nuevos materiales para su estudio sociohistórico (I. América)

21
ELEMENTOS LINGÜÍSTICOS AFROAMERICANOS EN EL ÁREA HISPÁNICA NUEVOS MATERIALES PARA SU ESTUDIO SOCIOHISTÓRICO (I. AMÉRICA) En un trabajo reciente* he expuesto las líneas fundamen- tales de investigación que, a mi parecer, deben ser tenidas en cuenta para un planteamiento correcto de los actuales estudios lingüísticos afrohispanoamericanos. El extenso ámbito, histó- rico y geográfico, que debe ser considerado para este fin, así como la metodología interdisciplinar que, ineludiblemente, debe manejarse, hacen necesario el conocimiento de un número considerable de fuentes escritas que, por su heterogeneidad y, en ocasiones, escasa accesibilidad, pueden constituir, para los investigadores interesados en esta temática, un serio obstáculo en su trabajo. Para obviar en lo posible esta dificultad y faci- litar a los especialistas de habla española una orientación sufi- cientemente amplia acerca de los elementos bibliográficos fun- damentales que deben ser empleados en este tipo de estudios, he publicado anteriormente varios artículos en los que recogí y comenté los materiales impresos que pueden considerarse básicos para ello, abarcando en los mismos tanto el entero cam- po de trabajo afrohispanoamericano' como sus áreas parciales correspondientes a las zonas geográficas de Hispanoamérica 3 y África 4 . 1 Planteamientos y necesidades actuales en los estudios lingüísticos afro/úspano- americanos, en Antiario de Letras (México), 12, 1974, págs.'53-82. a Materiales para el estudio sociohistórico de los elementos lingüísticos afro- americanos en el área hispánica, en Thesaurtts (Bogotá), 23, 1968, págs. 547-573. 3 Materiales complementarios para el estudio sociohistórico de los elementos lingüisticas afroamericanos en el área hispánica {I: América), en Thesaurus, 26, 1971, págs. 118-133. * Materiales complementarios para el estudio sociohistórico de los elementos

Transcript of nuevos materiales para su estudio sociohistórico (I. América)

Page 1: nuevos materiales para su estudio sociohistórico (I. América)

ELEMENTOS LINGÜÍSTICOS AFROAMERICANOS

EN EL ÁREA HISPÁNICA

NUEVOS MATERIALES PARA SU ESTUDIOSOCIOHISTÓRICO (I. AMÉRICA)

En un trabajo reciente* he expuesto las líneas fundamen-tales de investigación que, a mi parecer, deben ser tenidas encuenta para un planteamiento correcto de los actuales estudioslingüísticos afrohispanoamericanos. El extenso ámbito, histó-rico y geográfico, que debe ser considerado para este fin, asícomo la metodología interdisciplinar que, ineludiblemente,debe manejarse, hacen necesario el conocimiento de un númeroconsiderable de fuentes escritas que, por su heterogeneidad y,en ocasiones, escasa accesibilidad, pueden constituir, para losinvestigadores interesados en esta temática, un serio obstáculoen su trabajo. Para obviar en lo posible esta dificultad y faci-litar a los especialistas de habla española una orientación sufi-cientemente amplia acerca de los elementos bibliográficos fun-damentales que deben ser empleados en este tipo de estudios,he publicado anteriormente varios artículos en los que recogíy comenté los materiales impresos que pueden considerarsebásicos para ello, abarcando en los mismos tanto el entero cam-po de trabajo afrohispanoamericano' como sus áreas parcialescorrespondientes a las zonas geográficas de Hispanoamérica3

y África4.

1 Planteamientos y necesidades actuales en los estudios lingüísticos afro/úspano-americanos, en Antiario de Letras (México), 12, 1974, págs.'53-82.

a Materiales para el estudio sociohistórico de los elementos lingüísticos afro-americanos en el área hispánica, en Thesaurtts (Bogotá), 23, 1968, págs. 547-573.

3 Materiales complementarios para el estudio sociohistórico de los elementoslingüisticas afroamericanos en el área hispánica {I: América), en Thesaurus, 26,1971, págs. 118-133.

* Materiales complementarios para el estudio sociohistórico de los elementos

Page 2: nuevos materiales para su estudio sociohistórico (I. América)

482 GERMÁN DE GRANDA BICC, XXXI, 1976

Las fechas de aparición de dichos trabajos y la abundanciade publicaciones, algunas de ellas realmente fundamentales,que han visto la luz desde entonces sobre estos temas aconse-jan, ahora, actualizar en lo posible los datos recogidos en aque-llos artículos, facilitando, como suplemento a los mismos, lareseña de los estudios recientes referentes a la investigaciónafrohispanoamericana y, al mismo tiempo, la referencia de losque, publicados con anterioridad, no habían llegado a mi cono-cimiento cuando publiqué los trabajos mencionados.

Reservando para otra ocasión los datos atingentes al áreageográfica africana, consideraré a continuación los materialesque se relacionan con el ámbito americano de los mismos. Parasu exposición tendré en cuenta, del mismo modo que en mispublicaciones anteriores, los aspectos históricos de la presenciade núcleos humanos de origen africano en Hispanoamérica, ladescripción de las modalidades de su actual fisonomía, tantodesde el punto de vista sociológico como cultural, y, finalmen-te, los datos referentes a los elementos lingüísticos conexos condichos grupos afroamericanos. También facilitaré materiales,paralelos a los anteriores, sobre otras zonas, no hispánicas, deAmérica, ya que considero totalmente necesario su conocimien-to si se desea integrar los datos obtenidos en nuestra área detrabajo en una perspectiva inteligible a nivel continental.

Una excelente bibliografía sobre los estudios afrohispano-americanos es la de Tomás Fernández Robaina, Bibliografíasobre estudios afro-americanos, La Habana, 1969, similar a laque, con diferente ámbito geográfico de estudio, publicó Eli-zabeth U. Miller, The Negro in America: a Bibliography, Cam-bridge (Mass.), 1966.

Enfoques generales sobre la investigación afroamericana,de sus logros, necesidades y métodos, facilita Roger Bastide ensu trabajo Etat actuel et perspectives d'avenir des recherchesafro-américaines*, mientras que, centrándose en el área hispá-

lingüísticos afroamericanos en el área hispánica (II: África), en T/iesaurus, 26,1971, págs. 400-422.

" En Journal de la Société des Américanistes, 58, 1969, págs. 7-29.

Page 3: nuevos materiales para su estudio sociohistórico (I. América)

BICC, XXXI, 1976 ELEMENTOS LINGÜÍSTICOS AFROAMERICANOS 4 8 3

nica, realizan la misma tarea Angelina Pollak-Eltz ° y Fre-derick P. Bowser '. Es muy útil, para el conocimiento de loscentros y personalidades hispanoamericanas que se ocupan deestudios afroamericanos, un trabajo de Luis Beltrán8.

Sobre un planteamiento general de las relaciones racialesen el continente americano, tema importante también a nivelteórico0, versan varios trabajos valiosos, referidos, bien a todala zona10 o a diferentes áreas geográficas, hispánicas11 o nohispánicas12.

De la presencia del negro en Hispanoamérica, como fenó-meno histórico general, tratan otros trabajos, la mayoría deellos de gran superficialidad 13. Acerca de la terminología apli-cada en Hispanoamérica a los diferentes resultados de las rela-ciones sexuales interraciales versa algún estudio14, no exhaus-tivo.

* Panorama de estudios afroamericanos, Caracas, 1972.

" The Ajrican in Colonial Spanish America: rcjlcclions on research achieve-ments and priorit'tes, en Latín American Research Review (Austin), 7 (1), 1972,págs. 77-94.

8 Los estudios afroamericanos y africanistas en Iberoamérica, en Cuadernos His-panoamericanos, núms. 289-290, 1974, págs. 255-269.

9 Cfr. PIERRE L. VAN DER BERGHE, Race and liacism: A comparative perspec-tive, New York, 1967.

10 Véanse MARVTN HARRIS, Patterns of race in the Americas, New York, 1964;DAVID \V. COHÉN y JACK P. GRKKNE (eds.), Neithcr slaue ñor free, Bahimore, 1972.

11 MAGNUS MÓRNER (cd.), Race and class in Lalin America, Columbia Uní-versity Press, 1970; MAGNUS MÓRNUR, A histórica das relacoes de racas na AméricaLatina: algttns comentarios sobre o estado da pesquisa, en Revista de Historia(Sao Paulo), 35, 1967, págs. 501-522. Véase, sobre todo, Roben B. Toplin (cd).Slavery and Race Relations in Lalin America, Westport, 1974.

13 Por ejemplo VVINTIIROP JORDÁN, IVhite over blaclt: American altitudes towardthe ne.gro, 1555-1812, Chapel Hill, 1968; DAVID LOWKNTHAL, Race and color inthe West Indies, en Daedalus, 96 (2), 1967, págs. 580-626.

13 Por ejemplo JOSÉ LUCIANO FRAN'CO, La presencia negra en el Nuevo Mundo,

La Habana, 1968; HENRY KAMEN, El negro en Hispanoamérica (1500-1700), enAnuario de Estudios Americanos, 28, 1971, págs. 121-137.

14 ISIDORO MORENO NAVARRO, Un aspecto del mestizaje americano: el problema

de ¡a terminología, en Revista Española de Antropología Americana, 4, 1969, págs.201-217.

