Informe de pasantía LA LITERATURA INFANTIL COMO EXPERIENCIA...
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Informe de pasantía LA LITERATURA INFANTIL COMO EXPERIENCIA SENSIBLE EN EL RECONOCIMIENTO DEL CUERPO PROPIO Y DEL OTRO EN PRIMERA INFANCIA. Alexia Mayerly Cardozo Ramirez cód: 20132187251 Angela Catalina González Galindo cód: 20061187032 Pasantía realizada en la Secretaría Distrital de Integración Social para optar por el título de Licenciadas en Pedagogía Infantil Directora: Betty Sandoval Guzmán Universidad Distrital Francisco José de Caldas Facultad Ciencias y Educación Licenciatura en Pedagogía Infantil 2019 1
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Informe de pasantía
LA LITERATURA INFANTIL COMO EXPERIENCIA SENSIBLE EN EL
RECONOCIMIENTO DEL CUERPO PROPIO Y DEL OTRO EN PRIMERA
INFANCIA.
Alexia Mayerly Cardozo Ramirez cód: 20132187251
Angela Catalina González Galindo cód: 20061187032
Pasantía realizada en la Secretaría Distrital de Integración Social para optar por el título
de Licenciadas en Pedagogía Infantil
Directora: Betty Sandoval Guzmán
Universidad Distrital Francisco José de Caldas
Facultad Ciencias y Educación
Licenciatura en Pedagogía Infantil
2019
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TABLA DE CONTENIDO
1. Contexto de la pasantía.
1.1. Introducción
1.1.1. Instituciones vinculadas
1.1.1.1. Universidad Distrital Francisco José de Caldas.
1.1.1.2. Secretaria Distrital de Integración social.
1.1.1.3. Convenio Universidad distrital Francisco José de Caldas y la
Secretaria Distrital de Integración social.
1.1.2. Contextualización barrial, institucional y local.
1.1.3. Jardín infantil SDIS Suba.
2. Experiencia pedagógica
2.1. Contexto niveles párvulos 1, 2, 3 y 4
2.2. Propuesta de intervención pedagógica.
2.2.1. Fundamentación
2.2.2. Objetivos
2.2.3. Diseño Metodológico
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2.2.4. Desarrollo de Propuesta
2.2.5. Reflexión de la Experiencia Pedagógica
3. Conclusiones y recomendaciones
4. Bibliografía
5. Anexos
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1. Contexto de la pasantía.
1.1. Introducción
En el presente documento se pretende dar cuenta de la práctica laboral convenida entre la
Universidad Distrital Francisco José de Caldas (UDFJC) y la Secretaría Distrital de Integración
Social (SDIS) bajo el marco del acuerdo 038 del 28 de Julio del año 2015 en el que expone la
pasantía como modalidad de grado para optar por el título de LICENCIADAS EN PEDAGOGÍA
INFANTIL.
Ante esto, la UDFJC y la SDIS, Subdirección de Infancia, hacen un convenio en el que se
planea ejecutar proyectos dirigidos hacia la niñez, mediante sus Jardines Infantiles, para nuestro
caso particular el de SUBA, en el que se pretende trabajar durante 384 horas en un lapso no
superior a 6 meses, contados a partir de la segunda semana de Abril del año 2019, mediante una
serie de talleres que les permitirán a los niños y las niñas tener un acercamiento a la
sensibilización y al respeto del cuerpo propio y de los otros a través de la literatura y el arte,
articulándolos con el Proyecto Educativo Institucional (PEI) del Jardín considerando también el
eje que se esté teniendo en cuenta por parte de las docentes en el momento en el que se va a
desarrollar cada uno de los talleres.
Así, se propone realizar una secuencia didáctica, como estrategia metodológica que permite
construir y apropiar el concepto de cuerpo por parte de los niños y las niñas de dos a tres años,
pertenecientes al nivel de párvulos en la institución. Esto a través de experiencias sensibles,
literarias y artísticas, que conlleven la exploración y el reconocimiento del cuerpo propio, de los
otros y del medio en que se interactúa e intercambian saberes, con el fin de promover dinámicas
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de respeto entre pares, además de generar una conciencia sobre cada una de las partes que los
conforman y la función que estas cumplen.
1.1.1. Instituciones vinculadas.
La Universidad Distrital Francisco José de Caldas, en conjunto con la Unidad de Extensión de
la misma Institución permite a los estudiantes de diferentes carreras realizar prácticas laborales
para optar por sus títulos profesionales gracias a diferentes convenios realizados con Entidades
externas, en este caso la Secretaría Distrital de Integración Social fue la que permitió al grupo de
estudiantes de Licenciatura en Pedagogía Infantil, tener un acercamiento a la vida laboral
mediante la inmersión directa y permanente en el Jardín SDIS Suba.
1.1.1.1. Universidad Distrital Francisco José de Caldas.
La Universidad Distrital Francisco José de Caldas es una institución de Educación Superior
de carácter público cuyo propósito principal es brindar el acceso a estudios académicos de
pregrado y postgrados, a la comunidad en general, permitiendo principalmente que las personas
de escasos recursos puedan hacer parte de ella, garantizando su derecho a la educación.
Esta universidad cuenta con siete sedes principales: Facultad de ingeniería (sede principal y
administrativa), Facultad de Ciencias y Educación (La Macarena A y B con extensión en la
recientemente creada Bosa Porvenir); Facultad de medio ambiente y recursos naturales (Vivero);
Facultad Tecnológica (Candelaria la nueva); Facultad de Artes ASAB (centro); Sede de
Postgrados (calle 64), y La Aduanilla de Paiba, donde se encuentra la biblioteca general de la
universidad (ubicada en el Antiguo Matadero Distrital).
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La universidad tiene como misión “la formación de profesionales especializados y de
ciudadanos activos; la producción y reproducción del conocimiento científico, además de la
innovación tecnológica y la creación artística” . Fomentando un pensamiento crítico, que 1
contribuya a la construcción de una sociedad más justa y en paz, articulando un diálogo de
saberes, donde no existe una única verdad, y en la que todos forman parte de la construcción
activa de conocimientos.
Esta Institución de Educación superior fue creada en el año 1948, como Colegio Municipal
Jorge Eliecer Gaitán, en honor al líder social asesinado durante el Bogotazo, en la calle 6A #
43-25. Siendo constituida como Universidad Municipal Francisco José de caldas en el año 1950,
lo que indica que lleva 69 años al servicio principalmente de la población de bajos recursos de la
ciudad, contando con un presupuesto público tanto del Distrito como del Estado.
1 Tomado de la página principal de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas. https://www.udistrital.edu.co/mision-vision
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Foto tomada el 30 de Julio de 2019 de https://www.udistrital.edu.co/historia
1.1.1.2. Secretaría Distrital de Integración Social
La Secretaría Distrital de Integración social, es creada mediante Acuerdo 78 de diciembre 10
de 1960 denominada inicialmente como “Departamento Administrativo de Protección Social
(DAPAS)”, en el año 1968 se cambió su nombre “Departamento Administrativo de Bienestar
Social”. En Noviembre de 2006 y a través del Acuerdo 257 del 30 de noviembre de 2006 el
Departamento Administrativo de Bienestar Social del Distrito se convirtió en la Secretaría
Distrital de Integración Social “como un organismo del Sector Central de la Administración, que
se concibe líder y rector en la formulación, adopción, desarrollo y evaluación de las Políticas
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Públicas para la Integración Social de la ciudad. Se proyecta como una entidad que garantiza la
realización de los valores del Estado Social de Derecho a través del establecimiento de políticas
públicas que disminuyan la pobreza, la inequidad social y la exclusión de los ciudadanos de
Bogotá” . 2
La SDIS es la Entidad del Distrito que se encarga de liderar y formular las políticas sociales
del Distrito Capital a personas, familias y comunidades, en especial a la población que se
encuentra en situación de pobreza y vulnerabilidad; también se encarga de ejecutar acciones que
permitan promocionar, prevenir, proteger, rehabilitar y restablecer sus derechos mediante la
corresponsabilidad y trabajo en equipo entre la familia, la sociedad y el Estado, todo esto
teniendo en cuenta las diferencias étnicas, culturales, de discapacidad, de orientación sexual e
identidad de género, así como las territoriales, mediante programas dirigidos a todas las etapas de
la vida del ser humano.
La Secretaría de Integración Social está presente en las 20 localidades de Bogotá, cuenta con
espacios de atención y equipos especializados que atienden con calidad y calidez a la ciudadanía,
en muchos casos las 24 horas.
1.1.1.3. Convenio Universidad Distrital Francisco José de Caldas y la Secretaría Distrital de
Integración Social
El convenio de pasantía número 13732, se establece entre la Universidad Distrital Francisco
José de Caldas mediante la Unidad de Extensión y la Secretaria Distrital de Integración Social,
Subdirección de Infancia, con el fin de realizar proyectos dirigidos hacia la educación y atención
2 Tomado de MANUAL DE INDUCCIÓN Y REINDUCCIÓN SDIS, 2009
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a la primera infancia, en este caso desde las estudiantes de la Licenciatura en Pedagogía Infantil,
quienes en un tiempo no superior a seis meses y cumpliendo con mínimo 384 horas de servicio
con la población infantil, específicamente del Jardín Infantil SDIS Suba, que cuenta con 124
niños y niñas inscritos.
Durante este tiempo las pasantes deberán realizar su propuesta pedagógica, la cual les
permitirá optar por el título profesional de Licenciadas en Pedagogía Infantil.
De este modo, se da inicio a la pasantía el día lunes 8 de abril de 2019, culminando el proceso
el día viernes 26 de julio del mismo año mediante socialización y entrega de informe final.
1.1.2. Contextualización Barrial, Institucional y Local 3
El pueblo de Suba fue fundado en el año 1550 por dos conquistadores, se anexa al Distrito
Especial de Bogotá en 1954 y desde 1991 se consolida como la localidad 11 de Bogotá Distrito
Capital hasta la actualidad. Suba tiene 1.060 barrios y tan solo 259 de estos están legalizados,
además, cuenta con un Cabildo indígena Muisca, como la única comunidad étnica que ocupa su
territorio en una ciudad urbanizada en Colombia.
