EL PAPEL DE LAS UNIVERSIDADES PÚBLICAS EN LA PRESERVACIÓN
DEL PATRIMONIO CULTURAL.
Dra. Claudia Rocío González, [email protected], Universidad Autónoma
Metropolitana-Xochimilco
Dra. Giovanna Mazzotti Pabello [email protected]
Universidad Veracruzana
Dr. Pedro C. Solís Pérez, [email protected], Universidad Autónoma
Metropolitana-Iztapalapa
Capítulo: 17. Teorías de la Organización
RESUMEN:
En este trabajo se presenta el análisis del papel que pueden jugar las IES
cuando cuentan con un área académica de artes, con las funciones sustantivas
integradas, en la generación y conservación del patrimonio cultural en los entornos
locales y cómo esto puede promover, además, una formación profesional más
completa y la formación de actores/agentes de la cultura en nuestro país.
Esta ponencia es resultado de un proyecto de intervención/investigación la
reforma y la reorganización de la Universidad Veracruzana, que en los últimos
años ha modificado sus estructuras organizativas, específicamente en el área
académica de artes, a fin de integrar las funciones sustantivas en áreas y campos
de conocimiento, para la formación profesional integral de agentes generadores de
productos culturales y artísticos y para la preservación del patrimonio cultural de
Veracruz.
PALABRAS CLAVE:
Patrimonio cultural, IES, formación profesional y generación
productos culturales y artísticos
INTRODUCCIÓN
En la medida que la globalización es impulsada por empresas
transnacionales que operan en una economía integrada y amplia, se desarrollan
procesos políticos y acuerdos supranacionales que regulan y norman actividades
a nivel mundial, se expone a un mayor contacto a culturas diferentes en un
espacio social emergente con nuevos significados e interacciones que se traducen
en un tejido cada vez más denso de interdependencias asociadas a metas y
regulaciones sobre aspectos específicos relacionados con diversos tipos de
globalización. Dicho esquema corresponde a la presencia de esquemas de
gobernabilidad y de gobernanza locales que, según Messner (2001: 63) deberá
contemplar la articulación de diversas formas y planos, de coordinación,
cooperación y toma de decisión colectiva. Esto quiere decir que al multilateralismo
tradicional se incorporan diferentes esferas de acción lo cual exige una
reorganización del aparato institucional referido a contextos nacionales, a fin de
adaptarse a las demandas de la diversidad de los contextos locales.
De hecho, las reformas en la ONU iniciadas en la década de los noventa,
responden a la necesidad de adaptación a las transformaciones que han ocurrido
en el mundo en la última década del siglo XX y se desarrollan de frente a las
condiciones que se avecinan en el siglo XXI. Dichos referentes ahora están
directamente relacionados con el principio de unicidad o más directamente con la
Convención de 1972 (UNESCO), la cual señala los principios básicos a partir de
los cuales un sitio, una tradición, una comida, un ritual pueden ser declarados
Patrimonio Mundial. La percepción de que los elementos simbólicos contenidos en
una tradición, un platillo, la música y la cultura popular en general son elementos
de cohesión social es utilizado como una nueva estrategia para genera capital
social. La política cultural es vista entonces como una herramienta de desarrollo
social.
En este marco, es importante señalar que desde hace algunos años, la
manera en que se entiende y el valor que se le atribuye al papel que juega la
cultura en el desarrollo de una comunidad, ha cambiado. A diferencia de los años
anteriores, en los que el proyecto modernizador trató a la diversidad cultural como
elemento residual; convirtió a los conocimiento ancestrales en saberes marginales
y transformó a los vínculos comunitarios en obstáculos para el desarrollo, hoy,
diversos organismos internacionales (ONU, UNESCO, BM, y BID) sitúan la cultura
en el núcleo mismo del desarrollo y se asume como una inversión esencial para el
porvenir de las naciones1.
