LICENCIADO EN MATEMÁTICAS APLICADAS - FCFM: Facultad de … · La impartición de clases cargadas...

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BENEMÉRITA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE PUEBLA FACULTAD DE CIENCIAS FÍSICO MATEMÁTICAS Un análisis de las creencias en la resolución de problemas de matemáticas en los profesores de nivel básicoTESIS Para obtener el título de: LICENCIADO EN MATEMÁTICAS APLICADAS Presenta: Jesús Alejandro Javier Montiel Asesores: Dra. Olga Leticia Fuchs Gómez M.C. Ma. Guadalupe Raggi Cárdenas Puebla, Diciembre 2012

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BENEMÉRITA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE

PUEBLA

FACULTAD DE CIENCIAS FÍSICO

MATEMÁTICAS

“Un análisis de las creencias en la resolución de

problemas de matemáticas en los profesores de nivel

básico”

TESIS

Para obtener el título de:

LICENCIADO EN MATEMÁTICAS

APLICADAS

Presenta:

Jesús Alejandro Javier Montiel

Asesores:

Dra. Olga Leticia Fuchs Gómez

M.C. Ma. Guadalupe Raggi Cárdenas

Puebla, Diciembre 2012

Agradecimientos

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AGRADECIMIENTOS

Para llegar a este momento de mi vida he pasado muchos obstáculos, en los cuales he

aprendido que en la vida hay cosas importantes como la sinceridad, humildad y el trabajo

en equipo, las cuales en mi carrera afiné gracias al apoyo de muchas personas que

estuvieron en este camino.

Por ello quiero comenzar dándole gracias a mi tío Víctor Manuel Montiel López ya que sin

su apoyo no podría estar viviendo este momento de alegría y gozo de mi vida, gracias por

brindarme la compañía de cada noche, brindándome palabras de ánimo para poder seguir

adelante en mi carrera y por esas e incontables cosas más muchas gracias.

También gracias a mis padres Irma Montiel López y Juan Javier Hernández que sin el

cariño que unos padres le dan a su hijo no podría salir adelante, por ello me siento

agradecido ya que siempre he contado con su apoyo no solo como padres, sino como de

amigos y compañeros que cuando los necesito siempre están ahí brindándome su mano, por

ello gracias por todo.

Gracias a mis hermanos Cesar y Jazmín por la compañía que me brindaban cada vez que

tenía que estudiar para un examen.

No menos importante también gracias a mis tíos, Luis, Miguel, Raúl, Antonio, Alberto y a

sus correspondientes esposas ya que siempre en este camino me brindaron la experiencia

que han adquirido en el transcurso de los años.

Gracias a todos mis maestros de la FCFM por enseñarme lo que más me gusta que son las

“matemáticas” pero especialmente gracias a la Dra. Leticia Fuchs Gómez por aceptarme

como tesista, ya que no solo me enseñó la matemática y la física, me enseñó también cómo

ser y comprender al alumno, también a la maestra Ma. Gpe. Raggi Cárdenas por su

paciencia como tutora.

También agradezco a la Dra. María Araceli Juárez Ramírez, Dr. Juan Alberto Escamilla

Reyna y M.C. Rogelio Cruz Reyes por aceptar ser mi jurado, dedicarle tiempo y dedicación

a esta tesis.

También agradezco a mis amigos Jazmín, Gilberto, German, Laura, Ana por compartir

alegrías que nunca podré sacarme de las venas y por esa amistad que es difícil de olvidar, y

a Gladys que ella ha sido más que una compañera, amiga, ha sido el apoyo para poder

acabar esta carrera, muchas gracias.

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CONTENIDO

Introducción .......................................................................................................................... 4

Antecedentes ......................................................................................................................... 7

PREGUNTAS DE INVESTIGACIÓN ............................................................................ 20

OBJETIVO GENERAL .................................................................................................... 20

OBJETIVOS ESPECÍFICOS. .......................................................................................... 20

Capítulo 2. ¿Qué son las creencias? .................................................................................. 21

2.1 ¿Por qué son importantes las creencias? ..................................................................... 24

2.2 ¿Cómo se originan las creencias? ............................................................................... 28

2.3 El sistema de creencias ............................................................................................... 29

Capítulo 3. Creencias de los estudiantes. .......................................................................... 31

3.1 ¿Cuáles son las creencias de los alumnos en la resolución de problemas? ................ 34

3.1.1 Creencias sobre las matemáticas y los problemas. ......................................... 34

3.1.2 Creencias sobre los resolutores de problemas. ............................................... 36

3.1.3 Creencias sobre el proceso de resolución de problemas................................. 38

3.1.4 Creencias sobre el aprendizaje y mejora de la resolución de problemas........ 39

3.2. Origen y formación de las creencias ......................................................................... 41

3.2.1 Contexto escolar. ............................................................................................ 41

3.2.2 Agentes externos al contexto escolar. ............................................................ 42

3.2.3 Aspectos afectivos. ......................................................................................... 43

3.3. Consecuencias ............................................................................................................ 44

Capítulo 4. Evaluación de las creencias. ........................................................................... 46

4.1 Análisis descriptivo ..................................................................................................... 47

4.1.1 Análisis de la primera sección ........................................................................ 47

4.1.2 Análisis de la segunda sección ....................................................................... 55

4.1.3 Análisis de la tercera sección.......................................................................... 60

Conclusiones ........................................................................................................................ 73

Referencias…………………………………………………………………………………………78

Anexo: Encuesta a profesores de nivel básico………………………………………………………….……..81

INTRODUCCIÓN

4

Introducción

La ciencia y técnica de nuestros días ha logrado una constante acumulación de información,

que impone a los docentes el salto cualitativo que conduzca a eliminar aquella enseñanza

que sólo promueve el aprendizaje puramente reproductivo. La impartición de clases

cargadas de información, no permite que se enseñe al estudiante a pensar, a actuar y

desarrollar su independencia y creatividad, lo que limita su trabajo independiente.

En correspondencia con lo anterior, es importante una adecuada estructuración del proceso

docente educativo, que permita a los educadores realizar actividades donde se conjuguen

los conocimientos que deben asimilar sus educandos con las acciones y operaciones que

han de realizar. De esta forma se propicia la solidez de los conocimientos asimilados y el

logro de una enseñanza desarrolladora de habilidades y capacidades.

Cuando se trabaja en el sentido de desarrollar el pensamiento de los educandos, se puede

optimizar la forma de pensar y ejercitar los algoritmos que conducen a que se apropien de

una mayor profundidad y rapidez en su actuación independiente en la vida. Sin embargo,

como se ha observado en los últimos años, la enseñanza tradicional no está ayudando para

que el alumno desarrolle su pensamiento sino más bien mecanismos y respuestas

automáticas sin sentido, favoreciendo habilidades memorísticas. Aprender a pensar ha sido

un argumento para justificar la necesidad de aprender matemáticas, sabiendo que es muy

importante aunque no es lo único. Porque pensar es una de las actividades centrales de la

persona. El ser humano aparte de pensar también siente, cree, ama, juega, contempla y

INTRODUCCIÓN

5

actúa. Pero podemos decir que la matemática es la materia idónea para ejercitar el

pensamiento humano.

Podemos hacer de los procesos de pensamiento objeto de aprendizaje, a través de

situaciones problemáticas que se pueden abordar con las herramientas que ofrecen las

matemáticas. Y una de las herramientas es la resolución de problemas, la cual estimula a

los alumnos a afrontar situaciones nuevas, a responder cuestiones para las que no se conoce

una respuesta mecánica, elaborar estrategias para resolver dichas situaciones, a plantear

preguntas en las cuales puedan encontrar un camino para poder solucionar una nueva

situación y finalmente aplicar sus conocimientos junto con sus destrezas.

En este trabajo no consideramos un problema como una simple tarea, sino una herramienta

para pensar matemáticamente, esto exige crear un ambiente que propicie la confianza de

cada alumno y alumna en sus propias capacidades de aprendizaje, esto implica que el

alumno no se sienta frustrado o fracasado por la dificultad que se le presenta, sino más bien

que disfrute los retos que se encuentran en la vida cotidiana o en el mismo salón de clase.

Para que esto se logre consideramos el papel importante que juegan los profesores en el

aprendizaje para la resolución de problemas y cuáles son las creencias que ellos mismos

tienen en este rubro.

El motivo de este trabajo es saber cuáles son las creencias de los profesores en la resolución

de problemas y como estas afectan el bajo rendimiento de los alumnos en matemáticas. Una

prueba de esto lo podemos ver en la prueba ENLACE (2011) en el área de matemáticas del

estado de Puebla donde en primaria ya sea de la: CONAFE, GENERAL, INDIGENA O

PARTICULAR; la mayoría del alumnado se encuentra en “INSUFICIENTE” con un

promedio del 39.5% y sin olvidar la secundaria, el alumnado se encuentra en esta misma

categoría con un promedio de 42.5%. Sabemos que podrían ser muchos motivos por los

cuales el alumnado se encuentre en esta categoría pero con este trabajo daremos respuesta a

la siguiente pregunta ¿Será acaso que los profesores de matemáticas tienen que ver con el

bajo rendimiento del alumno? Y también ¿Qué creencias tienen los profesores en la

resolución de problemas y si poseen alguna similitud con el alumnado? En el capítulo 1

damos la visión que tienen los alumnos y profesor en la resolución de problemas. En el

INTRODUCCIÓN

6

capítulo 2 y 3, sin perder de vista que en el proceso de resolución de problemas intervienen

diversos elementos, nos centramos en uno de ellos, las creencias de los alumnos. Las

preguntas que abordaremos son las siguientes: ¿Qué son las creencias? ¿Por qué son tan

importantes? ¿Cómo se forman? En el capítulo 4 se muestra la metodología que se usó en el

análisis de los datos que se obtuvieron de la encuesta realizada a los profesores de nivel

básico de la sección 23 y 51 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación

(SNTE), que asistieron al programa de capacitación de matemáticas en la Facultad de

Físico Matemáticas de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP). Y

finalmente en el capítulo 5 presentamos las conclusiones que obtuvimos.

CAPÍTULO 1

7

Capítulo 1

Antecedentes

Sabemos que la palabra matemáticas tiene muchos significados. Lluís Santaló (1993),

explicó que para aquellos que tenían una escasa formación matemática, se piensa que esta

ciencia está integrada únicamente por cálculos aritméticos comunes y por los nombres y

propiedades de algunas figuras geométricas; para ellos, se trata de saber calcular y en

consecuencia, con la aparición de las calculadoras, consideran que la matemática ha

perdido gran parte de su interés, o que este interés cabe mantenerlo evitando el uso de las

nuevas tecnologías en el aula. Incluso personas con una alta formación profesional reducen

la actividad matemática a la abstracción y manipulación de números y relaciones

funcionales, quitando otros campos y tareas. Sin embargo, en el otro extremo de esta

escala, Santaló nos describe minuciosamente su visión de la actividad matemática, a la vez

como una técnica, como un arte, como una filosofía y como una ciencia. Y esta dimensión

solo puede ser desarrollada, como dice Puig Adam (1960), cultivando el espíritu de la

investigación y de conquista.

CAPÍTULO 1

8

Esta amplitud de valores culturales es mostrada por Alsina (1995), en su “Elogio por las

Matemáticas”, cuando expone que éstas han hecho posible un amplio abanico de modelos:

cuantitativo, basado en el mundo de los números, de representación y descripción de la

realidad física inmediata, de comparación y cuantificación de las magnitudes, de

razonamiento y muchos otros modelos específicos para describir fenómenos o situaciones.

Pero además, pone énfasis en que junto a este proceso ha ido desarrollándose una

enseñanza matemática que en un principio fue dirigida a una élite, y que mucho después fue

extendiéndose a la gran población, para llegar a su universalización.

Lakatos (1978), entiende a las matemáticas como una actividad humana que encierra en ella

misma una dialéctica de conjeturas, refutaciones y demostraciones, hasta llegar al

establecimiento de una conclusión. Por una parte, Carrillo y Contreras (2000), concluyen

que resolver un problema no es sólo dar el resultado, es también interpretar las condiciones

iniciales, es avanzar en el planteamiento de otros problemas e investigaciones; o como dice

Polya (1969), las matemáticas son una disciplina de descubrimiento. Pero, por otra parte, la

actividad matemática se justifica en la finalidad creativa: la actividad en sí misma podría

derivar en hacer por hacer, con un escaso interés intelectual o cultural.

Teniendo en cuenta las ideas anteriores, hay que reconocer los esfuerzos en los últimos

tiempos por caracterizar los valores educativos de las matemáticas: funcionalidad, sentido,

comunicación, perseverancia, placer etc. Como por ejemplo: Freudenthal, Guzmán, Polya,

Puig Adam y una extensa relación de matemáticos y pedagogos que han liberado este

proceso. En particular, Puig Adam redactó en 1985 el ya famoso “Decálogo del profesor de

matemáticas”, en el que recogía sus opiniones sobre la enseñanza de las matemáticas en los

institutos:

1) No adoptar una didáctica rígida, sino amoldarla en cada caso al alumno,

observándole constantemente.

2) No olvidar el origen concreto de la matemática, ni los procesos históricos de su

evolución.

3) Presentar la matemática como una unidad en la relación con la vida natural y social.

4) Graduar cuidadosamente los planos de abstracción.

CAPÍTULO 1

9

5) Enseñar guiando la actividad creadora y descubridora del alumno.

6) Estimular la actividad creadora, despertando el interés directo y funcional hacia el

objeto de conocimiento.

7) Promover en todo lo posible autocorrección.

8) Conseguir cierta maestría en las soluciones antes de automatizarlas.

9) Cuidar que la expresión del alumno sea traducción fiel a su pensamiento.

10) Procurar que el alumno tenga éxito para evitar su desaliento.

Polya (1965) consideraba que un profesor de matemáticas tiene en sus manos una gran

oportunidad: si utiliza su tiempo en ejercitar a sus alumnos en operaciones rutinarias matará

en ellos el interés, impedirá su desarrollo intelectual; pero si estimula en ellos la curiosidad

podrá despertarles el gusto por el pensamiento independiente.

En el documento “National Council of teachers of Mathematics” afirma en su

recomendación 1: “La resolución de problemas debería ser el foco de las matemáticas

escolares en los 80” (N.C.T.M., 1980:1).

Esta recomendación se basaba en seis acciones, en las que se implicaba el profesorado, a

los investigadores y a las administraciones educativas:

1. Debería organizarse el currículo de matemáticas en torno a la resolución de problemas.

2. Debería desarrollarse y ampliarse la definición y el lenguaje de la resolución de

problemas en matemáticas con el fin de incluir un amplio rango de estrategias, procesos

y modos de presentación que abarcasen todo el potencial de las aplicaciones

matemáticas.

3. El profesorado de matemáticas debería crear ambientes de clase en los cuales pueda

surgir la resolución de problemas.

4. Deberían desarrollarse materiales curriculares apropiados para enseñar a resolver

problemas a todos los niveles.

5. Los programas de matemáticas de los 80 deberían implicar al alumnado en la resolución

de problemas presentando aplicaciones a todos los niveles.

CAPÍTULO 1

10

6. Los investigadores deberían dar prioridad durante la década de los 80 a las

investigaciones sobre la naturaleza de la resolución de problemas y las vías efectivas

para conseguir resolutores de problemas.

Otro autor que más explícitamente ha hecho referencia al importante papel de la resolución

de problemas es , A.H. Schoenfeld (1991 y 1992), quien apunta la conveniencia no tanto de

hablar de enseñar a resolver problemas como de enseñar a pensar matemáticamente, es

decir moldear, simbolizar, abstraer y aplicar ideas matemáticas a un amplio rango de

situaciones. En este marco, los problemas jugarían el papel esencial de punto de partida de

las discusiones matemáticas, colocando en primer plano los procesos característicos de la

actividad matemática (de alto nivel cognitivo), por encima de las rutinas algorítmicas (de

bajo nivel cognitivo).

