POEMAS, TROPICO Y OCASO
-1-
AUTOR: PEDRO GUTIERREZ(PEDROYAAUTOR: PEDRO GUTIERREZ(PEDROYA) )
Abandono
Mi bella ilusin, frgil consolacin,
mi dulce amor. Mi rostro envejecido
refleja los lustros que llevo desolado.
Te fuiste hace tiempo, no escribiste una carta
ni un poema ni papelito rayado
testigos de tu presencia en esta fra estancia.
Tu cama es un santuario.
La luz del sol refleja el sitio donde antao
posaba tu cara blanquecina. Ya no reclino mi cuerpo en su suave almohada,
no es lo mismo. Ya no es dulce compaa.
Se aspira la soledad.
Las plantas que tanto cuidabas se han quedado inmovibles. Tu alma mas que tu humana presencia ha dejado un vaco
que hiela la sangre.
La Hiedra que tanto luchaste, por extinguir ha dominado tus predios amenazando con cubrir tus paredes de
verdor en dura competencia con el limo que arrastra
sus tentculos por el piso.
-2-
Decidido a tomar otro sendero
he clausurado este antiguo nido para que sea tu refugi.
Si algn da decides tu regreso, mores en ella hasta que el moho
de los tiempos acabe mi recuerdo.
-3-
Abuela
Eras como res al matadero, Esclava en tu misma tierra,
Esclava Juda.
Restos de un holocausto quedaron grabadas en tus sienes.
Tu antigua generacin qued atrs, llegas a vivir una vida nueva,
sin mas limites que tu propia mente.
Un Prncipe de la Amrica nueva, tom tus destinos,
no preguntaste nada, era tu ngel guardin,
la calidez que necesitabas, el sueo cumplido de una bella durmiente.
Tan solo cincuenta aos han pasado,
hoy estas casada, tu prncipe es tu esposo,
ahora tu vida ha cambiado, tu prole es extensa,
tus sueos corretean, te halan, se ren.
Te llaman Nana,la Nonna
Simplemente,
Abuela
-4-
Acordes
Escuchas los sonidos de mi cancin.
Entre acordes, hablas de nosotros.
Mientras entono tus melodas ms preciadas,
contemplas mis mejillas, parezco un ngel.
Mi cara se torna terciopelo,
mis ojos parecen blanquecidos por efecto de la luna.
Tonada a tonada, empieza el cortejo orquestado por los sonidos de la
luz.
-5-
Agazapada
La paz se queda dormida
cobijada y agazapada en la concordia del acuerdo
y la alianza soada.
Los smbolos que tanto amamos son pisoteados por las intrigas y la codicia del fiero dragn,
hambriento pidiendo mas festn.
La conciliacin ms querida, se guarda en la gula
de las barrigas hinchadas de la unin de unos pocos
para el bienestar de sus propios.
La injusticia campea, la justicia se esfuma,
la vida se arranca por el arte de la ficcin.
Vivimos encerrados en nosotros mismos.
Ansiamos las cosas ms vistosas. Entrenamos a nuestros
hijos en el rito del racismo de las superficies ms bonitas.
Creamos nuestras bases sobre terrenos materiales.
Los pocos cultivos espirituales no sobrepasan la media
de lo tangible.
Cultiva l espirito, ara tu conocimiento, hazlo mas parecido
al omnipotente: Yahweh, Dios, Jehov Como lo quieras llamar.
-6-
Agravio
En tus ojos vivi la alegra, en la metamorfosis de tus facciones adornadas por la nariz, y las arrugas que entumecan tus ojos
hinchados de felicidad en los extremos.
En tu mirada vivi la esperanza hecha moza, con la inocencia de una nia, con las caricias
en sensuales manos aromatizadas de esencias servidas en cenas sagradas de noche buena.
Contigo aprend a volar aviones de papel
con la mente de un nio travieso y angelical, con las rodillas raspadas oliendo a estircol.
Pero, todo termin, lleg nio con otros juegos.
De tus agravios, no me quiero recordar. En las noches, la lagrima deseo secar. De mi mente quiero expulsar la sonrisa
que llenaba los espacios vacos del alma.
Hundo mis manos en las calientes arenas castigando mi cuerpo inocente de las culpas
cometidas por mi corazn cruzado por flechas envenenadas de la pcima malsana de tus amores.
-7-
Agua Encendida
En noches de vinos efervescentes,
destapo el corcho de las botella aromatizada por la entraa apetecible de tu estrechez.
A orillas de lagunas ennegrecidas,
me sumerjo bajo la luz de las estrellas para descubrir submarinos
envistiendo los arcos de tus piernas.
Al deslizarte sobre el agua cristalina, tu cuerpo flota en indescriptible pureza. Pareces un delfn perturbando el agua
fresca, entrando saliendo de ella.
Llegas a la orilla sin aliento, esperando un beso que devuelva
tu fuente perdida y aguardas un beso, de agua encendida.
Quiero tomar de tu cuerpo cada gota, guardando cada una en cofre de plata
para as disfrutar esta noche cada da del resto de mis das.
-8-
Alegra!
La alegra florece, la voluntad se asoma,
con grato aroma, en el verde pasta.
Entre lluvias serenas, mi corazn sostienes,
en las rimas al comps de las noches claras.
Alegra que no te veo dibujada en la sonrisa de quien angustiado, vive su triste agona.
Alegra! Llena el contento, con el regocijo satisfecho
del corazn gozoso, con el dulce agrado
de la gustosa euforia.
Alegra es tiempo que dejes el pesimismo y no cabalgues
en la nostalgia en donde muchos desagravios aumentan tus disgustos.
Amarrada en lo mas alto
de un precipicio temblando, aferrada a la pared del fastidio,
te lanzas al vasto precipicio.
-9-
Almas insufribles
He intentado ocultar mis temores, tratando de acallar las conspiraciones
de tantas mentes en animosas codicias. Almas insufribles viviendo vidas ajenas.
Intuyo corazones dbiles en corazas edificadas en miserias concebidas de ilusiones frustradas y nacidas
de esperanzas truncadas.
Abrupta codicia no le dejas aspirar el rico ensueo del lindo despuntar de las maanas, en rayos solares que despiertan vidas silvestres.
Escabrosa apetencia no le permites
disfrutar las cosas ms sencillas, sumadas a los objetos ms sensibles, que nos permiten las humildades ms
divinas.
-10-
Amor!
Afronta mi paz
Contempla los aleteos de las aves.
Mira l vestido
verde de los pericos.
Siente los fantasmas entre las hojas
susurrando tus Mejillas.
Desnuda tus pies divinos en arena del manantial
sutil.
Escucha el canto acompasado de los consagrados
autores: el ruiseor
el arrendajo.
Escribe nuestros nombres, rodalos
con la figura acostumbrada.
Sube la mirada Al azulado cielo
buscando rendicin.
-11-
Amor y Odio
Amor y Odio!
Las dos inyectan su veneno mortal.
Son hermanas,
son apasionadas,
viven juntas,
son distintas,
se abrazan,
pero no se llegan a querer.
-12-
Andante
Camino empedrado, atasca tu tobillo. Andante arduo,
no detienes tu andar.
Tu voz corra mas que tus pies, eras elocuente,
destacaba tu porte, tambin tu imagen.
Eras fuerte,
mas fuerte era tu mente, todos apuraban el paso para alcanzarte,
parecan borregos, t los controlabas,
ellos lo saban, no lo podan evitar.
Pudiste gobernar,
pudiste reinar, pero tu reino no era de este mundo.
Seguiste los pasos,
que te dio el creador.
-13-
Archivo Muerto
T vi ayer, si acaso lo note!. Solo un viejo romance,
pero fuiste mas que eso.
Recuerdo que eras todo, recuerdo haberte llamado, suplicaste, no molestar! pues, tus ocupaciones,
copaban tu cabeza.
Pero te llame otra vez, y fue positiva la respuesta, Hola!, Hola! Contest. Te lleve al cine, pero la nica pelcula filmada Fue nuestros labios,
en la pasin ms romntica.
Esa noche hice mo, lo que ya Posea.
Solo nos separo la colcha y el piso, y el suelo se estremeci.
Pero todo fracaso. Esa noche eras tu, no tu cara.
Lo hice en realidad con una nia
conocida la noche anterior. Pero,
esa cara no impidi el sexo Hasta lo ms grande.
Comenzaste a dominar mis flancos,
tu mente quera dominar la ma, y terminaste siendo hostil a la razn.
Un da volv a casa dejando tus recuerdos en el archivo muerto de mi mente.
Finalmente te encerr en estas letras.
-14-
Arranca mis ojos
Arranca mis ojos, virtelos en tus manos,
perfumadas de inocentes aromas de cosmticos al mejor estilo Francs.
Viste tu figura de seda, con un vestido ajustado a tu piel, enalteciendo
tus delicadas formaciones en onduladas carnosidades.
Baila el merengue ms movido,
haciendo flotar los pliegos de tus faldas en ondas saltarinas de los adornados,
en los escenarios luminosos ms lindos de las coreografas artsticas ms alegres.
Despoja tus faldas para bailar un ritmo
ms caliente acompaado por los seductores rumbeares del Mambo, que me haca suspirar
con su ritmo efervescente lleno de pasin y sensualidad.
-15-
As
As como ayer mis
labios hmedos retocan
las paredes
de tu frente, decorada
en Grafitos, baados
del azul cielo,
amarillo esperanza
olor a
leo fresco.
-16-
Avatares
Latas
de refresco vacas
en terreno baldo, somos
nosotros.
Vamos de
lado a
lado arrastrados
por el
viento.
Recibimos la
inclemencia del
clima y
los avatares del
tiempo.
-17-
Bajos Instintos
Amor me ahogo en la tristeza del quebranto de la dolencia insensible de la hipocresa
de aquellos humanos cegados por la codicia de apariencia libertaria, buscando riqueza
Fijo el iris de mis ojos
en las ambiciosas campaas, tumbando Tiranos de barros, que esculpen dolos paganos
en tierras bien autenticas.
Recintos odiados por sectas derrotadas hace muchos aos,
por el smbolo de las lunas, l numero trece.
Me angustia pensar en cosas que vuelven en repentinos,
vicios circulares, escondidos esperando solo las acciones
de nuestros ms bajos Instintos.
-18-
Bal de Anhelos
Si vas a buscarme, no insistas.
