Oporto, Braga y Coimbra Intercity

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INTERCITY GUIDES por Antón Pombo Oporto Braga Coimbra

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INTERCITY GUIDES

por Antón Pombo

OportoBragaCoimbra

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ANTES DE SALIR • CÓMO LLEGAR

ANTES DE SALIR

CÓMO LLEGARPara viajar a Portugal (con una es-tancia máxima de tres meses), solo es necesario tener en regla el Do-cumento Nacional de Identidad. Co-mo consecuencia de la integración de Portugal en la Unión Europea y de los acuerdos de Schengen to-das las fronteras están permanen-temente abiertas y ya no existen las aduanas ni los controles.

EN COCHELos principales accesos hacia el norte y centro de Portugal son los siguientes: desde Galicia siguiendo la N 550/A 55 (Tui), con acceso directo a Braga y Oporto utilizando la A 3, o por la costa dirección Viana do Castelo. Otra opción es la de tomar en Verín un acceso directo a Tras-os-Montes por Chaves y Vila Real.Desde la Comunidad de Castilla y León existe una entrada menor por Zamora y Alcañices (N 122 y A 11) hacia Bragança (curzando Tras-os-Montes), desde donde se puede continuar hacia el Minho y Braga o hacia el Douro y Oporto; sin embargo, el paso internacional más frecuentado, también por los camiones procedentes de o con destino al resto de Europa, es el

de Salamanca y Fuentes de Oñoro (A-62), tomando luego dirección a Coimbra o Oporto.

EN TRENRenfe información. Telf. 902 320 320. En Internet: www.renfe.com.CP Comboios de Portugal. Telf. 808 20 82 08 o www.cp.pt.Vigo-Oporto. Desde Vigo hay dos trenes diarios con salida a las 8.25 h y a las 19 h y con una dura-ción aproximada de 2 horas y me-dia. Viajando en el de las 8.25 h no hay problemas para enlazar con Lisboa en la estación de Oporto.Una vez en Portugal nos podemos mover fácilmente en tren, con pre-cios muy parecidos a los de España dependiendo del tipo de comboio: los regionales de cercanías son los más baratos, también los más lentos, y permiten llevar gratis las bicis. Los Intercity comunican las principales poblaciones, y el más rápido, por ello conocido en su tiempo como o foguete, es el que va de Lisboa a Oporto pasando por Coimbra.

• Tarifas para jóvenesUna posibilidad es utilizar el Billete Interrail, que en el caso de Portu-gal se incluye en la zona F, junto con España y Marruecos. Tiene

diferentes periodos de validez y precios que varían en función de las zonas escogidas. Se puede obtener más información en: www.renfe.es o en www.inte-rrailnet.com.

EN AVIÓNPortugal continental cuenta con tres aeropuertos internacionales: Lisboa (Portela), Oporto (Francis-co Sá Carneiro) y Faro. Existen va-rias compañías aéreas que vuelan desde España hasta Portugal con frecuencias diarias o semanales en función de la época.Madrid-Oporto: Prestan servicio en esta línea Tap Portugal, Air Nos-trum y Ryanair. Se llega en una hora.Barcelona-Oporto: Dos compa-ñías ofrecen el servicio: Tap Portu-gal y Ryanair. La duración del vuelo es de 1 h 50 min.Otros aeropuertos españoles es-tán comunicados con Oporto por avión: Palma de Mallorca (Air Berlín y Ryanair), Valencia, Gran Canaria y Tenerife Sur (Ryanair). Más in-formación en las web www.aena-aeropuertos.es, o en las páginas de cada compañía.

EN AUTOCARLos trayectos principales son:Madrid-Oporto: Alsa y Eurolines operan esta línea a diario con pa-radas en Ávila, Salamanca, Guarda, Viseu y Albergaria. En esta última localidad se puede hacer transbor-do para seguir a Coimbra, Leiria, Fátima y Lisboa. De Salamanca a Oporto se tarda unas 6 h, y desde Madrid dos horas más. También realiza el viaje tres días a la sema-na la empresa zamorana Francisco Ledesma (telf. 915 276 279).Barcelona-Oporto: Alsa ofrece de dos a cuatro servicios diarios, directos o con transbordo en Ma-drid, con una duración de 16 a 18 h a Oporto (vía Zaragoza, Ma-

drid, Ávila, Salamanca, Guarda y Viseu). Para ir a Coimbra se debe hacer transbordo en la estación de Albergaria-a-Velha. Galicia-Oporto-Lisboa: Cubre esta línea Alsa, con una salida dia-ria desde A Coruña y paradas en Santiago de Compostela, Ponte-vedra, Vigo, Tui, Valença do Minho, Braga, Oporto, Albergaria-a-Velha, Coimbra, Leiria, Fátima.

• Regreso desde PortugalLa portuguesa Internorte (www.internorte.pt) ofrece muchas rutas para regresar de Portugal a España, tanto desde Lisboa a Madrid, vía Vilar Formoso, Salamanca y Ávila, como la que va a Barcelona por Zaragoza y Lleida. Hacia el norte dispone de un servicio de Lisboa a A Coruña con paradas en Coimbra, Albergaria-a-Velha, Oporto, Braga, Vigo, Pontevedra y Santiago. De Oporto y Albergaria-a-Velha tam-bién parte una línea hacia el sur y sureste, con destino a Huelva, Sevilla, Málaga, Granada, Murcia y Cartagena. De Lisboa va otra a Sevilla y Murcia. Existen también líneas hacia Francia que pasan por Valladolid, Burgos, Logroño, Lleida y Barcelona.La misma empresa, con el nombre de Intercentro (www.intercentro.pt), realiza recorridos desde Lisboa, vía Badajoz, a Madrid, con prolonga-ción a Zaragoza y Barcelona. Es-ta compañía ofrece descuentos a menores de 25 y mayores de 60 años.Para movernos por Portugal, el servicio más rápido es el de los expresos, intercity con pocas pa-radas, de la RedeExpres (www.re-de-expressos.pt); las cercanías las cubren numerosas compañías a un precio bastante más bajo, pero con trayectos interminables, que dan muchos rodeos para prestar ser-vicio al mayor número de usuarios.

> EMBAJADAS Y CONSULADOS F

Una dirección útil, antes de salir, es la Embajada de Portugal en España: (Pinar, 1. Madrid 28006. Telf. 91 782 49 60; www.embajadaportugal-madrid.org), y los consulados portugueses en las principales ciudades:Bilbao: Elcano, 7, 1º. Telf. 94 435 45 40 / 42.Barcelona: Ronda de San Pedro, 7. Telf. 93 318 81 50 / 54.Madrid: Lagasca, 88, 4º. Telf. 91 577 35 85.Sevilla: Avda. Cid, 1. Telf. 95 423 11 50 / 52.

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ANTES DE SALIR • CÓMO LLEGAR

ANTES DE SALIR

CÓMO LLEGARPara viajar a Portugal (con una es-tancia máxima de tres meses), solo es necesario tener en regla el Do-cumento Nacional de Identidad. Co-mo consecuencia de la integración de Portugal en la Unión Europea y de los acuerdos de Schengen to-das las fronteras están permanen-temente abiertas y ya no existen las aduanas ni los controles.

EN COCHELos principales accesos hacia el norte y centro de Portugal son los siguientes: desde Galicia siguiendo la N 550/A 55 (Tui), con acceso directo a Braga y Oporto utilizando la A 3, o por la costa dirección Viana do Castelo. Otra opción es la de tomar en Verín un acceso directo a Tras-os-Montes por Chaves y Vila Real.Desde la Comunidad de Castilla y León existe una entrada menor por Zamora y Alcañices (N 122 y A 11) hacia Bragança (curzando Tras-os-Montes), desde donde se puede continuar hacia el Minho y Braga o hacia el Douro y Oporto; sin embargo, el paso internacional más frecuentado, también por los camiones procedentes de o con destino al resto de Europa, es el

de Salamanca y Fuentes de Oñoro (A-62), tomando luego dirección a Coimbra o Oporto.