La localidad consta de una extensión de 10.056 hectáreas, de las cuales el 58% es territorio
urbano y el 37% territorio rural, ocupando el 6% del territorio de la capital; en cuanto al territorio
rural de Suba, encontramos que cuenta con cuatro humedales reconocidos, como lo son,
Humedal Juan Amarillo, la Conejera, Guaymaral y Córdoba, a su vez hay humedales que no son
3 Esta fue una elaboración conjunta realizada por: Diana Marcela Avendaño, Alexia Mayerly Cardozo Ramirez, Angela Catalina González Galindo, Angie Natalia Morales España, Ximena Alexandra Numpaque Valencia ,Ximena Alexandra Pérez Marroquín y Karol Lilia Paola Plazas Guarín; grupo de pasantes de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas 2019-1
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reconocidos, ya que su extensión es más pequeña, tal es el caso del Humedal Bosque de las
Mercedes y Humedal de los Chorrillos, además encontramos reservas como Thomas Van der
Hammen, el parque Mirador de los Nevados, entre otros.
Foto tomada desde google maps el dia 19 de julio de 2019.
Suba cuenta con 1,348.372 habitantes y 440.955 hogares urbanos, la localidad tiene una
población de primera infancia aproximadamente de 78.103 niños y niñas; infancia de 6 a 12 años
168.020; adolescencia de 13 a 17 años 97.658; jóvenes entre 18 y 24 años, 107.379; adultos de
25 a 59 años 695.405 y adultos mayores de 60 años 136.413.
La localidad de Suba brinda gran variedad de servicios para la comunidad, entre ellos, 20
comedores comunitarios divididos estratégicamente en toda la localidad, en zonas de mayor
vulnerabilidad, 8 casas vecinales, 2 jardines de atención integral para niños en condición de
discapacidad, una casa de la mujer, 7 jardines cofinanciados con Secretaria de Integración social,
un jardín que maneja la atención integral a menores en condición de explotación laboral, un
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jardín dedicado a la educación tradicional en Bilbao y ocho jardines que funcionan directamente
con la administración y recursos de la Secretaría Distrital de Integración social.
1.1.3. Jardín infantil SDIS Suba.
El Jardín SDIS SUBA se encuentra ubicado en la UPZ 27 al respaldo de la Subdirección
local de la Secretaría de Integración Social, diagonal a la alcaldía local de Suba, cerca de la
plazoleta principal, la cual tiene una historia indígena muisca y hace parte de su patrimonio
cultural.
Foto tomada desde google maps el dia 19 de julio del 2019
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Cabe resaltar que, el predio en donde funciona actualmente el jardín hace parte del patrimonio
Arquitectónico del Distrito Capital; indagando con los habitantes de la zona y negocios aledaños,
comentan que antes de hacer parte de la red de jardines de la Secretaría Distrital de Integración
Social, este como jardín social ya existía. La comunidad está de acuerdo en que este fue el
primer jardín de la localidad con aproximadamente cincuenta años de antigüedad; las historias
coinciden en que antes de ser un jardín, el predio funcionaba como cárcel municipal, la cual
aparentemente era administrada por los Agustinos Recoletos. En las instalaciones de la casa
cural, la alcaldía local de Suba, la subdirección de la secretaría de integración social, manifiestan
que no tienen ningún documento que verifique esta información más que los archivos que
reposan en su biblioteca central, el archivo nacional y la sede central de la secretaría.
La planta física del jardín, consta de dos zonas y dos áreas verdes distribuidas de la siguiente
manera: En la zona dos desde la puerta principal hacia la izquierda se encuentran ubicados tres
salones que corresponden a los niveles de párvulos y prejardín; hay dos salones conectados entre
sí, que corresponden a los grupos de caminadores uno y dos; la planta de baños infantiles, los
baños para el personal del jardín, la zona de alimentación para los niveles que están ubicados en
esta planta; la cocina, la oficina principal y la bodega.
Contiguo a esta zona, encontramos la fuente principal, las escaleras y la rampa de acceso la
zona uno, en este lugar se encuentran ubicados: el comedor, la zona de lavandería, la bodega; los
niveles de sala materna 1 y 2, un espacio vacío dispuesto temporalmente para uso
administrativo, sala de lactancia (Sala Amiga) y ludoteca. Estos espacios se encuentran
conectados entre sí, con amplia iluminación.
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Foto tomada desde google maps satelital el dia 19 de julio de 2019
La ambientación de los salones es sencilla, las docentes han dispuesto material, como móviles
con telas (nichos), cuerdas para colgar los libros infantiles, botellas sensibles, etc. Así mismo
cada nivel está provisto con juguetes donados, material de papelería y utilería frente a las
actividades que se planean en el cronograma mensual.
Los niños y las niñas cuentan además con suficiente material didáctico y sensible que varía
entre fichas de lego de pasta y madera, cubos y rompecabezas, fichas de espuma, instrumentos
musicales, arena, harina y escarcha, y una biblioteca que tiene todo tipo de literatura infantil de
autores reconocidos a nivel nacional e internacional.
Dicha zona del jardín se conecta directamente con el segundo espacio verde, provisto con un
parque infantil de madera, triciclos, casas en miniatura; contigua a esta zona se encuentra el
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espacio dispuesto para la huerta, la cual fue transformada por parte de los niños y niñas que
hacen parte de la comunidad educativa del jardín y el grupo de pasantes de la Universidad
Distrital Francisco José de Caldas. Igualmente esta zona verde cuenta con una batería de baños
infantiles que evita largos desplazamientos en caso de que los niños así lo requieran.
El Jardín SDIS Suba tiene una vinculación especial con el Instituto Distrital de las Artes
(IDARTES), realizando un proyecto que se inicia con la administración de Gustavo Petro y su
programa de desarrollo Distrital “Bogotá Humana”. Dicho convenio se viene ejecutando
aproximadamente desde el año 2014 en diferentes localidades de la ciudad.
IDARTES desarrolla el documento No. 993, por medio del cual se sustenta este proyecto,
presentando un enfoque en Primera Infancia, el cual lleva por nombre NIDOS, proveniente de
los centros CREA (antiguamente llamados CLAN). Así, el Jardín lleva aproximadamente desde
el año 2016 siendo parte de este convenio interinstitucional, abordando diversos laboratorios
artísticos que son trabajados por cuatro artistas, en donde dos de ellos intervienen. A su vez
trabajan la modalidad de circulación que trata de llevar a las niñas y los niños a nuevas
experiencias sensibles.
El jardín cuenta con 124 niños y niñas inscritos, cuyas edades oscilan entre los 4 meses hasta
los 4 años con 11 meses; esto quiere decir que se brinda atención a 107 familias de la localidad y
a 12 familias migrantes, en su mayoría de estratos 1, 2 y 3, provenientes principalmente de los
barrios aledaños, como son: Tuna Alta, Tuna Baja, el Rincón, Casa Blanca, Suba Pueblo, Cerros
de Suba, Pinar de Suba, Bosques de Suba, la Campiña, Suba el Poa, entre otros. Además del
proceso de ingreso a partir del estudio socioeconómico, el jardín ofrece la posibilidad de
vinculación especial para los hijos de los funcionarios de las entidades públicas de la zona.
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Las pasantes de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas, realizaron su trabajo de
pasantía con los niveles Párvulos 1, 2, 3 y 4.
2. Experiencia pedagógica
2.1 Contexto niveles párvulos 1, 2, 3 y 4
El nivel de párvulos 1 y 2 cuenta con el acompañamiento de la pasante Alexia Mayerly
Cardozo Ramirez. El grupo está conformado actualmente por veintisiete niños y niñas, en este
grupo hay 3 niños que han egresado por diversas circunstancias, uno era nuevo en el jardín,
asistió aproximadamente por dos semanas más y nunca volvió, ya que tuvo dificultades con el
proceso de adaptación a este espacio, decidiendo sus padres que lo mejor era retirarlo; luego se
fue otro de los niños ya que por cuestiones de salud, el médico recomendó a su madre retirarlo
del jardín; y finalmente la primera semana de junio se fue otro niño de traslado para el jardín de
Aures, ya que este quedaba más cercano a su lugar de residencia.
Continuando con los cambios a mediados de junio, llega un nuevo integrante al grupo, y
aunque al principio, le cuesta un poco la despedida de su madre, rápidamente se adapta a los
juegos y actividades que desarrollan sus compañeros compartiendo con ellos.
Podemos decir que los 17 niños y 9 niñas, que han asistido con regularidad al jardín se
encuentran en un rango de edad entre los 27 y 36 meses de edad, siendo el mayor de tres años, y
la menor tiene 27 meses.
Hay dos niños y una niña de origen venezolano, vinieron muy pequeños a Colombia en
compañía de sus padres, en búsqueda de un mejor futuro y oportunidades. Los padres de uno de
ellos están esperando un hermanito, trabajan informalmente, y el papá emigró a Perú.
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Por otra parte, encontramos dos niños, pertenecientes a comunidades indígenas, quienes
conservan gran parte de su cultura y tradición oral, y aunque uno de ellos no habla mucho,
cuando lo hace se expresa de forma clara, el otro por su parte es uno de los niños que tiene
bastante desarrollado el lenguaje, pregunta y habla con sus pares y con los adultos, su mamá
trabaja en venta de tejidos.
Encontramos un niño, que pertenece a la población afro, tiene 32 meses, y también le gusta
hablar mucho, disfruta cantar, imitando ritmos y movimientos. Los demás niños y niñas
nacieron en la ciudad de Bogotá, específicamente en la localidad de Suba, son mestizos, la
mayoría procede de familias nucleares, algunos monoparentales y otros pocos extensas,
encontrando un caso excepcional de un menor, quien procede de una familia disfuncional, ya que
su custodia está en manos de su abuelita.
