4 Páginas de Información AmbientalNº 22Enero 2006

Hoy en día, de cada tres hectáreas de suelo riojano, una está ocupada por bosques; hace pocomás de treinta años, en cambio, el monte arbolado apenas dominaba una quinta parte de lasuperficie regional. El último de los Inventarios Forestales Nacionales, que recoge el período1997-2006, ha puesto de manifiesto cómo los bosques riojanos van recuperando terreno conmás prisa que pausa. La gestión forestal que se viene practicando en los últimos tiempos,unida al descenso de la presión agrícola y ganadera, sobre todo en la sierra, está haciendoposible que nuestra región tenga más bosques, que los bosques tengan más árboles, y que losárboles sean cada vez de mayor tamaño.

Hoy en día, de cada tres hectáreas de suelo riojano, una está ocupada por bosques; hace pocomás de treinta años, en cambio, el monte arbolado apenas dominaba una quinta parte de lasuperficie regional. El último de los Inventarios Forestales Nacionales, que recoge el período1997-2006, ha puesto de manifiesto cómo los bosques riojanos van recuperando terreno conmás prisa que pausa. La gestión forestal que se viene practicando en los últimos tiempos,unida al descenso de la presión agrícola y ganadera, sobre todo en la sierra, está haciendoposible que nuestra región tenga más bosques, que los bosques tengan más árboles, y que losárboles sean cada vez de mayor tamaño.

reconquistanreconquistan La RiojaLa RiojaLos bosquesLos bosques

Los datos del IIIInventario ForestalNacional revelan que lasformaciones arboladasocupan ya un tercio dela superficie riojana

Los datos del IIIInventario ForestalNacional revelan que lasformaciones arboladasocupan ya un tercio dela superficie riojana

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uántas veces hemos oído a nuestrosmayores rememorar cómo ha cambiadoel paisaje; cómo donde había un bosquede ribera, ahora han tomado protagonismotodo tipo de cultivos que aprovechan losfértiles suelos de vega; o al revés, cómoterrenos deforestados por la acción de lospastos o el fuego se han convertido denuevo en bosques con ayuda de lasrepoblaciones forestales.Tan sólo un par de generaciones bas-

tan para que nos demos cuenta de quelos bosques cambian con nosotros, omejor aún, que se transforman “por”nosotros. El hombre está directa oindirectamente en el origen de la ma-yoría de los paisajes actuales de España.De hecho, el ser humano ha contribuidoa perfilar la fisonomía de nuestrosmontes arbolados, y los efectos eco-lógicos que provoca la acción del hom-bre son responsables de buena partede las características que estos montestienen en la actualidad.Por eso, conocer cómo evolucionan los

bosques, cuál es su extensión, su com-posición, su salud, es de gran importanciapara comprender una parte de nuestrahistoria y sobre todo, nos puede dar laspistas para poder llevar a cabo una gestiónde los montes que permita aprovechartodas sus potencialidades y, al mismotiempo, garantizar su conservación decara al futuro.Precisamente, este deseo y esta necesidad

de conocer a fondo nuestros montesmotivó la realización de un exhaustivoestudio que lleva por nombre InventarioForestal Nacional (IFN). Han pasado algomás de treinta años desde que comenzóla elaboración del primero de estosInventarios, nacido para cubrir el escasoconocimiento estadístico que se tenía has-ta entonces de este sector. Aunque conciertas deficiencias, su aparición contribuyóa clarificar la realidad del espacio forestalen España y dio las primeras cifrasrelativamente fiables de la superficieocupada por nuestros montes. Esta obra,que fue todo un acontecimiento para suépoca, abarcó el período 1966-1975.La situación política que se vivió en 1975

y en los años siguientes retrasó la apariciónde un segundo inventario, pero ya entradoslos ochenta se pudieron reanudar lostrabajos. La experiencia del anteriorinventario, las nuevas utilidades de losmontes surgidas por el desarrolloeconómico de la época, y los adelantos

técnicos e informáticos propiciaron larealización de un segundo inventario(1986-1996) de estructura y característicasdiferente al anterior y superior en todoslos sentidos.

