La Hermandad de la
Miserabilidad
Autor: René Julio Milla Auger
Dedicado a cada persona, que el frío del invierno se llevo, sus huesos al
cementerio…
Cada persona va encontrando su propio destino, satisfactorio o no. La historia se
ha originado con el hecho de ser el mismo, con diferentes matices ya sean
casualidades o causalidades de la misma vida, originada para cada individuo…
Las hermandades son clanes cerrados, que no dejan entrar mucha gente ya que
siendo eliticos en la posición que se encuentren, estarán siempre siendo una
hermandad, de pobres o ricos, feos o bonitos, de gentes o “de indigentes”…
Afirmado en la pared de la carnicería estaba “Carlitos Pinto” esperando que
abrieran la picada de la esquina, donde comprara la bebida para la mañana, un
pequeño envase de vidrio que llevaba en su bolsillo izquierdo, que debía ser
llenado con aquel liquido maduro de uvas vírgenes, extraídas de las mejores vides
que se puedan encontrar en nuestros suelos chilenos, sin embargo esto es solo
imaginación del bebedor o mejor dicho alcoholico , ya que lo que se vende en
esos lugares es un vino tan malo, que el primer sorbo te deban ganas de vomitar,
ya al segundo pasaba el trago amargo y el tercero te dejaba ver, que ya estabas
embriagado, hasta mas no poder, de ahí en adelante todo era simplemente
esperar que pasase el día para poder decir así, otra jornada cumplida, entre
botellitas de vino y conversaciones que muchas veces solían salirse del
fundamento y equilibrio necesario de nuestra sociedad, en donde el hombre mas
vivido es el que tiene la palabra de sabiduría que le ha enseñado la calle, mas
nunca falto el joven cretino, alegador que al final quedaba solo ya que no se podia
conversar con el y en este tipo de relaciones humanas se tiene respeto por
aquellos que muchas veces, se han ido lejos de sus familias por razones que se
encuentran, dentro de los problemas que radican por conceptos de
heterogeneidad en el corazón del núcleo familiar, creo que en este punto se
comienza a formar el concepto de Miserabilidad…
La miseria que un hombre cuerdo comienza a vivir, al dejar a un pariente mendigar
por que sufrió un desencanto con su mujer, ya que la encontró con un hombre en
la cama o por que su hombre la golpeaba y se aburrió de la miserable vida que
llevaba, teniendo un buen estatus social y comenzó a aclanarse en los suburbios
de la ciudad con la gente denominada “miserables” por el resto de la comunidad,
¿Quién resulta ser mas miserable? La persona que ha llegado a engañarse dentro
de una botella ahogando sus penas, o aquel pariente, hijos, primos, tíos, que no lo
quieren ver por que se encuentra en ese estado, “De abandono”, ¿Donde
comienza su miseria y donde se establece la responsabilidad de nuestra sociedad
en este concepto que afecta a un individuo, que habiendo sido sano se ha dejado
botar?, y que de pronto solo comienza a ser alterna, cuando la miseria fue dejar
que esa persona se fuera, donde todos son iguales, ya que están ebrios con su
pasar, aunque entre ellos existan diferencias, por la misma vía que es la vida que
los condujo, hasta esa parte de la incertidumbre humana, que le he denominado
Miserabilidad…
Carlitos Pinto, (apodo) prospero empresario de Puerto Montt, hombre cultivado en
los mas exquisitos colegios, se preparaba para tomar un próximo sorbo de vino
tinto y fumar lentamente su cigarrillo, por que no sabe si será el ultimo del día o si
comenzaba a fumarse el día entero, ya que nadie entiende como será el resto de
sol, hasta que comience a caer la noche, en la cual se enfrían los huesos viejos y
comienzan a doler, y cuando cae el aguacero, otra historia, que te hace recordar
que es lo que hemos sido y hay que ir a cobijarse en la botillería de mas allá, a
una cuadra de General Velásquez, picadita en donde su dueño, El tuerto
Rodríguez, tiene unos cuartos atrás en los cuales, tiene algunas sillas y pocas
mesas, algunos vidrios rotos, con sus paredes pintadas de un verde agua que
ahora esta ahumado por el humo del carbón y la leña de cajón de tomates,
recogidos por algunos de nosotros, en las ferias libres para calentarse y secar en
