3º ESO

LITERATURA DE LA EDAD MEDIA:

EL MESTER DE CLERECÍADON JUAN MANUEL

EL MESTER DE CLERECÍA

El mester de clerecía (oficio de clérigos) surge como una escuela poética en los siglos XIII y XIV. Las personas cultas que sabían latín empezaron a escribir sus obras en lengua romance para favorecer su difusión. Trata sobre todo temas religiosos, con una finalidad didáctica, y utilizan la cuaderna vía; una estrofa de cuatro versos con catorce sílabas en cada uno y rima consonante. La monorrima implica el manejo de un amplio vocabulario.

Gonzalo de Berceo, clérigo y notario en el monasterio de San Millán de la Cogolla (La Rioja), es el primer autor literario español cuyo nombre conocemos. Su obra más importante fue Milagros de Nuestra Señora, pero escribió muchas más, todas de carácter religioso.

Esta obra está constituida por 25 milagros atribuidos a la Virgen María que se recogen de la tradición europea (se reconoce una corriente de devoción extendida desde el siglo XII). Berceo los tradujo del latín al castellano y los adaptó a la sociedad del momento (amplificatio, abrevatio, digressio), de manera que al escucharlos los oyentes pudieran reconocer sus problemas cotidianos y su manera de ser.

En sus milagros, la Virgen María nunca abandona a los que confían en ella por muy pecadores que sean, los ayuda en sus problemas cotidianos y salva su alma llevándola con ella al cielo.

GONZALO DE BERCEO (1196-1264)

Durante el siglo XIV, además de transmitir valores religiosos y morales, el mester de clerecía buscaba entretener a los lectores, como sucede en el Libro de buen amor. Se trata de una sátira social en que el clérigo aporta su visión particular de un sistema que se desmorona ante la llegada de nuevos valores. Del autor sabemos poco más que su nombre, y que fue arcipreste de Hita (Guadalajara).

El contenido es de temas muy variados:- Una autobiografía amorosa del arcipreste (aventuras sentimentales

narradas en primera persona a modo de lección y advertencia). Búsqueda del amor que casi siempre fracasa.

- Cuentos y fábulas de animales que sirven como ejemplos de las ideas que defiende el arcipreste.

- Reflexiones morales, ascéticas y satíricas (pecados capitales).- Numerosos consejos sobre el amor y cómo conseguirlo y mantenerlo

(mantener la higiene corporal, no beber mucho vino, tocar algún instrumento musical, hablar moderadamente, no ser perezoso, tener dinero… y servirse de una alcahueta).

- Canciones líricas dedicadas a la Virgen María.- Una crítica severa sobre los vicios sociales de la época.

JUAN RUIZ, ARCIPRESTE DE HITA (SIGLO XIV)

Don Juan Manuel perteneció a la más alta nobleza castellana: fue tutor de Alfonso XI y abuelo del futuro rey Juan I de Castilla.

Como hijo de nobles, recibió educación en el manejo de las armas y de las letras, conoció profundamente la obra de su tío el rey Alfonso X el Sabio y tuvo acceso a las traducciones de cuentos orientales que se hicieron en la Escuela de Traductores de Toledo, y que sirvieron como inspiración para su obra El conde Lucanor.

El conde Lucanor es una colección de 51 cuentos en castellano destinada a la educación de los nobles que vivían en la corte y no sabían latín, con una intención didáctica y moralizadora.

DON JUAN MANUEL (1282-1348) (SIGLO XIV)

EL CONDE LUCANOREl que está bien sentado, no se levante.

Quien te alaba lo que tú no tienes, cuida que no te quite lo que tienes.

Para que los males no puedan llegar, su raíz al comienzo debemos cortar.

El no saber qué se debe dar, daño a los hombres ha de reportar.

Por pobreza nunca desmayéis, pues otros más pobres que vos veréis.

Procúrate siempre muy bien guardar del que al hacerte mal muestra pesar.

Si por descanso o deleites la buena fama perdemos, al acabar nuestra vida deshonrados quedaremos.

No te hagas mucho de rogar en lo que te pueda beneficiar.

Al que enemigo tuyo solía ser nunca le debes en nada creer.

EL CONDE LUCANOR

No pierdas un amigo provechoso por lo que él te diga el mentiroso.

No comas siempre de lo que has ganado, mas vive de modo que mueras honrado.

Disimula todo aquello que pudieres; venga solo lo que forzosamente debieres.

Al que te aconseja encubrirte de tus amigos le es más dulce el engaño que los higos.

Si Dios te diere seguridad, piensa en la muerte y la eternidad.

Huir del peligro es mayor seguridad que la que ningún amigo puede dar.

La honra y el descanso no hacen juntos morada; eso tened por cierto, que es verdad probada.

Por este mundo perecedero no te expongas a perder el duradero.