Pero no sólo eso, sino que a partir de lo anterior, a fin de darle seguimiento
a dicha iniciativa, dichas instituciones han elaborado una serie de documentos
(instrumentos normativos) que, resultado de convenciones internacionales
contienen declaraciones y recomendaciones que son referentes para la definición
de las políticas educativas y culturales de los países firmantes.2
1. EL PATRIMONIO CULTURAL
1 1 http://www.unesco.org/new/es/culture/about-us/how-we-work/strategy/ revisado 6 diciembre 2011 2 http://portal.unesco.org/en/ev.php-URL_ID=12024&URL_DO=DO_TOPIC&URL_SECTION=201.html. Convención 2003 Patrimonio inmaterial.
A partir de la implementación de la Convención para la salvaguardia del
patrimonio cultural inmaterial 2003, debe de entenderse por patrimonio inmaterial
"todo aquel patrimonio que debe salvaguardarse y consiste en el reconocimiento
de los usos, representaciones, expresiones, conocimientos y técnicas transmitidos
de generación en generación y que infunden a las comunidades y a los grupos un
sentimiento de identidad y continuidad, contribuyendo así a promover el respeto a
la diversidad cultural y la creatividad humana".
Tal como se define en la Convención, el patrimonio cultural inmaterial, se
manifiesta particularmente en los siguientes ámbitos:
Las tradiciones y expresiones orales, incluido el idioma como vehículo del
patrimonio cultural inmaterial.
Las artes del espectáculo.
Los usos sociales, rituales y actos festivos.
Los conocimientos y usos relacionados con la naturaleza y el universo.
Las técnicas ancestrales tradicionales.
Tales recomendaciones no tienen un carácter vinculante, por lo cual, el reto
consiste, sostiene la UNESCO3 en convencer a los políticos responsables de las
decisiones y a los actores sociales locales de que integren los principios de la
diversidad cultural y los valores del pluralismo cultural en el conjunto de las
políticas, mecanismos y prácticas públicas, especialmente gracias a
la colaboración del sector público/sector privado. En este sentido, la cuestión de la
GOBERNANZA se convierte en un elemento privilegiado, por parte de las
Instituciones encargadas de la Cultura, para asegurar la puesta en marcha de los
proyectos que atienden las cuestiones educativas y culturales de una región.
Con base a lo anterior, es posible observar que tanto el posicionamiento
como las estrategias de las Instituciones u de las organizaciones orientadas al
3 ídem
fomento y al fortalecimiento de las diversas expresiones culturales de una región
se han ido modificando, y, poco a poco, han dejado de estar abocadas
exclusivamente a la difusión de las obras artísticas (folklóricas o de las clasificadas
“bellas artes”) o de funcionar como agentes promotores de educación no formal,
para convertirse en verdaderas palancas del desarrollo social de las comunidades.
Ello implica que, tanto las funciones, como el diseño organizacional de las
Instituciones, pero sobre todo, la cultura organizacional y la formación de los
funcionarios y facilitadores. El papel del gestor de la cultura cómo un agente de
cambio que logra vincular actores ha sido también reconocido y estimulado, los
organismos culturales, han reconocido la necesidad de transformarse para poder
adaptarse a las exigencias del entorno que, con la globalización se vuelven, en
todas las regiones de la orbe, cada vez más acuciantes: migración, pobreza,
delincuencia organizada, polarización social, crecimiento urbano y devastación
ecológica, entre otros problemas, claman por la creación de alternativas que, por
medio de proyectos socialmente innovadores (gestión social) y acciones políticas
concertadas (redes interinstitucionales y gobernanza) tiendan a la reconstrucción
del tejido social, colaboren al bienestar de la población en su conjunto y generen
condiciones de gobernabilidad.
En consecuencia, no se trata sólo de transformar la cultura organizacional y
diseñar de manera más flexible a las instituciones avocadas a la preservación y
difusión de la cultura, sino de replantear los fundamentos de sus funciones y para
ello es preciso que las Universidades, como centros generadores de conocimiento
sean también capaces de tomar en sus manos el reto que representa tanto la
producción como la valorización (mediante la difusión y la innovación) de las
expresiones artísticas y culturales de la región en su dimensión universal.