S esperabas una flor colgada en tus bellos bustos no la tendrs.
S quieres encontrar una sonrisa matinal
solo una cara inexpresiva y fruncida.
Comprende mi forma de ser, soy gorrin enjaulado en las cuatro paredes
de mi mente.
Soy mas de ese mundo autista.
En su interior encontr un lugar para esconder mis temores.
Form una coraza amiga.
S me quieres,
busca all, y encontraras ese sitio bello,
l cual he llamado Bal de mis Anhelos.
-19-
Bruja
Hola!
Misteriosa mujer, vengo hablar de ti,
traigo a reflexin tu dolor.
Vengo a vociferar de tus penas. Seres que hieren tus entraas. Amarga son las despedidas, agria es tu vida en soledad.
No qued un solo hijo, la guerra te los quit,
aunque el tiempo ha pasado, no dejas de aorar.
Riegas tus flores, plantas otras ms.
limpias tu casa, ocupas tu tiempo, acortas tus das.
Ahora cras felinos, los recoges a todos,
ahora son tus buenos hijos.
Tu vehculo, un modelo europeo.
Ya no nunca lo pintaste, No se hizo importante.
Ya casi,
no hablas, no se te ve,
ya no eres tu, no perteneces a este mundo.
-20-
Ahora, te llaman espanto,
te llaman bruja,
no s que otra cosa.
Pero yo, nunca me burle de ti.
Al final todos tenemos algo de ti..
-21-
Campos Estriles
Las joviales briznas aguaron tus ojos, que en la dulce brisa deambulan
en ondas suaves de inocente vaivn.
En grado smil, son nuestros amoros divagando los tiempos en ingenuos
atardeceres llevados por los vientos.
Muy de maana antes que la gris caiga, salgo a cultivar tus romances con la esperanza
puesta en la recoleccin de tu huerta.
Caen las estaciones en lindos amarillos. La jornada fue exitosa para otros cultivos
donde nacieron los hijos en otros suelos plantados.
Pero los nuestros son estriles, de oscuras tardes de charlas, platicas de estudios a largas.
Un da nos cansaremos de rboles
frutales sin frutos recogidos. Tomaremos los asadores mellados
e iremos a cultivar otras tierras.
-22-
Castigo
No describas
el amor sino lo sientes.
No
deshojes margaritas.
Tu, no quedaste
en gravidez.
No dejes tus raudales de sangre salpicar
la alfombra.
El remedio, eres tu.
La
impunidad ser tu castigo.
La soledad
se impondr.
Las culpas no te dejaran
dormir.
Los das secaran tu
alma, no tu piel.
-23-
Es lo de menos.
Finalmente llegaran
tus ltimos das.
Necesitaras compaa,
pues no
eres muy
experta en eso de
cuidarte tu
misma.
Buscaras ayuda,
la tendrs.
Ella
limpiara tus
heridas.
El lavara
tu alma.
-24-
Celia...
Tus races te hicieron justicia creando los matices de tu boca
en sonora efusin, envidia de la voz mas consagrada, pues tu podas hacer cantar bailar, llorar, suspirar y rer.
Nunca imagine tus orgenes, tenas de todos los rincones, eras la negrita de los ritmos,
de los vestidos vivos. Eras la Rumbera de Amrica,
La Salsera, la romntica. La sonora que nace de la tierra
y se convierte en diosa.
A ti invocare mis plegarias, cuando quiera
cantar bailar
Y gozar!
-25-
Comparacin
Eres la flor de Verdolaga. Tu flor amarilla,
tus hojas en palma pequea. adornan tus pequeeces.
No te envidia la verbena con sus rosas rosadas,
vestidas de hojas flechas.
Te hace sombra la Acacia, mas alta, mas frondosa.
Pero con hojas pequeas, en flores de bellos rozados.
Te enfrento a la bella Amapola,
con sus flores rojas, pero castigada, por mala hierba.
Y me acuerdo de ti, mi bella Azucena,
de tus flores blancas, linaje de hermosas Orqudeas.
No hace mella el Aguacate,
el bello Almendro , el lindo Anan,
el atractivo Avellano. No ms bellos.
Pero gustosos al paladar,
no al apetito visual.
-26-
Cuando me aparto de ti
Cuando me ausento de ti, voy a recorrer las playas con sus olas vespertinas que chocan en mis dedos
en frescas y suaves burbujas dibujando con suavidad
las lneas de mis carnosas extremidades llenas de arenas nacaradas por las minsculas
partculas de las orillas.
Cuando viajo fuera de ti, me escondo en las imgenes de la policroma del arco iris
cruzando los cielos impregnados de sutiles bandadas de aves
formado las flechas inocentes, con la frente erguida de los lideres
que dan fuerza a sus osadas, transitando las inmensas distancias
del firmamento de los poemas.
Cuando me acuerdo de ti, mi mente vuela a los vrtices de los fros nevados soados,
encima de los cndores solitarios, dueos en seoro de las alturas. Planeando caer en las planicies,
me lanzo en picado en vuelos que me transportan a mundos
distintos de las realidades fatales de mis ms grandes angustias.
-27-
Cuatro letras: AMOR
Que bello es vivir de cuatro letras,
sintiendo la brisa matutina de tarde, paseando por la rivera de los ros posando la mirada en las piedras, que voy tirando en sus llanuras.
Que incomodas son esas horas
cuando cuento los minutos avistando la esquina que cruzas, esperando ver tu figura a lo lejos
mostrando su sonrisa restauradora.
Que horribles son los celos, llegando a los limites infames de la ebullicin de los cauces
de mis venas, en exticas comedias melodramticas.
Que crueles son esos sonidos, transformando cerebros lucidos
en mentes esquizofrnicas, producto de las disminuidas fuerzas de las cuatro letras.
Me haces ver tonto en demasa.
Con vestimentas sedosas, prendiendo una flor en la solapa,
oliendo a aromas perfumados del jazmn de mis jardines
Me inspiro en tu nombre, con lagrimas asomadas de tan lindos recuerdos pensando en que perd
o que gane de ti.
-28-
Danzas del desierto Milenario
En tus tibios ojos conoc el bello prisma color de tu mirada en crepsculo. De tu boca, la sonrisa detrs de un vello,
de milenario culto en doncella virginal.
La danza de tus caderas simboliz el nico ritual conocido por mi razn.
Ritmo sensual al servicio la seduccin en dulces movimientos de inspiracin.
Tus lindas prendas adornaban tu figura
en atrayente vbora cautivadora de mis deseos, impregnados de inciensos,
tomando los brebajes ms esquistos.
Bellas carpas blanquecinas a la luz de la luna, idolatrada por las antorchas
en religiosa vigilia de los silencios acompaando la lisura de los danzares.
Las caravanas de Dromedarios levantaron
el alba impregnada de mis recuerdos, de noches fras reunidas en fogatas
compartiendo las risas ms emocionales.
-29-
Defiendo el Amor
El amor no crea lagrimas de sangre, las crea el abandono de los das en los que paseabas los campos
de la ilusin atrapada en los brazos de los sentimientos emocionales.
El amor inspira al dulce trovador, creando las canciones ms bellas
en el balcn de tus encuentros. Perdona s la ausencia de tus odos
no deja unir a dos enamorados.
El amor nunca muere, est presente en cada rincn del alma de los seres
vivos que luchan por acariciarlo en todos los sentidos en donde la naturaleza
forma las idlicas razones.
El amor es inspiracin divina, porqu querrs compararlo con el odio que es infierno.
Pero los dos van lado a lado contrarios en el sentido.
-30-
Deseos de Playa
Agota mi vista bella tez bronceada,
alimenta mi vida, deshace tus deseos hmedos de aguas.
Corres desaforada
por la orilla de la playa sintiendo la arena tocar tus piernas
en pequeos grumos.
Lanzas tu cuerpo envuelto en arena sobre la brumosa
de la orilla embestida contra tu espalda.
Qu lindas lucen las trenzas
que adornan tus cabellos cuando saltas y chapoteas
en las aguas marinas del azulado azul de los cielos.
Qu hermosos se ven tus nudillos
vestidos con los brazaletes, amarillo oro del sol de las alturas.
No menos bellos se ven tus muslos adornados por tu bata de playa.
Qu bello luce el tatuaje
esculpido en tu figura muy cerca de tu estrecha
venus proclive al tacto de una mano escultora.
-31-
Deseos de Playa II
El rasgo aterciopelado de los rubores,
muestra los sutiles antojos de tus labios hinchados de los goces insaciables
de tus deseos en agradables retoques.
Tu afinada voz engendra los sonidos que tiernamente consienten nios, susurrando la calma de las noches
llenas de inocentes inquietudes.
Tus ojos reflejan solo las imgenes superpuestas, en cortejos de gaviotas en los acantilados de los precipicios, en revoloteos de circulares bellezas.
La ola golpea la roca y en turnos
se ocupa de llegar hasta las cercanas de tus pantorrillas, dejando estelas limpias sobre la gris arena mojada.
Los cocoteros empiezan a batirse
con el estruendo de la brisa impertinente, interrumpiendo el silencio de la tarde de delfines malabaristas del ocaso.
Las montaas de las islas a lo lejos descubren las figuras fantasmales
inertes, vestidas de gris, coronadas del color naranja del sol de la tarde.
Me interno en las aguas saladas
de la playa, para acariciar las olas que van menguando sus fuerzas
en ritual que despide el hermoso da.
-32-
Despedida Mortal
Me encuentro en un cuarto oscuro, en penumbras, con tu cuerpo dormido, ensangrentado de sangre roja del vino
regalado de tus sentimientos, en el sorbo pausado, acariciado por mi boca de la copa
de cristal obsequiada, cuando tu mirada abarcaba mis ojos, y las flores que dabas,
eran de un color esperanza buscando gotas de roco en una naturaleza casi muerta,
incitando a los ms divinos deseos de vida.
Ausente se encuentra el iris de mis ojos pidiendo clemencia al mas alto de los cielos, por errores infligidos en los lejanos albores
de mis das de felicidad, sin entender lo felices que hubisemos sido estando muy unidos, sacando de las malas, los frutos exquisitos, para luego engendrar nuevas esperanzas. Pero estoy aqu, sufriendo grandes ascuas,
ignorando que hacer con tu figura en carencias, de vida, de la cual te jactabas a todas anchas.
