AMEZ_-_TIPOLOGIAS_
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LAS TIPOLOGÍAS TEXTUALES COMO HERRAMIENTA DIDÁCTICA:
CONSIDERACIONES PARA LA ENSEÑANZA DE LENGUAS EXTRANJERAS
Artículo publicado en pp 107-116 de Propuestas. De la problemática del aula a las
propuestas concretas. Lengua y Literatura. Publicación del Centro de Lingüística
Aplicada - Facultad de Humanidades y Artes – U.N.R. Número 8. Año 2003. ISBN
987-43-4130-6
Mariel R. Amez
Profesora en Inglés/ Docente de Enseñanza Superior
1. Introducción
El vuelco de la oración al texto en el aula de lengua (tanto materna como
extranjera) constituye uno de los cambios más significativos de los últimos años. Sin
embargo, a pesar de los numerosos aportes que la Lingüística Textual ha realizado a la
Didáctica de la Lengua, el problema de los “tipos” o “clases” textuales se ha limitado en
la escuela a un tratamiento “intuitivo” más que a la imprescindible transposición
didáctica del saber científico. Probablemente, esta carencia pueda explicarse por la
dificultad de los lingüistas mismos para establecer un sistema de clasificación de textos
que satisfaga los requerimientos teórico- metodológicos y a la vez tenga realidad
empírica. Muchas tipologías se han construido desde fines de la década del ’60, pero
debido a la complejidad de la cuestión no existe aún una teoría indiscutida.
Lejos de pretender dar respuesta al debate de la comunidad científica, nuestro
objetivo es simplemente explorar la potencialidad didáctica para la enseñanza de
lenguas extranjeras de dos clasificaciones que Ciapuscio (1994: 131) caracteriza como
flexibles y con gran poder explicativo en el análisis de textos concretos. Para ello, en
este trabajo intentaremos comparar, desde una mirada docente, la tipología sobre
criterios de distinta índole de Brinker (1988) y la de niveles múltiples de Heinemann y
Viehweger (1991), y contrastarlas con la noción de habilidad lingüística comunicativa
de Bachman (1990).
2. La importancia de las clases textuales
A pesar de las dificultades que entraña la construcción de una tipología
exhaustiva, no caben dudas acerca de la relevancia de la temática.
Bajtín crea el concepto de género discursivo, como tipo relativamente estable de
enunciado que guía la comprensión y producción discursiva.
La voluntad discursiva del hablante se realiza ante todo en la elección
de un género discursivo determinado. ... Dado que nos expresamos
únicamente mediante géneros discursivos, nuestros enunciados poseen
formas típicas para la estructuración de la totalidad, relativamente
estables. Estos géneros nos son dados casi como se nos da la lengua
materna. (1982: 267)
Ciapuscio (1994) señala que la producción de un texto (tanto oral como escrito)
combina una determinada base proposicional en un esquema global que organiza el
contenido, de acuerdo con el objetivo a alcanzar. Esta estructuración, además de ser
condición imprescindible para la producción, es determinante para la comprensión. En
consecuencia, el conocimiento sobre clases textuales permite optimizar las actividades
comunicativas individuales y sociales.
Heinemann (2000), en su discusión sobre “clase textual” y “esquema textual”
subraya las implicaciones didácticas de estos conceptos. El conocimiento de clases
textuales permite ampliar y fortalecer la competencia comunicativa de los individuos
tanto de la lengua materna como de lenguas extranjeras. Es preciso, entonces,
elaborar didácticamente la variedad de problemas de clase textual en
relación con soluciones específicas de tareas comunicativas,
especialmente en el aspecto contrastivo en la enseñanza de lenguas
extranjeras.
3. La tipología de Brinker (1988)
Brinker define al texto como
una sucesión limitada de signos lingüísticos, que es coherente en sí que en tanto
una totalidad señala una función comunicativa reconocible
y considera en su tipología varios criterios y niveles de clasificación. Si bien suscribe a
la regla de homogeneidad establecida por Isenberg (1), encuentra que la base de la
tipología debe ser también aceptable,
es decir, debe conducir a distinciones que confirmen el saber intuitivo sobre
tipos textuales de los hablantes, o al menos que no lo contradigan.