Este es un curso bastante grande, el cual asiste de forma regular al jardín, presentándose bajo
porcentaje de fallas e inasistencias, gracias a ese tiempo en el jardín se observa que los niños y
las niñas ya están acoplados al espacio, identifican los lugares, apropian las rutinas, y poco a
poco, cada vez más controlan esfínteres, avisando el baño, ocurriendo alguna que otra
emergencia, especialmente cuando tienen soltura, y no alcanzan a llegar, o como en el caso de
una niña y un niño que avisan pero cuando ya han hecho, lo cual hace parte natural del proceso.
Algunos de los niños y las niñas no hablan mucho, aun se expresan por medio de gestos y
señales sin articular un lenguaje oral, no van más allá de “mami”, “hola”, “chao”, sin embargo,
muchos manifiestan su lenguaje, por medio de la imitación de lo que dicen los adultos que le
rodean, en este caso, las docentes, al observar imágenes de animales, algunos representan el
ruido que hacen, también disfrutan mucho las canciones y rondas, con las que aprenden nuevas
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palabras, intentando cantar, y entre pares se expresan por medio de lenguaje corporal, y algunos
ruidos que no articulan palabras, pero que entre ellos se entienden como invitaciones a jugar y a
hacer. La mayoría conoce el nombre de sus compañeros y se nombran entre ellos, o cuando se
hace la canción del llamado a lista lo señalan, o dicen “no vino”.
Algunos niños y niñas (6) de este grupo, son los que más desarrollo tienen en sus procesos de
lenguaje y comunicación, articulando palabras y tratando de formar frases para contar algo a sus
profes o a sus compañeros, tienen además buena pronunciación, de forma tal, que se escucha y
además entiende claramente su mensaje.
Como características socioafectivas encontramos que son niños y niñas que se encuentran en
un periodo de desarrollo, donde su comportamiento por lo general busca ser egocéntrico, por
tanto aunque algunas veces comparten, la mayoría de veces, quieren tener un objeto solo para
ellos sin compartirlo, para mediar esas situaciones que suelen darse de conflicto por un objeto se
acude entonces a un diálogo con los niños que participan en esta acción, donde juntos, empiezan
a compartir sus cosas, y de no ser así las docentes retiran el objeto de discordia, por lo cual en la
mayoría de casos aceptan soltar y compartir.
Se puede decir también, que son niños y niñas muy alegres, que se emocionan y sorprenden
con algunas actividades, siendo muy expresivos con sus gestos, haciendo caras de asombro y de
agrado o desagrado según lo sientan. Si por alguna razón se enojan momentáneamente con sus
pares, poco tiempo después ya están jugando y compartiendo de nuevo, son amigables, cada día
arman diferentes grupos, donde todos interactúan entre sí con sus cuerpos, ritmos y movimientos.
En tanto a la relación con sus familias, se observa en la mayoría que son muy cercanos a la figura
de su mamá, persona que más nombran, y por lo que a veces lloran ante su ausencia, se observa
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por tanto que la relación de afecto y cariño con sus seres queridos en la mayoría de casos es
buena.
Se evidencia también que algunos niños y niñas inician el proceso de pensamiento lógico, al
resolver problemas como pasar un obstáculo, en diferentes posiciones, eligiendo la más cómoda
para ellos, de acuerdo a su talla y peso, además realizan diversas figuras desarrollando su
creatividad e ingenio con los diferentes materiales que hay, como cubos, arma todos, tubos,
fichas grandes, etc., encajando las piezas, clasificándolas algunas veces por colores y tamaños,
aunque no identifican su nombre, visualmente se observa que hay una distinción entre las fichas.
También se pueden observar sus momentos de atención y concentración al escuchar cuentos,
leer imágenes, y realizar actividades que involucren algún movimiento coordinado, la mayoría
desarrolla de forma satisfactoria su memoria, recordando a veces contenidos de cuentos,
canciones, bailes, etc. Así mismo, entre pares tratan de unirse para hacer cosas grandes o de
mayor complejidad.
La mayoría de niños y niñas, desarrollan movimientos de forma coordinada, aprenden
rápidamente si hay que subir, bajar, abrir, cerrar, bailan y juegan de manera armónica con su
cuerpo, dan botes con ayuda de las maestras y disponen su cuerpo para hacerlo, ensartan tubos
dentro de un cordón, son capaces de seguir secuencias de movimientos, si se canta con
regularidad una canción o se retoma un cuento frecuentemente, ellos saben cómo moverse de
acuerdo a lo que escuchan de una forma en que recuerdan cuál es el paso o sonido que sigue. Se
encuentran en etapa de desarrollo de la motricidad fina y del movimiento de pinza, el cual se
refuerza con actividades de dibujo con crayones y pintura.
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Además, poco a poco, identifican las partes que conforman su cuerpo, las señalan cuando las
escuchan nombrar, y en algunos casos las nombran ellos mismos, esto se logró principalmente, a
partir de canciones.
Corporalmente, les agrada tener contacto con diversas texturas, como arcilla, arena, harina,
plastimasa (masa para arepas) de colores, esta fue una de las actividades que más gozaron.
Finalmente, en cuanto a su proceso de alimentación se podría decir, que al inicio, algunos
presentaban mucha dificultad para consumir los alimentos sólidos, en cuanto a las verduras,
viene desde casa una especie de “fobia” hacia lo verde, a pesar de que muchas veces se insiste en
que las prueben igual, las vomitan o las escupen en algunos casos. Sin embargo, cabe aclarar que
no pasa lo mismo con los alimentos líquidos como caldos y jugos, en este caso, la mayoría come
bien esos alimentos y el huevo es uno de sus alimentos favoritos. Además en el tiempo de
realizada la pasantía, se observa cómo progresivamente ha disminuido el desperdicio de comida
y alimentos.
Los niveles de Párvulos 3 y 4, cuentan con el acompañamiento de la pasante Angela Catalina
González Galindo, y en total están inscritos 22 niños y niñas, de los cuales un niño va de manera
esporádica ya que se encuentra con una incapacidad médica que le ha impedido llevar un proceso
constante dentro del jardín, y una niña ha estado ausente en el proceso por lo que no ha sido
posible interacción alguna con ella. Otra de las niñas va muy poco ya que su familia no es
constante con el proceso y otra niña a pesar de estar en el listado ya está egresada del Plantel.
Estos niños y niñas se encuentran entre los 2 y 3 años de edad, y están en una etapa en la que
aprenden todos de todos y con todos, algunos ya están en proceso de desarrollo del habla y los
demás han aportado para que esto sea posible, la mayoría controlan esfínteres y han apropiado
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las rutinas del jardín tales como la de alimentación, la siesta, la higiene personal (lavado de
manos, cara, dientes y control de esfínteres), de los veintidós niños y niñas que hay en los dos
niveles, solo dos no controlan esfínteres, lo que hace que la dinámica del grupo sea diferente para
ellos ya que es necesario que la docente se desplace hacia el otro baño a cambiarles el pañal
cuando se encuentran todos en el baño de los niños grandes; también es importante que ellos
tengan el hábito de disponer de los elementos a los que tienen acceso dentro y fuera de su
entorno inmediato (salón habitual) y así mismo los pongan en el sitio al que pertenece, esto con
el apoyo que los padres puedan proporcionar con el refuerzo de dichos hábitos.
La mayoría de los niños y niñas son de origen colombiano, solo hay dos que provienen de
Venezuela e infortunadamente el único obstáculo que se ha visto con ellos es que no reciben la
comida típica que se les brinda en el jardín, ya que los hábitos alimenticios de ellos son distintos
y ha sido bastante complicado incluir ciertos alimentos en su dieta diaria, por lo demás se han
adaptado de manera positiva tanto a las costumbres de sus compañeros como a las rutinas
propias del jardín. Tres niños hacen parte de la comunidad Muisca de la zona y pertenecen al
cabildo indígena.
Durante el tiempo que se ha estado realizando el trabajo de pasantía se ha evidenciado que
son en general un grupo en el que si bien se está inculcando el valor del compañerismo y la
solidaridad, cada uno como sujeto se encuentra en una etapa de egocentrismo, muchas veces se
han visto situaciones en las que han peleado por objetos que aunque pueden usar de manera
conjunta, quieren acaparar todo sin a veces medir sus actos y tienden a reaccionar de una forma
algo intimidatoria (golpes o mordiscos) a lo cual tanto las docentes como la pasante, se inclinan
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por explicar que hay que compartir con los compañeros, que hay maneras de pedir las cosas y
que a los amigos no se les pega, sobre todo porque todos los días están en el mismo espacio.
La mayoría de los niños y niñas reciben de manera positiva las actividades que se proponen
por parte de las docentes y la pasante, ya que participan muy emotivamente en especial en
actividades artísticas, lo que tiene que ver con pintura, expresión corporal y literatura son los
lenguajes expresivos en los que los niños y las niñas son más perceptivos, en particular hay dos
niños que no les gusta estar untados o sucios, por lo que prefieren no participar, ellos mismos son
algo “reacios” con el hecho de tener que quitarse los zapatos o cambiarse de ropa para realizar
trabajo con texturas y materiales con los que tengan que interactuar con las manos, como
alternativa se propone que utilicen pinceles o se les invita a que sean los “asistentes” de la
actividad para que ellos de manera indirecta participen. Hay un niño que no participa en ninguna
actividad, pero es porque no va continuamente al jardín y cuando va, casi siempre está molesto y
no habla ni participa de manera voluntaria, por lo que se le hace la invitación a ser partícipe de
otra manera dentro del espacio.
A nivel socio afectivo, el grupo es muy cariñoso hacia las docentes, en algunas ocasiones se
les dificulta el seguimiento de normas y pautas de comportamiento, ya que en su mayoría los
niños y las niñas del grupo son hijos únicos en sus hogares y son pocos los hábitos que han
logrado adquirir en compañía de los adultos; esto genera un choque de pautas y prácticas de
crianza entre las instituciones familiar y educativa, ya que, los niños y las niñas que no tienen
límites desde su hogar, consideran que estos malos hábitos también pueden hacer parte de las
dinámicas del jardín. Igualmente, este tipo de situaciones son conversadas con las familias para
que como equipo se pueda trabajar de la mejor manera.
