Salud Bucal en Medellín - 2009
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Salud bucal en la ciudad de Medellín: Monitoreo de los indicadores de caries
dental en escolares y evaluación de la apropiación del modelo educativo en
salud bucal como objeto de aprendizaje en el escenario escolar
Investigadoras
ANGELA MARIA FRANCO CORTES
BLANCA SUSANA RAMIREZ PUERTA
EMILIA MARIA OCHOA ACOSTA
SILVIA PAULINA DIAZ MOSQUERA
OFELIA ROLDÁN VARGAS
Convenio interadministrativo No
46000186444
Objeto: Aportar información a la Secretaría de Salud de Medellín sobre el comportamiento
de los indicadores relacionados con el estado de la dentición, los hábitos de higiene y el
acceso a la atención odontológica de los escolares de las instituciones educativas oficiales y
no oficiales del Municipio.
SECRETARÍA DE SALUD DEL MUNICIPIO DE MEDELLÍN
UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA
MEDELLIN
2009
2
TABLA DE CONTENIDO
Página
LISTA DE TABLAS 4
LISTA DE FIGURAS 5
LISTA DE ANEXOS 6
RESUMEN 7
INTRODUCCIÓN 9
1. MARCO TEÓRICO 14
1.1 Caries dental 15
1.2 Prevención en odontología 16
1.3 Hábitos de higiene bucal 17
1.4 Acceso a los servicios de salud bucal 18
1.5 La salud como objeto de aprendizaje en el escenario escolar 21
1.5.1 La experiencia de la salud bucal como apuesta curricular 21
1.5.2 Ambientes educativos potenciadores de la salud bucal 24
2. OBJETIVOS 28
2.1 Objetivos generales 28
2.2 Objetivos específicos 28
3. COMPONENTE CUANTITATIVO: Monitoreo de los indicadores
de caries dental y acceso de los escolares a los servicios de salud bucal 29
3.1 Metodología 29
3.2 Resultados 32
3.2.1 Calidad del cepillado 33
3.2.2 Caries dental 35
3.2.3 Acceso a los servicios de salud bucal: una mirada desde los niños,
niñas y jóvenes 43
3.3 Discusión 52
3
3.4. Conclusiones 57
3.5. Recomendaciones 57
4. COMPONENTE CUALITATIVO: Apropiación del modelo educativo
en salud bucal como objeto de aprendizaje en el escenario escolar 58
4.1 Sustentación metodológica 58
4.1.1 Estudio orientado desde la lógica de la investigación cualitativa 58
4.1.2 Criterios de inclusión de los(as) participantes 60
4.1.3 Técnicas e instrumentos 61
4.1.4 Análisis de información 62
4.2 Hallazgos preliminares 63
ANEXOS 75
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS 86
4
LISTA DE TABLAS
Página
Tabla 1. Distribución según edad y sexo en escolares de Instituciones
Educativas de Medellín, 2009 32
Tabla 2. Índice de biopelícula según edad (O’Leary). Escolares de las
Instituciones Educativas de Medellín, 2009. 33
Tabla 3. Índice de biopelícula según edad (O’Leary) de los escolares
de estratos bajos de Medellín, 2009 34
Tabla 4. Índice de biopelícula (O’Leary) según edad de los escolares de
estratos medio y altos de Medellín, 2009 34
Tabla 5. Experiencia y prevalencia de caries dental cavitaria en dentina
de la dentición permanente de los escolares de Medellín, 2009 35
Tabla 6. Experiencia y Prevalencia de caries según la edad de los escolares
y el tipo de Institución Educativa, Medellín año 2009 36
Tabla 7. Índice CPOD-C (Klein y Palmer), según edad y estrato de los
Escolares de 8 a 18 años. Instituciones educativas de Medellín, 2009 37
Tabla 8. Índice CPOD-C (Klein y Palmer) y sus componentes, índices
CPOD-M y CPOS-C según edad de los escolares de las Instituciones
educativas de Medellín, 2009 38
Tabla 9. Indice cpod-c y sus componentes, cpos-c, experiencia y prevalencia
de caries dental en niños/as de cinco años de las Instituciones educativas
de Medellin, 2009 41
Tabla 10. Experiencia de acceso a los servicios de salud odontológicos de
escolares de Medellín según tipo de aseguramiento, 2009 47
Tabla 11. Necesidad percibida de consulta a los servicios odontológicos por
los escolares de Medellín, de acuerdo con su tipo de aseguramiento, 2009 49
5
LISTA DE FIGURAS
Página
Figura 1. Distribución de los escolares según zona y estrato. Escolares de
las Instituciones Educativas de Medellín, 2009 32
Figura 2. Experiencia y prevalencia de caries en dentición permanente,
Según CPOD-C y CPOD-M. Escolares de 8 a 18 años. Instituciones
Educativas de Medellín, 2009 36
Figura 3. Distribución porcentual de los escolares según el valor del
CPOD-C.Instituciones Educativas de Medellín, 2009 39
Figura 4. Prevalencia y Experiencia de caries. Ïndice CPOD-C a los 12 años
según zona. Medellín, 2009 40
Figura 5. Tendencia de los valores del indicador CPOD-C (Klein y Palmer)
a los 12 años, escolares de instituciones educativas de estratos bajos.
Medellín 1968-2009 40
Figura 6. Distribución de los niños/as de 5 años de las instituciones
Educativas de estratos bajos, medio y altos, según el valor del cpod-m.
Medellín, 2009 42
Figura 7. Distribución porcentual de la frecuencia de cepillado por día
Según estratos. Escolares de instituciones Educativas de Medellín, 2009 46
Figura 8. Frecuencia de uso de la seda dental en escolares de las
Instituciones Educativas de Medellín, 2009 46
Figura 9. Proporción de escolares que han consultado alguna vez a los
Servicios de salud bucal por zonas. Escolares de Medellín 2009 48
Figura 10. Distribución de los escolares según meses transcurridos desde la
Última consulta odontológica. Instituciones Educativas de Medellín, 2009 51
6
LISTA DE ANEXOS
Página
Anexo 1. Estrato socioeconómico de cada zona de medellín y prevalencia estimada
para la experiencia de caries. 76
Anexo 2. Formato de examen clínico 77
Anexo 3. Encuesta de acceso al servicio de atención odontológica 79
Anexo 4. Formato para programación trabajo de campo 81
Anexo 5. Formato del consentimiento informado para los directivos de las
instituciones educativas 82
Anexo 6. Formato de consentimiento informado para los padres de los escolares 84
7
RESUMEN
Se realizó un estudio descriptivo transversal con el objetivo de Monitorear los indicadores de
caries dental, identificar las barreras de acceso a los servicios de salud bucal en escolares de 5, 8,
12, 15 y 18 años, de estratos bajos, medio y altos de la ciudad de Medellín (Colombia). Así
mismo se evaluó la apropiación del modelo educativo en salud bucal que se ha venido
implementando en el marco de la estrategia Escuelas y Colegios Saludables, con el interés de
develar aspectos relacionados con el ambiente educativo, en tanto puede favorecer u obstaculizar
la construcción social de la salud, entendida como proceso participativo determinado por aspectos
macro y micro-sociales. Además se identificó el compromiso institucional con la salud bucal,
mediante la revisión de iniciativas autogestionarias consignadas en la propuesta curricular o
evidenciadas en los textos de los/las participantes.
Se seleccionó una muestra aleatoria de 2.439 escolares matriculados en las Instituciones
Educativas de la ciudad; Instituciones oficiales y no oficiales que albergaban niños, niñas y
jóvenes de estratos socioeconómicos bajos (1, 2 y 3) e Instituciones educativas oficiales que
albergaban escolares de estratos medio y altos (4, 5 y 6). Dos odontólogos previamente
calibrados hicieron el examen de caries dental (Kappa interexaminador 0,65 y 0,7,
respectivamente), usando los criterios para los índices clásicos de promedio de dientes y
superficies cariadas, obturadas y perdidas de Klein y Palmer (CPOD-C y CPO-S). También se
diagnosticaron lesiones iniciales en el esmalte dental, según los criterios de Pitts y Fyffe. Se
calcularon la prevalencia y experiencia de caries dental y los índices mencionados. La
información sobre el acceso a los servicios se obtuvo mediante una encuesta. Se hicieron pruebas
Chi-Cuadrado, Kruskal-Wallis y t de student, para probar la significancia de las diferencias por
edad y estrato socioeconómico (α=5%).
8
Se realizaron además, cinco grupos focales con educadores de primero y tercero de básica
primaria, y se hicieron entrevistas en profundidad a cinco directivos docentes y dos niños de
tercero de básica primaria participantes en la estrategia Escuelas Saludables del Municipio de
Medellín. Con base en esta información se avanzó en el análisis cualitativo hasta la definición de
categorías y tendencias, como una etapa preliminar de la construcción de sentido y de la
interpretación del texto producido socialmente en el ambiente escolar por estudiantes y
profesores.
Los hallazgos del Estudio evidencian disminución de los indicadores de caries dental, respecto a
lo reportado por estudios anteriores realizados también en población escolar de Medellín. A los
doce años el 31,3 % de los escolares tenían experiencia de caries cavitaria en dentina y el índice
CPOD-C fue 0,7(±1,5) en los estratos bajos y (0,4±0,9) en el medio y altos (p< 0.01). El índice
significante de caries (SiC) fue 2,1±2,1 y 1,3±1,2 respectivamente.
Se concluye que la salud bucal de la población joven de la ciudad de Medellín es buena, se
cumplen las metas del Plan Nacional de Salud Pública. Se requiere actuar sobre problemas como
el de la polarización de la caries y la atención a otros grupos hoy desprotegidos.
9
INTRODUCCIÓN
El Plan Municipal de Salud 2008-2011 “Medellín es salud para la vida” se ha propuesto, con base
en un diagnóstico hecho previamente, importantes metas de resultado para el periodo de
referencia, con las que se pretende alcanzar el más alto nivel de salud física, mental y social para
toda la población de Medellín.1
Las metas planteadas responden a las prioridades establecidas por el Plan Nacional de Salud
Pública 2007-2010,2 las cuales son de estricto cumplimiento por los planes territoriales de salud,
siguiendo las directrices de la OMS planteadas en los objetivos del milenio, en cuanto a la
formulación de las metas propias de acuerdo con los logros alcanzados.
En razón a lo anterior, se realizó un estudio con los objetivos de: i) proporcionar a la Secretaría
de Salud información sobre los principales indicadores del estado de la dentición de la población
escolar, ii) recolectar información sobre la experiencia de esta población con el acceso a los
servicios odontológicos y, iii) evaluar la apropiación del modelo educativo en salud bucal que se
ha venido implementando en el marco de la estrategia Escuelas y Colegios Saludables.
El último objetivo es trascendente, por tratarse esta Estrategia de una iniciativa de educación para
la salud que ha intentado superar el carácter de acción puntual, limitada al desarrollo esporádico
de campañas diseñadas y orientadas desde el sector de la salud, sin la posibilidad del debate y la
reflexión crítica por parte de los miembros de la comunidad educativa, quienes son sus más
directos beneficiarios(as), dando así cabida, de forma gradual a una construcción que tiene la
pretensión de dar otra connotación y sentido a la salud y su componente bucal, de ahí que ha
venido involucrando los(as) distintos(as) actores que hacen parte del escenario escolar en un
proceso de corresponsabilidad por el mejoramiento de la salud general y bucal, que parte del
reconocimiento de la cultura y las realidades sociales en las que viven e interactúan los sujetos.
10
Tras el interés de configurar, delimitar y contextuar el ámbito problemático en torno a la relación
Salud Bucal- Educación, en el escenario escolar, aparecen condiciones problémicas de diferente
naturaleza, que resulta interesante explorar y precisar. En este sentido, es común encontrar
problemas derivados de la carencia comunicativa o el distanciamiento relacional; otros que hacen
mucho más énfasis en las tensiones provocadas por la imposición de saberes y acciones con la
consecuente resistencia que se desprende de tener que hacer algo que se considera ajeno, y en un
tercer plano podrían ubicarse las que dan cuenta de acuerdos incumplidos, intereses no
concretados, motivaciones fugaces e impotencias que no encuentran como superarse.
En este orden de ideas, es pertinente devolverse un poco en la historia con el propósito de dar
cuenta de cómo ha sido el acercamiento del sector salud al escenario escolar, lo que permite a su
vez, conocer las perspectivas teóricas y metodológicas desde las que se han orientado los
procesos de educación para la en la escuela.
La perspectiva que tradicionalmente ha orientado el trabajo en salud, tanto en el ámbito escolar
como en otros espacios, ha sido la de la salud pública convencional, que adopta “el presupuesto
filosófico-teórico de la enfermedad y la muerte como punto de partida para la explicación de la
salud y el método positivista para explicar el riesgo de enfermar en la población”.3 En
consecuencia, se ha privilegiado el desarrollo de campañas y otras actividades educativas de
carácter promocional y preventivo, inscritas en el enfoque de riesgo y generalmente destinadas a
enfrentar problemáticas concretas de grupos poblacionales particulares.
Sin embargo, cabe destacar que ante la ineficiencia y consecuente debilitamiento del modelo
biomédico, han surgido durante las últimas cuatro décadas movimientos como la Medicina Social
Latinoamericana y la Salud Colectiva, ésta específicamente en Brasil, fundamentados en una
concepción más constructiva e integradora de la relación salud y vida, entendida como proceso
social que se construye en relación y está determinado por factores de naturaleza tanto macro
como micro social.
En el curso de estas emergencias paradigmáticas se empezaron a implementar programas de
promoción de la salud en el ámbito escolar, orientados desde la Organización Panamericana de la
11
Salud para Latinoamérica. Una de las primeras propuestas fue Escuelas Promotoras de Salud
IREPS, que inició en 1995 y buscó la articulación y movilización multisectorial de recursos
regionales, nacionales y locales (talento humano, compromiso político, recursos técnicos y
financieros), destinados a la creación de condiciones propicias para el aprendizaje y el desarrollo
humano integral, el mejoramiento de la calidad de vida y el bienestar colectivo de niñas, niños,
jóvenes y demás miembros de las comunidades educativas. En Colombia la estrategia Escuelas
Promotoras de la Salud se adoptó con el nombre de “Escuela Saludable” y fue acogida en 1977
por el Ministerio de Salud, hoy Ministerio de la Protección Social para liderarla a nivel nacional.4
La estrategia Escuela Saludable orienta sus acciones desde los lineamientos propuestos en la
Carta de Ottawa de 1986, en los que el fortalecimiento de la participación comunitaria en la
dinámica escolar aparece como una de las prioridades; por eso surgen alianzas con diferentes
sectores para trabajar conjuntamente por unas mejores condiciones de vida de la comunidad
educativa.
A pesar de la coherencia y el alcance de los presupuestos teóricos que soportan los paradigmas de
la salud, a los que se hace alusión en los párrafos anteriores, en la práctica ha sido muy complejo
establecer vínculos efectivos que soporten un trabajo colaborativo con las instituciones
educativas y sus respectivas comunidades, por razones que muy probablemente están asociadas a
la permanencia de concepciones reduccionistas que siguen considerando la salud y la educación
como responsabilidades independientes y exclusivas del sector que tradicionalmente las ha
orientado y/o a la implementación de metodologías que, por un lado, no responden cabalmente a
las pretensiones del modelo y por otro, resultan ruidosas en la dinámica escolar en tanto se
desarrollan sin el conocimiento profundo de las condiciones del contexto y las características
pedagógicas, culturales, psicosociales y espacio temporales de la institución educativa.
Sin desconocer los esfuerzos que se han estado haciendo durante los últimos años, desde
diferentes ámbitos por crear ambientes educativos favorables a quienes interactúan en el
escenario escolar, lamentablemente hay que reconocer que los resultados no compensan los
esfuerzos realizados, que la perspectiva de la atención disciplinar sigue siendo el telón de fondo
de las acciones implementadas, que la fragmentación de las iniciativas aún no ha sido superada y
12
que muchas de las actitudes y las prácticas individuales y colectivas que predominan en los
escenarios escolares, distan de los discursos y concepciones actuales de salud.5
Aunque el componente bucal ha estado incluido en los programas de promoción de la salud en la
escuela, también ha sido complejo trascender la orientación reduccionista de los mismos. Si bien
actualmente se tienen algunas evidencias que ilustran el interés por superar el carácter de
actividad puntual, centrada casi exclusivamente en la enseñanza de técnicas de higiene oral, aún
no son claros los avances que den cuenta de la integración de este componente a la salud general
y menos a la vida cotidiana escolar.
Algunos estudios realizados en la ciudad han mostrado que los estudiantes tienen claridad acerca
del deber hacer en materia de salud bucal y lo manifiestan a través de la alusión continua a las
prácticas de higiene, al enfatizar en el número de veces que se cepillan, en el uso del enjuague
bucal promocionado en los medios masivos de comunicación, etc. Situaciones como éstas
reflejan la utilización de un lenguaje y unas expresiones que dan cuenta de la adquisición de
información puntual pero no de comportamientos coherentes con ello, lo cual corresponde a un
modelo educativo conductista que se fundamenta en la repetición permanente por parte de los
adultos significativos de lo que hay que hacer, acompañada generalmente de refuerzos, es decir
castigo o recompensa.6
De igual modo, estudios realizados en otros países han confirmado el énfasis transmisionista de
los programas educativos: Las acciones de promoción de salud ejecutadas por los diferentes
programas institucionales consisten en aportar información, como una estrategia para lograr
cambios en el comportamiento de las personas hacia el cuidado de su salud bucal. Estas acciones
no han logrado consolidarse como verdaderos programas de educación en salud.7
No obstante, hay que reconocer que esta desconexión conceptual y programática entre las
instituciones educativas y de la salud, que se deja entrever en la cotidianidad de las interacciones
y/o que aflora, aunque de manera tímida, en las evaluaciones procesuales o terminales de los
programas y proyectos de salud bucal, no está soportada sobre un ejercicio investigativo que
permita develar las consecuencias reales en cuanto a la calidad de los procesos adelantados, la
pertinencia de las estrategias implementadas, la apropiación del modelo de salud que subyace en
13
ellos, los factores del ambiente educativo que potencian o inhiben la construcción de la salud,
además del compromiso compartido de ambos sectores en cuanto al fortalecimiento de las
condiciones autopoiéticas de los actores educativos para la construcción social de la salud.
El presente ejercicio investigativo da cuenta de una aproximación comprensiva al componente
bucal de la salud en el escenario escolar, con el interés de develar aspectos relacionados con el
ambiente educativo, en tanto puede favorecer u obstaculizar la construcción social de la salud,
entendida como proceso participativo determinado por aspectos macro y micro-sociales. Así
mismo se identificó el compromiso institucional con la salud bucal, mediante la revisión de
iniciativas autogestionarias consignadas en la propuesta curricular o evidenciadas en los textos de
los/las participantes.
Se presentan en un primer capítulo los resultados del Monitoreo a los indicadores de caries
dental, posteriormente los resultados más relevantes de la exploración de las barreras que se
presentan a los niños, niñas y jóvenes para el acceso a los servicios de salud bucal. En un
segundo capítulo se presenta la sustentación metodológica y una descripción inicial de los
hallazgos acerca de la “Apropiación del modelo educativo en salud bucal como objeto de
aprendizaje en el escenario escolar”, que dan cuenta de un primer nivel de análisis de la
información, esto es, la construcción de argumentos descriptivos, en los que se podrán apreciar
las categorías de ordenamiento con las respectivas tendencias identificadas y los textos
ilustrativos, producto del ejercicio de codificación abierta de la información producida.
Se espera que los resultados aquí expuestos y analizados constituyan un aporte útil para orientar o
re-direccionar las políticas y programas, que se formulan desde la Secretaría de Salud y las
Instituciones Educativas, dirigidas a este grupo poblacional, teniendo en cuenta las siguientes
consideraciones:
Se actualiza la información sobre los indicadores de experiencia de caries dental de los/as
escolares
Se recogen de viva voz las experiencias, vivencias y necesidades de los/as escolares respecto
al acceso a los servicios odontológicos
Se accede de manera comprensiva al sentido de la salud bucal para los actores educativos y al
compromiso que la escuela está asumiendo en la construcción de la misma.
14
Se hace un aporte metodológico para profesionales interesados en la investigación cualitativa,
como alternativa de producción de conocimiento de incursión relativamente reciente en el
campo de la salud bucal.
Se produce un Estudio relevante social y disciplinariamente en la medida que aporta
conocimientos producidos de manera válida y confiable que pueden ser aprovechados para el
mejoramiento de las condiciones de salud de niños, niñas y jóvenes.
