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ACTORES CLAVES PARA LA JUSTICIA ALIMENTARIA
otros factores personales y de contexto, sino que la
malnutricin tambin est ligada a la obesidad a lo largo
de la vida del individuo (Monteiro et al, 2003; Rivera et al,
2004). Este alarmante problema de salud pblica tiene
races en la globalizacin y urbanizacin de los patrones
de consumo de los alimentos: las dietas tradicionales
ricas en granos y vegetales, basadas en la produccin
domstica en pequeo, son abandonadas a favor de
alimentos importados procesados industrialmente, con
altos contenidos de carne/grasa/azcar/sal, cuya
oferta est dominada por corporaciones agrcolas,
alimenticias, de bebidas y distribuidoras (Reardon et al,
2003; Pingali, 2004; Rivera et al, 2004; Fraser, 2005; Dixon
et al, 2007).
Definitivamente, la pequea produccin agrcola es
clave para la seguridad alimentaria rural; en cuanto a la
seguridad alimentaria urbana, puede muy bien depender
de los cultivos familiares (como en Brasil3) o de la
agroindustria (como en Mxico4). Sin embargo, la
agroindustria no es resiliente ante el cambio climtico:
altamente dependiente de combustibles fsilesresponsables por la mayor parte de la contaminacin y
desperdicio del agua, amenaza la adaptacin de la
totalidad del sistema de produccin de alimentos al
cambio climtico e incrementa la escasez de recursos
(Donald, 2008; Dhillon et al, 2010). Adems, el margen
para incrementar la produccin de alimentos no solo
radica en el sector agroindustrial sino tambin en la
produccin agrcola familiar, donde la productividad es
baja debido a una inversin insuficiente (Bojac et al,
2010; Dhillon et al, 2010; Bailey, 2011).
Las recientes crisis de alimentos debidas al cambioclimtico o a la volatilidad de los mercados
internacionales, demostraron cmo las poblaciones
urbanas logran imponer el tema de manera rpida en las
agendas de los gobiernos (Chiles Shelburne, 2008; Bush,
2010). En el futuro, estas crisis sern ms frecuentes y
los ciudadanos urbanos podran jugar un papel enorme
para presionar a los gobiernos y a las corporaciones en
favor de una agenda de justicia alimentaria. Aun hoy, un
grupo alternativo de habitantes urbanos
(mayoritariamente de clase media) votan con su poder
adquisitivo y se involucran en el consumo de alimentos
sustentables, ya sea por razones ticas o en busca de
productos de calidad y de una dieta saludable (Hinrichs,
2000; Feenstra, 2002; Parker, 2005; Donald, 2008).
A travs de una investigacin bibliogrfica y de algunas
entrevistas, este trabajo explorar la manera en que se
puede responder a los tres retos que enfrentan los
sistemas alimentarios urbanos al tiempo que se resalta
la justicia alimentaria en general, en una relacinmutuamente benfica con los pequeos productores
rurales. Este escrito har tal tarea mediante el anlisis
de iniciativas prcticas de los gobiernos y de la sociedad
civil (Oxfam en particular) en pases de LAC con ingresos
medios: principalmente Mxico5, Brasil6y Colombia7.
Estos ejemplos tienen el potencial de generar el cambio
a travs de una rplica a gran escala, de cambios en las
polticas, o de apelar a las creencias y prcticas de la
poblacin mayoritaria.
3 Mientras que los pequeos productores cultivan solamente el 24% del total de la tierra agrcola, sonresponsables del 84% de la produccin agrcola nacional, y del 70% de los alimentos consumidosen Brasil en 2006 (www.mda.gov.br/).
4 Ver Turrent Fernndez y Corts Flores, 2012. Con el acuerdo de libre comercio firmado en 1994,Mxico abri sus fronteras a las importaciones agrcolas, y ahora importa 40% de los alimentos queconsume. En Mxico, los pequeos productores representan 80% de las unidades de produccinagrcola, pero las ciudades se surten a travs de un sistema muy centralizado (ver de aqu enadelante el problema de la Central de Abasto).
5 Mxico tiene alrededor de 112 millones de habitantes, de los cuales, el 79% vive en zonas urbanas(INEGI, 2010).
6 Brasil tiene alrededor de 191 millones de habitantes, de los cuales el 84% vive en zonas urbanas(IBGE, 2011).
7 Colombia cuenta con 46 millones de habitantes, de los cuales el 75% vive en zonas urbanas (DANE,2010).
Mercado Campesino en la Plaza de Bolvar de Bogot
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9 En 2011 estaban funcionando 100 bancos de alimentos, 616cocinas comunitarias, y 147 "restaurantes populares" (un Realpor comida) (www.mds.gov.br).
cuando el gobierno de Lula lanz el
Programa Cero Hambre, con dos ejes
principales de intervencin:
(i) Extensin del acceso a losalimentos a la poblacin de bajos
ingresos (transferencia de
ingresos, alimentos escolares,
empresas productoras de
alimentos de servicio pblico,
etc.) en conjunto con la
recuperacin del salario mnimo y
del empleo.
