Resiliencia2
-
Upload
flema-punk-rock -
Category
Documents
-
view
16 -
download
0
Transcript of Resiliencia2
Resiliencia
Definición:
El vocablo resiliencia tiene su origen en el latín, en el término “resilio” que significa “volver a tras” “volver en
su salto, “rebotar”. Originariamente fue usado para referirse a la cualidad de elasticidad y plasticidad de una
sustancia (Greene y Conrad, 2002). Ha sido definido por el American Heritage Dictionary (1994) como la
habilidad para recuperarse rápidamente de la enfermedad, cambio o infortunio. La palabra resiliente ha sido
generalmente aplicada a las personas que se sobreponen a las dificultades.
Corresponde a la habilidad para recuperarse rápidamente de un cambio o desgracia. La palabra resiliente
ha sido aplicada a personas que se sobreponen a las dificultades de manera fácil. Ser resiliente no significa
no sentir malestar, dolor emocional o dificultad ante las adversidades, sino que la persona es capaz de
afrontar tales problemas.
La resiliencia no es algo que una persona tenga o no tenga, si no que implica una serie de conductas y
formas de pensar que cualquier persona puede aprender y desarrollar. Es decir, si bien tal capacidad es a
priori en los seres humanos, se adquiere (o se desarrolla mejor dicho) por medio del aprendizaje. Esto se ve
reforzado en base a una serie de estudios conducidos por Werner (1982, 1989) y Garmezy (1993) quienes
distinguen cuatro aspectos de la resiliencia: las características del temperamento (innato); la capacidad
intelectual (flexible); la naturaleza de la familia (social); y las fuentes de apoyo externo (ambiente).
Por otra parte, Fergusson y Lynskey (1996) mencionan otros factores de la resiliencia, entre ellos, la
inteligencia y habilidad de resolución de problemas; el desarrollo de intereses y vínculos afectivo externo; el
apego parental; la relación con los pares; etc.
Entre sus causas figuran aquellos sucesos que mayor impacto producen en las personas; aquellos que les
hacen producir inseguridad, incertidumbre y dolor emocional; frente a esto, actúa la resiliencia. Es decir, actúa
frente a los procesos y situaciones de riesgo psicosocial, ya que las conductas resilientes son los resultados
positivos frente a dichos riesgos, por lo que implican competencias individuales, familiares e interpersonales.
La resiliencia aparece actualmente como una palabra común en la vida cotidiana, sin embargo no existe un
consenso sobre su definición ya que son muchos los autores, incluso las marcas comerciales, que incorporan
el concepto en sus trabajos. Fraser, Richman y Galinsky (1999), desde la disciplina de Trabajo Social, han
sugerido que la resiliencia implica sobreponerse a las dificultades y tener éxito a pesar de estar expuestos a
situaciones de alto riesgo; mantener la competencia bajo presión, esto quiere decir saber adaptarse con éxito
al alto riesgo; y recuperarse de un trauma ajustándose de forma exitosa a los acontecimientos negativos de la
vida. En una visión similar Masten (1994) había sostenido que la resiliencia se refiere a personas de grupos
de alto riesgo que han obtenido mejores resultados de los esperados; buena adaptación a pesar de
experiencias estresantes; y recuperarse de un trauma.
A pesar de las diferencias en terminología, la resiliencia tiene que entenderse como un proceso. En este
sentido Masten y Coatsworth (1998) entienden la resiliencia como constructo dinámico que incluye una amplia
clase de fenómenos implicados en las adaptaciones exitosas en el contexto de amenazas significativas para
el desarrollo. La resiliencia, aunque requiere una respuesta individual, no es una característica individual
(como lo veremos más adelante) ya que está condicionada tanto por factores individuales como ambientales,
emergiendo de una gran heterogeneidad de influencias ecológicas que confluyen para producir una reacción
excepcional frente a una amenaza importante.
Anexando, podemos asegurar que el término resiliencia fue adaptado a las ciencias sociales para
caracterizar aquellas personas que, a pesar de nacer y vivir en situaciones de alto riesgo, se desarrollan
psicológicamente sanos y exitosos. (Rutter, 1993).
Dimensiones:
La resiliencia descansa sobre tres dimensiones:
1) Resiliencia existencial que es la necesidad de resistir y subsistir de la manera más satisfactoria.
2) Resiliencia constructiva que es la capacidad de transformar problemas, crisis, errores o desgracias en
situaciones de aprendizaje y crecimiento personal.
3) Resiliencia ética que es la clarificación de lo que se considera bueno y valioso para la sociedad y para uno
mismo. Para que esto funcione es fundamental tener una conciencia ética.
Por otra parte, según Matviuk, los autores Cynthia Lengnick-Hall y Beck Tammy afirman que hay tres
componentes que contribuyen a la resiliencia en las organizaciones: La resiliencia cognitiva, la resiliencia
conductual y la resiliencia contextual.
