Un Atisbo de Algo

8/9/2019 Un Atisbo de Algo

1/13

Encubrimientos (Un atisbo de algo)

Por Juan Antonio Molina

Sebastin Friedman. Souvenir. Detalle de instalacin, 2008


2/13

1-Una historia ilustrada de la mentira

El trmino encubrimientos, usado como ttulo de esta exposicin, tiene tantas

implicaciones polticas como poticas. De hecho, puede suponerse que el uso de

encubrimientos encubre una implicacin poltica tras una potica. O viceversa.

Dos obras de esta exposicin pudieran ilustrar perfectamente ese extremo en el

cual el encubrimiento se exhibe como gesto poltico (en un caso) y el gesto poltico

se descubre como simulacro (en el otro). Hablo de la pieza titulada Souvenir, de

Sebastin Friedman, y del polptico de Cia de Foto, titulado Polticos.

La primera es una obra que invita a los espectadores a formar parte del acto

fotogrfico por medio de una escenificada usurpacin de identidades. Sebastin

Friedman ha recortado y montado unas siluetas en tamao natural, dejando hueca

la parte correspondiente a la cara, de manera que las personas pueden optar por

tomarse una foto posando con su rostro a travs de una silueta ajena. Esto es lo

que se hace a veces en lugares tursticos con siluetas de personas famosas,

celebridades del mundo del espectculo o la poltica. Es un acto en el que la gente

juega a exhibirse como quien no es, ironizando sobre su propia fantasa y

vulgarizando elglamourde los famosos con su propio anonimato.

Friedman mantiene la irona, pero invirtiendo su sentido, pues las siluetas

utilizadas son de gente de las clases populares: pudieran ser obreros, sirvientas,

desempleados o personas que vive en las calles. No es el tipo de gente que uno quisiera

ser (literalmente, no queremos vernos en sus zapatos) y muchas veces es el tipo de gente

que permanece invisible. La relacin entre aspiracin, deseo y posesin, implcita en

la ficcin de las identidades, se vuelve aqu tambin una relacin poltica, casi

pudiramos decir que es una relacin polticamente incorrecta. Al invitar al


3/13

pblico de la exposicin a fotografiarse con estas figuras, Friedman hace que esta

relacin poltica pase a conformar el lado pragmtico de la obra, afectando la lgica

de su consumo y sustituyndola por una lgica de la participacin. Lgica tambin

invertida, pues si participar es tanto formar parte como tomar partido, en esta

obra ambas opciones existen solamente como sendas ficciones.

La serie que presenta el colectivo Cia de Foto consiste en tres trpticos que

muestran a diferentes candidatos a la alcalda de Sao Paulo en distintos momentos

de sus respectivas campaas. Cada trptico aqu es en realidad una sola foto.

Quiero decir, cada trptico es la representacin de un mismo sujeto, en una misma

circunstancia de tiempo y espacio, solamente que tomado desde tres ngulos

diferentes. Es un caso en que adquiere verdadera relevancia y provecho real la

pluralidad con que grupos como Cia de Foto reconstruyen la figura del autor. A un

autor multiplicado corresponde una foto multiplicada. Pero en este caso esa

multiplicidad implica otras cosas: la multiplicidad de los puntos de vista y, en

consecuencia la multiplicidad de las versiones de la realidad.

Tratndose de la actividad poltica, las versiones de la realidad se vuelven

cruciales. Pero este trabajo de Cia de Foto no pretende cuestionar el modo en que

el discurso poltico reconstruye la realidad, sino el modo en que el discurso

fotogrfico sostiene y legitima a las figuras polticas. En cada uno de los trpticos

aparecen los fotgrafos de prensa trabajando alrededor del personaje, adems hay

una vista del personaje, tal como lo ven los fotgrafos (tal como sern mostrados al

pblico de los medios, definitivamente) y por ltimo, hay una vista no

convencional, que niega y descubre la visin meditica. Lo que resulta, ms que un


4/13

conjunto de fotografas, es un concepto de fotografa, un concepto mediante el cual

la fotografa se exhibe y se contesta a s misma.