Page 4: nuevos materiales para su estudio sociohistórico (I. América)

484 GERMÁN DE GRANDA BICC, XXXI, 1976

La trata de esclavos negros hacia Hispanoamérira, al igualque la verificada hacia otras áreas del continente15, ha sidoobjeto de diferentes investigaciones, algunas de ellas realmenteimportantes, en relación con temas concretos como, por ejem-plo, las compañías esclavistas españolas16, la actividad negrerade determinados puertos americanos1T o las modalidades delcomercio de esclavos en períodos18 o áreas geográficas10 de-terminadas. El fenómeno histórico de la esclavitud ha sido ob-jeto de especial atención20 así como sus fundamentos econó-micos21 y se han dedicado varios estudios, con tesis y conclu-

]° Por ejemplo, RICHARD B. SHERIDAN, A¡rica and the Caribbean in the Atlantic

slave trade, en American Histórica! Revtew, 77 (1 ) , 1972, págs. 15-35.

" BIBIANO TORBES RAMÍREZ, La Compañía Gaditana de Negros, Sevilla, 1973.17 Es importante el libro de JORGE PALACIOS PRECIADO, La trata de negros por

Cartagena de Indias, Tunja, 1973. Véase también JUAN PÉREZ DE LA RIVA ¿CuándoUegaron a Cuba los últimos bozales?, en Revista de la Biblioteca Nacional ¡oséMartí, mayo-agosto, 1974, págs. 176-180.

18 Cfr. ENRIQUETA VILA VILAR, Algunos datos sobre la navegación y los navios

negreros en el siglo XVII, en Historiografía y Bibliografía Americanistas, 17 (3),1973, págs. 219-234, y también Los asientos portugueses y el contrabando de negros,en Anuario de Estudios Americanos, 30, 1973, págs. 557-609.

11 Se destaca, por su excelente metodología y por el manejo de documentosinéditos, D. R. MURRAY, Statistics oj the slave trade to Cuba, 1790-1867, en Journalo) Latín American Studies, 3 (2), 1971, págs. 131-149. Se ocupa también de CubaJOSÉ L. FRANCO, Comercio clandestino de esclavos en el siglo XIX, en Islas, 11 (3),1970, págs. 43-58. Son de interés dos investigaciones referentes, respectivamente,a la trata de negros en la zona de Cuyo y al litoral rioplatense: ROSA MERCEDESZULUACA, La trata de negros en la región cuyana durante el siglo XVII, en Revistade ¡a ¡unta de Estudios Históricos de Mendoza, 2a época, núm. 6, tomo 1, 1970,págs. 35-66, y SAMUEL GORBAN, El trájico negro en el Río de la Plata, en EstudiosHistóricos (Marília), 10, 1971, págs. 117-139.

M Un juicio crítico de la bibliografía existente facilita MAGNUS MORNER, Dasvergleichende Studium der Negersklaverei in Angla- und Latinamerika, en Jahrbuchjür Geschichte von Staat, Wirtschajt und Gesellsc/iaft Lateinamerikas, 5, 1968,págs. 405-421. La institución y sus consecuencias históricas y sociológicas son exce-lentemente analizadas, utilizando metodología marxista, en EUGENE D. GENOVESE,The World the Slaveholders Made. Two Essays in Ínterpretation, New York, 1969.Son importantes los volúmenes colectivos ALLEN WEINSTEIN y FRANK OTTO GATTEL

(eds.), American Negro Slavery. A modern rcader, Oxford University Press, 1968,y DAVID W. COHÉN y JACK P. GREENE (eds.), Ncither Slave ñor Free: The jreed-

man oj Ajrican descent in the slave societies oj the New World, Baltimore-Lon-don, 1974. Véase también VICENTA CORTÉS ALONSO, Algunas ideas sobre la escla-vitud y su investigación, en Miscellanea Charles Verlinden, Gand, 1975, pá.gs.127-144.

a Por ejemplo, EUGENE D. GENOVESE (cd.), The Slave Economies, 2 vols.,

Page 5: nuevos materiales para su estudio sociohistórico (I. América)

BICC, XXXI, 1976 ELEMENTOS LINGÜÍSTICOS AFROAMERICANOS 485

siones divergentes, al estudio comparativo de esta instituciónen diferentes áreas geográficas americanas22.

El enfoque de la esclavitud del negro en Hispanoaméricapor diferentes miembros de la Compañía de Jesús2B, la im-portancia del Padre Las Cas.is en su génesis histórica21 y lautilización de los esclavos en las guerras de independencia his-panoamericanas 2a han sido también tratados.

En cuanto a trabajos sobre la esclavitud en diferentes zonashispánicas de América, son de destacar los realizados sobre lasáreas geográficas de Cuba20, Puerto Rico2l, Santo Domingo2S,

Neiv York, 1973, y EUGENE GENOVESE, Economía política de ¡a esclavitud, Barce-lona, 1971. También SIDNEY M. GREENFILLD, Slavery and the plantation in thcNew World, en Journal of Latín American Sludies, 11 ( 1 ) , 1969, págs. 44-57.Sobre la esclavitud en los Estados Unidos véase ROBERT W. FOGEL y STANLEY L.ENCERMANN, Time on the Cross: The economía of American negro slavery, Bos-ton, 1974.

22 GWENDOLYN MIDLO HALL, Social control and slare plantation societies: acomparison oj St. Dominique and Cuba, Baltimore, 1971; CARL DECLEH, Neitherblac\ ñor white. Slavery and race relations in Brasil and United States, NewYork, 1971. Véanse también las posturas, contrapuestas, de H. S. KLEIN, Angli-canisrn, catholicism and the negro slave, en Comparative Studies tn Society andHistory, 8, 1965-1966, págs. 295-327 (favorable a la esclavitud tn Hispanoamé-rica, a la que considera más "humana") y ARXOLD A. Sio, ínterpretations ofslavery: the slave status in the Americas, en la misma revista, 7 (3), 1965, págs.289-308.

23 Cír. MACNUS MÓRNER, LOS jesuítas y la esclavitud de los negros, en RevistaChilena de Historia y Geografía, núm. 135; VINCENT P. FRANKLIN, Alonso deSandoval and the Jesuit concept of the negro, en The Journal oj Negro History,58 (3), 1973, págs. 349-360.

24 ROBERT L. BRADY, The role oj Las Casas in the emergence of negro slaveryin the New World, en Revista de Historia de América, núms. 61-62, 1968, págs.43-55.

26 NURIA SALES, Esclavos y reclutas en Sudamérica, 1816-1826, en Revista deHistoria de América, 70, 1970, págs. 279-337, ahora reproducido en NURIA SALES,Sobre esclavos, reclutas y mercaderes de quintos, Barcelona, 1975.

28 Excelente es el trabajo de FRANKLIN W. KNICIIT, Slave society in Cuba duringthe nineteenth century, Madison, 1970. Véase también JUAN FRANCISCO MANZANO,Autobiagrafía de un esclavo, Madrid, 1975 (introducción, estudio y notas de IVÁNA. SCIIULMAN). ES interesante ELÍAS ENTRALGO, LOS fenómenos raciales en ¡a eman-cipación de Cuba, en la obra colectiva El Movimiento Emancipador de Hispano-américa, III, Caracas, 1961, págs. 323-349.

27 BENJAMÍN NISTAL, Catorce querellas de esclavos (Manatí, 1868-1873), enSin Nombre, 4(2), 1973, págs. 78-100.

" CARLOS LARRAZÁBAL, LOS negros y la esclavitud en Santo Domingo, SantoDomingo, 1967.

Page 6: nuevos materiales para su estudio sociohistórico (I. América)

486 GERMÁN DE GRANDA BICC, XXXI, 197Ó

México20, Guatemala30, Costa Rica31, Panamá3 2 , Colombia33,Venezuela 34, Ecuador3!i, Perú3 0 , Paraguay3T y Argentina38 ,junto con algunos que abarcan varias de ellas39.

w NORMAN F. MARTIN, Antecedentes y práctica de la esclavitud negra en laNuera España del siglo XVI, en Historia y sociedad en el mundo de habla espa-ñola. Homenaje a José Miranda, México, 1970. págs. 49-68; EDGAR F. LOVE, Ilegalrestrictions on Ajro-lndian relations in Colonial México, en The Journal o¡ NegroHistory, 55 (2), 1970, págs. 131-139; WILLIAM B. TAYLOR, The joundation ojNuestra Señora de Guadalupe de los Morenos de Amapa, en The Americas, núm.26, 1970.

30 PEDRO TOBAR CHUZ, La esclavitud del negro en Guatemala, en Antropologíae Historia de Guatemala, 17 (1), 1965, págs. 3-M.

31 ÓSCAR R. AGUILAR BULGARELLI, La esclavitud eti Costa Rica durante el pe-ríodo colonial, en Estudios Sociales Centroamericanos, 2 (5), 1973, págs. 187-198.Trata también de este tema, aunque su ámbito de estudio es más amplio, el útilvolumen de CARLOS MELÉNDEZ y QUINCE DUNCA.V, El negro en Costa Rica, SanJosé, 1972.

RAFAEL RIVERA DOMÍNGUEZ, Estructura social de una comunidad negro-colonial panameña, en Hombre y Cultura, 1 (4), 1965, págs. 47-64; ALFREDOCASTILLERO CALVO, LOS negros y mulatos libres en Tierra Firme: Introducción alestudio de un grupo marginal, en la misma revista, 1 (5 ) ; JULIO AROSEMENA M O -RENO, Documentación relativa al negro en Panamá, en Lotería, 14, núm. 164,1969, págs. 49-60.

