Prohíben la publicidad y promoción del tabaco en la provincia

Vigilancia de enfermedades febriles exantemáticas

El Salvador: Se reporta un incremento en las muertes por neumonía

Estados Unidos: Apenas un tercio de las mujeres embarazadas reciben las vacunas que necesitan

Europa: La crisis climática causará una invasión de mosquitos y escasez de agua en el Mediterráneo

Filipinas: Una incubadora de enfermedades evitables por el miedo a las vacunas

Nigeria: Funcionarios venden carnés falsos de vacunación contra la fiebre amarilla

Pakistán: Resurgen en Karachi la difteria y el tétanos, y mueren cinco niños en 15 días

República Democrática del Congo: Aumentan a 31 los casos de peste bubónica en la provincia de Ituri

Estados Unidos: Primer caso humano de encefalitis equina del Este en Indiana en más de 20 años

México: Más de un millón de infectados con la enfermedad de Chagas

México: El dengue se multiplica y amenaza las grandes ciudades

Afganistán: Primer reporte de dengue en el país

China: Reportan cinco casos de encefalitis por el herpesvirus porcino 1 en Shandong

Córdoba A

La Legislatura de la Provincia de Córdoba aprobó la ampliación de la Ley 9113, de prevención y control del tabaquismo. Así, quedó prohibida la publicidad, promoción y patrocinio de productos elaborados con tabaco. Además, se equipararon las restricciones también al cigarrillo electrónico, de manera que no se puede “vapear” en espacios cerrados y no está permitida su venta a menores de 18 años.

El proyecto fue presentado por los legisladores de las Comisiones de Salud y de Prevención de Adicciones y acompañado por unanimidad por todo el cuerpo legislativo; y elaborado a partir de la propuesta del Ministerio de Salud de la Provincia.

“Con esta ampliación, Córdoba vuelve a ser pionera en control del cigarrillo y en la prevención del tabaquismo; ya que somos la segunda provincia del país en aprobar una legislación basada en las recomendaciones de los organismos sanitarios internacionales”, afirmó Francisco José Fortuna, titular de la cartera sanitaria.

Concretamente, el proyecto prohíbe: “La publicidad, promoción, patrocinio y exhibición de productos elaborados con tabaco, sus derivados y accesorios para fumar, en dispensadores y cualquier otra clase de estantería ubicada en los locales donde se venden ese tipo de productos, y el auspicio, patrocinio y el uso de incentivos directos o indirectos que fomenten la compra o que ofrezcan descuentos promocionales, entrega de obsequios y premios en dinero o especies por la adquisición o consumo de los productos y elementos mencionados en esta Ley”.

En cuanto a los dispositivos electrónicos, la norma establece la prohibición “en todo el ámbito de la Provincia de Córdoba la distribución y comercialización de productos destinados a fumar, como así también de dispositivos electrónicos con tabaco o cualquier otra sustancia que expida humo, gases o vapores utilizando el cigarrillo electrónico, vapeadores y todo otro tipo de dispositivo de naturaleza similar, a toda persona menor de dieciocho años de edad”.

Córdoba había aprobado la Ley 9113 en el año 2003, que dispuso, entre otras medidas, la prohibición de fumar en todos los ambientes cerrados, como centros de atención social, salas de teatro, cine y eventos deportivos en estadios cerrados.

“Esta ampliación actualiza su alcance para dar un nuevo impulso a la temática, que nos permita disminuir la actual prevalencia del consumo de tabaco y de sus patologías asociadas, ya que en las tres últimas Encuestas Nacionales de Factores de Riesgo se observa una meseta en la baja inicial del hábito de fumar”, valoró Alicia Mombrú, de la Dirección de Enfermedades Crónicas No Transmisibles.

El tabaquismo es un factor de riesgo común para las cuatro principales enfermedades crónicas no transmisibles: las cardiovasculares, respiratorias, cáncer y diabetes. La mortalidad atribuida directamente al tabaco, según la Organización Mundial de la Salud, es de 16% en la región de las Américas.

Argentina A

Hasta la semana epidemiológica (SE) 40 se registraron 35 casos de sarampión, 33 detectados en Argentina y dos en España. De los 33 casos detectados en Argentina, siete son casos importados o relacionados a la importación, y 26 no cuentan con antecedentes de viaje o vínculo hasta el momento con casos importados.

Los siete casos importados o relacionados a la importación fueron detectados en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (4), y las provincias de Buenos Aires (1) y Santa Fe (2). La fecha de inicio de exantema de estos casos fue entre las SE 7 y 33.

Los 26 casos restantes iniciaron exantema entre las SE 35 y 40 y corresponden a residentes de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (13) y la provincia de Buenos Aires (13). De estos casos, 18 se encuentran agrupados en dos cadenas de transmisión. El genotipo identificado en cuatro de los casos fue D8, linaje MVs/Gir Somnath.IND/42.16.

El mayor número de casos confirmados de sarampión corresponde al grupo etario de los menores de 1 año, donde se observa la mayor tasa de incidencia, seguido del grupo de 35 a 44 años y el de 10 a 19 años.

Argentina ha logrado eliminar la circulación del virus del sarampión gracias a la vacunación. El último caso endémico se registró en el año 2000. Desde la eliminación, hasta diciembre de 2018 se detectaron 43 casos confirmados. Los principales brotes posteriores a la eliminación ocurrieron en el año 2010 (17 casos) y en 2018 (14 casos agrupados en tres brotes).

En la situación actual de eliminación de la circulación endémica de la rubéola y el sarampión, es necesario un sistema de vigilancia epidemiológica sensible capaz de detectar e investigar

todos los casos sospechosos, incluidos los importados, y la realización de actividades que eviten o limiten la trasmisión secundaria.

Dada la semejanza en el cuadro clínico, la investigación epidemiológica y los estudios de laboratorio, las vigilancias de sarampión y rubéola en las Américas se realiza en forma integrada como enfermedad febril exantemática, utilizando una definición de caso única para ambas patologías. Los casos sospechosos deben ser investigados por laboratorio para ambos virus independientemente de la sospecha clínica inicial.

Tabla 1. Casos notificados, según provincia y región de residencia. Argentina. Años 2018/2019, hasta semana epidemiológica 40. Fuente: Secretaría de Salud de Argentina.1

Con el fin de interrumpir rápidamente la transmisión viral, la Secretaría de Gobierno de Salud de la Nación amplió las indicaciones de vacunación vigentes en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y en las Regiones Sanitarias V, VI, VII y XII de la provincia de Buenos Aires.2

1 Caso confirmado: Cumple con los criterios diagnósticos de caso confirmado de acuerdo con el algoritmo vigente. Caso sospechoso: Sin resultados de laboratorio que permita su clasificación. Caso no conclusivo: Con resultados de laboratorio que no permiten descartar la infección. Caso descartado: Con criterios diagnósticos de caso descartado para sarampión y rubéola de acuerdo con el algoritmo vigente. Otros países: Caso confirmado detectado fuera de Argentina. 2 Región Sanitaria V: Campana, Escobar, Exaltación de la Cruz, General San Martín, José Camilo Paz, Malvinas Argentinas, Pilar, San Fernando, San Isidro, San Miguel, Tigre, Vicente López y Zárate.

