Unidad 5. La II Revolución Industrial y el Imperialismo
1
Unidad 5. La II Revolución Industrial y el Imperialismo.
1. La II Revolución Industrial.
1.1.Introducción.
La primera revolución industrial tuvo su epicentro en Inglaterra en la segunda mitad del
XVIII y principios del XIX, en ella aparecen nuevas fuentes de energía como el carbón
mineral, trayendo nuevos avances en diferentes industrias como la siderúrgica o la minera,
por no hablar de los avances en los medios de comunicación y el impacto tan enorme del
ferrocarril, además de los avances en medicina.
A finales del S. XIX se producirá lo que se ha venido llamando como la II Revolución
Industrial, con nuevos avances en los diferentes campos, y la exportación de la Revolución
Industrial al resto de Europa, Japón y los EE.UU.
1.2. Nuevas fuentes de energía.
El petróleo, también conocido desde muy antiguo, tuvo una demanda creciente, aunque se
trataba de un petróleo que no procedía de yacimientos naturales, sino de la destilación del
carbón de pizarra. Posteriormente, al explotarse los yacimientos naturales del subsuelo y
obtenerse sus derivados (gasolina, queroseno, gasóleo y fuel-oil) por medio de la refinación y
destilación, su importancia creció enormemente. No llegó a alcanzar un uso a escala
industrial hasta la invención del motor de explosión o de combustión interna de gasolina
(Daimler y Benz, en 1885) y de aceite pesado (Diesel, en 1897). En 1911 rodaban ya dos
millones de vehículos de gasolina por todo el mundo. Más tarde se desarrollaría también la
aeronáutica.
La electricidad ya se conocía, pero la invención de la dinamo industrial permitirá la
producción de electricidad en las centrales hidroeléctricas, mientras que el alternador y el
transformador hicieron posible el traslado de la corriente eléctrica.
1.3. Nuevas industrias.
La industria química fue un sector de gran dinamismo que se aplicó a numerosos
campos: los colorantes, los explosivos (nitroglicerina, dinamita), abonos, farmacia,
vulcanizados (descubierto el procedimiento por Goodyear, y en donde destacarán las
empresas Dunlop, Firestone, Michelin y Pirelli), etc.
Unidad 5. La II Revolución Industrial y el Imperialismo
2
Los colorantes sintéticos o artificiales vienen a sustituir a los naturales, que resultan
insuficientes ante las elevadas exigencias de la industria textil.
Los explosivos se utilizan a partir de los descubrimientos de la nitrocelulosa (Schönbein,
en 1846), la nitroglicerina (Sobrero, en 1847) y la dinamita (Alfred Nobel, en 1866), que
es una mezcla de nitroglicerina y un determinado tipo de arcilla.
La nueva metalurgia. La obtención del acero se conocía con anterioridad, pero el
procedimiento era caro y difícil. Las innovaciones en el procedimiento de obtención van a
traer como consecuencia la sustitución del hierro colado (hierro fundido) por el acero.
Los más destacados de estos avances tecnológicos son el convertidor Bessemer (1856),
que permite aumentar la producción de acero hasta 1.000 toneladas al día; el horno
Martin-Siemens, que economiza combustible y produce acero más homogéneo y barato.
De esta manera, el hierro, convertido ahora en acero, sigue siendo el metal más
importante de la segunda revolución industrial. A diferencia de la primera, en la que se
aplicaba casi exclusivamente a los ferrocarriles, ahora se utiliza también en la
construcción (torre Eiffel, puentes), en la maquinaria agrícola y en los armamentos
(artillería, blindaje, cascos para los barcos, etc.).
Otros metales: El uso del níquel hará posibles nuevas aleaciones, como el acero
inoxidable; el aluminio comenzará a emplearse para usos domésticos e industriales
desde 1880, etc.
Las industrias eléctricas fueron variadas. Estas industrias demandaban nuevos metales,
como el plomo o el cobre, y contribuyeron a desarrollar los tranvías y trenes eléctricos,
las cadenas de radio, el cine, etc. Destacará la Philips en Holanda o la Siemens en
Alemania.
