15 Los nervios del Gobierno Resumen.DOC

63
1 LOS NERVIOS DEL GOBIERNO

Transcript of 15 Los nervios del Gobierno Resumen.DOC

LOS NERVIOS DEL GOBIERNO

4

LOS NERVIOS DEL GOBIERNO

P R E F A C I O

Este TEXTO sugiere que sera provechoso considerar el gobierno no tanto como un problema de poder, sino ms bien como un problema de conduccin, pretende mostrar que la conduccin es, fundamentalmente, un problema de comunicacin.

Aprendizaje y logro de objetivos

Puede definirse un objetivo como una condicin final en la cual el objeto actuante alcanza una definida correlacin en el tiempo o en el espacio con respecto a otro objeto o acontecimiento.

Con mucha frecuencia, puede alcanzarse una reduccin casi equivalente del desequilibrio interno mediante un reajuste interno de las relaciones existentes entre algunas de las partes que constituyen la red, operacin que servira de sustituto ms o menos efectivo para reemplazar la consecucin real del objetivo en cuestin, ubicado en el mundo exterior a la red.

Es por ello necesario distinguir entre los reajustes meramente internos y aquellos buscados por caminos que incluyen, como elemento esencial, el logro de una relacin de objetivo con alguna parte del mundo exterior.

Podemos llamar aprendizaje a los reordenamientos internos que todava son pertinentes para la bsqueda de objetivos en el mundo exterior. Los reordenamientos internos que reducen la eficacia de la red para la bsqueda de objetivos corresponden a la patologa del aprendizaje. Sus resultados pueden llegar a ser la autofrustracin y la autodestruccin.

Los valores y la capacidad de aprender

El movimiento de los mensajes a travs de redes complejas de realimentacin puede implicar el problema del valor o del conmutador. Si se encuentran disponibles muchos canales alternativos para pocos mensajes, puede trabarse el funcionamiento de la red a causa de la indecisin; si tienen que competir muchos mensajes para entrar por pocos canales, quiz la red llegue a trabarse por interferencia.

El funcionamiento eficaz de cualquier conmutador complejo requiere, por lo tanto, la existencia de algunas reglas de operacin relativamente estable, explcita o implcita, en las disposiciones u ordenamiento de los canales.

La tarea que cumplen las reglas de funcionamiento en conmutadores y mquinas de calcular es en cierta medida la misma que desempea la preferencia emocional en el sistema nerviosos de los animales y los hombres, y las preferencias, obstculos y valores culturales o institucionales en los grupos o sociedades.Cualquier red cuyas reglas de funcionamiento puedan modificarse mediante procesos de realimentacin est sujeta al conflicto interno entre sus preferencias establecidas de trabajo y el efecto de la nueva informacin.

Cuanto ms complejos sean, relativamente, los conmutadores y las redes, y ms abundantes las posibilidades de eleccin, tanto ms prolongados sern los perodos de indecisin o conflicto interno. Como la red adquiere sus preferencias mediante un proceso histrico, no es necesario que sus valores sean del todo coherentes entre s. Pueden formar configuraciones circulares de preferencia, que acaso ms adelante hagan que algunos impulso de la red queden atrapados en sendas circulares de frustracin. Como la red nerviosa del hombre es compleja, est sujeta a padecer conflictos, indecisin, interferencia y frustracin circular. Cualesquiera que sean las pautas, preferencias o reglas de funcionamiento que rijan su comportamiento en un momento determinado, slo pueden reducir esa tribulacin, pero nunca suprimirla.

Ya que la red de la mente humana se comporta con cierto grado de plasticidad, puede cambiar muchas de sus reglas de funcionamiento como resultado de la experiencia.La capacidad de aprendizaje puede verificarse mediante dos grupos de operaciones independientes: primero, mediante pruebas externas de la actuacin total de un sistema en una situacin dada, y, segundo, mediante el anlisis de su estructura interna.

LA CONCIENCIA Y LA VOLUNTAD COMO PAUTAS DEL FLUJO DE COMUNICACINEn una primera aproximacin y para los fines de este anlisis puede definirse la conciencia como un conjunto de realimentaciones internas de mensajes secundarios. Los mensajes secundarios son los que se refieren a cambios en el estado de las partes del sistema, es decir, a mensajes primarios. Mensajes primarios son aquellos que atraviesan el sistema como consecuencia de la interaccin de ste con el mundo exterior.

En todos estos casos, los mensajes secundarios funcionan como smbolos o rtulos internos de los cambios de estado dentro de la propia red, que reingresan en sta como informacin adicional y, junto con todos los dems datos de realimentacin, influyen sobre el comportamiento ulterior de la red. La conciencia no consiste simplemente en estos rtulos sino en los procesos por los cuales tales mensajes son derivados de la red y reintroducidos en ella, y en los procesos por los cuales dos o ms mensajes secundarios de este tipo llegan a interactuar entre s.

La conciencia en las organizaciones sociales

Los directores, juntas directivas o comisiones de planeamiento de esas organizaciones no pueden manejar toda la vasta informacin en los documentos originales. Operan sobre todo con ttulos, memoranda, sumarios, solicitudes de proyectos, fojas de ruta y otros smbolos secundarios, mientras que gran cantidad del material se procesa por debajo del nivel de conciencia de aquellas partes de la organizacin que guan y formulan su poltica. nicamente los circuitos de realimentacin y decisiones que son extrados mediante la aplicacin y la realimentacin de smbolos secundarios se hacen directamente conscientes para la organizacin.

Lo que llega a esa zona para su procesamiento por separado -luego de su rotulacin y registro- depende, a su vez, de lo que ha sido seleccionado o rechazado, asociado o disociado, encaminado o bloqueado, registrado o mal archivado o borrado dentro de resto del sistema. Existe una discriminacin automtica y podemos sospechar que ocurren procesos similares de discriminacin en los recuerdos y olvidos no conscientes, a las aversiones y corazonadas de la mente individual, as como en muchas de las convenciones y supuestos no verbalizados, las preferencias o tabes de las sociedades y culturas humanas.

Por cultura queremos significar los procesos selectivos creados histricamente que encauzan las reacciones del hombre, tanto frente a estmulos internos como externos.

Al aplicar smbolos secundarios a algunas de nuestras etapas en un clculo o secuencia de comportamiento, podemos llegar a cambiar su resultado, pues dichos smbolos secundarios son realimentados en la red, y el mensaje del cual la red se ha vuelo consciente puede aparecer entonces en ella con mayor frecuencia que sus alternativas sin rtulos, y quedar ms fcilmente disponible para un tratamiento preferencial.

Si los smbolos secundarios se llegan a aplicar a partes o conexiones de la red que incluyen las reglas de funcionamiento, esas reglas se vuelven conscientes para la red. Al ser realimentadas en ella, se refuerzan estadsticamente para una aplicacin ms efectiva, y se las puede cambiar con ms facilidad si tal posibilidad est incluida en la red. Los efectos de ese tipo de rtulos internos son en cierto modo comparables con el efecto de los smbolos dramticos o de los recursos publicitarios en una sociedad. Una vez adheridos a ideas, prcticas o leyes particulares, pueden elevarlas desde su previa existencia oscura hasta el fuego cruzado de la atencin pblica.

El conjunto de smbolos secundarios puede desfigurar, con facilidad, el verdadero contenido de la red. Ciertos smbolos primarios se hallan a veces excesivamente representados a causa de una realimentacin abundante, mientras otros quiz no lleguen nunca a hacerse conscientes. Por lo tanto, la conciencia puede ser falsa conciencia, del mismo modo que la verdadera personalidad de un hombre puede resultar muy diferente de lo que l piensa que es. Con todo, la conciencia no implica una sola operacin, sino al menos dos: un grado elevado de seleccin y abstraccin a partir de la corriente de mensajes primarios o de orden inferior, y su incorporacin sumamente condensada y abreviada en un nmero mucho menor de mensajes de orden superior; implica tambin el examen ms o menos simultneos de la mayor cantidad de esa informacin abreviada de segundo orden que pueda abarcarse en el foco de conciencia -o mbito de atencin o mbito de control- de una persona, o en la esfera efectiva de vigilancia o control de una organizacin.

Si la conciencia es un proceso de realimentacin, requiere dispositivos materiales y se lleva a cabo a un cierto costo material en lo que respecta a instalaciones y tiempo. La obstruccin de algn dispositivo, y la demora impuesta a los procesos primarios, deberan ser susceptibles de medicin.

En segundo lugar, los procesos de realimentacin poseen estructuras, circuitos, canales, conexiones relacionales cambiantes, incompatibilidades y discontinuidades posibles en el funcionamiento del proceso de conciencia.

Consideraciones similares podran aplicarse a los procesos de conciencia en naciones, clases u otros grupos sociales. Si tales procesos existen de qu modo estn organizados y estructurados? Cules son los recursos humanos, instalaciones, smbolos, procesos de aprendizaje y relaciones de trabajo en equipo, mediante los cuales se llevan a cabo?

Puede llamarse voluntad el conjunto de decisiones rotuladas internamente y de resultados anticipados, propuestos por la aplicacin de datos provenientes del pasado del sistema, y por el bloqueo de impulsos o datos incompatibles provenientes del presente o futuro del sistema. Como la red no puede pronosticar con certeza ni el resultado de las cadenas subsiguientes de sus propios mensajes internos y rdenes de cambio, ni el resultado de sus propios esfuerzos para inhibir la informacin incompatible con el resultado querido; slo conoce lo que har y no lo que deber hacer. Puede conocer su decisin, pero no puede saber con certeza si la ha de cambiar, o cundo lo har.

Un problema fundamental de voluntad en cualquier red autoconductiva parece ser el de llevar adelante y transformar en accin los diversos datos del pasado de la red, hasta el instante en que se forma la decisin, mientras se bloquea toda la informacin ulterior que pudiera modificar la decisin querida.

En el gobierno y la poltica, la voluntad es una pauta de preferencias e inhibiciones relativamente consolidadas, derivadas de las experiencias pasadas de un grupo social, rotuladas conscientemente para una porcin importante de sus miembros, y aplicadas para guiar las acciones y restringir las experiencias posteriores de ese grupo y de sus miembros.

La naturaleza de la voluntad libre

Ante todo, esta voluntad es relativamente libre de las presiones del mundo exterior en cualquier momento dado, pues representa el resultado acumulado del pasado de la red, que en ese instante entra por realimentacin en la formulacin de las decisiones a tomar. Sin una efectiva realimentacin de su pasado, el comportamiento de la red estara determinado en gran medida por presiones exteriores. No conducira, sino que ira a la deriva, tanto en sus ordenamientos externos como internos.

