1. LEER, UNA GRAN DIVERSION Las historias que a continuacin
leers, te llevaran a conocer un sin numero de aventuras divertidas,
que te ensearan lo maravilloso que es leer, aprenders el mundo
maravilloso de las letras. La puerta esta abierta. bienvenido
2. Caperucita roja
3. Haba una vez una adorable nia que era querida por todo aqul
que la conociera, pero sobre todo por su abuelita, y no quedaba
nada que no le hubiera dado a la nia. Una vez le regal una pequea
caperuza o gorrito de un color rojo, que le quedaba tan bien que
ella nunca quera usar otra cosa, as que la empezaron a llamar
Caperucita Roja. Un da su madre le dijo: Ven, Caperucita Roja, aqu
tengo un pastel y una botella de vino, llvaselas en esta canasta a
tu abuelita que esta enfermita y dbil y esto le ayudar. Vete ahora
temprano, antes de que caliente el da, y en el camino, camina
tranquila y con cuidado, no te apartes de la ruta, no vayas a
caerte y se quiebre la botella y no quede nada para tu abuelita. Y
cuando entres a su dormitorio no olvides decirle, Buenos das, ah, y
no andes curioseando por todo el aposento.
4. No te preocupes, har bien todo, dijo Caperucita Roja, y tom
las cosas y se despidi cariosamente. La abuelita viva en el bosque,
como a un kilmetro de su casa. Y no ms haba entrado Caperucita Roja
en el bosque, siempre dentro del sendero, cuando se encontr con un
lobo. Caperucita Roja no saba que esa criatura pudiera hacer algn
dao, y no tuvo ningn temor hacia l. Buenos das, Caperucita Roja,
dijo el lobo. Buenos das, amable lobo. Adonde vas tan temprano,
Caperucita Roja? - A casa de mi abuelita. - Y qu llevas en esa
canasta? - Pastel y vino. Ayer fue da de hornear, as que mi pobre
abuelita enferma va a tener algo bueno para fortalecerse. - Y
adonde vive tu abuelita, Caperucita Roja? - Como a medio kilmetro
ms adentro en el bosque. Su casa est bajo tres grandes robles, al
lado de unos avellanos. Seguramente ya los habrs visto, contest
inocentemente Caperucita Roja. El lobo se dijo en silencio a s
mismo: Qu criatura tan tierna! qu buen bocadito - y ser ms sabroso
que esa viejita. As que debo actuar con delicadeza para obtener a
ambas fcilmente. Entonces acompa a Caperucita Roja un pequeo tramo
del camino y luego le dijo: Mira Caperucita Roja, que lindas flores
se ven por all, por qu no vas y recoges algunas? Y yo creo tambin
que no te has dado cuenta de lo dulce que cantan los pajaritos. Es
que vas tan apurada en el camino como si fueras para la escuela,
mientras que todo el bosque est lleno de maravillas.
5. Caperucita Roja levant sus ojos, y cuando vio los rayos del
sol danzando aqu y all entre los rboles, y vio las bellas flores y
el canto de los pjaros, pens: Supongo que podra llevarle unas de
estas flores frescas a mi abuelita y que le encantarn. Adems, an es
muy temprano y no habr problema si me atraso un poquito, siempre
llegar a buena hora. Y as, ella se sali del camino y se fue a
cortar flores. Y cuando cortaba una, vea otra ms bonita, y otra y
otra, y sin darse cuenta se fue adentrando en el bosque. Mientras
tanto el lobo aprovech el tiempo y corri directo a la casa de la
abuelita y toc a la puerta. Quin es? pregunt la abuelita.
Caperucita Roja, contest el lobo. Traigo pastel y vino. breme, por
favor. - Mueve la cerradura y abre t, grit la abuelita, estoy muy
dbil y no me puedo levantar. El lobo movi la cerradura, abri la
puerta, y sin decir una palabra ms, se fue directo a la cama de la
abuelita y de un bocado se la trag. Y enseguida se puso ropa de
ella, se coloc un gorro, se meti en la cama y cerr las
cortinas.
6. Mientras tanto, Caperucita Roja se haba quedado colectando
flores, y cuando vio que tena tantas que ya no poda llevar ms, se
acord de su abuelita y se puso en camino hacia ella. Cuando lleg,
se sorprendi al encontrar la puerta abierta, y al entrar a la casa,
sinti tan extrao presentimiento que se dijo para s misma: Oh Dios!
que incmoda me siento hoy, y otras veces que me ha gustado tanto
estar con abuelita. Entonces grit: Buenos das!, pero no hubo
respuesta, as que fue al dormitorio y abri las cortinas. All pareca
estar la abuelita con su gorro cubrindole toda la cara, y con una
apariencia muy extraa. !Oh, abuelita! dijo, qu orejas tan grandes
que tienes. - Es para orte mejor, mi nia, fue la respuesta. Pero
abuelita, qu ojos tan grandes que tienes. - Son para verte mejor,
querida. - Pero abuelita, qu brazos tan grandes que tienes. - Para
abrazarte mejor. - Y qu boca tan grande que tienes. - Para comerte
mejor. Y no haba terminado de decir lo anterior, cuando de un salto
sali de la cama y se trag tambin a Caperucita Roja.
7. Entonces el lobo decidi hacer una siesta y se volvi a tirar
en la cama, y una vez dormido empez a roncar fuertemente. Un
cazador que por casualidad pasaba en ese momento por all, escuch
los fuertes ronquidos y pens, Cmo ronca esa viejita! Voy a ver si
necesita alguna ayuda. Entonces ingres al dormitorio, y cuando se
acerc a la cama vio al lobo tirado all. As que te encuentro aqu,
viejo pecador! dijo l. "Haca tiempo que te buscaba! Y ya se dispona
a disparar su arma contra l, cuando pens que el lobo podra haber
devorado a la viejita y que an podra ser salvada, por lo que decidi
no disparar. En su lugar tom unas tijeras y empez a cortar el
vientre del lobo durmiente. En cuanto haba hecho dos cortes, vio
brillar una gorrita roja, entonces hizo dos cortes ms y la pequea
Caperucita Roja sali rapidsimo, gritando: Qu asustada que estuve,
qu oscuro que est ah dentro del lobo!, y enseguida sali tambin la
abuelita, vivita, pero que casi no poda respirar. Rpidamente,
Caperucita Roja trajo muchas piedras con las que llenaron el
vientre del lobo. Y cuando el lobo despert, quizo correr e irse
lejos, pero las piedras estaban tan pesadas que no soport el
esfuerzo y cay muerto.
8. Las tres personas se sintieron felices. El cazador le quit
la piel al lobo y se la llev a su casa. La abuelita comi el pastel
y bebi el vino que le trajo Caperucita Roja y se reanim. Pero
Caperucita Roja solamente pens: Mientras viva, nunca me retirar del
sendero para internarme en el bosque, cosa que mi madre me haba ya
prohibido hacer.
9. Ahora, veamos cual fue la enseanza que te ha dejado el
cuento; dars clic en el enlace que veras resaltado de azul y te
llevara a responder una pequea evaluacin. Te deseo mucha suerte al
contestar las preguntas EVALUACION DE LECTO ESCRITURA.docx