La revista del GreenFilmFest2013edición nº1

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EQUIPOGREEN FILM FEST

Fundadora y directora general Alejandra Cordes

Producción EjecutivaAstrid HoffmannRocío Bonavita

Asistencia en ProducciónIlona SzentiványiMaría José CastilloRomeo Manzanedo

ColaboradoresSabrina LiparotiAgustín Suárez Ortega

ProgramaciónSusana Rodrigues

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REVISTA CONECTA

Edición general de contenidosTais Gadea Lara

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Diseño GráficoNomi Galanternik

Edición Audiovisual Sergio Cabouli

Prensa

CONECTANDO REDES

Hace 4 años fundamos un festival de cine ambiental con una misión muy clara: utilizar el cine como medio para generar conciencia ambiental. Nos animamos a emprender en un terreno bastante desconocido en ese momento. Queríamos traer contenido que de otra manera no llegaría al país. Confiábamos en la calidad de las películas convencidos de que “el trabajo de concientización lo haría la película”. Cuatro años des-pués seguimos trabajando con la misma pasión del primer día, pero con la tranquilidad de un nombre que ya nos legitima.

Hoy nos animamos a más. Conecta, la revista del Green Film Fest, es nuestra manera de seguir creciendo, de ofrecerle a nuestro fiel púbico –que todos los años nos acompaña y espera con ansias el festival– notas periodísticas con una perspectiva local de lo que está sucediendo en la Argentina en materia ambiental, y a la vez acercando el trabajo que realizan las 85 instituciones y empresas verdes que apoyan el Green Film Fest.

Esperamos que lean la revista y que luego la hagan circular, porque nuestro objetivo es que no se tire cuando termina el festival, sino que se comparta. Por sobre todas las cosas, que lleve a la reflexión indivi-dual para tomar conciencia ambiental.

Ojalá puedan disfrutar de esta nueva publicación tanto como nosotros disfrutamos hacerla, así como de las 15 películas nacionales e internacionales que elegimos para esta edición.

Gracias a todos los que nos acompañan, gracias por dejarnos hacer lo que más nos gusta.

Alejandra CordesFundadora y Directora Green Film Fest

4.

El impacto de una película de unos 90 minutos puede cambiar una vida, mover decisiones politicas e impulsar grandes cambios en las corpora-ciones. El papel del cine en nuestra vida es innegable.

Hoy el planeta está viviendo una película de terror y, lamentablemente, no hay nada ficcionado, es todo real. Estamos rodando en tiempo real el documental de nuestro propio apocalipsis.

No somos todos igualmente responsables, hay que decirlo. Los slogans que apuntan en esa dirección son los favoritos de empresas y gobiernos irresponsables que buscan diluir, minimizar o demorar las acciones que verdaderamente provocan la diferencia. Sin embargo, por más mínima cuota de responsabilidad que los individuos comunes tengamos en lo que está pasando, una vez que nos damos cuenta de todo lo que podemos hacer, sabemos que podemos pasar a ser protagonistas y ya no hay excusas.

Unidos como individuos conscientes podemos transformar esta película de terror en una película de acción, el final estará siempre abierto, pero lo que importa es dejar de ser extras y ponernos al frente de nuestro destino buscando un nuevo rol.

Si estás en una empresa buscá por todos los medios que no destruya el planeta a cambio de maximizar ganancias, buscá inteligentemente el menor impacto, buscá con creatividad la forma en que la performance incluso sirva para arreglar daños provocados y que el presupuesto de Responsabilidad Social no sea un adorno para quedar bien sino que tenga una relación lógica con las áreas netamente comerciales.

Si estás en el gobierno utilizá tu astucia para que las medidas am-bientales más progresistas generen redito político y no transes nunca cuando el daño sea irreversible. Estate dispuesto a jugar todo tu capi-tal político por tomar las acciones más jugadas en términos ambienta-les, el planeta realmente está complicado y necesita líderes con visión y rapidez de reflejos.

La taquilla de la sustentabilidad se mide con acciones concretas a todo nivel, no estar en una empresa o no estar en el gobierno no nos exime de hacer nuestra parte, más aún cuando sabemos que pode-mos hacer algo. Hagamos todas las acciones cotidianas que tenga-mos a mano para consumir menos, ahorrar energía, agua, separar nuestra basura en origen y utilicemos nuestro poder de consumido-res siempre a favor del planeta. Y finalmente, donemos dinero para salvar bosques, para plantar árboles, para proteger especies en vías de extinción, para concientizar, no dejemos de apoyar con dinero a las ONGs porque allí hay personas que entregan la vida para mover empresas y gobiernos hacia un final feliz… lo que en realidad significa que la vida en la tierra no tenga final.

Emiliano Ezcurra Director Banco de Bosques

DEL TERROR A LA ACCION

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naturaleza

cambio climático

urbanismo

alimentación

economía verde

residuos

consumo responsable

activismo

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Planet ocean Una nueva aventura cinematográfica de Yann Arthus-Bertrand en la que nos invita a acompañar las misiones científicas de Tara, un equipo de investigadores, oceanógrafos y biólogos de varios países, con el propósi-to de promover la conservación de los océanos y su biósfera. Por medio de una impactante fotografía, el director nos embarca en un viaje inédito al corazón oceánico de distintas regiones del planeta para conocer las experiencias más humanas y más terroríficas de nuestro tiempo. El filme fue presentado en el marco de la Cumbre de la Tierra de Río+20 ante representantes políticos de todo el mundo.

Proyecciones: jueves 15, 22:15 hssábado 17, 20:00 hsdomingo 18, 17:30 hs

Año: 2012Director: Yann Arthus-Bertrand Origen: FranciaDuración: 90 min.

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© Yann Arthus-Bertrand/Altitude - Whale off the coast of the Valdes

peninsula, Argentina. (42°23’ S, 64°29’ W).

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Sammy II: el gran escape Luego de numerosas aventuras juntos, la tortuga Sammy y su mejor amigo

Ray han decidido pasarle el legado a las crías recién nacidas, Ricky y Ella.

En sus primeros aleteos en el gran océano, Sammy y Ray son capturados

por pescadores furtivos y enviados a un acuario en Dubai, en el que intenta-

rán emprender un plan de fuga. Pero del otro lado del océano, las pequeñas

tortugas también irán en busca de sus padres. Emoción y diversión para

chicos y grandes que invita a reflexionar sobre aquellos espacios turísticos

que nosotros disfrutamos, ¿Pero qué ocurre con los animales?

Proyecciones: sábado 17, 15:00 hslunes 19, 12:30 hs

Año: 2012Director: Vincent Kesteloot, Ben Strassen Origen: BélgicaDuración: 92 min.

10.

Es el principal objetivo de quienes buscamos habitar este planeta no en un grado de superioridad frente a las otras especies animales y vege-tales, sino en un estado de equilibrio pacífico. ¿Qué errores cometimos en el camino y qué avances esta-mos logrando?

“El cambio climático es la consecuencia más visible del uso desmedido que estamos haciendo de los recursos naturales a nivel global”, asegura Inés Lanz, directora de Comunicación de Fundación Vida Silvestre. En las ediciones anteriores del festival disfrutamos de los más increíbles paisajes que la naturaleza nos regala a diario. Sin embargo, si continuamos consumiendo los recursos en un 30% más de lo que el planeta puede brindarnos, necesita-ríamos 1.3 planetas para sobrevivir.

“En Argentina, hay 500 especies en peligro de extinción, dentro de las cuales las más amenazadas son el Venado de las Pampas, el Tatú Carreta, el Yaguareté, el Oso Hormiguero, el Gato Andino, el Huemul y el Macá tobiano”, explica Lanz y ejempli-fica la gravedad de la situación: “El Yaguareté hoy

sólo ocupa entre un 10 y 15% de su distribución original en el continente americano y se estima que en Argentina sólo quedan 200 ejemplares”. ¿A qué se debe esta situación? Ni más ni menos que a la pérdida de su hábitat producto de la deforestación, su caza ilegal e indiscriminada o la de sus presas y los conflictos con animales domésticos. Acciones responsables del ser humano.

La promulgación de la Ley de Bosques en 2007 aún es motivo de debate en reclamo de su correcta implementación a fin de detener la desmedida defo-restación que sufren estos “pulmones” del planeta.

¿Qué ocurre fuera de la superficie terrestre, en aquellos paradisíacos y armoniosos celestes y azules que caracterizan las más diferentes formas que adopta el océano en nuestro planeta y que tan maravillosamente muestra el fotógrafo francés Yan Arthus-Bertrand en su documental Planet Ocean? Ese equilibrio natural lamentablemente también se ve alterado por la mano del hombre. “Argentina se encuentra entre los primeros cinco países del mundo en explotación de tiburones, uno de los principales animales que conforman las especies de peces car-tilaginosos a nivel local”, manifiesta Roxana García Liotta, directora del programa Conservación de

POR UNA CONVIVENCIA CON RESPETO Y EN ARMONÍA

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© Yann Arthus-Bertrand/Altitude - Raja Ampat Islands (Four Kings),

West Papua province, Indonesia (0°41’ S, 130°25’ E).

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Tiburones, quien advierte que aún son un mero recurso pesquero al no ser considerados como fauna silvestre dentro de la ley nacional.

