Revista Latinoamericana de Psicología

ISSN: 0120-0534

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Fundación Universitaria Konrad Lorenz

Colombia

Leon, Ramón; Zambrano Mora, Alfredo

Honorio Delgado: Un pionero de la psicología en America Latina

Revista Latinoamericana de Psicología, vol. 24, núm. 3, 1992, pp. 401-423

Fundación Universitaria Konrad Lorenz

Bogotá, Colombia

Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=80524312

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REVISTA LATINOAMERICANA DE PSICOLOGIA1992 VOL. 24 Nfl 3 401-423

HONORIO DELGADO: UN PIONERO DE·;LAP5ICOLOG.IA EN AME RICA LATINA'

RAMÓN LEÓN

hastitwo NadoruJl M Salud M6ftl11l -Hrmorio ~ HiMyo Nopdli-~ Rkm-do Palma, Li""4 Petí

y

.ALFREDO ~MBRANOMORA·

Univmidad Rictmlo Palfrta, Li""4 Petí

This paper is a short biographicalaccount oC Honorio Delgado (Arequipa,1892· Lima, 1969), a Peruvian paychiairistand a píoneer oC Latin' AlJM:JicanPsychology:Born in Arequipa and trained as physician at che San MatcosUniversity, Delgado)VU a productive author (his bibliography contaíns ll60ítems, published between 1915 and 1969).

In che 10's and 20's he 1lI.d an acti\le participation in 6eginnings ofpsychoanalysis in Latín Amerléfi because he wrot.e in 1915 a short paper onpsychoanalysis and in 1919 published a'book on che same topic, whichAueconsidered as the first Latin American publications on che Fréudian theoríes.Freud mentioned mm in his Hisl.arJ of ~nalytü; mowmmL But in che 30'sDelgado took a contrary positiori lO psychoan~sis and became che most~re critic oC ~hisdoctrine in theSpanish- spéa1l.ingatea: His writ~lI'{1¡omchISsecond penod show Jaspers's, Scheler's, Hartmann's mt1uence ahB ~a clear phenomenologicahpproach (spécially German psyc~). His nWltimportant books, /'sieolfJgÍ4 (With M.lberico; fii'at ed. 19ª3)'and Curso ,'MfiriquilJtri4, (1~5!) we'rebut-.llns, For thehistorians of LatinAme~nlhdPeruvian psychólogy Honorio Delgado is a representatíee oC, philQsophic!alty-orient.ed psychoIogy.' .

Key words: H~orio Delgado, Peruvian P4yého1ogy.

1 " Enhomen~ aJa ntemoria de HethorioJ)e~" al cOl\memotal'se el vigésimoaÍ1~sario de su (a1lecimiento, acaec:idoel 27 de nOviembre de 1969. "

• Dirección: Alfredo Zambrano Mora, Eduardo Terry 1580, Lima 1, Perú.

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La obra abundante e influyente de Honorio Delgado (Arequípa, 26 deseptiembre de 1892· Lima, 27 de noviembre de 1969) ha sido objetode múltiples estudios desde perspectivas muy diferentes: destaca enespecial la psiquiátrica (v. g. Alarcón 1982; Maríátegui 1985; Saavedra1957), también deben mencionarse la filosófica (v. g. Chíappo 1985;Miró Quesada 1974; Salazar Bondy 1965), la psicológica (v, g. Alarcón1968, 1980, 1986; Chiappo 1957a; León 1982a), y la historiográfica (v.g. León 1982b, 1984a, 1984b). Por último, hay comentarios y estudiosacerca de las actitudes y el rol de Honorio Delgado con respecto alpsicoanálisis (Mariátegui 1989; Rey de Castro 1983, 1985, 1989; Seguin1982; Silva 1979). .

Esta multiplicidad de estudios acerca de una persona sobre tanvariados campos constituye una verdadera rareza en la vida científicaperuana y pone de relieve la magnitud de la influencia de HonorioDelgado; influencia que, a pesar de los años transcurridos desde sufallecimiento, sigue. siendo evidente (como lo demuestra la fecha re-ciente de la mayoria de los trabajos que hemos citado en el primerpárrafo). Con mucha razón, Mariátegui (1990), uno de sus discípulosmas distinguidos, lo califica de "figura prominente de la intelectualidadcontemporánea y uno de los pensadores más representativos de lacultura nacional de este convulsionado siglo XX" (pág. 7).

El presente trabajo en modo alguno pretende ser un estudio bio-gráfico detenido de este científico. Su proposíto es tan sólo hacer unesbozo del derrotero vital de Honorio Delgado, discutiendo algunasde sus contribuciones principales y ubicando su trabajo en el contextode la historia de la psicología latinoamericana.

PRIMEROS AÑos

Nacido en Arequipa, la segunda ciudad en importancia del Perú,el 26 de septiembre de 1892, Honorio Delgado transcurrió su niñez yadolescencia en ella. cursando sus estudios secundarios en el ColegioNacional de la Independencia. viejo centro educativo estatal, rico entradiciones y pergaminos.

También en su ciudad natal (la misma que ha dado al Perú un buennúmero de sus más distinguidos políticos e intelectuales) habria de iniciarDelgado su formación superior, en las aulas de la Universidad Nacionaldel Gran Padre San Agustín, casa de estudios fundada en 1825.

El estudio de las ciencias naturales fue aquel al que el joven estu-diante dedicó los esfuerzos de esos años. De acuerdo con Basadre(1971), Delgado obtuvo el grado de Bachiller en Ciencias Naturalescon una tesis titulada Las grandes cuestiones de la herencia.

Inclinado por la medicina, se trasladó a Lima. la capital del Perú,en donde fue alumno de la Facultad de San Fernando, de la Universidad

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de San Marcos. Esta facultad, fundada en 1811 y reorganizada deacuerdocon-Ios cánones científicos de la época por una delas figurasmás representativas-de la medicina peruana, Cayetano Heredia (1797-1861), reunía: a comienzos. de siglo en-su plana docente a muchas delas personalidades de la profesión médica limeña. Médicos de tantoprestigio como Ricardo L. Flérez {1854-1939), Constantino T. Carvallo(185~1919), David Matto(1858-1914), Ernesto Odriozola (1862-1921),Max Gonzáles Olaechea (1867-1946), tenían a su cargo-el dictado delas asignaturas en ella (Avendaño, 1983; Arias-Schreiber Pezet 1972).