Es preciso considerar también que, en la medida que la globalización ha
puesto en entredicho las identidades, la cultura ha dejado de ser únicamente un
adjetivo, añadido a productos que, por su valor estético, merecen ser difundidos,
para convertirse en un factor neurálgico que atraviesa todas las áreas que
determinan el desarrollo.
2.- LA UNIVERSIDAD Y LAS ARTES
Es aquí dónde las Universidades Públicas en tanto instituciones que tienen
la capacidad de dar estabilidad cultural e impulsar el desarrollo de la sociedad de
la cual emanan, están obligadas a demostrar su pertinencia cumpliendo los
objetivos que se le han asignado: generar conocimiento pertinente e innovador,
formar recursos humanos capaces y vincularse con la sociedad para mejorar las
condiciones de vida mediante la aplicación de la innovación social, cultural y
técnica.
Al respecto se tiende a hacer énfasis en la capacidad de las universidades
para generar un tipo de innovación asociada a la tecnología, las patentes, por
ejemplo, es uno de los indicadores que tienen un valor mayor cuando se trata de
determinar la relevancia en la investigación y de resaltar la calidad de la formación
profesional, sin embargo, sostenemos que es imprescindible reconocer que, en la
llamada sociedad del conocimiento, cuyo desarrollo se inscribe en el proceso
globalizador que hemos referido, se ha privilegiado la innovación que favorece la
mejora o el desarrollo de procesos, tecnología y productos, mientras que el tipo de
innovación que redunda en la preservación de las actividades culturales y sociales
de los pueblos, tiene una valoración marginal. Dicho de otro modo, la innovación
se ha entendido como conocimiento añadido a los artefactos, mientras que el
conocimiento añadido a las relaciones humanas y a la construcción de significado
colectivo. Este último tipo de innovación es a la que nos estamos refiriendo con el
caso que ahora presentamos.
Ya en el documento La Evaluación Académica De Las Carreras De Artes
(2001) elaborado por Comités Interinstitucionales Para La Evaluación De La
Educación Superior (CIEES) se reconoce que: “el campo de las artes, por su
riqueza y requerimientos específicos, impone la necesidad de una evaluación que
atienda los aspectos específicos de las carreras de arte (2001:9)”.
Algunas de las especificidades que se mencionan son: “el lugar primordial
que debe tener en los planes de estudio: la sensibilidad estética y todos los
elementos para fomentar y desarrollar la creatividad”. No basta, continúa, “con
satisfacer las grandes exigencias de una preparación técnica, es indispensable dar
paso a la capacidad creativa que debe potenciar toda carrera de arte. Acentuar la
idea del arte como creación, promover la carrera artística como profesión, abrir
espacios de creación y difusión artística. Todo ello debe reflejarse en los planes y
programas de estudios” (2001: 17)
Se resalta otro aspecto, que tiene que ver con la contratación y el tipo de
requerimientos que para una carrera académica deben cubrir “Los profesores que
imparten clases en una carrera artística [es que] deben contar con una amplia y
sólida trayectoria artística, y poseer la capacidad y conocimientos suficientes para
desempeñarse como buenos profesores de arte.” (2001: 21) Y en lo que respecta
al ingreso de alumnos, se afirma que “los programas de arte deberán considerar
que la formación profesional en la mayoría de las disciplinas artísticas requiere el
inicio a edades muy tempranas. El estudio de la música o de la danza clásica, por
ejemplo, reclama que los alumnos se introduzcan a ellas preferentemente desde la
infancia. Conforme a ello, el acceso a una formación de nivel medio superior o
superior en arte debe suponer estudios previos en la disciplina de que se trate”.
(2001:23)
Y por último, en el documento se resalta que “Los estudiantes de carreras
artísticas no pueden desvincularse de la difusión ni de la creación. […].El proceso
de producción artística, que empieza con la construcción de un objeto de arte,
culmina con la degustación del público” (2001: 27) “En este sentido, cobra gran
importancia, por su función estratégica en la vinculación con otras comunidades
académicas y el público general, el fortalecimiento de la difusión de la cultura y de
la extensión académica a través de cursos, talleres, diplomados, seminarios,
coloquios, etc., que se realicen de manera sistemática.
