El Morbito no.2: El amor

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¿El amor es como la hiel? Agregue dos cucharaditas de miel pág. 15 www.elmorbito.com Publicación mensual ¡Llévate increíbles regalos! pág. 21 INGRATA! Yo ya no te creo nada pág. 4 Periódico para ojos curiosos • Año 1 • No. 2 • El amor • Mejor no lo leas Tú no sabes amar Eres una veleta pág. 8 Haciendo migas pág. 20 ¡Como lo vio en televisión! pág. 10 Advertencia: Los personajes, noticias y situaciones presentados son reales, cualquier parecido con la ficción es mera coincidencia. Yo te quiero Más que a mis ojos pág. 6

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Periodico para ojos curiosos. Es un periodico literario,profusamente ilustrado, dirigido al público infantil y juvenil, cuyo objetivo es poner al alcance de los jóvenes lectores material literario y gráfico de varios géneros y sobre todo de gran calidad.

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Page 1: El Morbito no.2: El amor

¿El amor es como la hiel? Agregue dos cucharaditas de miel pág. 15

www.elmorbito.com Publicación mensual

¡Llévate increíbles regalos!pág. 21

INGRATA!Yo ya no te creo nada pág. 4

Periódico para ojos curiosos • Año 1 • No. 2 • El amor • Mejor no lo leas

Tú no sabes amar Eres una veletapág. 8

Haciendomigaspág. 20

¡Como lo vio en televisión! pág. 10

Advertencia: Los personajes, noticias y situaciones presentados son reales, cualquier parecido con la ficción es mera coincidencia.

Yo te quieroMás que a mis ojospág. 6

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2 el morbito / México 2010www.elmorbito.com

Netáforas

EL MORBITO / Mejor no lo leas

Año 1 / No. 2 / El amor

Dirección General: Mario Rosales / [email protected]

Dirección Editorial: Abril Castillo / [email protected]

Dirección Creativa: Jorge Mendoza / [email protected]

Dirección de Comunicación: Anabel Prado / [email protected]

Coordinación de Producción: Lorena Peña / [email protected]

Comercialización: Eimar Rosales / [email protected]

Coordinación de Campo: Alejandro Molina

Arte y Diseño: Isabel Gómez / Poderoso Kamui / Flavia Zorrilla

Colaboradores: Abril Castillo / Alfredo Alcalá / Ana Paula Rosales

Anabel Prado / Ani Rani / Caldo de Pollo / Carlos Vélez / Chiquita

Milagro / David Nieto (Yosh) / Demian Marín / Diana Hernández

Fernando Rudy / Flavia Zorrilla / Gibrán Julián / Jorge López / Jorge

López / Jorge Mendoza / Juan Carlos Quezadas / Leyolo Carcamán /

Majo Ramírez / Manuel Monroy / Mario Rosales / Misstutsipop / Pixilon

Poderoso Kamui / Teobromina (Vida Rojo) / Teresa Martínez / Triveroquio

Consejo Editorial: Adriana de Teresa / Javier Sáez Castán / Juan

Carlos Quezadas / Mauricio Gómez Morín / Mónica B. Brozon

El Morbito, periódico mensual, julio de 2010. Editor responsable: Abril Castillo Cabrera. Número de Certi-ficado de Reserva otorgado por el Instituto Nacional del Derecho de Autor: 04-2010-011214355300-101.

Número de Certificado de Licitud de Título: 14707. Número de Certificado de Licitud

de Contenido: 12280. Domicilio de la Pu-blicación: Paseo de las Palmas no. 555,

1er piso, Lomas de Chapultepec, Miguel Hidalgo, C.P. 11000, México, D. F. Imprenta:

SPI. Mimosas no. 31, Santa María Insurgentes, C.P. 06430, México, D. F. Distribuidor, Intermex, Lucio Blanco no. 435, col. San Juan Tlihuaca, Azcapotzalco, C. P. 02400, México, D. F.

Que la fuerza este contigo“Sentirse amado da más fuerza que sentirse fuerte”

J. W. Goethe

“Retrato de J. W. Goethe”Ilustración: Anabel Prado

El amor no sólo es un sentimiento por el que las niñas suspiran a la menor provo-cación y por el que los niños vomitan tan sólo al escuchar la palabra.

Atrévete a descubrir de dónde viene esa es-pecie de calorcito interior cuando alguien te dice que te quiere y cómo funciona el corazón. Verás que el amor no siempre es miel sobre hojuelas, basta preguntarle al esposo de la mantis religiosa, a Marcia que ya no aguanta a su marido fiel o a Veleta, eterna enamorada de Tadeo. Sé testigo de cómo Sagitario prefiere creer en la amis-tad y Morbito huir a como dé lugar.

El amor está en el aire. Huye si puedes, pero si ya estás cerca, pon atención y ten cuidado, no vaya siendo que tú seas la si-guiente víctima...

No es un malestar estomacal

El calorcito interiorAunque todos queremos ser felices, la felicidad no significa lo mismo para todos. Para algunos, por ejemplo, equivale a tener mucho dinero y por eso se dedican a los negocios.

Texto: Fernando RudyIlustración: Teresa Martínez

Para otros, es conocer los secretos de la naturaleza, por lo que pasan su vida con-sagrados a la ciencia. Para una tercera clase de personas, no existe mayor regoci-jo que crear obras hermosas que hagan el mundo un lugar más bello. Aun hay otros para quienes felicidad significa descubrir lugares inexplorados o exóticos.

Pero sea cual sea el tipo de felicidad que le acomode a cada uno (y tú deberás des-cubrir cuál es el tuyo), hay algo que todos tenemos en común: la certeza de que sólo podemos ser felices cuando hay alguien con quien compartir esa felicidad.

Para el hombre más rico del mundo sus incontables billetes se convertirían en pa-pel sin valor si no tiene a nadie con quien disfrutar; el descubrimiento más asom-broso no tendría el mismo sabor para un científico solo en su laboratorio; la más hermosa canción no estaría completa has-ta que no haya alguien para escucharla… ¡O imagínate al explorador que llega por su cuenta a la cima del Everest y, una vez ahí, anhela compartir lo limpio que es el aire allá arriba!

Una vez un muchacho, llamado Christo-pher McCandless, decidió probar cómo sería vivir alejado de todos. Se fue a Alaska sin más compañía que una mo-chila, libros y su diario. Lo último que alcanzó a escribir, rodeado de los pai-sajes más bellos que puedas imaginarte, fue: “La felicidad sólo es real cuando es compartida”.