-33-
Diario de un Drogo hecho trizas
Me siento obligado a decir cosas que debo calificar, situaciones a las cuales adverso. No me mueven mis sentidos. Me mueven la voluntad de los dems. Intento seducir las situaciones mas complicadas en la red de las complejidades ms absurdas. Momentos en los cuales las sienes quieren salir a flotes, quedan abultadas. La vida no tiene sentido, soy yo el que divaga en lo sombro mi vida se vuelve ms hostil ya no s lo que digo ya no interpreto lo que dices estoy cansado no s que hacer, vivo un poco ms o muero un poco ms duermo casi todo el da es la nica forma de mantenerme sobrio cuando logro mantenerme en equilibrio voy al bao, introduzco las manos en lo mas profundo de mi garganta Expulsa l vmito que me quita el mareo ahora digo que si estoy bien Parece que soy mas viejo pero en realidad slo tengo veinte en el momento que estoy mas repuesto Agarro el telfono marco l numero de mi madre Me pregunta siempre la misma estupidez Que si volv a drogarme
-34-
que si volv con los amigos por que carajo no me preguntas como amanec hoy? Mejor los llamo No! hoy no lo voy hacer Pero a los pocos minutos ya estoy llamando y pido lo que ellos tienen que me transporta, que me hace sentir grande, navegando por las mareas subiendo a las nubes mas profundas Ya s Me voy a poner mi traje de superman Y me tiro de esta nube El juego me sali mal El traje no era anti choques voy a demandar a superman Superman no existe. Me volv trizas Cinco meses de rehabilitacin Otro da lo intento de mas arriba Y de verdad termino con esta Perfidia.
-35-
Divagacin
A veces siento la melancola,
ms grande.
Mi mente se sumerge,
en dolor inmenso.
No se como describirlo,
Angustia,
Pesar,
Premoniciones.
Trato de respirar muy profundo.
A veces me siento caer,
al precipicio.
Divago en la mente,
buscando mi propio origen.
Quisiera salir volando.
-36-
Divino maz
Paisaje olor a fruta fresca, ramas que acaloran tu cuerpo,
polen viajero, en busca de una morada, una nueva creacin.
Mariposa al vuelo,
hadas en celo.
Aorados sembrados, parecidos a inmensos batallones en marcha.
Inertes cosechas, alimento milenario,
culto divino.
Mazorca sin olor, oculta olor culinario.
Tus dientes tornan amarillos,
consumidos por adiccin al tabaco. Algunos blanquecinos por accin del bicarbonato.
Algunos como viejo desdentado.
Hidratados en harina, Haces mis pollos pelones y ricas arepas.
Deliciosos jojotos baados en mantequilla.
Irrumpen como estrellas en pizzas crujientes.
Tiernos son torturados y degollados para hacer
ricas cachapas.
-37-
Donde esta Mara
Oh Mara altsima!,
que lloras lgrimas y sangre, Por qu lloras?
Acaso te dejo un viejo amor? Es acaso por tu hijo?,
el cual abandonaste en el templo, a merced de no se cuantos fariseos desalmados.
y acaso lloras, porque el cordero de dios no mereci tus lagrimas ante el sepulcro divino? Dnde fuiste a parar mujer juda, Cuando Pilatos lav sus manos y
lo entrego a sus verdugos?. A donde fuiste a parar, Mara?
Dnde fuiste a predicar tu remordimiento? A donde te fuiste despus de
tus encuentros con los apstoles? Me pregunto... y
Porque Jess te neg? Al decir: Quin es mi madre y mis hermanos?
Por qu apareces en los momentos ms inusuales de la historia?
Porque en Akito? Porque te revelas a una doncella,
y luego le pides divulgar todo lo dicho, ante sus superiores?
Porque tanta vanidad? Dnde esta tu humildad? Dnde esta el Ejemplo?
S Seor De aquel Judo terco y
obsesionado con su Humildad!
-38-
Dualidad
Te veo atormentada en dualidad cristalina.
Muy temprano
abofeteas mis mejillas.
Tarde besas mis carnosidades.
Angustias con tu mirar los das tranquilos.
Danzas la balada de los ojos
en fuegos invisibles.
Amagas tus instintos.
Sorda eres a toda reaccin.
Alimentas tus entraas
con cada victoria conseguida.
-39-
El campo
Puesta del sol en el horizonte, ojos que despiertan, boca que bosteza,
piernas que se doblan, cuerpos que se estiran, vejigas que se vacan.
Aroma de humedad,
amados campos en soledad, melodas de grillos en danza nocturna, pastos verdes tumbados por la brisa.
El bramido del ganado en la distancia, Campesinos agolpados casi vestidos, rogando un sorbo del venerado caf.
Nata navegando en los pocillos,
vestigios de una leche recin ordeada.
Olores sabor a arepa raspada, queso recin Cortado.
Chistes, Chismes
Ancdotas, todo en torno al festn.
Rpidos ensilles de caballos, apuran el comienzo de los jornaleros.
-40-
El epitafio en mi lapida
Cuando entiendas cuanto amor perdiste, ya estars baando tus canas plateadas en el remanso de agua clara de los ros inundados de la lluvia de tus lagrimas.
Estars mirando los nietos de tus hijos que saltan sobre tus rodillas arrugadas por los lustros que no suelen perdonar
la piel estilizada que tanto solas cuidar.
Meseras tu cuerpo en la silla mecedora, mirando a la nada acompaada de las memorias
ms lejanas como filmes repetidos.
Pedirs permiso a tu pie izquierdo para que siga a tu miembro derecho en los paseos en domingo rutinario, para posar tus flores en mi lapida.
Rozaras la yema de tus dedos
sobre la leyenda escrita en silencio por un autor desconocido dedicado a tallar los ms trillados epitafios.
Muy de maana pedirs tomar el caf endulzado a tu paladar,
y quedaras recostada en tu cama dormida eternamente junto a m.
-41-
El nio de mi infancia
El nio de mi infancia,
no fue bienvenido en los surcos sondeados de mi vida.
Inoperante o mal ubicado su contexto.
La nia amada de mis ojos,
qued inmerecida en los rincones de mis pensamientos.
Los juegos aorados quedaron
solos en un banco de espectador.
Los amigos de la intimidad quedaron petrificados o colgados en los cuadros
de las paredes de mi corazn.
Dnde estn mis castillos de arena?
..nios exploradores con fusiles de palos y caballos de palos.
En que rincn esta mi bicicleta?
Dnde estn tus llantas, tus pedales?. En que cementerio estas?
eras solo tu y yo, en caminos empedrados
subiendo cuestas bajando laderas.
Dnde esta aquella inocencia?
En que aparador? Seor!
Eso que fue mo y fue empeado.
Ahora quiero recobrarlo Cunto cuesta?, Lo quiero comprar.
-42-
El pasado no volver
Aquella melancola, de un pasado que vuelve,
es solo una falacia, es mitologa,
se vive el presente, y muere antes de la puesta del alba.
Las flores de tu jardn que brillaron
tus ojos, no volvern, se marchitaron. nacern otras,
contemplaras otras, y acaso tu suspiro ser otro.
El sol brillante que tanto quem
tu piel, ser otro,
mas envejecido, mas caliente
mas leve.
El agua de mar que acariciara tus dedos,
tocara otros, los tuyos no se..
El amor que un da te di
muri, se transform en odio,
resentimiento, recuerdo vago.
Pero si vuelve,
en consecuencia, ser ms grande,
mas maduro, o quizs ms pequeo, perentorio o perpetuo.
-43-
El Zamuro
Sombra negra,
visin fatal, ojos enrojecidos.
Rey sin corona.
Gula, por excelencia, Depredador de escoria
Putrefacta.
Noble compromiso, misin loable,
te ofreci, el creador,
Y a veces,
con desprecio, levantamos la mirada.
-44-
Entre flores
Entre flores de colores
Pienso en sueos halados.
En mariposas suspendidas
sobre un cielo a ras de las cpulas
doradas.
Aromticas margaritas
se entregan en romntico
frenes a los caprichos
de las laboriosas abejas en hermoso ritual
envidia de vampiros sedientos.
La lluvia convierte Las gotas
de los ptalos en roco
luminoso, digno
de la mejor de las obras,
envidia del sptimo arte y todo lo visto por tus ojos
que todo lo han visto.
-45-
Ese soy yo
Soy el canto de sirenas,
el ser que alimenta tus dichas,
la brisa que sopla tu pelo,
los sueos niegas contar,
la fruta que devora tu boca,
la sed que ahoga tu voz,
la sonrisa de un nio,
el sol que no se apaga,
el ser que te ama,
el ser que desea tu cara,
el que comparte sus das,
el que comparte tu alma...
ese soy yo...
-46-
Ese soy yo II
Soy un grano pequeo una pizca de sal
un azcar morena la minscula hormiga,
que camina sobre tu torta.
Soy mosquito rondando tus odos, el que vive de tus desechos,
la rata recorriendo tus rincones.
Soy el sonido de los grillos en concierto nocturno, el canto matinal de las aves cuando estas dormida,
la suave brisa matinal que atraviesa tu ventana.
Soy agua cayendo sobre tu cuerpo, calor que seca tu figura,
brisa estimulante de tus poros.
Soy el vino que aromatiza tu boca, salsa invitando a probarla,
olores a buena sopa, buen gusto invitado a la mesa.
Soy la luna llena que enamora al romntico,
el balcn que inspiro el canto, la mente que inspira al poeta,
las suaves caricias de un novio.
-47-
Falso
Confieso que eres falso,
entraste de improviso, aprovechaste
tu verbo.
Cantabas mejor que yo,
mentas, decas
que eras bueno.
Contabas chistes ancdotas,
hablabas franco, volqu
mis esperanzas a un mundo mejorado.
Crea en los sonidos
de tus blasfemas, defend tu pellejo de quienes crea
diablos destruyendo nuestras promesas.
Pero empezaste
a cambiar, te convertiste
en arena de ese costal, o en verdad
no te conoca.
-48-
Todo aquello que me agrada
comenz a repugnar.
Ahora solo
quiero tirar el
caf en tu
cara.
-49-
Felina envejecida
Iracundo oleaje de sentimientos inundaba tus felinas razones.
Las mismas incrustabas con garras ensangrentadas de pasiones en lapidaciones intencionales
Insulsa torpeza recorre tus das,
arqueados de tantos desusos de no encontrar las vctimas
mas apropiadas a los aderezos de tus festines repugnantes en contraste de los juveniles
pasados.