Gracias a lo que ha aprendido en el pasado, no se halla del todo sometida al presente. Gracias a lo que todava puede aprender, no est de todo sometida al pasado. La accin recproca entre su presente y su pasado da forma a sus reajustes internos, como respuesta a nuevos desafos.

En sus acciones externas, la red hace lo que puede hacer. Su comportamiento visible ser el resultado de la accin recproca entre las rdenes transmitidas a sus efectores y los datos de realimentacin acerca de los resultados obtenidos en medio de las presiones del mundo exterior.

Considerar a un hombre como responsable, es considerarlo segn el supuesto de que no ha sido desbaratado su proceso de aprendizaje. Cada uno de nosotros es responsable por lo que es ahora, por la personalidad que l mismo ha adquirido mediante sus decisiones libres en el pasado.

PODER POLTICO Y TRANSACCIONES SOCIALES

La voluntad se relaciona con el poder. Tomar firmemente una decisin carece de significacin prctica si no existen medios para llevarla a cabo contra una posible resistencia externa o, en todo caso, para realizarla de tal manera que produzca una diferencia apreciable en el conjunto de resultados ambientales que hubiesen ocurrido de cualquier modo.

La interdependencia del poder y la voluntad

La voluntad es por lo tanto ineficaz sin el poder; pero el poder slo por casualidad es eficaz si falta la voluntad. El poder no puede logra ms que una sucesin de efectos fortuitos en el ambiente, a menos que haya algn objetivo o intencin relativamente determinados.

Esta gua es indispensable para que mantenga su eficacia cualquier sistema que aplique poder a su ambiente, y cualquiera de tales sistemas debe recibir esta gua de sus memorias, de sus decisiones pasadas, de su voluntad o, dicho en forma algo ms general, de su carcter.

Cuando hablamos del poder de un individuo u organizacin queremos significar entonces la medida en que pueden continuar teniendo xito en la exteriorizacin de su carcter. Dicho de otro modo, poder significa la capacidad de un individuo u organizacin para imponer extrapolaciones o proyecciones de su estructura interna sobre su ambiente. En lenguaje ms sencillo, tener poder quiere decir no tener que ceder, y obligar al ambiente o a la otra persona a que lo hagan.

El conflicto y su medicin

A partir de este enfoque acerca del poder, puede desarrollarse un concepto de conflicto que, en principio, sera susceptible de medicin. El conflicto entre dos sistemas en accin, A y B, podra medirse en funcin de:

La magnitud probable de la incompatibilidad entre sus respectivos programas para el futuro, y los probables costos de evitar el antagonismo entre ellos, total o parcialmente. Cada uno de stos podra medirse en funcin de los cambios esperados en la estructura de los dos sistemas en accin; y la suma de esos cambios -expresada, por ejemplo, en medidas de informacin- medira el alcance e intensidad del conflicto.

El anlisis del poder Robert. A. Dahl considera mensurable el poder poltico en dos aspectos. El primero es la aptitud para producir un cambio en la distribucin de probabilidad de una clase de resultados repetitivos; el segundo es la frecuencia de asociacin de un actor con resultados que parecen exitosos desde su presumible punto de vista. Ambas pruebas tienden a combinarse. La medicin del poder que Dahl efecta, tendera a eliminar a los manifiestamente impotentes: los que son reacios a conformarse con la mayora en perspectiva, y sin embargo no desean cambiarla. Pero ante los aparentemente poderosos, el poder slo deja de ser ambiguo cuando se le agrega otra informacin.

Lasswell y Kaplan definen el poder como participacin en la formulacin de decisiones y la decisin como una poltica que implica sanciones severas. Tal participacin efectiva se funda en el control que un actor posee sobre uno, o varios, entre una escala de valores de base. Esos valores de base son cosas, relaciones o situaciones fuertemente deseadas por otras personas que, para evitar sanciones u obtener recompensas en funcin de cierto valor de base, estn dispuestas a subordinar su comportamiento, con respecto a algn valor de finalidad deseado con menos fuerza, a las rdenes, insinuaciones, o incluso deseos anticipados de quien posee el poder. Cualquier valor puede servir como valor de base, o como valor de finalidad, o como ambos.

Dahl examina el costo de oportunidad de la influencia con respecto a quienes la manejan. Ese costo constituye la base de su concepto de brecha de influencia, que de ordinario se establece entre la influencia poltica que ejerce realmente un individuo, y la que podra ejercer si dedicara todo su tiempo y recursos disponible a este nico propsito. El mismo razonamiento utilizado para la influencia, vale naturalmente tambin para el poder. Estas brechas entre la influencia y el poder reales y potenciales de la mayora de la gente en pocas normales explican, segn Dahl, la gran inestabilidad potencial de la poltica cuando las crisis, o el cambio de circunstancias, inducen a muchas personas a orientar una mayor cantidad de sus recursos hacia la consecucin de objetivos polticos.Cuestiones de este tipo pueden conducirnos a un concepto de poder neto, en lugar de poder en bruto, y a una evaluacin del poder de quienes carecen de l.

El concepto de poder neto podra definirse como una diferencia: la diferencia entre el monto de cambios impuestos y el de cambios aceptados por el actor. Los cambios impuestos son los que impone el actor a su ambiente, incluidos los que afectan a antagonistas importantes. Los cambios aceptados son las modificaciones referentes a los valores y a los sistemas de comunicacin y de accin del actor. Si el primer grupo de cambios es mensurable, al menos en principio, tambin debera serlo el segundo.

Dahl ha abierto el camino para la medicin cuantitativa del poder en ciertos tipos de situaciones. Lasswell ha colocado el poder en el contexto de una red de otros posibles valores de base y de finalidad, y esclareci as su significado para un amplio mbito de condiciones. Talcott Parsons, en sus trabajos actuales, est dando el paso siguiente. Coloca el poder en el contexto dinmico de un flujo de intercambios entre los principales subsistemas funcionales de la sociedad, y, al hacerlo, acaso haya abierto el camino para una interpretacin ms fundamental del poder.El modelo general de intercambio Parsons distingue cuatro prerrequisitos funcionales en cualquier sistema social: 1) el mantenimiento o reproduccin de sus propias pautas bsicas; 2) la adaptacin al ambiente y a sus cambios; 3) el logro de cualesquiera objetivos que el sistema ha aceptado o se ha fijado a s mismo, y 4) la integracin de todas las diferentes funciones y subsistemas internos en un conjunto coherente y coordinado.Cada una de estas cuatro funciones principales -mantenimiento de pautas, adaptacin, logro de objetivos e integracin- debe ser cumplida, hasta cierto punto, por todos los subsistemas de la sociedad, pero a cada una de las cuatro funciones bsicas corresponde un subsistema principal de la sociedad, dedicado casi exclusivamente a actividades que atienden a esa funcin particular antes que a cualquiera de las otras.

Segn Parsons, la funcin de mantenimiento de pautas la atiende principalmente el subsistema de familias y ncleos domsticos, que son los elementos de la sociedad ocupados de la crianza de los nios, la reposicin de la fuerza de trabajo y la preservacin del grupo de parentesco. La economa corresponde principalmente a la tarea de adaptacin, incluyendo sus aspectos cientficos y tecnolgicos. El logro de objetivos lo atiende sobre todo la poltica, el subsistema poltico de la sociedad, y particularmente el gobierno. Finalmente, la funcin integrativa la llevan a cabo fundamentalmente los subsistemas de la cultura, incluyendo las instituciones sociales de educacin pblica y semipblica, la religin y la comunicacin de masas.Entre estos subsistemas funcionales, que pueden representarse como las cuatro esquinas de un cuadrado, existen seis posibles flujos importantes de intercambio, que vinculan a cada uno de los cuatro subsistemas principales con los tres ncleos domsticos entregan trabajo a la economa, y eventualmente reciben de sta bienes de consumo, en un flujo de transacciones tipo trueque de servicios por bienes. Sin embargo, en un sistema ms adelantado, las transacciones se hacen ms flexibles y generales por obra de un mecanismo social que est estrechamente especializado en la generalidad Podemos llamar divisa a tal mecanismo. En este caso, la divisa es el dinero, y acrecienta enormemente la flexibilidad del intercambio y los mbitos de seleccin abiertos a los participantes. Los miembros de los ncleos familiares permutan ahora en su trabajo por salarios en dinero; estos salarios se convierten en gastos de consumo, sea inmediatamente o despus de cierta demora, y a cambio de esos gastos de consumo se obtienen bienes. Existen, pues, dos flujos de transacciones en cada direccin, uno que comprende las cosas y acciones fsicas implicadas, y el otro, en su forma generalizada y flexible, la divisa empleada. Los ncleos familiares y luego bienes.Algunos intercambios del sistema poltico

En lo referente al sistema poltico, puede considerarse que los ncleos familiares -en el caso ms sencillo- formulan demandas especficas al sistema poltico. Proporcionan apoyo especfico a los gobernantes, que a su vez emplean este apoyo para tomar y hacer cumplir decisiones de la clase deseada por sus partidarios. Hay entonces un intercambio de apoyo especfico por decisiones especficas y confiables, sensibles a las demandas especficas, proceso que, en el plano poltico, recuerda al trueque econmico.

Mucho ms all de los cabildeos polticos anteriores, o del intercambio de favores, se pide y se concede el apoyo generalizado en funcin de una divisa slo parcialmente cuantificable de responsabilidad y lealtad, donde el sistema poltico otorga la proteccin formal, la ciudadana o el permiso de residencia, a cantidades calculables de personas, y exige la lealtad y fidelidad de todas aquellas que hayan sobrepasado la infancia.

Pueden aparecer divisas calculables con mayor exactitud, tales como los votos, en intercambios adicionales de transacciones, cuando los sistemas polticos conceden derechos electorales a ciertos grupos de ciudadanos y estos reintroducen entonces los votos en el funcionamiento del sistema.

El poder como divisa

Desde esta perspectiva, el poder puede verse como la divisa ms importante en los intercambios entre los sistemas polticos y todos los dems subsistemas principales de la sociedad.

Como las otras divisas, el poder puede cuantificarse, aunque de modo mucho ms imperfecto. No se lo puede contar con exactitud, pero se lo puede calcular en proporcin a los recursos o capacidades visiblemente disponibles. Tambin pueden estimarse los niveles de intensidad de apoyo, de moral, de las tcnicas y la capacidad de recursos -en la medida en que cualquiera de ellos, o todos, sean susceptibles de clculo- mediante una apropiada evaluacin.

