Plan de Trabajo para laRectoría de la UNAMPeriodo 2019-2023

Resumen Ejecutivo“Proyectar hacia el futuro: fortalecer el sentido científico, humano y social de la UNAM”

Ciudad UniversitariaOctubre, 2019

Dra. Angélica Cuéllar Vázquez

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Índice

1. Proyectar hacia el futuro: Fortalecer el sentido científico, humano y social de la UNAM z Vocación de servicio z La autonomía universitaria, fundamental para nuestro futuro z Más participación, mejor rendición de cuentas z El sentido de la administración de los recursos públicos z Desafíos de la educación superior y crecimiento de la Universidad z Transversalidad de género: modo de vida en la UNAM z Sentido de comunidad: seguridad y convivencia en la vida universitaria

2. La UNAM en el contexto internacional y nacional z Contexto internacional, un entorno complejo z Contexto nacional, problemas y desafíos

3. El rumbo a seguir: ejes rectores y líneas de acción3.1 Proyecto académico: la esencia de la UNAM

z Bachillerato z Licenciatura z Posgrado z Docencia z Investigación

3.2 Internacionalización y relaciones interculturales3.3 La cultura al alcance de los universitarios 3.4 Atención a estudiantes, por una comunidad incluyente y corresponsable3.5 Género: Igualdad y no discriminación3.6 La construcción de una comunidad segura3.7 Deporte y calidad de vida3.8 UNAM sostenible3.9 La administración al servicio de la comunidad 3.10 La UNAM al servicio de la sociedad

z Vinculación y educación continua z Servicio social

4. La UNAM que queremos, la Universidad que proponemos

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1. Proyectar hacia el futuro: Fortalecer el sentido científico, humano y social de la UNAM

La UNAM es un referente nacional e internacional de conocimiento, arte y cultura. Se ex-tiende sobre todos los ámbitos de nuestra sociedad y le infunda su aliento y la impulsa para lograr sus fines. Esto debe preservarse y fortalecerse. Para ello se dirige este documento el cual responde a la convocatoria emitida por la Junta de Gobierno sobre la elección de quien ocupará la Rectoría de la UNAM.

Los planteamientos y propuestas que integran este Plan de Trabajo, reflejan mi posición sobre el futuro de la Universidad, institución a la que he dedicado gran parte de mi vida. Mi proyecto para la Universidad no responde exclusivamente a un periodo de cuatro años, ya que actualmente el mundo debe ser pensado a través de estrategias continuas y de largo alcance.

La Universidad tiene una gran responsabilidad social, está al servicio de México y mantie-ne una posición independiente y crítica frente al poder económico y político, gracias a ello, es capaz de generar conocimientos aplicados a diversos ámbitos y proyectos de la sociedad.

Estoy convencida de que en esta época de aceleradas transformaciones, es central la par-ticipación universitaria en áreas de desarrollo social, científico, tecnológico, humanístico y artístico que contribuyan a elevar la calidad de vida de la población; sé que para ello se re-quiere ampliar los convenios de colaboración institucional y favorecer la integración de gru-pos interdisciplinarios orientados a la capacitación y certificación de servidoras y servidores públicos, así como a la formulación de diagnósticos integrales que fundamenten el diseño de políticas públicas.

Asimismo, la Universidad debe seguir participando con conocimiento científico, innova-ción tecnológica y compromiso social, con la iniciativa privada y la sociedad civil, establecien-do relaciones en las que ambas partes sean beneficiarias junto con la sociedad..

Vocación de servicio

La UNAM ocupa un lugar estratégico en la vida del país y realiza contribuciones significativas a las comunidades nacional e internacional, al aportar conocimiento a través de la investiga-ción, la docencia y la difusión de la cultura.

La Universidad tiene un compromiso social por un México más igualitario, justo y productivo que se inspira en los valores democráticos de nuestra Constitución Política, y se ha consolida-do como la mejor institución educativa de este país y una de las más importantes de la región, dado que se mantiene como una plataforma de movilidad e inclusión social y de equidad. Debido a la gratuidad de la educación pública y el acceso reglamentado del bachillerato a la educación profesional, la Universidad recibe en sus aulas a miles de estudiantes que, de otra manera, quedarían excluidos de la educación superior.

La UNAM es una institución que se caracteriza por la pluralidad y la diversidad que se nutren desde la sociedad; en su seno, conviven personas y grupos diversos con base en la libertad, el respeto, la tolerancia y el diálogo. Por ello, la Universidad es, sin duda, la máxima casa de estudios de nuestro país

La autonomía universitaria, fundamental para nuestro futuro

La autonomía es un atributo fundamental para las instituciones de educación superior, enti-dades cuyos objetivos primordiales son la enseñanza y la producción de conocimiento cien-

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tífico. En el caso específico de la UNAM, la autonomía es motivo de orgullo y uno de sus pilares identitarios.

No debemos dar por sentado el carácter autónomo de la UNAM, porque la autonomía es una construcción constante, es una conquista permanente que se alcanza con el trabajo co-tidiano y la actitud ética de toda la comunidad. Recordemos que no son pocos los momentos en la historia de la Universidad Nacional en los que se ha trabajado, discutido y luchado por alcanzarla, ampliarla, adecuarla o mantenerla.

Todo lo cual, resulta imprescindible reflexionar sobre cada momento histórico, cada co-yuntura política, cada situación social que condicionan las posibilidades y las características de la autonomía universitaria. Por ello, es importante seguir trabajando por una Universidad fuerte, plural, comprometida con el desarrollo social y la difusión del conocimiento; para lograrlo es impresindible reconocer la experiencia histórica de nuestra institución, en parti-cular la experiencia práctica de su autonomía.

El contexto político y social incide e incidirá en el futuro inmediato de la UNAM, por ello, es indispensable que los universitarios planteemos preguntas pertinentes: ¿cómo entende-mos hoy en día la autonomía universitaria? ¿existe un consenso sobre su significado? ¿frente a qué instancias se ejerce? ¿cuáles son los espacios institucionales en los que se observa? ¿qué rostro debe adquirir en los próximos años? son solo algunas de las interrogantes que debemos plantearnos.

