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OCUPACIÓN Y ESTRUCTURACIÓN DE LA COSSETANIA ORIENTAL (TARRAGONA) DE ÉPOCA IBÉRICA AL BAJO IMPERIO POR JOSEP GUITART*, JOSEP MARIA PALET**, MARTA PREVOSTI**, CARME RUESTES* * Departament de Ciències de l’Antiguitat i de l’Edat Mitjana. Edifici B. Universidad Autónoma de Barcelona ** Institut Català d’Arqueologia Clàssica * 08193 Bellaterra, Cerdanyola del Vallès, Barcelona. E-mail: [email protected]; [email protected] ** Pl. d’en Rovellat s/n, 43003 Tarragona. E-mail: jpalet@ icac.net; [email protected] RESUMEN Valoradas las potencialidades de las metodologías SIG para el estudio arqueológico del territorio, este sistema se consi- deró la herramienta adecuada para desarrollar el proyecto ti- tulado, Estudio del Paisaje Antiguo de la Cossetania Orien- tal, promovido por el Institut d’Estudis Catalans y financiado por AUCAT. El área de estudio se centró básicamente en la comarca del Baix Penedès (Tarragona), un territorio localizado entre Barcino (Barcelona) y Tarraco (Tarragona), área que en general había sido poco estudiada arqueológicamente. El pro- yecto planteó el estudio arqueológico del territorio y su diná- mica evolutiva entre época ibérica y tardoantigua, es decir, entre los siglos V a. C. y VI d. C. La aplicación de un SIG fue fundamental para el estudio de los patrones de asentamiento. Se elaboró una base de da- tos Access de yacimientos a partir de una revisión documen- tal y bibliográfica, y de prospecciones extensivas e intensivas. Dicha base se integró en un SIG ArcView para realizar una secuencia cronológica de mapas de distribución de yacimientos simbolizados según su tipología. Con intención de obtener una ayuda gráfica visual para analizar la distribución del pobla- miento, se calcularon Polígonos de Thiessen para yacimien- tos de un mismo período teniendo en cuenta su tipología y posibles relaciones jerárquicas. Así mismo, con ArcInfo, se efectuaron análisis de visibilidad y áreas de explotación del territorio a partir de yacimientos relevantes, que han resulta- do clave para analizar la organización del territorio. Los resultados permitieron caracterizar las dinámicas de ocupación del territorio durante el período cronológico ana- lizado. Caben destacar los cambios en los patrones de asen- tamiento al inicio de la romanización, y la consolidación de las formas romanas de ocupación del territorio a partir de época cesariana y augustal con la implantación de una centuriación y del sistema de la villa romana. En época tardoantigua se detecta un nuevo proceso de cambio en los patrones de asen- tamiento. SUMMARY The potentiality of GIS methodologies were considered in order to develop the research project intituled, Study of the Ancient Landscape of the Oriental Cossetania, promoted by the Institut d’Estudis Catalans and supported by AUCAT. The area of study was located in the Baix Penedès (Tarragona), a territory located between Barcino (Barcelona) and Tarraco (Tarragona). This area had not been the object of many archae- ological researches, specially the inland sector. The project focuses on the archaeological analysis of the territory and its dynamics of change from Iberian to Late Antiquity periods (V- IV B.C. - VI A.D.). SIG research was very useful for settlement analysis. A Data-Base for sites was elaborated in Access. Landscape data from extensive field walking, surveys, bibliographical research and artefact analysis were integrated in a SIG ArcView. A sequence of chronological and typological site maps was easily obtained. In order to analyze settlement distribution Thiessen polygons were calculated for the same periods and typologies. Moreover, visibility and site catchment’s analysis were calcu- lated for the main sites. The results allow us to characterize landscape dynamics and land-use during the period analyzed. Important changes were detected in settlement patterns and distribution in the beginning of Romanization (2nd-1st centuries BC). Neverthe- less, Roman landscape based on villa-system and centuriated territorial organization seems to be established from Caesar- ean and August times, while Late Antiquity is characterized by important changes in settlement patterns and human im- pact. PALABRAS CLAVE: protohistoria, tardoantigüedad, Baix Pe- nedès, Access, ArcView, ArcInfo, análisis de visibilidad, análisis de explotación del territorio, AUCAT, Institut d´Estudis Catalans. KEY WORDS: protohistory, late antiquity, Baix Penedès, Ac- cess, ArcView, ArcInfo, viewshed analysis, site catchment analysis, AUCAT, Institut d´Estudis Catalans. 1. INTRODUCCIÓN La construcción de la autopista Pau Casals, de Sitges al Vendrell, entre las comarcas del Garraf y del Baix Penedès, por parte de la empresa AUCAT en- tre 1996 y 1997 motivó un conjunto de intervencio- nes arqueológicas en distintos yacimientos (Morer, Rigo, Barrasetas, 1997; Morer, Rigo 2003a; Morer, Rigo 2003b). Este tipo de obras públicas de gran