Pero el tiempo sigue pasando, y amediados de los noventa la percepciónque se tiene de los montes, recogidaademás en multitud de normas, estrategiasy cumbres nacionales e internacionales,ya no se parece ni de lejos a la que habíacuando se diseñó el segundo InventarioForestal. El ámbito forestal se concibecomo fuente de bienes y serviciostradicionalmente forestales, como lamadera y sus derivados, pero tambiéncomo fuente de agua, alimentos, empleo,medicinas, forrajes, combustibles,esparcimiento, hábitats, almacenes decarbono, diversidad biológica, proteccióndel ambiente, paisaje, etc... Por eso, elinventario forestal de principios de sigloXXI busca precisamente evaluar losparámetros de los recursos forestales quesatisfacen antiguas necesidades, perotambién otros muchos que danrespuesta a las demandas actualesy de las generaciones venideras.Así pues, el III Inventario Forestal,

el último hasta la fecha, ofrece elpanorama del sector forestal riojano entre los años 1997 y 2006. Partede los datos obtenidos en estetrabajo, los más importantes, hansido recogidos recientemente porel Ministerio de Medio Ambienteen una publicación editada en

formato libro y también en soporte infor-mático. El estudio viene a confirmar loque ya apuntó el inventario de la pasadadécada y que quienes contemplan oconocen, por uno u otro motivo, el medionatural riojano pueden comprobar cadadía: que nuestra masa forestal se encuentraen uno de los mejores momentos de losúltimos años.

Mas de 160.000 ha de bosqueEn la actualidad, 301.476 hectáreas de lasuperficie regional son de uso forestal,del total de las algo más de 504.000hectáreas que conforman la ComunidadAutónoma de La Rioja. Al hablar desuperficie forestal se hace referencia alsuelo ocupado por especies vegetales,además de las plantaciones artificales deespecies forestales arbóreas. No se tieneen cuenta, por tanto, el suelo de usoagrícola, así como las formaciones arbóreasde los jardines urbanos.De estas algo más de 300.000 hectáreas

destinadas a uso forestal, 169.552 hectáreascorresponde a formaciones arboladas(incluido matorral con arbolado ralo ydisperso), lo que significa que actualmenteun tercio de la superficie regional estácubierta de árboles.Echando la vista atrás, estas cifras revelan

que pese a ser, a priori, una regiónpredominantemente agraria, en los últimoscuarenta años la superficie arbolada de LaRioja ha ido ganando terreno de manera

Los bosques reconquistan La Rioja

5Páginas de Información Ambiental Nº 22Enero 2006

Los inventariosforestales se realizan

cada 10-12 añosy tienen como unidadde trabajo la provincia

SUPERFICIE SEGÚN USOS DEL SUELO (HA)

Uso agrícolaUso elementos artificialesUso agua y humedalesUso forestal

· Bosques· Matorral con arbolado ralo y disperso· Monte desarbolado· Infraestructuras forestales

TOTAL SUPERFICIE RIOJA

192.452,438.200,112.398,90

301.475,47163.205,69

6.345,83130.475,51

1.448,44

504.526,91

COMPARACIÓN DE LOS INVENTARIOS FORESTALES IFN2-IFN3(Selección de los datos más importantes de La Rioja)

Año delinventario

1999/00(IFN3)

1988(IFN2)

Total montearbolado

169.552(incluyendo matorral conarbolado ralo y disperso)

128.917(sin incluir matorral conarbolado ralo y disperso)

Montedesarboladoe infraestructuras

131.924

165.487

Total de usoforestal

301.476

294.404

Total de usono forestal

203.051

210.123

Totalregional

504.527

504.527

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Fuente: III Inventario Forestal Nacional.

Fuente: III Inventario Forestal Nacional.

constante. Si comparamos los datos delSegundo Inventario Forestal Nacional,elaborado en 1988, con este últimoinventario se constata cómo, en La Rioja,los bosques han pasado de representarpoco más del 25 por ciento de la super-ficie regional (casi 129.000 ha) a ocuparel 33 por ciento de las tierras riojanas.En total, unas 33.000 hectáreas más demonte arbolado que en la década an-teriormente inventariada (sin incluirmatorral con arbolado ralo y disperso),procedentes sobre todo de repoblacionesy colonización natural. El incrementotodavía es mucho más espectacular si secompara con el primero de los inventariosforestales, el del 69, donde secontabilizaron 92.600 hectáreas de masasarbóreas.Las cifras que arrojan nuestros bosques

invitan por tanto al optimismo, aunquela comparación de datos entre inventarios,para ser completamente rigurosa, precisatambién alguna explicación. Este últimoInventario Forestal, el tercero, no haseguido con exactitud los mismosparámetros cuantitativos que el segundoinventario, y en algunas especies comoel matorral con arbolado ralo o dispersoel criterio difiere. El Inventario ForestalNacional tiene para toda España unmétodo y unas normas comunes de

clasificación de los espacios según sususos; esto produce que, al ser el país muydiverso, en algunas zonas dicha clasi-ficación no se ajusta totalmente a las con-diciones locales.Un ejemplo de estos pequeños