Estos dos ejemplos no son los nicos en esta exposicin que me inducen a

relacionar la idea de los encubrimientos con lo que he empezado a imaginar

como una posible historia ilustrada de la mentira. Suponer una historia ilustrada

de la mentira me lleva a recordar los conocidos Prolegmenos a una historia de la

mentira, de Derrida. En ese discurso la historia de la mentira se relata como

imposibilidad, tal vez por su carcter paradjico, en tanto historia de una

construccin poltica de la verdad (y de la historia), pero sin dejar de conceder un

peso bastante significativo a la funcin persuasiva y mitolgica de la imagen en las

sociedades actuales, tecnolgica y mediticamente dependientes. Por eso, al final,

el escepticismo de Derrida no me convence. En todo caso me deja con la sospecha

de que, si en algn momento se construye una historia de la mentira en las

sociedades modernas, sta ser una historia ilustrada con fotografas.

Lo que puede tener de peculiar este planteamiento, en el contexto de una

exposicin como Encubrimientos, es el reconocer que ni la simulacin, ni la ficcin,

ni la parodia son temas que conciernen exclusivamente a la fotografa

latinoamericana. Eso a pesar de que hay condiciones locales en las que tales

procedimientos parecen especialmente subversivos, sobre todo en pases que no

se distinguen por abordar su propia historia con mucho sentido del humor.


5/13

2-La transparencia

Pero Encubrimientosno se refiere tanto a lo divertido, como a lo diversionista, si

podemos calificar as el efecto que se deriva de la densidad semntica de las

fotografas, que obligan a una lectura por capas, en las que la superficie aparece de

pronto como un seuelo, el estilo como una distraccin y la ideologa como un

fantasma.

Las capas que dan grosor semntico a una fotografa pueden separarse una por una, para

revelar lo que cada una esconde debajo. Pero esa operacin pudiera despojar de misterio

y de encanto a cualquier obra de arte. Si bien estas capas, vistas individualmente, son

transparentes, verlas individualmente no es recomendable y, probablemente,

tampoco es del todo factible.

En verdad, el crtico o el comisario, el artista y el pblico, trabajan de acuerdo a una

mutua complicidad, que les permite encubrir mientras van descubriendo y simular

mientras van revelando. De ese modo, siempre queda algo intacto, bien como rastro o

bien como posibilidad: la imagen tras el significado, el significado tras el signo, el signo

tras la ideologa, la ideologa tras la realidad, o la realidad tras la imagen.

Estas yuxtaposiciones estn implcitas en el sostenido vaivn entre la intencin esttica,

que se hace explcita como nfasis en la forma, y la intencin poltica, que se detecta

desde la eleccin de los temas. Y esto ltimo no es trivial para captar el tono de una

exposicin constituida por obras que, en su totalidad, se originan en una inquietud o una

inconformidad ante situaciones de impacto social.

Es innegable la intencin crtica en la serie Oleoductos, de Mara Teresa Ponce,

aunque lo que est en la superficie de esas fotos sea el estilo. Ella mezcla un tema


6/13

social e histricamente sensible con una experimentacin a partir de la historicidad de

ciertos modelos iconogrficos. Su serie se compone de paisajes realizados hasta ahora

en tres pases sudamericanos exportadores de petrleo: Venezuela, Ecuador y

Argentina. Por medio de citas y otros procedimientos, pone a dialogar esas fotos con el

paisajismo romntico del siglo XIX. En esa relacin entre la imagen histrica y la

imagen del presente se infiltran los signos de una realidad que sigue siendo

problemtica en trminos ecolgicos, econmicos y sociales.

Detrs del tono festivo y espontneo de la serie Superrubias, de Andrea Aragn, hay

que detectar un trabajo documental que expone la asimilacin de los estereotipos

tnicos y los ideales de belleza en el contexto de distintas clases sociales en Guatemala.

