En Pasos y Compases trabajamos constantemente con los niños como SERES DE DERECHOS.

- Con principios de valoración y conocimiento de su cuerpo- Como SERES con la capacidad de Reconocer y expresar sus sentimientos - Con visión objetiva para reconocer situaciones en las que se ve un riesgo inminente- Como SERES con derecho a tener su propia intimidad y espacio y sus momentos personales.- Como SERES que en algunos momentos requieren ayuda y su DERECHO a expresar cuantas veces sea necesaria la necesidad de apoyo

En Pasos los niños ejercen sus derechos, hablan, se expresan y exploran sus expectativas, intereses, fantasías, sueños todo lo que se les pasa por sus cabecitas.

Promovemos el DERECHO a la diversidad de pensamientos, de opiniones, de visiones donde se genera un ambiente en el que se da cabida al diálogo y a la resolución de conflictos por medio del diálogo y la interacción entre los pares.

Acompáñanos en nuestro trabajo

* Celebrando cada uno de sus logros.* Validando sus opiniones y expresiones así no compartamos la misma visión de ellos.* Escuchándolos, todo lo que ellos dicen tienen mucho valor y seguro que es lo más impor-tante.* Dandole vaalor a sus problemas por que lo que ellos viven es tan importante como lo que nosotros vivimos.* Dialogando con ellos, invítalos a pensar, a reflexionar y a ver diferentes puntos de vista.Cuando una situación se te salga de las manos no llegues al castigo físico, grito o insultos, esto sólo dejará en ellos cicatrices y afectará su autoconfianza.

TRATO DEL BUEN

PROMOCIÓN

PASOS Y COMPASES

FACTORES DE RIESGO DE MALTRATO

Factores inherentes

al niño y la niña

2

2

3

3

1

1

Factores inherentes a la familiaFactores inherentes

a la comunidad y

a la sociedad

Niños y niñas fruto de embarazos no deseados, prematuros, con bajo peso, con enfermedades crónicas e hiperactivos. El niño y niña en situación de discapacidad tiene mucho riesgo de ser maltratado y por lo tanto, se debe ser extremadamente cuidadoso en buscar signos de maltrato en ellos. Usualmente, estos niños y niñas por su condición de discapacidad no realizan la función que el adulto espera y son causa de frustración o culpabilidad en muchos padres o cuidadores, lo que lleva a maltratarlos.

Padres jóvenes, familia monoparental, embarazo no planeado, exposición precoz a la violencia, abuso de sustancias, atención prenatal inapropiada, enfermedad física o mental, problemas relacionales, familia numerosa conviviendo en un espacio reducido, aislamiento social, situación de estrés, etc.

Desconocimiento o incumplimiento de la Ley para la garantía y protección de los derechos de los niños y las niñas, disminución del valor de los hijos e hijas (discapacidad, sexo), desigualdades sociales, violencia organizada, alta aceptabilidad social de la violencia, normas culturales, etc.

Situaciones que pueden implicar sospecha de Maltrato:

Se debe sospechar maltrato si:

* hay lesión física sugestiva de maltrato.* Hay lesión en genitales o ano.* El niño o la niña expresa espontáneamente que es víctima de cual-quier tipo de maltrato.* Hay evidencia de alteración en el comportamiento del niño o la niña (Tristeza, aislamiento, llanto, silencio, etc.)* Hay evidencia de alteración en el comportamiento de los cuidado-res. (Separaciones, fallecimientos, largas ausencias, violencia intra-familiar, etc.)* El niño o la niña está descuidado en su higiene. * Hay discrepancia entre una lesión y la historia relatada como origen de la lesión.* Hay consulta médica tardía con lesiones graves.

Problemática de Maltrato en Bogotá:

Dentro de las condiciones de vulneración de derechos y maltrato infantil en Bogotá se ha identificado:

Aunque el artículo 32 de la Convención sobre los Derechos del Niño los protege contra la explotación laboral, ellos y ellas se ven en la obligación de ayudar a la economía de su hogar, de tal manera que encontramos niños y niñas pidiendo en las calles, vincu-lados al comercio informal, como ayudantes de construcción; las niñas consiguen “empleo” como domésticas. Pero otros, con menos ‘”suerte”’ se ven inmersos en el mundo del crimen y la explotación sexual, o con problemática de calle como única alternativa.

* Factores sociales, económicos, culturales y familiares que promueven la vinculación temprana de los niños y niñas al trabajo; exposición temprana de niños y niñas a condiciones de trabajo deteriorantes que vulneran su salud y desarrollo integral por ser trabajadores o acompañantes de adultos en el trabajo.