33 Son excelentes los trabajos de WILLIAM F. SHAKP, The Colombian Chocó¡680-1810: A survey oj manumission, libres and blacl{ resistance in a tropicalmiíiing región, en ROBEKT B. TOPLIN (ed.), Slavery and Race Relations in LatínAmerica, Wcstport, 1974, págs. 89-111, y The projitablility oj slavery in the Co-lombtan Chocó, 1680-1810, en Hispanic American Histórica! Rcvieiv, 55 (3), 1975,págs. 468-495. De menor valor son ALLAN J. KUETHE, The status oj the jree pardoin the disciplined militia oj New Granada, en Journal oj Negro History, 56 (2),1971, págs. 105-117; RICARDO ARROYO ARBOLEDA, Esclavos negros en Nariño, enCultura Nariñense (Pasto), núm. 60, 1973, págs. 455-460; ANTONIO JOSÉ GALVISNOYES, La esclavitud en Colombia durante el período republicano (1825-1851),en Universitas Humanística (Bogotá), núms. 5-6, 1973, págs. 227-238.

3* Es trabajo importante, tanto por los materiales que reproduce como por suintroducción, ERMILA TROCONIS DE VERACOECHEA, Documentos para el estudio de¡os esclavos negros en Venezuela, Caracas, 1969. Véanse también JOHN V. LOMBARDI,Sociedad y esclavos en Venezuela: la era republicana, en Boletín de la AcademiaNacional de la Historia (Caracas), 52, núm. 207, 1969, págs. 515-527; ILDEFONSOLEAL, La aristocracia criolla y el Código Negrero de 1789, en Revista de Historia(Caracas), 2, 1961, págs. 61-81; H. A. BIERCK, jr., Bolívar y la esclavitud. El con-flicto entre la ley y su aplicación, en Boletín de la Academia Nacional de la His-toria (Caracas), 36, núm. 142, 1953, págs. 117-137.

15 JOSÉ ALCINA FRANCH, ¡JOS negros en Esmeraldas (siglos XVI-XIX), en Ho-menaje a Antonio Muro Orejón, Sevilla, 1974.

M De excepcional calidad es la investigación de FREDERICK P. BOWSER, TheAjrican slave in Colonial Perú: 1524-1650, Stanford, 1974. Véanse también Ni-

Page 7: nuevos materiales para su estudio sociohistórico (I. América)

BICC, XXXI, 1976 ELEMENTOS LINGÜÍSTICOS AFROAMERICANOS 4 8 7

Investigaciones paralelas se han realizado respecto a zonasamericanas no hispánicas, como las Antillas Británicas40, lasAntillas francesas 41, las Antillas danesas42, Surinam 43, Guaya-na francesa44, territorios ingleses de la América del Norte4S y,sobre todo, Brasil40.

CHOLAS P. CUSHNER, Slave mortality and reproduction on Jesuit Haciendas in Co-lonial Peni, en Hispanic American Historical Review, 55 (2), 1957, págs. 177-199; EMILIO HARTH-TERRÉ, Negros e indios: Un testamento social ignorado delPeni Colonial, Lima, 1973; LEÓN G. CAMPBELL, Black, power in Colonial Perú:t/ie 1779 tax rebellion of Lambayeqtic, en Phylon (Atlanta), 33 (2), 1972, págs.140-152. Es mediocre Luis MILLONES, Gente negra en el Perú: esclavos y con-quistadores, en Anuario Indigenista (México), 31 (3), 1971, págs. 593-624.

37 Es muy útil, por su aportación documental, JOSEFINA PLA, Hermano negro:la esclavitud en el Paraguay, Madrid, 1972.

38 ROBERTO ZAVALA MATIENZO, La esclavitud en Tucumán después de la Asam-blea de 1813, en Investigaciones y Ensayos (Buenos Aires), enero-junio de 1973,págs. 295-324.

M De ámbito general es el importante volumen de ROBERT B. TOPLIN (ed.),Slavery and Race Relations in Latín America, Wcstport (Conn.), 1974. SobreCuba y Puerto Rico JORCE MALUQUER DE MOTES BKRNET, ¿7 problema de la escla-vitud y la revolución de 1868, en Hispania (Madrid), núm. 117, 1971, págs. 55-75.Sobre el Río de la Plata, durante el período de las guerras de independencia, MARTAGOLDBERG DE FLICHMAN y LAURA BKATRIZ JANY, Algunos problemas referentes a la

situación del esclavo en el Rio de la ¡'lata, en IV Congreso Internacional de His-toria de América, VI, Buenos Aires, 1966, págs. 61-71. Es de gran interés el tra-bajo de HEBK CLEMKNTI, La abolición de ¡a esclavitud en América Latina, BuenosAires, 1975.

40 Cfr. JEROME S. HANDLER, The Unappropiated People: Freedmen in theSlave Society oj Barbados, Baltimore, 1974; D. ELTIS, The trafjic in Slaves be-tween the British West lndian colonies, 1807-1833, en The Economic History Re-view, 25 (1), 1972, págs. 55-64. Es de gran calidad la obra de RICHARD S. DUNN,Sugar and Slaves. The rise oj the planter class in the English West Indies, ¡624-1713, Chapel Hill, 1972.

41 Excelentes son las obras de SHELBY T. Me. CLOY, The Negro in the FrenchWest Indies, Lexington (Ky.), 1966, y GABRIEL DEBIEN, Plantations et esclaves áSaint Domingtie, Dakar, 1962, y Les esclaves aux Antilles jrancaises (XVIIe-XVIIIesueles), Basse-Terre-Fort-de-Francc, 1974.

43 THORKILD HANSEN, Slavernes Skibe: Tcgninger aj Birle Lund, Copenhague,1968. Se refiere a la trata de esclavos hacia la isla, antes danesa y hoy norteame-ricana, de St. Croix.

43 WILLEMINA KLOOSTERBOER, Involuntary Labotir since the Abolition oj Sla-very, Leiden, 1966.

44 J. T A R R A D E , Ajjranchis et gens de couleur libres a la Guyane a la fin duXVlIIe siecle d'apres les minutes des notaires, en Revue Francaise d'Histoire d'Outre-Mer, 49, 1962, págs. 80-116.

45 Cfr., por ejemplo, PETER H. WOOD, Black. Majority: Negroes in ColonialSouth Carolina jrom 1670 through the Stono rebellion. New York, 1974.

4" Una excelente revisión de las obras de la llamada "escuela de Sao Paulo"

Page 8: nuevos materiales para su estudio sociohistórico (I. América)

488 GERMÁN DE GRANDA BICC, XXXI, 1976

El fenómeno del cimarronismo y de las insurrecciones deesclavos ha sido investigado tanto a nivel continental47 comoen lo que respecta a áreas determinadas, entre las que sobresalenpor su interés algunas zonas hispanoamericanas48 como Cu-ba 49, Nueva Granada 50, VenezuelaG1 y otras52 junto con va-

hace RICHARD GRAHAM en su artículo Brazilian Slavery reexamined: a review ar-ticle, en Journal oj Soria! History, 3 (4), 1970, págs. 431-453. Véanse también,en cuanto a estudios generales, MARCAS KL/LA, Poczatly czarne.go niewolnictwa wBrazilii. Oleres gospodarsln cul{rowej XVI-XVll w, Wroclaw-Warszawa-Krakow,1970; A. J. R. RUSSELL-WOOD, Blacl{ and mulatto brothcrhoods in Colonial Brazil.A study on collective behavior, en Híspame American Histórica! Review, 54 (4),1974, págs. 567-602; H. S. KLEIN, The colored freedmen in Brazilian slave societv,en Journal oj Social History, 3 (1), 1969, págs. 30-52. Sobre la esclavitud en di-ferentes zonas geográficas del Brasil véanse VICENTE SALLES, O negro no Para.Sob o regime da escravidio, Río de Janeiro, 1971; SABASTISO FERRARINI, A escra-vidao na provincia do Paraná, Curitiba, )!)7I; J. H. GAI.LOWAY, The last years ojslavcry on the silgar plantations oj Northeaslern Brazil, en Hispanic American His-tórica! Review, 51 (4), 1971; FERNANDO HENRIQUK CARDOSO, Capitalismo e escravidiono Brasil meridional. O negro na sociedade escravócrata do Rio Grande do Snt,Sao l'aulo, 1962. De la trata africana hacia el Brasil se ocupan CORCINO MEDEIRÍWDOS SANTOS, Relacoes de Angola com o Rio de Janeiro, en Estudos Históricos(Marília), 12, 1974, págs. 7-68, y H. S. KLEIN, The trade in Ajrican slaves toRio de Janeiro, 1795-181 i: estímales oj mortality and patterns oj voyages, en [our-nal oj Ajrican History, 10 (4), 1969, págs. 533-549.

" De todo punto excelente es RICHARD PRICE (ed.), Maroon Societies: Rebelslave communities in the Americas, Carden City (N. J.), 1973, obra en la quese compendian acertadamente los datos fundamentales referentes a las principaleszonas de cimarronismo en el Nuevo Continente.

a Por ejemplo, con referencia a la Isla Española y a Panamá durante elsiglo xvi, véase RALPH H. VIGIL, Negro slaves and rebels in the Spanisk possessions,1503-1558, en The Historian (University of Pennsylvania), 33 (4), 1971, pájjs.637-655.

" Véanse JOSÉ LUCIANO FRANCO, LOS cobreros y los palenques de negros cima-rrones (esquema de dos libros pendientes de publicación), en Revista de la Biblio-teca Nacional José Martí, 3* época, 15 (1), 1973, págs. 37-46, y PEDRO DES-CHAMPS CHAPPEAUX, Cimarrones urbanos, en la misma revista, 3* época, 11 (2),1969, págs. 145-164.

00 MARÍA DEL CARMEN BORRECO PLA, Palenques de negros en Cartagena deIndias a jines del siglo XVII, Sevilla, 1973.

61 Luis ARTURO DOMÍNGUEZ, Sublevación de negros y zambos en la sierra deCoro en 1795, en Boletín de la Academia Nacional de la Historia (Caracas), 41,núm. 162, 1958, págs. 132-144.