El petróleo fue otra de las nuevas industrias. En 1859 se producía la primera extracción
en Pennsylvania; poco después, Rockefeller construía la primera refinería en Cleveland
(Ohio) y marcaba el inicio de los oligopolios petrolíferos.
Por último, es de destacar la industria de la alimentación, adecuada al nuevo y mejor
nivel de vida, con sus variantes conserveras y frigorífica (1878) y con empresas como
Nestlé.
1.4.Desarrollo del capitalismo.
Unidad 5. La II Revolución Industrial y el Imperialismo
3
La primera transformación radicó en la dimensión de la empresa: se prefieren las grandes
unidades de producción y tienden a desaparecer las pequeñas empresas. La fabricación se
orientó a la producción en serie (como vimos en el documental con el ejemplo del alfiler, la
idea ya la propuso el gran economista Adam Smith), reduciendo costos y aumentando la
producción. La fabricación de automóviles Ford, en Estados Unidos fue una las primeras
empresas en implantarlo, es por ello, que al sistema en serie se le denomina también
fordismo.
La inversión que conllevaba la creación de una empresa estimuló la relación entre banca e
industria, emprestando (se denomina en economía financiación) la primera, el dinero
necesario a la segunda, a cambio de unos interesas, así bancos y empresas salían ganando. La
creación de empresas llevó a diferentes países a organizar, dentro de sus territorios, espacios
destinados a las mismas, existiendo en la actualidad zonas fuertemente industrializadas.
Europa se convertiría en el centro económico del mundo, realizando la mitad de las
exportaciones y recibiendo más de las tres cuartas partes de las importaciones, y junto a los
Estados Unidos, tendrá el dominio financiero del mundo. El aumento del volumen comercial
fue posible gracias a los progresos del transporte, las vías de comunicación (apertura del
canal de Suez en 1869 y el canal de Panamá en 1914) y al fortalecimiento económico de las
empresas y el sistema capitalista europeo.
2. Movimiento obrero.
2.1.La nueva sociedad de clases.
La industrialización trajo una nueva clase dominante, la alta burguesía, compuesta de
empresarios, banqueros y propietarios agrarios. Por debajo, había una mediana burguesía
compuesta por profesionales (abogados, médicos, profesores…) y una pequeña burguesía
compuesta por empleados y artesanos, cuyas condiciones de vida eran similares a la del
proletariado. Los hijos/as de la burguesía acababan acudiendo a la universidad y formarían la
clase intelectual.
Por debajo de la burguesía se situaba el proletariado, la clase obrera, la mano de obra
necesaria para que el sistema industrial funcionara. En los primeros tiempos de la
industrialización, no existía ninguna legislación laboral que regulase las condiciones de
trabajo, estando sometidos a una dura disciplina laboral, donde los castigos y las
Unidad 5. La II Revolución Industrial y el Imperialismo
4
penalizaciones eran frecuentes. Jornadas de 12-14 horas, con salarios muy bajos y unas
condiciones lamentables, trabajando además niños/as (cobraban el 10% de los hombres) y
mujeres (cobraban el 40% de los hombres). Estas condiciones generaba que la esperanza de
vida fuera baja y a los 50 años, las personas se encontraban muy envejecidas.
Las duras condiciones de trabajo y la miseria en que vivía la clase obrera bajo el sistema
industrial, generó una nueva conflictividad social. El proletariado, poco a poco y con
esfuerzo, va a unir fuerzas, con el objetivo de mejorar sus condiciones laborales y de vida.
2.2. Primeros movimientos obreros.
- Las primeras acciones del proletariado se van a dirigir a la destrucción de los instrumentos
que causaban su esclavitud y la falta de trabajo: las máquinas. Es el movimiento “ludita” (en
honor de uno de los más destacados destructores de telares, Ned Ludd), surgido en Inglaterra
hacia 1780.
- Con posterioridad, los obreros se fueron uniendo y creando asociaciones, con la finalidad
de luchar por sus derechos y mejorar sus situaciones, así tenemos las primeras
Sociedades de Socorro Mutuo, a través de pequeñas cuotas se crearon fondos,
permitiendo que los obreros pudieran acudir a las primeras huelgas y seguir cobrando.
