TALLER DE LICENCIATURA “ELIMINACIÓN DE BROTES...

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Pontificia Universidad Católica de Valparaíso Fundación Isabel Caces de Brown Estación Experimental La Palma Casilla 4-D, Quillota-Chile Teléfonos 56-32-274501- 56-33-310524 Fax 56-32-274570, 56-33-313222 http://www.agronomia.ucv.cl TALLER DE LICENCIATURA “ELIMINACIÓ N DE BROTES ANTICIPADOS Y EFECTOS SOBRE Á REA FOLIAR Y CALIDAD DE FRUTOS EN UVA DE MESA (Vitis vinifera L.) cv. SUPERIOR SEEDLESS” PABLO ORELLANA PEÑA QUILLOTA, CHILE 2006

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Pontificia Universidad Católica de Valparaíso Fundación Isabel Caces de Brown Estación Experimental La Palma

Casilla 4-D, Quillota-Chile Teléfonos 56-32-274501- 56-33-310524

Fax 56-32-274570, 56-33-313222 http://www.agronomia.ucv.cl

TALLER DE LICENCIATURA

“ELIMINACIÓN DE BROTES ANTICIPADOS Y EFECTOS SOBRE Á REA FOLIAR Y

CALIDAD DE FRUTOS EN UVA DE MESA (Vitis vinifera L.)

cv. SUPERIOR SEEDLESS”

PABLO ORELLANA PEÑA

QUILLOTA, CHILE

2006

CON AMOR A MIS PADRES, ESPOSA E HIJO

AGRADECIMIENTOS

A Dios por ayudarme a realizar mis sueños. A mi profesor guía Sr. Ing. Agr. Carlo Sabaini, por sus consejos, apoyo, paciencia y dedicación durante todo el ensayo. Al Sr. Ing. Agr. José Luis Rossi, por confiar en mí y permitir realizar el ensayo en su predio. Al Sr. Ing. Agr. Constantino Kukulis por compartir su amistad, experiencia y ayuda en la elaboración y desarrollo de este ensayo. Al Sr. Ing. Agr. Ricardo Cautín, por su patrocinio y consejos en la redacción del escrito. A Exportadora Trinidad exports S.A. por el financiamiento de este ensayo. A mi esposa, por su apoyo, comprensión y compañía en los momentos más difíciles. A mi hijo, por su amor incondicional, darle un nuevo sentido a mi vida y fuerzas para continuar. A mis queridos amigos: Claudio Valderrama (zorrito), Luis Ramírez (Luchín), Ivan, José Luis Alvarez (Copo), Francisco González (Pancho), Fabián Riquelme (Kanario), Andrés Paniagua (Negro), Herman Mecklemburg, Isabella Andreani, Carla Llanos y en forma muy especial a mi entrañable amigo Victor Vallejos (Q.E.P.D.). A mis padres, por su incondicional amor, apoyo y confianza en mí. A mis abuelos Carlota y Nano, tia Kika y Beto, por su amor y ayuda. Agradezco en forma especial al padre Pedro Gutierrez, por interceder por mí en momentos difíciles durante los años de estudio. A todas las personas que me apoyaron de una u otra manera y que permitieron que tuviese trabajo compatible con las horas de clases y poder desarrollar otras actividades. A los profesores de la facultad de agronomía de la PUCV, por enseñarme el carisma de nuestra facultad, en especial a los profesores del área de fruticultura.

ÍNDICE DE MATERIA

1. Resumen

2. Introducción 1

3. Revisión Bibliográfica 4

3.1. Desarrollo del brote de la vid 4

3.2. Manejo del dosel y desarrollo vegetativo 5

3.3. Intercepción de luz en el huerto 6

3.4. Contenido de clorofila en la hoja 8

3.5. Microclima lumínico y calidad de la fruta 8

3.6. Lignificación 11

3.7. Fertilidad de yemas 11

3.8. Evaluación del dosel 12

3.8.1. Evaluación cuantitativa 12

4. Material y Método 13

4.1. Lugar del experimento 13

4.1.1. Selección de los sitios 13

4.2. Tratamientos 13

4.3. Diseño experimental 14

4.4. Métodos de medición 15

4.4.1. Expresiones del área foliar 15

4.4.1.1. Índice de área foliar (I.A.F.) 15

4.4.1.2. Método del número de capas de hojas (NCH) de Smart 15

4.4.2. Mediciones de luz 16

4.4.2.1. Radiación fotosintéticamente activa (RFA) ó (PAR en inglés) 16

4.4.2.2. Intensidad lumínica 16

4.4.3. Correlación entre el índice de intensidad lumínica y el porcentaje

de Radiación Fotosintéticamente Activa incidente bajo el dosel. 17

4.4.4. Calidad de la fruta 17

4.4.4.1. Sólidos solubles 17

4.4.4.2. Acidez titulable 18

4.4.4.3. Relación sólidos solubles / acidez 18

4.4.4.4. Materia seca 18

4.4.4.5. Diámetro ecuatorial 19

4.4.4.6. Color 19

4.4.5. Lignificación 19

4.4.6. Fertilidad 20

4.4.7. Clorofila 20

4.5. Confección de tabla para el análisis del porcentaje de radiación

fotosintéticamente activa incidente al interior del dosel. 21

5. Resultados y discusión 22

5.1. Densidad del dosel 22

5.1.1. Número de capas de hojas (NCH) 22

5.1.2. Índice de Á rea Foliar (I.A.F.) 24

5.1.3. Efecto de la intensidad de eliminación de brotes anticipados, 26

sobre el índice de área foliar primario y secundario resultante,

en sectores de distinto vigor.

5.2. Microambiente lumínico 27

5.2.1. Intensidad lumínica 27

5.2.2. Radiación Fotosintéticamente Activa (RFA) 29

5.2.3. Correlación entre el índice de intensidad lumínica y el porcentaje 31

de Radiación Fotosintéticamente Activa incidente bajo el dosel.

5.3. Contenido de clorofila según nivel de hoja y oferta lumínica 32

5.4. Calidad de la fruta 33

5.4.1. Concentración promedio de sólidos solubles en la fruta 33

5.4.2. Acidez de la fruta 34

5.4.3. Relación sólidos solubles / acidez 35

5.4.4. Materia seca 35

5.4.5. Calibre 36

5.4.6. Color 36

5.5. Lignificación 37

5.6. Fertilidad de yemas 37

6. Conclusiones 39

7. Literatura citada 40

8. Anexos

RESUMEN En Catemu, V región, Chile, con el propósito de establecer parámetros que indiquen el mejor manejo del dosel de la uva de mesa, conducida en parrón español, en sectores de distinto vigor, se evaluaron efectos de tres intensidades de eliminación de brotes anticipados sobre la expresión del área foliar, microambiente lumínico, concentración de clorofila, calidad de fruta, lignificación y fertilidad de yemas del cv. Superior seedless. Plantas con baja intervención, presentaron el 7 de enero, similar número de capas (niveles) de hojas (2,35) en el sector de bajo vigor y significativamente superior (3,32) en alto vigor, en tanto que intensidades medias y altas fueron similares. Por otro lado plantas con alta intervención, llegaron a cosecha con índice de área foliar total entre 4,9 (alto vigor) y 4 (bajo vigor), de ellos, el Índice de área foliar secundario fue superior al primario en el sector de alto vigor y similar en el de bajo. Radiación fotosintéticamente activa e Intensidad lumínica no fueron claros indicadores del microambiente lumínico y la mejor relación entre ellos, es en ambientes sombríos. La concentración de clorofila en cuatro niveles de hojas no mostraron diferencias significativas, sin embargo al compararla con la oferta lumínica, existió una tendencia directamente proporcional. Indicadores de la calidad de fruta, en ambos sectores, mostraron que alta intervención, produjo mayor contenido de azúcar en los frutos (15,32 y 16 ° Brix) y mayor relación sólidos solubles (26,3 y 33,31), mientras que el contenido de materia seca no varió. En el alto vigor, la acidez de la fruta es inversamente proporcional a la intensidad de intervención (0,61- 0,55 - 0,48 g ac tartárico por 100 ml). El calibre, no fue influenciado por las intervenciones, en tanto que el número de racimos de color verde es mayor en plantas con baja intervención en sector de alto vigor. Por último, lignificación y fertilidad de yemas no resultaron afectadas por las diferentes intensidades de eliminación de brotes anticipados.

Elimination of Early Buds and Effects on the Leaf Area and Fruti Quality in Superior seedeless cv.

ABSTRACT In Catemu, V Region, Chile, effects of de three elimination intensities of early shoots were evaluated according to leaf area light microenvironment, chlorophyll concentration, fruit quality, lignification end fertility of buds of de Superior seedless cv. This evaluation was made intending to establish parameters that indicate the best table grapes canopy management grown in Spanish vines in sectors og different vigor. Low-intyervention plants showed on January 7 a similar number of leayers (levels) of leaves (2.35) in the low-vigor sector and significantly higher (3.32) in high vigor; whereas medium and high intensities were similar. High. Intervention plants came to harvest with a leaf-area index from 4.9 (high vigor) to 4 (low vigor); the secondary leaf-area index was higher than the primary in the light intensities were not clear indicator of the light microenvironment and the best relation between them occurs in shaded environments. The chlorophyll concentration in four levels of leaves did not show significant differences; nevertheless, when compared with light offer, a directly proportional tendency appeared. In both sectors, fruit quality indicators showed that high intervention produced greater content of sugar in fruits (15.32 and 16 ° Brix) and greater relation soluble solids (26.3 and 33.31), whereas the content of dry matters did not change. In the high vigor, acidity of de fruit is inversely proportional to the intensity of intervention (0.61- 0.55 – 0.48 g tartaric ac per 100 ml). The size was not influenced by the intervention, while the number of bunches of green color is higher in low-intervention plants in high-vigor sector. Finally, the lignification and fertility of buds were not affected by the different intensities of elimination of early shoots.

1

2. INTRODUCCIÓN

El sistema de conducción horizontal conocido como parrón español, es generalizado en la

producción de vides para uva de mesa en Chile. Este se acomoda al hábito de sus brotes

(primarios y anticipados) que tienden a colgar. Esta situación crea una copa compacta

que favorece el sombreamiento al interior del dosel y obliga a intervenir el follaje para

mejorar su iluminación (Gil, 2000).

Tanto el número como las características de las intervenciones en verde, juegan un papel

fundamental en el desarrollo de la planta y en la calidad de la fruta, sin embargo labores

como desbrote (primer ajuste de carga), eliminación de brotes anticipados y deshojes se

hacen casi en forma intuitiva, según una apreciación visual de la luz al interior del dosel

(Pérez, 1994a).

Para caracterizar la expresión del área foliar en el dosel, han sido utilizados el número de

capas de hojas y el índice de área foliar.