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OCUPACIÓN Y ESTRUCTURACIÓN DE LA COSSETANIAORIENTAL (TARRAGONA) DE ÉPOCA IBÉRICA

AL BAJO IMPERIO

POR

JOSEP GUITART*, JOSEP MARIA PALET**, MARTA PREVOSTI**, CARME RUESTES** Departament de Ciències de l’Antiguitat i de l’Edat Mitjana. Edifici B. Universidad Autónoma de Barcelona

** Institut Català d’Arqueologia Clàssica

* 08193 Bellaterra, Cerdanyola del Vallès, Barcelona.E-mail: [email protected]; [email protected]

** Pl. d’en Rovellat s/n, 43003 Tarragona. E-mail: [email protected]; [email protected]

RESUMEN

Valoradas las potencialidades de las metodologías SIG parael estudio arqueológico del territorio, este sistema se consi-deró la herramienta adecuada para desarrollar el proyecto ti-tulado, Estudio del Paisaje Antiguo de la Cossetania Orien-tal, promovido por el Institut d’Estudis Catalans y financiadopor AUCAT. El área de estudio se centró básicamente en lacomarca del Baix Penedès (Tarragona), un territorio localizadoentre Barcino (Barcelona) y Tarraco (Tarragona), área que engeneral había sido poco estudiada arqueológicamente. El pro-yecto planteó el estudio arqueológico del territorio y su diná-mica evolutiva entre época ibérica y tardoantigua, es decir, entrelos siglos V a. C. y VI d. C.

La aplicación de un SIG fue fundamental para el estudiode los patrones de asentamiento. Se elaboró una base de da-tos Access de yacimientos a partir de una revisión documen-tal y bibliográfica, y de prospecciones extensivas e intensivas.Dicha base se integró en un SIG ArcView para realizar unasecuencia cronológica de mapas de distribución de yacimientossimbolizados según su tipología. Con intención de obtener unaayuda gráfica visual para analizar la distribución del pobla-miento, se calcularon Polígonos de Thiessen para yacimien-tos de un mismo período teniendo en cuenta su tipología yposibles relaciones jerárquicas. Así mismo, con ArcInfo, seefectuaron análisis de visibilidad y áreas de explotación delterritorio a partir de yacimientos relevantes, que han resulta-do clave para analizar la organización del territorio.

Los resultados permitieron caracterizar las dinámicas deocupación del territorio durante el período cronológico ana-lizado. Caben destacar los cambios en los patrones de asen-tamiento al inicio de la romanización, y la consolidación delas formas romanas de ocupación del territorio a partir de épocacesariana y augustal con la implantación de una centuriacióny del sistema de la villa romana. En época tardoantigua sedetecta un nuevo proceso de cambio en los patrones de asen-tamiento.

SUMMARY

The potentiality of GIS methodologies were considered inorder to develop the research project intituled, Study of theAncient Landscape of the Oriental Cossetania, promoted by

the Institut d’Estudis Catalans and supported by AUCAT. Thearea of study was located in the Baix Penedès (Tarragona), aterritory located between Barcino (Barcelona) and Tarraco(Tarragona). This area had not been the object of many archae-ological researches, specially the inland sector. The projectfocuses on the archaeological analysis of the territory and itsdynamics of change from Iberian to Late Antiquity periods (V-IV B.C. - VI A.D.).

SIG research was very useful for settlement analysis. AData-Base for sites was elaborated in Access. Landscape datafrom extensive field walking, surveys, bibliographical researchand artefact analysis were integrated in a SIG ArcView. Asequence of chronological and typological site maps was easilyobtained. In order to analyze settlement distribution Thiessenpolygons were calculated for the same periods and typologies.Moreover, visibility and site catchment’s analysis were calcu-lated for the main sites.

The results allow us to characterize landscape dynamicsand land-use during the period analyzed. Important changeswere detected in settlement patterns and distribution in thebeginning of Romanization (2nd-1st centuries BC). Neverthe-less, Roman landscape based on villa-system and centuriatedterritorial organization seems to be established from Caesar-ean and August times, while Late Antiquity is characterizedby important changes in settlement patterns and human im-pact.

PALABRAS CLAVE: protohistoria, tardoantigüedad, Baix Pe-nedès, Access, ArcView, ArcInfo, análisis de visibilidad,análisis de explotación del territorio, AUCAT, Institutd´Estudis Catalans.

KEY WORDS: protohistory, late antiquity, Baix Penedès, Ac-cess, ArcView, ArcInfo, viewshed analysis, site catchmentanalysis, AUCAT, Institut d´Estudis Catalans.

