FECHA: 11 DE JUNIO DEL 2014

ENSAYO 5

LOS ORFANATOS DE LA MUERTE EN

CHINA

Por: Sandra Severino

En 1995 se emitió en España el documental “Las habitaciones de la muerte”

(producido por el británico Channel 4 y emitido en España por Documentos TV). El éxito

de audiencia condujo a repetir varias veces su emisión, y en cada ocasión las centrales

telefónicas de las cadenas emisoras se vieron colapsadas por las llamadas de personas

interesadas en adoptar una niña china.

A finales de los 70, los expertos aconsejaron a los dirigentes de China el control de

la natalidad del país. En la República Popular de China existe un problema demográfico

estructural. Las autoridades chinas hablan de “sobre población”. En China cada medio

segundo nace un bebé esto equivale a 21 millones de bebes al día. Existen problemas de

aglutinamiento de personas en las grandes ciudades, también problemas de higiene, pero

sobre todo, las autoridades chinas se preocupan por las finanzas: los gastos en los que

incurre el gobierno se elevan con cada bebé que nace en ese país. Por lo que desde 1979, el

gobierno chino ha impuesto una política del “hijo único”, con el fin de controlar el

crecimiento demográfico y de esa manera evitar los conflictos para la alimentación,

vivienda y las necesidades básicas.

La política de China sobre tener un solo descendiente por familia tenía como

objetivo general es conseguir estabilizar la población hacia el año 2000, alcanzados los

1.200 millones de habitantes. Según las proyecciones, de no tomarse medidas drásticas, la

simple inercia demográfica puede conducir a crecimientos mucho mayores, que pondrían

en peligro los programas de modernización de la época. Las parejas con un sólo hijo, si se

comprometen a no tener más, reciben un certificado que les proporciona beneficios como

una baja de maternidad más prolongada, mejores servicios pediátricos, preferencia en la

asignación de vivienda e incluso ayudas en metálico. Pero en las áreas rurales la

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fecundidad es mayor, y el control se vuelve omnipresente mediante brigadas de personal

sanitario femenino que presionan para que los solteros retrasen el matrimonio.

Es por eso que un grupo de investigadores de EEUU fue a China a observar la

situación de los orfanatos en esa ciudad. Grabaron en el interior de los orfanatos de China

con cámaras ocultas, y que muestra cómo los pequeños permanecían sin ser atendidos

durante largos períodos de tiempo atados a sus sillas de bambú, o yacían extenuados bajo

sábanas mugrientas. Las cámaras consiguieron llegar hasta las habitaciones donde se

dejaban abandonadas las niñas cuando se consideraba que estaban demasiado enfermas.

China en varios siglos era una oposición para la mujer. Las mujeres siguen siendo

ciudadanos de segunda clase. El hijo era el heredero por eso tenia mayores derechos y

beneficios. Las celebraciones de los hombres y las mujeres eran diferentes por ejemplo:

cuando nacía un hombre lo celebraban con fuegos artificiales en cambio, a las mujeres no.

Antes en 1989 a las mujeres recién nacidas las mataban o las ponían en adopción. Además

durante la época del hambre si la familia tenían hambre mataban a una de sus hijas para

que sobrevivieran lo otros de la familia, especialmente los hijos.

El infanticidio se evidenció en China. A las niñas recién nacidas las ahogaban antes

de que dieran su primer respiro. Este es un resultado directo de la política del hijo único. El

Infanticidio es la práctica de causar la muerte de un infante (niño o niña) de forma

intencionada. Habitualmente es la madre quien comete el acto, pero la criminología

reconoce varias formas de asesinato no maternal de niños.2 En muchas sociedades pasadas

ciertas formas de infanticidio eran consideradas permisibles, mientras que en la mayoría de

las sociedades modernas se considera a la práctica inmoral y criminal. No obstante, aún

sucede — en el mundo occidental generalmente debido a la enfermedad mental del padre o

conductas violentas, y en algunos países pobres como una forma de control de la

población, algunas veces con la aceptación social. El infanticidio de mujeres es más común

que el de varones debido al infanticidio por selección de sexo.

En conclusión, la realidad que se vivió en China fue terrible. Los niños vivían en

condiciones inhumanas, los orfanatos eran un infierno para los bebes que llegaban cada

día. 1 de cada 5 bebes morían diariamente y en su mayoría niñas. Sin embargo, esta

política ha sido una tortura para esas vidas que necesitan vivir.

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Los hijos no deseados eran considerados una vergüenza para el País.

Ha traído como consecuencia el abandono de bebés en los orfanatos o sin piedad en las

calles.