El microclima ó clima del dosel (Smart, 1985), depende básicamente de la cantidad y

distribución del área foliar en un volumen dado ó como lo expresa Gil (2000), la

distribución de luz en el interior de la copa depende de la densidad del follaje (índice de

área foliar del árbol), de la orientación y forma de las hojas, del viento, de la posición con

respecto al sol, de la transmisión de la luz a través de cada hoja y de la luz difusa, por lo

que todo aquello afecta a la fotosíntesis total, a lo cual se agregan las diferentes edades

de las hojas y su condición. La radiación luminosa ocupa una pequeña franja del espectro,

que va desde 400 a 700 nm y se sitúa entre las radiaciones ultravioletas y las infrarroja y

constituyen la llamada radiación fotosintéticamente activa (PAR en inglés) (De Las Rivas,

2000).

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La diferencia de luminosidad que llega a los distintos niveles de hojas, influye

directamente en la morfofisiología de la hoja afectando el grosor de la lámina y la cantidad

de pigmento fotosintético. Es decir que la planta se adapta y emplea mecanismos que

mejoran tanto la absorción como la utilización de la luz en determinadas condiciones.

Variados son los efectos de la falta de luz bajo el dosel, manifestados tanto en la

morfología como en la fisiología de la planta. Se ha demostrado que el sombreamiento,

por debajo del punto de compensación, produce bayas con un menor calibre, con un

menor contenido de sólidos solubles, con un color verde traslucido y una apariencia débil

(Cifuentes, 1985). La carga de uva que una parra puede llevar a madurez con máxima

calidad está relacionada con la superficie foliar efectivamente iluminada, lo que se suele

expresar en cm2 ó número de hojas por gramo de fruta, por baya o por racimo. Diversos

trabajos han demostrado que la relación óptima está entre 8 a 10 cm2 de hoja por gramo

de fruta de calidad.

En general las plantas vigorosas son más fértiles que las plantas débiles, solo en caso de

vigores exagerados puede verse disminuida. La fertilidad de yemas se reduce por la falta

de luz, aumenta la necrosis de yemas y se manifiestan desordenes fisiológicos asociados

al sombreamiento de yemas.

Contreras (1995) señala que tanto el vigor como la capacidad son afectados directamente

por el medio ambiente, sistemas de conducción y manejos del dosel, así como también

por prácticas culturales realizadas durante el desarrollo del cultivo. Si se reduce el número

de brotes/unidad de longitud del dosel y/o el vigor de los brotes, generalmente mejorará el

microclima luminoso dentro del dosel.

No existen antecedentes del efecto de la eliminación de brotes anticipados, en el cv.

Superior seedless, por ello se hace necesario un estudio de éstos para lograr mejorar el

manejo del follaje de ésta variedad en condiciones determinadas.

3

Hipótesis: Al aplicar distintas tasas de eliminación de brotes anticipados, existirán

diferentes efectos sobre la expresión del área foliar, el microclíma lumínico, concentración

de clorofila, calidad de la fruta, lignificación y fertilidad de yemas del cv. Superior

seedless, en sectores de distinto vigor.

Objetivo general: establecer parámetros que indiquen la mejor forma de abordar el

manejo del dosel frente a situaciones de diferencia de vigor.

Los objetivos específicos son:

1. Determinar los efectos de la intensidad de eliminación de brotes anticipados sobre

la expresión del área foliar y microambiente lumínico durante el período de

desarrollo vegetativo.

2. Correlacionar la intensidad lumínica con la radiación fotosintéticamente activa

incidente bajo el dosel, durante el período de desarrollo vegetativo.

3. Determinar el contenido de clorofila de las hojas, según los diferentes niveles de

hojas y su relación con la oferta lumínica en el interior del dosel.

4. Determinar los efectos de la intensidad de eliminación de brotes anticipados sobre

la calidad de la fruta del cv. Superior seedless.

5. Determinar los efectos de la intensidad de eliminación de brotes anticipados sobre

la lignificación y fertilidad de yemas.

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3. REVISIÓN BIBLIOGRÁFICA

3.1. Desarrollo del brote de la vid:

La vid posee yemas invernantes laterales en sarmientos de un año, compuesta de varias

yemas bajo el mismo grupo de escamas. La yema central primaria puede ser mixta y

originar un brote que porta, hacia la base, una a tres panículas ramificadas (comúnmente

llamados racimos) laterales opuestos a una hoja ubicados según el grado de fertilidad;

más hacia arriba en el brote se encuentran zarcillos opuestos a hojas que son pedúnculos

de inflorescencias incompletamente desarrolladas. La yemas secundarias de la yema

compuesta pueden ser mixtas en algunas variedades, pero de menos inflorescencias y

menos flores (Gil, 2000).

Al finalizar el período de receso invernal, los brotes primarios crecen a expensas de las

reservas de las raíces, tronco, brazos principales y secundarios y prontamente deben

hacerse autosuficientes a través del aporte de fotosintatos de las hojas las que sólo son

exportadoras cuando sobrepasan el 50% de su tamaño final. Cuando existen tres a cuatro

hojas exportadoras, la basal exporta basipétalamente hacia el sarmiento, estableciéndose

así un movimiento bidireccional y cuando el brote tiene 10 hojas, se torna autosuficiente.

Durante el período de cuaja a pinta, las hojas más basales alimentan al sarmiento y en

forma creciente a los racimos, que al momento de tener bayas sobre 10 mm, la punta del

brote se torna competidora con el racimo, ésta es favorecida por el despunte ó inhibición

del ápice. Al acercarse la madurez el mayor aporte al racimo proviene de las hojas

centroterminales más nuevas (Gil, 2000).

Los brotes se constituyen en unidad productiva cuando son autosuficientes. Esto depende

de la condiciones que determinan el número y tamaño de racimos y el vigor de los brotes

con hojas siempre bien iluminadas, con recambio durante la maduración de la uva de las

5

primarias basales más viejas por otras mas nuevas apicales y anticipados a lo largo de

éste.

Smart y Robinson (1991) mencionan que existen dos períodos de máximo crecimiento

vegetativo; uno cercano a floración y otro cercano a cosecha.

La fructificación y el primer crecimiento del racimo son muy sensibles a la competencia del

ápice del brotes; de hecho, pueden existir fallas o corrimientos en los racimos de brotes

muy vigorosos y aumento de bayas cuajadas por eliminación del ápice (pellizco o

chapoda).

3.2. Manejo del dosel y desarrollo vegetativo.

Una vez formada la planta, las intervenciones se inician en la brotación (Rosés, 2000),

eliminando brotes primarios mal ubicados, débiles o que superan el número necesario

para la producción deseada. Posteriormente le siguen raleos de anticipados, deshojes y

despuntes. El deshoje afecta directamente la relación hoja: fruta (Vargas et al., 2002), por

ello todas estas intervenciones deben guardar el justo equilibrio para no alterar el normal

desarrollo de la planta y su capacidad para producir fruta de calidad ya que muchas veces

las plantas son intervenidas con prácticas agronómicas que las terminan estresando.

Estas intervenciones pueden atentar contra el normal desarrollo de la planta, al limitar el

crecimiento radical e impedir un adecuado crecimiento vegetativo y además afectar a los

frutos proyectados (Frías, 2003).

Por su parte Candolfi-Vasconcelos y Koblet (1990), mencionan la extraordinaria

capacidad de las vides para compensar la disminución del área foliar, incrementando la

producción de brotes laterales, o la eficiencia foliar.

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El crecimiento vegetativo es la principal actividad de los árboles, el que está relacionado

entre otros con el vigor de la planta, por lo que la preocupación y los esfuerzos, se

orientan a la obtención de un crecimiento equilibrado (Razeto, 1999).

3.3. Intercepción de luz en el huerto.

El parrón español, a pesar de ser un sistema de conducción, capaz de interceptar un alto

porcentaje de luz incidente, posee una deficiente distribución de ella en su interior

(Montenegro, 1983). Mientras más interna se encuentre una hoja, menos es la luz directa

que recibe, ellas absorben hasta un 16% de la luz transmitida por las hojas soleadas y

hasta un 80% de la luz difusa de la atmósfera y de la directa que pase por espacios libres

entre hojas exteriores. Las hojas son la principal causa del sombreamiento del dosel y

determinan la distribución de la luz en su interior (Smart y Robinson, 1991).

El órgano encargado de captar la luz es la hoja, ésta en buenas condiciones es capaz de

absorber entre un 85-90 % de la luz recibida, permitiendo que solo una pequeña porción

sea reflejada (5-10%) o la atraviese sin ser aprovechada (transmitida 5%). De este modo

las hojas exteriores son las que hacen la mayor contribución a la fotosíntesis. Por lo tanto

una capa de hojas en la superficie o periferia, puede llegar a hacer que la siguiente capa

de hojas en profundidad sea incapaz de generar fotosíntesis, ya que recibe menos luz que

lo requerido (Frias, 2003). Estudios realizados en vides indican que bajo la tercera capa

de hojas, éstas se encontrarían en el punto de compensación, es decir en una condición

de menor asimilación de CO2 (Pacheco, 2003), pero según Gil (2000) dicho punto estaría

por debajo de la cuarta capa.

En términos de radiación Agustí (2004), señala que cuando ésta incide sobre un árbol,

interacciona con él, siendo absorbida, dispersada y transmitida, a través de la copa.

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El máximo potencial productivo que puede alcanzar un huerto, depende de la fotosíntesis

máxima, la cual a su vez depende de que toda la superficie foliar se encuentre expuesta a

la luz óptima por mayor tiempo posible. En esto hay dos hechos adicionales involucrados,

uno es la intercepción de luz y el otro la distribución de ésta en el follaje (Gil, 2000). Un

huerto optimiza su captación de radiación en la medida que cubre toda la superficie. La

optimización requiere, además que la máxima intercepción ocurra prontamente después

de la plantación; la densidad de plantación y el vigor inicial de las plantas cobra entonces,

especial importancia. Si el follaje es sólido o continuo, sin espacios entre hojas ni

movimientos por aire, la primera capa de hojas está saturada y absorbe el 80% de la luz

incidente. La segunda capa de hojas recibe el 10% que trasmite la primera capa y

absorbe el 8% para dar una fotosíntesis neta positiva cercana al 40%. La tercera capa de

hojas recibe sólo el 1% de la luz y absorbe el 0,8%, se encuentra en el punto de

compensación y no es un aporte para la planta. En una condición natural la hoja inútil

pasa a ser la cuarta u otra de mayor profundidad (Gil, 2000).

Un día de sol proporciona al aire libre unos 2000 μmol * m-2 *s-1, en potencia unos 1000 W

/m2 (De Las Rivas, 2000) y en general se estima que en frutales una intensidad lumínica

que va de 500 a 800 micromoles de fotones por segundo por metro cuadrado de hoja

(equivalente a un 25-30% de la plena luz solar) es el punto sobre el cual la fotosíntesis se

estabiliza en un nivel máximo y por debajo del cual ella empieza a disminuir. Cuando la

intensidad baja de 50 μmol * m-2 *s-1, la hoja se torna parásita.

La falta de luz, según Razeto (1999), no afecta con igual intensidad a todos los huertos,

ya que tiende a ser mayor en climas de baja luminosidad, en variedades de crecimiento

vigoroso o suelos muy fértiles donde los árboles tienden a crecer mucho. Así como la falta

de luz es perjudicial para la plantas, un exceso también puede afectarlas, ya que cuando

la intensidad luminosa aumenta por sobre el punto de saturación de luz, las plantas

experimentan un estrés, debido a que las clorofilas presentes en las antenas de los

fotosistemas absorben más energía que la requerida para la fotosíntesis, produciéndose

la llamada fotoinhibición (De Las Rivas, 2000).

