Anamnesis

“…Siento rabia pero a la vez melancolía…”

Amairany Ramírez.

He considerado que el sótano de mi casa es muy interesante pues me he

encontrado muchos objetos simbólicos, llenos de memoria1 y ausencia2.

Esta vez ha sido un álbum, tal vez mío, ya que en todas la fotos sale mi imagen de

cuando era pequeña, conviviendo con otros “alguien”, y que conversando con mi

madre ha dicho que son de las celebraciones de mis cumpleaños (hasta el número

6) y algunas otras de momentos memorables. Ahora bien ¿Qué momentos

memorables? ¿Qué fiestas? No recuerdo nada, sé que existieron pues hay

registro de ello, pero ¿Por qué los habré olvidado? ¿Por qué no me siento parte de

esos “buenos momentos”?... Nunca me había sentido tan vacía de recuerdos, tan

ajena a algo que me pertenece, en este caso mi memoria, mi pasado.

Estas imágenes que se encuentran en el álbum quizá fueron de algo maravilloso y

bonito, aquello que con el paso del tiempo se ha borrado de mi memoria y aún,

como dice Adriana Garrido-Díaz (2013) “la creencia popular de que la imagen

fotográfica es una imagen objetiva de la realidad, como si el uso de una máquina

fuera condición suficiente para garantizarla, ha contribuido a percibirla no sólo

como la imagen realista por excelencia, sino como sucedánea de la realidad. ¿Es

ficción la fotografía de la realidad?” “Se tiende a olvidar con facilidad que la

tridimensionalidad representada en dos dimensiones no es más que una ilusión

óptica, que el sujeto detrás de la cámara es quien escoge para encuadrar y, al

mismo tiempo, descartar todo aquello que también ocurre, pero no registra y

además se olvida que se pierde, entre otras, la realidad auditiva”, y que considero

1 Usada con varios grados de sofisticación, la noción de memoria, más practicada que teorizada, ha sido

utilizada para denotar cosas muy diferentes, que sin embargo comparten un denominador común tópicos: las vías por las cuales la gente construye un sentido del pasado. (Francisco Erice, 2009) 2 Ausencia. S f. es el sentir melancólico en un mundo de pérdidas.

respuesta para ella, de Jean Baudrillard quien dice que “La imagen fotográfica no

es representación, es ficción” y así es como significo a la fotografía, como ficción.

En particular de ese almacén de fotografías, existen 5, las cuales he rechazado,

debido a que me molesta verlas, y de esto me di cuenta por medio de esa

memoria colectiva3 que obtuve, en donde mi madre al terminar de contar

aquellos momentos solía decir con voz frágil: aquellas fiestas que acababan en

desastre, aquellos momentos que siempre terminaban mal por alguna u otra

razón, pero siempre eran problemas a la hora de salir, o simplemente convivir con

la familia.

Esas anécdotas que siempre acababan mal o tristes para, este caso, mi madre; y

que la imagen muestre todo lo contrario, ya que se llegan a notar personas que

sonríen y conviven armoniosamente. ¿Por qué las historias sobre eso son tan

tristes? ¿Por qué no hay concordancia entre historia e imagen? ¿Qué tan certera

es su palabra? ¿Qué tan sinceras son esas sonrisas? Esta sensación hacia las

imágenes es desagradable, estas personas que se encuentran junto a mi jamás

las había visto tan sonrientes.

“No sé si esta historia sucedió tal y como me la contaron a mí, quizá solo ocurrió

así en parte, una verdad a medias, o tal vez sucedieron más hechos que nunca

llegaron a mis oídos”. (Francisco Mielgo, 2005)

¿Es posible recordar todo?