EN TRENRenfe información. Telf. 902 320 320. En Internet: www.renfe.com.CP Comboios de Portugal. Telf. 808 20 82 08 o www.cp.pt.Vigo-Oporto. Desde Vigo hay dos trenes diarios con salida a las 8.25 h y a las 19 h y con una dura-ción aproximada de 2 horas y me-dia. Viajando en el de las 8.25 h no hay problemas para enlazar con Lisboa en la estación de Oporto.Una vez en Portugal nos podemos mover fácilmente en tren, con pre-cios muy parecidos a los de España dependiendo del tipo de comboio: los regionales de cercanías son los más baratos, también los más lentos, y permiten llevar gratis las bicis. Los Intercity comunican las principales poblaciones, y el más rápido, por ello conocido en su tiempo como o foguete, es el que va de Lisboa a Oporto pasando por Coimbra.

• Tarifas para jóvenesUna posibilidad es utilizar el Billete Interrail, que en el caso de Portu-gal se incluye en la zona F, junto con España y Marruecos. Tiene

diferentes periodos de validez y precios que varían en función de las zonas escogidas. Se puede obtener más información en: www.renfe.es o en www.inte-rrailnet.com.

EN AVIÓNPortugal continental cuenta con tres aeropuertos internacionales: Lisboa (Portela), Oporto (Francis-co Sá Carneiro) y Faro. Existen va-rias compañías aéreas que vuelan desde España hasta Portugal con frecuencias diarias o semanales en función de la época.Madrid-Oporto: Prestan servicio en esta línea Tap Portugal, Air Nos-trum y Ryanair. Se llega en una hora.Barcelona-Oporto: Dos compa-ñías ofrecen el servicio: Tap Portu-gal y Ryanair. La duración del vuelo es de 1 h 50 min.Otros aeropuertos españoles es-tán comunicados con Oporto por avión: Palma de Mallorca (Air Berlín y Ryanair), Valencia, Gran Canaria y Tenerife Sur (Ryanair). Más in-formación en las web www.aena-aeropuertos.es, o en las páginas de cada compañía.

EN AUTOCARLos trayectos principales son:Madrid-Oporto: Alsa y Eurolines operan esta línea a diario con pa-radas en Ávila, Salamanca, Guarda, Viseu y Albergaria. En esta última localidad se puede hacer transbor-do para seguir a Coimbra, Leiria, Fátima y Lisboa. De Salamanca a Oporto se tarda unas 6 h, y desde Madrid dos horas más. También realiza el viaje tres días a la sema-na la empresa zamorana Francisco Ledesma (telf. 915 276 279).Barcelona-Oporto: Alsa ofrece de dos a cuatro servicios diarios, directos o con transbordo en Ma-drid, con una duración de 16 a 18 h a Oporto (vía Zaragoza, Ma-

drid, Ávila, Salamanca, Guarda y Viseu). Para ir a Coimbra se debe hacer transbordo en la estación de Albergaria-a-Velha. Galicia-Oporto-Lisboa: Cubre esta línea Alsa, con una salida dia-ria desde A Coruña y paradas en Santiago de Compostela, Ponte-vedra, Vigo, Tui, Valença do Minho, Braga, Oporto, Albergaria-a-Velha, Coimbra, Leiria, Fátima.

• Regreso desde PortugalLa portuguesa Internorte (www.internorte.pt) ofrece muchas rutas para regresar de Portugal a España, tanto desde Lisboa a Madrid, vía Vilar Formoso, Salamanca y Ávila, como la que va a Barcelona por Zaragoza y Lleida. Hacia el norte dispone de un servicio de Lisboa a A Coruña con paradas en Coimbra, Albergaria-a-Velha, Oporto, Braga, Vigo, Pontevedra y Santiago. De Oporto y Albergaria-a-Velha tam-bién parte una línea hacia el sur y sureste, con destino a Huelva, Sevilla, Málaga, Granada, Murcia y Cartagena. De Lisboa va otra a Sevilla y Murcia. Existen también líneas hacia Francia que pasan por Valladolid, Burgos, Logroño, Lleida y Barcelona.La misma empresa, con el nombre de Intercentro (www.intercentro.pt), realiza recorridos desde Lisboa, vía Badajoz, a Madrid, con prolonga-ción a Zaragoza y Barcelona. Es-ta compañía ofrece descuentos a menores de 25 y mayores de 60 años.Para movernos por Portugal, el servicio más rápido es el de los expresos, intercity con pocas pa-radas, de la RedeExpres (www.re-de-expressos.pt); las cercanías las cubren numerosas compañías a un precio bastante más bajo, pero con trayectos interminables, que dan muchos rodeos para prestar ser-vicio al mayor número de usuarios.

> EMBAJADAS Y CONSULADOS F

Una dirección útil, antes de salir, es la Embajada de Portugal en España: (Pinar, 1. Madrid 28006. Telf. 91 782 49 60; www.embajadaportugal-madrid.org), y los consulados portugueses en las principales ciudades:Bilbao: Elcano, 7, 1º. Telf. 94 435 45 40 / 42.Barcelona: Ronda de San Pedro, 7. Telf. 93 318 81 50 / 54.Madrid: Lagasca, 88, 4º. Telf. 91 577 35 85.Sevilla: Avda. Cid, 1. Telf. 95 423 11 50 / 52.

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VISITA • OPORTO

OPORTO/ PORTO> Capital de región y distrito. 221.800 habitantes (área metropolitana, cerca de 1.200.000 habitantes).

Oporto o Porto, capital del norte de Portugal, vivió su Capitali-dad Europea de la Cultura (2001) en plena euforia constructiva. El barrio de la Ribeira, en el casco antiguo, declarado en 1986 Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, todavía está siendo rehabilitado. Monumentos emblemáticos de la historia urbana, hasta hace bien poco olvidados, también han sido restaurados, al tiempo que se apuesta por la arquitectura más novedosa.

INFO> Oficinas de Turismo. Rua Clube dos Fenianos, 25 (justo tras el Ayuntamiento, del lado izquierdo). Telf. 223 393 472/0. Horario: de noviembre a mayo, a diario de 9 h a 19 h; de junio a octubre, a diario

de 9 h a 20 h. www.portoturismo.pt, www.visitporto.travel.Terreiro da Sé (en el antiguo consis-torio, junto a la catedral). Con el mis-mo teléfono y horario de la anterior.Estación de tren de Campanhã (junto a las taquillas). Horario: en

Semana Santa y de junio a octubre, de 10 a 18 h.Praça da Ribeira. Horario: solo en agosto, de 12 a 19 h.Serralves (quiosco multimedia sin personal, pero con teléfono gratuito de contacto con la oficina central de turismo). Rua de D. João de Castro, 210. Horario: de octubre a mayo, de 10 a 19 h; de junio a septiembre, de lunes a viernes de 10 a 19 h, fines de semana hasta las 20 h.Aeropuerto Sá Carneiro. Telf. 229 420 496. http://portoenorte.pt. Horario: a diario, de 8 a 23,30 h., pero con puesto de turismo virtual las 24 h. Dependiente de la región de Turismo Porto e Norte.En Vila Nova de Gaia. Cais de Gaia. Telf. 223 756 216. Horario:

en invierno, de lunes a sábado de 10 h a 12.30 h y 13.30 h a 18 h; verano, con el mismo horario toda la semana. Av. Diogo Leite, 242 (cen-tro histórico). Telf. 223 773 080. Horario: de lunes a sábado de 10 h a 18 h. www.gaiaglobal.pt.En Matosinhos. Av. General Norton de Matos. Telf. 229 386 423. Hora-rio: lunes de 13 h a 19 h, de martes a sábado de 9.30 h a 19 h; domingo de 10 h a 13 h. Rua Hintze Ribeiro, 2-Leça da Palmeira. Telf. 229 965 387. Horario: lunes de 13 h a 19 h; de martes a sábado de 9.30 h a 19 h; cierra domingo. www.cm-matosinhos.pt.> Prensa y webs de informa-ción general. El gran periódico de Porto y del norte de Portugal, que