Consideremos el problema desde una perspectiva un poco diferente. Desde este punto de vista, el poder es la expectativa coordinada de sanciones significativamente probables, es decir, de cambios sustanciales en la adjudicacin de valores importantes en alto grado. Sin embargo, la capacidad previsible de imponer sanciones se halla estrechamente relacionada con las capacidades cuantificables consideradas ms arriba. Este concepto de poder, y de sanciones, es mucho ms amplio que el concepto de observancia forzosa. El prestigio es entonces al poder lo que el crdito al dinero en efectivo. Y la fuerza fsica, coaccin en sentido estricto, es al poder lo que el oro es al papel moneda, o a las cuentas de ahorro y los cheques.

Los bancos prestan con frecuencia por valores varias veces superiores a la cantidad de dinero recibido en depsito, pues confan en que no todos los clientes reclamarn sus depsitos al mismo tiempo. En forma muy parecida, los gobiernos pueden prometer que respaldarn con sanciones muchas de sus decisiones, estatutos y leyes obligatorios, y contra una gran cantidad de gente, excediendo con ello lo que cualquier gobierno podra efectuar si, por ejemplo, todos los habitantes comenzaran a desobedecerlo al mismo tiempo.

Los gobiernos, como los bancos fundamentan as sus operaciones en el hecho de la elevada coordinacin de las expectativas populares que les son favorables, de modo que la mayora de los individuos puede contar con que todos los dems hagan casi siempre lo que ellos hacen; mientras que las expectativas contrarias -que uno retire dinero o viole la ley- resultan por lo comn bastante poco coordinadas, de modo que ningn individuo puede confiar en que provocar la quiebra de un banco o la cada de un gobierno suscitando un pnico concertado respecto del primero, u organizando una revolucin concertada contra el segundo.

Parece que en la vida econmica se lleva a cabo generalmente una gran cantidad de tarea cooperativa humana, correspondiente en sus resultados al ingreso nacional, con ayuda de un monto menor de divisas monetarias, y una cantidad de oro relativamente muy pequea.El oro y la fuerza como mecanismos de control de deterioros

El sistema poltico, como el sistema econmico, depende entonces, en gran medida, de la trama de las expectativas coordinadas. Cuando se daa esta construccin, especialmente en situaciones en que estn ocurriendo fuertes tensiones, la coordinacin puede destruirse y tomar la forma de una pauta fragmentada, a menos que se controle el deterioro. La fuerza fsica y sus instrumentos de accin -hombres con tanques y armas de fuego- son un mecanismo de control de deterioros para la sociedad. Pueden funcionar como tal en situaciones en que se ha quebrado el acatamiento a las rdenes legales o polticas, y en que podra comenzar a difundirse el no acatamiento o la resistencia abierta.

En crisis polticas menos graves, las demostraciones de respaldo poltico mediante votos, declaraciones pblicas o manifestaciones acaso sean insuficientes para conservar el armazn de confianza en el proceso poltico.

La poltica, como la vida econmica, depende de la cooperacin humana, basada en expectativas coordinadas. La esencia de la actividad econmica consiste en la divisin del trabajo coordinada, flexible y confiable, en la combinacin productiva del talento y el esfuerzo humanos con la maquinaria tecnolgica y con los recursos extrados del ambiente. Esta trama de cooperacin flexible y productiva es lo que produce la riqueza y la capacidad para producir ms riqueza.

La coordinacin de los esfuerzos humanos hacia el logro de algn objetivo, u objetivos, establecido por la sociedad o por cualquiera de sus subsistemas, puede acelerarse o facilitarse enormemente por el uso del poder, y en algunos momentos y lugares, hasta cierto punto, por el uso de la fuerza. Esto ocurre especialmente cuando se ha resquebrajado alguna maquinaria ms normal de control social. Sin embargo, son bsicamente los hbitos coordinados y no las amenazas lo que hace que las cosas marchen.Una perspectiva sobre la teora poltica

Por consiguiente, el poder no es ni el centro ni la esencia de la poltica sino una de sus divisas, uno de los mecanismos importantes de aceleracin o de control del deterioro cuando fallan la influencia, el hbito o la coordinacin voluntaria, o no sirven adecuadamente la funcin de logro de objetivos.La esencia de la poltica: la firme coordinacin de los esfuerzos y expectativas humanos para el logro de los objetivos de la sociedad.Algunas consecuencias cuantitativas

El modelo de intercambio del subsistema poltico, y de sus relaciones con los otros subsistemas principales de la sociedad, tiene consecuencias cuantitativas. Puede llegar a calcularse el volumen de las demandas efectivas formuladas a un gobierno, y tambin el mbito de asuntos respecto de los cuales ese gobierno asume una responsabilidad pblica, as como la cantidad de capacidades y recursos adecuados que tiene a su disposicin.

Si se responde a la mayora de las demandas especficas efectuadas a un sistema poltico con respuestas especficas y adecuadamente gratificadoras, quizs un proceso de aprendizaje de refuerzo llegue a aumentar el nmero de personas que experimentan una lealtad generalizada hacia la comunidad poltica -tal como una nacin o una federacin-, o hacia su forma de gobierno, o incluso hacia el partido, grupo o persona particulares que se hallan en el poder.

AUTONOMA, INTEGRIDAD Y SIGNIFICADO

Todas las redes autoconductivas tienen tres elementos bsicos: receptores, efectores y controles de realimentacin. Lo que esas redes sencillas poseen de yoidad (selfhood), o autonoma, se encuentra en sus controles de realimentacin.

La autonoma y la ubicacin del control

Los sistemas ms complejos pueden cambiar sus objetivos, o reestructurar sus realimentaciones, mediante la interaccin con la informacin proveniente de su pasado, acumulada en mecanismos mnmicos especiales. Cuando se pierde toda memoria y dejan de ser eficaces la informacin y las preferencias pasadas, ya no estamos frente a un individuo o grupo social con autodeterminacin, sino a un autmata autoconductivo. La voluntad de individuos o grupos puede paralizarse destruyendo la informacin pasada que han almacenado, o desorganizando el flujo de sta en el sistema.Existen redes an ms complejas que pueden incluir procesos de conciencia, de verificacin interna de ciertos estados de la red. La conciencia, cuando existe en magnitud suficiente, se convierte en elemento determinante del comportamiento total del sistema. Puede destruirse la autonoma de un individuo, una empresa, un grupo social, un partido o un gobierno, sin daar su memoria, privndolos de conciencia, es decir, cortando el flujo de informacin acerca del estado de sus diferentes partes, y desorganizando aquellos controles sobre sus propias partes que dependan de esa informacin interna.

Para que una sociedad o comunidad pueda autoconducirse, debe continuar recibiendo un flujo completo de tres tipos de informacin: primero, informacin acerca del mundo exterior; segundo, informacin sobre el pasado, con un amplio mbito de evocacin y recombinacin; y, tercero, informacin sobre s misma y sobre sus propias partes.

Las pautas de los canales de realimentacin interna -los diagramas de flujo de la informacin- pueden emplearse para evaluar el funcionamiento de sistemas particulares de comunicacin. En esos casos, ayudaran a revelar la ubicacin del control, es decir, las conexiones o configuraciones crticas de los canales de informacin y de decisin, que hacen que el sistema se comporte de una manera determinada.Una prueba del funcionamiento en todos estos niveles sera la capacidad de aprender, es decir, de producir reordenamientos internos en el sistema, de modo que ocurran cambios en su comportamiento.

La yoidad, segn esta posicin, aparece no como una propiedad esttica sino como el funcionamiento de conjuntos particulares de canales en un sistema de comunicacin, la autodeterminacin, y no por sus progresos en cuanto a tamao o complejidad.

Integridad y dignidad

Integridad significa, por lo tanto, el funcionamiento no deteriorado de los dispositivos que transportan los procesos de autodeterminacin. Cuando defendemos nuestra integridad, estamos defendiendo nuestro equipo autnomo de aprendizaje, la estructura de la personalidad que hemos adquirido. Cuando defendemos la dignidad de un hombre, defendemos su aptitud para emplear su personalidad: lo defendemos contra la imposicin de una velocidad intolerable en el cambio de su comportamiento: la llamamos intolerable porque resulta incompatible con el funcionamiento continuado de su autodeterminacin. La dignidad puede perderse o daarse temporariamente. Es la suspensin de un proceso de autodeterminacin que, con posterioridad, puede reasumirse nuevamente. La integridad perdida o daada implica un cambio permanente en la estructura interna. Puede recuperarse entonces la autonoma, pero probablemente ya no resulte la misma que antes.

Respeto para el derecho de cada hombre a aprender de acuerdo con su propia velocidad y con su propio equipo interno, en una secuencia ininterrumpida de actos autnomos de aprendizaje, en los cuales su propio y nico pasado acumulado, y sus propias preferencias adquiridas en cada uno de los pasos, tienen al menos cierta participacin con el resultado. Quiz la mejor manera de obtener una elevada velocidad de aprendizaje y amplios cambios de comportamiento, sin la prdida de la estructura interna y de un pasado efectivo consista en aumentar la variedad, flexibilidad y nmero de los canales interiores de comunicacin.Una concepcin acerca de la mente

Podramos definir provisionalmente la mente como un proceso fsico autoapoyado que abarca nueve operaciones: seleccin, abstraccin, comunicacin, almacenamiento, subdivisin, evocacin, recombinacin, reconocimiento crtico y reaplicacin de tems de informacin.

Pueden llamarse mensajes los tems discretos de informacin que se desplazan por una red. Cualquier mensaje que haya adquirido una asociacin relativamente estable con un evento exterior a la red, o con otro mensaje ubicado dentro de ella, puede funcionar como un smbolo, y una mente puede considerarse como un proceso fsico de autoconservacin que comunica y manipula smbolos.

Produccin de novedad y de iniciativa. Si se abstrae y almacena analticamente la informacin procedente de eventos del mundo exterior, es decir, si se almacena por separado la informacin acerca de algunas de sus partes o aspectos diferentes, estas partes pueden evocarse por separado y recombinarse en nuevas estructuras que no existan en el mundo exterior. Debe almacenarse una nueva imagen o smbolo, perteneciente a la nueva pauta en su conjunto, y sin tomar en cuenta su anterior origen combinatorio. La creatividad se consuma en esta segunda etapa.La riqueza combinatoria de posibilidades de novedad puede ser ya vasta dentro de una sola mente y ms an en cualquier mente que se halla en comunicacin con otras, y quiz vastsima en una mente abierta, es decir, que aplica iniciativa a la ampliacin de su capacidad de ingresos de informacin proveniente de lo que todava podemos creer que es un universo infinito.