Exhausta de tantas jornadas, te retiras al resto de los tiempos, a la meditacin de tus encantos
pasados y a la escritura de memorias no beatas de las rectitudes.
-50-
Firmamento sobre las aceras
Te miro sentada en la acera de enfrente, ausente con la mirada cristalizada a travs del vidrio de mi ventana, llena de huellas de rayos solares
y de bellos atardeceres de ventiscas, marcando vas dentro de tus cabellos.
Salgo a tu encuentro y me poso al lado tratando de acompaarte en el ocaso
que se vuelve ms lindo en tu presencia, susurro palabras que caen en torpeza
pues solo bastaba mirar tu ceo complacido por el roce aterciopelado de mis devociones.
Sentimos las personas rozando con sus tnicas
nuestras espaldas casi encorvadas por las posturas, pero ahora nos ausentamos en nuestro mundo
como si estuvisemos dibujando el camino de los viajes de las aves que regresan a sus casas sobre los pinceles del firmamento del sol dorado.
-51-
Fortaleza
Desprende tu fuego sagrado. Desecha el odio con furor.
Manifiesta tu amor. Expresa tu dolor.
Vierte tu pcima disuasiva. Hincha tu pecho celador.
Marca tu dominio. Has que tu circulo se respete.
Rompe murallas y crea las tuyas,
Donde impere la fortaleza del Amor.
-52-
Goce
A veces veo el oleaje de tus cabellos anidados
andarines en rtmicos contoneos de tus caderas.
A menudo me antojo
de tus bajas que van cayendo por efectos de inercia sostenida que se abultan, que se estiran bailando al comps del son.
Con frecuencia voy subiendo Volcanes gemelos nevados en erupcin de mis instintos aumentando ricos placeres.
Cuando avisto tus bellos pastos
voy husmeando tus caminos revelando tus ms intima e inexplorada estrechez.
Provoca destapar el champaa
y verter sus lquidos en las impermeables superficies
de tu lustrada epidermis.
-53-
Golpe a las adicciones
Arremetes contra mis nimos, voy en retirada con las sienes destrozadas por las adicciones que mucho nublan las mentes de los corazones destrozados.
Angustias mi desgraciada vida, abriendo con palabras afiladas, las cicatrices de las profundas
heridas que haban sido curadas, por otras manos ms cuidadosas.
En la cima de tus deseos ms viles,
lanzas tus ponzoas ms venenosas, arremetiendo contra mis flancos, debilitados en fogosos puetazos
a m espirito unido a las sustancias.
-54-
Gotas
Ellas descansan sobre la copa de los rboles,
las vemos escondidas en las gotas de las hojas,
estn en las lagunas tranquilas,
en el torrente que cruzan los ros,
se asoman en las lagrimas cuando lloras,
se van de fiesta a las nubes de los cielos,
Y como si nada,
estallan en colrico estruendo,
se cubren con vello negro,
para luego caer torrencialmente,
o en calma,
dependiendo de cmo les haya ido en casa.
-55-
Grito
Grito a la desidia humana, al mal que nos abruma,
clera no de fieras, nosotros rapias comiendo unas o otras,
lucha de ti hacia m, por tres metales con valor que tu solo le das.
Grito al apartheid, tu me desprecias
yo te quiero, no me rechaces no mires mi cara, ni a mis ojos
cierra los ojos oye mi voz
De quien es la voz? pugna entre colores de pieles pintadas.
Grito a la vanidad,
al zapato abandonado con el moho cayendo
al pie descalzo y agrietado al vestido descosido l fri que hizo ayer
y la nia que muri sin abrigado.
Grito a abandono, al anciano en el rincn del asilo
olvidado y tembloroso quien pasa la Navidad solo
por ser viejo y terco, no tena derecho a tener compaa.
Grito mezquindad
el nio harapiento que estira su mano. Tu cara que mira con indiferencia
la lagrima que recorren mis mejillas. El abandono de la barriga preada.
El da de mi cumpleaos que enviaste regalos y olvidaste enviar l mas preciado,
-56-
Tu indescriptible pap!
Haba mucha primavera
Haba mucha primavera, para dos, paseabas a la sombra de los rboles
enlazando tus manos en las mas, vivamos enamorados en las nieblas.
Eras bella, realmente mas que hermosa,
tu rostro lo adornaban todas las orqudeas aferradas a los troncos asomados en orillas
del manantial donde flotan los Lirios.
Vestas del blanco rub en los pliegos de tus faldas, adornando tus piernas cubiertas de ingenuos vellos alisados por el torrente suave de la primavera.
Las mariposas revoloteaban a tu alrededor
jugando con tu sombrero lleno de flores de los mismos campos donde sembramos
esos hijos que tanto cuidamos los dos.
De esos recorridos, solo queda una pintura en un cuadro ovalado de tu imagen fresca
envejecida por los largos aos colgada en este museo personal de mis recuerdos.
Enaltec todos aquellos memorados rincones los cuales solan llenarse de adornados tuyos para el deleite de mis aupados y gozosos ojos,
hinchados de tantos obsequios visuales.
-57-
He aprendido
He aprendido las virtudes de la vida en soledad.
He aprendido a aprender lo aprendido en soledad.
He llorado en soledad los buenos das de mi infancia.
He recorrido el pasado como una pelcula sin fin.
He caminado los senderos de la imaginacin,
slo me lleva mi mente misma.
-58-
Idilio a la sal*
Remembranzas de un antiguo ritual.
Salario de la Romana ancestral. Trabajo bajo el sol en labor bestial.
Salobre sabor que alivia mi paladar, en ricos ungentos me pasan el pan,
sazonas mi vida en clido placer.
Sagrada porcin grantica, manjar de elefantes,
bajas en sal, dieta controlas. Contrarios en los brazos
de lo amargo y lo dulce.
-59-
Ilusa Ilusin
Eres vctima de la maldad, eres vctima de la desesperanza,
eres vctima del desasosiego,
Eres invitada al fracaso, fuiste invitada por la realidad
a medirte en el campo de la verdad.
Eres inmadurez, no pisas la tierra bajo tus pies.
Te yergues,
mas no puedes sostenerte, eres vctima incurable del desanimo.
-60-
Inspiracin
Recibo las seales, que la vida me da.
Doy vueltas
y vuelvo a encontrarla.
Es como rayo, bocanada de aire,
latido en el corazn.
Escribo y nada ms, Empiezo a vibrar,
Y la pluma corre sin cesar.
ay!
No alcanzo a decirle que frene!
Aguanta el paso!
Por qu tanta carrera?
Dnde vas tan aprisa?
Qu quieres decir?
Yo soy quin escribe!
-61-
Invocando
Te quiero y voy cambiando mi forma de ver tus ojos,
desesperados por mis deseos.
Anhelas una de mis muecas que lleven a volar muy alto
los sentimientos contrariados.
En la distancia, te he visto exiliado de mis fervientes amores, en las tierras ridas ms crueles.
Sacias la sed en los manantiales
de mis caricias, pero en instantes, siento el flagelo de tus desamores.
Me angustia conocer tu ausencia,
estamos tan estrechamente unidos por la epidermis, no las dulces almas.
Invoco esa distancia como nico paliativo de fuerza de mis dudas a la forma voluble de tus amores.
-62-
La Aguada Romntica
De las golondrinas que surcaban los aires de tus ojos, slo quedan las memorias.
En mi vida slo hay una fatdica esperanza, la de vivir la ilusin a la deriva.
La inclemente morada de la tristeza
agu los ojos de la linda alegra dejando una estela de abandono
donde antes reinaba el divino gozo.
El sutil violn ya no entona la bella msica que antao acompaaba las cenas romnticas
a la luz de la luna, ahora tengo esa luna.
-63-
La copa al mar
El da de muerte, recuerda tu compromiso. Dona todos mis rganos,
recoge los restos suficientes e incinralos.
Virtelos en una copa, invita a tus amigos
y aquellos que dudan. Que acudan mis hijos
de mi sangre y de mi alma. Ve al mar
En la cspide del acantilado, entona mi querido salmo " El seor es mi pastor.. "
y finalmente
esparce las cenizas al viento
y la copa arroja al mar.
-64-
La corona de Espinas
La corona de espinas hace derramar la sangre pura y rojiza por tu frente
Con los prpados detienes
las heridas provocando los cogulos ms horrendos
Te resquebrajas
no aguantas las dolencias
Aquellas fueron superiores a las sufridas por todos
los estigmas vividos
Azotas tu cuerpo rasgado en pattico gesto
provocado por ente externo
en figura mundana auspiciado en forma casual
por azar del destino
Exorcismo! instigaste a sacar
el demonio asomado en la bella inocencia
de la doncella herida.
-65-
La dulce tonada
Llega a la orquesta de cmara
entreteniendo al espectador con cmoda
butaca Espacio estrecho Pblico selecto.
Cantas
al ritmo del Trovador con magistral voz.
Odias el Canto
improvisado la Balada
inconclusa.
Dominas el violn
haciendo llorar
al duro
Trombn.
La flauta se uni a ti No quiso
nada con cupido
El arpa se enamoro de ti
Dejo de cantar en el cielo.
-66-
La fuente
Pareces diosa del Olimpo augusta nia, piel de porcelana
estampas tu mirada congelada al infinito
te ves imponente tu vestido inerte
nunca el viento ha tocado estas sobre esa fuente
noche y da pareces querer saltar
todos te admiran detallan tu cuenco destilando agua
se repite una y otra vez no s cuantas veces
eres la imagen de una herona no s quien exactamente
Esculpida en piedras
permanecers por siempre en la plaza
olvidada de mi pueblo.
-67-
La ley de la Vida
Los ojos turbios los clava en tus sienes, en defensa de sus primitivos instintos,
levanta su cabeza aun ms erguida mostrando su ponzoa amenazadora.
Tratas de huir en intil resistencia,
tienes la suerte de camuflar tu figura esperando la extincin de la amenaza
que acechaba con apagar tu existencia.
La persecucin es feroz, aunque eres veloz, es mas fuerte el hambre de las fieras sedientas
de tu carne, donde la sangre y tus nervios te vacilan y caes rendido en las inclemencias.
Por supervivencia de los ms aptos depredadores
caes rendido sin aliento, siendo consumido en carne viva, Luego de saciar sus necesidades,
dejan tus restos en abandono, vienen los carroeros.