“desajustes” lo tenemos en La Rioja. Laclasificación nacional considera como'monte arbolado' algunas formacionesque los forestales riojanos considerancomo matorrales de elevado porte, casode bujedos, espinares o enebrales. Estecambio de criterio hace que algunashectáreas pasen de monte arbolado,según el Inventario nacional, a desarboladosegún el criterio autonómico.

Más y también mejorAdemás de tener unos bosques no-

tablemente más amplios que hace pocomás de una década, su calidad tambiénha mejorado. El Tercer Inventario Forestalsaca a la luz unos bosques más pobladosy de composición más rica y variada, yaque junto a la mejora de las especiesdominantes como encinas, hayas, roblesy pinos silvestres, este aumento desuperficie y de árboles está beneficiandotambién a otras que los acompañan comoes el caso de arces, acebos, serbales ofresnos, potenciando así la biodiversidadde nuestra Comunidad Autónoma.

El aspecto y la composición que pre-sentan actualmente nuestros bosques es,una vez más, el que la propia acción delhombre ha ido configurando. Los bos-ques de montaña dominan claramentesobre las reducidas formaciones de llanura,ya que esta se encuentra intensamentecultivada. Las masas que mayor superficieocupan son los rebollares de Quercuspyrenaica, los pinares de pino silvestrey los hayedos. Entre las tres suponen algomás de la mitad de superficie del terrenoarbolado. Encinares y quejigares apenassobrepasan el 20 por ciento, lo que apuntaa la enorme disminución que hanexperimentado estas especies, antañolas principales especies forestales riojanas,y que ahora han reducido su presenciaa costa de ceder parte de sus tradicionalesterrenos a la agricultura.

En general, las especies frondosasautóctonas siguen siendo las indiscutiblesprotagonistas de nuestros bosques. Entre

todas suman cerca de 101.000hectáreas, el 61,7% de la su-perficie arbolada. Hayedos(Fagus sylvatica), robledales(Quercus pyrenaica) y enci-nares (Quercus ilex) son losbosques que más presenciatienen en suelo riojano. Enel grupo de las coníferas, elpino silvestre (Pinus sylvestris)es la especie dominante, ocu-pando cerca de 23.000 hectá-reas, prácticamente la mitadde la superficie de coníferas.De hecho la superficie depino silvestre se ha incre-mentado un 23% en el tiem-po transcurrido entre ambosinventarios, básicamente co-mo consecuencia de las repo-blaciones y, en menor medi-da, por la colonización na-tural de zonas de matorral.Junto a este aumento de

superficie boscosa, losbosques riojanos tienen ma-yor número de pies (más

Los bosques reconquistan La Rioja

6 Páginas de Información AmbientalNº 22Enero 2006

Las especies frondosasautóctonas cubren másdel 61% de la superficie

boscosa de La Rioja

En La Rioja, los bosques ocupan en la actualidad cerca de 170.000 hectáreas.

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árboles) y de mayor tamaño. Todo estose traduce en una mayor biomasa ennuestros montes. En total los bosquesriojanos tienen más de 240 millones depies. Casi la mitad de estos ejemplares(117.000) son pies mayores cuyo diámetrosupera los 18 cm. Resulta ademássignificativo que la proporción de piesmayores haya crecido de forma notable,pasando de ser un 42% del total de árbolesen el segundo Inventario Forestal, arepresentar casi un 49% en el actualinventario. Este incremento en el tamañode los árboles que pueblan nuestrosbosques refleja que los bosques riojanosson cada vez más maduros, lo que lesconfiere un valor adicional desde el puntode vista ecológico: proporcionan mássombra, producen más humedad, sujetanmejor la tierra, absorben mayor cantidadde CO2 y tienen mayor capacidad paraalbergar fauna.