(ii) Fortalecimiento de granjasfamiliares, las cuales
constituyen la mayora de
los establecimientos
agrcolas (granjas), y que
son las principales
responsables del
suministro de alimentos
al mercado domstico.
Las iniciativas derivadas deCero Hambreen el mbito
urbano comprenden:
Apoyo al ingreso (becas escolares;
programas para el ingreso mnimo,
tales como el programa de
transferencia de efectivo Bolsa
Familia, seguridad social,
generacin de empleo e ingreso),
Acceso a alimentos subsidiados
(expansin de los programas de
comidas escolares, restaurantes
populares, bancos de alimentos,
cocinas comunitarias, hortalizas
comunitarias9)
Salud y nutricin.
Ferias y sistemas agroecolgicos:
desde la produccin, procesamiento
y distribucin, hasta el consumo
(ferias y mercados sobre ruedas,
modernizacin de las instalaciones
de suministro de alimentos, nuevas
relaciones con minoristas y
supermercados, estimulacin del
consumo de productos agrcolas
locales, incentivos para la siembra
urbana, y compras directas del
gobierno al sector de pequeos
productores para los programas
alimentarios y servicios pblicos).
Resaltan dos programas como
ejemplos de las prcticas
intersectoriales promotoras del
acceso a los alimentos y queparalelamente fortalecen las granjas
familiares. Debe hacerse notar que
ambos programas proporcionan un
incentivo especial para la siembra
familiar agroecolgica.
El Programa de Adquisicin de
Alimentos(PAA) se estableci en
2003 y se lleva a cabo en sociedad
con la Compaa Nacional de Abasto
Alimenticio (CONAB), y con los
estados y municipios. Prev la
compra por parte del gobierno de
productos alimenticios directamente
a las asociaciones de productores
familiares (establecidos bajo la
reforma de tenencia de la tierra y de
comunidades y pueblos
tradicionales). Los alimentos
entonces abastecen la formacin dereservas estratgicas y a los
diversos programas de
seguridad alimentaria:
distribucin gratuita de
alimentos y los servicios de
comidas gratuitas y
nutricin, como son los
restaurantes populares,
bancos de alimentos y las
cocinas comunitarias, y losalimentos escolares y en
hospitales. Desde 2003
hasta diciembre 2008, el gobierno
federal ha distribuido ya
$ 2 mil millones de Reales (1.18 mil
millones Dlls.) para la ejecucin de
PAA, resultando en la adquisicin de
aproximadamente 2 millones de
toneladas de alimentos. En 2008, un
total de 118,900 agricultoresvendieron sus productos al PAA, que
fueron donados a 16.8 millones de
personas (Presidencia de la
Repblica, CONSEA, FAO, e IICA, 2009).
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consumidores urbanos
Mxico: una larga historia de movimientos sociales urbanos y de polticas pblicas por el Derecho a laAlimentacin
El Programa Nacional de Alimentos
Escolares(PNAE) es el programa
alimenticio brasileo con mayor
antigedad, surgido en los aos
cuarenta. La nueva ley (2009)
establece los alimentos escolares
como un derecho para los
estudiantes de educacin bsica en
las escuelas pblicas, adems de
crear una conexin institucional
entre los alimentos ofrecidos en las
escuelas pblicas y la agricultura
A pesar de que Mxico no tiene una
poltica de seguridad alimentaria tan
integral o exitosa, tiene una larga
historia de movimientos sociales y
de polticas pblicas por el Derecho
a la Alimentacin, como la de
muchos otros pases
latinoamericanos, que puede serreactivada e influenciada por el
modelo brasileo.