algo la ropa que se lleva puesta y en la cual te venden un plato de comida caliente
por $150 pesos chilenos, es bueno tomarse una sopa de puchero después de
estar todo el día en la calle y con la tormenta que cae implacable por esas aceras
solitarias y mojadas del barrio de Estación Central. Si no fuera por el árbol viejo
que se encuentra en la calle Santa Teresa, estaríamos estilando hasta los
calcetines y ese si que sería problema, por que nos agarraríamos una pulmonía
que nos enviaría al policlínico de la hospedería y ahí solo el mas fuerte sobrevive
aunque los cuidados de las enfermeras son muy buenos, muchos de nosotros
estamos debiluchos, el licor te inhibe el apetito, es mejor el trago que el “Tito
Manyare”, (almuerzo), se aprende el ritmo de vida de estas callejuelas, que no
sabes si tendrán salida para ti, ¿infortunio o azahar?. Ni los carabineros se
molestan en detenernos, nadie quiere a los borrachos o mendigos que quieren
contar sus dichos, son un problema llevárselos presos, se ponen a cantar hasta
que se duermen, pero ¿Quién realmente sabe quienes Son? Y ellos son
¿miserables o sobrevivientes? de una sociedad que los ha condenado y les dice
siempre, en que momento se te ocurrió abrazar la miseria de esta manera, fácil es
decirlo, pero si la depresión te tiene atrapado, ¿Cuál es el camino por el que te vas
a marchar?, los que vivimos en las calles sabemos, pero los que miran de ves en
cuando, ¿Sabrán hacia donde nos dirijimos?… Miserabilidad, indescriptible
sugerencia, excepto por las conductas de las personas, en donde al individuo, no
le alcanza para comprar zapatos a los niños y los manda con agujeros a la
escuela en todo su uniforme, o no le alcanza para darles un buen plato de comida
y los mantiene con sopita de sobre, por guardar el dinero que reúne, para sus
arcas personales, que realmente a nadie le sirve después que has entrado en tu
cajón y la tierra te cubre dejándote como carne de gusanos, paradojalmente, al
verte así, seria necesario decir que todos los pesos que no gastaste en alimento,
en comida te transformas y los gusanos se harán un festín con tu carne y los tuyos
se olvidaran y recordaran las largas jornadas de hambruna que los hiciste vivir y
tu “esfuerzo de ahorrar todo ese dinero” ¿En que va a quedar? En la comilona que
tu familia se va a dar sobre lo miserable que fuiste cuando estabas con vida… Y la
Hermandad de la Miserabilidad, comienza a fortalecerse creando diversas
vivencias y nuevos nexos de aquel apestoso olor a podredumbre que muchos
hombres “no conocen por que se bañan todos los días” y a cada rato para
olvidarse de donde vinieron y hacia donde no quieren volver, nunca mas, por que
no se lo permite la pobreza, que tienen en su interior, de echar un vistazo hacia
atrás recordando de que fueron creados. Muchos muestran que las almas no
tienen pobreza y que el espíritu no se envilece, entonces que me dices tu cuando
estas atribulado y entras con tus andrajosos trapos que huelen a calle y con los
cuales te has vestido por mas de una semana y a veces es mucho mas tiempo,
por que la noche te ha pillado en la mitad del camino y te has tenido que tapar con
aquellos cartones, que encontraste tirados en la acera, para que se los llevara el
basurero o fueran un recurso monetario para el cartonero y de esta manera
entraste al templo de oración “La Iglesia” con un corazón consternado, has llegado
con olor a basural y orines, no tienes mas ropa que ponerte y la hermana/o te mira
con cierto aire de asco, arriscando su nariz y estando a tu lado, tu sientes que
estas siendo despreciado en la casa del señor ¿pobreza de espíritu o gracias a
Dios ya no huelo de esa Manera?, mas la causa del error se encuentra en no
haber dado asilo al afligido, entonces mi hermana/o ¿no esta siendo
acompañado/a por la miseria dentro de su alma y se torna mas miserable que
nosotros mismos, que estamos en la calle de la vida, y por el solo hecho de haber
perdido la facultad de no mirar a su alrededor, con la percepción clara de lo que es
el cristiano, que ha sido acogido en los brazos de Nuestro Señor Jesus-Cristo, ha
corrompido el Cristianismo?...