Favorecida por la declaración de su cas-co antiguo como Patrimonio Mundial en 1996, por ser la base de la que parten la mayoría de los cruceros por el Douro y por el gran número de conexiones internacionales del aeropuerto Sá Car-neiro, la capital del norte, eterna rival de Lisboa, se ha convertido en un destino turístico consolidado y en alza. La ciudad

constituye un todo funcional junto a su pujante área metropolitana, con la que se comunica a través de un moderno metro en superficie, que permite el acceso a varias localidades sin necesidad de usar el vehículo privado: entre ellas se cuentan Matosinhos, donde se sitúa el gran puerto atlántico de Leixões; Vila do Conde, Póvoa de Varzim y, al otro lado del río y complementando perfectamente el casco antiguo portuense con sus centenarias bodegas, Vila Nova de Gaia, privile-giado mirador al atardecer.Oporto, que ha tardado en crecer hacia el mar, debe su desarrollo al Douro, por el que llegaban antaño los barcos rabelos cargados de uva y barriles de vino. Cinco puentes lo cruzan, pero dos de ellos, el de Dona María Pía y el de Dom Luís (finales del siglo xix), son los más fotografiados por pertenecer a la escuela de Eiffel, aquella de la ingeniería del hierro que también parió la célebre torre parisina y tantos mercados. Los puentes son el emblema de la laboriosa y liberal urbe, que en su casco histórico rememora la antigua pujanza comercial en los muelles de A Ribeira, hoy emporio turístico con sus embarcaderos y restaurantes, desde el gran edificio de la Alfândega

Por qué visitar Oporto

Nova o en el palacio de la Bolsa, con sus salones neomoriscos.En un plano superior se conserva el maltrecho burgo medieval, en permanente proceso de rehabilitación, presidido por la Sé y con un buen número de palacios, iglesias y conventos, amén de callejuelas sombrías y fachadas pintorescas. Más alla, el Oporto burgués de principios del siglo xx se asoma a la ostentosa Avenida dos Aliados, presidida por la Câmara Municipal y en posesión de un notable con-junto de edificios modernistas y eclécticos, estilos que también están presentes en el resto del ensanche. Pero los reclamos no se acaban aquí: ahí está la torre dos Clérigos, icono predilecto del barroco firma-do por Nasoni; una red de museos con ofertas tan atractivas como la del Nacional Soares dos Reis, el Romántico o el de Arte Contempo-ráneo de Serralves; románticos jardines entre los que destaca el del Palácio de Cristal; sorprendentes edificios de arquitectura contem-poránea como la Casa da Música y otras piezas sueltas tales como la Librería Lello, una de las más hermosas del mundo; el decadente Café Majéstic, delicioso espacio del tardomodernismo; tiendas y ultramari-nos de otra época, vanguardistas centros comerciales... Oporto es un destino, en suma, capaz de seducir a cualquier viajero.En la ciudad se comen con deleite las tripas (callos), cuyo consumo está fundado en la historia de los descubrimientos, nada menos que a raíz de una expedición del infante D. Henrique que dejó en los mue-lles los despojos del ganado para llevarse a bordo la carne seca en salmuera. También el bacalao tiene sus recetas portuenses de culto: á Gomes de Sá, a Zé do Pipo… Pescado, marisco, arroces y repostería monástica completan una cocina regada por los excelentes vinos de la D.O. Douro, con los olorosos vinos de Oporto para la sobremesa.

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VISITA • OPORTO

OPORTO/ PORTO> Capital de región y distrito. 221.800 habitantes (área metropolitana, cerca de 1.200.000 habitantes).

Oporto o Porto, capital del norte de Portugal, vivió su Capitali-dad Europea de la Cultura (2001) en plena euforia constructiva. El barrio de la Ribeira, en el casco antiguo, declarado en 1986 Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, todavía está siendo rehabilitado. Monumentos emblemáticos de la historia urbana, hasta hace bien poco olvidados, también han sido restaurados, al tiempo que se apuesta por la arquitectura más novedosa.

INFO> Oficinas de Turismo. Rua Clube dos Fenianos, 25 (justo tras el Ayuntamiento, del lado izquierdo). Telf. 223 393 472/0. Horario: de noviembre a mayo, a diario de 9 h a 19 h; de junio a octubre, a diario

de 9 h a 20 h. www.portoturismo.pt, www.visitporto.travel.Terreiro da Sé (en el antiguo consis-torio, junto a la catedral). Con el mis-mo teléfono y horario de la anterior.Estación de tren de Campanhã (junto a las taquillas). Horario: en

Semana Santa y de junio a octubre, de 10 a 18 h.Praça da Ribeira. Horario: solo en agosto, de 12 a 19 h.Serralves (quiosco multimedia sin personal, pero con teléfono gratuito de contacto con la oficina central de turismo). Rua de D. João de Castro, 210. Horario: de octubre a mayo, de 10 a 19 h; de junio a septiembre, de lunes a viernes de 10 a 19 h, fines de semana hasta las 20 h.Aeropuerto Sá Carneiro. Telf. 229 420 496. http://portoenorte.pt. Horario: a diario, de 8 a 23,30 h., pero con puesto de turismo virtual las 24 h. Dependiente de la región de Turismo Porto e Norte.En Vila Nova de Gaia. Cais de Gaia. Telf. 223 756 216. Horario:

en invierno, de lunes a sábado de 10 h a 12.30 h y 13.30 h a 18 h; verano, con el mismo horario toda la semana. Av. Diogo Leite, 242 (cen-tro histórico). Telf. 223 773 080. Horario: de lunes a sábado de 10 h a 18 h. www.gaiaglobal.pt.En Matosinhos. Av. General Norton de Matos. Telf. 229 386 423. Hora-rio: lunes de 13 h a 19 h, de martes a sábado de 9.30 h a 19 h; domingo de 10 h a 13 h. Rua Hintze Ribeiro, 2-Leça da Palmeira. Telf. 229 965 387. Horario: lunes de 13 h a 19 h; de martes a sábado de 9.30 h a 19 h; cierra domingo. www.cm-matosinhos.pt.> Prensa y webs de informa-ción general. El gran periódico de Porto y del norte de Portugal, que

Favorecida por la declaración de su cas-co antiguo como Patrimonio Mundial en 1996, por ser la base de la que parten la mayoría de los cruceros por el Douro y por el gran número de conexiones internacionales del aeropuerto Sá Car-neiro, la capital del norte, eterna rival de Lisboa, se ha convertido en un destino turístico consolidado y en alza. La ciudad

constituye un todo funcional junto a su pujante área metropolitana, con la que se comunica a través de un moderno metro en superficie, que permite el acceso a varias localidades sin necesidad de usar el vehículo privado: entre ellas se cuentan Matosinhos, donde se sitúa el gran puerto atlántico de Leixões; Vila do Conde, Póvoa de Varzim y, al otro lado del río y complementando perfectamente el casco antiguo portuense con sus centenarias bodegas, Vila Nova de Gaia, privile-giado mirador al atardecer.Oporto, que ha tardado en crecer hacia el mar, debe su desarrollo al Douro, por el que llegaban antaño los barcos rabelos cargados de uva y barriles de vino. Cinco puentes lo cruzan, pero dos de ellos, el de Dona María Pía y el de Dom Luís (finales del siglo xix), son los más fotografiados por pertenecer a la escuela de Eiffel, aquella de la ingeniería del hierro que también parió la célebre torre parisina y tantos mercados. Los puentes son el emblema de la laboriosa y liberal urbe, que en su casco histórico rememora la antigua pujanza comercial en los muelles de A Ribeira, hoy emporio turístico con sus embarcaderos y restaurantes, desde el gran edificio de la Alfândega

