Tom y Guirnaldo Jp Zooey

8/12/2019 Tom y Guirnaldo Jp Zooey

1/16


2/16

TOM YGUIRNALDO

J.P. Zooey

los-proyectos


3/16

DICE

biertartadam y Guirnaldo. Zooeyros ttulos de los-proyectospyright


4/16

OM YGUIRNALDO

ELRO DE LAPLATA, entre Buenos Aires y Colonia, hay un islote de roca plana y negra queenta metros cuadrados. La forma romboide es perfecta y la piedra es porosa. Aparte de una cocangrejos negrirrojos, y algunos mejillones, no hay nada. Nada exceptuando al Almirante Tobo Principal Guirnaldo, su toldera, y un can del siglo XIXreciclado y en funciones, con unapesar de los siete aos aislados ambos llevan, como si fuera el primer da, los uniformes ignias de la Armada Argentina. A Tom y Guirnaldo les otorgaron esos nombres de guerra curon destinados, por el propio Presidente, a montar la base en el islote durante el conflicto

stera Botnia. Desde que llegaron, cuando las relaciones entre Argentina y Uruguay se tensaryo del 2005, no reciben instrucciones ni saben si ha terminado el conflicto.

El Almirante Tom pasa la mano por el borde filoso del islote, quisiera acariciar el corazn donia de mejillones. Pero los malditos no se organizan en torno a un corazn ni entiendarquas. Al tacto todas esas puntas podran confundirse con la cresta de un dragn, o las defntiagudas de un castillo. El Almirante Tom y el Cabo Principal Guirnaldo sienten poseepecie de castillo emergente en las aguas del Ro de la Plata. Un cangrejo le atenaza un dedo. A! Solt! Ta que lo tir! Pero qu estaba pensando?

Ah! Sabe qu so anoche Cabo Principal?Y cmo voy a saber?Que alguien sala de una caja de cartn, me miraba un rato con ojos de cangrejo, y me

llos son libres, no estn atrapados por la Historia.Aj.Y sabe Cabo quines son ellos?Los cangrejos?S! Y quines ms?

Los mejillones?S! Y Dios y nuestros ms remotos antepasados: todos los prehistricos estn libres storia! Y tambin los prceres del Saln de los Bustos de la Casa Rosada: todos los inmortalin ajenos a los vaivenes de la Historia!

Almirante, yo quisiera estar afuera de la Historia, que el tiempo deje de avanzar que, en un presente eterno Esta poca es profundamente satisfactoria.

Quin sabe Quizs cuando termine el conflicto.

El Plan de Guerra General Belgrano tena lineamientos tcticos y objetivos estratgicoeccin tctica estaba orientada a mantener el absoluto secreto de la operacin. El Almirant


5/16

bo Principal no tendran medios de telecomunicacin mientras durase el conflicto; montaradera negra sobre la roca negra, con una cocina y una cama cucheta; no conoceran con antelacmento de disparar el can: llegado el da recibiran una seal desde algn lado, que no dar a dudas. El objetivo estratgico consista en disparar la bala del can al BuquebusEbel, hacerle sentir el sacudn y as indicarle al Presidente de Uruguay que Argentina epuesta a todo. Mientras tanto, hasta recibir la seal, el Almirante Tom y el Cabo Prinirnaldo esperaran al pie del can.

Y an esperan.

Va usted o voy yo, Almirante?

Como todos los das un paquete arrib a la isla. Una caja de telgopor cubierta con varias bolon, aseguradas a su vez con cinta de embalar. Vena flotando desde el horizonte. En la re

olgica de Buenos Aires alguna existencia piadosa con buen conocimiento de las mareas prep

paquete y lo lanzaba al agua repleto de alimentos frescos. Podan ver venir las provisiones derizonte, era lo nico que vean, adems delEladia Isabel, ir y volver, blanco elEladia, commenso caballo alado volando sobre las aguas. Un da le daran un susto con el caonazo. Un cdo El Almirante Tom y el Cabo Principal Guirnaldo estn seguros de que ha regresadogentina una poca heroica, habitada por entidades mticas. Y ellos estn en el lugar indiro qu estaba pensando?

Va usted o voy yo, Almirante?

Ah! Vaya usted, Guirnaldo, como siempre.Yo pregunto.

No necesit palo ni nada para atraer la caja. La marea la golpeaba contra el borde del islotevaba y descenda, se la vea levantar cabeza, mansa, y desaparecer bajo el borde, mansa, paremal pidindole comida a Guirnaldo. La subi y la apoy en la roca. Sac un cutter de la caarcegu y cort las bolsas. Abri la caja: dos latas de arvejas, dos yogures, seis huevos blancoschichas y entre el paquete de yerba y la pared de la caja, bien protegida, una radio porttil.

Una radio, Almirante! Una radio!