Región Sanitaria VI: Avellaneda, Lanús, Lomas de Zamora, Almirante Brown, Berazategui, Esteban Echeverría, Ezeiza, Florencio Varela y Quilmes.

Región Sanitaria VII: General La Heras, General Rodríguez, Luján, Marcos Paz, Merlo, Hurlingham, Ituzaingó, Morón, Tres de Febrero y Moreno.

Región Sanitaria XII: La Matanza

Los niños de entre 6 y 11 meses de edad, deben recibir una dosis de la vacuna triple viral, la “dosis cero”. Esta dosis es adicional y no debe ser tenida en cuenta en el esquema del Calendario Nacional de Vacunación.

Los niños de 13 meses a 4 años de edad inclusive deben acreditar al menos dos dosis de la vacuna triple viral: la primera dosis correspondiente al año de vida y la dosis de la Campaña Nacional de Seguimiento 2018. Aquellos niños que no hayan recibido la dosis de la Campaña 2018, deberán recibir una dosis adicional.

Estas indicaciones son dinámicas y podrán sufrir modificaciones de acuerdo a la situación epidemiológica. Se evaluará en base a la evolución de la situación la necesidad de ampliar la zona geográfica de la indicación de vacunación a los menores de un año. Las eventuales modificaciones serán comunicadas a través de alertas o memorándums.

Para el equipo de salud de todo el país: todas las personas que trabajan en el nivel asistencial –por ejemplo, mesa de entradas, limpieza, seguridad, laboratorio, planta médica y de enfermería, etc– deben acreditar dos dosis de vacuna con componente contra el sarampión aplicada después del año de vida (monovalente, doble o triple viral) o contar con serología IgG positiva para sarampión.

Para la población de todo el país: el Calendario Nacional de Vacunación incluye dos dosis de la vacuna triple viral a los 12 meses y a los 5 años de edad. Se debe verificar y completar el esquema de vacunación de acuerdo a la edad: De 12 meses a 4 años de edad inclusive: deben acreditar una dosis de la vacuna triple

viral. Mayores de 5 años, adolescentes y adultos: deben acreditar dos dosis de vacuna con

componente contra el sarampión aplicada después del año de vida (monovalente, doble o triple viral) o contar con serología IgG positiva para sarampión.

Las personas nacidas antes de 1965 no necesitan vacunarse porque son consideradas inmunes.

Para residentes en Argentina que viajen al exterior Menores de 6 meses de edad: se sugiere aplazar y/o reprogramar el viaje, puesto que en

ellos la vacuna triple viral está contraindicada y es el grupo etario de mayor vulnerabilidad.

Niños de 6 a 11 meses de edad: en caso de no poder aplazar el viaje deben recibir una dosis de la vacuna triple viral, la “dosis cero”. Esta dosis es adicional y no debe ser tenida en cuenta en el esquema del Calendario Nacional de Vacunación. Se recomienda no viajar al exterior.

Niños de 13 meses a 4 años de edad inclusive: deben acreditar al menos dos dosis de la vacuna triple viral: la primera dosis correspondiente al año de vida y la dosis de la Campaña Nacional de Seguimiento 2018. Aquellos niños que no hayan recibido la dosis de la Campaña 2018, deberán recibir una dosis adicional.

Mayores de 5 años de edad, adolescentes y adultos: deben acreditar dos dosis de vacuna con componente contra el sarampión (monovalente, doble o triple viral) aplicada después del año de vida o confirmar a través de un estudio de laboratorio la presencia de anticuerpos contra sarampión (serología IgG+ contra sarampión). De no contar con

Es importante señalar que esta dosis (“dosis cero”) no debe considerarse dentro de las dosis contempladas por el Calendario Nacional de Vacunación. Todos los lactantes vacunados en este contexto deberán recibir además la dosis correspondiente a los 12 meses de edad y, si correspondiera, la dosis de la Campaña Nacional de Seguimiento de octubre y noviembre de 2018.

las dos dosis recomendadas, la vacuna debe ser aplicada como mínimo 15 días antes del viaje.

Embarazadas: pueden viajar si acreditan dos dosis de vacuna con componente antisarampionoso (monovalente, doble o triple viral) aplicada después del año de vida o confirmar a través de un estudio de laboratorio la presencia de anticuerpos contra sarampión (serología IgG+ contra sarampión). Se desaconseja viajar a las embarazadas sin antecedentes comprobables de vacunación o sin anticuerpos contra el sarampión.

América A

Se registraron 735 muertes por neumonía hasta el pasado 28 de septiembre en todo El Salvador, según confirmó el Ministerio de Salud del país.

Esta cifra supera en 185 casos a la del mismo periodo del año pasado. Las autoridades de Salud informaron que, hasta el 28 de septiembre de 2018, se habían registrado 550 muertes provocadas por esta enfermedad.

Las cifras también aumentaron en 32% respecto a los casos de neumonía registrados a escala nacional. Hasta el 28 de septiembre pasado, Salud contabilizó 453 casos cada 100.000 habitantes, mientras que en el mismo lapso, el año pasado se registraron 342. Se evidencia un incremento en el riesgo de 111 casos cada 100.000 habitantes.

El promedio semanal de casos de neumonía en 2019 es de 760, con base en el total acumulado del periodo, que es de 29.660 casos.

Del total de egresos por neumonía, 52% corresponden al sexo masculino. La mayor proporción de egresos se encuentra entre los menores de 5 años (70%) y los adultos mayores de 60 años (16%).

La tasa de letalidad en hospitales de 2019 es de 5,7% (735 muertes), menor que la de 2018 (6,5%, 550 muertes) en el mismo período. El 67% (493) de las muertes se registró en adultos mayores de 60 años de edad.

Los departamentos que registraron más casos son San Salvador (7.015 casos), San Miguel (4.550), La Unión (2.563), Usulután (2.543) y Santa Ana (2.444). Por su parte, los que presentan mayor tasa de incidencia son La Unión (962 casos cada 100.000 habitantes), San Miguel (915), Chalatenango (739), Morazán (684) y Usulután (663).

Alrededor de dos tercios de las mujeres embarazadas de Estados Unidos no se vacunan contra la influenza y la tos convulsa, lo que supone un riesgo para ellas y para sus bebés recién nacidos.