- El relativo poco éxito de las reivindicaciones puramente laborales, hizo que la lucha
obrera se conectara con la acción política. La concreción de este objetivo se hizo con la
Carta del Pueblo (People’s Charter) de 1838, origen del movimiento “cartista” y
elaborada por la Asociación de Trabajadores de Londres. Los obreros, por medio de
cartas, solicitaban mejoras laborales, llegándose a aprobar la Ley de Minas de 1842 y la
Ley de las Diez Horas de 1847.
- Con todo, habrá que esperar al último tercio del siglo XIX, o incluso a principios del XX,
para que se produzca en casi todos los países el reconocimiento de los sindicatos.
También fue en Inglaterra donde se crearon los primeros sindicatos, que reuniría a los
obreros de un mismo oficio, con la finalidad de unir fuerzas para mejorar su situación
laboral.
- Además, se crearían los Great Trade Union, sindicatos más amplios, formado por
trabajadores de diferentes oficios.
Unidad 5. La II Revolución Industrial y el Imperialismo
5
2.3. Ideologías del movimiento obrero.
La conciencia de clase que va a ir impregnando al obrero, tendrá como base ideológica a
diferentes corrientes de pensamiento:
Socialismo utópico: Francia poseía una gran tradición revolucionaria e intelectual, será allí
donde surjan, en la primera mitad del siglo XIX, algunos pensadores que expondrán las
primeras teorías sobre la sociedad y sus problemas (reciben, por ello, el nombre de
socialistas) y proponen soluciones ideales, que más tarde Marx, para diferenciarlos de su
“socialismo científico”, calificaría de utópicas. Criticarán el sistema de producción capitalista
y plantearan medidas para acabar con la propiedad privada y dar paso a propiedades
colectivas.
Socialismo científico o marxista: Fue ideado por Karl Marx y por Engels. Marx, al hacer el
estudio de la historia, parte de que en toda sociedad o “estructura social” existe una
infraestructura material, que es la economía, sobre ella se apoya la sociedad y las relaciones
que esta genera, la superestructura. Según sea la infraestructura así será la superestructura, y
cualquier cambio en aquella, producirá un cambio en ésta y viceversa.
El sistema económico de la sociedad, crea un conjunto de relaciones según sea uno,
propietario de los medios de producción o no propietarios. El enfrentamiento entre ambos
grupos se habría repetido a lo largo de la historia.
En el caso de la sociedad capitalista, estaría compuesta por la burguesía (posee los medios de
producción) y el proletariado (no posee los medios de producción); la lucha entre ambos
grupos se conocerá como lucha obrera. Sus teorías concluyen con el triunfo de los
proletarios en esta lucha que llevará a esta clase al poder, y producirá el establecimiento de
una dictadura transitoria, la “dictadura del proletariado”. Esta dictadura daría paso a una
nueva “sociedad socialista” en la que no habrá clases, ni Estado.
Otros conceptos importantes en la teoría de Marx son los siguientes:
o La necesidad de participar mediante “partidos políticos” en la democracia burguesa.
o El valor de un objeto se obtiene sumando el trabajo que haya costado producirlo y
el costo de su materia prima.
o La plusvalía, el trabajador recibe una cantidad, muy por debajo del trabajo que ha
Unidad 5. La II Revolución Industrial y el Imperialismo
6
aportado a la fabricación de ese producto, esa cantidad que no recibe y que el
empresario se queda, se conoce como plusvalía.
Anarquismo: Se trata de un movimiento poco homogéneo que tiene entre sus máximas
figuras a Mijail Bakunin. Sus ideas principales se pueden resumir en las siguientes:
o Defiende ante todo, la libertad de las personas.
o Está en contra de todo sistema de poder establecido y especialmente en contra del
Estado y de la Iglesia como institución. La causa es que todo poder corrompe
siempre, porque la autoridad supone la primacía de un hombre sobre el resto, que,
al imponer esta autoridad, elimina parte de la libertad del gobernado. Por tanto es
imprescindible destruir y eliminar cualquier tipo de poder.
o Los anarquistas están también en contra de la propiedad privada de los medios
de producción, que deben ser socializados.
o Partidarios de la eliminación de las clases sociales.
