.Un mundo nuevo.

Capítulo 1: .El comienzo.

La verdad es que no supieron nunca porque estaban allí, ni como habían llegado a esas extrañas tierras… pero si supieron lo que era el amor, la simpatía, la verdadera amistad y lo que era compartir. Todo empezó con unos machangos pequeños. En la espalda cado uno llevaba un símbolo. Cada uno de esos símbolos representaba una cualidad que solo ellos podían hacer.

En total de todos ellos contaban con unos 12 machangos pequeños. No podían reproducirse pero si podían morir. Cada uno sabía lo que les esperaba si cruzaban el más allá…

El planeta no se podía ver .Era nómada. Era una esfera de cristal y no se podía hacer nada salvo respirar, comer y hablar.

Esa historia…en verdad no era un solo planeta eran dos planetas uno encima de otro. Siempre estaban juntos. El planeta de abajo se había desarrollado rico y próspero mientras que el de arriba se había desarrollado pobre. El planeta de arriba robaba oro del planeta de abajo, piedras preciosas, objetos…

El planeta inferior tenía un sitio prohibido: un bosque lleno de criaturas mitológicas y extrañas…

Uno de los seres de ese bosque eran los 12 machangos: los Moribius .Se alimentaban de una planta muy peculiar una: planti , una planta que podía hacer que los seres vivos que la comiesen pudieran volar. Los Moribius se comían esa planta por esas cualidades, porque tenía muchos nutrientes

y porque además de esas dos cualidades en esa planta se podían encontrar gusanos de seda, para hacer sus ropas.

El último Moribius que nació empezó a comer mermelada, y mermelada y más mermelada hasta que un día que explotó. Hasta entonces solo quedaba 11 Moribius. Los hermanos Moris eran mudos pero eran los más sabios del todo el clan. Todos estaban en una cueva pequeña. El líder era el número:3.

Por alguna razón el número 3 había nacido el primero.

Capítulo 2: .Una situación de desesperación.

En esta situación los Moridius estaban escasos de comida. Las plantas no germinaban y no llovía. Los Moribius tuvieron que emigrar al mundo humano. Pero habían pasado una décadas la era de la robótica había evolucionado. Todo estaba desierto y no había ningún humano.