Al proyecto OCDE/PISA (2000), sin ser un documento comparable a los anteriores, incide

en la misma idea de plantear el conocimiento matemático sobre la base de competencias,

confrontando éstas a la visión tradicional del saber en términos de conceptos, hechos,

algoritmos y técnicas.

Como podemos darnos cuenta, en estos tiempos el profesor se encuentra con dificultades

cuando pretende desarrollar los planteamientos anteriores; y además creemos que a su vez

muy estrechamente relacionado con ello, la realidad diaria nos muestra también una amplia

e inabordable casos de dificultades, bloqueos y errores cometidos observados en el alumno

al resolver problemas de matemáticas.

Una ejemplo muy conocido y a la que se dió mucha difusión en su momento, es la que

llevó a cabo el IREM de Grenoble (1980) en la cual, en el marco de una investigación, se

planteaba a un alumnado de 7 a 9 años la siguiente cuestión:

En un barco hay 26 corderos y 10 cabras. ¿Cuál es la edad del capitán?

Se observó que de los 97 niños y niñas a los que se propuso, 76 consiguieron calcular la

edad del capitán a partir de los datos del enunciado. Otro ejemplo de los mismos

investigadores es acerca de un niño de 7 años a quien le preguntaba:

CAPÍTULO 1

11

Tienes 10 lápices rojos en tu bolsillo izquierdo y 10 lápices azules en tu bolsillo derecho

¿Qué edad tienes?

A lo que respondió: “20 años”. Al niño se le hizo ver que el niño no tenía 20 años, a lo cual

contesto: “Sí, pero es tu culpa, no me has dado los números correctos”.

Por otra parte, podemos considerar otros tipos de dificultades observadas en la resolución

de problemas no estereotipados, estos no requieren complejas estrategias de resolución, o

más aún, no admiten estrategias o procesos de ejecución informales. Un problema de esta

naturaleza es el que realiza Schoenfeld (1991), propuesto en el tercer NAEP:

En un autobús militar caben 36 soldados. Si 1128 deben ser trasladados ¿Cuántos

autobuses son necesarios?

Los resultados muestran que un 70% del alumnado efectuó correctamente los cálculos, sin

embargo: ¿Cuántos autobuses eran necesarios? Un 29% afirmó que “31 de resto 12”; un

18% afirmó que se necesitaban 31; y únicamente un 23% afirmó que se necesitaban 32.

A pesar de que se tratan de problemas poco complejos, incluso para la edad a la que eran

propuesto, su carácter no estereotipado hace que se requiera de un abordaje reflexivo, no

automático, ni asociado de forma mimética a algoritmos o sistemas conceptuales; los datos

nos llevan a dudar de que sea posible encontrar de forma generalizada ese nivel de

pensamiento matemático en clase; por supuesto eso, eso debería ser deseable.

También debemos de considerar aquellos alumnos especialmente capacitados en la

educación matemática ya que a veces buenos alumnos se bloquean, dan respuestas rápidas

o incoherentes, o se conforman con bajos niveles de solución. Un ejemplo de esta

naturaleza es un problema abierto como se muestra a continuación:

¿Cuánto cartón es necesario para construir un envase que pueda contener un litro de

leche?

Podemos ver con estos ejemplos y los resultados obtenidos que no solo basta saber

matemáticas, si no hacer uso de todos los recursos que tiene el resolutor en su exterior e

CAPÍTULO 1

12

interior. Así pues podemos decir que un problema es una situación, planteada con finalidad

educativa, que propone una cuestión matemática cuyo método de solución no es

inmediatamente accesible al alumno/ resolutor o grupo de alumnos que intenta resolver,

porque no dispone de un algoritmo que relacione los datos y la incógnita o de un proceso

que identifique automáticamente los datos con la conclusión, y por lo tanto debería de

buscar, investigar, establecer relaciones, implicar relaciones, implicar sus afectos, etc. para

afrontar una situación nueva.

Esto nos lleva a una caracterización de la idea de problema entendida como “herramienta

para pensar matemáticamente” (Schoenfeld, 1992) y en estos términos preferimos

referirnos a la “creación de un ambiente de resolución de problemas en el aula” y a lo que

Abrantes (1996) llama “resolución de problemas como ambiente y como naturaleza de

actividades de aprendizaje”. Este ambiente de aprendizaje exige una determinada

formación del profesorado, así como de ciertas actitudes y creencias. Se genera

seleccionando problemas que sean accesibles a los alumnos, que no les creen frustración,

que al menos admitan un tratamiento parcial más sencillo, pero que al mismo tiempo les

supongan un reto; alentando la exposición de ideas, la argumentación y el espíritu crítico;

fomentando el trabajo en grupo entre los estudiantes, la comunicación de ideas, el contraste

y el diálogo; interesando al estudiante en procesos generadores de conocimiento como

definir, hacerse preguntas y preguntar, observar, clasificar, particularizar, generalizar,

conjeturar, demostrar y aplicar.

Polya (1965), desde la visión introspectiva del resolutor ideal, describe las siguientes cuatro

fases por las que cualquier resolución debe pasar: comprensión del problema, diseño de un

plan, ejecución del mismo, verificación de la solución. Desde una visión que pretende

observar y analizar el proceso para comprenderlo, Schonfeld (1985) describe

minuciosamente pequeñas conductas y acciones que engloba en lo que él llama esquemas

de análisis del comportamiento del resolutor los cuales son: “análisis y comprensión, diseño

y planificación, exploración, ejecución y verificación”.

Desde una perspectiva más centrada en el aula, Mason, Burton y Stacey (1988) describen el

proceso de resolución de problemas dando importancia capital a lo que se siente: los

CAPÍTULO 1

13

estados afectivos, de ánimo, emocionales. Esta descripción hace referencia a unos procesos

(particularizar,-generalizar, conjeturar, demostrar) a unas fases (abordaje, ataque, revisión)

y a unos estados.

De todo lo anterior, podemos observar tres fases de acciones en la resolución de problemas,

las cuales son: el abordaje, el desarrollo y la revisión general, con las correspondientes

transiciones entre ellas. Las acciones relacionadas en el abordaje van encaminadas a

comprender mejor el problema y a buscar varios enfoques o vías de resolución; las

relaciones con el desarrollo, a implementar una estrategia de resolución que se ha

determinado en la fase anterior; las relaciones con la verificación, a comprobar, reflexionar

y generalizar.

Ahora veremos algunos aspectos que influyen en la resolución de problemas, Schonfeld

(1985) consideraba que un buen resolutor de problemas era conveniente disponer de:

1. Un buen equipo organizado de conocimientos en torno al contenido.

2. Un buen equipo de procedimientos para representar y transformar el problema.

3. Un sistema que controle y guíe la selección de conocimientos y procedimientos.

En otras palabras, Kilpatrick se refiere en (1) a los conocimientos del campo específico (por

ejemplo: trigonometría), (2) a los conocimientos de las estrategias de resolución de

problemas (por ejemplo: probar con casos más sencillos) y (3) a la capacidad de control y

autorregulación, todos ellos aspectos con una clara componente cognitiva. Sin embargo,

podemos considerar los factores cognitivos como comentaba (McLeod y Adams, 1989;

Mason, Burton, Stacey, 1988) concretamente de tipo afectivo y contextual. En esta línea,

muy recientemente ha cobrado fuerza el concepto de inteligencia emocional (Goleman,

1996) para adoptar una visión más amplia que la que se ajusta al dominio cognitivo.

En cualquier caso, en esta categoría de los afectos se incluyen aspectos como las actitudes

(la motivación, el interés, la confianza, la perseverancia, el gusto de asumir riesgos, la

tolerancia a la ambigüedad y la resistencia a la finalización prematura), las emociones en su

sentido, más amplio y las creencias.

CAPÍTULO 1

14

Sin embargo, la inclusión de estos aspectos de carácter afectivo no podemos entenderla

desde una visión compartimentada. En defensa de la estrecha relación entre los dominios

afectivo y cognitivo, McLeod (1992) afirma que no hay respuesta afectiva en ausencia de

evaluación cognitiva, y desde la perspectiva inversa, la mayor parte de las respuestas

emocionales se originan en una interrupción de los planes de resolución de problemas o en

una discrepancia entre las expectativas y los sucesos reales. Así, menciona puntos de

conexión importantes entre ambos dominios (generalmente de tipo metacognitivo) como

por ejemplo: la decisión de perseverar en el camino de una posible solución puede estar

influenciada por la ansiedad o la confianza, o también que los procesos de almacenamiento

y recuperación de información pueden estar afectados por las emociones.

Así Lester (1987), distinguía cinco categorías interdependientes: los conocimientos, el

control, las emociones y actitudes, las creencias y las condiciones socioculturales. En el

siguiente cuadro ponemos las relaciones de Lester y las categorías que él pensaba.

Cuadro 1.1 Las cinco categorías que Lester pensaba en la influencia en la resolución

de problemas.

Conocimiento

Emociones y

actitudes

Condiciones

socioculturales Creencias

Control

CAPÍTULO 1

15

Con una clara visión del papel que juegan las creencias en el conjunto del rendimiento en

la resolución de problemas (observamos en el esquema que directamente y también

indirectamente a través de otros aspectos, inciden sobre la utilización de los

conocimientos). En esta línea, Schoenfeld (1992) distingue cinco aspectos: conocimientos

base, estrategias de resolución de problemas, gestión, creencias y afecto y prácticas. Así, en

particular Schoenfeld considera que cuando un alumno dispone de un buen bagaje de

conocimientos y estrategias, y tiene un buen control de lo que hace, la única cosa que

permite explicar el fracaso es su sistema de creencias.

Como podemos observar todos tienen algo más en común, lo cual es la base de

conocimientos, que la podemos definir como: el conjunto de conocimientos que están

disponibles en la memoria del sujeto para ser utilizados. Schoenfeld (1985), que se refiere a

ellos con el nombre de recursos, incluye explícitamente: hechos, procedimientos y técnicas.

Sin embargo otros autores (Lester, 1987; Lester, Garofalo y Kroll, 1989) incluyen esta

categoría las estrategias heurísticas. Sabemos que es muy importante que el alumno

“sepa/sepa hacer/ haga”, pero no podemos olvidar la necesidad y conveniencia de que

también reflexione sobre “qué sabe/qué sabe hacer/ qué hace”. Es así que al analizar los

modos de resolver problemas o al dirigir el aprendizaje del alumnado, entramos en el

resbaladizo terreno de la metacognición. En la metacognición algunos autores distinguen

dos aspectos (Schoenfeld, 1987; Garofalo y Lester, 1985):

a) El conocimiento y las creencias en torno a los propios procesos de pensamiento; en

particular podemos distinguir creencias en torno al propio sujeto, en torno a la tarea

(propósitos, dificultades, etc.) y en torno a la estrategia;

b) La regulación y el control del proceso, los cuales dirigen la manera en la que se

utiliza los conocimientos; en particular nos referimos a las decisiones en torno a la

selección de contenidos, la planificación de acciones, la selección de estrategias

apropiadas para llevar a cabo un plan, la toma de decisiones para mejorar el plan,

evaluar la validez del plan y en caso necesario, la revisión o abandono de los planes

o estrategias inadecuadas.

CAPÍTULO 1

16

Por otra parte, un aspecto importante en la resolución de problemas, son las llamadas

estrategias de resolución de problemas, heurísticos o, en palabras de Kilpatrick, los

procedimientos de representación y transformación de los problemas. Carrillo (1996), a

partir de la idea Schoenfeld, considera que un heurístico es una insinuación o sugerencia

general o estrategia, independiente de cualquier tópico particular o materia de estudio, que

ayuda al resolutor a aproximarse y comprender un problema, y ordenar eficientemente sus

recursos para resolverlo. En cualquier caso, nuevamente la terminología en diversos autores

adquiere diferencias más o menos relevantes; por eso consideramos especialmente

interesante y clasificador el análisis que nos presenta Puig (1996) distinguiendo los

términos herramienta heurística, sugerencia heurística y destreza con potencial heurístico.

Otros autores contienen en el dominio afectivo aspectos como las actitudes, las creencias,

las apreciaciones, gustos y preferencias, emociones, sentimientos y valores. McLeod (1992)

prefiere delimitar al dominio de las emociones, las actitudes y las creencias, aunque sin

considerar esto como un encorsetamiento.

A continuación presentamos las conclusiones que se le hizo a un grupo de primer año de

ESO con respecto a las creencias en la resolución de problemas, la muestra fue de 61

alumnos este estudio fue realizado por Vila en el 2001.

La tendencia que predomino en el grupo fue que un problema de matemáticas entraba como

categoría de pregunta escolar, de naturaleza aritmética que viene caracterizada por aspectos

formales como la presentación, formato, etc. y cuya respuesta es el resultado de los cálculos

que preceptivamente se supone que propone el resultado. En particular no se ve la

diferencia entre problema y ejercicio en el resolutor sino en las características que

mencionábamos. Otro aspecto identificado de forma relevante en el grupo es el que hace

referencia a cuál es el papel del enunciado: se trata de una relación de mandatos “descifrar”

esto lo podemos ver si han entendido el problema, para continuación ejecutar; es esa la

dificultad “añadida” al problema, con relación al ejercicio: la explicitación o no de lo que se

espera que se haga. Una parte importante del alumnado del grupo mantiene fuertemente

creencias entorno a la existencia de una categoría diferenciada de tareas, con

denominaciones anecdóticas del estilo de “problemas de ingenio, lógica”; el acuerdo ya no

CAPÍTULO 1

17

es unánime con relación a si se trata de “tareas matemáticas” o se trata de tareas que “a

veces se plantean en clases de matemáticas”. En cualquier caso se les niega

mayoritariamente la categoría de “matemáticas importantes”.

En consecuencia, la tendencia predominante también es la de caracterizar la resolución de

problemas como una actividad de reconocimiento-aplicación de las técnicas trabajadas en

clase, y a la vez como una actividad de acreditación de las técnicas aprendidas. Así, más

concretamente, resolver un problema consistiría en la actividad de averiguar cuáles son las

operaciones adecuadas para obtener el resultado pedido, resultado que es meritorio obtener

a partir del método recientemente trabajado en clase, y sin mostrar dificultades ni bloqueos,

mediante un proceso que avance directamente de los datos al resultado final.

En cuanto al aprendizaje y mejora de la actividad de resolución de problemas, la tendencia

predominante también en el grupo es a centrar en dos aspectos las claves que mejoran el

éxito: el aprendizaje de técnicas y conceptos matemáticos y la mecanización de métodos-

tipo de resolución. En particular se supervalora la importancia de la “buena lectura” del

enunciado en tanto en cuanto ésta se cree que permite identificar claramente que es lo que

se tiene que aplicar.

Una conclusión importante del estudio es que el rendimiento académico en matemáticas no

es una variable que determine diferencias relevantes en el conjunto de los sistemas de

creencias identificados.

Por otra parte con relación a los aspectos y agentes identificados relativos al origen y

formación de las creencias del grupo, distinguiremos los más relevantes agrupados en tres

categorías: los agentes que inciden o tienen lugar en el propio entorno escolar, los que

inciden fuera de él y algunos aspectos afectivos sobre los cuales es importante centrar la

atención. En la primera de ellas, los agentes internos al entorno escolar, se han identificado

con especial relevancia aspectos relacionados con la naturaleza de las tareas desarrolladas y

el papel del profesorado; y con una menor incidencia, aspectos relacionados con el papel

que juega la evaluación, las actividades de popularización de las matemáticas y finalmente

los propios compañeros de clase.