Nuestra autonomía debe pensarse también en el marco de la llamada revolución del co-nocimiento. Por ello, no es vano preguntarse en este momento cómo definimos la autono-mía ante diversos órdenes de poder, ya sean políticos o económicos.

En ocasiones, se piensa que la autonomía es un elemento que conviene únicamente a la Universidad Nacional, sin embargo, es necesario señalar que es fundamental para el fortale-cimiento de todo el país. En el complejo momento que vivimos en México, es preciso contar con instituciones que garanticen la libertad de pensamiento, de investigación y de construc-ción de conocimiento.

Son tres las dimensiones que constituyen a la autonomía: académica, gubernamental y administrativa. Contamos con nueve décadas de experiencia que seguirán nutriendo la reflexión sobre cómo operar cada una de estas. Defender la autonomía requiere de una comunidad comprometida con el trabajo. La autonomía no sólo se decreta, sobre todo se practica, se ejerce día a día en todas las actividades desarrolladas en este espacio virtuoso de conocimiento y compromiso social.

La autonomía hacia el futuro debe pensarse de la mano de otra palabra fundamental en la comunidad universitaria: la responsabilidad. Éste debe ser un valor alimentado día a día por todos los miembros que la integran; actuar responsablemente dignifica a cualquier persona o entidad. Nuestra casa de estudios, en su fecunda historia, ha acumulado un invaluable reconocimiento social vinculado justamente a esa responsabilidad social.

Más participación, mejor rendición de cuentas

La Universidad Nacional es una entidad autónoma y descentralizada del Estado. Como toda institución que recibe financiamiento público, tiene una responsabilidad ineludible con la transparencia y la rendición de cuentas, entendida ésta como un ejercicio de informar y expli-car sus acciones, estrategias y decisiones. La política de transparencia en la UNAM debe supe-rar el paradigma del simple cumplimiento de la norma. Nuestras obligaciones de acceso a la información deben ser prácticas comunes; debemos avanzar hacia un modelo de universidad abierta a su comunidad y a la sociedad en general. La política de rendición de cuentas debe ser asumida por todos los universitarios y encabezada por las autoridades de la Universidad.

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El sentido de la administración de los recursos públicos

La UNAM se apoya con recursos de la nación, por ello debe disponer de una administración inteligente, sensible, honesta y eficaz, que cuide los recursos que utiliza para cumplir las ta-reas sustantivas que tiene a su cargo.

La administración universitaria debe fortalecer los siguientes rubros: realizar análisis pros-pectivos; ampliar los procesos de diálogo, consulta y concertación; establecer puentes de co-municación con la comunidad con el objeto de articular mejores formas de trabajo y lograr respuestas específicas a sus demandas.

Una administración eficaz implica construir una política administrativa con la capacidad para racionalizar los procesos de planeación, programación, control y evaluación de los recur-sos en favor del desarrollo autónomo de la UNAM consagrado en su legislación. Si los recursos públicos del país son escasos ante el cúmulo de demandas y problemas, es fundamental que la UNAM sea visionaria en su aprovechamiento y en la definición de prioridades.

Desafíos de la educación superior y crecimiento de la universidad

En las últimas décadas, las universidades públicas se han visto acotadas en su desarrollo y crecimiento, con lo que el país ha enfrentado una enorme demanda insatisfecha de educa-ción media superior y superior.

La Universidad Nacional ha mantenido su misión inicial intacta, pues ha establecido las adecuaciones necesarias para recibir a un número creciente de estudiantes en todos sus niveles, ha logrado una importante expansión a través del sistema de educación abierta y a distancia y mediante la creación de unidades profesionales y de investigación en toda la república e incluso fuera del país.

Es el momento de evaluar la estrategia de crecimiento de la Universidad Nacional para consolidar modelos alternativos como la educación a distancia y las sedes foráneas con el objetivo de contribuir a ofrecer oportunidades de educación profesional al mayor número de jóvenes a lo largo y ancho del país.

Es posible explorar otras opciones de expansión, como replicar el modelo UNAM en el interior del país, pero no a cargo de la Universidad, sino del Estado, estableciendo unidades académicas dotadas de autonomía administrativa que les permita una operación adecuada.

Transversalidad de género: modo de vida en la UNAM

Uno de los principales retos que enfrenta la UNAM es lograr la igualdad de género, un desa-fío que este proyecto acoge y afronta no solo desde la dicotomía hombre – mujer, sino en un sentido más amplio, comprometido con el principio de respeto a la diversidad, la tolerancia y la inclusión.

La desigualdad de género está en la base de la sociedad, lo que conduce a situaciones de violencia, discriminación, exclusión, inseguridad y vulnerabilidad. Proponemos que la UNAM adopte la transversalidad de género (mainstreaming), entendida como un modelo de política institucional que promueve la igualdad de derechos y oportunidades entre hombres y muje-res.

En los últimos años, la Universidad Nacional ha hecho enormes esfuerzos por desnatura-lizar la desigualdad de género, fomentando institucionalmente la equidad y la no discrimina-

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ción. Consideramos que es momento de redoblar esfuerzos y transitar hacia un pensamiento y un accionar universitarios basados en los principios de igualdad y no discriminación.

Sentido de comunidad: Seguridad y convivencia en la vida universitaria

La inseguridad restringe las libertades y genera amenazas contra la integridad personal y patrimonial, por ello se ha convertido en una de las preocupaciones principales en México. Es conveniente reconocer que el problema de inseguridad no es exclusivo de la UNAM, pero ésta es sensible a los cambios que comprometen el futuro de nuestro país y puede ofrecer alternativas para resolver problemas nacionales, sin descuidar sus tareas estratégicas.

Por otro lado, sabemos que cualquier afectación a las condiciones generales de seguridad de la UNAM repercute en el ánimo de la opinión pública del país. Por tal motivo, el reconoci-miento de cada contexto particular es imprescindible para diseñar e implementar intervencio-nes (arquitectónicas, culturales, deportivas y políticas) y también estrategias de formación y difusión académica que transformen positivamente las relaciones sociales en la Universidad, sin recurrir únicamente a un incremento en los sistemas de vigilancia o a una orientación me-ramente punitiva.

