San Antonio de Los Altos, 14 de marzo de 2016

Centro de Diseño Digital

Historia del Diseño

Vanessa Echenagucia

Resumen del capítulo I y II del libro historia del diseño escrito por Philip B. Meggs y

Alston W. Purvis

Capítulo I: La invención de la escritura.

Al buscar nuestros orígenes prehistóricos nos lleva hacia atrás en el tiempo a las

primeras innovaciones de nuestros antepasados; se conoce que hemos evolucionado a partir

de una especie que vivió hace miles de años en la parte meridional de África. Aquellas

personas llamadas como homo sapiens, por ser consciente y pensante se atrevieron a salir a

las praderas a medida que los bosques fueron desapareciendo lentamente en esa parte del

mundo. La mano logró desarrollar la capacidad de transportar alimentos y el poder sujetar

objetos, se descubrió en Kenia una piedra de casi tres millones de años que había sido pulida

hasta convertirla en un utensilio; es posible que las primeras piedras a las que se les logró dar

forma se utilizaran para escarbar en busca de raíces o para arrancar la carne de los animales

muertos para así poder comerla. A pesar de que sólo se puede especular acerca de uso de los

primeros utensilios, se sabe que fue un paso fundamental en la especie humana desde los

orígenes primitivos.

El habla, es la capacidad de producir sonidos para comunicarse unos con otros, fue una

habilidad primitiva desarrollada por la especie humana a lo largo del camino evolutivo desde

sus comienzos arcaicos. Por otra parte, la escritura es el equivalente visual del habla; las

marcas, los símbolos, los dibujos o las letras trazadas sobre una superficie se convirtieron en

el habla visual, debido a que las palabras dichas se desvanecían sin dejar rastros, mientras que

las palabras escritas permanecían por un largo tiempo. La creación de la escritura posibilitó la

preservación de conocimientos, experiencias y pensamientos adquiridos con esfuerzo en la

era primitiva, ya que la escritura comenzó con simples ilustraciones por lo que los pueblos

primitivos utilizaron las ilustraciones como una manera elemental de registrar y transmitir

información. Antiguamente los primitivos dejaron pinturas en cuevas, y fabricaban un negro a

partir del carbón y una gama de tonos cálidos desde amarillos claros hasta castaños rojizos, a

partir de óxidos de hierro rojos y amarillos. La paleta de pigmentos se combinaba con grasa

como aglutinante. Puede que se pintara con los dedos en las paredes o que se fabricara una

especie de pincel con cerdas o juncos. Aquello fue la forma más simple de comunicación

visual, porque las pinturas primitivas se hacían para sobrevivir y con fines utilitarios y

rituales, como por ejemplo en algunas pinturas dibujaban lanzas contra los animales, dándole

el significado de que realizaban ritos mágicos que estaban destinados a dominar a los

animales y obtener una buena caza.

Los pueblos prehistóricos han dejado numerosos petroglifos grabados sobre roca por

descascarillado, muchos de estos son pictogramas y algunos pueden ser ideogramas. Muchos

de los dibujos de aquella época representan un nivel elevado de observación y memoria. Sin

embargo, los pictogramas primitivos evolucionaron de dos maneras; primero al comienzo del

arte pictórico en cuanto a los objetos y los acontecimientos del mundo que se fueron

registrando cada vez con mayor fidelidad y exactitud; y por último constituyeron la base de la

escritura; las imágenes acabaron por convertirse en símbolos de los sonios del lenguaje

hablado. A finales del período Paleolítico, algunos petroglifos y pictogramas se habían

reducido tanto que casi parecían letras. La cultura primitiva alrededor del 8000 a.C se

cultivaba cereales silvestres, se domesticaban animales y se comenzó la agricultura. Alrededor

del 6000 a.C se trabajaba con el martillo de objetos de cobre y alrededor del 3000 a.C se da

comienzo a la Edad de Bronce, cuando se hicieron aleaciones de cobre con estaño para

fabricar herramientas y armas duraderas, creando así la primera rueda. A pesar de lo vitales

que fueron las tecnologías desarrolladas en Mesopotamia para el futuro de la humanidad, la

aportación de los sumerios al progreso social e intelectual tuvo aún más repercusión en el

futuro. Los sumerios inventaron una mitología encabezada por una divinidad suprema

llamada Anú, que era el Dios del cielo. Esta cultura establecida por los sumerios conquistó a su

vez a los invasores y la sucesión de pueblos que gobernaron Mesopotamia.