1. INTRODUCCIÓN

La construcción de la autopista Pau Casals, deSitges al Vendrell, entre las comarcas del Garraf y delBaix Penedès, por parte de la empresa AUCAT en-tre 1996 y 1997 motivó un conjunto de intervencio-nes arqueológicas en distintos yacimientos (Morer,Rigo, Barrasetas, 1997; Morer, Rigo 2003a; Morer,Rigo 2003b). Este tipo de obras públicas de gran

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impacto social suele generar una conflictividad en elterritorio, que enfrenta sectores de población diver-sos, y ello tiene consecuencias en la actividad arqueo-lógica y puede contaminar actuaciones arqueológi-camente correctas. En el caso que nos ocupa, lasintervenciones arqueológicas se llevaron a cabo contodos los medios, e incluso para salvar y dejar visi-table uno de los yacimientos (el Fondo del Roig deCunit), se modificó el trazado de la autopista y seincluyó un nuevo puente, no proyectado.

Posteriormente, la empresa AUCAT, asesorada porM. Prevosti, se planteó la inversión en un proyectode estudio territorial, a desarrollar entre 1998 y 2001,en las comarcas afectadas por la construcción de laautopista. La inversión se realizó a través de la Uni-versidad Autónoma de Barcelona y el Institutd’Estudis Catalans, lo cual fue motivo de una fruc-tífera relación entre la universidad y la empresa pri-vada. La dirección científica corrió a cargo de J.Guitart, J.M. Palet y M. Prevosti. El proyecto cons-tituyó un magnífico ejemplo de la incidencia que laarqueología del paisaje puede tener en la gestión delterritorio, tanto por la relación con la empresa Au-cat, como para la sólida base que acabó aportando alconocimiento de la arqueología de la zona. En estesentido, especialmente la interpretación histórica delos orígenes de la estructuración del territorio y dela dinámica de la ocupación humana, desde épocaibérica a época romana y medieval, explican muchosaspectos de la realidad posterior e incluso actual.

El planteamiento científico del proyecto consis-tió en realizar un estudio arqueológico del paisaje enel territorium de la antigua Tarraco, cuya enormeamplitud espacial obligaba a abordar la tarea en unaserie de etapas, por unidades territoriales asequibles,la primera de las cuales se concretaba en la comar-ca del Baix Penedès: la «Cossetania oriental».

Se trata de un territorio localizado entre Barcinoy Tarraco, que en general había sido poco estudia-do arqueológicamente. Así se desarrolló un estudiodel paisaje centrado en el período romano, pero conuna perspectiva diacrónica que tomaba como puntode partida el ibérico pleno (siglos V-III a. C.), ocupán-dose también de las transformaciones del territorioen época bajo-imperial y en la Antigüedad tardía(siglos V-VII d. C.). El estudio se llevó a cabo entre1998 y 2001, culminando en la convocatoria y pos-terior publicación del Simposio Internacional Terri-toris antics a la Mediterrània i a la Cossetània orien-tal (Guitart, Palet, Prevosti 2003) (fig. 1).

El planteamiento metodológico global del traba-jo se basó en la combinación de los resultados de tresámbitos fundamentales de estudio: el poblamiento,

la morfología del territorio y los estudios paleoam-bientales.

En lo que se refiere al estudio del poblamiento,el trabajo se centró en cinco apartados básicos, cu-yos resultados se recogieron en la base de datos in-tegrada en el SIG:

1. Las prospecciones extensivas, centradas en losyacimientos ya conocidos, sobre los que se recogiótoda la información disponible y se realizó una pros-pección sistemática superficial, con inventario demateriales y elaboración de una ficha con todos losdatos para la base de datos del SIG.

2. Las prospecciones intensivas, sistemáticas, detres transectos, cuyos resultados también se integra-ron en la base de datos.

3. Prospecciones sistemáticas intra site, que seefectuaron en dos yacimientos: Tomoví (Albinyana)y Mas Quefa (la Bisbal).

4. El estudio de los materiales arqueológicosconservados en colecciones particulares y museos.

5. El diagnóstico por sondeos en yacimientosestudiados previamente en prospección.

En relación con el estudio arqueomorfológico, lainvestigación se centró en el análisis de las macroes-tructuras del paisaje a través de la fotointerpretacióndel vuelo de la USAF de 1956 a escala aproximadade 1:33.000. Para la verificación de la morfología

Fig. 1. Situación del área de estudio.

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obtenida a partir del análisis de las fotos de 1956 seutilizaron ortofotos digitales distribuidas por el Ins-titut Cartogràfic de Catalunya (ICC) a escala 1:25.000(2,5 m/píxel) y 1:5.000 (0,5 m./píxel) (Figura 3).También se emplearon planimetrías históricas sobre-todo de inicios del siglo XX. Entre éstas cabe desta-car los mapas de minutas municipales realizados entrelos años 1914 y 1923 a escala 1:25.000 por el Insti-tuto Geográfico y Estadístico, así como la primeraedición del Mapa Topográfico Nacional de 1926 aescala 1:50.000. Se llevó a cabo también un controlde terreno de los elementos morfogenéticos y ma-croestructuras del paisaje. La planimetría restituidasirvió de base para el estudio arqueomorfológico, ladetección de distintas formas de organización delterritorio y el establecimiento de una secuencia decronología relativa entre ellas. La datación absolutade las trazas se basó en criterios de modulación y enla inserción de otros elementos arqueológicos (trazasde la vía romana, yacimientos).