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3.4. Contenido de clorofila en la hoja

La clorofila es el pigmento fotosintético más importante, ya que es la biomolécula

cromófora que interviene más directamente en el proceso de absorción y conversión de la

energía luminosa, por su parte la hoja es el órgano que agrupa la mayor cantidad de tejido

fotosintético (De Las Rivas, 2000). Los mismos autores al referirse al condicionamiento de

las características de las hojas según el régimen de radiación, señalan que el ambiente

luminoso al que se encuentran expuestas las plantas afecta a su crecimiento y desarrollo

y determina su morfología foliar y fisiología. Las hojas que crecen en condiciones de

sombra, son más grandes, con poca densidad de estomas, parénquima esponjoso y en

empalizada finos, cloroplastos grandes con gran número de tilacoides apilados.

El contenido de clorofila es un estimador de la fotosíntesis, aunque es difícil establecer

una correlación entre fotosíntesis neta y contenido de clorofila o de nitrógeno en hojas,

porque en condiciones de campo la fotosíntesis fluctúa durante el día, mientras que los

contenidos de clorofila y nitrógeno permanecen prácticamente estables.

3.5. Microclima lumínico y calidad de la fruta

Con la madurez aumentan los niveles de azúcar en la fruta (glucosa y fructosa),

disminuye la acidez, por la menor concentración de ácido tartárico, que constituye el ácido

más importante en la uva. Las uvas corresponden a frutos no climatéricos, ello implica

que la fruta no evolucionará en sus parámetros de madurez y contenido de azúcar una

vez que haya sido cosechada. Es decir que la uva sólo puede cosecharse una vez

alcanzado un estado de madurez que permita su consumo y que implica un mínimo

contenido de azúcares, también se considera el nivel de ácidos, de manera de establecer

una relación entre ellos como requisito de madurez.

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En los frutos maduros, los sólidos solubles tienen importancia por estar formados de

compuestos orgánicos que, en gran medida, determinan el sabor, color y la calidad de la

fruta. Además, pueden ser utilizados como indicadores de maduración. Según Muñoz y

Lobato (2000) la cosecha en el cv. Superior seedless se realiza con un contenido de

azúcar entre 16 y 16.5 grados Brix, lo que ocurre en la provincia de Aconcagua la

segunda semana de Enero. Los sólidos solubles son influenciados por algunos factores

externos, entre los cuales destacan la temperatura y la luminosidad, siendo esta última

afectada por la densidad de brotes (Vargas et al., 2002). La luz, percibida por el

fotocromo, altera el desarrollo de la uva según el momento. En sombra durante la etapa I,

el crecimiento se reduce, como también la acumulación de sólidos solubles y

antocianinas, en cambio en la etapa III afecta la acumulación de fenoles y antocianinas

(Gil, 2000).

Gaete y Pérez (1986), señalan que vides con excesivo sombreamiento, deteriora la

calidad de la uva. Smart (1985) señala que se ha identificado que el sombreamiento es el

factor más importante en reducir las producciones y la calidad de la uva.

Ensayos realizados por Gaete y Pérez (1986), concluyen que plantas sombreadas (52, 25

y 14% de luz) presentaron frutas con menor grado Brix que aquellas crecidas a 100% de

luz. La acidez no presentó diferencias , en tanto que la relación sólidos solubles acidez

presentó una tendencia a disminuir a medida que disminuye el porcentaje de luz. Muñoz

et al., (2002) pudo inferir de sus resultados que la mayor exposición del follaje a la

sombra, afectan negativamente la acumulación de azúcar en las bayas, esto lo confirma

Pérez, Peppi y Larrain (1998), al estudiar dos niveles de luminosidad y sus efectos en la

calidad de la fruta, al encontrar una diferencia de 2.6 ºBrix más en el tratamiento de luz

que en el de sombra.

Muñoz et al. (2002), señalan que racimos que crecen con una mayor exposición solar

presentan menor acidez total, explicadas por un menor tenor de ácido málico. Sin

embargo Pérez, Peppi y Larrain (1998), ni Muñoz et al. (2002) encontraron diferencias en

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el contenido de ácidos en la fruta dado los diferentes niveles de iluminación, por lo que

ésta diferencia fue atribuida a la acumulación de ácidos. En cambio Gaete y Pérez (1986)

señalan que las similitudes en el contenido de ácidos podrían deberse a una redistribución

activa de los ácidos orgánicos dentro de cada planta, para mantener el equilibrio interno.

Al conjugar los sólidos solubles con la acidez, Gaete y Pérez (1986), mencionan que la

relación sólidos solubles / acidez es quizás el mejor y más seguro índice de madurez y

que ésta varía según la variedad y la zona.

El color resulta ser un parámetro importante de tipo sensorial visual y sobre el cual el

mercado ha sido muy exigente, Muñoz y Lobato (2000), describen al cv. Superior

seedless como una variedad de piel verde amarillenta, por ello el desarrollo de colores

dorados en esta variedad, es considerado como un efecto nocivo de la prolongada

exposición de la fruta a la radiación solar, es este argumento el que ha llevado a muchos

agricultores a favorecer densidades altas de follaje, con el fin de obtener un color más

verde en las bayas (Razeto, 1999).

En el calibre, la incidencia de la luz también juega un rol fundamental, ya que cualquier

factor que altere la capacidad fotosintética de las hojas, determinará un menor crecimiento

en los frutos (Razeto, 1999), diversos autores señalan la importancia de la luz en la

expresión del volumen final de la fruta, al respecto Gaete y Pérez (1986) evidencian un

mayor calibre en plantas con mayor iluminación.

Otros investigadores mencionan que la materia seca es un indicador que expresa la

eficiencia fotosintética con que trabaja una planta y su máxima capacidad para almacenar

carbohidratos.

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3.6. Lignificación

La lignificación, es la deposición de lignina en la membrana celular, al respecto algunos

investigadores mencionan que la rapidez y eficiencia con que este proceso se desarrolle

en las yemas antes del período de receso, es vital para la supervivencia del brote,

protegiendo los tejidos de las bajas temperaturas invernales. El cv. Superior seedless es

particularmente sensible a las bajas temperaturas, por lo que se recomienda que éste

tenga una buena lignificación de sus cargadores antes de podar.

3.7. Fertilidad de yemas

La vid es una de las especies que requiere más iluminación directa sobre sus yemas para

conseguir una buena inducción floral y por ende un índice de fertilidad satisfactorio, dicho

índice de fertilidad de yemas es mejor cuando en la poda se dejan como cargadores los

sarmientos que han crecido expuestos a la luz (Muñoz, 2000), el mismo autor señala que

de acuerdo a sus resultados, la luz es un factor determinante en la fertilidad de yemas en

el cultivar Superior seedless. Gil-Albert (1992) también señala que la falta de luz afecta la

inducción y diferenciación floral, en razón al bajo nivel de carbohidratos acumulados y la

propia floración y fructificación posterior.

La incidencia de la luz en la fertilidad de las yemas ya era señalada por Buttrose (1968),

quién dice que el número y el tamaño de los primordios de inflorescencia aumentan con la

intensidad de la luz, lo que tiene efectos en la producción.

Martines de Todá (1991), expresa que plantas que crecen a la sombra disminuyen el

número de inflorescencias. Por lo tanto, la producción es función directa, entre otros

factores, del número de yemas fértiles que crecen sobre brotes capaces de sustentar fruta

de calidad y de la relación vigor / capacidad que tenga un cultivo.

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Para que ocurra la inducción y desarrollo de inflorescencias la temperatura debe ser alta.

La intensidad y la suma de luz son requisitos importantes para las mismas etapas que la

temperatura, además una buena nutrición permite la mejor expresión de la inducción y

desarrollo floral, tanto el agua como los minerales cumplen una función adecuada si

mantienen el crecimiento de la planta equilibrado, el nitrógeno no debe ser deficiente,

pero tampoco excesivo (Gil, 2000).

3.8. Evaluación del dosel

3.8.1 Evaluación cuantitativa

Existe una serie de formas para estimar la densidad del dosel, como el índice de área

foliar (IAF), que es la razón entre el área de la superficie de las hojas y el área de suelo

asignado a la planta. Según Pavez (1996), en viñedos débiles la densidad del dosel tiene

pocos cambios entre cuaja y cosecha, mientras que en vigorosos puede aumentar a más

del doble. Por otro lado viñedos con IAF menor que 2,8 se pueden clasificar como de bajo

vigor, y los que tienen IAF superiores a 5,5 como vigorosos. Por otra parte Gil (2000)

expresa que el índice de área foliar óptimo a cosecha en vides conducidas en parrón

español es 4. Para sistemas horizontales, también se encuentra el número de capas de

hojas (NCH), el que simula un rayo de luz que atraviesa el follaje, utilizando para ello un

alambre que se hace pasar a través de una regla con agujeros, pudiendo no solo dar una

apreciación de la densidad del dosel, sino también de la distribución de las hojas en el

espacio (Smart y Robinson, 1991). Smart (1985) menciona que un número de capas de

hojas óptimo es tres.

13

4. MATERIAL Y MÉTODO

4.1. Lugar del experimento

Los sectores estudiados se encuentran en las parcelas Nº 33, 34 y 35, pertenecientes a la

Inmobiliaria La Fortuna S.A. en la localidad de Ñilhue, comuna de Catemu, V región.

4.1.1. Selección de los sitios

De las 50 ha del predio, 3,8 están plantadas desde el año 2000 con la variedad Superior

seedless, conducidas en el sistema de parronal español, regadas por goteo en un marco

de plantación de 3 x 3 m.

La segunda semana de julio de 2004 se hizo un muestreo de todo el cuartel para

caracterizar los sitios según el vigor de sus cargadores. Cada 10 plantas y 10 hileras se

tomó una planta, a la cual se midió el diámetro basal de los cuatro cargadores medios de

los brazos principales. Arbitrariamente, se estableció que el sector de menor vigor (bajo),

fué aquel que presentó diámetros iguales o inferiores a 1,3 cm y el sector de mayor vigor

(alto), presentó diámetros iguales o superiores a 1,5 cm (ver Anexo 17). Con el desarrollo

del ensayo se reconoció que se estuvo frente a dos sectores de distinto vigor (alto y bajo),

pero siempre dentro de un sector vigoroso.

4.2. Tratamientos

To (baja intervención): Se eliminaron todos los brotes anticipados de los brotes primarios

14

de todas las unidades muestreales (U.M) desde la base, hasta dos yemas después del

racimo. No se volvieron a eliminar brotes anticipados y los brotes primarios se dejaron

crecer hasta una longitud de 1,2 m. , largo en el cual se hizo un tipping (pellizco del ápice

del brote primario) progresivo a todos los brotes primarios que alcanzaban esta longitud

(ver Anexo 18).

