Todos en esta vida somos estudiantes, porque vivir es aprender. Aprendemos cada da, de nuestras experiencias, de un nio, de un libro, de un amigo, de nuestrospadres... Pero existe un da especial para el escolar y el bachillerato: el estudiante. No es fcil ni sencillo porque es un largo camino por recorrer, un camino que nunca termina. Pero tiene susrecompensas. Es uno de los caminos que ms recompensas y satisfacciones brinda. Mientras ms estudies y te esfuerces, muchos ms frutos vers al recoger la cosecha. Por eso te exhorto a que no mires al camino,ni los tropiezos que tengas en l, sino que mires adelante hacia donde estn las metas y sueos que te has propuesto. El xito te espera.La educacin es preciosa! Aprender de los libros buenos es unprivilegio. Sin la educacin, no podemos entender mucho de los pueblos de las diferentes culturas.Los estudiantes venezolanos estn viviendo, otra vez, un momento estelar en la historia de nuestro pas. Y digo otra vez porque, desde la poca de nuestra independencia, pasando por la gesta de la recordada Generacin del 28, y las luchas estudiantiles que se dieron en las dcadas rebeldes de los aos sesenta, setenta y ochenta, el estudiante universitario venezolano ha cumplido un rol fundamental. Precisamente, la Orden que hoy entregamos lleva el nombre de Luis Mara Ribas Dvila, nacido en Mrida el 19 de agosto de 1778, quien con apenas 17 aos de edad ya era alumno del Seminario de Mrida, hoy Universidad de Los Andes, compaero de Simn Bolvar en La Campaa Admirable, y un ferviente luchador por nuestra independencia, impulsado por su juventud y sus convicciones de justicia y libertad de la patria. A l le correspondi el honor de nombrar oficialmente Libertador a Bolvar, y luchar en batallas que sellaron la gesta independentista nacional. En homenaje a ese rebelde estudiante universitario merideo, la Universidad de Los Andes confiere esta Orden con la cual reconoce los logros acadmicos de sus alumnos, a propsito del Da Nacional del Estudiante Universitario. Pero en esta oportunidad, es justo reconocer que, al igual que en las pocas de Luis Mara Ribas Dvila, del grupo rebelde comandado en 1928 por Jvito Villalba -semilla que aos despus lograra la consolidacin de nuestra democracia- y de las luchas contra la guerra, por la paz y la igualdad, que brot en la conciencia de los jvenes universitarios en 1968, hoy nuestros estudiantes universitarios estn dando la batalla por lo que consideran amenazas latentes contra esa misma democracia por la que sus antecesores lucharon. Venezuela se siente y se palpa dividida, y ms all de las luchas por la autonoma universitaria, por las reivindicaciones estudiantiles, por el presupuesto justo para nuestras universidades, los estudiantes universitarios enarbolan banderas y gritan por volver a unir esos pedazos en los que quieren separar a nuestro pas. Es loable y esperanzador ver los llamados, de parte y parte, al dilogo y a la unin. La verdad no est de un solo lado. La verdad se construye entre todos. Y creo que ese, es el mejor mensaje que nos estn enviando los jvenes estudiantes universitarios venezolanos de hoy. Como en otras pocas, se les trata de contener y de acallar. Afortunadamente, es un intento difcil. El estudiante es rebelde por naturaleza y, si rebelde fue cuando, en dcadas anteriores, sinti que las desigualdades sociales, la injusticia, la impunidad y la corrupcin estaban acabando con el sistema democrtico de este pas, rebelde es y ser cuando percibe que en aras de suprimir aquellas perversiones, se quiera imponer un sistema que se aleja de las vas democrticas y constitucionales y sustituya la verdad que se erige entre todos por la que viene de un solo lado, de un solo pensamiento. Yo los felicito, no solamente por el logro acadmico que hoy los hace merecedores de la Orden Luis Mara Ribas Dvila, sino tambin por formar parte de esta nueva generacin de estudiantes que les ha tocado en suerte otra lucha. La sociedad venezolana espera mucho de ustedes. No slo para su desarrollo y crecimiento cientfico y social. Tambin para que la acompaen en un momento que, como antes, requiere del apoyo de jvenes rebeldes, con argumentos, convicciones y voluntad para luchar por una Venezuela