Con este proyecto Aragn mantiene la atencin sobre los temas de gnero que han

estado presentes en gran parte de su obra y elabora su propia versin de cmo el cuerpo

termina constituyndose en un referente social. La serie tambin muestra como se

desdobla el universo de los adultos en el universo infantil. Nios y adultos parecen

compartir las mismas aspiraciones, las mismas ficciones y los mismos modelos, que

afectan la apariencia, las relaciones de grupo y la proyeccin de la sexualidad.


7/13

Andrea Aragn. Superrubias. 2006-2008

Andrs Asturias tambin trabaja a partir de una preocupacin social, en sus series

realizadas en Coney Island y Playa del Puerto San Jos. Sobre todo la segunda, hecha en

Guatemala, exhibe mejor la particularidad de un sitio solamente visitado por miembros

de las clases populares. Es una serie que tiene la complejidad ideolgica propia de las

representaciones elaboradas a partir de la mirada so bre el otro. Esa complejidad

ideolgica est encubierta detrs del nfasis puesto en las formas y en la superficie

del soporte fotogrfico, que obliga a percibir la foto como textura y la textura como

texto, remitiendo a un modelo de representacin ms cercano a lo pictrico.


8/13

Andrs Asturias.Arena negra. 2010

Partiendo de una investigacin con el tema de ndices y causas del suicidio en

Guanajuato, Arel Vargas ha hecho una serie de fotos que son representaciones de los

lugares en donde ocurrieron los suicidios y que vienen acompaadas de las

transcripciones de las cartas dejadas por los suicidas. La serie, titulada Axiomas

inevitables, establece un cruce entre la realidad y la ficcin, a partir del cruce entre el

documento y su reconstruccin esttica. Hay una tensin entre el presente y el pasado, y

los cuerpos ausentes parecen ubicarse en ese punto atemporal, enfatizado por la

representacin.

Gran parte de la efectividad retrica de esta obra est basada en los textos. Son los

textos los que contribuyen a dar un tono melodramtico y ambiguamente literario

a esta serie de testimonios pstumos, que deberan ser ledos, ms all de las

ancdotas, como evidencias de un violento desprendimiento entre los individuos y


9/13

el grupo social (la familia, bsicamente). Y son los textos los que reconstruyen (y

disimulan) poticamente el origen forense y antropolgico de esta serie de documentos.

3-La inscripcin

En general, la intertextualidad difusa de que hacen gala muchos de estos trabajos

se expresa mediante un efecto de inscripcin. En la obra de Vargas este proceso se

da por la transcripcin de los textos, mientras en la obra de Gerardo Repetto es el

cuerpo el que se inscribe en la fotografa, convirtindose tambin en una medida

de su temporalidad.

Gerardo Repetto trabaja en un proyecto que ha titulado Heliografas. La serie se

compone de retratos a escala natural, por proyeccin directa de sombra sobre papel

heliogrfico. Es tan atractivo exhibir el resultado impreso como el proceso, mediante el

cual un sujeto (entre actor, modelo y artista del performance) se expone al dispositivo

fotogrfico y a la mirada casual del pblico. En esta obra es crucial la relacin entre el

cuerpo y el soporte fotogrfico, as como el elemento temporal, que nos permite

apreciar la fotografa como proceso. La imagen resulta de un cuerpo sometido,

controlado y, no slo metafricamente, violentado. El reto es descubrir esa violencia

encubierta tras la nobleza de formas, a veces casi abstractas, de la silueta impresa.


10/13

Cinthya Soto. Playa y bicicleta. 2007

En el caso de la serie Pictografas, de Cinthya Soto es la imagen la que aparece como

inscripcin en la fotografa. Este conjunto se compone de fotos de muros con

decoracin naif, que son muestras de la imaginera popular en espacios comerciales. Por

un lado Cinthya Soto expone aqu la relacin entre pintura y fotografa, por medio del

recurso de la imagen dentro de la imagen, mientras que por otra parte hay una lectura

del arte popular y el folclor como referencias a un territorio, a una comunidad y a una

particularidad lingstica.