T1 (intervención media): Se eliminaron todos los brotes anticipados de los brotes

primarios de todas las U.M., desde la base hasta dos yemas después del racimo, en el

mismo tiempo que To. Se esperó que crecieran lo suficiente para volver a eliminar brotes

anticipados hasta la sexta yema después del racimo. No se volvieron a eliminar brotes

anticipados y los brotes primarios se dejaron crecer hasta una longitud de 1,2 m. , largo

en el cual se hizo un tipping progresivo a todos los brotes primarios que alcanzaron ésta

longitud.

T2 (alta intervención): Se eliminaron todos los brotes anticipados de los brotes primarios

de todas las U.M., desde la base hasta 2 yemas después del racimo, en el mismo tiempo

que To. Se esperó que crecieran lo suficiente para volver a eliminar brotes anticipados

hasta la 6ª yema después del racimo en el mismo tiempo que T1. Se esperó que creciera

lo suficiente para eliminar brotes anticipados hasta la 10ª yema después del racimo. No se

volvieron a eliminar brotes anticipados y los brotes primarios se dejaron crecer hasta una

longitud de 1,2 m. , largo en el cual se hizo un tipping progresivo a todos los brotes

primarios que alcanzaron ésta longitud. Para todos los tratamientos, no se permitió la

influencia de brotes laterales de otras plantas no involucradas en las mediciones.

4.3. Diseño experimental

Modelo aleatorio simple a dos factores (vigores), con tres niveles (tratamientos).

15

4.4. Métodos de medición

4.4.1. Expresiones del área foliar

4.4.1.1. Índice de área foliar ( I.A.F.)

El índice de área foliar (IAF), es la razón entre la superficie total del follaje de la planta y

la superficie de suelo asignada a ella. La obtención de este índice se hizo confeccionando

plantillas de cartulina, con los distintos tipos de hojas presentes en un determinado brote

(primario o anticipado) en el tiempo, calculando por medio de una relación peso / área, se

determinaron las áreas por metro lineal de cada brote. Cada área se multiplicó por el

número de brotes de una determinada longitud que poseía cada planta asociada a la

medición. Cabe señalar que los brotes originales se obtuvieron de plantas no involucradas

en la medición. El área foliar total fue la sumatoria de las áreas foliares de hojas primaria y

hojas de anticipados.

4.4.1.2. Método del número de capas de hojas (NCH) de Smart

Como método indirecto de estimación de densidad foliar, el NCH se obtuvo mediante una

modificación de método propuesto por Smart (1987), excluyendo racimo y brotes.

Consiste en el uso de una regleta con orificios espaciados cada 10 cm. Por los orificios se

pasó un alambre acerado recto de 2 mm, de un metro de longitud y se contó el número

de hojas que toca la punta del alambre en forma vertical. La regleta fue colocada

perpendicular al tronco de la planta, a una altura de 1,6 m, en forma paralela al alambrado

y en dirección hacia el centro de las cuatro plantas involucradas en la medición, ver Anexo

14. El número de capas de hojas fue el total de hojas interceptadas, divididas por el

número de veces en que se tocó la primera hoja con la punta del alambre.

16

4.4.2. Mediciones de luz

4.4.2.1. Radiación fotosintéticamente activa (RFA)

Para realizar esta medición se subdividió la superficie comprendida entre cuatro plantas

(9m2) en nueve cuadrantes, siendo los cuadrantes esquineros los denominados A, B los

cuadrantes medios y C para el cuadrante del centro ( ver Anexo 15). La Radiación

fotosintéticamente activa se midió directamente con fotómetro marca Li- Cor, model Li-

1400), y se expresó en términos de promedio del porcentaje de la radiación

fotosintéticamente activa incidente bajo el dosel, respecto a la radiación

fotosintéticamente activa incidente en el camino a un costado del parrón. El sensor se

colocó a una distancia de 1m bajo el alambrado, se tomaron 10 lecturas por cuadrante, de

ellas se registraron los cuatro valores ubicados entre el percentil 25 al 75 de cada

cuadrante. Estas mediciones se hicieron entre las 12.00 y 14:00 h en días despejados.

Cuando las condiciones lumínicas ambientales cambiaron durante la medición, fue

necesario medir nuevamente en el camino a un costado del parrón, de tal manera que el

porcentaje de radiación fotosintéticamente activa incidente bajo el dosel correspondiera a

la oferta lumínica real del momento.

4.4.2.2. Intensidad lumínica

La intensidad lumínica se midió indirectamente con el método del cuadrante, conocido

también como malla de puntos, que consiste en un paño de polipropileno, con las

dimensiones del marco de plantación (9 m2) y con puntos impresos a 10 cm de distancia

uno del otro. De este método se obtuvo el porcentaje total de área iluminada ó Índice

lumínico (I.L.) y el porcentaje de área iluminada de cada cuadrante, siendo éste último el

promedio del área iluminada de los cuadrantes esquineros de la malla (A), los cuadrantes

medios (B) y el cuadrante central (C). El registro en terreno se hizo anotando la sumatoria

en cada cuadrante de los puntos iluminados. bajo un sistema binario. (1= punto iluminado,

17

es decir luz no interceptada y 0= punto sombreado, es decir luz interceptada). Cabe

señalar que durante la postura de la malla, esta debe coincidir con la sombra proyectada

de los cuadrantes involucrados en la medición, ver anexo 15. Estas mediciones se

hicieron entre las 12.00 y 14.00 h en días despejados. El valor entregado en éste trabajo

corresponde en cada tratamiento, al promedio total de los cuadrantes A, B y C de cada

repetición.

4.4.3. Correlación entre el índice de intensidad lumínica y el porcentaje de Radiación

Fotosintéticamente Activa incidente bajo el dosel.

Para cada tratamiento y nivel de vigor del sector, se correlacionó la radiación

fotosintéticamente activa con el índice de intensidad lumínica.

4.4.4. Calidad de la fruta

4.4.4.1. Sólidos solubles

Al comienzo y final de la cosecha se tomaron tres racimos al azar por tratamiento y

repetición, a cada uno de ellos se extrajeron 150 g de fruta tomadas al azar del hombro,

centro y cola del racimo, luego se maceraron y se tomó una pequeña alícuota, que fue

colocada en el refractómetro. Se utilizó un refractómetro con las siguientes características:

Marca: ATAGO, modelo ATC-1E, termocompensado, con rango de 0.0 a 32%.

18

4.4.4.2. Acidez titulable

De la misma muestra macerada en la medición de los sólidos solubles, se extrajeron 25

ml de jugo, que fué analizado bajo el método de neutralización de ácidos con una base.

En un vaso precipitado se colocaron 25 ml de jugo de uva filtrado, luego se agregaron dos

a tres gotas de fenoftaleína al 1 %, como indicador. Se colocó el vaso precipitado bajo la

llave de una bureta con 50 ml de NaOH 0,1 N y se abrió la llave dejando escurrir el NaOH,

hasta que neutralizar el ácido presente en la solución, momento en el cual el pH cambió

de ácido a básico y la fenoftaleina cambió a un color levemente rosado producto del

nuevo ambiente en el que se encuentra, luego se anotó el gasto de NaOH y se procede a

procesar este dato en la siguiente fórmula:

Gramos de ácido tartárico/ 100 ml =(gasto de NaOH (ml) x concentración de Na OH

(0,1 N) x 0,075 x 100) / volumen de muestra (ml)

4.4.4.3. Relación sólidos solubles / acidez

Mediante división entre sólidos solubles respecto a la acidez se obtuvo esta relación,

expresada en valores absolutos.

4.4.4.4. Materia seca

Al comienzo y final de la cosecha, se tomaron nueve racimos por tratamiento, a los que

se les extrajeron aproximadamente 50 g, de fruta tomadas del hombro, centro y cola del

racimo, colocándolas en pocillos de aluminio debidamente identificados. Luego fueron

deshidratados en hornos a 90 ºC, durante 48 h pesándolos antes y después de

introducirlos. Se promediaron las muestras de los mismos tratamientos en las diferentes

19

fechas de medición y ésta se expresó como porcentaje del peso de la materia seca en

relación al peso total de la muestra fresca.

4.4.4.5. Diámetro ecuatorial

Según lo determinó la distribución de calibres hecha en packing a la totalidad de la fruta

exportable de cada tratamiento y repetición. Los calibres fueron los siguientes: “A” mayor

a 19 mm, “B” entre 17.5 y 18.9 mm y “C” menor que 17.5 mm. medidos con set de

argollas metálicas (calibrómetro). Se registró el número de racimos por tratamiento

pertenecientes a cada uno de los rangos descritos.

4.4.4.6. Color

Mediante apreciación visual comparativa con tabla Munsell, Color charts for plant tissues,

se clasificó el color en tres niveles; verde que corresponde al rango descrito por la serie

7.5 GY 7/6 al 7/10 y 7.5 GY 6/6 al 6/9, crema correspondiente a 5 GY 7/6 y 2.5 GY 8/6, y

amarillo correspondiente a 5Y 8/6 . Al ser cosechados se midió esta variable a todos los

racimos de cada tratamiento y se registró en términos de número de racimos de un color

determinado.

4.4.5. Lignificación

Para medir lignificación se tomaron en cada tratamiento cuatro cargadores, que

corresponden al cargador central, ubicado sobre el lateral medio del brazo de la sobre

hilera. Se utilizó una lupa común para ver la yema lignificada y su posición en el

cargador, siendo una yema lignificada, aquella que no presentó puntas verdes.

20

4.4.6. Fertilidad

Para analizar fertilidad de yemas se tomaron para cada tratamiento y sector de vigor,

cuatro cargadores, que corresponden al cargador central, ubicado sobre el lateral medio

del brazo de la sobre hilera (ver Anexo 16). De ellos se analizaron las 15 primeras yemas

de cada cargador, cuando éstas por razones de largo del cargador no se presentaron se

consideraron muertas. Luego se tomó el cargador procediendo a seccionarlo en trozos de

siete centímetros de largo, dejando la yema al centro de ellos, posteriormente se vuelve a

cortar el trozo a un centímetro bajo la yema, durante éste proceso se cuidó el orden de los

trozos para que correspondan a su jerarquía original. Con un bisturí se realizaron cortes

finos desde la punta de la yema primaria hacia el interior para luego analizarlos bajo lupa

estereoscópica.

4.4.7. Clorofila

Para hacer ésta medición se estratificó el dosel en niveles ó capas de hojas, siendo la

primera, aquella más expuesta a la luz directa. Se midió el contenido de clorofila total de

la 1ª, 2ª, 3ª y 4ª capa de hojas y la oferta lumínica que reciben éstas durante la cosecha.

Las muestras fueron analizadas en laboratorio donde se midió el contenido de clorofila

total en μg. de clorofila por ml, de la siguiente manera:

1) Moler la muestra (300 mg de hoja) con nitrógeno líquido y luego molinillo.

2) Cubrir con papel aluminio los frascos y sus correspondientes tapas para realizar el

análisis.

3) Pesar 300 mg en cada frasco.

4) Añadir tres ml de N,N-Dimethylformamide (DMF), tapar y agitar. Agitar la mayor

cantidad de veces posible durante el ensayo (cuatro o cinco), procurando que no

queden restos en las paredes del frasco.