* Aumento de la accidentalidad doméstica de los niños y las niñas cuidadores.En las formas de relación y comunicación familiar se presentan actos de vio-lencia en la familia y en las personas que la conforman, generando así situa-ciones de violencia intrafamiliar, que se convierten en un excelente escenario para el maltrato infantil.

* Los niños y niñas resultan siendo los más afectados en todos los aspectos del desarrollo (físico, emocional y mental) y no solo por el maltrato, sino que se convierten en los depositarios de la frustración, intolerancia, odios, descon-fianza e incertidumbres de los adultos.

Desde el jardín tenemos los siguientes objetivos:

Es de suma importancia promover en el trabajo diario con los niños y las niñas factores de protección como:

Promueva entre los agentes educativos del jardín que en el trato y trabajo pedagógico con los niños y las niñas tengan en cuenta las siguientes recomendaciones:

* El conocimiento y valoración del cuerpo.La capacidad de reconocer y expresar sus sentimientos.* El reconocimiento de situaciones de riesgo tanto en las relaciones familiares como con extraños.* El derecho a su intimidad (tener su propio espacio, ser respetado en momentos personales como su baño, sus juegos infantiles).* Saber pedir ayuda (reconocer a personas o institucio-nes de confianza). * Que identifique con nombre propio a sus padres y familiares, así como a sus agentes educativos.

* Escuchar y validar las opiniones y expresiones de los niños y las niñas.

* Dedicar a los niños y niñas un tiempo individual, para explorar sus expectativas, intereses, fantasías, creen-cias e inquietudes.

* Promover en su interacción con los niños y las niñas y entre ellos, el respeto a la diferencia. Todos tenemos derecho a tener diferentes opiniones frente a una misma situación, propicie los consensos.

* Evitar expresiones de amenaza como: “Cuando vengan a recogerte voy a contarle a tus papas”, “si no te portas bien, te dejamos aquí sola/o”, “si no haces lo que te decimos, ya no te vamos a querer o no sales a jugar”.

* Dedicar tiempo para conversar amablemente con los niños y las niñas; que la comunicación no se limite solo a órdenes. Conversar, también es escuchar.

* Propiciar y favorecer la participación de los niños y las niñas en la planeación, ejecución y evaluación de las diferentes actividades del jardín. Esto genera fortale-zas en la autonomía y en el ejercicio de tomas de deci-siones responsables en ellos y ellas.

* Generar amplios espacios de socialización y juego de los niños y niñas con sus pares, de esta manera ellos mismos encuentran las formas de resolver los conflic-tos y las situaciones cotidianas.

En el trabajo de promoción con los padres, madres y/o cuidadores es impor-tante que el jardín infantil haga énfasis en los siguientes aspectos:

Los niños y las niñas recién nacidos no alcanzan a enten-der la consecuencia de su conducta, aún no comprenden límites o normas, por ello es importante que el adulto sea comprensivo y paciente.

La importancia de escuchar y validar las opiniones y expresiones de sus hijos e hijas.Su compromiso de ayudar a sus hijos e hijas a tener confianza en sí mismos (Celebrar sus esfuerzos y triun-fos).

Los problemas de sus hijos e hijas son tan importantes como los de los mismos padres o madres.La importancia del respeto por las actividades que realizan sus hijos e hijas; es importante evitar interrum-pir o imponer cambios de actividad por conveniencia del adulto.

Orientar sobre las etapas del desarrollo infantil, con-versar sobre mitos y creencias y analizar puntos críti-cos en el desarrollo, como la alimentación, control de esfínteres, adquisición de lenguaje y hábitos. Recuérdeles que los niños y las niñas son fácilmente impresionables, y que pretender lograr conductas es-peradas a través del uso de figuras imaginarias (El coco, el hombre del costal, las brujas, el ogro, los fantasmas, la mano peluda, el diablo, el gato negro, la inyección) puede generarles inseguridades y temores.La importancia de reconocer las propias emociones y como las maneja el adulto. Por ejemplo como maneja la rabia.

La importancia de ayudar a reconocer las emociones a los niños y niñas para su protección.

Es importante enseñarle a los padres a resolver los conflictos de la vida cotidiana de forma pacífica sin usar la violencia.

Explique le a los padres que antes de establecer normas para los niños y niñas se forma el habito, pero para ello es importante revisar los propios hábitos que se tiene como adulto y como cumple las normas socia-les propuestas.

Que enseñen a sus hijos la identificación de sus padres y familiares.