¡Piensa cómo sería la vida sin alguien que te consuele cuando estás triste o que se ría contigo cuando estás feliz! Hay multi-tud de cosas valiosas en el mundo, pero nada es más valioso que el amor que puedes dar o recibir.

Saber que tú haces feliz a alguien es la máxima felicidad; sentirte feliz cuando estás junto a alguien es amarlo. Y aun-que esto parezca un trabalenguas, en realidad es muy fácil: si alguien te hace sentir un calorcito interior cuando está junto a ti, ¡no lo dejes ir! Pégate a él o ella, pues de seguro por ahí ronda la felicidad.

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asegurarse de mantenerlos en eterna dis-tancia, rasgó el firmamento, creando así la Vía Láctea.

Sin embargo, compadecida por el sufri-miento de los Enamorados Celestiales, les otorgó la dicha de encontrarse una noche al año. En esta ocasión única, se abre un puente que cruza la Vía Láctea. Niulang lo atraviesa, sorteando toda clase de peli-gros, para ver a Zhinu.

Esto ocurre en la noche del séptimo día del séptimo mes lunar, y dicen que si llueve en la ocasión, significa que los amantes están llorando por no haberse podido encontrar ese año.

Netáforas

En China, el día del amor no es el mismo que nosotros conocemos. Su nombre en chino es Qi xi, que significa “La noche de los sietes”, y se celebra el día séptimo del séptimo mes lunar.

Texto: Demian MarínIlustración: Little Alice

Texto: Ani RaniIlustraciones: Mario Rosales

Estaban tres insectos sentados en las hojas de una jardinera, cuando se acerca un macho de mantis religiosa y les dice:

—¡Llegó su hora!

De repente se escucha una voz desde una rama más arriba que interrumpe:

—Cariño... ¡llegó la tuya!

En este día, las muchachas rezan a los Enamorados Celestiales para encontrar el amor.

La leyenda cuenta que una vez un arrie-ro llamado Niulang se encontró con el hada Zhinu, quien estaba bañándose en un lago. Niulang le propone matrimonio a la bella hada y ésta acepta. Así vivieron felices mucho tiempo, y la gente se ma-ravillaba con el amor que se prodigaban. Pero, un día, la Diosa del Cielo se enteró del matrimonio y enojada bajó por Zhi-nu a la Tierra. La castigó por haberse ca-sado con un mortal, encerrándola en un lugar lejano en el cielo. Niulang, por su parte, fue enviado al otro extremo de la bóveda celeste. La Diosa del Cielo, para

¡Ay, amor!

Ya no me quieras tantoHay amores incondicionales,hay amores ciegos,hay amores sacrificados,hay amores que matan.

·La hembra de la mantis religiosa des-pués de copular se come la cabeza del macho.

·El macho ni siquiera se da cuenta, pues lo último que ve es el rostro de su amada. ¡Todo sea por nutrir a su descendencia!

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4 www.elmorbito.comel morbito / México 2010Paparazzi

Exclusiva con el marido fiel

En la kermesse de San Va-lentín, una pareja de estu-diantes de 9 y 10 años se unieron en sagrado matri-monio, según ficticias actas a la que esta reportera tuvo acceso.

Sus nombres: Marcia y Leopoldo. De acuerdo con la información, desde el ca-samiento, Leopoldo ha cumplido celosa-mente los votos: cargarle su mochila has-ta el salón, sentarse junto a ella y traerle dulces todos los días. Marcia clama que ya no lo soporta. He aquí la versión de este pobre enamorado.

¿Cómo conociste a Marcia?

Ella entró en este año escolar y de inme-diato supe que era la mujer de mi vida y por suerte ya se acercaba la kermesse.

¿Cómo pasaron de hacerse ojitos al ma-trimonio?

Era el paso natural a seguir. Llegué tempra-no a la escuela el día de la kermesse y en cuanto la vi llegar, pedí su mano a su papá. Él se sonrió y me dijo que sí, pero que cuál era mi fortuna (por suerte la kermesse fue en lunes y todavía traía todo mi domingo).

¿Y quién los casó?

Miss Chencha, en su calidad de juez. Fue una ceremonia muy bonita: asistieron todos nuestros amigos, y hasta el maldi-to de Rodrigo, que siempre había estado enamorado de Marcia. Por suerte no dijo nada cuando Miss Chencha preguntó si alguien se oponía.

Texto: Abril CastilloIlustración: Poderoso Kamui

¿Pero no era todo un juego?

¿Un juego? ¿Esta acta le parece falsa? (saca una hoja membretada de la escue-la en cuestión, donde se leen, escritos a mano, los nombres de los cónyuges y sus firmas) ¿Acaso no puede tocar este anillo en mi dedo? (muestra un anillo hecho de alambre bastante traqueteado).

Hablamos con su mujer y nos informó que ya están separados.

Si se refiere a que ya no nos sentamos juntos y que ya no me deja cargar sus co-sas, yo sólo pretendo darle el espacio que me pide. Después de todo, el matrimonio se trata de respetar la libertad del otro. Además, eso sí, los dulces que le llevo, bien que se los sigue comiendo.

Bueno, pero Marcia nos dice que ya so-licitó el divorcio...

Ah, eso. Pues sí, el otro día el mismo Rodri-go, que ahora se hace pasar por abogado de Marcia, me hizo llegar una hoja arran-cada de cuaderno —hágame el favor— con la firma de mi esposa, donde me pide el divorcio. Yo ya lo consulté con mis abogados —no me puedo quedar sin representación legal— y me dicen que estamos casados con todas las de la ley, y que la única forma de finiquitarlo es a través de la jueza que nos casó (Miss Chencha), pero hasta la próxima kermesse.

¿No le parece que es forzar de-masiado las cosas?

La ley es la ley. Además, a mí me suena que ese tal Rodri-go me está poniendo tra-bas, siempre la ha amado en secreto. Pero no. Su esposo soy yo y voy a lu-char por salvar nuestro matrimonio.

El entrevistado, enojado y triste, recogió sus do-cumentos, me dio la mano y salió, lim-piándose los mo-cos con la manga de su suéter.

El matrimonio es un juego de ninos

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www.elmorbito.com 5el morbito / México 2010 Pequeño ficcionario ilustrado

Efectos secundarios

Olores que enfermanMónica siempre está ha-blando del amor, de los ojos de Juan, de la boca de To-más... A veces parece que a Mónica le gustan todos los niños de la escuela, todos los que tienen nariz perfec-ta o sonrisa de anuncio de pasta de dientes.