Los lineamientos tcticos del Plan de Guerra General Belgrano eran muy estrictos sobre presecreto hermtico los pormenores de la accin blica: el susto que se les dara a los urug

ba asaltarlos por sorpresa. Ninguna informacin se les poda escapar a los involucrados, ni dber nada ms que lo que la seal les indicara. Tal era la causa de que la Armada no los huovisto de medios de telecomunicacin. Ahora una radio podra interferir las aguas de ignoranci

bitaban desde el 2005. El Almirante Tom y el Cabo Principal Guirnaldo evalan la posibilid


6/16

e al fin, despus de siete aos, se les est por dar la seal. Tal vez, si sintonizaran un informdran saber en qu etapa estaba la escalada del conflicto.

La radio dar la seal para disparar?Prndala.Quiere que prepare el can por si las moscas?Qu le voy a responder Cabo Principal?Me va a decir que preferira no tener opciones, Almirante.Por eso. Pero prndala.Est seguro?Es una radio, Cabo.Es una radioSi es una radio est para prenderse.Qu emisora quiere, Almirante?Qu le voy a responder, Cabo Principal?Escuchemos la que est Guirnaldo ajust la sintona fina. Suena bien Almirante!Deje esa, deje esa.

Guirnaldo emplaz la radio sobre la roca negra. El Almirante se sent sobre un tabureteca del artefacto. El Cabo se acomod con las piernas entrecruzadas, en la postura de flor deust un poco ms la sintona fina porque la seal haca fiuuuuu fiuufiuu fiiii cuanrda. La luz rosada del atardecer caa sobre el castillo negro, plano y romboide que emerga enuas del Ro de la Plata.

De la radio sala un dilogo:

Por qu me llamaste?Basta, por favor...Pero decime por qu me llamaste.No s basta, te lo ruego.Me llams por telfono y no sabs por qu me llamaste?Es que es importante.Es de vida o muerte?No, de vida o muerte no.Entonces, por qu en vez de llamar no mands un mensajito?Es que quera escuchar tu voz.Escuchame Bonnie: vos deberas empezar algn tipo de terapia.

Fiuuuu Fiufiu Fiiiiiiiii

A ver si sintoniza bien, Cabo!


7/16

La radio est interferida por seales telefnicas! Estbamos escuchando una charla telefmirante!

Qu me quiere decir?No, nada, eso. Es como si estuviramos haciendo inteligencia.Qu me quiere decir? A ver si la hace andar!

Guirnaldo permanece en la postura de flor de loto, pero estira las manos hacia la radio, quoyada en la roca, entre l y el Almirante. En esa posicin mueve la sintona fina, de un lado an sutileza. Mientras, el Almirante Tom se pregunta por qu la joven del telfono querra escucz del muchacho, si acaso para verificar que se trataba de l, como una prueba de identidad.

Y volvieron a sintonizar.

No seas tan duro, Clyde.Por qu en vez de llamar no me mandaste un mensajito?

Qu fue ese ruido?Qu ruido?Decime qu fue ese ruido.No, nada.Ese ruido como de que son otro celular?Yo no tengo otro celular, Bonnie.Por eso. Con quin ests?Tengo que cortar.Te llam para contarte que vi un halcn cazando una paloma.

Adnde?Desde mi balcn, enfrente, en la plaza del Congreso. Me dio mucha impresin,era una paloma tan chiquita

De las nuestras?No sBueno. Tengo que cortar.Clyde, no me siento bien.Otra vez?Es que no s si hicimos bien.

Para esto me llamaste.Y si nos arrepentimos?Bueno. Tengo que cortar.Decime un piropo.Ahora?Uno solo.Cuando la luna abre su ojo, yo slo veo la luz que te viene de adentro.Clyde antes de que hiciramos lo que hicimos yo senta una luz que me vena

de adentro, una luz blanca, espiritual.Despus te llamo.Te mando un giga de besos, Clyde, pero llamame.


8/16

Te mando un bit al centro de tus labios.Te amo.Chau.

Alguna vez se enamor Almirante?

Ya era noche cerrada en el islote. Haban escuchado la conversacin ajena en la comcuridad. Solo se vea un palito colorado en el dial de la radio, iluminado desde adentro. Erea roja de cinco centmetros que indicaba la altura del dial y se poda mover con una ruedecilaba al costado del artefacto. Se vea solamente esa venita roja y el esplndido cielo nocturno,

as estrellas iluminadas desde adentro.

Lo que est iluminado desde adentro cautiva pens el Amirante para s mismorellas, las mujeres encintas, la luz de la televisin. Cmo la extraaba!, a la televisin. Pque verdaderamente amaba era la de los vitrales de la Catedral. El Almirante cree que, si

ere, su accionar militar lo har pasar al Santoral de la Armada. Pero qu estaba pensando?