2. INTEGRACIÓN DE LA INFORMACIÓNARQUEOLÓGICA EN EL SIG

La información arqueológica se integró y anali-zó mediante ArcView y ArcInfo. Se empleó una basecartográfica digitalizada a escala 1:50.000 del Insti-tut Cartogràfic de Catalunya, y utilizando su capa decurvas de nivel se creó un MDT (Modelo Digital delTerreno) de 25 × 25 m de resolución. También seintegraron en el SIG representaciones digitalizadasde redes viarias y otros restos de morfología histó-rica. Esta información gráfica se conectó a una basede datos Acces 97 con información de posicionamien-to geográfico y descriptiva sobre los yacimientos.

A partir de estos datos se realizó una serie diacró-nica de mapas de distribución de los yacimientos sim-bolizados según su tipología que contempla las épo-cas ibérica, republicana, imperial y bajo imperial.Dichos mapas constituyeron la base para estudiar laevolución de poblamiento y para implementar trescategorías de análisis espaciales: polígonos de Thies-sen, áreas de explotación del territorio y análisis devisibilidad.

Los polígonos de Thiessen y áreas de explotacióndel territorio se generaron con el fin de obtener unaherramienta gráfica que ayudara a visualizar mejorla distribución del poblamiento.

Los polígonos fueron calculados respecto a yaci-mientos de un mismo periodo histórico y teniendo encuenta sus tipologías y posibles relaciones jerárqui-cas. Así, para la época ibérica, por ejemplo, se deter-

minaron polígonos que contemplan únicamente lospoblados, poblados y establecimientos rurales, y elconjunto de yacimientos representativos de pobla-miento.

Las áreas de explotación del territorio fueron cal-culadas respeto a poblados ibéricos y a villas y es-tablecimientos rurales romanos. Se trata de un aná-lisis anisotrópico basado en la siguiente hipótesis: unyacimiento debía explotar un área de 5 km de radioa su entorno, que equivaldría a 1 hora de camino enterreno completamente llano. Pero, en realidad, losdesniveles del terreno supondrían un aumento delesfuerzo y que en 1 hora se hiciese menos camino:100 m de subida representarían 15 minutos extra y100 m de bajada 7 minutos y medio extra. Así, afec-tada por la topografía del terreno, el área de 5 kmdisminuiría 1,25 km cada 100 m de subida y 650 mcada 100 metros de bajada. Las resultantes áreas deexplotación romanas, que frecuentemente se sobre-ponían parcialmente, fueron recortadas a partir de loscorrespondientes polígonos de Thiessen.

Finalmente, en un intento de estudiar la dinámi-ca del control visual del territorio, se implementaronanálisis de visibilidad binarios desde poblados ibé-ricos y villas romanas. Se añadieron 6 m de altura alpunto de observación de los poblados, ya que pudie-ron contar con torres, y 3 m en el caso de las villas,dada la posible existencia de algún piso o torre enestas edificaciones.

3. DINÁMICA TERRITORIAL

LA ETAPA IBÉRICA (Fig. 2)

Los datos recogidos en la base de datos fueronrepresentados en diversos mapas que permitenempezar a entender el funcionamiento estructuraldel llano del Baix Penedès, en base a la distribu-ción topográfica, espacial y funcional de los estable-cimientos.

Se han recogido evidencias de 42 yacimientos quehan proporcionado materiales del ibérico pleno (si-glos IV-III a. C.). De ellos, solamente tres han sido ex-cavados de forma exhaustiva: les Toixoneres/AlordaPark (Calafell), les Guàrdies (el Vendrell) y el Fon-do del Roig (Cunit), cuatro lo han sido parcialmen-te y otros diez han sido objeto de alguna interven-ción arqueológica más restringida. Estas excavacionessirven pues de muestra para entender el conjunto delos establecimientos de la zona, y en base a esteconocimiento se ha podido establecer la tipología delos asentamientos (Asensio et al. 2000).

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Fig. 2. Distribución y tipología de los yacimientos de las épocas ibérica y republicana.