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2.2. Propuesta de Intervención Pedagógica
2.2.1. Fundamentación
La secuencia didáctica diseñada responde a la etapa de desarrollo preoperacional, en la cual se
encuentra la población infantil. Dicha etapa es fundamental por la aparición y desarrollo del
lenguaje, ya que, los niños y las niñas cada día en la interacción con sus pares y con los adultos
van aprendiendo nuevas palabras, dotándoles un significado y sentido, usándolas y
relacionándolas con palabras anteriores formando sus primeras frases. Así, durante este periodo
“el niño puede ahora re-presentar mentalmente experiencias anteriores y hace un intento por
representárselas a los demás” Labinowicz (1.982).
En esta edad empieza a ser importante el juego simbólico, “al imitar cualquier conducta el
niño utiliza algo para representar algo más” es así, como una piedra puede convertirse en un
carrito, o en una pelota para el niño, o la cartuchera en su almohada, así el objeto se convierte en
el símbolo de algo que en el momento no está presente. “En el juego simbólico el niño modifica
la realidad en función de su representación mental”. Empiezan a ser comunes también en esta
etapa los juegos de roles, donde algunos niños dramatizan por ejemplo la función del papá
zapatero, o de la mamá doctora.
“El juego así se convierte en una experiencia creativa: El niño cambia la realidad según
sus deseos, agregando sus experiencias sociales, reviviendo sus gozos, resolviendo sus
conflictos” Labinowicz (1.982).
Como se mencionó anteriormente esta propuesta tiene como eje central el cuerpo, aspecto que
se desarrolló teniendo en cuenta los cuatro pilares de la educación inicial como se presenta a
continuación:
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1. Juego: Al abordar la temática del cuerpo se desarrolló principalmente de acuerdo al
movimiento. El juego corporal “remite a la presencia del cuerpo y sus manifestaciones.
Implica esencialmente tomar y poner el cuerpo como objeto y motor del jugar”(MEN, 2014).
“El momento del juego, es un periodo privilegiado para descubrir, crear e imaginar”, tanto de
forma individual como de forma colectiva, pueden darse juegos con algunas reglas, que pueden
modificarse a partir de acuerdos entre los jugadores.
“El niño y la niña juegan a lo que ven, y juegan a lo que viven resignificándolo”, por esta
razón es fundamental el juego de roles, para de esta manera evidenciar cual es la visión que tiene
el niño respecto a la realidad de su ciudad, de su país y de su contexto en general.
Además, el juego es en esta edad principalmente una actividad sería para los niños y las niñas,
pues es muy importante en su etapa de desarrollo dedicarle un buen tiempo, se vuelve casi como
una responsabilidad, una necesidad vital, que permite además aprender a convivir con los demás,
fomentando habilidades sociales, y permitiendo reconocer las habilidades que cada uno posee.
2. Arte: Respecto al arte como medio para abordar la temática del cuerpo podríamos decir que
cobraron especial importancia actividades relacionadas con experiencias artísticas y sensibles
en torno a los sentidos, además de la creación plástica de cuerpos de otros y del propio con
diversos materiales, el dibujo y el garabateo.
En cuanto a la expresión musical, fue abordada desde las rondas y cantijuegos, que además
involucraron la creación de coreografías, reafirmando la plasticidad del cuerpo.
“A través del arte las ideas, emociones, inquietudes y las perspectivas de ver la vida se
manifiestan por medio de trazos, ritmos, gestos y movimientos que son dotados de sentido”,
(MEN, 2014) es importante tener en cuenta esto, ya que nos ayuda a evidenciar parte de la
23
personalidad e identidad de los niños y las niñas con los que estamos trabajando, además se
pueden identificar algunos de sus talentos y cultivo de sus gustos.
“Contemplar el arte como una actividad inherente al desarrollo infantil contribuye a
evidenciar que posee un carácter potenciador de creatividad, sensibilidad, expresividad y sentido
estético” (MEN, 2014). Puesto que, es el arte un medio de expresión de nuestro interior, los
colores que seleccionamos, la forma de nuestros trazos, los movimientos que realizamos, y el
ritmo con el que hacemos las cosas, el cual es diferente para cada uno dependiendo de las
actividades desarrolladas.
Fotografía “moldeo mi familia”, tomada el 16 de mayo de 2019.
3. Literatura: En nuestro proyecto con relación a la temática del cuerpo ocupó un lugar
transversal a todos los ejercicios, cada día se destinó un tiempo a la lectura de poesías, rimas,
coplas, etc, dirigidas al público infantil, que ayudaron a desarrollar cada día la capacidad de
24
atención y escucha por parte de los niños y las niñas. Para ello hubo algunos talleres de
creación de personajes, y otras formas de lectura, se utilizó el teatrino con presentaciones de
títeres con la adaptación o creación de algunas obras, de forma tal que los niños y niñas
pudieran encontrar en la lectura una actividad divertida y placentera, que no les cueste, y que
les permita imaginar, fantasear, soñar, crear, etc.
“No basta tener un buen acervo literario si este no es de fácil acceso, por ello una
condición imprescindible para disfrutar y familiarizarse con la lectura es que los libros
estén disponibles y al alcance de todas las manos. Además es muy importante que los
niños y las niñas cuenten con adultos que les lean cotidianamente para que así vayan
conociendo los libros y adquieran paulatinamente la autonomía para elegir sus favoritos:
aquellos que más les gustan o con los cuales se identifican porque les ayudan a expresar
sus gustos, sus sueños, sus temores y sus intereses, o a dar forma a sus preguntas” (MEN,
2014)
El ejercicio literario en este caso además permitió favorecer el reconocimiento del
cuerpo a través de diversos textos que abordan esta temática, además se abrió la
posibilidad de trabajar los sentidos. La mayoría de los libros leídos estaban basados en
dibujos e ilustraciones donde se desarrolló predominantemente la vista, permitiendo la
creación de historias a partir de la lectura de imágenes; otros, dependieron más de la
escucha, algunos estuvieron acompañados de sonidos y olores durante su narración.
En cuanto a la importancia que tiene la literatura infantil en primera infancia podemos
destacar que no solo se trata del desarrollo de la capacidad de imaginación y creatividad
25
del niño, se trata de un proyecto político y social que contribuye a la disminución de la
brecha de la desigualdad, ya que como señala Yolanda Reyes, (2005):
“la clave para cambiar el curso del desarrollo de los niños más vulnerables potenciando
habilidades para leer-se, leer el mundo y expresarse, se constituye en la justificación
esencial que amerita la inclusión de la lectura en el marco de una política pública para
la infancia colombiana”.
Así, para esta autora La literatura en la primera infancia consta de tres etapas: «Yo no
leo, alguien me lee»; «Yo empiezo a leer con otros»; «Yo leo solo». Donde primero se
configura un “triángulo amoroso” entre el adulto, el libro y el lector (niño), esta etapa se
da durante el primer año de vida, donde el niño y la niña no solo necesitan la interacción
con el libro, sino que entablan un vínculo afectivo con quien les lee, identificando su voz,
y estableciendo relaciones nuevas de significado. Luego encontramos la segunda etapa,
donde pasados los 18 meses empiezan a aparecer las primeras palabras, nace el lenguaje
oral en los niños y las niñas, y se crean nuevas formas de relación entre pares, que les
permiten, realizar lecturas compartidas acerca de imágenes, en esta etapa, se resalta
mucho el papel del libro albúm, ya que permite nombrar las cosas que aparecen, las
cuales el niño y la niña identifican, en este punto el adulto interviene más como mediador
de aprendizajes, ya que contribuye a la formación de nuevas palabras, donde los niños y
las niñas al unirlas e imitarlas, empiecen a producir frases en torno a lo que observan.
Finalmente, la tercera etapa, se marca con el ingreso a la escuela, donde el maestro debe
cumplir un rol de provocador, incitador de la lectura, no hacerla una carga pesada, sino
más bien un elemento de goce y disfrute por parte de la infancia, incentivando su
comprensión.
26
Fotografía: “Los libros a mi alcance” tomada el 04 de julio de 2019
4. La exploración del medio: En nuestro caso con el cuerpo se trato de hacer recorridos por
diversas partes del jardín de forma tal que los niños y las niñas puedan apropiarse y sentirse
seguros de su espacio.
“A través de su dominio sensorial y perceptivo las niñas y los niños exploran con su
cuerpo y, en la medida que adquieren mayor autonomía en sus movimientos, se desplazan
por diferentes espacios, ampliando sus posibilidades de exploración. Así en la interacción
con los objetos, comienzan el reconocimientos de sus propiedades: los tocan, los huelen,
los prueban, los oyen, los mueven, es decir, actúan sobre estos. Posteriormente los
comparan y encuentran semejanzas y diferencias, los clasifican, los ordenan, los cuentan,
etc. De este modo, después de una manipulación primaria, se llega al conocimiento
experiencial. ” (MEN, 2014).
Los niños y las niñas en primera infancia se encuentran en una búsqueda constante de
comprender, conocer e interpretar el mundo, conociéndose también a sí mismos,
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descubriendo que les gusta y que no, en cuanto olores, sabores, temperaturas, texturas,
etc. que contribuyen a su construcción de identidad como sujeto particular.
5. Cuerpo y corporalidad: Nuestro eje central a trabajar es el cuerpo, ya que es el medio
primario por el cual nos acercamos al mundo para reconocerlo, identificarlo, comprenderlo y
apropiarlo, dotándolo de sentido y significado. Cada quien desde su historia particular de
vida, el cuerpo no es solo materia, el cuerpo es vida, y se debe aprender a cuidarlo y
mantenerlo desde la primera infancia.
El cuerpo permite el movimiento, cada día se puede observar como crece, como adquiere
mayor independencia y capacidad de autonomía para desplazarse con total confianza y
seguridad. Encontrando las diferencias entre cuerpo vamos construyendo nuestra identidad y
reconociendo la particularidad que habita en cada ser humano.