5) Llevar a la nevera del refrigerador y mantener entre 24 a 48 horas.

21

6) Sacar de la nevera, centrifugar los tubos cinco minutos a unas 4000g, extraer el

sobrenadante y mantener 30 minutos las muestras a temperatura ambiente antes

de medir en espectrofotómetro.

7) Medir cada muestra a dos longitudes de onda: 647 y 664. Antes de cada longitud

hacer un blanco (cubeta con DMF puro). Entre longitudes mantener la muestra

protegida de la luz.

8) El cálculo de las clorofilas se realizó aplicando las siguientes fórmulas:

Ca= 12.64 A664 – 2.99 A647 (μg/ml)

Cb= -5.6 A664 + 23.26 A647 (μg/ml)

CT = 7.04 A664+ 20.27 A647 (μg/ml) (valor utilizado en este estudio)

4.5. Confección de tabla para el análisis del porcentaje de radiación fotosintéticamente

activa incidente al interior del dosel.

Para una mejor comprensión del efecto de la falta de luz al interior del dosel, se

confeccionó el Cuadro 12 (ver anexo 5), en base a los datos aportados por la radiación

fotosintéticamente activa que llega a desde la primera a la cuarta capa de hojas, así se

tradujo esta información al porcentaje de radiación fotosintéticamente activa que llega a

cada capa de hoja.

22

5. RESULTADOS Y DISCUSIÓN

5.1. Densidad del dosel

5.1.1. Número capas de hojas (NCH):

CUADRO1. Efecto de la intensidad de eliminación de brotes anticipados, sobre el número de capas de hojas promedio resultante, en las distintas fechas de medición, en sectores de distinto vigor, durante el período de crecimiento vegetativo y frutal del la vid (cv. Superior seedless).

Intensidad de eliminación de brotes anticipados

Baja Media Alta

Fecha de Medición Vigor Número de capas de hojas

Alto 1,19b 1,52a 1,33ab 1 (19/Oct/04)

Bajo 0,89b 1,22a 1,02ab

Alto 1,66a 1,63a 1,63a 2 (9/Nov/04)

Bajo 1,44a 1,39a 1,35a

Alto 2,36a 1,86b 1,93b 3 (29/Nov/04)

Bajo 1,77a 1,55a 1,57a

Alto 2,79a 2,25b 2,23b 4 (18/Dic/04)

Bajo 2,06a 1,74b 1,78ab

Alto 3,32a 2,81b 2,66b

5 (7/Ene/05)

Bajo 2,35a 2,10a 2,08a

Promedios seguidos de igual letra en las filas no difieren significativamente (P= 0.05), según prueba de LSD.

23

A partir del 29 de Noviembre se manifiestó el desarrollo de diferencias significativas, en el

sector de alto vigor, en donde el tratamiento de baja intervención presentó número de

capas de hojas superior a los tratamientos de media y alta intervención, lo que no ocurrió

en el sector de bajo vigor.

Por otro lado en el sector de alto como en el de bajo vigor, no existieron diferencias

significativas entre los tratamientos de media y alta intervención en ninguna de las fechas

de medición.

En condiciones de vides vigorosas, el crecimiento de los brotes puede continuar hasta

después de cosecha (Smart y Robinson, 1991), sin embargo en este ensayo el

crecimiento fue limitado despuntando el brote, lo que favoreció el crecimiento de

anticipados, mayoritariamente en el sector de alto vigor, lo que pudo influir en el mayor

número de capas de hojas del tratamiento de baja intensidad de un 18% y 24% más que

los de media y alta respectivamente en cosecha. Este efecto fue menor en el sector de

bajo vigor.

Como lo señala Candolfi-Vasconcelos y Koblet (1990), la vid tiene gran capacidad para

compensar follaje y esta pude ser la causa de las similitudes encontradas cuando se

eliminan anticipados hasta seis (intensidad media) y diez (alta) yemas sobre el racimo en

los sectores de distinto vigor, brotando yemas laterales después de aplicar los

tratamientos.

Por otra parte los valores registrados el 7 de enero, en los distintos sectores de vigor, se

encuentran dentro de los rangos descritos por Dokoozlian y Kliewer (1995b), quienes

señalan rangos entre uno y cuatro capas de hojas, dependiendo de la densidad del dosel.

24

Los niveles de hojas de un parrón no solo se relacionan al desarrollo del dosel, sino que a

la condición lumínica en que se encuentra, por ello Pacheco (2003) señala que el

ambiente lumínico en las distintas capas de hojas del parrón varía en función del IAF, así

la frecuencia, intensidad y duración de la iluminación decrece hasta ser mínima en las

hojas de los brotes que sostienen al racimo.

Por último, la pérdida de la verticalidad de los brotes es fundamental en la medición y

correcta interpretación de los resultados entregados por éste método, en este ensayo esta

situación se presentó a partir de la última semana de Noviembre, como lo muestra la

fotografía del anexo 13.

5.1.2. Índice de Área Foliar (I.A.F.):

Desde el 19 de octubre al 9 de noviembre, no existieron diferencias significativas entre

tratamientos en sectores de distinto vigor.

A partir del 29 de noviembre y en adelante se mantuvo mayor IAF en el tratamiento de

baja intervención del sector de alto vigor, el que no se manifestó en el bajo, sino hasta el

18 de diciembre.

Entre el 29 de noviembre y el 18 de diciembre los tratamientos de media y alta

intervención en los diferentes sectores de vigor, no guardaron relación con el grado de

intervención aplicados hasta esa fecha, por lo que no existe una explicación clara de lo

sucedido en este período, para luego el 7 de enero, terminar con un IAF según lo

esperado y de acuerdo al grado de eliminación de brotes.

25

CUADRO 2. Efecto de la intensidad de eliminación de brotes anticipados, sobre el índice de área foliar promedio resultante, en las distintas fechas de medición, en sectores de distinto vigor, durante el período de crecimiento vegetativo y frutal de la vid (cv. Superior seedless).

Intensidad

Baja Intensidad

media Intensidad

Alta

Fecha de Medición Vigor INDICE DE AREA FOLIAR

Alto 1,18a 1,18a 1,13a 1 (19/Oct/04)

Bajo 1,05a 1,06a 1,03a

Alto 2,15a 2,16a 2,18a 2 (9/Nov/04)

Bajo 1,99a 2,01a 1,99a

Alto 4,99a 1,92c 2,87b 3 (29/Nov/04)

Bajo 2,34c 2,71b 3,28a

Alto 6,15a 2,98c 3,34b 4 (18/Dic/04)

Bajo 5,80a 3,40b 3,63b

Alto 7,30a 5,55b 4,90c 5 (7/Ene/05)

Bajo 6,96a 4,70b 4,00c

Promedios seguidos de igual letra en filas no difieren significativamente (P= 0.05), según prueba de LSD.

La tercera semana de noviembre denota un momento crítico en el manejo del dosel, en

donde la correcta decisión de eliminación de brotes anticipados según el vigor puede

provocar diferencias lumínicas que se reflejarán en la calidad de la fruta, es así como en

este trabajo y como lo muestra la figura 1 (Anexo 1), baja intervención en el sector de alto

vigor se reflejó en el aumento en más del doble del IAF, respecto a la medición efectuada

20 días antes.

Contreras (1995), manifiesta el requerimiento de 10 cm2 de hoja para producir un gramo

de fruta de calidad en diferentes cultivares. Tomando en consideración este valor, en este

ensayo al 7 de enero en el sector de alto vigor con alta intensidad, el IAF de 4,9 y un

marco de plantación de 3 x 3 m, se traduciría en 441000 cm2 por planta, es decir la

26

capacidad de producir 44100 g de fruta de calidad (44,1 kg), sin embargo esta relación no

es proporcional al IAF, ya que la capacidad de producir fruta de calidad, tiene que ver con

distintos factores entre los que se cuenta área foliar efectivamente iluminada, la que sólo

se logra hasta la cuarta capa, gracias a los espacios de luz entre la hojas, el movimiento

de ellas y luz difusa (Gil, 2000). Siendo aún más preciso Pacheco (2003) señala que las

hojas de la capa inferior permanecen la mayor parte del tiempo con niveles de iluminación

bajo los 800 μmol m-2 s-1 , mientras que las hojas de la capa intermedia y superior, están

expuesta a condiciones de iluminación variable, debido a los cambios de IAF.

5.1.3. Efecto de la intensidad de eliminación de brotes anticipados, sobre el índice de

área foliar primario y secundario promedio resultante, en sectores de distinto vigor.

En el sector de alto vigor, el índice de área foliar secundario de todos los tratamientos

siempre fue menor al primario, hasta el 29 de noviembre, situación que cambió la fecha

siguiente (18 de diciembre), en donde baja intervención produjo que ambos índices

fuesen similares, en tanto que media y alta intervención mantuvieron IAF secundario

menor al primario. El 7 de diciembre todos los tratamientos mostraron un IAF secundario

superior al primario (ver Anexo 3).

En el sector de bajo vigor, todos los tratamientos mostraron IAF secundario menor al

primario hasta el 18 de diciembre. El 7 de enero plantas con baja y madia intensidad de

intervención mostraron IAF secundarios similares al primario y aquellas con alta

intervención, el IAF secundario fue menor (ver Anexo 4).

Con lo expuesto existe clara evidencia que plantas poco intervenidas (una vez) lograron

igualar el IAF secundario con el primario, antes que plantas con dos o tres intervenciones

y que en el sector de alto vigor el crecimiento secundario superó al primario.

27

Como menciona Gil (2000) un Índice de área foliar óptimo para producir fruta de calidad,

es cuatro, o sea mientras antes se logre este valor, se tendrá anticipadamente la máxima

fotosíntesis neta posible. Lo importante es mantener éste valor hasta la cosecha. Por

ejemplo, en este trabajo de investigación, en un sector de alto vigor el valor cercano a

cuatro es logrado entre el 9 y 29 de noviembre por el tratamiento de baja intervención,

pero el continuo aporte de follaje por parte de crecimientos secundarios hacen que éste

valor se incremente a índice cercanos a siete en la cosecha, lo que va en desmedro de la

calidad de la fruta. No se puede mencionar certeramente que la suma de ambos Índice de

área foliar tendrá asociada una fecha exacta en que se tendrá una Índice de área foliar

óptimo, pues es necesario que este crecimiento secundario tenga hojas capaces de

alimentarse a sí mismas y aportar al sistema, es decir, cuando han alcanzado 2/3 ó 3/4 de

su tamaño final.

El vigor juega un papel importante en el número de brotes removidos (Contreras, 1995) y

también la época en que se realiza, al respecto otros autores señalan que el retraso de

este manejo puede llegara debilitar la vid, debido al alto consumo de carbohidratos de los

brotes nuevos no exportadores. Una hoja sana y bien iluminada puede mantenerse activa

durante toda la temporada de crecimiento y seguir aportando carbohidratos después de

cosecha, entonces es válido pensar que mantener IAF cercanos a cuatro puede ser

logrado removiendo un alto número de brotes.