CAPÍTULO 1

18

En cuanto a la naturaleza de las tareas desarrolladas, el estudio permitió distinguir a su vez

dos grandes aspectos:

a) Los que podríamos englobar bajo el denominador de las experiencias vividas en

cursos anteriores: se puede tratar de experiencias ricas y personalizadas, con

abundancia de tareas de resolución de problemas, con metodologías centradas en

trabajos en grupos y actitudes interrogativas, que inciden en la formación de

sistemas de creencias muy flexibles y de un amplio rango de visiones, o se puede

tratar también de experiencias rutinarias y compartimentadas, y de escaso

contenido en resolución de problemas, las cuales inciden en la formación de

sistemas de creencias rígidos y mecanicistas, de visiones acreditativas e

ilustrativas del papel de la resolución de problemas. En general, estas experiencias

las relacionamos con procesos de formación de creencias con relación al papel y

principales componentes de la actividad de resolución de problemas, y con

relación a las características que definen el objeto “problemas de matemáticas”.

b) Los que pueden relacionarse con distintas tipologías y naturalezas de trabajo en

clase en función de que se desarrollen en horas de materias comunes (rutinarias,

explicación-practica) u optativas (participativas, investigativas) o del profesorado

que la proponga, o al menos con la percepción de que ello es así. El estudio

permitió asociar esta dualidad a la formación a su vez de sistemas de creencias

dualistas, con creencias que conviven contrapuestas, llegando a dividir la

actividad de resolución de problemas según el contexto en el que se plantee. Un

efecto a añadir es el de que habitualmente una de estas visiones (la rutinaria,

acreditativa) es la que acaba considerándose la “importante”, o incluso llegándose

a negar el carácter matemático de la otra.

En cuanto al papel del profesorado, el estudio identificó una relación poco frecuente pero sí

importante entre el hecho de otorgar un papel normativo a la conducta matemática del

profesorado (principalmente desde la perspectiva sancionadora) y un proceso de formación

de creencias relacionado con el papel acreditativo de la resolución de problemas,

normalmente originado en autoimposiciones por parte del propio alumnado. Por otra parte,

CAPÍTULO 1

19

las experiencias (agradables y desagradables) vividas con relación a determinados

profesores “especiales”, acaban siendo a menudo modeladoras de creencias de naturaleza

muy diversa.

Finalmente, en cuanto al resto de aspectos del entorno escolar antes mencionados, la

evaluación tiene una incidencia derivada principalmente del papel normativo de los

exámenes y de la componente sancionaría de éstos; las actividades de popularización de las

matemáticas tiene una incidencia que cabe relacionar parcialmente con un aspecto ya antes

mencionado: la distinta naturaleza de tareas en situaciones escolares distintas; la incidencia

de los compañeros de clase cabe relacionarla con aspectos como la competitividad, espíritu

de superación, cooperación, individualismo, etc.

En la segunda de las grandes categorías, los agentes externos al entorno escolar, se

identificaron con especial relevancia el papel que juegan los padres y familiares y el papel

de los denominados mitos sociales. Con relación al primero de ellos, quisiéramos destacar

dos aspectos:

a) El estudio estableció que el trabajo con resolución de problemas de fuera del

entorno escolar, con familiares directos, se constituye en un agente muy importante,

principalmente del proceso que lleva a establecer una visión dualista relacionada

con la coexistencia de dos naturalezas de actividad matemática, y las inconsistencias

en el sistema de creencias que se derivan de ellos y que han sido ya comentadas.

b) Por otra parte la presión familiar a la cual puede estar sometido un alumno puede

suponer un agente importante en el proceso de formación de las creencias

especialmente relacionadas con un papel principalmente acreditativo y mecanicista

de la resolución de problemas. Sin embargo, el grado de presión puede ir ligado con

respuestas afectivas, o canalizaciones del estímulo relacionadas con creencias que

se presentan de forma simultánea y contrapuesta a las anteriores.

Con relación a los mitos sociales identificaron dos de incidencia especial, jugando el papel

de reforzadores de otros agentes que pueden considerarse más relevante: la importancia

social de las matemáticas y la asociación entre matemáticas e inteligencia. La tercera gran

CAPÍTULO 1

20

categoría identificada, hace referencia a aspectos afectivos que tienen relación con

características de la personalidad del alumnado; estos aspectos no pueden considerarse de

forma estricta, agentes, aunque en cualquier caso están estrechamente relacionados, con

otros anteriormente mencionados, jugando un papel capital en el proceso de la formación

de las creencias.

PREGUNTAS DE INVESTIGACIÓN

¿Cuáles son las creencias de los profesores de nivel básico en la resolución de problemas de

matemáticas?

¿Afectan éstas el bajo rendimiento de los alumnos?

¿Coinciden estas con las creencias de los alumnos?

OBJETIVO GENERAL

El motivo de este trabajo es saber cuáles son las creencias de los profesores de nivel básico

en la resolución de problemas y cómo esto afecta el bajo rendimiento de los alumnos en

matemáticas.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS.

Estudiar y analizar las creencias de los profesores de nivel básico sobre lo que son las

matemáticas.

Estudiar y analizar las opiniones de los maestros de primarias y secundarias sobre las

habilidades que se desarrollan al usar las matemáticas.

Estudiar las creencias de los maestros sobre las razones por las cuales los alumnos no

resuelven adecuadamente los problemas.

Contrastar las creencias de los maestros con las creencias de los alumnos en estos rubros.

CAPÍTULO 2

21

Capítulo 2

¿Qué son las

creencias?

En este capítulo vamos a profundizar que son las creencias para poder comprender su

importancia, su naturaleza, su origen, cómo se relacionan entre sí y su conexión con las

prácticas.

Sabemos que hay distintas visiones de las matemáticas si les preguntáramos a diversas

personas ¿qué es la matemática? nos contestarían distintas visones de esta ciencia, por

ejemplo: “trabajar con números”, “manipular estructuras abstractas”, “resolver problemas”,

etc.; la primera excluye las matemáticas que se pueden hacer sin números, como la

geometría; a la segunda, si bien es más general se le puede objetar que hay estructuras que

no son matemáticas y que las matemáticas son algo más que estructuras; la tercera hace

referencia a un proceso matemático importante, pero también es incompleta. Pero en la

realidad sabemos que es difícil definir que son las matemáticas pero esto nos muestra la

visión de esta ciencia o de la misma experiencia que tienen las personas que son

CAPÍTULO 2

22

consecuencia sobre la manera de enfrentarse y desarrollar la actividad matemática y sobre

el uso y aplicaciones de esta ciencia.

A lo largo de la historia, los matemáticos han contemplado esta disciplina desde distintas

perspectivas como por ejemplo, G. Polya, desde una visión empirista de la matemática,

propone desarrollar, junto al pensamiento demostrativo, aquel otro que conduce al

descubrimiento, el pensamiento plausible. Así, en el prefacio de la edición francesa de su

libro Matemáticas y razonamiento plausible (1958: IX-X) dice:

“En el dominio científico como en la vida cotidiana, cuando alguien se encuentra ante una

nueva situación, empieza haciendo una hipótesis. La primera hipótesis puede no adaptarse a

la realidad, pero se prueba y, según el resultado obtenido, se modifica más o menos. Tras

algunos ensayos y algunas modificaciones, ayudado por las observaciones y conducido por

la analogía, puede que llegue a una hipótesis más satisfactoria. El resultado del trabajo

creador del matemático es un razonamiento demostrativo, una prueba, pero esta prueba se

descubre mediante un razonamiento plausible, intentando adivinar. Si es así, y yo creo que

lo es, debería tener un lugar en la enseñanza de las matemáticas el arte de adivinar”.

En los programas oficiales de matemáticas, lo que llamamos currículo normativo, subyace

de forma más o menos explícita una determinada visión de esta ciencia. En cuanto al modo

de presentar la matemática señalan la relevancia del proceso de origen del saber

matemático para su enseñanza-aprendizaje y establecen una diferencia entre el proceso de

construcción del conocimiento, que es inseparable de la actividad concreta sobre los

objetos, y el estado avanzado de las teorías en el cual las matemáticas se presentan como

ciencia deductiva, las teorías se organizan a partir de axiomas, se insiste en la presión del

lenguaje matemático en particular del simbólico, que permite explicar relaciones no

observables y predecir hechos; esta potencia comunicativa remite a la naturaleza del

conocimiento matemático.

Desde el punto de vista práctico, la visión de la matemática que presenta el currículo

normativo puede estar o no en relación con la del profesorado y con la del alumnado e

influir en mayor o menor grado en el currículo impartido, esto es, en el modo en que se

CAPÍTULO 2

23

acercan a esta ciencia, en la selección de actividades y recursos, en la forma de aprender, en

la intervención del profesorado, en la manera de organizar la clase, de afrontar la actividad

matemática, de resolver problemas, etc. Junto a ello, las prácticas del profesorado y del

alumnado que se desarrollan en la clase, unas veces responden a intencionalidades

explicitas, queridas o buscadas y otras veces no, es lo que se llama currículo oculto.

Pero entre el currículo diseñado y desarrollado por el profesor y lo que realmente asimilan

los alumnos, suelen haber divergencias y desajustes. Estas divergencias se explican porque

el alumnado reconstruye su propia visión de la matemática, sus propios conocimientos, a

partir de sus experiencias, de lo que ya sabe y de sus creencias. A pesar de que los alumnos

disponen de un buen bagaje de conocimientos y de estrategias y de tener un buen control y

autorregulación de sus procesos, no dan las respuestas esperadas y buscadas por el profesor,

un hecho que explica esto es su sistema de creencias. Y lo que ha asimilado el alumno del

proceso enseñanza-aprendizaje es lo que llamamos currículo logrado.

Estas visiones alrededor de la matemática y de su enseñanza-aprendizaje las llamaremos

creencias. A una primera definición del concepto de creencias podemos definirla como:

“son una forma de conocimiento personal y subjetivo, que está más profunda y fuertemente

arraigada que una opinión; que se construye a partir de las experiencias, informaciones,

percepciones, etc., y de ellas se desprende unas prácticas”. Las creencias tienen una

estabilidad pero son dinámicas, pues la experiencia o el contraste con las otras pueden

hacer que evolucionen o cambien. Las creencias se relacionan unas con otras formando una

estructura más amplia que llamaremos sistemas de creencias.

CAPÍTULO 2

24

2.1 ¿Por qué son importantes las creencias?

A continuación presentamos algunas razones por el cual son importantes las creencias:

1.- Las creencias están presentes en los tres niveles del currículo: el pretendido o

normativo, el impartido y el logrado. En el cuadro 2.1 presentamos los tipos de creencias

que se dan en cada uno de ellos y quienes las tienen.

Cuadro 2.1 Niveles de currículo y tipos de creencias

Niveles de currículo Tipos de creencias Quienes las manifiestan

Currículo pretendido -Posiciones epistemológicas y

teóricas explicitas acerca de lo

que es la matemática, de su

enseñanza y aprendizaje.

-Diseñadores del currículo

nacional o autonómico.

-Departamentos o seminarios de

matemáticas.

-Profesorado (nivel de

planificación)

Currículo impartido -Creencias explicitas del

profesorado.

-Creencias implícitas que forman

parte del currículo oculto: cultura

del aula (valores, formas de

proceder, etc.), criterios para la

selección de actividades, de

materiales, para la evaluación, la

intervención educativa, etc.

-Profesorado (nivel de desarrollo

del currículo)

Currículo logrado -Creencias explicitas e implícitas

del alumnado, a veces no deseadas

por el profesorado.

-Alumnado

CAPÍTULO 2

25

Las creencias que se presentan en este cuadro, tienen una relación entre sí, pero esta

relación no es consistente ni jerárquica, es decir, se puede sostener creencias contradictorias

y de las del primer nivel no se deducen del segundo nivel, ni de este el tercero. Pero

sabemos algo de sus relaciones como por ejemplo la del segundo nivel influyen en las del

tercer nivel (Vila, 1995) y la identificación de las del tercero ofrece elementos para inferir

las del segundo, esto es, la forma en que se ha trabajado la matemática en la escuela (Vila,

2001).

Estas creencias se pueden detectar de distintas formas: las relacionadas con el currículo

predeterminado, con el currículo impartido y logrado, pero no olvidemos que la escuela es

un lugar aislado, sino que está en medio de la sociedad. La relación de la escuela con la

sociedad implica que el currículo pretendido se ve afectado por los valores, las expectativas

y proyectos sociales; además el profesorado, pero sobre todo los alumnos, están imbuidos

por las creencias dominantes de la sociedad y en el entorno más cercano hacia la valoración

social matemática, su importancia, su relación con la inteligencia, etc.

2.- La segunda razón es la estrecha relación entre las creencias y las prácticas.

E. Pehkonen y G. Torner (1999) señalan por una parte que:

- Las creencias tienen una gran influencia en cómo el alumnado aprende y utiliza las

matemáticas y a veces son un obstáculo para el aprendizaje;

- Las creencias del profesorado regulan sus decisiones y la planificación, desarrollo y

evaluación de los procesos de enseñanza-aprendizaje;

Y por otra parte, las creencias y las prácticas forman un círculo difícil de romper:

- Las experiencias de aprendizaje del alumnado influyen en sus creencias y, a su vez,

éstas mediatizan su manera de abordar y realizar actividades matemáticas;

- Las experiencias de enseñanza del profesorado influyen en sus creencias y estas

creencias mediatizan su intervención educativa.

CAPÍTULO 2

26

Para romper este círculo es necesario diagnosticar aquellas creencias que no son

adecuadas para desarrollar la actividad más genuinamente matemática, la resolución de

problemas, y diseñar experiencias que las desestabilicen.

A partir de los rasgos expuestos, vamos a tratar de elaborar una definición de que son

las creencias, acogiendo también otros rasgos que se subrayan en la abundancia

literatura sobre el tema: su carácter subjetivo, su contenido, su relación con la

afectividad y con el contexto y su naturaleza. D.B. McLeod (1992) las define como las

experiencias y conocimientos subjetivos (imágenes) del estudiante o profesorado.

Otros autores se refieren a las creencias subrayando su contenido como por ejemplo

F.K. Lester, J. Garofalo y D.L. Kroll (1989) las definen como el conocimiento subjetivo

del individuo sobre sí mismo, sobre las matemáticas, la resolución de problemas y los

temas relacionados con el planteamiento de los problemas.

En cuanto a la naturaleza de las creencias, S. Llinares (1992) distingue tres aspectos los

cuales son:

- Dominio, definido como el “envoltorio” y los compromisos personales de la

creencia establecida. Este componente se puede inferir del uso de afirmaciones

que describen elecciones personales, decisiones y acciones (es decir, el

contenido de la creencia).

- Razones o argumentos que acompañan la elección de la creencia relacionan las

creencias y las acciones. Este componente se infiere del uso de los términos

“porque” y “como”, que explican la importancia de la creencia.

- Practica aplicada, que describe la transferencia individual de las creencias a la

práctica. La utilización de este componente ayuda a describir las creencias

individuales y a realizar las comparaciones entre los sistemas de creencias de los

estudiantes.

CAPÍTULO 2

27

A partir de lo expuesto hasta ahora, podemos decir que las creencias son: “un tipo de

conocimiento subjetivo referido a un contenido concreto sobre el cual versan; tienen un

fuerte componente cognitivo, que predomina sobre el afectivo y están ligadas a situaciones.

Aunque tienen un alto grado de estabilidad, pueden evolucionar gracias a la confrontación

con experiencias que las puedan desestabilizar: las creencias se van construyendo y

transformando a lo largo de toda la vida”.

CAPÍTULO 2

28

2.2 ¿Cómo se originan las creencias?

Una manera de comprender las creencias es a partir de sus orígenes, J.P. Ponte (1994) las

entiende como verdades personales e intransferibles de cada uno que derivan de experiencia

o la fantasía y que tienen un componente afectivo a la valoración. Las creencias pueden

también originarse por el tipo de actividades, más o menos estereotipadas, repetitivas o

creativas, que se proponen en clase de matemáticas y que forman parte de la cultura

escolar, o por la propia organización de los contenidos, a veces en comportamientos

estancos, de acuerdo con las ramas de la matemática.

Por último, los diversos espacios de socialización como la familia, los grupos de la misma

edad, los medios de comunicación social, las actividades de ocio y tiempo libre como los

clubs de matemáticos, y los mitos sociales sobre esta ciencia, originan, refuerzan o

contradicen las creencias sobre la matemática.