Por qué visitar Oporto

Nova o en el palacio de la Bolsa, con sus salones neomoriscos.En un plano superior se conserva el maltrecho burgo medieval, en permanente proceso de rehabilitación, presidido por la Sé y con un buen número de palacios, iglesias y conventos, amén de callejuelas sombrías y fachadas pintorescas. Más alla, el Oporto burgués de principios del siglo xx se asoma a la ostentosa Avenida dos Aliados, presidida por la Câmara Municipal y en posesión de un notable con-junto de edificios modernistas y eclécticos, estilos que también están presentes en el resto del ensanche. Pero los reclamos no se acaban aquí: ahí está la torre dos Clérigos, icono predilecto del barroco firma-do por Nasoni; una red de museos con ofertas tan atractivas como la del Nacional Soares dos Reis, el Romántico o el de Arte Contempo-ráneo de Serralves; románticos jardines entre los que destaca el del Palácio de Cristal; sorprendentes edificios de arquitectura contem-poránea como la Casa da Música y otras piezas sueltas tales como la Librería Lello, una de las más hermosas del mundo; el decadente Café Majéstic, delicioso espacio del tardomodernismo; tiendas y ultramari-nos de otra época, vanguardistas centros comerciales... Oporto es un destino, en suma, capaz de seducir a cualquier viajero.En la ciudad se comen con deleite las tripas (callos), cuyo consumo está fundado en la historia de los descubrimientos, nada menos que a raíz de una expedición del infante D. Henrique que dejó en los mue-lles los despojos del ganado para llevarse a bordo la carne seca en salmuera. También el bacalao tiene sus recetas portuenses de culto: á Gomes de Sá, a Zé do Pipo… Pescado, marisco, arroces y repostería monástica completan una cocina regada por los excelentes vinos de la D.O. Douro, con los olorosos vinos de Oporto para la sobremesa.

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OPORTO, BRAGA Y COIMBRA

cuenta con una cumplida agenda cultural, es el Jornal de Notícias (www.jn.pt).Información general de todos los municipios del área metropolitana: www.amp.pt.Se puede consultar la agenda cultural y de eventos del área metropolitana de Porto en www.viva-porto.pt, www.portolazer.pt o http://iporto.amp.pt. En papel también se edita iPorto (Agenda Metropolitana de Cultura), que se reparte gratuitamente en ofi-cinas de turismo, centros culturales y negocios de hostelería. En el mismo sentido también pueden resultar úti-les las siguientes páginas web: www.casadamusica.com, www.serralves.pt o www.coliseudoporto.pt.

TRANSPORTESLa Porto Card permite obtener el acceso gratuito o con descuento a museos, tiendas, restaurantes, bode-gas, paseos en barco, etc. Existen va-rias modalidades y precios. Se puede adquirir en las oficinas de turismo, en algunos hoteles, el quiosco Bibatours (Praça da Liberdade, 123), la Pape-laria do Carmo (Rua do Carmo, 15) o en el FNAC de Santa Catarina, 73.La Tarjeta Andante (www.linhan-dante.com, 0,50 €) se utiliza úni-camente para el transporte público combinado (autobús, metro, tranvía y algunos trenes de cercanías), y la turística Andante Tour es de 24 h (6 €) y 72 h (15 €). Ambas están a la venta en los puestos de información de la STPC (autobuses urbanos) o en las taquillas o cajeros del metro> Autobuses interprovincia-les. Entre los servicios regionales o carreiras, y los servicios nacionales o expressos, existen actualmente más de 25 empresas y más de 10 estaciones de autobuses (algunas son paradas en la calle). > Estaciones de ferrocarril. Hay cuatro líneas de trenes de cercanías o suburbanos: Aveiro, Braga, Marco

(Douro) y Guimarães. Los trenes que prestan este servicio son modernos y cómodos, por lo que es una opción a tener en cuenta. Para viajar en los suburbanos existen diferentes tipos de billetes y bonos de 10 viajes. Para el trayecto entre las estaciones de Valongo, São Bento y Coimbrões también son válidas la Porto Card y la Tarjeta Andante.> Aeropuerto Sá Carneiro. Se sitúa en Pedras Rubras (Maia). A 11 km de Porto. Está comunicado con la ciudad por autobús y metro. También funcionan dos empresas de traslado a hoteles o al centro en microbuses: Airportshuttle (telf. 960 426 692) y Goin’Porto (telf. 937 599 089), www.ana-aeroportos.pt.> Cruceros por el Douro. Son varias las modalidades que se ofer-tan, desde las más sencillas (1 hora bajo los cinco puentes o paseo noc-turno con cena), hasta las más caras, de uno, dos y hasta 6 días en barco. El río Duero es navegable hasta España gracias a las esclusas que ayudan a salvar el desnivel existen-te. Hay un sinfín de empresas que ofrecen los cruceros, entre otras: Porto Tours, Torre Medieval. Calça-da D. Pedro Pitões, 15. Telf. 222 00 00 73; www.portotours.com. Rent Douro, Rua de São João, 89. Telf. 224 646 352. www.rentdouro.com. Rota do Douro. Av. Diogo Leite, 438-Vila Nova de Gaia. Telf. 223 759 042. www.rotadodouro.pt. > Autobuses urbanos (auto-carros). Funcionan 81 líneas diur-nas que llegan a Matosinhos, Vila Nova de Gaia y al aeropuerto, así como 11 líneas nocturnas (Rede da Madrugada), con inicio y término en la Avenida dos Aliados/ Praça da Liberdade. Se pueden adquirir en Centro de Mobilidade de la Estação de São Bento o en la Estaçao de Campanhã). Para usar los buses también son válidas la Porto Card y la Tarjeta Andante.

En palabras de Camões, Oporto era la “leal cidade, donde teve origem –como é fama– o nome eterno de Portugal”, cita que nos obliga recordar por un instante el Portus Cale romano. La en

tiempos modesta villa episcopal murada, alcanza un primer período de esplen dor con Dom João I, aquí esposado con Filipa de Lencaster para sellar la alianza luso-británica, y en los días de la expedición a Ceuta organizada en sus muelles por Dom Henrique o Navegante (1415). Arrebatado el comercio de Ultramar por Lisboa, encontraría su nueva fuente de riqueza en la producción vinícola, en gran medida organizada por firmas británicas. La influencia inglesa, aún patente en la arquitectura, se prolonga al romanticismo, movimiento en el que descuella la figura de Almeida Garrett. Oporto encabezó la revolución liberal aclamando al desembarcado Dom Pedro IV. Ya coronado, el rey constitucional donó su corazón a la ciudad que había resistido el asedio miguelista durante once meses. Al igual que Milán respecto de Roma, en Oporto reside el motor económico de un país que prima el gasto público en la capital; no en vano, el refrán ya reza que “Lisboa presume y Oporto trabaja”. Esto explica que la urbe abandere el hasta ahora frustrado movimiento autonomista.

Una ciudad antigua

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OPORTO, BRAGA Y COIMBRA

cuenta con una cumplida agenda cultural, es el Jornal de Notícias (www.jn.pt).Información general de todos los municipios del área metropolitana: www.amp.pt.Se puede consultar la agenda cultural y de eventos del área metropolitana de Porto en www.viva-porto.pt, www.portolazer.pt o http://iporto.amp.pt. En papel también se edita iPorto (Agenda Metropolitana de Cultura), que se reparte gratuitamente en ofi-cinas de turismo, centros culturales y negocios de hostelería. En el mismo sentido también pueden resultar úti-les las siguientes páginas web: www.casadamusica.com, www.serralves.pt o www.coliseudoporto.pt.