En el encuentro niño - espacio prevalece una relación sensorial que involucra todo el
cuerpo, que incita al niño a la acción, a moverse, a desplazarse, a tocar, a mirar por los
orificios pequeños que pasa del otro lado, a escuchar los sonidos que le proporciona su
entorno, a oler, a jugar y despertar su curiosidad, asombro y sensibilidad ante el mundo, que
en relación con él se complementa y se transforman mutuamente, generando nuevos y
valiosos aprendizajes.
“El cuerpo dialoga con otros cuerpos para manifestar el placer que le provocan algunas
acciones” (MEN, 2014) y compartirlo con sus pares, ya que frente a las experiencias nuevas
prevalece una actitud de asombro que les lleva a repetir acciones y a incitar a otros a que las
realicen, para que sientan como él o ella.
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Cabe decir que en nuestro plan de trabajo estos pilares se encontraran desarrollados de forma
simultánea, a partir de diversos ejercicios y actividades, que favorecieron el reconocimiento,
apropiación y cuidado del cuerpo propio y el de los otros.
Por último vale la pena recordar por qué es importante la educación inicial para los niños y las
niñas:
“En la educación inicial las niñas y los niños aprenden a convivir con otros seres
humanos, a establecer vínculos afectivos con seres y adultos significativos, diferentes a
los de su familia; a construir normas, a relacionarse con el ambiente natural, social y
cultural; a conocerse, a ser más autónomos, a desarrollar confianza en sí mismos, a ser
cuidados y a cuidar a los demás; a sentirse acogidos, seguros, partícipes, escuchados,
reconocidos, a hacer y hacerse preguntas, a indagar y a formular explicaciones propias
sobre el mundo en el que viven, a descubrir diferentes formas de expresión, a descifrar las
lógicas en las que se mueve la vida, a solucionar problemas cotidianos, a sorprenderse
con las posibilidades de movimiento que ofrece su cuerpo, a apropiarse y hacer suyos
hábitos de vida saludable, a enriquecer su lenguaje y construir su identidad.” (MEN,
2014)
2.2.2. Objetivos
● Fortalecer el reconocimiento del propio cuerpo y el de los otros estableciendo vínculos
entre experiencias sensibles y artísticas y la subjetividad propia y compartida teniendo
como mediador la literatura infantil.
● Fomentar el trabajo en equipo por medio de actividades grupales que permitan a los niños
el reconocimiento del otro, mediante experiencias sensibles.
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● Identificar la importancia de la literatura infantil como mediador del proceso de
desarrollo integral de los niños y las niñas y de sus capacidades de creación, imaginación
y exploración.
2.2.3. Diseño Metodológico
El informe de pasantía presentado se basa en un estudio cualitativo, ya que su principal
función es identificar, analizar y comprender las características sociales de la población infantil,
teniendo en cuenta necesidades, intereses y particularidades propias a nivel físico, emocional,
cognitivo, psíquico y social de los niños y las niñas que conforman los niveles de Párvulos 1 y 2;
y 3 y 4 en el Jardín SDIS Suba, propendiendo por un desarrollo integral de su ser.
De esta manera se trató de estimular el reconocimiento del cuerpo propio y del otro a partir de
la literatura infantil, incluyendo también algunas rondas, canciones, ejercicios corporales y apoyo
audiovisual afines a la edad de los niños y las niñas, todo ello brindándonos la posibilidad de un
acercamiento más profundo hacia la población.
Así mismo, el método cualitativo es aquel que nos permite “reconocer que el conocimiento
de la realidad humana supone no sólo la descripción operativa de ella, sino ante todo la
comprensión del sentido de la misma por parte de quienes la producen y la viven” (2002,
Sandoval, p.38) ,
Dentro de la postura cualitativa, nos situamos en un enfoque etnográfico, ya que durante esta
pasantía tuvimos la oportunidad de sumergirnos en las dinámicas propias del jardín apropiando
sus rutinas y hábitos, estableciendo horarios. Todo esto acompañado de una visión de
extrañamiento ante el nuevo espacio que se empieza a ocupar y las personas con las que se
30
interactúa a diario, así se produce lo que explica Galindo, (1998): “La etnografía tiene una
vocación del otro, lo busca, lo sigue, lo contempla. Su asombro se resuelve muchas veces en la
racionalidad de los propios referentes, pero también hace estallar la certidumbre y la alerta de
la imaginación”.
Esto implica un encuentro, que se da entre el observador y lo observado, en un intento por
identificar, analizar y comprender las situaciones y realidades que atraviesan la vida ordinaria de
una comunidad desconocida, pero con el tiempo y observación se convierte en parte de la vida
del observador, quien tiene que mantener límites en tanto a los prejuicios y creencias previas,
manteniendo una mirada abierta al asombro, debe tener la capacidad de dejarse sorprender y no
dar todo por sentado. Es por esta razón que la etnografía es considerada como “el oficio de la
mirada y el sentido”.
Para nuestro caso particular, vivenciamos y permanecimos vinculadas a la comunidad infantil
del Jardín SDIS Suba, observando sus prácticas y pautas de crianza, sus formas de conocer y
comportarse, analizando sus procesos de socialización, y, especialmente, la relación que
establecen con sus cuerpos y con los de sus pares con quienes conviven a diario, se trata de mirar
y observar ese lenguaje implícito, detrás de gestos, miradas y acciones ejercidas sobre el cuerpo
propio y el de los otros.
Continuando, empleamos como técnica la observación participante, la cual es definida por
Guber (2011), como “observar sistemática y controladamente todo lo que acontece entorno del
investigador y participar en una o varias actividades de la población”, fue así como más que un
acercamiento y acompañamiento, llegamos a entender tanto el rol del docente en su vida laboral
y profesional, sus logros, desafíos y desaciertos en la labor de educar y formar a los niños y las
31
niñas desde la primera infancia. Evidenciando también las actitudes que llegan a tener los niños
y las niñas conforme a variaciones de estados de ánimo, y problemas familiares, sus desarrollos
en el transcurso del tiempo, como el control de esfínteres, la aparición del lenguaje y el uso que
le dan, interviniendo de alguna manera para que su vocabulario aumente, y pueda poco a poco
llegar a componer frases cortas. De este modo se concluye que,
“La observación participante permite recordar en todo momento que se participa para observa y
que se observa para participar… La observación que se propone obtener información significativa
requiere algún grado, siquiera mínimo de participación; esto es, requiere que el investigador
desempeñe algún rol y por lo tanto incida en la conducta de los informantes, que a su vez influyen
en la suya” Guber, (2011).
Esta observación, tiene como principal herramienta algunas notas de diario y fotografías, que
ayudan a documentar y evidenciar la experiencia, además de formar parte integral del análisis.
2.2.4. Desarrollo de la Propuesta
La propuesta metodológica está diseñada en tres fases distribuidas de la siguiente manera:
Etapa Tema Actividades a desarrollar
1. Caracterización y
contextualización
del Jardín Infantil
SDIS y la
población que lo
conforma.
Reconocimiento
del espacio y de
los niños,
apropiación de
rutinas.
-Talleres rompehielo
-Lectura de cuentos
-Indagación de presaberes
-Adaptación a las rutinas del Jardín
-Observación
32
-Talleres de creación plástica para Primera
Infancia
2. Exploración y
reconocimiento del
cuerpo a través de
la literatura y la
música.
El
reconocimiento
del cuerpo
mediante
experiencias
sensibles,
artísticas y
literarias.
-Lectura de cuentos y textos
-Realización de talleres en los que
intervengan cada uno de los sentidos del
cuerpo humano (como vendar los ojos,
probar distintos sabores, tocar varias texturas,
escuchar diversos sonidos y tratar de
desplazarse hacia ellos, etc.)
-Títeres
-Rondas Infantiles
-Creación de “Rincón literario”
3. Conclusiones y
cierre de
experiencias con
los niños y las
niñas.
La narración de
cuentos como
vínculo que une
la experiencia, y
que genera en
los niños y las
niñas un
-Finalización de la intervención
-Socialización de la experiencia ante las
docentes y los niños y niñas del jardín
33
intercambio y
compartir.
Etapa 1: Reconocimiento del espacio y de los niños, apropiación de rutinas
El Reconocimiento del espacio se inició desde la primera visita a la Institución, en la fase de
reconocimiento de los niños y las niñas de los niveles Párvulos 1 y 2; y Párvulos 3 y 4, se
realizaron talleres rompehielo (rondas infantiles, juegos, etc.), en los que se observa la actitud;
lectura de cuentos (libro álbum), para tener en cuenta la capacidad de atención, indagación de
presaberes para saber qué tanto y quienes tienen manejo del lenguaje verbal; y algunos talleres
de creación plástica (trabajo con plastilina, dibujo, pintura, etc.) mediante la observación
participante para entrar en las rutinas del jardín e identificar, conocer y realizar un acercamiento
de una manera particular a cada uno de los integrantes de los niveles, entre los cuales la mayoría
son de procedencia colombiana y local, algunos son de procedencia Venezolana y otros son
pertenecientes a la comunidad Muisca.
Dentro de las rutinas del jardín se encontraban las siguientes actividades:
● Entrada de los niños y las niñas: En este espacio que dura aproximadamente una hora,
se reconoce la actitud de cada uno de los niños y niñas al momento de ingresar, se tiene
contacto directo con los padres y/o los cuidadores y la relación afectiva que se tiene entre
ellos, se diligencian las carpetas de novedades y se revisa a los niños y niñas en caso de
alguna lesión, los padres aprueban y firman las observaciones que se apuntan allí, las
docentes reproducen música alegre de fondo para que los niños y las niñas se activen para
la jornada.
34
● Llamado a lista: En este momento las docentes titulares realizan el llamado a lista no
solo para saber quién llegó a la Institución, sino también este registro es tenido en cuenta
para que el personal de la cocina y servicios generales tenga una cifra exacta de los niños
y niñas que asistieron tanto para la preparación de los alimentos como para la
organización del comedor y disposición de las sillas y las mesas en las que ellos toman su
alimento en el desayuno, almuerzo y refrigerio.