Encuentra que los rasgos lingüísticos de los textos son insuficientes para su
clasificación, y fundamenta entonces su propuesta en distintos criterios de
diferenciación:
Criterio básico:
la función textual
Criterios adicionales (que se derivan de la función textual):
contextuales: forma comunicativa y ámbito de la acción
estructurales: tipo de tema textual y forma de despliegue temático
4. La tipología de Heinemann y Viehweger (1991)
Para Heinemann y Viehweger el texto es
el resultado de una variedad de operaciones psíquicas interrelacionadas; (...)
una estructura multidimensional, en la cual se manifiestan los sistemas de
conocimiento de los hablantes: el conocimiento lingüístico, el conocimiento
enciclopédico, el conocimiento accional (pragmático) y el conocimiento sobre
clases textuales.
Proponen una tipología multinivel, y difieren con Isenberg con respecto a la
exhaustividad, rigurosidad y monotipia de una tipología, ya que para una gran cantidad
de textos son posibles las clasificaciones múltiples.
(...) cada texto en condiciones similares puede relacionarse con distintas
unidades superiores según los intereses de los hablantes y el grado de
relevancia que para los hablantes tengan los distintos tipos clasificatorios. (en
Ciapuscio, 1994: 122)
Plantean que el saber sobre esquemas textuales se realiza a través de
clasificaciones multidimensionales de representaciones prototípicas a distintos niveles:
Nivel I: tipos de función
Nivel II: tipos de situación
Nivel III: tipos de procedimiento,
Nivel IV: tipos de estructuración textual
Nivel V: esquema de formulación prototípico.
Estos niveles pueden variar en importancia en las distintas clases textuales, pero
todos están siempre incluidos.
5. La habilidad lingüística comunicativa
Bachman (1990) explica la habilidad lingüística comunicativa como
el conocimiento o competencia y la capacidad para ponerlo en práctica en un
uso de la lengua adecuado y contextualizado.
Tiene tres componentes: competencia lingüística, competencia estratégica y
mecanismos psicofisiológicos. Esta perspectiva, que recoge y completa la descripción
de competencia comunicativa de Hymes (1967) y Canale- Swain (1980), presenta la
competencia estratégica como un elemento separado con función de ejecución, ya que
proporciona los medios para relacionar la competencia de la lengua y las estructuras de
conocimiento sociocultural y del mundo del usuario. Esta interrelación se ilustra en el
Gráfico 1:
Gráfico 1:
Componentes de la habilidad lingüística comunicativa en el uso comunicativo de la
lengua (Bachman, 1990: 108)
Con respecto a la competencia lingüística propiamente dicha, ésta abarca entre
otras la competencia textual, que incluye el conocimiento de las convenciones para unir
COMPETENCIA LINGÜÍSTICA
Conocimiento de la lengua
ESTRUCTURAS DE CONOCIMIENTO
Conocimiento del mundo
COMPETENCIA ESTRATÉGICA
MECANISMOS PSICOFISIOLÓGICOS
CONTEXTO DE SITUACIÓN
frases para formar un “texto”: una unidad de lengua hablada o escrita que consiste de
dos o más enunciados o frases estructuradas conforme a reglas de cohesión y
organización retórica. En el uso conversacional de la lengua contempla además las
máximas conversacionales, la organización de turnos y otras convenciones que son
análogos a los rasgos retóricos del discurso escrito. La totalidad de sus componentes se
detalla en el Gráfico 2:
Gráfico 2
Componentes de la competencia de la lengua (Bachman, 1990: 110)
6. Análisis
6.1. Consideraciones generales
De la definición del objeto “texto” se desprende que la postura de Brinker se ubica
en la lingüística textual de orientación comunicativa, que privilegia su aspecto accional.
Heinemann y Viehweger, por su parte, sostienen un enfoque procedural, de corte
cognitivo.