TRANSPORTESLa Porto Card permite obtener el acceso gratuito o con descuento a museos, tiendas, restaurantes, bode-gas, paseos en barco, etc. Existen va-rias modalidades y precios. Se puede adquirir en las oficinas de turismo, en algunos hoteles, el quiosco Bibatours (Praça da Liberdade, 123), la Pape-laria do Carmo (Rua do Carmo, 15) o en el FNAC de Santa Catarina, 73.La Tarjeta Andante (www.linhan-dante.com, 0,50 €) se utiliza úni-camente para el transporte público combinado (autobús, metro, tranvía y algunos trenes de cercanías), y la turística Andante Tour es de 24 h (6 €) y 72 h (15 €). Ambas están a la venta en los puestos de información de la STPC (autobuses urbanos) o en las taquillas o cajeros del metro> Autobuses interprovincia-les. Entre los servicios regionales o carreiras, y los servicios nacionales o expressos, existen actualmente más de 25 empresas y más de 10 estaciones de autobuses (algunas son paradas en la calle). > Estaciones de ferrocarril. Hay cuatro líneas de trenes de cercanías o suburbanos: Aveiro, Braga, Marco

(Douro) y Guimarães. Los trenes que prestan este servicio son modernos y cómodos, por lo que es una opción a tener en cuenta. Para viajar en los suburbanos existen diferentes tipos de billetes y bonos de 10 viajes. Para el trayecto entre las estaciones de Valongo, São Bento y Coimbrões también son válidas la Porto Card y la Tarjeta Andante.> Aeropuerto Sá Carneiro. Se sitúa en Pedras Rubras (Maia). A 11 km de Porto. Está comunicado con la ciudad por autobús y metro. También funcionan dos empresas de traslado a hoteles o al centro en microbuses: Airportshuttle (telf. 960 426 692) y Goin’Porto (telf. 937 599 089), www.ana-aeroportos.pt.> Cruceros por el Douro. Son varias las modalidades que se ofer-tan, desde las más sencillas (1 hora bajo los cinco puentes o paseo noc-turno con cena), hasta las más caras, de uno, dos y hasta 6 días en barco. El río Duero es navegable hasta España gracias a las esclusas que ayudan a salvar el desnivel existen-te. Hay un sinfín de empresas que ofrecen los cruceros, entre otras: Porto Tours, Torre Medieval. Calça-da D. Pedro Pitões, 15. Telf. 222 00 00 73; www.portotours.com. Rent Douro, Rua de São João, 89. Telf. 224 646 352. www.rentdouro.com. Rota do Douro. Av. Diogo Leite, 438-Vila Nova de Gaia. Telf. 223 759 042. www.rotadodouro.pt. > Autobuses urbanos (auto-carros). Funcionan 81 líneas diur-nas que llegan a Matosinhos, Vila Nova de Gaia y al aeropuerto, así como 11 líneas nocturnas (Rede da Madrugada), con inicio y término en la Avenida dos Aliados/ Praça da Liberdade. Se pueden adquirir en Centro de Mobilidade de la Estação de São Bento o en la Estaçao de Campanhã). Para usar los buses también son válidas la Porto Card y la Tarjeta Andante.

En palabras de Camões, Oporto era la “leal cidade, donde teve origem –como é fama– o nome eterno de Portugal”, cita que nos obliga recordar por un instante el Portus Cale romano. La en

tiempos modesta villa episcopal murada, alcanza un primer período de esplen dor con Dom João I, aquí esposado con Filipa de Lencaster para sellar la alianza luso-británica, y en los días de la expedición a Ceuta organizada en sus muelles por Dom Henrique o Navegante (1415). Arrebatado el comercio de Ultramar por Lisboa, encontraría su nueva fuente de riqueza en la producción vinícola, en gran medida organizada por firmas británicas. La influencia inglesa, aún patente en la arquitectura, se prolonga al romanticismo, movimiento en el que descuella la figura de Almeida Garrett. Oporto encabezó la revolución liberal aclamando al desembarcado Dom Pedro IV. Ya coronado, el rey constitucional donó su corazón a la ciudad que había resistido el asedio miguelista durante once meses. Al igual que Milán respecto de Roma, en Oporto reside el motor económico de un país que prima el gasto público en la capital; no en vano, el refrán ya reza que “Lisboa presume y Oporto trabaja”. Esto explica que la urbe abandere el hasta ahora frustrado movimiento autonomista.

Una ciudad antigua

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OPORTO, BRAGA Y COIMBRA VISITA • OPORTO

> Tranvía. La línea 1 (Infante-Passeio Alegre), operativa de 9.30 h a 18 h, sigue estando reservada al viejo eléctrico, que parte de la Rua do Infante (por detrás de la Iglesia de São Francisco). El billete se compra en el propio tranvía, siendo válidas las tarjetas Andante Tour y Porto Card; el billete comprado en el tran-vía cuesta 2,50 €. También discurren las líneas 18 (Carmo-Massarelos) y 22 (Carmo-Guindais-Batalha), ambas hasta las 19 h. Más informa-ción en el telf. 808 200 166; www.stcp.pt; www.itinerarium.net.> Metro. Es una forma cómoda y rápida de moverse por la ciudad, desde el aeropuerto y hasta las poblaciones de los alrededores (Gaia, Matosinhos, Maia, Vila do Conde, Póvoa de Varzim), aunque no llega a todos los lugares turísticos. A la vez ferrocarril y tranvía, conce-bido sin barreras y apto para per-sonas discapacitadas, cuenta con seis líneas denominadas con letras y colores. La línea más interesante, desde el punto de vista turístico, es la amarilla (línea D), que pasa sobre el tablero superior del puente Dom Luíz I, lo que nos permite disfrutar de una vista impresionante, sobre todo al anochecer. Para viajar en metro es necesaria la tarjeta recargable Andante, con diferentes precios y modalidades según las zonas que atravesemos. El metro funciona desde las 6 h a 1 h de la madrugada. Más información: telf. 808 205 060 (Línea Olá Metro), www.metrodo-porto.pt, www.linhandante.com. > Funicular dos Guindais. Para los que no quieran hacer ejer-cicio y perderse por las estrechas ruas de la Ribeira hay un moderno funicular, heredero del inaugurado en 1891, que en dos minutos salva la altura y distancia existente entre Ponte Luíz I y la Praça de Batalha. Se necesita la tarjeta Andante, o bien la Port Card.

> Barco. En la Rua do Ouro, al lado del Ponte da Arrábida (Lordelo do Ouro), se halla un pequeño embar-cadero en el que existe un servicio regular de barcas que atraviesan el río hasta Afurada, en Vila Nova de Gaia. La empresa que presta este servicio es la Sociedade dos Catraei-ros do Douro, con salidas cada quince minutos desde las 6 y hasta las 23 h.> Taxis. Se identifican rápida-mente por su techo de color verde, variando el color del vehículo del beige al negro. Conviene saber que sábados, domingos y festivos las tari-fas se incrementan un 20 % desde las 21 h a las 6 h de la madrugada. Si se sale de la ciudad pagando algún peaje de autopista, el cliente corre con el sobrecoste. Por el uso del maletero se aplica un recargo, e igualmente por el servicio de radio-taxi, siendo más barato tomar el vehículo en una parada o en la calle. Raditaxis. Telf. 969 661 666/7.> Bicicletas. Circular en bicicleta por la ciudad no es algo muy reco-mendable debido a las pronunciadas cuestas y al intenso tráfico, pero hay zonas seguras, por ejemplo la ciclovía que va desde la Ribeira hasta las pla-yas de la foz, de varios kilómetros. Se pueden alquilar en Fold n’visit (Rua do Alferes Malheiro, 139-zona metro Trindade, telf. 220 997 106, 915 316 999, www.foldnvisit.com), Porto Rent a Bike (Av. Gustavo Eiffel, junto al funicular de Guindais, telf. 912 562 190, www.portorentabike.com) o en Bluedragon (Av. Gustavo Eiffel, telf. 222 022 375, www.bluedragon.pt). Los precios rondan entre 10 € me-dio día y13 € por día, bajando si se alquilan más días. Estas empresas organizan rutas guiadas en bici. > Aparcamiento. En el poco transitable centro abundan los aparcamientos públicos y privados, algunos con tarifas económicas, en descuentos si al pago se hace por adelantado (desde 6 € las 24 h).