● Desayuno, almuerzo y refrigerio: En su mayoría de veces son servidos y tomados en el
comedor, en algunas ocasiones es necesario servirlo en el salón (en el que se disponen
mesas y sillas para los niños y las niñas) ya que a veces se utiliza el comedor para realizar
reuniones con los padres, en estos espacios es sumamente necesario por higiene y salud
que tanto las docentes y pasantes como las personas de servicios generales y el personal
de cocina utilicen gorro y tapabocas para evitar posibles virus que se puedan transmitir
tanto de adultos a niños como de niños a adultos.
● Rutina de higiene personal: Estas rutinas son realizadas exclusivamente en el baño,
dentro de esta rutina aprenden a controlar sus esfínteres (excepto los niños que todavía
usan pañal, a estos era necesario dirigirse al baño de los niños pequeños para el cambio
respectivo), se les enseña a lavarse las manos según los parámetros de la OMS
(Organización Mundial de la Salud) mediante los pasos estipulados por ellos, en su
mayoría de veces se les canta una canción para realizar los pasos correspondientes, esta
actividad se realiza antes y después de tomar los alimentos, gracias a las rutinas
generadas en el Jardín, muchos padres las adoptan en sus casas y es mucho más fácil para
35
ellos tener un control sobre las mismas rutinas y los niños y niñas vayan identificando la
importancia de la higiene personal en el lugar a donde vayan.
● Intervención Pedagógica: Este bloque de intervención dura aproximadamente una hora
y media, la cual se divide en dos espacios liderados por cada una de las docentes titulares,
en este caso en particular, uno de los espacios fue cedido a las pasantes para realizar sus
intervenciones pedagógicas, este espacio tiene como principal objetivo y de acuerdo al
proyecto del Jardín “Generar experiencias sensibles en los niños y las niñas mediante el
arte y la literatura”, estas intervenciones tienen un “inicio”, un “nudo” y un “desenlace”,
en los cuales se inicia con una preparación de los niños y las niñas en un mundo de
fantasía mediante un pequeño juego o una canción, posteriormente se realiza la actividad
que es la inmersión en el arte y/o la literatura y finalmente se hace realiza un breve cierre
por medio de una canción y preguntando qué les ha parecido la experiencia.
● Tiempo de juego libre: Esta franja de tiempo por lo general es desarrollada después de
tomar los alimentos del almuerzo, se realiza bien sea en alguno de los parques de juegos
o en el salón si está lloviendo, en este espacio los niños y las niñas tienen la oportunidad
de compartir con los compañeros y tener su espacio de juego libre para fomentar así la
imaginación.
● Siesta: En esta franja, se disponen en los salones de cada uno de los niveles algunas
colchonetas para que los niños y las niñas se acuesten y tengan un sueño reparador, en
cada colchoneta caben entre 4 y 5 niños y son ubicadas de acuerdo al número de niños
que lleguen en la jornada, la siesta es tomada luego de entrar del parque, algunas veces se
toma más temprano (en caso de lluvia) ya que no hay el lugar para que tengan su espacio
36
de esparcimiento, sin embargo, en estos casos, los niños se acuestan y la docente titular
les brinda cuentos para que pasen el tiempo mientras llega la hora de dormir, por lo
general se reproduce música suave para relajar el cuerpo de los niños y las niñas, este
espacio dura aproximadamente dos horas.
● Salida de los niños y niñas del jardín: Esta es la hora en que los niños y las niñas están
más ansiosos, ya que están activos gracias al tiempo de sueño y porque ya saben que
luego de dormir y tomar el refrigerio, los padres y/o cuidadores vuelven por ellos al
Jardín, en este espacio es cuando las docentes realizan un trabajo de cambios de ropa (en
caso de que se hayan ensuciado), se peina a todos los niños y niñas ya que se levantan
despeinados y hay que entregarlos en perfectas condiciones, mientras se van llevando a
los niños y niñas, las docentes reproducen música alegre para despedir a los niños y
niñas, se llena carpeta de novedades y los padres la firman y aprueban las condiciones en
las que se van.
Etapa 2: El reconocimiento del cuerpo mediante experiencias sensibles y literarias.
En esta fase se realizó la sensibilización corporal a través de los sentidos (vista, olfato, oído,
gusto y tacto), en estas actividades se incluían probar distintos sabores, tocar varias texturas, oler
aromas agradables y no agradables, escuchar diferentes sonidos y hacer diversas observaciones
en especial de los colores, se leyeron cuentos los cuales incitaban a la lectura de imágenes, se
realizaron obras de títeres y se cantaron rondas infantiles, los niños y las niñas se mostraban
bastante curiosos ante las experiencias, en especial en las que se usaba pintura y lo relativo a los
colores (colores, papel celofán, papel silueta, etc.) ya que se podían manipular de manera más
directa y no era necesario invitarlos a realizar las actividades sino que ellos mismos ya tenían la
37
disposición para interactuar con el material, esto se prestaba para darles indicaciones y que ellos
las siguieran o no las siguieran según su criterio.
Se realizaron diversas experiencias sensibles en las que se hizo énfasis en el cuerpo propio y
el cuerpo del otro, se hizo lectura de cuentos en los que se evidenciaba que no solamente los
humanos tenemos un cuerpo sino también todos los seres vivientes y no vivientes lo tienen, para
esto se representaron en arcilla, plastimasa (masa para arepas), plastilina y otros materiales
moldeables algunos objetos que los niños y las niñas consideran como cuerpos (bien fuera de
animales, plantas, humanos u objetos), esto se articuló con rondas infantiles en las que se
involucraban las partes del cuerpo y actividades en las que se interactuaba entre ellos como “el
día de los abrazos”, etc., para así reforzar el respeto no solo hacia el cuerpo propio sino hacia el
de los demás también enfatizando en que a los amigos se les trata con cariño y no se les golpea,
estas actividades generaron con el tiempo una reacción en cadena en la que los niños ya no se
limitaban a incomodarse e informar a las docentes sobre lo que estaba sucediendo, sino también
entre ellos se recordaban que a los demás hay que quererlos y respetarlos.
También se intentó realizar una indagación con los padres, familiares y/o cuidadores de los
niños y niñas sobre su procedencia (De dónde vienen, dónde viven, etc.) pero muchos de ellos se
mostraron algo intranquilos con esta intervención, sin embargo con algunos niños y niñas (los
que ya tenían algún uso del lenguaje verbal) se logró hacer un breve contexto de su entorno,
algunos de ellos hablaban sobre sus hermanos y/o hermanas, las personas con las que viven, si
tienen o no mascotas, etc., por otro lado se contaron cuentos sobre las diferentes procedencias
que podían existir en muchas partes del mundo e incluso de la ciudad donde viven haciendo
énfasis en los diferentes colores de piel, las texturas del cabello, algunas señales características
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de cada uno como por ejemplo: lunares, pecas, manchas de nacimiento e incluso se identificaban
con algunas heridas leves como rasguños y las señalaban diciendo que eran “yayitas”, en todas
estas actividades se incluyó a las pasantes como participantes de las señales que las
caracterizaban.
Como última fase de las intervenciones se realizó un acercamiento hacia el trabajo corporal
mediante rondas infantiles, danza (baile realizado por la docente titular en el de se debían seguir
unos pasos específicos siguiendo una canción), teatro (representación de un personaje específico
dentro de un contexto), juego dirigido (se realizaron juegos de roles en los que los niños y las
niñas debían disfrazarse e interpretar un animal dentro de un cuento) y juego libre, como medio
para el reconocimiento del cuerpo y sus partes articulándolo siempre con la literatura, también se
realizó la reproducción de materiales audiovisuales, en los que se reforzaban los nombres de las
partes del cuerpo mediante el uso de colores, animales, y objetos que se pudieran usar con partes
específicas.
Etapa 3: Conclusiones y cierre de experiencias con los niños y las niñas.
En esta etapa se realizó el levantamiento de un documento solicitado por la coordinación del
jardín en el que se pedía una contextualización tanto del entorno inmediato como una
caracterización de cada uno de los niveles en los que estaban interviniendo las integrantes del
grupo de Pasantes de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas, este trabajo en conjunto
tomó realizarlo aproximadamente dos semanas, ya que era indispensable hacer indagaciones
acerca del contexto local, barrial y particular basándose también en la experiencia y la
observación de cada una de las pasantes como resultado se obtuvo un texto en el que se incluye
la historia de la localidad incluida en el contexto de este documento.
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La propuesta de cierre y finalización de la intervención con los niños y las niñas de cada uno
de los niveles del jardín, en el que se realizó un arduo trabajo en conjunto con el grupo de
pasantes de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas incluyendo una temática teniendo
en cuenta el cuento llamado “La historia de los colores” (adaptación del cuento del autor S.
Marcos), planeación (adaptación del cuento, cronograma para ambientación, vestuario y
realización de invitaciones y recordatorios para los niños y niñas), ambientación de cada uno de
los espacios del jardín tanto común como particular (cada espacio era ocupado por cada uno de
los proyectos de las pasantes, estos espacios tenían destinado un color y se hizo la articulación de
cada color con una actividad propia de cada proyecto, en este caso se ambientó con el color azul
el salón de caminadores y la actividad era realizar moldeado de “plastimasa” de color azul, la
plastimasa es masa para arepas, por lo que lo hace comestible y no tóxico para las personas que
la manipulan), realización de invitaciones a los padres de los niños y niñas de sala materna y
caminadores (ya que se les dificulta un poco el desplazamiento a cada uno de los espacios en los
que se realizó la obra), vestuario y maquillaje, etc.
Finalmente se realizó la socialización de cada uno de los proyectos de cada una de las
pasantes en la que estuvieron presentes la Coordinadora del Proyecto Curricular Licenciatura En
Pedagogía Infantil, Docente y tutora de este proyecto de Pasantía por parte de la Universidad
Distrital Francisco José de Caldas, la coordinadora del Jardín SDIS Suba, la docente monitora de
las pasantes en nombre de la Secretaría Distrital de Integración Social, las docentes titulares de
los niveles Párvulos 3 y 4, y la pasante Alexia Mayerly Cardozo Ramírez quien en conjunto con
la pasante Angela Catalina González Galindo, realizaron su proyecto de pasantía titulado:
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“LA LITERATURA INFANTIL COMO EXPERIENCIA SENSIBLE EN EL
RECONOCIMIENTO DEL CUERPO PROPIO Y DEL OTRO EN PRIMERA INFANCIA”.