4-El trnsito

En realidad, ms que intertextualidad yo he optado por usar el trmino

transtextualidad, que nos remite a la manera en que la fotografa puede generar una

experiencia esttica marcada por una cierta transversalidad. Esa transversalidad se

deriva de una estructura textual mixta, como en los casos que hemos visto, pero tambin

de ah se deriva que nuestra percepcin y nuestra lectura de las representaciones

fotogrficas se vean marcadas por un efecto de movilidad que no es solamente espacial,

sino tambin temporal.


11/13

Algunas de las obras de Encubrimientos enfatizan especialmente ese efecto de

desplazamiento, incluso desde su propio tema. Alejandro Lipszyc presenta parte de su

serie Los emigrantes, que constituye un conjunto de excelentes retratos tomados a

individuos o familias a punto de emigrar desde Argentina, a raz de la crisis econmica

que afect a ese pas a principios de la dcada de 2000. De hecho, los retratos fueron

realizados justo en el momento previo a la partida, y muestran a los sujetos en una

especie de limbo de tiempo y espacio, ya definitivamente marcados por la experiencia

psicolgica de la emigracin. Como subtema interesante se destaca en esta serie la

nocin de momento o de lapso que provee de una capacidad de impacto extra a la

vaga expresividad con que son captados los sujetos: siempre frontales, siempre serios,

siempre hermticos.

Sebastin Friedman exhibe una serie de retratos colectivos de familias con sus

sirvientas. Se combinan con fotografas de las sirvientas en su propio espacio

domstico. Es un trabajo que tambin reflexiona sobre las relaciones de poder, las

diferencias de clase, e incluso tnicas. Como subtema est esa ubicuidad de los sujetos

fotografiados y mostrados en contextos diferentes, construyendo un dilogo espacio-

temporal que puede manejarse tambin como una metfora de la migracin en pequea

escala.

Joao Castillo presenta parte de su serieRemolino, con fotografas tomadas en el Sertao.

Son imgenes de una visualidad enrgica y vital, que parecen aludir a una realidad

alternativa, con un tono que recuerda al realismo mgico. La serie constituye una

peculiar construccin espacio temporal generada desde la propia representacin.

Adems de las fotos, se exhibe el video Entre Ros, que parte de una accin que

consisti en llevar objetos tomados de un ro en Brasil hasta otro en Mali. El video no es


12/13


13/13

pudoroso ante la posibilidad de que un esfuerzo por promover nuevas figuras de la

fotografa latinoamericana se confunda con un intento pretenciosamente taxonmico.

La manera en que abordamos aqu la imagen del encubrimiento no debe dar pbulo a las

suspicacias. Pero estamos tan acostumbrados a asumir que los descubrimientos son

buenos, que tal vez cueste un poco de trabajo aceptar que hay mucha bondad tambin en

los encubrimientos. Hasta el lenguaje fotogrfico est construido con esos

antagonismos: revelar(lo positivo) contra velar(lo negativo). Y sin embargo, mi gusto

por la fotografa siempre ha venido acompaado de un sincero aprecio por las veladuras

y por los tamices, lo que es decir, un sincero aprecio por lo que ocurre en la superficie.

Confiamos en que una fotografa, despus de revelada su superficie, nos ofrezca

otra nueva revelacin. Pero tal vez en esa esperanzada actitud se esconde tambin

la intuicin de que toda fotografa oculta algo y que siempre hay algo que se queda

a medio revelar. Algo que se queda envuelto entre transparencias, inscripciones y

fragmentos. Tal vez por eso, mientras escribo este texto, tengo en mente todo el

tiempo esa frase de De Kooning que Susan Sontag usa como exergo de su ensayo

Contra la interpretacin: El contenido es un atisbo de algo

Juan Antonio Molina

Mxico, 2010

Texto para el catlogo de la exposicin Encubrimientos. Instituto Cervantes. Madrid, 2010

Un Atisbo de Algo

Documents

Transcript of Un Atisbo de Algo