1. Marco teórico
La Organización Mundial de la Salud, en el Reporte Mundial de la Salud Oral, plantea que la
salud bucal es parte integral de la salud general y que su deterioro está asociado con problemas
nutricionales, enfermedades cardiovasculares, bajo peso al nacer y problemas de salud mental,
entre otros.8 En este sentido, en todos los países, se hace especial énfasis en la salud bucal de los
niños/as y los/as jóvenes, en los objetivos de las políticas de salud pública, teniendo en cuenta
que una buena salud bucal en los primeros años de vida, es un factor importante que favorece el
adecuado crecimiento y desarrollo en la vida adulta, de ahí que la atención oportuna las
necesidades en salud de estos grupos de la población debe ser una política de Estado, debido a
que la promoción y la prevención en etapas tempranas acarrean menores consecuencias y bajos
costos con respecto a los estados avanzados de las enfermedades.
Con base en lo anterior, se puede afirmar que debe ser una prioridad de los dirigentes del sector
de la salud, crear los mecanismos para obtener la información que permita identificar los grupos
prioritarios y sus necesidades, para orientar las políticas y programas en salud bucal. Es así como
el Ministerio de la Protección Social, coherente con las Metas del Milenio formuladas por la
OMS,9 ha planteado la necesidad de hacer monitoreos de la salud bucal en los diferentes entes
territoriales del país, con el fin de que den cuenta de los principales indicadores de morbilidad
bucal en la población, para la toma de decisiones con base en información actualizada.
La situación de salud bucal de la población de Medellín, se conoce parcialmente, debido a que si
bien es cierto, la ciudad ha mantenido durante los últimos 40 años, un sistemático monitoreo de
15
los indicadores en la población escolar, los estudios en población preescolar, en jóvenes y
adultos, han sido muy pocos y la mayoría de ellos apenas de pequeños grupos no representativos
de toda la población.
1.1 Caries dental
La importancia de los primeros años en el crecimiento y desarrollo de los niños, así como el
reconocimiento del componente bucal de la salud como parte integral de la salud general y factor
determinante en la calidad de vida, hacen que la caries dental en la población más joven sea
motivo de preocupación.10,11
Los últimos estudios de salud bucal realizados en la población
escolar en la ciudad de Medellín dan cuenta de varios resultados que se deben tener presentes,
tanto para la formulación de planes y programas dirigidos a este y a otros segmentos de
población, como para la formulación de nuevos estudios.12,13,14
Entre estos resultados se destaca
positivamente, la reducción de los indicadores de caries en la dentición permanente de los niños y
niñas hasta aproximadamente los 13 o 14 años de edad; así como indicadores de pérdida de
dientes permanentes cercanos a cero.
Específicamente el último monitoreo de la situación de salud bucal realizado en el año 2006 para
escolares de colegios oficiales4 y en el 2007 para los de colegios no oficiales,
5 mostró que el
valor del índice CPOD (incluyendo las lesiones no cavitarias) a los 12 años de edad es de 1.42 (
1.8) y 1.71 ( 1.9), respectivamente, con lo cual la ciudad cumple con la meta del Plan Nacional
de Salud Pública (PNSP) y mantiene el liderazgo que siempre ha tenido en el país en cuanto a
bajos indicadores de caries en la población escolar. Sin embargo, no todos los resultados fueron
tan positivos; en el caso de los niños y niñas más pequeños (5 años) la prevalencia de caries sigue
siendo alta y la severidad de las lesiones no ha sido impactada significativamente,15,16
además los
índices de placa dental no son muy satisfactorios y siguen siendo muy susceptibles de mejorarse.
Los buenos resultados sobre la experiencia de caries en la dentición permanente, no logran
ocular, sin embargo, que en la ciudad, como sucede hoy en otras ciudades del mundo, el
problema de la caries dental se ha polarizado, lo que significa que grandes grupos de población
están libres de la enfermedad o tienen niveles muy bajos, mientras otro grupo significativo de
pobladores tiene todavía niveles altos. El estudio del 2006 en escolares de colegios oficiales4
mostró que a pesar de que el 58% de ellos estaban libres de caries y el CPOD a los 12 años es de
16
1.42, el tercil de escolares de esta misma edad, más afectados, tenía un CPOD de 3.35, es decir
por encima de la meta del PNSP.
1.2 Prevención en odontología
El objetivo de la odontología preventiva es la obtención y mantenimiento de una optima salud
bucal, a través del uso de estrategias que permitan a las personas el control de algunas
enfermedades bucales, principalmente las relacionadas con la biopelícula dental. En este sentido,
la odontología fomenta aquellas opciones que propicien el mejoramiento del componente bucal
de la salud, teniendo presente no solo los mecanismos que se han encontrado para desarrollarlos
sino también la etapa del ciclo vital en que se encuentra la persona y el contexto en que vive. Así
mismo, los profesionales que trabajan en los servicios de salud, tienen a su cargo la búsqueda de
un sistema que responda a las necesidades poblacionales e individuales y que facilite la
adquisición de buenos hábitos.
En este sentido, los niños y niñas en edad escolar que han tenido un acompañamiento adecuado
en la niñez temprana, empiezan a comprender el valor de mantener su salud bucal17
y en este
momento el contacto con los servicios de salud es de gran importancia para reforzar la
adquisición de buenos hábitos para el niño(a) y su familia, proyectando una autonomía que le
permita perfeccionar el uso del cepillo dental y con el acompañamiento de sus padres, desarrollar
la habilidad necesaria para utilizar adecuadamente la seda dental.
Los jóvenes en edades comprendidas entre los 12 y 18 años por su parte, empiezan a mirar el
mundo que los rodea con una mirada mas critica, hecho que permite forjar un camino hacia la
posibilidad de tomar decisiones informadas de manera autónoma.17
Así, en esta etapa de su vida,
es necesario comprometer al joven con su salud en general y bucal en particular.
Estas características aunque frecuentes, deben tener presente la etiología multifactorial de las
enfermedades bucales y los aspectos involucrados con la bioquímica concreta que ocurre en los
procesos de salud-enfermedad bucal, aunados a los factores socioeconómicos de la población a
intervenir, teniendo presente en relación con las enfermedades bucales prevalentes, la caries y la
enfermedad periodontal, que estas son condiciones que aún se presentan con alta prevalencia en
el mundo y que se concentran en poblaciones marginadas.18
Por esto, los profesionales de la
17
salud bucal deben acudir diferentes técnicas para su prevención y control que están representadas
en la utilización cotidiana de elementos como el cepillo dental y la seda que tienen como función
principal remover la biopelícula dental, pero de la etapa del ciclo vital en que se encuentra la
persona, debe considerarse el proceso salud enfermedad atención como un proceso constante del
proceso vital humano. Desde esta descripción de la situación de prevención en odontología, debe
apuntarse a la propuesta de Harris19
quien propone que las prácticas en prevención deben buscar
de manera equilibrada, la aparición de enfermedades y favorecer la atención a aquellas personas a
quienes los procesos han fallado.
1.3 Hábitos de higiene bucal
El cuidado profesional, la educación y la motivación de las personas para utilizar técnicas
efectivas de cepillado y mantenerlas a lo largo del tiempo, son muchos más importantes que el
diseño del cepillo y otros elementos de higiene bucal. En general se considera que con un
cepillado cuidadoso cada 12 o cada 24 horas es posible mantener una buena salud gingival; en
cuanto al recambio del cepillo dental, se encuentran recomendaciones que oscilan entre los 2,5 y
los 6 meses.20
Estudios realizados en niños y adolescentes han demostrado que al aumentar el tiempo de
cepillado aumenta la eliminación de la biopelícula, pero aún cuando se prolonga el tiempo de
cepillado hasta los 3 minutos, las zonas menos accesibles (dientes posteriores y caras linguales)
quedan siempre con una cantidad notable de biopelícula. Debido a que el cepillado dental
convencional no consigue su eliminación total de los espacios interproximales, es necesario
reforzar la higiene con medidas que permitan un acceso a estas superficies, como el uso de la
seda dental.
Aunque se reconoce la importancia de las técnicas y los implementos para la higiene bucal, la
efectividad del control de placa depende en gran medida de la motivación, conocimiento,
instrucción en higiene oral, ayudas para realizarla y destreza manual.10
Lo anterior reafirma la
necesidad de que los programas de control de placa estén acompañados por estrategias que
superen la información y contribuyan a crear actitudes y a desarrollar destrezas, además de
facilitar el acceso a los elementos de higiene. Así mismo debe tenerse en cuenta que la
18
apropiación de hábitos de higiene bucal adecuados por parte de los individuos, está influenciada
en primer lugar por su ambiente familiar y posteriormente por las pautas de la comunidad a la
cual pertenecen. Investigaciones en niños demuestran la importancia que tiene el rol de la madre
en la influencia del comportamiento adoptado por el niño con referente a su salud bucal.21
Este rol fundamental de los padres de familia, maestros y adultos significativos a cargo de los
niños define la necesidad de que sean incluidos en los programas educativos. Un estudio
realizado en Instituciones Educativas de la Ciudad de Medellín, señala la necesidad de asumir
seriamente la educación de las madres y cuidadores para la verdadera promoción de la salud
bucal.22
Oliveira y col. comentan que los niños pasan la mayor parte del día en el colegio, por lo
cual sería conveniente brindar mayor información sobre las prácticas preventivas a los
maestros.23
1.4 Acceso a los servicios de salud bucal
La Constitución Política de Colombia dispone que los derechos de la niñez prevalezcan sobre los
derechos de los demás y la Ley de Infancia y Adolescencia, aprobada recientemente, señala la
importancia de generar condiciones que promuevan su desarrollo integral, y de manera particular
propende por garantizar la prestación de acciones, bienes y servicios conducentes a la
conservación o recuperación de la salud.24,25
Coherente con estos mandatos establecidos en la
legislación del país, una de las estrategias más importantes, mediante la cual se puede y debe
seguir trabajando por la reducción de los indicadores de morbilidad bucal, es el fortalecimiento
de los programas de atención primaria y la garantía del acceso real y con calidad a los servicios
de salud.
Existe claridad entonces, en cuanto a que la salud es un derecho, que en Colombia además de
estar contemplado en la Constitución en conexión con la vida, está inscrito en el Sistema General
de Seguridad Social en Salud, en donde se contemplan la universalidad, la equidad, la
integralidad y la unidad; como principios a los que está sujeto el sistema. Así, el acceso a los
servicios de salud tiene una connotación de derecho y posibilidad, pues es a través de éste que los
usuarios logran la interacción con el sistema. En concordancia con estos planteamientos, algunos
estudios que han contemplado el acceso a servicios de salud en Colombia incluyen aspectos de la
19
calidad de la atención en salud,26
con aspectos de equidad27
y con grupos poblacionales
específicos, particularmente en situaciones asociadas a la exclusión.28
Sin embargo, el acceso a los servicios de salud, ha sido abordado desde diferentes propuestas
teóricas y enfoques29,30
que se centran en aspectos relacionados con las políticas de salud, la
estructura de los servicios, el proceso y si éste cumple o no con las expectativas y necesidades de
los usuarios. En este mismo sentido, se han desarrollado las tendencias de los estudios
relacionados con el acceso a los servicios de salud, buscando en estas propuestas las interacciones
y los aspectos particulares que se relacionan con cada contexto y con los sujetos.
La propuesta que mayor impacto ha tenido para el análisis del acceso a los servicios, es la
desarrollada por Aday y Andersen,31
quienes a partir de 1960 iniciaron el desarrollo de un
modelo que ha tenido diversos enfoques en términos de la unidad de análisis (familia, individuo),
los tipos de servicios y la naturaleza de los servicios de salud entre otros. La base fundamental
para su análisis es la consideración de dos grandes dimensiones representadas en el acceso real y
potencial a lo servicios a través de las cuales es posible desentrañar los procesos y resultados que
se dan en la interacción entre usuarios y servicios, todo enmarcado en las políticas de salud. (Ver
diagrama de adaptación del modelo de Aday y Andersen).
Adaptación del modelo de Aday y Andersen para el estudio del acceso a los
servicios de salud
20
En relación con el acceso potencial a los servicios de salud, hace referencia al espacio de
interacción de las personas con los servicios y en él se destacan las características de la población
y de la oferta del sistema de salud. Las características poblacionales se asocian con aspectos de
la predisposición (creencias y actitudes, nivel de información, características demográficas y
estructura social), los recursos disponibles (personal, familiar y comunitario) y las necesidades
(percibidas por los usuarios, evaluadas por los prestadores de servicios).
Las características de la oferta de servicios tienen en cuenta los recursos en términos de volumen
y distribución y la organización en relación con la entrada (portafolio de servicios, transporte,
tiempo de viaje, horarios de atención) y la estructura (tipo y localización de proveedor, extensión
de la cobertura).
El lo que concierne al acceso real a los servicios de salud, se explora la utilización efectiva de los
servicios, teniendo en cuenta lo institucional y la experiencia que los usuarios relatan de su
contacto con el sistema. Así, en lo institucional se tiene presente el tipo de institución con que se
tiene contacto, el sitio de atención (urgencias, consulta externa etc), el propósito de esta atención
en términos de su complejidad (prevención, curación rehabilitación) y la frecuencia de
utilización.
La experiencia de los usuarios con los servicios, incluyen las experiencias personales que se
relacionan con el uso de estos, la financiación, las características de los prestadores del servicio y
la calidad en términos de la satisfacción del usuario con la atención recibida. Sobre el tema del
acceso a los servicios, particularmente los servicios odontológicos, no se conocen estudios
recientes que permitan tener un diagnóstico aproximado, lo que significa que cualquier
afirmación que se haga sobre el tema corresponde a las apreciaciones empíricas de las personas
que laboran en ellos y que perciben que existen barreras económicas y culturales, así como
barreras propias del mismo Sistema General de Seguridad Social en salud, dado que
específicamente el POS-S tiene un plan de beneficios muy limitado, además es claro que el
recurso humano es insuficiente para dar cobertura con tratamiento completo a la totalidad de la
población afiliada al régimen subsidiado. También se percibe que algunos grupos poblacionales,
en especial adultos y niñas(os) de 0 a 6 años, afiliados al régimen subsidiado, tienen aún menores
21
posibilidades de acceder al tratamiento odontológico completo, por las mismas razones
expresadas, sumadas a la directriz de priorización de otros grupos etarios.
Si bien la propuesta de Aday y Andersen en su desarrollo y aplicación en diversas investigaciones
ha logrado la construcción de un modelo que tiene en cuenta la interacción del usurario con el
servicio y los resultados de esta utilización, para el presente Estudio, la orientación se da desde
aquellos aspectos que resaltan las experiencias que escolares de la ciudad de Medellín, en edades
de 12, 15 y 18, han tenido con los servicios de salud bucal de la ciudad, teniendo presente la
importancia de conducir los resultados que se deriven de allí, a acciones que amplíen la búsqueda
hacia las relaciones que se establecen desde y con los servicios de salud bucal.
1.5 La salud como objeto de aprendizaje en el escenario escolar
1.5.1 La experiencia de la salud bucal como apuesta curricular
La condición autopoiética, que autores como Maturana32
, Almeida-Filho33
, Granda34
le atribuyen
a los seres humanos al referirse a la salud, introduce un elemento revolucionario, provocador de
un giro radical en la concepción que, desde el enfoque biomédico tecnocientífico, centrado en la
dicotomía salud- enfermedad, en el distanciamiento médico–paciente y en la lógica explicativa
causa-efecto, ha prevalecido por siglos en la cultura occidental.
Reconocer la autoproducción humana de la salud y con ella la subjetivación de los procesos que
la promueven y favorecen o dificultan y entorpecen representa en principio un tránsito
importante, evidente en el intento de despolarizar la perspectiva macrosocial, asentada en los
principios del estructural funcionalismo que considera la salud como un sistema complejo, en
interdependencia con los demás sistemas de la sociedad global, externo al sujeto, en el que las
relaciones se establecen entre roles y del cual se puede dar razón desde la evidencia empírica, y
la perspectiva microsocial, en la que los rostros individuales y los colectivos particulares se
visibilizan y adquieren sentido en su relación con la salud y la vida.
En este sentido, se pueden revisar los trabajos realizados por movimientos como la Medicina
Social Latinoamericana y la Salud Colectiva, generadores de debate crítico en torno a la
multideterminación de la salud por factores tanto estructurales de naturaleza macro, del orden de
22
lo social, lo cultural, lo económico y lo político, como por situaciones individuales y particulares
de grupo poblacional,35
que generan y reproducen condiciones de inequidad, exclusión y
precariedad que es preciso resolver, desde la participación social y la intervención estatal para
poder avanzar hacia la construcción de formas de relacionamiento y vida saludables.
Así entendida la salud, implica desestimular la preocupación por la enfermedad y la muerte, sin
que ello signifique olvidarse de ellas, para ocuparse de la salud y la vida; asumir los sujetos –
individuales y congregados en instancias de la sociedad civil o en cuerpos colegiados del Estado-
como corresponsables de la construcción de formas de vida saludables antes que centrar la
atención en fórmulas, técnicas y procedimientos, e invertir esfuerzos y recursos en la apuesta
individual y la movilización pública por la salud, entendida como una forma autónoma y
solidaria, consustancial con la cultura humana, dependiente y condicionante de las relaciones que
se establecen con la naturaleza, la sociedad y el Estado.36
Continuando con esta discusión, afirmar que el ser humano es constitutivamente social porque
para ser humano hay que crecer humano entre los humanos,37
implica reconocer que la salud
depende del desarrollo, despliegue o expansión de la vocación ética y política de los individuos y
de los colectivos, o dicho de otro modo, comprometerse con la salud requiere la ampliación del
círculo ético de tal manera que el dolor o la felicidad de los demás tengan cabida en la propia
existencia; que la distribución equitativa de los recursos públicos y el acceso a las oportunidades
esté consignado en las apuestas cotidianas; que la participación en la reivindicación de los
derechos propios o de quienes les hayan sido conculcados represente interés prioritario en la
agenda personal y colectiva; que no haya lugar para la tristeza, el dolor o las enfermedades que
puedan evitarse, o visto de una manera más integradora, que la salud constituya una experiencia
vital, entendida como un fin en sí misma.
Lamentablemente, la pasión por hacer, el ansia de acción en este entorno signado por la velocidad
y la impaciencia en la que vivimos, somete a muchas personas a una increíble escasez de
experiencias, todas ellas superficiales. Ninguna experiencia tiene oportunidad de desplegarse por
completo porque algo más la suplanta inmediatamente. Lo que llamamos experiencia es, por
tanto, tan disperso y diverso que apenas si merece ese nombre.38
23
Para evitar los calificativos fugaz y superficial con los que asocia Dewey las experiencias del
mundo contemporáneo, al pensar en la salud bucal como experiencia de gestión curricular habría
que abarcar un amplio entramado de significaciones y de relaciones sociales constitutivas de un
ambiente educativo que actúe como nicho donde sea posible una vida vivida saludablemente que,
además, permita la construcción de un ideal regulador antes que la realización de un estado de
cosas,39
pues, no se trata de la salud como un ejercicio académico, como separata de temas que se
enseñan o como ejercicios prácticos realizados a partir de ciertas regularidades de tiempo y
espacio.