Los peces son víctimas de la explotación sea para consumo humano –sin prever los riesgos ante la presencia de mercurio y neurotoxinas– o para divertimento propio en acuarios, problemática que se evidencia de manera didáctica en el filme infantil Sammy II: El Gran Escape. “Las ballenas francas mueren cada año enredadas en sogas y redes o por colisiones con grandes barcos. En los últimos años se evidenció una preocupante disminución en el número de crías, consecuencia de la baja cantidad de krill –su principal fuente de alimento– por el incre-mento en la temperatura del agua”, cuenta Diego Taboada. El presidente del Instituto de Conserva-ción de Ballenas reconoce, sin embargo, algunos signos positivos actuales: “Millones de personas han comprendido que las ballenas son animales excep-cionales y han buscado relacionarse con ellas de modo pacífico a través del avistaje”.

“El ecoturismo se practica en contacto con la naturaleza en áreas que tienen un interés espe-cial”, explican Florencia Blanco y María Eugenia Bianchi, socias de Ecoexplorer y agregan: “Se destaca por el interés del turista en el conocimiento y un vínculo de respeto con el medio ambiente y las nuevas culturas a fin que también puedan disfrutarlo las próximas generaciones”. El incremento de este interés se evidenció en el crecimiento de actividades ecoturísticas como trekking, escalada, buceo, kayak y la visita a parques nacionales y reservas naturales.

El objetivo para el 2020 es proteger al menos un 17% de cada región natural terrestre (actualmente es del 7.7% en nuestro país) y un 10% de la marina. En julio pasado, pudimos celebrar el alcance del 4% del Mar Argentino bajo protección gracias a la creación del Banco Namuncurá, primera área marina protegida oceánica de la Argentina.

Informarnos, concientizarnos y empezar a actuar son las claves para que las bellezas de la naturaleza no queden en la pantalla del cine sino las podamos disfrutar en el día a día. Así reflexiona Cynthia Dabul, directora de Proyecto Ambiental: “Debemos realizar un cambio de paradigma e incluir la noción de natu-raleza como sujeto de derecho comprendiendo que la tierra no pertenece al hombre, sino el hombre a la tierra porque, en definitiva, somos naturaleza”.

NIÑOSACTORES DEL CAMBIO

Cada año buscamos incorporar a los más chi-cos en el festival a través de alguna película del género infantil que los invite a reflexionar sobre temáticas ambientales. ¿El motivo? Estamos convencidos que los niños son po-tenciales actores del cambio hacia un planeta más sustentable.

“La educación ambiental contribuye al desarrollo de un ambiente saludable a través de la modificación de conductas, no aprendiéndolas de memoria sino internali-zándolas en las distintas situaciones reales”, explica Gonzalo del Castillo, representante del Movimiento Agua y Juventud. Debe-mos mostrarles que con pequeños hábitos podemos hacer una gran diferencia: cerrar la canilla al lavarnos los dientes o apagar las luces cuando salimos del cuarto.

La curiosidad constante que caracteriza a los niños es el motivo oportuno para educarlos en el cuidado de la tierra a través de la práctica que les es propia: el juego. “Vivimos la era de la tecnología como entretenimiento. Tenemos que mostrarles a los chicos que hay otras formas de divertirse en una plaza o un parque”, aconseja Tomás Stocker, director ejecutivo de Conexión Natural.

En esta edición 2013 incorporamos el filme Sammy II: El Gran Escape, una propuesta para aprender y tomar conciencia a través de la diversión y el cine. “Ellos, como líderes del ma-ñana, estarán capacitados para tomar decisio-nes que no generen un impacto negativo en el medio ambiente”, asegura Stocker, a lo que del Castillo agrega: “Si los niños de hoy crecen con ideales distintos, conceptos como `desarrollo sostenible´ o `economía verde´ pasarán de ser slogans marketineros a realidades concretas. Y eso es lo que el mundo de hoy necesita”.

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The weather war Ante al incremento de los tornados en los Estados Unidos, el dúo de artistas Bigert&Bergström llevan su creatividad a la pantalla grande a fin de dar cuenta de los intentos del hombre por controlar el cambio climático para su beneficio. El objetivo propuesto es claro: detener un tornado. Pero en el proceso de alcanzarlo, conoceremos ejemplos his-tóricos de cómo la ciencia y la meteorología trabajaron en conjunto con objetivos militares. Frente a los fenómenos del cambio climático, el filme se pregunta: ¿Nos adaptamos o empezamos a combatir?

Proyecciones: sábado 17, 0:30 hsmiércoles 21, 22:30 hs

Año: 2012Director: Bigert & BergströmOrigen: SueciaDuración: 58 min.

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Sand wars Disfrutamos de la arena cuando vacacionamos en hermosas playas, pero ¿Acaso estará ahí junto al mar para siempre? La arena se emplea para múltiples fines de industrias diversas, desde la construcción de vi-viendas, rascacielos y puentes hasta la fabricación de fibra óptica, pasta dental y alimentos en polvo. Si la oferta crece cada vez más, ¿La arena podrá satisfacerla infinitamente? A través de encuentros con millonarios, políticos corruptos, promotores inmobiliarios sin escrúpulos, ecologis-tas y traficantes de arena, el filme propone una investigación sobre una realidad a nivel mundial: la “guerra de la arena” ya comenzó.

Proyecciones: jueves 15, 12:30 hslunes 19, 22:15 hs

Año: 2013Director: Denis DelestracOrigen: Francia, CanadáDuración: 74 min.

14.

Las consecuencias de la acción del hombre sobre el planeta se hacen sentir en todo el mundo. Lo que antes parecía quedarse en congresos de científicos y expertos hoy supo interiorizarse en el día a día de los ciudadanos. Que el cambio climático existe, ya nadie puede dudarlo.

La Organización de las Naciones Unidas (ONU) enumera las principales características de esta pro-blemática mundial: intenso aumento de la emisión de gases de efecto invernadero, escasez de agua, alte-ración de los regímenes de ordenación de la fauna y la flora silvestre, continuidad y alza de la práctica de caza de especies en peligro de extinción, incremento en el nivel del mar.

Según el reciente informe del Grupo Intergu-bernamental de Expertos sobre Cambio Climático, el nivel de CO2 es de un 40% mayor que el nivel preindustrial. Al respecto, Sebastián Do Rosario,

en representación de Equilibrium Global, explica: “El informe del Banco Mundial advierte que, sin una clara estrategia e iniciativas de mitigación, en el presente siglo el planeta podría ser 4ºC más cálido en comparación con la era preindustrial. Muchos de nosotros sufriremos las consecuencias más graves de un mundo 2ºC más caluroso en los próximos 20 a 30 años”.

Así, aumenta la frecuencia y cantidad de fenómenos ya conocidos, como los tornados en Estados Unidos que investigan los creadores del documental The Weather War con vistas a comprender la importancia política y social que se encuentra detrás del denominado “cambio climá-tico”. Pero también existen problemáticas no tan conocidas con igual grado de emergencia respecto de su impacto sobre el medio ambiente. Tal es el caso del conflicto político, económico y social que gira en torno a la arena y que es descripto en el documental alemán Sand Wars.

La problemática del cambio climático implica pensar en una situación social igualmente grave: los refugiados ambientales. El progresivo deterioro de las tierras, las inundaciones, las catástrofes y los desastres industriales contaminantes obligarán a millones de personas a desplazarse de sus territorios

La naturaleza responde al impacto que sobre ella genera el hombre de forma trágica y fenomenal, sin discri-minar lugar, tiempo ni sociedad. Sin embargo, aún hay esperanzas para que el cambio no sea climático sino sustentable.

UNA REALIDAD PRESENTE ANTE NUESTROS OJOS

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© Yann Arthus-Bertrand/Altitude

Icebergs and Adélie penguins, Adélie Land,

Antarctica (South Pole) (66°00 S, 141°00 E)

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de origen. Para el 2050 se prevé que el número de refugiados ambientales alcanzará los 150 millones de personas, de los cuales el 75% radica en las áreas con mayor índice de pobreza en África, Asia y Amé-rica Latina. La ONU sólo reconoce a los refugiados políticos o raciales, no así aún a los ambientales.

De este modo, lo que antes parecía ocurrir únicamente en los Estados Unidos o Europa hoy también se hace presente en América Latina con fenómenos climáticos nunca antes vistos y pro-blemáticas sociales y ambientales que se agravan cada vez más. En una entrevista al diario La Nación, Christiana Figueres, secretaria ejecutiva de la ONU para el Cambio Climático aseguró: “América Latina es una de las regiones más vulnerables. Varios países sufren escasez de agua para la agricultura, ya sea por el derretimiento de los glaciares o por su ubicación geográfica”.

Las cifras de las intensas lluvias que afectaron a las ciudades de Buenos Aires y La Plata en abril de 2013 hablan por sí solas: 150 y 400 milímetros de lluvia en dos horas, 8 y 60 muertos, 90.000 hogares afectados y 58.000 propiedades dañadas, pérdidas económicas de 1.900 y 2.600 millones de pesos, res-pectivamente. “Los estudios han mostrado que estas lluvias más frecuentes y con gran cantidad de agua en poco tiempo vienen afectando la zona del Río de la Plata durante los últimos años”, explica Daniel Ryan, director de Cambio Global de la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN).

Según María Evangelina Pirola, coordinadora de Sustentabilidad del Centro de Integración, Co-operación y Desarrollo Internacional (CICODI) estas catástrofes climáticas, sumado a una mayor participación en la agenda pública y mediática, han despertado el interés social en distintos temas am-bientales durante los últimos tres años.