Uno de los integrantes de la plana docente era Hermilio Valdizán(1885-1929), médico oriundo de la ciudad de Huánaco (situada en elinterior del país), quien tras cursar estudios en la casa sanmarquinahabía partido al Viejo Mundo para una prolongada estancia de perfec-donamíento.En Italia, país en el que tuvo una larga permanencia, Valdizántornó contacto y estuvo b.yo el asesoramiento de Sante De Sanctis (1862-1935).,uno delós grandes de la psicología..y de la psiquia.tria italianas. Asu retorno al Perú/en 1917 asumió la. cltedra de Enfermedades Mentalesy Nerviosas de la Facultad de Mediciria de San Marcos y desplegó una enverdad inagotable labor publicista sólo interrumpida por su prematurofallecimiento, 'el 25 de diciembre de 1929;

Hermilio Valdizán, a quien Mariátegui (1981), su más reciente bió-grafo, ha calificado como ~stor del proyecto de la psiquiatría peruana,ejerció una profunda influehcia en Honorio Delgado, al que tuvo comoalumno primero y después como colega. y asociado en algunos de susproyectos de investigación, revistas e instituciones académicas y deorientación social que desarrollase. Valdizán fue, muy probablemente,quien terminó de inclinar de manera difinitiva al joven estudiante porla especialidad de la psiquiatría, cuyo prestigio académico y social noera muy elevado en el Pero de los albores del siglo XX.

Los años formativos de Delgado coincidieron con aquellos -en loscuales se producían marcados cambios en la educación universitariaperuana. Cueto (1989) las enumera: Expansión en la matrícula estu-díantíl.regularídad en la vida académica y especialización en los estudiosprofesionales. Particularmente la Facultad de Medicina había experi-mentado un. proceso de modernización y también había iniciado unapolítica de creciente especialización; así, en 1003 inauguró un modernoy funcional edificio, que contaba con laboratorios de química, bacte-riología y fisiología, gracias a una inversión de 17.251 libras (Cueto1989). Entre 1890 y 19~0, anota igualmente Cueto (1989), se crearonlas siguientes Cátedras: bacteriología (1890), pediatría (1896), oftalmo-logía (1897), otorrinolaringología (1909), dermosifilografia (1911),víasurinarias (1909), psiquiatría (1916) y medicina tropical (1916). En1911,siempre según Cueto, "La Facultad de Medicina se modernizó y secrearon nuevos laboratorios para bacteriología, química, toxicología,histología, anatomía patológica y parasitología" (Cueto 1989; pág. 69).

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Tras cursar con éxito sus estudios, Delgado se graduó de médicoen 1918, y en 1920 obtuvo el doctorado respectivo. En 1923 le fueconcedido, asimismo, el grado de doctor en Ciencias Naturales. Paraoptar cada uno de estos grados Delgado presentó sendos trabajosacadémicos. Así, la tesis de graduación de médico fue El psicoanálisis(1918-1919), una presentación sistemática y puesta al día (en la medidaen que se lo permitían la distancia de los centros psicoanalíticos mun-diales, y las limitaciones bibliográficas, endémicas en el Perú) de lateoría propuesta por Sigmund Freud (1856-1939)1.

Naturaleza elemental del proceso de la función (1919b) se tituló eltrabajo de tesis por el cual le fue concedido el grado de doctor enMedicina. Por último, el de doctor en Ciencias Naturales lo optó conun trabajo que pone en evidencia su marcado interés por la psicología:Rehumanización de la cultura científzca por la psicología (1923).

Esta breve referencia a los años inicialesdel protagonista de esta contri-bución debe completarse con la indicación de que en 1915, cuando contabatan sólo 23 años de edad y era todavía un estudiante de medicina, publicóen el prestigioso diario limeño El ~ el decano de la prensa peruana,un artículo titulado "Fl Psicoanálisis",que, hasta donde se conoce, es el primert:rab<90 en la América de habla hispana sobre la doctrina de Freud.

HONORIO DELGADO Y EL PSICOANALISIS

El tema de las relaciones entre Honorio Delgado y el psicoanálisis nopuede faltar en un esbozo biográfico por modesto que sea de este científico.Y estO,porque Delgado fue desde muy temprano en su carrera profesionaly académica considerado como el introductor de las ideas de Freud enel Perú y en América Latina.

Por supuesto que tal afirmación no es gratuita. Estudios históricos entomo a la psicología y el psicoanálisis en América Latina lo mencionancomo el primero en haberse referido en esta parte del mundo a losplanteamientos de Freud (v. g. Cesio 1982).

Pero, no sólo por eso, sino además por haber sido durante apro-ximadamente década y media (entre 1915 y 1930) Su más conspicuorepresentante y entusiasta defensor, razones por las cuales el creadordel psicoanálisis, pasando revista a la difusión mundial de su doctrinaen su Historia del Movimiento Psicoanalítico (1968), lo menciona comoúnico latinoamericano (y también como único hispanohablante alladode Luis López y Ballesteros, el traductor de las obras de Freud alcastellanoj.Todo esto pues nos obliga a detenemos sobre el particular.

l. La tesis fue también publicada como libro, con el mismo título (1919a) viniendo aser. el primer libro dedicado al psícoanalísís en la región hispanohablante de AméricaLauna.

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Existe, sin embargo, una razón adicional. Flla estriba en el hechoque Delgado experimentara hacia inicios de los años treinta una suertede viraje conceptual, que comenzó por alejarlo progresivamente delpsicoanálisis y que terminó colocándolo en las antípodas de esta doc-trina. Este alejamiento no supuso, empero, desinterés por parte de él.Por el contrario,Delgado desplegó con el paso de los años una laborde cada vez más rigurosa crítica de la teoría freudiana, sin parangónen las latitudes latinoamericanas, de modo tal que, como lo ha señaladoAlarcón (1982), llegó a convertirse en el más severo crítico del psicoa-nálisis en Hispanoamérica.

Esta tarea crítica, cumplida desde la Cátedra de Psiquiatría de laFacultad de Medicina (San Fernando) de la Universidad de San Marcos(a la que había accedido tras el inesperado fallecimiento de Valdizán),tanto como en sus conferencias y a través de sus numerosas publica-ciones, ha sido considerada como uno de los factores que en su mo-mento inhibió el desarrollo del psicoanálisis en el Perú (Rey de Castro1983; Silva, 1979).

Por razones de espacio nos limitaremos a señalar los principales hechosque distinguieron la relación de Delgado con el psicoanálisis. Como yalo señalamos, en 1915 el entonces médico en formación publicó en laspáginas de El Comerdo un artículo sobre el psicoanálisis que constituye elpunto de inicio de sus publicaciones en pro de las ideas de Freud, En1918, como igualmente ya se dijo, dedicaba la tesis con la cual había degraduarse de médico a la presentación de esta doctrina. El trabajo sepublicó también en los recién fundados Anaw tk la Facultad tk Medicinade Lima (Delgado 1918-1919), publicación creada en 1918 y dirigida a lasazón por Valdizán. En 1919, la ya mencionada tesis de Bachiller apareceen forma de libro (1919a).

