AQUA PÚBLICA Y POLÍTICA MUNICIPAL
ROMANA:
El abastecimiento de agua a las ciudades fue siempre una de las
actividades edilicias más cuidadas por los romanos. Son
numerosas las construcciones de diverso tipo dedicadas a ello
que se nos han conservado Es bastante significativa la
minuciosidad con la que se trata el tema de la administración de
los recursos acuíferos cuyos capítulos reservados a este tema
nos dan la medida de lo que debió ser un aspecto importante de
la política municipal de muchas comunidades , Aunque en la
época romana podían funcionar sin acueductos y obras
hidráulicas similares, no es menos cierto que el desarrollo
urbanístico de muchas poblaciones, con la construcción de
establecimientos termales, ninfeos monumentales, fuentes, etc.,
hizo insuficientes en muchos casos los sistemas convencionales
de aprovisionamiento, exigiendo la búsqueda de nuevas fuentes
acuíferas para aumentar el caudal de uso urbano, con la
consiguiente planificación de acueductos, depósitos terminales,
Castellá aquarum y las correspondientes redes de distribución.
El estatuto municipal, frecuentemente acompañada de
una notable renovación urbanística pudo ser en muchos casos el
momento apropiado para plantear seriamente esta cuestión ya
cometer nuevas obras hidráulicas sobre la base de la iniciativa
pública o privada , esta última, a tenor de los testimonios
epigráficos, frecuente y notable El agua de las conducciones
públicas abastecía, primordialmente, a los edificios públicos,
termas, fuentes monumentales (nymphaea) y toda una red de
fuentes distribuidas por las ciudades, que era de donde la
tomaba para los usos domésticos la mayoría de la población.
Elius aqueo particular, que esencialmente recaía sobre las aguas
sobrantes, no era acordado más que a un pequeño número de
privilegiados en Roma