A Nina le gusta escuchar a Mónica, pero no le interesa tener novio. “Me sudan las manos, quiero estar con él todo el día, sólo pienso en él”, “¡Qué horror!” piensa Nina, le da la impresión de que Mónica está enferma, fuera de sí. Definitivo: no le interesa que le suceda nada de eso, se mira en el pequeño espejo circular que Mónica guarda en su mochila y se ve las pecas que tiene sobre la nariz...

Hasta que un día, a la salida del cole-gio, Nina espera aburrida el sonido del claxon del carro de su mamá. Hace calor y tiene hambre, “otra vez salió tarde del trabajo... mi estómago me...” y tuvo que hacer una pausa, bueno, en realidad, el mundo entero hizo una pausa, porque un aroma intenso se coló por su nariz, debajo de sus pecas, y sólo quedaron en el universo un chico de cabello castaño y ella. Nunca había estado cerca de al-guien que oliera tan bien, y el mundo,

junto con su hambre, el calor y la espera, se desvanecieron. Lo que vino después fue muy rápido: el chico la miró, sonó un claxon, se oyó el grito de su madre que hizo volar a todas las aves de la periferia y ahí tienen a Nina frente a un plato de lentejas sin dar un solo bocado.

Desde aquel día todo se ha vuelto lento y Nina mira con más atención que nunca las pecas sobre su rostro. “¡Mamá, Nina está enamorada!”, grita cruelmente su hermana mayor, “¿Queeé!”, responde Nina azorada, la han descubierto, pero ¿cómo pudo ser? “¡Es broma babas, sal-te del baño!”. Uf, Nina vuelve a respirar. Van a hacer las compras, Nina está obse-sionada con ese aroma, todo su cuerpo se pone tenso, le sudan las manos. Está enferma, deliciosamente enferma. Va por los pasillos de los productos de belleza destapando todos los frascos, oliendo todos los champús; hasta que da con su aroma, un desodorante para hombre que huele igualito al chico del cabello casta-ño. Tiene que tenerlo. Se lo guarda en el bolsillo del saco, se imagina que la policía irá a sacarla de su casa por robar, pero nada le importa. Guarda su reliquia hasta la noche y cuando ya todas las luces se han apagado, metida en la cama, saca el frasquito. Quiere entender lo que le pasa, pero no puede. En su memoria, nubla-da por la intensidad de sus emociones, el rostro de un niño castaño se dibuja. No tiene nariz perfecta, ni ojos divinos... Pero a Nina le gusta y no puede dejar de pensar en él.

Todas los días, al salir de clases, lo busca con la mirada entre las mochilas, el calor y los carros. ¿Lo encontrará? Creo que sí. Mientras, en la oscuridad de su habitación y contra todos los pronósticos, Nina deja que el aroma viaje debajo de sus pecas...

Texto: Majo RamírezIlustración: Gibrán Bravo

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Estos hielos en forma de corazón (hasta con flecha de cupido) serán un toque muy original para enfriar tus bebidas y de paso harán que cualquiera se derrita.

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6 el morbito / México 2010www.elmorbito.com

Pequeño ficcionario ilustrado

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www.elmorbito.com 7el morbito / México 2010 Pequeño ficcionario ilustrado

Sabrina y Javier se conocie-ron en la sala de espera de un hospital. Ella, con cator-ce años y unos ojos verdes color grillo del Amazonas, leía una revista mientras es-peraba que su mamá saliera de un consultorio. Él, con quince y una arteria en el corazón a punto de estallar, había ido al hospital para afinar los últimos detalles de su inminente operación.

–Voy a morirme el viernes, ¿quieres ser mi novia? –lanzó Javier a quemarropa.

–Pero, ¿por qué? –preguntó Sabrina sor-prendida.

–Me instalarán un robot miniatura en el corazón para que controle mis latidos. Mi corazón es un tonto que no sabe lle-var el ritmo –respondió el joven mientras simulaba tocar con torpeza una batería inexistente.

–No te pregunté por qué te vas a morir, te pregunté por qué quieres que sea tu novia. No nos conocemos.

–Porque tienes los ojos más bonitos del mundo. Quiero que tu mirada sea la úl-tima cosa que yo vea. Además no debes preocuparte: hoy es lunes y te aseguro que nuestro noviazgo estará terminado a más tardar el sábado. Nadie se ha salva-do de una operación como la mía. Tengo una oportunidad contra un millón de se-guir viviendo.

Aunque a Sabrina le parecía muy ex-traño hacerse novia de alguien a quien apenas conocía, creyó que sería buen gesto concederle una última voluntad a un moribundo (además, hay que decirlo, el joven estaba muy guapo).

–Está bien, acepto ser tu novia, pero, ¿cómo te llamas?

–Soy Javier.

–Yo soy Sabrina –entonces la joven dudó un poco, aunque al final lanzó una pre-gunta porque la mataba la curiosidad–. ¿De verdad te instalarán un robot en el corazón?

Ojos verde botella

Enfrascado en tu mirada

Texto: Juan Carlos QuezadasIlustración: Mario Rosales

Los siguientes días Sabrina visitó a su nuevo novio en el hospital. Se la pasaban muy bien viendo películas o escuchando música (cada uno con un auricular en la oreja para no molestar a los demás enfer-mos). Hablaban de la vida y de la muerte y aunque tocaran temas tan complicados también tenían tiempo para reír.

Ella trataba de animarlo diciéndole que libraría la operación pero Javier, sin per-der la tranquilidad, le aseguraba que todo terminaría muy pronto.

El jueves en la noche se dieron un beso (el primero) y Sabrina se dio cuenta de que estaba locamente enamorada.

El viernes Sabrina llegó temprano al hos-pital. Le llevó a Javier un libro y una caja de chocolotes.

–Es para tu recuperación… por si acaso.

–No habrá recuperación, pero gracias –dijo el joven resignado. Después le pidió que se acercara para poder contemplar por úl-tima vez sus ojos. Sus maravillosos ojos. Verdes ventanitas hacia la eternidad.

Se dieron otro beso (el último) y después Javier le pidió a Sabrina que saliera de la habitación, que saliera de su vida. Enton-ces el joven cerró los ojos y no volvió a abrirlos…

…No volvió a abrirlos hasta el sábado cuan-do los doctores decidieron despertarlo. Lo primero que vio Javier fue la cara de su tía. Al principio pensó que efectivamente había muerto y que estaba en el infierno en presencia de un demonio menor. Poco a poco fue recobrando la conciencia y en-tonces se enteró de que había sobrevivido a la operación.