Es fundamental crear y fortalecer instancias de colaboración entre la comunidad, la institu-ción y las autoridades locales, estatales y federales, de tal manera que se propicie el diálogo y se atiendan las necesidades de la comunidad.

Se deben encaminar esfuerzos para establecer relaciones con las comunidades circundan-tes a los campus universitarios, llevando a su población los beneficios que los miembros de la Universidad pueden ofrecer: servicios médicos, odontológicos, psicológicos, orientación legal, muestras culturales y artísticas.

Como resultado, la comunidad universitaria será capaz de movilizar sus capacidades solida-rias para construir una visión compartida de la seguridad que priorice el interés colectivo por encima del interés privado y favorezca un ejercicio cotidiano de toma de decisiones en torno al diseño e implementación de acciones encaminadas a prevenir la incidencia delictiva y la violencia.

2. La UNAM en el contexto internacional y nacional

Contexto internacional, un entorno complejo

En la actualidad somos partícipes de profundos cambios en las formas de reproducir la vida en común. La desaceleración económica, la desigualdad, la migración internacional, la crisis medioambiental, el crimen organizado, la falta de equidad entre géneros y diversas violacio-nes a los derechos humanos, son solo algunos de los temas de reflexión y acción.

Si bien el avance tecnológico contribuye a mejorar la conectividad de las personas e im-pulsa cambios significativos en las formas de organización social, el problema del acceso a la tecnología sigue planteando brechas importantes entre las llamadas ciudades globales y los millones de personas que sobreviven en situaciones extremas de pobreza.

De hecho, el cruce entre marginación económica, inseguridad, violencia y desarrollos des-iguales, se presenta como la causa precipitante de la gran mayoría de las migraciones huma-nas y los desplazamientos forzados en todo el orbe.

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Lo anterior se agudiza si pensamos también en la incidencia que algunos procesos comuni-cativos tienen en nuestra capacidad de reflexión. El fenómeno de la posverdad, por ejemplo, es una evidencia de cómo los escenarios de información excesiva en la esfera pública tras-nacional tienen como una de sus consecuencias que las personas construyan explicaciones sobre el mundo que vivimos a partir de referencias ambiguas, no fidedignas y sin sustancia.

En este contexto, el papel de las universidades públicas es relevante por el grado de res-ponsabilidad que tienen para formar profesionales preparados para comprender, enfrentar y transformar las circunstancias a las que nos referimos. Así, la UNAM tiene que potenciar su li-derazgo con el fin de encabezar estrategias integrales que sirvan para detectar estos desafíos.

Contexto nacional, problemas y desafíos

Nuestro país enfrenta un contexto nacional complicado en la medida en que la población vive con carencias, rezagos, y vulnerabilidades que es importante erradicar. Para ello, el país necesita revertir la inseguridad y la desigualdad con políticas gubernamentales visionarias y eficientes.

La economía mexicana no debe sustentarse en el empleo informal. Es impostergable el impulso al empleo productivo, formal y útil, como elemento necesario para producir riqueza y crecimiento económicos. Se debe asegurar el acceso de los trabajadores a los sistemas de salud, pensiones, y jubilación, siempre sobre la base de los derechos laborales.

México sigue siendo un país de jóvenes, por lo que el desempeño escolar básico, medio y medio superior plantea retos enormes para los gobiernos de todos los niveles y para las ins-tituciones de educación. La compleja situación por la que atraviesa la juventud mexicana se observa en sus hábitos alimenticios y en el consumo de sustancias psicoactivas.

Si bien en algunos rubros de la vida social, económica, cultural y política de nuestro país, las mujeres y sectores con adscripciones genéricas diversas han logrado establecer, fortalecer y consolidar su presencia, también es cierto que la desigualdas es muy marcada en otros espa-cios.

La realidad multiétnica y multicultural en México no significa que las relaciones sociales entre los diversos grupos se lleven a cabo de forma equitativa y horizontal. La UNAM debe ofrecer oportunidades y trabajar en formas de prevención contra la discriminación de cual-quier tipo; no sólo las que son evidentes, sino de aquéllas que son veladas, que subyacen en la interacción social.

En estas líneas se mencionaron sólo algunos de los problemas que enfrenta nuestro país; somos conscientes de que visibilizar, comprender y transformar la complejidad actual es una tarea presente y futura de toda la comunidad de la UNAM.

3. El rumbo a seguir: Ejes rectores y líneas de acción3.1. Proyecto académico: La esencia de la UNAM

Bachillerato

Ante un contexto nacional en el que atender a la juventud es fundamental, la UNAM tiene la oportunidad de ser vanguardia de su atención desde un abordaje integral. Por su carácter

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y tradición humanista, hoy debemos convocar a toda nuestra comunidad a hacer esfuerzos por fortalecer y atender los primeros espacios formativos de nuestra institución.

El bachillerato UNAM ha sido durante décadas un elemento central de movilidad social que ha permitido a muchas generaciones proseguir con sus estudios a nivel licenciatura. La edu-cación que ofrece la UNAM en sus primeros niveles ha sido fundamental para la construcción de una nación más justa, libre y democrática; atenderla con responsabilidad y compromiso es fundamental.

Partimos de que fortalecer el sistema de bachillerato es prioritario. Por ello, en el plan de trabajo centramos la mirada en este momento formativo, justamente por hacer propio el con-vencimiento de que una mejora sustancial en la política institucional del bachillerato redituará en el fortalecimiento de toda nuestra casa de estudios.

