Libro "Memorias de un soldado desconocido" será llevado al cine

1
C6 l Cine El Comercio domingo 8 de febrero del 2015 He leído su biografía y no sé si el Perú esté listo para asimilarla cuando se convierta en película ambiciosa. Me asombro de que Lurgio Gavilán se haya sentido listo para contarla. Habrá quie- nes rechacen indignados su fa- se senderista, cuando, según su propio relato, se enroló en el radicalismo porque “fui tras de mi hermano”. Era 1983 y tenía 12 años. Al poco tiempo, estaba sumido en el pánico y la alerta permanente, pues los mandos terroristas no solo asesinaban a militares y ronderos, sino tam- bién a sus militantes si come- tían una falta tan humana como dormirse haciendo guardia. Una noche fue obligado, junto a cinco chicos, a ahorcar a una compañera que se enamoró de un policía. Al cabo de dos años, Lurgio albergaba sueños de de- serción, pero la violencia –y la suerte– decidieron por él. Habrá quienes recelen de su pase al Ejército. Fue tras una emboscada. Lo cuenta con cier- ta frialdad, pues quiere compar- tir su historia sin poses ni desga- rros. Hoy es antropólogo y sabe lo útiles que son las historias de vida para sociedades que nece- sitan comprenderse antes de re- conciliarse: “Unos instantes más y habría muerto. Intenté gritar torpemente […] ¡Viva Gonza- lo! ¡Viva Lenin! ¡Viva Marx! […] Cuando volví en mí, el teniente me estaba hablando y me pedía guiar el camino de regreso a la base militar” (pág. 99). El oficial que pudo rematarlo lo usó de guía para volver sano y salvo a su base. En medio del ho- rror, ese gesto de confianza es uno de los momentos más con- movedores. Los extremos emo- cionales se tocan. Pero Lurgio no subraya nada; solo nos cuenta cómo el teniente, a quien consi- deraba su padre, lo hizo asimi- larse a la vida del Ejército, lo hi- zo cabito y lo ayudó a terminar el colegio. También le tocó partici- par, como soldado, en operacio- nes atroces. Y habrá quienes digan “esto es demasiado, no me lo creo” cuando lleguen a su conversión en fraile. Pero la clave es leer a Lurgio con el mismo despre- juicio con el cual él ha contado todo. Y confiar en él, porque en torno a su desfogue sin furia ni resentimiento, hubo religiosos UNA HISTORIA DE LA GUERRA INTERNA ARCHIVO PERSONAL ARCHIVO PERSONAL ARCHIVO PERSONAL Vivió para contarla Lurgio Gavilán reveló, en “Memorias de un soldado desconocido”, su periplo de adolescente senderista, soldado y fraile franciscano. Basado en su libro, Luis Llosa hará una película con guion de Mario Vargas Llosa. Fernando Vivas ESCRITOR. Tras la publicación de "Memorias de un soldado desconocido" (IEP, 2012), Lurgio paseó por varias ferias de libros. SOLDADO. En 1993, en una patrulla militar en Viviana, Ayacucho. Lurgio ya era mayor de edad y poco después dejó el Ejército. En 1997, en Santa Rosa de Ocopa, Junín, como fraile franciscano, hizo tareas de catequesis. CABITOS. En la base de Huanta, con otro adoles- cente. Miradas inocentes en medio de la guerra. RALPH ZAPATA y antropólogos que lo anima- ron a publicar. Uno de ellos, el difunto Carlos Iván Degrego- ri, escribió el prólogo y resume en una línea su odisea: “Des- pués de pasar por las tres insti- tuciones totales (SL, ejército e Iglesia) más connotadas de la historia del Perú, Lurgio es un hombre libre” (pág. 13). NO ES UN CAMALEÓN Conversando con amigos que leyeron el libro, evocamos la figura de Zelig, el camaleón de Woody Allen. ¿Es Lurgio un personaje camaleónico porque adaptó diferentes identidades? Pienso que no. Lo que hay en él son fases acumulativas, expe- riencias que decantan una per- sonalidad capaz