1).- La resiliencia cognitiva tiene que ver con la forma en la que la organización comprende su entorno y los
cambios trascendentales implícitos. Esta implica también la capacidad de la organización para responder a
esos cambios de forma competitiva. Esta dimensión corporativa implica que los miembros de la organización
permiten que la organización esté a punto y encuadren su identidad (desde los valores) de tal manera que
saben lo que tienen que hacer cuando la organización se enfrenta a una crisis.
2).- La resiliencia conductual se refiere a los hábitos y comportamientos que hacen que una
organización esté dispuesta a actuar cuando vienen tiempos de incertidumbre. Cuando la organización tiene
este tipo de resiliencia, la gente se comporta de tal manera que utiliza los canales de comunicación
adecuados, interactúa inteligentemente con los demás y sabe dónde buscar para obtener información
importante a la hora en situaciones inesperadas.
3).- La resiliencia contextual es un componente que refiere a las conexiones sociales internas de la
organización. Las organizaciones resilientes tienen personal que ha desarrollado redes interpersonales que
se aprovechan cuando la colaboración es necesaria para enfrentar y resolver una crisis. Constituye el sistema
de interconexión relacional construido previo a la crisis y que es fácilmente activable en un momento
determinado para garantizar una respuesta, una solución, una alternativa de supervivencia corporativa.
Estos tres componentes de la resiliencia florecen sólo en organizacionales que se caracterizan por la
flexibilidad y se basan en: la forma de pensar compartida por todos los miembros de la organización, la
capacidad de compartir claramente la visión de la organización, el establecer y mantener sólidas relaciones
interpersonales que faciliten la coordinación y la cooperación, y donde todo el mundo sabe cómo reaccionar y
obtener información cuando la organización se enfrenta a una crisis o situación inesperada.
Entre los tipos de resiliencia, se encuentra la resiliencia individual; la resiliencia familiar; la resiliencia social
y comunitaria.
Para integrar el significado del concepto en la intervención social es importante que tomemos como punto
de partida las aportaciones de las distintas etapas de investigación en resiliencia. Existen tres etapas en la
investigación en resiliencia.
Características de la Resiliencia:
Un dato importante es mencionar que, si bien la totalidad de sus características no se encuentran presente
en todas las personas, todos poseen la capacidad para desarrollarla.
Es un proceso individual que se manifiestade diferentes maneras, y conlleva pensamientos, actitudes y
conductas que pueden ser aprendidas y/o modificadas por cualquier persona. Para desarrollarla no existen
límites de edad, cultura, religión, status económico, político o social. En todo lugar existen seres humanos
resilientes. Es un estado temporal y se va desarrollando de forma dinámica.
La Resiliencia no es un estado innato en el sujeto (como lo es el estrés), sino que es la forma positiva y
saludable de enfrentarse a la vida y a sus circunstancias. Es un proceso de adaptación que se desarrolla
progresivamente con el tiempo. Las personas resilientes no son inmunes a experimentar sufrimiento y tristeza
ante las dificultades y acontecimiento, como se explicó anteriormente. Una de las características de tales
personas (resilientes) es lo que las distingue del resto de las personas, ya que saben sacar provecho de las
experiencias y conflictos, es decir, a medida que se desarrollan en la vida, van surgiendo y se van tornando
más fuertes emocionalmente ante los obstáculos.
Entre las diferentes maneras de construir Resiliencia se encuentran:
1. Establecer buenas relaciones sociales
2. Evitar ver las crisis como obstáculos insuperables
3. Aceptar que el cambio es parte dela vida
4. Moverse hacia sus propios medios
5. Llevar acabo acciones decisivas, mas que ignorar los problemas
6. Buscar oportunidades para descubrirse a si mismo
7. Cultivar una visión positiva de su persona
8. Mantener las cosas en perspectiva
9. Nunca perder la esperanza
10. Cuidar de la propia persona.
Entre los pilares de la Resiliencia se encuentran:
- Autoestima consistente
- Introspección
- Independencia
- Capacidad de relacionarse
- Iniciativa
- Humor
- Creatividad
- Moralidad
- Capacidad de pensamiento critico
Conexiones teóricas
Podemos relacionar el término resiliencia con etapas de la vida, ya que si se considera que la resiliencia es
una capacidad que se desarrolla y actualiza en la historia interaccional del sujeto, su relación con las diversas
etapas de la vida cobra particular relevancia. El concepto etapa de vida es uno de los supuestos más
generalizados entre los especialistas y los legos para describir y explicar las diversas situaciones que hacen
parte del desarrollo humano. Desde distintos enfoques teóricos se han definido diversas clasificaciones de
etapas de la vida, que abarcan desde el nacimiento hasta la muerte.