También en 1918 Valdizán y Delgado fundaron la Revista de PsiquiatríaY Disciplinas Conexas, que es en la historia del publicismo científico en elPerú la primera revista especializada en la psiquiatría pero con un (inclusivepara hoy) moderno enfoque interdisciplinario (León, 1986). En esta revistael psicoanálisis tuvo también su lugar, pues en las páginas de ella HonorioDelgado desplegó una activa labor difusora del psicoanálisis, como lodemuestra el número de artículos suyos referidos a Freud y a sus ideas(Mariátegui y León, 1986; véase además León, 1985).

Más aún, la Revista tk Psiquiatría y Disciplinas Conexas se convirtióen la vía de ingreso y difusión de la ya para ese entonces abultadaliteratura psicoanalítica. En efecto, particularmente Delgado se preo-cupó de modo constante por resumir y recensionar libros y artículospsicoanalíticos publicados en Estados Unidos y Europa para los lectoresde esta importante publicación limeña.

Destacaremos, sólo a modo de ejemplo, el resumen que preparara ypublicara de Die Don Jtuzn-Gestalt, del conocido Otto Rank, durante muchosaños uno de los más cercanos colaboradores de Freud (Delgado, 1924).

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Por las habituales dificultades económicas, la Revista de PSU¡uÚJtríay Disciplinas Conexas dejó de publicarse en 1924. Con su cese desaparecióun importante órgano de difusión especializado, que contribuyó demodo decisivo a institucionalizar y dar realce académico a la psiquiatríaen el Perú, una especialidad hasta entonces con poco brillo. Pero nosólo a la psiquiatría, también a la psicología. Tanto Delgado comoValdizán experimentaron un profundo y constante interés por la psi-cología, tal como lo demuestran numerosas publicaciones de ellos (véaseMariátegui, 1981, Bio-bibliografia de Delgado, 1970). La revista queambos fundaron y que Delgado pasó a dirigir a partir de 1922, publicóalgunos importantes trabajos nacionales sobre psicología, y una traduc-ción al castellano de un trabajo de Rorschach (1924).

Para 1924 Delgado había tenido ya su "experiencia europea" (unasuerte de obligatorium para los intelectuales y estudiosos peruanos dela época). En 1922 Delgado viajó a Alemania con el propósito de asistiral VII Congreso Psicoanalítico Internacional, que se celebro entre el25 y 27 de septiembre; aunque una demora del barco que lo trasladabaa Alemania le impidió llegar oportunamente a ese evento (Anónimo,1922), él tuvo la oportunidad de conocer personalmente a Freud, asícomo a algunAs de las más importantes figuras del psicoanál,isis.

Con Freud mantuvo una larga correspondencia, que ha sido pre-sentada y comentada en detalle por Rey de Castro (1983, 1989). Peroademás de Freud, Delgado parece haber tenido una activa vinculacióncon Karl Abraham (1877-1925), uno de los discípulos más cercanosal padre del psicoanálisis. Abraham no sólo dió a conocer a través devarias recensiones publicadas en la lntemationale Zeitschrift Jür Psychoa-nalyse y en ellntemational Journal o/ Psycho-Analysis los trabajos que lellegaban desde Lima (León 1981, 1982, 1983); también tradujo al alemánel estudio de Delgado acerca de la atracción que despiertan los ojos;la traducción apareció nada menos que en lmago (Delgado, 1921).

En 1926 Delgado publicó una hoy olvidada biografia del psiquiatrade Viena, con tono laudatorio. Este trabajo, del cual apareció unatraducción al portugués en 1933 'podría bien ser la primera biografíade Freud preparada y publicada en América Latina. En ese mismo añoDelgado tomó parte activa en un homenaje que se rindió en Lima aFreud, con motivo de su septuagésimo aniversario. En 1927, en unnuevo viaje a Europa y después del X Congreso de Psicoanálisis enInnsbruck, Delgado es incorporado como miembro activo de la Socie-dad Británica de Psicoanálisis, que lo hizo -como lo señala Mariátegui(1989)- el primer latinoamericano formalmente incorporado a la Aso-ciación Psicoanalítica Internacional. En su producción, sin embargo,se observa desde comienzos de la década una apertura de sus interesesy de sus influencias a otros autores más bien alejados del psicoanálisis(cuando no opuestoS a él): William Stern (1871- 1938), Max Scheler

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(1874-1928), Hennann von Keyserling (1880- 1946), Emst Kretschmer(1888-1964) y Karl Jaspers (1883--,1969).

En estos autores debió encontrar Delgado respuestas y estímulospara algunos de sus intereses personales que no encontraban eco enel psicoanálisis. Así, SU anhelo de rigor metodológico y de sujeción alos datos pudo hallar enla AUg.-rneine Psychopath'ologie de Karl Jaspers(1883....:.¡~69),una obra'revolucionaria en el terreno de la psicopatologíaoriginalmente publiea<tci:en 1913 (Jaspers, 1951), una respuesta másapropiada que en algunas de las' desmesuras psícoanalítícas que paraese entonces comenzaban a darse; su pasión por la filosofía (Delgadofue un voraz y crítico lector de obras filosóficas, mostrando gran pre-dilección por losttába:jos de Nietzsche, 1844-1900, a quien citó cons-tantemente), se enriqueció y amplió con la visión al par polémica yaguda de un pen~~doi del talento ele Max Scheler. Por último, la teoríade Kretschmer encontró eco en un hombre como él, formado en latradición positivista.

Sea aún dicha una palabra acerca del rol de Delgado en la difusiónde las ideas de uno de los discípulos de Freud, Alfred Adler (1870-1937).Tan temprano corno 192~,en la Revista de Psiquiatría y DisciplinasConexas, Delgado publicó una recensión de El carácter nf!Urótico, obrafundamental del padre de la psicología individual...

Las relaciones entre Delgado y Adler parecen haber repetido lasque él tuviera con Freud. En su tesis El psicoanálisis (después aparecida,como ya se dijo en forma de Iibro menciona varios trabajos de Adler(Study olorgiln inleriority and its psychical compensation; Ueber den neruoesenCharakter, "Die Indívídualpsychologie, ihre Voraussetzungen und Er-gebnisse"); describiendo los aspectos centrales de su teoría a la' queconsidera una innovación que "consiste -por lo menos en algunospuntos- en una hábil sustitución de valores o acaso sólo de nombres"(Delgado, 1919, pág. 160).

Su valoración de las ideas de Adler era favorable, como se desprendede la lectura-del siguiente párrafo de El psicoanálisis: "en lo substancial(de la teoría adleríana) hay dos conceptos nuevos que pueden agregarsea las conquistas freudianas, tales son: el de la inferioridad orgánicacomo punto de arranque o estímulo para el deseo, y el del fm ilusoriopara conseguir la seguridad contra tal inferioridad. La experiencia delporvenir se encargará de señalar los justos lúnites de los factores descu-biertos . .Quizá el único pecado de Adler es haber generalizado de manerademasiado absoluta, De todos modos, su contribución a la psicología delindividuo es muy apreciable y útil" (Delgado 1919a, pág. 161).