Frente a esta realidad, el miedo no es la solución. Ser conscientes de lo que está “enfermando” a nues-tro hermoso planeta nos permitirá actuar en busca de un “remedio”. El optimista potencial que la región lati-noamericana presenta en materia de energías renova-bles permitiría redefinir el sistema energético actual en pos de un menor impacto sobre el planeta. Conforme el estudio Repensando nuestro futuro energético del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la dotación de recursos de energía renovable de América Latina y el Caribe es suficiente para cubrir más de 22 veces

la demanda eléctrica proyectada para el 2050. Los recursos solares, geotérmicos, mareomotrices, eólicos y la biomasa disponibles en la región podrían producir hasta 80 petavatios-hora de electricidad. Actualmente, sólo se generan 1,3.

Según el informe, las energías renovables ya tienen precios competitivos con las tecnologías convencionales, ofrecen buenas oportunidades de inversión y deberían ser consideradas por los formuladores de políticas que buscan diversificar las matrices energéticas en sus países, reducir su vulne-rabilidad a las fluctuaciones de precios de combus-tibles fósiles y disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero.

El desarrollo de energías renovables para la sa-tisfacción de nuestro consumo deberá ir acompañado de un conjunto de hábitos más sustentables que se desarrollarán a lo largo de las siguientes secciones. De lo que se trata, en definitiva, es de actuar y participar activamente. “La educación ambiental es la base fundamental para lograr el cambio de paradigma”, asegura Pirola quien considera que cualquier perso-na, sea niño, joven o adulto, puede realizar pequeñas acciones para paliar este gran problema global desde su casa, su lugar de estudio o su oficina de trabajo.

La acción ciudadana y el desarrollo tecnológico deberán ir acompañados de políticas que favorez-can las medidas frente al cambio climático. Ryan se muestra crítico al respecto: “A nivel político, hubo algunos avances en Argentina en materia de desa-rrollo de instituciones, departamentos o agencias gubernamentales pero, en general, es un tema aún periférico en la agenda de políticas públicas”. La ONU es contundente respecto de la necesidad de acción presente: “Se calcula que un dólar de los Estados Unidos invertido en medidas preventivas puede ahorrar hasta siete dólares en gastos de soco-rro en el futuro”.

Las respuestas que la Tierra nos brinda a nues-tros actos desmedidos pueden encontrar una vía de coexistencia armoniosa si comenzamos a tomar con-ciencia que el más mínimo cambio de hábito puede significar un gran aporte para la sociedad –presente y futura–. Al respecto, Do Rosario es contundente: “El cambio climático no es un problema a futuro, de las generaciones que vendrán; sino un acuciante problema del presente que requiere de un compromi-so de todos”.

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The human scale El 50% de la población mundial vive en zonas urbanas y para el 2050 se estima que esa cifra ascenderá al 80%. Vivimos, trabajamos y nos entre-tenemos en grandes ciudades sin tomar conciencia del paso del tiempo, de la cantidad de rascacielos nuevos, del incremento de personas que caminan a nuestro alrededor, de la falta de interacción que tenemos con ellas, de los problemas de salud que nos afectan a diario, del impacto que generamos sobre el medio ambiente. ¿Son fenómenos aislados o conse-cuencias de un determinado estilo de vida que es necesario repensar?

Premios:Premio Green Cross, PlaneteDoc, Warsaw 2013.Premio Niño y la Familia, Festival de Cine AljazeeraInt. Documentary 2013.

Proyecciones: jueves 15, 15:00 hs viernes 16, 22:15 hsmartes 20, 20:00 hs

Año: 2012Director: Andreas Dalsgaard Origen: Dinamarca, Bangladesh, China, Nueva Zelanda, Estados UnidosDuración: 83 min.

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YERT: your environmental road trip 50 estados. 1 año. ¿Basura Cero? Tres amigos se lanzan a una aventura en carretera con esperanza, humor y toda su basura a fin de conocer extraordinarios innovadores y ciudadanos que emprenden proyectos e iniciativas para dar solución a problemáticas ambientales –desde el cambio climático y la contaminación a la escasez del agua y la des-trucción del hábitat–. Con características propias del género, el equipo se propuso no sólo documentar las experiencias sino también vivirlas. En este extenso recorrido de múltiples desafíos, un giro inesperado de acontecimientos los llevará al límite de su documental.

PremiosPremio del Público, Festival Internacional de Cine San Luis Obispo.Documental Internacional, DocuFest Atlanta 2011.

Proyecciones: viernes 16, 0:30 hsdomingo 18, 22:00 hsmiércoles 21, 20:00 hs

Año: 2011Director: Ben Evans Origen: Estados UnidosDuración: 113 min.

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“Las megaciudades son una realidad. Sin embargo, parecen visiones de películas de ciencia ficción” se enuncia en el documental The Human Scale que busca cuestionar el grado de urbanización al que han llegado nuestras grandes ciudades, en las que cada uno de nosotros parece haberse perdido en la multitud, viviendo en la rutina, en el tráfico del día a día; parece que perdimos nuestra condición de “ser humano” entre los imponentes rascacielos.

Uno de los principales signos de los peligros que corren las megaciudades desde el punto de vista ambiental es el transporte. “Desde la década de 1960 se desarticularon los tranvías y trenes y se comenzó a fomentar el uso del auto particular. Ese cambio cultu-ral perdura. Hoy el parque automotor se colmó porque hacemos una subutilización de los autos”, explica Lucas Croxatto, ingeniero de Sincropool.

Frente a ello, grandes centros urbanos como Buenos Aires han optado por un cambio de paradig-ma: dejar de centrar la importancia en el auto como medio para transportarse y colocar el interés en el individuo que necesita movilizarse por las calles de la ciudad. Esto ha permitido darle un mayor protagonis-mo a la bicicleta –medio sustentable por excelencia– y al peatón que recorre las calles pero que también necesita de un transporte público seguro y confiable.

Creación y extensión de las bicisendas, alquiler público de bicicletas y entrega de beneficios y pre-mios a los ciclistas han sido estrategias comunes llevadas a cabo en Buenos Aires, Bogotá, Santia-go de Chile y Río de Janeiro. “El ciclismo urbano está dejando de ser un puñado de casos aislados para convertirse en un fenómeno de crecimiento y expansión sostenida en las ciudades latinoamerica-nas”, asegura Matías Kalwill, creador de las inicia-

REPENSANDO LAS CIUDADESImplica una diferencia sustancial de cambio de paradigma respecto de cómo transitar los grandes centros urbanos, cómo diseñar los altos edi-ficios, cómo dar seguridad al ciclista y cómo aplicar la tecnología para visitar la ciudad con una sonrisa.

tivas La Vida en Bici y Bikestorming, y agrega: “Nuestros líderes políticos deberían tomar una página de la hoja de ruta de las capitales globales del ciclismo urbano y atreverse a cambios grandes. ¿Qué ciudad tendrá el privilegio de ser considerada el Ámsterdam o la Copenhague de América Latina?”

Por otra parte, los principales centros comercia-les están experimentando cambios de peatonalización como una medida para alivianar el tránsito pero, al mismo tiempo, contribuir a la salud de sus habitantes.

¿Debemos entonces dejar de usar el auto? ¡Claro que no! “La potencia de la tecnología e Internet permiten conectar personas a una velocidad notable. Ello facilita la posibilidad de ponerse en contacto para compartir el auto”, explica Croxatto uno de los siste-mas tecnológicos más recientes en Europa y América Latina: el carpooling, es decir, coordinar con otras personas, compartir un viaje en un mismo auto y dejar así de contribuir a que, por ejemplo, en Capital Federal ingresen un millón y medio de autos por día con sólo una persona en su interior. El beneficio obviamente es múltiple si pensamos en la ecuación: menos cantidad de autos = menos emisiones de CO2.

Ser eficientesLa mejora en los sistemas de transporte público defini-tivamente contribuye a una mayor eficiencia energética en las ciudades. De hecho, el 25% de la energía utili-zada en el mundo se emplea para el transporte. Pero también necesita del acompañamiento arquitectónico de ingenieros y desarrolladores a la hora de pensar los nuevos emprendimientos inmobiliarios o repensar los existentes. Durante los últimos años, la certificación LEED (Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental) supo despertar el interés del sector privado para desarrollar nuevos edificios con iluminación LED, reutilización de materiales en la construcción, sistemas eficientes de aislación, aprovechamiento de aguas grises y pluviales, y espacios de recreación. Al mismo tiempo, las gran-des empresas comenzaron a priorizar la instalación de sus oficinas en este tipo de edificios.

La eficiencia se logra además con una correcta gestión y disposición de las toneladas de residuos que los ciudadanos generamos a diario, con un sistema económico integral y con una mirada social inclusiva. Es decir, sustentabilidad en sus tres ejes. “Existen experiencias que combinan estas tres manifestaciones de lo sostenible en Buenos Aires:

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los vecinos organizados que enseñan a separar la basura y la retiran como una iniciativa ambiental, el Distrito Audiovisual que muestra cómo lo sustentable puede ser abordado desde una perspectiva econó-mica y, desde el carácter social, asociaciones que tejen redes con la comunidad como `Cascote, un perro macanudo´ que busca restituir a las mascotas perdidas en la ciudad a sus dueños”, explica Ivana López, representante de Proyecto Bamboo.

Lo social, lo económico y lo ambiental se sin-tetiza, además, en iniciativas como las de Cascos Verdes en la que se busca educar a la sociedad en temas de cuidado ambiental a partir de la inclusión laboral como educadores de las personas con disca-pacidad intelectual. “La educación ambiental no sólo es fundamental para el desarrollo de una sociedad sustentable sino el primer paso para lograrlo”, ase-gura Melisa Tedeschi, responsable de Relaciones Institucionales de la asociación civil.