M. Fishbein e I. Ajzen (1975) señala tres tipos de creencias, según su origen:

1. Creencias descriptivas: son las que provienen de la observación directa y sobre todo

de la experiencia, del contacto personal con los objetos; estás creencias se

mantienen con un alto grado de certeza al ser validadas continuamente con la

experiencia que suelen tener un peso importante sobre todo en las actitudes de los

individuos.

2. Creencias diferenciales: son las que tienen su origen en relaciones previamente

aprendidas o en el uso de sistemas formales decodificación; en cualquier caso, la

base de la creencia de la creencia diferencial es siempre algún tipo de creencia

descriptiva.

3. Creencias informativas: como su nombre indica, provienen de informaciones que

proceden del exterior: otras personas, medios de comunicación social, etc.

Resumiendo, las creencias tienen su origen en la experiencia en la observación directa o

provienen de informaciones, y a veces son inferidas de otras creencias.

CAPÍTULO 2

29

2.3 El sistema de creencias

Una creencia no se sostiene con independencia de otras, por ello se suele hablar más de

sistemas de creencias que de creencias aisladas. Presentan pues una estructura agrupada una

definición clásica en la de M. Rokeach (1968:2): “Una forma organizada psicológicamente,

aunque no necesariamente lógica de todas y cada una de las incontables creencias

personales sobre la realidad física y social”, por la tanto se trata de una red organizada. E.

Pehkonen y G. Torner (1996) se las imaginan como un palto de espaguetis: si se tira uno de

ellos posiblemente se acabara tirando de muchos más.

T. F. Green (1971) afirma que la noción de sistema de creencia es una metáfora para

examinar y descubrir cómo se organizan las creencias de un individuo. Dos personas

pueden tener las mismas creencias y distintos sistemas de creencias y por tanto abordaran y

desarrollaran de manera diferente la actividad matemática.

T.F. Green ha identificado tres dimensiones de los sistemas de creencias, que no tienen que

ver con su contenido, si no con el modo que están relacionadas entres si dentro del sistema:

- Algunas creencias se relacionan entre si al modo de primicias y conclusión por lo

que puede hablarse de creencias primarias y derivadas. Su relación es cuasi lógica,

distinta de la de los sistemas de conocimientos donde la relación es de tipo lógico.

- Las creencias se mantienen con un diferente grado de convicción y distinta fuerza.

En este sentido cabe hablar de su centralidad psicológica: las que sostienen con

mayor fuerza son centrales y las demás son periféricas.

- Las creencias suelen mantenerse “enclaustradas”, sin someterse al contraste con el

exterior. El contraste tiene más de confrontación defensiva que de apertura para su

enriquecimiento o para su modificación.

Por otra parte es importante destacar también que la estructura del sistema favorece que

puedan ser mantenidas creencias a pesar de evidencias contrarias; más aún estas creencias

no pueden ser modificadas simplemente introduciéndolas “razones evidentes”.

CAPÍTULO 2

30

En resumen, la estructura del sistema de creencia de un sujeto ayuda a explicar algunos

comportamientos como, por ejemplo, que sostenga al mismo tiempo creencias

contradictorias entre sí o que se resista a cambiar aquellas que no son adecuadas, a pesar de

ofrecerle razones evidente para modificarlas. En estos casos, la inconsistencia y la

estabilidad del sistema de creencias, en mayor o menor grado se deben a que estén más o

menos ligados o más o menos agrupadas y en claustradas.

Pero para poder modificar las creencias es necesario no solo conocer su forma de la

relacionarse y de agruparse, si no también el tipo de relación que se da entre ellas, si son

primarias o derivadas centrales o periféricas, porque en la medida en que se trate de

desestabilizar y cambiar las creencias primarias y centrales, se producirá una “crisis” mayor

en el sistema de creencia del sujeto, que deberá restructurarse y reconstruirse y para

estabilizarse de nuevo.

CAPÍTULO 3

31

Capítulo 3

Creencias de los

estudiantes.

Después de haber explicado que son, por que son importantes y cuáles son los orígenes de

las creencias, ahora mostraremos algunas de las creencias que tienen los alumnos. Como

hemos explicado éstas forman parte del conocimiento que tienen los alumnos para poder

afrontar la resolución de problemas.

En este capítulo trataremos importantemente las creencias relacionadas con la resolución de

problemas y se abordara:

Cuáles son.

Como se han formado.

Cuáles son las consecuencias.

CAPÍTULO 3

32

Diversas investigaciones han identificado cuales son las creencias que tienen los alumnos

en la resolución de problemas; las creencias detectadas en los alumnos se pueden agrupar

de distintas formas, atendiendo por ejemplo al objeto de la creencia, a su propia naturaleza

o a su origen. D.B. McLeod (1992) las ha clasificado en cuatro grandes apartados:

1. Creencias sobre la matemática como disciplina.

2. Creencias de los sujetos sobre sí mismos y su relación con la matemática.

3. Creencias sobre la enseñanza de las matemáticas.

4. Creencias sobre la matemática relacionadas con el contexto social.

En todas ellas hay un componente cognitivo y un componente afectivo, además del

componente ligado al contexto en que se manifiesta esta creencia. El componente cognitivo

predomina en las creencias sobre la matemática y su enseñanza, y el afectivo en las

creencias de los sujetos sobre sí mismos.

Las creencias relacionadas con el contexto social se refieren a las normas sociales y a la

influencia de la familia y de otros ámbitos de socialización. Para describirlas hemos

formado cuatro grupos, sabemos que una creencia difícilmente se puede clasificar en un

solo de estos grupos, pues directamente o indirectamente tiene que ver con más de uno de

ellos. Por ello en el siguiente cuadro podemos ver cómo influye cada una de ellas.

Cuadro 3.1 Tipos de creencias

La matemática El aprendizaje de la

resolución de

problemas

Los resolutores

El proceso de resolver

problemas

Creencias sobre

CAPÍTULO 3

33

Estas creencias se identifican de diversas formas: se pueden inferir a través de la

observación de los componentes de los estudiantes cuando resuelven problemas o las

manifiestan en diálogos, entrevistas o cuestionarios. A veces tenemos que las creencias son

contradictorias cuando se aplican a la vida cotidiana, con la forma de abordar matemáticas.

En ocasiones las creencias manifestadas por los estudiantes responden a las expectativas del

profesorado, a las intenciones del currículo pretendido o al currículo oculto.

CAPÍTULO 3

34

3.1 ¿Cuáles son las creencias de los alumnos en la resolución de

problemas?

3.1.1 Creencias sobre las matemáticas y los problemas.

El cuadro 3.2 presentamos distintas creencias de los estudiantes acerca de la matemática

referidas a:

- La escasa o nula relación de las matemáticas escolares con el pensamiento y el

mundo real (1,2 y 3).

- Lo que es o no importante (4,5 y 11).

- Una visión rígida de la actividad matemática (8).

- La identificación de esta ciencia con el cálculo y los procedimientos algorítmicos

(7,17 y 18).

- El estudiante aparece con un papel pasivo, pues recibe lo que le transmite el

profesor y demuestra lo aprendido (9 y 10).

3.2 Creencias sobre la matemática y los problemas

1. Las matemáticas formales tienen poco o nada que ver con el pensamiento real y la resolución de

problemas (Schoenfeld, 1985a).

2. Las matemáticas aprendidas en la escuela tienen poco o nada que ver con el mundo real

(Schoenfeld, 1992).

3. Las técnicas de resolución de problemas que se utilizan en la escuela no guardan ninguna relación

con las que se necesitan para resolver los problemas reales de cada día, los problemas de la vida real

o los que encuentras en la casa o en el trabajo (Woods, 1987).

CAPÍTULO 3

35

4. La forma de una argumentación matemática es más importante que su contenido (Schoenfeld,

1987).

5. Las demostraciones formales son irrelevantes en el proceso de descubrimiento o de invención

(Schoenfeld, 1992).

6. La matemática es una actividad solitaria, hecha por individuos aisladamente (Schoenfeld, 1992).

7. Las matemáticas son cálculo, en concreto las cuatro operaciones básicas: sumar, restar, multiplicar y

dividir, además de la memorización de propiedades y algoritmos que permiten obtener respuestas

numéricas. Por tanto hacer matemáticas significa seguir reglas y aprender matemáticas es

memorizar (Frank, 1988).

8. El objetivo de aprender matemáticas es obtener “respuestas correctas”. Solo el profesor puede decir

si la respuesta es correcta o no (Frank, 1988).

9. El papel del alumno en clase de matemáticas es recibir conocimientos matemáticos y demostrar que

efectivamente los ha recibido. Para ello basta prestar atención en clase, leer el libro de texto y

trabajar en las tareas asignadas. Se demuestra que se aprendido obteniendo la respuesta correcta en

las tareas propuestas, lo que prueba que se ha comprendido (Frank, 1988).

10. El papel del profesor de matemáticas es transmitir conocimientos matemáticos, “dar materia” y

verificar que los estudiantes lo han recibido mediante pruebas de control (Frank, 1988).

11. Sólo las matemáticas que se preguntan en clase son importantes y dignas de saberse (Garofalo,

1989).

12. Un problema de matemáticas es una categoría de pregunta escolar de naturaleza aritmética,

caracterizada de forma biunívoca por aspectos formales de presentación; su respuesta es el resultado

de los cálculos que preceptivamente propone el enunciado (Vila, 2001).

13. La diferencia entre problema y ejercicio no está en los conocimientos del resolutor sino en

características formales de la presentación de este tipo de tarea (Vila, 2001).

14. Adquisición de conocimiento de herramientas, procedimientos y conceptos matemáticos básicos

(Gómez Chacón, 2000).

15. Una asignatura de conocimientos (sumas, ecuaciones, fracciones, teoremas, medidas, unidades,

fórmulas, trigonometría, particiones, geometría) (Gómez Chacón, 2000).

CAPÍTULO 3

36

16. Una asignatura de estrategias y procedimientos (Gómez Chacón, 2000).

17. Los alumnos más pequeños identifican un problema con cálculo y operaciones y a medida que se

hacen mayores lo asocian más con el proceso de resolución, el descubrimiento (Alsina y otros,

1998).

18. Visión de las matemáticas desligada de las otras disciplinas y asociada al cálculo y a la producción

de respuestas cortas del tipo “verdadero y falso” (Abrantes, 1994).

Las creencias que presentamos son reduccionistas, pues contemplan los aspectos más

formales e instrumentales de esta ciencia, en disminución de aquellos relacionados con la

creación y la comprensión profunda de la misma. Como consecuencia, se produce un

rechazo de la matemática por parte de aquellos alumnos que se aburren con tareas

rutinarias, o que son más sensibles a la creatividad, la belleza o el juego, aspectos que

también son inherentes a la matemática; también la confusión de aquellos otros que

consideran la matemática como una ciencia segura de sí misma, cuando se enfrentan a

verdaderos problemas y sienten que no tienen recetas que les aseguren el éxito.

3.1.2 Creencias sobre los resolutores de problemas.

Ahora presentamos en el siguiente cuadro las creencias que se refiere a dos tipos de

alumnos: aquellos que son capaces de descubrir y crear matemáticas y aquellos otros que

sólo alcanzan a memorizar y aplicar mecánicamente lo que han aprendido y, por tanto, no

saben resolver problemas.

CAPÍTULO 3

37

3.3 Creencias sobre los resolutores de problemas

1. Solo los genios son capaces de descubrir o crear matemáticas (Schoenfeld, 1985a).

2. Los alumnos normales no pueden esperar comprender las matemáticas; confían

simplemente en memorizar y aplicar lo que han aprendido mecánicamente y sin

comprensión (Schoenfeld, 1992).

3. Los alumnos que han entendido la matemática serán capaces de resolver cualquier

problema propuesto en cinco minutos o menos (Schoenfeld, 1992).

4. Si se es bueno en matemáticas, se es bueno resolviendo problemas (Woods, 1987).

5. Si se tiene dificultades en matemáticas, se tendrán dificultades resolviendo problemas

(Woods, 1987).

6. Si una situación se denomina problema y lo resuelvo fácilmente debo de ser bueno

resolviendo problemas (Woods, 1987).

7. La gente que es buena en matemáticas no necesita dedicar tiempo a pensar sobre cómo

resolver un problema (Woods, 1987).

8. A los expertos les basta considerar una situación para encontrar un modelo (Woods, 1987).

9. Las matemáticas son para gente creativa; el resto solo intenta aprender lo que se le

transmite. Los profesores y los libros son pues una autoridad en la materia que “dispensan”

conocimientos: no se cuestiona esta autoridad y los alumnos no se imaginan a sí mismos

como creadores de conocimientos (Garofalo, 1989).

Esta separación drástica entre quienes son capaces de resolver problemas y quienes no,

deriva del hecho de considerar que una situación es un problema en sí misma. Sin embargo,

el concepto de problema es relativo al sujeto que trata de resolverlo y al contexto concreto

en que se propone. Podemos pensar que cualquier persona es capaz de resolver problemas,

pero lo que para unas personas es una actividad sencilla, un mero ejercicio, para otras es un

verdadero problema, debido a sus capacidades, sus emociones, sus conocimientos, sus

actitudes hacía la matemática y también sus creencias sobre sus propias capacidades, sobre

la tarea en sí y la forma de abordarla.

CAPÍTULO 3

38

Finalmente podemos decir que el alumno que este en un grupo o en el otro esto le genera

confianza en sus propias capacidades y, como consecuencia, de tener ánimo para abordar

problemas de matemáticas o todo lo contrario.

3.1.3 Creencias sobre el proceso de resolución de problemas.

En el cuadro 3.4 subyace la identificación entre problema con ejercicio en cuanto a la forma

de proceder en las distintas fases de resolución, al tiempo a emplear, a la variedad o no de

procedimientos y al sentimiento de éxito o fracaso.

3.4 Creencias sobre el proceso de resolución de problemas

1. Los problemas de matemáticas se resuelven siempre a menos de 10 minutos, si es que se resuelven

(Schoenfeld, 1985a).

2. Solo hay una manera de responder correctamente a cada problema; normalmente es el método que el profesor

acaba de mostrar recientemente en clase (Schoenfeld, 1992).

3. Solo hay un procedimiento correcto para resolver un problema y solo hay una respuesta correcta (Woods,

1987).

4. La primera vez que se lee el enunciado de un problema se debería ser capaz de entender inmediatamente qué se

pide o qué se pretende que se calcule o se decida (Woods, 1987).

5. Se ha de tener el problema completamente trabajado en la cabeza antes de comenzar a anotar algo (Woods,

1987).

6. Cada paso que se dé ha de ser correcto; no hay lugar para hacer ensayo y error. No se ha de jugar con las

situaciones problemáticas (Woods, 1987).

7. No se puede permitir usar la intuición en la RP (Woods, 1987)

8. No se puede cambiar de alguna forma el problema para hacerlo más sencillo (Woods, 1987)

9. Para resolver problemas sólo hace falta memorizar y usar una estrategia organizada. Se usa la estrategia una

vez y de manera secuenciada, como si se cerrara una cremallera (Woods, 1987).

10. Todo el mundo resuelve los problemas de la misma manera; por tanto puede ser útil para trabajar, fijarse en los

ejemplos resueltos por los demás (Woods, 1987).

11. Los problemas de matemáticas son tareas para aplicar reglas aprendidas, por tanto, se pueden resolver

fácilmente en pocos pasos (Frank, 1988).

12. Casi todos los problemas de matemáticas se pueden resolver directamente aplicando hechos, reglas, formulas y

CAPÍTULO 3

39

procedimientos mostrados por el profesor o dados en el libro. Por tanto el pensamiento matemático consiste en

poder aprender, memorizar y aplicar los hechos, reglas, formulas y procedimientos (Garofalo, 1989).

13. Los ejercicios de los libros de matemáticas se pueden resolver con los métodos presentados en el libro; además,

han de ser resueltos con los métodos presentados en el apartado del libro en el que se proponen (Garofalo,

1989).

