Volador III

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22 episodios narrativos y poeticos

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Doppelganger quieren agradecer:

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Volador es un libro de publicación periódica

conteniendo 22 textos cada uno. Este ejemplar

corresponde al volumen # 3, publicado y lanzado al

espacio el dia 22/02/2013 a las 22:22:22 hs

locación : 65° 56′ 41″ N, 21° 33′ 25″ W

Volador es propiedad intelectual de Doppelganger

Registro en Safecreatives

Para descargas gratuitas de este ejemplar:

https://www.facebook.com/Volador3

-Prohibida su venta-

*ejemplar de distribución gratuita*

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░░░░░░░░░░░░░░░░░░░░ me transformo cuando camino por la vereda en una masa muscular

amarilla y ruidosa

llena de tajos y tripas para regalar

soy muy singular

no quiero lastimar más a las personas que se acercan

no soy capaz de emitir ningún sonido entendible

siempre escuchan mis silbidos raspantes y guturales

como pariendo vocales sin sentido en pleno silencio

tengo que avisarles de algún modo que tengo espinas para regalar

cuando me cierro entonces todo se revuelve

y me convierto en un espejo maligno y sanguíneo

de lo que reflejan las corneas antrómolas

termino en repollo

en el basurero cantando como un cascabelero

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Cuando me rompió todos los vidrios

Ok. Mejor, porque dejo mas abiertas las ventanas

No hubo cicatriz

Porque tampoco había carne que lastimar

No era yo aquellos vidrios

Entra el viento crudo de un ciprés

por la in-ventana

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un hule blanco

como una cigüeña

como el corazon acostado

eso tenias vos

y un capricho cachorro

por ver la soledad

y un tiburon quizas, también

hechizos chirriantes que se te caen

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algo se te perdió

algo que vos viste y nadie vio

sin razón

un corazon blanco tirado

frente al porton

algo que jamas se te olvido

un corazon blanco

que caía del balcon

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El una vez me explico de los números indivisibles. Que son números que de cada partición queda un resto que no se puede reducir, ni dividir, entonces hay que ponerlo en otro lado. Es un resto que se arrastra eternamente. En cambio uno agarra un 10 y son 5 para cada lado. Chau. La simpleza total, el aburrimiento.

Y el dice “te lo dije como 10 veces”. 10 o 5, o 20. Siempre números asi. Habiendo

números tan lindos como el 14, o el 21 o el 2 sin mencionar el 23. Por qué no dice:

“hay que mirar 14 veces, o mejor, 14 mil veces, la hoja caída de aquel árbol para

ver si aún respira”? (A propósito: ¿en que momento dejan de respirar las hojas?

Digo, una vez que se desprenden de la rama)

Además, a mi me encanta agregarle la terminación “mil” a los números. “te lo dije

23 mil veces”. Es una linda exageración. No me gustan los millones. Te lo dije 23

millones de veces, suena a una cosa imposible. Y cien es demasiado poco. Mil es

perfecto. (es manejable). Y no me gusta transformarlos en palabras. Cuatro es una

palabra. No tiene nada que ver con 4. Para mi 4 es 4. Pero mil no. Mil es mil, una

palabra. 000 no forman “mil” en mi cabeza ni visualizándolo 17 mil veces (ahí va

otro número hermoso)

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soy la canción que solían cantar

aun siendo yo un silbido

el hace una melodía de mi

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Las tortugas es como que están casi muertas. Por eso viven tanto. Si mi tortuga se

muriera, es como si ya estuviera muerta de todos modos, así que hasta podría

conservarla, totalmente muerta en el estante de la biblioteca. Nadie se daría

cuenta. Ni yo misma, con el tiempo.

Todos los días me parece que está muerta. Las cosas vivas emiten como unas

vibraciones sutiles, que aunque invisibles, son perfectamente perceptibles. Uno

de solo ver algo sabe si está vivo o está muerto. Yo una vez vi una foca en la playa

y de muy, muy lejos ya me había dado cuenta de que estaba muerta. Hay como

una rigidez que es lo contrario de la vida, que es puro movimiento. Si hasta los

arboles se mueven a su manera lentísima, porque ellos viven en un tiempo que no

es el nuestro, y nuestros días son como sus minutos, así que para ver moverse un

árbol hay que estar años mirándolo fijo, cosa que nadie haría. Pero con las

tortugas es distinto. Son como piedras vivas, o medio muertas. Por eso todas las

mañanas, una de las primeras cosas que hago es ir a cerciorarme que sigue del

lado de los vivos, aunque sea en algún porcentaje. Hago así: le toco la cabeza, y

ella la estira y entonces yo la acaricio debajo de su cuello, y ella lo estira lo más

posible, lo estira tanto que hasta parece un animalito de verdad.