Líneas de acción z Creación de una entidad que dé seguimiento integral al estudiante desde la

Iniciación Universitaria (en su caso) hasta el Posgrado. z Fortalecer y consolidar el programa de Maestría en Docencia para la Educación

Media Superior (MADEMS). z Reforzar los programas de asesorías y tutorías existentes. z Revisión de Planes y Programas de Estudios en cuatro dimensiones

fundamentales: su relación con el avance del conocimiento en cada materia; su relación con la formación docente; su relación con el desarrollo tecnológico y su relación con el sistema pedagógico propio de cada sistema educativo.

z Promover institucionalmente la vinculación del último año de formación al nivel medio superior con el primero de la superior.

z Priorizar toda aquella política institucional encaminada a garantizar la seguridad de estudiantes, profesores y trabajadores de todo el sistema de bachillerato.

z Fortalecer la relación entre nuestros institutos, facultades y órganos de difusión de la cultura de nuestra casa de estudio y el bachillerato.

z Revisar y mejorar todas aquellas políticas institucionales relacionadas con la profesionalización del ejercicio docente.

z Realizar una evaluación del Bachillerato a distancia con el fin de fortalecerlo y ampliarlo.

Licenciatura

Cada año, miles de jóvenes buscan un lugar para estudiar en las aulas de la Universidad Nacional; lamentablemente, muchos de ellos no consiguen ingresar. El proceso de selección siempre es problemático y desalentador, pues los lugares que se pueden ofrecer siempre resultan insuficientes frente a la enorme demanda.

Sabemos muy bien que la Universidad Nacional no puede enfrentar esta problemática por sí sola, ya que es un asunto que compete principalmente a los gobiernos federal y locales, y en el que se deben involucrar todas las instituciones de educación superior del país. No obstante, la UNAM debe redoblar esfuerzos, redefinir prioridades y reorientar recursos para contribuir, en la medida de sus posibilidades, a la solución de este problema.

Otro reto que debemos enfrentar como institución es la deserción o abandono escolar; fenómeno que se presenta en todos los niveles educativos a nivel nacional, pero que se agu-diza en el nivel educativo superior. Es bien sabido que el abandono escolar tiene un origen multifactorial (económico, académico, vocacional, familiar, administrativo, etc.), por lo que

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combatirlo siempre ha resultado sumamente complicado. En este sentido, resulta prioritario que fortalezcamos los mecanismos de detección temprana de casos de rezago educativo y de potencial abandono, para posteriormente atacar el problema interviniendo en tres planos: socioeconómico, académico y psicológico.

Estrechamente relacionadas con el rubro anterior, la eficiencia terminal y la titulación son asuntos relevantes a considerar. Por ello, es necesario que la Universidad siga en el camino de explorar nuevas formas de titulación que se sumen a las ya existentes, sin que ello signifique una pérdida de la calidad académica en la formación profesional.

Fortalecer la doble titulación, el intercambio y la movilidad nacional e internacional también son prioridades en el nivel licenciatura. Revisar y actualizar los planes de estudio es otra tarea fundamental, junto con el análisis sobre la viabilidad de crear nuevas licenciaturas.

Líneas de acción z Desarrollar mecanismos de detección temprana de casos de rezago y potencial

abandono escolar. z Desarrollar nuevos esquemas de combate al abandono escolar desde tres

dimensiones: socioeconómica, académica y psicológica. z Diagnosticar prácticas educativas para identificar modelos exitosos y modelos

que requieren ser modificados o sustituidos. z Revisión de Planes y Programas de Estudios a nivel superior en cuatro

dimensiones fundamentales: su relación con el avance del conocimiento en cada campo del saber; su relación con la formación docente; su relación con el desarrollo tecnológico y su relación con el sistema pedagógico propio de cada sistema educativo.

z Fortalecer académica y tecnológicamente el modelo de universidad abierta y a distancia, como una forma de contribuir a que cada vez más personas tengan acceso a la educación superior.

Posgrado

El objetivo fundamental de los estudios de posgrado en la UNAM es formar profesionales e investigadores del más alto nivel que, con sentido ético, contribuyan a la solución de proble-mas nacionales y globales e impulsen el bienestar social.

En la formación de nuestros programas de posgrado debe vincularse la investigación cientí-fica con la docencia, para que el trabajo realizado contribuya a mejorar la calidad de la práctica profesional de nuestras egresadas y egresados.

La Universidad debe institucionalizar mecanismos de seguimiento para la formación inte-gral del estudiantado, con la finalidad de abatir el rezago y apoyar el desarrollo de sus estudios en condiciones óptimas.

La eficiencia terminal es un reto importante, pero todavía lo es más, que la comunidad estu-diantil cuente con suficientes elementos de apoyo institucional para su formación integral. En este sentido, la movilidad nacional e internacional debe ser una prioridad, su vinculación con sus respectivos mercados laborales, así como la creación de planes de estudios de posgrado profesionalizante.

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Líneas de acción z Elevar el número de planes de estudio con reconocimiento del Programa

Nacional de Posgrados de Calidad (PNPC). z Incrementar la oferta educativa en los estudios de posgrado. z Ampliar la matrícula para la formación de profesionales y nuevos investigadores. z Sostener, y de ser posible incrementar, el apoyo con becas a estudiantes de

posgrado. z Propiciar mayor interacción y colaboración entre los distintos programas de

posgrado de la Universidad. z Fortalecer los convenios con Instituciones de Educación Superior, nacionales

e internacionales, que desemboquen en líneas de investigación comunes, estancias de investigación y dobles titulaciones.

z Vincular los estudios de posgrado con la investigación científica en el país, siempre buscando que el nuevo conocimiento sea útil a la sociedad.

Docencia

Uno de los pilares del presente plan de trabajo es la atención a la práctica docente en todos los espacios y niveles formativos de nuestra institución. Si pensamos a las universidades como espacios centrales de la llamada sociedad del conocimiento, es crucial poner en el centro de nuestro interés un eslabón esencial de los procesos de enseñanza-aprendizaje: el ejercicio docente. Y en este sentido, es importante recalcar que la innovación docente no se restringe al uso de tecnologías de vanguardia. Para desarrollar prácticas que fomenten el desarrollo del pensamiento crítico, la creatividad y el conocimiento significativo, es necesario dotar a los profesores de nuevos discursos y herramientas pedagógicas que les permitan interactuar exitosamente en este complejo entorno educativo.