La gestión curricular como experiencia saludable se complejiza en medio de las profundas crisis
sociales que hoy permean la escuela, en buena parte por ser una institución que defiende la
participación y la autonomía, y a la vez se comporta de modo autoritario y heterónomo;40
por ser
una institución igualitaria, que sin embargo, reproduce la desigualdad social y mantiene
mecanismos que favorecen el elitismo;41
por su incapacidad para acoger a quienes arriban al
mundo bien dotados genética, cultural, social y económicamente y a quienes escasamente llegan;
a quienes tienen una familia que es nicho de acogida y protección y a quienes, pese a su corta
edad, tienen que acoger y proteger a otros mientras crecen; a quienes todo lo entienden y a
quienes requieren estrategias personalizadas para acercarse al conocimiento; a quienes siempre
están de acuerdo y a quienes asumen la controversia como forma de hacer presencia; a quienes
disponiendo de todo el tiempo también tienen el de sus adultos significativos y a quienes tienen
que repartirse entre el estudio, la calle y el sufrimiento.42
Las condiciones de posibilidad (utilizando terminología kantiana) de la experiencia de la salud en
la escuela, emergen precisamente como consecuencia de una gestión curricular crítica y
problematizadora, orientada a desentrañar las contradicciones y los factores subyacentes que las
sustentan, a analizar las consecuencias que éstas tienen, tanto en el plano individual como en el
social, y por sobre todo, a levantar propuestas tendientes a producir los cambios que permitan
superarlas,43
porque la esperanza no nace de una visión del mundo tranquilizadora y optimista
sino de la laceración de la existencia vivida y padecida sin velos, que crea una irreprimible
necesidad de rescate44
y un infinito anhelo de emancipación. Para ello, los estudiantes, entre
otros, necesitan aprender cómo asumir riesgos, entender cómo el poder actúa de modo diferente
24
como fuerza productiva y también dominante, ser capaces de leer el mundo desde diversas
perspectivas, estar dispuestos a pensar más allá de los presupuestos racionales que gobiernan la
existencia cotidiana.45
1.5.2 Ambientes educativos potenciadores de la salud bucal
Frente al propósito de acercar salud y educación, como sectores de acción social de amplia
trascendencia en la constitución y desarrollo de la vida humana, además de pertinente, es
absolutamente necesario abordar el tema de los ambientes, entendiendo por ello las condiciones
físicas, bioquímicas y psicosociales que permiten, favorecen y posibilitan o inhiben y
obstaculizan la vida en relación de los seres humanos y de éstos con las demás manifestaciones
vitales y con el mundo material en su conjunto.
Concebir el ambiente de esta manera, trasciende el pensamiento dicotómico del afuera y el
adentro, del dintorno y el entorno, de lo personal y lo colectivo, de lo humano y lo material,
además, reduce la distancia entre el discurso y la acción, si se tiene en cuenta que somos
ambiente como parte constitutiva de la naturaleza y la cultura, y en este sentido, lo constituimos y
somos constituidos por él; lo afectamos y nos afecta, en tanto somos en la medida en que nos
relacionamos con los otros, las otras y lo otro en escenarios diversos de actuación y desde
intencionalidades particulares, como pueden ser en este caso que nos ocupa, la salud y la
educación.
Desde esta perspectiva, la apuesta por la creación de ambientes educativos potenciadores de la
salud bucal se convierte en un campo de desarrollo que trasciende el plano de lo sectorial y lo
disciplinar para configurarse en un compromiso que no le compete de manera exclusiva a quienes
han optado por la salud pública como alternativa de desarrollo profesional o a quienes hacen de la
educación su apuesta vital, sino que es una responsabilidad compartida. Mirada así la situación
atinente al espacio escolar y su potencial en la construcción colectiva de la salud bucal, es
precisamente la conjunción de fuerzas, en apuesta colaborativa, lo que viabiliza la configuración
de ambientes educativos saludables, en los cuales se construya y renueve la sensibilidad y el
compromiso con la vida; en los que se trascienda la auto-rendición, la resignación y la crítica
pasiva ante lo que aparentemente es y seguirá siendo para pasar a la actividad proactiva y
25
autoproductiva, y en los que se reconozca que “la elección no es entre el lenguaje y la
experiencia, pues hay una compatibilidad esencial entre las versiones de ambos”,39
cuando de
transformación de prácticas vitales de trata.
Son la movilización de la apertura y la expansión de la posibilidad, sobre una base sólida de
acción reflexiva y pensamiento crítico proyectivo, las alternativas más favorables para la
construcción de los ambientes educativos no solamente saludables sino potenciadores de la salud,
a los que se hace referencia en el párrafo anterior, sobre todo, si se tiene presente que el “campo
de potenciación está definido por las mediaciones que forman parte de la articulación entre
construir realidades con sentido y, simultáneamente, asumir el desafío de auto-construirse como
sujeto”46
en experiencias cotidianas que requieren ser re-significadas de manera permanente, lo
cual ha sido definido por Wood como "la experiencia recobrada”,47
expresión que acuña en su
referencia a la “deconstrucción”, entendida como “la experiencia de la experiencia”.
Si se conjugan la inquietud de Wood de volver experiencialmente sobre la experiencia para
recobrar, desde la reflexión y el análisis crítico, lo vivido y lo que aún está por vivir y la idea de
que “el contexto obliga a caracterizar cualquier situación del sujeto como de tránsito, lo que
corresponde a conceptualizar la realidad socio-histórica como una secuencia de momentos”,47
habría allí un tópico importante para reflexionar en esta referencia a los ambientes educativos
saludables, en dos sentidos. Por un lado, se puede correr el riesgo de que esos momentos
adquieran una connotación de situaciones episódicas, fugaces, triviales, a las que se les preste
poca importancia, precisamente por la transitoriedad que subyace en ellos; pero visto de otra
manera, representa un potencial importarte para la configuración de experiencias de construcción
subjetiva e intersubjetiva edificantes y potenciadoras, en la medida en que no estatiza y en
cambio si convoca a la permanente reinvención.
En consecuencia con lo anterior, aparece el reto de construir en las comunidades educativas
condiciones experienciales, mediadas por la interacción activa y reflexiva, que permita
comprender que si bien el despliegue de la vida humana se va dando en momentos, éstos no
pueden quedarse en el plano de fragmentos de tiempo en los que se realizan actividades y se
implementan estrategias, a manera de campaña y con horarios establecidos, para promover la
26
salud bucal por ejemplo. Participar en la creación de ambientes educativos saludables implica
tener conciencia clara de que la vida es un continum de acontecimientos en los que intervienen no
sólo la razón sino también la sensibilidad, no sólo el deseo sino también la posibilidad, no sólo el
saber científico y profesional sino también el sentido común y la intuición.
Adicionalmente, hay que considerar que en la institución educativa concurren las condiciones del
contexto social, algunas posibilitadoras y muchas otras inhibidoras, unas alimentadoras de la
esperanza y otras limitantes de la visión, unas movilizadoras del pensamiento y re-creadoras de la
acción y otras que aquietan por temor, las cuales además de influir en la calidad de los programas
y proyectos que en ella se realizan, aportan a la configuración del ethos cultural que está a la base
de los ambientes educativos saludables. En este caso, además de las condiciones materiales,
habría que pensar en el peso que tiene la simbología en el escenario escolar y la relación que ello
guarda con el direccionamiento de las acciones realizadas y las omisiones provocadas.
Al respecto conviene decir que si “los símbolos construyen el lado oculto de la realidad, su lado
más hondo, más profundo; aquella dimensión a la cual es imposible de acceder a través de
cualquier otro modo de conocimiento”,48
los primeros pasos en la apuesta por ambientes
educativos saludables han de trascender el enfoque tecno-científico, materializado en el cálculo
relacional de acciones puntuales y sus efectos cortoplacistas, y avanzar hacia la interpretación del
sentido que los colectivos escolares le atribuyen a sus prácticas, quizás para ellos, promotoras de
la salud, a las concepciones de salud que las soportan y a la simbología que en todo ello subyace,
teniendo en cuenta que “los símbolos construyen un aspecto del mundo que no resulta evidente a
la experiencia inmediata”49
pero que no por ello, deja de ser impactante en la configuración de
las posibilidades requeridas en los procesos de educación para la salud y en las opacidades que en
este mismo sentido deben atenderse.
Cuando se dice que la consideración del ethos cultural y dentro de él, la simbolización propia de
las instituciones, es importante en la creación de los ambientes saludables se está pensando en la
necesidad de construir alternativas en las que la salud no sea vista como un apéndice de los
procesos educativos y en consecuencia, no sea reducida a intervenciones tangenciales de la
27
dinámica institucional, sino que sea considerada como parte constitutiva del desarrollo humano,
en tanto finalidad de cualquier proceso educativo.
Para que lo anterior pase del deseo a la realización hay que ir creando distancia de la racionalidad
instrumental, fundamentada en la evidencia empírica y la relación costo-beneficio, y desestimular
la prescripción profesional y la transmisión de conocimientos elaborados a grupos poblacionales
de los que poco se conoce su cultura y su saber, como si no hubiera la conciencia de que “lo
social, lo político y lo institucional responden a una escenografía simbólica y solamente pueden
entenderse desde ésta”.50
Por todo lo anterior, es posible afirmar que el nivel de impacto de los programas y proyectos
orientados a la construcción de la salud bucal en los escenarios escolares está asociado a la
capacidad que éstos tengan, no de instalarse vacíamente en ellos con la intención de convertirlos
o transformarlos desde una lógica tecno-científica expandida de manera unidireccional, sino con
el potencial transformador que sean capaces de estimular y desarrollar en los grupos poblaciones
involucrados.
Como aporte a esta discusión que se trae, aparece Bárcena planteando que “las situaciones
humanas son parecidas a las situaciones morales en las que existen conflictos y nuestra tarea
consiste en decidir conjuntamente lo que hay que hacer en contextos de incertidumbre y
formarnos un juicio en la acción. En estas situaciones debemos deliberar, elaborar juicios y tomar
decisiones prácticas”,51
que viabilicen la configuración de un panorama de posibilidad,
fundamentado en el reconocimiento a la pluralidad y en la trascendencia de “las verdades
científicas” propias de una cultura que a todas luces refleja que “vivimos en una sociedad
profesionalizada, donde los profesionales liberales dominan y controlan discursos, significados,
valoraciones, praxis”.52
Sólo “en esas condiciones, el saber entendido como acumulación de
experiencias se vuelve bastante sensato: las verdades no son ocurrencias individuales sino
sentidos estructurales”,53
las debilidades no son impedimento sino alerta de posibilidad y los
logros no son puntos de llegada sino nuevos comienzos.
De manera complementaria a lo que se ha venido planteando en esta apuesta compartida entre la
salud y la educación por debilitar sus fronteras para avanzar en creación de ambientes educativos
28
saludables, aparece la necesidad de fortalecer la confianza que, según Corea y Lewkowicz, “no
funciona sobre un terreno de jerarquías previamente establecidas sino de diferencias construidas
en torno a un proyecto compartido”.54
2. OBJETIVOS
2.1 Objetivos Generales
2.1.1 Aportar a la Secretaría de Salud de Medellín información sobre el comportamiento de los
indicadores relacionados con el estado de la dentición, los hábitos de higiene y el acceso a la
atención odontológica de los escolares de las instituciones educativas oficiales y no oficiales del
Municipio, incluidos sus corregimientos.
2.1.2 Determinar la apropiación que tiene la escuela del modelo educativo en salud bucal.
2.2 Objetivos Específicos
2.2.1 Estimar la prevalencia y experiencia de caries dental en escolares de 5, 8, 12, 15 y 18 años
de estratos socioeconómicos bajos, medio y altos.
2.2.2 Calcular los índices relacionados con el estado de la dentición primaria y permanente
(COPD, COPS, ceod y ceos, SiC). (Meta 1 del Plan Nacional de Salud Pública).
2.2.3 Estimar la proporción de escolares de 18 años sin pérdida dentaria como consecuencia de la
caries dental (Meta 2 del Plan Nacional de Salud Pública).
2.2.4 Determinar la calidad del cepillado dental en los escolares mediante el índice de placa
O’Leary.
2.2.5 Proporcionar información sobre la experiencia de acceso a los servicios odontológicos de la
población escolar.
2.2.6 Acceder a información respecto a las condiciones del ambiente escolar que favorecen y
obstaculizan la construcción de la salud por parte de niños y niñas e identificar las tendencias que
emergen en ella.
29
2.2.7 Revisar iniciativas escolares en salud bucal y describir los elementos novedosos que se
encuentren en ellas.
2.2.8 Acceder a textos, orales y escritos que ilustren el nivel de compromiso de la escuela con la
promoción de la salud oral de niños y niñas y organizarlos por tendencias de acuerdo a los
parámetros de la codificación abierta.
2.2.9 Recopilar la información necesaria para determinar si se evidencia en la propuesta
curricular el compromiso de la escuela con la promoción de la salud oral de niños, niñas y
jóvenes.
Los aspectos metodológicos encaminados al logro de los objetivos, así como los hallazgos del
Estudio, se presentan a continuación en dos partes. En la primera parte, se exponen la
metodología y resultados que se refieren al comportamiento de los indicadores relacionados con
el estado de la dentición y los hábitos de higiene, así como de la exploración del acceso a la
atención odontológica de los escolares, y en la segunda se describe la metodología desarrollada
para determinar qué apropiación tiene la escuela del modelo de salud bucal implícito en la
estrategia Escuelas y Colegios Saludables, avanzando en el análisis hasta la construcción de una
“matriz categorial” donde se describen las categorías y tendencias identificadas.
3. COMPONENTE CUANTITATIVO: Monitoreo de los indicadores caries dental y acceso
de los escolares a los servicios de salud bucal
3.1 METODOLOGÍA
La población de referencia para el Estudio la constituyeron los escolares de 5, 8, 12, 15 y 18 años
matriculados y asistentes a las Instituciones Educativas oficiales y no oficiales de la ciudad de
Medellín, que para efectos del interés del Estudio se dividieron en dos estratos así: (i)
Instituciones en las que la totalidad o la mayoría de la población escolar perteneciera a estratos
socioeconómicos (ESE) bajos (1, 2 y 3), de las cuales se escogieron aleatoriamente 140, y (ii)
Instituciones en las que la totalidad o la mayoría de los escolares perteneciera a los ESE medio y
altos (4, 5 y 6), de las cuales se escogieron aleatoriamente 25. Los exámenes bucales a los
escolares se llevaron a cabo previo consentimiento informado de los adultos responsables.
30
El cálculo de la muestra de escolares se hizo con base en la fórmula para estudios descriptivos y
atendiendo los siguientes parámetros: experiencia de caries dental reportada en el VI Monitoreo
del año 2006;5 nivel de confianza del 95% y un error de muestreo del 10%. Para corregir
problemas de calidad de los datos o pérdidas en la recolección, la muestra se amplió en un 5 %.
El tamaño final de la muestra fueron 2.439 escolares de ambos sexos.
Teniendo en cuenta que la división territorial de la ciudad de Medellín, está compuesta por seis
zonas en el área urbana y que se divide en 16 comunas conformadas por 269 barrios, el muestreo
se hizo por zonas y se tomó además el área rural. Para la elección de la prevalencia representativa
de cada zona, se observaba el estrato socioeconómico predominante de ésta y luego se le
asignaba la prevalencia reportada. En el caso en que se presentara algún empate entre el número
de barrios de una comuna en cuanto a su estrato socioeconómico promedio, se observaban las
prevalencias y se asignaba la menor para la determinación de la muestra para la zona respectiva,
La distribución por zonas, estrato socioeconómico por comuna de cada zona de Medellín y
prevalencia estimada para la experiencia de caries se presentan en el anexo 1. Para la selección de
las unidades finales de análisis se siguió un procedimiento polietápico proporcional, en donde en
la primera etapa se definió el número de colegios por zona, en la segunda etapa mediante
muestreo sistemático se seleccionaron las instituciones educativas, y finalmente en cada colegio
se escogieron al azar tres niños por cada grado escolar (preescolar, segundo, noveno, once)
asumiendo el grado como proxy de la edad, para un total de 15 escolares por cada colegio.
Dos odontólogos generales, previamente calibrados en el diagnóstico de caries dental, (Índice de
Kappa interexaminador 0,65 y 0,70, respectivamente), hicieron el examen clínico bucal a los
escolares. Los exámenes se realizaron en equipos odontológicos portátiles, las superficies
dentales se secaron con aire y se valoraron mediante inspección visual; se utilizó espejo bucal
plano, sonda WHO 11.5 y lámpara de luz halógena. Con el fin de evaluar la calidad de cepillado
y garantizar las mejores condiciones para el examen, todos los escolares se cepillaron antes de
este procedimiento. Durante la evaluación clínica los examinadores contaron con el material
necesario para garantizar las medidas de bioseguridad exigidas en estos procedimientos. Los
resultados del examen clínico fueron registrados por un anotador, en un formato previamente
diseñado para este fin (anexo 2).
31
Para la evaluación de la experiencia de caries, se utilizaron criterios tanto para el diagnóstico de
lesiones iniciales en el esmalte como de caries cavitaria en la dentina. Los datos obtenidos se
resumieron en el Índice Clásico de dientes o superficies dentales Cariadas/Obturadas/Perdidas
por caries, CPOD-C y CPOS-C de Klein y Palmer,54
así como los índices cpod-c y cpos-c de
Gruebbel,55
y en los mismos índices modificados, CPOD-M, CPOS-M, cpod-m y cpos-m. La
modificación de los índices clásicos, consistió en incluir los hallazgos de lesiones activas no
cavitadas (mancha blanca) y de las lesiones cavitarias en esmalte.56,57,58
Por último, la calidad del
cepillado se evalúo con base en la aplicación del índice de O´Leary,59
que se expresa en la
proporción de superficies dentales con biopelícula, en relación con el total de superficies
examinadas.
Para obtener información acerca de la experiencia de acceso de los escolares a los servicios
odontológicos, se aplicó una encuesta de 15 preguntas cerradas y abiertas a 1.461 escolares de 12,
15 y 18 años de los que habían sido seleccionados para la evaluación clínica (se excluyeron
los/as de 5 y 8 años), en la encuesta se contemplaron dimensiones relevantes para el acceso a los
servicios de salud bucal, que incluyen algunas de las propuestas por Aday y Andersen, entre
otros.60
Las preguntas de la encuesta fueron orientadas a obtener información acerca de las
categorías predisposición, dotación, necesidad, utilización y satisfacción; cada una de las cuales
evalúa diferentes variables que afectan el acceso. La encuesta se probó y ajustó luego a través de
una prueba piloto. La encuesta definitiva (anexo 3), fue aplicada a los escolares por los
anotadores que hicieron el registro de la evaluación clínica, quienes previamente habían
participado en la prueba piloto.
El análisis de los datos, se hizo con el programa SPSS® versión 17.0 y se utilizó un nivel de
significación estadística del 5 %. Se calcularon los índices clásicos y modificados según la edad y
el ESE de los escolares. Adicionalmente, se exploraron diferencias entre prevalencias de caries y
entre los valores de los índices según edad y estrato, a través de la pruebas Chi-cuadrado de
independencia y Prueba U de Mann-Whitney, Kruskal-Wallis y T de Student.
32
3.2 RESULTADOS
En la figura 1 se puede ver la distribución de los escolares según el ESE y la zona de ubicación
de la Institución Educativa. En la tabla 1 se presenta la distribución de los escolares examinados
según edad y sexo.
Figura 1. Distribución de los escolares según zona y estrato. Instituciones Educativas de
Medellín, 2009.
448508
352
148
21
243
365
0 0
65 84139
66
00
100
200
300
400
500
600
1 2 3 4 5 6 7
No
ZONA
Estrato Bajo Estratos medio y alto
Tabla 1. Distribución según edad y sexo en escolares de Instituciones Educativas de
Medellín, 2009.
Sexo
Hombres Mujeres Total
Edad n % n % n %
5 217 8,9 269 11,0 486 19,9
8 221 9,1 271 11,1 492 20,2
12 240 9,8 262 10,7 502 20,6
15 234 9,6 270 11,1 504 20,7
18 217 8,9 238 9,8 455 18,7
Total 1129 46,3 1310 53,7 2439 100,0
33
3.2.1 Calidad del cepillado dental
En la evaluación de la calidad del cepillado, efectuado por cada escolar antes de hacer el examen,
se observó que el 100 % tenía superficies dentales con biopelícula, aún después de cepillarse. El
promedio global fue 40,2±15,9 superficies comprometidas, tabla 2. Los índices de presencia de
biopelícula fueron 40,1±16,2 y 40,6±13,5 en los escolares de estratos bajos y los de medio y altos
respectivamente, (p> 0,05). Los niños y niñas de menor edad (8 años) presentaron los índices de
presencia de biopelícula, más altos, con un promedio de 44.7±15.2; las diferencias en esta edad
respecto a los demás grupos etareos fueron estadísticamente significativas en las instituciones de
estratos bajos (p < 0.001; prueba de rangos múltiples de Tukey); mientras que en las de estratos
altos sólo entre los de cinco y ocho años hubo diferencias significativas (valor p= 0.014 prueba
de Tukey). Tablas 3 y 4
Tabla 2. Índice de biopelícula según edad (O’Leary). Escolares de Instituciones
Educativas de Medellín, 2009.
n X D.E
I. C p5% Rango
Edad Lim. Inf. Lim. Sup.