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Cegada por el nombre, asi como un tronco sublimado, un agua feroz y Risa mi

hermana mayor con total coraje me toma del pie. siempre se enfada cuando me

repito, cuando ya vio lo que pense no queda nada por hacer entonces llega desde

aca cerca una rafaga veloz, como un sapo, lo vomita, llevandosela hasta el Averno

Glorioso plantado por un hombre semidesnudamente lloron y meon. que

berrinche absurdo se formo en el tubo , en nuestro Tubo Hambriento de agua y

hambriento de carne. a mirar! no se puede mas aca, me caigo en el suelo y no

pasa nada y pasan los dias y no pasa nada y pasa la iguana y no pasa nada y pasa

la muerte y no pasa nada y para la lombriz y no pasa nada y pasa la esperanza y no

pasa nada y pasa la citar y no pasa nada y no sigue pasando nunca nada mas

porque ya todo paso entre mi mí y yo

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Fotosíntesis

Episodio narrativo # 3

Te parece?

Tenés razón. Llegamos al final. Un rio donde, qué? Se abre la tierra femenina para

dar lugar al cause de su agua verde. La savia macerada. Un asco recorre nuestras

venas. Empezamos a notar que nuestra sangre ya no quema enrojecida, sino que

se va volviendo verde, y el verde es un color del todo lento. Se va volviendo savia

nuestra sangre y nos refresca reverdeciéndonos.

Te doy mi mano. Abrazamos al último árbol, y nuestro corazón es uno con el

bosque muerto. Nos morimos un poco. Morirse debe ser así: sentirse como

integrado con el resto. Morirse será una disgregación-reintegración. Atomizados,

vaporizados como un rocío nuevo sobre la sombra anular de su corteza, la del

mundo.

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la pelusa de la mariposa volaba sobre el balcón

Lentamente descendió , suavemente, como lo hacia yo

al llegar a la orilla del cordón

la miro sobre la vereda y sonrió

llevo tanto tiempo bajo el agua

manteniendo el reflejo-

dijo una hoja y pronto el zurco se la trago.

esta fue su leccion mas importante

-el amor de un maestro es el tesoro de mas valor-

dijo la pelusa, fue por eso que lloro

y se zambullo como lo hacian los niños de la pradera

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Cuando se hace de noche, flotando sobre el agua, viene con un bote invisible.

Canta una canción indescifrable. Un sonido que sale de su pecho y rebota en el centro de

mi espalda.

No me puedo negar. Sonámbulo floto sobre el pasto hacia la niebla donde esta ella

simulando el espectro de unas plantas.

Estoy por tocar el agua con la punta de mis zapatillas, cuando ella me detiene con un

pensamiento y me tiende la mano. Sopla mis pies, y aunque la distancia es larga, de un

solo movimiento natural, como un pequeño salto, ya estoy en el interior del bote, que es

de lo más confortable.

Había pequeños animales dentro. Me miraban con desconfianza. Ella les dijo algo en otro

idioma y se tiraron al agua. Nadaban de contentos.

Quedamos ella y yo.

Yo pensé que iba a poder decirle muchas cosas. Pero enmudezco cuando la tengo cerca.

Ella igual rema mirando al infinito, ajena a mis secretos pensamientos. Parece no

importarle lo que pueda decirle. Le dicen muchas cosas todo el tiempo.

Solo le importa llevarme de paseo.

A dónde vamos?

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te amo

es un poema enterrado

es el fuego por el poro de la montaña

del mañana que es otro hoy

un te amo que reina en el piso

donde pisan las miradas

una luz en una gota de agua

el destino se tienta tan fácil

no dejes a sus ramas fornicarte

cuando la gloria es grande

la fortuna se labra con mas vigor

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Yo no se bien que es la tristeza.

Generalmente deambulo en un estado de semi-felicidad tranquila.

Una sensación de pre-tristeza, como si caminara por el filo y cualquier traspié

pudiera hacerme caer en ella definitivamente.

Pero eso nunca ocurre.