En Mxico, en los aos ochenta, la
CONASUPO (Compaa Nacional de
Subsistencia Popular, una empresa
pblica utilizada para apoyar la
produccin y consumo) extendi su
programa de suministro de alimentos
subsidiados para las comunidadesen situacin de pobreza de la Ciudad
de Mxico, donde millones de
migrantes se estaban asentando. En
los barrios pobres en expansin,
fuertes movimientos populares
haban estado reclamando el
familiar en la regin donde estn
ubicadas. Del total de los recursos
financieros transferidos por el
gobierno federal, como mnimo el
30% deber ser utilizado para la
adquisicin de alimentos
directamente de los agricultores
familiares. Vale la pena mencionar la
intensa participacin social en la
formulacin del proyecto, que dio
origen a la ley y a las negociaciones
sobre su contenido que precedieron
a su aprobacin en el congreso
nacional. Derivado de este programa,
45.6 millones de estudiantes de
primaria y secundaria recibieron
alimentos escolares en 2011. Ello
represent por lo menos $600
millones de Reales por ao ($353
millones de dlares) de compras
gubernamentales a las granjas
familiares (Presidencia de la
Repblica, CONSEA, FAO, e IICA, 2009).
derecho a la vivienda, a servicios
bsicos y alimentos. Estas
organizaciones participaron en la
implementacin del programa,
organizando y manejando las
tiendas y las tarjetas de alimentos
bsicos subsidiados: tortillas, arroz,
leche, azcar (Alatorre, 1994).
Cuando en 1990 los subsidios
alimenticios comenzaron a reducirse
debido a las polticas de Ajuste
Estructural, emergi un gran
movimiento en toda la ciudad, con
una fuerte movilizacin de mujeres,
unidos en el Frente por el Derecho a
la Alimentacin. Paralelamente a
nivel nacional, el Frente lanz una
propuesta de reforma constitucional
por el derecho a la alimentacin, y
continuaba trabajando a nivel
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La obesidad, un problema creciente con alarmantes consecuencias para la salud pblica.
Obesidad, salud pblica y la industria
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comunitario para establecer
conexiones directas con los
proveedores (propietarios de
pequeos molinos de maz y
pequeos productores rurales), en
un intento de sortear los monopolios
de distribucin de alimentos en la
Central de Abasto de la Ciudad de
Mxico. Sin embargo, los intentos
fallaron por la falta de logstica y de
infraestructura adecuada. En 1999,
el gobierno elimin los subsidios
para el consumo de alimentos
bsicos y liquid la CONASUPO. ElFrente por el Derecho a la
Alimentacinfracas en impedir la
medida; sin embargo, los grupos
comunitarios sobrevivieron y estn
participando, una vez ms, en la
implementacin de un nuevo
programa pblico nacido en 2009 en
la ciudad de Mxico (Alatorre, 1994).
La canasta de alimentos bsicospara una familia de cinco miembros
El hambre crnica afecta a 30 millones de mexicanos
(casi 27% de la poblacin total, con un alto ndice denios y adolescentes en este grupo), mientras 7 de cada
10 mexicanos adultos tienen sobrepeso (42% de los
hombres y 37% de las mujeres), o son obesos (24% de
los hombres y 35% de las mujeres). Mxico tiene el
segundo lugar en el mundo en obesidad, y el primero en
obesidad infantil (en 2006, 26% de todos los nios entre
los 5 y 11 aos). (Olaiz-Fernndez et al, 2006).
se ha incrementado en 507% de
1994 a 2010, de 56.6 pesos
mexicanos por da a 343.7 pesos
mexicanos. Mientras tanto, el salario
mnimo ha aumentado de 15.27
pesos en 1994 a 57.46 pesos en
2010, lo cual significa, en trminos
nominales, un incremento de
solamente el 276% (Rodrguez, 2011,
sobre UOM, 2010). Como
consecuencia, en el perodo
subsecuente a la primera crisis en el
precio del maz (el tortillazo) en 2007,
y en medio de una crisis financieraglobal, el gobierno de la ciudad de
Mxico comenz a apoyar los
Comedores populares y los
Comedores comunitarios. El
programa se enfoca en los barrios
pobres y tiene por objetivo fortalecer
la "corresponsabilidad de los
ciudadanos en el acceso al derecho
a los alimentos". Alrededor de 200
Comedores populares sirven unpromedio de 30,000 comidas por da,
comercializadas a una cuarta parte
del precio de comidas corridas
comerciales (10 pesos en lugar de
40), y proponen actividades
culturales a sus clientes.
De acuerdo con Pablo e Hilda
(entrevista de enero 2012) quienes
trabajan y administran uno de estos
Comedores populares y participaron
en la histrica lucha del Frente por el
Derecho a la Alimentacin, este
programa es todava muy
"asistencialista", pero tambin
ofrece una plataforma de
organizacin para el barrio. Ellos
todava desean establecer
conexiones directas con pequeos
productores rurales para saltarse los
monopolios de la distribucin de
alimentos de la Central de Abasto en
la Ciudad de Mxico, pero sienten
que sin el apoyo pblico es
imposible superar las barreras
logsticas.