Como proceso fsico de comunicacin, la mente depende de un conjunto de medios fsicos, canales circulares de comunicaciones, y otros similares, que en s mismos son procesos fsicos de un orden ms simple. En este sentido, no existe mente sin cuerpo.

El proceso que hemos llamado mente depende de una particular configuracin de dispositivos fsicos, pero no de la preservacin de tales dispositivos, mientras se la reemplace por otra sin destruir la configuracin.

Si el individuo y la sociedad, son tambin portadoras de procesos mentales, acaso se descubra que la mente persiste por encima de cualquier nmero de cambios materiales de sus partes -incluyendo, como es lgico, el reemplazo de cada una de esas partes individuales-, con la nica condicin de que se conserve la configuracin del todo.

Como la mente depende de los dispositivos fsicos, depende necesariamente del proceso por el cual se conservan tales dispositivos, es decir, de la vida. La vida orgnica o social puede considerarse desde cierto punto de vista, como un autocatalizador que se autoconserva, autorreproduce y automodifica o, en forma ms general, como una estructura de procesos materiales que se autoconserva, autorreproduce y automodifica.

Puede darse la vida sin el pensamiento, pues el mantenimiento de los canales puede continuar sin realimentaciones adicionales de informacin, pero no puede darse la mente sin la vida, pues las realimentaciones de informacin no pueden continuar sin el mantenimiento de los canales.

La mente no es la configuracin y el mantenimiento de los canales de comunicacin y de los recursos de almacenamiento, sino la pauta del flujo de informacin que se produce en su interior. El deterioro de los canales puede desorganizar el flujo de informacin.Ciertos conjuntos de canales, tales como las mquinas de calcular, pueden limitarse de todo flujo de informacin e iniciar una nueva serie que no se halle afectada por lo que ocurri con anterioridad.

Pero hay otros sistemas de comunicacin, como el cerebro humano, que nunca se limpia del todo; funcionan como mquinas de una sola serie.

La naturaleza de la mente implica entonces la individualidad.

Los conceptos de autodeterminacin y crecimiento estn vinculados entre s, y un filsofo contemporneo de la historia ha considerado que el criterio ms esencial del crecimiento reside en el aumento de la autodeterminacin.1. El crecimiento no debera significar nicamente el mximo grado de unidad y autodeterminacin dentro de los lmites existentes de un sistema (integracin),

2. ni una mera ampliacin de ste sin que ocurran cambios en sus caractersticas de funcionamiento (mantenimiento del patrn),

3. sino tambin una aplicacin de la capacidad de aprendizaje para el aumento de la apertura, es decir, del mbito, diversidad y eficacia de los canales de ingreso de informacin proveniente del mundo exterior, con que cuenta una organizacin (adaptacin), y, ms an,

4. un aumento en la capacidad de una organizacin para dar respuestas eficaces a su ambiente, y para cambiar ese ambiente de acuerdo con sus necesidades, es decir, para realizar la funcin de logro de objetivos.

5. Por ltimo, el crecimiento debera significar un aumento en el mbito y diversidad de objetivos que la organizacin es capaz de perseguir, incluido el poder de cambiar objetivos y de aadir otros nuevos.Espritu y significado

Puesto que ninguna mente puede operar sin valores, el espritu denota un valor de segundo orden. Es el conjunto de preferencias acerca de conjuntos de preferencias; el espritu de un hombre, o de un pueblo, o de una poca, es la configuracin de reglas de acuerdo con las cuales se estructuran y actan sus sistemas de valores.

Del mismo modo que el espritu se ocupa de las pautas internas de una mente, el significado del contexto. Significado es contexto. Reconocer significado es reconocer similitudes en una serie de tipo lgico, adems de reconocer su extrapolacin a otra serie por lo menos de un tipo lgico ms elevado.En este sentido, el significado es la posicin fsica en una secuencia de eventos. En consecuencia, el significado siempre es relativo.Puede darse significado a los acontecimientos en dos formas: simblicamente, asignndoles smbolos a ellos y tambin al contexto en que realmente funciona, y fsicamente, colocndolos materialmente en un contexto, es decir, en alguna serie ms amplias de acontecimientos. La primera de ellas, la atribucin de smbolos al error y a verificacin, del modo que otras afirmaciones referentes a interacciones que ocurren entre los eventos de la naturaleza o de la sociedad. La segunda -la participacin fsica en un contexto- parece esencial para el funcionamiento continuado de cualquier mente: su informacin almacenada carecera en ltima instancia de sentido si llegara a cerrarse a toda informacin adicional, proveniente de cualquier contexto mayor que ella.Modelos de comunicacin y sistemas de decisin poltica

Los gobiernos y los partidos -es decir, los sistemas polticos o redes de decisin y control- dependen de los procesos de comunicacin, y en ciertos aspectos se parecen tanto a un equipo de comunicaciones fabricado por el hombre como para despertar nuestro inters.

El primer punto fundamental de semejanza consiste en que todos los gobiernos, como todos los sistemas de comunicacin, dependen del procesamiento de informacin.El concepto de informacin

La informacin puede definirse, en general, como una distribucin pautada, o una relacin pautada entre eventos. Una secuencia de tales procesos forma un canal de comunicacin, y la informacin es ese aspecto de la descripcin del estado de cada etapa del canal que ha permanecido invariable de una etapa a otra.La recepcin de informacin

La eficiencia de la informacin en el receptor depende de dos clases de condiciones. Ante todo, por lo menos algunas partes del sistema de recepcin deben hallarse en un equilibrio sumamente inestable, de manera que la cantidad muy pequea de energa transportadora de la seal se suficiente para poner en marcha un proceso mucho mayor de cambio. Sin tal desequilibrio existente ya en el receptor, la informacin no producira efectos significativos.

La magnitud del efecto que produce la introduccin de nueva informacin en un sistema poltico o econmico podra muy bien relacionarse, entre otras cosas, con la magnitud de los factores de inestabilidad que ya existen en l.

Sera til indagar las inestabilidades prometedoras, es decir, las inestabilidades importantes para una posible innovacin.Riqueza de informacin y selectividad de recepcin

La segunda clase de condiciones implica la selectividad del receptor. Qu pautas se encuentran ya almacenadas en el receptor, y cun especfica debe ser la pauta de la seal entrante para producir efectos?La selectividad de los receptores se relaciona entonces, entre otras cosas, con la riqueza y especificidad de la informacin que ya se halla almacenada en ellos.La medicin de la informacin y la fidelidad de los canales

El resultado final de todo este trabajo ha sido el surgimiento del concepto de informacin como nocin cuantitativa. La informacin puede medirse y contarse, y el funcionamiento de los canales de comunicacin para transmitir o distorsionar la informacin puede evaluarse en trminos cuantitativos.

Informacin y cohesin social

Si podemos medir la informacin, aunque sea de modo tosco, tambin podemos medir la cohesin de organizaciones o sociedades en funcin de su capacidad para transmitir informacin con prdidas menores o mayores, o con distorsiones.Si concebimos una comunidad tnica o cultural como una red de canales de comunicacin, y un Estado o un sistema poltico como una red de tales canales y de cadenas de mando, podemos medir la integracin de individuos en un pueblo por su capacidad para recibir y transmitir informacin en un amplio mbito de tpicos diferentes, con una demora relativamente escasa o poca prdida de detalles importantes.Anlogamente, podemos medir la velocidad y exactitud con que se transmite informacin u rdenes polticas, y el grado en que las pautas contenidas en la orden todava son reconocibles en las pautas de la accin que se supone constituyen su ejecucin.

La diferencia entre una comunidad o un sistema poltico dotados de cohesin, por un lado, y un grupo profesional especializado, por el otro, consiste en la multiplicidad de temas acerca de los cuales es posible la comunicacin eficiente. Cuanto ms amplio sea el mbito de temas, tanto ms integrada resulta la comunidad o el cuerpo poltico en lo que respecta a las comunicaciones.

La capacidad para comunicarse amplia y efectivamente sobre temas no tradicionales puede tener importancia para la cohesin y la capacidad de aprendizaje de pueblos y sistemas polticos en pases en proceso de rpida industrializacin.

Las mediciones de la exactitud y el mbito de temas de informacin transmitidos en un Estado o un grupo social o poltico, indicaran tambin la magnitud y profundidad del rea restante de comunicacin y entendimiento mutuos y eficientes entre sus miembros. De este modo, acaso podramos obtener datos importantes para calcular las probabilidades de un comportamiento fuertemente unificado del sistema poltico y de la poblacin respectiva en emergencias posteriores.Redes de comunicacin cara-a-cara y smbolos de legitimidad

Si bien en muchos estudios polticos se ha subrayado el poder, o la coaccin, debera aadirse ahora que la informacin antecede a la compulsin. Es imposible hacer cumplir ninguna orden, a menos que el agente encargado de la coaccin sepa hacia quin tiene que dirigirla.

El problema se vuelve ms serio cuando debe dirigirse la coaccin contra un nmero significativo de miembros personalmente desconocidos de una poblacin no cooperativa, como en situaciones de conspiracin, actividades polticas clandestinas.

De modo parecido, la informacin debe preceder a la obediencia. Es imposible que alguien cumpla una orden a menos que sepa de qu orden se trata.

El mito de legitimidad, consistente en un conjunto eficaz de memorias interrelacionadas que identifican con mayor o menor claridad las clases de rdenes y fuentes de rdenes a las que se debe otorgar preferente atencin, obediencia y apoyo, porque se vinculan con algunas de las pautas generales de valor predominantes en la cultura de la sociedad y con aspectos importantes de las estructuras de personalidad de sus miembros. Sin embargo, incluso donde gran parte de la poblacin retiene en su mente esas creencias de legitimidad, tienen que existir formas de recibir rpida y exactamente las rdenes para que la gente pueda actuar de acuerdo con ellas.

Al evaluar la significacin poltica de este hecho, es fcil cometer dos errores. El primero consiste en sobrestimar la importancia de los medios impersonales de comunicacin, tales como las transmisiones de radio y los diarios, y en subestimar la significacin muchsimo mayor de los contactos cara-a-cara.