Uno en un millón.

Las posibilidades de morir aplastado por un piano son de veinte millones con-tra una. Sabrina fue esa una: el viernes, nada más salir del hospital, sus verdes ventanitas se cerraron para siempre…

…O casi: cuando salió del shock que la noticia le causó, Javier se enteró de que el cuerpo de Sabrina estaba en la morgue del hospital en espera de la autopsia. El joven no dudo ni un momento. Casi a rastras llegó al anfiteatro y aprovechan-do un descuido del encargado abrió la gaveta en la que se encontraba Sabrina (o lo que de ella quedaba, un piano enfu-recido puede resultar muy brusco) y en-tonces se topó con esa mirada que tanto le gustaba.

No lo pensó mucho y ayudado por un termómetro roto extrajo de sus cuencas los ojos del cadáver. Guardó las verdes (y redondas) ventanitas en un frasco con formol que algún forense había olvida-do, escondió su botín entre la bata que vestía y con gran esfuerzo regresó a su habitación.

Una semana después Javier abandonó el hospital.

Llevaba entre sus pertenencias una vida por delante, un libro que no leería jamás y un par de ojitos verdes que habrían de alumbrar su camino.

Eternamente.

Amén.

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el morbito / México 2010www.elmorbito.com8 Mitografías

La gente dice que, en cues-tiones de amor, uno debe se-guir los impulsos de su cora-zón. Espero que la desgracia del enamorado Tadeo y la ingrata Veleta sirva de escar-miento para todos aquellos que piensan estas cosas.

Adrián Tadeo tenía 11 años y vivía por los rumbos de Peralvillo. Todos lo conside-raban un niño ejemplar: respetaba a sus padres, cuidaba de su abuelita, hacía con esmero su tarea, iba a misa los domingos y jugaba maravillosamente al futbol. Era, además, un muchachito bien plantado, lo que quiere decir que era guapo.

Tadeo estudiaba en la primaria Mártires de Cupido. Sin duda, era el más popular del colegio: todos los niños querían ser amigos suyos y todas las niñas, sus no-vias. Tadeo, siempre prudente, repetía: “Amigos, todos los que quieran. Novias, hasta la universidad”. Pero el amor llega cuando uno menos lo espera. A Tadeo le llegó durante un frío mes de febrero y traído por la persona menos esperada: Ji-mena González, hija del director de Már-tires de Cupido, don Jimeno González.

Jimena entró a la escuela de su padre a mitad de año, nadie sabía bien por qué: unos decían que, por su belleza, el direc-tor la había mantenido encerrada en su casa durante once años; otros, que vivía con su madre en Suiza, pero que ella aca-baba de morir y Jimena había regresado a México; un tercer grupo aseguraba que era un niña tan chiqueada y caprichosa que en ninguna escuela la aguantaban y que por eso su padre había decidido te-nerla cerca y vigilarla él mismo.

Para respaldar sus ma-ledicencias, afirmaban (y era verdad) que todos la conocían con el sobrenom-bre de Veleta, pues cada día se dirigía por donde soplara el vien-tecillo de sus caprichos.

Sea como fuere, Tadeo cayó rendido desde el momento en que la vio. “Si me espero hasta la universidad”, se dijo, “seguro ya habrá conseguido esposo”. Así que puso manos a la obra.

Se acercó galantemente, le regaló una margarita que cortó del jardín de la es-cuela y, con voz melosa, se presentó. Pero Veleta no se inmutó: sin voltearlo a ver, tomó la margarita y se fue contoneándo-se. La misma escena se repitió una y otra vez en los días siguientes.

Texto: Fernando RudyIlustración: Abril Castillo

La verdadera historia de Tadeo y Veleta

Fria como el viento

* 535 a. C. La liebre y la tortu-ga tenían los mismos gustos y se llevaban bien, pero la liebre no soportaba que a la tortuga le llevara tanto tiempo alistarse para salir.

1597 Romeo y Julieta eran el uno para el otro, pero ella dor-mía demasiado. Un día en que Romeo la fue a buscar a las 3 PM, pensando que había muerto, se suicidó.

Otros romances trágicos de lahistoria

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www.elmorbito.com 9el morbito / México 2010 Mitografías

Pero su desprecio formaba parte de un plan. “Mientras más sufra, más enamo-

rado estará”, pensaba. Y también: “Lo pondré a prueba para ver cuán-

to le gusto”. Y así lo hizo.

Un domingo, antes de ir a misa, Tadeo recibió la pri-mera carta de Veleta, que decía: “Venme a ver aho-

rita a mi casa”. Tadeo no supo qué hacer.

Le gustaba mucho ir a misa, sobre todo por el olor a incienso, pero después pen-só en el cabello de Veleta y en su aroma a regaliz... Acudió a la cita. Pero Veleta, después de hacerlo esperar dos horas, se asomó al balcón para decirle que no po-día salir.

El sábado siguiente, mientras Tadeo pa-seaba con su abuelita en el parque, Vele-ta le gritó desde lejos: “Tadeo, cómprame un helado”. Tadeo sentó a su abuelita en un banco, dijo que no tardaba y se fue con la niña. No sólo le compró un helado, sino también un globo y un rehilete. Tan contento estaba que se olvidó de su abue-lita, quien se quedó sentada esperándolo hasta que se hizo de noche.

Y así siguió Veleta. Requería a su enamo-rado en el momento más inoportuno: la noche antes de un examen o la mañana en que tenía partido de futbol. Como Tadeo siempre dejaba todo y acudía sin chistar, decidió por fin recompensarlo con un beso. Lo citó la tarde del último día de clases.

Tadeo, feliz, llegó como un rayo a la es-cuela, ya desierta a esas horas. Veleta lo esperaba en la puerta de atrás. Lo condu-jo hasta la bodega donde se guardaban los balones y le dijo: “Tadeo, tan bien te has portado, que un beso te has ganado”. El niño cerró los ojos y paró el pico. Ve-leta se disponía a hacer lo mismo cuando alcanzó a distinguir un lunar que tenía junto a la boca.