Ya sea individual o colectiva, la memoria significa la presencia del pasado,

una presencia viva, activa, cuyo soporte lo constituyen las personas, esto

es, el lenguaje, y no simplemente una huella material. El procedimiento

conforme al cual opera la memoria es complejo, pues articula recuerdos y

olvidos, lo consciente y lo inconsciente, la parte que aceptamos y asumimos

del pasado, como también aquella que negamos y mantenemos oculta. En

otras palabras, la memoria no es todo el pasado; la porción de él que sigue

viviendo con nosotros se nutre siempre de las representaciones y

3 “la construcción de la memoria de los individuos con respecto a su trayectoria personal o la de los colectivos humanos de los que forma parte” (Francisco Erice, 2009)

preocupaciones del presente. Constituye, sin embargo, toda esa parte del

pasado que sigue viviendo en nosotros, sea gracias a la experiencia directa,

vivida, o bien como el fruto de una transmisión familiar, social o política. La

memoria humana no es acumulativa, no se parece en nada a la memoria de

un ordenador: recordar es siempre, en mayor o menor medida, olvidar algo;

es desplazar la mirada retrospectiva y recomponer, así, un paisaje distinto

del pasado.

¿Podemos “olvidar” la historia?

La memoria, que ya definimos como la presencia viva del pasado, no es la

historia, entendida como la narración del devenir colectivo. Entre las

muchas diferencias que las separan, hay una bastante fácil de comprender:

- el trabajo de la historia consiste, por una parte, en una especie de

anamnesis, es decir, en traer a la memoria un pasado posiblemente

olvidado por la falta de transmisión o reprimido por construir una

experiencia traumática, lo que significa, en este último caso, que de alguna

manera todavía está presente, aunque no se tenga conciencia de ello, y

que, por tanto, no está “olvidado”;- pero el trabajo histórico es también un

proceso cuya finalidad declarada es conocer, dar a conocer e interpretar un

pasado que ha permanecido ignorado, y que, por tal razón, es preciso

descubrir y reconstruir…tal desconocimiento puede alcanzar también a las

generaciones futuras: la historia, al igual que la memoria, no puede

reconstruir todo el pasado ni pretender tampoco reconstruir completamente

la verdad del pasado, pues no debe olvidarse que el historiador utiliza las

palaras y conceptos del presente, y se dirige en última instancia a sus

propios contemporáneos, por lo que ha de emplear un discurso que ellos

sean capaces de entender. En consecuencia, la historia no es solamente

anamnesis, sino un proceso cognitivo que, como todo acto de conocimiento,

permite medir ante todo la extensión de nuestra ignorancia. Es también un

aprendizaje de la alteridad, de la distancia, de las diferencia y semejanzas

entre los que nos han precedido y nosotros mismos. En otras palabras, la

relación con el pasado no se expresa únicamente en función de recuerdos y

olvidos, puesto que no se puede recordar ni olvidar lo que no se conoce.

(Henry Rousso, 2002).

Y con esto, resultó Anamnesis4 pieza en la cual retomo el rechazó hacia

esta 5 imágenes y que me dispuse a deformar. “Para Platón „el saber cómo un

4 Anamnesis. Representación o traída a la memoria de algo pasado.

recordar‟ o „el diálogo del alma consigo misma‟ representan el meollo de la

anamnesis”. (Arnoldo Kraus, 2010)

Se trata de una video-instalación con la técnica Frame by Frame, en la que se

presenta esa deformación de la imagen, la cual se proyecta sobre un álbum5 de

60x30cm. Este álbum se encuentra en un espacio totalmente blanco, a manera de

representar ese vacío, y justo en medio sobre la pared.

Los materiales que se ocuparon son:

o Un álbum de 60x30cm.

o Programa Image to Avi que se utilizó para juntar las imágenes.

o Escáner HP Deskjet F4200

En el proceso me daba cuenta que quería darle una imagen a esa memoria ya sea

monstruosa o a manera de espectro, pero lo único que debía de hacer era

eliminarla completamente, tal como lo quería pero me impedía el saber que son

las únicas fotos en las que me encuentro con personas que ya no están a mi lado,

que amaba, pero al parecer eran malos. No tengo certeza de ello más que ver el

rostro de mi madre al platicarlo, como si lo leyera y esas líneas me dijeran algo

cierto.

En parte al verlas me siento bien, la imagen dice que… que la pasaba bien y que

eran las personas que amaba, en lo que va mi vida, pero que se han ido por

voluntad propia o a costa de. Y si de lo que desprendía la imagen era felicidad,

¿Por qué lo único que la gente (la que era participe), cuenta situaciones

desastrosas? Todo terminaba mal, eran los peores momentos… Siento rabia pero

a la vez melancolía. Lo que queda es la eliminación de aquellas fotografías.