Gestión públicaUna de las principales razones del buen

momento por el que atraviesan las masasforestales de La Rioja reside en unapeculiaridad de nuestra región que siguepotenciándose hoy en día, y es la elevadaproporción de superficie arbolada que

Páginas de Información Ambiental Nº 22Enero 2006

Los bosques reconquistan La RiojaLos bosques reconquistan La Rioja

SUPERFICIE FORESTAL RIOJANASEGÚN RÉGIMEN DE PROPIEDAD (HA)

Montes públicos catalogadosde Utilidad Pública

· Montes de entidades locales· Montes compartidos

de entidades localesy de la Comunidad Autónoma

· Montes de la Comunidad Autónoma

Montes públicos no catalogadosde Utilidad Pública

· Montes de entidades locales- Montes consorciados

o conveniados- Montes no consorciados

conveniados· Montes de la Comunidad Autónoma

Montes privados· Montes consorciados

o conveniados· Montes no consorciados

ni conveniados

TOTAL FORESTAL

187.406,68

165.853,616.244,62

15.308,45

12.388,61

11.448,653.206,67

8.241,98

939,96101.680,18

403,09

101.277,09

301.475,47

SUPERFICIE FORESTAL ARBOLADA (BOSQUES)SEGÚN FORMACIÓN FORESTAL DOMINANTE (HA)

Frondosas· Hayedo (Fagus sylvatica)· Rebollar (Quercus pyrenaica)· Quejigar (Quercus faginea)· Encinar (Quercus ilex)· Encinar (Quercus ilex)

mezclado con robles(Quercus) y espinos (Crataegus)

· Choperas de plantación(Populus sp)

· Bosques de riberaConíferas

· Pinar de pino silvestre (Pinussilvestris)

· Mezcla de pinares· Pinar de pino laricio (Pinus nigra)· Abeto de Douglas

(Pseudotsuga menziesii)

Mezcla de frondosas y coníferas

TOTAL BOSQUES

TOTAL BOSQUES

100.906,0024.600,1128.951,008.653,26

15.018,0414.497,99

5.089,51

4.069,0947.777,1822.913,65

13.205,669.483,602.174,27

14.552,52

163.502,70(sin incluir

monte con arboladoralo, matorral)

169.552(incluyendo montecon arbolado ralo)

7Fuente: III Inventario Forestal Nacional. Fuente: III Inventario Forestal Nacional.

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gestiona directamente la Ad-ministración autonómica. Deltotal de la superficie forestal,prácticamente 200.000 hec-táreas son públicas, la mayoríaintegradas además en elCatálogo de Montes de Uti-lidad Pública, frente a las101.680 hectáreas que seencuentran en manos priva-das, la mayoría de las cualesse encuentran además de-forestadas. Así, con más deun 60% de montes de UtilidadPublica, La Rioja se encuentradesde hace años a la cabezade las Comunidades Au-tónomas en porcentaje demontes controlados y gestio-nados directamente por laadministración.Esta situación potencia la

conservación del medio na-tural ya que la declaración deUtilidad Pública garantiza laadecuada protección de losmontes y permite a sus pro-pietarios acogerse a los beneficios de laLey de Protección y Desarrollo del Pa-trimonio forestal de La Rioja. En estatendencia del gobierno regional aincrementar el patrimonio forestal pú-blico, se encuentra, por tanto, la clave deque nuestros montes hayan mejoradotanto en calidad como en cantidad, alprevalecer en todo momento los criteriosde conservación de la biodiversidad y losvalores culturales y educativos sobre loscriterios estrictamente productivos.Finalmente, un análisis del estado de los

bosques no puede dejar de lado las

repoblaciones. Y es que el hombre,modificador del paisaje, también estácontribuyendo a su recuperación. Dehecho, las repoblaciones forestales hanpermitido incrementar para el bosquealgo más de la cuarta parte de la superficiearbolada. La superficie que ahora ocupanlos pinares de pino silvestre, por ejemplo,se corresponde sobre todo a terrenos quequedaron poco productivos por el usopecuario y que se han intentado convertirnuevamente en bosque. Igualmente, lasmasas de pino laricio y pino carrasco tam-bién corresponden en su práctica totalidad

a los trabajos de reforestacióniniciados a mediados

del siglo XX.

En general, según datos delúltimo Inventario el 40% de lasuperficie arbolada riojanacorresponde a masas repobladas,lo que ha supuesto un cambiosignificativo en el paisaje forestaly permite recordar la importan-cia porcentual que tuvieron losrasos en los montes públicos.