5.2. Microambiente lumínico

5.2.1. Intensidad lumínica:

En los distintos sectores de vigor, las diferentes tasas de eliminación de brotes

secundarios, no produjeron diferencias significativas sobre el índice de intensidad

lumínica, en las diferentes fechas de medición, excepto el 18 de diciembre en bajo vigor,

28

en donde el tratamiento de baja intervención presentó índice de intensidad lumínica

menor a los tratamientos de media y alta intervención.

CUADRO 5. Efecto de la intensidad de eliminación de brotes anticipados, sobre el índice de intensidad lumínica promedio resultante bajo el dosel, durante el período de crecimiento vegetativo y frutal de la vid (cv. Superior seedless).

Intensidad de eliminación de brotes

anticipados

Alta Media Baja

Fecha de Medición Vigor INTENSIDAD LUMÍNICA (%)

Alto 30,09a 34,63ª 30,97a 1 (19/10/04)

Bajo 37,50a 31,06ª 36,37a

Alto 11,78a 8,98ª 9,77a 2 (9/11/04)

Bajo 14,65a 13,75ª 13,64a

Alto 1,66a 1,25ª 9,55a 3 (29/11/04)

Bajo 25,33a 33,33ª 26,66a

Alto 1,11a 11,66ª 9,85a 4 (18/12/04)

Bajo 14,22b 30,48ª 29,40a

Alto 0,70a 6,88ª 12,81a 5 (7/01/05)

Bajo 8,88a 14,96a 21,70a

Promedios seguidos de igual letra en las filas no difieren significativamente (P= 0.05), según prueba de LSD.

Dada las características del sistema de conducción “parronal español”, en que el

crecimiento del follaje se ordena en capas de hojas que crecen superpuestas una sobre

otra, generan lecturas muy similares aún cuando la densidad del dosel sea diferente de un

tratamiento respecto de otro, por ello en este trabajo el índice de intensidad lumínica no

resultó ser un buen indicador de la condición lumínica del dosel, sin embargo, el método

utilizado (malla de puntos) es perfectible, puesto que a pesar de lo señalado, se

obtuvieron lecturas en el tratamiento más sombrío, del 7 de enero.

29

5.2.2. Radiación Fotosintéticamente Activa (RFA)

CUADRO 6. Efecto de la intensidad de eliminación de brotes anticipados, sobre el porcentaje de radiación fotosintéticamente activa (R.F.A.) promedio incidente bajo el dosel resultante, en dos sectores de distinto vigor, durante el período de crecimiento vegetativo y frutal de la vid (cv. Superior seedless).

Intensidad de eliminación de brotes anticipados

Baja Media Alta

Fecha de Medición Vigor % de R.F.A. incidente bajo el dosel

Alto 52,09a 55,41a 54,31a 1 (19/10/04)

Bajo 54,00a 58,21a 26,96b

Alto 1,79a 1,55a 1,42a 2 (9/11/04)

Bajo 1,40a 1,56a 1,38a

Alto 0,79a 1,54a 1,85a 3 (29/11/04)

Bajo 1,07a 1,92a 1,55a

Alto 0,46a 0,89a 1,02a 4 (18/12/04)

Bajo 0,54a 0,87a 1,00a

Alto 0,34a 0,68a 0,78a 5 (7/01/05)

Bajo 0,44a 0,75a 0,83a

Promedios seguidos de igual letra en las filas no difieren significativamente (P= 0.05), según prueba de LSD.

En el sector de alto como el de bajo vigor no existieron diferencias significativas entre

tratamientos en las distintas fecha de medición, excepto el 19 de octubre, cuando el

tratamiento de alta intensidad es menor en el sector de bajo vigor, atribuible a la

disposición heterogénea de los brotes. También Pavez (1996) señala la poca variación de

la RFA entre cuaja y cosecha al estudiar la caracterización del desarrollo vegetativo y

microclima lumínico en cv Thompson seedless en sitios de distinto vigor, solo estudios

realizados en viñedos evidencian diferencias en el porcentaje de RFA incidente, al

30

modificar la posición de los brotes, ejemplo de ello, son las diferencias encontradas por

Muñoz et al. (2002) en vides de Cabernet-Sauvignon, mencionando mayor porcentaje de

RFA incidente follajes expuestos, como resultado de deshojes.

Por otro lado, sólo se observó una drástica caída del porcentaje de RFA incidente bajo el

dosel a partir del 9 de noviembre, descendiendo de valores cercanos al 50% durante la

primera fecha de medición a rangos menores al 2% y no variando significativamente

después de esta fecha, por lo que las plantas aún pueden fotosintetizar, sin estar en el

punto de compensación.

Pacheco (2003) menciona que cerca del 80% de las caras adaxiales de las hojas del

parrón se encuentran entre 0 y 100 μmol m-2 s-1 , recibiendo principalmente radiación

difusa, mientras que solo el 4,5% de las hojas principalmente ubicadas en la parte

superior reciben 1500 μmol m-2 s-1. Además menciona que las hojas desarrolladas en el

plano superior del parronal español se encuentran sometidas a condiciones térmicas y

lumínicas adversas, por el exceso de densidad de flujo de fotones (PPFD superiores a

1500 ųmol m-2 s-1), en cambio en planos inferiores los valores de PPFD estarían entre 10

y 100 ųmol de fotones m-2 s-1 durante la mayor parte del período vegetativo, el mismo

autor comprobó que las hojas de planos inferiores son eventualmente expuestas a

niveles de radiación similares a las del plano superior, asociados a manchas de sol

(sunfleck) intermitentes durante el día.

Durante las mediciones se tuvo en promedio RFA ambiente de 1844 μmoles de fotones

por m-2 s-1 . Según Kliewer y Lider (1970) las hojas estarían bajo el punto de

compensación, cuando reciben menos de 24 μmol m-2 s-1 , por lo que existe una alta

probabilidad que las hojas pertenecientes a capas más bajas, hayan estado por un largo

período en condiciones críticas de iluminación, ya que en los tratamientos en los que se

registraron menos del 1% de RFA incidente bajo el dosel pudieron recibir valores

cercanos a 18.44 μmol m-2 s-1 . Dokoozlian y Kliewer (1988) consideran niveles bajos de

31

iluminación cuando reportaron un 10% RFA ambiental en follajes poco densos hacia el

interior del dosel y conducidos en forma vertical, por lo que el efecto sería mayor en

follajes más densos y sistemas de conducción horizontales.

Trabajos hechos por Bledsoe, Kliewer y Marois (1988), en sitios de alto y bajo vigor a

distintas alturas en el interior del dosel en sistemas verticales, indican que hay muy pocas

alteraciones en la intensidad de la luz a lo largo del período de desarrollo de la fruta.

También Pszczólkowzki et al. (1989), al estudiar el comportamiento del microclima, al

modificar estructuras de un parrón español, reportó que no hay diferencias en la

Radiación fotosintéticamente activa a 1.2 m de distancia del tronco.

Según él Cuadro 12 (Anexo 5), la primera capa de hojas recibe un 100% de la R.F.A.

total, la segunda capa de hojas recibe el 6.05%, la tercera capa un 1.62% y la cuarta sólo

un 0.37% de la R.F.A. total. Utilizando éstos porcentajes y el promedio de 1844 μmoles de

fotones por m-2 s-1 obtenido durante el período de medición, se puede inferir que la R.F.A.

ambiental promedio que llegó a las diferentes capas de hojas es de 1844 μmoles de

fotones por m-2 s-1 , sobre la primera capa de hojas, 111.562 μmoles de fotones por

m-2 s-1 , en la segunda capa, 29.8728 μmoles de fotones por m-2 s-1, en la tercera y

6.8228 μmoles de fotones por m-2 s-1 en la cuarta capa de hojas. Es decir que ésta última

capa estaría bajo una condición crítica de luminosidad, pero tomando en cuenta el

movimiento de las hojas y el paso de luz por los espacios dejados por ésta, la hoja

compensa ésta condición mediante varios mecanismos, como por ejemplo aumentando la

concentración de clorofila de hojas sombrías.

5.2.3. Correlación entre el índice de intensidad lumínica (%) y el porcentaje de Radiación

Fotosintéticamente Activa incidente bajo el dosel.

32

En el sector de alto vigor, tratamientos de baja, media y alta intervención, presentaron alta

correlación entre la radiación fotosintéticamente activa incidente bajo el dosel y el índice

de intensidad lumínica y en forma directamente proporcional, en cambio en el sector de

bajo vigor sólo el tratamiento de baja intensidad de eliminación de brotes anticipados.

Estos resultados expresan que esta alta correlación es favorecida por ambientes de baja

luminosidad.

Pavez (1996) también encontró alta correlación entre estos métodos, sin embargo en este

trabajo de investigación ninguno de los métodos utilizados indican un efecto inducido por

la intensidad de eliminación de brotes ya que los valores se encuentran en umbrales

lumínicos en los que no existen diferencias significativas.

5.3. Contenido de clorofila total según nivel de hoja y oferta lumínica

El contenido de clorofila disminuye desde la capa más expuesta a la luz (capa 1), hacia la

tercera capa ubicada en el interior del dosel. Cabe señalar que las muestras uno y tres de

la capa cuatro, presentaron un contenido de clorofila similar a la capa uno (ver Anexo 7).

Por otro lado y como lo muestra la Figura 3 en el Anexo 8, existen dos contenidos

similares de clorofila, para diferentes ofertas lumínicas, se aprecia que para ofertas

cercanas a 1800 ųmol de fotones m-2 s-1 se tienen contenidos de 1250 microgramos de

clorofila por ml, contenido similar para ofertas cercanas a 15 ųmol de fotones m-2 s-1. este

resultado coincide con Pacheco (2003) quien menciona que el contenido de clorofila total

es mayor en el conjunto de hojas habituadas a la sombra.

El contenido de clorofila disminuyó directamente proporcional a la oferta lumínica, luego al

existir menos del 1% de RFA incidente bajo el dosel, el contenido de clorofila aumentó.

Esto tiene base en la fisiología de la planta, ya que DE Las Rivas (2000), señalan que el

33

ambiente luminoso en el que se encuentran expuestas las plantas afecta su crecimiento y

desarrollo y determina su morfología foliar y fisiología, sobreviviendo únicamente aquellas

plantas adaptadas a dichas condiciones de luz. Las hojas que están en condiciones

sombrías, son más delgadas y poseen menos capas de células del mesófilo en

empalizada, células más cortas y menor peso por unidad de área foliar. Además el

aparato fotosintético presenta mayor número de granas por cloroplasto y un mayor

número de tilacoides apilados, así también poseen un mayor número de pigmentos en las

antenas de los fotosistemas (especialmente clorofila b), con el fin de aprovechar al

máximo la escasa irradiación incidente. Lo anterior hace suponer que la planta utiliza

diferentes concentraciones de clorofila para compensar la falta o exceso de luz.

5.4. Calidad de fruta

5.4.1. Concentración promedio de sólidos solubles en la fruta.

Fruta proveniente de plantas con alta intervención en el sector de alto vigor tuvo mayor

contenido de azúcar que aquella proveniente de plantas con intensidad media y baja, en

tanto que fruta de plantas con alta intervención del sector de bajo vigor tuvo mayor

concentración de azúcar que aquella proveniente de plantas con baja intervención, pero

similar a la de media (ver Anexo 9, Cuadro 13).