La influenza y la tos convulsa son infecciones graves que pueden ser letales para los bebés, sobre todo los que son demasiado pequeños como para vacunarse directamente. Pero cuando las mujeres reciben esas vacunas durante el embarazo, transfieren anticuerpos al feto que entonces ofrecen protección durante el periodo en que el recién nacido es demasiado pequeño como para vacunarse.

Las vacunas también benefician a las futuras madres. Las mujeres embarazadas tienen el doble de probabilidades de ser hospitalizadas si desarrollan influenza, en comparación con las mujeres de la misma edad, durante la temporada de esta enfermedad.

Pero solo una minoría de las mujeres estadounidenses recibe las vacunas que necesitan.

Se realizó una encuesta a casi 2.100 mujeres de 18 a 49 años que estaban embarazadas entre agosto de 2018 y abril de 2019. De ellas, 54% dijo que se aplicó la vacuna contra la influenza antes o durante el embarazo, y 55% también se vacunó contra la tos convulsa mientras estaban embarazadas. Eso podría significar que más mujeres embarazadas pueden sufrir una enfermedad grave.

Si una mujer embarazada contrae influenza, tienen un riesgo más alto de sufrir complicaciones graves, como una admisión a una unidad de cuidados intensivos, muerte materna, prematuridad y parto prematuro.

Al observar los datos de todas las mujeres de 15 a 44 años que fueron hospitalizadas debido a la influenza desde 2010, entre 24 y 34% estaban embarazadas, aunque apenas 9% de las mujeres estadounidenses de ese grupo de edad están embarazadas en cualquier momento dado cada año.

En total, apenas alrededor de 35% de las mujeres recibió ambas vacunas durante el embarazo.

Estas cifras son mucho más bajas de lo deseado, lo que es decepcionante, dados los beneficios para las madres y los bebés asociados con estas vacunas. Sin embargo, estos números podrían ser bajos por provenir de una encuesta en línea que dependió de la memoria de los pacientes.

La encuesta encontró que las mujeres cuyos proveedores de atención de la salud les ofrecieron o las remitieron a las vacunas tenían las tasas más altas de vacunación. Las mujeres negras tenían unas tasas más bajas que las mujeres de otros grupos raciales/étnicos, y fue menos probable que reportaran que les ofrecieron o las remitieron a las vacunas.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos recomiendan que todas las mujeres embarazadas se vacunen contra la influenza en cualquier etapa del embarazo y la vacuna triple bacteriana a principios del tercer trimestre como parte de la atención prenatal de rutina.

Una vacuna contra la influenza reduce el riesgo de una mujer embarazada de ser hospitalizada por la influenza en un promedio de 40%.

La influenza también es peligrosa para los bebés, sobre todo los menores de 6 meses. Son demasiado pequeños como para ponerse su propia vacuna contra la influenza, y tienen la incidencia más alta de hospitalizaciones relacionadas con la influenza, y el riesgo más alto de muertes relacionadas con la influenza entre los niños.

La vacuna contra la influenza en las mujeres embarazadas reduce el riesgo de hospitalización relacionada con la influenza en los bebés menores de 6 meses en un promedio de 72%.

Y la tos convulsa puede resultar letal, sobre todo antes de que los bebés comiencen a recibir la vacuna a los 2 meses de edad. Dos tercios de los bebés menores de 2 meses que contraen la enfermedad requieren atención en un hospital. Siete de cada 10 muertes por tos convulsa (69%) ocurren en ese grupo de edad.

La vacuna triple bacteriana durante el tercer trimestre del embarazo previene en más de 78% los casos de tos convulsa en los menores de 2 meses.

Pero muchas mujeres piensan que como habían recibido la vacuna triple bacteriana antes, no la necesitaban de nuevo durante el actual embarazo. Pero se ha recomendado que las mujeres se la apliquen en cada embarazo desde 2012.

Se ha probado una y otra vez que esas vacunas son seguras para las mujeres embarazadas y sus bebés en desarrollo.

El Centro Nacional de Inmunización y Enfermedades Respiratorias de los CDC pidió a los obstetras y a las comadronas que hablen sobre la importancia de la vacunación materna con sus pacientes embarazadas.

Todas las madres embarazadas deben estar al día con las vacunas recomendadas como parte de su atención prenatal de rutina. Los CDC recomiendan de forma contundente que los proveedores de atención de la salud hablen con las futuras madres sobre los beneficios de las vacunas triple bacteriana y antigripal, que son seguras, para su salud y el bienestar de sus bebés.3

Funcionarios del Departamento de Salud del Estado de Indiana informaron que un residente del condado de Elkhart contrajo encefalitis equina del Este (EEE), una infección viral transmitida por mosquitos, el primer caso humano en el estado en 21 años.

El caso falleció a causa de la infección viral.

Se trata del primer caso humano en Indiana desde 1998, y el cuarto reportado desde 1964.

Además del caso humano, las autoridades estatales informaron 13 casos confirmados de EEE en caballos: 10 en el condado de Elkhart y tres en el condado de LaGrange.

3 Puede consultar el informe completo, en inglés, haciendo clic aquí.

La encefalitis equina del este (EEE) se transmite a los caballos y a los humanos por mosquitos infectados, incluidas varias especies de Culex y Culiseta melanura. En el estado de Indiana, los principales vectores son los mosquitos del género Coquillettidia.

El Departamento de Salud del Estado de Indiana había comenzado tareas de fumigación aérea para combatir estos insectos en los condados de Elkhart, LaGrange y Noble.

En México, más de un millón de personas padecen la enfermedad de Chagas, una afección silenciosa y desatendida, ligada a la pobreza y a las viviendas precarias.

En el país se registra en Veracruz, Oaxaca, Chiapas, Yucatán, Morelos y el Estado de México. Actualmente, en el mundo hay entre seis y siete millones de personas infectadas, 100 millones están en riesgo y por su causa ocurren 12.000 muertes al año.

Margarita Cabrera Bravo, coordinadora de Ciencias Básicas de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México, destacó que este padecimiento ocurre en 21 países de América Latina, con mayor frecuencia en Argentina, Brasil y México.

Paz María Salazar Schettino, jefa del Departamento de Microbiología y Parasitología de la Facultad de Medicina, recomendó controlar las chinches vectores del parásito Trypanosoma cruzi al interior de los hogares mediante el mejoramiento de la vivienda (especialmente piso firme), educación para la salud y empleo de insecticidas.

Para las especies que viven fuera de las casas pueden usarse mosquiteros y mallas en puertas y ventanas, y tener control biológico.

Yurika Manuel Valencia, del Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades, de la Secretaría de Salud, señaló que a 110 años de su descubrimiento, la enfermedad de Chagas es considerada la parasitosis más grande de América Latina.

En el país se han identificado 39 especies vectores, y por lo menos 21 de ellas se han encontrado infectadas con el parásito T. cruzi. “Las condiciones de la vivienda en muchas áreas del país favorecen la presencia del transmisor y el riesgo de adquirir la enfermedad”.