Consideramos que para innovar en la educación en un sentido más amplio que el tecnoló-gico es fundamental articular políticas institucionales que coloquen a nuestra comunidad de profesores y profesoras como el eje articulador de muchas de las funciones sustantivas de la UNAM. En otras palabras, es importante fortalecer el principio de colegialidad y extenderlo a otros ámbitos de la vida universitaria. Estamos convencidos de que la Universidad debe avan-zar en la dignificación de la práctica docente, reconociendo en ella un motor de la vitalidad de nuestra institución.

Líneas de acción z Implementar cursos de formación docente con temáticas y orientaciones

transversales. z Mejorar las condiciones de trabajo de toda la comunidad docente. z Articular de manera más efectiva la revisión y actualización de planes de

estudio con las diversas modalidades de docencia. z Promover el diálogo y encuentro del profesorado en torno a problemáticas

comunes sobre los procesos de enseñanza-aprendizaje. z Desarrollar plataformas digitales que permitan un mayor conocimiento de la

tecnología y su relación con la transmisión de conocimiento.

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Investigación

Una de las responsabilidades sustantivas de la Universidad es la investigación, pues ella per-mite dar sentido, cauce, proyección y utilidad a las actividades académicas que llevan a cabo investigadores, profesores y estudiantes de esta casa de estudios.

Con la amplia variedad de proyectos, publicaciones, materiales de consulta, y eventos tanto de análisis como de debate, se contribuye a consolidar el perfil académico de la UNAM como la institución de investigación por excelencia.

Es indispensable consolidar una sana relación entre los distintos institutos, facultades, es-cuelas y centros de investigación, tanto en la UNAM como de otras instituciones académicas estatales, nacionales e internacionales, por lo cual se propone un decidido impulso a la inves-tigación en los dos grandes campos de actuación: la investigación básica y la aplicada.

Este plan de trabajo propone promover y realizar investigación dirigida a la promoción de me-canismos de articulación y vinculación académica que produzcan resultados desde un enfoque.

Líneas de acción z Impulsar la interdisciplina. z Impulsar la vinculación con otras instituciones nacionales e internacionales. z Fomento, apoyo y evaluación de la investigación para la generación de

conocimientos orientados a atender los problemas nacionales y globales. z Fortalecer lazos de investigación entre las diversas instancias de la Universidad. z Impulso al código de ética en la UNAM en el quehacer científico. z Impulso a la investigación en facultades y escuelas e incorporar investigadores

a la docencia en bachillerato y licenciatura. z Fortalecimiento de las ciencias básica y aplicada.

3.2 Internacionalización y relaciones interculturales

La internacionalización es un componente central para llevar a cabo las tareas sustantivas de la UNAM. Se trata de un proceso dual pues implica la proyección exitosa de nuestra comunidad hacia el exterior y el poder de convocatoria para que personas del extranjero visiten nuestra máxima casa de estudios.

Para impulsar el proceso de internacionalización identificamos cuatro aspectos: fortale-cimiento de los programas de movilidad universitaria, saliente y entrante, tanto estudiantil como académica. Una internacionalización integral debe considerar un modelo dinámico que apoye también a las personas que, por limitaciones económicas, físicas o de otra índole, no logran dicha experiencia.

Un segundo aspecto a trabajar es lo que denominamos Aula Global, un mecanismo que tiene el objetivo de complementar los instrumentos convencionales de internacionalización con elementos de hipermedia, el uso de nuevas tecnologías y la internacionalización del currí-culum.

Un tercer aspecto es el orientado a eficientar nuestra gestión de la cooperación internacio-nal y la profesionalización de nuestros representantes en el extranjero.

El cuarto rubro sugiere, en términos de interculturalidad, potenciar las funciones de las ca-torce sedes que tiene nuestra Universidad en el extranjero. Si bien éstas desempeñan un pa-pel relevante con la certificación del idioma español y la promoción de la cultura mexicana, es

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importante señalar que en algunas de ellas se posibilita el estudio a distancia del bachillerato y otros estudios de grado y posgrado.

Líneas de acción z Reforzar la movilidad universitaria, saliente y entrante, a través del máximo

aprovechamiento de la red de convenios firmados por la UNAM. z Promover el uso de las tecnologías de la información y la internacionalización

del currículum. z Impulsar un programa de profesionalización de los miembros de las

unidades de internacionalización, la Red Universitaria de Responsables de Internacionalización (RURI) y los titulares de las sedes en el extranjero.

z Promover a la UNAM como centro productor y difusor de la identidad nacional, las lenguas y culturas de México.

3.3 La cultura al alcance de los universitarios

La difusión de la cultura es un elemento primordial en la labor de la Universidad, pues ofre-cer expresiones artísticas de toda índole complementa la formación académica de la comu-nidad, amplía sus horizontes de experiencia, le permite construir referencias del mundo y de la sociedad desde perspectiva ricas y complejas. Además, posibilita la aprehensión de formas de ser y modos de vivir diversos, lo que abona a una práctica de la tolerancia, el res-peto y el conocimiento del otro. La cultura también ofrece satisfacción estética, el goce de los sentidos que no necesariamente está ligado a los asuntos mencionados antes, sino que puede ser un simple gusto, el disfrute de las actividades culturales por placer.

Este plan de trabajo busca que las actividades culturales se produzcan, practiquen y se apre-cien por el mayor número posible de miembros de la comunidad universitaria, dándoles a conocer la amplia oferta de la UNAM y fomentando la asistencia a los eventos culturales, po-niendo énfasis en los grupos con acceso restringido a este tipo de actividades.

Es importante ampliar y reforzar los mecanismos de creación de públicos entre todos los sectores de la comunidad universitaria, así como, reforzar las políticas encaminadas a demo-cratizar la práctica de las diferentes expresiones artísticas. Desarrollemos espacios en los que se conozca cómo se hacen las artes y se aprenda su lenguaje y sus código.