En Brasil, el sobrepeso y la obesidad afecta a alrededor
de 50% de la poblacin, y registra tendencias a la alzatanto en nios como en adultos (Ministrio da Sade,
2012). El impacto en la salud pblica es enorme: estn
creciendo enormemente enfermedades incurables y
causa de incapacidad (diabetes, hipertensin,
enfermedades cardiovasculares, algunos tipos de
cncer, etc.), y constituyen ya una carga para el ingreso
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consumidores urbanos
familiar y para el presupuesto
de salud pblica. Estas
enfermedades representan el
11% del presupuesto nacional
para la salud en Mxico; en
2030, solamente en Mxico
afectar a 30 millones de
personas, con un costo superior
al actual presupuesto nacional
para salud (Rudio, 2012, sobre
Secretara de Salud, 2011). En
Brasil, para 2008 se estimaba
que los costos de salud
relacionados con enfermedadescrnicas ligadas a hbitos
alimenticios inadecuados
llegaba a $ 7500 millones de
Reales por ao (alrededor de
3700 millones de dlares: en 2008, 1 Real= 0.5 dlares
en el mercado cambiario), creando una carga para el
sistema de salud (Coutinho et al, 2008). La reforma
laboral, ahora en proceso en Mxico, expandir la
flexibilidad de contratacin, as que los enfermos no
podrn trabajar; tampoco tendrn seguridad social yaque, para evitar la quiebra del sistema de salud, el
Seguro Popular(seguro de salud para los desempleados
y trabajadores independientes en situacin de pobreza)
ya excluye de su cobertura la diabetes tipo 2.
Esto no es solamente un problema de inequidad: la
malnutricin y la obesidad estn directamente
relacionadas. Por una parte, los infantes desnutridos
que sobreviven y entran a la escuela, de pronto se
encuentran inmersos en un ambiente propicio para la
obesidad (estilos de vida sedentaria incluidos), sobre
todo cuando migran del campo a las ciudades. Por otra
parte, el consumo de comida y bebidas chatarra
contribuye a los altos ndices de anemia y deficiencias
de micronutrientes, mientras que el dinero que los
nios de comunidades en situacin de pobreza gastan
para comprar comida chatarra
podra ser utilizado para adquirir
alimentos ms nutritivos (Torres
Ornelas et al, 2011).
Reconociendo la relacin entre
bajo peso-obesidad, el gobierno
de Brasil ha implementado la
"agenda nica de nutricin
(agenda nica de nutrio), con
miras a promover hbitos
alimenticios saludables
perdurables de vida (Coutinho et
al, 2008).
El patrn de alimentacin de laspoblaciones (incremento en el
consumo de alimentos de
origen animal, grasas, azcares,
alimentos industrializados, y
relativamente pocos carbohidratos complejos y fibras)
es el resultado de una cadena de causas, cuyo origen
surge en las condiciones de produccin y distribucin
de alimentos, contina con los parmetros de
procesamiento de los alimentos impuestos por las
industrias, y se extiende tambin al mercado
publicitario que a su vez condiciona el consumo.
Mxico es el primer consumidor de refrescos del mundo,
por encima de los Estados Unidos. Entre 1984 y 1998,
los mexicanos redujeron su consumo de frutas y
vegetales en un 29%, e incrementaron su consumo de
refrescos endulzados en un 37% (Rudio, 2012a sobre
Secretara de Salud, 2011): este dramtico giro en los
hbitos alimenticios desemboca en un giro en los
proveedores de alimentos; de ser los agricultores ahora
son las industrias y corporaciones. En Brasil, el
consumo de protena animal se increment en un 50%
entre 1960 y 1990, y el consumo de grasas casi se
duplic en el mismo perodo. Otros productos como los
cereales, frutas y vegetales han perdido relevancia en
la dieta de la generalidad (Bermdez y Tucker, 2003).
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Circuitos cortos y Mercados Campesinos en Colombia
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11 Es interesante reflexionar sobre el costo y el valor atribuido a los alimentos orgnicos, comparadoscon la comida chatarra: la comida chatarra no es ms barata que la orgnica, pero es masivamente
aclamada y comprada por poblaciones de bajos ingresos, e inclusive por hogares mal nutridos. Si lamercadotecnia ha logrado una sobrevaloracin de la comida chatarra, la educacin sobre nutricinpodra revertir este fenmeno en favor de alimentos ms sanos, y social y ambientalmentesustentables.
En 2004, Oxfam y sus contrapartes
ILSA (Instituto Latinoamericano parauna Sociedad y un derecho
Alternativos) y CICC (Comit de
Interlocucin Campesino y
Comunitario) iniciaron el proceso de
Mercados Campesinos en Bogot.