Al igual que con Freud, Delgado se Carteó con Adler. Rey de Castro(1989) señala que entre los archivos del psiquiatra peruano se encuentrauna misiva de Adler del 30 de abril de 1922. También en ese añoapareció en Heilen unlt Bilden; una obra de Adler y Furtmüller, unacontribución del psiquiatra peruano (Delgado, 1922b). Este hecho pa-

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rece haber marcado el punto más alto de las relaciones de Delgadocon Adler. Sin embargo, las vinculaciones de él con el movimiento deAdler prosiguieron: en 1927 el médico peruano viaja al X CongresoPsicoanalítico Internacional que empezó el primero de septiembre y,por invitación de Adler,al IV Congreso Internacional de PsicologíaIndividual Comparada, que se realizó entre el 16 Yel 19 de septiembre(Mariátegui, 1990). Después, con el paso de los años, Delgado se alejaríade la psicología adleriana.

Lo cierto, en definitiva, es que hacia 1930 Delgado había asumidouna actitud de distancia cada vez mayor con respecto al psicoanálisis.

Psicología (1933) Y La personalidad y el carácter (1942)

Es precisamente en Psicología en donde este alejamiento de la doc-trina freudiana se evidencia de un modo más claro.'Escrito por Delgadoen conjunto con Mariano Iberico (1892-1974), aligual que él profesorsanmarquino y destacado fílosófo, Psicología es el fruto tanto del interéscontinuado por la ciencia psicológica como de los años durante loscuales nuestro autor había enseñado esta disciplina en la Facultad deLetras de la Universidad de San Marcos.

"Ofrecemos a los estudiantes peruanos este curso de Psicologíacuyo principal objeto es acentuar y difundir entre nosotros el interéspor la cultura del espíritu (Delgado e Ibérico, 1933; pág. V): con estaspalabras se inicia la introducción de esta obra, que ejerceria una graninfluencia en la psicología peruana y que es, con toda justicia, la másexitosa de todas las obras de psicología escritas en el Perú (en efecto,alcanzó nada menos que nueve ediciones en 36 años) (León, en prensa).

Como hemos dicho, el libro Psicología evidencia el alejamiento deDelgado del psicoanálisis. Sin embargo, de modo sorprendente, en elvolumen se encuentra un capítulo especialmente dedicado a esta doc-trina: "El hecho se justifica, empero, si se valora con imparcialidad elsignificado de la aportación de Freud a la Psicología" --escriben Delgadoe Iberico- . "En efecto, gracias al genio del ilustre psiquiatra vienés,el conocimiento del alma humana ha salido del lecho de Procusto dela psicología fisiológicay experimental del siglo XIX".Pero más adelantese puede leer que "no se puede negar tampoco que el cuerpo dedoctrina del psicoanálisis es, en su mayor parte, afirmación no demos-trada" y que "la inmensa literatura de los cultores de la nueva disciplina,en lugar de ofrecer demostraciones bien fundadas yjuiciosas rectifica-ciones de las hipótesis insostenibles, es un cúmulo de interpretacionesmás o menos estereotipadas según los artículos de la fé psicoanalítica"(Delgado e Ibérico, 1933, pág. VI).

En lo citado antes se observa la presencia de un juicio criticoacertado hacia el psicoanálisis.Pero, si losautores se muestran escépticos

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con respecto de las posibilidades del pensamiento de Freud, écuál esel enfoque que caracteriza la perspectiva de la psicología que ellostienen?

En primer lugar, se observa una mareada influencia del pensamientogestáltico: "la idea dominante en el libro que hoy publicamos es la deque en la vida psicológica como en la orgánica, el todo es antes quelas partes, la forma antes que la materia, la estructura antes que loselementos en que se descompone" (Delgado e Ibérico, 1933, pág. V).Debe anotarse, empero, que la obra prosigue una revisión más ampliade la vida psicológica: "Como es sabido, la realidad psicológieapuede ser'estudiada desde dos puntos de vista extremos: el punto de vista fenome-nológico y el integral Y genético ... Nosotros no hemos querido prescindirni de las nociones de la fenomenología en cuanto a la diferenciaciónesencial de los hechos, ni de las observaciones de la psicología integral ygenética, que contempla la actividad anúnica como un todo germinal eindescomponible" (Delgado e Ibérico, 1933, pág. V).

Por otro lado,la influencia de Henri Bergson (1859-1941), repre-sentada' en esta obra por Ibérico (que lo había estudiado desde sujuventud, apreciando de modo especial sus ideas), se hace presente,Bergson domina el capítulo sobre el carácter y, también, es el autormás citado tanto en la primera como en la última edición de la obra(Ver tabla 1).

TABLA 1

Los cinco autores más citados en el libro "Psicología"(primera y última ediciones)

1933(11ed.)

1969(91 ed.)

01. H. Bergson02. W.James03. H. Hoeffding04. Th. Ri.bot05. S. Freud

1615130908

01. H. Bergson02. M. Scheler03. Th. Ri.bot04. H. Delacroix05. W. McDougall

1309090808

La tabla anterior demuestra la influencia de Bergson en esta obray la "atmósfera europea" en Psicología. Obsérvese que Sigmund Freudno figura más en la lista de los cinco autores más citados en la novenaedición (1969).

La influencia de psicología en la escena académica peruana y en laciencia psicológica latinoamericana fue muy grande. Blumenfeld (1949)señaló que la obra era conocida en varios países sudamericanos, entanto que Alarcón (1968, 1980) destaca la importancia del libro en losmedios universitarios y señala, además, que una versión abreviada de

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él, fue publicada con el título de Compendio de psicología (Delgado eIbérico, 1950), para el uso de los estudiantes de secundaria.

No menos importante es La personalidad y el carácter (1966), obraque expone algunas de las principales teorías europeas de la persona-lidad, con especial énfasis en los teóricos alemanes.

En esta obra dos cosas se hacen evidentes: de un lado, la marcadadistancia que existe ya para entonces entre Delgado y el psicoanálisis(no se expone en esta obra teoría psicoanalítica alguna de la persona-lidad); y, del otro, la aceptación por parte del autor de los principiosde la psicología comprensiva en el estudio de la personalidad. Las ideasde Dilthey (1833-1911) son expuestas y Delgado se detiene en laintuición como uno de los métodos del conocimiento de la personalidad.

Algo más debe señalarse con respecto al libro La personalidad y elcarácter: se trata del hecho que en la época en la que aparece (la primeraedición data de 1942), algunos de los más importantes tratados de lapersonalidad aún no habían sido traducidos al castellano, razón por lacual esta obra constituyó una de las mejores alternativas para el lectorinteresado en el tema.