De este modo, detrás de esos inmensos ras-cacielos, detrás del bullicio constante del tránsito y detrás de la constante contaminación sonora y atmosférica, están comenzando a surgir iniciativas

políticas, privadas y sociales que buscan hacer de las grandes ciudades un lugar más digno de habitar desde el punto de vista ambiental y humano. El do-cumental Your Environmental Road Trip YERT es un claro ejemplo de ello pues evidencia que sólo en un año se pueden conocer proyectos sustentables de gran relevancia alrededor de 50 estados de Estados Unidos. ¿Con qué maravillas podremos encontrarnos entonces en los otros múltiples países?

1.6 billones de personas carecen de acceso a la electricidad.La cantidad de residuos generada por indivi-duo al año supera los 300 kg.900 millones de personas carecen de acce-so al servicio de transporte.1.8 millones de personas mueren por año debido a la falta de servicios sanitarios y agua potable.Para 2030, se estima deberán invertirse US$40 trillones en infraestructura urbana.

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The fruit hunters Los “cazadores de frutas” se pueden encontrar en lo más profundo de las selvas de Borneo, en las colinas de Umbria o en la casa del vecino de al lado. Aventureros, fanáticos de frutas exóticas e incluso la estrella de cine Bill Pullman, son algunos de los protagonistas de la nueva película del reconocido director Yung Chang. Con una increíble fotografía de pai-sajes, el filme nos invita a realizar un viaje desde los inicios de la humani-dad en su relación con las frutas hasta las prácticas más modernas de la agricultura. Una película que no sólo cambiará la manera en la que vemos lo que comemos sino también el significado de ser humano.

Premios:Selección Oficial, Festival Internacional de Cine Asiático Toronto Real Selección Oficial, Festival Internacional Palm Spring

Proyecciones: viernes 16, 20:00 hslunes 19, 17:30 hs

Año: 2012Director: Yung ChangOrigen: CanadáDuración: 95 min.

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GMO OMG Un filme que explora la posible pérdida del más precioso y antiguo patrimonio de la humanidad: las semillas. El director Jeremy Seifert se embarca en una investigación sobre cómo la manipulación y alteración genética de las semillas en manos de empresas monopólicas del sector afecta no sólo a la propia diversidad de especies sino también a la salud de los niños, del planeta y de la libre elección del consumidor. Con casos de lucha y manifestación, Seifert intenta comer con su familia sin participar de este sistema injusto, destructivo y poco saludable.

Premios:Elección del público, Festival de Cine Ambiental de YALE 2013

Proyecciones: sábado 17, 22:15 hsdomingo 18, 12:30 hsmiércoles 21, 15:00 hs

Año: 2013Director: Jeremy Seifert Origen: Estados Unidos, Haiti, NoruegaDuración: 90 min.

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La rutinaria vida en las grandes ciudades nos puede generar esa sensación de distancia respecto del origen de los productos que tomamos –casi sin mirar– en el supermercado. Sin embargo, se trata de una realidad que requiere de nuestro interés. El vínculo que el ser humano ha tenido con sus fuentes de nutrientes ha cambiado notablemente durante la historia. De ello da cuenta el documental The Fruit Hunters en esta búsqueda por entender que la comida nos define también como seres.

“Debemos ser conscientes que a la hora de alimentarnos somos responsables de cómo lo hace-mos y así lograr efectos beneficiosos para mejoría de nuestra salud”, asegura la doctora Viviana Baran-chuk, directora de la Fundación DAAT. Constanza Feldman, responsable de Comunicación de Huerta Niño, agrega: “Debemos desarrollar una conciencia mayor acerca no sólo del tipo de alimentación que llevamos sino también de cómo la producimos”.

El crecimiento demográfico y la búsqueda de satisfacer la demanda alimenticia fueron los motivos que encontraron grandes corporaciones privadas para alterar por completo el sistema agrícola en pos exclusivamente de las ganancias económicas. “La agricultura es un invento del sistema capitalista” enunciaba el documental Think Global, Act Rural en una edición anterior del festival para evidenciar que la naturaleza por sí sola tenía un perfecto siste-ma de generación de vida y alimento. El hombre con su biotecnología ha quebrantado dicho equilibrio.

Fiel ejemplo de ello es la modificación y alte-ración genética que se ha hecho de las semillas en todo el mundo. El documental GMO OMG –en alusión a las siglas de “organismos genéticamente modificados”–, muestra con realismo lo difícil que

SOMOS LO QUE COMEMOSLa alimentación es la base de nues-tro bienestar pero se ha visto alte-rada por la búsqueda de maximizar la producción a cualquier costo. ¿Cómo comer de manera saludable para el propio cuerpo y para el am-biente que habitamos?

es intentar alimentarse haciéndose a un lado de este sistema monopólico de producción alimentaria dañina para nuestra salud y la de nuestro planeta. “Si seguimos manteniendo este cultivo no susten-table tampoco vamos a poder alimentar al mundo, ya que estamos destruyendo las áreas de cultivo. ¿O acaso tenemos un segundo planeta en donde cultivar?”, reflexiona Fernando Baz, fundador de Jardín Orgánico.

En boca de los responsables de esta modifi-cación genética, no existe alternativa posible para producir alimentos debido al constante crecimiento en el número poblacional y su consecuente demanda de comida. ¿Qué ocurriría si cada uno de nosotros tuviera una pequeña huerta orgánica en su balcón, terraza o jardín?

“La huerta es una solución sustentable porque una vez instalada, produce sus propios insumos y se autoabastece”, asegura Feldman. “La agricultura orgánica representa una alternativa óptima contra la agricultura industrializada que hoy genera más del 15% del total de gases GHG de efecto invernade-ro”, explica Baz.

Según Baranchuk, los beneficios de la alimen-tación orgánica se hacen sentir al poco tiempo: “Constituye la mejor alternativa dentro de un con-texto de epidemia global de obesidad y diabetes, sumado a la alta exposición a comidas rápidas que perjudican notablemente nuestra salud”. Con una dieta rica en frutas, verduras y carnes (para quienes aún no optaron por una alimentación vegetariana o vegana), los orgánicos mejoran los niveles de colesterol, disminuyen los triglicéridos y optimizan los valores de glucemia.

La comida orgánica resulta, además, más segura ya que durante los procesos de su cultivo se prohíbe el uso rutinario de plaguicidas y herbicidas, utilizados frecuentemente en combinaciones poten-cialmente peligrosas. “Emplea los recursos locales, es menos vulnerable a los cambios de precios de cosechas e insumos, es menos fluctuante ante los problemas ambientales, mejora la fertilidad y textura de los suelos, mantiene limpio el agua, mejora la cali-dad nutritiva de los alimentos y, por lo tanto, la salud de quienes producen y consumen”, enumera Valeria Churba, responsable de Jardín Gourmet.La producción orgánica es un camino viable hacia una alimentación más saludable y más sustentable

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que necesita del trabajo conjunto de emprendedores y consumidores informados y conscientes.

Derribando mitosLas grandes corporaciones productoras de fertilizan-tes y semillas transgénicas coinciden a la hora de sostener que “con producción orgánica no se puede alimentar el mundo”. ¿Qué piensan ante ello quienes vienen trabajando en proyectos económicos, sociales y ambientales de alimentos orgánicos?

“El desafío de terminar con el hambre del mundo va más allá de producir los suficientes alimentos para toda la población. Involucra también su correcta distribución y llegar a quienes más lo necesitan. Numerosos estudios señalan que, con una buena gestión, la agricultura orgánica puede lograr la misma producción que la industrial; incluso produce mayo-res rendimientos en áreas propensas a las sequías”, opina Churba. Así mismo, revela un problema actual: “Los resultados en rendimiento varían según las ca-

pacidades de gestión y los conocimientos ecológicos y tecnológicos de los productores; quienes aún no cuentan con las herramientas suficientes. Depende de consumidores, gobiernos y otros actores invo-lucrados generar el cambio necesario para que la agricultura orgánica continúe extendiéndose”.

Por su parte, la experiencia en huertas comunita-rias en escuelas rurales de zonas desfavorecidas de la Argentina le permite a Feldman emitir su opinión sobre el tema: “Es un argumento que respalda directamente su accionar y que representa el refuerzo de una visión meramente capitalista del mundo. Actualmente, hay un proceso de cambio a nivel global que empieza a rescatar las pequeñas iniciativas compartidas, comuni-tarias y solidarias. Éstas promueven un enfoque más consciente sobre el desarrollo sostenible y buscan reinstaurar un modelo que alguna vez existió. La pre-gunta que habría que hacer a las grandes corporacio-nes debería ser: `Alimentar el mundo con producción transgénica, ¿A costa de qué?´”.

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Amazonia eterna La selva amazónica es hoy un gran laboratorio de experimentos soste-nibles que están revelando la posibilidad de nuevos vínculos entre el ser humano, las empresas y el patrimonio natural en términos de un nuevo modelo económico mundial: la economía verde. Pero ¿Cuántos son los servicios que realmente vale la pena incorporar a este nuevo paradigma? ¿Quién debería beneficiarse de ello? La producción brasilera busca res-ponder estos interrogantes a través de iniciativas exitosas, la experiencia de los especialistas y un mágico conocimiento sobre la vida cotidiana de los habitantes de la selva.

Proyecciones: jueves 15, 17:30 hssábado 17, 12:30 hslunes 19, 15:00 hs

Año: 2012Director: Belisario FrancaOrigen: BrasilDuración: 88 min.