Es la ley de la vida, sino matas estas muerto en las fauces de los dientes fuertes de tu verdugo tratando de engullir tu ser indefenso lo ms rpido
en donde la competencia no pueda emularle.
-68-
La maana de tu amor
En la maana de tu amor!,
Cristales luminosos auparon mis ojos.
Saci mi sed en el riachuelo de tus
caricias.
Brinqu la talanquera de la timidez.
Entregu mis cosechas, para alimentar tu amor.
Brot luz donde solo haba oscuridad.
Cant la cancin ms deseada.
Hice los suspiros ms instantneos.
Cre en ti la novia ms seductora.
Descubr la amante ms complacida.
Bes tu rostro con roco primaveral.
Cant el ruiseor a mi ventana en
rtmica serenata a mi balcn.
Eso y mucho ms.
-69-
La pesca Triste
Ayer sali a pescar a la laguna del dolor
donde se atrapa el sentir de la traicin en su vivir.
Vivi una vida atrapada en vertientes de la rivera
donde se agarra pestilencia en bella vestimenta ligera.
Sinti esas aguadas orillas, baando sus pies calientes,
deseando dulces caricias en fros egosmos mezquinos.
Volvi en una y otra ocasin
a recoger su caa de un estirn consiguiendo otra desilusin de la misma carnada ingrata.
Tom su caa de pescar
y llevo su carga de tristezas a orillas menos turbulentas
donde pudiera invertir sus das.
-70-
La Subasta
Voy a fustigar mi cuerpo hasta quedar cansado
Logrando vomitar el alma de sus entraas.
Voy a tomar
y empear mi alma al postor de mi vida,
al cual entregar las lindas enseanzas de mis das.
Voy a enviar mi espirito en caravanas Beduinas, apresada entre barrotes camino a los tablones
de los subastados.
Me hinchar de gozo cuando mi alma
sea valorada con las mejores
ofertas.
Para as demostrar
el valor de ella
a tus
mezquinas pretensiones.
-71-
Las tres Lunas Luminosas
Sopla la brisa sobre la cabeza Esculpida en el mrmol oscuro del hroe cado, desangrado de olvido en la memoria
de la decadencia humana, la cual aferr su preferencia, en destructor rito
dogmtico, idiomtico e ideolgico
Alimentemos nuestro espirito y cuerpo en las tradiciones ms antiguas, no solo
las que bailan, sino tambin las que curan el cuerpo y el modo de vivir atado
a la naturaleza que nos lleva a purificar el alma y a estar mas cerca del creador.
Desconecta tu mente de las rutinas robadas
de otros mundos, que apresan tus pensamientos creando estrs artificial inyectado por sociedades
impostoras de las culturas milenarias ms avanzadas en las artes de la convivencia de las sociedades, y el amor a la paz que muri en los precipicios.
Volvamos a nuestras races precolombinas.
Volvamos a marchar con los Mayas, los Aztecas con la vida que nace de la tierra y se funde en ella.
Volvamos a ser protagonistas del Antrtida eterna de los dioses hechos carne en la tierra favorita de las eternas trece Lunas luminosas.
-72-
Leer es una Aventura
A menudo descanso los avatares del da recostado a un buen libro haciendo cuenta de la data incrustada en mi mente cansada
de archivar pesados archivos en los anaqueles de sus neuronas.
Grabo sus palabras en incrustaciones acuadas para luego repetirlas una tras otra en las guardas
de los escribas donde escondo los papeles ms ntimos de m entraados pensares.
Sumerjo mis ojos en las lecturas ms fantsticas
aquellas de tanta emocin, me hacen soar inundando de ros de lgrima mis ojos. Aquellas que hacen correr mis pupilas
en forma desenfrenada sobre lneas punteadas buscando las razones ocultas del autor.
Viajo al misterio, a la aventura, suspenso
a las tierras del ayer, del presente, del futuro portando una pistola, un escapulario
Un mensaje que ahuyente los pesares Una ilusin que me ayude a escapar de lo real.
-73-
Lluvia
Tie tu cuerpo de Arco iris y corona tu ser
Levanta tu cara, baa tu frente
con las gotas ms fuertes. Que tu rostro vibre al impacto de ellas. Re a carcajadas.
Da vueltas sin parar
hasta que te sientas caer y si quieres llorar, puedes hacerlo;
porque tus lagrimas se confundirn con las gotas de lluvia fra.
Siente los ros que hacen surco en tu cuerpo,
los caudales que llegan, hasta los sitios ms encendidos de tu figura
para luego drenarse por tus piernas hasta tus pies.
Deja que la lluvia se calme
Deja que tus ojos se llenen de lagrima. Deja que tu voz se quiebre de angustia.
Deja que de tu piel broten gotas de sudor.
Deja que la brisa acaricie tu cara. Aspira profundo tu belleza juvenil. Deja que tus pies desnudos corran
y corran bajo la lluvia.
Ahoga tu cuerpo en la charca recin creada.
-74-
Chapotea! Chapotea! sin cesar, Y siente la libertad de las ranas.
Magia Andaluza
Voy a escribir las lneas de tu alma
enalteciendo las rubias mejillas de tu cara,
autenticas expresiones de tus rubores.
Quiero hundir mis dedos
en los costados de tus sienes aun tensadas.
Ahuyentando los temores escondidos de la dureza
de tus corazas Sorprendiendo
tus vidas gracias Moras dadas
a la magia de
encantos embrujados.
Ese cuerpo entregado
a los goces juveniles
en deseos de la carne es de puras bondades combinado en danza sensual seduce
mis
-75-
sentidos. Autnticos
ojos
dirigen el
dominio de tu
lengua evasiva.
Magia mstica
Andaluza prestada
a la
hispnica.
-76-
Magia Encantada
La Luna de tus das sembr en mi,
imgenes espirituales en siluetas csmicas adornando en Runas
mgicas la suerte de nuestro amor.
Las tibias aguas
estimularon mis deidades mas intimas
a posar entre las brumas plateadas.
Las hmedas arenas
dejaron huellas detrs de los dulces
movimientos de tus vestidos recin baados.
El claro amanecer
descubri el reverdecer de las aguas cristalinas, jugando entre tus dedos
envueltos en bellas capas de conchas marinas.
La suave brisa
toco tu piel dorada alzo tu falda
y revelo tu mas intima postura
producida en magia encantada.
-77-
Mal sueo
Lagrima azul cielo,
cielo hecho lagrima,
lecho de aguas,
aguas que bajan por acantilados,
acantilados en pendientes verticales,
chorros que caen verticalmente,
vrtigo que me puede hacer caer al vaco,
vaco mis ojos en el fondo del acantilado,
mis pies se deslizan hacia el borde,
me siento caer,
abro mis ojos,
estoy boca abajo,
veo las patas de mi cama,
estoy sobre mi alfombra.
Solo era un mal sueo!.
-78-
Maana
Siempre habr un maana,
con sol o sin sol, que ms da,
pero, un maana, solo un maana.
Las cosas de ayer se han
quedado atrs inevitablemente,
solo mira en el espejo muy de maana,
y notars por un momento que eres tu,
y ese presente.
Las cosas de ayer solo existen
si las vuelves a recordar.
-79-
Memorias de mi ex
Te dolieron los das de mi ausencia
en los que contaba hormigas de muchos colores
prefiriendo esas frivolidades a estar en tus miradas.
Me imaginaste
abrazado a otros regazos amorosos con mi mente pegada en manos
a las manecillas del tiempo rogando no volver a tus brazos
Te recuerdas
el da de tu cumpleaos que lloraste lagrimas amargas cuando yo contaba otras velas
ovacionaba otros aos
Recuerdo mi mala racha cuando recib la llamada
reportando tu falso deceso Ya haba comprado la corona
de laureles Ya haba invitado a mis amigos
Ya me vea feliz en nuevas nupcias.
Pero no importa mi amor Ya de esos das
Han pasado muchos Ahora somos felices Ahora podr cantar
Tu no, ya estas muerta.
-80-
Memorias de un Presidio
A veces veo agobiado los nimos en las reflexiones de mis neuronas que analizan los comportamientos
de seres adultos vestidos de crueles inspiraciones en sarcsticas falacias.
A veces observo a mis compaeros
de la habitacin cercana a mis claustros, y s que sus mentes estn llenas
de dudas, de odio y de desesperanzas del mundo que les ha tocado enfrentar.
Dime sino es as, que en la noche
de tu primera estada en este retrete llorabas en el regazo de tu catre
aferrado a una foto de cierta novia, Qu quien sabe, que besos besaba.
Fui testigo inerte de violaciones
a la carne ajena en duros moretones obligando a bajar la sien, cerrar los ojos,
haciendo lo nico que hacen los lamentos, la cura de las heridas fsicas, no las almas.
A veces era madre, padre y consejero
al mismo tiempo de los echados a sus suertes, pues haba tenido experiencia en este hasto,
donde el valiente es el que roba tus intimidades haciendo de tu vida la piltrafa inmerecida.
Fui depositario de pualadas, ria colectiva,
ajusticiamientos en impunidad sostenida por la desidia de una sociedad corrompida
de los pies a la cabeza de la torpeza que ha parido nuestro situacin carcelaria.
-81-
Siento estos barrotes como parte de una pelcula Muda en donde todos gritan, hacen mimos,
pero los subttulos no fueron incluidos y l pblico se re de las cosas, de los empujones,
y de los tortazos pero no hace nada, solo mirar.
-82-
Mendigo
Eres azucena de muchos
colores.
Acuarela de mil facetas incluidas
las muertas.
Sabor A exquisitos
olores los encontrados en mis praderas.
Suma los que Nacern.
Ingenua de las encontradas en los genios ms verstiles.
Agrega los nios
inocentes que vienen al mundo y aquellos
no nacidos.
Inmensos carios grandes caricias
anidadas en tus sienes.
Las bondades
las regalas a los ms necesitados
entrgalas a mi corazn
-83-
mendigo de ti.
Mi bella Abeja
Mi bella abeja seductora de pasiones, aspiras el nctar de mis pistilos
en plena succin de mis entraas servidoras condicionadas a tus deseos.
Cargas con los ms valiosos bastimentos
que puedes llevar de mis sentimientos vaciados por tus aguijones expertos
en labores rutinarias a mis voluntades.