Anejos de AEspA LIX 225OCUPACIÓN Y ESTRUCTURACIÓN DE LA COSSETANIA ORIENTAL (TARRAGONA)

Los mapas muestran una dispersión moderada delhábitat rural, de tipo granja, posiblemente de estruc-tura sencilla, construidos con materiales perecederos,que han dejado pocas evidencias, especialmente enel registro de prospección. Dos yacimientos corres-ponden a núcleos concentrados: les Masies de SantMiquel, un oppidum rodeado de murallas, de unas 4ha, con posibles funciones de capitalidad de la zona,y las Toixoneres – Alorda Park, centro también amu-rallado, de 0,3 ha, que se interpreta como una ciu-dadela militar. Pero también se distingue un tercertipo de establecimiento, constituido por los centrosde actividad económica especializada, metalúrgica,textil o ceramista. Así, el yacimiento de Les Guàr-dies (el Vendrell), es un centro dedicado a la meta-lurgia del hierro, además de ser centro de almacena-miento de grano (Morer, Rigo 2003b). Otro campode silos importante se halla en el Corral de Castell-vell (Cunit).

Así pues, el poblamiento del ibérico pleno pare-ce que se articula alrededor de los dos asentamien-tos comentados, el de las Masies de Sant Miquel(Banyeres del Penedès) (Carrasco et al. 1990; 1994;Cela et al. 2003) y Toixoneres – Alorda Park (Cala-fell) (Sanmartí, Santacana 1986; 1992; Asensio,Morer, Pou 2003). El primero, situado en el centrodel llano del Baix Penedès, constituye el oppidum demayores dimensiones de la comarca. Se fecha entrelos siglos VI y II a. C. Sus potentes murallas y sus di-mensiones denotan su importancia y permiten clasi-ficarlo como el centro de poder principal de la región.Alrededor del oppidum, se observa un área con unnotable vacío, significativo de que los campesinos quecultivaban los campos más cercanos al poblado de-bían residir en su interior, protegidos por las mura-llas. Efectivamente, el área de captación de les Ma-sies de Sant Miquel (figs. 4 y 5), resulta un área casicircular, que ocupa la mayoría del llano, dentro dela cual solo se encuentran dos establecimientos detipo campesino, mientras que los 20 restantes sehallan en los límites del llano, en el pie de monte eincluso en las montañas que cierran el Baix Penedès.Estos yacimientos más alejados, no permitían que elcampesino fuese y volviese en un mismo día delpoblado a trabajar las tierras, por lo que se interpre-tan como hábitats definitivos o estacionales, de la-bradores y ganaderos que explotaban las tierras másdistantes del poblado.

El poblado de les Toixoneres – Alorda Park se dataentre los siglos VII y finales del III o inicios del II a. C.A su alrededor se encuentran abundantes estableci-mientos rurales, hecho que significa que la mayoríade campesinos no habitaba la ciudadela. Estos peque-

ños establecimientos formaban una densa red deocupación de la franja costera. Si dibujamos el áreade captación del poblado (Figura 4), se observa quemuchos de ellos quedan dentro de esta área, concre-tamente doce. Cuatro más quedan fuera, aunque muycerca de sus límites. El poblado se ha interpretadocomo una plaza fuerte, habitada por una élite mili-tar, con funciones de avanzadilla sobre la costa ycontrol comercial, aunque también con actividad deagricultura, especialmente de control de los peque-ños hábitats rurales mencionados.

Así pues, les Masies de Sant Miquel parece ha-ber sido el núcleo principal de poder de una comu-nicad regional del ibérico pleno, típicamente campe-sina. Probablemente estaba ubicada en el centro deun llano en función de la centralidad y accesibilidadde la actividad principal que ocupaba a sus habitan-tes. Esta situación de centralidad también ofrecía unasposibilidades excepcionales de dominio del territo-rio, así como de comunicación excelente, aunque ibaen detrimento de la estrategia defensiva. Quizás paraesta función compartía o delegaba parcialmente enla ciudadela de Calafell (Alorda Park). Llama la aten-ción la ubicación del oppidum de les Masies de SantMiquel, en contraste con la mayoría de oppida ibé-ricos, en el centro de una llanura agrícola, en un puntocentral de comunicaciones, de tal forma que, en cam-bio, podríamos decir que reunía las condiciones to-pográficas idóneas para una ciudad romana. A pesarde ello, tras la conquista romana, se abandonó y elemplazamiento no fue utilizado para un asentamientode carácter urbano.

LA ETAPA REPUBLICANA (SIGLOS II-I A.C.) (Figura 2)

Tras la conquista romana, los cambios en la dis-tribución del asentamiento resultan significativos: losdos poblados ibéricos se abandonan y se documentauna densificación de establecimientos rurales de ca-rácter disperso por el territorio, que alcanzan en estaetapa el número máximo.

La distribución del asentamiento rural en esteperíodo no es uniforme, observándose cuatro áreasde agrupación principales: la costa; la zona de trán-sito en el interior hacia el valle del Gaià; el paso delrío Foix hacia la costa; y el piedemonte del Mont-mell. En cierta medida, esta estructura es una herenciade la estructura del período ibérico. Con todo, seobserva una tendencia clara a la ocupación del lla-no, que en la etapa ibérica estaba menos poblado. Detodas formas, siguen existiendo zonas vacías, queresultan muy difíciles de interpretar, para lo cual

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convendría un buen estudio de la sedimentación ho-locena y de procesos postdeposicionales, que hoy porhoy no poseemos.