Actualmente, explicó, la Secretaría de Salud tiene en marcha el Programa de Acción Específico para la Vigilancia, Prevención y Control de la Enfermedad de Chagas, que incluye una visión de control integrado, que contempla dos tratamientos para eliminar al parásito y disminuir la probabilidad de desarrollar complicaciones crónicas, así como contribuir a la interrupción de la cadena de transmisión.

En los últimos seis años, la Secretaría de Salud ha otorgado el tratamiento a unos 2.000 pacientes, que representan 41% del total de casos notificados en el mismo periodo.

Probó con el humo de un cigarro, se roció los brazos y la cara con más repelente, pero no había manera de espantarlos. “Era una horda de mosquitos”, recordó Mariana López, 48 años, sobre aquella noche de fines de septiembre en una terraza del centro de Guadalajara. A los dos días empezaron la fiebre, el dolor abdominal, los sarpullidos por todo el cuerpo. Había sido infectada con dengue, como otros 2.122 casos en Guadalajara. La tercera ciudad más poblada y rica de México es uno de los improbables epicentros del brote, que ha aumentado 250% con respecto al año pasado y ya se ha cobrado 72 vidas en todo el país.

El virus ha saltado de las costas tropicales, su ecosistema natural, y la onda expansiva está alcanzando cada vez más zonas del interior. El dengue es endémico de México desde los tiempos de la colonia, pero uno de los mosquitos que lo transmiten, Aedes aegypti, tradicionalmente se limitaba a las zonas calurosas y húmedas del trópico mexicano, como Veracruz o Oaxaca. El cambio climático –más calor y más lluvias– facilita que el insecto logre adaptarse a lugares alejados del mar y con mayor altura, como Guadalajara o Puebla, capitales del interior que han registrado un aumento de casos respectivamente de 700% y 1000% en lo que va del año.

“Lo preocupante es que ahora está llegando a las ciudades. Es un incremento enorme en el número de casos: 22.992 en total, más otros 100.000 probables. No hay un control de la plaga y es probable que no quieran emitir la alerta epidemiológica para no evitar el efecto llamada porque no da abasto”, apuntó el epidemiólogo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), José Luis Alfredo Mora Guevara. Desde la Secretaría de Salud de Jalisco descartan de momento emitir la alerta epidemiológica y se mantienen en el escalón anterior: aviso. “Ya conocemos lo que hace el brote y cuáles son los serotipos: DENV-1 y DENV-2. Además, no nos hemos visto rebasados en la atención a los pacientes”, sostuvo Leandro Hernández Barrios, director de Vigilancia e Investigación Epidemiológica de la Secretaría.

En la clínica pública del barrio de Santa Teresa, a 10 minutos andando del centro de Guadalajara, todas las sillas de espera están ocupadas. Van pasando lista por tandas a los enfermos de dengue. Son las 17:00 horas y van por el número 62. Adelaida Burgos llegó hace dos horas con su hijo. Tiene el número 92 y la clínica cierra a las 20:00 horas. “Sí nos van a atender, pero es lerdo”, dice la madre. “Pero esto es una epidemia, aunque no lo reconozcan”.

La mayor preocupación de las autoridades es el aumento del porcentaje de casos de dengue grave. La epidemióloga del Departamento de Salud Pública de la UNAM Guadalupe Soto Estrada apuntó que “en Chiapas o Guerrero están por encima de 50%, cuando otros años no llegaba a 5%”.

Diana Gutiérrez, 33 años, empezó a vomitar un jueves por la noche. Siguió la fiebre y el dolor abdominal. El médico le recetó paracetamol. Continuaron los dolores en la columna y en la cadera. Al cuarto día comenzaron los sangrados por la nariz. Fue directa a urgencias. Ya en terapia intensiva, aparecieron la hematuria y el sangrado de encías, pese a estar ya tomando antihemorrágicos. “Bajé seis kilos. No cesaban de bajar las plaquetas y empecé a ver borroso. Ahí sí me asuste. Pero me hicieron una tomografía y descartaron que hubiera sangrado en cerebro y cabeza”, recordó. No le dieron el alta hasta después de 20 días.

El dengue suele ser una dolencia leve, incluso asintomática (80% de los casos). Pero puede complicarse si una misma persona contrae varias veces la dolencia. La agresividad de este brote se debe en parte a un cambio en el serotipo. Tradicionalmente era el DENV-1 el más común en Jalisco. “Esta vez estamos viendo cada vez más el serotipo DENV-2. Y cuando una persona se enferma por segunda vez de un segundo serotipo del que no está inmunizado, se complica el caso y suele pasar a grave”, apuntaron desde la Secretaría de Salud.

Defienden que se están haciendo los tareas de contención y erradicación larvario correspondientes: fumigación, control biológico y campañas de información a la ciudadanía para que extremen la higiene en los recipientes de líquidos, donde se crían las larvas, o que incluso los desechen. Y confían en que la curva ascendente de casos, pronto empiece a descender. La académica de la UNAM, por su parte, apuntó a que sería necearía oportuno ampliar el muestrario de las encuestas. “No se sabe si son doble infección. No tenemos un archivo de todas las personas. Es complicado porque las encuestas serológicas son costosas”.

Centroamérica también sufre desde el verano un aumento del brote y los estudios recientes son poco optimistas con la capacidad de contención de las dos especies de mosquitos vectores: Aedes aegypti y Aedes albopictus. En el peor escenario de cambio climático –hacia el que vamos si no se reducen las emisiones– estos insectos podrán reproducirse en prácticamente todo el planeta habitado en 2080 y amenazarán a 7.000 millones de personas, 1.000 millones más que hoy. Pero antes irán alcanzando cada vez más áreas al ritmo que suban los termómetros.

El mundo A

El 3 de octubre de 2019, el Laboratorio Nacional de Salud Pública de Afganistán confirmó un caso de dengue, el que fue informado a través del sistema de Vigilancia y Respuesta Nacional

de Enfermedades (NDSR) en el país. Esta es la primera vez que se detecta el virus en Afganistán. El paciente de 21 años informó un historial de viajes a India durante el período de incubación y fue ingresado en un hospital de enfermedades infecciosas en Kabul para recibir tratamiento.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) está trabajando con el Ministerio de Salud Pública y sus asociados en la respuesta y la investigación del caso. Desde 2007, más de 4.700 brotes de enfermedades han sido investigados y respondidos a través del sistema NDSR. La OMS ha estado brindando asistencia técnica para la implementación del sistema, incluido el componente de alerta temprana, la prevención y el control de zoonosis, así como el control y prevención de la influenza aviar y pandémica.