14. Todos los problemas con enunciado que narra una historia se puede resolver directamente aplicando una o más

operaciones aritméticas, que son identificadas por las palabras claves que hay en el enunciado (Lester, 1987)

15. Sería bueno convertir la resolución de problemas en una resolución evidente (Vila, 1995).

Estas creencias son adecuadas para realizar tareas rutinarias, pero no para resolver

problemas, pues los procesos de comprensión, planificación de una estrategia, desarrollo y

revisión, son los propios de una actividad creativa, como veremos más adelante.

Si los alumnos consideran el proceso de resolución de problemas como acabamos de

señalar, les costará vencer el medio al vacío, al papel en blanco, se sentirán frustrados si no

conocen un procedimiento algorítmico que conduzca a la solución y por tanto no abordaran

la tarea ni perseveran en ella. Las emociones y sentimientos negativos, no los considerarán

como algo habitual de un proceso donde los caminos no están trazados y coexisten

incertidumbres, dudas y bloqueos, junto a intuiciones y certezas.

3.1.4 Creencias sobre el aprendizaje y mejora de la resolución de

problemas.

En el siguiente cuadro presentamos algunas creencias sobre el aprendizaje y la mejora de

resolución de problemas esto nos muestra la implicación afectiva y efectiva del resolutor,

aspectos que son, como sabemos, necesarios pero no suficientes, porque pueden favorecer

pero no asegurar la inspiración.

CAPÍTULO 3

40

3.5 Creencias sobre el aprendizaje y mejora de la resolución de problemas

1. Mejorar la utilización de técnicas de resolución de problemas es fácil. Lo que se tiene que

hacer es realizar una sesión de 20 minutos de lluvia de ideas y la creatividad aflorará

(Woods, 1987).

2. Dos aspectos claves para alcanzar el éxito en la resolución de problemas son: el

aprendizaje de técnicas matemáticas y la mecanización de métodos-tipo (Vila, 2001).

3. Aspectos internos como el esfuerzo y la concentración, y afectivos como las ganas, la

tranquilidad y el gusto por los retos tienen más relación con el éxito que los aspectos

externos como la poca dificultad de un problema (Vila, 2001).

4. La resolución de problemas no exige otras capacidades distintas a las propias de la

matemática (Vila, 1995).

5. El aprendizaje de la resolución de problemas tiene técnicas sencillas (Vila, 1995).

6. Aspectos controlables del éxito y fracaso en matemáticas son: trabajar duro, prestar

atención, preguntar al profesor, organizarse el tiempo de estudio (Gómez Chacón, 2000)

7. Aspectos incontrolables son: origen familiar, tener oportunidades, aptitud (Gómez Chacón,

2000).

Si los alumnos piensan que mejorar es fácil, se sentirán defraudados si no constatan que sus

esfuerzos han dado los frutos esperados. Pero sabemos que poco a poco ellos podrán

resolver más problemas y los resolverán de una mejor forma, esto nos sirve para decir que

el profesor no solo debe de tomar en cuenta la calificación que obtiene el alumno sino

también otros aspectos que han ido evolucionado en la resolución de problemas.

CAPÍTULO 3

41

3.2. Origen y formación de las creencias

Por otra parte, en cuanto a los aspectos y agentes identificados con relación al origen y

formación de las creencias de un grupo, distinguiremos los más relevantes agrupados en

tres grandes categorías: los agentes que inciden o tienen lugar en el propio contexto escolar,

los que inciden fuera de él y algunos aspectos afectivos sobre los cuales es importante

centrar la atención.

3.2.1 Contexto escolar.

En cuanto a los agentes internos al contexto escolar, se han identificado con especial

relevancia aspectos relacionados con la naturaleza de las tareas desarrolladas y el papel del

profesorado, y con una menor incidencia, aspectos relacionados con el papel que juega la

evaluación, las actividades de popularización de las matemáticas y finalmente los propios

compañeros de clase.

En cuanto a la naturaleza de las tareas escolares, podemos distinguir a su vez dos grandes

aspectos:

a) Los que podríamos englobar bajo el denominador de las experiencias vividas en

cursos anteriores: se puede tratar de experiencias ricas y personalizadas, con abundancia de

tareas de resolución de problemas, con metodologías centradas en trabajos en grupos y

actitudes interrogativas, que inciden en la formación de sistemas de creencias muy flexibles

y de un amplio rango de visiones, o se puede tratar también de experiencias rutinarias y

compartimentadas, y de escaso contenido heurístico, las cuales inciden en la formación de

sistemas de creencias rígidos y mecanicistas, de visiones acreditativas e ilustrativas del

papel de la resolución de problemas.

CAPÍTULO 3

42

b) Los que pueden relacionarse con distintas tipologías y naturalezas de trabajo en

clase, en función de que se desarrollen en horas de materias comunes (habitualmente

rutinarias, explicación-practica) u optativas (más a menudo participativas, investigativas) o

del profesorado que la proponga, o al menos con la percepción de que ello sea así. Un

efecto a añadir es que habitualmente una de estas visiones (la rutinaria, acreditativa) acaba

considerándose la “importante”, o incluso se llega a negar el carácter matemático de la otra.

En cuanto al papel del profesorado, hay una relación poco frecuente pero sí importante

entre el hecho de otorgar un papel normativo a la conducta matemática del profesorado

(principalmente desde la perspectiva sancionadora) y un proceso de formación de creencias

relacionado con el papel acreditativo de la resolución de problemas, normalmente originado

en auto imposiciones por parte del propio alumnado. Por otra parte, las experiencias

(agradables y desagradables) vividas con relación a determinados profesores “especiales”,

acaban siendo a menudo modeladoras de creencias de naturaleza muy diversa.

Finalmente, en cuanto a otros aspectos del contexto escolar, la evaluación tiene una

incidencia derivada principalmente del papel normativo de los exámenes (las tareas son

relevantes en función de si pueden ser susceptibles de formar parte de un examen) y de la

componente sancionadora de estos (por la generación de incertidumbre, frustración y en

algunos casos de competitividad); las actividades de popularización de las matemáticas

tienen una incidencia que cabe relacionar parcialmente con un aspecto ya antes

mencionado: la distinta naturaleza de tareas en situaciones escolares diversas; y la

incidencia de los compañeros de clase cabe relacionarla con aspectos como la

competitividad, el espíritu de superación, la cooperación y el individualismo.

3.2.2 Agentes externos al contexto escolar.

En la segunda de las grandes categorías, los agentes externos al entorno escolar, se pueden

señalar con especial relevancia el papel que juegan los padres y familiares y el papel de los

CAPÍTULO 3

43

denominados mitos sociales. Con relación al primero de ellos, quisiéramos destacar dos

aspectos:

a)La fuerte influencia de la resolución de problemas junto con familiares

directos, fuera del entorno escolar, sobre el proceso que lleva a establecer una visión

dualista relacionada con la coexistencia de dos naturalezas de actividad matemática, junto

con las inconsistencias en el sistema de creencias que se derivan de ellos.

b) Por otra parte, la presión familiar a la cual pueda estar sometido un alumno

puede suponer un agente importante en el proceso de formación de las creencias,

especialmente las relacionadas con un papel principalmente acreditativo y mecanicista de la

resolución de problemas. Sin embargo, el grado de presión puede ir ligado con respuestas

afectivas, o canalizaciones del estímulo, relacionadas con creencias que se presentan de

forma simultánea y contrapuesta a las anteriores.

Y con relación a los mitos sociales, se identificaron dos de incidencia especial, jugando el

papel de reforzadores de otros agentes que pueden considerarse más relevantes: la

importancia social de las matemáticas y la asociación entre matemáticas e inteligencia.

3.2.3 Aspectos afectivos.

La tercera categoría identificada hace referencia a aspectos afectivos que guardan relación

con la personalidad del alumnado; estos aspectos no pueden considerarse de forma estricta

agentes, aunque en cualquier caso están estrechamente relacionados con otros

anteriormente mencionados, jugando un papel capital en el proceso de formación de las

creencias.

CAPÍTULO 3

44

3.3. Consecuencias

Y finalmente, en cuanto a las consecuencias que pueden establecerse con relación a los

esquemas de actuación desarrollados cuando se abordan problemas no estándar y al papel

que en ellos han jugado los correspondientes sistemas de creencias, podemos mencionar

que principalmente se desarrolla esquemas ingenuos, impulsivos o irreflexivos o bien

esquemas (aunque no pueda llamárseles así) que se limitan a dar una respuesta rápida a la

pregunta formulada en el enunciado. La práctica totalidad de los esquemas de actuación

observados toman como punto de partida la manipulación (a menudo ciega) de los datos del

enunciado o de aspectos parciales de éste; son minoritarios los esquemas centrados en un

análisis global de la situación planteada.

Es relevante destacar que se constatan relaciones importantes entre estos esquemas de

actuación y los sistemas de creencias identificados, en términos de que se observan maneras

de proceder menos efectivas entre el alumnado con sistemas de creencias más rígidos o

“menos adecuados”, y como hemos dicho independientemente del nivel de resultados

académicos. Pero es que de forma más precisa, nos permite también relacionar el sistema

de creencias del alumnado con su manera de proceder y su toma de decisiones durante el

proceso de resolución. Por ejemplo, ante un problema no rutinario y no estándar, pero con

claros referentes numéricos, simplificando ligeramente las conclusiones nos encontramos

por una parte con aquellos alumnos que lo que destacan en él es la identificación en el

enunciado de los referentes numéricos, y por otra parte con aquellos alumnos que lo que

hacen es identificar y destacar el carácter no estándar del problema. En el primer caso el

alumnado intenta aplicar los “métodos-tipo” de resolución, y entendiendo que la resolución

del problema proviene del adecuado “descifrado” del enunciado, y por supuesto de la

utilización de las ´ultimas técnicas aprendidas en clase, es donde observamos unas

interpretaciones absurdas de la situación (“descifrados ingenuos del enunciado”,

supervalorando la aritmética).

CAPÍTULO 3

45

En el segundo caso, nos hallamos mayoritariamente ante alumnos que ante una situación

que acaban de identificar como un problema de matemáticas o bien un problema de no-

matemáticas, en tanto en cuanto no se requiere la aplicación de los “métodos-tipo”, se

limita a dar una respuesta rápida, obviamente irreflexiva. Sin embargo, una minoría de los

alumnos estudiados, reaccionan en un sentido opuesto al identificar que se hallan ante un

problema no estándar: su sistema de creencias, más flexible, más rico, les induce a buscar

recursos más heterodoxos (estudiar casos concretos, realizar esquemas o tablas, buscar

pauta) lo cual les lleva abordajes eficaces de la situación planteada.

Por último, podemos afirmar que estas conclusiones pueden establecerse también si

centramos el análisis en el alumnado de mayor rendimiento académico en matemáticas.

¿Qué relevancia tiene este hecho? Creemos que mucha, y más si lo relacionamos con una

conclusión anteriormente mencionada en relación a que el rendimiento matemático no

determina diferencias relevantes en la identificación de los sistemas de creencias. Es

posible que visiones críticas hacia el planteamiento de este trabajo consideren que la

importancia y el papel de las creencias matemáticas es mucho menor que la que aquí le

otorgamos, y lo es en el sentido siguiente: aprendiendo matemáticas (conceptos, técnicas,

procedimientos) ya se ira modelando la adecuada visión de qué son las matemáticas, y

consecuentemente se asume que “aprendiendo más matemáticas, ya se aprende cuándo y

cómo hay que utilizarlas”.

Creemos que el propio planteamiento teórico del trabajo en particular y de toda la

bibliografía al respecto reduce a simplista, sino a completamente errónea, esta visión; pero

es que además los datos citados anteriormente nos muestran que incluso los “mejores”

alumnos tienen creencias inadecuadas e incluso ellos cometen errores absurdos y

difícilmente explicables por otras vías, cuando sin embargo alumnos con menor

“rendimiento matemático” tienen creencias más adecuadas y abordan de manera más eficaz

los problemas no estándar.

CAPÍTULO 4

46

Capítulo 4

Evaluación de las

creencias.

En los capítulos anteriores hemos reflejado la complejidad de la tarea de resolver

problemas y, paralelamente, el papel que en ella juegan las creencias del alumnado. Si

entendemos que la resolución de problemas es el corazón mismo de la matemática, y que en

ella debería centrarse la educación matemática, consecuentemente la evaluación de los

aprendizajes del alumnado debería enfocarse a esa finalidad con un planteamiento global e

inevitablemente a partir de metodologías e instrumentos complejos, término que no

queremos asociar con el de “complicado” sino al de “naturaleza diversa” y en cualquier

caso no tradicional.

En este capítulo se presenta la información obtenida del cuestionario realizada a una

muestra de profesores de nivel básico de la sección 23 y 51 del SNTE, que asistieron al

programa de capacitación de matemáticas en la Facultad de Físico Matemáticas de la

BUAP. La muestra fue de 46 profesores, debido a que varios de los maestros no devolvían

la encuesta.

CAPÍTULO 4

47

4.1 Análisis descriptivo

4.1.1 Análisis de la primera sección

Comenzaremos haciendo el análisis de la primera sección la cual es: “Creencias sobre las

matemáticas y los problemas que se resuelven en clase, que tienen los profesores de nivel

básico”. En el cuadro 4.1 usamos una red sistemática con el fin de sintetizar y organizar la

información proveniente de las preguntas abiertas del cuestionario que contestaron los

profesores (ver anexo).

En las siguientes graficas podemos observar que los profesores no tienen alguna diferencia

sobre lo que es un problema o un ejercicio, en la primera grafica (figura 4.1) con un 87.7%

los profesores consideran que un problema es solamente resolver operaciones numéricas y

con un 8.7% solo se pueden considerar como problemas. En la siguiente grafica (figura 4.2)

podemos ver con 56.5% no ponían ejercicios de matemáticas y con un 30.4% si ponían

ejercicios de matemáticas.

Cuadro 4.1

Un problema una situación cotidiana 10

de matemáticas es: un conflicto 8

otra 28

no se relaciona con lo visto en clase 32

Un problema de matemáticas: se relacionan con la vida cotidiana 9

no contestaron 5

CAPÍTULO 4

48

Figura 4.1

Figura 4.2

Haciendo un análisis a la pregunta 5 que dice: ¿Se encuentra con situaciones complicadas

en la vida cotidiana en las que tenga que utilizar las matemáticas? Podemos notar que con

un 50% los profesores se encuentran con situaciones difíciles en su vida cotidiana (figura

4.3), en la pregunta 5.1 con un 47.8% los profesores resuelven problemas sobre situaciones

de su vida cotidiana en clases (figura 4.4). Esto nos lleva a una contradicción porque para

los profesores los problemas vistos en clase tienen diferencia con problemas de la vida

cotidiana esto lo podemos ver en el cuadro 4.1.

Figura 4.3

Figura 4.4

En la tabla 4.2 analizamos los enunciados de los problemas de matemáticas que

normalmente se trabajan en clase con lo que contestaron los profesores:

CAPÍTULO 4

49

En la primera sección podemos ver con un 45.5% los profesores trabajan “Siempre” con

expresiones y con nombres de matemáticas, seguido con un 41.3% “A menudo” esto quiere

decir que por lo regular a sus alumnos se les enseña que es una suma, resta, multiplicación,

ecuación por decir algunos ejemplos. En la segunda sección con 43.5% los profesores dan

“A menudo” pistas para resolver los problemas que se le ponen en clase y con un 30.4% “A

veces” dan alguna pista. En la tercera sección los problemas propuestos en clase tienen “A

menudo” todos los datos que se necesitan para resolver el problema con un 43.5%, en este

caso con un 26.1% podemos ver que “A veces y Siempre” tienen el mismo valor lo cual nos

Tabla 4.2

Nunca A veces A menudo Siempre

Hay expresiones y nombres

de cosas matemáticas.

0% 13% 41.3% 45.5%

Hay pistas sobre lo que se

debe de hacer para

resolverlos.