Se deberá vigilar su congruencia con las opciones profesionales que en
este campo ofrezca cada institución” (2001:.28).
Las especificidades, y el hecho de que las Artes constituyan una pequeña
parte (cerca del 30 por ciento) del universo total que le corresponde evaluar al
Comité de Educación y Humanidades y que está constituido por 164 programas de
los cuales 25 se imparten en la UNAM y el resto en universidades de los estados,
(2001:8) determinan el hecho de que cuando se habla del papel de las
Universidades y se describen sus funciones sustantivas, se mencione la
generación y la distribución del conocimiento haciendo hincapié en la investigación
y la vinculación, sin hacer alusión, ni los procesos de creación artística, ni a los de
difusión cultural como parte integral tanto de la formación de profesionistas, como
del compromiso social de las universidades.
Lo anterior ocurre pese a que “En las últimas décadas, las universidades
han ampliado su cobertura de programas de arte. Cada vez hay más programas
formales que sustituyen o complementan a los talleres y departamentos, se tiende
a que las carreras técnicas den lugar a la aparición de los estudios profesionales.
Las estadísticas de la última década marcan un incremento notable de programas
de enseñanza artística en las universidades” (2001:8)
En efecto, a partir del 18 de enero del año 2011, el rector Raúl Arias Lovillo,
anunció la integración del área de difusión cultural y el Área Académica de Artes
con la finalidad de desarrollar un solo gran proyecto universitario. En las notas del
periódico universitario (Universo, No. 427) y de los periódicos locales (Diario de
Xalapa) datadas el 18 y 24 de enero respectivamente, se menciona que: “Tanto el
Rector de la UV como el responsable de la difusión cultural en la UV, han
destacado la valiosa oportunidad que representa la iniciativa de integración que,
permitirá tanto a los grupos como a la academia del Área de Artes fortalecerse
mutuamente con su experiencia, ofrecer una mucho más amplia y sólida oferta
educativa a los jóvenes estudiantes […] la iniciativa de integración permitirá, al
mismo tiempo, incorporar a los grupos artísticos, de amplio reconocimiento
nacional e internacional, al proceso de academización, modernización e
innovación vigente en la Universidad, mientras suma la experiencia de ambas
áreas a favor del fortalecimiento tanto de la difusión cultural como de la academia
de las artes”. Continúa la nota: “Raúl Arias también ya ha referido que, como en
las anteriores reformas universitarias, los derechos laborales de los miembros de
los grupos artísticos están garantizados, además de que esta reforma daría a los
artistas y ejecutantes que se sumen a la docencia, investigación y vinculación, la
posibilidad de participar en los distintos programas de estímulos académicos que
tiene nuestra casa de estudios para tal efecto, permitiendo que artistas y
ejecutantes con vocación académica realicen y se realicen con tales tareas”.
En este contexto, el reto consistía en lograr que se desarrollaran espacios
que facilitaran la capacidad de los grupos para actuar conjuntamente. Dichos
espacios deben ser procurados incorporando una mayor flexibilidad, el
debilitamiento de la división del trabajo, e incrementando la coordinación y la
interdependencia entre actores de distintas dependencias. Sin embargo, esto no
resulta tan sencillo, ya que, en este caso, tanto los profesores del área de artes,
como los ejecutantes adscritos a difusión cultural, son desafiados a enfrentarse a
los nuevos espacios de comunicación para interactuar constructivamente,
intercambiar conocimiento y experiencias, trabajar en equipo y cuantificar los
resultados del aprendizaje, para lo cual deben adquirir habilidades de socialización
que les permitan resolver problemas conjuntamente; tomar decisiones; ser
creativos, flexibles y adaptables, y a aprender de los otros en el hacer sobre la
práctica.