VISITA ■ Un lento pero continuado programa de restauración va dando sus frutos alrededor de la catedral, en la Ribeira y Miragaia. El centro constituye todo un museo de arquitectura de principios del siglo xx. La torre dos Clérigos, a la manera de un emblemático faro, preside un sector dominado por voluminosos edificios neoclásicos. Al este, los barrios de Bonfim y Campanhã cuentan con monumentos tan notables como el puente de Dona Maria Pía o el palacio do Freixo. En Boavista, con su área residencial y ajardinada hacia el mar, resulta obligada la visita a la Fundación Serralves. La Foz, por su parte, pasó de zona defensiva a zona de paseo.Vila Nova de Gaia, que supera en número de residentes a su vecina del norte, posee un mirador privile-giado en el monasterio da Serra do Pilar. Las bodegas embotellan los preciados vinos olorosos de merecida fama internacional.A ambos lados del puerto exterior de Leixões tienen asiento los núcleos de Leça da Palmeira, con su barrio antiguo y la célebre Casa de Chá de Boavista de Álvaro Siza Vieira, y Matosinhos, cabecera municipal, famosa por su santuario del Bom Jesus, dotada de los servicios propios de una ciudad.

PERDERSE POR EL BARRIO ANTIGUOCualquier relato sobre el Porto me-dieval debe comenzar en la Sé. Su terreiro, en el que se alzan la alme-nada torre da Calçada de Dom Pedro Pitões, un pelourinho neo-pombalino de columna salomónica y el monumento ecuestre a Vímara Pérez (el Cid local), tanto vale para admirar el puente de Dom Luís I y Gaia como para constatar las mejoras poco a poco introducidas en el mal-trecho casco histórico de angostas ruas gremiales.Iniciada a mediados del siglo xii, la catedral (visita de abril a junio y en octubre, de 9 h a 12.30 h y 14.30 h a 19 h; domingos de 9 h a12.30 h y de 14.30 h a 19 h; de noviembre a marzo, de 9 h a 12.30 h y 14.30 h a18 h) no sería concluida hasta bien entrado el siglo xiii, dominando el gótico al románico en una filiación mixta de las escuelas de Coimbra y el Limousín.Con aspecto externo de fortaleza, su fachada presenta un rosetón origi-nal y reformas barrocas en torres y portada (1772); al norte fue añadido un elegante porche atribuido, como

casi todo en Porto, a Nasoni (1736). Si avanzamos a través de sus es-trechas y oscuras naves, y husmea-mos en sus capillas, descubriremos obras de arte como la imagen de Nossa Senhora de Vandoma (siglo xiv) o, sostenida por cuatro leones, la tumba gótica de João Gordo, que como contador de Dom Dinis y juez de la mar debió hacer honor a su apellido. En el crucero se halla el enterramiento de Maria Pacheco, mujer del comunero Padilla hasta aquí huida, disfrazada de labradora, y por siempre exiliada.La capilla mayor fue reformada en 1610 por el francés Claude La-prade, y presenta frescos del polifa-cético Nasoni. A la misma centuria pertenecen coro, órganos, agua-benditeros y barandas, así como el riquísimo altar, en plata repujada, de la capilla del Sacramento (1651). Por otro lado, el claustro (visita de abril a junio y en octubre, a diario de 9 h a 12.15 h y de 14.30 h a18.30 h, y domingos o festivos solo tardes; de julio a septiembre, de 9 h a18.30 h, y domingos de 14.30 h a 18.30 h; de noviembre a marzo, de 9 h a 12.15 h y 14.30 h a 17.30 h, domingos so-lo tardes) data de 1385, y presenta

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OPORTO, BRAGA Y COIMBRA VISITA • OPORTO

> Tranvía. La línea 1 (Infante-Passeio Alegre), operativa de 9.30 h a 18 h, sigue estando reservada al viejo eléctrico, que parte de la Rua do Infante (por detrás de la Iglesia de São Francisco). El billete se compra en el propio tranvía, siendo válidas las tarjetas Andante Tour y Porto Card; el billete comprado en el tran-vía cuesta 2,50 €. También discurren las líneas 18 (Carmo-Massarelos) y 22 (Carmo-Guindais-Batalha), ambas hasta las 19 h. Más informa-ción en el telf. 808 200 166; www.stcp.pt; www.itinerarium.net.> Metro. Es una forma cómoda y rápida de moverse por la ciudad, desde el aeropuerto y hasta las poblaciones de los alrededores (Gaia, Matosinhos, Maia, Vila do Conde, Póvoa de Varzim), aunque no llega a todos los lugares turísticos. A la vez ferrocarril y tranvía, conce-bido sin barreras y apto para per-sonas discapacitadas, cuenta con seis líneas denominadas con letras y colores. La línea más interesante, desde el punto de vista turístico, es la amarilla (línea D), que pasa sobre el tablero superior del puente Dom Luíz I, lo que nos permite disfrutar de una vista impresionante, sobre todo al anochecer. Para viajar en metro es necesaria la tarjeta recargable Andante, con diferentes precios y modalidades según las zonas que atravesemos. El metro funciona desde las 6 h a 1 h de la madrugada. Más información: telf. 808 205 060 (Línea Olá Metro), www.metrodo-porto.pt, www.linhandante.com. > Funicular dos Guindais. Para los que no quieran hacer ejer-cicio y perderse por las estrechas ruas de la Ribeira hay un moderno funicular, heredero del inaugurado en 1891, que en dos minutos salva la altura y distancia existente entre Ponte Luíz I y la Praça de Batalha. Se necesita la tarjeta Andante, o bien la Port Card.

> Barco. En la Rua do Ouro, al lado del Ponte da Arrábida (Lordelo do Ouro), se halla un pequeño embar-cadero en el que existe un servicio regular de barcas que atraviesan el río hasta Afurada, en Vila Nova de Gaia. La empresa que presta este servicio es la Sociedade dos Catraei-ros do Douro, con salidas cada quince minutos desde las 6 y hasta las 23 h.> Taxis. Se identifican rápida-mente por su techo de color verde, variando el color del vehículo del beige al negro. Conviene saber que sábados, domingos y festivos las tari-fas se incrementan un 20 % desde las 21 h a las 6 h de la madrugada. Si se sale de la ciudad pagando algún peaje de autopista, el cliente corre con el sobrecoste. Por el uso del maletero se aplica un recargo, e igualmente por el servicio de radio-taxi, siendo más barato tomar el vehículo en una parada o en la calle. Raditaxis. Telf. 969 661 666/7.> Bicicletas. Circular en bicicleta por la ciudad no es algo muy reco-mendable debido a las pronunciadas cuestas y al intenso tráfico, pero hay zonas seguras, por ejemplo la ciclovía que va desde la Ribeira hasta las pla-yas de la foz, de varios kilómetros. Se pueden alquilar en Fold n’visit (Rua do Alferes Malheiro, 139-zona metro Trindade, telf. 220 997 106, 915 316 999, www.foldnvisit.com), Porto Rent a Bike (Av. Gustavo Eiffel, junto al funicular de Guindais, telf. 912 562 190, www.portorentabike.com) o en Bluedragon (Av. Gustavo Eiffel, telf. 222 022 375, www.bluedragon.pt). Los precios rondan entre 10 € me-dio día y13 € por día, bajando si se alquilan más días. Estas empresas organizan rutas guiadas en bici. > Aparcamiento. En el poco transitable centro abundan los aparcamientos públicos y privados, algunos con tarifas económicas, en descuentos si al pago se hace por adelantado (desde 6 € las 24 h).

VISITA ■ Un lento pero continuado programa de restauración va dando sus frutos alrededor de la catedral, en la Ribeira y Miragaia. El centro constituye todo un museo de arquitectura de principios del siglo xx. La torre dos Clérigos, a la manera de un emblemático faro, preside un sector dominado por voluminosos edificios neoclásicos. Al este, los barrios de Bonfim y Campanhã cuentan con monumentos tan notables como el puente de Dona Maria Pía o el palacio do Freixo. En Boavista, con su área residencial y ajardinada hacia el mar, resulta obligada la visita a la Fundación Serralves. La Foz, por su parte, pasó de zona defensiva a zona de paseo.Vila Nova de Gaia, que supera en número de residentes a su vecina del norte, posee un mirador privile-giado en el monasterio da Serra do Pilar. Las bodegas embotellan los preciados vinos olorosos de merecida fama internacional.A ambos lados del puerto exterior de Leixões tienen asiento los núcleos de Leça da Palmeira, con su barrio antiguo y la célebre Casa de Chá de Boavista de Álvaro Siza Vieira, y Matosinhos, cabecera municipal, famosa por su santuario del Bom Jesus, dotada de los servicios propios de una ciudad.

