Tríptico exposición
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MUJERES
Un encuentro a travs de la Arqueologa
v
Centro Cultural La Corrala / Museo
de Artes y Tradiciones Populares
Universidad Autnoma de Madrid
C/ Carlos Arniches, 3 y 5
28005 Madrid
Tel. +34 91 497 65 00
Transporte
Metro: La Latina, lnea 6
Autobs: 17, 18, 23, 35 y 60
Entrada gratuita
Horarios
Lunes a viernes: 10 a 20h.
Sbado: 10 a 14h.
Domingos y festivos
cerrado.
Contacto exposicin
expoenfrentandosealavida
@gmail.com
Visita nuestro Blog y nuestro Facebook!
expoenfrentandosealavida.blogspot.com
https://www.facebook.com/expoenfrentandosealavida
Del 3 de marzo al 30 de abril de 2015
Y MUJERES
MESOAMERICANASPREHISPNICAS
Diseo: Laura Garca Blas ([email protected])
Comit espaol (UAM): Lourdes Prados Torreira,
Raquel Castelo Ruano y Clara Lpez Ruiz.
Comit mexicano (INAH): Mara Rodrguez-
Shadow y Cristina Corona Jamaica.
Esta exposicin surge de la colaboracin
entre un grupo de investigadoras de la
Universidad Autnoma de Madrid (UAM)
y del Instituto Nacional de Antropologa
e Historia de Mxico (INAH).
A travs de las imgenes de los restos
arqueolgicos, se muestra cmo se
enfrentaban a la vida cotidiana, las
mujeres de las culturas Ibera y
Prehispnicas en Mesoamrica, culturas
muy lejanas en el tiempo y el espacio
pero con las mismas necesidades
cotidianas.
-
INT
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A
LA
S CULTURAS IBRICA Y MESOAMERICANA
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LAS ACTIVIDADES DE MANTENIMIENTO
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MANUFACTURA TEXTIL
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DE LOS MIEMBROS DE LA COMUNIDAD
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REEMPLAZO GENERACIONAL
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SOCIALIZACIN Y APRENDIZAJE
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FAMILIARES Y PRCTICAS SIMBLICAS
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LOS DIFUNTOS
La cultura ibrica se desarrolla entre los siglos VI y I a.C. desapareciendo lentamente con la romanizacin de la Pennsula Ibrica. Se caracteriza por una importante jerarquizacin social y territorial que se desarroll en la zona oriental y meridional de la pennsula ibrica extendindose hasta el sur de lo que hoy es Francia. Una cultura mediterrnea coetnea de etruscos, griegos, pnicos y romanos. Mesoamrica comprende la mitad meridional de Mxico y las regiones de Guatemala, El Salvador y Belice, as como el occidente de Honduras, Nicaragua y Costa Rica. En esta regin, durante varios siglos, se desarroll una pluralidad de civilizaciones indgenas que conformaron un mosaico de gran diversidad tnica, religiosa o lingstica, si bien compartieron varios rasgos culturales.
Tras el surgimiento en Espaa y Mxico de la Arqueologa de Gnero, se plante el rechazo a la visin androcntrica del pasado donde la mujer era prcticamente invisible o jugaba unos roles siempre secundarios. Tanto en la cultura ibrica como en las prehispnicas en Mesoamericana, el registro arqueolgico permite observar que las mujeres fueron las encargadas de llevar a cabo la produccin domstica. Eran las responsables de los procesos de socializacin del grupo y el cuidado de los miembros de la comunidad, de las actividades domsticas, de la elaboracin de la cestera, el trabajo textil o la cermica de cocina. Es decir, todas las tareas que resultaban imprescindibles para lograr la reproduccin de la unidad domstica y de la propia comunidad: las llamadas actividades de mantenimiento.
Las mujeres ibricas y mesoamericanas debieron participar en muchas de las tareas cotidianas que ayudaban al sustento de la comunidad. Intervinieron en las tareas agrcolas relacionadas con el cultivo de los huertos, la recoleccin de plantas y frutas silvestres. Seran las encargadas de garantizar la supervivencia del grupo familiar, prevenir las enfermedades por desnutricin y transmitir las pautas culturales de la alimentacin, que se aprenden durante la infancia, generacin tras generacin.