5 486 37,9ª 16,2 36,4 39,3 2,5 – 84,5
8 492 44,7b 15,2 43,4 46,1 2,7 – 86,3
12 501 40,3ª 15,4 39,0 41,7 3,6 – 92,3
15 504 39,2ª 15,8 37,8 40,6 1,8 – 99,1
18 455 38,5ª 15,8 37,1 40,0 1,8 – 80,4
Total 2438 40,2 15,9 39,5 40,8 1,8 – 99.1
Las letras en superíndice no coincidentes muestran que hay diferencias estadísticamente significativas (DES) entre los
escolares de 8 años con las demás edades (prueba de rangos múltiples de Tukey, valor p <0.001). Entre los demás
grupos etáreos no se encontraron DES.
34
Tabla 3. Índice de biopelícula (O’Leary) según edad de los escolares de estratos bajos de
Medellín, 2009.
n X D.E I. C p5%
Rango Edad Lim. Inf. Lim. Sup.
5 413 37,9a 16,5 36,3 39,5 2,5 - 84,5
8 428 44,7b 15,6 43,2 46,2 2,7 - 86,3
12 430 40,6a 15,8 39,1 42,0 3,6 - 92,3
15 426 38,9a 16,2 37,3 40,4 1,8 - 99,1
18 387 38,1a 16,3 36,5 39,8 1,8 - 80,4
Total 2084 40,1 16,2 39,4 40,8 1,8 - 99,1
Tabla 4. Índice de biopelícula (O’Leary) según edad de los escolares de estratos medio y
altos de Medellín, 2009.
Edad n X D.E I. C p5%
Rango Lim. Inf. Lim. Sup.
5 73 37,8a 14,5 34,4 41,2 8,8 - 80
8 64 45,0bc
12,6 41,9 48,2 22,7 - 75
12 71 39,1c 13,1 36,0 42,2 5,8 - 69,8
15 78 41,0c 13,7 37,9 44,1 11,6 - 74,1
18 68 40,7c 12,9 37,6 43,8 4,5 - 67
Total 354 40,6 13,5 39,2 42,0 4,5 - 80
35
3.2.2 Caries dental
Dentición permanente1
Se encontró que el 31,1 % de los y las escolares tenían experiencia de caries cavitaria (según
criterios del CPOD clásico de Klein y Palmer), con un incremento estadísticamente significativo
con la edad (X2=430,4; valor p<0.001), pasando del 17,5 % a los 8 años hasta un 57,6 % a los 18.
Por ESE la experiencia de caries tiene diferencias significativas, 39,5 % en el ESE bajo y 31,1 %
en el medio y altos, (X2=7,38; p=0,007). A los doce años el 33,9 % de los escolares ha padecido
caries dental, con diferencias significativas según estrato, 35,5 % en los bajos y 23,9 % en el
medio y altos. Tabla 5
Tabla 5. Experiencia y prevalencia de caries dental cavitaria en dentina
de la dentición permanente de los escolares de Medellín, 2009.
Edad
Experiencia (% )
Prevalencia (%) Total
Total
Estratos
Bajos
Estratos
Medio y
Altos
Estratos
Bajos
Estratos
Medio y
Altos
Experiencia
(%)
Prevalencia
(%)
8 18 14,1 11,2 6,3 17,5 10,6
12 35,5 23,9 19,5 8,5 33,9 17,9
15 46,5 39,7 24,6 10,3 45,4 22,4
18 59,9 44,1 25,1 8,8 57,6 22,6
Total 39,5 31 20 8,5 31,1 15
La prevalencia de caries dental cavitaria en dentina, es decir la proporción de escolares que tenían
caries al momento del examen, fue del 15% y se incrementa en forma significativa con la edad,
pasando de 10,6 % en los escolares de 8 años hasta un 22,6 % a los 18 años; (X2=121,4; valor
p<0.001). La prevalencia según estrato, fue de 20,0 % en ESE bajo y 8,5 % en el medio y altos
(X2=21,01; p<0.0001). A la edad de doce años el 17,9 % de los escolares tenía caries dental al
1 El análisis del estado de la dentición permanente se realizó para 1 953 niños, niñas y jóvenes de 8, 12, 15 y 18 años.
Se excluyeron los niños y niñas de 5 años, debido a que muy pocos de ellos tenían dientes permanentes en el
momento del examen
36
momento del examen, siendo mayor en el ESE bajo, 19,5 %, que en el medio y altos, 8, 5 %; (X2
21,01; p<0.0001). Tabla 5. La prevalencia y la experiencia de caries en la dentición permanente,
según el tipo de Institución Educativa, oficial o no oficial, se presenta en la tabla 6.
Tabla 6. Experiencia y Prevalencia de caries según la edad de los escolares y el tipo de
Institución Educativa, Medellín año 2009
I. E. Pública I. E. Privada
Experiencia Prevalencia Experiencia Prevalencia
IC 95% IC 95% IC 95% IC 95%
% L.inf L.sup % L.inf L.sup % L.inf L.sup % L.inf L.sup
8 17,5 17,3 17,7 10,5 10,3 10,7 17,5 17,1 17,9 10,7 10,4 11,0
12 37,9 37,6 38,2 22,1 21,8 22,4 27,9 27,5 28,3 11,8 11,5 12,1
15 45,5 45,2 45,8 25,2 24,9 25,5 45,3 44,8 45,8 18,7 18,3 19,1
18 61.5 61,2 61,8 26,2 25,9 26,5 50,9 50,3 51,5 16,6 16,2 17,0
Total 40,0 39,9 40,1 20,8 20,7 20,9 35,5 35,4 35,6 14,5 14,4 14,6
Tanto la experiencia como la prevalencia de caries aumenta cuando se suman las lesiones
iníciales en el esmalte dental (CPOD-M). A los 12 años, pasan a 84,7 % y 81,3%
respectivamente, figura 2. Estos indicadores presentan valores mayores en los ESE bajos; las
diferencias fueron significativas.
Figura 2. Experiencia y prevalencia de caries en dentición permanente, según
CPOD-C y CPOD-M. Escolares de 8 a 18 años. Instituciones Educativas de Medellín,
2009
57,6
10,6
17,922,4 22,6
17,5
33,9
45,4
81,3 82,281,7
70,9
89,584,7
74
86,9
0
10
20
30
40
50
60
70
80
90
100
8 12 15 18
Edad
Po
rcen
taje
Prevalencia CPOD-C Experiencia CPOD-C Prevalencia CPOD-M Experiencia CPOD-M
37
El número promedio de dientes permanentes cariados, obturados y perdidos a causa de la caries
(COPD-C: Klein y Palmer) fue 0,9±1,6 y aumenta con la edad, con valores que van desde
0,3±0,6 en los escolares de ocho años hasta 1,5±2,0 en los de 18 años; las diferencias fueron
estadísticamente significativas entre todos los grupos etáreos. Tabla 7.
Tabla 7. Índice CPOD-C (Klein y Palmer), según edad y estrato de los Escolares de 8 a 18
años. Instituciones educativas de Medellín, 2009
CPOD - C Estratos bajos CPOD - C Estratos medio y altos
Edad
D.E.
I.C. 95%
D.E.
I.C. 95%
Lim
inf. Lim sup.
Lim
inf. Lim sup.
8 0,3a 0,6 0,2 0,3 0,3a 0,8 0,1 0,5
12 0,7b 1,6 0,6 0,9 0,4ab 0,9 0,2 0,6
15 1,1c 1,7 0,9 1,3 0,7b 1,2 0,5 1,0
18 1,7d 2,1 1,5 1,9 0,8b 1,1 0,5 1,1
Total 0,9 1,6 0,6 1 0,4 0,7
Valor p (0.000 Kruskal-Wallis)
El valor del CPOD-C fue 0,9±1,6 en el ESE bajo y 0,6±1,0 en los ESE medio y altos. En los
primeros las diferencias fueron estadísticamente significativas entre todas las edades; mientras
que en los segundos sólo se observaron diferencias significativas entre los de 15 y 18 años, y
entre los de 12 y 18 (Prueba Kruskal-Wallis). Las diferencias también son significativas entre los
dos ESE, (Prueba T-Student, valor p<0.0001). El CPOD-C promedio en los escolares de doce
años (Indicador de referencia internacional) fue 0,7±1,5; siendo mayor en el ESE bajo (0,7±1,6),
que en el ESE medio y altos (0,4±0,9). (Prueba T-Student, valor p<0.018). Tabla 7.
En cuanto a la distribución de los componentes del CPOD-C, se observó que del valor total del
índice (0,9±1,6), los dientes obturados representan la mayor proporción del índice (63,2%),
mientras que el componente cariado corresponde al 34,5%. A la edad de doce años las
proporciones son 52,9% y 44,1% para los componentes obturado y cariado respectivamente. En
los escolares de ESE medio y altos, el componente obturado representa el 75,6% del valor total
del CPOD-C y en los de ESE bajos representa el 51,3%.
XX
38
El CPOD-C no presentó distribución normal y el valor de la mediana de este indicador en todos
los grupos etáreos muestra que al menos en el 50% de los escolares era cero. No se presentaron
diferencias estadísticamente significativas en el CPOD-C global por sexo (prueba U de Mann-
Whitney; p > 0,05), ni entre los grupos etarios según sexo, tampoco se presentaron diferencias
significativas entre las zonas geográficas donde estaban ubicadas las Instituciones Educativas,
(Prueba Kruskal-Wallis; p=0,16).
En el análisis de la experiencia de caries dental, se observó que el componente perdido del
CPOD-C global representa el 2,3%. A los 18 años el valor del indicador corresponde al 2,6 % y
el promedio de dientes perdidos debido a la caries en el ESE bajo fue 0.05±0,3; mientras que en
los de ESE medio y altos fue cero.
El índice CPOD modificado (CPOD-M), que incluye además de las lesiones de caries cavitaria en
dentina, las lesiones en estadíos iniciales en el esmalte fue 1,87 ±1,6 y 4,87±3,6 a las edades de 8
y 18 años respectivamente. A los 12 años fue 3,47±3,2; aunque fue mayor en los escolares de
ESE bajo (3,81±3,2), en donde el 89,8% corresponde a dientes cariados y el 9,7% a dientes
obturados. En los ESE medio y altos el valor del índice modificado a esta edad fue 1,38±1,9;
correspondiendo 77,5 % al componente cariado y 22,5 % a dientes obturados. El CPOS-C
(superficie como unidad de observación) a los 12 años fue 1,3±4,4; aunque es mayor en ESE
bajos, 1,5±4,7, que en medio y altos (0,6±1,5). Tabla 8.
Tabla 8. Índice CPOD-C (Klein y Palmer) y sus componentes, índices CPOD-M y
CPOS-C según edad de los escolares de las Instituciones educativas de Medellín,
2009
Edad Cariados Obturados Perdidos COPD-C
COPD-M
COPS-C
DE DE DE DE
DE
DE
8 0,13b 1,1 0,12
b 0,5 0,00
a 0,1 0,26
b 0,6
1,87
b 1,6
0,4 1,1
12 0,30c 0,9 0,36
c 0,9 0,01 0,1 0,68
c 1,5
3,47
c 3,2
1,3 4,4
15 0,37c 0,9 0,65
d 1,2 0,03 0,2 1,05
d 1,6
4,38
d 3,6
2,0 3,7
18 0,38c 0,8 1,11
e 1,7 0,04
b 0,3 1,53
e 2,0
4,87
d 3,6
2,8 4,1
Total 0,30 0,9 0,55 1,2 0,02 0,2 0,87 1,6
3,63 3,3
1,6 3,7
Valor p 0.000 0.000 0.002 0.000
0.000
0.000
X X X X X X
39
El 61,8 % de los escolares tenían un CPOD-C de cero, es decir, no habían tenido experiencia de
caries dental cavitaria; el 26,8 % tenían valores entre uno y dos y en el 3,7 % era mayor o igual a
5. En la figura 3 se presenta la distribución porcentual de los escolares según el valor de este
índice, para cada ESE.
Figura 3. Distribución porcentual de los escolares según el valor del CPOD-C y el ESE.
Instituciones Educativas de Medellín, 2009
60,5
27,3
7,94,3
0 1 - 2 3 - 4 5 o más
Estratos bajos
69
23,9
0,76,4
0 1 - 2 3 - 4 5 o más
Estratos medio y altos
El promedio de dientes cariados, obturados y perdidos a causa de la caries dental, calculado con
base en el CPOD-C en el tercil de los escolares de 12 años más afectados, Índice Significante de
Caries (SiC), fue 2,0±2,0. Se observaron diferencias por estrato; 2,1±2,1 y 1,3±1,2 en ESE bajos
y altos, respectivamente, (prueba t de Student; valor p 0,044). Por otro lado, el valor del SiC en
esta edad cuando se incluyen las lesiones iniciales en esmalte (CPOD-M), fue 4,6±3,4 con
diferencias por estrato; 5,0±3,4 en los bajos y 2,3±2,2 en los altos, (valor p<0,0001 prueba t de
Student).
En la figura 4 se presenta la experiencia, la prevalencia de caries y el índice CPOD-C a los 12
años para cada una de las zonas administrativas del municipio de Medellín.
40
Figura 4. Prevalencia y Experiencia de caries. Ïndice CPOD-C a los 12 años según zona.
Medellín, 2009
En la figura 5 se presentan los valores del índice CPOD-C a los 12 años, en la cual se puede
observar la tendencia decreciente del indicador en los escolares de instituciones educativas de
estratos bajos entre 1968-2009, de acuerdo con los resultados reportados en estudios anteriores y
en el presente Estudio.
Figura 5. Tendencia de los valores del indicador CPOD-C (Klein y Palmer) a los 12
años en escolares de instituciones educativas de estratos bajos. Medellín 1968-2009
Experiencia: 31.5 Prevalencia: 18.3 CPOD-C:
Experiencia: 32.9 Prevalencia: 13.4 CPOD-C
Experiencia: 32.5 Prevalencia: 17.5 CPOD-C:
Experiencia: 28.0 Prevalencia: 12.9 CPOD-C:
Experiencia: 25.0 Prevalencia: 8.1 CPOD-C:
Experiencia: 28.2 Prevalencia: 12.0 CPOD-C:
Corregimientos Experiencia: 34.2 Prevalencia: 16.2
CPOD-C:
41
Dentición primaria
El estado de la dentición primaria se evalúo sólo en los 486 niños/as de cinco años de edad. El
análisis de la experiencia de caries con base en el cpod clásico (cpod-c), muestra que el 54,7% de
los niños/as, de estratos bajos tenía experiencia de caries dental, mientras que en de estratos
medio y altos esta proporción disminuye a 26 %. El valor del indicador aumenta a 88,6% en ESE
bajos y a 50,7 % en ESE medio y altos, cuando se incluyen las lesiones iníciales de caries dental
en el esmalte, (cpod-m), las diferencias fueron significativas, (prueba X2; p<0,0001).
La prevalencia de caries dental cavitaria en dentina (niños/as con lesiones de caries al momento
del examen) es mayor en los estratos bajos (45%) que en los medio y altos (19,2%) ; valores que
aumentan a 86,4% y 49,3% respectivamente, cuando se incluyen las lesiones iníciales en
esmalte, las diferencias fueron significativas, (prueba X2; p<0,0001). Los hallazgos de los
principales indicadores de caries dental en dentición primaria, se presentan en la tabla 9.
Tabla 9. Indice cpod-c y sus componentes, cpos-c, experiencia y prevalencia de caries
dental en niños/as de cinco años de las Instituciones educativas de Medellin, 2009.
Estrato
c p o cpod-c cpos-c Experiencia
%
Prevalencia
%
Clásica Modif. Clásica Modif.
Bajo 1,5 0,1 0,6 2,2 5,8 54,7 88,6 45,0 86,4
(DE) 2,6 0,6 1,2 3,1 9,5
Medio y Alto 0,3 0 0,3 0,6 1,3 26,0 50,7 19,2 49,3
Total 1,3 0 0,1 1,9
(DE) 2,4 0,6 1,1 2,9
El número promedio de dientes primarios con lesiones de caries cavitaria en dentina, obturados y
perdidos a causa de la caries (cpod-clásico) fue 1,9±2,9; este valor es mayor en los niños/as de
estratos bajos (2,2±3,1), que en las de estratos altos (0,6±1,2). El índice cpod-m, que incluye
además de las lesiones de caries cavitaria en dentina, las lesiones en estadíos iníciales en el
esmalte fue 5,4±4,7 en estratos bajos y 1,9±2,8 estratos altos. Las diferencias fueron
significativas (Prueba t-Student, valor p<0.0001).
X XX X X
42
El análisis de la distribución de los componentes del cpod-c, muestra que del valor total, el
componente cariado corresponde a 1,3±2,4, lo que representa una mayor proporción del índice
(68,4%), siendo menor en estratos medio y altos (44.1%); mientras que el promedio de dientes
obturados (0,5±1,2) tiene un menor peso porcentual en la composición del índice, 26,3%, aunque
en los estratos altos representa el 50%, (Tabla 9). Adicionalmente, cuando se incluyen las
lesiones iniciales del esmalte (cpod-m), el promedio de dientes cariados aumenta a 4,66 en
estratos bajos y 1,55 en estratos medio y altos.
El número promedio de superficies con experiencia de caries dental cavitaria en dentina, cpos-c
(superficie dentaria como unidad de estudio), fue 5,8±9,4 en estratos bajos y 1,3±3,4 en estratos
medio y altos, las diferencias fueron significativas (Prueba t-student, valor p <0,0001).
El 11.4 % de los niños/as de cinco años de instituciones educativas de estratos bajos no habían
tenido nunca experiencia de caries (cpod-m=0), mientras que en los estratos altos la proporción
aumenta a 49 %. Valores cpod-m entre 1 y 2 fueron encontrados en el 33,7% en estratos bajos y
30% en los altos, mientras que valores cpod-m mayores de 4 se encontraron en 33,7 % y 6% en
estratos bajos y altos respectivamente, figura 6.
Figura 6. Distribución de los niños/as de 5 años de las Instituciones Educativas de estratos
bajos, medio y altos, según el valor del cpod-m. Medellín, 2009
11,4
33,7
21,3
33,7
49
30
15
6
0
10
20
30
40
50
60
70
cpod-m
E. Bajo E. Alto
0 1-2 3-4 5 o más
43
En cuanto a la severidad de las lesiones de caries encontradas en los niños/as de 5 años, la
distribución muestra que el 68 % y 73 % corresponden a lesiones iníciales en el esmalte en
estratos bajos, medio y altos, respectivamente. En el estrato alto no se encontraron lesiones con
probable compromiso pulpar y en el estrato bajo estas representan el 6%.
El promedio de dientes cariados, obturados y perdidos a causa de la caries dental, calculado con
base en el cpod-c en el tercil de los niños/as más afectados, Índice Significante de Caries (SiC),
fue 5.3±3,0 en ESE bajos y 3.0±1,2 en ESE medio y altos.
En cuanto a la pérdida prematura de molares primarios a los cinco años, el 5,3% de los niños/as
de estratos bajos habían perdido al menos un molar temporal debido a caries dental y el 1,2%
habían perdido dos molares; mientras que en los niños/as de las instituciones educativas de
estratos medio y altos no se presentó perdida de molares.
3.2.3 Acceso a los servicios de salud bucal: una mirada desde los niños, niñas y jóvenes
En este estudio, el acceso se abordó a través de una encuesta realizada a 1 461 niños, niñas y
jóvenes de 12, 15 y 18 años y en ella se contemplaron dimensiones relevantes para el acceso que
incluyen algunas de las propuestas en relación con el acceso potencial y real por Aday, Andersen
y otros,31,55
donde sobresalen las siguientes:
La relación de los niños, niñas y jóvenes con los servicios de salud bucal
En la relación de niños, niñas y jóvenes con los servicios de salud bucal, es importante destacar
como la predisposición, creencias y actitudes en relación con el componente bucal de la salud y
los servicios que se relacionan con el mismo, permiten reconocer la manera como se aproximan
los niños(as) como usuarios, al sistema de salud y finalmente la construcción que hacen sobre los
procesos de salud-enfermedad-atención. De acuerdo con la encuesta, niños, niñas y jóvenes de
estratos altos y bajos consideran la consulta odontológica como una posibilidad para la
prevención de enfermedades y el mejoramiento de la estética, tanto desde el motivo de su última
consulta como para la consulta potencial.