Líneas de acción z Ampliar y/o modernizar infraestructura cultural en la Universidad. z Fortalecer la presencia social de Radio y TV UNAM. z Producir y difundir material televisivo y radiofónico en plataformas de internet. z Diseñar programas de seguimiento a la participación de los alumnos en las

actividades culturales y que cada área de cultura lleve parte de su programación a las escuelas.

z Diseñar actividades de experimentación artística para los estudiantes desde las diferentes áreas de cultura.

z Construir una parrilla programática para que, en colaboración con las áreas de cultura de cada plantel, se ponga a disposición del alumnado una oferta coherente y consensuada de actividades artísticas y culturales en cada escuela o facultad.

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3.4 Atención a estudiantes, por una comunidad incluyente y corresponsable

El modelo de atención a estudiantes de la UNAM debe encaminarse a fomentar que cada miembro de nuestra comunidad estudiantil pueda desarrollarse plenamente en su queha-cer universitario. Lo anterior, a partir de un enfoque de corresponsabilidad entre el actuar de autoridades, estudiantes, académicos y trabajadores, a fin de incentivar un ambiente de comunidad y respeto.

En este rubro, debemos redoblar esfuerzos desde una perspectiva que reconozca que los jóvenes son agentes activos que forman parte del entorno en el que se desarrollan. En otras palabras, se debe evitar la perspectiva paternalista, según la cual los jóvenes son sujetos pasi-vos incapaces de reflexionar sobre sus propios problemas o los de su Universidad.

Para este proyecto, los jóvenes son agentes reflexivos, sujetos de derechos y obligaciones, por ello, proponemos que la atención estudiantil se realice a partir de un enfoque de corres-ponsabilidad, el cual se traduce como la capacidad de cada universitaria y universitario de participar en el desarrollo y fomento de una vida significativa, creativa y sin violencia, que en todo momento respete la diversidad y el bienestar de la comunidad.

Líneas de acción z Fortalecer la difusión de los derechos y obligaciones de los diferentes sectores

de la comunidad universitaria, particularmente el estudiantil, reforzando la idea de pertenencia y ampliando la posibilidad de participar en la elaboración de diagnósticos sobre las principales problemáticas que aquejan a la institución.

z Promoción de un programa de salud sexual, reproductiva y alimentaria. z Consolidar modelos de comedores o cafeterías saludables, con una oferta

variada de alimentos. z Atención a los factores de adicciones. Implementar programas informativos

sobre los riesgos del abuso del consumo de tabaco, alcohol y sustancias psicoactivas desde un enfoque de reducción de riesgos y autocuidado.

z Fortalecer los programas de atención a la salud emocional y psicológica; generar campañas que incentiven la educación y autocuidado emocional.

z Fomentar la resignificación de los espacios y el tiempo libre a través de la creación de los Centros Recreativos Estudiantiles y de Atención (CREA).

3.5 Género: Igualdad y no discriminación

Al pensar en ámbitos de acción en el entorno universitario, no se puede pasar por alto el tema de la igualdad y la no discriminación de todos los integrantes de la comunidad. Este tema ha estado vinculado mayoritariamente al género, sin embargo, la igualdad no se res-tringe a éste de manera exclusiva, sino que atraviesa otros rubros en los que se generan exclusiones y desigualdades. No obstante, el género como categoría que expresa una cons-trucción sociocultural de la diferencia sexual entre hombres y mujeres, sigue siendo prepon-derante al hablar de desigualdad.

Las diferencias en el terreno biológico continúan impactando en las estructuras sociales y en las prácticas de mujeres y hombres que cotidianamente se ven condicionados por los roles de género. La UNAM ha avanzado y trabajado de manera constante en los derechos humanos y la igualdad de género. Sin embargo, a pesar de los avances, la Universidad está obligada a plantearse nuevas metas para ser un punto de referencia y un espacio ejemplar de protección de derechos, igualdad e inclusión.

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Líneas de acción z Implementar estrategias de transversalidad en las políticas institucionales de

equidad de género en la UNAM. z Reforzar la producción de conocimiento sobre el tema, por medio de procesos

de investigación, docencia y difusión. z Concientizar y desarrollar herramientas que permitan la inclusión de la

diversidad en tres ejes fundamentales: sexual, cultural y de capacidades. z Hacer visibles los problemas de inequidad e incorporar las demandas de una

comunidad diversa. z Crear un observatorio de asuntos de género, cuyas principales acciones sean

prevenir, atender y acompañar los casos de violencia y discriminación en la UNAM, que brinde un seguimiento a las medidas y acciones de la política institucional en la materia.

3.6 Seguridad y convivencia

La Universidad no está al margen de lo que ocurre en el país, especialmente en materia de seguridad. Los nuevos tiempos hacen necesario evaluar y, en caso necesario, reorientar los esfuerzos humanos y presupuestales, de tal manera que se brinde una capacitación inicial y una actualización permanente al personal responsable de la seguridad en la Universidad.

En el mismo tenor, es importante colocar en el centro el principio ético-político de fortalecer el sentido de comunidad, pues ello permitirá intervenir integralmente en los espacios públi-cos, convirtiéndolos en sitios seguros, accesibles y detonantes de encuentros y discusiones académicas. También es relevante fortalecer y aplicar los protocolos de seguimiento en casos de acoso escolar, sexual y laboral. Así mismo, es fundamental difundir ampliamente informa-ción sobre qué hacer en caso de robo o cualquier otro acto de violencia física al interior de las instalaciones universitarias.

Es necesario favorecer condiciones propicias para que estudiantes, académicos y trabajado-res que cotidianamente desarrollan su vida en las instalaciones de la UNAM, puedan hacerlo sin riesgo para su integridad física, sus bienes personales y el patrimonio universitaria.

Líneas de acción z Elaborar un diagnóstico integral sobre victimización e inseguridad en la UNAM. z Favorecer la recuperación y apropiación de los espacios por parte de la

comunidad universitaria, mediante actividades artísticas, culturales y recreativas.

z Contar con centros para la recepción de información en tiempo real, con el fin de conocer los lugares y horarios de mayor incidencia y las afectaciones a la integridad física y los daños a la infraestructura de la Universidad.

z Capacitar al personal comisionado en materia de primeros auxilios y de apoyo a la seguridad, así como conciliación y atención a víctimas del delito, con la debida certificación.

z Fortalecer, en cada plantel, los Comités de Higiene y Seguridad. z Establecer convenios y comunicación con las autoridades policiales y

ministeriales locales, estatales y federales, para prevenir y actuar con agilidad y oportunidad cuando se presenten situaciones irregulares.