Trabajos realizados por Gaete y Pérez (1986), reportaron un aumento de dos grados Brix

para el tratamiento con 100% de luz respecto al que tenía un 52% de luz, estos resultados

concuerdan con los de Kliewer et al. (1967), quienes encontraron diferencias entre 4 y 6

°Brix en parras creciendo bajo 50 y 21% de luz solar respectivamente. Trabajos

posteriores de Pérez, Peppi y Larraín (1998), señalan que la falta de luz en el follaje y

sobre los racimos influye directamente en la tasa de acumulación de azúcar y esto habría

determinado una menor fotosíntesis que a la larga se traduce en menor concentración de

azúcares en la baya, es así que al disminuir artificialmente la luz en un 80%, 39 días antes

34

de cosecha, provocó la reducción de 2.6 ° Brix, respecto a fruta de la misma planta con

sector iluminado. En esta investigación, plantas con alta intervención produjeron fruta que

alcanzó en cosecha 1.7 y 1.5 ° Brix más que las sombreadas en el sectores de alto y bajo

vigor respectivamente.

Varios son los autores que mencionan la influencia positiva de la luz para lograr adelantar

la acumulación de azúcar, sin embargo en otros trabajos realizados por Pérez et al.

(1987) no evidenció diferencias significativas sobre los sólidos solubles, al ralear brotes y

despuntar el ápice de crecimiento del brote principal.

5.4.2. Acidez de la fruta

En el sector de alto vigor, la acidez de la fruta obtuvo valores inversamente proporcionales

a la intensidad de eliminación de brotes, sin embargo como lo muestra el Cuadro 2

(Anexo 9), en el sector de bajo vigor esta situación fue diferente al presentar similar

concentración de ácido de la fruta de plantas intervenidas en forma baja y alta.

Kliewer y Lider (1970), al igual que los resultados del sector de alto vigor, reportaron

diferencias significativas, señalando una disminución de la acidez en parras expuesta a

plena luz solar con respecto a aquellas sombreadas artificialmente, lo mismo ocurre en

ensayos hechos por Smart, Smith y Winchester (1988). Sin embargo, esta situación no se

repite en el sector de bajo vigor. Gaete y Perez (1986), no encontraron diferencias en la

acidez de la fruta entre parras que crecieron con un 100% de luz solar y aquellas que

crecieron con 52, 25 y 14% de luz solar, aunque la acidez disminuyó al aumentar la luz

solar, las diferencias no fueron significativas, por ello explican el hecho suponiendo que

existe una redistribución activa de ácidos orgánicos para mantener el equilibrio interno.

Por último cabe señalar que la temperatura juega un rol fundamental en la degradación de

los ácidos, por lo que tratamientos que permitieron mayor penetración de luz directa,

35

pudieron influir en éste parámetro no cuantificado en esta investigación, es decir a mayor

luz, mayor temperatura y por ende mayor degradación de ácidos.

5.4.3. Relación sólidos solubles / acidez

En los diferentes sectores de vigor, la mayor relación sólidos solubles : acidez, se dio en

fruta proveniente de plantas con alta intervención. Esta relación estuvo favorecida por una

característica varietal, ya que el cv. Superior seedless presenta una baja acidez, lo que

hace que con bajos niveles de azúcar sea posible tener dicha relación.

Este resultado coincide con Gaete (1984), quien expresa que la relación sólidos solubles

acidez es mayor en plantas expuestas a plena luz solar, puesto que la acumulación de

azúcar es mayor y la disminución de la acidez es más rápida, que en parrones muy

emboscados. Muñoz (2002) también evidenció mayor acidez en fruta de plantas

sombreadas, contribuyendo a acentuar las diferencias en la relación sólidos solubles :

acidez.

5.4.4. Materia seca

Tanto en el sector de alto vigor como de bajo vigor, no se observaron diferencias

significativas entre tratamientos.

La similitud de estos valores plantea que la planta compensa la reducción de área foliar

efectivamente iluminada, redistribuyendo los carbohidratos fotosintetizados ó utiliza otros

mecanismos para alimentar a los frutos en crecimiento, emitiendo brotes a sectores

iluminados (Kliewer y Lider, 1970) y a la vez eliminando área foliar parásita (Gil, 2000).

Otro aspecto importante es mencionado por Contreras (1995) quien citando a Smart

(1974) dice que el 70% de la luz directa interceptada por la vid es absorbida en los

36

primeros 10 cm de dosel, la que además es la responsable de la mayor parte de la fijación

de carbono de la planta, por ello y desde este punto de vista, en esta investigación, el

porcentaje de materia seca de la fruta no es afectado por las diferentes intensidades de

raleo de brotes anticipados.

5.4.5. Calibre

Tanto en el sector de alto como de bajo vigor, los tratamientos no mostraron diferencias

entre si (Cuadro 9, Anexo 10), para las tres categorías descritas como A, B y C. Estos

resultados se contraponen a Kliewer y Lider (1970) quienes encontraron reducción del

calibre en plantas sombreadas artificialmente. Por otro lado, Muñoz (2002) reportó que las

bayas crecidas a la sombra fueron de mayor calibre. En este trabajo las distintas

intensidades de eliminación de brotes anticipados, no produjeron variación del calibre.

5.4.6. Color

El 100% de los racimos provenientes de plantas con baja intervención, del sector de alto

vigor, fueron de color verde, número significativamente superior a los de media y alta

intensidad, quienes tuvieron 88% de racimos de color verde, entre 9% y 12% de racimos

color crema y entre 0% y 3% de color amarillo. En el sector de bajo vigor las diferencias

entre tratamientos fluctuaron para racimos de color crema, los que representan entre 6% y

15% del total de racimos, este último, significativamente superior a los demás

tratamientos, ver Cuadro 10 (Anexo 11).

Los primeros resultados concuerdan con lo mencionado por Razeto (1999), en donde

doseles menos iluminados obtienen más fruta de color verde, por efecto de protección a la

radiación solar directa. Sin embargo dichas diferencias no se presentaron en el sector de

37

bajo vigor, por lo que una baja intensidad de eliminación de brotes anticipados no

necesariamente produciría mayor número de racimos de color verde.

5.5. Lignificación

Durante la primera fecha de medición del número de yemas lignificadas por cargador, se

encontró que el 100% de ellas estaban lignificadas en todos los tratamientos y vigores,

por ende la segunda fecha de medición presentó el mismo patrón.

La deposición de lignina en la pared celular se llevó a cabo tempranamente lo que

resguarda también a la planta a heladas tempranas. Plantas con buen estado nutricional

en la temporada de crecimiento, mejoran sustancialmente sus mecanismos de adaptación

a las bajas temperaturas y mantienen una cantidad suficiente de reservas en sus

estructuras para dar el impulso a la próxima brotación. Según Hidalgo (1993), alta

cantidad de carbohidratos y moderada de materias nitrogenadas, dan como resultado

lignificación temprana. Por ende la temprana lignificación de cargadores también

dependerá de la disponibilidad de fotoasimilados después de cosecha, los que se

acumulan como reserva en sarmientos, brazos, tronco y principalmente raíces.

5.6. Fertilidad de yemas

El porcentaje promedio de yemas fértiles, en los distintos sectores de vigor de todos los

tratamientos, no presentaron diferencias (Anexo 12).

Variados son los estudios del efecto de la luz sobre la fertilidad y necrosis de yemas, al

respecto Muñoz (1997), señala que la luz es un factor preponderante en la fertilidad de

yemas del cultivar Superior y en trabajos realizados con distintos sistemas de podas

señala que cargadores expuestos a la luz tuvieron un índice de fertilidad de 50%, mientras

38

que los cargadores sombríos tuvieron un 40%. En esta investigación plantas con alta

intervención mostraron en promedio en el sector de alto vigor 39% de yemas fértiles, las

que a pesar de ser similares a los porcentajes de fertilidad de plantas de media y baja

intensidad de intervención, debe aumentarse el número de yemas consideradas en la

poda. Trabajos realizados por Pérez y Valdés (1989), sostienen que parrones del cultivar

Sultanina bajo condiciones de sombra (5 a 100 µ moles m-2 s-1 ) presentaron baja fertilidad

(15 a 31%). En otro trabajo el mismo autor muestra que el porcentaje de yemas fértiles es

inversamente proporcional al nivel de sombreamiento.

Por último es necesario señalar que las yemas de los cargadores muestreados estuvieron

absolutamente influenciados por el nivel de luz de cada tratamiento, sin embargo no

existieron diferencias significativas entre ellas, por lo que es probable que aún cuando

existió bajo nivel de luz en el tratamiento más sombrío, ésta fue suficiente para satisfacer

los requerimientos de la planta y por ende de los tratamientos de media y alta

intervención.

39

6. CONCLUSIONES En el sector de alto vigor, plantas con baja intensidad de eliminación de brotes anticipados

tienen mayor número de capas de hojas que aquellas con media y alta intensidad, en

tanto que en el sector de bajo vigor no existen diferencias.

En los sectores de distinto vigor, el IAF es un buen parámetro que refleja el efecto de las

distintas intensidades de eliminación de brotes anticipados.

En el período de cosecha, el IAF secundario es superior al IAF primario, en el sector de

alto vigor, en tanto que en el sector de bajo vigor es similar o menor.

RFA e intensidad lumínica no resultan ser indicadores claros de la condición lumínica bajo

el dosel y de los efectos de ésta.

La concentración de clorofila aumenta con niveles deficitarios de luz.

Alta intensidad de eliminación de brotes anticipados, mejora la concentración de azúcar,

acidez y relación sólidos solubles de la fruta.

Baja intensidad de eliminación de brotes anticipados produce mayor número de racimos

de color verde en el sector de alto vigor y similar a intensidades mayores número en

sector de bajo vigor.

En el sector de alto como de bajo vigor, las diferentes intensidades de eliminación de

brotes anticipados, no producen efectos en el contenido de: materia seca de la fruta,

número de racimos de cada uno de los calibres, porcentaje de yemas lignificadas y

fértiles.

40

7. LITERATURA CITADA

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ANEXOS

ANEXO 1

Figura 1. Efectos de la intensidad de eliminación de brotes anticipados, sobre el índice de área foliar total resultante, en uva de mesa (cv. Superior seedless) conducida en parrón español, en sector de alto vigor.

0

1

2

3

4

5

6

7

8

19-Oct 09-Nov 29-Nov 18-Dic 07-Ene

Fecha

Indi

ce d

e ar

ea fo

liar

Intensidad bajaIntensidad mediaIntensidad alta

ANEXO 2

Figura 2. Efectos de la intensidad de eliminación de brotes anticipados, sobre el índice de área foliar total resultante, en uva de mesa (cv. Superior seedless) conducida en parrón español, en sector de bajo vigor.

0

1

2

3

4

5

6

7

8

19-Oct 09-Nov 29-Nov 18-Dic 07-Ene

Fecha

Indi

ce d

e ar

ea fo

liar

Intensidad bajaIntensidad mediaIntensidad alta

ANEXO 3

CUADRO 3. Efecto de la intensidad de eliminación de brotes anticipados, sobre el índice

de área foliar (IAF) primario y secundario promedio resultante, en uva de mesa (cv. Superior seedless) conducida en parrón español, durante el período de crecimiento vegetativo y frutal , en sector de alto vigor.

