El Saber Científico según Piaget (1970) está constituido por tres ramas siendo la primera la lógica que estudia las condiciones formales de la verdad, seguida de la metodología que se encarga de los métodos, etapas y técnicas conexas del proceso general del conocimiento científico, y por último la epistemología que es una teoría o filosofía que profundiza hacia la reflexión crítica sobre la investigación científica y su resultado.

La epistemología al ser la ciencia de la ciencia se clasifica en tres categorías:

1.- Epistemologías Metacientíficas.- parte de una reflexión hacia una teoría general, da validez solo al conocimiento científico al que da preponderancia sobre cualquier otro tipo de conocimiento.

2.- Epistemologías Paracientíficas.- se afirma en una crítica restrictiva de la ciencia, sin el uso de la reflexión fundamenta un nuevo conocimiento de diferente forma, menos objetivo y más simbólico, que va de lo físico a lo psíquico pasando por lo vital.

3.- Epistemologías científicas.- permanecen dentro de una reflexión sobre la ciencia, su fundamento es la explicación del conocimiento científico, nace de los efectos de la evolución de las ciencias y permite revisar sus principios e instrumentos.

El trabajo de la Epistemología es validar a la ciencia como tal, distinguiéndose de la metafísica y la seudociencia. Según Lenk (1988) la epistemología debe abordar los siguientes aspectos:

1.- La lógica de la ciencia2.- La semántica de la ciencia 3.- La ontología de la ciencia4.- La axiología de la ciencia5.- Los criterios de los valores estéticos de la investigación científica6.- Los intereses que mueven la ciencia.

Se concuerda que al ser la epistemología la voz a la reflexión sobre la ciencia en general y en torno a cada disciplina en particular, debe existir un argumento racional que asociado con la actitud científica la demanda del conocimiento científico será un baluarte personal como formación profesional. Esta capacidad epistemológica no debe ser solo el arma de defensa del estudiante si no su fortaleza y compañía.

Daniel Ochoa