El segundo error podra consistir en considerar los mitos o smbolos de legitimidad como algo aislado de las redes reales de comunicaciones y de las redes humanas -llamadas con frecuencia organizaciones, mquinas, aparatos o burocracia- por las cuales aqullos son transmitidos y difundidos selectivamente.Sin creencias de legitimidad ampliamente difundidas y favorables es sumamente difcil de construir una red de comunicaciones cara-a-cara. Por otra parte, sin un control efectivo sobre el grueso de las redes efectivas de comunicacin cara-a-cara, los poseedores nominales de los smbolos de legitimidad pueden resultar relativamente impotentes frente a los grupos que poseen ese control.

En consecuencia, acaso el poder poltico resida ms en el grado de coincidencia entre las creencias de legitimidad y los canales de comunicacin social.La discrepancia entre el podero publicitario de un dirigente o candidato, y su fuerza real, no en las bases, sino en el decisivo nivel intermedio de comunicacin y decisin, puede resultar un campo prometedor para la investigacin poltica comparativa.El nivel intermedio de las comunicaciones y el mandoEl nivel intermedio estratgico. Es el nivel de comunicacin y mando que se halla lo bastante cercano verticalmente a la gran masa de consumidores, ciudadanos o soldados rasos como para impedir que exista comunicacin directa, continuada y eficaz entre ellos y los escalones superiores, y debe estar bastante por encima del nivel de gran parte de la masa, como para permitir que exista una comunicacin y organizacin horizontales y efectivas entre un sector bastante grande de los hombres o unidades en su propio nivel.El concepto de nivel intermedio acaso permita un enfoque relativamente simple para el anlisis expeditivo de gobiernos, partidos o sistemas de decisin poltica, cuando resulten limitados el tiempo y los recursos para la investigacin. En todos esos sistemas podramos buscar el grupo crucial de nivel intermedio -de entre cincuenta y quinientas personas, sin cuya cooperacin o consentimiento (o, por supuesto, sustitucin) muy poco se puede hacer en el sistema de decisin.

Es de esperar que esas personas reflejen en parte la influencia de otras que las ubican en esos cargos. En parte, ellos mismos sern los agentes que den forma al curso de los acontecimientos segn sus deseos. Poseen dos caractersticas fundamentales: 1) Sin ellos, tomados en su conjunto, poco es lo que se puede hacer y, particularmente, poco es lo que se puede cambiar. 2) Cada uno de ellos debe contar con el grupo de sus pares, con cuyo apoyo puede triunfar fcilmente, pero cuya oposicin lo vuelve importante en la prctica.Hay que tener en cuenta que las personas pertenecientes a este nivel intermedio superior estratgico, por lo comn reciben muy poca publicidad. Son los hombres que actan entre bambalinas, es decir, son quienes en realidad formulan, permiten y ejecutan el mayor nmero de decisiones estratgicas.La funcin de inteligencia interna y el liderazgo continuado

Si la poltica exige una maquinaria de coaccin y un conjunto de hbitos de consentimiento, es imposible realizarla sin un flujo de informacin que llegue a quienes tienen que cumplir las rdenes.En situaciones de intranquilidad, los gobiernos no enfrentan slo el problema bsico de asegurar la conservacin de lealtades o valores convenientes en sus funcionarios, sino tambin el problema tcnico de conseguir un flujo continuo de informacin exacta acerca de su comportamiento. Hasta cierto punto, la pregunta Quin vigila al vigilante?, se responde: Sus pares, y la poblacin en general, mientras ambos se encuentren motivados suficientemente por creencias arraigadas de legitimidad.

En un pas o perodo donde son dbiles las creencias de legitimidad puede resultar de suma importancia el elemento temporal en los reagrupamientos polticos, las conspiraciones y las purgas. Incluso donde se hallan bien arraigadas las creencias de legitimidad, acaso sea necesario degradar lentamente y a travs de etapas honorficas a los sublderes potencialmente insubordinados para dar tiempo a que sus seguidores se separen de ellos con la mnima prdida de su propio status.

No slo puede fracasar el organismo encargado de imponer la coaccin porque no logra mantenerse informado acerca del comportamiento probable de sus propios funcionarios u organizaciones subsidiarias, sino tambin fallar la coaccin poltica si no consigue predecir correctamente la reaccin de la poblacin frente a ella. En este aspecto, la historia de las revoluciones aparece en gran medida como la historia de los fracasos de la inteligencia interna en los gobiernos que fueron derrocados.

En todas partes, la eficacia de las decisiones polticas depende de la correccin con que hayan sido pronosticadas las reacciones pertinentes ante ellas.El liderazgo en el grupo, como en el estado, depende entonces en gran medida de algo que podramos llamar la funcin de inteligencia interna.

Los canales e instituciones mediante los cuales un gobierno o un partido obtienen y emplean informacin referente a su propia estructura y composicin, y la eficacia con que tal informacin se compila, se aplica y con el tiempo se almacena, para su utilizacin futura, en archivos o en las memorias de los hombres, constituyen un promisorio objeto de estudio en el campo de la poltica comparada.La imitacin voluntaria y la moral: el concepto de mimesis

La contraparte de la capacidad de dirigentes o gobernantes para obtener y emplear informacin proveniente del pueblo la constituye la disposicin de la poblacin para aceptar informacin y sugestiones, en lugar de simples rdenes, por parte de sus gobernantes.Al calcular las aptitudes polticas de un gobierno, con frecuencia preguntamos: Acepta la poblacin mensajes y rdenes provenientes del gobierno?, Acatan tales rdenes con escasa o ninguna supervisin, y les prestan apoyo activo por encima y ms all de la mera anuencia?, Son los gobernantes aceptados como modelos o grupos de referencia?, Imita voluntariamente la poblacin las pautas de comportamiento sealadas o sugeridas por sus gobernantes?, la falla en la imitacin ocurre mucho antes que la falla en la obediencia, y resulta predictiva de esta ltima. Con el fracaso de esta imitacin voluntaria, o mimesis, la minora creativa se convierte en una mayora dominante.Los sistemas de decisin y su capacidad para el acarreo de informacin

Otra lnea con inters para la investigacin podra referirse a la capacidad de quienes formulan las decisiones para predecir el tipo y la intensidad de las reacciones frente a stas, tanto de posibles antagonistas y de observadores supuestamente pasivos, como de supuestos partidarios o subordinados. Qu esfuerzos se realizaron para reunir la informacin pertinente, mediante qu canales se la llev al punto de decisin, y qu probabilidades tenan de considerarla quienes formulan las decisiones.En un plano ms general, esta lnea de pensamiento sugiere que la sobrecarga de comunicacin o la sobrecarga de decisin puede ser un factor principal en la decadencia de Estados y de gobiernos. Anlogamente, la sobrecarga de la atencin puede constituir un elemento causante de dificultades en nuestra cultura de masas, dirigida y con frecuencia superficial, con sus noticias estandarizadas, sus anlisis en pldoras y sus resmenes de libros. La sobrecarga en la atencin y la comunicacin puede obligar tambin a muchas personas a buscar frenticamente un status privilegiado para sus propios mensajes, cosa que ocurrira espontneamente en una democracia prspera y econmicamente igualitaria.

CAPACIDAD DE APRENDIZAJE Y CREATIVIDAD EN POLTICA: LA BSQUEDA DE COHESIN Y DE VALORES

El fracaso de las poblaciones en imitar a sus gobernantes es una consecuencia del fracaso de esos gobernantes en inventar y ejecutar una nueva respuesta eficaz frente a algn desafo nuevo que el ambiente presenta al Estado o a la sociedad.

Esta capacidad de producir novedad, y de reconocer las nuevas soluciones adecuadas una vez que se las ha descubierto, parece relacionarse con la riqueza combinatoria del sistema por el cual se almacena, procesa y evala la informacin.

Esta funcin de inteligencia creadora que opera en la sociedad no se relaciona directamente ni con la coaccin ni con la obediencia, pero constituye un aspecto esencial de los recursos intelectuales de los que puede depender la supervivencia del sistema poltico o social.

Podemos describir el aprendizaje de un sistema como un cambio estructural cualquiera dentro de ese sistema, que le hace dar una respuesta diferente -y quizs entonces ms efectiva- frente a un estmulo externo repetido. Si el aprendizaje consiste, por lo tanto, en cambios estructurales internos seguidos por cambios en el comportamiento externo, la capacidad de aprendizaje de un sistema se relaciona con la cantidad y los tipos de sus recursos no comprometidos.La nocin de conjunto de recursos no comprometidos permite plantear interrogantes acerca de su nmero y distribucin, sus proporciones frente al resto del sistema, o la carga que probablemente se imponga a ste.

Desde hace mucho tiempo los estudiosos del crecimiento econmico se han interesado por estas cuestiones referentes a la aptitud de inventar e innovar, y sobre la propensin a hacerlo.

La estructura de los dispositivos destinados al aprendizaje social

La capacidad de aprendizaje de las organizaciones depende del mbito que abarcan las recombinaciones de conocimiento, recursos humanos y dispositivos que se hallen internamente disponibles, y esos mbitos deberan aumentar con la eficacia de las disociaciones, es decir, la medida en que los dispositivos destinados al procesamiento y almacenamiento de informacin pueden subdividirse en piezas independientes cada vez ms pequeas.

Esta afirmacin, si no se la limita, resultara una peligrosa verdad a medias, pues cuantos ms pequeos sean los tems de informacin y ms vasto el conjunto de sus nuevas combinaciones posibles, tanto ms tardaramos en examinar esos conjuntos y menor sera la probabilidad de extraer de ellos combinaciones pertinentes o utilizables en un plazo limitado.

Probablemente sea lento el aprendizaje mediante la recombinacin de grandes cantidades de pequeos tems no relacionados entre s, y haya que apelar permanentemente a criterios selectivos adicionales, externos al conjunto de tems recombinables. Esto correspondera a la descripcin del aprendizaje infantil formulada por D. O. Hebb.

Hebb. opone tales procesos a lo que l llama aprendizaje adulto. Este, en su opinin, consiste en la recombinacin de un nmero menor de subgrupos mayores de memorias o hbitos, y el principio se aplicara, mutatis mutandis, a las recombinaciones de subgrupos de dispositivos materiales. El aprendizaje infantil, segn esta postura, se parece a la construccin de una casa mediante ladrillos; el aprendizaje adulto equivale a armarla con paneles prefabricados. El aprendizaje infantil es entonces ms lento, pero ms rico en posibilidades; el aprendizaje adulto es ms rpido dentro de los lmites combinatorios de los subgrupos que le son dados.

Desde un punto de vista estructural, la capacidad de aprendizaje de una organizacin la indican el monto de sus recursos internos no comprometidos; la magnitud de la posible disociacin de stos en tems separados, y la magnitud e importancia probables de sus subgrupos fijos disponibles para nuevas recombinaciones.