Las repoblaciones han con-tribuido a la expansión de lamasas arbóreas, igual que loha hecho el desuso de laquema de árboles para elaborar

carbón vegetal o cisco, la disminuciónde las cortas para leñas y, cómo no, lanaturaleza colonizadora de especiescomo el roble, la encina o el haya, queha favorecido su expansión. Pero contodo, la principal causa de larecuperación de nuestros bosques estáen el éxodo poblacional que ha tenidolugar en el medio rural de la sierra, queha traido consigo el abandono decultivos, de pastos creados a costa delbosque, y también el fin de las cortasmasivas para la obtención de leñas.Sea como fuere, lo importante es que

nuestros bosques gozan de buena saludy eso, aunque a menudo lo olvidemos,es una buena noticia para todos.

Páginas de Información AmbientalNº 22Enero 20068

EVOLUCIÓN DE LA SUPERFICIE (EN HA),DE LA BIOMASA ARBÓREA (EN MILLONES DE M3)Y DEL NÚMERO DE PIES (EN MILLONES DE PIES)

Especie

Todas las especies

Pinus sylvestris

Fagus sylvatica

Quercus pyrenaica

Quercus ilex

Populus nigra yPopulus x canadiensis

Tipo de piesSuperficieBiomasaPies mayoresPies menoresSuperficieBiomasaPies mayoresPies menoresSuperficieBiomasaPies mayoresPies menoresSuperficieBiomasaPies mayoresPies menoresSuperficieBiomasaPies mayoresPies menoresSuperficieBiomasaPies mayoresPies menores

IFN2128.917

9,56985,416

116,47223.2992,458

17,5657,714

23.0263,164

14,55319,87727.9741,912

26,95638,77213.8100,3568,050

25,0936.7260,7942,0480,794

IFN3169.55215,516

117,714124,16628.6704,510

22,0384,539

27.7514,475

19,87720,12434.1782,536

30,87525,64026.0340,735

15,54136,3936.3580,7071,9440,707

Cerca de la mitadde nuestros

árboles son piesmayores,

lo que evidenciala madurez

de los bosquesriojanos

Fuente: III Inventario Forestal Nacional.

Los bosques reconquistan La Rioja

Páginas de Información Ambiental Nº 22Enero 2006 9

El Inventario Forestal Nacional revela quésuperficie ocupan las formaciones arbóreasen nuestro país, cuántos árboles tenemos,de qué especies, cuál es su edad… Peroesta fotografía de los bosques españolesdeja ver mucho más: aspectos relacionadoscon la sanidad forestal, el fuego y la erosión;con los aprovechamientos forestales y laselvicultura; con los regímenes de pro-tección, propiedad y gestión de los montes;con la biodiversidad que albergan losterrenos forestales, y también con el valorde los bienes y servicios que estos terrenosproporcionan a la sociedad.

¿Cómo se consigue realizar un trabajo desemejante magnitud?. Básicamente, elinventario forestal se concibe como unagran base de datos para cuya elaboraciónse precisa la participación de diversasfuentes de información, tanto de carácterexterno como la propia información delInventario. La información externa sondatos sobre los montes que suministran lasComunidades Autónomas, organismospúblicos, etc; esta información secomplementa con la información propia delinventario, que procede de los datosrecogidos en los trabajos de campo.de campo para hacer un Inventario Forestalse realiza, en una primera fase, medianteel estudio de fotografías aéreas de la zona.Estas imágenes permiten conocer quéextensión ocupan los bosques, cuál es laespecie dominante, si existen mezclas, cómoes su estado general, así como otra seriee datos más complejos que, más tarde, se verán completadoscon la información que se recoja en los propios montes.

Más de 18.000 horas a pie de monte18.472 horas. Ese fue, nada menos, el tiempo invertido en

los trabajos de campo para inventariar los bosques riojanos.A lo largo de este tiempo se reconocieron y estudiaron, se"apearon" como se dice en el argot técnico, un total de 1.346parcelas, una por cada 126 hectáreas arboladas.

La recogida de los numerosos e intrincados datos que reúneun inventario forestal requiere un personal especializado, unosaparatos de medición y registro muy complejos, y un manualde instrucciones extenso y minucioso que debe seguirse al piede la letra, para conseguir datos homogéneos y comparablesen las distintas regiones del país. Así, un total de cinco cuadrillasde campo, constituidas cada una por un jefe de equipoespecialista y dos ayudantes, bajo la dirección de un ingenierotécnico y un ingeniero de montes, recorrieron La Rioja durante

varias semanas entre los años 1999 y 2000, recogiendo losdatos que han servido de base para obtener la "radiografía" delos bosques de nuestra región. El año 2000 se llevó a cabo laactualización de la cartografía, y desde entonces hasta 2002se procesaron los datos. Para comprender la magnitud de untrabajo de este tipo, basta conocer que la elaboración delInventario correspondiente a La Rioja ha contado con presupuestocercano a los 700.000 euros.