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z Diseñar espacios seguros que permitan brindar información a consumidores de sustancias psicoactivas e impulsar programas de reducción de daños y riesgos; así como la participación de la comunidad en los foros de discusión especializados en la temática.

z Priorizar la perspectiva de género y derechos humanos en todos los programas y políticas de convivencia y seguridad que se desarrollen en las instalaciones de la UNAM.

3.7 Deporte y calidad de vida

La UNAM cuenta con diversas instalaciones, personal y programas para fomentar una cultu-ra física y deportiva que ponga a la salud, el bienestar colectivo y la solidaridad como bases de una calidad de vida satisfactoria.

No toda la población universitaria realiza un deporte pensando en desarrollarlo como acti-vidad de alto rendimiento. Sin embargo, es necesario impulsar el acondicionamiento físico y la práctica deportiva lúdica como actividades que benefician la salud física, mental y emicional de quien las realiza.

Al igual que la cultura, el deporte y la cultura física se deben acercar a las escuelas, y no sólo ofertarlo en las instalaciones universitarias centrales. Cada plantel debe contar con instalacio-nes suficientes y adecuadas, así como con personal capacitado para dirigir la práctica deporti-va y programas para la incorporación de estudiantes a estas actividades.

Líneas de acción z Fomentar la práctica de deportes y actividades físicas con fines lúdicos y de

salud. z Elaborar un diagnóstico de instalaciones deportivas en cada escuela y planificar

su mantenimiento y/o ampliación. z Elaborar un programa de construcción de cultura deportiva, para formar

público practicante de actividades deportivas. z Diseñar programas de deporte incluyentes y adaptados. (Saavedra, 2018). z Diseñar un programa de competencias inter escuelas y facultades de alcance

profundo, no sólo para los practicantes habituales, de disciplinas deportivas comunes, para incentivar su práctica y fomentar la competencia.

3.8 UNAM sustentable y sostenible

En las últimas dos décadas del siglo pasado fuimos testigos del surgimiento de dos fenóme-nos que han significado grandes cambios en la organización de la sociedad y la economía: la globalización y el desarrollo sustentable. Estos temas se convirtieron en dos conceptos básicos de referencia para la política del desarrollo urbano. La UNAM asume su compromi-so para consolidar un modelo de universidad sustentable, fortaleciendo la investigación y la docencia para aportar estrategias y soluciones innovadoras que hagan frente a la crisis ecológica.

La Universidad ha generado información y grandes avances en el tema de sustentabili-dad. Estos esfuerzos deben integrarse, perfeccionarse y orientarse con el fin de consolidar un modelo de universidad sustentable y sostenible con un enfoque científico, tecnológico y eco-lógico replicable, que responda a las problemáticas sociales, económicas y medioambientales a través de programas interdisciplinarios y de acción comunitaria.

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Líneas de acción z Fortalecer y actualizar el cumplimiento de las recomendaciones del Distintivo

Ambiental UNAM en cada entidad. z Fortalecer el Sistema de gestión de residuos sólidos urbanos de la UNAM. z Actualizar los Criterios para la adquisición de bienes con menor impacto

ambiental. z Ampliar las estaciones y ciclovías de BiciPUMA. z Reformar la currícula para transversalizar el tema ambiental en la docencia y

en el modelo educativo integral universitario.

3.9 La administración al servicio de la comunidad

Es menester llevar a cabo una revisión y modernización administrativa en todos los niveles, a fin de que su operación atienda las necesidades actuales de todos los sectores de la comu-nidad universitaria, realizando en paralelo la actualización de los manuales administrativos.

Es necesario redefinir la relación laboral con la representación sindical, a fin de plantear esquemas congruentes de trabajo que concreten acciones para generar servicios oportunos y de calidad, manteniendo en todo momento el respeto irrestricto a los derechos y obligaciones que establece el Contrato Colectivo de Trabajo. Así mismo, se continuarán instrumentando programas actualizados de capacitación para el personal administrativo de base.

Actualmente, en las entidades y dependencias de la UNAM se han implementado los princi-pios y esquemas del Sistema de Gestión de la Calidad, instrumento que proporciona orden a los procesos administrativos de las siguientes cuatro áreas: Recursos Humanos, Bienes y Su-ministros, Servicios Generales y Recursos Financieros. Es imprescindible revisar dicho sistema, a fin de mantener y consolidar la certificación en materia de procesos administrativos. 

Líneas de acción z Revisión y actualización de las estructuras administrativas y su marco

normativo, z Asegurar la transparencia y rendición de cuentas en la aplicación de recursos a

través de la profesionalización y revaloración de los funcionarios académicos y administrativos, así como del personal de confianza.

z Reforzar el proceso de descentralización administrativa. z Reforzar la capacitación efectiva de funcionarios y personal de confianza

dedicado a los procesos administrativos en todos sus ámbitos. z Modernizar los esquemas de la administración mediante el uso eficiente de

los procesos digitales. z Replantear la relación laboral con las representaciones sindicales en un marco

de colaboración y respeto.

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3.10 La UNAM al servicio de la sociedad

Vinculación y educación continua

En México y en otros países, se emplea el nombre de educación continua para aquellas ac-tividades académicas con que la universidad, después de realizar la tarea fundamental de capacitar a las personas para que puedan desarrollar un trabajo en particular, busca cum-plir con los objetivos de profesionalizar, actualizar o especializar a las y los profesionales a lo largo de su vida, es decir, a quienes deciden optar por educarse de manera continuada por otras vías. Así, congresos, conferencias, cursos, diplomados, seminarios, talleres, incluso charlas, han sido caminos eficaces y legítimos para capacitar a las personas.