63 Por ejemplo JUAN JOSÉ ANDRÉU OCÁRIZ, La rebelión de los esclavos en BocaNigua, en Anuario de Estudios Americanos, 27, 1970, págs. 551-581 (se refierea Santo Domingo, 1796), y EDGAR F. LOVE, Negro resistance to Spañish rule inColonial México, en The Journal oj Negro History, 52 (4), 1967.

Page 9: nuevos materiales para su estudio sociohistórico (I. América)

BICC, XXXI, 1976 ELEMENTOS LINGÜÍSTICOS AFROAMERICANOS 489

rias no hispánicas, entre ellas Brasil53, las Guayanas 54, Jamai-ca 5o, Haití50 y territorios de los actuales Estados Unidos deAmérica 57.

La abolición de la esclavitud en los diferentes países his-panoamericanos no ha sido considerada con la atención quemerece, aunque existen algunos trabajos valiosos en relacióncon Venezuela 58, Ecuador5I), Centroamérica60, Chile 61, Argen-tina62, Cuba63 y Puerto Rico64. Además, en lo que se refierea la abolición en las Antillas españolas, se pueden utilizar con

M Es fundamental CLOVIS MOURA, Rebelides da senzala: quilombos, insurrei-coes, guerrilhas, Rio de Janeiro, 1972. Véanse también RONALD H. CHILCOTE, Pro-test and resislance in Angola and Brazil, Berkeley, 1972; S. B. SCHWARTZ, TheMocambos: Slavc resistance in Colonial Bahía, en Journal oj Social History, 3 (4),1970, págs. 313-333; R. K. KENT, Ajricam revolt in Bahía: 24-25 January 1835,en la misma revista, 3 (4), 1970, págs. 334-356. y Palmares: An Ajrican state inBrazil, en Journal oj Ajrican History, 6, 1965, págs. 161-175.

" Es interesante RICHARD PRICE, The Guiana Maroons: Changing perspectivasin Bush Negro studies, en Caribbean Studies, 11 (4), 1972, págs. 82-105. Estudiofundamental, sincrónico, es JEAN HURAULT, Ajricains de Guyane, The Hague-Pa-ris, 1970.

m Cfr. ORLANDO PATTF.RSON, Slavery and slavc revolts: a socio-historical ana-lysis oj the jirst Maroon war, jamaica, 1655-1740, en Social and Economic Studies(Mona, Jamaica), 19 (3), 1970, págs. 289-305. El libro de KATHERINE DUNHAM,Journey to Accompong, Westport, 1971, es la narración vivida del viaje a una delas localidades jamaiquinas pobladas por descendientes de cimarrones.

M Véase JEAN FOUCHARD, Les marrons de la liberté, Paris, 1972.07 Por ejemplo, JACK D. L. HOLMES, The abortive slave revolt at Point Coupée,

Louisiana, 1795, en Louisiana History, 11 (3), 1970, págs. 341-362.65 Es de gran calidad la investigación de JOHN V. LOMBARDI, The Decline and

Abolition oj Negro Slavery in Venezuela, ¡820-1854, Westport, 1971.

*° JULIO TOBAR DONOSO, La abolición de ¡a esclavitud en el Ecuador, en Bo-letín de la Academia Nacional de Historia (Quito), 39, núm. 93, 1950, págs. 5-30.

60 CARLOS MARTÍNEZ DURAN y DANIEL CONTRERAS, La abolición de la escla-

vitud en Centroamérica, en Journal oj Ínter-American Studies, 4 (2), 1962.m GUILLERMO FELIÚ CRUZ, La abolición de la esclavitud en Chile. Estudio

histórico y social, Santiago, 1942.M José CARMELO BUSANICHE, La manumisión de los esclavos en la provincia

de Santa Fe, en Revista del Instituto de Historia del Derecho Ricardo Levene(Buenos Aires), 19, 1968, págs. 201-204.

63 JULIO LE RIVEREND, Observaciones sobre la revolución de 1868 y la abo-lición de la esclavitud, en Etnología y Folklore (La Habana), 7, 1969, págs. 55-58.

** JORGE C. VALTUEÑA, La abolición de la esclavitud en Puerto Rico, en Ho-rizontes (Ponce), 16, núms. 31-32, 1972-1973, págs. 7-60.

Page 10: nuevos materiales para su estudio sociohistórico (I. América)

490 GERMÁN DE GRANDA BICC, XXXI, 1976

fruto las diferentes publicaciones contemporáneas, cuyo inte-rés ha sido puesto de relieve por los especialistasOu, y en lasque se encuentran importantes datos e informaciones68. Detodos modos, aún queda mucho por hacer hasta poder alcan-zar el nivel que, en cuanto a este punto de investigación, seha logrado, por ejemplo, en Brasil °7.

Muy escasos son los datos sobre procedencia de esclavosnegros en Hispanoamérica 68 en comparación, sobre todo, con

85 Véanse, por ejemplo, ALBERTO GIL NOVALES, Abolicionismo y librecambio(Labra y la política colonial española en la segunda mitad del siglo XIX), en Re-vista de Occidente, 2* época, 6, núm. 59, 1968, págs. 154-181, y JUAN R. CASTE-LLANO, La Sociedad Abolicionista Española y la abolición de la esclavitud en Cubay Puerto Rico, en Hispanófila, núm. 23, 1965, págs. 9-22.

M Pueden consultarse, por ejemplo, FRANCISCO DE ARMAS Y CÉSPEDES, De la

esclavitud en Cuba. Madrid, 1866; GONZALO DE MURCA, De la abolición de la es-clavitud en el Brasil y en España, Madrid, 1872; Conferencias antiesclavistas delTeatro Lope de Rueda, Madrid, 1872; JOSÉ JULIÁN ACOSTA, La esclavitud en PuertoRico, Madrid, 1872; JOAQUÍN MARÍA SANROMÁ, IM esclavitud en Cuba, Madrid,

1872, y La emancipación de los esclavos en Puerto Rico, Madrid, 1873; M. BA-RÓN FORTACI'N, De la abolición de la esclavitud en Cuba, Madrid, 1880. Entre lasnumerosas publicaciones de RAFAKL MARÍA DE LABRA deben verse La abolición de

la esclavitud en las Antillas españolas, Madrid, 1869; La abolición de la esclavituden el orden económico, Madrid, 1873; La libertad de los negros en Puerto Rico,Madrid, 1873; La experiencia abolicionista de Puerto Rico, Madrid, 1874; La bru-talidad de los negros, Madrid, 1877; Los Códigos Negros, Madrid, 1879; Discursospolíticos, académicos y forenses, Madrid, 1884.

" Véanse ROBERT CONRAD, The Dcstruction of Brazilian Slavery, 1850-1888,Berkelcy, 1972; LESLIE BETHELL, The Abolition oj the Brazilian Slave Trade,London, 1970; DAVID T. HABERLY, Abolitionism in Brazil: anti-slavery and anti-slave, en Lttso-Brazilian Review (Madison, Wisc), 9 (2), 1972, págs. 30-42; PE-TER h. EISLNBERG, Abolishing slavery: The process oj Pernambitco's plantations,en Hispanic American Historical Review, 52 (4), 1972, págs. 580-597; L. H.DÍAS TAVARES, AS solucoes brasileiras na extincio do tráfico negreiro, en Journalof Ínter-American Studies, 9 (3), 1967.

68 Véanse RAFAEL RIVERA DOMÍNGUEZ, LOS orígenes tribales del negro colonial

panameño, en Hombre y Cultura (Panamá), 1 (5) , 1966; GERMÁN DE GRAN-DA,

Onomástica y procedencia africana de esclavos negros en las minas del sur de laGobernación de Popayán (siglo XVIII), en Revista Española de Antropología Ame-ricana, 6, 1971, págs. 381-422; Datos documentales sobre la preservación del sis-tema antroponímico twi en la Nueva Granada, en Revista Española de Lingüística,1, 1971, págs. 265-274; Dalos antroponímicos sobre negros esclavos musulmanesen la Nueva Granada, en Thesaurus, 27 (1), 1972, págs. 89-103; Nuevos datossobre el empleo de antropónimos twi en Hispanoamérica (siglo XVlll), en lamisma revista, 28 (2), 1973, págs. 189-194.

Page 11: nuevos materiales para su estudio sociohistórico (I. América)

BICC, XXXI, 1976 ELEMENTOS LINGÜÍSTICOS AFROAMERICANOS 491

los serios trabajos realizados en áreas no hispánicas america-nas69.

La descripción sociológica de los núcleos negros en His-panoamérica y de sus relaciones con los otros segmentos po-blacionales ha avanzado significativamente en los últimos años,contándose ya con algunos trabajos de conjunto70 y con otros,especializados en áreas geográficas concretas, dedicados a Cu-ba 71, República Dominicana72, Puerto Rico 73, México74, Cos-

" Véase, por ejemplo, G. DEBIEN y J. HOUDAILLE, Leí origines ajricaines desesclava des Artilles trancases, e n Caribbean Studtes, 10 ( 2 ) , 1 9 7 0 , p á g s . 5 - 2 9 .

70 Son importantes las publicaciones colectivas siguientes: MAGNUS MSRNER(ed.), Race and Class in Latín America, New York, 1970; RICHARD FRUCHT (cd.),Black. Societv in the New World, New York, 1971; JÜRCEN GRÜHENER (ed.),K/assengesellsc/ta/t tmd Rassismus: sur Marginalisieritng der A/roameri/'a.ver in La-teinamerika, Dusseldorf, 1971. Véase también L. A. COSTA PINTO, Negros y blan-cos en América Latina, en Comunidades (Madrid), 4 (11), 1969, págs. 115-135.