44
En relación con lo preventivo, existe una clara concepción de la importancia de asistir a los
servicios odontológicos, que se expresa tanto en el motivo de consulta para la ultima atención
como en la identificación de la consulta potencial. En la primera, los niños(as) de estratos medio
y altos (60,59%) y bajos (52,08%) tienen como motivo de su última consulta aspectos
relacionados con la búsqueda de diagnósticos: “para ver como iba mi estado oral” y actividades
preventivas (sellantes, flúor, limpieza, control de erupción) lo cual es similar para su
manifestación de la necesidad futura de consulta, donde expresan la posibilidad de mejorar sus
hábitos de higiene bucal en su interacción con el talento humano en odontología, “porque me
gustaría tener los dientes limpios”, “para cuidarme mejor los dientes”. Así mismo, se hace
evidente la necesidad de asistir a consulta odontológica como la manera de marcar una diferencia
para recuperar o mantener el bienestar: “para ver cómo está la salud de los dientes”, “porque es
bueno frecuentar al odontólogo”, “porque mi mamá me dice que cada 6 meses” y asociado al
control prenatal que se expresa como motivo de su asistencia pasada y potencial: “porque estoy
en embarazo”, “rutina, porque en embarazo hay que ir.”
Finalmente es importante resaltar para los estratos bajos (9,89 %) la permanencia de una relación
con los servicios de atención odontológica está ligado a los momentos en que la salud hace crisis,
pues es a partir del dolor por agudización de procesos patológicos o por erupción de terceros
molares que se piensa en consultar: “me dolía mucho una muela”, “porque a veces me duelen las
muelas de atrás”.
En relación con lo estético, se priorizan aspectos relacionados con la maloclusión y con la
posibilidad de mejorar la apariencia a partir de los dientes, desde dos procedimientos clínicos: la
ortodoncia y el blanqueamiento. El blanqueamiento es un procedimiento que aunque se presenta
como motivo de consulta anterior en un 1,45 % para los estratos bajos y 1,47 % para medio y
altos, y consulta potencial en un 4,9 % para los medios y altos y 6, 4 % para los bajos; resulta
significativo por el tipo de tratamiento y los motivos que hacen que se convierta en una necesidad
para los usuarios(as). Este procedimiento se demanda a partir de una sensación de necesidad
“Porque yo siento que necesito blanquear más mis dientes”, deseo “Porque me quiero hacer un
blanqueamiento” o baja aceptación “Porque tengo los dientes muy feos, amarillos”.
45
La ortodoncia como procedimiento que puede mejorar los aspectos funcionales y estéticos, se
expresa como motivo de consulta pasada y potencial en un mayor porcentaje que el
blanqueamiento para los estratos medio y altos, 23,64 % en el motivo de consulta y 15,1% para
la necesidad potencial. En los estratos bajos se presenta en un 8,53% para el motivo de consulta
y un 17,5% para la consulta potencial y está asociado a la percepción de malposición dentaria
(dientes separados, juntos, torcidos, montados, disparejos, mal acomodados, mala mordida etc.),
o a una necesidad social “Porque no me han hecho la ortodoncia” y tratamiento actual “Revisión
de control de ortodoncia”. Este aspecto llama la atención pues el considerar la maloclusión como
una prioridad para la consulta nos habla de una sensación asociada al mejoramiento de las
condiciones básicas de salud bucal, en una búsqueda que supera lo urgente para pasar al
perfeccionamiento de las condiciones dentales y que puede interpretarse como una expresión de
cómo la disminución del fenómeno de caries dental está construyendo necesidades donde la
percepción de tener maloclusiones entra a ser un problema prioritario que deben resolver los
servicios de salud bucal. Este asunto se torna de gran importancia en el análisis, pues entraría a
considerarse como un aspecto de demanda insatisfecha que puede percibirse por parte de los
usuarios como una barrera o aspecto inequitativo para el acceso a los servicios.
Desde sus experiencias, niños y niñas expresan además, lo que según ellos es prioritario para los
servicios de salud en relación con la información que les brindan y así encontramos como según
el 62,1 % de escolares de los estratos medio y altos y el 58,8 % de los bajos, manifiestan que el
personal de salud bucal les brinda información posterior al tratamiento siendo relevante (65%
para los estratos bajos y 65,4 % para los altos), las instrucciones que se relacionan con la
motivación hacia el cuidado bucal y la utilización de los elementos de higiene. Estos aspectos
preventivos, se confirman a partir de la aceptación de estos elementos para la higiene, que se
refleja en su uso, mostrando en lo que concierne al cepillado tanto para los estratos bajos como
medio y altos, el mayor peso porcentual al cepillado entre 2 y 4 veces al día, figura 7.
46
Figura 7. Distribución porcentual de la frecuencia de cepillado por día según
estratos. Escolares de instituciones Educativas de Medellín, 2009
1,6
23,4
65,4
8,5
1,11,8
35,9
56,2
5,11
0
10
20
30
40
50
60
70
80
90
100
1 2 3 4 mas de 4
Po
rcen
taje
Numero de veces
Estratos bajos Estratos altos
Respecto a la utilización de la seda, es importante destacar cómo el mayor porcentaje para ambos
estratos (36,5% para los bajos y 29,5% para medio y altos), se presentó en niños, niñas y jóvenes
que dicen no utilizar la seda dental en su rutina diaria de higiene, haciendo pertinente la revisión
de las estrategias de motivación y educación sobre hábitos, que son impartidas por quienes
trabajan por la salud bucal en la ciudad, para lograr no sólo niveles de aceptación y utilización de
la seda similares al cepillo, sino también para mejorar su calidad, figura 8.
Figura 8. Frecuencia de uso de la seda dental en escolares de las Instituciones
Educativas de Medellín, 2009
36,5
17,5
15,0
18,0
12,9
29,5
22,6
15,7
11,1
21,2
0
10
20
30
40
50
no usa 1 2 3 mas de 3
Po
rcen
taje
Numero de veces
Estratos bajos Estratos altos
47
La utilización real de los servicios
Los resultados nos permiten analizar algunas condiciones de accesibilidad relacionadas con la
asistencia, donde sobresalen entre 1 461 encuestados, un 6,9 % que nunca ha asistido a consulta
odontológica. De ellos(as) el 97 % pertenecen a los estratos bajos principalmente en las edades de
12 (43,6 %) y 15 años (41,6 %), quienes se hacen representativos en la medida que la inasistencia
a los servicios odontológicos puede asociarse con las separación de unas familias de la afiliación
al sistema de seguridad social y/o de la ausencia de canales efectivos de remisión desde los
programas de crecimiento y desarrollo. Esto representaría, así mismo, un incumplimiento, por
parte de las instituciones, de lo contemplado en el articulo 5 de la Resolución 412 de 2000 donde
se obliga a las EPS y ARS a “implementar estrategias que le garanticen a sus afiliados, de
acuerdo con las condiciones de edad, género y salud, el acceso a las actividades, procedimientos
e intervenciones de protección específica y detección temprana así como la atención de
enfermedades de interés en salud pública”.61
Adicionalmente, la falta de asesoramiento durante
los primeros años de vida en relación con la salud bucal puede afectar el desarrollo físico y
psicosocial de niños y niñas.
Así y de acuerdo a la tabla 10 y la figura 9 puede también apreciarse el comportamiento de la
utilización de los servicios según el tipo de aseguramiento y la zona de la ciudad donde se ubican
los usuarios.
Tabla 10. Experiencia de acceso a los servicios de salud odontológicos de escolares de
Medellín según tipo de aseguramiento. 2009
Tipo de aseguramiento
Acceso a Servicios
Contributivo
Subsidiado
No asegurado
Ha asistido 95,9 % 89,5 % 89,7 %
Nunca ha asistido 4,1 % 10,5 % 10,3 %
48
Figura 9. Proporción de escolares que han consultado alguna vez a los servicios de salud
bucal por zonas. Escolares de Medellín 2009
La inasistencia a los servicios de salud bucal es representativa además, en la medida que esta
inasistencia se asocia de acuerdo con las respuestas de los escolares, con descuido y miedo a los
procedimientos (37,7 %), “es que me da pereza”, porque le tengo miedo”; con dificultades de
los padres (36 %), “Porque mi mamá tiene mucho trabajo”, “porque mi mamá no me ha
llevado”; a dificultades económicas que impiden el acceso (14,7 %), “porque a mi mamá no le
han pagado”, “porque no hemos tenido plata” y a dificultades para obtener la cita (9,8 %),
“porque en el centro de salud es muy difícil que le den cita”; aspectos que invitan a pensar en la
información/motivación que ofrecen los servicios y las barreras que se generan en los mismos.
Los datos anteriores coinciden con los motivos de quienes ya habiendo consultado alguna vez,
creen necesitar una nueva consulta, pero no han hecho efectiva esta pretensión que en relación
con el tipo de aseguramiento se distribuyen porcentualmente de acuerdo con la tabla 11 y de
acuerdo a los motivos que expresan según estrato, los principales se asocian con la falta de interés
(31,3 %) “A uno se le olvida, como que no le da importancia”, y las ocupaciones de los padres
Zona 1 91,9 %
Zona 2 93,2 %
Zona 3 96,4 %
Zona 4 93,5 %
Zona 5 99 %
Zona 6 96,7 %
49
(22,8 %), “Porque mi mamá está ocupada y mi papá no puede”. En los estratos bajos, las causas
para no buscar esta nueva consulta se relacionan igualmente con la falta de interés (31,3 %) en
términos ausencia de enfermedad: “Porque no me han dolido los dientes” y las ocupaciones de
los padres (17,1 %), a quienes sus jornadas laborales no les permiten tener presente el trámite
para la consulta odontológica, hecho que refleja cómo la utilización de los servicios ocurre para
los niños(as) con su desconocimiento de los procesos, asociado a la dependencia de un adulto
responsable quien debe tramitar las acciones que permiten el acceso al sistema “Porque yo no sé
pedir la cita”.
Tabla 11. Necesidad percibida de consulta a los servicios odontológicos por parte de
escolares de Medellín, de acuerdo con su tipo de aseguramiento, 2009
Tipo de aseguramiento
Necesidad
Contributivo
Subsidiado
No asegurado
Necesita asistir 30,3 % 18,2 % 17,2 %
No necesita 69,7 % 81,8 % 82,8 %
Así mismo, se encuentran algunas condiciones que dificultan el ingreso o reingreso a los
servicios que se detallan a continuación:
Aspectos relacionados con el manejo de la economía familiar: la economía familiar en cabeza de
los adultos responsables, requiere de la priorización de las actividades que pueden realizar los
miembros de la familia. Es así como se expresa para los estratos bajos (13,2 %) la dificultad de
acceso al servicio, tanto en lo relacionado con los procedimientos de odontología general como
especializada, asociado a los altos costos de los tratamientos particulares, la priorización de las
necesidades básicas, la destinación de un ahorro, “Mi mamá ha estado ahorrando la plata para
poder pagar” o la necesidad de tomar turnos para la atención: “Porque primero le están
haciendo el tratamiento a mi hermana”. El acceso a los servicios odontológicos, desde este punto
de vista se encuentra limitado por sus costos y no cubrimiento de la totalidad de los tratamientos.
Este aspecto se hace presente en los estratos altos en menor proporción (4,2 %).
50
Factores asociados al derecho y prestación del servicio: aquí se encuentran las barreras más
sobresalientes para el ingreso al sistema en cuanto reflejan, para los estratos bajos (16,5 %),
aspectos de inequidad en el acceso a los servicios de salud, como la dificultad para la obtención
de citas en el SGSSS por cuotas/multas pendientes: “es muy difícil porque yo debo una multa”;
congestión telefónica, “es muy difícil conseguir la cita por teléfono”; largos tiempos de espera en
la solicitud personal “he estado por pedir la cita pero me da pereza ir allá a sentarme al Centro
de Salud”; agendas llenas, “Me están pidiendo la cita y que no hay”; citas en el mediano o el
largo plazo, “Me da pereza pedir citas porque se demoran mucho”, y congestión en el régimen
subsidiado “porque es difícil la cita por Sisben”.
En relación con el derecho al servicio, los obstáculos para consultar se refieren a los tiempos de
espera o dificultades para efectivizar la afiliación “Porque tengo problemas con los papeles y
particular vale mucho”, “porque según las reglas, allá no se ha cumplido el tiempo pa`pedir la
cita”; así como los obstáculos que se derivan de los trámites relacionados con la afiliación y
carnetización “Porque ya no tengo EPS, están haciendo la nueva encuesta y antes porque no
había plata” “Porque no me han dado el carné de la EPS”, cambio de residencia “Porque antes
vivíamos en Bogotá y aquí no hemos pedido cita”; cedula de ciudadanía en trámite “Nunca he
pedido cita y una vez que fui no me atendieron porque no había sacado cédula” y desempleo de
los padres “Mi papá se salió de trabajar”.
De otra parte y en referencia al tiempo transcurrido desde la última consulta odontológica, los
rangos más representativos se encuentran en los niños, niñas y jóvenes que consultaron los
servicios odontológicos hace 0 a 5 meses, con un 43,3 % para estratos bajos y 63,8 % para medio
y altos. En segundo lugar se encuentra la consulta que se realizó hace 6 a 11 meses para los
estratos medio y altos (19,8 %) y la que se realizó con un tiempo que supera los 12 meses para
los estratos bajos (39,8 %), figura 10.
51
Figura 10. Distribución de los escolares según el número de meses transcurridos desde la
última consulta odontológica. Instituciones Educativas de Medellín, 2009
43,3
17,0
39,8
63,8
19,816,4
0
10
20
30
40
50
60
70
80
90
100
0-5 m 6-11 m mayor a 12 m
Po
rcen
taje
Estratos bajos Estratos medio y altos
Meses
Si bien los mayores porcentajes se encuentran asociados a las periodicidades que han sido
promocionadas desde la profesión y los medios de comunicación y a las estipuladas en las guías
de atención de la resolución 412 para las actividades preventivas en odontología, es primordial en
este punto, llamar la atención sobre la importancia de tener presente en la orientación a los
usuarios, no solo estas directrices, sino también la valoración de riesgo de caries, como una
posibilidad para diferenciar a quienes son más o menos susceptibles, aumentando sus
oportunidades para prevenir o controlar su enfermedad62
y teniendo presente el contexto
socioeconómico en que vive.
Satisfacción de los niños/niñas con los servicios de salud bucal
Entre los niños y niñas que han tenido contacto con los servicios de salud, se expresan algunas
condiciones de satisfacción con el servicio que se asocia con los tiempos de espera y la calidad de
la atención. En relación con los tiempos de espera para ser atendidos, los/as escolares de estratos
altos (99 %) y bajos (94.8 %) expresan su satisfacción, pues la atención recibida en los diferentes
servicios fue puntual, con una apreciación de atención inmediata o de cortos tiempos de espera.
Así mismo, su percepción sobre la calidad de atención es valorada como buena para el 88,7 % en
los estratos bajos y el 98,6 % para los estratos altos, aspecto que sostienen a pesar de considerar
52
la consulta odontológica como incómoda en relación con el dolor durante o después del
procedimiento y el disgusto con los sonidos y objetos punzantes propios del servicio.
Finalmente y aunque quienes califican como mala la calidad de la atención recibida solo
corresponden al 1.9% para los estratos bajos y al 1.38% para los estratos altos, es importante
analizar sus justificaciones como insumo para las acciones de mejoramiento continuo que deben
hacer parte de las instituciones prestadoras de servicios de salud bucal. Estas son la actitud de
algunos profesionales que califican como grosero, mal genio, problemático y con problemas en la
comunicación como la ausencia de información sobre la condición que esta tratando en el
niño(a), o los regaños y comentarios negativos acerca de las condiciones de salud bucal del
usuario. Así mismo, la calidad de atención evaluado como mala por los niños(as) a partir de que
se provoca mas dolor del necesario, mas citas de las necesarias, insatisfacción con el resultado, la
falta de indicaciones y el no saber que le hicieron.
3.3 Discusión
En la ciudad de Medellín se han realizado desde 1968 hasta el año 2010, siete estudios sobre la
situación de salud bucal de los escolares de la ciudad. Si bien es cierto, en estricto sentido, los
objetivos, las edades incluidas y la metodología de estos estudios no son cien por ciento
comparables, esto no invalida la oportunidad que ha tenido la ciudad de monitorear la tendencia
de los problemas, principalmente el de la caries dental. El último monitoreo, el sexto, se había
realizado en el año 2006 en colegios oficiales que albergaban predominantemente estudiantes de
ESE bajos y en el 2007, en colegios no oficiales con estudiantes de estrato medio y alto.
Este VII monitoreo fue realizado con una metodología semejante a la que se usó en el estudio
pasado de tal manera que las comparaciones de los resultados fueran confiables. Incluyó de
nuevo muestras probabilísticas de estudiantes de estratos bajos, medio y altos; utilizó el mismo
sistema de diagnóstico del problema caries dental y aunque no evaluó la fluorosis dental por las
razones ya comentadas en la introducción, sí indagó por la experiencia de los escolares con el
acceso a la atención odontológica.
53
La evaluación de la calidad del cepillado; observación que se ha mantenido a lo largo de estos
estudios como una forma de evaluar indirectamente el resultado de las acciones educativas
emprendidas en programas como el de Escuelas y Colegios Saludables, muestra que estas
acciones no sólo deben mantenerse sino también mejorarse y posiblemente replantearse en
términos de su metodología, por cuanto el indicador promedio para las cuatro edades estudiadas
(8, 12, 15 y 18) fue 40.7% de las superficies dentales con biopelícula, lo que significa que cerca
de la mitad de las superficies siguen en riesgo aún después del cepillado. Comparado con los
resultados del VI Monitoreo,5 la calidad del cepillado de los escolares ha desmejorado pues el
indicador pasó de de 23.9% a 40.3% a los 12 años, situación que corrobora lo que se había
advertido cuando se señaló que hay debilidad en la construcción de hábitos saludables y se
sugirió la necesidad de superar la concepción reduccionista de educación para la salud, entendida
como simple transmisión de conceptos y elementos técnico instrumentales, impartidos por
profesionales de la salud que intentan transformar hábitos, desde acciones fundamentadas en el
modelamiento conductual, y que desconocen los contextos de sentido en el que estos se
producen.6
A pesar de lo anterior los resultados de la evaluación de la experiencia de caries y el promedio de
dientes afectados (CPOD) son positivos. El índice CPOD clásico (sólo lesiones cavitarias) sigue
mostrando tendencia al decrecimiento pasando de 0.98 a 0.70 en el ESE bajo y de 0.74 a 0.40 en
los estratos medio y altos. Coherentemente con esto la proporción de escolares con experiencia de
caries bajó de 54,8 a 35,5 en el ESE bajo y de 66,3 a 23.9 en el alto. Esto significa que en la
ciudad cada vez son menos los niños, niñas y jóvenes que sufren la caries dental y que el
Municipio cumple con la meta nacional de tener un CPOD < 2,3 a los 12 años.7 A los 15 y 18
años, los valores del CPOD (Tabla 4) son menores que los encontrados en otras ciudades
latinoamericanas.63,64
Con estos resultados, Medellín sigue haciendo parte de las ciudades y países que redujeron
sensiblemente la experiencia de caries en su población joven en las últimas décadas del siglo XX
y en el inicio del siglo XXI;65
según la OMS, actualmente cerca del 70% de los países alcanzan la
meta de un CPOD ≤ 3.0 a los 12 años.66,67,68
Aunque debe reconocerse que el problema está lejos
54
de ser controlado y por el contrario se ha ido polarizando como muestra de un problema que de
manera clásica expresa las desigualdades en salud, en muchos lugares del mundo.17,69,70
La polarización del problema de caries dental en el municipio de Medellín, es decir la
concentración de la mayor parte de la enfermedad y de las necesidades de tratamiento en un
pequeño grupo de población, fenómeno ya reportado en otros estudios,20,71
la corrobora el análisis
del comportamiento del Índice Significante de Caries (SiC),72
pues mientras el CPOD global
(ambos estratos) a los 12 años es de 0,68(1.5), el SiC, o sea el CPOD de la tercera parte más
afectada de los escolares, es de 2,0(2.0), es decir, tres veces mayor, aunque la cifra indica que la
ciudad también ha alcanzado la meta propuesta para el 201525
y que el valor es menor que el
reportado en otros estudios latinoamericanos.17,73,74,75,76,77
Este índice que aporta información relevante sobre el impacto de la enfermedad en los individuos
más afectados, debe ser tenido en cuenta por las autoridades de salud, los profesionales de la
odontología y los investigadores para replantear varias de sus estrategias de trabajo. De un lado,
el modelo de prestación de servicios que sigue siendo el mismo que existía cuando el problema
era generalizado en la ciudad y de otro, la manera como deben abordarse los próximos estudios
tratando de hacer un aporte más significativo en el reconocimiento y caracterización de la
población más afectada.20,78
Comentario especial merece lo ocurrido con el índice CPOD modificado (incluye las lesiones no
cavitarias y cavitarias limitadas al esmalte). Los resultados muestran que contrario a lo ocurrido
con el CPOD clásico, los valores del índice modificado varían de manera diferente entre uno y
otro estudio. En el VI Monitoreo el CPOD-M a los 12 años es de 1.42 y 1.71 para ESE bajos y
medio y altos, respectivamente. En este Monitoreo, el mismo índice a la misma edad es de 3.81 y
1.38 para bajos y medio-altos. ¿Qué puede explicar el comportamiento de este índice en el ESE
bajo?