Vives aglutinada con tus amigas alimentando tus instintos de nuevas
virtudes para as, extraer los nctares ms exquisitos con tus seductoras frases.
Mas tarde, me apartas de tus rutas maaneras
para luego revolotear en otras vecinas extraas a tus placeres, siendo conquistadas
y la vez embarazas a cada una, de sentimientos.
-84-
Mi Hermana Querida
Cuando se tiene una hermana tan bella como tu, se tienen todas en una sola, se tiene la esencia de la flor en vida que el complacido corazn aspira.
Los aos que he recorrido contigo
los llevo en mis recuerdos adornados en los rincones llenos de imgenes
los cuales recorro cuando estas ausente.
Eres dulce amiga y fiel consejera En los das en que las ganancias son menguadas por los fracasos
que mucho distancian los objetivos.
Si el creador me pidiera que escogiera otra hermana, me volvera
hacia ti diciendo: Eres solo tu, mi hermana querida
-85-
MI Nave
Subo a los cielos, exculpo tu cara,
sumerjo mis labios.
Descubro un sistema interestelar, Estrellas grandes, Astros luminosos.
Descubro los misterios, de los tneles celestes
dejo deslizarme dentro de ellos.
Auguro una buena travesa, bajo mis alerones,
aterrizo y pozo mi nave en la pista de tu regazo.
Descanso luego de largo viaje.
Vuelvo al proyecto inicial.
-86-
Mi Oracin
Sujeto es la razn que das a mi ser,
verbo es la accin
que expresan tus
sentimientos,
Adjetivo es La forma
en que denotas mis cualidades,
Y predicado es Lo que resta o complementas
En mi.
-87-
Mi Sierra Nevada
Bellos relieves amorfos de la tierra altiva, son tus riscos de donde la mirada no se aparta
viendo tus picachos en cubierta nevada, no te han admirado mis ojos en incrdula pasin, fue la mirada de la magnificencia.
Solitario testigo de largos viajes a la grandeza de Inmortales Centauros forrados de fortaleza
de Campaa Admirable, Inmunes a las batallas, doblegados por tus fros que hielan los torrentes de las venas ms resistentes a la inclemencia.
Bellos ponchos hacen juego con tus picos,
parecen tus hijos correteando por las praderas, hilera de mulas subiendo tus cuestas
semejan hormiguero de laboriosos caminantes costeando lagunas negras de misteriosas presencias.
Bellas deidades inalcanzables en tiempos antaones
dominadas por tecnologas que me llevan a tus cspides, ya he visto de cerca las canas reflejando tu ancianidad,
ya voy a llegar a tu altura para merecer tus lluvias granizadas posndose en mi cabeza, qu inmensidad.
-88-
Movimientos perpetuos
Las tibias aguas matutinas lavaron mis facciones atormentadas,
aguaron mis lagrimas negras, fortificaron mis esperanzas ms lejanas,
entumieron mis extremidades aun dormidas mitigando restos acumulados,
de una noche de torrenciales tormentas.
Dirijo mi cuerpo con rastros de gotas. Me dejo caer vencido por el doblez todava marcado de mis sbanas,
agoto esfuerzos por calzar mis calcetines, me miro al espejo pensando en repeticiones
diarias las cuales nos convierten en mquinas de procesar en movimientos perpetuos.
-89-
Musa inocente
Quin escribe a tus odos? Quieren despertar
tus sentidos los versos
no inspirados de las almas.
Quin entona acordes?
El que desafina tus poemas convertidos en cancin
despeinada.
Quin viola tus derechos? el que imita
y copia textualmente Como cotorra
a los verdaderos ruiseores
de la palabra.
Quin te critica?
Aquel que odia sin haber escrito
ni amado un
solo escrito.
Viva la Musa!
Referencia divina.
Yo soy tu sbdito ignorante
-90-
arrogante atrevido.
Museo naturaleza muerta
Invitacin a un espectculo macabro en santuario amorfo
lleno de galeras absurdas Se eriza mi piel,
mas no la de ellos estn muertos Luces de nen
luminosas color amarillo esperanza
luces ambientadas en Rosado.
La selva esta muy lejos Cul ilusin?
Msica acompasada para llenar el mortuorio
melodas ambientales invitacin al relax
Avanzas en procesin contemplativa
Hambre a lo desconocido a lo morboso
Suelos a brillo espejo provoca dormir
sobre su fro polar Testigos mudos
Momias al natural Seres petrificados Seres en posicin
gallarda Ojos de cristal
Vista que se pierde en el infinito.
Seres casi extinguidos Seres de apariencia
casi feroz Seres con la fuerza de
10 hombres
-91-
Seres al servicio de la contemplacin no de la destruccin.
El dolor me asfixia
mis ojos se sofocan hacen que mis lagrimas
se agolpen ansiosas de derramarse
No es espectculo cultural o recreativo
Es solo grotesco Me recuerda a algo mencionado
Naturaleza Muerta yo dira
naturaleza arrancada natura asesinada
Me animo a pensar que estos seres
quieren salir de esta prisin
quisiera tener una magia
Y Gritar! Salgan corriendo
Son libres .. y tu tambin pequeo
..corre a casa.
-92-
Nave Sideral
Naciste en el encanto de las estrellas, eres nave sideral recorriendo cielos
recorres los astros en pausas la inercia gua tus pasos te dejas caer en picada
presionas el piloto automtico dejas que haga su trabajo
vas saltando de una nube a otra en rtmica ondulacin y entonas una cancin
Entras en trance profundo
producto de la hipnosis viras tus ojos a 360 grados
con los prpados an abiertos
Con solo tocar tus hombros vuelves a transportarte
a la realidad.
-93-
Nios de la Calle
Dulce ilusin, abriga tu pecho,
funesto vivir,
llena tus das,
hambre corporal, riqueza espiritual,
infancia abandonada, en pos de un sueo,
peregrino en camino incierto,
limpiabotas que limpias tus tristezas
en zapatos pulidos,
miseria incontrolada,
artista insigne creado en caminos de asfalto.
Promesas incumplidas,
adultos inmaduros,
nio blanco,
negro, pardo,
de mi tierra.
A ti te toc el calvario de Jess.
-94-
No
No voy a dejar tus ojos distantes, por otros cristales luminosos
posados en otras orqudeas sensuales vestidas de arrogantes placeres.
No dejare que tu sombra negra se disipe en la claridad del alba
para que nuestros das envejecidos recuerden las noches apasionadas.
No mirare mas las luminosas estrellas
hasta el da que nuestros picaras miradas consientan el tiempo y se posen fervientes a contemplar las bellas rubricas infinitas.
No suspirare mas porque la respiracin
me tranca el pecho que oculta el corazn sembrador de ilusiones en contra de la razn
esquivando tropiezos a pura inspiracin.
-95-
No entiendo de Religin
No entiendo de religin, unos hablan de resurreccin, algunos hablan de hermanos,
y nos matamos sin razn.
Si somos hermanos, porque matamos a nuestros hermanos de Gaza?
ellos tambin son frutos de Abraham.
El Mesas no vino a salvar a al pueblo de Israel de sus opresores Romanos,
por el contrario, vino a salvarlos de ellos mismos.
Ni catlicos,
ni Judos, ni todas las religiones,
han entendido su verdadera misin.
Han entendido que oprimiendo, a sus hermanos que discrepan un tanto,
comprendern sus razones.
Cruzadas, Inquisiciones,
Peleas territoriales, Eso es lo que entienden por salvacin.
Humillas a tu hermano Y humillas a tu creador.
Te ama a ti al igual que tu semejante.
Satans!
Porque invades mi iglesia? Porque invades el corazn de mis hermanos?
Tendremos que cambiar las parbolas!
-96-
Tampoco las entienden...
Nos Salvamos
Huele a sangre fresca!
Rasgo mi camisa,
y vuelvo a verte.
Intuyo que eres tu,
sigo corriendo,
huyes detrs de m.
Son fieras incontroladas, cargan sus pistolas,
descargan todas sus cargas.
Me aferr a ti, tratas de sostenerte,
sudo copiosamente,
caigo rendido, caes a mi lado.
Las turbas pasan sobre nosotros,
Nos salvamos.
Hoy no es buen da para morir.
-97-
Ojos complacidos de la tierra amada
Te amo en las bastas profundidades, donde reposa tus bondades inertes,
acompaadas de los tentculos de races de los rboles frtiles fabricantes de savias blanquecinas de vida.
Me gustan tus lombrices fertilizantes
de la tierra, que te convierten en abonos, invitando a los cultivos de las siembras de las mas variadas galas de especies, sustento de los estmagos hambrientos.
Adoro rozar tus hojas verdes primaverales
con tus frutos de frescas carnosidades. Olores de guayaba silvestre aromatizadas
que nacen realengas en todos los rincones, pequeas!, pero, con el corazn del duro roble.
Siento el remanso de agua clara en cristalinos, borboteando en los abruptos choques de rocas
que habitan casi enterradas en tus fondos pocos profundos, haciendo pequeas lagunas,
refugio de peces imberbes de agua dulce.
Iluminan mis ojos las orqudeas que descubro en mis aventuras cortas dentro de bellos santuarios
en cpulas formados por los rboles mas altos, en eterna sombra creadora de vidas ocultas
con ojos alertas a las mnimas pisadas del intruso.
La Bella garza vuela a los lejos, solitaria, y a veces en bandadas, posando en majestuoso aterrizaje su cuerpo blanco, inocente y liviano. Casi puedo tocarlas con la mirada envilecida
de tantas imgenes adornadas en las planicies.
-98-
As quiero conservar tus recuerdos, tierra amada, cuando mis ojos no puedan verte y ests sola sin mis caricias, pero tan solo soy un granito
entre muchos seres mas, del amor compartido que vas alimentando en otros ojos complacidos.
-99-
Oye Muerte
Me muero de risas No me hagas mas cosquillas No me cuentes mas chistes
Me muero. No s que tengo en l estomago.
Ay
si me voy a morir sin ver a esa loca otra vez
Vi morir la tarde
Vuelvo a revivirla maana
Que pena me das muerte
Se muere la copla ya nadie quiere algo con ella
maana alguien la toma y ya no esta muerta.
Se mueren los Sirios
reviven otra vez.
Mueres de hambre. La muerte no tiene culpa,
la hambruna
Se muere el amor que falsa
el amor nunca muere.