La promocin de una poltica y el liderazgo proftico

Cuando algunos individuos o grupos dentro de la sociedad descubren soluciones autnticas o supuestas a nuevos problemas, hay que proponerlas a otros individuos para que las acepten o las apoyen, y para que eventualmente las ejecuten.

Desde un punto de vista combinatorio la creatividad o invencin significa producir ya mismo una combinacin adecuada, que segn el clculo de probabilidades, incluyendo tanto las condiciones econmicas como las culturales, slo se habra encontrado en un futuro ms o menos lejano.En la poltica y en la vida social las soluciones propiciadas tienen que satisfacer tres conjuntos muy diferentes de pruebas.Primero, las soluciones deben expresar, en cierta medida, los hbitos, preferencias, creencias y quiz las estructuras de personalidad socialmente estandarizadas de sus proponentes. Si no cumplen del todo con esos requisitos, no las propiciaran esas personas en particular o, en el caso extremo, no las propondra nadie.

Segundo, las ideas y polticas propuestas pueden representar o no respuestas adecuadas a los desafos que enfrentan el estado o la sociedad. Aunque no fuera as, podran no obstantes ofrecer una satisfaccin emocional a quienes las proponen, e incluso ayudarlos a obtener una gran participacin temporaria en las recompensas tangibles o intangibles que otorga la sociedad, si bien es probable que tales personas, en una etapa posterior, deban compartir las consecuencias del quebranto o el estancamiento social.En tercer lugar, las soluciones propuestas tienen que ser bastante aceptables para una cantidad suficiente de individuos y grupos en la sociedad, aparte de sus proponentes y defensores originales, para que se las pueda llevar realmente a la prctica.

Desde el punto de vista ideal, la solucin de un problema poltico, para que sea satisfactoria, debera contar con el fuerte apoyo de un grupo influyente en la sociedad y ser capaz de resolver ese problema en la prctica; adems, el nmero de miembros de la sociedad que la aceptan debera ser tal como para que su ejecucin resultara viable. Pero en la realidad no es, por supuesto, necesario que coincidan estos tres criterios.

Estas consideraciones explican, en cierta medida, el hecho tan conocido de que las nuevas pautas de comportamiento en la poltica, la economa y la cultura se originan o propagan a menudo, en sus primeras etapas, por la accin de individuos atpicos, inadaptados, extranjeros, miembros de minoras y hombres marginales.

Las nuevas ideas pueden resultar tan inslitas que quiz se requieran hombres inusitados o marginales para propagarlas. Los hombres de este tipo se convierten en profetas o promotores de tales ideas. Pueden llegar a aceptarlas grupos influyentes en la sociedad, pero excluyendo a los individuos y grupos que las propagaron originalmente. Al final, las polticas son ejecutadas por los de adentro, mientras los de afuera se dispersan o continan como una secta que lamenta la imperfecta ejecucin de sus principios.

La creatividad es entonces una propiedad de ciertos sistemas complejos de procesamiento de la informacin que incluyen tanto a los individuos como a las sociedades y las culturas. Se la encuentra en diferentes niveles de los sistemas, y, en principio, se la puede describir con cierto detalle en sus principales etapas secuenciales, su estructura interna, y las condiciones externas e internas que la favorecen o inhiben.La comunicacin, la cohesin y los lmites de los Estados y las federaciones

Muchos cientficos polticos se inclinan a aceptar como dadas las unidades polticas, los Estados, las naciones o federaciones que se analizan.

Sin embargo, a veces se disuelven tales Estados; los habitantes de ciertas regiones, los miembros de ciertas nacionalidades, o los adherentes de cierta fe poltica o religiosa, pueden tratar de separarse, y acaso tengan xito al hacerlo. En otros casos, estados o pueblos previamente separados tratan de federarse o de juntarse de alguna otra manera en una unidad poltica comn. Qu condiciones rigen el xito o el fracaso de tales empresas? Si bien debemos recurrir a todos los sectores de las ciencias sociales, incluso la historia, para obtener una respuesta, quizs el estudio de la informacin y la comunicacin pueda efectuar un aporte importante.

La capacidad de los miembros de un pueblo as concebido para transmitirse informacin recproca sobre una amplia variedad de temas; la capacidad de formar pautas eficaces de trabajo en equipo para una amplia variedad de propsitos, y quiz su capacidad de formar nuevas pautas de trabajo en equipo para nuevos propsitos, pueden calcularse o medirse.

Los datos sobre todos esos aspectos miden, por decir as, el equipo invisible de comunicaciones que llevan en sus mentes los miembros de una poblacin.

El examen, o medicin, de los hbitos de comunicacin debe complementarse con un examen o medicin de las experiencias reales de comunicacin.

Y cules son las posiciones de status de cada uno de estos tipos de experiencias de comunicacin, en funcin de la estructura social y los valores culturales de las poblaciones en cuestin?

El examen de los hbitos de comunicacin indica una clase de dificultades que se presentan en el aprendizaje social y que un proceso de integracin poltica debe superar. El examen de experiencias de comunicacin y del status cultural y social que se les asigna indica cul es el material esencial con que tiene que trabajar cualquier proceso de integracin poltica, as como algunas fuentes importantes de su fuerza potencial.Los cambios, en los datos bsicos de los hbitos o las experiencias de comunicacin pueden sealar cambios posteriores en las funciones sociales de las unidades polticas existentes.

Preferencias, autoridad y valores

En cualquier sistema de comunicacin, salvo en los ms sencillos, quiz tengan que competir varios mensajes por entrar en el mismo canal de comunicacin, que acaso carezca de capacidad suficiente para transportarlos a todos al mismo tiempo.

Ningn sistema de comunicacin de cierta complejidad puede funcionar sin un conjunto de preferencias o prioridades operacionales.

En su forma ms tosca y simple, un valor es una preferencia repetitiva por una clase particular de mensajes o datos que deben recibirse, transmitirse o segn los cuales se debe actuar, con preferencia sobre los dems.

Puede decirse que una fuente de mensajes que recibe tratamiento preferencial habitual en lo que respecta a la atencin, transmisin y obediencia en la poltica o en la vida social, posee autoridad.La autoridad intrnseca podra referirse entonces a mensajes que imponen un tratamiento preferido en la comunicacin social a causa de los mritos de su contenido particular, aunque no se originen en una fuente preferida ni vayan acompaados por smbolos preferidos.

Cuando una fuente de gran autoridad o elevado prestigio emite reiteradamente mensajes de escasa importancia o mrito intrnsecos, los hombres pueden aprender a estimarnos menos, y cuando una fuente de autoridad, status o prestigio bajos, emite con frecuencia mensajes importantes y valiosos para quienes los reciben, estos ltimos pueden aprender a otorgarles ms consideracin. Por lo general, la autoridad externa tiende a acentuarse cuando no hay tiempo para la evaluacin de los mritos intrnsecos de sus mensajes, como en casos de emergencia o donde quienes reciben los mensajes, a causa de su ignorancia o de sus prejuicios culturales o sociales, son presumiblemente incapaces de evaluar estos mritos; o, finalmente, y ello no es infrecuente en poltica, en casos en que tales mritos parecen dudosos, a veces incluso a las personas mismas que produjeron los mensajes.

Algunas de estas consideraciones han hecho que se hablara con frecuencia, en los escritos sobre poltica, del desenmascaramiento de la autoridad.

No puede volverse a ocultar la fisura potencial entre la autoridad externa de una fuente de comunicaciones y los mritos intrnsecos de los mensajes originados en ella, una vez que se ha difundido la conciencia de que tal fractura existe.

Aunque pueda persistir entonces, en cierta medida, el escepticismo frente a la autoridad formal, el estudio de la comunicacin nos muestra que todas las organizaciones requieren indispensablemente un conjunto de preferencias opcionales.

En un sentido ms amplio, el trmino valor indica con frecuencia, en las ciencias sociales, una preferencia operacional vinculada con otras preferencias y tambin con importantes memorias y pautas de reaccin emocional en los individuos que lo sostienen.Pero sea cual fuere la nocin de valor que adoptemos, el problema fundamental que se plantea es siempre el de la relacin existente entre varios valores. Es imposible comprender la funcin de un valor aislado, salvo en funcin del conjunto de valores que forman un todo pertinente de las oraciones, y las oraciones en el contexto del lenguaje, del mismo modo la funcin de un valor nicamente puede describirse en funcin del sistema de valores en que ocurre.

En este punto nuestro conocimiento se enfrenta con dos trampas. La primera consiste en la propensin a confundir lo que la gente dice o piensa que prefiere, con lo que realmente prefiere en los hechos. La segunda trampa es una versin ms de la vieja falacia mecanicista de que el comportamiento de un sistema puede pronosticarse totalmente sobre la base del comportamiento de sus partes. Un conjunto de valores descriptos individualmente quiz no logre describir el funcionamiento del sistema de valores que constituyen todos ellos en conjunto.

EL GOBIERNO COMO PROCESO DE CONDUCCIN:

LOS CONCEPTOS DE REALIMENTACIN,

OBJETIVO Y PROPSITO

Recordemos que nuestra palabra gobierno proviene de una raz griega que se refiere al arte del timonel. El mismo concepto bsico se refleja en el doble significado de la palabra moderna governor (gobernador y regulador), es decir, una persona encargada del control administrativo de una unidad poltica, y un artefacto mecnico que regula el funcionamiento de una mquina de vapor o de un automvil. Si observamos ms de cerca notamos que existe en verdad cierta similitud bsica entre el gobierno o autogobierno de los barcos o mquinas, y el gobierno de las organizaciones humanas. Proceso comn en que se basan todas las operaciones de este tipo: el de realimentacin.Este control de una mquina sobre la base de su funcionamiento real y no de su funcionamiento esperado se conoce como realimentacin, e implica miembros sensoriales impulsados por miembros motores, que desempean la funcin de relatores o monitores, es decir, de elementos que indican un funcionamiento ...

Mi tesis es que son exactamente paralelos el funcionamiento del individuo vivo y el de algunas de las mquinas ms nuevas de comunicacin. Ambos poseen receptores sensoriales en una etapa de su ciclo de operacin: es decir, en ambos existe un aparato especial para reunir informacin proveniente del mundo exterior a bajos niveles de energa, y para ponerla a disposicin del individuo o de la mquina. En ambos casos, esos mensajes externos no son recibidos en forma neta, sino a travs de los medios internos de transformacin del aparato, sea ste algo vivo o algo muerto. La informacin se convierte luego en una nueva forma disponible para etapas posteriores del funcionamiento.