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The carbon rush Los bonos de carbono se han presentado durante los últimos años como una solución para las grandes empresas a fin de compensar su impacto sobre el medio ambiente. Su puesta en práctica despertó el de-bate. ¿Son la solución ideal? ¿Cómo se aplican? ¿Acaso no se genera contaminación en los proyectos de compensación? ¿Cómo hacer para que su naturalización no genere un círculo de contaminación-bonos de carbono indefinido? ¿Quiénes terminan beneficiándose y perjudicándo-se con esta política? El documental pone en juego estos interrogantes a lo largo de una dramática pero impactante investigación.

Proyecciones: domingo 18, 20:00 hsmiércoles 21, 12:30 hs

Año: 2012Director: Amy MillerOrigen: CanadáDuración: 84 min.

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Numerosos emprendimientos basados en la pro-ducción orgánica de alimentos se han sumado al nuevo paradigma económico al cumplir con ciertos principios que buscan garantizar los beneficios en sus tres ejes: social, económico y ambiental. “Economía verde es un enfoque según el cual las prácticas productivas e inversiones públicas y priva-das deben considerar al ambiente ya no como una externalidad sino como un entorno vital que debe ser plenamente resguardado”, define Pablo Va-gliente, responsable nacional de Fundación Avina en Argentina. Así, la eficiencia energética y en el uso de los recursos, la reducción de las emisiones de carbono, la regeneración de los sistemas dañados pasaron a ser los indicadores más importantes del quehacer económico.

Ante las críticas que el concepto recibe, Va-gliente se muestra reflexivo: “Debemos ir más allá de la economía verde pues no basta con contemplar el impacto ambiental sino que debe promoverse e implementarse una nueva economía que realmente permita reducir las desigualdades: el gran flagelo de América Latina”.

El documental Amazonia Eterna es un maravi-llo ejemplo de cómo la economía verde se implemen-ta desde la naturaleza hasta el producto en manos del cliente. En Argentina, hubo un sector importante de jóvenes emprendedores entre los 25 y 35 años que decidieron iniciar proyectos que se ajusten a este nuevo paradigma económico. Un ejemplo de ello es Azzularq, una empresa dedicada al dise-ño de objetos de uso cotidiano con bajo impacto

UNA NUEVA FORMA DE HACER NEGOCIOSEl concepto de sustentabilidad se ha trasladado al ámbito económico a través de emprendimientos que buscan el cuidado del medio ambien-te en toda su cadena productiva y de las grandes empresas que emplean acciones y medidas compensatorias para paliar su impacto.

ambiental. “Desde la elección de la materia prima, optamos por materiales nobles, como los hilados de algodón y lana merino, buscando la mínima interven-ción y usándolos en su estado más puro”, explica su fundadora Andrea Luzza. Desde lo social, los artículos son tejidos artesanalmente por un grupo de mujeres mayores según los principios del comercio justo –otra de las formas clave de producir a la hora de pensar en una economía más green–.

Una de las características fundamentales de la economía verde es la concientización sobre el cuidado del planeta, lo que requiere conocimiento por parte del emprendedor y un vínculo ameno e informativo con su cliente-consumidor. “La capaci-tación debe adaptarse al nuevo paradigma ya que cualquier emprendimiento tiene que saber que es parte de un sistema y que debe ser coherente en todo el circuito productivo, ser responsable con los recursos que utiliza y tender a la mejora constante en relación a lo social y ambiental”, aconseja la Mesa Ambiental de Inicia.

Toda esa información deberá ser trasladada al momento de venta para fomentar una relación con el cliente más allá de lo comercial. “Cuando el consu-midor conoce la procedencia y la forma en que un producto fue elaborado, puede valorarlo de verdad. No buscará únicamente consumir sino objetos que lo representen”, asegura Luzza.

¿Qué ocurre con aquellas grandes empresas ya asentadas en el mercado? Favorablemente, hubo un notorio interés por readaptar sus políticas para comenzar a aportar a la inclusión social y la pro-tección del planeta. Ello principalmente se logró a través del desarrollo de áreas de Responsabilidad Social Empresaria (RSE) que ya no distingue rubros de pertenencia sino que se encuentra en todo tipo de corporaciones. Al respecto, Sol Oromí y Julia Tramutola de Revista Ecosistema se muestran críticas: “La percepción de algunos signos de revi-sión del sistema económico instalado en la Argentina, ha llevado a las empresas a desarrollar acciones y programas de RSE, muchas veces como resultado de una política global de las casas matrices o por una cuestión de imagen marcaria. Sin embargo, la transformación hacia una economía verde no se refleja aún en compromisos concretos”.

Por otra parte, la elaboración de reportes de sustentabilidad sirvió a las empresas para conocer su

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estado actual de desarrollo y comenzar a implemen-tar acciones hacia la sustentabilidad, pero también contribuyó a que la comunidad pueda tener acceso a más información sobre los productos que consume o los servicios que emplea.

Las corporaciones de mayor envergadura, conscientes de su impacto sobre el medio ambiente, han comenzado a optar por una medida novedosa de compensación: los bonos de carbono. “Se trata de invertir dinero en proyectos que permitan reducir la cantidad de dióxido de carbono liberado a la atmós-fera”, explica Kate Hurowitz, gerente de Comunica-ciones de Google Green, empresa tecnológica que se inició en esta cruzada por asumir la responsabili-dad de su huella ambiental.

Sin embargo, tal como pone en discusión el do-cumental The Carbon Rush, aún queda mucho por conocer y analizar de esta supuesta “solución” ante el impacto ambiental. ¿El motivo? La necesidad de infor-mación y control sobre las acciones emprendidas para corroborar que el daño sea compensado beneficiando a quienes más lo necesitan y en las áreas donde es necesario. Hurowitz subraya: “Lo interesante es que no sólo buscamos reducir nuestra huella sino que, si no invirtiéramos ese dinero, esos proyectos no serían posible”. El debate está abierto.

EL PARADIGMA B

Bajo el lema de ser “no la mejor empresa del mundo, sino la mejor empresa para el mun-do”, el nuevo paradigma de empresas B llegó a nuestro país para quedarse. La inserción local se realiza a través de la conformación de Sistema B que asesora y trabaja en conjunto con las futuras B corporations para la posterior certificación en Estados Unidos.

Uno de sus fundadores y actual jurado en el concurso Semillero, Pedro Tarak, describe las características de este pasaje hacia una nueva economía: “Estamos transitando de una eco-nomía donde las oportunidades las tienen unos pocos a otra más distributiva e inclusiva; de una economía basada en los hidrocarburos a otra de bajo carbono; de un sistema que simplifica y reduce los ecosistemas y la biodiversidad a otro que busca gestionar y producir al mismo tiempo; de una producción que tira los residuos a otra que los convierte en recursos. Es una nueva eco-nomía que presenta oportunidades para nuevos negocios social y ambientalmente sustentables”.

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Trashed, no place for waste El actor Jeremy Irons se introduce en un viaje documental alrededor del mundo para conocer, indagar e investigar minuciosamente cómo hermosos paisajes han sido devastados por la contaminación producida por la basura. El consumo desmedido y la falta de responsabilidad sobre los desechos que cada ciudadano genera se ponen de manifiesto en los grandes basurales de las principales ciudades. Irons realiza un viaje en el que, junto con el espectador, se experimentarán emociones contrapues-tas: del escepticismo a la tristeza, del horror a la esperanza.

Premios:Palme Verte, Festival de Cine Verde de Reino Unido 2013Grand Prix, Festival Internacional de Cine Documental Kyiv

Proyecciones: viernes 16, 15:00 hslunes 19, 20:00 hsmartes 20, 12:30 hs

Año: 2012Director: Candida BradyOrigen: Estados UnidosDuración: 98 min.re

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Podemos comer alimentos orgánicos y optar por productos basados en la economía verde, pero si el packaging que los envuelve es no solamente nocivo para el ambiente sino que además no puede reinsertarse en el ciclo productivo, entonces aún falta un paso clave para que nuestro consumo sea en verdad lo más sustentable posible. “Producimos una enorme cantidad de basura. La enterramos, lo cual tiene enormes problemas, y la quemamos, lo que agrava aún más la situación”, expresa el actor Jeremy Irons, protagonista del documental Trashed, No place for waste en el que recorrió varias ciudades del mundo para conocer de cerca la problemática actual de los residuos. Su experiencia cinematográfica y personal le ha permitido asegurar: “Podemos ser agentes del cambio, no tenemos que esperar a que los políticos nos digan qué hacer. Ya

AL RESCATE DE LAS 3RCada producto que consumimos deja una huella en el planeta. Reducir, reutilizar y reciclar son los objetivos que ciudadanos y emprendedores locales se propusieron para pensar y actuar en términos sustentables.

hay comunidades que empezaron a vivir con base en la sustentabilidad y su progreso es inspirador”.

Al respecto, Rodrigo Castro Volpe, de Dónde Reciclo, argumenta el creciente interés de la ciuda-danía por la basura como problemática ambiental: “Es uno de los temas ambientales en los cuales el ciudadano tiene más contacto y mayor poder de ge-nerar un cambio. Como consumidor tiene muy poca injerencia en las otras partes del proceso productivo de un producto”.

Durante los últimos años, en la ciudad de Buenos Aires y alrededores hubo iniciativas comu-nitarias que decidieron comenzar a formar parte del cambio. Tal es el caso de los cartoneros o recupera-dores urbanos que allá en el 2001 salieron a la calle a recolectar cartón y otros materiales reciclables para poder comer en el día a día. Hoy, iniciativas

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como El Ceibo Taller de la cooperativa El Ceibo, contribuyen a su inserción laboral en el mercado a partir de la elaboración de sus propios produc-tos con los mismos residuos que recolectan. “La formalización de los cartoneros y su organización en cooperativas para la gestión de residuos sólidos secos ha sido uno de los principales avances en materia de basura”, explica Castro Volpe.