Olvidándose del beso, se dio media vuel-ta y dijo: “¡Ay Tadeo, qué horror! ¡Qué lunar tan feo tienes junto a la boca!”, y salió pitando. En su prisa azotó la puerta de la covacha, sin pensar en que el mu-chachito no tenía la llave para salir. Una vez que llegó a su casa, no volvió a pen-sar en él por el resto de las vacaciones. El niño, desesperado, gritó y gritó el nom-bre de su amada, pero nadie lo escuchó.

Ésta es la historia del romance de Tadeo y Veleta, así que la historia de lo que en-contró el conserje cuando abrió la bode-ga dos meses después tendrá que contar-se en otra ocasión.

La verdadera historia de Tadeo y Veleta

Fria como el viento

1757 La Bestia hizo oídos sordos a la petición de Bella: “Córtate esas ga-rras”. Dormían tan mal juntos que se divorciaron.

1810 A Josefina no le importaba que Napoleón fuera chaparrito; en cam-bio él no le perdonó que no pudiera embarazarse.

1867 Carlota decía que Maximilia-no era su “emperador azul”. Sus sueños de grandeza terminaron abruptamente una tarde en el Ce-rro de las Campanas...

1957 El comal y la olla se adoraban, pero nunca supieron cómo decírselo.

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10 www.elmorbito.comel morbito / México 2010Fenomenalia

“Se veía tan suavecito y abrazable”: abuela Pili

Pringu, el pingüino diabolico19/06/1993. Eran las dos de la mañana cuando Samara se despertó sobresaltada por una llamada telefónica. Había caído en un sueño profundo, pues la tarde an-terior había celebrado su fiesta de 9 años. “Mi abuelita me dijo que era la última moda en Paiwan”, manifestó la afectada. Fue tras gritarle a sus padres, presa del pánico nocturno, que éstos desarmaron al pequeño Pringu, quien llevaba entre sus aletitas unas afiladas tijeras.

Samara sólo recuerda haber visto rastros de pisadas marcadas con agua en la al-fombra, y la luz intensa de la televisión encendida que hacía un siniestro ruido con su estática.

“Presencié una verdadera masacre. Por toda la recámara volaba relleno, pedazos de tela y restos de peluche”, nos informó la madre. “Corrí a tapar los ojos de Sama-ra, pero era tarde: lo había visto todo”. La familia asegura que, tan pronto remo-vieron las tijeras del poder del pingüino, éste desapareció con la noche.

Esta semana se reportaron casos simila-res de juguetes provenientes de Paitei, informó la agencia de noticias TOI, pero hasta el momento no se sabe qué pudo haber causado el desvío maligno en los muñecos.

Yo le regalé un Pringu a mi novia, sa-lían a cada rato en televisión. No sé cómo permitieron eso. Mi novia me dijo que su muñeco se fue directito a los colchones y cojines de la sala. Algo tienen por el relleno. Y me dijo que a una amiga suya también le pasó lo mismo, no le quedó un sólo peluche vivo... De haber sabido, jamás le regalaba eso. Mi novia hasta cortó conmigo.

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Envía un correo a [email protected] y gánate uno de los 30 pases

dobles para ver antes que nadie Mi villano favorito.

¡Vamos a la premiere!

Page 12: El Morbito no.2: El amor

12 www.elmorbito.comel morbito / México 2010

El corazón es el órgano principal del sistema circulatorio

Mide poco más que

tu propio puñoTiene cuatro

cavidades: dos superiores (aurículas), y dos infe-

riores (ventrículos)

En el fondo, aunque te duela el

pecho cuando tu amor te voltea a

ver, deberías en realidad sobarte

la cabeza, pues ahí habitan todos los sentimientos.

Pesa1,300 g

En su superficie tiene unas ranuras (circunvoluciones)

y unos surcos (cisuras).

Se divide en dos hemisferios, cada uno dividido en

cuatro partes

No es sólo un órgano que tienes en el centro de tu cuerpo en medio de los pulmones, ni ese tambor que te mece a la hora de dormir. No es eso que le rompió Veleta a Tadeo por no hacerle caso. Bueno, sí, pero también es algo que muchas culturas han relacionado con el ser humano más allá de su cuerpo: es un símbolo. Así, en occidente como en oriente, el corazón no es solamente un órgano que cumple funciones físicas, y en la actualidad se ha convertido en el símbolo del amor y de la amistad.

El corazón funciona como bomba que impulsa la sangre desde los ventrículos hacia las arterias, para que llegue limpia a todo el cuerpo y lo hace mediante dos movimientos: sístole (para expulsar la sangre) y diástole (relajación para recibir la sangre).

En el mundo

Tal como lo lees

Infografía: Jorge López

La organización CIWF Trust, dedicada a hacer campa-ñas en defensa de los animales de granja, afirma que éstos tienen emociones como el miedo y la ira. Los animales no son autómatas, por ejemplo, según datos de científicos ingleses, las vacas bien pueden disfrutar resolviendo problemas, o las ovejas construir amistades profundas.

Las vacasSegún investigadores, las vacas llegan a producir más leche cuando no se les grita ni maltrata físicamente.

Sístole

Diástole

ChimpancésJane Goodall, experta en chimpancés, dice haber visto que estos animales ayudan a otros si perciben que tienen miedo o han pasado por una experiencia traumática, como quedar huérfanos o lastimados.

Lóbulo frontal Anterior: regula las emociones, la personalidad y el razonamiento. Posterior: con el lóbulo parietal, se encarga de los movimientos de los músculos.

3. Lóbulo temporal: la audición, lenguaje y dicción; sentidos del sabor y olor distribuidos en pequeñas áreas de los lóbulos temporal y frontal.4. Lóbulo occipital: visión.

IraIndignación y enojo, deseo de

venganza, furia.

MiedoPerturbación angustiosa por un

riesgo o daño real o imaginario.

AmorSentimiento intenso de afecto

de un ser humano hacia

alguien (o algo).

AversionRechazo o repugnancia

frente a alguien o algo.

SorpresaConmoverse o maravillarse con

algo imprevisto o incomprensible.

TristezaAflicción, melancolía. Cuando algo resulta doloroso

o difícil de soportar.

AlegriaSentimiento grato manifestado con palabras o gestos de júbilo.

OCCIDENTEEl corazón es el lugar donde habitan los sentimientos. ORIENTEPara ciertas culturas orientales el corazón es la intuición y la inteligencia. India El corazón y su religión van juntos: los movimientos (sístole y diástole) equivalen a la expansión y reabsorción del universo, o sea, al origen de los tiempos. Egipto Para los egipcios, el corazón es un vaso. De ahí que después los cristianos lo relacionaran con el Santo Grial: una copa cuyo brebaje permite alcan- zar la inmortalidad, una copa que es justamente “el corazón del mundo”.