Recomendaciones para:Padres y cuidadores

Recomendaciones para los padres, madres y/o cuidadores y agentes educativos del jardín sobre la relación con los niños y niñas para evitar el maltrato

Existen algunos comportamientos positivos que se deben adoptar para preve-nir el maltrato:

* Reconocer que los niños y las niñas son personas con derechos como los adultos y dichos derechos deben ser respetados y garantizados. Los niños y las niñas no son propiedad de sus padres y madres.

* La base de una buena relación con los niños y las niñas es la expresión permanente de afecto y amor. Se debe aprovechar el mayor tiempo posible para conversar con ellos y ellas, desarrollar actividades conjuntas y conocer sus sentimientos, ideas y aspiraciones.

* Los niños y niñas aprenden la mayoría de sus comportamientos observando a los adultos que tienen a su alrededor.

* Dialogar con los niños y niñas sobre sus faltas; no es necesaria la agresión física o verbal. El uso del castigo físico y del maltrato causan mucho daño en ellos y ellas.

* Establecer reglas claras para la crianza del niño y niña. Es mucho mejor si son pocas y básicas.

* Aplicar siempre las mismas reglas. Cuando al niño o a la niña se le permite un día una cosa y otro día no, se confunden. Cuando haya que hacer una excep-ción de la regla, es necesario explicar porqué se hace. Las reglas no se pueden estar cambiando ni aplicando de acuerdo a la conveniencia de los padres o madres.

* Establecer un acuerdo sobre la aplicación de las reglas de modo que todos los adultos de la casa que conviven o están al cuidado del niño o niña las cumplan.

* Explicar siempre al niño o la niña las razones por las cuales una conducta o comportamiento es negativo o inaceptable. Cuando un niño o una niña cometa una falta, es necesario explicarle por qué se considera que lo que hizo estuvo mal. No importa si aún no habla porque desde muy temprana edad entienden las razones e interpretan las expresiones de sus padres y madres.

* Ante una falta es necesario escuchar lo que el niño o la niña tenga que decir, antes de llamarle la atención por haberlo realizado.

Recomendaciones para:Padres y cuidadores

Recomendaciones para los padres, madres y/o cuidadores y agentes educativos del jardín sobre la relación con los niños y niñas para evitar el maltrato

Conversar con sus hijos e hijas sobre la prevención del abuso sexual. Explicarles la diferencia entre caricias y expresiones de afecto de personas que les quieren y respe-tan y comportamientos de personas que lo hacen con el propósito de abusarlos, aún cuando sean conocidas, familiares o amigos.

Existen algunos comportamientos positivos que se deben adoptar para preve-nir el maltrato:

Contar desde diez hasta cero (10, 9, 8, 7….0) antes de llamarle la atención al niño o la niña por algo que hizo, y pensar por un momento cual será la forma más adecuada de hablar y orientar la conducta o comportamiento incorrecto.

Evitar hacerle observaciones al niño o la niña por algo que pasó hace mucho tiempo, especialmente si es muy pequeño. Él o ella no entenderá porqué nueva-mente le hablan del tema.

Evitar hacerle observaciones al niño o la niña dos veces por un mismo hecho. Si tuvo una conducta o comportamiento inadecuado y un padre ya le llamó la atención por ese acto, el otro no necesita hacerle observaciones nuevamente. Los padres o uno de ellos pueden optar por reflexionar con el niño o la niña sobre la falta cometida, los acontecimientos que la rodearon, las razones que tuvo y que explican su comportamiento, los motivos por los que ese comporta-miento no es adecuado y cómo prevenir otros hechos similares.

Jamás tratar despectivamente a un niño o una niña. Los niños y las niñas, como todos los adultos, pueden equivocarse y cometer faltas. Cuando así sucede, estas faltas deben corregirse pero no de manera violenta. Todas las personas cometen errores y no por eso deben ser tratadas despectivamente.Nunca amenazar a los niños y las niñas. Las amenazas no son formas efectivas de promover una conducta positiva y de lograr una adecuada disciplina. Por ejemplo, amenazar a un niño o a una niña diciéndole que se le va a abandonar o a regalar, les puede producir un gran daño psicológico ya que fácilmente ellos o ellas lo creen y se atemorizan desarrollando sentimientos de inseguri-dad.

Erradicar el castigo físico, los gritos o los insultos como una forma de gene-rar respeto y corregir un comportamiento inapropiado de un niño o de una niña. Este tipo de acciones sólo infunden miedo, no fomentan la autoconfianza del niño o de la niña y no promueven habilidades constructivas y conductas positi-vas.

La mejor manera de infundir respeto es mantener las reglas muy claras, escu-char, explicar las razones y tratar de ser justo en el momento de corregir una conducta.