Es posible que la escritura evolucionara porque dentro de la economía de los templos

cada vez tenía más necesidad de guardar registros. Los jefes de dichos templos buscaron

conscientemente un sistema para registrar la información, debido a que la memoria humana

con el tiempo se puede volver borrosa y a menudo se olvidan hechos importantes. Según se

sabe el origen del lenguaje visible surgió de la necesidad de identificar el contenido de los

costales y los recipientes de cerámica que se utilizaban para almacenar alimentos; se hacían

pequeñas etiquetas de arcilla que identificaban el contenido con un pictograma y la cantidad

mediante un sistema elemental de numeración decimal, en base a los diez dedos. Por otra

parte, la arcilla era el material lógico para conservar registros; se utilizaban una aguja de

junco afilada en punta para trazar las líneas finas y curvas de los primeros pictogramas, para

escribirlos se comenzaba desde la esquina superior derecha de la tablilla y las líneas se

escribían con cuidado en columnas verticales. Aproximadamente 300 años después se

sustituyó la aguja afilada por una de punta triangular, que se clavaba en la arcilla en lugar de

arrastrarse sobre ella; a partir de esto los caracteres se componían mediante una serie de

trazos en forma de cuña, en lugar de ser un dibujo con una línea continua, esta innovación

cambió de forma radical la escritura evolucionando hacia signos abstractos, llamada

cuneiforme quien se transformó más tarde en jeroglíficos, utilizando ilustraciones y/o

pictogramas para representar palabras y sílabas que tienen un sonido igual o parecido al

objeto que se intenta representar. El conocimiento que desarrolló la escritura fue notable, se

realizaron bibliotecas que contenían miles de tablillas sobre religión, matemática, historia,

derecho, medicina y astronomía; desde entonces surgió la literatura a medida que la poesía,

los mitos, los poemas épicos y las leyendas comenzaron a registrarse en dichas tablillas de

arcilla.

Los jeroglíficos eran pictogramas que representaban objetos o seres y se combinaban

para designar ideas reales que denotaban sonidos y determinativos que indicaban categorías;

cuando los egipcios primitivos se encontraban con palabras difíciles de expresar de forma

visual creaban un jeroglífico usando imágenes para representar el sonido del mismo. El

antiguo Egipto representa la claridad de las primeras fases de la civilización occidental, de

esta cultura se recibió buena parte de conocimientos como uso de símbolos visuales, nació de

ellos el Zodíaco, la balanza de la justicia y el uso de animales para representar conceptos,

ciudades y personas. Los egipcios tenían un extraordinario sentido para el diseño y eran

sensibles a las cualidades decorativas y textuales de sus jeroglíficos. En cuanto a la evolución

del papiro, que es un soporte semejante al papel para los manuscritos en las comunicaciones

visuales egipcias; las hojas más altas median 49 cm se solían pegar y enrollar hasta veinte

hojas con el recto hacia dentro. Sujetando el rollo con la mano izquierda, se escribía

comenzando por el extremo exterior derecho y se escribía una columna de jeroglíficos de

arriba hacia abajo, escribiendo columna tras otra. Sin embargo, los egipcios fueron el primer

pueblo que produjo manuscritos ilustrados en los que se logró combinar palabras e imágenes

para transmitir alguna información; los papiros ilustrados fueron evolucionando hasta

alcanzar un diseño homogéneo, en la parte superior e inferior del manuscrito había una o dos

franjas horizontales, por lo general estaban coloreadas. La cultura egipcia sobrevivió más de

tres mil años junto con sus jeroglíficos, papiros y manuscritos ilustrados como comunicación

visual, junto con las invenciones logradas en Mesopotamia desencadenaron la evolución del

alfabeto y las comunicaciones gráficas en el mundo grecorromano.

Capítulo II: Alfabetos.

Un alfabeto es un conjunto de símbolos visuales o caracteres que se utilizan para

representar los sonidos elementales de un lenguaje hablado y se pueden unir o combinar para

establecer configuraciones que signifiquen sonidos, sílabas y palabras pronunciadas por la

boca humana. Esta invención del alfabeto supuso un gran avance en las comunicaciones

humanas, debido a que los primeros sistemas visuales como la escritura cuneiforme, los

jeroglíficos y el chino escrito tienen una alta complejidad para su comprensión. El alfabeto

proviene originalmente de las escrituras antiguas pero fueron sustituidos dichos pictogramas

o ideogramas por veinte o treinta símbolos elementales y fáciles de aprender. Se dice que en

el año 1700 a.C existían pictogramas realizados en Creta que incluían figuras, brazos, algunas

partes del cuerpo, animales, plantas y algunos símbolos geométricos; los mismos dieron paso

a la escritura lineal, posible precursora del alfabeto griego.