71 Ks muy importante VERENA MARTÍNEZ ALIKK, Marriage, Class and Colourin Nineteenth Centtiry Cuba, Cambridge Univcrsity Press, 1973. Véanse tambiénRAFAEL FERMOSELLE, Política y color en Cuba. La guarirá de 1912, Montevideo,1974; MARTHA VERÓNICA ALVAREZ MOLA y PEDRO MARTÍNEZ PÍRFZ, Algo acerca

del problema negro en Cuba hasta 1912, en Universidad de l~a Habana, núm. 179,1966, págs. 79-93 y, finalmente, la serie de trabajos de PEDRO DESCHAMPS CHAP-PEAUX entre los que se incluyen El negro en la economía habanera del siglo XIX:las comadronas o parteras, en Revista de la Biblioteca José Martí, 3^ época, 12 (3),1970, págs. 49-62; Historia de la gente sin historia: el negro en la economía haba-nera del siglo XIX, jlebotomianos y dentistai. en la misma revista, 13 (1), 1971,págs. 75-86; El negro en la economía habanera del siglo XIX. Agustín Ceballos,capataz de muelle, en la misma revista, 59 (1) , 1968, págs. 53-59; El negro enel periodismo cubano en el siglo XIX: ensayo bibliográfico, La Habana, 1963.

l3 Es muy bueno, desde una perspectiva metodológica marxista, FRANKLIN J.FRANCO PICHARDO, LOS negros, los mulatos y la nación dominicana, Santo Domingo,1969. Para la interrclación histórica entre Haití y la República Dominicana véaseahora FRANK MOYA PONS, La dominación haitiana, 1822-1844, Santiago (RepúblicaDominicana), 1972. Cfr. también JOSÉ DE JESÚS ALVAREZ PARELLÓ, La mezcla de

razas en Santo Domingo y los jactares sanguíneos, en EME, 8, 1973, págs. 67-98,y H. HOETINK, The Dominican Republic in the Nineteenth Century: Some noteson stratification, inmigration and race, incluido en M. MÓRNER (ed.), Race andClass in Latin America, New York, 1970.

'3 ANTHONY L. LA RUFFA, San Cipriano: Lije in a Puerto Rican Community,New York, 1971; ÓSCAR LEWIS, Eac/tground to La Vida, New York, 1968.

7* PATUICK CARROLL, Estudio sociodemográjico de personas con sangre negraen Jalapa, 1791, en Historia Mexicana, n ú m . 8 9 , 1 9 7 3 , págs . 1 1 1 - 1 2 5 ; E D G A R F .

LOVE, Marriage patterns o/ persons of African descent in a Colonial México CityParish, en Hispanic American Historical Rei/iew, 51 (1) , 1971, págs. 79-91.

Page 12: nuevos materiales para su estudio sociohistórico (I. América)

492 GERMÁN DE GRANDA BICC, XXXI, 1976

ta Rica70, Panamá76, Colombia 77, Ecuador78, Uruguay70 y Ar-gentina 80. Trabajos paralelos sobre áreas no hispánicas han sidotambién realizados, con metodologías diversas81, en las Anti-

75 MICHAEL D. OLIEN, The Ne.gro in Costa Rica: The role oj an ethnic mi-nority in a developing society, Winston-Salem, 1971.

" ALFREDO CASTILLERO CALVO, LOS negros y mulatos en ta historia socialpanameña, en Lotería, 14, núm. 164, 1969, págs. 61-96.

77 M u y b u e n a invest igación es N O R M A N E . W H I T T E N , jr . , Black. Frontiersmen.A South American Case, New York, 1974. Véanse también NICOLE PUJOL, Laraza negra en el Chocó. Antropología física, en Revista Colombiana de Antropo-logía, 15, 1970-1971, págs. 225-292; THOMAS G. SANDERS, The blac\s oj Colombia'sChocó: race, culture and power in Quibdó, Hanovcr (N. H.), 1970, y Economy,education and emigration in the Chocó, Hanover (N. H.), 1970. MAURICIO SOLAÚNy SIDNEY KRONUS, Discrimination without Violence: Miságenation and Racial Con-jüct in Latín America, Neiv York, 1973 (se refiere a Cartagena de Indias); T.LYNN SMITH, The racial composition o] the population oj Colombia, en Journalo\ Inter-American Studies, 8 (2), 1966, págs. 213-235.

78 NORMAN E. WHITTEN, Ritual enaetment o) sex roles in the Pacific lowlandsoj Ecuador-Colombia, en Ethnology, 13 (2), 1974, págs. 129-144, y The ecologyof race relations in Northwest Ecuador, en ¡ournal de la Société des Américanisles.58, 1969, págs. 223-233; JULIO ESTUPIÑÁN BASS, El negro en Esmeraldas: apuntespara su esludio, Quito, 1967. Es útil PAULO DE CARVALHO NETO, Bibliografía ajro-ecuatoríana, en Humanitas (Quito), 4 (2), 1963, págs. 5-19.

*9 CARLOS M. RAMA, The passing of the Afro-Vruguayans from coste societyinto class society, incluido en M. MÓRNER (ed.), Race and Class in Latin America,New York, 1970. Es valioso PAULO DE CARVALHO NETO, Apuntes críticos sobrealgunas fuentes antropológicas afro-uruguayas, en Boletín Bibliográfico de las Cien-cias del Hombre, Montevideo, I, 1964.

80 RrcARDo RODRÍGUEZ MOLAS, Condición social de los últimos descendientesde los esclavos rioplatenses, en Cuadernos Americanos, 21, 1962, págs. 133-170,y El negro en la sociedad porteña después de Caseros, en Comentarios (BuenosAires), 1959, págs. 45-55.

61 Son especialmente importantes DAVID LOWENTHAL, West Indian Societies,London, 1972, y Race and color in the West Indies, en Daedalos (Cambridge),96 (2), 1967, págs. 580-626; DAVID LOWENTHAL y LAMBROS COMITAS (eds.), Con-

sequences oj Class and Color: West Iridian Perspectives, New York, 1973; FER-NANDO HENRIQUES, Colour and contemporary society in the Caribbean, en ¡ournalde la Société des Américanistes, 58, 1969, págs. 207-22; M. G. SMITH, A Fra-meivork. jor Caribbean Studies, Mona, 1955.

83 Sobre las Antillas inglesas véanse CARL BRIDENBAUCH y ROBERTA BRIDEN-BAUGH, No Peace beyond the Une: The English in the Caribbean, 1624-1690,New York, 1972, y M. G. SMITH, Kinship and Community in Carriacou, NewHaven, 1962. Sobre las Antillas francesas MICHAEL HOROWITZ, Morne-Paysan:Peasant Village in Martinique, New York, 1967, e YVES DEBBASH, Couleur etliberté, Paris, 1967. Para las Antillas holandesas H. R. HOETINK, Het patroon van

Page 13: nuevos materiales para su estudio sociohistórico (I. América)

BICC, XXXI, 1976 ELEMENTOS LINGÜÍSTICOS AFROAMERICANOS 4 9 3

lias y Guayarías82, los Estados Unidos83, Brasil84, Centro-américa83 y Canadá 86. Son especialmente interesantes los de-dicados a las islas de San Andrés y Providencia, de poblaciónanglohablante y soberanía colombiana87.

En cuanto a estudios sobre la estructura familiar de losgrupos negros, son comparativamente escasos en las áreas his-pánicas *" y, por el contrario, abundantes y muy valiosos en laAmérica no hispánica89.

de oude Curacaose samenlcvin.g, Assen, 1958. Sobre las Guayarías véanse SILVIAW. DE GROOT, Djuka Society and Social Change, Assen, 1969, junto con JEANHURAULT, Ajricains de Guyane. The Haguc-Paris, 1970, ya citado.

83 Es útil, como orientación, ERWIN K. WELSCH, The Negro in the UnitedStates: a research guide, Bloomington, 1965.

84 Es excelente THOMAS E. SKIDMORE, Black into White. Race and Nationalityin Brazilian Thought, New York, 1974. Véase también KALERVO OBERC, Racerelations in Brazil, en Sociología (Sao Paulo), 20 (3), 1958, págs. 310-350, asícomo FLORESTÁN FERNANDKS, The Negro in Brazilian Society, New York, 1969,y EDISON CARNEIRO, Ladinos sobre o negro no Brasil, Río de Janeiro, 1964.

85 PIERRE BEAUCAGK, l^es Caraibes Noirs: trois siecles de changement social, enAnthropologica (Ottawa), 8 (2), 1966, págs. 175-195, y NANCIE SOLIEN DE GON-ZÁLEZ, Black. Carib adaplation to a Latín-American milieu, en Social and EconomicStudies (Mona), 14 (3), 1965, págs. 272-278.

M ROBÍN WINKS, The Blacks in Canadá, Montréal, 1971.87 PETER J. WILSO.V, Crab Antics: The social anthropology of English-speaking

Negro societies o¡ the Caribbean, New Havcn, 1973; EMILIO WILLEMS, San Andrés:continuity and change in the culture o¡ a Caribbean island, en NiedersachsischesLandesmuseum Hannover, Abteilung jür V 6lkerk,unde, V'ólkerkt'ndiche Abhand-lungen, 1, 1964, págs. 315-328; PETER J. WILON y JON BUETTNER-JANUSCH,Demography and evolution on Providencia Island, Colombia, en American Anlhro-pologist, 63 (5), 1961, págs. 940-954.