Este proyecto surge como una
estrategia poltica de
reconocimiento de la economa
campesina, de valoracin de la
funcin de los pequeos
productores en el abastecimiento
alimentario y de la defensa del
derecho a la alimentacin, en el
marco de la declaracin del Mandato
Agrario de 2003. La expansin de los
Mercados Campesinos en 2007 fue
ACTORES CLAVES PARA LA JUSTICIA ALIMENTARIA
posible gracias al apoyo de la
alcalda de Bogot y de la UninEuropea. Hoy participan ms de
2,500 pequeos productores
campesinos (hombres y mujeres) de
60 localidades de la regin central de
Colombia, y la experiencia est
siendo replicada en Cali (Villate y
Mendoza, 2011).
El programa ha consolidado los
canales alternativos de
comercializacin que permiten a loscampesinos llevar sus productos
directamente a los consumidores
urbanos en Bogot, construyendo
una cadena de distribucin y
reduciendo los intermediarios. Estos
canales son:
ejemplo, Mxico est viviendo una crisis alimentaria en
algunas reas rurales debido a la peor sequa en 70
aos en el norte y centro del pas (Concha, 2012). Fue
invisible y silenciosa hasta que en los medios y las
redes sociales en internet se inform de suicidioscolectivos debido al hambre. Habitantes urbanos
(principalmente de clase media) expresaron su
indignacin ante la inaccin gubernamental, su
solidaridad a travs de donativos masivos de alimentos,
y se involucraron en el debate acerca de las polticas
nacionales sobre alimentos y agricultura. Bajo presin,
el gobierno tuvo que responder a las demandas de las
personas hambrientas y de los agricultores. En el
futuro, estas crisis sern ms frecuentes y los
ciudadanos que viven en zonas urbanas jugarn un
papel enorme para colocar la justicia alimentaria en las
agendas de gobiernos y corporaciones. Varias formas
de consumo de alimentos sustentables que benefician
consumidores y productores, al igual que al medio
ambiente, surgieron durante las dcadas pasadas
(Feenstra, 2002; Parker, 2005). Nos enfocaremos aqu
en las cadenas de valor cortas (o circuitos cortos) entre
consumidores y pequeos productores y en los
Sistemas Participativos de Garanta para los productos
orgnicos. Ambos sistemas abren canales de comercio
ventajosos para la agricultura familiar, al tiempo que
contribuyen a la reduccin en los precios a los
consumidores11.
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consumidores urbanos
Mercados mayoristas: ventas
directas en plazas de mercado,
tiendas de frutas y verduras y
supermercados;
Mercados minoristas con
contacto directo con los
consumidores finales: dos veces
por mes en 10 localidades de la
capital; la idea ha sido
autnomamente replicada por los
campesinos en mercados locales
de centros urbanos menores de la
regin central, con sus propios
recursos.
A travs de encuentros para facilitar
el dilogo con las autoridades
municipales y del fortalecimiento de
las capacidades de incidencia
poltica del CICC, el programa
tambin logr el cambio de polticas
en relacin al suministro de
alimentos. En Bogot, el Plan
Maestro para el Abastecimiento
Alimentario 2007-2015, reconoce el
papel estratgico de los pequeos
productores para la seguridad
alimentaria, y establece que el
sistema de suministro debe estar
basado en precios justos que
beneficien a ambas partes de la
cadena. El proyecto tambin logr
incluir en el Comit que monitorea
este plan a dos representantes de
los pequeos productores
campesinos.
Los Comits Municipales de
Campesinos lograron varios objetivos
de incidencia poltica dirigidos a las
entidades pblicas locales: apoyo
para el transporte de los productores
rurales, financiamiento para
proyectos especficos, y la adopcin
de lneas de presupuesto en algunas
municipalidades. El 92% de los
comits obtuvo algn tipo de apoyo
para sus actividades comerciales y
operativas, y el gobierno distrital de
Bogot apoy con un fondo de
apalancamiento de 1.4 millones de
dlares. Como el objetivo ha sido
extender los Mercados Campesinos a
otras municipalidades en la regin
central, la estrategia de incidencia
poltica con las autoridades locales
fue intensificada con el fin de
institucionalizar los mercados
campesinos a travs deAcuerdos
Municipales(Villate y Mendoza,
2011).