La educación continuada debe resultar significativa para quienes deciden dedicar tiempo y esfuerzo a actividades académicas que les permitan actualizarse, profesionalizarse o sim-plemente satisfacer la legítima curiosidad del conocimiento.

Las universidades cuentan con la capacidad de formalizar y estructurar actividades de aprendizaje, de establecer las características de las profesiones, de identificar los perfiles más completos de cada profesional, y de liderar la formación continuada de calidad. La UNAM está preparada para emprender, en este sentido, una transformación de grandes dimensiones, de grandes alcances.

Líneas de acción z Diseñar nuevas propuestas educativas, considerando las necesidades de

aprendizaje de personas con diversas preocupaciones e intereses. z Dar respuesta a las necesidades de certificación y reconocimiento de las

capacidades y saberes de las personas que se acercan de manera continua a la educación.

z Potenciar el trabajo transdiciplinario, debido a que el mundo y sus problemas no se presentan de manera fraccionada.

z Fortalecer el trabajo colectivo, la colaboración, la diversificación de conocimientos, el respeto a los otros, la capacidad de cuestionar los nuevos conocimientos, el aprendizaje y la investigación al lado de otros.

Servicio social

Para la UNAM, el servicio social implica avances significativos en tres ámbitos fundamenta-les: 1) En el formativo, los estudiantes aprenden a actuar con solidaridad, reciprocidad y a trabajar en equipo, y los lleva a tener más posibilidades de incorporarse al mercado de tra-bajo que tendrán la oportunidad de conocer. 2) En el ámbito social, se concientizan respecto de la problemática nacional, en particular, la de los sectores más desprotegidos del país. 3) Se consolida su reconocimiento acerca del valor que tiene la educación recibida en la UNAM.

El servicio social representa una de las mejores oportunidades para cumplir uno de los pilares de nuestra institución enfocado en extender los procesos de enseñanza-aprendizaje. El trabajo intenso y el contacto de los universitarios con las comunidades generan valiosos acervos de conocimiento, y propician que desempeñen el papel de intermediarios entre las comunidades y la Universidad.

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Líneas de acción z Rediseñar el proyecto general del servicio social, de manera que los estudiantes

entren en contacto directo con las problemáticas de su Universidad y de su comunidad a partir de los conocimientos obtenidos durante su formación.

z Propiciar la formación de personas con una visión integral de la sociedad, cuyas perspectivas críticas les permitan cuestionar su propia realidad, con la posibilidad de convertirse en parte de la conciencia de la sociedad.

z Incentivar el compromiso del estudiantado con su realidad y con la construcción de una escala de valores y prioridades; se espera que sea central la necesidad de los estudiantes de servir a su sociedad y de incidir en su realidad. El servicio social de los estudiantes universitarios les dará la oportunidad de transformar su mundo y dejarse transformar por él. La equidad, la paz, la justicia, la igualdad deben ser los objetivos.

z Afinar la planeación, la instrumentación, la evaluación y la comunicación del servicio social; trabajar también en que éste forme parte central de las carreras universitarias, de la currícula y de la labor de investigadores y docentes.

4. La UNAM que queremos, la universidad que proponemos

La UNAM que queremos:

z Queremos una Universidad en la que la producción científica y tecnológica cuente con todo el apoyo institucional y se realice con plena independencia de intereses políticos y económicos.

z Queremos una Universidad Nacional que dé continuidad a su función social de formar profesionales competentes, comprometidos y capaces de estudiar los principales problemas nacionales y del mundo, no solo para comprenderlos sino para contribuir a su solución.

z Queremos una Universidad que atienda a sus estudiantes, que les brinde todas las condiciones para que desarrollen sus potencialidades y al mismo tiempo tengan la sensibilidad para corresponder a la sociedad.

z Queremos una Universidad en la que toda su comunidad tenga acceso a la cultura, a las bellas artes y a otras formas de expresión artística, porque esto le permitirá tener un horizonte ampliado de su quehacer profesional.

z Queremos una Universidad en la que la diversidad cultural y sus políticas académica y científica sean los pilares para su enriquecimiento, así como un ejemplo de que se puede convivir en paz dentro de la diferencia si se usa el diálogo y la razón.

La Universidad que proponemos:

z Proponemos fortalecer el bachillerato como cimiento de la generación de profesionales y científicos.

z Proponemos una política que garantice la igualdad de género y combata con fuerza la violencia por razones de género, así como cualquier otro tipo de discriminación.

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z Proponemos que el modelo de la UNAM sirva para garantizar la cobertura que requiere la juventud mexicana para cursar estudios superiores.

z Proponemos que la UNAM goce, viva y ejerza plenamente su autonomía académica y científica, frente a gobiernos, partidos y organizaciones. Que ejerza autonomía financiera y administrativa. Que tenga autonomía para establecer sus criterios de admisión.

z Proponemos que la seguridad sea un tema clave para garantizar a la comunidad condiciones adecuadas para el desarrollo de sus actividades: medidas puntuales de intervención, trabajo coordinado con gobiernos de todos los niveles, medidas de prevención del delito.

z Proponemos innovación tecnológica, el uso de nuevas tecnologías para mejorar las funciones sustantivas de la Universidad, como refuerzo de la docencia, para la difusión de la cultura, para la educación a distancia.

z Proponemos una UNAM universal: ampliar los intercambios de académicos y estudiantes; realizar investigaciones y publicaciones conjuntas con otras instituciones educativas del país y del extranjero; posicionar a la Universidad en foros y espacios internacionales.

z Proponemos administrar para la academia, la investigación y la difusión de la cultura. Realizar una administración eficiente mediante una modernización conceptual y práctica, mediante la transparencia de los recursos públicos que la sociedad le otorga.

z Proponemos una política integral de salud para brindar información y orientación a la comunidad sobre alimentación sana, los beneficios del deporte, la prevención del uso de sustancias adictivas, así como de prácticas sexuales responsables y seguras.

z Proponemos que la UNAM refuerce su vocación de servicio a la comunidad mediante la resignificación del servicio social y una extensión universitaria vinculada a la solución de problemas concretos de la sociedad.