Pero también ha sido fundamental el fuerte vínculo alcanzado entre los cartoneros y los vecinos de los barrios que dejaron a un lado la estigmatiza-ción de su figura para pasar a concebirlos como un trabajador. La educación ambiental fue mutua: del cartonero al vecino y del vecino al cartonero, basada en la búsqueda de fomentar la separación en origen y así facilitar la recolección urbana.

“Tenemos una relación fluida con la cooperativa El Álamo. Una de las principales dificultades que advertimos es que el crecimiento en la cantidad de basura que reciben no se ve acompañado de una mejora en su logística, por lo tanto el sistema de organización interno no logra absorber la deman-da”, cuenta Ale Reich, representante de la FAUBA Verde (Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires –UBA–).

Las universidades evidentemente fueron uno de los actores protagonistas en este interés por los residuos. ¿El motivo? Empezar por el cambio de hábitos en el ámbito educacional a fin que luego se replique en los hogares y áreas de trabajo. Dafna Nudelman, representante de FADU Verde (Facul-tad de Arquitectura y Diseño de la UBA) explica: “En nuestro caso, además, las carreras proyectuales son las responsables de la planificación de la producción industrial de los productos que consumimos. Somos los diseñadores quienes debemos pensar soluciones para resolver el problema de la basura”.

El paradigma de las 3R ha sufrido cambios de importancia con el paso del tiempo y con una mayor concientización ambiental. Primero se trató de reuti-lizar los residuos, luego de reciclarlos transformando su forma original. Hoy la clave está puesta en dos aspectos. Por un lado, reducir el consumo. Vivimos en una sociedad capitalista en la que importa más la “cantidad de vida” que la “calidad de vida” y ello se traduce en cada acto de compra. “En el nuevo paradigma de involucrar en la gestión de residuos a todos los actores participantes, ya no basta con con-

sumir y tirar, sino que es necesario ver qué es lo que compramos, cuál es la responsabilidad del productor y qué hacemos con lo que resta”, explica Ricardo Rollandi, director ejecutivo de la Asociación para el Estudio de los Residuos Sólidos (ARS).

Por otro lado, la segunda tendencia actual es concebir al residuo como un recurso valioso. Este nuevo paradigma ha permitido a numerosos em-prendedores iniciar proyectos económica, social y ambientalmente eficientes. “En nuestro caso, fue una cuestión de sentido común”, cuenta Rocío Gonzá-lez, cofundadora de Greca –que reutiliza botones de descarte en las grandes industrias para elaborar objetos de diseño– y advierte: “Te permite reducir los residuos incorporándolos a un nuevo proceso productivo pero trabajar a partir de un descarte nos propone ciertas limitaciones que a veces nos impulsan a ser más creativos”. Basados en el diseño sustentable o en la simple reutilización de un material descartable, los diferentes emprendimientos supieron insertarse en el mercado laboral de una manera competitiva gracias a un aspecto adicional: están contribuyendo al cuidado del planeta, están evitando que más residuos ocupen lugar innecesario en los rellenos sanitarios o basurales, están en definitiva dándole vida a un elemento que de otra manera carecía de toda funcionalidad.

¿Qué queda por hacer en materia de basura? Aún mucho pero somos creyentes en que toda iniciativa que surja de la acción conjunta de los dis-tintos actores de la comunidad (ciudadanos, ONGs, políticos y empresarios) inevitablemente tendrá importantes resultados. Como expresó Irons en una entrevista seamos racionales y verdaderamente conscientes: “No lo hagamos sólo por cuestiones morales, sino también por el instinto de la supervi-vencia. Necesitamos a nuestro planeta más de lo que él nos necesita a nosotros, nuestros destinos están inevitablemente entrecruzados”.

Podemos ser agentes del cambio, no tenemos que esperar a que los políticos nos digan qué hacer.

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Consumed, inside the belly of the beast Vivimos en una era basada en el hiperconsumo donde nada dura, todo se renueva y la felicidad parece encontrarse en un shopping. ¿Cómo llega-mos a esta instancia? Con un creativo trabajo de edición de imágenes y una mirada evolutiva y psicológica, el filme propone conocer las caracte-rísticas actuales del sistema de consumo capitalista, la cultura moderna y la condición humana a través de la reflexión de ecologistas, psicólogos, diseñadores y expertos en sustentabilidad. ¿Qué vale más? ¿Consumir cosas o consumir experiencias?

Proyecciones: jueves 15, 20:00 hsdomingo 18, 0:30 hsmartes 20, 15:00 hs

Año: 2009Director: Brett King, Kristina Eva Marks, Adam J. SloanOrigen: Gran BretañaDuración: 52 min.

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Antes de Consumed se proyec-tará el cortometraje Creamen, de Esther Casas Roura. www.creamenthemovie.com

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Los g uardianes d e l a se lva El actor argentino Boy Olmi se introduce en un inspirador viaje en la selva paraguaya para conocer Aché, una etnia con actualmente 100 miembros víctima de la deforestación de su hábitat natural, la persecu-ción territorial y étnica. Sin embargo, la empresa de yerba Guayakí los incorporó a su proyecto recuperando miles de hectáreas deforestadas. Olmi nos invita a sumarnos a este mágico viaje de sabiduría, naturaleza y cultura en armonía con la tierra que ejemplifica cómo, con respeto, una etnia puede también integrarse al sistema económico actual y llegar a vender un producto en California.

Proyecciones: sábado 17, 17:30 hsmartes 20, 17:30 hs

Año: 2012Director: Boy OlmiOrigen: ArgentinaDuración: 30 min.

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DE LA CONCIENCIA A LA ACCIÓNSer responsables en la era capitalista del hiperconsumo parece un desafío imposible, pero no lo es. Conocer los alcances del concepto es la clave ini-cial para poder comenzar a modificar hábitos y participar activamente.

“El concepto de consumo responsable es com-plejo a tal punto que no existen certificaciones al respecto. Sin embargo hay cuatro ejes claves para guiarse: ¿Contempla el producto o servicio que vamos a consumir en sus procesos de producción, distribución y comercialización la inclusión social, las 3R, la eficiencia energética y la regeneración de servicios ecosistémicos?”, reflexiona Lucas Campodónico, director ejecutivo de la revista Ecomanía. Con ese interrogante en mente, el consumidor elegirá a consciencia según cuatro acciones que Lorena Núñez, cofundadora de To-tebag, enumera: “Evalúa la vida útil del producto, valora los procesos de producción limpia, consi-dera su huella ambiental y premia a los producto-res con políticas responsables”.

De este modo, el consumo responsable va más allá de aquello que comemos. Podríamos decir que incluye los cambios de actitud que hemos esbozado a lo largo de todas las secciones anteriores con el fin de dejar de contribuir al cambio climático desde

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nuestro accionar y comenzar a disfrutar la vida en armonía con la naturaleza.

El documental Consumed, inside the belly of the beast demuestra cómo históricamente nos hemos convertido en este perfil de hiperconsumidor basado en la obsolescencia y el descarte constante. Pero también, esboza los caminos que aún podemos retomar para modificar nuestro accionar. Al respecto, Campodónico nos comparte la reflexión de Estanis-lao Sarandón: “Hoy existe la utilización de consumo consciente y consumo responsable como sinónimos, no obstante uno puede ser consciente de una acción negativa que va a realizar y realizarla igual. La clave es pasar de la conciencia a la acción, en definitiva, ser responsables”.

Para que ello sea posible es importante no sólo que crezca la demanda sino también la oferta. Ello ha comenzado a ser posible en nuestro país con la crea-ción de espacios de comercialización de productos elaborados con responsabilidad que permite articular el trabajo en red de múltiples emprendedores soste-nibles. Recientemente se inauguró en Capital Federal la primera Feria de Consumo Responsable que integra a más de 70 puestos de proyectos basados en la reutilización de materiales, el diseño sustentable y la concientización a fin de compartir un encuentro sema-nal de aprendizaje y divertimento mutuo. “Promove-mos un Happytalismo, un capitalismo más sensible e inteligente que busca el equilibrio a través de acciones concretas de intercambio”, asegura Campodónico.

El mercado Sabe la Tierra, en San Fernan-do, también contribuye al trabajo en red de quienes priorizan el comercio justo, el consumo responsable y la producción sustentable. “Comprar productos de elaboración local es apoyar el desarrollo propio y evi-tar que los alimentos viajen miles de kilómetros antes de ser consumidos”, explica Angie Ferrazzini. La creadora del mercado advierte la existencia actual de un consumidor activo, informado y consciente, y otro que tiene una intención por modificar sus hábitos. “Sé que llegará el día en el que, ante un producto que respeta a las personas y la tierra –sea de un pequeño productor o de una empresa que asume esa respon-sabilidad– y otro producto que no cumple con esas pautas, al tener la información el consumidor elegirá el primero”, reflexiona optimista Ferrazzini.

Los detalles contribuirán a grandes resultados. “Elegir una bolsa reutilizable es parte de un pequeño

aporte que nos invita a volver a los buenos hábitos”, aconseja Núñez y reafirma: “La durabilidad de una bolsa de tela nos permite rechazar cientos de bolsas por mes por persona y eso genera un contagio positi-vo que ayuda a nuestro entorno y a nuestros hijos”.