El resultado es un trabajo importante, necesario, útil,demandado, costoso y esmerado que proporciona a España, acada una de sus Comunidades Autónomas, y también a la UniónEuropea la información indispensable para conocer la evoluciónde sus sistemas boscosos, divulgar sus beneficios, comprendersu funcionamiento, tomar decisiones en materia de políticamedioambiental, elaborar una legislación que ayude a tenercada vez más y mejores montes, y actuar con racionalidad paraalcanzar un óptimo desarrollo y una gestión sostenible de losecosistemas forestales españoles.

Con un 60% de Monte de Utilidad Pública, La Rioja es la región con mayor proporción de montesgestionadas por la administración.

¿Cómo se estudian los bosques?

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10 Páginas de Información AmbientalNº 22Enero 2006

El pino albar o pino silvestre (Pinus sylvestris) es la especie máscaracterística de los pinares de la alta montaña riojana. En la actualidadocupa alrededor de 23.000 hectáreas. Las masas espontáneas se localizanen las sierras de Urbión y de los Cameros, en las cuencas altas de los ríosNajerilla e Iregua. Esta formación puede desarrollarse a una cota altitudinalmuy variable, pero es más frecuente a partir de los 1.400 m.

Este pino fue una especie casi erradicada de las sierras riojanas por laacción repetida del fuego seguida de un pastoreo intensivo que eliminabalo que se iba regenerando. Durante el siglo XX los pinares espontáneoshan experimentado una importante recuperación debido a la regeneraciónnatural de la especie a partir de los escasos rodales espontáneos quequedaban en La Rioja y de las extensas masas sorianas y burgalesas.

Merece destacarse, por su singularidad en el territorio riojano, el pequeñoenclave de pino negro (Pinus uncinata) de la zona del Castillo de Vinuesa,ya que dista unos 180 km de las poblaciones pirenaicas más cercanas.

Los bosques reconquistan La Rioja

Los hayedos riojanos ocupan unas 24.000 hectáreas, pero además el haya aparece diseminada en otras comunidades forestales yse encuentra en proceso de expansión. Tradicionalmente, de los hayedos se extraía madera, leña y carbón; hoy en día, la prácticadesaparición de este tipo de aprovechamientos ha contribuido a la recuperación de los montes. Además, la capacidad del haya deregenerarse bajo condiciones de sombra le permite la colonización de pinares y robledales. Pero no sólo los montes arbolados estánsiendo colonizados por el haya; también brezales, bujedas, escobonales y hasta terrenos abiertos constituyen buenos nichos deregeneración para la especie.

Los hayedos aparecen entre los 900 y los 1.800 m. En la Rioja, las mejores y más extensas masas de hayedo se localizan en lassierras occidentales, la Demanda y San Lorenzo, principalmente en la cuenca alta del Oja y en la media del Najerilla, zonas donde esla especie dominante.

Aunque el territorio propicio para su desarrollo es el más extenso de la región, en la actualidad los encinares apenas superan el 10%de la superficie forestal, ya que estas tierras están dedicadas al cultivo. La amplitud de condiciones ecológicas que tolera permite a laencina mezclarse con casi todas las especies arbóreas riojanas: pinos silvestres, hayas, rebollos y quejigos. Al igual que en los rebollaresy quejigares, el aprovechamiento de leñas y carbón ha reducido al encinar a monte bajo, siendo el monte adehesado menos frecuente.

En La Rioja aparecen las dos subespecies de reconocidas en la Península: Quercus ilex ilex y Quercus rotundifolia. La primera selocaliza en los encinares montanos del norte de la región, Montes Obarenes y Sierra de Toloño. En el resto de la región la encinaque aparece es la subespecie continental.