Para alcanzar todas estas transformaciones en la estructura social es necesaria una
revolución, que ha de ser espontánea, de las masas trabajadoras y campesinas contra todo el
poder establecido. Tras ella se creará una nueva sociedad anarquista, organizada en torno a
comunas autogestionarias (comunidades de producción y consumo que se autoabastecen)
básicamente agrarias. Los individuos ingresarían en ellas de forma voluntaria, e igualmente
voluntaria sería la unión entre comunas de una región o regiones del mundo hasta formar
federaciones mundiales; también sería libre la separación de las mismas.
Sus acciones políticas se centrarán en la propaganda y reivindicaciones llevadas a cabo por
su sindicato.
2.4. La Internacional Obrera.
Los movimientos obreros, la conciencia de clases y las ideologías obreras, acabaron
asumiendo que el movimiento obrera era algo global, por lo que era necesario reunir a todos
los obreros del mundo. Así se organizó, la I Internacional Obrera o Asociación
Internacional de Trabajadores en 1864, amparada por marxistas y anarquistas.
Discrepancias internas (entre anarquistas y marxistas) hicieron que se acabara disolviendo en
1876.
Unidad 5. La II Revolución Industrial y el Imperialismo
7
En 1889, los marxistas fundaron una II Internacional, que tendría validez hasta el inicio de
la 1º Guerra Mundial, cuando los nacionalismos se impusieron a la idea global del
movimiento obrero.
Finalmente, se organizó una III Internacional creada por el partido comunista ruso en
1919 y que se mantuvo en vigor hasta 1943, debido en gran parte a la II Guerra Mundial.
3. El Imperialismo.
3.1. Causas de la expansión colonial.
Las causas son diversas y hay que entenderlas como parte de un todo. Estas fueron:
- Económicas, la industrialización produjo la necesidad en las potencias europeas de
nuevos mercados con una triple finalidad: obtener materias primas baratas, tener más
mercados en los que vender sus excedentes (productos que en sus países no vendían) y
crear nuevas empresas, al ser la mano de obra más barata.
- Aumento de población, las mejoras en materia de alimentación y sanidad de finales del
XVIII y primera mitad del XIX produjo un ascenso de la demografía en Europa, que a su
vez originaba un alto paro, lo que llevó que muchas personas emigraran, de las
metrópolis a las colonias.
- Exploraciones, a mediados del siglo XIX, numerosas zonas del interior de África, Asia y
de los océanos eran prácticamente desconocidas, por ello, numerosas exploraciones se
pusieron en marcha, conociéndose lugares nuevos para los europeos.
- Nacionalismo, la segunda mitad del siglo XIX es una época de triunfo de las ideas
nacionalistas, con importantes realizaciones como las unificaciones de Italia y Alemania.
Estos nuevos estados buscan una expansión colonial que los equipare con las potencias
históricas europeas. En algunas de estas últimas, la idea expansionista supone un olvido
de recientes desastres (en el caso francés, la derrota de Sedán y la pérdida de Alsacia y
Lorena), un lanzamiento a una política de prestigio, un intento de contener a las masas
populares. En este contexto, en el que privan los ideales de potencialidad mundial o de
prestigio nacional, no es extraño que otros países europeos, hasta ese momento, ajenos a
la expansión imperialista, se integren en esta carrera de reparto del mundo.
Unidad 5. La II Revolución Industrial y el Imperialismo
8
- El mito de la raza superior fue la base ideológica que utilizaron los europeos a la hora
de someter y adueñarse de un conjunto de territorios denominados colonias, bajos
concepciones racistas y nacionalistas. Esta teoría se basaba en la idea de una raza
blanca superior, cuyos atributos de inteligencia la legitimaban para imponerse sobre el
resto. La clase intelectual y política defendieron estas ideas y utilizaron todos los medios
a su alcance, incluida la guerra.