En las dos tipologías, observamos la preocupación por reflejar el saber general de
los hablantes. En este sentido, Brinker no plantea una discriminación entre los términos
“tipo” y “clase” textual (que para Isenberg describen, respectivamente, una designación
teórica y otra conscientemente vaga y no necesariamente relevante para la lingüística)
sino que los emplea en forma indistinta. En cambio, Heinemann y Viehweger mantienen
la distinción entre la categoría teórica y el saber de los hablantes. Es especialmente
interesante su consideración de distintos tipos de saberes, que corresponden a muchos
de los componentes de la habilidad lingüística comunicativa:
Bachman Heinemann y Viehweger estructuras de conocimiento saber enciclopédico, o conocimiento
del mundo
COMPETENCIA GRAMATICAL (vocabulario, morfología, sintaxis y fonología/ grafía)
COMPETENCIA ORGANIZATIVACOMPETENCIA TEXTUAL
(cohesión y organización retórica)
COMPETENCIA
DE LA LENGUA
COMPETENCIA ILOCUTIVA (actos de habla; funciones ideativa, manipulativa, heurística e imaginativa) - Según Halliday (1973; 1976)
COMPETENCIA PRAGMATICACOMPETENCIA
SOCIOLINGÜISTICA (sensibilidad hacia diferencias de dialecto, registro y naturalidad; referencias culturales y lenguaje figurado
competencia gramatical saber lingüístico, o conocimiento de gramática y léxico
competencia pragmática (ilocutiva y sociolingüística)
saber interaccional, o saber ilocucionario, máximas y normas comunicativas, etc.
competencia textual saber sobre esquemas textuales globales, o sobre clases textuales
El saber sobre clases textuales, según Heinemann y Viehweger, puede ser activo o
pasivo: cuanto más habitual sea una clase textual, mayor será el número de hablantes
que la domine en forma pasiva y activa. No se trata de un conjunto fijo, sino que
depende de las experiencias comunicativas de los hablantes.
6.2. La función textual
Brinker toma la función textual como criterio diferenciador básico, la cual define
como
el propósito comunicativo del hablante expresado en el texto con determinados
recursos (...) establecidos en la comunidad educativa
Por su parte, para Heinemann y Viehweger, el punto de partida (Nivel I) es
también la función, entendida ésta como
el papel de los textos en la interacción, su contribución a la realización de
metas comunicativas sociales y objetivos individuales así como a la constitución
de relaciones sociales.
Mientras que en el primer caso el énfasis está puesto en el hablante, y se delimita
del efecto del texto sobre el receptor, en el segundo se centra en el texto mismo y su rol
social, aunque coinciden en que las funciones frecuentemente se realizan en forma
simultánea en el uso de la lengua, con una función predominante.
Las funciones previstas por Brinker derivan de la clasificación de Searle para los
actos ilocutivos y se apoyan en el tipo de contacto comunicativo que el productor
exterioriza frente al receptor con el texto. Heinemann y Viehweger determinan las
funciones sobre la base del efecto que pueden tener los textos en la interacción. En
consecuencia, las clasificaciones priorizan distintos aspectos y se superponen en
algunos casos. Un intento de correspondencia sería el siguiente:
Bachman Brinker Heinemann y
Viehweger ideativa informativa informativa
expresiva manipulativa contacto contacto
declarativa apelativa obligativa
directiva
heurística informativa informativa imaginativa informativa expresiva
La función heurística parece ausente de las propuestas tipológicas. Relacionada
con el uso del lenguaje para ampliar nuestro conocimiento del mundo, se produce
normalmente en actos como la enseñanza, el aprendizaje, la solución de problemas y la
memorización consciente. Por lo tanto, aunque desde la perspectiva didáctica tenga un
rol saliente, coincidimos en que su significatividad para el establecimiento de tipos
textuales es extremadamente reducida.
En el Apéndice presentamos un cuadro que intenta sintetizar las coincidencias y
discrepancias entre todos los criterios adoptados por ambas tipologías.
6.3. El contexto
Los criterios contextuales de Brinker incluyen la forma comunicativa y el ámbito
de la acción. Considera cinco medios (Ver Apéndice) a través de los cuales puede
realizarse el contacto comunicativo entre los hablantes y tres ámbitos de acuerdo al tipo
de relaciones sociales entre los participantes de la comunicación. Dentro de los criterios
estructurales, el tipo de tema textual comprende la orientación temporal y la relación
entre emisor o receptor y el tema, las cuales creemos que corresponden también al
contexto.
Heinemann y Viehweger describen el Nivel II (Tipos de Situación) en términos de
los tipos de marco interaccional, la diferenciación según la organización social de las
actividades, el número de hablantes, los roles sociales de los interactuantes y la
coincidencia o no coincidencia de lugar y tiempo entre ellos. Estos parámetros otorgan
mayor flexibilidad a la caracterización, y permite adecuarlos a las cambiantes
necesidades y metas comunicativas de los hablantes. El “chat” y el correo electrónico,
por ejemplo, no están contemplados en los cinco medios de Brinker, pero pueden ser
descriptos cómodamente en esta propuesta.