Por ello, la utilización de ciertas metodologías participativas de gestión
como tecnologías de cambio y de acompañamiento son artefactos que coadyuvan
y transportan conocimiento de los individuos a los grupos y a la organización, cosa
que implica una fuerte transformación respecto a las formas tradicionales de
organización y que asimismo, requiere incorporar una mayor flexibilidad, ajuste
mutuo, debilitamiento de la división del trabajo e incrementar la coordinación y la
interdependencia.
En este trabajo veremos los avances desarrollados en esta dirección tal
como se registra en la experiencia de los actores, en los documentos
institucionales y en la legislación universitaria.
3.- LOS PROPÓSITOS INSTITUCIONALES
Al aplicarse la metodología del marco lógico se identificaron los dos
propósitos Institucionales del eje de difusión, extensión y vinculación universitaria,
tales propósitos fueron
a) La promoción de un nuevo ciclo de la difusión cultural para consolidar la
vinculación con la comunidad a través de la difusión y el fomento de la
cultura, y
b) Contar con una nueva cultura de la vinculación con énfasis en el desarrollo
sustentable, intercultural local y global para impactar positivamente en los
objetivos del desarrollo social, político y económico de la población.
Para el cumplimiento del primer propósito, se llevaron a cabo acciones muy
contundentes que quedaron plasmadas en la legislación universitaria a partir del
Acuerdo del Rector del 18 de febrero de 2011, ratificado en CUG del 14 de marzo
de 2011: La Dirección General del Área Académica de Artes será responsable de
promover y difundir la cultura a través de los grupos artísticos, como organismos
de difusión y extensión, así como de impulsar la participación de los ejecutantes
en actividades de docencia, tutoría, investigación y gestión académica. Para
promover y difundir las obras resultantes de la actividad de los artistas visuales, la
Dirección General del Área Académica de Artes contará con la Galería Ramón
Alva de la Canal. 2 En este acuerdo4 plasman los siguientes considerandos:
Que actualmente los grupos artísticos se suman a la transformación
académica que ha emprendido la niversidad eracruzana con su incorporación
la irección eneral del rea Académica de Artes, con la finalidad de que los
conocimientos competencias, e periencia prestigio de los integrantes de los
grupos artísticos se capitalicen beneficios en atención de la formación integral de
los alumnos y de la comunidad universitaria general.[…] En este sentido, los
grupos artísticos continuarán contribuyendo a la difusión y e tensión de la cultura
y las artes y tendrán la oportunidad de sumarse de manera sistemática a los
procesos educativos a través de la docencia, la investigación, a las tutorías, a la
creación, ejecución y la gestión académica.
Resultado de lo anterior, se define una estructura operativa del Área que
consiste, afirma un actor entrevistado, en:
Una Dirección General y tres grandes coordinaciones: Una que es la
Coordinación Administrativa, otra que es la Coordinación de Docencia e
Investigación y, por último, la Coordinación de Difusión y Extensión de la
Cultura. Estas tres coordinaciones, en el organigrama tiene un mismo nivel,
sus actividades son lineales, o sea, están absolutamente interrelacionadas,
todas. Y la nueva Dirección del Área de Artes tiene su propia administración
tiene sus propios recursos y se encarga de administrarlos obviamente. Aquí
tenemos a la secretaria de administración y finanzas a quien le damos cuenta
todo el tiempo. En la Coordinación de Docencia e Investigación el objetivo es
dar un seguimiento y hacer propuestas de mejora a todos los programas
educativos con los que contamos. Programas de licenciatura, de posgrado,
4(http://www.uv.mx/transparencia/infpublica/convenios/acuerdos/documents/Acuerdo-2011-02-18.PDF)
talleres libres de arte, los centros de iniciación musical infantil, centros libres
de jazz. Estar constantemente haciendo estas propuestas de mejora y,
asimismo, al interior de los programas educativos, nacen proyectos artísticos
que son representativos de cada uno de los programas…
En sintonía con ello, hay otro cambio sustancial, es aquel que va dirigido a
la definición de los Organismos de Difusión y Extensión Cultural como entidades
académicas, estableciendo las bases de una identidad Institucional integral. Tal
cuestión se plasma en el ARTICULO 8 de la Ley Orgánica (LO) Las Entidades
académicas FACULTADES: Aquellas que preponderantemente realizan funciones
de docencia a nivel de licenciatura en cualquiera de las modalidades previstas en
la reglamentación universitaria, pudiendo tener a su cargo estudios de posgrado,
de técnicos medios y actividades de investigación y difusión de la cultura y
extensión de los servicios. INSTITUTOS: Aquellos que preponderantemente
realizan funciones de investigación, pudiendo tener a su cargo actividades de
docencia en cualquiera de los niveles y modalidades previstas en la
reglamentación universitaria, de difusión de la cultura y extensión de los servicios
y los ORGANISMOS DE DIFUSION Y EXTENSION: Aquellos que
preponderantemente realizan funciones de creación, ejecución y recreación
artística; difusión de la cultura; actividades deportivas; comunicación y divulgación;
educación no formal y extensión de los servicios, pudiendo realizar actividades de
docencia e investigación.