El herpesvirus porcino 1 (PHV-1) es un virus de ADN bicatenario, miembro de la subfamilia α-herpesviridae. Infecta principalmente a los cerdos, con solo casos esporádicos en países desarrollados, pero con potenciales brotes endémicos en países en desarrollo. Al igual que otros herpesvirus, el PHV-1 es altamente neurotrópico y puede infectar el sistema nervioso central. Los seres humanos no son los huéspedes naturales del PHV-1 y, en general, se ha considerado que son refractarios a las infecciones por este virus. Sin embargo, ha habido informes de casos recientes que indican que el PHV-1 puede causar endoftalmitis y encefalitis en humanos, lo que sugiere que se deben realizar más estudios para investigar las infecciones por PHV-1 en humanos.

En un reciente estudio, se detectaron cinco pacientes con síntomas clínicos de encefalitis aguda que fueron confirmados como causados por la infección por PHV-1.

Los cinco pacientes –cuatro hombres y una mujer– se confirmaron mediante la secuenciación de próxima generación del líquido cefalorraquídeo. Los pacientes se presentaron en un hospital de Shandong entre febrero y abril de 2018. Todos sobrevivieron hasta el alta hospitalaria.

Los cinco pacientes presentaban las siguientes características comunes:

- Un trabajo que involucra el manejo de cerdos. Todos los pacientes trabajaron con cerdos y la mayoría de ellos reportaron una lesión en la mano en el trabajo antes del inicio de sus síntomas clínicos. Esto sugiere que la transmisión viral de cerdo a humano es posible, aunque es necesario aclarar el mecanismo exacto.

- Inicio agudo con progresión rápida. Dentro de las 1-2 semanas posteriores al inicio de la enfermedad, los cinco pacientes habían desarrollado síntomas clínicos graves y una enfermedad potencialmente mortal.

- Características clínicas principalmente de una infección del sistema nervioso central (SNC), pero también puede involucrar a otros sistemas, como el pulmonar y el hepático.

Los pacientes comenzaron con fiebre alta y dolor de cabeza, con una rápida progresión a signos de infección del SNC, como estado mental alterado, convulsiones y coma. Cuatro de los cinco pacientes presentaron insuficiencia respiratoria y requirieron intubación endotraqueal y asistencia respiratoria. Tres pacientes presentaron disfunción hepática.

- Compromiso óptico. Dos de los cinco pacientes presentaban compromiso óptico al ingreso hospitalario o en una visita de seguimiento clínico. El tratamiento mejoró los síntomas del SNC y respiratorios, pero parecía no detener la progresión del compromiso óptico. Los exámenes revelaron lentes y opacidades vítreas, atrofia del nervio óptico y edema y exfoliación retiniana.

- Los cinco pacientes recibieron inmunoglobulina humana intravenosa, glucocorticoides, tratamientos antiepilépticos, antivirales y antibióticos, y todos sobrevivieron hasta el alta. La neumonía fue una complicación frecuente durante el curso de la enfermedad.

En resumen, este estudio demostró que la infección por PHV-1 puede ser una de las causas de la encefalitis humana.4

La crisis climática y ambiental facilitará la invasión de mosquitos capaces de transmitir enfermedades en la Región Mediterránea y, a la vez, provocará un incremento de la escasez de agua. Son dos de las múltiples alertas que recoge el informe Los riesgos vinculados a los cambios climáticos y ambientales en la región mediterránea que se presentó el 11 de octubre en Barcelona.

El informe señala que “el cambio climático favorece la potencial transmisión” de enfermedades inoculadas por mosquitos y que la actual invasión del mosquito Aedes albopictus puede verse incrementada.

Se puede decir con certeza que el calentamiento climático así como el aumento de la frecuencia de los sucesos climáticos extremos, como las inundaciones, contribuyen al potencial de transmisión de las enfermedades en la región.

Los últimos años se han dado varios casos de transmisión autóctona de dengue, al menos, en Croacia, Francia o España (dos casos en Murcia y cerca de Barcelona).

4 Puede consultar el artículo completo, en inglés, haciendo clic aquí.

Aedes albopictus

Durante el cálido verano de 2017, se registraron dos focos de fiebre chikungunya en Francia e Italia. Los expertos ven difícil calibrar toda la gravedad de las consecuencias del cambio climático y la distribución de enfermedades infecciosas, dado que las interacciones entre patógenos y vectores de transmisión son complejas.

Pero recuerdan que toda la Cuenca Mediterránea presenta un fuerte potencial de infección por el virus del Nilo Occidental, que podría extenderse en la mayor parte de los países mediterráneos.

Las dinámicas del ciclo de vida de estas especies susceptibles de transmitir e enfermedades y los organismos patógenos son sensibles a las condiciones climáticas.

Existe una abundante y compleja sucesión de fenómenos que desencadena el cambio climático: por ejemplo, el calentamiento y sus secuelas (sequías, menor disponibilidad de agua y más presión sobre los recursos hídricos) amenazan con agudizar los conflictos y agravar los riesgos de migraciones masivas en la cuenca del Mediterráneo.

Se observa un círculo vicioso en el que el calentamiento y la evapotranspiración –fruto de un clima más cálido– dejarán las plantas más secas; e intensificarán la

necesidad de riego agrícola, lo que unido a otras demandas adicionales (para cubrir aumentos demográficos, urbanización...) agravarán esa escasez de recursos.

Para toda la región se pronostica una sensible disminución de la disponibilidad de agua dulce en las próximas décadas (cifrada entre 2% y 15%, para un alza de 2°C de temperatura). Es una de las tasas de descenso más fuertes a nivel mundial.

Más de 250 millones de personas integrarán la población pobre en agua (menos de 1.000 metros cúbicos de agua por habitante y año) que sufrirá su escasez dentro de 20 años. Esta carencia afectaba a 180 millones de personas en el año 2013.

Eso es así porque la duración de los períodos de sequía aumentará de forma significativa, así como su intensidad.

Esa intensificación de las sequías ya se detecta desde 1950, y se destaca especialmente la del período 2008-2011 en Medio Oriente.

En esta última, influyeron la ausencia de lluvias, los altos niveles de evapotranspiración vinculados al calentamiento y la demanda en alza de agua a causa del fuerte crecimiento demográfico. La temperatura media en Medio Oriente aumentó 1°C entre 1931 y 2008.

Se estima que un aumento de temperaturas de 2°C en la atmósfera a nivel mundial causará un descenso de precipitaciones en verano de entre 10% y 15% en el noroeste de España, el sur de Francia y los Balcanes.

Gráfico 1. Evolución de la temperatura media en la Cuenca Mediterrá nea y a nivel mundial. Años 1880/2020. Fuente: Mediterranean Experts on Climate and Environmental Change.

La duración de los episodios de sequía podría aumentar 7% si la temperatura media aumentara 1,5°C.