Oye muerte! Tu no me asustas ven a buscarme ya estoy curado
te espero y si quieres no vienes
-100-
te voy hacer trampa.
Me bajas el teln lo vuelvo a subir
En otra vida
mi alma no la matas
Que la obra contine..
-101-
Palabras Txicas
Soy el acompaante fiel que escucha tus plegarias, adornadas de grises ojos,
en las humildes horas de las Miradas ms sensibles.
En la amarga melancola de tu mirada
sumerjo mis memorias estregadas en imgenes de mil radiantes matices
rastreando las luces de tu sonrisa, ocultas en los costados de tu tristeza.
En agravio sostenido a mis consuelos,
reprochas mis sumisas intenciones aumentadas por mis amorosos afectos
los cuales inmunizas con los desplantes a mis cortejos inspirados sobre tus sentidos.
Ya no me dolern tus palabras txicas
acostumbradas a raros encantamientos de mis neuronas, en suaves ajustes,
para luego clavar tus ponzoas mortales ya menguadas en el uso de tus constancias.
-102-
Paseo Por el Parque
Aguas oscuras ennegrecidas
seducen las piedras en dulces choques
sin maldades provocan mis odos
brotan mis ojos.
Caminos empedrados Bellas estepas
El suelo baboso resbala mis pisadas.
Voy atravesando
un puente pegado al ro formado
por piedras poco profundas muy separadas
creadas por humano ingenio.
Tu atrapas mi Mano Le temes al agua No es tu culpa.
Al fin cruzamos
Estas extenuada. Tus mejillas enrojecidas
me piden aliento.
Luego de tanto camino calmas
la sed con l nico
-103-
liquido conciliador.
Nos sentamos a la sombra de un Olivo Sientas tus
piernas sobre las mas Poso mi mano sobre tu muslo Son las nicas
caricias que puedo robar
de tu respeto.
Nos vamos
estamos cansados
van a cerrar l Parque
Otro
domingo t
sustraigo otra
cosa.
-104-
Peregrino
Entregaste tu alma al credo, permaneciste virginal en cuerpo, fundiste tu mente en la oracin,
las lneas que leste te inspiraron.
Dejaste el calor de tu pueblo, en busca de otros necesitados.
Hiciste de los desposedos tu hogar,
ahuyentaste de ti los temores y as,
sacar el de tus semejantes.
Llevas el mensaje del padre, Para as cumplir tu misin.
-105-
Pizca de vida
En tus ojos encontr las sonrisas de mis aos mozos enjaulados
en las curvas de mis encorvadas espalda aspirando viejos tiempos
Levante mi nimo entristecido
a la vuelta de la esquina sollozado con amarga semblanza arruinada
de gastar la alhaja vivida.
Desate mis brazos sin sentir los dolores que ataban mi existir
a la monotona ms severa de una vida, ayer entera.
Aspire copos de subsistencia
de la supervivencia que tu alma fungi encontrando la luminosa
juventud que ya crea extinguida.
-106-
Pompa Fnebre
Juegos idos al infierno enmaraan tiernos caminos
luto reflejando oscuridad pompa fnebre
ritmo de la msica orquesta en fatalidad
lagrima cansadas confundidas en lluvia torrencial
casualidad tropical cuerpo inocente
tarde de un domingo.
Que fcil sera estar en casa tomando chocolate caliente
comiendo galletas No encerrado en este traje y en estos zapatos nuevos estn matando mis cayos.
-107-
Portada Dominical
Camina viejo y necio errante, que tu camino no ser en vano
viaja donde la mirada no extrae, la radiante y esbelta hermosura. Navega por la mar ms preciosa.
Vierte tus ojos en la extensa llanura donde el aire feroz viene arroyando con sus latigazos las tmidas hojas, y amenaza con sacudir de una sola
bofetada tu sombrero de ala de ancha.
Siente que no eres nada, al borde de la ms alta cascada jams creada y lanza tu cuerpo inocente en cada
mortal con el solo motivo de mostrarte en la portada de un semanario dominical.
-108-
Puedes perdonar
He aprendido a perdonar, cruce la barrera que tu,
amigo, no has sabido cruzar.
Ame, odie,
y Aprend mi leccin.
Fui traicionado, humillado,
encolerice!
Me vi envuelto en los turbios confines de la venganza,
y al final, Quede solo con un puado de recuerdos.
El Perdonar no es fcil,
Pero cuando se tiene ese don divino,
Muchas cosas pueden cambiar.
-109-
Purificacin
Slo recibo la risa que tu me das en el dulce aroma de tus suspiros intentando someter tus voluntades en estirones fuertes de tus huesos
a los primeros rayos luminosos.
Inmovibles nos quedamos viendo las cspides lejanas de las montaas
vestidas de las blancas neblinas con velos angelicales descubriendo
el alba vencedora de las oscuras tinieblas.
Omos el preludio de las aves recibiendo los primeros baos
de roco primaveral en erizados plumajes y en duras labores pero preciosas al mirarlas.
Nosotros que vivimos la noche
en plena lujuria, idealizamos la maana tomando de ella la pura fragancia la cual nos purifica de la frentica
obsesin de nuestros cuerpos.
-110-
Quiero
Quiero tomar las cosas con hidalgua, tomar las riendas que tom Simn,
recobrar el camino que nos perteneca.
Quiero dejar escapar este pesimismo, que Amenaza con tragarnos a todos.
Este imperio que esta tragando nuestras esperanzas,
y que nace de adentro.
Quiero que reconquistemos la cumbre, el valor que se perdi,
la dicha de llamarnos venezolanos, la gallarda y la nobleza del soldado.
Quiero por sobre todo,
que eduquemos a nuestros hijos, con las matemticas que nos sumen a todos,
con las letras de un Andrs, de un Gallegos.
Quiero que los enseemos a pensar ms
a mentir menos, a ser honestos,
a entender que el valiente no es el que dispara sino el que baja su arma.
Y ser fieles a Dios y a su patria, que somos todos.
-111-
Quiero componer
Quiero componer una cancin con las melodas ms celestiales
aquella que doblegue a los hombres que tenga muchas facetas
aquella que provoque llevar el vello que permita unir las manos
proclive al llanto que una a los novios
en desesperado sculo aquella compaera en la marcha
armnica de las gaviotas.
Quiero melodas profanas en el modo ms vulgar que permitan poseer
tu miel.
Quiero arroyos interminables de timbales
haciendo mover tus caderas al ritmo de mis manos.
Quiero el bong y la charrasca
que descubran tus races latinas.
La quiero pura en mi idioma natal
para que sea entendida al comps de tus pies.
-112-
Quince lneas buscando Amor
El amor es la fragancia de tus ojos mozos cautivadores de mis sentidos ms ntimos,
entonando las picardas ms risueas.
El amor se acuesta de noche a esculpir las bellas frases que el galante ruiseor
entonar en la rama del dulce amanecer.
El amor es nobleza sentada en el trono baado en oro de mil quilates oliendo
A jazmn, calzando zapatos de mendigo.
El amor es ignorancia al egosmo, tonto ilusionado en pueril quimera
sentada en la barca de la esperanza.
El amor no es la escultura de barro, por el contrario, es la figura de granito que soporta el avatar de los tiempos.
-113-
Satlites ensogados
Le cambiaste el sentido a mi vida, diseando los ms bellos idilios
a la luz de tus inquietas imgenes que fueron dando sombra compasiva
a mis sentimientos vilmente pisoteados.
Hice de ti, mi reino, haciendo omisin a mi carcter altivo, dando sumisa razn a tus incoherentes actitudes aderezadas por tus caricias, nicos sostenes sutiles
de nuestras relaciones no perpetuas.
Me hiciste girar en torno a tu planetario cumpliendo las estaciones, adornado con las indumentarias bien ajustadas
a tus vanos caprichos, pues as deseabas tener los satlites que giraban ensogados.
Ahuyentaste de mi, todo rastro con sabor a inocencia, colocando mis pies en tierra
firme, donde tuve que crecer como persona lejos de tus egocntricas intenciones...
donde se baila un tango sin son ni candor.
-114-
Solo en ti
Eres la maana que despierta mis ojos son los ojos invocando a ti preparo mi caf oliendo a ti
tomo un sorbo veo tu rostro reflejado
rodeas mi cintura con tus brazos tomas un poco de mi taza.
Descubres misterioso nctar beso tus labios aun mojados.
Vuelvo a sentir el agrio confundido con tu aliento. Salgo de casa y veo tu rostro en mi parabrisas vuelvo a verte en las caderas de alguien mas
Voy a mi oficina y pienso,
en lo que estara haciendo si estuviera a tu lado
Me asombro al pensar solo en ti nada ms.
-115-
Soy para ti
Soy para ti la historia
que versa tu ser.
La aguja perdida en un pajar
de tanto buscar y de andar.
La ingenuidad
a engaar.
Un ser colgado a tus deseos.
Esclavo de tus designios
y sueos.
Imberbe trovador de ilusiones
hundidas en las fauces ocultas
de tus anhelos.
Gladiador sin armadura sin casco ni lanza.
Toro en ruedo sin posibilidad
de salir con vida.
-116-
Temeridad
Hay una doncella vestida de negro, ronda la noche y arrastra su cola,
No habla, pues, no ha tenido que hacerlo, Es capaz de asustar al ms osado.
Estuvo siempre detrs de tu escaparate,
Cuando eras nio, contaban historias de ella, Prendas la luz y muchas veces temblabas.
Siempre estuvo junto a ti y siempre estar.
Cuando quisiste dar tu primer beso, Ella estuvo all y freno tu impulso.
Fuiste al ejercito, probaste tu primer rifle,
Titubeaste porque ella estaba all.
Y siempre estar all para ofrecer a todos, la oportunidad de no saltar al abismo.
-117-
Tengo culpa
Tengo culpa de levantarme
con pie izquierdo extrema contraria
imagen en un cuadro en la Carraca.
Culpable
de tener las fosas muy grandes
la mirada muy atrs no ves el brillo de mis ojos.
Culpable
por admirar tu cuerpo tu sonrisa blanca
la suave guitarra en forma
de tu cuerpo cuando pensaba
tambin en tu alma
porque te quera completa.
Culpable
de mis talones riveras de ros
grietas erosionadas
de una jornada incremente.
Culpable de no ver mas all de las tierras
-118-
en donde tu amor ha florecido.
Culpable
de no poseer la materia
sino el contrario de lo tangible.