Recordamos que Bachman asigna un papel muy importante al contexto de
situación, el cual en el uso lingüístico se vincula a través de la competencia estratégica
con el conocimiento del mundo y de la lengua. La competencia sociolingüística,
además, se relaciona estrechamente con esta dimensión, por lo que se requieren
herramientas de descripción como las del modelo multinivel que reflejen todos sus
aspectos.
6.4. La estructura y los recursos lingüísticos
El otro criterio estructural presentado por Brinker se refiere a las formas de
despliegue temático: descriptivo, narrativo, explicativo y argumentativo. Éstas
presentan distintos grados de compatibilidad con las funciones textuales, aunque no
existe una correspondencia lineal, y es un área que requiere mayor investigación
empírica. Plantea además la necesidad de explicar las formas (convencionalizadas) de
realización en los textos de las formas de despliegue temático, ya que una categoría
“forma de realización” conectaría los aspectos estructurales y comunicativo-
pragmáticos del análisis lingüístico del texto. Los criterios propuestos, continúa, sirven
a la delimitación básica de clases textuales, pero una descripción de las clases textuales
tiene que considerar los recursos lingüísticos (léxicos y sintácticos) específicos y, en
algunos casos, los recursos no lingüísticos.
Los Niveles III (Tipos de Procedimiento), IV (Tipos de Estructuración Textual) y
V (Esquema de formulación prototípico) de Heinemann y Viehweger proporcionan una
cobertura mucho más exhaustiva de todos estos aspectos. Los Tipos de Procedimiento
se refieren a la selección de contenido, su forma de desarrollo y ordenamiento para
cumplir los objetivos del productor, así como al uso de recursos emotivos o a la
simplificación o complejización de los sucesos. Los Tipos de Estructuración Textual
incluyen las decisiones relativas a la sucesión de los complejos de partes textuales
(núcleo textual, parte inicial, parte terminal), su presencia, secuencialización y
conexión. Los Modelos de Formulación Prototípicos contemplan las máximas
comunicativas específicas de las clases textuales, que limitan la libertad del productor
para formular su texto, y las palabras, conlocaciones (2) y construcciones que se han
conservado y fijado como prototípicas de clases textuales. Heinemann y Viehweger las
denominan “constituyentes textuales estereotipados”, ya que se activan como
totalidades y están ligadas a distintas fases de la constitución textual.
7. Conclusión
Mientras que la tipología de Brinker se orienta a la delimitación y descripción de
las clases textuales, la de Heinemann y Viehweger se ubica en la perspectiva del
productor de textos, y de los procesos cognitivos que él realiza, y también permite
explicar los procesos que lleva a cabo el intérprete si se sigue un recorrido inverso de
los niveles propuestos.
En consecuencia, esta tipología multidimensional aporta mayores elementos para
la enseñanza de lenguas extranjeras orientada al desarrollo de la habilidad lingüística
comunicativa. Ya hemos señalado algunas de las coincidencias entre la tipología de
Heinemann y Viehweger y los postulados de Bachman. Sin embargo, es en los Niveles
III, IV y V donde encontramos las mayores fortalezas de la propuesta. La descripción de
los procedimientos y estructuras provee una guía clara a tener en cuenta a la hora de
producir textos, y la determinación de las máximas comunicativas específicas y los
constituyentes textuales estereotipados facilita el contraste y la comparación entre la
lengua materna y la extranjera.
Si bien para el hablante nativo los procesos de producción y comprensión textual
no son conscientes (al menos en las clases textuales más frecuentes), para quien aprende
una lengua extranjera es necesario desarrollar estrategias metacognitivas que le
permitan ampliar y fortalecer su competencia en la solución de tareas comunicativas. La
tipología de Heinemann y Viehweger aporta los elementos que el docente necesita para
favorecer la reflexión de los alumnos sobre los procesos de producción y comprensión
textual.