PERDERSE POR EL BARRIO ANTIGUOCualquier relato sobre el Porto me-dieval debe comenzar en la Sé. Su terreiro, en el que se alzan la alme-nada torre da Calçada de Dom Pedro Pitões, un pelourinho neo-pombalino de columna salomónica y el monumento ecuestre a Vímara Pérez (el Cid local), tanto vale para admirar el puente de Dom Luís I y Gaia como para constatar las mejoras poco a poco introducidas en el mal-trecho casco histórico de angostas ruas gremiales.Iniciada a mediados del siglo xii, la catedral (visita de abril a junio y en octubre, de 9 h a 12.30 h y 14.30 h a 19 h; domingos de 9 h a12.30 h y de 14.30 h a 19 h; de noviembre a marzo, de 9 h a 12.30 h y 14.30 h a18 h) no sería concluida hasta bien entrado el siglo xiii, dominando el gótico al románico en una filiación mixta de las escuelas de Coimbra y el Limousín.Con aspecto externo de fortaleza, su fachada presenta un rosetón origi-nal y reformas barrocas en torres y portada (1772); al norte fue añadido un elegante porche atribuido, como

casi todo en Porto, a Nasoni (1736). Si avanzamos a través de sus es-trechas y oscuras naves, y husmea-mos en sus capillas, descubriremos obras de arte como la imagen de Nossa Senhora de Vandoma (siglo xiv) o, sostenida por cuatro leones, la tumba gótica de João Gordo, que como contador de Dom Dinis y juez de la mar debió hacer honor a su apellido. En el crucero se halla el enterramiento de Maria Pacheco, mujer del comunero Padilla hasta aquí huida, disfrazada de labradora, y por siempre exiliada.La capilla mayor fue reformada en 1610 por el francés Claude La-prade, y presenta frescos del polifa-cético Nasoni. A la misma centuria pertenecen coro, órganos, agua-benditeros y barandas, así como el riquísimo altar, en plata repujada, de la capilla del Sacramento (1651). Por otro lado, el claustro (visita de abril a junio y en octubre, a diario de 9 h a 12.15 h y de 14.30 h a18.30 h, y domingos o festivos solo tardes; de julio a septiembre, de 9 h a18.30 h, y domingos de 14.30 h a 18.30 h; de noviembre a marzo, de 9 h a 12.15 h y 14.30 h a 17.30 h, domingos so-lo tardes) data de 1385, y presenta

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HISTORIA • EL SIGLO XVI

LA ÉPOCA DE LOS DESCUBRIMIENTOSEs frecuente considerar el año de 1415, conquista de la plaza de Ceu-ta por el rey Dom Henrique el Na-vegante, como el principio de una época que se prolongó a lo largo de más de una centuria y media, durante la cual Portugal extendió su dominio por el mundo, conclu-yendo en 1599, fundación de San Salvador de Bahía.En palabras de Juan Brandão du-rante ese tiempo “...el puerto de Lis-boa era el mejor de toda la costa del mar descubierto y que a él acuden y entran cada año mil quinientas naos y carabelas de todas las partes de la cristiandad, y esto año tras año”.Son muchas las causas esgrimidas y las respuestas aducidas por los historiadores para explicar esta gesta. En palabras de José Her-mano Saraiva: “La amplitud de la acción ejercida por los portugueses en una enorme parte del mundo en-tre los siglos xv y xx es sorprenden-te. Puede hablarse de una enorme epopeya colectiva, sin temor a exa-gerar el uso de las palabras. La his-toria del mundo no puede escribirse sin hacer numerosas referencias a lo que hizo un pequeño pueblo de un país pobre de los confines de Europa. ¿Cómo fue posible que un pueblo tan pequeño hiciera tanto?”.Entre las causas apuntadas están la situación geográfica, la despro-porción entre el crecimiento de-mográfico y los recursos internos, la experiencia marinera de las po-blaciones del litoral, una ciencia náutica muy desarrollada, el creci-miento de la burguesía, las accio-nes personales como las del rey Henrique, etc. Pero ninguna agota la respuesta. Por tanto, quedémo-

nos con la idea de que la expan-sión acaecida en esa época era la solución a las contradicciones de la vida colectiva nacional, un hito que ponía fin a una época de con-tinuas guerras civiles y aunaba una idea nacional común. Además de que se daban las condiciones y, por ende, todas las instituciones y los estamentos sociales convergían en una solución común a sus diferen-tes expectativas. Para el pueblo, la oportunidad de emigrar y mejorar de vida, liberándose de su estado de opresión; para los clérigos y no-bles, una forma de servir a Dios y al rey, mereciendo sus recompensas; para el rey, una forma de adquirir prestigio, mantener ocupados a los siempre intrigantes nobles y, cómo no, una importante fuente de ingresos.

LOS DESCUBRIDORESComo se ha dicho, la tradición de los reyes navegantes fue inaugura-da por Dom Henrique en 1415. El monarca había residido en Lagos, que, junto a Lisboa, encabezaba el desarrollo de la cartografía y la as-tronomía, influyendo en la ciencia y la técnica de su tiempo.Desde esta fecha los barcos portu-gueses comienzan a viajar con re-gularidad a Madeira. En 1427 Dio-go Silves descubre el archipiélago de las Azores. En 1434 Gil Eanes logra pasar por primera vez el mítico cabo Borjador. Alfonso Gonçalves desembarca en Pedra de Galé.El rey Dom Duarte publica su Libro de Consejos –un referente en la época– donde expone sus conoci-mientos de astronomía. A mediados del siglo xv, Nuno Tristão utiliza por primera vez la carabela y dirige las expediciones a Cabo Blanco y al río Senegal.

En esa misma época Dinis Dias su-pera el cabo Verde y Álvaro Fernan-des desembarca en la ensenada de Varela, en Guinea Bissau. En 1471 João de Santarém y Pedro Escobar llegan a Santo Tomé.El rey Alfonso V firma con Espa-ña el Tratado de Alcaçovas, por el que Madeira, Azores, Cabo Verde y Guinea Bissau pertenecen a Portu-gal y Canarias a España. La costa occidental de África es conquistada por Diego Cão. En 1488 Bartolo-mé Dias dobla el cabo de Buena Esperanza. En 1494 los Reyes Ca-tólicos y Juan II firman el Tratado de Tordesillas, por el cual los dos estados de la península se reparten el Nuevo Mundo.Pocos años después, bajo el rei-nado de Manuel I, Vasco de Gama parte hacia a la India, donde llega a Calcuta en 1498. Este viaje abre definitivamente el camino de Eu-ropa hacia el continente asiático. Se crean las colonias de Goa, Ga-mão y Diu, que son pobladas, en los siglos siguientes, por miles de portugueses.Pedro Álvares de Cabral llega a Brasil en 1500 y en 1513 Jorge Álvares desembarca en China.

UN CRUCE DE CULTURASLos Descubrimientos tuvieron con-secuencias económicas y políticas de consideración. Pero no fueron menores los efectos culturales y de intercomunicación de Europa con los demás continentes.Desde el Atlántico hasta el Pacífico, los portugueses dejaron la impronta de su cultura: su idioma, su religión, su arte y su ciencia; introdujeron el comercio e intercambiaron su cultura con la de esos pueblos. Por todo Portugal pueden verse las nuevas artes nacidas del cruce de civilizaciones: porcelanas chinas decoradas según los cánones eu-ropeos, muebles indo-portugueses,

biombos japoneses decorados con motivos lusos, etc.Los portugueses trajeron hasta Eu-ropa nuevas ideas, especias, pie-dras preciosas y maderas exóticas. Desarrollaron nuevas tendencias artísticas y estilos. Así nació en Portugal la decoración manuelina, reflejo de esa expansión marítima y del intercambio cultural.