El análisis sugiere dos explicaciones: (i) Coherente con el incremento de los porcentajes de
superficies dentales con biopelícula hay un incremento en este tipo de lesiones; lo que supone la
55
necesidad de reforzar los programas educativos, como ya se dijo, y hacer una vigilancia más
constante sobre esta situación que claramente indica un incremento en las probabilidades de tener
más escolares afectados con caries cavitaria; (ii) Pese a la calibración, puede haber ocurrido un
sesgo en los examinadores quienes diagnosticaron en algunos casos las manchas propias de la
fluorosis, de alta prevalencia en la ciudad, como lesiones no cavitarias. De ser esta la explicación,
sugiere que este debe ser un aspecto de máxima atención es estudios futuros.
La situación particular de los y las jóvenes de 18 años merece un comentario aparte en tanto no
son muy frecuentes los estudios en esta edad16,79
y porque ellos y ellas son sujetos específicos de
algunas de las metas del milenio.80
Aunque la experiencia de caries en este grupo también tiene
una tendencia a la reducción, no puede pasar desapercibido que entre los 12 y los 18 años, pasan
de ser 35 a 60 por cada cien, los afectados por este problema; que el porcentaje de superficies con
biopelícula (38,8) no difiere significativamente del promedio global (40,7) y que no se ha logrado
un indicador de cero pérdidas dentarias por caries en los y las jóvenes de estratos bajos (2,6% han
perdido uno o más dientes por esta causa) como una muestra más de las desigualdades, puesto
que en el ESE medio y altos este indicador es igual a cero.
De otro lado, el tema del acceso explorado en este Estudio sugiere globalmente, además de las
reflexiones ya anotadas en la presentación de los resultados, que el acceso de niños, niñas y
jóvenes a los servicios está mediado por situaciones ya conocidas de naturaleza económica,
cultural, social y organizacional. Sin duda podemos reconocer una cultura de la prevención
arraigada en la subjetividad de la mayoría de los y las escolares, que favorece su actitud hacia el
cuidado; esto sin embargo, resulta insuficiente ante la presencia de algunas barreras económicas y
organizacionales que limitan el derecho a la atención y ante la arremetida del mercado que crea
necesidades que fácilmente los hace dependientes de intervenciones de alto perfil estético como
el de la ortodoncia e incluso el blanqueamiento.81
Esto coincide con algunos de los hallazgos
reportados en el componente cualitativo del VI monitoreo, que muestran que la preocupación
fundamental de los estudiantes respecto a la salud bucal está centrada en la necesidad de cumplir
con ciertos requisitos estéticos dominantes en la cultura e impuestos por los criterios de la
odontología de mercado y los medios masivos de comunicación. Además se afirma frente al
desarrollo de prácticas saludables, que no basta con el deseo, el querer hacer algo o la convicción
56
de que hay que hacerlo, si no se cuenta con las condiciones básicas o los recursos mínimos
necesarios, como es en este caso particular, el acceso a la crema, a la seda dental y/o a la consulta
odontológica de manera oportuna.15
Finalmente, la cifra de un 7,0 % de los y las escolares que a pesar de tener 12 años o más, nunca
han recibido atención odontológica, refuerza los argumentos sobre inequidad e invita a la
reflexión sobre la experiencia de otros países que han dispuesto el acceso universal a la atención
para la población entre cero y 18 años.82
Este nuevo Monitoreo refrenda el interés por los niños, las niñas y los jóvenes de la ciudad de
Medellín como parte de una opción política que ha quedado ratificada en el Código de Infancia y
Adolescencia que adoptó Colombia en el año 2006.2 Esto sin embargo no impide considerar dos
situaciones particulares, de un lado, que están excluidos de este Estudio los niños, niñas y jóvenes
no escolarizados, que aunque no lo reconozcan las cifras oficiales, se presume que son un número
significativo teniendo en cuenta, la situación social que vive la ciudad, la deserción escolar
reiteradamente denunciada y aquellos y aquellas llegados masivamente como desplazados del
campo a engrosar los cinturones de miseria de la ciudad y que no entran en dichas cifras. De otro
lado la preocupación por la población joven no oculta la realidad de la ciudad cuyos servicios
están desbordados por la atención a los adultos, de quienes no conocemos su situación real de
salud bucal desde hace más de 10 años, reportada en el ENSAB III;83
sólo conocemos
empíricamente la insuficiencia de los servicios para atender su demanda.
En conclusión, la situación de salud bucal de la población joven de la ciudad de Medellín es
buena, se cumplen las principales metas del Plan Nacional de Salud Pública, sin embargo
problemas como el de la polarización de la caries o la existencia de barreras para el acceso a los
servicios de salud, sugieren que es necesario reducir las desigualdades socio-económicas y
adoptar medidas de salud pública dirigidas a los grupos más vulnerables. Intervenciones que
desde una perspectiva de solidaridad, equidad y responsabilidad, se preocupen por el bienestar de
todos y todas y en particular por las condiciones propias de niños, niñas y jóvenes en relación con
el componente bucal de la salud, mediante abordajes que trasciendan el sólo objetivo de cumplir
con las metas establecidas.
57
3.4 Conclusiones
La situación de salud bucal de la población joven de la ciudad de Medellín puede catalogarse
como buena, dado que se presenta una tendencia a la disminución de los indicadores de caries
dental de referencia internacional para el seguimiento de este problema de salud bucal.
Se cumplen las metas en salud bucal del Plan Nacional de Salud Pública 2007 - 2010,
acogidas por el Plan Municipal de Salud, de acuerdo con las directrices del Ministerio de la
Protección Social.
Continúan siendo evidentes problemas como el de la polarización de la caries y la existencia
de barreras para el acceso a los servicios de salud.
3.5 Recomendaciones
Problemas como el de la polarización de la caries o la existencia de barreras para el
acceso a los servicios de salud, sugieren que son necesarias múltiples intervenciones y
quizás la reforma de algunas de las que hoy están en marcha. Intervenciones que desde
una perspectiva de solidaridad, equidad y responsabilidad, se preocupen por el bienestar
de todos y todas y en particular por las condiciones propias de niños, niñas y jóvenes en
relación con el componente bucal de la salud, mediante abordajes que trasciendan el
objetivo de cumplir con las metas.
Sobre la base de los resultados de este Estudio, es recomendable avanzar en iniciativas
que complementen las respuestas de los escolares sobre el acceso a la atención con las de
los padres de familia y las Instituciones Prestadoras de Servicios de salud en Medellín,
pues es indispensable la perspectiva de todos los actores para la planeación de la
prestación de los servicios.
Es conveniente adelantar la implementación de estrategias educativas que además de
concretar los mecanismos adecuados para la utilización apropiada de los elementos para
la higiene bucal, privilegien lo relacionado con la manera de relacionarse con los servicios
como una apuesta por el fortalecimiento del derecho a la salud.
58
Es importante realizar una concertación entre los organismos gubernamentales, y las
comunidades académicas y gremiales relacionadas con la odontología para explorar la
posibilidad de orientar a los padres y jóvenes en relación con la pertinencia e indicaciones
para procedimientos estéticos.
4. COMPONENTE CUALITATIVO: Apropiación del modelo educativo en salud bucal
como objeto de aprendizaje en el escenario escolar
4.1 Sustentación metodológica
4.1.1 Estudio orientado desde la lógica de la investigación cualitativa
“…y cada vez es más claro para nosotros que el sentido
mismo no es otra cosa que lo inagotable del significado, lo
disperso, confuso e infinito del significado o, dicho de otro
modo, el movimiento vertiginoso del intercambio, del
transporte y de la pluralidad del significado” Larrosa y
Skliar
La adopción de una metodología particular para el abordaje del objeto de estudio es una decisión
que hay que tomar con mucho cuidado en todo proceso investigativo, teniendo en cuenta que ha
de garantizarse completa correspondencia entre el propósito del estudio, las características del
fenómeno social que se pretende analizar – su naturaleza, los sujetos implicados y las condiciones
de ocurrencia- y la lógica que subyace en el procedimiento a seguir, junto con las posibilidades
reales de las herramientas que lo apoyan.
De acuerdo con lo anterior y teniendo en cuenta que hay un interés fundamental de comprender
lo que está sucediendo en las instituciones educativas respecto a la salud bucal como objeto de
aprendizaje, para sustentar la elección hecha por la investigación cualitativa, como lógica
orientadora del Estudio, es pertinente que primero se presente lo que se entiende por
“comprender” en una investigación de esta naturaleza, en la que están implicados los actores
educativos –estudiantes y maestros-.
59
Es por eso que, partiendo de la convicción de que comprender implica “aprender a ver más allá
de lo cercano y de lo muy cercano, sin desatenderlo, sino precisamente verlo mejor integrándolo
en un todo más grande84
” , en este proceso investigativo se dio la posibilidad del acercamiento
personal y profundo – tipo conversacional- entre investigadora y participantes alrededor de
situaciones que configuran la cotidianidad de la escuela y dentro de las cuales lo referente a la
salud oral fue emergiendo de una manera natural, sensible, contextuada y dotada de sentidos, los
que cada actor/a le otorga de acuerdo a sus propias experiencias y a las que construye con sus
grupos de referencia.
Teniendo en cuenta que “el ser humano expresa su interioridad mediante manifestaciones
sensibles, y toda expresión humana sensible refleja una interioridad, y que no captar, por tanto, en
una manifestación, conducta, hecho histórico o social, esa dimensión interna, equivale a no
comprenderlo85
”, en este Estudio, se prestó especial cuidado de no pasar de largo por las
expresiones, sentires u opiniones de los participantes y simplemente registrarlos como si se
tratara de una información cualquiera que se puede analizar aisladamente del entorno de
producción. Consecuente con este autor y muchos otros que han teorizado no sólo sobre el
fenómeno de la comprensión humana sino de la investigación cualitativa como una manera de
aproximarse a la comprensión detallada de las perspectivas que los seres humanos tienen de la
experiencia vivida, se dieron los espacios y se construyeron relaciones de confianza para la
expresión tranquila y para volver sobre los aspectos que no fueron aprehendidos en primera
instancia, buscando en todo caso, llegar hasta las raíces del fenómeno en cuestión, con rigor
científico más no con rigidez y con una relación permanente de reflexividad.86
En este sentido, aproximarse al escenario escolar con la intensión expresa de comprender la
manera como se experiencia la salud bucal en él, qué tanto han apropiado, quienes lo
constituyen, el modelo educativo de salud bucal y hasta qué punto se ha desarrollado en ellos y
ellas su compromiso con la promoción de la salud bucal, es una apuesta que no podría tener otro
camino que el señalado por el paradigma cualitativo, por la posibilidad que ofrece de acercarse a
esta realidad como un todo cuyo sentido se produce en la interrelación de los elementos que lo
configuran.
La metodología cualitativa se fundamenta en una concepción heterogénea, reconstructiva y
holística de la realidad, la cual es configurada mediante procesos intersubjetivos y de permanente
60
interpretación entre quienes comparten contextos cotidianos de actuación, que no podrían de
ningún modo reducirse a variables previamente establecidas por quienes asumen la tarea
investigativa. Desde esta perspectiva, en la lógica cualitativa, las personas y los escenarios son
parte constitutiva de un todo, lo que quiere decir, que cada persona experimenta un
acontecimiento dentro del contexto al que está vinculada,87
razón por la cual su voz individual y
su sentir particular tienen especial importancia en el intento de comprender.
Estos “intentos de comprender totalidades como proceso en movimiento”88
en una institución
como la escuela, en la que confluyen visiones, perspectivas, posturas, intereses y motivaciones de
tan diverso orden, pudieron llevarse a feliz término gracias a que para este proceso de indagación
se abordaron las relaciones y reacciones en contextos naturales y en su desarrollo subjetivo e
intersubjetivo, es decir, tal como las viven los actores, como las expresan y con los sentidos que
les otorgan. Dicho de otra manera, para el caso particular de este estudio, “la subjetividad es un
recurso y no un problema para una explicación teórica y práctica satisfactoria”89
del fenómeno
social denominado salud bucal en la escuela.
Este reconocimiento del sujeto como constructor de la realidad, en un mundo de múltiples
pertenencias, donde el sentido se construye en presencia y relación con los otros, ha hecho que no
se tenga que renunciar a la posibilidad de construir regularidades –categorías- y explicitar
inclinaciones –tendencias-, vistas como constantes que emergen y se tejen en torno a la
configuración del campo de análisis, como una manera de hacer inteligible el fenómeno social en
cuestión e incluso abrir una ventana a “la posibilidad del cambio y la creación de una realidad
deseable, no sólo el enfoque en las realidades actuales”.90
4.1.2 Criterios de inclusión de los(as) participantes
Para la inclusión de los participantes en el estudio se tuvieron en cuenta los siguientes criterios:
Pertenecer a instituciones educativas oficiales vinculadas a la Estrategia Escuelas
Saludables de la Secretaria de Salud de Medellín durante el año 2009.
Docentes, directivos docentes, niños y niñas que participaron en el componente de
promoción de la salud bucal, desarrollado en el marco de la Estrategia Escuelas
Saludables de la Secretaria de Salud de Medellín durante el año 2009.
61
4.1.3 Técnicas e instrumentos
Relatos de experiencias en contexto de grupos focales
“La vida, como unidad inteligible, no es algo dado, existente por fuera del relato, sino que
se configura de acuerdo con el género discursivo/narrativo en cuestión, y en el marco de
una situación y una esfera determinada de la comunicación”,91
de ahí el valor de esta
técnica como forma de conectar pasado y presente, de dar cuenta y visionar, de recordar y
anticipar y sobre todo, de reconstruir con otros y otras las experiencias que han sido
significativas por lo mucho que han aportado o por la carencia que las ha caracterizado.
Se realizaron cinco grupos focales con educadores de primero y tercero de básica
primaria, pertenecientes a cinco instituciones educativas oficiales que hacen parte de la
Estrategia Escuelas Saludables del Municipio de Medellín.
Entrevista en profundidad
Se optó por la entrevista en profundidad como técnica para la construcción de los datos
porque en ella el/la entrevistado/a tiene la posibilidad no sólo de aportar información sino
de expresar sus criterios y valoraciones; narrar sus experiencias con la emoción que ellas
le generen y hacer alusión crítica respecto a sus actitudes y a las de los demás miembros
de la comunidad educativa, gracias al formato conversacional que caracteriza esta técnica.
En el caso particular de este estudio, “se trata de captar en la conversación el
acontecimiento contenido en la experiencia del sujeto que muestra la forma de
constitución creadora de la subjetividad en su singularidad y no desde generalizaciones y
significados fijos y comunes, valorando la particularidad de los acontecimientos sobre la
generalidad de cualquier concepto para llegar al sentido que le dan los sujetos a las
experiencias vividas”.92
Se entrevistaron cinco directivos docentes de instituciones oficiales, pertenecientes a la
estrategia Escuelas Saludables del Municipio de Medellín y dos niños de tercer grado de
básica primaria.
62
4.1.4 Análisis de la información
Es importante precisar que el análisis de este estudio se concibe desde una lógica inductiva, o
dicho de otra manera, el objeto de estudio se va construyendo en la medida en que se tiene acceso
a una cantidad mayor de información y se hace análisis de la misma con el fin de dar respuesta a
los interrogantes que le dieron origen.
De acuerdo con los planteamientos de Habermas,93
el análisis en una investigación cualitativa
como ésta, corresponde a una perspectiva hermenéutica de la construcción de conocimiento, en
tanto, los hallazgos no están estrictamente estructurados en los aportes informacionales que
provienen de los sujetos participantes de la investigación, sino que corresponden precisamente a
la interpretación que hace el/la investigador/a de las expresiones de significado que aparecen
como objetivaciones inteligibles de la realidad y/o del fenómeno social que interesa analizar.
Como parte constitutiva del análisis se hizo la codificación de la información, entendida según
Coffey y Atkinson como “el proceso que le permite al/la investigador/a identificar datos
significativos y establecer el escenario para interpretar y sacar conclusiones” o como una forma
de “condensar el grueso de los datos en unidades analizables, creando categorías con ellos o a
partir de ellos, para abrir la indagación y pasar a la interpretación”.94
Desde esta perspectiva de
trabajo, en el análisis se pueden diferenciar tres niveles, así:
Primero: Identificación de regularidades mediante la sistematización de la información y el
uso de la codificación abierta. Esta parte del proceso se logró haciendo un recorrido paso a paso y
con todo el nivel de detalle por las expresiones o textos que produjeron los profesores y
estudiantes participantes del estudio.
Segundo: Categorización de la información. Una vez revisado todo el grueso de la información
recogida con la aplicación de las técnicas de grupo focal, entrevista en profundidad y revisión
documental, gracias a un ejercicio que Strauss y Corbin95
denominan codificación axial, se logra
organizar en torno a cuatro grandes categorías: apropiación del Modelo de salud Bucal,
Condiciones del ambiente escolar que favorecen e inhiben la salud bucal, iniciativas novedosas
en salud bucal y compromiso de la escuela con la promoción de la salud bucal, cada una de ellas
63
con sus respectivas tendencias, como aparece en la tabla, con que se inicia el capítulo de los
hallazgos.
Tercero: Construcción del sentido. Esta fase del análisis, aún no desarrollada, se dedicará a la
construcción propiamente dicha de cada una de las categorías, es decir, a la descripción o
sustentación de las tendencias que las constituyen, las cuales fueron presentadas de una forma
sintética en la matriz categorial. Para ello, se parte de las expresiones provenientes de los
participantes y se redacta un texto en el que se logre mostrar a manera de entramado de
relaciones, el texto social producido a propósito de este ejercicio investigativo. Como insumos
para la parte del análisis que falta, se aportan los siguientes textos in vivo, es decir, que son
expresiones directas de los y las participantes respecto a cada una de las categorías.
4.2 Hallazgos preliminares
Aunque este capítulo referido a la construcción de sentido o a la interpretación del texto
producido socialmente en el ambiente escolar por estudiantes y profesores, aún no se ha hecho, se
presentan como insumo para ello los siguientes textos asociados a cada una de las tendencias ya
identificadas en la fase del análisis:
Matriz categorial
CATEGORÍAS TENDENCIAS
Apropiación del Modelo de Salud
Bucal
La responsabilidad frente a la salud , un compromiso de todas los
actores educativos
La construcción de la salud asociada a procesos subjetivos e
intersubjetivos
La salud bucal como experiencia cotidiana
Condiciones del ambiente escolar que
favorecen e inhiben la salud bucal.
La conversación como punto de partida en la construcción de
ambientes saludables
Espacios reducidos y dotación insuficiente
Eventos episódicos obstaculizadores de la construcción colectiva
de la salud
Iniciativas escolares novedosas de
salud bucal.
La escuela una institución rutinaria, ávida de novedad.
Compromiso de la escuela con la
promoción de la salud bucal
Sensibilidad y apertura institucional
Irrupción programática de la dinámica escolar que opaca la
apuesta por el trabajo cooperado.
Tímida inclusión de la salud como apuesta curricular.