Los expertos consultados por la Unión por el Mediterráneo alertan de que se dan las condiciones de un efecto en cadena en el agravamiento de las condiciones de vida, incluido el potencial de que surjan nuevos conflictos, incluida la intensificación de las migraciones masivas.

Las poblaciones de las regiones semiáridas situadas en el Sur y el Este del Mediterráneo son las que están especialmente expuestas a sufrir la penuria de agua, incluso si el calentamiento se limita a 2°C. En Grecia y Turquía la disponibilidad de agua podría bajar por debajo de los 1.000 metros cúbicos por habitante y año de aquí a 2030.

La insuficiente disponibilidad de agua por habitante en el sudeste de España y de las costas del sur de Mediterráneo podría situarse por debajo de los 500 metros cúbicos por habitante y año, una situación de penuria de agua a la que se podría llegar en un futuro cercano.

Se prevé que la demanda de agua para riego deberá aumentar entre 4% y 18% de aquí al fin del siglo, exclusivamente por un calentamiento de entre 2°C y 5°C, respectivamente. Pero estas cifras podrían situarse entre 22% y 74% por el crecimiento demográfico y de la demanda.

La demanda de agua asociada la producción industrial aumentará entre 50% y 10% de aquí a 2050 en los Balcanes y el sur de Francia.

El crecimiento demográfico proyectado, en particular en las zonas costeras de los países de este y del sur del Mediterráneo, así como la urbanización creciente comportan no sólo una demanda de agua más elevada, sino también una degradación de la calidad del agua.

De manera general, el cambio climático provoca una merma de los recursos generales y económicos disponibles, lo que contribuye a un endurecimiento de los conflictos.

Las revueltas sirias –surgidas en junio de 2011– son fruto de varios factores complejos estrechamente vinculados entre sí. Es contestada la hipótesis de que el clima haya desempeñado un papel importante en la génesis de ese desgraciado conflicto, y se desbarata la tesis de una secuencia infernal: sequías, malas cosechas, hundimiento de la economía, brecha entre el mundo urbano y rural, paro y aumento de la población pobre, hasta llegar a las revueltas.

Pero incluso aunque este vínculo de causalidad no pueda establecerse directamente en Siria, algunos sectores piensan que las recientes sequías han desempeñado un papel importante en su desencadenamiento, con el argumento de que las últimas sequías están entre las más largas y más graves de los últimos 900 años.

Además, fuera de la situación en Siria, se ha constatado que cambios ambientales y sociopolíticos han sido una fuente de migraciones humanas forzadas hacia regímenes más estables en todo el mundo.

Refugiados en la frontera entre Macedonia y Grecia en 2016.

La Región del Mediterráneo está sufriendo niveles de calentamiento más intensos que los del conjunto del planeta. Las consecuencias no sólo se aprecian en las carencias en la disponibilidad de agua, sino también en la pérdida de biodiversidad o la sobreexplotación de los recursos naturales y pesqueros.

En la Región Mediterránea, las temperaturas anuales medias son hoy aproximadamente 1,5°C superiores a las de la época preindustrial (1880-1899) y superiores a las de las tendencias mundiales en materia de calentamiento. Esto significa que el calentamiento es 20% más rápido que la media mundial.

Si no hay medidas de atenuación suplementarias, la temperatura regional aumentará 2,2°C (con relación a la de la época preindustrial) en esta región de aquí a 2040; e, incluso, hasta 3,8°C en algunas subregiones de aquí a 2100. Todos estos aumentos de temperatura se traducirán en olas de calor más significativas y duraderas.

El fenómeno de la “isla de calor urbana” agudizará el aumento de la frecuencia, de la intensidad y de la duración de las olas de calor.

El nivel del mar ha subido 1,1 milímetros por año entre 1970 y 2006, pero se han acelerado los últimos decenios hasta alcanzar los 3 milímetros al año.

Los escenarios futuros señalan una elevación del nivel del mar en la escala mundial entre 52 y 190 centímetros en horizonte del 2100.

La aceleración del deshielo en Groenlandia y la Antártida representa un riesgo importante de elevación del nivel del mar, con una elevación potencial de varios metros, incluso si el calentamiento climático a escala mundial se limita a un aumento de 1, 5°C.

El aumento del nivel del mar a finales de siglo afectaría a un tercio de la población de la región en las zonas costeras y pondría en peligro los medios de subsistencia de al menos 37 millones de personas sólo en el norte de África.

En 2050, las ciudades mediterráneas representarán la mitad de las 20 ciudades del mundo con mayores daños anuales por la subida del nivel del mar. Esto supondrá una carga adicional para los ya escasos recursos de muchas zonas urbanas de la región.

La productividad agrícola en las zonas costeras está en peligro debido a la pérdida de tierras que serán inundadas y a la salinización de las aguas subterráneas como consecuencia de la intrusión de agua de mar.

El Mediterráneo, que alberga entre 4% y 18% de las especies marinas (aunque sólo representa 0,8% de la superficie de los océanos), registra un descenso de las especies de aguas frías, que

Delta del Ebro

se hacen menos abundantes o desaparecen, mientras que las especies de aguas calientes proliferan más.

Más de 600 especies de plantas y animales marinos no autóctonos (a menudo procedentes del Mar Rojo) se han establecido, lo que indica que se dan condiciones más cálidas.

Algunos depredadores exóticos como el pez león (Pterois antennata) pueden tener ventajas sobre las especies nativas, causando la extinción regional o la pérdida de hábitat.

El 90% de las poblaciones de peces comercializadas ya están sobreexplotadas en el Mediterráneo, y se prevé que el peso corporal máximo medio de los peces se reducirá hasta en 49% para 2050.

Durante las últimas décadas, el alcance y la intensidad de los brotes de medusas se han visto favorecidos por el aumento de la temperatura del agua, lo que ha convertido a esta especie en una plaga, ya que se encuentra en cantidades poco comunes y perturban otros ecosistemas bien equilibrados.

Los grandes incendios debidos al cambio climático, provocados por el calor y la sequedad, pero también por la

transformación territorial y del paisaje, han destruido una cantidad récord de áreas boscosas en los últimos años, y han dañado la biodiversidad y restado capacidad de absorción del dióxido de carbono.

El área quemada futura podría aumentar hasta 40% sólo con un escenario de calentamiento de 1,5°C. La inundación y la intrusión de agua salada afectarán a muchos humedales costeros delicadamente equilibrados.

La demanda de alimentos aumentará debido al crecimiento de la población, y surgirá una escasez cuando disminuyan las cosechas, el rendimiento de la pesca y el ganado.

La calidad de gran cantidad de cultivos también disminuirá tras el calentamiento, ya que el ciclo fenológico se acorta, como es el caso de la vid.

Es probable que aumenten los desequilibrios regionales en materia de seguridad alimentaria, asociados a una mayor dependencia de las importaciones de alimentos.