Ese era uno de los dolores de Carlitos Pinto cuando sorbía su sopa caliente la cual
acompañaba con un vaso de pipeño por que la mangueada (pedida en la calle)
había sido generosa para ese día, me decía que lo importante era reconocer de
donde habíamos salido o venido, sin importar que estuviésemos ahora en un mal
pie, o tal vez llenos de dinero, “ esto no es de importancia para nadie”, total el
atorrante siempre va a ser eso, “atorrante” por que cambiarlo es difícil, sobre todo
cuando se acostumbra uno a vivir de la calle, pero hay situaciones que no deben
ser aguantables y no debemos dejarlas pasar, tampoco, el maltrato a la mujeres,
como la golpean hasta dejarlas inconcientes, patearlas en el suelo y cuando están
embarazadas agarrarles a combos el vientre y después burlarse de ellas,
llevándola a la posta y les advierten a sus parejas casados o no “Pobre que digas
quien te golpeo o te va a salir peor la otra paliza que te voy a dar”, mas encima le
lleva flores a ver si lo perdonan esto si es ser Miserable, condenable y
extremadamente pobre en su pensamiento y proceder de esta manera como ser
humano hacia la pareja que tu elegiste, condeno Miserabilidad, concepto que
cubrimos con diferentes nombres, malvado, cretino, sin corazón, vago, llegando a
la calidad de enfermo para los demás, de ahí parte el cretinismo que
habitualmente nos cubre con diferente patologías clínicas, esquizofrénico,
maniaco, de mente, etc…
Callando y partiendo la única papa del plato que le habían puesto en esa sopa,
sonreía y soplaba, que por lo menos caliente se encontraba, terminando su
comida con harto ají verde, al instante su cara se había puesto de color rojo por lo
picante que se puso su boca y garganta o por lo soleado del trago que se mando
al seco después de esto, se preparaba a encender su cigarrillo, hurgándose en los
bolsillos de su vestón primeramente, en busca de los tan buenos e inolvidables
compañeros, sus fósforos, extendiendo el pequeño madero sobre uno de los
laterales de la caja, para que su cabeza iniciara el recorrido, de esta forma cuando
finalizara el trayecto, su flama ya estuviera abierta mostrando el suave color del
cerrillo acercándolo entre sus manos hacia el extremo opuesto del filtro que
afirmaba entre sus labios, aspirando el humo que inmediatamente llenaba su
cavidad bucal, para exhalarlo lentamente hacia el techo con la cabeza inclinada
hacia atrás y arriba, perdiendo su visión en la nube de humo que ascendía en este
comedorcillo de juegos, cantos, comida y tragos, donde muchos contaban sus
historias casi irreales, pero con dolor que muestran las lagrimas, eso hacia que
fueran vivas, al compás de una guitarra y muchos también mentían para no ser
menos frente a los demás y así poder ganarse un puesto en este hermético circulo
de “Libertad” en el cual solo algunos eran invitados a entrar y los demás que
tomaran sus cosas y se fueran para sus casas, por que no eran dignos de decirse
miembros de la “Hermandad de la Miserabilidad” y así como en las grandes
cofradías en que solo son recibidos los que son reconocidos, lo mismo sucede
acá.
De pronto un bullicio estruendoso y entra Pepe, como un enajenado mental, antes
de hablar se coloca una caña de vino blanco al seco para decir: ¡Aquí en la plaza
le han dado un balazo a un Joven y esta muerto!, nos levantamos rápidamente
para ir a husmear, el clima continuaba frío y lluvioso, con sombrero como única
cubierta para la lluvia que se estaba ensañando con el espectáculo que
estábamos observando, de pronto Carlitos Pinto, me codea (golpea con el codo) y
me muestra sin emitir sonido al otro lado de la plaza, junto a una banca sentado
en el suelo estaba “El Chueco” con la cabeza gacha, al parecer los carabineros no
lo habían visto, lo cubrían algunos matorrales, me dijo que lo acompañara,
llegamos donde estaba y lo tomamos al Chueco entre los dos y lo llevamos a la
picada, pedimos un plato caliente de sopa, en esos momentos no se puede pensar
con el frío en los huesos y la ropa mojada, ordenamos un medio pato de tinto (eso
bebía el) pero andaba preparado el Chuequito, así es que saco su botella plástica
llena de tintan (vino tinto) y comenzó a hablar diciendo que le habían disparado al
chicuelo no mas por dispararle, iba pasando.
Pero el Chueco sabia bien, que si hablaba de mas también le podría tocar a el la
puerta la pelada, así es que no quisimos saber mas y lo dejamos con algo caliente
en el estomago y nos fuimos al hogar, era tarde y si llegamos después de la hora
los Tíos/as nos dejan sin cenar.