2.2% 30.4% 43.5% 23.9%

Hay todos los datos que

necesitamos para resolver el

problema.

4.3% 26.1% 43.5% 26.1%

Hay datos que no

necesitamos y en cambio no

los dan.

13% 58.7% 23.9% 4.9%

Son muy claros y exactos al

darnos los datos y las

condiciones.

13% 23.9% 41.3% 21.7%

CAPÍTULO 4

50

quiere decir que el profesor piensa que a veces es necesario poner todos los datos y en caso

contrario la misma cantidad de profesores siempre ponen todos los datos para solucionar el

problema. En la siguiente sección con un 58.7% los profesores ponen “A veces” datos

innecesarios para resolver el problema, esto lo podemos comprobar con la sección anterior

ya que como vimos un 43.5% “A menudo” pone todos los datos para resolver el problema.

Finalmente en la última sección con un 41.3% “A menudo” los profesores dan el enunciado

claro y exacto con las condiciones muy bien planteadas. Seguido con un 23.9% los

profesores “A veces” dan un enunciado claro y exacto.

En la tabla 4.3 mostramos el análisis acerca de lo que es más importante para un profesor

cuando un alumno resuelve un problema de matemáticas:

Tabla 4.3

Poco

importante

Medio

importante

Importante Muy

importante

El enunciado no tiene

pistas sobre que hace

falta hacer para

resolverlo.

6.5%

21.7%

30.4%

41.3%

El enunciado no tiene

ninguna palabra.

32.6%

17.4%

30.4%

19.6%

Al enunciado le faltan

datos que necesitamos

para poder resolver el

problema.

13.0%

17.4%

37.0%

32.6%

El enunciado tiene datos 28.3% 34.8% 21.7% 15.2%

CAPÍTULO 4

51

Podemos ver que a los profesores les “muy importante” cuando un alumno resuelve un

problema que no tiene pistas para resolver el problema, seguido con un 30.4% le es

“Importante” que sus alumnos pueden resolver un problema con estas estas características.

En la segunda sección con un 32.6% le es “Poco importante” que el alumno resuelva un

enunciado que no tiene ninguna palabra, también con un porcentaje alto de 30.4% a los

profesores es “Importante” que los alumnos puedan resolver problemas sin enunciado. Con

un 37% le es “Importante” que sus alumnos puedan resolver problemas donde no tengan

todos los datos y con un 32.6% le es “muy importante”. En la cuarta sección la mayor parte

de los profesores le es “Medio importante” que sus alumnos resuelvan problemas donde el

enunciado tiene datos de más, con un 28.3% les es “Poco importante” y con un 21.7% le es

importante que resuelvan problemas con esta característica. Y con un 32.6% les es “muy

importante” que el alumno resuelva un enunciado poco claro, con 28.3% al profesor le es

“Poco importante” y con 23.9% es “Importante” para ellos que los alumnos puedan

resolver un problema de matemáticas con estas características.

La pregunta 10 nos sirve para saber si los profesores saben cuáles son problemas o cuales

son ejercicios. Para poder hacer el análisis primero diremos cuales son problemas y cuales

son ejercicios.

Problemas Ejercicios

Al comprar un objeto tienes que

pagar un porcentaje de impuesto y te

hacen un porcentaje de descuento

Al comprar un objeto que vale 1250

¿Qué porcentaje de descuento

deberán hacerme para poder pagarlo

que no necesitamos para

nada.

El enunciado es poco

claro.

28.3%

15.2%

23.9%

32.6%

CAPÍTULO 4

52

¿con que orden es mejor que te

hagan los cálculos?

¿Qué cuesta más barato, ir de Reus

a Tarragona en moto o en autobús?

Tenemos dos cuadrados iguales

¿Cómo hay que recortarlos y

pegarlos para poder construir un

solo cuadrado?

si solo tengo 10?

¿Cuáles son las fracciones que se

obtienen de ellas mismas sumando 1

al numerador y 2 al denominador?

¿Cuáles son los diferentes tipos de

triángulos que conoce?

Si tengo 20 y tú tienes 35 ¿Cuántos

tienes más tú que yo?

Resuelve 3x-2=16

4/21+3/7-5/6

Los resultados que obtuvimos son los siguientes:

15.1 15.2

Frecuencia Porcentaje Frecuencia Porcentaje

Si 36 78.3% Si 25 54.3%

No 10 21.7% No 21 45.7%

15.3 15.4

Frecuencia Porcentaje Frecuencia Porcentaje

Si 20 43.5% Si 26 56.5%

No 26 56.5% No 20 43.5%

15.5 15.6

Frecuencia Porcentaje Frecuencia Porcentaje

CAPÍTULO 4

53

Si 26 56.5 Si 28 60.9

No 20 43.5 No 18 39.1

15.7 15.8

Frecuencia Porcentaje Frecuencia Porcentaje

Si 25 54.3 Si 42 91.3

No 21 45.7 No 4 8.7

15.9

Frecuencia Porcentaje

Si 35 76.1

No 11 23.9

Podemos ver en la primera pregunta con un 78.3% los profesores piensan que “Sí” es un

problema de matemáticas, pero podemos ver que este tipo de preguntas se considera como

un ejercicio; con un 21.7% los profesores consideran que no es un problema esto nos quiere

decir dos cosas, la primera podría ser que están considerándolo como un ejercicio y el peor

de los casos no lo consideran como ejercicio ni como problema. En la pregunta dos con un

54.3% consideran que es un problema la pregunta en cuestión y con un 45.7% consideran

que no es un problema y podemos decir lo mismo que en la pregunta anterior. Ahora

observemos lo que obtuvimos en la siguiente pregunta, con un 56.5% los profesores

consideran que “no” es un problema, haremos un análisis detallado, para comenzar nos

haremos la siguiente pregunta: ¿Por qué contestaron que no es un problema? Tomando en

cuenta la clasificación de las preguntas podemos ver que es un problema de matemáticas,

esto nos quiere decir que el profesor no está familiarizado con este tipo de preguntas,

podemos decir que solo el profesor de matemáticas necesita que este explicito números,

CAPÍTULO 4

54

operaciones o que se le diga que se resuelve con un procedimiento matemático. Finalmente

podemos decir que hasta para poder este tipo de preguntas el alumno debe de desarrollar

otras habilidades aparte de sus conocimientos previos de matemáticas. En las siguientes

preguntas podemos ver lo mismo que en las dos primeras preguntas por ello no haremos un

análisis detallado de estas.

En la pregunta 2 de la segunda sección damos a conocer las tres palabras en las cuales los

profesores encuentran el significado de la palabra matemáticas, los resultados que

obtuvimos son los siguientes:

Figura 4.5

Como podemos observar en la gráfica con un 32.6% la palabra que describe lo que es la

matemática es el “razonamiento”, seguida después de “métodos” con un 23.2% y

finalmente como nos interesa saber cuáles son las tres palabras los maestros definen la

palabra matemáticas con el “sentido común” y “exactitud”.

Ahora mostramos las tres palabras las cuales los profesores definen o se relacionan más con

las clases de matemáticas, lo podemos observar en la siguiente gráfica:

CAPÍTULO 4

55

Figura 4.6

Con un 26.1% los profesores piensan que en una clase de matemáticas lo más que se hace

es “pensar” seguido después de “explicar” con un 22.5% y con 21% es “practicar”,

podemos darnos cuenta que la palabra “investigar” tuvo un porcentaje bajo lo cual debería

de tener un porcentaje más alto ya que una consecuencia de esto es que los alumnos no

desarrollan la habilidad de investigar y solo creen que la matemáticas son formulas,

procedimientos, etc.

4.1.2 Análisis de la segunda sección

Ahora haremos el análisis de la segunda sección la cual es: “Creencias sobre los resolutores

de problemas”.

Haciendo un análisis de la pregunta 4 con un 47.8% los profesores proponen resolver un

problema de matemáticas en cualquier momento, con un 30.4% profesores resuelven un

problema de matemáticas al empezar un tema y por último con un 21. 7% lo hacen al final

de un tema (figura 4.7).

CAPÍTULO 4

56

Figura 4.7

Ahora presentamos el análisis de lo que es más importante para el profesor, que su alumno

pueda hacer en la clase de matemáticas. Y de la misma manera diremos que es lo que más

les gustaría hacer a los alumnos en la clase de matemáticas (figura 4.8 y 4.9).

Observando en la primera gráfica podemos decir que con un 39.1%, para el profesor es más

importante “haber sido capaz de mantener su punto de vista sobre un problema con sus

alumnos”, seguido con un 30.4% les es importante que sus alumnos puedan resolver

“problemas muy difíciles” y con un 17.4% les es importante que el alumno puedan haber

“efectuado unos cálculos mentales muy difíciles”. En la figura 4.9 con un 43.5% los

profesores piensan que a sus alumnos les gustaría “haber resuelto un problema muy

Figura 4.8

Figura 4.9

CAPÍTULO 4

57

difícil”, seguido con un 26.1% los profesores dijeron que a sus alumnos les gustaría “haber

sido capaz de mantener su punto de vista ante un problema de matemáticas” y finalmente

con un 19.6% los alumnos estarían contentos si “haber efectuado unos cálculos difíciles

mentalmente”.

En los siguientes cuadros analizamos lo que los profesores piensan cuando sus alumnos

resuelven problemas en clase.

Como podemos observar en la tabla 4.4 en la primera pregunta los profesores piensan que

sus alumnos le dan mucha importancia al obtener el resultado ya que obtuvo un 67.4%, en

la segunda sección con un porcentaje de 47.8 % regularmente el alumno le da importancia

para utilizar lo que se les acaba de en enseñar en esos momentos, con un 39.1% los

profesores piensan que regularme sus alumnos dan importancia a explicar cada uno de los

pasos que utiliza para resolver problemas, en la cuarta sección vemos que regularmente los

alumnos dan importancia al buscar otros caminos y por ultimo con un 41.3% los alumnos

dan regularmente importancia a comprobar el resultado.

CAPÍTULO 4

58

Tabla 4.4

Poca Medio Regular Mucha

Obtener el resultado 4.3%

8.7%

19.6%

67.4%

Haber utilizado las cosas

que se le acaban de explicar

8.7%

30.4%

47.8%

13.0%

Explicar por qué hacen cada

cosa

6.5%

21.7%

39.1%

32.6%

Haber seguido la forma que

usted le enseño

10.9%

32.6%

39.1%

17.4%

Al acabar, ver si hay otros

caminos

19.6%

43.5%

23.9%

13.0%

Comprobar el resultado 15.2%

15.2%

41.3%

28.3%

CAPÍTULO 4

59

En la tabla 4.5 mostramos lo que los profesores dan importancia cuando sus alumnos están

resolviendo un problema de matemáticas.

Tabla 4.5

Poca Medio

regular

Regular Mucha

Que desde el principio vaya

por el buen camino

10.9%

26.1%

32.6%

30.4%

Que lo resuelva en la cabeza

antes de escribir nada

39.1%

37.0%

15.2%

8.7%

Que no se quede bloqueado

en ningún momento

6.5%

21.7%

39.1%

32.6%

Que lo haya resuelto en

poco tiempo

34.8%

47.8%

17.4% 0%

Finalmente hacemos el análisis de la última pregunta de esta sección la cual es: “¿Para qué

sirven las matemáticas?” y lo presentamos en la tabla 4.6

Tabla 4.6

Poco Medio

regular

Regular Sobretodo

Saber un conjunto de reglas

y operaciones.

26.1% 21.7% 34.8% 17.4%

CAPÍTULO 4

60

Saber calcular y hacer

operaciones

4.3%

10.9%

37.0%

47.8%

4.1.3 Análisis de la tercera sección

Ahora haremos el análisis de la tercera sección la cual es: “Creencias sobre el proceso de

resolución de problemas, sobre el aprendizaje y mejora de la resolución de problemas”.

En la tabla 4.7 mostramos los resultados que obtuvimos al preguntarles a los maestros la

siguiente cuestión ¿Para que sus alumnos aprendan a resolver problemas de matemáticas

tienen que aprender: ?

Tabla 4.7

Poco Medio

regular

Regular Sobretodo

Muchas matemáticas 10.9% 41.3% 34.8% 13.0%

Hacer intuitivo y al utilizar

el sentido común

8.7% 23.9% 32.6% 34.8%

A dominar su estado de

animo

19.6% 34.8% 32.6% 13.0%

Estrategias como por

ejemplo hacer esquemas,

4.3% 8.7% 41.3% 45.7%

CAPÍTULO 4

61

representaciones

Estrategias como por

ejemplo probar con casos

más sencillos, con

ejemplos…

4.3% 10.9% 34.8% 50.0%

En la primera afirmación los maestros respondieron que para resolver problemas de

matemáticas sus alumnos necesitan “medio regular” aprender muchas matemáticas con un

41.3 % seguido con 34.8% “regular”. En la siguiente afirmación con un 34.8% los alumnos

“sobretodo” deben de ser intuitivos y utilizar el sentido común. Con 45.7% “sobretodo” los

alumnos deben de desarrollar estrategias como por ejemplo hacer esquemas,

representaciones y finalmente con un 50% “sobretodo” deben de desarrollar estrategias

para probar con casos más sencillos.

En la tabla 4.8 mostramos los resultados que se obtuvieron de las afirmaciones sobre

algunas creencias referentes al aprendizaje.

Tabla 4.8

MA A D MD

Quien no sabe resolver

problemas es porque no

sabe matemáticas

6.5% 17.4% 52.2% 23.9%

Si han aprendido bastante,

sabrán ver en los

enunciados que es lo que

hay que aplicar para

resolverlo

30.4% 41.3% 26.1% 2.2%

CAPÍTULO 4

62

Usted como profesor da

métodos para resolver cada

tipo de problema

10.9% 60.9% 19.6% 8.7%

Los buenos alumnos en

matemáticas normalmente

encuentran fácilmente el

camino para resolver

cualquier problema

21.7% 54.3% 21.7% 2.2%

Usted como profesor quiere

que lo observen cómo

resuelve los problemas para

así aprender más

15.2% 34.8% 37.0% 13.0%

Quedarse “en blanco”

resolviendo un problema es

muy normal y no tiene nada

de malo

4.3% 26.1% 43.5% 26.1%

Si los alumnos saben

muchas matemáticas, ya

sabrán cuándo y cómo

tienen que utilizarlas

17.4% 45.7% 37.0% 0%

Para resolver problemas es

muy importante la paciencia

y la perseverancia

56.5% 32.6% 8.7% 2.2%

Es importante que cuando

los alumnos estén probando

una manera de resolver un

50.0% 28.3% 17.4% 4.3%

CAPÍTULO 4

63

problema, no la abandonen

aunque no lo logre

Si dominan un tema de

matemáticas, normalmente

sabrán resolver los

problemas que hacen

referencia a éste tema

23.9% 52.2% 17.4% 6.5%

Como profesor da métodos

para resolver cada tipo de

problema

17.4% 45.7% 21.7% 15.2%

Se puede adquirir la

capacidad de resolver

problemas solo observando

a otras personas a las que le

vayan bien en las

matemáticas

8.7% 23.9% 54.3% 13.0%

Ahora analizaremos solo dos preguntas de la tabla anterior estas serán la pregunta 3 y 5

estas las escogimos porque podemos observar como es el comportamiento del maestro en el

salón de clases y más cuando sus alumnos están resolviendo problemas de matemáticas. En

la pregunta 3 podemos ver que con un 60.9% los maestros están “de acuerdo” en que ellos

dan métodos para resolver cada uno de los tipos de problemas, seguido con un 19.6% están

en “desacuerdo”, con un 10.9% están “muy de acuerdo” y finalmente con un 8.7% están

“Muy desacuerdo ” como lo muestra la figura 4.10.En la pregunta 5 podemos ver con un

37.0% los maestros están en “desacuerdo” en que sus alumnos lo observen cuando resuelve

problemas y así ellos aprenden más, pero con un 34.8% están “de acuerdo”, con un 15.2%

están “muy de acuerdo” y finalmente con un 13.0% están “muy en desacuerdo” ver figura

4.11.