El racismo y el nacionalismo eran considerados como una manera de reafirmar la fuerza
y la superioridad cultural de cada país, considerando la necesidad de difundir su cultura
y civilización entre los pueblos considerados inferiores.
- Causas políticas, la expansión de las diferentes potencias aumentará la rivalidad entre
ellas, el tener colonias era calificado como la grandeza de un país, por lo que contra más
colonias, el país era más importante. Esta pelea por ver quién era el país con más
colonias, acabaría desembocando en conflictos que llevarían al estallido de la 1º Guerra
Mundial.
3.2. Modalidades de la colonización.
3.2.1. Según la forma de explotación.
Colonias de explotación. Territorios en los que, a partir del establecimiento de grandes
compañías comerciales, funcionarios o militares explotaban los recursos naturales. Es
el caso de la India y de los territorios del África negra, donde se impuso una agricultura
de plantación (café, algodón, caña de azúcar...) y la explotación minera.
Colonias de poblamiento. Territorios donde se establecieron grandes contingentes de
inmigrantes europeos. Trabajaban como colonos agrícolas en granjas, ocupando las
tierras expoliadas a los indígenas, los cuales eran trasladados a tierras menos fértiles o
utilizados como mano de obra barata. Es el caso de Canadá, Sudáfrica, Nueva Zelanda y
Australia (imperio británico) y también de Argelia y las Antillas (imperio francés).
Concesiones. Consiste en un acuerdo de tipo comercial por el que se produce un
asentamiento, generalmente en una ciudad con puerto de mar, para facilitar
intercambios comerciales, concesión de minas, construcción del ferrocarril... El ejemplo
típico es Hong-Kong (concesión británica hasta el 30 de junio de 1997).
Unidad 5. La II Revolución Industrial y el Imperialismo
9
3.2.2. Según la forma de gobierno.
Colonia. Se impuso en los territorios donde existía un gobierno autóctono y que, por el
derecho de ocupación, han caído bajo la órbita de la metrópoli, la cual impone sus
funcionarios e instituciones, organizando la administración. Han perdido cualquier tipo
de gobierno indígena anterior a la conquista.
Protectorado. Se respeta el gobierno indígena, que organiza la vida interior del
territorio; sin embargo, debe seguir las directrices de política exterior marcadas por la
metrópoli, y en la práctica cae en una sumisión total al gobierno de la potencia con la
que ha pactado. Es el modelo de administración política que utilizaban los franceses en
África y en Indochina, los ingleses en la India y en Birmania o los españoles y franceses
en Marruecos.
Territorios metropolitanos. Sistema utilizado por los franceses. Los territorios
coloniales eran considerados una prolongación del territorio metropolitano y sus
habitantes eran representados en las instituciones de gobierno de la metrópoli. El caso
más característico fue Argelia.
Dominios. En las colonias de poblamiento inglesas, las colonias consiguieron el
autogobierno, tenían sus propias instituciones, parlamentos y plena libertad en política
interior. Se mantuvo el vínculo con la metrópoli por medio de la figura del gobernador.
Es el sistema que se implantó en Canadá, Australia y Nueva Zelanda.
3.3. Las metrópolis se reparten el mundo.
Los principales imperios coloniales europeos fueron el francés y el británico, pero otros
muchos poseyeron colonias:
- Imperio Británico. A finales del siglo XIX poseía el mayor imperio colonial y
controlaba las rutas marítimas. Tenía posesiones en África, entre ellas Egipto (controlaba
el Canal de Suez) y Sudáfrica. Pero sin lugar a dudas, la India sería la colonia más
importante de Gran Bretaña, vendiendo sus excedentes y encontrando materias primas a
bajo costo para sus empresas.
Unidad 5. La II Revolución Industrial y el Imperialismo
10
- Imperio francés. Se instaló principalmente en África, controlado parte de la zona central
y norte. Por su parte, en Asia se situaría en la zona de Indochina, actuales Laos,
Camboya y Vietnam.
- Japón, al igual que Estados Unidos, llegaron tarde a la Revolución Industrial pero
tuvieron un avance muy rápido, convirtiéndose en grandes potencias. Ambas se
extenderían por sus zonas de influencia, en el caso de Japón por Corea y Manchuria.