No es una corazonada

VerguenzaCambio del ánimo, que suele

encender el color del rostro.

. .

El cerebro está cubierto en la parte superior por una capa gris hecha de células y neuronas, y en la parte interior por una capa blanca con millones de fibras nerviosas. Lóbulo parietal: sensaciones de

calor, frío, presión y tacto.

Cardiopat aVisión superpoderosa

Page 13: El Morbito no.2: El amor

www.elmorbito.com 13el morbito / México 2010

El corazón es el órgano principal del sistema circulatorio

Mide poco más que

tu propio puñoTiene cuatro

cavidades: dos superiores (aurículas), y dos infe-

riores (ventrículos)

En el fondo, aunque te duela el

pecho cuando tu amor te voltea a

ver, deberías en realidad sobarte

la cabeza, pues ahí habitan todos los sentimientos.

Pesa1,300 g

En su superficie tiene unas ranuras (circunvoluciones)

y unos surcos (cisuras).

Se divide en dos hemisferios, cada uno dividido en

cuatro partes

No es sólo un órgano que tienes en el centro de tu cuerpo en medio de los pulmones, ni ese tambor que te mece a la hora de dormir. No es eso que le rompió Veleta a Tadeo por no hacerle caso. Bueno, sí, pero también es algo que muchas culturas han relacionado con el ser humano más allá de su cuerpo: es un símbolo. Así, en occidente como en oriente, el corazón no es solamente un órgano que cumple funciones físicas, y en la actualidad se ha convertido en el símbolo del amor y de la amistad.

El corazón funciona como bomba que impulsa la sangre desde los ventrículos hacia las arterias, para que llegue limpia a todo el cuerpo y lo hace mediante dos movimientos: sístole (para expulsar la sangre) y diástole (relajación para recibir la sangre).

En el mundo

Tal como lo lees

Infografía: Jorge López

La organización CIWF Trust, dedicada a hacer campa-ñas en defensa de los animales de granja, afirma que éstos tienen emociones como el miedo y la ira. Los animales no son autómatas, por ejemplo, según datos de científicos ingleses, las vacas bien pueden disfrutar resolviendo problemas, o las ovejas construir amistades profundas.

Las vacasSegún investigadores, las vacas llegan a producir más leche cuando no se les grita ni maltrata físicamente.

Sístole

Diástole

ChimpancésJane Goodall, experta en chimpancés, dice haber visto que estos animales ayudan a otros si perciben que tienen miedo o han pasado por una experiencia traumática, como quedar huérfanos o lastimados.

Lóbulo frontal Anterior: regula las emociones, la personalidad y el razonamiento. Posterior: con el lóbulo parietal, se encarga de los movimientos de los músculos.

3. Lóbulo temporal: la audición, lenguaje y dicción; sentidos del sabor y olor distribuidos en pequeñas áreas de los lóbulos temporal y frontal.4. Lóbulo occipital: visión.

IraIndignación y enojo, deseo de

venganza, furia.

MiedoPerturbación angustiosa por un

riesgo o daño real o imaginario.

AmorSentimiento intenso de afecto

de un ser humano hacia

alguien (o algo).

AversionRechazo o repugnancia

frente a alguien o algo.

SorpresaConmoverse o maravillarse con

algo imprevisto o incomprensible.

TristezaAflicción, melancolía. Cuando algo resulta doloroso

o difícil de soportar.

AlegriaSentimiento grato manifestado con palabras o gestos de júbilo.

OCCIDENTEEl corazón es el lugar donde habitan los sentimientos. ORIENTEPara ciertas culturas orientales el corazón es la intuición y la inteligencia. India El corazón y su religión van juntos: los movimientos (sístole y diástole) equivalen a la expansión y reabsorción del universo, o sea, al origen de los tiempos. Egipto Para los egipcios, el corazón es un vaso. De ahí que después los cristianos lo relacionaran con el Santo Grial: una copa cuyo brebaje permite alcan- zar la inmortalidad, una copa que es justamente “el corazón del mundo”.

No es una corazonada

VerguenzaCambio del ánimo, que suele

encender el color del rostro.

. .

El cerebro está cubierto en la parte superior por una capa gris hecha de células y neuronas, y en la parte interior por una capa blanca con millones de fibras nerviosas. Lóbulo parietal: sensaciones de

calor, frío, presión y tacto.

Cardiopat aVisión superpoderosa

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www.elmorbito.com 15el morbito / México 2010

Gran estreno: Amor Didas

La serie de los sabores imposibles• La nueva serie del Canal Chomp se transmitirá los jueves a la hora de la comida.• El señor Didas, alcahuete gastronómico, será el anfitrión de este programa.

Tentempié

Salsa agridulce

¡Ideal para carne asada y pechuga de pollo!

Ingredientes:• ½ taza de salsa cátsup• ¼ taza de trocitos de piña en almíbar• 1 cucharada de miel• 1 cucharadita de vinagre blanco• 1 pizca de sal• ½ cucharadita de salsa chipotle (opcional)Instrucciones:1. Revuelve todos los ingredientes en un tazón. Prueba la salsa y ajusta la mezcla hasta que quede a tu gusto.*2. Sirve la salsa sobre tu plato de car-ne, pollo o hasta pescado.3. Si te sobra salsa, puedes guardar-la en el refrigerador hasta tres días.*Puedes omitir el chipotle, si no te gusta el picante, o cambiarlo por salsa Valentina. Si no te gusta la piña, pon-le duraznos. Si no te gusta la miel, usa alguna mermelada. Si no te gusta el vinagre blanco, intenta con vinagre de manzana, o vinagre balsámico. El chis-te es combinar sabores dulces, ácidos y picantes.

¡Encuentra la combinación ideal para ti!

La serie narra las aventuras del señor Didas —sin parentesco con el Rey Mi-das—, un cocinero que decide cambiar su aburrido trabajo en un restaurante de comida rápida por una exitosa ca-rrera como alcahuete gastronómico. “Hay tantos ingredientes buscando a su media naranja… lo menos que pue-do hacer es ayudarlos”, afirma.

En el primer capítulo, se narrará la his-toria de amor de la Miel y el Vinagre, separados por sus orígenes dulces y ácidos. Ella vive en un panal, protegi-da celosamente por las abejas, quienes niegan la entrada a todo ingrediente que no sea dulce. El vinagre, de origen rudo y ácido, se esconde en las bote-llas de la alacena.