La salud humana también está en peligro: se espera que las enfermedades y muertes relacionadas con el calor sean más frecuentes, especialmente en las ciudades, debido al

Embalse de Rialb en 2017.

Incendio en el paraje La Peñuela de Moguer (Huelva), que entró en el espacio natural de Doñana, en junio de 2017.

efecto de la isla de calor, y para los grupos de población vulnerables, como los ancianos, los jóvenes y los más pobres.

El cambio climático favorece la aparición de enfermedades transmitidas por vectores y por el agua, como se ha dicho más arriba.

El deterioro de la calidad del aire, el suelo y el agua afecta a la salud humana debido a las enfermedades respiratorias y cardiovasculares, así como a la reducción del acceso a alimentos saludables.

Los riesgos costeros derivados de las inundaciones y los daños causados por las tormentas causan importantes riesgos para la infraestructura y los medios de subsistencia de las personas.

A medida que las olas de calor se hacen más fuertes y frecuentes, los sistemas de apoyo social para los ancianos y las poblaciones desfavorecidas se vuelven más frágiles y aumentan los desequilibrios sociales.

Debido a sus efectos en la agricultura y la seguridad alimentaria, las sequías intensas han desempeñado un papel importante en la actual crisis regional.

Los países del sur y el este del Mediterráneo son generalmente más vulnerables debido a su limitada capacidad socio-económica para adaptarse a los cambios ambientales.

Con epidemias de dengue y sarampión, que han matado a más de 1.800 personas, y un brote de poliomielitis recién declarado, el sistema de salud de Filipinas está desbordado y el país corre el riesgo de convertirse en incubadora de enfermedades prevenibles, en gran medida por el miedo a las vacunas.

La mayoría de los fallecidos por dengue y sarampión son menores de 5 años y en el último mes se han confirmado dos casos de poliomielitis –una niña de 3 años en Lanao del Sur y un niño de 5 en Laguna, sur de Maynila–, enfermedad para la que no hay cura, que fue erradicada del país hace 19 años.

“Todavía hay unos 750.000 niños filipinos que no han recibido ninguna vacuna”, señaló el director para Filipinas de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Rabindra Abeyasinghe, quien insiste en que tanto el sarampión como la poliomielitis son evitables gracias a “vacunas eficaces y seguras”.

Abeyasinghe recordó que Filipinas aún se recupera del trauma de Dengvaxia®, una vacuna experimental contra el dengue que se aplicó masivamente en escuelas entre 2016 y 2017,

hasta que su fabricante, la farmacéutica francesa Sanofi, admitió que tenía efectos adversos y varios niños vacunados fallecieron.

Antes de ese escándalo, 93% de los filipinos creía en la eficacia de las vacunas, mientras que hoy lo hace 32%, es decir, solo uno de cada cinco filipinos confía en su seguridad, según el Índice Global de Confianza en las Vacunas.

Con el desplome de la tasa de inmunización a 40% en 2018 –tres de cada cinco menores de 5 años no están debidamente vacunados–, Filipinas podría ser una incubadora de enfermedades contagiosas, un riesgo potencial para toda la región.

Para contener la nueva emergencia sanitaria, el Departamento de Salud comenzará la próxima semana una amplia campaña de inmunización contra la poliomielitis, como ya hizo a principios de año cuando se declaró el primer brote de sarampión, que solo ahora comienza a estar controlado tras haber matado a unas 550 personas.

El objetivo es inmunizar por vía oral a unos 5 millones de niños para noviembre, con especial incidencia en las comunidades más pobres donde “el hacinamiento y el saneamiento deficiente facilitan los contagios de poliomielitis y sarampión”, apuntó Abeyasinghe.

En Filipinas, con una tasa de pobreza de 21%, más de 22 millones de personas viven en esas condiciones precarias e insalubres, donde esas enfermedades altamente infecciosas se propagan con rapidez.

La campaña cuenta con el apoyo de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Fondo Internacional de Emergencia de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), entidades que han liberado fondos para la compra de las vacunas y han desplegado personal especializado sobre el terreno.

El presidente del CICR en Filipinas, Chris Staines, afirmó que el “alarmante regreso” de la poliomielitis pone en riesgo la vida de 11 millones de menores de cinco años, por lo que animó a todos los padres a vacunar a sus hijos “para salvar vidas”.

La cobertura de inmunización contra la poliomielitis se situó en 2018 en 66%, “muy lejos del 95% que se considera seguro para garantizar que la población está protegida frente a la enfermedad”, alertó el secretario filipino de Salud, Francisco Tiongson Duque III.

Las autoridades sanitarias declararon el brote de poliomielitis el 19 de septiembre, cuando se confirmó el primer caso, pero ya advirtieron del riesgo del retorno de la enfermedad meses antes al detectar el virus tipo 2 en muestras extraídas de la red de alcantarillado de Maynila y Davao, las ciudades más densamente pobladas del país.

La tasa de mortalidad por poliomielitis –enfermedad endémica solo en Afganistán, Pakistán y Nigeria– alcanza a 20% y sus secuelas suelen ser irreversibles, en forma de parálisis.

Sin embargo, la emergencia sanitaria más grave en Filipinas es la epidemia de dengue, declarada el pasado agosto, que ya supera los 307.700 casos –más del doble que el año pasado– y las 1.250 muertes en lo que va del año a causa de la enfermedad.

Aunque la incidencia de la enfermedad es elevada este año en todo el Sudeste Asiático –los contagios en la región se han triplicado–, Filipinas acumula las cifras más demoledoras en su peor brote de dengue desde 2012.

Los hospitales públicos de los barrios más humildes de Maynila, como Santa Cruz o Tondo, están desbordados y aglutinan hasta 20 pacientes por habitación.

En esos centros, a pesar de que se han desplegado camas adicionales en los pasillos para atender la epidemia de dengue, algunos pacientes deben compartirlas.

Más de la mitad de las muertes por dengue son de niños menores de 9 años, “mucho más vulnerables a la enfermedad porque su sistema inmune es más débil”, explicó Amado Parawan, de Save The Children.

Ante la gravedad de la epidemia, algunas voces, incluida la del presidente Rodrigo Roa Duterte, se han mostrado partidarias de retomar el uso de Dengvaxia®, una controvertida decisión cuando aún se investiga la relación de la vacuna con la muerte de unos 119 niños.

No menos de 80.000 de los carnés amarillos que se emiten en Nigeria como certificación de haber recibido la vacuna contra la fiebre amarilla antes de viajar fuera del país se están vendiendo en mercados y en las calles, sin que los viajeros hayan sido vacunados, causando al gobierno pérdidas por más de 550.000 dólares.