Respecto al sistema de vías de comunicación,parece que se mantuvieron los mismos ejes que enel período ibérico, que se corresponden con las zo-nas más ocupadas, citadas más arriba: la vía del li-toral, el corredor hacia la cuenca del Gaià, la vía decomunicación que pasa por el piedemonte de la SierraLitoral y el paso del Foix hacia la costa. La riera dela Bisbal debía funcionar también como una vía na-tural de comunicación en sentido interior-costa, comoindica la presencia junto a ella del alfar de Tomoví,uno de los más importantes de la zona, en una situa-ción interior (Martín, Prevosti 2003).

El oppidum de les Masies de Sant Miquel entraen clara recesión o incluso se abandona paulatinamen-te, con el inicio del dominio romano. El poblado bienestudiado de les Toixoneres – Alorda Park (Sanmar-tí, Santacana, 1992) se abandona de forma muy ge-neralizada a finales del siglo III e inicios del II, aun-que un pequeño sector del poblado sigue habitadohasta el tercer cuarto del siglo II a. C. Les Guardies(el Vendrell), que en el ibérico pleno había tenido unpapel de economía especializada y de dependencia,en esta etapa se convierte en un establecimiento decarácter puramente agrícola, con lo cual pasa a serun establecimiento de tercer orden (Morer, Rigo2003b). En cambio, los pequeños establecimientoscampesinos, de tipo granja, dispersos por el territo-rio, se multiplican. De esta forma el patrón de dis-tribución de la población, en los siglos II y I a. C. pro-tagoniza un cambio remarcable: los núcleos depoblación agrupada desaparecen mientras que proli-feran los pequeños establecimientos dispersos.

El estudio de poblamiento por períodos muestraque el hábitat disperso prácticamente se duplica enesta fase, respecto al período ibérico pleno (s. IV-III

a. C.). Su caracterización tipológica es difícil. Sabe-mos por la excavación de alguno de estos estableci-mientos que se trataba de granjas con estructuras muydegradadas de naturaleza endeble, de fuerte tradiciónibérica, aunque con frecuencia presentan la incorpo-ración de elementos constructivos romanos, comotegulae o la utilización de mortero. Se documentatambién la incorporación de sistemas nuevos de trans-formación agrícola, como algún depósito recubiertode mortero o el uso de dolia. En general, se trata deestablecimientos sencillos, relacionados con una eco-nomía campesina, aunque la fuerte incorporación decerámica de importación indica una actividad econó-mica muy notable, con un comercio que ha de exce-der el ámbito de la economía doméstica. Posiblemente

se trata de la población procedente de los poblados,que se establece sobre sus campos de trabajo.

Pensamos en este sentido que se trata de una etapade gran dinamismo económico, que se refleja en ladensificación de granjas y en las cerámicas de impor-tación relacionadas con la existencia de un comerciode larga distancia. Hay que resaltar que algunos deestos establecimientos campesinos adquieren ya unfuerte carácter romano, como es el caso de les Guàr-dies, donde se levanta un edificio rectangular, con unaárea de prensa de aceite, aunque presenta el hogar decarácter ibérico. También posee carácter romano lacasa romana que se levanta encima de las ruinas delpoblado de les Toixoneres – Alorda Park (Pou et al.,1993). En la mitad del siglo I a. C., se construye elVilarenc (Calafell) (Revilla 2003), una granja plena-mente dentro de la tradición romana, que está al lí-mite de lo que podríamos empezar a denominar vi-lla (Prevosti, en prensa). Todo ello indica que con eldominio romano, esta sociedad entró con fuerza ydinamismo en el ámbito económico del mundo roma-no del Mediterráneo occidental.

El cambio del siglo II al I a. C. representa un puntode inflexión importante para la expansión de los es-tablecimientos rurales. Pensamos que una de las cla-ves interpretativas de la transformación es que la zonapasa a formar parte del ager de Tarraco. De hecho,la estructura de los asentamientos se parece más a lade la ciudad romana, con el núcleo urbano (Tarra-co) y los asentamientos rurales dispersos por su te-rritorium, que a la estructura de asentamientos ibé-rica, con la población concentrada en poblados yalgunas granjas dispersas por el territorio (Prevosti2005: 349, 369-370). Se trata de un período de tran-sición de la estructura ibérica a la romana, con la lentadisolución de la sociedad y la economía ibérica, queva quedando cada vez más marginal, a medida quese implanta la agricultura más especializada y degestión centralizada, propia del sistema de la villaromana.