- Estados Unidos se extendió por su zona de influencia, hacia el Pacífico y el Caribe. En
una guerra rápida expulsaron a los españoles de Filipinas, Cuba y Puerto Rico, y se
apoderaron de una franja de Panamá, donde acabaron de construir el canal del mismo
nombre.
- Otros países que participaron activamente del reparto fueron: Bélgica (se adueño del
Congo Belga), Holanda (zona de Malasia), Italia (Libia), Alemania (Camerún) o
Portugal (Angola y Mozambique).
3.4. El reparto trajo problemas.
El afán colonialista de las diferentes potencias ocasionaría diferentes enfrentamientos,
siempre en suelo colonial y nunca en el suelo de la metrópoli. Estos enfrentamientos
impulsó la convocatoria de la Conferencia de Berlín (1885). En ella se decidieron las
normas para repartirse el territorio y las zonas que ocuparía cada potencia.
Algunos de estos conflictos fueron:
- En la zona del lago de Chad, chocaron británicos y franceses (1898).
- En la zona de Sudáfrica se enfrentaron holandeses y británicos (1899-1902), debido
a que en la zona holandesa se encontraron algunas minas de oro, suceso que precipitó
la invasión británica de varias tribus que se encontraban en zona holandesa. Al final,
los británicos se acabaron anexionando los territorios holandeses.
- El continente asiático no se quedó al margen de estos enfrentamientos, la zona de
mayor conflicto fue China. Las llamadas Guerras del Opio (1839-1860) entre
británicos y chinos, forzó la apertura del comercio en China, hasta el momento
monopolizado por los británicos. Mientras los europeos entraban en china, la
Unidad 5. La II Revolución Industrial y el Imperialismo
11
población autóctona contestó con diferentes revueltas sociales como la de los bóxers
(1899).
3.5. Consecuencias del Imperialismo.
Modificación del territorio. Las metrópolis modificaron el territorio de sus colonias a su
antojo, así, crearon nuevos países, modificaron sus economías y sistemas de gobierno,
sobreexplotaron sus recursos y construyeron diferentes infraestructuras, necesarias
para llevar a cabo sus actividades empresariales.
Impacto demográfico. La introducción de medidas higiénicas y la construcción de
nuevos hospitales en los que se vacunaba a los indígenas permitieron la reducción de
epidemias. Como consecuencia, la mortalidad descendió notablemente y la población
aumentó. Pero en muchas colonias, especialmente del continente africano, se rompió el
equilibrio entre población y recursos, empezándose a producir una situación de
subalimentación crónica.
Colonización cultural. La llegada de los europeos produjo también un impacto cultural
muy fuerte, bajo la idea de que la cultura europea era muy superior a las indígenas, los
europeos se dispusieron a implantar sus costumbres, restándole identidad a los pueblos
conquistados. Este fenómeno denominado aculturación, se dio más en África que en
Asia, donde culturas como la China o la India resistieron mejor la colonización cultural.
Consecuencias económicas. Las colonias pasaron a ser un territorio cuya función
principal era satisfacer los intereses económicos de las metrópolis, esto provocó el
abandono de los cultivos tradicionales y la intensificación de grandes plantaciones:
cacao, café o algodón. Con ello, se impuso el capitalismo y el modo de producción
europeo, los indígenas se quedaron sin propiedades y debían trabajar para ganar un jornal
y con ese dinero, acudir al mercado a comprar sus alimentos. Todo lo referente a los
talleres tradiciones o manufacturas locales quedó enterrado, en detrimento de los objetos
importados de la metrópolis, más baratos y realizados en serie.
Desarticulación de las sociedades tradicionales. Todas las causas anteriormente
mencionadas, trajo consigo un cambio radical, adaptándose forzosamente al modo de
Unidad 5. La II Revolución Industrial y el Imperialismo
12
vida europeo, fracturando y acabando con las formas de vida tribales y el antiguo
sistema de jerarquías sociales indígenas.
Unidad 5. La II Revolución Industrial y el Imperialismo
13
Unidad 5. La II Revolución Industrial y el Imperialismo
14
Top Related