Lo cual se reafirma en el Estatuto del Personal Académico (p.9) en el que
se enuncia: “En síntesis, el presente Estatuto refleja, respecto al personal
académico del área de difusión cultural y extensión universitaria, un gran avance
que reconoce y formaliza la calidad y valía de un sector de la Institución que por
circunstancias que responden a sus tiempos no se habían otorgado”. Lo anterior
esta plasmado de manera muy clara en el ARTÍCULO 2.- El personal académico
de la Universidad Veracruzana es el que realiza las funciones de docencia,
investigación, difusión de la cultura y extensión de los servicios. En el mismo
tenor, en el Estatuto General CAPITULO V se establece, en los ARTÍCULO 22.-
La difusión de la cultura y la extensión de los servicios constituyen una de las
funciones sustantivas de la Universidad; su ejercicio genérico compete a todas las
entidades que la integran. (Cursivas nuestras)
La breve referencia a lo que consideramos los aspectos centrales de la
legislación universitaria en torno a la iniciativa de integración de las funciones
sustantivas de la organización, denota un gran aprendizaje organizacional y con
base a ello se da un paso importante para romper con la fragmentación del circuito
de generación, distribución y transferencia del conocimiento y caminar al
fortalecimiento del papel de la Universidad Veracruzana para impactar
positivamente en el ambiente cultural de la región. Hablamos entonces de un
incremento sustancial en lo que respecta al Capital Estructural de la
organización, el cual, según el modelo Intelectus (UAM, 2003) representa el
conocimiento propio de la organización, que surge de las personas y de los
equipos de la entidad y debe ser explicitado, codificado, sistematizado e
internalizado por la organización mediante un proceso formal de la creación de
rutinas organizativas o de pautas de acción. En las niversidades y I s, el
Capital Estructural está relacionado con los recursos bibliográficos y
documentales, archivos, sistemas y procedimientos de gestión, la cultura y los
valores, las bases de datos, los desarrollos técnicos y otro medios intangibles
disponibles en Facultades, Departamentos, Institutos, Centros, Laboratorios y
otras dependencias.
Este proceso de reorganización resulta muy favorable, al decir de uno de
los actores involucrados en el proceso de reorganización del área académica de
artes, quien de manera excepcionalmente clara esboza el concepto de la
integración de las funciones sustantiva de la Universidad:
Bueno, creo que hay una demanda muy importante de todas las
actividades que realizamos, sobre todo desde la integración de los grupos
artísticos [al área académica] lo podemos ver de manera muy palpable.
Anteriormente era un poco más complicado […] actualmente hemos
encauzado mucho los esfuerzos hacia allá. Hacia saber cuáles son las
necesidades reales que tiene nuestro entorno y poder cubrirlas a través no
sólo de los grupos, sino de los programas educativos. Estamos buscando que
nuestros programas se enfoquen hacia esta parte de necesidades reales del
mercado laboral. Eso sí lo tengo muy claro… Continúa: lo hacemos a través
de nuestros programas educativos, lo hacemos también a través de los
proyectos artísticos que hay al interior de las facultades y lo hacemos también
con los grupos artísticos.