NADA, NADA, debe quedar, para que NADA sea recordado.

Lo cual es la terminación de la pieza. Intervención de esas fotografías destruidas y

puestas sobre el álbum, a manera que mis familiares noten la huella de esa

imagen, haya sido de lo que sea.

5 Álbum en el que han sido identificadas esas 5 fotografías, las cuales se pretende eliminar.

BIBLIOGRAFÍA

Diccionario enciclopédico. Ediciones Trébol, S.L. Barcelona. Pág. 797. 2000.

Erice, Frencisco. (2009). Guerras de la memoria y fantasmas del pasado. “Usos y

abusos de la memoria colectiva”. Eikasia Oviedo.

Mielgo, J. Francisco. (2005). El pozo del olvido. Editorial Visión Net. Madrid.

España.

Chávez Mayol, Humberto. (2007). Del tiempo muerto, registro de exploraciones.

Grupo Impresor. México.

Chávez Mayol, Humberto. (2005). Tiempo muerto. Litho Kolor. Toluca, EdoMéx.

Anamnesis. (2010, 3 de noviembre). La Jornada.

http://www.jornada.unam.mx/2010/11/03/opinion/018a1pol

Adriana Garrido-Diaz. (2010). La narración en torno a la fotografía. Consultado 20

de mayo de 2010. Replicante, Cultura crítica y periodismo digital:

http://revistareplicante.com/la-narracion-en-torno-a-la-fotografia/

Referentes - Artistas

Faces - Ashkan Honarvar http://pinterest.com/pin/66568900714733255/

Faces - Ashkan Honarvar

Eduardo Vallesteros. Proyecto genocida.

http://www.derhuman.jus.gov.ar/conti/2013/06/av-proyecto-genocida.shtml#.UbphE-

f55SQ

Irina Werning. Volver al futuro. http://culturacolectiva.com/irina-werning-volver-al-

futuro/

“Me encantan las fotografías antiguas, de modo que un día decidí volverlas a

tomar recreando los momentos del ayer en el presente. La mayoría de las

personas se fascina por el aspecto retro; pero para mí esto es imaginar cómo la

gente se siente y se ven el día de hoy".

- Tomando esta artista como contraposición a la pieza.

Deformación de imagen

ANEXOS

Deformación de imagen, en animación.

¿Cómo interpretar el enigma de una memoria6 sin recuerdo? La memoria

sin recuerdos es una memoria liberada de las experiencias pasadas, de las

que no guarda más que la energía (el deseo), que está disponible para los

desarrollos (cognitivos, afectuosos, prácticos) futuros. (Humberto Chávez,

2005).

“Papel que juega el deseo en la integración y desintegración de los objetos en los

espacios cotidianos y la posibilidad de crear memorias fantasmales de formas-

signo-recuerdo no vivido.” (Humberto Chavéz, 2005).

Jaime Sabines

Donde habite el olvido,

En los vastos jardines sin aurora;

Donde yo sólo sea

Memoria de una piedra sepultada entre ortigas

Sobre la cual el viento escapa a sus insomnios.

Donde mi nombre deje

Al cuerpo que designa en brazos de los siglos,

Donde el deseo no exista.

En esa gran región donde el amor, ángel terrible,

No esconda como acero

En mi pecho su ala,

Sonriendo lleno de gracia aérea mientras crece el tormento.

Allí donde termine este afán que exige un dueño a imagen suya,

Sometiendo a otra vida su vida,

Sin más horizonte que otros ojos frente a frente.

Donde penas y dichas no sean más que nombres,

6 Memoria: facultad de conservar y de recordar los estados de conciencia pasados y lo que a ellos se

encuentra asociado.

Cielo y tierra nativos en torno de un recuerdo;

Donde al fin quede libre sin saberlo yo mismo,

Disuelto en niebla, ausencia,

Ausencia leve como carne de niño.

Allá, allá lejos;

Donde habite el olvido.