A pesar de que se desconoce el inventor del alfabeto, se cree que tuvo origen en los

pueblos semíticos del noroeste de la región Mediterráneo occidental: primitivos cananeos,

hebreos y fenicios. Durante el II milenio a.C, los fenicios se convirtieron en comerciantes

marítimos, comunicándose con toda la región mediterránea; se logró absorber influencias e

ideas procedentes de otras zonas como Egipto y Mesopotamia. Es probable que la geografía y

el comercio tuvieran que ver con la creación del alfabeto, porque las ciudades fenicias se

convirtieron en centros del mundo antiguo y en encrucijadas del comercio internacional. Tal

parece que los fenicios buscaron un sistema de escritura para su propia lengua semítica

septentrional. La escritura exportada por los fenicios, que era un sistema alfabético

totalmente abstracto de veintidós caracteres se utilizaba en 1500 a.C; una de las inscripciones

más antiguas hechas en alfabeto fenicio se encontró en el lateral de la tapa del sarcófago de

piedra caliza del rey de Biblos, Ahiram. El alfabeto arameo, que fue utilizado por primera vez

por las tribus procedentes de Aram, es una importante derivación primitiva de la escritura

semítica septentrional; este sistema de escritura consistía en veintidós letras para sonidos

consonánticos y se escribía de derecha a izquierda. Este alfabeto arameo, posiblemente bajo

las influencias del hebreo antiguo, produjo un sistema de escritura llamado hebreo cuadrado,

que evolucionó hasta convertirse en el hebreo moderno. Después del alfabeto latino, el árabe

es el que más se utiliza en la actualidad. Las conquistas de los árabes durante los siglos VII y

VIII d.C difundieron la religión musulmana y su libro sagrado, El Corán, que está escrito con el

alfabeto árabe; el respeto por estos escritos religiosos ha elevado la caligrafía a la categoría de

arte en las culturas musulmanas.

El arte, la arquitectura y la literatura comprenden una parte importante de la herencia

griega, se puede decir que tras adoptarlo, los griegos mejoraron la belleza y la utilidad del

alfabeto. Los antiguos griegos adoptaron el alfabeto fenicio y lo difundieron por sus ciudades

en torno al 1000 a.C. Los griegos aplicaron un orden y una estructura geométrica a los

desiguales caracteres fenicios, transformándolos así en formas artísticas de gran armonía y

belleza; la forma escrita del griego representa un orden visual y un equilibrio, ya que las letras

se desplazan sobre una línea base en una repetición constante de forma y espacio. Al

principio, habían adoptado el estilo fenicio de escritura de derecha a izquierda y

posteriormente desarrollaron un método de escritura llamado bustrofedón que significa “usar

un arado tirado por bueyes”, porque cada línea se lee en sentido contrario a la anterior. Sin

embargo, los griegos adoptaron el movimiento de lectura de izquierda a derecha que continúa

hasta el día de hoy en la civilización occidental; además desarrollaron un estilo de escritura

más redondeado donde las letras eran llamadas unciales.

El alfabeto latino llegó hasta los romanos desde Grecia a través de los antiguos

etruscos, pueblo cuya civilización en la península itálica tuvo su auge durante el siglo VI a.C;

después de que Spurius Carvilius diseñara la letra g para sustituir la letra griega z, que no

tenía demasiado valor para los romanos, el alfabeto latino contenía veintiuna letras: a, b, c, d,

e, f, g, h, i, j, k, l, m, n, o, p, q, r (evolucionó como variación de la p), s, t, u, v y z. Tras la conquista

romana de Grecia, se añadieron las letras griegas y y z al final del alfabeto latino, porque los

romanos estaban apropiando de palabras griegas que contenían estos sonidos. La letra

romana manuscrita tenía varias formas. Las más importantes eran las mayúsculas cuadradas,

un estilo que se usó mucho desde el siglo II d.C hasta el siglo V, eran trazadas cuidadosa y

lentamente con una pluma plana. Las mayúsculas rusticas, que se empleaban durante el

mismo período; estas formas condensadas se escribían con rapidez y ahorraban espacio. El

pergamino y el papiro eran caros y con esta caligrafía, el escribiente podía incluir un 50% más

de letras en la página que con las mayúsculas cuadradas.

El pergamino se inventó a partir de pieles de animales domésticos, sobre todo ternera,

oveja y cabra; para hacer estas hojas de piel preparada, primero se lava la piel y se limpia del

pelo; se estira bien tensa sobre un marco y se rasca para quitarle todo el rastro de pelo y

carne, después de blanquearla con tiza, se alisa con piedra pómez.

El alfabeto coreano o hangul, es uno de los sistemas de escritura más científicos que se

haya inventados jamás. Aunque el coreano y el chino hablados son totalmente diferentes, los

coreanos utilizan los complejos caracteres chinos para su lenguaje escrito. El hangul no se

escribe siguiendo un orden lineal, como los alfabetos griego y romano, sino que las letras se

combinan dentro de un rectángulo imaginario para formar bloques silábicos. Estas sílabas se

forman combinando como mínimo una consonante y una vocal. La peculiaridad del hangul

entre las lenguas escritas deriva en parte de este sistema de agrupar caracteres alfabéticos

para construir sílabas. En la Corea contemporánea, con estas veinticuatro letras se forman

más de dos mil sílabas comunes que se utilizan a diario.

Los alfabetos siguen siendo uno de los grandes logros de la humanidad, la escritura

alfabética se convirtió en la fuente de comunicación de distintas comunidades frente a las

limitaciones que imponían la memoria, el tiempo y el lugar. Aumentar el acceso a la

información permitió una mayor participación en los asuntos públicos.