“No fue fácil convencerlos de que po-dían ser una bonita pareja”, explica el señor Didas. “Me llevó una semana persuadir a las abejas de que dejaran

salir a la Miel para visitar mi cocina, donde ya la esperaba el Vinagre. Pero cuando por fin se encontraron, fue amor a primera vista”.

A sabiendas de que su amor no sería aceptado fácilmente por la sociedad, la pareja decidió mudarse a China, en donde el amor entre mieles y vinagres ha sido reconocido y apreciado desde hace varios siglos como la base de las salsas agridulces. “Espero que regresen pronto”, dijo el señor Didas. “Cada vez veo más fans de las salsas agridulces en nuestro país”.

En los siguientes capítulos de esta tem-porada, podremos ver cómo el señor Didas reúne a otras parejas inusuales, como al Chocolate y al Chipotle, o Fresas con crema y Vinagre balsámico. ¡No te la pierdas!

Texto: TeobrominaIlustración: Caldo de Pollo

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16 www.elmorbito.comel morbito / México 2010Grafoscopio

Por: Carlos Vélez

Page 17: El Morbito no.2: El amor

www.elmorbito.com 17el morbito / México 2010 Grafoscopio

Page 18: El Morbito no.2: El amor

18 www.elmorbito.comel morbito / México 2010La columna de Leyolo Carcamán

EL APRENDIZAJE AMOROSOLaëtitia Bourget / Emmanuelle Houdart

Los Especiales A la Orilla del Viento

FCE

LA MEJOR MASCOTADavid LaRochelle / Hanako WakiyamaLos Primerísimos

FCE

AL OTRO LADO DEL RÍOAntonio Ventura / Linda Wolfsgruber

Los IlustradosNostra Ediciones

¡TIEMBLEN, DRAGONES!Robert Munsch / Juan Gedovius

Castillo de la LecturaEdiciones Castillo

MI LEÓNMandana SadatLos Especiales

A la Orilla del VientoFCE

Odio el amor. El amor es para los jóvenes, y yo ya no soy joven. El amor es para los pajaritos y para las flores, y yo soy un anciano. Odio a los que creen que saben tanto del amor y quieren hacer

creer que existe algo como El aprendizaje amoro-so. Si mi padre siguiera vivo, les enseñaría.

Y la verdad es que nadie sabe en el fondo qué es el amor... Nadie lo entiende realmente; tal vez por eso sea mejor la amistad o una mascota, al menos. Si yo algún día me decidiera por alguna, tengan por seguro que sería un dragón. Sí, un dragón

sería la mejor mascota. Claro, no falta el niño que le tiene pavor a los dragones, tanto mejor, más dragones para los valientes como yo.

Mi padre, Juglario Carcamán, también era muy valiente, más valiente que yo. De

él heredé mi gran amor por los drago-nes, aunque nunca tuve uno. Pero

él sí, y ésta es una historia ve-rídica. Mi padre vivió al otro

lado del río, hace muchos muchos años,

cuando aún los dragones pastaban por el campo y las princesas eran seres re-pugnantes que había que resca-tar cada dos por tres.

Juglario Carcamán era un hom-bre fuerte y nada le daba miedo, al contrario, todos le temían y con razón. En la ranchería de dragones donde trabajaba, y de la que estuvo a cargo casi toda su vida, tan pronto la gente lo veía pasar les anun-ciaba a las criaturas: “¡tiemblen, dragones!”.

Mi padre era un hombre sabio, nunca creyó en el amor y de hecho le daba más asco que a mí. Y lo entiendo perfec-tamente, vivir en una época con tanta princesa...

Yo mejor me quedo con mi león, aunque sea de peluche.

no me hagan vomitarTexto: Leyolo CarcamánIlustración: Triveroquio/Poderoso Kamui

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www.elmorbito.com 19el morbito / México 2010 Linker

Perdido y encontrado

Un hecho (casi) científico indica que cuando pierdes algo que te hace mucha falta será muy difícil encontrarlo. Así, si un día pierdes la playera que más te gusta y ni tu mamá, ni tu hermano, ni el perro, ni nadie en la casa sabe dónde se quedó, lo más seguro es que no aparezca en el momento y que vuelvas a verla hasta el día que ya no la necesites más, cuando ha pasado ese evento tan importante.

Así es: las cosas perdidas aparecen cuan-do uno menos las espera. Esto también sucede con algunas personas y, por su-puesto, como todo mundo sabe o debería saber, con algunos animales, más especí-ficamente con los pingüinos.

Perdido y encontrado es el segundo libro de Oliver Jeffers (escritor e ilustrador na-cido en Irlanda del Norte). Cuenta la his-toria de un niño que abre un día la puer-ta de su casa y se encuentra, sin más ni más, con un pequeño pingüino. No sabe de dónde vino ni cómo llegó hasta ahí, pero lo sigue por todos lados, por más que él trata de evitarlo. Como el pingüino se ve tan triste, el niño decide ayudarlo a regresar a su hogar y así comienza esta historia de aventuras, encuentros y des-cubrimientos.

En sus ilustraciones, Oliver Jeffers utiliza un estilo de dibujo sencillo, aunque lle-gar a ello le ha tomado varios años, pues además de ilustrar libros también pinta. Cuenta que en realidad nunca tuvo la in-tención de hacer libros, pero un día se le ocurrió la historia completita del que se-ría su primer libro. Jeffers asegura tam-bién que, más que ver televisión, disfruta profundamente ver pinturas en los mu-seos y descubrir lo que en ellas se narra. Ya te imaginarás por qué desde que se le ocurrió su primer libro no ha podido dejar de inventar más y más.

Y si la historia de Perdido y encontrado es ya de tus favoritas, te recomiendo leer

todos los libros de Oliver Jeffers: Cómo atra-par una estrella, De vuelta a casa, El increíble niño come libros, El misterioso caso del oso y El corazón y la botella.

· En 2008, Studio AKA, un reconocido estu-dio de animación británico, dio nueva vida a la historia del pequeño pingüino con un corto animado, cuyo avance puedes ver aquí:

http://www.youtube.com/watch?v=BaOqMuOTsOc

· Si te gustó, no olvides darte una vuelta por el sitio de los creadores en:

http://www.studioaka.co.uk donde po-drás ver otras animaciones increíbles.