LA ETAPA ALTOIMPERIAL (Figura 3)

En esta fase se documenta un cambio importan-te en los patrones de asentamiento. El poblamientorural disperso se reduce de manera significativa (a lamitad e incluso menos), y se implanta un modelo deasentamiento más concentrado, organizado según elsistema de la villa romana (fig. 4). Sin duda, la pro-ducción de vino es uno de los puntos fuertes de lasvillas del inicio del imperio (Martín, Prevosti 2003).Esta nuclearización del asentamiento rural es coetá-

Anejos de AEspA LIX 227OCUPACIÓN Y ESTRUCTURACIÓN DE LA COSSETANIA ORIENTAL (TARRAGONA)

Fig. 3. Distribución y tipología de los yacimientos de las épocas imperial y bajo imperial.

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nea a la centuriación del territorio (Tarraco IV, Pa-let 2003), así como a posibles cambios en la propie-dad de la tierra. La cronología inicial de los cambioscomentados posiblemente pueda situarse a partir dela promoción de Tarraco a colonia en época cesariana.Este nuevo patrón de asentamiento es evidente haciael cambio de era y se mantiene durante los dos pri-meros siglos del Imperio, hasta finales del siglo II

d. C.Así, si en el período republicano se detectaban 85

establecimientos rurales de tipo granja, en épocaimperial se reducen a 37. Se hace patente pues lanotable disminución de granjas dispersas, acompaña-da de la consolidación de un tipo de asentamiento másnuclearizado, organizado según el sistema de la vi-lla. En esta fase, junto a las villae existirían tambiénpequeñas granjas y áreas de explotación que podríanpertenecer a pequeños propietarios. En muchos ca-sos son yacimientos definidos por estructuras de ca-rácter agropecuario (muros, dolia, opus signinum) ymateriales constructivos (tegulae), y de importaciónsin que se identifiquen áreas de residencia de lujo.

Las villae en esta zona son centros de gran enti-dad que organizan la explotación del territorio enfundi de mayor tamaño, seguramente con coloni es-tablecidos en las pequeñas granjas de alrededor delas villas. Es posible que en esta época, esta nuevasituación fuese acompañada de un cierto despobla-miento de la comarca, debido a la lejanía del centrode poder, de Tarraco. En todo el territorio en estu-dio se detectan solamente cinco yacimientos que sepueden calificar claramente como villas: el Vilarenc(Calafell), Tomoví (Santa Oliva y Albinyana), que sonlas más estudiadas, y Mas Quefa (la Bisbal del Pe-nedès), la Feixa del Cintet (Castellet i la Gornal) yla Masia dels Arcs (Sant Jaume dels Domenys). Se-guramente, en la economía de las villas de la primeraetapa del imperio, juega un papel importante la pro-ducción de vino (Martín, Prevosti 2003).

ETAPA BAJOIMPERIAL Y TARDOANTIGÜEDAD (Figura 3)

A partir del siglo III se documenta una nueva nu-clearización del poblamiento, con el abandono de nu-merosos establimentos rurales altoimperiales, hechoque se traduce en la reducción del número de esta-blecimientos. Pensamos que esta reducción y nuclea-rización del poblamiento durante el bajo Imperio esreal, pero sin duda debe matizarse en función del nivelde conocimiento de cada sector estudiado.

En este sentido, se dispone de información deta-llada para dos sectores: la marina penedesenca, jun-

to a la línea de costa, y el interior, en el extremonordoccidental del territorio, en el municipio de LaBisbal del Penedès.

En esta zona interior, los yacimientos con crono-logía bajoimperial representan más del 17% del to-tal, lo cual permite matizar la imagen de abandonogeneralizado del campo que se deduce de las cifrasreferidas a la globalidad del territorio. De hecho, eneste sector, el modelo de asentamiento basado en lasvillae parece mantenerse hasta finales del Imperio.

En la zona litoral, por el contrario, los cambiosson importantes a partir del siglo III. La cronologíafinal de ocupación de la villa del Vilarenc (Calafe-ll), justo en este momento, es significativa al respecto.Otros establimentos rurales de la zona proporcionandatos similares. Sólo en un yacimiento (les Albardes)se ha documentado en excavación una continuidad deocupación hasta finales del s. IV - mediados del V (Mo-rer, Rigo, Barrasetas 1997, 77-78). En este sectorlitoral, los cambios en relación con la fase anteriorson más marcados, mientras que en la zona interiorse observan más elementos de continuidad.

Disponemos de poca información para el resto delterritorio, pero los datos comentados podrían extra-polarse, de manera que determinadas villae podríanhaber tenido continuidad en época bajo imperial,aunque esta continuidad sea, a falta de nuevos datos,hipotética.

Es posible que durante el Bajo Imperio la centu-riatio perdiera su función estructuradora original.Seguramente la nuclearización comentada refleja unacierta concentración de la propiedad en manos degrandes propietarios (Revilla, Miret 1994, 204-205).Asimismo podemos hablar de un cierto despobla-miento, probablemente debido a la desactivacióneconómica motivada por la lejanía del núcleo admi-nistrativo y comercial del que depende, Tarraco.