CAPÍTULO 4

64

En la tabla 4.9 mostramos los resultados que obtuvimos con las afirmaciones

correspondientes.

Tabla 4.9

MA A D MD

Los alumnos deben de leer

bien los enunciados para así

buscar lo que hay que

aplicar

76.1% 23.9% 0% 0%

Es perfectamente correcto

utilizar el sentido común

para resolver problemas

28.3% 52.2% 17.4% 2.2%

Si no pueden resolver un

problema, tienen que

estudiar más

17.4% 39.1% 34.8% 8.7%

Es importante que cuando

estén probando una manera

de resolver un problema y

58.7% 34.8% 4.3% 2.2%

Figura 4.10 Figura 4.11

CAPÍTULO 4

65

Observando los resultados que obtuvimos en la afirmación 2 con un 52.2% los profesores

están “de acuerdo” que es correcto utilizar el sentido común para resolver problemas,

seguido con un 28.3% los maestros están “muy de acuerdo”, 17.4% en “desacuerdo” y solo

2.2% en “muy desacuerdo” ver figura 4.12. En la afirmación 5 con un 39.1% los maestros

están “de acuerdo” que si sus alumnos utilizan una técnica matemática es mejor que

resolverlo usando el sentido común y con un 37.0% los maestros están “muy de acuerdo”

ver figura 4.13.

Figura 4.12

Figura 4.13

En la tabla 4.10 mostramos los resultados que obtuvimos con las afirmaciones

correspondientes.

vea que no lo logro, busque

otro camino

Si se puede utilizar una

técnica matemática, es

mejor eso que resolver un

problema por “sentido

común”

37.0% 39.1% 15.2% 8.7%

CAPÍTULO 4

66

Tabla 4.10

MA A D MD

Normalmente sus alumnos

resuelven bien los

problemas de matemáticas

2.2% 50.0% 47.8% 0%

Normalmente sus alumnos

cuando resuelven

problemas están muy

tranquilos

6.5% 43.5% 47.8% 2.2%

Normalmente sus alumnos

cuando resuelven

problemas los sienten

seguros

6.5% 43.5% 47.8% 2.2%

Normalmente sus alumnos

cuando resuelven

problemas notan que saben

matemáticas

13.0% 67.4% 17.4% 2.2%

Normalmente sus alumnos

cuando resuelven

problemas se notan muy

concentrados

10.9% 56.5% 28.3% 4.3%

Con un 50% los maestros están “de acuerdo” que normalmente sus alumnos resuelven bien

los problemas de matemáticas, también podemos ver que con un 47.8% los maestros están

en “desacuerdo” y finalmente con 2.2% los maestros están “muy de acuerdo” ver figura

CAPÍTULO 4

67

4.14. En la afirmación 4 con un 67.4% los maestros están “de acuerdo” que sus alumnos

cuando resuelven problemas notan que ya han aprendido matemáticas, seguido con la

opción de “desacuerdo” teniendo 17.4%, también con 13% los maestros están “muy de

acuerdo” y por ultimo con 2.2% están “muy desacuerdo” ver figura 4.15.

A continuación mostramos los resultados que obtuvimos al preguntarles a los maestros

¿Cuándo acaban de resolver correctamente un problema sus alumnos normalmente se

sienten? (ver tabla 4.11)

Tabla 4.11

Poco Medio

regular

Regular Sobretodo

Normal, como siempre 13.0% 34.8% 39.1% 13.0%

Satisfechos 2.2% 8.7% 21.7% 67.4%

Sorprendidos, no me lo

acabo de creer

10.9% 21.7% 39.1% 28.3%

Con ganas de hacer más 6.5% 10.9% 41.3% 41.3%

Figura 4.14 Figura 4.15

CAPÍTULO 4

68

problemas

Mirando la tabla con 39.1% los maestros piensan que sus alumnos “regularmente” se

sienten normales después de resolver un problema de matemáticas y seguido de “medio

regular” con 34.8%. En la siguiente afirmación con 67.4% los maestros piensa que

“sobretodo” sus alumnos se sienten satisfechos al acabar de resolver un problema de

matemáticas; con 21.7% en la misma afirmación “regularmente” los alumnos están

satisfechos. En la siguiente afirmación con un 39.1% “regularmente” los alumnos se sienten

sorprendidos al acabar de hacer un problema de matemáticas, seguido de “sobretodo” con

28.3% y por ultimo podemos ver que hay un empate entre “sobretodo y regular” con 41.3%

esto quiere decir que la mayoría de los alumnos tienen muchas ganas de hacer más

problemas.

En la tabla 4.12 podemos ver los resultados de la siguiente cuestión: ¿Cuándo ve que no

pueden resolver correctamente un problema sus alumnos normalmente se sienten?

Tabla 4.12

Poco Medio

regular

Regular Sobretodo

Normal, como siempre 43.5% 28.3% 21.7% 6.5%

Insatisfecho 10.9% 21.7% 19.6% 47.8%

Preocupado 8.7% 21.7% 37.0% 32.6%

Enfadado 23.9% 32.6% 21.7% 21.7%

CAPÍTULO 4

69

En la primera afirmación con 43.5% los alumnos se sienten “poco” normales al no poder

resolver un problema de matemáticas seguido de “medio regular” con un 28.3%; en la

siguiente afirmación con un 47.8% se sienten “sobretodo” insatisfechos. En la siguiente

afirmación se sienten preocupados “regularmente” al no poder resolver un problema de

matemáticas y con 32.6% “sobretodo” se sienten preocupados.

En la tabla 4.13 nos dicen los maestros con su porcentaje correspondiente porque no saben

resolver un problema de matemáticas sus alumnos.

Tabla 4.13

Poco Medio

regular

Regular Sobretodo

No saben bastantes

matemáticas

19.6%5 37.0% 37.0% 6.5%

No tienen bastante intuición

o sentido común

17.4% 39.1% 30.4% 13.0%

No hacen esquemas o

representaciones

15.2% 28.3% 45.7% 10.9%

No se esfuerzan demasiado

mientras lo resolvían

10.9% 10.9% 52.2% 26.1%

No estaban muy

concentrados

10.9% 15.2% 52.2% 21.7%

CAPÍTULO 4

70

De manera contraria a la tabla anterior aquí podemos observar los resultados que obtuvimos

al preguntarles a los maestros ¿Cuándo uno de sus alumnos ha podido resolver un problema

de matemáticas es porque? (Ver tabla 4.14)

Tabla 4.14

Poco Medio

regular

Regular Sobretodo

Saben muchas matemáticas 13.0% 39.1% 34.8% 13.0%

Tienen mucha intuición y

sentido común

13.0% 23.9% 47.8% 15.2%

Saben hacer esquemas y

representaciones

8.7% 23.9% 45.7% 21.7%

Se esfuerzan mucho

mientras lo resolvían

4.3% 15.2% 50.0% 30.4%

Estaban muy concentrados 2.2% 17.4% 45.7% 34.8%

En la tabla 4.15 observamos los resultados obtenidos al preguntarles a los maestros por qué

sus alumnos no han podido resolver un problema de matemáticas la pregunta que se

formulo es igual a la de una tabla anterior pero las afirmaciones a responder son diferentes.

Tabla 4.15

Poco Medio

regular

Regular Sobretodo

CAPÍTULO 4

71

Han tenido mala suerte 78.3% 6.5% 8.7% 6.5%

No le gustan las

matemáticas

23.9% 28.3% 34.8% 13.0%

El problema era demasiado difícil 13.0% 23.9% 45.7% 17.4%

En la tabla 4.16 mostramos el caso contrario de la tabla anterior y los resultados son los

siguientes:

Tabla 4.16

Poco Medio

regular

Regular Sobretodo

Han tenido buena suerte 82.6% 8.7% 2.2% 6.5%

Le gustan las matemáticas 6.5% 17.4% 37.0% 39.1%

El problema era fácil 15.2% 17.4% 43.5% 23.9%

En la tabla 4.17 mostramos otras afirmaciones en las cuales los alumnos no han podido

resolver un problema de matemáticas:

Tabla 4.17

Poco Medio

regular

Regular Sobretodo

Se han puesto nerviosos 34.8% 41.3% 13.0% 10.9%

CAPÍTULO 4

72

No han tenido bastante

paciencia

8.7% 30.4% 37.0% 23.9%

Les daba mucha pereza

ponerse con ganas

13.0% 17.4% 50.0% 19.6%

Y de la misma manera podemos ver porque si han podido resolver un problema de

matemáticas los alumnos:

Tabla 4.18

Poco Medio

regular

Regular Sobretodo

Estaban muy tranquilos 26.1% 28.3% 28.3% 17.4%

Les gustan los retos 4.3% 19.6% 41.3% 34.8%

Le ponen muchas ganas 0% 15.2% 50.0% 34.8%

Finalmente podemos observar en la siguiente grafica con un 50.0% a los profesores les

gusta “poco” las matemáticas, seguido con 32.6% a los profesores les gusta “mucho” la

matemática y con un 17.4% les gusta bastante.

Figura 4.16

CONCLUSIONES

73

Conclusiones

Con los resultados que se obtuvieron daremos solución a las preguntas de investigación que

dieron origen a esta investigación. Primero daremos respuesta a la pregunta inicial, la cual

es: ¿Cuáles son las creencias de los profesores en la resolución de problemas de

matemáticas?

Como podemos ver en el cuadro 3.1 los diferentes tipos de creencias que se tienen son:

creencias sobre la matemática y los problemas, sobre los resolutores, sobre el proceso de

resolución de problemas, el aprendizaje y mejora de la resolución de problemas.

En el siguiente cuadro presentamos las creencias que se identificaron en los maestros

acerca de la matemática y los problemas.

Creencias sobre la matemática y los problemas

1. Un problema de matemáticas no tiene nada que ver con la vida cotidiana.

2. Un problema de matemáticas es un conflicto.

3. Un problema de matemáticas es lo mismo que un ejercicio de matemáticas.

4. Las matemáticas y los problemas de matemáticas son cálculo numérico.

5. Las matemáticas son exactas.

6. Un alumno que pueda resolver un problema de matemáticas que no tenga texto es

poco importante.

7. Problema de matemáticas que no tenga números no es un problema de

matemáticas.

8. La matemática es razonamiento.

9. La matemática son métodos que hay que aprenderse de memoria.

10. En las clases de matemáticas hay que pensar, explicar y practicar.

CONCLUSIONES

74

Ahora en el siguiente cuadro presentamos las creencias que se detectaron en los maestros

sobre los resolutores de problemas.

Creencias sobre los resolutores de problemas.

1. El alumno puede resolver en cualquier momento un problema de matemáticas.

2. El alumno que resuelva problemas difíciles, es buen resolutor de problemas.

3. Alumno que pueda hacer cálculos mentales muy difíciles, es buen resolutor.

4. Alumno que pueda resolver un problema de matemáticas difícil estará a gusto

como resolutor.

5. Un buen resolutor estaría a gusto por realizar cálculos mentales muy difíciles.

6. Alumno que encuentre el resultado correcto, es un buen resolutor.

7. Alumno que no utilice lo que se le enseño en esos momentos no es un buen

resolutor.

8. Un buen resolutor es cuando regularmente vaya por el buen camino.

9. Un buen resolutor es cuando regularmente no se quede bloqueado en ningún

momento.

Finalmente, presentamos las creencias que poseen los maestros sobre el proceso de

resolución de problemas, el aprendizaje y mejora de la resolución de problemas.

Creencias sobre el proceso de resolución de problemas, el aprendizaje y mejora de la

resolución de problemas.

1. Si han aprendido bastante matemáticas, sabrán ver en los enunciados que es lo que

hay que aplicar para resolverlo.

2. El profesor da métodos para resolver cada tipo de problema.

CONCLUSIONES

75

3. Los buenos alumnos en matemáticas normalmente encuentran fácilmente el camino

para resolver cualquier problema.

4. Quedarse “en blanco” resolviendo un problema no es muy normal y es malo.

5. Si los alumnos saben muchas matemáticas, ya sabrán cuándo y cómo tienen que

utilizarlas.

6. Si no pueden resolver un problema, tienen que estudiar más.

7. Si se puede utilizar una técnica matemática, es mejor eso que resolver un problema

por “sentido común”.

8. El no responder un problema, el alumno no se esfuerza demasiado mientras lo

resolvía.

9. El no responder un problema, el alumno no estaban muy concentrado.

10. Alumno que no le gustan las matemáticas no podrá resolver un problema.

11. Alumno que responda bien un problema se sentirá con ganas de hacer más

problemas.

12. El no responder un problema es porque el problema era demasiado difícil.

13. Resolver un problema es porque al alumno le gustan las matemáticas.

14. Alumno que resuelva un problema es porque el problema era fácil.

15. Resolver un problema se necesita bastante paciencia.

Estos cuadros nos muestran que los maestros de nivel básico tienen creencias en la

resolución de problemas que son erróneas, de la misma manera observando las creencias

que tienen los alumnos, podemos decir que hay una gran similitud entorno a estas

creencias. Así, podemos dar solución a la tercera pregunta de investigación: ¿hay alguna

similitud con las creencias de los maestros con la de los alumnos?, la respuesta es “sí”. Esto

está provocando que los alumnos tengan las mismas creencias erróneas que los maestros,

provocando así que los alumnos no estén dando su mejor rendimiento en la resolución de

problemas de matemáticas, un ejemplo de esto es la prueba ENLACE (2011), donde la

mayoría del alumnado del estado de Puebla se encuentra en el nivel “INSUFICIENTE” en

la prueba de matemáticas. Otro ejemplo a nivel internacional es la prueba PISA (2009)

donde México se encuentra en el lugar 50 de 65 en la prueba de matemáticas. Así con estos

CONCLUSIONES

76

datos podemos dar respuesta a la segunda pregunta de investigación: ¿Afectan las creencias

en el bajo rendimiento de los alumnos?, esta investigación nos da fuertes indicios de que las

creencias erróneas posiblemente sí afecta el rendimiento del alumno.

Otro aspecto importante que destacó en esta investigación, es que la mitad de profesores a

los que se les realizó la encuesta, les gusta poco las matemáticas lo que provoca un gran

rechazo sobre la clase de matemáticas cuando el maestro la está impartiendo a sus alumnos.

A continuación presentamos qué es lo que les gusta y lo que menos les gusta de las

matemáticas a los profesores, mostrándolo de esta manera para analizar que ambos aspectos

siempre están relacionados.