64
De manera complementaria, se presentan como insumos para la finalización del Estudio,
los siguientes textos in vivo aportados por los participantes, ya ubicados en cada una de
las categorías de análisis definidas:
a) CATEGORÍA 1: APROPIACIÓN DEL MODELO DE SALUD BUCAL
TENDENCIA TEXTOS DE PARTICIPANTES
La responsabilidad
frente a la salud , un
compromiso de
todos los actores
educativos
La Secretaria manda o la Alcaldía en general manda programas, se ejecutan
y uno tiene que abrir los espacios del aula para que pasen, entonces, uno se
queda como: “ve, bueno…”
“Sería muy diferente si nosotros tuviésemos conocimiento con anterioridad
porque también hay que involucrar a los papás, los papás también deben
saber quién viene, quién interviene, para qué interviene cómo intervienen…
como todo ese tipo de cosas… y no solamente eso, si no previamente,
opino que también sería importante que ustedes expresaran o manifestaran
qué sienten ustedes, cuáles son las necesidades prioritarias, no sólo desde
las necesidades o desde las situaciones problemáticas de pronto, sino
también, pues no tenemos que trabajar solamente desde el problema si no
de otra manera…”
“Yo pensaría que tiene que ver con el bienestar, y con el bienestar en
general del ser humano, como con esas condiciones físicas, emocionales y
psicológicas entonces… Por eso entiendo un poco que por ejemplo el
programa ha trabajado lo de habilidades para la vida, y que ahí cogía como
un componente que tenía que ver con solución de problemas porque me
parece que apuntaba como hacia allá…
“Lo que nosotros tratamos de hacer es enlazar esos hábitos que deberían
haberlos adquirido en lo familiar ya, con cosas académicas como para que
los niños lo entiendan desde lo pedagógico, pero si es muy difícil como
dice ella, cuando nosotros no sabemos, un día aparecen aquí con un bulto
de cepillos entonces los niños: “ve…”
“Que cuando la Secretaria de Salud y la Secretaria de Educación piensen en
intervenciones para las instituciones, no se piense sólo en agentes de la
institución sino en comunidad educativa en general, porque a veces lo que
hacen es que llegan a trabajar con los niños y muchas veces la información
que les dan a los directivos es muy restringida, y muchas veces no tienen en
cuenta a los docentes entonces llegan a trabajar con los estudiantes. O a
veces se comunican muy abiertamente con los directivos y dejan a un lado
a los docentes, y bueno, directamente el enlace es directivos – estudiantes”.
“Porque qué bueno sería que los papás como dice Fernando, aprovechar eso
lo de la higiene oral para lo de lo académico… muchos papás no saben qué
pasa cuando uno tiene una encía inflamada o no saben o no son consientes
de la necesidad de la salud oral, no se dan cuenta de los impactos que
genera un daño en la boca y de los impactos que genera en toda la salud
¿cierto”.
65
TENDENCIA TEXTOS DE PARTICIPANTES
“Yo diría que los odontólogos estuvieron como muy conscientes de que era
importante tener en cuenta a los padres de familia pero yo solamente me di
cuenta que lo hicieron, que se vincularon con la reunión de padres de
familia, los papás venían entonces yo estoy pendiente llamando al papá y
decirle: “mire en el colegio hay un programa de salud oral, dígame si su
niño está asistiendo” pues ya, llene estos papeles; entonces lo que hicieron
fue que los niños que no habían llevado porque votaron el papel y no lo
diligenciaron, o los papás que se les olvido y los dejó, ellos se sentaron con
ellos, les explicaron la importancia y volvieron a diligenciar el papel y se
ocuparon de que casi todos los niños tuvieran la fotocopia, el registro, todo
lo que ellos necesitaban para atender a toda la comunidad”.
“Yo vi muchos profesores muy comprometidos, muy comprometidos con
esta campaña”
“Y también que en las casas a veces les quitan a veces los cepillos porque
varias personas usan el cepillo, o la mamá no está pendiente de que el niño
se cepille todos los días, esos es el único problema que he tenido”
“La familia también se tiene que comprometer con la salud oral porque en
las casas a veces les quitan a veces los cepillos porque varias personas usan
el cepillo, o la mamá no está pendiente de que el niño se cepille todos los
días, esos es el único problema que he tenido”.
“Pienso no sé hasta qué punto hubiera sido muy benéfico haber entrado,
haber hecho una reunión con los padres de familia antes de empezar para
que ellos sean conscientes de que al niño en la casa había que reforzarle lo
del cepillado y ellos estar muy pendientes de que el niño trajera su
cepillito”.
“No gastarle la seda del niño, ni quitarle la crema, ni coger el vaso para otra
cosa, porque así pasaba, yo marqué los vasos, los cepillos, marqué todo,
pero eso se salía porque le echaba marcador y eso se borra, entonces “ah,
que mi vasito que mi mamá me lo cogió y sembró una matica en él” ¿cómo
le parece? Yo creo que hay que empezar es desde la mamá o de la abuela o
la persona que esté encargada del niño”
¿Qué vengan? Muy difícil pero por lo menos la sensibilización, iniciar la
sensibilización y ya de ahí en adelante le toca es a uno, pero el tiempo, no
tienen disponibilidad de tiempo, las que trabajan porque trabajan y las que
no trabajan porque están cuidando el muchachito, tienen un montón de
cosas… es como difícil engancharlas acá a que estén viniendo ellas, no, no
lo veo como posible, uno sabe cuando inician campañas así que le toca es a
uno, uno sabe que al que le toca es a uno, dentro de su jornada uno hace lo
que le toca hasta donde pueda y no sabe que después de que salgan de acá
quede como en la conciencia de ellos que se cepillen antes de acostarse, y
al otro día cuando llegan uno les pregunta por la mañana si se cepillaron y
así, pero eso pienso yo lo importante es la sensibilización a los padres de
familia, en la familia, el respeto por el cepillo del otro, porque cómo es que
se cepillan dos y tres con un cepillo”.
66
TENDENCIA TEXTOS DE PARTICIPANTES
“Pero aquí hay una limitación grande que es una limitante muy grande y
muy significativo, y es el vínculo de la escuela con la comunidad, eso lo
hemos discutido muchísimo o sea los padres de familia pueden llegar a la
institución de otras”.
Imagínese usted, inclusive los cepillos que se les dan aquí y el último
cepillo y uno les pregunta que qué pasó “ah, que mi mamá me lo cogió y lo
dejo pa ella; eso hay que concientizarlos a ellos del respeto, de la pulcritud,
del aseo, de la higiene, un cepillo es muy personal… y hacer algo por los
dientes de sus hijos me parece que es básico, es básico que por uno
empiecen a cuidar sus dientes, de verdad que es muy importante”
“Porque esas niñas sobre el conflicto aprendieron mucho, sobre autoestima,
ella las evaluaba y yo era aterrada porque las niñas mías son de primero y
ellas hablándoles con una propiedad, pues, y participando y todo, o sea le
llega muy bien a estas niñas, de verdad que les saben llegar y saben dar el
mensaje muy bien y las niñas captan muy fácil y se apropiaron de, …eran
capaz después, cuando ella iba a evaluarlas de contarles todo lo que era un
conflicto, por qué se daban, con quiénes se dan, cómo se solucionaban,
cómo eran asertivas, por qué eran, qué era esa palabra”
“No citar mucho a los padres, no involucrarlos a ellos en muchas
actividades porque es complicado, y porque mire que cuando se reunió y se
invitaron a los padres de familia para la charla, mire que hubo mucha
asistencia, en cambio para todo el proceso como era cada 8 días, empezaron
como 8 ó 10 y luego se fueron retirando, retirando, porque no, quedaba
muy difícil”
“Yo pienso que la mayor dificultad es que algunos padres que no se
comprometen (inaudible) se quedó a lo último una y también se fue,
entonces el compromiso de las niñas excelente, el de las profesoras también
excelente, porque había el espacio para estar como en el proceso, para
acompañarlas, pero los padres de familia son muy pobres haciendo eso”
“Entonces, todas las otras maneras de entrar de lo institucional o lo estatal
son formas agresivas para ellos o para lo único que ellos ven al Estado es
para que les den; entonces, yo siento que ese es el reclamo que ellos nos
hacen a nosotros porque finalmente nosotros somos Estado también…
entonces ellos llegan a decirnos: “¿profe y cuándo le van a dar los útiles?
¿profe y cuándo le van a dar los uniformes? ¿o cuándo les van a dar no sé
qué…?”
“Me gusta que mi mamá venga a los talleres para que no me coja el
cepillo”.
“Los grandes también es bueno que sepan lo que nos enseñan en los
talleres”.
67
TENDENCIA TEXTOS DE PARTICIPANTES
La construcción de
la salud asociada a
procesos subjetivos
e intersubjetivos
“Uno puede hacer relaciones sanas o enfermas porque cuando uno tiene
envidia, rabia, eso enferma”.
“Uno se alivia o se siente bien , por ejemplo cuando dos niños después de
una palee se piden perdón y se dan la mano”
“Pero has visto que la salud es como la integridad de la persona, ella misma
y con el ambiente que se relaciona: si yo estoy bien, físicamente y
psicológicamente, las personas que están conmigo también van a tener esa
parte de salud… y no es saludable solamente físicamente si no a nivel de
psicología, yo puedo estar enferma pues del cuerpo pero psicológicamente
tener muchas cosas buenas; hablar de salud es como hablar de la integridad
de la persona, en todos los aspectos, físico, morales, espirituales, religiosos,
todos… para que la personas esté bien, personalmente, y a nivel de
ambiente con la gente que…
“La salud es una forma de vida, tiene mucho que ver con la relación
conmigo misma y con los demás”
“Pa mi salud es estar bien, en paz, contento y uno se vuelve más saludable
cuando tiene amigos, compañeros o así”
“Yo siento que este programa ha sido muy positivo, yo que manejo las
niñas de primero, pues yo siento que se han motivado las niñas, que es muy
importante, motivar en el otro el deseo de estar bien, limpio, en muchas
partes de su cuerpo, en los ojos, en la boca, en los oídos, como todo lo que
integra una persona físicamente y espiritualmente”.
“Hay gente que vive enferma y por ahí derecho lo enferma a uno con sus
problemas y su manera de ser.”
“Yo también tengo que estar saludable para hacer la vida más fácil a la
gente que vive conmigo.”
“Me parecía que no, no, o sea, me parecía muy artificial montar con los
niños una prácticas que no tenían que ver con lo que comúnmente hacíamos
dentro del aula, para que se acostumbraran a resolver conflictos que no iban
a lograr hacer tampoco en la casa”.
“Listo, hay que sacarle el momento al cepillado de dientes, si, pero si
nosotros vemos como que ellos de alguna manera es… no es que no sea
beneficioso para ellos porque igual es parte de… o sea, como si las cosas
tuvieran un enlace.
“De todas formas vemos que la educación es integral, los hábitos saludables
y en estos niños tienen que hacerse; por aquí hay mucha cultura, empiece
por el cepillo que es compartido, entonces si uno no le crea a los niños
hábitos saludables, de estar aseados, lavarse los dientes, de eso, es parte del
trabajo de la educación también, yo pienso que es parte de la educación
también, que no lo tienen en la casa”
“Uno, estarles revisando los dientes cuando llegan fomentar que no
consuman los dulces, que se juaguen la boca después de que consuman los
dulces, y el cepillado después de que, pues por ejemplo este año yo todavía
estoy con el cepillado, yo ando con esas goticas reveladoras y después del
descanso se cepillan y a la salida les hecho esas góticas reveladoras salen
felices con la lengua roja ahí se dan cuentan de lo mal que se cepillaban eso
sería servicio a nivel interno”.
“Ellos me reclaman “profe el cepillado” y los voy mandando por filitas, así,
y les fascina, yo no sé si será por las goticas que se entusiasman de verse
así, pero ellos me reclaman el cepillado, eso fue es bueno, eso es muy
importante”.
68
b) CATEGORÍA 2: CONDICIONES DEL AMBIENTE ESCOLAR QUE
FAVORECEN E INHIBEN LA SALUD BUCAL.
TENDENCIA TEXTOS DE PARTICIPANTES
La conversación y el
trabajo cooperado como
punto de partida en la
construcción de ambientes
saludables
“Uno no se sienta a ver esto si está dando resultado, vamos a ver los niños que
piensan de esto, porque finalmente es la voz de ellos puesta ahí”.
“También yo comparto, es que en esos programas que se vienen a implementar
dentro del programa no se cuadran espacios para conversar, para conversar con
los docentes, para conversar con la institución, porque si bien uno se da cuenta de
que esos programas están muy bien sustentados, que vienen de hacer un trabajo
serio, cada espacio, cada lugar y cada persona, demanda como ciertas cosas,
¿cierto?, entonces es necesario esos espacios de conversación para escuchar las
necesidades y escuchar los intereses, y para compartir, compartir preocupaciones,
compartir angustias, relacionadas con el grupo…”
“Lo hemos conversado en muchos espacios, es sentarnos a conversar para
organizar las actividades entre todos nosotros…”
“Yo pienso que los logros han sido muy buenos, muy buenos, pero porque con
ella nos sentamos a conversar y a programar cómo hacerlo”.
“Entonces no son actividades aisladas, que el otro viene toca un poquito y se va…
no, porque ya nosotros como eso hace parte de nuestro quehacer académico ya
nosotros lo retomamos de otra manera, por eso el resultado… además, hay un
asunto de la repetición, del habito, de la rutina y todos esos asuntos que con ellos
hay que manejarlos de otra manera y eso tiene que ver con salud, y la salud es
disciplina, la salud es rutina, la salud es verse bien, la salud es un bienestar
integral que es como con un todo”
“Me parece bueno cuando nos sentamos en el patio o en corredor a hablar de los
dientes y a hacer dibujos o así.”
“Como hay niños cochinos que tienen mal aliento, la profe se sienta conversar
con nosotros pa que todos seamos más asiados con los dientes”.
69
TENDENCIA TEXTOS DE PARTICIPANTES
Espacios reducidos y
dotación insuficiente
“Pues para que los niños lo hagan un poco bien para que los niños no jueguen con
el agua ni boten el cepillo, todo eso entonces 20 minutos usted con él y 10 que se
desplazan, entonces es media hora, una hora es 45 a 50 minutos, eso es lo que yo
le veo problema en eso, pero me parece muy importante, y me parece muy bueno
lo que hicieron y uno se organiza a medida que tiene los grupos pero es lo que yo
le digo si uno está cerquita de una zona sanitaria donde pueda desplazarse
rápidamente”
“Pero por ejemplo, los grupos de primero que están allá abajo venir, hasta por allá
es muy duro”.
“El problema acá era en las poceticas que nos encontrábamos varios grupos. El
problema es que a veces eso no se puede hacer a la carrera, y algunos niños se
ponen a usar la seda ahí de cualquier manera y a veces se cortan, la usan mal y
hay que hacerlo pues, bien hecho, no cepillarse por cepillarse”
“También el problema es los cepillos, que uno los guardan en el morral y
empiezan a oler mal, entonces, hay que estarlos secando todos los días con una
toallita o con una servilleta, es lo único pues”.
“No se puede decir como que tengan aquí un cepillero porque como hay dos
jornadas, quién va a responder por los cepillos en la otra jornada, yo por ejemplo,
me estuve llevando los cepillos para la casa (inaudible) pero es que esos cepillos
necesitan aire, estar en un lugar ventilado, aislado, aquí en la institución yo no
veo como espacios para eso”.
“Si, porque dígame usted dónde se van a colocar que les entre el aire y que estén
protegidos del gato que anda por ahí, de ratas, de cucarachas y de tantas cosas que
hay por ahí, no veo manera, y eso genera bacterias y problemas”.
“Y por ejemplo en la zona del restaurante que es donde se supone que los niños se
cepillarían los dientes al salir del restaurante, son tres lavamanos para trescientos
niños que van en un momento determinado, entonces el alboroto que se arma
allá… o sea, el espacio físico para ellos cepillarse los dientes no es el más
adecuado”
“Es muy maluco cepillarse en la escuela porque todo mundo empuja o le tira agua
a uno”.
“ No tenemos donde guardar los cepillos y se nos pierden o se dañan en el
morral”
“ Aquí no hay donde guardar el cepillo y uno se lo lleva pa la casa y allá todo
mundo se lava con él.”
“Los cepillos se ensucian y huelen maluco guardados en el morral”.
70
TENDENCIA TEXTOS DE PARTICIPANTES
Eventos episódicos
obstaculizadores de la
construcción colectiva de
la salud
“Me preocupó mucho más fue con lo de Salud Oral, por que si vi cosas, que
venían, entregaban un cepillo de dientes y se iban, incluso, en una de las primeras
entregas yo le propuse a la señora: “mire, no se los de a ellos, si no que yo se los
guardo” Ella me dijo: “no mirá, la idea es que ellos se los lleven” entonces ellos
se los llevaron los cepillos de dientes y efectivamente, ellos no volvieron con los
cepillos de dientes en todo el año”
“El de Salud Oral llegó, presentó el programa, no hizo seguimiento, no hizo
evaluación… entonces quedan los programas como quienes llegan implementan y
se van, y así no tienen ninguna incidencia, cuando el asunto no tiene regularidad,
no tiene evaluación parcial, evaluación periódica de nada sirve”.
“Con todo el respeto les digo que los programas de salud deben tener en cuenta la
dinámica de las instituciones, porque van cayendo como a destiempo”.
“Para nosotros ha sido muy importante conocer los programas que nos llegan
porque nosotros desde nuestro quehacer les podríamos hacer también un refuerzo,
podríamos incluirlos dentro de nuestro diario vivir ¿cierto? Listo, hay que sacarle
el momento al cepillado de dientes, si, pero si nosotros vemos como que ellos de
alguna manera es… no es que no sea beneficioso para ellos porque igual es parte
de… o sea, como si las cosas tuvieran un enlace”.
“Pero si es muy difícil como dice ella, cuando nosotros no sabemos, un día
aparecen aquí con un bulto de cepillos entonces los niños: “ve”
Ella sí, yo vi que ella uno le pasaba los niños pero eso fue poquito tiempo también
¿cierto? El problema es el tiempo, tan poquito todo, como muy poquito tiempo
para cada niño, ahí no habían cupos para niños, por ejemplo, yo tenía un primero
con 42 muchachos, y habían muchos niños necesitados de ese espacio, y no los
pude enviar a todos porque ya ella tenía su cupo completo, no podía admitir más
muchachos”.
“A mi me gusta mucho lo que hacemos pero a veces las higienistas vienen y
después se demoran mucho pa volver”.
“Cuando las higienistas vienen todos nos cepillamos todos pero ya después no”.
“Como todos no podemos estar en los talleres, entonces eso es muy maluco
porque los de cuarto y quinto nos dicen que, que bueno ir”.
71
TENDENCIA TEXTOS DE PARTICIPANTES
Prescripción adulta que
inhibe la construcción de
hábitos
“No traemos el cepillo porque la profe no nos lo pide”
“El nos decía que trajéramos cuando él venía el cepillo para cepillarnos después
del recreo.
“ Ahora no lo traemos porque se nos perdió y todavía no nos han dado otro”
“ Yo me cepillo todos los días, después del desayuno, después del almuerzo,
después de la comida “
“Y también ha sido dura la lucha con los padres de familia en el sentido de que yo
les digo que no les den plata para comprar dulces, porque si consume dulces, ya
no se consume el refrigerio y entonces ya el refrigerio, los lácteos, y todo lo que
es, en la hora del descanso, en la hora del refrigerio es la cantaletica de que para
los dientes, de que el calcio para los huesos, diario, pues como estar así a toda
hora, pero en primero pues me ha ido bien, no sé de ahí en adelante cómo será, ya
ellos van creciendo, y ya no sé, ya es según el incentivo que se les va
estimulando eso”.
“Es mas de que ellas mismas se apropiaran de la responsabilidad de coger diario
el cepillito de su hijo y secarlo, y tener un lugar donde ponerlo para que al otro
día el cepillito viniera seco donde la mama estuvieran pendientes de eso los
cepillos no hubieran cogido mal olor”.
“Entonces imagínese usted ya sería un problema de salud pública (inaudible) yo
pienso que si las mamás hubieran estado desde un principio al tanto de esto,
hubieran dicho bueno a partir de hoy ustedes, en lugar del niño van a estar
pendientes de secarles el cepillito al menos”.
“Y como Estado lo digo, estamos más preocupados es por cambiarlos que por
aprovechar los potenciales que ya tengan…
“Todos nos cepillamos cuando la profe nos manda pero después nos da pereza”.
“La profe también es muy regañona cuando uno no se cepilla o cuando se le
queda el cepillo en la casa”.
“Hay unos niños que no se cepillan después del recreo porque la profe no está con
nosotros en el baño”.
72
c) CATEGORÍA 3: INICIATIVAS ESCOLARES NOVEDOSAS DE SALUD
BUCAL
TENDENCIA TEXTOS DE PARTICIPANTES
La escuela una institución
rutinaria, ávida de novedad
“Cuando llega una persona experta eso genera mucho movimiento en el grupo,
hay entusiasmo y motivación por lo que va a decir, si trae algo nuevo ”
“Él venía muy animado, muy entusiasta, y los niños, él llegaba y los niños esa
felicidad, porque él tenía como esa energía, se inventaba cosas nuevas, los hacía
reír, Luis Fernando era muy animado”.
“El lograr motivar a un niño para hacer algo, quiere decir que la otra persona
tuvo muy buena preparación para llegar… porque es que a ellos no los motiva
usted fácil para decirles: “cepíllese” que le da asco el Kolinos, que le sabe
maluco, que él no quiere, porque le mientan el Kolinos y sale volado”.