68 ANGELINA POLLAK-ELTZ, The Black. Family in Venezuela, Wien, 1974. Véasetambién VIRGINIA GUTIÉRREZ DE PINEDA, Familia y Cultura en Colombia: tipo-logías, junciones y dinámica de la jamilia, Bogotá, 1968; INÉS REICHEL-DOLMATOFFAspects de la vie de la femme noire dans le passé et de nos jours en Colombie(cote atlantique), en R. BASTIDE (ed.), La Femme de Couleur en Amérique Latine,París, 1974, págs. 247-265. Sobre la familia esclava negra en la época colonial esimportante RICHARD KONETZKE, Die Sk.lavenjamilie im ko¡on'"¡'n Hispanoamérica,en Collectanea Charles Verlinden, Gand, 1975, págs. 321-334.

80 Véanse especialmente HYMAN RODMAN, Lower-class Families: The Cultureof Poverty in Negro Trinidad, New York, 1971; NANCIE SOLIEN DE GONZÁLEZ,Black. Carib Household Strticture: A Stndy oj Migralion and Dcvelopment, Scattle,1969; ANDREW BILLINCSLEY, Black. Families in White America, Englewood Cliffs,1968; JESSIE BERNARD, Marriage and Family among Negroes, Englewood Cliffs,1966; JUDITH BLAKE, Family Strticture tn Jamaica: The Social Context oj Repro-duction, Glencoe, 1961.

Page 14: nuevos materiales para su estudio sociohistórico (I. América)

494 GERMÁN DE GRANDA BICC, XXXI, 1976

Pocos y, en general, superficiales son también los trabajosdedicados al influjo cultural africano en Hispanoamérica concarácter general80, siendo, en cambio, de mucho mejor calidadcientífica algunas investigaciones de área91. El mismo juiciopuede expresarse respecto a los territorios no hispánicos deAmérica02.

La religión afroamericana sigue siendo, en los últimos años,uno de los ámbitos de investigación más y mejor trabajados.En la América hispánica sobresalen los excelentes estudios de laespecialista Angelina Pollak-Eltz03, a los que pueden añadirse

°° Por ejemplo ARGELIERS LEÓN, Consideraciones en torno a la presencia derasgos a/ricanos en ¡a cultura popular americana, en Santiago (Santiago de Cuba),13-14, 1973-1974, págs. 49-77. Véase el volumen de PAULO DE CARVALHO NETO,Estudios ajros, Caracas, 1971.

n Véanse ANGELINA POLLAK-ELTZ, Vestigios africanos en la cultura de! pueblovenezolano, Caracas, 1972; NORMAN E. W H I T T E N , jr. y NINA S. DE FRIEDEMAN,

La cultura negra del litoral ecuatoriano y colombiano: un modelo de adaptaciónétnica, en Revista Colombiana de Antropología, 17, 1974, págs. 75-115. Son muyinferiores ARCELIERS LEÓN, Presencia del africano en la cultura cubana, en Islas,núm. 41 , 1972, págs. 155-169, BERTA MONTERO DE BASCOM, Influencias africa-nas en la cultura cubana, en Ciencias Sociales, 5, 1954, págs. 98-102 y MARCIOVELOZ MAGCIOLO, Remanentes indígenas y africanos en Santo Domingo, en RevistaDominicana de Antropología e Historia, 4, 1974, págs. 19-26.

03 Es excelente GUY B. JOHNSON, Folk. Culture in St. Helena Island, South Ca-rolina, Hatboro (Pa.) , 1968. Véanse, para Brasil, FERNANDO AUGUSTO ALBUQUERQUEMOURÍO, La contribution de l'Afrique bantoue a la formation de la société brési-lienne, Sao Paulo, 1974; OUSMANE SILLA, l.'afro-brésilien dans sa nation, en Bu-lletin de ¡' I. F. A. N. (Dakar) serie B, 31 (2) , 1969, págs. 533-573; M. L.RIBEIRO, Influencia da cultura angolense no Vale de l'araiba, en Revista Brasileirade Folclore, 8, núm. 21 , 1968, págs. 155-172; MKSQUITELA LIMA, Da importanciados estudos bantos para a compreensáo da problemática socio-cultural brasileira,Luanda, 1963; J. H. RODRIGUES, The injluence of África on Brazil and Brazil onÁfrica, en Journal of A frican History, 3 (1 ) , 1962, págs. 49-67.

" Cultos afroamericanos, Caracas, 1973; El concepto de múltiples almas y al-gunos ritos fúnebres entre los negros americanos, en Montalbán (Caracas), 3, págs.157-204; El culto de los gemelos en África occidental y en las Américas, enAmérica Latina (Río de Janeiro), 12 (2) , 1969, págs. 66-78; The Yoruba religiónand its decline in the Américas, en XXXVUl International Congress of America-nists, III. Stuttgart-München, 1969, págs. 423-427; Religiones africanas en lasAméricas, en Boletín de la Asociación Cultural Humboldt (Caracas), 4, 1968,págs. 51-65.

Page 15: nuevos materiales para su estudio sociohistórico (I. América)

BICC, XXXI, 1976 ELEMENTOS LINGÜÍSTICOS AFROAMERICANOS 495

algunos otros de carácter generalM y varios más dedicados ala santería cubana95 y a la secta Abakuá °6 de la misma isla.

En cuanto a zonas no hispánicas se destacan, junto a buenosenfoques generales97, meritorias investigaciones sobre fenóme-nos religiosos, de componente africano, en Brasil °8, Haití",Trinidad 10°, Jamaica y Surinam101.

°* HANS-ALBERT STEGER, El trasjondo revolucionario del sincretismo criollo:aspectos sociales de la transformación clandestina de la religión en Afroaméricacolonial y postcolonial, Cuernavaca, 1972.

" ROSALÍA GARCÍA HERRERA, Observaciones etnológicas de dos sectas religiosasen una comunidad lajera: La Guinea, en Islas (Universidad de Las Villas), núm.24; ARGELIERS LEÓN, Elebwa: una divinidad de ¡a santería cubana, en Abhand-¡ungen und Berichte des Staatlichen Museum jür Volk.erk.unde (Dresden), 21,1962, págs. 57-62 y CARLOS CANET, Luctimí: religión de los yorubas en Cuba, Miami,1973, obra esta última muy bien documentada. La obra de MIGEKE GONZÁLEZ-WIPPLER, Ajrican Magic in Latin America: Santería, New York, 1973, es muysuperficial y, a veces, facilita datos erróneos, pero es útil.

** ARGELIERS LEÓN, El círculo de dominación, en Universidad de La Habana,núms. 196-197, 1973, págs. 130-146; LYDIA CABRERA, Ritual y símbolos de la ini-ciación en la sociedad secreta Abakuá, en Journal de la Société des Américanistes,58, 1969, págs. 139-171; JOSÉ ÁNGEL BUSTAMANTE, El sacrificio totémico en elBaroko ñañigo, en Revista Bimestre Cubana, 73 (2), 1957, págs. 29-63.

K Véanse, en especial, GEORCE EATON SIMPSON, Afro-American religions andreligious behavior, en Caribbean Studies, 12 (2), 1972, págs. 5-30, y ReligiousCulis of the Caribbean: Trinidad, Jamaica and Haití, Rio Piedras, 1970 (recopi-lación de artículos ya publicados con anterioridad).

M SETH y RUTH LF.ACOCK, Spirits of the Deep: a Study of an Afro-BrazilianCult, Garden City, 1972 (se refiere al batuque de Belem); VERA LUCÍA PALMAPAGLIUCHI, Le spirilisme d'Umbanda. Analyse structurale d'une séance et de ladoctrine dans un 'terreiro' paulista, Louvain, 1970; MARIO BARCELOS, O livro doexército bronco de Oxalá, Río de Janeiro, 1970; A. NUNES FILHO, Umbanda, religiáo-desafio, Río de Janeiro, 1970; DONALD WARREN, jr., Notes on the histórica! origimof Umbanda, en Universilas (Bahía), núms. 6-7, 1970, págs. 155-163; Josa Ri-BEIRO, As festas dos Eguns, Río de Jainero, 1969, y O ritual africano e os seusmisterios, Río de Janeiro, 1969; JUANA ELBEIN y DEOSCÓREDES DOS SANTOS, Ancestorworship in Bahía. The Egun cult, en Journal de la Société des Américanistes, 58,1969, págs. 79 y sigs.: ANTONIO A. TEIXEIRA NETO, Oxossi (S. Sebastiao), Río deJaneiro, 1968; J. B. CORREA NERY, A Cabula. Um culto ajro-brasileiro, EspiritoSanto, 1963.

°° M. LACUERRE, The place of Voodoo in social structttre of Haití, en Ca-ribbean Quarterly, 19 (3), 1973, págs. 36-50; L. HURBON, Dieu dans le Vaudooháitien, París, 1972; GISELLE COSSARD-BINON, La filie de saint, en Journal de laSociété des Américanistes, 58, 1969, págs. 57-78; HAROLD COURLANDER y REMVBASTIEN, Religión and Politics in Haití, Washington, 1966.

100 J. D. ELDER, The Yoruba ancestor cult in Gasparillo: its structure, orga-nization and social junction in community, en Caribbean Quarterly, 16 (3), 1970,

Page 16: nuevos materiales para su estudio sociohistórico (I. América)

496 GERMÁN DE GRANDA BICC, XXXI, 1976

Como actividades íntimamente relacionadas con elemen-tos religiosos pueden ser consideradas la magia102, la adivina-ción 103 y la medicina popular 304, las cuales, desgraciadamente,casi no han recibido atención en Hispanoamérica, aunque sí enotras áreas del continente.