Algunos altos funcionarios del Ministerio Federal de Salud retiraron algunos de los carnés electrónicos amarillos impresos por el Gobierno Federal que deben ser entregados a las personas después de que se hayan aplicado la vacuna en clínicas designadas, aeropuertos y puestos fronterizos.

El carné, que cuesta oficialmente unos 7 dólares, se vende a los potenciales viajeros a precios de hasta 14 dólares, sin que se apliquen la vacuna, lo que socava los objetivos de la vacunación contra esta enfermedad. El gobierno ha estado haciendo esfuerzos para recuperar todos los carnés robados con escaso éxito.

A principios de febrero, el Gobierno Federal había aprobado la emisión de un carné amarillo que podía detectarse electrónicamente, para eliminar los incidentes de falsificación y venta de carnés falsos en lugares designados.

En abril, el Ministerio de Salud imprimió un millón de carnés electrónicos en dos lotes: A y B, con 500.000 copias en cada lote. El gobierno esperaba obtener más de 5,5 millones de dólares de las ventas, pero el robo de miles de carnés redujo los ingresos proyectados y produjo un aumento de casos de fiebre amarilla.

Al parecer, la Unidad de Servicios de Puertos no ha agotado los carnés amarillos del lote A. Pero los contenedores que guardaban el lote B fueron violentados y algunos funcionarios de salud, que tenían el mandato de mantenerlos a salvo, se robaron grandes cantidades de ellos.

Se calcula que los carnés robados valen más de 550.000 dólares en el mercado negro.

Aunque el gobierno ha identificado a quienes distribuyen los carnés impresos, no se han tomado medidas serias contra ellos.

Un funcionario que había robado 11.000 carnés en Kano solo fue retirado de su escritorio de emisión en la Unidad de Servicios de Salud del Puerto del Ministerio de Salud y enviado a otra repartición. Se calcula que sólo este oficial negoció carnés por un valor de 76.000 dólares.

El incidente en Kano no se investigó adecuadamente, ya que algunos de los funcionarios implicados aprovecharon sus conexiones de alto nivel con el gobierno para silenciar a los altos funcionarios del Ministerio en Abuja para lograr un encubrimiento.

Nigeria presenta una alta prevalencia de fiebre amarilla, registrando un aumento en 2019. Según el informe epidemiológico semanal publicado por el Centro de Control de Enfermedades de Nigeria para la semana epidemiológica 38 de 2019, el país registra 2.674 casos sospechosos de fiebre amarilla, de los que 65 han muerto; en 2018 sólo se había registrado una muerte por esta enfermedad.

Debido a la negligencia y la actitud indiferente del Departamento de Salud de Sindh, las enfermedades inmunoprevenibles como la difteria y el tétanos, que han sido eliminadas en gran parte del mundo, comenzaron a resurgir en Karachi, donde al menos tres niños murieron a causa de la difteria, mientras que el tétanos se cobró dos vidas, dijeron el 10 de octubre funcionarios de salud.

Los expertos afirman que gracias a la vacunación, esta enfermedad bacteriana mortal fue eliminada incluso en Pakistán, pero ahora se están reportando casos en diferentes áreas de Karachi y cobrando las vidas de niños.

Del mismo modo, el tétanos, eliminado de la mayoría de los países del mundo, incluido Pakistán, debido al deterioro de las condiciones ambientales y la disminución de la inmunización de rutina, ha comenzado a afectar a los niños del país, y ya se ha cobrado dos vidas esta semana en Karachi.

“Hasta ahora hemos admitido 11 casos confirmados de difteria durante las últimas dos semanas, de los cuales tres expiraron y ocho aún están en tratamiento en la sala de aislamiento de nuestro centro de salud”, dijo el profesor Jamal Raza, pediatra y director del Instituto Nacional de Salud Infantil (NICH), en Karachi.

Afirmando que la difteria era una enfermedad completamente prevenible por vacunación que había sido eliminada de Pakistán, e incluso la gran mayoría de los médicos desconocen sus síntomas y tratamiento, Raza agregó que estaba asombrado de ver a los niños llegar con un “extraño conjunto de síntomas”, y agregó que cuando enviaron las muestras para su análisis de laboratorio, se confirmó que 11 de ellos estaban afectados por difteria.

“Para entonces, no se podía hacer nada por estos desafortunados niños, que podrían haberse salvado mediante la inmunización de rutina, que se brinda de manera gratuita en Pakistán. Tres de ellos murieron mientras que ocho todavía luchan por su vida y estamos tratando de salvarlos”, dijo, y agregó que estaba seguro de que podría haber otros niños que han contraído esta enfermedad pero murieron antes de ser diagnosticada y de concurrir a un centro de salud de atención terciaria.

Culpó a la disminución de la cobertura de inmunización de rutina en Karachi, y dijo que los funcionarios del Programa Ampliado de Inmunización afirman que el exceso de inmunización de rutina es de 50%. Sin embargo, alegó que estas cifras no eran reales, y que la inmunización de rutina era mucho menor en diferentes áreas de la ciudad, y debido a ello los niños contraían todas las enfermedades prevenibles por vacunación como sarampión, difteria e incluso tétanos.

El tétanos se cobró la vida de dos niños esta semana, dijo Raza, y agregó que habían recibido a cinco niños con tétanos, de los cuales dos expiraron, dos estaban en tratamiento en el centro de salud, mientras que uno fue dado de alta tras su recuperación.

Raza afirmó que los funcionarios del Programa Ampliado de Inmunización habían asegurado la vacunación de emergencia contra la difteria y el tétanos en las zonas donde se registraban los casos de estas enfermedades, pero lamentó que, debido a la apatía de algunas personas, los niños en Karachi habían comenzado a morir debido a enfermedades que durante mucho tiempo estuvieron eliminadas en el país.

“No podremos erradicar la poliomielitis de nuestro país hasta que fortalezcamos la inmunización de rutina. Además de la poliomielitis, nuestros niños comenzaron a morir debido a la fiebre tifoidea extremadamente resistente y el sarampión, y ahora la difteria y el tétanos, lo que se está convirtiendo en una causa de preocupación mundial. Es necesario tomar este problema muy en serio o no podremos controlar los inminentes brotes de infecciones mortales, que matan a nuestros hijos “, observó.

La Oficina para África de la Organización Mundial de la Salud informó que el brote de peste bubónica en la provincia de Ituri, en el noreste de la República Democrática del Congo, ha causado un total de 31 casos y ocho muertes desde principios de este año.

Los primeros cinco casos fueron reportados durante la semana epidemiológica (SE) 10, en la zona sanitaria de Aungba, que se encuentra en un área endémica. Se notificaron otros dos casos en la SE 13 (en la zona sanitaria de Aru) y en la SE 14 (zona sanitaria de Aungba). El último clúster de casos se informó en las SE 39 (7 casos y 3 muertes) y 40 (14 casos), en la zona sanitaria de Aru.

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