Taller de Sensibilidad Racional.

6
Introducción Principal prerrequisito para alcanzar el éxito: la completa aceptación de sí mismo y la clara percepción de la desagradable realidad en la que se vive. Se le ayudara a resolver el problema de tener un problema. Usted cree que es terrible que su jefe o asociado sea tan inepto. Que no debería actuar de forma tan estúpida. Que no puede aguantar su manera de ser y actuar. Que resultara catastrófico si el persiste en bloquear el progreso, actuando indefinidamente con tanta necedad. Pongámonos de acuerdo en que efectivamente él es así. Admitamos que está saboteando idiotamente la maquinaria de su compañía. Reconozcamos que su vida sería mucho más agradable si él no fuese de esa forma. Pero usted mismo desde el momento en que se muestra ansioso, deprimido, iracundo, o molesto por su comportamiento, se está creando tontamente un problema adicional e innecesario: su propia molestia. La ayuda de este libro pretende dar: soltar, cambiar, eliminar su propia molestia emocional. Pues es claro que si usted no hace algo eficaz para usted mismo, difícilmente podrá poner en juego su talento, su cerebro y sus conocimientos y hacer algo eficazmente. Por eso vamos a centrarnos en usted. El ABC de la sensibilidad racional Es sencillo tener una mayor sensibilidad emocional, pero no fácil. El reconocimiento de sus propios problemas es estupendo; decidirse a hacer algo sobre ellos es todavía mejor; pero hacer ese algo y que funcione es una cosa muy distinta. La comprensión puede resultar perniciosa y conducir a la autoflagelación. Su observación: “Estoy convencido de que actuó como un neurótico, ¡decididamente tengo que dejar de actuar así!” es en cierto sentido muy sana. Con ella admite incurrir en un error y la necesidad de modificar su comportamiento. Pero también implica otra cuestión: “Y si no dejo de actuar como un neurótico, ahora que veo perfectamente que me he comportado como un tonto, ¡vaya si seré idiota!”. Surge un problema secundario: condenarse por comprender la situación y aun así no adoptar una actitud distinta.

description

Se aborda el concepto de sensibilidad racional y algunas premisas básicas del trabajo Albert Ellis.

Transcript of Taller de Sensibilidad Racional.

Page 1: Taller de Sensibilidad Racional.

Introducción

Principal prerrequisito para alcanzar el éxito: la completa aceptación de sí mismo y la clara percepción de la desagradable realidad en la que se vive.

Se le ayudara a resolver el problema de tener un problema.

Usted cree que es terrible que su jefe o asociado sea tan inepto. Que no debería actuar de forma tan estúpida. Que no puede aguantar su manera de ser y actuar. Que resultara catastrófico si el persiste en bloquear el progreso, actuando indefinidamente con tanta necedad. Pongámonos de acuerdo en que efectivamente él es así. Admitamos que está saboteando idiotamente la maquinaria de su compañía. Reconozcamos que su vida sería mucho más agradable si él no fuese de esa forma. Pero usted mismo desde el momento en que se muestra ansioso, deprimido, iracundo, o molesto por su comportamiento, se está creando tontamente un problema adicional e innecesario: su propia molestia. La ayuda de este libro pretende dar: soltar, cambiar, eliminar su propia molestia emocional. Pues es claro que si usted no hace algo eficaz para usted mismo, difícilmente podrá poner en juego su talento, su cerebro y sus conocimientos y hacer algo eficazmente. Por eso vamos a centrarnos en usted.

El ABC de la sensibilidad racional

Es sencillo tener una mayor sensibilidad emocional, pero no fácil.

El reconocimiento de sus propios problemas es estupendo; decidirse a hacer algo sobre ellos es todavía mejor; pero hacer ese algo y que funcione es una cosa muy distinta.

La comprensión puede resultar perniciosa y conducir a la autoflagelación. Su observación: “Estoy convencido de que actuó como un neurótico, ¡decididamente tengo que dejar de actuar así!” es en cierto sentido muy sana. Con ella admite incurrir en un error y la necesidad de modificar su comportamiento. Pero también implica otra cuestión: “Y si no dejo de actuar como un neurótico, ahora que veo perfectamente que me he comportado como un tonto, ¡vaya si seré idiota!”.

Surge un problema secundario: condenarse por comprender la situación y aun así no adoptar una actitud distinta.

¿Cuál es la solución? Es la sensibilidad racional. Significa ser extraordinariamente sensible, pero no vulnerable.