Los beneficios ms evidentes de los
Mercados Campesinos son
econmicos, ya que los campesinos
venden a un mejor precio
incrementando su ingreso entre un
40% y un 60% (Villate y Mendoza,
2011). Sin embargo, no ha sido elnico beneficio. Se ha fortalecido la
capacidad organizativa de los
campesinos, las mujeres
campesinas han incrementado su
participacin en el mercado, se han
construido puentes de comunicacin
con el gobierno local, y la incidencia
poltica ha tenido peso en las
polticas de suministro de alimentos
en las grandes ciudades. Con el
fortalecimiento y promocin de
canales directos de comercializacin
entre consumidores y pequeos
productores de alimentos, al igual
que con polticas pblicas urbanas
enfocadas en un sistema alimenticio
justo e incluyente, el proyecto ofrece
una medida real e inmediata sobre
las inequidades en las ciudades,
gracias al acceso de los
consumidores a alimentos frescos a
precios ms bajos.
Los Mercados Campesinos estn
ubicados en reas de grandes
contrastes: tres de las localidades a
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donde acuden pertenecen a las ms
pobres de la ciudad, mientras que
otras siete localidades son visitadas
por ms personas de la clase media.
Comparada con los minoristasalternativos (plazas de mercado,
tiendas de frutas y verduras, y
supermercados), la canasta bsica
cuesta hasta un tercio ms barata
en los Mercados Campesinos. Los
consumidores de los Mercados
Campesinos manifiestan en
especfico que los ahorros les
permiten comprar una cantidad
mayor de comida, lo cual muestra un
impacto directo en la seguridad
alimentaria de las familias. Los
consumidores pobres de las zonas
urbanas generalmente usan el
incremento disponible en sus
ingresos para aumentar su gasto en
salud, recreacin y cultura, y para el
pago de crditos, de acuerdo a la
elasticidad calculada.
Adems, existe la idea de incursionar
en un nuevo proyecto que articulara
pequeos productores rurales,
microempresarios de sectores
populares urbanos y consumidores
pobres, brindando a los dos primeros
acceso a mercados en condiciones
ms justas y a los terceros mejores
precios a partir de la eliminacin de
eslabones de intermediacin
A travs del desarrollo de las
capacidades de los agricultores,
dentro del proceso de los Mercados
Campesinos estn surgiendo
prcticas agroecolgicas y
produccin de alimentos orgnicos
como una iniciativa para la
"adaptacin al cambio climtico". La
iniciativa tambin apunta a la
organizacin de redes deproductores de alimentos orgnicos.
Aunque lo anterior tiene el potencial
de incrementar el ingreso de los
productores (a travs de precios ms
altos y menos gastos en insumos
tales como fertilizantes y
pesticidas), las organizaciones de
campesinos an dudan de la
produccin orgnica en cuanto al
alto costo de la certificacin
orgnica (casi anula las ganancias
debido al precio ms alto a ser
pagado por los consumidores), y a la
exclusin de los consumidores en
situacin de pobreza de estos
alimentos saludables y seguros, lo
cual debe ser un derecho para
todos y no un privilegio para la
clase media. Sin embargo, la
apuesta es que
la expansin de estas redes de
productores de alimentos orgnicos
y el incremento en la cantidad que
pueden ofertar reducir el precio de
los alimentos orgnicos;paralelamente, educar a los
consumidores sobre nutricin
ayudara a mejorar sus hbitos
alimenticios y a valorar los alimentos
orgnicos.
Experiencias como la de los
Mercados Campesinos en Colombia
ilustran el potencial de los circuitos
cortos entre pequeos productoresrurales y grandes mercados urbanos,
que no solamente mejoran el
ingreso de los productores, sino
que adems incrementan la
justicia alimentaria para los
consumidores urbanos.
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12 Entrevista con Sophie, la empleada encargada del mercado dela asociacin (llamada Luum), en enero de 2012, y visitas almercado. Ver sitio: www.mercadoel100.org
consumidores urbanos
La Red Mexicana de Tianguis y
Mercados Orgnicosintegra a
pequeas, medianas y mega
ciudades tales como Oaxaca,
Guadalajara y Mxico, D. F. Mientras
que la produccin orgnica de
rpido crecimiento en los ltimos 15
aos (de 25,000 a 400,000 hectreas
con 130,000 productores en la
actualidad) ha sido absorbida por la
demanda internacional (se exporta
entre un 80% y un 90% de la
produccin orgnica) (Rudio,
2012b), estas ferias y mercados
buscan acercar a productores y
consumidores. Aunque tambin
existen en poblaciones rurales, es
en las ciudades donde la gente estconcientizada del valor de estos
productos y tienen poder
adquisitivo.