En cambio si me ocurre la furia, la desesperación, un estado de profunda

oscuridad relampagueante

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entorno retorno

y siempre el camino doblándose oniricamente alrededor del árbol. trazando una

perfecta circunferencia el camino traqueteaba y tomaba impulso hasta liberarse

en una recta custodiada por la infinita sombra de los pinos, y el sol, detrás de las

nubes rosadas que me hacian ave los ojos, sin pensar en las ruedas y las millas que

saltan de pueblo en pueblo. y la madera de la estación y siempre el camino

doblándose

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solo mi deseo hoy

es que si le estoy fallando a alguien al hacer esto, si estoy quebrando el delgado

cabello del cual pende la espada, si estoy peligrando una existencia, una felicidad,

una confianza, una paz…

*si es asi*

no quiero por un capricho romper nada, me retiro, tanto es lo que esta en juego

pero siento dentro de mí, tan fuertemente, que esto no es un capricho

que es algo, que por mas que se quiera, no se puede matar

pues fue plantado en el corazon del mundo

en el nucleo azul de aquella estrella

la que guia

y si hoy, venciendo todo, se puede, en medio las ruinas, dar algo con las manos

peladas de tanto rasgar las puertas, de tanto suplicarle a la tierra que por fin algo

no se muera, que algo crezca, creo que es lo correcto

*si, asi es*

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era a la mañana o en el anochecer

nuestros labios de cartón

se encendían como piñas

e iluminaban la habitación de nuestros padres

recordábamos las balas perdidas

bajo el agua, que enfermas eramos

pero estaba bien porque era primavera

y todo el sol y todas las aves como la sal

nos secaban lo insoportable y las migrañas

la ventana cerrada estaba silenciosa

nos mirábamos sobre la silla

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nos mirábamos hasta con los ojos cerrados

pero tenias demasiado miedo yo y

vos estábamos muy trémulas o idas

luego el apagón y el resto fue

verde agua

y patines

la vida es hermosa

con o sin ella

algun día tambien seré bonita

y reiré como su collar de colores

a Vellerie (una chica rubia)

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Entendí que sentía desde el principio con el una sintonía física.

Era como si estuviésemos unidos por el mismo hilo invisible, que nos atravesaba en idénticos puntos

correspondientes.

Entonces cuando el hacia ciertos movimientos me sentía como tironeada.

Sabia por su forma de caminar, de acomodarse el pelo, de saltar por las piedras, que entre nosotros no podría haber

ninguna torpeza, ningún movimiento fuera de lugar, ningún gesto incomprensible.

Cuando esta todo ahí, desde el principio, solo hace falta un movimiento para desencadenar la reacción que puede ser

lenta, pero nunca desconocida.

Pero no se puede prescindir del primer movimiento.

Y a mí me tocaría quebrar esa quietud.

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BARRO

CAMION

UN ABRAZO DEHIERRO

UN BESO LAGUNA

CONTE TODAS LAS LUNAS DE REGRESO A CASA

LUNA VERDE UNA LUNA

UNA LUNA CLEMENTE UNA LUNA REFLEJA

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Y LA LUNA MAS BELLA ESTABA EN LA ESTACION

DE SANDRES

CON UN MONTGOMERY VIOLETA NOS HICIMOS DE PAPEL

EN EL VIENTO

Y LAS TROMPETAS COMO CUERDAS DE UNA SILABA

UNA LUNA LILA SOBRE OTRA NEGRA

LAMIENDO EL PAVIMENTO EL CAMION NOS LLEVABA

COMO QUIEN LLEVA UNA BUFANDA SOBRE LA REMERA

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Y OTRA VEZ LA LAGUNA AZUL EN LOS PIES QUE ERAN

O QUE ERAN NUESTROS

Y LA LUNA QUE NO ALCANZABA A VERNOS

QUE NO ESPERABA VERNOS MAS

ZAPATILLAS EN EL BARRO

A KILOMETROS

DE LA ESTACION DE

SANDRES

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Con mi Papa hacemos “tai chi” y él me habla de la energía, y de cómo fluye y

etcétera, pero yo jamás sentí nada de lo que el dice mientras imitamos los

movimientos de esos animales que no conozco y que jamás veré, porque creo que

eso que él llama energía no puede darse por movimientos prefabricados,

pensados por otros para detonar zonas tan nuestras. Yo siento algo parecido a la

energía, cuando salgo al exterior y sigo mis propios métodos, desarrollados a

través de numerosas pruebas donde me guían únicamente mis sensaciones. Por

ejemplo: desde hace un tiempo me gusta hacer montoncitos de arena que llegan

un poco mas alto que mis tobillos, hago uno al lado del otro, cerca de la orilla,