2.2.5. Reflexión de la Experiencia Pedagógica
Inicialmente, dentro del periodo de reconocimiento del lugar, las rutinas del jardín y los niños
y las niñas, los niños se mostraron algo sorprendidos por tener personas “extrañas” dentro de su
entorno inmediato, pero rápidamente se acoplaron a nuestra presencia en el jardín, habían niños
bastante reticentes ya que no estaban acostumbrados a personas diferentes a sus docentes y sus
padres, incluso a las actividades que se planteaban.
En cuanto a la Literatura como medio para el reconocimiento del cuerpo propio y del otro,
siempre estuvieron prestos a la lectura de imágenes y a la escucha de textos infantiles que tenían
que ver con la temática, aunque algunos no tenían un acercamiento a esta por parte de sus
familias, siempre les gustaba ver cuentos nuevos y participar activamente en los relatos, en
especial por el hecho de que la persona que leía hacía cambios de voz para que la lectura fuera
más amena, este factor es muy importante para un buen llamado de atención, sobre todo en los
más pequeños ya que como lo menciona el Ministerio de Educación Nacional (2014): Es
importante que un adulto los acerque a la experiencia de la lectura para que se familiaricen con
ella y se familiaricen con los libros que puedan tener al alcance, así se convierte en una actividad
divertida y placentera. Como lo afirma Reyes, (2005):
“En ese sentido, la experiencia literaria vinculada al afecto de los seres queridos y la constatación
permanente de las estrechas conexiones entre los libros y la vida constituyen un sustrato de
“nutrición emocional”, vital para esta etapa. Sortear los complejos procesos de la alfabetización
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será una experiencia retadora y menos árida si el niño entiende, desde su corazón, que los libros le
permiten leer y descifrar el fondo de sí mismo y si ha experimentado, desde la primera infancia,
las compensaciones y el placer ligado a la lectura de sus libros entrañables.”
El arte siempre fue la base para realizar los talleres que se desarrollaron a lo largo de esta
experiencia, el dibujo (garabateo), el moldeado, la pintura, etc., estuvieron presentes, los niños y
las niñas en su mayoría estaban muy animados por las diferentes experiencias que se les
brindaban en el jardín, los sentidos, como medio de percepción, fueron la clave para esta
sensibilización, ya que son el principal receptor conector entre el exterior y el cuerpo, ya que los
niños y niñas manifiestan sus emociones mediante trazos, movimientos, gestos y les dan sentido
de acuerdo a su vivencia (MEN, 2014)
Del mismo modo, mediante esto actos de garabateo y expresión artística los niños y las niñas
están aprendiendo a comunicar su interior a los demás, exteriorizando sus emociones, gustos y
miedos a partir de los trazos que realizan, en este sentido Reyes (2005), concluye que en esta
etapa inicial de la vida:
“Además se empiezan a dar procesos de escritura: “Esto significa comenzar a “escribir” mucho
antes de las primeras letras valiéndose, no sólo del lenguaje oral, sino de la amplia gama de
lenguajes no verbales que en la primera infancia se constituyen en formas fundamentales de
expresión y comunicación. El juego simbólico y las experiencias de exploración artística –artes
plásticas, música, expresión corporal, juego dramático, entre otras– ofrecen oportunidades de
“escritura” que deben vincularse a las propuestas de lectura para la primera infancia”
Por otra parte en tanto a la corporalidad podemos decir, que es un factor que cobra especial
significado y relevancia en la vida de los niños y las niñas, ya que por medio de esta se
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construyen relaciones que marcan la vida y desarrollo de los niños y las niñas, de la sociedad y
de su entorno inmediato. Como lo explican Castro-Martínez, Duarte y Rodríguez (2017) se
distinguen tres tipos de interacciones a partir del cuerpo y el movimiento como son:
1) El cuerpo y el movimiento en relación hacia sí mismo, es en esta primera etapa donde el
niño y la niña empiezan a tener una conciencia de su propio cuerpo, lo ven, lo sienten, lo
identifican y lo reconocen, creando el concepto de autoestima, construyendo una autopercepción
y una consciencia de sí mismo y del lugar que ocupa. Esto se aborda principalmente bajo
ejercicios de reconocimiento de las partes que conforman el cuerpo, además de realizar
actividades de una forma más autónoma e independiente, para que de esta forma pueda
identificar sus capacidades en la destreza para realizar ciertos movimientos, además de reconocer
claramente cuál es ese aspecto que lo hace único, auténtico y diferente a los demás.
2) El cuerpo y el movimiento en relación hacia los demás, Esta segunda etapa de interacción
es fundamental para los procesos de socialización y comunicación que se adelantan en la primera
infancia, es a partir de ahí donde el niño y la niña además de identificarse a sí mismos, empiezan
a dar lugar a los otros, a considerarlos como pares, se crea una intersubjetividad, que con la
ayuda del movimiento voluntario y coordinado crea relaciones de cercanía encontrando que,
“cuando un infante tiene mayor conciencia sobre sus capacidades motoras es capaz de
desarrollar habilidades como la empatía y el reconocimiento de los demás” (Bolaños, 2006)
citado por Castro-Martínez, Duarte y Rodríguez (2017). Este aspecto se aborda principalmente a
partir del trabajo colaborativo entre pares, donde además se hace evidente la zona de desarrollo
próximo, donde entre pares logran la resolución de problemas sencillos de una forma conjunta.
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3) El cuerpo y el movimiento en relación hacia el entorno, Esta última relación nos permite
dar cuenta de la construcción cognitiva que va haciendo el niño y la niña en tanto el espacio y el
tiempo que ocupan, con relación a las acciones sociales que se realizan a forma de rutina, como
son las horas de alimentación, juego, sueño o reposo del cuerpo, etc. Esto se desarrolla a partir
del “conocimiento que tiene el individuo sobre su propio cuerpo; en donde este debe ser
consciente de lo que sucede en su interior al momento de localizarlo dentro de un tiempo
determinado (SDIS, UPN y SED, 2013) citado por Castro-Martínez, Duarte y Rodríguez (2017).
Como pudo evidenciarse, es entonces el cuerpo, el principal medio de reconocimiento y de
interacción inicial con que cuenta el ser humano, es a partir de él que se logra gran parte del
desarrollo integral del sujeto, permitiendo crear relaciones de cuidado y reciprocidad hacia los
otros y hacia el entorno en que habita, de este modo resulta fundamental recordar que,
“Los niños y las niñas, a través de la corporeidad y el movimiento, realizan un contacto con el
medio ambiente que les permite retroalimentación, les genera un aprendizaje y aprehenden el
conocimiento por medio de los sentidos, al hacer una construcción conjunta con su propio
entorno” (Bolaños, 2006). Citado por Castro-Martínez, Duarte y Rodríguez (2017)
De esta manera, se puede evidenciar la relación literatura, arte y cuerpo, como ejes que se
articulan posibilitando diversas formas de expresión del ser, que a su vez, pueden llegar a
posibilitar relaciones nuevas entre los seres humanos, donde se difunda y promueva una cultura
del respeto y cuidado de sí mismo y de los otros, construyendo desde la primera infancia una
cultura de paz y justicia en las interacciones con los otros y con el medio en general.
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De acuerdo a lo anterior, durante las intervenciones realizadas se pudo evidenciar que hubo
apropiación y reconocimiento del cuerpo propio de los niños, las niñas y el de sus compañeros;
cabe decir que, aunque en algunos casos predominaban comportamientos inadecuados contra el
otro, como los mordiscos y los rasguños, con el paso del tiempo, el dialogo, y el proceso de
reconocimiento que se iba dando, esto fue disminuyendo, tomando una conciencia inicial del
dolor (acción - reacción) y respeto del espacio del otro.
Cosa que nos permitió reconocer, también prácticas de cuidado hacia el otro, donde se hacía
notoria la preocupación general del grupo, por ejemplo, cuando alguien se caía, se lastimaba, o
simplemente lloraba, sus compañeros los miraban atentamente, y algunos trataban de buscar la
explicación de lo sucedido y ayudar si era necesario.
De esta manera, a través de diversas lecturas, cantos y juegos se llegó a consolidar una
especie de acuerdos implícitos, donde habían momentos para hablar, gritar, guardar silencio,
interactuar, moverse libremente, moverse con cuidado de no lastimar a nadie sin intención, etc.
Aspectos que se generan justamente en los procesos de socialización entre pares y adultos que se
dan al interior del jardín.
Así, podemos inferir, que se logró cumplir con los objetivos propuestos por este proyecto de
pasantía, pues de alguna manera, como se explicó, se dieron además procesos inesperados como
la construcción de acuerdos y esa conciencia de lo que siente el otro ante las acciones que se
ejercen sobre él.
Mediante diversos talleres y actividades como la construcción de caras con sus partes,
acompañada de la canción “mi carita redondita”, la lectura de cuentos como “los secretos del
abuelo sapo”, y ejercicios corporales tanto de forma autónoma como cooperativa, además de
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experiencias plásticas con plastimasa, arcilla, arena, harina, colbón, pintura, entre otros, se pudo
dar cuenta de que los niños y las niñas además de relacionar y tocar las partes que la componían,
empezaban a nombrarlas con su lenguaje oral.
Por otra parte en tanto a los procesos creativos e imaginativos en primera infancia se puede
decir que, muchas veces los niños y las niñas se dejan llevar por lo que han vivido y
experienciado con sus familias y en su contexto más cercano, para describir las acciones que
pueden observar en las imágenes de los libros, y fotografías, que tienen a su alcance, así
identifican personajes como mamá, papá, bebé, y crean historias, como por ejemplo, que estaban
comiendo helado celebrando que el niño se portó bien. También se puede evidenciar que estos
personajes no aparecen solo entorno a figuras de cuerpos humanos, también forman familias en
torno a animales y objetos a quienes les atribuyen características y emociones humanas.