La penetración africana en el folclor hispanoamericano,considerado en conjunto, ha sido muy superficialmente tratadaen determinadas áreas como Cuba 1Oi) y Ecuador 10G. Los ele-mentos del folclor oral afroamericano lo han sido de un modoalgo más detenido10T, si bien inferior al nivel alcanzado enépocas anteriores108. Algo sorprendente es el interés que parecedespertar la presencia de temas afroamericanos en la literatura

págs. 5-20; ANCELINA POLLAK-ELTZ, Shango Kult und Shotttcr Kirchc in Trinidadund Grenada, en Anthropos, 1970, págs. 813-814; GEORGK Ií. SIMPSOM, The accul-turative process in Trinidadian Shango, en Anthropological Quarterly, 37 (1),1964, págs. 16-27.

101 J. C. MOORE, Religious syncretism in Jamaica, en Practica! Anthropology,12, 1965, págs. 63-70. Para Surinam véase CHARLES WOODING, Winti: een Afroame-rik&anse godsdienst in Surinamt, Weppcl, 1972.

>0! M. MESSEGUE y A. GAYOT, Ce soir le atable viendra te prendre. La sorcel-lerie aux Antiües, París, 1968.

103 Excelente es W. BASCOM, Ifa Divination, Bloomington, 1969. Véase tam-bién BYRON TORRES DE FREITAS, O jogo dos buzlos, Río de Jainero, 1966.

101 LEONARD BARRETT, Portrait oj a ¡amaican healer: African medical ¡ore inthe Caribbean, en Caribbean Quarterly, 19 (3), 1973, págs. 6-19; ALCEU MAYNARDARAUJO, Medicina rústica, Sao Paulo, 1961.

1M Véanse JOSÉ L. FRANCO, Folklore afrocubano, en Cahiers d'Histoire Mon-diale, 13 (4), 1971, págs. 663-698, y Folklore criollo y afrocubano, La Habana,1959.

100 ADALBERTO ORTIZ, La negritud en la cultura latinoamericana: poemas ne-gristas, en Expresiones Culturales del Ecuador, 1, 1972, págs. 10-22 (a pesar deltítulo, es una revisión de elementos folclóricos africanos de todas clases en Ecuador).

107 MANUEL ZAPATA OLIVELLA, Tradición oral y conducta en Córdoba, Bo-gotá, 1972; GERMÁN DE GRANDA, Notas para una tipología de las fórmulas oralesen un área colombiana de población negra, en Revista Española de Lingüística, 4,1974, 363-374; Décimas tradicionales en Iscuandé (Nariño, Colombia), en Revistade Dialectología y Tradiciones Populares, 30, 1974, págs. 315-321, y Adivinanzasde tradición oral en Iscuandé (Nariño, Colombia), en la misma revista, 30, 1974,págs. 223-226.

108 Cfr. LYDIA CABRERA, Contes negres de Cuba, París, 1936; Cuentos negrosde Cuba, La Habana, 1940, y Refranes de negros viejos, La Habana, 1945; RA-MÓN GUIRAO, Cuentos y leyendas negros de Cuba, La Habana, s. f.

Page 17: nuevos materiales para su estudio sociohistórico (I. América)

BICC, XXXI, 1976 ELEMENTOS LINGÜÍSTICOS AFROAMERICANOS 4 9 7

de Hispanoamérica 109, paralelamente a lo que ocurre en otraszonas del continente n o , si bien en estas últimas áreas se dedicamás atención a los elementos del folclor oral U1.

De la música afroamericana, que es objeto de valiosos estu-dios a nivel teórico y general11L>. se han ocupado, en los terri-

108 Luis BF.LTRÁN, Éléments ajricains dans la poésie hispanoaméricaine, enLectura Ajricaines (Lubumbashi), 2 (1) , 1973-1974, págs. 42-51; MARÍA TERESA

BABÍN, Aristas de la esclavitud negra en la literatura de Puerto Rico, en Sin Nombre,4 (2), 1973, págs. 57-65; PEDRO M. BARRILDA-TOMÁS, Alejo Carpentier: dos visio-nes del negro, dos conceptos de la novela, en Hispania, 55 (1), 1972, págs. 34-44;SERGIO VIDAL BERNAL, Caracterización lingüistica del negro en la novela "¡Ecué-

Yamba-O!" de Alejo Carpentier, en Anuario L/L, (La Habana), 2, 1971, págs.123-170; ILDEFONSO PEREDA VALDÉS, LO negro y lo mulato en la poesía cubana,

Montevideo, 1970; M. MANSOUR, Circunstancia e imágenes de la poesía negrista,en Revista de la Universidad de México, 25, 1970, págs. 25-32; RICHARD RENAUD,Juyungo, d'Adalberto Ortiz OH: de la haine raciale a ¡a lulte contre l'injustice, tnBulletin Hispanique, 72 (1-2), 1970, págs. 152-170; JOSÉ ANTONIO PORTUONDO,

El negro, héroe, bufón y persona en la literatura cubana colonial, en Etnología yFolklore, 7, 1969, págs. 63-68; RENE DEPESTRE, Problemas de la identidad delhombre negro en las literaturas antillanas, en Casa de las Américas, núm. 53,1969, págs. 19-28; N. ESTUPIÑÁN BASS, Apuntes sobre el negro de Esmeraldas enla literatura ecuatoriana, en Norte (Amstcrdam), 8 (5), 1967.

110 Véanse, por ejemplo, SEYMOUR GROSS y J. E. HAROY, Images o) the Negro

in American Litcrature, Chicago, 1966; H. M. GLOSTER, Negro Voices in AmericanFiction, New York, 1965; R. A. BONE, The Negro Novel in America, New Havcn,1965; ANTONIO OLINTO, The Negro in Brazilian Literature, en Ajrican Forum, 2(4), 1967; R. G. HAMILTON, Ajro-Brazilian culis in the novéis oj Jorge Amado,en Hispania, 50 (2) 1967; S. A. BROWN, A Century o/ negro portraiture inAmerican literature, en Massachusetts Review, 7 (1), 1967, págs. 73-96; RAYMONDSAYERS, The Negro in Brazilian Uteralure, New York, 1956, etc.

111 Buenas elaboraciones teóricas son ROCER D. ABRAHAMS, The shaping ojfolklore traditions in the British West Indies, en Journal oj ínter-American Studies(Coral Cables), 9 (3), 1967, págs. 456-480, y MARY ARNOLD TWINING, An anthro-

pological lool( at Ajro-American jolk, narrative, en CLA Journal (Baltimore), 14(1), 1970, págs. 57-61. Notables colecciones de textos son DKOSCÓREDES DOS SANTOS,Conlos de Naga, Río de Janeiro, 1963, y Cantos negros de Bahía, Río de Janeiro,1961; RICHARD DORSON, Negro Folktales oj Michigan, Cambridge, 1956; SUZANVE

COMHAIRE-SYLVAIN, Les Cantes haitiens, Wetteren, 1937, etc. Aún no ha sidopublicada la tesis de ROCH LUCIEN MIRABEAU, Cantes joll(loriques de Port-au-

Prince: étude linguistique et littéraire (Universidad de Illinois, 1967). Véase tam-bién DANIEL J. CROWLEY, / Could Talk. Oíd History Good: Creativity in BahamianFolklore, Berkeley-Los Angeles, 1966.

111 Véase, ante todo, GEORGE LIST y JUAN SALAS (eds.), Music in the Ame-

ricas, Hloomington, 1967. También ALAN LOMAX, The homogeneity oj Ajrican-Ajroamerican musical style, en N. E. WHITTEN y J. SZWED (cds.), Ajro-American

Page 18: nuevos materiales para su estudio sociohistórico (I. América)

498 GERMÁN DE GRANDA BICC, XXXI, 1976

torios hispánicos, algunos especialistas m , entre los que descue-llan las figuras de los infatigables Luis Felipe Ramón y Rive-ra 114 e Isabel Aretz de Ramón y Rivera115. En lo que se refierea otros aspectos culturales afroamericanos como son el arte n 0 ,la danza117, los hábitos alimenticios118, etc., que han sido in-vestigados, al menos parcialmente, en algunas otras zonas ame-ricanas, son, desgraciadamente, ignorados en las áreas hispáni-cas, así como lo son varios componentes parciales de las acti-vidades vitales afrohispánicas.

Finalmente y en relación con los rasgos lingüísticos de losnúcleos sociales afroamericanos, que han sido objeto de seriaconsideración, en los últimos años, en diferentes zonas no his-pánicas como Brasil no , Estados Unidos120, Jamaica121, Trini-

Anthropology. Conteníporary Perspectiva, New York, 1970, págs. 129-144, y ALANP. MERRIAN, The Anthropology oj Music, Evanston, 1964. Igualmente JEROME S.HANDLER, y CHARLOTTE J. FRISBIE, Aspects of llave lije in Barbados: Music andits cultural context, en Caribbean Studies, 11 (4), 1972, págs. 5-46.

111 Por ejemplo ARMANDO FORTUNE, Presencia africana en la música paname-ña, en Lotería, núm. 213, 1973, págs. 42-52; NásToR ORTIZ ODERICO, Calunga.Croquis de Candombe, Buenos Aires, 1969.

" ' Es excelente su libro La música ajro-venezolana, Caracas, 1971. Véansetambién La música ajro-venezolana, en 25 Estudios de Folklore. Homenaje a V. T.Mendoza y V. Rodríguez Rivera, México, 1971, págs. 225-230; Música afro-ecua-toriana, en Folklore Americano (Lima), núm. 15, 1967-1968, págs. 70-86, y Elmestizaje de la música afro-venezolana, en G. LIST y J. ORREGO SALAS (cds.),Music in the Americas, Bloomington, 1967.