Una importante tarea domstica, en ambas culturas, fue transformar la lana y elaborar hilos para fabricar tejidos. En la cultura ibrica la presencia en los enterramientos femeninos de elementos relacionados con la actividad textil, transmite el carcter simblico de gnero que se otorga a estos objetos, tambin presentes en santuarios como ofrenda a una divinidad femenina. El trabajo textil tuvo un aspecto social, poda realizarse en grupo al tiempo que se transmitan relatos orales. En Mesoamrica, mientras que las mujeres del pueblo fabricaban la indumentaria de su familia con tejidos toscos, las nobles solo hilaban y tejan algodn con tcnicas sofisticadas. De hecho, los lienzos textiles llegaron a utilizarse como moneda de cambio. Hay constancia de diversas divinidades femeninas, en distintas reas de Mesoamrica, que actuaron como protectoras de esta actividad.
Las mujeres ibricas y mesoamericanas fueron las encargadas del cuidado del grupo familiar, y por extensin de toda la comunidad. Debieron tener conocimientos de hierbas medicinales y tratamientos teraputicos; siendo expertas en el cultivo y recoleccin de plantas con propiedades curativas. El embarazo fue una fuente constante de temor debido a la alta mortalidad tanto de la madre como de los hijos, tal y como se constata en el registro arqueolgico.
Las uniones matrimoniales en la cultura ibrica tuvieron por objeto perpetuar las casas, ya que las familias eran la base de la incipiente vida urbana. En Mesoamrica sirvieron para consolidar los linajes patriarcales. En ambas sociedades, las bodas fueron una importante transaccin econmica expresada en la dote y en el intercambio de regalos. Uno de los roles fundamentales de las mujeres fue la reproduccin biolgica y social, existiendo divinidades femeninas a las que se les solicitaba un buen embarazo, parto y lactancia.
Las mujeres ibricas y mesoamericanas seran las encargadas de transmitir experiencias relacionadas con la propia identidad del grupo como el lenguaje. Las costumbres, mitos, creencias religiosas, tradiciones y comportamientos sociales se transmitiran por va oral en el entorno del hogar a travs de cuentos y narraciones. Para perpetuarse a travs de su descendencia debieron de arbitrarse una serie de reglas mediante las cuales los individuos infantiles y juveniles aprenderan lo necesario para incorporarse adecuadamente al grupo de los adultos. A travs del juego y el trabajo las nuevas generaciones aprenderan sus propios roles.
El ritual funerario de la cultura ibrica fue la cremacin, mientras que en los pueblos prehispnicos se constataron la cremacin e inhumacin. Los rituales celebrados incluiran diversas ceremonias que variaran segn el grupo social. Posiblemente, las mujeres seran las encargadas de la preparacin del cadver en el hogar: lavarlo, ungirlo, vestirlo y adornarlo. Seran tambin las responsables de preparar los alimentos del banquete funerario y del cuidado de las tumbas, manteniendo la memoria del grupo familiar. En el mundo ibrico se enterraron en necrpolis prximas a los poblados, mientras que en las culturas mesoamericanas fue frecuente enterrarse bajo las casas.
Las mujeres iberas participaban activamente en los rituales realizados en viviendas y santuarios. Entre las ofrendas, destacan los exvotos en forma de figuritas masculinas y femeninas, animales o partes anatmicas del cuerpo. Muchas prcticas reflejan la existencia de rituales de iniciacin, como el matrimonio, y la presentacin de recin nacidos ante una divinidad protectora, posiblemente femenina. En Mesoamrica, los rituales asociados a la peticin de lluvia y al maz fueron constantes en templos y reas domsticas. Por su parte, las diosas mexicas Xochiqutzal y Tlazoltotl, amparaban las labores textiles. El sacrificio humano estaba asociado a las prcticas de las curanderas y parteras mexicas.