…hemos trabajado muy cercanamente con las vicerectorías para que
nuestros académicos puedan ir a impartir AFEL con ellos y ahora a partir de
hace ya un periodo, estamos con las tutorías de apreciación artística. También
estas tutorías las llevamos a las diferentes regiones, ya sea en periodo
intersemestral o en periodo regular los sábados generalmente, y de esta
manera hemos ido ampliando estas redes que mencionas. El principal
problema, como siempre, el recurso económico.
En total coincidencia con lo anterior, en las regiones se vive del siguiente
modo, según lo menciona un director de facultad:
Un elemento que yo veo un poquito y no de ahorita que me haya
tocado a mí, sino de un poco antes, empezó a gestionar un poquito cierta
motivación en trabajo artístico a los estudiantes, fue una clase electiva de
fotografía, que de alguna manera hizo un poco de una versión en que los
arquitectos pueden estar … Es curioso ¿no? Porque un arquitecto siempre
puede estar asociado a una condición como la fotografía ¿no? Pero al haber
tomado una clase, como que hubo cierta incentivación (SIC.) yo lo percibo.
Y respecto al problema de los recursos, se afirma en la Vicerrectoría:
En cuanto a los grupos sigue siendo difícil, quisimos traer a uno y has
de cuenta que son nueve mil pesos, nada más porque hay que pagarles
hospedaje, viáticos, alimentación, aunque pongamos la camioneta y vayamos
por ellos. Entonces, sigue habiendo una dificultad, hay la disposición de la
Dirección de Artes, lo que han hecho ahora y hemos hecho con ellas, es
coordinarnos con los ayuntamientos, entonces el ayuntamiento paga una
parte, pero entonces, en lugar de que el grupo venga, viene dos días, y poder
estar los dos días repartido en las facultades, pues tiene que atender dos o
tres compromisos con el ayuntamiento y bueno, ya los otros vienen para la
Universidad, entonces… […] pero si ha disminuido, ha disminuido la
posibilidad de la oferta artística y cultural que tenemos, pero la hemos
subsanado con la local.
En este último aspecto, se ha desarrollado por parte de la Dirección del
Área una serie de acciones que parecen estar dirigida hacia el fortalecimiento de
las capacidades regionales, según se afirma desde una vicerrectoría:
nos comisionó a una persona, que vino a reforzarlo, que tenía mucha
experiencia, mucha experiencia en, por ejemplo, bajar recursos de
CONACULTA, y eso nos ha permitido detonar, por las relaciones que ella
tiene, pero como que es un caso muy particular, pero bueno, el apoyo si lo
quisiéramos generalizar como una política institucional que pudiera haber para
las regiones más apoyos de este tipo comisionando a gente que tiene
experiencia, que tiene relaciones y que nos puede apoyar.
….al momento en que se fusiona la dirección general de artes, el área
académica de artes con difusión cultural, empezamos a tener (con los grupos
culturales) lo que se percibía desde las regiones, fue casi un semestre en que
no pudimos tener actividades culturales en lo que ellos se reorganizaron […]
yo pienso que eso ha sido benéfico porque nos ha permitido potenciar los
valores locales. Se ha formado una rondalla en una facultad, tenemos aquí un
acordeonista en contaduría.
Visto desde otra óptica, en otra región se afirma:
Y después de eso, regionalmente también he gestionado parte de este
trabajo, entonces hemos tenido conciertos, que vengan los artistas de Xalapa
a hacer presentaciones. Se colabora con los viáticos en algunas ocasiones,
según lo que esté programado y como esté programado y ha habido más
eventos culturales en ese sentido. Y por el otro lado, se está empezando a
incentivar la participación de estudiantes en ese sentido. Entonces, por
ejemplo, hubo iniciativa de los propios muchachos […]ellos mismos
organizaron un pequeño concierto en donde ellos eran los actores de ese
concierto y ahorita tienen un proyecto regional que está este… ¿cómo se
llama? Impulso a los talentos y de ahí tenemos ya algunos alumnos que ya
van a participar en esa presentación.