118 Por ejemplo, cfr. Instrumentos musicales de Venezuela, Cumaná, 1967.110 Cfr. PHILIP J. C. DARX, Bush Negro Are an African Art in the Americas,

London, 1954.

"T RENATO ALMEIDA, Danses ajricaines en Amérique Latine, Río de Janeiro,1969.

" ' JOSÉ RIBEIRO, Amalas. A cozinha africana, Río de Janeiro, 1969; Luis DACÁMARA CASCUDO, Historia da alimentacáo do Brasil, Sao Paulo, 1967 (véase la2* parte: Dieta africana).

'" JEAN-PIERRE ANGENOT, JEAN-PIERRE JACQUEMIN y JACQUES L. VINCKE, Ri-

pertoire des vocables brésiliens d'origine ajricaine, Lubumbashi, 1974; YÉDA PESSOADE CASTRO, Etnónimos africanos e formas ocurrentes no Brasil, en Ajro-Asia(Bahía), núm. 6-7, 1968, págs. 63-83 y A sobrevivencia das lenguas africanas noBrasil: sua influencia na linguagem popular da Bahía, en la misma revista, núms.4-5, 1967, págs. 25-33; ADELINO BRANDSO, Contribuicoes afro-negras ao léxico po-pular brasileiro, en Revista Brasileira de Folclore, 8, núm. 21, 1968, págs. 119-128;JÜRGEN ZWERNEMANN, Ein "Curunsi" Vokjabular aus Bahía. Ein Beitrag zur Afro-

Page 19: nuevos materiales para su estudio sociohistórico (I. América)

BICC, XXXI, 1976 ELEMENTOS LINGÜÍSTICOS AFROAMERICANOS 499

dad 122, las Guayanas123, etc., es preciso reconocer que salvo enCuba, donde un grupo de lingüistas se dedica, con desigualfortuna, a este tipo de trabajos 124, en el resto de Hispanoamé-rica las investigaciones lingüísticas afrohispánicas son desarro-lladas, hoy, por un reducidísimo grupo de especialistas a losque se deben las únicas investigaciones que, acerca de temascomo las lenguas africanas en América125, los africanismosléxicos120, fonéticos127 o semánticos128 que se han incorporado

Americanista^, en Tribus (Stuttgart), 17, 1968, págs. 147-156. Aún no se hapublicado la tesis de WILLIAM W. MEGENNEY, An Ei/wo!ingiiistic Sludy of WestAjrican Influence on Balitan Portuguese (University of New México, 1970).

"° Véase, como orientación respecto a la gran cantidad de estudios publicadossobre este tema, I. W. BRASCH y W. M. BRASCII, A Comprehensive Annotated Bi-bliography of American B/ac/( English, Baton Rouge, 197-1.

121 DAVID DALBY, Ashanti sttrvivals in the language and traditions of theWindward Maroons oj Jamaica, en Ajrican Language Sttidies, 12, 1971, págs. 31-51.

la MAUREKN WARNER, Trinidad Yoruba. Notes on survivals, en Caribbean Quar-terly, 17, 1971, págs. 40-19, y Some Yoruba descendants in Trinidad, en Buüetinoj the Ajrican Stttdies Association of the West Indies (Kingston), 3, 1970, págs. 9-16.

1=1 RICHARD y SALLY PRICE, Saramal^a onomastics: an Ajro-American namingsystem, en Ethnology (Pittsburgh), 11 (4), 1972, págs. 341-367.

! ! l GEMA VALDÉS ACOSTA, Descripción de remanentes de lenguas bantúes enSanta Isabel de las Lajas, en Islas (Universidad de Las Villas), núm. 48, 1974,págs. 67-85; C. J. QUESADA MIRANDA, Remanentes de una lengua africana utili-zada por la sociedad secreta de los Abactio en Cuba, en la misma revista, núm.45, 1973, págs. 143-246; José GARCÍA GONZÁLEZ, Remanentes lingüísticos mun-sundis: Un estudio descriptivo, en la misma revista, núm. 44, 1973. A épocas an-teriores de la investigación sobre estos temas en Cuba corresponden los trabajossiguientes: NICOLÁS ANGARICA, El lucumí al alcance de todos, La Habana s. £.;JUAN LUIS MARTÍN, Muliaroco: Sango Recobebá, La Habana, 1945; W. R. BASCOM,The yoruba oj Cuba, en Nigeria (Lagos), 37, 1951, págs. 14-20; DAVID L. OLMS-TED, Comparative notes on Yoruba and Lucumí, en Language, 29, 1953, págs.157-163; MANUEL HURTADO DE MENDOZA, Vocabulario chimbungo, en Archivos delFolklore Cubano, 2 (1), 1926, págs. 89-91.

l x GERMÁN DE GRANDA, De la matrice africaine de la 'ianguc congo' de Cuba,Dakar, 1973; Portuguesismos léxicos en la 'lengua congo' de Cuba, en Boletín deFilología (Lisboa), 22 (3-4), 1973, págs. 235-250, y Un ejemplo lingüístico delproceso de reinterpretación de rasgos culturales africanos en América (k.il(ongonsimbo lengua congo de Cuba simbo), en Annali (Ñapóles), 14 (1), 1972, págs.87-95.

"* GERMÁN DE GRANDA, Un afortunado fitónimo bantú: Macondo, en The-satirus, 26, 1971, págs. 485-494; Notas sobre léxico palenquero de origen bantú,en Boletín de Filología (Madrid), núms. 49-50, 1971, págs. 9-13; Evidencia sobre

Page 20: nuevos materiales para su estudio sociohistórico (I. América)

500 GERMÁN DE GRANDA BICC, XXXI, 1976

al castellano americano, las hablas criollas de origen africa-no 120, la descripción del español hablado en áreas de poblaciónnegra 13t), etc., se vienen realizando en los últimos años.

No es demasiado optimista, salvo en lo que se refiere atemas muy concretos y determinados, la perspectiva que ofre-cen, en los últimos años, los estudios afrohispanoamericanos y,más concretamente, el ámbito lingüístico de los mismos. Esde desear que, en el inmediato futuro, pueda alterarse favora-blemente este juicio, mediante el aumento cuantitativo y lamejora cualitativa de las investigaciones realizadas sobre una

el origen y la etimología del americanismo macuto, en Revista de Dialectología yTradiciones Populares, 28 (1-2), 1972, págs. 138-144; Algunas observaciones mor-jológicas y etimológicas sobre vocabulario de origen banlú en el habla criolla deSan Basilio de Palenque (Bolívar, Colombia), en la misma revista, 29, 1973, págs.135-441; Un zoánimo de origen banlú en el léxico de Tumaco, Colombia, en The-saurus, 29, 1974, págs. 429-434. Sobre el inglés de la Isla de San Andrés (desoberanía colombiana) es interesante JAY EDUARDS, Ajrican influences on the En-glish o] San Andrés Island, Colombia, en D. DE CAMP y IAN F. HANCOCK (eds.>Pidgins and Creóles: Curren! Trends and Prospects, Washington, 1974, págs. 1-26.

117 GERMÁN DE GRANDA, Diatopía, diastratía y diacronía de un fenómeno fo-nético dialectal en el Occidente de Colombia, en Thesaurus, 29, 1974, págs. 221-253.

12S GERMÁN DE GRANDA, Semántica, antropología e historia en una investiga-ción etimológica (sobre el americanismo salar), en Proemio (Madrid), 4 (1-2),1973, págs. 177-187.

120 GERMÁN DE GRANDA, Cimarronismo, palenques y lenguas criollas en His-panoamérica, en Thesaurus, 25, 1970; Sobre el origen africano del habla de SanBasilio de Palenque (Bolívar, Colombia), en la misma revista, 26, 1971, págs.84-94; Algunos datos sobre la pervivencia del criollo en Cuba, en Boletín de laReal Academia Española, 51, 1971, págs. 481-491; Estructuras lingüísticas y rela-ción genética en un habla criolla de Hispanoamérica, en Filología (Buenos Aires),16, 1972, págs. 119-133; Estado actual y perspectivas de la investigación sobre len-guas criollas en Hispanoamérica, en Anuario de Letras (México), 10, 1972, págs.5-27; Papiamento en Hispanoamérica (siglos XVH-X1X), en Thesaurus, 28, 1973,págs. 1-13; Análisis semántico y diacronía (sobre un ejemplo criollo-atlántico), enBoletín de la Real Academia Española, 54, 1974, págs. 315-323; Un posible mo-delo para ¡a descripción sociolingüística de las hablas criollas atlánticas con espe-cial atención a las del área hispanoamericana, en Zeitschrijt für romanische Philo-logie, 90, 1974, págs. 174-202.

"° Josa JOAQUÍN MONTES, El habla del Chocó: notas breves, en Thesaurus, 29(3), 1974, págs. 409-428; GERMÁN DE GRANDA, Dialectología, historia social y so-ciología lingüistica en Iscuandé (Departamento de Nariño, Colombia), en la mismarevista, 28 (3), 1973, págs. 445-470; Técnicas y vocabulario de ¡a orfebrería deloro en Barbacoas (Colombia), en Revista de Dialectología y Tradiciones Populares,30, 1974, págs. 29-41.

Page 21: nuevos materiales para su estudio sociohistórico (I. América)

BICC, XXXI, 1976 ELEMENTOS LINGÜÍSTICOS AFROAMERICANOS 501

materia que, como la que aquí consideramos, ofrece tan dila-tado y fructífero campo de trabajo a los americanistas y, enparticular, a los lingüistas especializados en español de Amé-rica. Desearía que los materiales recogidos en este artículo pu-dieran ser de alguna utilidad para conseguir este propósito.

GERMÁN DE GRANDA.

Universidad Autónoma de Madrid.