(una vez hice ciento cincuenta y tres) y cuando me canso, doy la vuelta,

pateándolos con violencia, viendo como se desintegran ante mis embates, y me

siento llena de una fuerza autentica y profundamente mía, y en el momento en

que la arena se dispersa, siento que transito el revés de una trama creadora que

necesita de esa destrucción para volver a formularse. Me siento limpia, vaciada,

lista para comenzar de nuevo. Ese es mi tai chi verdadero, aunque practico el otro

con mi Papa, porque me gusta estar con él y con el tiempo fuimos logrando una

sincronicidad que es en si misma una fuente de energía que no es para despreciar.

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no puedo impedir

que los campanarios me agobien

no quiero que sufran al verme

arrancarme su vertigo

se salen todos los sonidos

menos los necesarios

menos el sol brillante

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siempre siempre clavados en islas

siempre entre mares siempre gritan

y la verdad es su rio

que corre demasiado rapido

bajo esas amargas tierras

la corte se rie

en el manto las comadrejas

ejercen urañas las tintas

el diluvio en el oriente embaja

callandose del barranco gris

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Tengo una cajita con papeles cuadrados, todos del mismo tamaño, tan chiquitos

que solo puede escribirse una palabra. La llamo paraíso. Todas las noches,

después del pastoreo, escribo una palabra. Solo una. No es solo por la limitación

del papel que escribo algo tan breve. Es que en realidad me di cuenta de que no

hace falta más que una palabra. Las demás ya sobran y quitan fuerza. Esta

limitación me obliga a ser concisa, a concentrarme, a no distraerme con periferias.

Es solo lo nodal. Las ideas son sustancias, y mientras más diluidas, más débiles,

más difusas. Una sola palabra es una idea concentrada, una partícula indivisible,

un átomo, algo deshidratado que con solo agregar los líquidos correspondientes

podrá formar más adelante cosas ... A esta palabra la llamo la palabra hermética.

Es algo así como la esencia pura de ese día. Tengo cientos de papelitos con

palabras. Algunas son raras y no recuerdo que es lo que significan o por que las

escribí.. Me desconciertan. Otras son comunes, pero para mí tienen un significado

complejo. Otras, como “peces”, “iluminar” o “celeste” las escribí seguramente

algún día en que me hallaba en esos estados de belleza que se me dan sin previo

aviso. Yo los llamo días mansos. Y son días en los que me parece que esta todo

terriblemente en su lugar, y tan liviano que me siento flotar en una felicidad

amniótica. El día que lo vi, escribí esto: Imposible.

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LOS PECES ESTAN GORDOS COMO RIÑONERAS y lo peor esta por reventar la sangre sobre

el pantalon de mi violador ES

UN SUEÑO... no no no no no no hay

si si si esteban si ahi ahi ahi

JAMAS LE DESEARIA EL MAL A NADIE pero me arrancaria

las agujas para meterlas en su garganta PERO

EL ERA COMO UN PULMON AUXILIAR o

un duende verga rezaba:

LA VAGINA DE MI MAMA ME PREGUNTA:

QUE VAS A HACER CON

TU VIDA ????????????

me brillaba el labio & sonrrey

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Debe haber pocas cosas más hermosas que las canciones. Y ellos traen bastantes,

que acompañan con un instrumento que si fuera apenas un poco más sencillo,

sería estúpido, pero así es perfecto. Me quisieron enseñar muchas veces a tocar la

guitarra (así llaman a este instrumento) pero a mí me inspira mucho respeto y no

me considero digna de él. Hay que ser totalmente puro para hacer música, y yo no

soy pura de ninguna manera. Ellos tampoco lo son, pero no les importa, y

arremeten contra las cuerdas con un entusiasmo que a mí me hace pensar que

hay algo que no están comprendiendo. Cantan canciones casi eufóricas, ¿de que

están tan contentos? Pero debo admitir que al escucharlas y a veces

acompañarlos cantando, se me pega algo de su alegría.

Quizá no es que estén contentos, sino que cantan para alegrarse. Pero yo prefiero

siempre ser sincera con mis estados de ánimo. De todas formas a veces no me

puedo resistir y apoyo la cabeza en ese pozo negro que se abre bajo las cuerdas, y

paso un dedo apenas por alguna de ellas (me gustan las más graves) y me quedo

escuchando la evolución de ese sonido que se extingue irremediablemente,

dejando como una soledad difusa en su lugar.