“Uno es esperando a ver que traen nuevo o que estrategias hacen, si me
entiende, porque sí, que pesar pero uno se deja mucho”.
“Eso es un logro muy grande, porque un niño se convence fácil pero eso hay
que hacerlo con buenas tácticas y con muy buena metodología, porque ellos
ven a Consuelo y salen a toda porque saben que se van a divertir …
“A mí me parece que fue muy bueno, fue muy didáctico me parece que ella que
fue la que lo gestionó, ella pues, muy creativa
A los niños les encanta la creatividad, ver cosas nuevas porque a veces las
clases son muy pasivas”
Ella le llega mucho, muy qué… le llega pues mucho a los niños. Aprendieron
mucho, yo creo que a través como de eso es que las niñas aprenden más fácil
que una clase ahí pues como en el tablero… entonces aprendieron más, que
saben muy bien qué es, cómo cepillarse, para qué se cepillan, cómo debe ser el
cuidado”
“Me parecieron muy divertidos los talleres y gozábamos mucho con Luz Dary”.
“Pasamos muy bueno cuando vienen de Escuela Saludable porque nos reímos y
hacemos cosas que en los otros días no nos dejan hacer”
73
d) CATEGORÍA 4: COMPROMISO DE LA ESCUELA CON LA PROMOCIÓN
DE LA SALUD BUCAL
TENDENCIA TEXTOS DE PARTICIPANTES
Sensibilidad, compromiso y
apertura institucional
“Entonces cómo podemos vincularnos”… entonces bueno, ella empezó a pensar
en cómo traer otras cosas, nos encontramos incluso una vez fuera del colegio,
una vez un sábado en la Universidad de Antioquia entonces nos sentamos a
planear le contamos lo que nosotros teníamos, las otras alianzas que teníamos
con otras instituciones y cómo lo de ella entonces tenía que ser algo que
apoyara, coherente, que se vinculara con nosotros y también muy especifico
para que ella no estuviera mezclando cosas que nosotros ya estuviéramos
haciendo por otro lado… “
“Para nosotros ha sido muy importante conocer los programas que nos llegan
porque nosotros desde nuestro quehacer les podríamos hacer también un
refuerzo, podríamos incluirlos dentro de nuestro diario vivir ¿cierto?”
“Ah, no, no, aquí siempre hubo disponibilidad total, a nosotros no nos
desagrada, ni nos, y si llegó en mitad de clase, llegó a mitad de clase, porque es
que ¿cómo va a ser más importante que aprenda un concepto que le puedo
enseñar más tarde o al otro día, que a cepillarse los dientes?”.
“Hay que darle prioridad, me parece importante y hay que darle prioridad a las
cosas, porque cuanto hubiera agradecido uno que en primaria a uno le hubieran
hecho esas campañas y le hubieran enseñado a cuidar los dientes, entonces para
mí, yo considero que esto es muy valioso lo mismo que el refrigerio, son cosas
que hay que darles prioridad por encima de todo porque para que este estudie y
todo sin su boca, deja mucho que desear (inaudible) a mí personalmente pues no
puedo hablar por los demás, pero aquí en el colegio no tenemos problema con
eso, y personalmente yo tengo disponibilidad total”.
“En el momento en el que llegue está bien, porque uno sabe que se manejan los
problemas del transporte, que tacos, mucha cosa, no pudo llegar a la hora y él
siempre me avisaba, siempre me avisaba cuándo iba a venir, incluso yo tuve
cambios de jornada y hablábamos para cuadrar eso”.
“Bueno aquí se ha continuado porque las profesoras han proporcionado los
espacios en sus aulas para que guarden sus Kit, entonces finaliza los descansos
y muchas entran a cepillarse… entonces lo que yo decía, sería no tan tarde
empezar este proceso, a las 9, no, empezar desde el inicio del año, y crear ya ese
hábito para que ya los demás puedan continuar con el proceso, pero sería,
bueno… primero y tercero…
“A la profe le gusta mucho que vengan de escuelas y saludables y nos hace
quedar callados pa que podamos participar en todo”.
“Cuando vienen los de escuelas siempre nos reúnen en el coliseo y hacemos
muchas cosas y pasamos bueno. También al rector le gusta que vengan”.
74
TENDENCIA TEXTOS DE PARTICIPANTES
Irrupción programática de la
dinámica escolar que opaca la
apuesta por el trabajo
cooperado.
“La Secretaria manda o la Alcaldía en general manda programas, se ejecutan y
uno tiene que abrir los espacios del aula para que pasen, entonces, uno se queda
como: “ve, bueno”…”
, lo único que vi de dificultad también en la estrategia, fue que a veces las
visitas eran muy cortas, eran así a la lata, entonces, muy triste todo tan a la
carrera, hubiera sido más tiempo, más despacio… eso me pareció, las visitas
pues fueron muy corticas, entonces pues la exposición de las carteleras todo
había que hacerlo como muy rápido; a mí me gusta como todo despacio, como
bien hechecito, o sea como que quede”
“Sería muy bueno que nos convocaran para hacer una programación conjunta de
tal manera que nos interrumpieran en la programación de la institución y así
también habría mayor disposición de todos para el desarrollo de las
actividades”.
“ Me parece que falta mayor estructura en la propuesta para que no se reduzca a
actividades sueltas”.
“Así como los de la salud tienen que enseñarnos nosotros también les
podríamos aportar si nos sentáramos a planear juntos “
“ a veces estamos en cualquier clase y llegan las higienistas entonces la profe
son hace guardar todo y ya nos quedamos con ellas”
Tímida inclusión de la salud
como apuesta curricular.
“…yo ya incorporaría esa tarea en mi quehacer académico pero no, uno supone
que como el otro trae el programa, el otro se hace cargo del resultado y del
alcance de los logros de ese asunto…”
“Ya eso es como cada una, pues nosotras, cada una con su grupo en la clase de
ciencias pues se enseña siempre el cepillado correcto”.
“Eso si es una dificultad en los grupos que son por profesorado, a partir de
tercero, pero como en primero y segundo uno maneja su tiempo, uno sabe que
tiene sacar las últimos 20 minutos para el cepillado, uno sabe que tiene que
tenerlo”
“Lo que nosotros tratamos de hacer es enlazar esos hábitos que deberían
haberlos adquirido en lo familiar ya, con cosas académicas como para que los
niños lo entiendan desde lo pedagógico”.
“Eso se hace a través de las áreas, directamente quienes dictan ética y valores y
el trabajo con valores… allí… y las hermanas de catequesis trabajan eso
también, o sea, en todas las materias se hace porque eso integra”.
“Bueno si hacemos muchas cosas, pero en le PEI no se tiene nada consignado
de eso”.
“Propiamente de salud bucal no hay nada en e PEI pero si tenemos el Proyecto
Escuelas saludables porque queremos que sea el eje articulador de los demás
proyectos en salud”.
75
ANEXOS
76
ANEXO 1
ESTRATO SOCIOECONÓMICO DE CADA ZONA DE MEDELLÍN Y PREVALENCIA ESTIMADA
PARA LA EXPERIENCIA DE CARIES.†
Zona Comuna Estrato
predominante*
Número de
barrios por
estrato
Prevalencia
Nororiental
Comuna 1- Popular Bajo-Estrato 2 7 de 12 43
Comuna 2- Santa Cruz Bajo-Estrato 2 11 de 11 43
Comuna 3-Manrique Bajo-Estrato 2
Bajo-Bajo-Estrato 1
8 de 16
6 de 16
43
45,2
Comuna 4-Aranjuez Medio Bajo-Estrato 3 11 de 15 41,1
Noroccidental
Comuna 5-Castilla Medio Bajo-Estrato 3 14 de 16 41,1
Comuna 6-Doce de Octubre Bajo-Estrato 2 9 de 13 43
Comuna 7-Robledo Bajo-Estrato 2 15 de 22 43
Centro-oriental
Comuna 8-Villa Hermosa Bajo Bajo-Estrato 1
Bajo-Estrato 2
Medio Bajo-Estrato 3
6 de 19
7 de 19
6 de 19
45,2
43, 0
41,1
Comuna 9-Buenos Aires Medio Bajo-Estrato 3 10 de 18 41,1
Comuna 10- La Candelaria Medio Bajo-Estrato 3
Medio-Estrato 4
8 de 18
10 de 18
41,1
36,1
Centro-occidental
Comuna 11- Laureles Estadio Medio alto- Estrato 5
Medio-Estrato 4
12 de 16
4 de 16
Comuna 12- La América
Medio alto-Estrato 5
Medio Bajo- Estrato 3
Medio-Estrato 4
4 de 13
2 de 13
7 de 13
54,7
41,1
36,1
Comuna 13 San Javier
Bajo Bajo- Estrato 1
Bajo- Estrato 2
Medio Bajo- Estrato 3
7 de 20
7 de 20
6 de 20
45,2
43
41,1
Suroriental Comuna 14
El Poblado
Medio bajo-Estrato 3
Medio - Estrato 4
Medio alto – Estrato 5
Alto - Estrato 6
2 de 23
3 de 23
1 de 23
17 de 23
41,1
36,1
54,7
45,4
Sur Occidental Comuna 15
Guayabal
Medio bajo-Estrato 3
Medio- Estrato 4
7 de 8
1 de 8
41,1
36,1
Comuna 16 Belén Bajo – Estrato 2
Medio Bajo- Estrato 3
Medio- Estrato 4
Medio alto-Estrato 5
Alto- Estrato 6
4 de 22
5 de 22
9 de 22
3 de 22
1 de 22
43
41,1
36,1
54,7
45,4
Corregimientos 50 Santa Elena
60 Palmitas
70 San Cristóbal
80 San Antonio de Prado
90 Altavista
Bajo – Estrato 2
Bajo – Estrato 2
Bajo – Estrato 2
Bajo – Estrato 2
Bajo – Estrato 2
No aplica
No aplica
No aplica
No aplica
No aplica
36,1
36,1
36,1
36,1
36,1
* Información proporcionada por Empresas Públicas de Medellín, a través del Departamento de Planeación de Medellín, subdirección
Metroinformación, año 2002.
† Diseño muestral realizado por Hugo Grisales Romero. Matemático, Especialista en estadística, Magister en Epidemiología, Doctor en
Epidemiología, docente Universidad de Antioquia.
77
ANEXO 2
FORMATO DE EXAMEN CLÍNICO: INDICADORES DE CARIES DENTAL DE LOS
ESCOLARES DE INSTITUCIONES EDUCATIVAS DE ESTRATOS BAJOS, MEDIOS Y
ALTOS. MEDELLÍN, 2009
N° de formulario _________________ Fecha _________________
Nombre de la institución ____________________________________________
Nombre del escolar ________________________________________________
Edad ____________________
Dirección de residencia ____________________________________________
Teléfono de la casa _______________
Afiliación a la seguridad social
R. Contributivo
R. Subsidiado
No asegurado
Privado
Otro . Cuál? _____________________________
Barrio donde reside _____________________________
Estrato ________________________________________
78
79
ANEXO 3
ENCUESTA DE ACCESO AL SERVICIO DE ATENCIÓN ODONTOLÓGICA.
ESCOLARES DE 12, 15 Y 17(18) AÑOS DE INSTITUCIONES EDUCATIVAS DE LA CIUDAD
DE MEDELLÍN
1. ¿Has asistido alguna vez a consulta odontológica? Si ___ No ___ (pasa a la pregunta 12)
2. ¿Cuándo fue la última vez que fuiste al odontólogo? ___ días ___ meses ___ no recuerda
3. ¿A dónde fuiste? (anotar textualmente lo que conteste el/la entrevistado/a)
___________________________________________________________________________________
4. ¿Por qué motivo fuiste al odontólogo? (anotar textualmente lo que conteste el/la entrevistado/a)
___________________________________________________________________________________
5. ¿Dónde queda el consultorio donde te atienden? (anotar el barrio)
___________________________________________________________________________________
6. Cuándo llegaste te atendieron…?
Inmediatamente ___ Se demoraron un poco ___ Se demoraron mucho ___
7. ¿Qué te hicieron en esa cita? (anotar textualmente lo que conteste el/la entrevistado/a)
__________________________________________________________________________
8. ¿Sentiste que te atendieron bien o hubo algo que no te gustó? (anotar textualmente lo que conteste el/la entrevistado/a)
__________________________________________________________________________
9. ¿Cuando terminó la cita el/la odontólogo/a te dio instrucciones o te explicó algo del tratamiento? Si ________
No ________ (pasa a la pregunta 11)
10. ¿Qué te dijo? (anotar textualmente lo que conteste el/la entrevistado/a)
80
__________________________________________________________________________
11. ¿Te dieron una nueva cita o ya terminaste el tratamiento? Le dieron una nueva cita ___ Ya terminó el
tratamiento ___
12. ¿Tu crees o sientes que en este momento necesitas consultar el/la odontólogo/a por alguna razón?
Si la necesita ___ No la necesita ___ (pasa a la pregunta 15)
13. ¿Cuál es el motivo por el que sientes que necesitas consultar al odontólogo? (anotar textualmente lo que conteste el/la
entrevistado/a)
__________________________________________________________________________
14. ¿Y por qué no has consultado? (anotar textualmente lo que conteste el/la entrevistado/a)
__________________________________________________________________________
15. ¿Cuáles elementos utilizas para la higiene bucal, y cuántas veces al día/semana? (No los lea, señálelos cuando el
entrevistado/a los nombre)
___ Cepillo ___ veces por _________
___ Crema ___ veces por _________
___ seda ___ veces por _________
___ enjuague ___ veces por _________
Otro ____________________________
81
ANEXO 4
PROGRAMACIÓN TRABAJO DE CAMPO
Institución educativa: ___________________________________ Teléfono: ____________
Dirección: ________________________________
Rector(a): ____________________________________________
Coordinador(a): ____________________________________________________________
Persona facilitadora para el día de la visita: ______________________________________
Grado preescolar (5 años) Jornada y descansos Nombre y edad de los escolares seleccionados
Grupo seleccionado:
1.
2.
3.
Grado Tercero (8 años) Jornada y descansos Nombre y edad de los escolares seleccionados
Grupo seleccionado:
1.
2
3.
Grado octavo (12 años) Jornada y descansos Nombre y edad de los escolares seleccionados
Grupo seleccionado:
1.
2
3.
Décimo (15 años) Jornada y descansos Nombre y edad de los escolares seleccionados
Grupo seleccionado:
1.
2
3.
Grado once (18 años) Jornada y descansos Nombre y edad de los escolares seleccionados
Grupo seleccionado:
1.
2
3.
Fecha de exámenes clínicos: ______________________________________________________________________
Ubicación del sitio de trabajo: _____________________________________________________________________
Observaciones: _________________________________________________________________________________
____________________________________________________________________________________________
82
ANEXO 5
FORMATO DEL CONSENTIMIENTO INFORMADO PARA
LOS DIRECTIVOS DE LAS INSTITUCIONES EDUCATIVAS
UNIVERSIDAD
DE ANTIOQUIA
Proyecto de Investigación: Salud bucal en la ciudad de Medellín: Monitoreo de los indicadores de caries
dental en escolares y evaluación de la apropiación del modelo educativo en salud bucal como objeto de
aprendizaje en el escenario escolar. Instituciones Educativas Oficiales.
Investigadores: Grupo salud bucal y bienestar Universidad de Antioquia.
Investigadora principal: Blanca Susana Ramírez Puerta
Nombre del/la Rector/a: _______________________________________________________
Institución Educativa: _________________________________________________________
Yo, __________________________________________ mayor de edad, con Documento de identidad
No ___________________ de __________________ y con domicilio en _________________
DECLARO:
Que la Institución Educativa a mi cargo ha sido invitada a participar en un estudio que busca describir el
estado de salud bucal de los escolares de la ciudad de Medellín, para hacer el monitoreo de los indicadores
de caries dental y evaluar la apropiación del modelo educativo en salud bucal como objeto de aprendizaje
en el escenario escolar; con el fin de orientar los programas de salud bucal desde la Secretaría de salud de
Medellín.
Que el grupo investigador me ha proporcionado la siguiente información:
El Estudio busca estimar la prevalencia de caries dental en la población escolar de la ciudad de
Medellín; describir la calidad del cepillado dental de los escolares y determinar qué apropiación
FACULTAD DE ODONTOLOGÍA
83
tiene la escuela del modelo de salud bucal implícito en la Estrategia Escuelas y Colegios
Saludables.
Los resultados de la investigación serán comunicados en forma escrita y oral y se usarán
exclusivamente para fines académicos, es decir, solamente serán comunicados en publicaciones
científicas o de divulgación institucional, y en eventos académicos.
La información obtenida a través de los exámenes bucales y las entrevistas, será confidencial, los
nombres de los participantes no aparecerán como tal.
Mi participación y la de los escolares de la Institución educativa que represento es totalmente
voluntaria, y no implica ninguna obligación de nuestra parte con el grupo investigador, ni con los
programas o instituciones que este representa.
En cualquier momento puedo revocar dicho consentimiento. Sin embargo, me comprometo a
informar oportunamente al grupo investigador si llegase a tomar esta decisión.
La participación en dicho estudio no me reportará ningún beneficio de tipo material o económico,
ni se adquiere ninguna relación contractual.
Los exámenes bucales se realizarán siguiendo las normas de bioseguridad establecidas, por lo cual
no existe ningún riesgo para los participantes.
Para la realización de los exámenes bucales hemos hecho los siguientes acuerdos: se realizarán exámenes
bucales a 15 niños previamente seleccionados de los grados, preescolar, tercero, octavo, décimo y once.
Doy fe, de que para obtener el presente Consentimiento Informado, se me explicó en lenguaje claro y
sencillo lo relacionado con dicha investigación, sus alcances y limitaciones; además que en forma personal
y sin presión externa, se me ha permitido realizar todas las observaciones y se me han aclarado las dudas e
inquietudes que he planteado, además que de este consentimiento tendré copia.
Dado lo anterior, manifiesto que estoy satisfecho/a con la información recibida y que comprendo el
alcance de la investigación, mis derechos y responsabilidades al participar en ella.
En constancia firmo: ______________________________________________________
Nombre: ____________________________________ Cédula No.__________________
Ciudad y fecha: _________________________________________________________
84
ANEXO 6
FORMATO DE CONSENTIMIENTO INFORMADO PARA
LOS PADRES DE LOS ESCOLARES
Investigación: “Salud bucal en la ciudad de Medellín: Monitoreo de los indicadores de caries dental en
escolares y evaluación de la apropiación del modelo educativo en salud bucal como objeto de aprendizaje
en el escenario escolar”
Yo, _______________________________________________________, Identificado con C.C.
Nº_________________, como acudiente del menor _________________________________,
identificado con ___________________________________, autorizo a los investigadores de la
Facultad de Odontología de la Universidad de Antioquia, para que se le realice el examen clínico
bucal a que haya lugar, de acuerdo con la investigación que se está realizando referente a los
Indicadores de caries dental de los escolares de Instituciones Educativas de la ciudad de Medellín.
Entiendo que la investigación que se realizará ha sido autorizada por la Universidad de Antioquia y
que el examen se llevará a cabo bajo las normas de bioseguridad indispensables para este tipo de
exámenes, no es invasivo y es de bajo riesgo; y se realizará con el fin de establecer la calidad del
cepillado y la presencia de caries dental.
Toda la información obtenida es de carácter confidencial y será analizada en forma colectiva sin
revelar nombres o identificar datos individuales. Los resultados derivados de la investigación serán
usados únicamente con fines académicos y divulgados en forma escrita u oral en publicaciones
científicas, a nivel institucional o eventos académicos.
La participación es totalmente voluntaria y no implica ninguna obligación de nuestra parte con el
grupo investigador ni con la institución que este grupo representa, por lo tanto en cualquier momento
podemos retirarnos del estudio y revocar el presente consentimiento, habiendo informado previa y
oportunamente al grupo investigador de mi decisión.
FACULTAD DE ODONTOLOGÍA
85
Doy fe, de que para obtener el presente Consentimiento Informado, se me explicó en lenguaje claro y
sencillo todo lo relacionado con la investigación.
De acuerdo con lo anterior, manifiesto que estoy satisfecho con la información recibida y que
comprendo los alcances de la investigación y mis derechos y responsabilidades al participar en ella.
En Constancia firmo,
_____________________________ V° B° Rector(a) _________________________
Firma del acudiente
C.C. Ciudad y fecha:_______________________
86
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