En la ciudad de Mxico, los
campesinos agro-ecologistas
promovieron en los aos noventa
Circuitos cortos y mercados de productoresorgnicos campesinos en Mxico y Brasil
una de estas iniciativas (Foro
Tianguis Alternativo de la Ciudad de
Mxico Tejiendo Redes entre el
Campo y la Ciudad). Formaron una
red de productores orgnicos, pero
les faltaba un espacio fijo para la
comercializacin y tenan queesperar a que hubiera ferias
peridicas, cada tres meses
aproximadamente. En 2009 abrieron
ese espacio, aunque lo hicieron en
una casa privada. Pronto se convirti
en una tienda alternativa donde los
agricultores y otros productores
dejaban sus productos, en lugar de
venderlos ellos mismos. En 2011
lanzaron un mercado abierto en unode los distritos ms elegantes de la
clase media en la ciudad de Mxico,
que dos veces al mes ofrece a
200 consumidores, en promedio, un
amplio rango de productos
(vegetales, frutas, lcteos, carnes,
granos, alimentos procesados,
cosmticos artesanales, etc.), as
como talleres (de nutricin, rupturas
en el sistema alimenticio,
catstrofes medioambientales,
reciclaje, alimentos transgnicos,
etc.).
Una iniciativa muy similar (Mercado
el 10012) enfatiza la importancia del
consumo local (productores
provenientes de 100 millas la
redonda de la ciudad de Mxico,
como mximo) y del comercio directo
de pequeos productores orgnicos.
La certificacin orgnica no es un
requisito para participar. Sus
promotores subrayan los beneficios
sociales y ambientales para el
colectivo (por ejemplo, el apoyo a los
pequeos productores y la
preservacin de las tierras agrcolas
ante la urbanizacin) por encima de
los beneficios en salud para el
consumidor individual. El mercado
se instala en el mismo distrito, con
la misma oferta (productos y
talleres) y la misma periodicidad;
atiende ms o menos a la misma
cantidad de consumidores (en subanco de datos estn registrados un
total de 3,000 consumidores), y
beneficia a 26 productores. Los
fundadores son empresarios
Mercado de productos orgnicos de la Rede Ecolgica en Brasil
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13 Entrevista con Mnica Chiffoleau, miembro de Red Ecolgica[Rede Ecolgica]. en febrero de 2012, www.redeecologicario.org
ACTORES CLAVES PARA LA JUSTICIA ALIMENTARIA
sociales de clase media y un
propietario de un restaurante en
busca de productos frescos y de
buen sabor para sus clientes.
Tuvieron que luchar un ao paraconseguir la autorizacin del
gobierno para poder usar tan solo
dos veces al mes un parque pblico;
su meta para este tercer ao de
existencia es instalar el mercado
cada semana. Los precios son ms
bajos en promedio
que aquellos de las
tiendas orgnicas
(debido al circuito
corto entre
productores y
consumidores), y
ms altos que en los
mercados
tradicionales. Los
productores pagan
su propio
transporte, y una
cuota fija a los
organizadores del
mercado para cubrir los costos
logsticos pero el salario de los
empleados de la asociacin es
subsidiado y financiado por otro
mecanismo.
Los agricultores y/o mercados
orgnicos y otros canales de
consumo sustentables han existido
desde hace muchos aos en Brasil.
En Porto Alegre, un mercado as
tiene ya 40 aos y abarca 20
cuadras. En Rio de Janeiro, la Red
Ecolgica(Rede Ecolgica13) surgi
de manera autnoma por parte de la
sociedad civil. Consiste en grupos
de consumidores que hacencompras en una interaccin directa
y colectiva con los productores, lo
que les posibilita el suministro de
productos agroecolgicos /
orgnicos y accesibles. Surgido en
2001, gracias a los residentes de un
mismo barrio, la Rede Ecolgica
actualmente cuenta con nueve
ncleos: seis distritos de la ciudad
de Rio de Janeiro, dos en la ciudad
de Niteri, y uno en Seropdica. Hoy
da la red cuenta con
aproximadamente 200 productores
en pequeos locales. Mientras quela mayora de los participantes
continan siendo personas con
ingresos medios o altos, la red est
desarrollando mecanismos para la
expansin de sus operaciones a
barrios de bajos ingresos. Adems,
promueven con fuerza la creacin de
nuevos grupos organizados
autnomos.