En ambos, la accin cumplida con el mundo exterior, y no simplemente la accin propuesta, vuelve a conocimiento de aparato regulador central.

Algunas aplicaciones de la realimentacin negativa: oposicin a sobrepasar el objetivo

Como sabemos, nuestra vida se halla rodeada por aplicaciones de este principio de realimentacin en la actual ingeniera de control.

En estos casos, se comienza por provocar en un sistema elctrico o mecnico un desequilibrio interno importante que funciona como impulso, en el sentido de que el sistema tiende a moverse hacia un estado en el cual se reducir este desequilibrio interno o dicho en forma menos precisa, disminuir la tensin interna. El desequilibrio interno debe ser de tal ndole que se lo pueda reducir colocando al sistema entero en cierta situacin o relacin particular frente al mundo exterior. Esta situacin del sistema frente al mundo exterior puede llamarse una situacin de objetivo o, ms brevemente, un objetivo.

En segundo lugar, para que el sistema se acerque con eficacia al objetivo, debe darse la condicin de realimentacin. El sistema debe recibir informacin concerniente a la posicin del objetivo y a su propia distancia con respecto a ste, y debe recibir informacin sobre los cambios en la distancia que lo separa del objetivo, provocados por su propio fundamento. Los mensajes son a menudo negativos, pues se oponen a las acciones previas del sistema, con el propsito de no sobrepasar el blanco.

En tercer lugar, el sistema debe ser capaz de responder a esta informacin mediante cambios adicionales en su propia posicin o comportamiento. Valido de estos mecanismos, y si se le ofrece la libertad suficiente, el sistema tender entonces a acercarse a su objetivo.

Finalmente, si estos cambios resultan eficaces y el sistema alcanza su objetivo, disminuir por lo comn parte de su impulso o tensin interna.Existe una obvia similitud entre estos pasos en el proceso de bsqueda de objetivos, y los conceptos de impulso, indicio, respuesta, y recompensa, habituales en la psicologa del aprendizaje.

Los procesos de realimentacin parecen representar la maquinaria particular de la homeostasis, por la cual se mantienen a nivel constante ciertos estados o funciones esenciales de un organismo, tales como la temperatura del cuerpo o el ritmo respiratorio.

Parece sorprendente la similitud de estos procesos de conduccin, bsqueda de objetivos y control autnomo, con ciertos procesos polticos. Los gobiernos pueden buscar objetivos en su poltica interna. Para acercarse a ellos, deben guiar su comportamiento mediante una corriente de informacin sobre la posicin en que se encuentran respecto de tales objetivos, la distancia que les falta para alcanzarlos, y los resultados reales -no ya los propuestos- de los pasos o tentativas ms recientes que realizaron para aproximarse a ellos.

Adems de buscar objetivos, los gobiernos o las organizaciones polticas pueden tratar de mantener cierto estado de cosas que estiman deseable, tal como la prosperidad en la economa o la tranquilidad en la poltica. Al hacerlo as, deben recibir informacin concerniente a la magnitud y el ritmo de los desrdenes, para poder orientar la dimensin y velocidad de las contramedidas. Si reaccionan en forma insuficiente o tarda, no detendrn el desorden. Si lo hacen en forma excesiva o demasiado pronta, sobrepasarn la marca y ellos mismos crearn un desorden en la direccin opuesta.Una alternativa del enfoque del equilibrio

En su aplicacin a la poltica, el concepto de realimentacin permite obtener un enfoque ms sofisticado que el del concepto mecanicista tradicional de equilibrio, y lograr una escala ms amplia de anlisis y medicin.

En sntesis, el concepto de equilibrio es incapaz de describir un mbito importante de fenmenos dinmicos, y no puede fijar la trayectoria temporal que seguir el cambio sustancial.

A primera vista, el proceso de bsqueda de objetivos que antes describimos puede parecer similar al proceso de restablecer simplemente el equilibrio. En verdad, resulta muy distinto de ste por lo menos en cuatro aspectos. Ante todo, en los procesos de realimentacin, la situacin de objetivo buscada se encuentra fuera, y no dentro, del sistema que busca los objetivos. Segundo, el sistema mismo no est aislado de su ambiente sino que, por lo contrario, su funcionamiento depende de una corriente constante de informacin procedente de ste, y de otra concerniente a su propio funcionamiento. Tercero, el objetivo puede cambiar, sea de posicin, como un pjaro en vuelo o un aeroplano, o incluso de velocidad y direccin como un conejo perseguido por un perro.

En cuarto lugar, es posible aproximarse indirectamente a un objetivo mediante un recorrido, o un nmero de posibles recorridos, que sortean un conjunto de obstculos.

Podemos evaluar la eficacia de un proceso de realimentacin en funcin del nmero y la magnitud de sus errores, es decir, las correcciones hacia abajo o hacia arriba que realiza para alcanzar el objetivo.

1. La carga de informacin, es decir, la magnitud y velocidad de los cambios en la posicin del blanco en relacin con el sistema de bsqueda de objetivos.

2. El retardo en la respuesta del sistema, es decir, el lapso que transcurre entre la recepcin de informacin concerniente a la posicin del blanco, y la ejecucin del paso correspondiente en el comportamiento de bsqueda de objetivos por parte del sistema.

3. El provecho en cada paso correctivo dado por el sistema, es decir, el monto resultante de cambio real en el comportamiento.

4. La gua o anticipacin, es decir, la distancia que media entre la posicin exactamente pronosticada del blanco en movimiento y la posicin real de la cual se recibieron las ltimas seales.

Un modelo de realimentacin de este tipo nos permite formular un nmero de preguntas significativas sobre el funcionamiento de los gobiernos.

1. cul es la carga sobre el sistema de decisin poltica del Estado? 2. cul es el retardo en la respuesta de un gobierno o de un partido frente a una nueva emergencia o desafo? Cunto tiempo requieren quienes ejecutan la poltica para darse cuenta de una nueva situacin y cunto tiempo adicional necesitan para llegar a una decisin? Qu demora impone la consulta o participacin ms amplia? Cunto tiempo se requiere para transmitir una serie de rdenes cambiantes a los funcionarios, soldados y ciudadanos que deben ejecutarlas, y cunto tiempo les lleva a esas personas reajustar sus pautas de comportamiento, hbitos y valores anteriores, para poder obedecer con eficacia? cul es el retardo en la respuesta a una nueva informacin que entra en el sistema de decisin poltica por un canal en lugar de otro, en contraste con la informacin que primero se acepta entre algn grupo social u ocupacionales determinados?

3. cul es el provecho de la respuesta, o sea la velocidad y la magnitud de la reaccin de un sistema poltico frente a los nuevos datos que ha aceptado? Con qu rapidez responden las burocracias, los grupos de inters, las organizaciones polticas y los ciudadanos a reaplicaciones importantes de sus recursos? En qu medida llevan ventaja los regmenes autoritarios para forzar una respuesta masiva frente a las nuevas polticas, una vez adoptadas? En qu medida pueden tener las democracias una tasa elevada de provecho?

4. Cul es el monto de gua o anticipacin, es decir, de capacidad de un gobierno para predecir y anticipar con eficacia los nuevos problemas? En qu medida intentan los gobiernos mejorar su tasa de anticipacin estableciendo organizaciones especficas de inteligencia, juntas de la libre discusin pblica, incluida la libertad para las opiniones no ortodoxas, sobre la eficacia predictiva de un sistema de decisin poltica?

Como el provecho se relaciona con el poder, los gobiernos u organizaciones con escaso poder acaso deban tratar de compensar sus tasas reducidas de provecho intentando aumentar su previsin y la velocidad de su respuesta, es decir, reducir su retardo y aumentar su anticipacin.Algunas aplicaciones de la realimentacin amplificatoria: refuerzo automtico de la respuesta

La informacin referente al funcionamiento de un sistema de decisin se devuelve a ste y puede servir para negar, oponerse o invertir su accin en curso, si tal accin alejara al sistema de su objetivo. Sin embargo, en otras situaciones podemos hallar pautas positivas o amplificatorias de realimentacin. En los casos de realimentacin amplificatoria, la informacin acerca de la respuesta de un sistema sirve para reforzar esa respuesta en la misma direccin, y la informacin acerca de esta respuesta reforzada puede producir un refuerzo adicional de ese comportamiento. Los pnicos en las muchedumbres, los pnicos en la Bolsa, los casos de inflacin galopante, las carreras armamentistas, o el crecimiento del encono en una comunidad sumamente dividida son ejemplos de sistemas con realimentacin amplificatoria en la vida social o poltica.

Si la secuencia de refuerzos de comportamiento, debida al fenmeno de la realimentacin, forma una serie uniforme o incluso creciente, la respuesta total aumentar hasta superar los lmites del sistema, y terminar en alguna forma de desquiciamiento. Si, por lo contrario, esta secuencia de refuerzos forma una serie decreciente de modo que, en conjunto, cada nuevo refuerzo tiende a ser menor que los ocurridos con anterioridad, el refuerzo total tender a acercarse a un lmite superior que no tiene por qu sobrepasar las capacidades del sistema.

Los cambios graduales en las pautas culturales o en las estructuras de personalidad de una poblacin, o en la composicin de una lite poltica, pueden cambiar as los objetivos buscados por un sistema de decisin poltica. Si el objetivo A ha sido alcanzado en la medida de un valor dado de umbral, el logro del umbral provocar un reordenamiento de algunos elementos del sistema de comunicacin, de modo de dar prioridad a otro circuito de realimentacin que conduzca al sistema en direccin de otro objetivo B. Si se alcanza B, el sistema puede volver a la bsqueda de A, o pasar a un tercer circuito buscador de objetivos que lo conduzca hacia el objetivo C, y as sucesivamente.

De acuerdo con la opinin de Adolfo Hitler sobre la psicologa de las masas, el arte del liderazgo de masas consiste en tales casos en la capacidad para hacer aparecer cada objetivo intermedio como si fuera el ltimo, y convencer al pueblo comn de que todo depende de su capacidad para conquistar este objetivo particular aqu y ahora, sin tener en cuenta nada ms. Slo los objetivos ltimos, segn este punto de vista, poseen la capacidad de suscitar en grandes cantidades de personas la plena aplicacin de los recursos disponibles.

Tales tcticas psicolgicas de todo o nada se ven agravadas por serios costos polticos. Tucdides ya haba advertido uno de sus inconvenientes: como cada objetivo tctico se representa como muy importantes, y virtualmente el ltimo, se convierte en traicin cualquier desacuerdo acerca de las tcticas.