EL SIGLO XVIEL ESTILO MANUELINOEl estilo manuelino marca la tran-sición del gótico al Renacimiento. El manuelino recibe este nombre porque se desarrolla durante el reinado de Manuel I (1490-1520), en la época de mayor auge de las expediciones marítimas de ultramar y es el reflejo de aquellos gloriosos días y del encuentro con nuevas culturas.El manuelino abarca desde la arqui-tectura religiosa, de la que el mejor ejemplo lo constituye el gran mo-nasterio de los Jerónimos en Lis-boa, hasta la arquitectura militar, como aprecia en la cercana torre de Belém, con sus ornamentaciones civiles. Está considerado un estilo único en el arte portugués. Uno de los ejemplos más hermosos es la famosa ventana del convento del Cristo de Tomar.Las catedrales continúan teniendo una planta gótica, pero la decora-ción se hace más suntuosa y evoca el mundo náutico por sus detalles de grandes encordados, que re-cuerdan las maromas marineras, estrellas de cuatro puntas, pilares que se retuercen en espiral, grue-sas nervaduras, esferas armilares, conchas, extrañas formas acuáti-cas, capullos de adormidera, perlas o anclas, etc.Los elementos orientales también abundan, creando una gran sensa-ción de exotismo que trasciende la

UN POCO DE HISTORIA

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HISTORIA • EL SIGLO XVI

LA ÉPOCA DE LOS DESCUBRIMIENTOSEs frecuente considerar el año de 1415, conquista de la plaza de Ceu-ta por el rey Dom Henrique el Na-vegante, como el principio de una época que se prolongó a lo largo de más de una centuria y media, durante la cual Portugal extendió su dominio por el mundo, conclu-yendo en 1599, fundación de San Salvador de Bahía.En palabras de Juan Brandão du-rante ese tiempo “...el puerto de Lis-boa era el mejor de toda la costa del mar descubierto y que a él acuden y entran cada año mil quinientas naos y carabelas de todas las partes de la cristiandad, y esto año tras año”.Son muchas las causas esgrimidas y las respuestas aducidas por los historiadores para explicar esta gesta. En palabras de José Her-mano Saraiva: “La amplitud de la acción ejercida por los portugueses en una enorme parte del mundo en-tre los siglos xv y xx es sorprenden-te. Puede hablarse de una enorme epopeya colectiva, sin temor a exa-gerar el uso de las palabras. La his-toria del mundo no puede escribirse sin hacer numerosas referencias a lo que hizo un pequeño pueblo de un país pobre de los confines de Europa. ¿Cómo fue posible que un pueblo tan pequeño hiciera tanto?”.Entre las causas apuntadas están la situación geográfica, la despro-porción entre el crecimiento de-mográfico y los recursos internos, la experiencia marinera de las po-blaciones del litoral, una ciencia náutica muy desarrollada, el creci-miento de la burguesía, las accio-nes personales como las del rey Henrique, etc. Pero ninguna agota la respuesta. Por tanto, quedémo-

nos con la idea de que la expan-sión acaecida en esa época era la solución a las contradicciones de la vida colectiva nacional, un hito que ponía fin a una época de con-tinuas guerras civiles y aunaba una idea nacional común. Además de que se daban las condiciones y, por ende, todas las instituciones y los estamentos sociales convergían en una solución común a sus diferen-tes expectativas. Para el pueblo, la oportunidad de emigrar y mejorar de vida, liberándose de su estado de opresión; para los clérigos y no-bles, una forma de servir a Dios y al rey, mereciendo sus recompensas; para el rey, una forma de adquirir prestigio, mantener ocupados a los siempre intrigantes nobles y, cómo no, una importante fuente de ingresos.

LOS DESCUBRIDORESComo se ha dicho, la tradición de los reyes navegantes fue inaugura-da por Dom Henrique en 1415. El monarca había residido en Lagos, que, junto a Lisboa, encabezaba el desarrollo de la cartografía y la as-tronomía, influyendo en la ciencia y la técnica de su tiempo.Desde esta fecha los barcos portu-gueses comienzan a viajar con re-gularidad a Madeira. En 1427 Dio-go Silves descubre el archipiélago de las Azores. En 1434 Gil Eanes logra pasar por primera vez el mítico cabo Borjador. Alfonso Gonçalves desembarca en Pedra de Galé.El rey Dom Duarte publica su Libro de Consejos –un referente en la época– donde expone sus conoci-mientos de astronomía. A mediados del siglo xv, Nuno Tristão utiliza por primera vez la carabela y dirige las expediciones a Cabo Blanco y al río Senegal.

En esa misma época Dinis Dias su-pera el cabo Verde y Álvaro Fernan-des desembarca en la ensenada de Varela, en Guinea Bissau. En 1471 João de Santarém y Pedro Escobar llegan a Santo Tomé.El rey Alfonso V firma con Espa-ña el Tratado de Alcaçovas, por el que Madeira, Azores, Cabo Verde y Guinea Bissau pertenecen a Portu-gal y Canarias a España. La costa occidental de África es conquistada por Diego Cão. En 1488 Bartolo-mé Dias dobla el cabo de Buena Esperanza. En 1494 los Reyes Ca-tólicos y Juan II firman el Tratado de Tordesillas, por el cual los dos estados de la península se reparten el Nuevo Mundo.Pocos años después, bajo el rei-nado de Manuel I, Vasco de Gama parte hacia a la India, donde llega a Calcuta en 1498. Este viaje abre definitivamente el camino de Eu-ropa hacia el continente asiático. Se crean las colonias de Goa, Ga-mão y Diu, que son pobladas, en los siglos siguientes, por miles de portugueses.Pedro Álvares de Cabral llega a Brasil en 1500 y en 1513 Jorge Álvares desembarca en China.

UN CRUCE DE CULTURASLos Descubrimientos tuvieron con-secuencias económicas y políticas de consideración. Pero no fueron menores los efectos culturales y de intercomunicación de Europa con los demás continentes.Desde el Atlántico hasta el Pacífico, los portugueses dejaron la impronta de su cultura: su idioma, su religión, su arte y su ciencia; introdujeron el comercio e intercambiaron su cultura con la de esos pueblos. Por todo Portugal pueden verse las nuevas artes nacidas del cruce de civilizaciones: porcelanas chinas decoradas según los cánones eu-ropeos, muebles indo-portugueses,

biombos japoneses decorados con motivos lusos, etc.Los portugueses trajeron hasta Eu-ropa nuevas ideas, especias, pie-dras preciosas y maderas exóticas. Desarrollaron nuevas tendencias artísticas y estilos. Así nació en Portugal la decoración manuelina, reflejo de esa expansión marítima y del intercambio cultural.

EL SIGLO XVIEL ESTILO MANUELINOEl estilo manuelino marca la tran-sición del gótico al Renacimiento. El manuelino recibe este nombre porque se desarrolla durante el reinado de Manuel I (1490-1520), en la época de mayor auge de las expediciones marítimas de ultramar y es el reflejo de aquellos gloriosos días y del encuentro con nuevas culturas.El manuelino abarca desde la arqui-tectura religiosa, de la que el mejor ejemplo lo constituye el gran mo-nasterio de los Jerónimos en Lis-boa, hasta la arquitectura militar, como aprecia en la cercana torre de Belém, con sus ornamentaciones civiles. Está considerado un estilo único en el arte portugués. Uno de los ejemplos más hermosos es la famosa ventana del convento del Cristo de Tomar.Las catedrales continúan teniendo una planta gótica, pero la decora-ción se hace más suntuosa y evoca el mundo náutico por sus detalles de grandes encordados, que re-cuerdan las maromas marineras, estrellas de cuatro puntas, pilares que se retuercen en espiral, grue-sas nervaduras, esferas armilares, conchas, extrañas formas acuáti-cas, capullos de adormidera, perlas o anclas, etc.Los elementos orientales también abundan, creando una gran sensa-ción de exotismo que trasciende la

UN POCO DE HISTORIA