No estamos sugiriendo, es claro, la transferencia indiscriminada de la tipología al
aula, sino su mediatización por parte del docente que, al contar con herramientas
sólidas, podrá diseñar materiales para facilitar la comprensión de la complejidad
discursiva (cfr. Rébola, 2000: 30). Si el tratamiento intuitivo que la cuestión de los tipos
textuales ha tenido en el aula se debe a la ausencia de una teoría satisfactoria,
consideramos que la propuesta de Heinemann y Viehweger puede llenar este vacío.
Como consideración final, queremos destacar que el conocimiento sobre clases
textuales en la lengua extranjera puede también tener impacto sobre el desarrollo del
saber sobre esquemas textuales de la lengua materna. Al ampliar las experiencias de los
hablantes y su conciencia metalingüística, se puede incrementar el saber activo sobre
clases más complejas y de menor frecuencia, que lleve a una verdadera
“democratización” de la cultura.
Notas:
(1) Según Isenberg (1987) las exigencias teóricas que debe cumplir una tipología
incluyen: homogeneidad (base de tipologización unitaria en relación con la cual todos
los textos se definen de igual manera), monotipia (no puede contener un principio de
acuerdo con el cual sea posible clasificar un mismo texto en distintos tipos de igual
rango y de manera múltiple), rigurosidad (no puede haber ningún texto tipológicamente
ambiguo) y exhaustividad (debe abarcar necesariamente todos los textos de su ámbito
de aplicación).
(2) El término “conlocaciones” describe ciertas construcciones sintácticas y
combinaciones fijas de palabras que frecuentemente aparecen en conjunto. Su
coocurrencia es típica de ciertos ámbitos comunicativos (diagnóstico y evaluación para
la escuela) y pueden ser identificadoras de clases textuales (había una vez y vivieron
muy felices para los cuentos infantiles). Cfr. Ciapuscio, 1994: 119.
Referencias bibliográficas:
Bachman, L. (1990) "Habilidad lingüística comunicativa" en Llobera, M. et al.
Competencia comunicativa, Edelsa, Madrid.
Bajtín, M. (1982) Estética de la creación verbal. Siglo XXI, México.
Brinker, K. (1988) Linguistiche Textanalyse, E. Schmidt, Berlin. Cap. 4. Traducción
(mimeo)
Ciapuscio, G.E. (1994) Tipos Textuales, Eudeba, Buenos Aires.
Isenberg, H. (1987) “Cuestiones fundamentales de tipología textual” en Bernárdez,
E. (ed) Lingüística del Texto (1ª ed. 1983)
Heinemann, W. (2000) “Clases textuales. Para la discusión sobre las clases de base
del comunicar. Retrospectiva y panorama”. En Textsorten. Reflexionen und
Analicen, K. Adamzik (ed.), Stauffenburg, Tubingen. Traducción informal de G.
Ciapuscio (mimeo)
Rébola, Ma. C. (2000) “Tipos de texto: modelos teóricos y enseñanza de la lengua”
en Propuestas ,5, pp. 21-30.
APÉNDICE
HEINEMANN- VIEHWEGER BRINKER
NIVEL I: FUNCION FUNCION (criterio básico) informativos informativosexpresivosde contacto de contactodirectivos apelativos
obligativosdeclarativos
NIVEL II: SITUACIONmarco interaccional
RELACION EMISOR O RECEPTOR Y TEMA (criterio estructural)
tema centrado en el emisor tema centrado en el receptor tema no centrado en los participantes de la comunicación
organización social actividadesFORMA (criterio contextual)
cara a cara teléfono radio
número hablantes (diádica, de grupo, de masas)
TV
canal escrito
AMBITO (criterio contextual) roles sociales de los interactuantes (simétrico, asimétrico)
privado
oficialpúblico
+/- coincidencia de lugar y tiempo FIJACIÓN TEMPORAL (criterio estructural)anterior simultáneoposterior
NIVEL III: PROCEDIMIENTOprocesos de desarrollo textualpasos estratégicos DESPLIEGUE TEMÁTICO (crit. estructural)
descriptivonarrativoexplicativoargumentativo
procedimientos tácticos particulares
NIVEL IV: ESTRUCTURA TEXTUAL tipos división secuenciación conexión
RECURSOS LINGÜÍSTICOS (Y NO LINGÜÍSTICOS)
NIVEL V: ESQUEMAS PROTOTIPICOSmáximas comunicativas específicas lexemas específicosconlocacionesestereotipos