Lo que más les gusta de matemáticas Lo que no les gusta de matemáticas

1. Geometría. 1. Calculo diferencial

2. Geometría, aritmética y proporcionalidad. 2. No contesto

3. Resolver Problemas de la vida cotidiana. 3. Entender lo que pide el problema

4. Diseñar procedimientos 4. Que es una exactitud

5. No contesto 5. No contesto

6. Razonamiento y lógica 6. Muchas operaciones

7. Problemas con menos dificultad 7. El cálculo y fracciones

8. Operaciones básicas 8. Volúmenes, áreas, medición de ángulos

9. Resolver problemas 9. Operaciones difíciles

10. Geometría, aritmética y proporcionalidad. 10. Parábolas, elipses y circunferencias

11. Resolver Problemas de la vida cotidiana. 11. Usar tantos números

12. Resolver Problemas de la vida cotidiana. 12. son difíciles actividades

13. Razonamiento lógico 13. Calculo integral

14. Figuras geométricas 14. Calculo, razonamiento y operaciones

15. Resolver Problemas de la vida cotidiana. 15. No contesto

16. Operaciones básicas 16. Problemas de algebra

17. Ángulos y proporcionalidad 17. Las fracciones y algebra

18. Resolver operaciones 18. Problemas muy difíciles

19. No contesto 19. No contesto

20. Resolver Problemas de la vida cotidiana. 20. Problemas muy difíciles

21. Problemas muy difíciles 21. Geometría

22. Implica retos 22. Tratamiento de información

23. Quebrarse la cabeza 23. Saturarme de información

24. Se crea imaginación 24. Resolver Pr. complejos

25. Que es exacta 25. Muchas formas de resolver un Pr.

26. Cálculo 26. Algebra

27. RP 27. Estadística

28. No contesto 28. No contesto

29. Razonamiento 29. No contesto

30. No contesto 30. Operaciones

31. Fracciones y operaciones 31. Algebra y trigonometría

32. Que es un reto 32. Problemas no claros

33. Cuando se aplica a un juego 33. Pensar, argumentar y operar

34. Las aplicaciones 34. No contesto

35. La aplicación 35. Poca reflexión sobre las formulas

36. Calcular áreas 36. Resolver problemas

CONCLUSIONES

77

37. Razonar y buscar soluciones 37. Resolver problemas con datos innecesarios

38. Varios Procedimientos 38. No resolver problemas de la vida cotidiana

39. Las fracciones 39. Diagramas de árbol

40. RP 40. Falta de Métodos para resolver problemas

41. Aplicación 41. La geometría

42. CM, RP, GM y FR 42. RP con decimales

43. Pensar y razonar 43. No contesto

44. RP 44. Fracciones

45. No contesto 45. Algebra

Finalmente, podemos decir que la educación matemática está influida por personas, y

principalmente por los maestros, que estos mismos introducen a los alumnos en la cultura

matemática, sabemos que el profesor planifica, desarrolla y evalúa su intervención

educativa, toma decisiones acerca de las actividades a proponer, la metodología a utilizar o

la manera de valorar el trabajo de los alumnos, pero que en su práctica docente está

cometiendo errores como usar determinadas estructuras, por ejemplo: números, algoritmos,

razones, etc., además, atributos, acciones o procesos, abstracciones, comportamientos o

patrones creados por la mente humana, observados en la naturaleza o derivados de otros

patrones que se pueden explorar con las matemáticas y describir con su lenguaje,

ofreciendo una determinada visión de esta ciencia. Sus decisiones como sus prácticas son

indicadoras de sus creencias, que están siendo conscientes o inconscientes, acerca de lo que

es la matemática, de los valores de esta ciencia y de cómo se aprende y se enseña.

REFERENCIAS

78

Referencias

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Problem Solving. Vol. 9(4); pp.8-9.

Anexos

81

Anexos

Encuesta a profesores de nivel básico

Nombre: _________________________________________

Escuela de donde procede: _______________________________

1.-Si tuviera que explicar qué es un problema de matemáticas a alguien que no lo sabe,

¿Cómo se lo explicarías para que te entendiese fácilmente?

2.- Pon dos ejemplos de problemas de matemáticas (no hace falta que los resuelva)

a)

b)

3.-Pon dos ejemplos de ejercicios de matemáticas que no sean el cálculo de operaciones (no

hace falta que los resuelvas)

a)

b)

4.-Aparte de problemas y ejercicios, en clase de matemáticas se hace algún otro tipo de

actividades a) Sí b) No

Si la respuesta es sí, ponga algún ejemplo.

5.- ¿Se encuentra con situaciones complicadas en la vida cotidiana en las que tenga que

utilizar las matemáticas?

a) Muchas b) bastantes c) pocas d) ninguna

¿Resuelve en clase problemas sobre situaciones como las que se encuentra en la vida

cotidiana?

a) Muchas b) bastantes c) pocas d) ninguna

6.- Ponga un ejemplo de estas situaciones con las que se haya encontrado recientemente

fuera de clase y hayas tenido que utilizar las matemáticas.

Anexos

82

7.- ¿Qué tienen de diferente los problemas de matemáticas de la escuela y las situaciones de

fuera de clase en las que haya tenido que utilizar las matemáticas?

8.- En cada una de las siguientes frases señale el número del 1 al 4 que considere más

adecuado.

En los enunciados de problemas de matemáticas que normalmente se trabaja en clase:

Nunca A veces A menudo Siempre

Hay expresiones y nombres

de cosas matemáticas.

1 2 3 4

Hay pistas sobre lo que se

debe de hacer para

resolverlos.

1 2 3 4

Hay todos los datos que

necesitamos para resolver el

problema.

1 2 3 4

Hay datos que no

necesitamos y en cambio no

los dan.

1 2 3 4

Son muy claros y exactos al

darnos los datos y las

condiciones.

1 2 3 4

Usted cuando da cursos de matemáticas, reconoce la importancia de resolver problemas en

los que:

Poco

importante

Muy

importante

El enunciado no tiene

pistas sobre que hace

falta hacer para

resolverlo.

1 2 3 4

El enunciado no tiene

ninguna palabra.

1 2 3 4

Al enunciado le faltan

datos que necesitamos

para poder resolver el

problema.

1 2 3 4

El enunciado tiene datos

que no necesitamos para

nada.

1 2 3 4

El enunciado es poco

claro.

1 2 3 4

Anexos

83

9.- En los problemas de matemáticas siempre propone o pide que haga alguna cosa.

Aquí tiene algunos ejemplos:

Calcular un número

Calcular una medida

Dibujar una figura geométrica

De unos cuantos ejemplos más de cosas que pida hacer con los problemas de matemáticas.

10.- De cada uno de los siguientes ejemplos diga si se trata o no de un problema de

matemáticas. (Marque con una X)

a) Sí b) no 1.-Al comprar un objeto que vale 1250 ¿Qué porcentaje de

descuento deberán hacerme para poder pagarlo si solo tengo 10?

a) Sí b) no 2.- Al comprar un objeto tienes que pagar un porcentaje de

impuesto y te hacen un porcentaje de descuento ¿con que orden es

mejor que te hagan los cálculos?

a) Sí b) no 3.- ¿Qué cuesta más barato, ir de Reus a Tarragona en moto o en

autobús?

a) Sí b) no 4.- ¿Cuáles son las fracciones que se obtienen de ellas mismas

sumando 1 al numerador y 2 al denominador?

a) Sí b) no 5.- Tenemos dos cuadrados iguales ¿Cómo hay que recortarlos y

pegarlos para poder construir un solo cuadrado?

a) Sí b) no 6.- ¿Cuáles son los diferentes tipos de triángulos que conoce?

a) Sí b) no 7.- Si tengo 20 y tú tienes 35 ¿Cuántos tienes más tu que yo?

a) Sí b) no 8.- Resuelve 3x-2=16

a) Sí b) no 9.-

Segunda sección

1.- Como profesor de matemáticas si estuviese corrigiendo unos problemas de sus alumnos

¿Qué nota pondría a cada uno de los chicos y chicas? (pon una nota de 0 a 10 en la casilla

de cada alumno).

__ Alberto __ Begoña __Carlos __Dori __Esteban

___Fina

Alberto ha resuelto bien el problema, pero no ha escrito nada, lo ha hecho todo de

cabeza.

Begoña ha resuelto el problema de la manera que el profesor esperaba, pero dado

que ha copiado mal los datos, el resultado es incorrecto, a pesar de haber efectuado

correctamente los cálculos.

Carlos lo ha hecho todo bien, pero una vez acabados los cálculos, ha escrito como

resultado 23cm en lugar de 23km

Dori lo a echo todo bien pero al final del resultado no puso las unidades en el

resultado.

Anexos

84

Esteban ha dado el resultado correcto, pero no se entiende muy bien como lo ha

conseguido, porque se ha equivocado en los cálculos un par de veces.

Fina ha resuelto el problema de la manera que el profesor esperaba, pero se ha

equivocado en los cálculos un par de veces.

2.- Marque con una cruz las tres palabras que se relacionan más con las matemáticas.

a) Reglas b) métodos c) imaginación d) exactitud e) razonamiento f) sentido

común.

3.- Marque con una cruz las tres palabras que se relacionan más con las clases de

matemáticas.

a) practicar b) memoria c) pensar d) explicación e) investigar f) discusión

4.- ¿En qué momento de un tema de matemáticas les proponen resolver un problema?

a) principalmente al empezar un tema

b) principalmente ya acabando un tema

c) en cualquier momento del tema

¿Por qué?

5.- ¿Qué es más importante para usted en los siguientes casos?

a) haber resuelto un problema muy difícil

b) haber efectuado muchos cálculos en poco tiempo

c) haber sido capaz de mantener su punto de vista sobre un problema con sus alumnos

d) haber efectuado unos cálculos difíciles mentalmente

6.- ¿Qué cree que les gustaría más a los alumnos en la clase de matemáticas que fueran

capaces de hacer?

a) haber resuelto un problema muy difícil

b) haber efectuado muchos cálculos en muy poco tiempo

c) haber sido capaz de mantener su punto de vista ante un problema de matemáticas

d) haber efectuado unos cálculos difíciles mentalmente

7.- En cada una de las siguientes frases señale el número del 1 al 4 que considere mas

adecuado.

Los alumnos, cuando resuelven problemas, dan importancia a:

Poca Mucha

Obtener el resultado 1 2 3 4

Haber utilizado las cosas

que se le acaban de explicar

1 2 3 4

Explicar por qué hacen cada

cosa

1 2 3 4

Haber seguido la forma que

usted le enseño

1 2 3 4

Al acabar, ver si hay otros 1 2 3 4

Anexos

85

caminos

Comprobar el resultado 1 2 3 4

Como profesor cuando mira a sus alumnos resolviendo un problema de matemáticas, daría

importancia a:

Poca Mucha

Que desde el principio vaya

por el buen camino

1 2 3 4

Que lo resuelva en la cabeza

antes de escribir nada

1 2 3 4

Que no se quede bloqueado

en ningún momento

1 2 3 4

Que lo haya resuelto en

poco tiempo

1 2 3 4

Las matemáticas sirven para:

Poco Sobretodo

Saber un conjunto de reglas

y operaciones.

1 2 3 4

Saber calcular y hacer

operaciones

1 2 3 4

Tercera sección

En cada una de las siguientes frases marque del 1 al 4 según crea conveniente.

Para que los alumnos aprendan a resolver problemas de matemáticas tienen que aprender:

Poco Sobretodo

Muchas matemáticas 1 2 3 4

Hacer intuitivo y al utilizar

el sentido común

1 2 3 4

A dominar su estado de

animo

1 2 3 4

Estrategias como por

ejemplo hacer esquemas,

representaciones

1 2 3 4

Estrategias como por

ejemplo probar con casos

más sencillos, con

ejemplos…

1 2 3 4

2.- En cada una de las siguientes frases diga si está muy de acuerdo (MA), de acuerdo (A),

en desacuerdo (D) o muy desacuerdo (MD) (marque la opción que escoja).

Anexos

86

Quien no sabe resolver

problemas es porque no

sabe matemáticas

MA A D MD

Si han aprendido bastante,

sabrán ver en los

enunciados que es lo que

hay que aplicar para

resolverlo

MA A D MD

Usted como profesor

explica métodos para

resolver cada tipo de

problema

MA A D MD

Los buenos alumnos en

matemáticas normalmente

encuentran fácilmente el

camino para resolver

cualquier problema

MA A D MD

Usted como profesor quiere

que lo observen cómo

resuelve los problemas para

así aprender más

MA A D MD

Quedarse “en blanco”

resolviendo un problema es

muy normal y no tiene nada

de malo

MA A D MD

Si los alumnos saben

muchas matemáticas, ya

sabrán cuándo y cómo

tienen que utilizarlas

MA A D MD

Para resolver problemas es

muy importante la paciencia

y la perseverancia

MA A D MD

Es importante que cuando

los alumnos estén probando

una manera de resolver un

problema, no la abandonen

aunque no lo logre

MA A D MD

Si dominan un tema de

matemáticas, normalmente

sabrán resolver los

problemas que hacen

referencia a éste tema

MA A D MD

Como profesor da métodos

para resolver cada tipo de

problema

MA A D MD

Se puede adquirir la MA A D MD

Anexos

87

capacidad de resolver

problemas solo observando

a otras personas a las que le

vayan bien en las

matemáticas

3.- En cada una de las siguientes frases di si estás muy de acuerdo (MA), de acuerdo (A),

en desacuerdo (D) o muy desacuerdo (MD) (marque la opción que escoja).

Los alumnos deben de leer

bien los enunciados para así

buscar lo que hay que

aplicar

MA A D MD

Es perfectamente correcto

utilizar el sentido común

para resolver problemas

MA A D MD

Si no pueden resolver un

problema, tienen que

estudiar más

MA A D MD

Es importante que cuando

estén probando una manera

de resolver un problema y

vea que no lo logro, busque

otro camino

MA A D MD

Si se puede utilizar una

técnica matemática, es

mejor eso que resolver un

problema por “sentido

común”

MA A D MD

4.- En cada una de las siguientes frases di si estás muy de acuerdo (MA), de acuerdo (A),

en desacuerdo (D) o muy desacuerdo (MD) (marque la opción que escoja).

Normalmente sus alumnos

resuelven bien los

problemas de matemáticas

MA A D MD

Normalmente sus alumnos

cuando resuelven problemas

están muy tranquilos

MA A D MD

Normalmente sus alumnos

cuando resuelven problemas

los sienten seguros

MA A D MD

Normalmente sus alumnos

cuando resuelven problemas

MA A D MD

Anexos

88

notan que saben

matemáticas

Normalmente sus alumnos

cuando resuelven problemas

se notan muy concentrados

MA A D MD

5.- En cada una de las siguientes frases señale con un círculo el número del 1 al 4 que

considere más adecuado.

Cuando acaban de resolver correctamente un problema sus alumnos normalmente se

sienten:

Poco Sobretodo

Normal, como siempre 1 2 3 4

Satisfechos 1 2 3 4

Sorprendidos, no me lo

acabo de creer

1 2 3 4

Con ganas de hacer más

problemas

1 2 3 4

Cuando ve que no pueden resolver un problema normalmente se sienten:

Poco Sobretodo

Normal, como siempre 1 2 3 4

Insatisfecho 1 2 3 4

Preocupado 1 2 3 4

Enfadado 1 2 3 4

Si no saben sus alumnos resolver un problema de matemáticas es porque:

Poco Sobretodo

No saben bastantes

matemáticas

1 2 3 4

No tienen bastante intuición

o sentido común

1 2 3 4

No hacen esquemas o

representaciones

1 2 3 4

No se esfuerzan demasiado

mientras lo resolvían

1 2 3 4

No estaban muy

concentrados

1 2 3 4

Anexos

89

6.- En cada una de las siguientes frases señale con un círculo el número del 1 al 4 que

considere más adecuado.

Si han sabido resolver sus alumnos un problema es porque:

Poco Sobretodo

Saben muchas matemáticas 1 2 3 4

Tienen mucha intuición y

sentido común

1 2 3 4

Saben hacer esquemas y

representaciones

1 2 3 4

Se esfuerzan mucho

mientras lo resolvían

1 2 3 4

Estaban muy concentrados 1 2 3 4

Si no han sabido resolver sus alumnos un problema es porque:

Poco Sobretodo

Han tenido mala suerte 1 2 3 4

No le gustan las

matemáticas

1 2 3 4

El problema era demasiado

difícil

1 2 3 4

Si han sabido resolver un problema es debido a que:

Poco Sobretodo

Han tenido buena suerte 1 2 3 4

Le gustan las matemáticas 1 2 3 4

El problema era fácil 1 2 3 4

Si no han sabido resolver un problema es debido a que:

Poco Sobretodo

Se han puesto nerviosos 1 2 3 4

No han tenido bastante

paciencia

1 2 3 4

Les daba mucha pereza

ponerse con ganas

1 2 3 4

Si han sabido resolver un problema es debido a que:

Anexos

90

Poco Sobretodo

Estaban muy tranquilos 1 2 3 4

Les gustan los retos 1 2 3 4

Le ponen muchas ganas 1 2 3 4

7.- ¿Le gustan las matemáticas?

a) Mucho b) bastante c) poco d) nada

8.- ¿Qué es lo que más le gusta de las matemáticas?

9.- ¿Y lo que menos le gusta?