Culpable
de despedidas de tardes mudas
de equipajes rondando de manos diciendo
adis
Fui cobarde
No te retuve
no insist no consegu
el verso apropiado.
-119-
Tormenta perfecta
Navega en los ros de mi sangre,
sumerge tu ser en mis aguas mansas,
iza las velas de mis pulmones,
exhala todo el aire donde est,
sacude los mandos de mis caderas.
Crea un torbellino,
hecha tu nave a la deriva,
has que mi sudor se inunde,
has agua de mi boca,
pierde el control de tu barca,
y ahoga tu ser como naufrago,
en tormenta perfecta.
-120-
Tu Victoria
Acepta la vida como es, de triunfos y fracasos
tomando los reveses en catapultas impulsoras
de nuevos logros, edificados sobre las bases
ms duraderas del equilibrio de los tiempos.
Cambia el apodo que una vez rob tu animo,
erige tu nuevo nombre sobre el plpito
y predica las buenas nuevas de tu cambio
hacia un mundo mejor, esperanzado de triunfo.
-121-
Tus poemas en abril
Tus poemas asoman el mes de abril
Las letras avivan mi ser en entusiasmo varonil La risa que se muestra en tu cara infantil
invita a celebrar de tu rostro servil Comienzas el ritual nocturno prendiendo el candil
el cual apagas en un soplido gentil
Empiezas a declamar tus tonadas y la suave brisa que entra por los ventanales
convierte tu pelo en ondas misteriosas El Sonido de tu voz vibra en mis odos
me hace palpitar escuchando las cadencias ms bellas en acordes celestiales.
Finalmente desvisto cada una de las letras para descubrir la razn de las metforas
que van envolviendo las diademas de las vocales y consonantes
de tus oraciones convertidas en versos de finos esplendores matizados.
-122-
Un Domingo Cualquiera
Me siento solo a pesar de ti. Enclaustrado dentro de m.
El da transcurre, no mas as. Vivo en inercia perfecta.
Ritmo que seduce los atardeceres de un domingo tranquilo. Me sumerjo en la lectura.
Papeleo de Diarios matutinos diciendo cosas inocuas a m. Loco de volar por paredes,
salto a la cocina como lo que sea, engullo todo.
Prendo la tele, melodramas en repetitiva, provoca apagarlo.
Hago andar el motor del vehculo Dejo calentar el motor.
Conduzco a lo largo de la avenida. No consigo nada abierto. Vuelvo a casa, lo guardo.
Vuelo a engullir. Me acuesto.
Vuelvo a encender la televisin. Me quedo con el melodrama.
Ya llega la hora de dormir esperando que amanezca.
Por fin
El domingo ha terminado.
-123-
Una cama mas...
Sombra en tu piel.
Es el sol que se asoma.
Amanece, es la primera vez a mi lado.
Eres amor clandestino,
se nota en tus ojos.
Esa pasin con que estrechas tu pecho, Me lo das a entender.
Ese querer comer el tiempo. Tienes mucha experiencia,
te gusta que lo sepa.
La sabana se va deslizando, la aprietas con tus manos,
no quieres descubrir tus cicatrices.
Tus deltas de varices ya empiezan a brotar, no quieres que las vea.
Vas remontando los cuarenta.
Tus prpados se arrugan,
necesitas un cirujano.
Te encanta lo que conseguiste, eres practica.
Te gustan las soluciones rpidas.
Se nota que no quieres volver a casa.
Tal vez maana.
Disfrutas la plasticidad del momento.
-124-
Una frazada mas
Ven! No hagas ruido
Agacha tu cuerpo curioso Aspira el suelo fervoroso Imaginas que es el ocaso
celador de un avatar diurno.
Reposa aqu conmigo Despoja tu cuerpo escamoso
que estorba demasiado Has de la hierba tu regazo con las estrellas en techo
luminoso titilando sobre el fro roco nocturno
Consiente tu figura mimada
en el regazo convertido en frazada Transforma nuestra mirada
en lente observando el juego misterioso de las constelaciones
de los tiempos inmemorables.
Intentas encender un cigarrillo Te lo apago, no esta permitido
Queda prohibida, cualquier cosa Menos tu y yo.
Comienzas a retocar viejos recuerdos Es la hora de las sinceridades abiertas
El tiempo de las nostalgias mas sentidas Es el momento de caricias sostenidas
Que duren toda una noche en apariencias eternizada por la magia de nosotros.
-125-
Vanidades ruines
Arisca y desconfiada me observas, no contemplas mis bellas entraas,
solo te dedicas a los superfluos detalles de mi faz no llamativa a tus prototipos.
Me miras escondido en los matorrales en simulaciones de roedores tmidos aorando un pedazo de tus desechos en el despojo de tus vanidades ruines.
Realizas tus poses en teatros sensuales para la exquisitez de mis ingenuidades
sabiendo que mis nfimas oportunidades son menoscabadas en danzas satirizadas.
Sostengo romances en papeles escritos con la tinta de pluma que todos los das plasman mis inspiraciones agradecidas del desamor que t, mi bien, imprimes.
-126-
Veinticinco lneas en desgraciado Amor
En noches de amor, las dulces melodas se antojan en componer la viva sinfona en vestido de gala a orillas de la playa, salpicada de bellos cristales iluminados
por la diosa consagrada de las seducciones.
Amor se escribe con el amargo rechazo a los sentimientos pisoteados en vano,
mientras hacas de tus emociones, el nido ms confortable con las espigas doradas de la ilusin sobre ramas esperanzadas.
El amor me hizo esclavo de las jornadas completas de vigilias a tus pensamientos,
doblando la espina dorsal de mis paciencias, arrastrando consigo los restos de mis juicios
al precipicio del acantilado de la locura.
El da desdichado de tu despedida ingrata, fue amor arrancado de mi infeliz alma
para ser entregado en bandejas de plata, a un corazn anhelante de su belleza espiritual, inocente de mi desgracia.
-127-
Velo Negro
Lagrimas de sal secadas al tiempo en el intenso oleaje de misterios, nublan la mente de estelas grises
invadiendo el cielo de las memorias.
Largas carreteras de lneas escritas creadas por manos imaginativas
enaltecen las artes de flores ennegrecidas, por el agrio roco de cruentos misterios.
El crujir de la silla en movimientos agonizantes, ambienta las tinieblas
en negras sombras esculpidas en las paredes de hmedos temores.
Los espejos reflejan los misterios
Enterrados en l mas all de las imgenes Ocultas detrs de los nervios atrapados
En la mitologa inocente del temor infantil.
Abundan los cuerpos dormidos cubiertos de pies a cabeza temiendo las apariciones De los ms horripilantes seres revestidos
De velo negro.
-128-
Ventiscas
Ventiscas a roco matutino baaban tu bella frente
dejando hermoso capullo de gotas en estado silente
soportadas sobre tu tez blanca bronceada
por el sol del trpico.
Los tibios colores florales avistan tus trotes pausados mientras remontas cuestas hechas de asfaltos grises.
Pequeas lagunas naciendo
de la nada, extrao espejismo en sol naciente, hace apuro de tus pasos adormecidos
de la friccin constante.
El temor a sentirte sola traslada tus pensamientos a otros lugares distantes
a la rutina del sudor de estirar tus msculos de conservar tu cuerpo
para disfrutar mejor el da.
-129-
Vestiduras Incambiables
Me despojo de las vestiduras maldecidas,
por el amor secado al sol de tus inclemencias, que una vez age con mis llantos gozosos del placer que me ofrecas en los regazos
de la felicidad de tus cultos superfluos.
Me descubres haciendo lea de tus amores, levantando grandes humaredas de los odios que se antojan en la mente llena de curiosas formas imaginarias, confeccionadas en bellos matices de sangres y cuellos recin cortados.
Entrego mi ms grande orgullo a los brazos
de las bebidas que provocan las alucinadoras resacas, llevando mi mente a otros sitios
extraos fuera de la realidad, y a porrazos entiendo lo equivocado de mis pretensiones.
Finalmente, visto mi cuerpo de flores de colores
para poder cambiar lo incambiable en mis entraas para luego entregarme a las mundanas farras
nocturnas en nupcias prolongadas, con sus rtmicos
romanceros Que descosen la palabra pero no mis amarguras.
-130-
Virginal
Ayer prob en decidido fragor,
Tu ser no mancillado... Dejando tu espirito intacto.
Sent el palpitar sanguneo,
De tu eterno cuerpo.
Fije tu mente con experta Hipnosis,
A los servicios del placer.
Escale las vertientes de tus senos, Como volcanes en ebullicin.
Volqu mis manos en viaje sin
Fronteras, A los con confines de tu piel y
Sexo. Atormente tus labios, Con mi dulce manjar.
Toque tus mas intimas entraas, Como cazador furtivo en tierras
Vrgenes.
Y coloque victoriosamente, mi Bandera ante lo inexplorado.
Finalmente, luego de agotadora
Labor, Susurraste tu quejido triunfal.
S que no podr apartar tu imagen
De m.
Pues, ahora no me har a la mar, anclare mi barco,
y plantare mi refugio en ti.
-131-
Viva la revolucin
Dnde esta mi gorra?
Me sienta bien esta franela? Acerca mi bandera...
No vaya a esa marcha, No es tu problema,
Deja que otros lo hagan, No te pintes la cara,
Abrzame, Te espero en la cena,
Vuelve pronto!
Hola, Marta, Te gustan mis jeans?
Son espectaculares!, Verdad? Hoy es un gran da,
Quiero, que camines a mi lado.
Oigo disparos!, ....Dnde estoy? No siento nada!,
Que pasa! Porque estoy viendo hacia arriba?
Todo me da vuelta! Mejor me voy!
Ay.. No me puedo levantarme Y esta presin en el brazo?
No me gustan las agujas!
Debo buscar mi celular.. No! Lo perd..
Debo revisar mi agenda electrnica! No esta!
Tengo clases maana!.. Eso si lo recuerdo Olvide la cena con mam!
Debo apresurarme! Mi piernaaaaa!
Quin rob mi pierna? Dios mo!
Quin rob mis sueos!
-132-
Volubles sentimientos
Eres la doncella encantada de mis esperanzas bendecidas,
con las miradas en el infinito, sosiego de los esteros aguados
de mis deseos ms ntimos.
Eres moza de las bellas montaas, Y de los suaves desplazamientos,