HONORIO DELGADO Y LA REVISTA DENEURo-PSIQUIATRIA

Ya nos hemos referido a la Revista de Psiquiatría y Disciplinas Conexas,con cuyo cese desapareció la única revista especializada que se publicabaen el Perú en la década de los años veinte. Algunos intentos de reflotarlafracasaron y ocasionalmente aparecieron otras publicaciones que, deun modo u otro, intentaban cubrir el vacío que ella había dejado: asípor ejemplo, entre 1937 y 1941 el Cuerpo Médico del Hospital VíctorLarco Herrera editó los Archivos Peruanos de Higiene Metal; que contienevaliosos trabajos e informaciones del acontecer científico y profesionalde la época (León y Mariátegui 1987). En general, sin embargo, loscultores de las disciplinas del hombre carecían de algún lugar perma-nente para publicar; si exceptuamos la Revista de Ciencias.

En 1938, Honorio Delgado yJ. Osear Trelles (joven y prometedorneurólogo que retornaba al Perú tras exitosos estudios en Francia)fundan la Revista de Neuro-psiquiatria, que hasta el día de hoy se publica.Si bien en ella no hay la orientación interdisciplinaria perceptible yaen el título mismo de su antecesora, la Revista de Psiquiatría y DisciplinasConexas, la Revista de Neuro-psiquiatría se ha tornado con el paso delos años y con la dirección impresa por sus fundadores y continuadapor su actual Director-Editor (Prof. Dr. Javier Mariátegui) una revistainterdisciplinaria, que convoca y expresa los esfuerzos científicos delos estudiosos de las más diversas disciplinas. Por supuesto, la psiquiatría'y la neurología tienen un lugar y atenciones de privilegio, pero también

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la psicología, la antropología y la historia de la medicina y de la psi-quiatría, la filosofia y hasta la líteratura como tema de reflexión psi-quiátrica han encontrado acogida en sus páginas. continuados a lolargo de cincuenta años (verdadero récord en el publícísmo científicoperuano. Maríáteguí, 1987).

El propio Honorio Delgado dio la pauta y sentó las bases de laorientación interdísciplinaria de la Revista de NtJU1'O- psiquiatria, pues élpublicó numerosos artículos con enfoque no psiquiátrico o en todo caso.no exclusivamente psiquiátrico (v. g. 1939b. 1940. 1943. 1959. 1961).

En ausencia de una revista dedicada a la psicología que tuviera unaaparición regular. la Revista de Neuro-psiquiatna. terminó acogiendo ensus páginas muchos trabajos que, de haber existido una revista psico-lógica peruana, habrían tenido acogida en ella. Así por ejemplo. muchosde los importantes trabajos neuro-psícológícos de Leopoldo Chíappo,discípulo de Delgado y hoy uno de los más destacados exponentes dela psicología comprensiva en el Pero, fueron publicados en sus páginas(1955. 1957b. 1958. 1959).

Sin embargo, Delgado fue particularmente conciente de la necesidade importancia de revistas psicológicas, así como de otras, dedicadas aáreas más específicas. Así, él prestó decidido y activo apoyo y colaborócon algunos trabajos a la Revista de Pskologia, una publicación auspiciadapor la Sociedad Peruana de Psicología, la misma que apareció entre1959 y 1960 (León y Orbegoso 1988). Otra publicación auspiciada por .Delgado fue la Revista de Pskolog(a Médica y Psicoterapia, presentadacomo suplemento de la Revista de Neuro-psíquiatria, y cuya existenciafue lamentablemente breve (León y Zambrano en prensa).

HONORIO DELGADO Y LA ENSEÑANZADE LA PSICOLOGIA

Como ya se manifestó, Honorio Delgado dió evidencias desde muytemprano de un interés sostenido y sistemático por la psicología. Casipodríamos decir que, después de la psiquiatría, la psicología fue sumás clara e importante vocación. dado que, a lo largo de toda suexistencia y, en especial, a través de su amplísima producción bibliog-ráfica, los temas psicológicos atrajeron su atención y merecieron unlugar preferencial en sus esfuerzos publicistas.

Pero, por cierto, Delgado no sólo escribió sobre psicología (comosucedió por ejemplo, con su tesis doctoral en ciencias naturales o con sulibro traducido al alemán con Mariano Ibérico) sino que también la enseñó.Esto lo hizo en la Facultad de Letras de la Universidad de San Marcos,entre 1928 y 1931. El libro Psicologfa presenta de modo sistemático suspuntos de vista, los mismos que él, sin duda, dió a conocer durante eldesarrrollo lectivo de la asignatura en la Facultad de Letras.

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Sin embargo, no sólo la labor docente en dicha Facultad debemencionarse en cuanto se trata el aporte de Honorio Delgado a laenseñanza de la psicología en el Perú. Algunos años atrás, en laspostrimerías de la segunda década del siglo en curso, él y Valdizánhabían animado el Seminario Psicopedagógico (fundado en 1918), gru-po de trabajo extrauniversitario que tenía por finalidad sensibilizar alos participantes en una adecuada y moderna concepción del procesopedagógico y del desarrollo del niño. Este seminario rindió sus frutostambién en el terreno de la investigación: Victoria Izcue, una partici-pante en él, publicó un estudio en el que empleó la técnica de asociaciónde palabras (Izcue, 1920); de otro lado, Delgado dio a la imprenta ellibro Algunos aspectos de la psü;ología del niño en 1922, una obra quereunía las conferencias que él dio en ese seminario y que fue prologadapor William A. White (1870-1937). Por esos años, asimismo, Delgadoreclamó en varios artículos periodísticos y en la revista que dirigía conValdizán, la presencia de un curso de psicología en la formación generaldel universitario (v. g. Delgado 1919c, 1919d)1.

HONORIO DELGADO Y SU POSICION EN PSICOLOGIA

Resulta tarea harto compleja llevar a cabo una valoración adecuadade la posición de Delgado en psicología. Dos razones estrictamenteformales se erigen en obstáculos formidables: de una parte, el volumende la producción delgadiana; de la otra, la variedad de temas abordadospor el estudioso peruano. Estos dos aspectos demandan un manejoexigente y detenido para llegar a un conocimiento cabal en las ideasde Delgado y de su producción.