También distinguiremos el concepto de resiliencia del de vulnerabilidad, ya que durante la década del 70
ganó popularidad el concepto de niño vulnerable, con el que se aludía a algunos niños que parecían
constitucionalmente tan fuertes, que no cedían frente a las presiones del estrés y la adversidad. No obstante,
este concepto resultaba confuso y, según lo afirma Rutter (1985), equivocado por al menos tres razones: la
resistencia al estrés es relativa, no absoluta, en tanto no es estable en el tiempo y varía de acuerdo a la etapa
del desarrollo de los niños y la calidad del estímulo. Las raíces de la resistencia provienen tanto del ambiente
como de lo constitucional, el grado de resistencia no es estable, sino que varía a lo largo del tiempo y de
acuerdo a las circunstancias. Por estos motivos, en la actualidad se utiliza preferentemente el concepto de
resiliencia. Si bien, en las primeras publicaciones alusivas a la resistencia, se tendió a utilizar este concepto
como equivalente al de invulnerabilidad, más tardíamente se han establecido claras distinciones entre
ambos, quedando el concepto de invulnerabilidad más bien en el campo de la psicopatología.
Imprescindible resulta también, en este plano, conocer el significado del vocablo vulnerabilidad, en tanto
ésta es una característica básica para la gestación de los comportamientos resilientes; este concepto será
discutido más adelante.
Podemos también relacionar la resiliencia con la competencia, ya que de acuerdo a Luthar (1993), es
frecuente que los estudios sobre resiliencia se focalicen en la capacidad de competencia social, bajo el
supuesto de que ésta refleja buenas habilidades de enfrentamiento subyacentes. Sin embargo, estudios
recientes muestran personas que, si bien se comportan en forma competente en situaciones de alto riesgo,
pueden a la vez ser vulnerables frente a problemas físicos o mentales s (Werner y Smith, 1982, 1992, en
Luthar, 1993). Ejemplo de ello, son los estudios de Radke-Yarrow y Sherman (1990 ) que dan cuenta de un
grupo de niños y niñas que junto con presentar alta vulnerabilidad al estrés, mostraban un enfrentamiento
positivo.
En relación al concepto de empoderamiento, éste permite otorgar la facultad de enfrentar de forma resiliente
el buen manejo de las circunstancias vividas por el sujeto.
También podemos hacer cierta conexión entre la resiliencia y la robustez, ya que el concepto de robustez
que, según Levav (1995), podría ser considerado afín al de resiliencia, ha sido definido como una
característica de la personalidad que en algunas personas actúa como reforzadora de la resistencia al estrés.
La robustez ha sido definida como una combinación de rasgos personales que tienen carácter adaptativo, y
que incluyen el sentido del compromiso, del desafío y la oportunidad, y que se manifestarían en ocasiones
difíciles. Incluye además la sensación que tienen algunas personas de ser capaz de ejercer control sobre las
propias circunstancias. Kobasa (1979; en Roth, 1989), describe evidencias respecto de personas que han
mostrado escasos síntomas de enfermedad, pese a haber estado sometidas a situaciones provocadoras de
estrés. Señala que éstas muestran mayor cantidad de comportamientos comprometidos, mayor capacidad de
control interno y de desafío, al ser comparados con sus pares que se estresan con frecuencia y que se
enferman, como consecuencia de ello, más repetidamente.
Ahora, estableceremos la distinción entre resiliencia y estrés. A diferencia de la resiliencia que busca
afrontar y superar los problemas traumaticos, el estrés es el resultado fisiológico opuesto, que busca huir de
la situación que lo provoca y confrontarla violentamente. En esta reacción participan casi todos los órganos, o
sea el estrés es somático y fisiológico, en cambio la resiliencia tiene que ver con una mejor preparación
mental.
Ejemplo:
La Resiliencia la podemos observar en las intervenciones que se realizan con personas en situaciones
vulnerables como los campamentos o poblaciones de alto riesgo, mujeres maltratadas (VIF), esto permite que
cada situación vivida pueda sobrellevarse de manera adecuada frente a estos hechos que tienen que
enfrentar las personas, capacitándose para un devenir.
Otro ejemplo es la superación personal en personas enfermas de cáncer, el sufrimiento puede convertirse
en maestro efectivamente se conocen las sensación, se identifican y se aprender de ellas, convirtiendo lo que
implica enfermedades en herramientas.
Bibliografía:
- Matviuk, S. (2008). Building Corporate Resilience: The Role of Leadership. Global CEO Magazine, Nov. 2008. Tomado de Internet el 15/12/2008 de http://www.iupindia .in/1108/GC_Building_Corporate_9.html
- Rutter, m (1993). Resilence Some Concpetual Considerations.
- Obtenido el 14/10/2013 de: http://www.monografias.com/trabajos67/resiliencia/resiliencia2.shtml.
- Obtenido el 14/10/2013 de http://www.addima.org/Documentos/Articulos/Articulo%20Cristina%20Villalba%20Quesada.pdf
- Obtenido el 14/10/2013 de http://recursosparalideres.blogspot.com/2012/07/3-dimensiones-clave-de-la-resiliencia.html
- Obtenido el 15/10/2013 de http://www.slideshare.net/josselyna/resiliencia-8414662
- Obtenido el 16/10/2013 de http://www.addima.org/Documentos/Articulos/Articulo%20Cristina%20Villalba%20Quesada.pdf