El roble negral (Quercus petraea) forma pequeños rodales en las cabeceras de los valles del Oja, en la del Najerilla y, en menormedida, en la del Iregua. La acción humana es responsable de la disminución de la presencia de roble albar en los bosques de hojacaduca riojanos, entre otras cosas porque su madera es muy apreciada por la construcción. Hayas y rebollos, con los que habitualmenteaparece mezclado, poseen mayor capacidad para soportar cortas periódicas, fructificar con frecuencia y recolonizar espacios deforestados,por lo que han desplazado al roble negral.

En los valles de las sierras occidentales aparecen bosques mixtos de gran complejidad y diversidad de especies arbóreas, sobre todoárboles de ribera como fresnos, sauces o chopos, junto a los árboles de los bosques con que contactan, principalmente hayas y robles.Normalmente ocupan pequeñas extensiones de terreno en barrancos abrigados o fondos de arroyos.

Encinares

Bosques mixtos de frondosas

Pinares de montaña

Hayedos

denuestrosmontes

árbolesLos

denuestrosmontes

árbolesLos

Los bosques de ribera riojanos son en laactualidad comunidades fragmentadas y muydiscontinuas a lo largo de los cursos de agua.La utilización de las riberas ha afectado desi-gualmente a sus bosques: las comunidades quese desarrollan más próximas al cauce son lasmejor conservadas, mientras que los bosquesmás alterados son los que se desarrollan en laszonas de menor riesgo de inundación, como esel caso de las olmedas.

El álamo negro (Populus nigra), el álamo blanco(Pópulus alba) y el sauce blanco (Salix alba)son las especies más frecuentes en la mayorparte de las riberas riojanas, cuyos bosques sonun buen ejemplo de la diversidad de la región.En los bosques de ribera de montaña de la mitadoccidental es posible encontrar sauces montanosy fresnos, acompañados de otras especies comoálamo temblón, abedul, avellano, olmo de mon-taña, serbales, cerezos silvestres, arces, fresnosy tilos. Los bosques de los tramos medios ybajos de los ríos occidentales se caracterizanpor la presencia de alisos junto a fresnos dehoja estrecha, álamos negros y olmos.

Por su parte, en los bosques de ribera de lamitad oriental, Rioja baja y cuencas del Linares,Cidacos y Alhama, de clima más árido y suelosricos en bases, la especie dominante es el álamoblanco y el tamariz.

Páginas de Información Ambiental Nº 22Enero 2006 11

Los bosques reconquistan La Rioja

Los quejigares puros cubren algo más de 7.000 hectáreas,sobre todo en los valles medios del Iregua y Leza. Pese aser una cifra sensiblemente inferior a la de hayas y rebollos,la especie se encuentra repartida por los terrenos calizosde todo el territorio riojano acompañando a otras especiesarbóreas. Al igual que en el rebollo, la obtención de leñay carbón ha sido el principal aprovechamiento, y la cortaa matarrasa fue la gestión más frecuente por lo que lamayoría de quejigares son montes bajos formados porjóvenes fustes procedentes del rebrote de viejas cepas.

Son la formación forestal más extendida de la región ycubren algo más de 27.000 hectáreas, una extensión similara la de los hayedos. Su capacidad de regeneración vegetativaa partir de cepas y raíces ha hecho posible una rápidarecuperación del rebollo tras el cese de la explotacióntradicional a la que ha estado sometido (leñas y carbón).

Los rebollares (Quercus pyrenaica) más extensos aparecenen las cuencas del Najerilla y del Iregua, donde la especieencuentra su mejor hábitat: clima de montaña y abundanciade sustratos silíceos.

Rebollares

Otras formacionesOtras comunidades forestales como abedulares, acebedas

o tejedas, pese a no ser muy numerosas, resultan singularesen los paisajes riojanos.

El abedul aparece disperso en los bosques de hoja caducay pinares de montaña del sector sudoccidental. Las acebedasriojanas se encuentran en las montañas occidentales delsistema ibérico en las sierras de La Demanda, Urbión yCameros. Las tejedas, por su parte, resultan de especialinterés por su singularidad, pese a ser poco extensos. Rodalesdominantes de tejo se dan puntualmente en la Sierra de laDemanda, por encima de los 1.300 m de altitud y conorientación norte y noroeste. En los Obarenes y la Sierra deToloño el tejo ocupa escarpes de falla y pedregales al pie decantiles donde se acumula la humedad; en el resto de sierrasdel sur de la región, Urbión, Cebollera y Cameros es frecuentela presencia puntual de pies de la especie, principalmenteen umbrías y barrancos húmedos.

Quejigares

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Bosques de ribera