La red es manejada por sus
miembros, quienes sostienen
asambleas generales y reuniones
vecinales, y quienes tambin tienen
la obligacin de participar en la
logstica, aportando su tiempo para
ayudar a los productores a
descargar sus
camiones y a
elaborar las canastas
de productos. Eltrabajo voluntario de
los consumidores es
otra de las formas en
que las iniciativas de
circuitos cortos
mantienen precios
razonables, al tiempo
que resuelven los
problemas de los
costos de logsticaasociados al saltar a
los intermediarios, como una forma
alternativa para los subsidios
pblicos o de ONG's
De acuerdo con Rede Ecolgica, los
consumidores se unen a la red
primordialmente motivados por la
bsqueda de alimentos saludables y
seguros. Despus de unirse, los
participantes se hacen ms
conscientes de las implicaciones de
la produccin y consumo
sustentables, y desarrollan una
perspectiva ms informada y
comprometida sobre el
Mercado de productos orgnicos de la Rede Ecolgica en Brasil
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Sistema Participativo de Garanta en Brasil y Mxico
consumidores urbanos
En Latinoamrica, Brasil es un pionero en los Sistemas
Participativos de Garanta, y uno de los cinco pases
que han obtenido reconocimiento legal del Estado (en
conjunto con Mxico, Bolivia, Costa Rica y Uruguay)
(Rudio, 2012c). Desde 2004, estos Sistemas
Participativos de Garanta son reconocidos por los
Federacin Internacional de Movimientos de
Agricultura Orgnica [International Federation of
Organic Agriculture Movements(IFOAM)], y por el
Movimiento Agroecolgico Latinoamericano y del
Caribe (MAELA), como una solucin para los pequeos
productores para lograr un costo bajo (de hecho,
gratuito para los productores) y obtener una
certificacin no burocrtica. Las apelacionesorgnicas convencionales son otorgadas por
organizaciones comerciales y estn lejos del alcance
de los pequeos productores: son muy caras (desde
1,000 hasta 2,000 dlares anuales por hectrea en
Mxico) y se requiere cumplir con estndares de
inspeccin y recopilar mucha documentacin, cuando
muchos de los pequeos productores son analfabetas,
en situacin de alta condicin de pobreza como para
poder pagar estos costos, y cuya meta es ms que
exportar tan solo vender sus productos en los
mercados locales. Para el mercado internacional, el
costo de certificacin est justificado por el alto valor
agregado; para los mercados local y nacional, buscar
alternativas a las apelaciones orgnicas
convencionales es una forma de ofrecer productos
orgnicos a la poblacin, incluidos los consumidores
de bajos ingresos, al obviar el costo de la apelacin y
al incrementar la cantidad de productores y productos.
Cmo funcionan los Sistemas Participativos de
Garanta? Al interior de un grupo existente (por ejemplo,
un mercado, aunque tambin puede ser una red
nacional o local de productores), consumidores,
productores y todo grupo interesado establecen sus
propias normas en relacin a la produccin
funcionamiento del sistema
alimentario.
De hecho, Rede Ecolgicase
considera a s misma como un
movimiento social cuya misin es
contribuir a cambiar los paradigmas
de la sociedad, moverse del
consumismo hacia la agro-ecologa.
Por lo tanto, adicionalmente a las
compras colectivas y debido a la
burocracia que representa tener la
anuencia oficial, Rede Ecolgica
apoya a los productores locales para
ingresar a esquemas
gubernamentales y convertirse en
proveedores de los programas
pblicos de alimentacin y bienes
(tales como el Programa deAdquisicin de Alimentos, o el
Programa de alimentos escolares).
Tambin han desarrollado una serie
de actividades externas
relacionadas con: reutilizar el
embalaje, agroturismo, campaas
(por ejemplo, en contra de los
agroqumicos), seguridad
alimentaria, agricultura urbana,
agro-ecologa, solidaridad
econmica, etc.
Finalmente, la red est
implementando un Sistema
Participativo de Garanta para la
produccin orgnica, un sistema
que ya est ampliamente
diseminado en Brasil. En Mxico, las
dos iniciativas descritas arriba estn
tomando como modelo la Red de
Alternativas Agropecuarias de
Jalisco, donde 300 productores ya
estn implementando el sistema.
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@OxfamenColombia Oxfam en Colombia
OXFAM:Es una confederacin de cooperacin
internacional con presencia en 92 pases, dedicada a
combatir la injusticia y las situaciones de pobreza.
Desde hace ms de 30 aos apoya en Colombiainiciativas para mejorar las condiciones de vida de las
comunidades rurales. El Programa Justicia Econmica
concentra su intervencin en apoyar la legitimidad y
credibilidad de modelos alternativos de desarrollo rural
que contribuyen a superar la pobreza, la desigualdad y
la inequidad de gnero en el pas.
Oxfam en Colombia:[email protected] -
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Encuentre videos de otras experiencias de comercializacin en:http://www.youtube.com/watch?v=5E9-prhoaYYhttp://www.youtube.com/watch?v=OmNHGhTeVOM
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