La temática es tan amplia que implica incluso considerar a las mascotas con las cuales convivimos en la ciudad. “La idea fue elaborar productos con diseño para el hogar como una campaña sutil de sensibilización, no desde imágenes fuertes ni histo-rias terribles, sino a través de imágenes llamativas y optimistas de perros que inviten a pensar en el trato de animales, sus singularidades, la adopción y el no abandono”, explica Melina Zukernik, fundadora de Perro Real, emprendimiento textil dedicado a mejorar la vida de los perros sin hogar.

Si hay una empresa que resume mucho de lo que abarca el concepto de consumo responsable es Gua-yakí. Desde el primer eslabón de su cadena produc-tiva hasta el modo en que logró insertar la yerba mate como hábito cultural entre los estudiantes universita-rios estadounidenses, todo el proceso se basa en la responsabilidad de cada uno de los actores involu-crados. “Los Aché son una etnia que fue víctima de la persecución hasta el exterminio y de la deforestación, producto de la ambición desmedida que generaron cultivos muy rentables. Guayakí los incluyó hace 10 años en su proyecto de regenerar miles de hectáreas deforestadas, cultivando la yerba mate. Así volvieron a florecer los Aché. Así, los niños de la comunidad nos sumergieron con su abrazo en la Ética del Cuidado”, expresa el actor Boy Olmi, director del documental Guardianes de la selva en el que invita a conocer esa primera etapa de una empresa entre los escondi-tes de la selva paraguaya y que se presenta en nuestra programación de este año como la única producción cinematográfica argentina.

Quedará mucho aún por hacer en materia de con-sumo responsable pero compartimos el espíritu opti-mista de Campodónico: “¡¡Que haya una revista como Ecomanía que está pensada para el consumidor final es un avance! ¡Que surja una feria para que emprende-dores y consumidores intercambien responsablemente es un avance! ¡Que exista un evento como Green Film Fest es un avance! E incluso ¡Que estemos hablamos sobre el tema es un avance! El desafío es lograr que el consumo responsable deje de ser una alternativa y se transforme en la norma”.

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Occupy love No es un documental sobre cambio climático, pero sí hay líderes ambien-tales, no es una película con cifras y estadísticas sobre las principales contaminaciones del planeta, pero sí hay muestras de prácticas susten-tables frente a ellas. Occupy Love es una original propuesta cinemato-gráfica que se adentra en el corazón de la búsqueda del cambio hacia una mejor sociedad en un mejor planeta: las movilizaciones alrededor del mundo frente a las crisis económicas y ambientales. Nos invita a formar parte de ellas para conocer sus principios, sus argumentos y sus sensa-ciones, para conocer el amor en acción.

Proyecciones: viernes 16, 12:30 hsmiércoles 21, 17:30 hs

Año: 2012Director: Velcrow RipperOrigen: CanadaDuración: 84 min.

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The slow food story Un recorrido histórico sobre cómo se conformó el movimiento Slow Food hasta su actual revolución social, empresarial y ambiental con vistas a una alimentación más saludable frente al monopolio de las comidas rápidas. El director Stefano Sardo nos invita a conocer los principios y fundamentos del movimiento y de los múltiples empren-dedores que optaron por una producción más consciente. Una pelícu-la motivadora, con escenas deliciosas de la comida, que demuestra que la aventura es mejor si sirve en porciones colmadas.

Proyecciones: viernes 16, 17:30 hsdomingo 18, 15:00 hsmartes 20, 22:15 hs

Año: 2013Director: Stefano Sardo Origen: ItaliaDuración: 74 min.

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ACTUAR PARA CAMBIAR, CAMBIAR PARA ACTUAR¿Es el activismo sólo la acción de grupos que impiden la caza de balle-nas? ¿O acaso no incluye también las acciones de grupos comunitarios que llevan a cabo determinadas acciones basadas en convicciones concretas? Conozcamos la opinión de activistas reales sobre un tema polémico.

Hablamos de la necesidad de un cambio, de tomar conciencia sobre las problemáticas ambientales y sociales actuales para comenzar actuar. Pero ¿Qué ocurre cuando esa acción implica detrás una organi-zación de manera conjunta con objetivos concretos y actividades puntuales? El año pasado salimos sorprendidos de la sala del cine luego de apreciar el polémico documental If a tree falls, que dejaba abierto el debate sobre los alcances, los límites y las necesidades del denominado “ecoactivismo” o “activismo ecológico”.

“Activista es el que pone el cuerpo frente a injusticias o crímenes ambientales. Se trata de un voluntario entrenado en no violencia que compar-te los principios de la organización y pone a su servicio su tiempo y compromiso”, define Fabiana Bellina, coordinadora del área de logística de Greenpeace Argentina.

Las acciones que la organización lleva a cabo comienzan con una etapa inicial de investigación que permite reunir las pruebas necesarias para la docu-mentación de la denuncia. Allí comienza el reclamo frente a sus oponentes que, como Greenpeace tra-baja para cambiar las políticas, suelen ser gobiernos y/o empresas. De este modo, voluntarios mayores de edad que han sido entrenados para tal fin participan activamente en eventos de todo tipo que implican destinar su cuerpo físico y su tiempo a la manifesta-

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ción en distintos puntos del país. Las acciones están acompañadas de un seguimiento y participación on-line a través de las redes sociales que, según Bellina, “es una tendencia cada vez más fuerte”.

¿Qué ocurre entonces cuando un grupo de personas se pone determinadas metas para cuidar el medio ambiente, desde andar grupalmente en bicicleta o concientizar a la sociedad para cambiar hábitos? ¿Puede seguir hablándose de activismo? La respuesta de Bellina es contundente: “Absolutamen-te. El activismo no es sólo de la manera que lo encara o transmite Greenpeace. Activismo es ser activo en pos de un objetivo. Las diferencias se ven en el cómo se llevan a cabo esas metas”.

Esta modalidad de activismo se puede apreciar en distintas partes del mundo. El movimiento Slow Food en pos de una alimentación más saludable es un ejemplo de ello. Sus orígenes, su desarrollo y su situación actual son narrados de una manera interesante y divertida en el documental The Slow Food Story.

En Argentina se emprendieron distintos proyec-tos que actúan para cuidar el medio ambiente. Por un lado, encuentros sociales como Green Drinks Buenos Aires. Una de sus fundadoras, Ethel Bonnet-Laverge, argumenta su consideración como activismo: “No solamente buscamos que se conoz-can nuevos proyectos sociales y ambientales sino que se genere mayor conocimiento de las oportuni-dades en el campo de la sustentabilidad. Además, esperamos que los emprendedores que necesiten un empuje en sus proyectos puedan encontrar el espacio y los consejos necesarios para hacerlo”. Así, en cada encuentro mensual se configura una red de actores, una alianza de proyectos y nuevas ideas que hasta el momento se desconocían entre sí.

Por otro lado, existen organizaciones en las que el objetivo de concientización ciudadana impulsó la puesta en práctica de múltiples acciones para cuidar el medio ambiente. “Buscamos cambiar hábitos, fomentando el rol de ciudadanos responsables y comprometidos con su entorno, por ejemplo, el reciclaje de residuos”, asegura Magdalena Olmos de Fundación Reciduca. El trabajo en red es clave para generar un impacto real así como el sosteni-miento de la actividad a lo largo del tiempo.

El género ha sido otro de los motivos que permitieron una acción conjunta en pos del planeta.

“A través de acciones de militancia territorial en eventos o en la vía pública, de penetración comu-nicacional en redes sociales y medios diversos, y de participación en espacios académicos, hemos buscado evangelizar a la ciudadanía con un enfoque orientado a la mujer”, cuenta Aleandra Scafati, fundadora de Ecomujeres, y agrega: “En esta búsqueda por mejorar la calidad de vida desde el núcleo primario de la familia, creemos que nuestras acciones se pueden enmarcar en un proceso de activismo permanente y continuo”.

El activismo ha encontrado espacios de manifestación desde las grandes organizaciones como Greenpeace, pasando por emprendimientos y encuentros sociales, hasta llegar a la acción de asociaciones vecinales. “Asumimos el pensamiento conservacionista de ‘pensar globalmente y actuar localmente’”, reconoce Hugo Campos de Vecinos por la Ecología una agrupación vecinal de la Comu-na 12 (Coghlan, Villa Urquiza, Saavedra y Villa Puey-rredón) que emprende distintos proyectos en pos del cuidado ambiental y social de su vecindario. Campos destaca algunas de las iniciativas: un programa de arbolado que incluyó la plantación de árboles autóctonos, un Club de Observadores de Aves para realizar salidas a la naturaleza, charlas concientizado-ras con alternativas concretas de resolución.

“Hoy es determinante la existencia del activis-mo medioambiental ya que la vida de los seres y del planeta está en riesgo, justamente por actividades humanas. Por esto, es fundamental accionar con inteligencia y comunión entre las personas”, expre-sa Mariela Silvestein, presidente de Conciencia Solidaria, una organización cordobesa que logró en equipo la prohibición por ley de la megaminería y de radioactivos en su provincia.

De lo que se trata, en definitiva, es de manifestar-se en pos del cambio, en pos de la acción. “El amor como pasión, como una creencia con la que se puede seguir adelante frente a las empresas o políticos que destruyeron la sociedad. Pueden desalojarte de una plaza o una calle, pero no pueden desalojar una idea”, se enuncia en el documental Ocuppy Love como una mirada diferente para pensar nuestro paso por este hermoso planeta al que fuimos invitados a participar en armonía. ¡Actuemos para cambiar las cosas, cam-biemos para actuar activamente, conectémonos para cambiar y actuar en conjunto!