En cuestiones culturales tenemos programado para finales del
semestre la semana del estudiante. Organizado por los mismos estudiantes.
Les inculcamos la cuestión de que ellos mismos participen en este tipo de
eventos. Es una semana en la cual se tienen eventos deportivos, culturales,
bailables, canto. Hasta el año pasado tuvimos cuatro bandas de rock.
CONCLUSIONES
Considerando que los elementos que componen la tercera función
sustantiva de la universidad son de diversa índole, por lo cual, al referirnos a ella
lo hacemos en el marco del circuito de generación del conocimiento y se le
atribuye la responsabilidad de llevar a cabo la trasferencia de conocimiento, que la
institución realiza a la sociedad. En este nivel, la vinculación y la difusión cultural,
como tercera función implica, no solamente la cantidad y calidad de los
“productos” que son puestos a disposición de la sociedad, sino que corresponde al
modo en que la universidad, como organización generadora de valor adquiere o
valida su pertinencia en la sociedad.
No limitándose solamente a la difusión, sino a la gestión de la cultura y de
los intangibles y a la llamada puesta en valor que implica dar un paso más en el
circuito de la producción y difusión de la cultura.
La universidad entendida como “palanca de desarrollo” solo puede cumplir
con su papel al involucrarse con los actores sociales, económicos y políticos para
generar soluciones innovadoras, mismas que sólo pueden ser resultado de los
procesos de investigación, reflexión y organización que dan a la universidad su
razón de ser, estamos hablando de la conservación y reproducción del patrimonio
cultural e intangible y del importante papel que, al respecto, pueden desempeñar
las Universidades. En este sentido, la vinculación refiere a la aportación que hace
la Universidad a la sociedad en su conjunto y los mecanismos que ella tiene para
transferir a la sociedad el conocimiento generado. Es preciso recordar que la
cultura en su acepción mas elemental refiere a la capacidad humana de crear
organización que salvaguarde la existencia del grupo. En este sentido, en algunas
áreas del país y del mundo, este principio básico de la cultura está en riesgo. Por
ello, en los tiempos actuales, es imprescindible no sólo “tener conciencia”, sino
implementar acciones colectivas y organizadas que sean eficaces y que estén
orientadas a la restauración y a la regeneración de los vínculos sociales y
comunitarios mínimos necesarios para garantizar la conservación y la transmisión
de la cultura.
En esta dirección introducir nociones tales como la Gestión Social del
patrimonio cultural entendido en un sentido amplio, puede comenzar a orientar las
acciones y los conocimientos disponibles tanto del área de artes como de las
diferentes áreas tales de conocimiento tales como la sociología, la antropología,
derecho o política, de este modo será posible no circunscribirse no únicamente a
difundir productos culturales sino a planificar, organizar, coordinar y dirigir
programas de cultura y educación de acuerdo a las políticas sociales y a los
problemas emergentes en el sistema social.
BIBLIOGRAFIA
MAYNTZ, Renate, 2001, El Estado y la sociedad civil en la gobernanza moderna, Revista del
CLAD Reforma y Democracia. No. 21, pp. 7-22
MESSNER, Dirk, 2001, Globalización y gobernabilidad global, Nueva Sociedad, No. 176, pp.48-66
DOCUMENTOS:
Gestión del Conocimiento en Universidades y Organismos Públicos de Investigación (2003)
Universidad Autónoma de Madrid. Director del EQUIPO DE TRABAJO Eduardo Bueno Campos
Comités Interinstitucionales Para La Evaluación De La Educación Superior Comité De Educación Y
Humanidades La Evaluación Académica De Las Carreras De Artes (2001) México, D.F.
Http://Www.Ciees.Edu.Mx/Ciees/Documentos/Marcos_Referencia/Caeyh/Eval_Artes.Pdf
consultada en febrero de 2011
FUENTES:
En la Sesión 171 del comité ejecutivo de la UNESCO
(171 EX/18; 171 EX/INF.10; 171 EX/64 part II; 171 EX/65)
http://www.uv.mx/universidad/doctosofi/menuindex.html
Top Related