Almirante, alguna vez se enamor?Ah! Una Una. Y sabe por qu no me enamor ms?Porque no quiso?Por precavido.Para no sufrir.Ni tener que elegir.

Entonces el Almirante se hizo traer una tiza blanca y una linterna que haba en la tolirnaldo vino con la tiza, la linterna, y tambin un borrador; el borrador por si las moscmirante le hizo sostener la linterna e iluminar una parte del islote; despus se arrodill y empujar.

Eso es un corazn, Almirante!Es. Y usted no quiere dibujarse uno? Yo me voy a sentar adentro de este. Pero los d

ramos.Yo me hago el mo propio.

Guirnaldo traz con mano dubitativa la forma de un corazn un poco deforme.

Y qu clase de corazn es ese, Cabo Principal?Ya lo va a ver.


9/16

El Cabo le hizo un cabito al corazn, y el cabito continu en una rama, y la rama en otra,mpletar un rbol.

Es un manzano?El manzano del Paraso, Almirante!El de la fruta prohibidaEl Paraso! Como este! Como nuestro islote!El manzano del que comi Eva. Ella est eternizada, existe fuera de la Historia. Ajena al d

a degradacin...

El Almirante Tom mir el dibujo y pens que en esta poca ningn fruto debera estar prohicereal, ni carne, ni nada que se pueda exportar. Y tuvo una mirada que fue tambin una visireci que ese rbol blanco no estaba dibujado en verdad: estaba calado sobre la piedra negra. minado desde las entraas del islote por una Luna Reina vestida de luto.

Al Almirante le pareci buena idea contarle al Cabo Principal sus saberes sobre el poder es que vienen de adentro.

Sabe por qu la televisin nos atrae tanto?Yo? No.Nos rendimos ante todo lo que tiene luz que le viene de adentro.Como las estrellas?A los vitrales, Cabo, piense, les rezamos.

El fuego, Almirante.Y el Sol tambin, mirarlo es la mayor tentacin.Porque tiene mucha luz que le viene de adentro.El Sol, la verdad, es la mayor tentacin.Pero si lo mira mucho se queda ciego.Cabo, yo confo en el Sol, pero no lo miro.Y yo tambin.

Se fueron a dormir en orden. El Almirante Tom trep por la escalera hasta la cama cucheiba y se sent en el borde, con las piernas colgando para afuera. l prefera la cama de arribarqua. Una vez que se hubo sentado, como siempre, le orden al Cabo Guirnaldo que agarraos de la cama y los sacudiera con fuerza. Si un da en esta prueba la estructura ceda, la paiba caera sobre el colchn de abajo. El colchn tena reservas suficientes de goma espuma ra amortiguar la cada y no morira nadie aplastado durante la noche. Guirnaldo sacudi una z, hasta que Tom indic con la mano que ya era suficiente y se acost.

El modelo es bueno dijo una vez ms el Almirante, Fabricaciones Militares lo hizo

oca de Frondizi.


10/16

Y como siempre cada uno en su cama se son los dedos de los pies con una maniobra entremero el Almirante y despus el Cabo Principal. Ya habindose quitado las mentiras, todencio. Silencio salvo el golpetear de las olas sobre los bordes del islote. Y el Almirante no tar pensar en los cangrejos negrirrojos, primero, y en los mejillones, despus, prendidos con u

rras al filo del islote. Cada especie en lo suyo era especialista en supervivencia. Y ni los canglos mejillones saban de conflictos sectoriales, ni de subsidios estatales, ni de inflacin, vivtiempo que era puro presente, consumiendo cosillas naturales; aunque estuvieran prendidos una simple piedra porosa, estaban libres de la Historia, en un Paraso paralelo. Despus de pen, el Almirante se durmi.

So con el Presidente: sala de una caja, lo miraba un rato con ojos de cangrejo, y le deca: n libres, no estn atrapados por la Historia. Ellos y Eva, no se olvide, Almirante. No, seponda Tom. El Almirante Tom cree, en su subconsciente, que la Argentina renacida de sus cesde el 2003 est en camino al Paraso: estuvo en el Infierno, pas por el Purgatorio, y ya deber llegar al Jardn del Edn, donde el tiempo cesa y ya no hay miedo a los vaivenes de la Histormuerte.

A las siete de la maana los despert el telfono que sonaba en la radio, una nueva interferbo un rin que son entre los sueos y confundi al Almirante. Aunque no haba telfono

ote, crey que llamaban desde la mismsima Quinta de Olivos para que disparara el can.

Hola.Qu pasa, Bonnie?No te enojes.

Qu pasa Bonnie?Me siento muy mal. Hace muchos, pero muchos meses que no te veo.Y para qu quers verme?No te enojes pero somos una pareja, Clyde.Qu pasa, Bonnie?Decime un piropo y cuelgo.Y para qu quers que te diga un piropo?No s. Lo deseo.Lo de deseas o lo necesits?