Intensidad de eliminación de brotes anticipados

Fecha de Medición I.A.F. Baja Media Alta

IAF 1° 1,09a 1,09a 1,02a 1 (19/Oct/04)

IAF 2° 0,09b 0,08b 0,10b

IAF 1° 1,79a 1,85a 1,89a 2 (9/Nov/04)

IAF 2° 0,35b 0,30b 0,28b

IAF 1° 2,70a 1,45a 2,09a 3 (29/Nov/04)

IAF 2° 2,29b 0,47b 0,78b

IAF 1° 2,99a 2,23a 2,13a 4 (18/Dic/04)

IAF 2° 3,16a 0,75b 1,21b

IAF 1° 3,16b 2,46b 2,20b 5 (7/Ene/05)

IAF 2° 4,13a 3,08a 2,70a

Promedios seguidos de igual letra en columnas, en las distintas fechas, no difieren significativamente (P= 0.05), según la prueba de LSD.

ANEXO 4

CUADRO 4. Efecto de la intensidad de eliminación de brotes anticipados, sobre el índice de área foliar (IAF) primario y secundario promedio resultante, en uva de mesa (cv. Superior seedless) conducida en parrón español, durante el período de crecimiento vegetativo y frutal , en sector de bajo vigor.

Intensidad de eliminación de brotes anticipados

Fecha de Medición I.A.F. Baja Media Alta

IAF 1° 0,97a 0,99a 0,91a 1 (19/Oct/04)

IAF 2° 0,07b 0,07b 0,11b

IAF 1° 1,73a 1,74a 1,73a 2 (9/Nov/04)

IAF 2° 0,25b 0,26b 0,25b

IAF 1° 1,86a 2,12a 2,27a 3 (29/Nov/04)

IAF 2° 0,48b 0,59b 1,00b

IAF 1° 3,46a 2,16a 2,40a 4 (18/Dic/04)

IAF 2° 2,33b 1,23b 1,23b

IAF 1° 3,60a 2,23a 2,53a 5 (7/Ene/05)

IAF 2° 3,36a 2,46a 1,46b

Promedios seguidos de igual letra en columnas, en las distintas fechas, no difieren significativamente (P= 0.05), según la prueba de LSD.

ANEXO 5

CUADRO 12. La siguiente tabla confeccionada a partir de datos obtenidos en ésta investigación, en la medición del contenido de clorofila según la oferta lumínica, refleja el porcentaje de radiación fotosintéticamente activa ambiental que llega a las diferentes capas de hojas a partir de una oferta promedio total de 1852 μmol m-2 s-1 .

Capa de hoja μmol m-2 s-1 % del total ambiental de

μmol m-2 s-1

Capa Nº 1 1852 100%

Capa Nº 2 112 6.05%

Capa Nº 3 30 1.62%

Capa Nº 4 6.85 0.37%

Capa n° 1, es aquella más expuesta a la luz.

ANEXO 6

CUADRO 7. Correlación entre la intensidad lumínica y el porcentaje de Radiación fotosintéticamente activa incidente bajo el dosel, en cada tratamiento y nivel de vigor, de uva de mesa (cv. Superior seedless).

Vigor

Tratamiento Alto Bajo

Baja intervención 90 % 70 %

Media intervención 92 % 37 %

Alta intervención 82 % 49 %

ANEXO 7

CUADRO 8. Contenido de clorofila total en cuatro niveles de hojas, en uva de mesa (cv.Superior seedless), conducidas en parrón español.

Identificación Muestras Clorofila (microgramos/ml)

Capa Nº 1 Muestra 1 1298.62

Capa Nº 1 Muestra 2 1282.04

Capa Nº 1 Muestra 3 1235.12

Capa Nº 2 Muestra 1 1217.38

Capa Nº 2 Muestra 2 1125.92

Capa Nº 2 Muestra 3 1193.79

Capa Nº 3 Muestra 1 1029.76

Capa Nº 3 Muestra 2 1013.20

Capa Nº 3 Muestra 3 1059.84

Capa Nº 4 Muestra 1 1307.75

Capa Nº 4 Muestra 2 894.65

Capa Nº 4 Muestra 3 1280.19

Capas 1 a 4 ordenadas en forma decreciente desde la parte superior del dosel (más expuesta a la luz) a hacia el interior (menos expuesta). Se tomaron 3 muestras por capa.

ANEXO 8

Figura 3. Concentración de clorofila total en hojas, según la oferta lumínica.

0

200

400

600

800

1000

1200

1400

1600

1800

2000

0 200 400 600 800 1000 1200 1400

ųgr./ ml

ųmol

/m2 /s

eg

ANEXO 9

CUADRO 13. Efecto de las intensidades de eliminación de brotes anticipados, sobre índices de calidad de fruta de uva de mesa del cv. Superior seedless en sectores de distinto vigor.

°BRIX ACIDEZ g de ac tartárico

RELACION sólidos

solubles : acidez

MATERIA SECA

INTENSIDAD DE ELIMINACIÓN DE BROTES

ANTICIPADOS

ALTO VIGOR

BAJO VIGOR

ALTO VIGO

R

BAJO VIGO

R ALTO VIGOR

BAJO VIGOR

ALTO VIGOR

BAJO VIGOR

BAJA 14,34b 13,83b 0,61a 0,61a 23,54b 22,92b 13,64a 14,49a

MEDIA 14,36b 14,52ab 0,55b 0,52b 26,10b 28,21a 13,49a 15,31a

ALTA 16,00a 15,32a 0,48c 0,58a 33,31a 26,30a 14,83a 14,40a

Promedios seguidos de igual letra en las columnas no difieren significativamente (P= 0.05), según la prueba de LSD.

ANEXO 10

CUADRO 9. Efecto de las diferentes intensidades de eliminación de brotes anticipados, en sectores de distinto vigor, sobre el calibre de la fruta (medido como número de racimos por tratamiento), en uva de mesa del cv. Superior seedless.

Alto Vigor Bajo Vigor

Calibre Tratamiento (intervención) Nº de Racimos/ tratamiento

T0(baja) 119a 170a

T1(media) 140a 176a A (≥ 19 mm)

T2(alta) 142a 191a

T0(baja) 81a 39a

T1(media) 87a 40a B (17.5—18.9)

T2(alta) 71a 28a

T0(baja) 18a 3a

T1(media) 2a 10a C (< 17.5)

T2(alta) 10a 28a

Promedios seguidos de igual letra en las columnas, según calibre, no difieren significativamente (P= 0.05), según la prueba de LSD.

ANEXO 11

CUADRO 10. Efecto de las diferentes intensidades de eliminación de brotes anticipados, en sectores de distinto vigor, sobre el color de la fruta de uva de mesa del cv. Superior seedless.

Alto Vigor Bajo Vigor

Color Tratamiento (Intervención) Nº de Racimos/ tratamiento

T0(baja) 219a 195a

T1(media) 201b 193a Verde

T2(alta) 196b 195a

T0(baja) 0b 12c

T1(media) 28a 25b Crema

T2(alta) 20a 38a

T0(baja) 0a 5a

T1(media) 0a 9a Amarillo

T2(alta) 7a 14a

Promedios seguidos de igual letra en las columnas, según color, no difieren significativamente (P= 0.05), según la prueba de LSD.

ANEXO 12

CUADRO 11. Efecto de los tratamientos sobre el porcentaje de yemas fértiles,

vegetativas y muertas de uva de mesa del cv. Superior seedless, en sectores de distinto vigor.

VIGOR

Estado Yema Tratamiento (intervención)

Alto Bajo

T0(baja) 54a 35 a

T1(media) 56 a 39 a Fértil

T2(alta) 39 a 45a

T0(baja) 11a 13 a

T1(media) 13 a 14 a Vegetativa

T2(alta) 19 a 18 a

T0(baja) 36 a 52 a

T1(media) 31 a 46 a Muerta

T2(alta) 42 a 37 a

Promedios seguidos de igual letra en las columnas, según tipo de yema, no difieren significativamente (P= 0.05), según la prueba de LSD.

ANEXO 13

FOTO 1: Orientación vertical de brotes, en uva de mesa.

ANEXO 14 FOTO 2: Muestra la orientación de la regleta, para efectuar correctamente las mediciones.

ANEXO 15 FOTO 3: Malla de Puntos. Malla de puntos colocada según la proyección de la sombra de las cuatro plantas.

C

B A

ANEXO 16 FOTO 4: Cargador central del lateral medio.

ANEXO 17

Muestreo de cargadores, para determinar el vigor del sector.

cargador Nº hilera nº planta 1 2 3 4 Promedio

2 2 1.5 2 1.6 1.6 1.7 A 12 1.5 1.3 1.2 1.2 1.3 B 22 1 1.1 1.4 1.7 1.3 C 32 1.5 1.3 1.3 1.2 1.3 D 42 0.9 1.1 1.2 1.6 1.2 E 52 1.6 1.1 1 1.5 1.3 F 62 1.4 1.2 1.5 1.2 1.3 G 72 1.4 1.3 1.3 1.2 1.3 H 80 1.3 1.7 1.3 1.6 1.5 I

10 8 1.4 1.8 1.3 1.4 1.5 J 18 1.3 1.3 1.5 1.3 1.4 K 28 1.4 1 1.2 1.3 1.2 L 38 1 0.9 1.1 0.9 1.0 M 48 1.1 1.4 1.2 1 1.2 N 58 1.2 1 1.1 1.8 1.3 Ñ 68 1.1 1.2 1.1 1.4 1.2 O 78 1.2 1.5 1.3 1.4 1.4 P

88 1 1.7 1.6 1.4 1.4 Q 20 2 1.6 1.2 1.5 2 1.6 R 12 1.2 1.3 1.4 1.5 1.4 S 22 1.6 1.6 1.7 1.5 1.6 T 32 1.3 1.2 1.1 1.3 1.2 U 42 1.2 1.4 1.3 1.4 1.3 V 52 1.2 1.2 1 1.5 1.2 W 62 1.5 1.2 1.2 1.2 1.3 X

72 1.5 1.2 1.2 1.2 1.3 Y

30 9 1.3 1.4 1.2 1.6 1.4 Z 19 1.3 1.5 1.5 1.6 1.5 AA 29 1.3 1.3 1.1 1.5 1.3 AB 39 1.4 1.2 1.1 1.3 1.3 AC 49 1.8 1.6 1.1 1 1.4 AD 59 1.6 1.5 1.4 1.3 1.5 AE 69 1.4 0.8 1.3 1.8 1.3 AF

79 1.3 1.6 1.1 1.5 1.4 AG

A+J+R+Z 1.53 1.5

B+K+S+AA 1.37 D+M+U+AC 1.19 1.2

E+N+V+AD 1.27

ANEXO 18

ESQUEMA DE LAS INTERVENCIONES

24/Dic19/Nov19/Oct

Yddr: yemas después del racimo To, T1 y T2 tratamientos de baja, media y alta intervención respectivamente.