I Una noticia publicada en la Revista Univmitaria (1929), nos da una idea de lostemas desarrollados (en forma de seminarios por los alumnos) en la asignalllra dePsicología. Los temas fueron: Escuela pitagórica: animismo - Conceptos báSicos de lapsicología tomista. Inteligencia animal lexiste en los insectos y en las aves? El mundoexterior y el interno en el salvaje y el niño. Heráclito; el "fuego" origtnarioc panta reí;logos, hiérnarmené; alma individual, enatiodremia, lucha de todor.polaridad, relativismo.Orígenes de la psícoñsica, La orientación de los insectos )' las aves respecto al espacio,Significación cultural del mito. Significación psicológica del pensamiento de Heráclito ydel de Plotino. Instinto plástico e instinto fijado. ACtitud del salvaje y del niño ante larealidad. Anaxágoras: Nous: materia pensante. El alma y el cuerpo según Plotino. ¿Quésignificado tiene la estructura y la evolución del sistema nervioso para la psicol~? ¿Ql1érelación hay entre el desarrollo de la mente del niño )' el de la humanidad? Hípócrates:pneuma y cerebro; physis: tipología de los caracteres; Aspe.ctos de la vida anímica segúnAristóteles. ¿Qué hechos inilican que los animales inferiores -protozoarios y anélidos,etc- son capaces de vida psíquica? Cambios característicos de la vida psíquica en lapubertad. Demócrito, átomos fisicos y psíquicos; materialismo unilateral. 1:1 alma segúnAristóteles. ¿Qué se debe entender por instinto? Manifestaciones superiores de lamentalidad del hombre primitivo. Pro~ras. -Sécrates: la autognosia. Aristóteles y lacatarsis. Locke. Relación entre los actos mstintivos y los de la inteligencia. Erotismo ygenitalidad en la adolescencia. Platón: idealismo; inmortalidad del alma. Dicotomía defa actitud espiritual de la humanidad, Plotino: la triada de los principios divinos y latriade humana. ¿Qué hechos nos, indican que hay actividad pslquica espontánea en losin~ Primeras manifestaciones de la actividad f?síquicadel níño. Aristóteles: empirismoen el estudio de los fenómenos naturales: substancia, materia y forma: entelequia; sensoriocomún. Psicología moderna: Wundt.

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Pero, a despecho de estas dificultades algunos intentos se han hecho:el más completo es. el desarrollado por Leopoldo Chiappo, discípulode Delgado, que ha escrito varios trabajos examinando su obra desdeel ángulo psicológico, pero también tratando la arista filosófica (v. g.1957a, 1985).

Es también en relación con la filosofía que Salazar Bondy lleva acabo en su Historia de las ideas en el Perú republü;ano (1965) un análisisde las ideas de Honorío Delgado.

En el marco de la presente contribución sólo haremos referenciaa breves aspectos centrales de la obra delgadiana, dentro de los limitesestrictos de la psicología.

Destaca, en primer lugar, la evolución que experimentan las ideasde Delgado. Entusiasta difusor y defensor del psicoanálisis en la primerahora de esta doctrina en tierras latinoamericanas, Delgado se interesatambién por el enfoque biotipológico que Kretschmer propone a partirde 1921, para después, ganado por su permanente preocupación portemas filosóficos, experimentar (y expresar en sus escritos) la influenciade Scheler, Keyserling y Jaspers.

La influencia de estos autores, todos ellos críticos del psicoanálisis,probablemente jugó un rol de gran significado en el progresivo aleja-miento del psiquiatra peruano con respecto a las ideas de Freud. DeScheler, por lo demás uno de los críticos más agudos y mejor informadosde las ideas psicoanalíticas de su época, Delgado parece también habertomado el marcado interés por fenómenos intraindividuales desde unaperspectiva fenomenológica, perspectiva que también Jaspers repre-sentaba. De este último, el médico peruano recogió el fuerte énfasisen el método y la insistencia en la precisión de la descripción clínica.Sobre el particular Delgado escribe lo siguiente "(la) descripción feno-menológica entraña un mínimo de interpretación. Consiste en describircon exactitud la experiencia vivida en el momento, sin cuidarse de lascondiciones de su origen ni de sus consecuencias, prendiendo sólo surealidad palpitante, su modalidad original, su estructura distintiva"(Delgado, 1969, pág. 21). '

Por otro lado, Jaspers, severo crítico del psicoanálisis, influyó en laestimativa de Delgado sobre la doctrina de Freud.

Otro nombre todavía debe ser mencionado cuando se hace unrápido balance de las influencias sobre Delgado. Es uno probablementedesconocido para los psicólogos latinoamericanos de las promocionesjóvenes: se trata de Nicolai Hartmann (1882-1950), el distinguido fi-lósofo alemán que ha ejercido tanta influencia en la obra de muchospsicólogos alemanes (por ejemplo en Philipp Lersch),

La postura central de Delgado en lo que concierne a la psicologíaes la de concebir a ésta en calidad de rama de la filosofia, relegandoal experimento a un segundo plano como vía generadora del conoci-

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miento psicológico y colocando en primer lugar a la intuición. Hay,además, un manifiesto propósito de ligar la axiología (la disciplina queestudia los valores) a la ciencia psicológica, lo que nos parece quedelata la fuerte influencia de Spranger (1882-1963).

Obviamente, la ligazón que Delgado establece entre la psicología yla filosofia, ligazón de dependencia, entra en clara contraposición conlo que hoy los psicológos piensan acerca de la sintonía de la psicología.y con esto, Delgado se inscribe dentro de la psicología comprensiva(verstehende Psychologie), a la cual tantas contribuciones han hecho figurascomo Dilthey y Spranger.

HONORIO DELGADO Y LA PSICOLOGIA INTERNACIONAL

Honorio Delgado fue el primer psiquiatra y psicólogo peruano detalla internacional. Esto, por su dilatada actividad publicista en revistasy publicaciones editadas más allá, no sólo de las fronteras peruanas,sino también de las costas latinoamericanas.

Políglota y poseedor de intereses universales, Delgado fue percibidopor sus coetáneos y colegas como un "hombre de mundo". Luis AlbertoSánchez, una de las figuras más destacadas de la escena cultural peruanadel presente siglo, se refiere al Delgado de los años veinte empleandoestos términos: "Acababa de visitar Europa. Había estado en Alemaniay Austria. Regresaba saturado de las innovaciones científicas de la Escuelade Viena. Era el representante natural de Freud en lima. Traducía aStefan George. Probablemente conocía ya las poesías de Rilke. Era unhombre con figura esbelta, cabeza redonda, gran frente, ojos negros deauquénido, andar automático. Siempre usaba guantes de color patito yescarpines blancos o plomo claro perla. En su mano jamás faltaba elbastón de malaca. A menudo destellaba una rosa o un clavel blanco enel C?jalde su solapa. Era la imagen viva del Herr Professor pasado por lasdelicadezas del Boulevard" (Sánchez, 1975; pág. 10).

En un medio científico como el peruano., tan alejado de las metro-polis de la ciencia, la actualización permanente que Delgado demostrabaen sus escritos, su condición de políglota, el manejo de literatura parala inmensa mayoría local francamente inaccesible, la profundidad yvariedad de temas por él tratados, lo hicieron la expresión peruana"de carne y hueso" del genuino Sdiola».