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Cuando escuchás “Cine Ambiental”, ¿En qué pen-sás? Mucha gente aún piensa que el cine ambiental es: 1) Aburrido. 2) Una bajada de línea. 3) Negativo.Vamos a ir por una definición del Cine Ambiental. Se-gún los organizadores del Green Film Fest en Buenos Aires, se utiliza el cine “como medio para acercarle a la gente información y entretenimiento, logrando la sensibilización en temas fundamentales para nuestra calidad de vida.”

Hoy podemos hablar de un “Cine Ambiental” porque éste se está convirtiendo en un género (con las de-finiciones difusas que hay en la materia) para lo cual está ganando una identidad propia.

El cine ambiental rompió las barreras de lo mera-mente enunciativo, cuando las piezas se parecían más a bloques de noticieros que a una película, mostrando la visión del creador. Podemos hablar de Home de Yann Arthus-Bertrand y maravillarnos por sus imágenes, su perfección técnica y su mensaje, o de Annie Leonard y su serie de documentales sobre la “Historia de…”. Así continúan los ejemplos donde tanto directores, guionistas y productores, están imprimiendo en las películas que abordan la temática ambiental su sello personal. Probablemente estén

alentados por la nueva consciencia, este aire reno-vado donde no es tabú hablar de estar mejor como sociedad e individuos o quizás estén apurados por la urgencia de realizar cambios sobre nuestros hábitos y costumbres para poder seguir viviendo en el Planeta. Lo cierto es que dentro del Cine Ambiental temas objetivos como ser los desastres naturales y huma-nitarios, el cambio climático, el reciclaje, el impacto de la actividad humana sobre el Planeta, se trabajan desde una poética de autor, que permite una mayor conexión con el espectador, abre el debate, permite confluir y contrastar distintos puntos de vista.

El cine ambiental es una muestra de coraje y una victoria para todos los que trabajamos en la industria audiovisual. Y ofrece un diferencial: es una puerta abierta a la reflexión y a la acción. Invita a pensar sobre las situaciones planteadas y a actuar, dejando un mensaje claro: estamos en esta situación por la acción humana y sólo nosotros podemos salir de ella, realizando tanto acciones grandes como pequeñas. Así es que nuestra pregunta final queda abierta: ¿Cuál es tu granito de arena?

Por Bárbara Vespa y Lorena TenutaGuionistas y directoras de Revista Lima

¿CINE AMBIENTAL? SI, ¡GRACIAS!

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Semillero Green Film Fest 2013 es la 3º edición del Concurso Na-cional de Cortometrajes de Temática Ambiental. Su objetivo principal es fomentar la creatividad y apoyar la realización nacional independiente de obras audiovisuales cuyo contenido esté referido a la temática ambiental. El jurado encargado de seleccionar la obra ganadora está compuesto por: Elena Roger, Nicolás Pauls, Juan Taratuto, Gabriela Vizental, Pedro Tarak y Emiliano Ezcurra. El cortometraje ganador se proyectará antes de las películas del Festival y recibirá un traspaso a DCP de Cinecolor. +info: www.greenfilmfest.com.ar/semillero

Desde el Green Film Fest creemos que para lograr un planeta más jus-to y más sustentable es fundamental la coherencia. Buscamos generar conciencia del impacto que tienen los hábitos individuales en el ambien-te. Por eso, a partir de la edición en Buenos Aires 2011 y con el apoyo de Ecomujeres, medimos la huella de carbono del festival, para luego llevar adelante diferentes acciones de mitigación o compensación.

¡Ayudanos a reducir la huella de carbono del Festival!Vení caminando, en transporte público o en bici (no olvides tu casco), ¡podés dejar tu bici gratis en Estacionamiento Palermo! Beruti 3387, 1º subsuelo, junto a la caja. Si tenés que venir en auto, ¡compartí en viaje! www.sincropool.com Participá de la medición de la huella de carbono contándonos cómo viniste.

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Fundacion La Naciónwww.hacercomunidad.org

Greenpeacewww.greenpeace.org/argentina

Fundación Vida Silvestrewww.vidasilvestre.org.ar

Galería PRAXISwww.praxis-art.com

Alianza Francesawww.alianzafrancesa.org.ar/afba

Sustentatorwww.sustentator.com

Banco de Bosqueswww.bancodebosques.org

Avina www.avina.net

Agua y Juventudwww.aguayjuventud.org.ar

FARN www.farn.org.ar

Ecomujeres www.ecomujeres.com.ar

Perro Real www.perroreal.com

La vida en bici lavidaenbici.com

Bikestorming www.bikestorming.org

Go Eco www.goeco.com.ar

Escuelas Verdeswww.buenosaires.gob.ar/escuelasverdes

Cascos Verdeswww.cascosverdes.org.ar

Totebagwww.ilovetotebag.com

Revista Ecomaníawww.ecomania.org.ar

Revista Ecosistemawww.revistaecosistema.com

Revista Limawww.revistalima.com.ar

Proyecto Bamboowww.proyectobamboo.com

Sophia www.sophiaonline.com.ar

BK Mag www.bkmag.com.ar

Revista Urbano&Orgánicowww.urbanoyorganico.com

Revista Futuro Sustentablewww.futurosustentable.com.ar

Amartya www.amartya.org.ar

Instituto de Conservación de Ballenas www.icb.org.ar

Creatividad Éticawww.creatividadetica.org

Dónde Reciclowww.dondereciclo.org.ar

Conexión Naturalwww.conexionnatural.org

EcoBici ecobici.buenosaires.gob.ar

CICODI www.cicodi.org

Sabe la Tierrawww.sabelatierra.com

Green Drinksgreendrinksba.org

Fundación Huerta Niñowww.mihuerta.org.ar

Compromiso Ecowww.compromisoeco.org

INICIA www.inicia.org.ar

Unidadcomwww.unidadcom.com.ar

FADU VERDEfadurecicla.wordpress.com

Miguel Breawww.miguelbrea.com.ar

Distrito Audiovisualwww.buenosaires.gob.ar/audiovisual

Azzularq www.azzularq.com.ar

Greca www.grecaweb.com

Noticias Positivaswww.noticiaspositivas.org

Fundación Tierra Vidawww.fundaciontierravida.org

ARS http://ars.org.ar/

Sonyandowww.sonyando.com.ar

Jardín Gourmetwww.jardingourmet.com

Directorio Verdehttp://directorio-verde.com

Jardín Orgánicowww.jardinorganico.com.ar

Exploradores Solidarioswww.organicoopers.net

Chicos Naturalistaswww.chicosnaturalistas.com.ar

Sincro-poolwww.sincropool.com

Goes Greenwww.goesgreen.com.ar

Monkysanwww.monkysan.com.ar

Fundacion Huellas www.fundacionhuellas.org

Universidad de Flores www.uflo.edu.ar

Red Argentina de Responsa-bilidad Social Empresaria www.unirse.com.ar/tag/red-argentina-de-rse

Conservación de Tiburonesconservaciondetiburones.blogspot.com.ar

Conciencia Solidariawww.concienciasolidaria.org.ar

Vecinos por la Ecologíahttp://vecinosporlaecologia.blogspot.com.ar

La Huella http://lahuellaespaciodearte.blogspot.com.ar

Medicina Ayurvedawww.medicinaayurveda.org

Proyecto Ambientalwww.proyectoambiental.com.ar

Fundación DAATwww.fundaciondaat.com.ar

Fundación Reciducawww.fundacionreciduca.org.ar

GIO www.juguetesgio.com.ar

Ecoexplorerwww.ecoexplorer.com.ar

Cable a tierrawww.cabletierra.com.ar

Céspedeswww.cespedescoworking.com

Equilibrium Globalwww.equilibriumglobal.com

Ecoeducartewww.ecoeducarte.com.ar

Manos Verdeswww.manos-verdes.org

Toctumi www.toctumi.com

Buenos Aires Verdewww.bsasverde.com

Suelto www.suelto.net

CORKDESIGNwww.corkdesign.com.pt

Nuevos Aireswww.nuevosaires.org.ar

Delta Terrawww.deltaterra.com.ar 

Sapo Composterohttp://sapocompostero.wix.com/compost

Fundación Crisis Global

Ecovasoshttp://qeroecovasos.com/

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Estas son las organizaciones que apoyan el Green Film Fest, ¡conocelas y conectate vos también!

www.mascaña.com.arwww.ledesma.com.ar

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Entrada general: $39 Abono de 10 películas: $350

Entradas en venta en: Cinemark Palermo: Beruti 3399 esq. Bulnes Online: www.cinemark.com.ar

+info www.greenfilmfest.com.ar

jueves 1512:30 Sand wars15:00 The human scale17:30 Amazonia eterna20:00 Consumed22:15 Planet ocean

viernes 1612:30 Occupy love15:00 Trashed17:30 The slow food story20:00 The fruit hunters22:15 The human scale00:30 YERT

sábado 1712:30 Amazonia eterna15:00 Sammy 217:30 Los guardianes de la selva20:00 Planet ocean22:15 GMO OMG00:30 The weather war

domingo 1812:30 GMO OMG15:00 The slow food story17:30 Planet ocean20:00 The carbon rush22:00 YERT00:30 Consumed

lunes 1912:30 Sammy 215:00 Amazonia eterna17:30 The fruit hunters20:00 Trashed22:15 Sand wars

martes 2012:30 Trashed15:00 Consumed17:30 Los guardianes de la selva20:00 The human scale22:15 The slow food story

miércoles 2112:30 The carbon rush15:00 GMO OMG17:30 Occupy love20:00 YERT22:30 The weather war

Programación

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Revista impresa

en papel Ledesma

VISIÓN hecho con

fibra de caña de

Azúcar.