Esto nos lleva a entender el proceso literario que se conforma en la primera infancia, la
estructura que adquiere, de acuerdo al marco de representación que ha desarrollado el niño y la
niña, a través de las relaciones que construyen con su entorno y el enriquecimiento que se da a
través de la narración y la lectura en voz alta, realizada por los adultos, reafirmando la teoría de
que,
“Antes que lectores hemos sido oyentes, y lo hemos sido desde el momento en que
nacimos. La voz intima, familiar y cercana que nos cantó en la cuna es la que, además,
nos leyó en voz alta las primeras historias que fueron nuestras primeras experiencias
intelectuales, en las que las emociones y los sentimientos, no solo no estaban ausentes,
sino que eran las que daban sentido aquellos textos leídos en voz alta” Cerrillo, (2010)
En tanto al proceso de acoplamiento a las dinámicas y rutinas que tiene establecidas el jardín,
podemos establecer que el tiempo de intervención pedagógica fue limitado, ya que, aun teniendo
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una planeación diseñada, muchas veces no pudieron ser ejecutadas por las diversas actividades
que eran promovidas por el Distrito, por IDARTES y por la propia institución, las cuales
interferían directamente en la rutina del jardín y no eran dadas a conocer a las pasantes, con la
debida anticipación.
A su vez habían semanas enteras que se dedicaban por ejemplo a la familia, al medio
ambiente, a la celebración de la semana del niño y la niña, en las cuales de algún modo tuvimos
que hacer una conexión entre la temática que seguía el jardín y lo que nosotras pensábamos
llevar, fue así como a partir de retratos de la familia, se trató por ejemplo el tema de identidad, en
la semana del ambiente, cuidado de sí mismos, de sus compañeros y del medio que nos rodea,
incentivando, el echar la basura donde corresponde, a través de videos y lecturas.
La independencia estuvo asociada a la exploración del medio y la experiencia sensible, así, se
proponía a los niños y las niñas, reconocer sus prendas y pertenencias, además de aprender cómo
vestirse y desvertirse, de forma tal que ellos pudieran hacer las cosas por sí mismos, teniendo
ayuda solo en acciones como amarrar los cordones de los zapatos.
Por otra parte, se puede observar que el tiempo de intervención pedagógica por parte de las
docentes titulares, es a veces limitado debido a trámites administrativos y funciones adicionales,
que no permiten el desarrollo del cronograma planeado.
En cuanto a la relación que hubo con las docentes titulares, podemos decir que siempre estuvo
basada en el respeto y el diálogo, donde se llegaba a acuerdos de colaboración mutua que
permitían que los niños y las niñas no estuvieran dispersos con tanta actividad, sino, que se
trataba de organizar el tiempo y las acciones de tal forma que pudieran haber momentos de
esparcimiento y a la vez de atención y concentración en la misma jornada, posibilitando de esta
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manera el desarrollo integral del niño y la niña a partir de los pilares del juego, el arte, la
literatura y la exploración del medio, los cuales trataron de hacerse presentes en cada una de
nuestras sesiones.
Fotografía: “Descubro el movimiento en mi cuerpo”. Tomada el 05 de junio de 2019
3. Conclusiones y recomendaciones
● El trabajo corporal es muy importante con los niños y las niñas, y más en primera
infancia en donde ellos están empezando a conocer el mundo y su primera forma de hacerlo es
explorando a partir de las sensaciones de agrado y desagrado, placer y displacer que les genera
su cuerpo frente a las experiencias que tienen, esto se extiende a lo largo de la vida de cada una
de las personas, permitiendo la sensibilidad frente a lo que sienten tanto física como
emocionalmente.
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● El juego toma un papel fundamental en esta etapa de la vida, ya que no solo es una forma
de canalización de las energías, es además una actividad en la que los niños y las niñas
concentran su atención, porque a partir de él están aprendiendo a comunicarse y relacionarse con
los otros.
● El cuerpo, hace, habla, crea, imagina, brilla, se va construyendo y cuidando cada día,
aprendiendo los hábitos, que le llevaran a un sano crecimiento y desarrollo, además de educar
para el respeto y el cuidado que se debe tener hacia sí mismo y hacia los otros, con quienes se
comparte. Entendiendo su valor, su necesidad, su autonomía, sus libertades, pero también sus
responsabilidades y deberes.
● La música y la danza son posibilitadores innatos de grandes aprendizajes durante la etapa
inicial de la vida, es a partir de allí, como los niños y las niñas empiezan a conocer y entender su
propio ritmo, además, de aprender nuevas palabras, en la medida que intentan cantar e
identificar, para nuestro caso varias partes de su cuerpo, por ejemplo, a partir de rondas infantiles
y cantijuegos, además de esta forma se transmite y se apropia parte de la cultura.
● La literatura infantil, es el escenario principal, donde los niños y las niñas pueden
indagar, imaginar, descubrir y habitar el mundo, en esta edad llaman poderosamente la atención
los libros que hablan sobre animales humanizados, así la infancia logra sentirse identificada con
algunas de las acciones que realizan los personajes y con las partes que conforman su cuerpo.
Además los libros y cuentos infantiles abren las puertas hacia un mundo de la fantasía, la
imaginación y la creación e invención de historias que todo niño y niña merece experimentar y
conocer.
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● Un aspecto a destacar es que el desarrollo integral del sujeto en primera infancia depende
en gran medida de las relaciones que lograr crear con los otros (pares y adultos) y con su
medio, cobrando el cuerpo y la literatura un lugar privilegiado en la transmisión de
cultura y en la adopción de rituales y hábitos de cuidado hacia sí mismos y hacia los
demás, que les permitirán tener desde temprana edad una conciencia del papel que
cumplen en la transformación y construcción de una cultura de paz en Colombia, ya que
es a partir de los primeros seis años donde se sientan las bases afectivas, emocionales y
sociales que le permitirán al niño y la niña ser ciudadanos partícipes de la construcción de
su país.
● Uno de los aportes que se tuvieron durante esta experiencia desarrollada en el Jardín
SDIS de Suba a la formación profesional, consistió en aprender a observar lo que
realmente pasa en el contexto laboral de un jardín, aprender sobre rutinas, ya que a la vez
que se formaban hábitos en los niños y las niñas, también transformaba las prácticas
alimenticias y horarios de las maestras y pasantes. Haber estado ahí, presenciando cómo
día a día los niños y las niñas adquirían mayor apropiación y desarrollo de su lengua
materna, a través de rondas, canciones y la participación en la lectura en voz alta de la
literatura infantil, también deja una huella, ya que nunca habíamos tenido la oportunidad
de trabajar tanto tiempo con infancias de estas edades, y es a partir de aquí donde se
pueden observar y comprender de una forma más clara las etapas de desarrollo y la
importancia de los procesos de socialización en la primera infancia, fue de alguna manera
una forma de vivenciar lo que señala la teoría en la que se enfatizó a lo largo de la
carrera.
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Por otro lado, la experiencia permitió abrir los horizontes de una manera positiva, ya
que no es nada parecido a las vivencias y/o prácticas universitarias en las que se realizaba
trabajo pedagógico una vez a la semana, en esta ocasión se estaba inmerso en el ámbito
laboral todos los días de la semana, realizando planeaciones, adoptando las rutinas del
espacio y adaptando nuestras propias rutinas al servicio de los niños y las niñas, es
gratificante saber que seres tan pequeños sean capaces de atender a las actividades diarias
que plantean las docentes y permitir que las experiencias sensibles toquen ciertas fibras
con las que los niños y las niñas pueden tener un acercamiento tanto al arte como a la
literatura y salir de los esquemas del “trabajo de escritorio”, es importante que la docente
haga uso de su imaginación y creatividad para que las personas que están al otro lado
tengan otra perspectiva en cuanto al entorno y que tengan vivencias distintas a las de sus
hogares, no hay que subestimar el poder de creación de los niños y las niñas, la
posibilidad que ellos tienen para hacer cambiar el pensamiento de la docente es tan
grande que posibilita seguir procesos en los que ellos tendrán un aprendizaje
significativo, abriendo las puertas al trabajo no solo en aula sino también en otros
contextos, esto abre las puertas a nuevas experiencias y permite que la docente en
formación sea quien tome las riendas de este viaje en la educación sin desconocer los
aportes que los niños y las niñas tengan por compartir.
● Finalmente como recomendación a la institución podríamos decir que es importante
construir una secuencia o un proyecto pedagógico que siga una linealidad anual, donde
no se corten los procesos que llevan los niños y las niñas por estar cambiando
mensualmente y de manera arbitraria el calendario y la duración de cada fase, para
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seguir con algo completamente diferente, dejando en el olvido lo ya visto, se trata de
enriquecer cada día el conocimiento y el desarrollo integral de la infancia desde una
perspectiva que involucre, lo visto anteriormente con lo nuevo que se desea enseñar.
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4. Bibliografía
● Duarte, J. A.; Rodríguez, L. C.; Castro, J. A. (2017). Cuerpo y movimiento en la educación
inicial: concepciones, intenciones y prácticas. Revista: Infancias
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Investigación en Sociedad, Cultura y Comunicación. Editorial Pearson Educación.
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Bogotá, editorial Fondo Educativo Interamericano.
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● MEN, (2014) El arte en la educación inicial.
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53
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https://habitatencifras.habitatbogota.gov.co/documentos/boletines/Localidades/Suba.pdf
● Ficha Localidad Suba (Agosto de 2018)- Obtenido de la página web de la Veeduría
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● Contextualización del Bosque de las Mercedes en Bogotá (2014) - Obtenido de la página
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http://humedalesbogota.com/2014/12/11/el-bosque-las-mercedes-en-bogota/
● MANUAL DE INDUCCIÓN Y REINDUCCIÓN SDIS, 2009:
http://intranetsdis.integracionsocial.gov.co/anexos/documentos/3.3_proc_adminis_gestio
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IS.pdf
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5. Anexos
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