Hablemos de sensibilidad. “Soy sensible a que te encuentres deprimido”. (1) “Entiendo, comprendo y estoy sensibilizado por el hecho de que tengas la moral deprimida. Y como entiendo tu depresión, puedo hacer concesiones a tu comportamiento y tal vez a ayudarte a superar en parte la depresión”. Pero también significa: (2) “He advertido que estas deprimido y estoy muy afectado, soy muy vulnerable y sensible a tu situación. No puedo soportar estar a tu lado cuando te encuentras así, porque yo también me deprimo rápidamente. Por tanto, odio tu depresión y tu persona. Entiendo que debo desaprobar el que estés deprimido y evitarte cuando estas así”.

La sensibilidad racional consiste en entrenarse a sí mismo a ser “sensible” según la forma expuesta en el primer caso y no en el segundo. La sensibilidad racional significa que usted utiliza su pensamiento y emotividad para estar cada vez más sensibilizado y receptivo a los fallos propios y ajenos. La sensibilidad racional es tolerancia, flexibilidad, receptividad. Es la capacidad de una persona de hacer sus propias

Page 2: Taller de Sensibilidad Racional.

cosas y dejar a los demás hacer las suyas, sin condenarse a sí mismo o a los demás, cuando la actuación se vuelve inútil, errada o autodestructora.

Vamos a aprender el ABC del desbloqueo emocional. Empecemos con C la consecuencia inoportuna. Las principales consecuencias que usted desearía minimizar o eliminar son aquellas que normalmente llamamos disturbios, bloqueos o síntomas emocionales. Supongamos en el punto C que está usted sentando en un sillón sin hacer nada. Así en C su propia falta de iniciativa lo está poniendo en jaque mate y posiblemente se esté torturando así mismo por encontrarse en esa situación. Supongamos que en el punto A que el departamento que dirige en la empresa que trabaja ha tenido un mal año de ventas y que por ello ha sido reprendido duramente. Siendo humano normalmente se diría: “Mi departamento ha tenido serios reveses y el director me ha reprendido, y eso me hace sentir incapaz y desaprobar mi actuación”.

Pero ¿cómo pudieron esos acontecimientos generar en su persona algún tipo de sentimiento? ¿Dónde está la brujería, el encantamiento, que produjo que un fracaso en el departamento, unas palabras desagradables del director le hiciesen sentir algo como apatía y ponerse contra sí mismo?

Entonces ¿es A lo que causa C? El verdadero culpable es B: su sistema de creencias que tiene sobre ciertos Acontecimientos. B está formado por dos creencias. La primera una creencia racional (Br): “Es desafortunado que mi departamento no alcanzase este año una cifras aceptables. Hubiese preferido que fuesen más altas. ¡Que fastidio! Y que molesto es ser reprendido por el director, especialmente cuando no puede demostrar siquiera que yo fuese el culpable de esas cifras tan bajas”. Y la segunda por una creencia irracional (Bi).

Si usted se mantiene en esa Creencia racional no tendrá ningún disturbio emocional. Sus emociones por muy profundas e intensas que sean serán las apropiadas para los Acontecimientos Activadores que las preceden; y le animaran apropiadamente a hacer algo sobre tales acontecimientos en la siguiente ocasión y a intentar mejorarlos. Las afirmaciones racionales que se hace pueden confirmarse empíricamente. ¿Por qué es desafortunado, fastidioso, frustrante y molesto que su departamento no tenga buenos resultados y sea amonestado por la deficiente actuación?

1. No conseguirá el aumento deseado.2. Sera relevado de su cargo de responsable del departamento.3. El director dejara de tener confianza en usted.4. Otros ejecutivos de la organización dejaran de estar deseosos de cooperar con usted.

Las afirmaciones racionales adoptan la forma general: “Me gustaría que las cosas se hiciesen según la forma X, sin embargo están saliendo de la forma Y, ¡que desgracia!”.

Creencia irracional (Bi): “Es terrible que mi departamento haya conseguido resultados tan bajos y que el director me recrimine por ello. No puedo permitir ese tipo de fracasos. Soy una persona bastante inútil como ha demostrado mi actuación y posiblemente no vuelva a hacerlo nunca bien. Si continuo haciéndolo así de mal, debería realmente ser castigado por mi desafortunada actuación”. Las actitudes y pensamientos son evidentemente inoportunas para los Acontecimientos Activadores.

Sus Creencias irracionales no son comprobables empíricamente y están sin ninguna relación con la realidad. ¿Porque? Vamos a examinar cada una de ellas y lo veremos.

Page 3: Taller de Sensibilidad Racional.