· Puedes ver imágenes de todos los libros en el sitio del autor:

http://www.oliverjeffers.com/#/illus-tration/

Feliz encuentro!

Texto: PixilonIlustración: Chiquita Milagro

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20 www.elmorbito.comel morbito / México 2010Entre líneas

En tus narices

Amistad a tres ca das, sin l mite de tiempoSagitario y El Escorpión eran amigos desde hacía mucho tiempo. Cuando Sa-gitario llegó junto a su fa-milia, siendo un niño, tuvo que soportar las bromas de sus compañeros en la es-cuela debido a su extraño acento sudamericano, pero sobre todo por el estrabis-mo congénito que padecía.

El Escorpión era el niño más corpulento y el más respetado del salón (acaso por el temor que generaba su tamaño). En los primeros días de clases, en el rincón más alejado de escuela, El Escorpión hizo su primera aparición como luchador cuan-

do un grupo de niños estaba a punto de hacerle bolita a Sagitario, que esquivaba los golpes como podía. Trepándose a un árbol como si fuera la tercera cuerda, el luchador en ciernes voló por los aires al tiempo que gritaba: “¡Áaaaaabranla, que ahí les voy…!”.

Los niños, asustados, se hicieron a un lado. Desde ese momento, el Escorpión acogió al escuálido niño como su prote-gido y se volvieron inseparables. Además (y he aquí un secreto que pocos conoce-mos) en la lista de alumnos del 3º B, El Es-corpión y Sagitario ocupaban lugar, uno después del otro, en la L de López.

El Escorpión compartía sus juguetes con Sagitario y, por su parte, éste, con gran habilidad de observación y deducción desde niño, conseguía siempre la estam-pita más difícil en los tapados. Los niños ya no lo golpeaban, porque sabían quién era su protector, pero seguía recibiendo las burlas por su defecto físico (imposi-ble de corregir incluso con los lentes de fondo de botella que usaba), que apro-vechaba para hacerse el indefenso y, en el momento menos pensado, ganarles la

coti zada estampa.

Gracias a Sagitario, su amigo completó el álbum del Maravilloso mundo animal, el del Fabuloso viaje planetario y su preferi-do: Guerreros del Pancracio.

Por la tarde jugaban a las luchas, el jue-go favorito del Escorpión, y otras veces a las escondidillas, el preferido de Sagita-rio, que siempre encontraba fácilmente el escondite de su amigo, siguiendo las mo-ronas de dona que dejaba, o guardando silencio y escuchando atentamente hasta dar con el sitio de donde provenía el so-nido del mordisqueo del Escorpión, que no paraba de comer.

Cuando le tocaba esconderse a Sagitario era más difícil, pues escogía los lugares más insospechados y varias veces, aburri-do por la espera y con la mente ocupada en eternas disertaciones sobre hipotéti-cos misterios escolares, Sagitario abando-naba su escondite, apareciendo hasta el otro día, como si nada, a la puerta de la casa de su amigo.

Con el tiempo, las personalidades de am-bos amigos, sus destrezas y sus pasiones, se desarrollaron, El Escorpión eligió el ca-mino del cuadrilátero, mientras que Sagi-tario, perfeccionando su gran capacidad de deducción, escogió ser detective.

Una gran confianza se construyó entre ellos, a tal grado que Sagitario es una de las tres personas que conocen la identi-dad secreta del Escorpión. Los otros dos son: su mamá y yo, por supuesto. Y, quién sabe, si pones mucha atención, tal vez al-gún día tú también la sabrás.

Texto: Jorge MendozaIlustración: Poderoso Kamui

Algunas veces lo

que buscas se encuentra

más cerca de lo que crees,

prácticamente en tus narices.

Una buena amistad, por ejemplo,

es algo que no se busca, sola-

mente llega y si se le cuida,

dura para siempre.

Page 21: El Morbito no.2: El amor

www.elmorbito.com 21el morbito / México 2010 El ropero

Cuéntanos la forma más divertida como has hecho un amigo en 500 palabras y llévate El increíble niño comelibros, El misterioso caso del oso o El corazón y la botella de Oliver Jeffers, cortesía del FCE.

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Cuéntanos en qué consiste el trabajo de tu papá o de tu mamá en 500 pala-bras, junto con el título que te gusta-ría leer, cortesía de Editorial Castillo,

FCE y Nostra Ediciones.

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Querrás liberarte, pero ¡cuidado!, no jales muy fuerte.

Tú déjate llevar y la trampa

se aflojará; aunque para entonces tal vez ya no querrás salir.

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Pocima para el amor

El amor es el inicio de todo. Sin él, nuestra vida sería igual a la tierra sin agua. Sin amor, nada funcionaria en nosotros, es la razón para seguir adelante.

Desde la antigüedad se han hecho pociones mágicas para atraer al amor deseado, que por lo general contenían ingre-dientes simples de conseguir y un elemento especial que es la clave para que funcione.

Si deseas preparar tu propia pócima, necesitarás mezclar en una botellita de plástico un chorrito de agua, 5 gotas de miel, una ramita de canela y jugo de uva. Una vez que tengas la póci-ma, deberás conseguir una pestaña de la persona que tanto te gusta y agregarla. Tapa bien la bo-tella y agita la mezcla.

Para un mejor resultado, cuando veas a la persona que te gusta, ofrécele un poco de tu pócima. Además de que le encantará, se fijará en ti e iniciará la magia.

Texto: Lorena PeñaIlustración: Ana Paula Rosales

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Page 22: El Morbito no.2: El amor

22 www.elmorbito.comel morbito / México 2010Sé verla al revéS

Valor nutricionalDescubre cómo hacer amigos en todo el mundo.

amigo (español)freund (alemán)friend (inglés)tomodachi (japonés)arkada (turco)ami (francés)ven (danés)vän (sueco)ffrind (galés)amic (catalán)amico (italiano)amigo (portugués)brbgh (marciano)

“No” es “sí”, “sí” es “no”... Para con-seguir el amor, los humanos siempre hacen lo contrario. Así hay que atacar: ¡con agresividad! ¿Me oíste bien? ¡Eres un soldado!

¡Maldición! Esos humanos tontos se han salido con la suya otra vez, pero esto no se va a quedar así...

¡Tú sí serás nuestra...!

Descargalo en: elmorbito.com

Por: Diana Hernández

Page 23: El Morbito no.2: El amor

www.elmorbito.com 23el morbito / México 2010 Tiradero

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EL AMOR POR MISSTUTSIPOP

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