Sus habilidades lingüísticas y su permanente interés en establecercontactos internacionales, sus repetidos viajes al exterior, durante mu-chos de los cuales desempeñó importantes funciones en congresos yeventos científicos (por ejemplo, fue Director de la Segunda Sesión delCongreso Mundial de Psiquiatría, en París, en 1950; Ponente Oficialen el Segundo Congreso Internacional de Psiquiatría, en Zürich, en1957; Presidente de Sesión de Clausura del Symposium sobre Estados

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Depresivos, en Río de Janeiro, en 1950; Presidente de la Sección dePsiquiatría del Congreso Panamericano de Medicina, en México, en1960; etc.), le permitieron conocer personalmente a muchas de lasgrandes figuras de la psiquiatría y la psicología mundiales y tomarcontacto de primera mano con mucho del progreso en la escena cien-tífica mundial, progreso del que informó a través de sus múltiplespublicaciones (v; g. Delgado 1927b, 1951, 1955).

Para muchos de sus compatriotas Delgado fue el más distinguidorepresentante en el Perú del pensamiento alemán en psiquiatría, psi-cología, y filosofia.

De hecho, Delgado experimentó una gran admiración por la obrade pensadores germanos y su contacto con el mundo cultural y científicode habla alemana fue prolongado y fructífero. No sólo dio a conocera Freud en el Perú y en América Latina (Rey de Castro, 1989), sinoque además fue el más profundo conocedor local (ymuy probablementeen toda América Latina, como lo señala Oneto, 1970) de la obra deJaspers y, motivado por su interés por la cultura alemana, fue mucho másallá de las fronteras disciplinarias ingresando en el mundo de la filosoña(como lo demuestran sus ensayos acerca de Goethe y Cassirer; y, enparticular, sobre Hartmann, por el que sintió particular admiración) y laliteratura (difundiendo la obra del poeta esotérico Stefan George).

Sus primeros contactos efectivos con la psicología y la psiquiatríaalemanas se produjeron en el marco del interés por el psicoanálisis. Enla década del veinte, cuando Delgado visitó por primera vez Europa, tuvola oportunidad, como ya se ha dicho, de conocer a Freud, Karl AbrahamYOtto Rank, encuentros de gran significado en su carrera científica si setiene en cuenta el número de veces que Delgado fue citado por ellos odel acceso que él tuvo a publicar en revistas psicoanalíticas.

Pero, por supuesto, esas estancias en Alemania no sólo permitieronreforzar los vínculos con el psicoanálisis (que él más adelante rompería,como ya vimos). También con el paso de los años (tanto antes de suprimer viaje a Europa como, por supuesto, después de éste), Delgadose relacionó a través de lecturas pero también personalmente con unaverdadera galería de gigantes de la psiquiatría y la neurología alemanas:desde Wagner Jauregg hasta Binswanger, pasando por Jaspers, Spran-ger, Schneider, etc. De algunos de ellos, Delgado fue el más distinguidorepresentante en el Perú y en América Latina: así, por ejemplo, él fuereconocido como el más profundo conocedor de la obra de Jaspers, ala que dedicó varios trabajos (el más amplio de ellos está dedicado asu AU~ne Psychopathologie, (Delgado, 1947; véase también Delgado,1939a);asimismo Spranger, hoy virtualmente olvidado, fue objeto deestudio por parte del psiquiatra peruano (Delgado, 1952) quien, además,escribió contribuciones paras dos Festschriften dedicados a él (Delgado,1957, 1957a). También puede .afirmarse algo semejante en lo que serefiere a Cassirer (Delgado, 1958).

HONORIO DELGADO 417

La admiración de Delgado por la psicología francesa fue tambiénmuy grande. Desde muy temprano en su carrera, Delgado profesóadmiración marcada hacia Pinel y Ribot, dedicando al primero untrabajo de corte histórico (Delgado, 1927a); y, si bien, en los primerosaños de su actividad publicista demostró escepticismo hacia las ideasde Bergson, con el paso de los años su actividad hacia él parece habersufrido una modificación sustancial, si se tiene en cuenta el númerode citas que en Psicologfa, él e Ibérico hacen de Bergson.

El acercamiento a la cultura y a la ciencia francesas, le permitió unconocimiento amplio de la filosofía y la cultura francófonas. Esto,probablemente desde muy temprano en su carrera científica, dadas lasfuertes influencias de la cultura francesa en el medio académico limeñode comienzos de siglo. Conocedor y lector de los moralistas franceses(tales como La Rochefoucauld y Chamfort), Delgado encontraría, comoya se dijo antes, con el paso de los años y superando una postura deinicial y marcado escepticismo, en las ideas de Bergson materia germinalpara su puntos de vista psicológico y psiquiátrico. Así por ejemplo, ensu Enjuiciamiento de la medicina psicosomátú:a (1960) dedica una secciónespecial a la valoración de las ideas del pensador francés sobre el tema.

De otra parte, en la obra del gran novelista Marcel Proust (1871-1922), Delgado creyó encontrar un buen ejemplo para demostrar loque él permanentemente sostenía: que la literatura es la vía más efectivay segura para llegar a conocer el alma humana (Delgado, 1948).

Por su parte, las relaciones de Delgado con la psicología italianafueron también de muy antigua data, si bien de modo indirecto. Comoya se dijo, el maestro de Delgado, Hermilio Valdizán, fue un discípulode Sante De Sanctis, una de las grandes figuras de la psiquiatría y dela psicología ítalas. Honorio Delgado fue pues heredero indirecto dela rica tradición de la psicología italiana. Delgado conoció en detallemuchas de las obras de Agostino Gemelli (1878-1959) y Nicola Pende,tal como lo demuestran numerosas recensiones de trabajos de estaspersonalidades y otras aparecidas en la Revista de Neuso- psiquiatría,especialmente en los primeros volúmenes.

Pero si bien los psicólogos italianos no estuvieron en el centro dela atención de Delgado, otras figuras italianas sí lo estuvieron. Así, éldedicó un extenso estudio a Castiglione y otro, no menos extenso, aAntonio Raimondi (1826-1890), científico italiano que emigrara alPerú y permaneció allí hasta su muerte; ambos incluidos en su volumenDe la cultura y sus art{jices (1961).

Los vínculos de Delgado con la psicología inglesa y con la nortea-mericana; en general, con la psicología del mundo angloparlante, nofueron tan estrechos como con la psicología y la psiquiatría alemanas.Especial valoración concedió a la obra de Gordon W. Allport (1897-1967), pero su actitud frente a las ideas de Watson fue de dura critica.En sus años de entusiasmo psicoanalítico, sin embargo, mantuvo ca-

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rrespondencía entre otros con Wtlliam Alanson White, Emest jones ytradujo para la editorial Biblioteca Nueva, en colaboración con PaulWilson, un volumen sobre el psicoanálisis escrito por Smith EllyJellife.En 1941 Delgado fue nominado miembro del cómite editorial del]ournal of Almormal andSocial Psydwwt:J.