Sin embargo, es durante la Antigüedad tardía (si-glos VI-VII) cuando se documentan las transformacio-nes más importantes, reflejadas sobre todo en los es-tudios polínicos de Cubelles y Creixell (Riera 2003).Los diagramas reflejan una importante deforestaciónentre los siglos V y VII, acompañada de una extensiónde las comunidades arbustivas y herbaceas, relacio-nada con prácticas ganaderas y explotaciones agro-pecuarias más extensivas. En este período la ruptu-ra respecto al patrón de asentamiento de épocaimperial es muy notable. Ello se refleja también enla morfología del territorio, con la desaparición de-finitiva del modelo de centuriación y la potenciaciónde nuevos ejes de comunicación, de tradición gana-dera (vías pecuarias), hecho documentado por la in-vestigación arqueomorfológica (Palet 2003).

Anejos de AEspA LIX 229OCUPACIÓN Y ESTRUCTURACIÓN DE LA COSSETANIA ORIENTAL (TARRAGONA)

Fig. 4. Áreas de explotación del territorio de los poblados ibéricos (imagen superior). Áreas de explota-ción de las villas imperiales recortadas a través de polígonos de Thiessen (imagen inferior).

230 Josep Guitart, Josep Maria Palet, Marta Prevosti y Carme Ruestes Anejos de AEspA LIX

Resulta interesante el emplazamiento de nuevosestablecimientos junto a estas vías. La necrópolispaleocristiana de la Ermita de Sant Esteve (Sant Es-teve de Castellet), o los yacimientos de la iglesia deSant Miquel (Calafell) y, especialmente, el de LaSolana (Cubelles), ambos en plena marina penedes-enca, en la confluencia de las cañadas con la víaromana de la costa.

El yacimiento de la Solana constituiría una mues-tra paradigmática del nuevo tipo de establecimiento.En el yacimiento, fechado entre los siglos V y VII, sehan excavado unos 90 silos, que junto con los análi-sis carpológicos, dan testimonio de la producción degrano. La producción de vino también se ha confir-mado por la presencia de una prensa y depósitos,donde los análisis han identificado haber contenidovino o derivados. La ganadería también se ha estu-diado bien, con la presencia de ovicápridos y bovi-nos, además de la presencia de cánidos y équidos. El

estudio de las piezas metálicas y algunos hornos si-derúrgicos ha puesto de manifiesto que en el yaci-miento se realizó la cadena siderúrgica completa defabricación de objetos de hierro. Parece que se tratade una aglomeración de viviendas de carácter sencillo,donde la economía ganadera va cobrando cada vezmás peso (Barrasetas 2003).

Así pues, en este territorio la antigüedad tardíahabría que entenderla como una etapa en que el sis-tema de la villa, basado en una red de gestión de ri-cas haciendas agrícolas, está en proceso de desapa-rición, mientras que en su lugar aparecen nuevasformas del hábitat rural.

Los datos indican, pues, un largo proceso de cam-bio, que se inicia en plena época imperial y que seacelera a partir del siglo V, que afecta tanto a los pa-trones de asentamiento como a la explotación delterritorio. La Antigüedad tardía, en esta zona de lacosta catalana, se caracteriza por la expansión de la

Fig. 5. Cuenca visual del poblado ibérico de Les Masies de Sant Miquel.

Anejos de AEspA LIX 231OCUPACIÓN Y ESTRUCTURACIÓN DE LA COSSETANIA ORIENTAL (TARRAGONA)

ganadería extensiva, los importantes cambios en laarticulación viaria, así como en la evolución del pai-saje, donde la deforestación y la erosión del interiorse complementan con la explotación del litoral comoprados húmedos.

La dinámica territorial documentada incide en lasituación alejada del Baix Penedès en relación conel núcleo urbano de Tarraco. Se observa, en estesentido, el contraste entre la etapa republicana, conuna densidad de población importante que derivaclaramente de la situación del período ibérico pleno,y la etapa alto imperial poco poblada, con pocas vi-llas, situación que se incrementa en la tardo roma-nidad hasta el punto de mostrar un territorio sub-explotado agrícolamente. En época ibérica esta regióngozaba de una personalidad y vitalidad propia, im-portante, que heredó en el período republicano, peroque se perdió en el alto imperio, seguramente debi-do al papel centralizador del núcleo urbano.

Los datos sugieren, en este sentido, un proceso decambio que se inicia en plena época imperial, y quese acelera a partir del siglo V, con una explotación delterritorio más extensiva relacionada con la expansiónde actividades ganaderas. No podemos por el momen-to determinar las características de estas actividades.Los estudios microregionales desarrollados en distin-tas zonas del nordeste peninsular indican que segu-ramente no significaron el desarrollo de rutas trashu-mantes de larga distancia, sinó desplazamientos decorta o media distancia, entre la marina litoral y lasáreas de montaña y llanos prelitorales.

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