Lo necesito.Cuando me abandonaste eyect mi corazn hacia el cielo. Todava anda perdidoel muy bobo, es una estrella fugaz. Dios quiera que una noche de estas le pidas tresdeseos y me vuelva este hueco a rellenar.

ClydeQu?Pero yo no te abandon.Qu pasa, Bonnie?

Las voces llegaban desde la radio que haba quedado encendida al pie de la cama cuche


11/16

umen alto les daba una textura an ms de hojalata. Al Cabo Guirnaldo, que segua durmiencol entre sueos la conversacin y se despert pensando en el hombre de hojalata del Mago dhombrecito al que le haban robado un corazn. Aunque no tena formacin poltica le vinsamiento revelador: a nuestra Patria le falta un Mago de Oz, alguien malvado que orquestere las sombras y podamos exigirle que nos devuelva un corazn en torno al cual organizarnbo cree, en su fuero ntimo, que Argentina es un pas encantado.

Te llam para decirte que un halcn mat otra paloma y la dej muerta en elbalcn.

No llores.Era de las nuestras, tan chiquita y blanca, est ah ensangrentada, con los ojos

abiertos No s si hicimos bien. Estoy tan arrepentida.Era de las nuestrasS. No puedo ms. No pude dormir. Pienso que tal vez ellas son lo mejor que

hicimos Y mir cmo terminan. Y vos que no me llams nunca, ni vensAhora voy a ir. Ya mismo. Y voy a sacar esa paloma de tu balcn. Esos halcones

son la nueva idea del Gobierno de la Ciudad.

Son tan crueles.Una paloma con un ramo de olivo en el pico anunci a No que el diluvio haba

terminado. Matar las palomas es como eliminar la posibilidad de que alguien nosrecuerde que finaliz el caos.

Qu decs, Clyde? No te entiendo nada.Nada.Es que es tan temprano.Ya voy para ah.No, ahora no. Yo la voy a enterrar sola.

Qu pasa, Bonnie?Tengo que cortar.Qu pasa, Bonnie?Tuuuuuu

Tom y Guirnaldo quedaron estupefactos. Un cangrejo negrirrojo fue caminando desde el bordote hasta ellos. Se trep como pudo a la radio. Y qued ah agarrotado. La vibracin del artefaca sentir a gusto.

l est afuera de la Historia, Cabo, en un Paraso paralelo.

El Almirante Tom meti al cangrejo y a la radio en una caja de telgopor, con dos dedos de aunos mejillones. Lo cuidaran para siempre, juraron, como al Presidente.

Almirante, lo llamaremos Clyde como Clyde?

Podra ser, pero no. Lo llamaremos l.


12/16

l qu?l solo, como Dios.

Volvieron a ser creyentes y suspiraron.

Por la noche, cuando Tom y Guirnaldo estaban en duermevela, la Luna Reina vestida de luto luz adentro de la caja y ti de blanco el agua que haba. l, que estaba inmovilizado sobrntaa de mejillones, se sinti convocado. Tras un momento de vacilacin movi sus patasjillones crujieron. Vacil de nuevo. Al fin lleg movilizado hasta el agua blanca. Despu

mergi y ba su exoesqueleto en la Luna. En la isla todos durmieron en profunda paz y seguri

Entre sueos se filtr por la tela del parlante una partcula de dilogo:

Un ltimo piropo, Clyde.

Claro, Bonnie:Podra suceder que no seas real, pero no pasar sin beber de esteespejismo.


13/16

P. ZOOEYnaci en 1973. Curs periodismo en la UBA. No ejerce. Public Sol artificialen 200torial Paradiso, yLos electrocutados en 2011 por editorial Alpha Decay. Vive en el barrmagro.


14/16

TROS TTULOS DE LOS-PROYECTOS

temecva Almada

utralidadarcelo Cohen

s altosguido de Biografa onrica de un corredorderico Levn


15/16

2012 los-proyectos 2012 J.P. [email protected]

Buenos Aires, [email protected]

eISBN: 978-987-28505-2-4Diseo de cubierta: Mica HernndezDiseo y armado: los-proyectos

Zooey, J.P.Tom y Guirnaldo. - 1a ed. - Buenos Aires : los-proyectos, 2012.EBook

ISBN 978-987-28505-2-4

1. Narrativa Argentina. 2. Cuentos. I. Ttulo.CDD A863

Queda prohibida la reproduccin total o parcial de esta obra, por cualquier medio o procedimsin permiso previo del editor y/o autor.
mailto:[email protected]://los-proyectos.com.ar/mailto:[email protected]


16/16

Tom y Guirnaldo Jp Zooey

Documents

Transcript of Tom y Guirnaldo Jp Zooey