Por último, sus relaciones con la psicología española merecen par-ticular atención. Delgado fue uno de los más fervientes defensores delfortalecimiento de los lazos entre el Perú y la así llamada Madre Patria.En el plano cultural auspició de manera decida la fundación del InstitutoPeruano de Cultura Hispánica en Lima y publicó muy activamente enrevistas españolas de psicología (como, por ejemplo, la Revista de Psi-cowgía General, Aplicada, La Revista de Psicología Médica, Psiroterapia)y tuvo lazos de amistad con numerosos psiquiatras y psicólogos espa-ñoles. En 1957 le fue concedido el Premio de la Sociedad Española dePsicología y en 1954 la Universidad de Salamanca le concedió el gradode Doctor honoris causo:

A MODO DE CONCLUSION

En el presente trabajo hemos abordado la vida y la obra cientíjü;ade Honorio Delgado. Subrayamos de modo expreso el término "obracientífica", porque, por la razones propias de las limitaciones de todoartículo, nos hemos visto en la imperiosa necesidad de no referirnosa su labor gestora de lo que fuera la Universidad Peruana de CienciasMédicas y Biológicas (que hoy se ha transformado en la UniversidadPeruana Cayetano Heredia), que él ayudó a fundar en 1962 y de laque fue su primer Rector y su primer Doctor luJnoris causa; y a sudesempeño como Ministro de Educación en 1948, durante el gobiernode José Luis Bustamante y Rivero.

llegando al fin de nuestra contribución debemos formular un ba-lance, necesariamente sucinto, de sus aportes y de lo que hoy conservasignificado y actualidad de su trabajo,

La primera y la, más evidente de las conclusiones es señalar queHonorio Delgado fue uno de los más activos e importantes precursoresde la psicología en el Perú y en América Latina, En efecto, en la historiade la psicología peruana Delgado ocupa un lugar de gran significado.Su incansable actividad en el terreno del publicismo científico, expre-sada en los items que conforman su bibliografia, su dilatada labordocente, su actuación en congresos, reuniones científicas y sociedadesacadémicas; y su actitud universal frente al conocimiento, lo colocanen el sitial de pionero de la psicología en el Perú (alIado de WalterBlumenfeld), pero, además, hacen de él una de las personalidades demás definido perfil en la historia de la cultura y la ciencia peruanas.

HONORIO DELGADO 419

Aunque formado como médico y especializado en psiquiatría, Del-gado cultivó -como se ha demostrado en este trabajo- con preocupacióny asiduidad la psicología. La suya fue la formaci6n del autodidacta: nopodía ser de otro modo, dado que en los años de su vida estudiantil,la psicología en el Perú no existía como profesi6n y sus representantesen el país sudamericano eran muy contados (y también, a su vez,autodidactas). Delgado fue, por lo menos a partir de la segunda mitadde la década del veinte hasta fines de la primera mitad de los treinta,el único psia5ÚJgo peruano, combinando la labor académica como lapráctica profesional de hecho como psicólogo y psiquiatra.

Si Delgado puede ser visto como un psicólogo, entonces fue unpsicólogo con características que lo asemejan a Enrique Mouchet, EmilioMira y López, yJosé Ingenieros. Vasta cultura filosófica, preocupaci6nuniversal por el conocimiento, productividad científica de inicio tem-prano y continuada a lo largo de toda su vida, insistencia en el aspectovalorativo, desarrollo paulatino de concepciones propias (a pesar deun expreso renunciamiento a la creaci6n original en aras de la difusiónde las ideas del Viejo Mundo), compromiso académico expresado enla proposición cuando no creación y fundaci6n de sociedades científicasy revistas; labor magistral reconocida y proficua: estos son algunos delos rasgos distintivos de ellos.

No menos importante es destacar la permanente preocupación deDelgado por señalar las relaciones entre la psicología y,la filosofia. Porcierto que en esto el médico peruano tuvo una posición que los psi-cólogos de hoy no comparten, al proponer que la psicología era unaparte de la filosofia. Esta idea de Delgado tiene, por supuesto, que servista al contraluz de la época en que él vivi6 Ydel nivel de desarrolloalcanzado por la psicología en el país andino. Más allá de esto, sinembargo, los psic61ogos considerarán como suyos los rigurosos cánonesde trabajo (en la observación, en la obtenci6n de conclusiones) y loacertado del ejercicio de la tarea crítica (por ejemplo, la llevada a caboen la valoración del psicoanálisis) que fueron las propias de él.

Su actuación coincidi6 con los años en los cuales la psicología comoprofesión y como actividad científica comenzaba recién a proyectarseen el ámbito latinoamericano. A ese desarrollo contribuy6 Delgado consu sostenida preocupación por la psicología, su cultura universal, y laproducción de obras de amplia lectoría. Como muchos otros pionerosde la psicología latinoamericana Delgado se distinguió por buscar unapsicología plenamente integrada a las otras ciencias y con un sólidorespaldo en la filosofia.

Esta postura, netamente filos6fico-espiritualista fue defendida porél con la convicción del pionero y la pasión del enamorado, tal comopuede observarse en sus escritos.

No puede concluirse un trabajo sobre la vida Yla obra de HonorioDelgado, por breve que éste sea, sin hacer una menci6n a la dimensi6n

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ética que fue una impronta de toda su existencia; Javier Mariátegui, sudiscípulo, escribe "Horwrabilidad, honestidad ,honradez" son algunas delas caracteristicas genéricas del maestro peruano quien, desde queasomó a la razón en su Arequipa natal, forjó un estilo de vida enea-minado al logro de las excelencias, al que se ciñó estrictamente en sudilatada y fecunda existencia. Trazó una imagen óptima, la de lashonoriJieiencia Y vivió conforme a ella, gracias a.una disciplina personalcon acerada voluntad afumativa. En fin, hizo de su proyecto vital ellogro de su mismidad, la culminación de su ser real, el acuerdo tácitoy admirable entre su vida y su obra" (Mariátegui, 1990; pág. 7).

Pero, nos parece, nadie mejor que Jorge Basadre, el gran historiadorperuano, ha pincelado el porte moral de Honorio Delgado: "En él nofuncionan los atributos que suele adjudicarse a la mente criolla: lasimulación, la improvisación, la ligereza, el apresuramiento, la inauten-ticidad, la frivolidad, la impresionabilidad, el arribismo, el afán defiguración, la retórica, la falta de método, la inconstancia y otros defectossimilares. Dignidad y mesura, serenidad y energía, entusiasmo y madu-rez, robustez y finura, depuración y sencillez, austeridad y cordialidad,señorío y limpieza caracterizan la personalidad de Honorio Delgado"(Basadre, 1981; pg. 36).

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