Si fuera posible hacer pblico, en todas las ocasiones, el objetivo estratgico del gobierno u organizacin, y hacer pblica la relacin particular de los objetivos tcticos del da frente a ese objetivo estratgico, resultara ms fcil para los ciudadanos o soldados, o para los miembros de una organizacin, mantener su compromiso emocional con las tcticas cambiantes, mientras que prestaran a la vez un completo apoyo operativo a tales tcticas, no por ellas mismas, sino en bien del objetivo estratgico al que se dice que sirven.Un ltimo aspecto de la realimentacin de objetivos cambiantes podra implicar cambios fundamentales en los objetivos. Una organizacin que ha perseguido una clase de objetivo podra llegar a buscar otra muy diferente.

AUTOCONCIENCIA POLTICA, AUTONOMA Y SOBERANA

En gobiernos u organizaciones de inteligencia, puede observarse empricamente la distincin entre mensajes primarios y secundarios. Tales organizaciones, quiz reciban una vasta cantidad de informes concernientes a los acontecimientos del mundo exterior. Se adhieren luego smbolos secundarios a los informes entrados, de modo que la organizacin conozca cada informe recibido, y dnde se lo puede localizar. Otros smbolos secundarios llevan a la prctica las decisiones referentes al itinerario de los informes primarios y a su archivo posterior, as como a la clase de personas a las que se permite verlos segn una clasificacin de seguridad. Por fin, se adhiere a los informes resmenes y breves evaluaciones, para reducir la cantidad de detalles transmitidos a los niveles superiores de decisin.

Sin esta divisin funcional entre informacin primaria y secundaria, sera casi imposible mantener el control sobre el flujo de grandes cantidades de informacin, identificar los tems ms importantes, y utilizarlos dentro de un tiempo limitado para las decisiones y la accin.

En un sentido un poco amplio, conciencia es el proceso especfico de interaccin simultnea o casi simultnea de una cantidad de smbolos secundarios diferentes, extrados de distintos niveles de informacin de orden primario. En su sentido ms amplio, es el proceso completo por el cual se derivan y usan smbolos secundarios en un sistema de decisin, desde el momento en que se los aplica a los mensajes primarios, confrontndolos y recombinndolos en los niveles mximos de decisin, y luego a todo lo largo de su trayectoria hasta que se los reaplica a la accin. En este sentido, la conciencia es el conjunto de procesos de realimentacin de los smbolos secundarios.La conciencia puede permitir que la conduccin ocurra en forma muy precisa. Si se la realimenta en el control y la redireccin de los dispositivos de ingreso u rganos sensorios del sistema de decisin, puede servir para fijar o para cambiar el inters y la atencin de la organizacin, es decir, para identificar los tipos de informacin que deben ser seleccionados y transmitidos con preferencia a otros.

Tambin puede producir casi el resultado contrario, al aumentar la probabilidad de decisiones errneas por el empleo de smbolos secundarios que tergiversen la distribucin de los datos primarios. Puede dejar de lado los tems ms pertinentes de informacin primaria en favor de otros no representativos que parecen preferibles sobre la base de ciertos criterios de aceptabilidad previamente adquiridos.

Por lo tanto, la conciencia puede llegar a ser falsa conciencia. Un gobierno, un grupo social o una organizacin poltica pueden vivir en parte en un mundo de fantasa. En situaciones menos dramticas, muchas organizaciones, gobiernos o individuos actan con autoimgenes de su propio comportamiento que pueden diferir en mucho de lo que en verdad estn haciendo.Al cambiarse la cantidad de atencin y de informacin secundaria otorgadas a ciertos tipos de hechos y acontecimientos sociales o polticos, su efecto eventual sobre toda la sociedad o el sistema poltico puede sufrir grandes cambios.

Lo menos obvio, pero quiz no menos cierto, es que el poder potencial ejercido mediante los procesos de realimentacin de la conciencia social no depende simplemente del cambio de la institucin que transmite la informacin, sino depende a veces mucho ms del grado de condensacin de datos primarios y de la ubicacin estratgica del control en algn punto de estrangulamiento del flujo de informacin secundaria.Fronteras y autonoma

Los lmites de una organizacin autnoma pueden describirse en trminos de un diferencial de comunicacin: entre los miembros o las partes de una organizacin debera existir una comunicacin ms rpida y efectiva que con los ajenos a ella.

Entre las pautas ms importantes de comunicaciones internas, canales y preferencias que integran una organizacin, figuran los rizos de realimentacin que incluyen dispositivos de memoria como partes de sus sendas. Por dispositivos de memoria se entienden todos los tipos de mecanismos disponibles para la organizacin, mediante los cuales se almacenan los datos del pasado y se los mantiene disponibles para la evocacin y las aplicaciones a la recombinacin o a la accin.Cualquiera que sea su forma fsica, la memoria es esencial para todo funcionamiento de la autonoma en escala amplia. En verdad, podramos definir la autonoma, por encima del nivel simple de realimentacin, como la realimentacin de datos provenientes de cierta forma de memoria, y por lo tanto del pasado, en la formulacin de decisiones presentes.Segn esta opinin, la autonoma depende del equilibrio entre dos flujos de realimentacin de datos: uno proveniente del funcionamiento del sistema en el presente y en su ambiente; otro proveniente del pasado del sistema, en forma de smbolos evocados de su memoria.Sin tradiciones ni memorias, las organizaciones supuestamente autoconductivas estn expuestas a marchar a la deriva con su ambiente, pero si no se abren a la nueva informacin procedente de su ambiente, las organizaciones autoconductivas dejan de conducirse a s mismas y se comportan en cambio como simples proyectiles totalmente gobernados e impulsados por su pasado. Paradjicamente, se pierde la yoidad en individuos y organizaciones al perderse informacin proveniente del exterior del propio sistema cerrado y del propio tiempo.

La autonoma dentro de una organizacin es, por lo tanto, una funcin de todo el sistema. No se halla ubicada en ningn punto determinado del sistema, pero puede haber uno o ms puntos de importancia particular respecto de ella. Estos puntos cruciales para la autonoma de una organizacin son aquellos por los cuales un flujo de datos evocados del pasado penetra en el flujo de datos empleados para formular las decisiones actuales.Acaso sera ms realista pensar en los partidos polticos y en los grupos de inters como organizaciones con capacidad por lo menos limitada para autoconducirse, con dirigentes y dispositivos para la formulacin de decisiones que les permiten recibir advertencias de su ambiente, percibir seales concernientes a los lmites de una accin factible o segura, y maniobrar en consecuencia con el fin tanto de evitar choques perjudiciales como de alcanzar objetivos particulares en un breve lapso.En qu medida saben los dirigentes y miembros de tales grupos hasta qu punto llegar en cualquier situacin especfica, y cul es su capacidad para detenerse exactamente all? La capacidad de los sistemas polticos para combinar la libertad individual y la propensin a innovar, con la paz interna y la estabilidad, acaso no se halle desvinculada de las respuestas a este interrogante.La concentracin de las decisiones: soberana y vulnerabilidad en los sistemas polticos

Cualquier sistema importante de decisin probablemente incluya un nmero considerable de procesos de realimentacin, y de las correspondientes pautas de rizo en los canales de comunicacin. Cada uno de estos rizos de realimentacin puede contener una o varias etapas crticas o puntos de decisin, en los cuales llega a cambiarse el comportamiento de la realimentacin, o el comportamiento de un rizo de alimentacin produce un cambio en el comportamiento de otro. Los puntos en los que las realimentaciones de informacin almacenada proveniente de dispositivos de memoria interactan con los procesos de realimentacin basados en la informacin externa presente son puntos de decisin de este tipo.

Si todas las decisiones importantes se concentran en un punto, y si las efectuadas en ese punto tienden a gobernar o contrarrestar a todas las efectuadas en cualquier otra parte del sistema, el funcionamiento de ste puede asemejarse a la situacin de soberana concentrada.

La concentracin de decisiones en tal sistema corresponde, en cierto grado, a la concentracin de smbolos de legitimidad, y a la imputacin de responsabilidad a los prncipes, ministros o gobernantes individuales. Si el sistema poltico sigue una serie de decisiones que conducen al desastre, las acciones u omisiones de estas pocas personas tienden a ser consideradas como sus causas.

Una caracterstica an ms esencial de la soberana es la ausencia de cualquier canal reconocido de entrada que controle o contrarreste la informacin proveniente del exterior del sistema.

Finalmente, la concentracin de todas las decisiones supremas en un solo punto implica que dentro de la organizacin poltica ms extensa no se tolera el funcionamiento de ningn subsistema que cuente con un mnimo de autonoma como para poder modificar o contrarrestar las decisiones efectuadas en la cspide.

Se cree que las decisiones de ese sistema poltico son terminales o finales, en el sentido de que no existen otros medios para modificarlas o cambiarlas despus que hayan alcanzado una etapa, punto o institucin particulares en el sistema.

A pesar de su aparente plausibilidad, este esquema puede representar una descripcin sumamente imperfecta del verdadero estado de cosas.

Cuando se sobreestima la concentracin de decisiones en un solo punto, suele producirse una sobreestimacin de la importancia de cargos o personas particulares.

La misma consideracin puede muy bien aplicarse al problema consistente en calcular la vulnerabilidad de los gobiernos ante la destruccin de puntos o instituciones crticos en el sistema de decisin.El ingenuo supuesto de la soberana concentrada puede llegar a ser aun ms engaoso en la poltica internacional. El nfasis sobre la soberana puede tender a desviar la atencin de los lmites muy reales que restringen las decisiones hasta en las naciones ms poderosas.

1. Probabilidades de lmite, es decir, la probabilidad de que el comportamiento del gobierno, o del Estado, tropiece con un lmite fsico, social, econmico o militar.

2. Seales de lmite, es decir, seales, datos o informacin que anuncian la cercana o la presencia de ese lmite fsico o social.

3. Imgenes de lmite, es decir, imgenes de tales lmites fsicos o sociales, de sus configuraciones, y de la probabilidad de enfrentarlos en condiciones particulares.

Por supuesto, tales imgenes de lmite pueden ser detalladas o toscas, precisas o vagas, realista o engaosa; y pueden ser usadas efectivamente o no por el sistema.LA AUTOCLAUSURA DE LOS SISTEMAS POLTICOS

La base de la autonoma consiste en una forma particular de tratar la informacin. Como buena parte de esta informacin se transmite mediante smbolos, la autonoma implica ciertas maneras de tr