1. “Es terrible que mi departamento haya conseguido resultados tan bajos y que el director me recrimine por ello”. Terrible tal y como es utilizado en esta hipótesis, significa dos cosas distintas: a) Es incomodo, perjudicial y doloroso haber sido recriminado y b) Es mucho más que incomodo, perjudicial y doloroso haber sido recriminado. Si es honesto consigo mismo podrá ver que la mayoría de las veces que usa la palabra terrible lo hace para referirse al punto b. El punto a es válido y sano y corresponde a una creencia racional. El punto b es mágico y no comprobable. ¿Cómo puede ser algo más que incomodo, muy perjudicial y doloroso? ¿No le da a la frase una dimensión mística que no puede referirse a algo empírico? ¿Cómo puede llegar a demostrar que ser recriminado es algo más que excepcionalmente incomodo? La preposición también puede significar: “Es molesto y fastidioso para mí estar en esa situación”, y “por tanto no debería, estar en esa molesta y fastidiosa situación”. Estamos de acuerdo en que es molesta y fastidiosa, ¿Por qué no debería de ser así? ¿Es que existe una ley divina o humana que impida tener acontecimientos molestos? Evidentemente no existe pues si no se deben tener experiencias desagradables, entonces no pueden tenerse. Y sin embargo las ha tenido.

2. “No puedo permitir este tipo de fracasos”. Estamos de acuerdo en que no le gusta y nunca le gustara. Los seres humanos inevitablemente se equivocan, precisamente por ser humanos y por tanto sujetos a errores, es evidente que tienen que ser capaces de superar los fracasos. De otra forma serían incapaces de sobrevivir.

3. “Soy una persona bastante inútil como ha demostrado mi actuación y posiblemente no vuelva hacerlo nunca bien”. ¿Cómo puede honestamente autocalificarse de inútil solo por el hecho de que uno de sus actos no ha alcanzado los resultados queridos? Usted es un proceso en constante cambio y es demasiado complejo para ser descrito satisfactoriamente por un solo evento ¿Cómo puede justificarse que nunca más será capaz de hacerlo bien?

4. “Si continuo haciéndolo así de mal, debería realmente ser castigado por mi desafortunada actuación”. Castigo significa, penalización más condena. Significa que por el hecho de haber tenido un fracaso, usted debe ser condenado y sufrir de una manera especial en la tierra, presumiblemente por ir en contra de la ley de la naturaleza que afirma que usted tiene que triunfar. Es evidente que todas esas hipótesis requieren dioses y demonios justicieros cuya existencia no podrá ser nunca demostrada.

Queda claro que cuando se encuentra molesto en el punto C no está respondiendo oportuna y correctamente a los acontecimientos. Está valorando irracionalmente esos estímulos, pensando cosas terribles y catastróficas. En lugar de aceptar serenamente y luchar contra las inconveniencias y desventajas reales del mundo.

En el punto D debería preguntarse: ¿Por qué es terrible que mi departamento haya conseguido resultados tan bajos este año y que el director tenga que recriminarme por ello? ¿Por qué no puedo aguantar ese tipo de fracaso? ¿Quién asegura que si continuo actuando de esta manera seré castigado?

Page 4: Taller de Sensibilidad Racional.

¿Dónde está la demostración de que sea una persona inútil por haber tenido una actuación equivocada y de que nunca seré capaz de hacerlo bien?

Si usted continua disputando sus Creencias irracionales (Bi) sobre los Acontecimientos en el punto A alcanzara el punto E. Llegará a un Efecto de pensamiento (Ep) y será capaz de dar una respuesta a su disputa en el punto D afirmando: 1) “No es terrible que mi departamento haya conseguido resultados tan bajos este año y que el director tenga que recriminarme por ello; tan solo es muy molesto. De hecho todos los malos resultados y críticas no son más que inconvenientes; y nada es terrible, horrible o catastrófico a menos de que yo mismo lo defina así.” 2) “Por supuesto que soy capaz de aguantar ese tipo de fracaso”. 3) “No existe ni puede existir ninguna evidencia de que mi actuación se desprenda que soy un inútil. De hecho no existen personas inútiles simplemente personas que tienen actuaciones desafortunadas o que son calificados inútiles por otras. El hecho de que no haya conseguido grandes resultados hasta ahora no demuestra que no sea capaz de hacerlo mejor en el futuro”. 4) “Por muy mala que continúe siendo mi actuación, no merezco un castigo especial. Castigo significa condena y tanto yo como cualquier otra persona no tenemos por qué ser condenados cuando nos equivocamos.

Si persiste en alcanzar esos Efectos de pensamiento (Ep) también alcanzara un Efecto emocional (Ee) o de comportamiento (Ec) : Dejara de sentirse sin ganas de hacer cosas, dejara de sentirse culpable de los desafortunados acontecimientos. Dejará por tanto de tener un problema emocional y se sentirá mucho más capaz de regresar al punto A e intentar iniciar alguna vía que mejore la situación.

La sensibilidad racional significa el proceso y la práctica de sensibilizarse para la realización y el bienestar humano.