Al día siguiente el Chueco tenia un disparo en la cabeza, abatido en la misma
plaza, los brazos rotos y las piernas quebradas, esas son las hermandades
silenciosas de los bandoleros, Carlitos dijo: mira los Miserables no les basto con
apalearlo bien, lo mataron igual, deben haber pensado que el hablo son unos
miserables novatos, no deben ser de acá, no sabían que Chueco nunca delato a
nadie y este hermano si que había vivido y visto en la calle mil cosas…
Que descanse bien y en paz, te veré en el cielo estimado, así es que nos fuimos a
llorar las penas y conversar de lo miserable que era la vida que nos había tocado
compartir, y con la enfermedad del alcoholismo no nos daban trabajo en ningún
lugar, la Miserabilidad tocando el alma humana, sin compasión entre nuestras
conversaciones muchas lagrimas se derramaron y muchos vasos de vino fueron a
dar a nuestros estómagos y entre una de estas Carlitos Pinto me dijo conocí al
chueco antes que fuera boxeador (de ahí provenía su apodo, por la nariz
quebrada), me explico que había estado inmerso en la política y trabajo
arduamente por un partido, codo a codo con Senadores y Diputados en el cual le
prometieron que tendría un buen puesto en cuanto ganaran las elecciones, y el
chueco se puso a trabajar hasta altas horas de la noche, en pos de una
oportunidad de salir adelante colocando letreros, palomas acompañando a una de
las mas grandes y antiguas dirigentas de la ciudad, trabajaron y trabajaron mas y
cuando se cansaron siguieron trabajando, al poco tiempo que ganara el partido
que trabajaba, la dirigenta se enfermo gravemente por las extensas jornadas
laborales que tuvieron que hacer para que el partido saliera adelante y la dejaron
literalmente botada y al Chueco lo hicieron a un lado por que era una persona
instruida pero sin titulo que lo avalara y esto no le conviene a los gestores políticos
por que no hay que avispar a las aves, dicen, es malo para todos, (sobre todo para
quienes se denominan asesores de las autoridades) la multitudes solo deben
saber lo que es necesario y eso creo que es mucho, “Pan y Circo para el Pueblo
dijo El Romano” así es que el Chueco con su amiga quedaron vulgarmente
hablando, “Tirados en la Carretera” y desde ese tiempo es que subió al Ring a
desquitar sus rabias y ¿Esto no es miseria de los partidos políticos que juegan
con la sensibilidad de las personas y se aprovechan de sus colaboradores,
sacándole partido a los intereses que tienen escondidos para sus propósitos
miserables?, yo lo miraba no sabía que decirle, Carlitos estaba claramente
enojado, mientras que el humo salía con fuerza de su boca, agregaba:
La miseria esta dentro de todos los ángulos aun los mas imperceptibles
indescriptibles, amigo nosotros no hemos nacido miserables es la vida los que nos
hace ser, lo que somos, no he podido entender como las demás personas, se han
vuelto míseros con sus pequeños hermanos diciendo que nosotros somos los
perdidos y te vienen y te dan pan, ¿Hay que agradecer?, o ¿Es solo injusticia
social? pero siempre entran dudas, ¿Del por que lo hacen o es que tienen la
conciencia brumosa y no hablo de los niños que envían como carne de cañón
Universitarios, para que se senbilizen de lo que sucede a su alrededor, ¿Para
que?, para hacerlos sentir miserables de que deben hacer algo por esas personas
cuando estas gentes son tarea de un estado políticamente equilibrado y este
gobierno hace aspavientos de sus soluciones de parche y lo muestran en la
televisora, diciendo que han hecho un adelanto con respecto a las probabilidades
de la subsistencia del mendigo ¿y nosotros? y ¿Nuestros compañeros muertos?
¿Quién se hace cargo de este pequeño punto del nuestro Universo Social?, solo el
curita, las hermanas, las pompas fúnebres, los enterradores y el agujero y si te
pones a pensar en mis palabras se deja ver, que también me he vuelto miserable
en este dialogo, por que aunque les estén dando a los demás, reclamo igual,
Hermandad de la Miserabilidad, esta inscrita en los genes de la humanidad y es
tan fina la línea, que de pronto se deja pasar sin darse cuenta que es esa la
historia de nuestra realidad…
FIN