de tomar dis- tancia de todo lo que le tocó vivir para contarlo. Lo llamé a México, donde vive con su mujer y su niña (tiene, además, un hijo mayor en el Pe- rú), pues prepara su tesis doctoral en la Universi- dad Iberoamericana. ¿Crees que la socie- dad peruana está pre- parada para tu historia? "Creo que no. El libro no lo empecé a escribir pen- sando en el público. Y ahora estoy sorprendido, me han llamado ex sol- dados que quieren con- tar su vida, me invitan a hablar ante jóvenes y ni- ños. Y me ha pasado, pero es uno entre 100, que un escritor llamó a la univer- sidad quejándose de que permitieran estudiar a un criminal de guerra. Cuan- do vino a México Alfredo Crespo (del Movadef), participé con preguntas y me llamó la atención que Personajes DANTE PIAGGIO AFP VíCTOR IDROGO Luis Llosa Urquidi: Director y pro- ductor de cine y TV, fundador de Iguana Producciones. Dirigió varios largometrajes, en el Perú y en Ho- llywood. El último fue "La fiesta del chivo" (2006), basado en la nove- la homónima de su primo y cuñado Mario Vargas Llosa. Ha comprado los derechos del libro de Gavilán. Mario Vargas Llosa: Varias obras de nuestro premio Nobel se han lleva- do al cine, sin su participación en la adaptación. Codirigió una versión de su novela "Pantaleón y las visi- tadoras" (1975) y ha escrito guio- nes para TV. “Tatuajes en la memo- ria” sería su primer guion basado en una historia ajena. Daniel Lazo: El ganador de la pri- mera temporada de "La voz Perú", de origen ayacuchano, ha debuta- do en el cine en "La última noticia", filme de Alejandro Legaspi, aún por estrenarse. Luis Llosa dice que, aunque no está aún decidido, po- dría interpretar a Lurgio Gavilán en “Tatuajes en la memoria”. Llamé a Luis Llosa para que me contara cómo iba el proyecto. "Es un libro muy interesante, pero todavía no hay una pelí- cula allí. Hemos trabajado con Mario [Vargas Llosa] la adap- tación y hemos terminado una primera versión. Hace unas se- manas fui a México, a hablar con Lurgio. Ha hecho anotacio- nes muy puntuales que nos ayu- dan a legitimar cómo hablaban los personajes". Le pregunto a Lucho si man- tendrán las fases en la vida de Lurgio: "Nos estamos concen- trando en las dos primeras, la de fraile es una suerte de epílogo, es como una consecuencia de la guerra". ¿Cuándo rodarán? "Hacia junio. Vamos a intentar ir a Ayacucho, aunque razones de producción podrían llevar- nos a otro sitio. El año pasado, aprovechamos la Semana San- ta ayacuchana, y viajamos con Mario a hacer trabajo de campo. Conversa- mos con mucha gente, recorrimos varios luga- res y surgieron cosas pa- ra la adaptación que no están en el libro". Daniel Lazo, el ga- nador de la primera temporada de "La voz Perú", declaró días atrás que trabajaría en una próxima pelícu- la de Luis Llosa. No dio más detalles. Le pregun- to a Lucho si Daniel ha- ría el papel de Lurgio: "Hemos hablado con él. Es una posibi- lidad. El punto de partida es la manera extraordinaria en que canta 'Adiós pueblo de Ayacu- cho'. Pero he hecho contactos en México que podrían deter- minar traer a otros actores". Le hago a Lucho la misma pre- gunta que a Lurgio. ¿Estamos listos para esta historia? "Es un reto. Todos los que vivimos esa época hemos sido víctimas. ¡Có- mo no herir susceptibilidades! Pero Lurgio es una voz autoriza- da porque vivió la guerra". ¿Ya tienen título? "Sí, 'Tatuajes en la memoria', es una frase del libro". Si la película se rueda en ju- nio, quizá la veamos estrenada a fines de año, sino en el 2016. El libro de Lurgio se reeditará en tiempos de trance político, y con él, se reavivará la polémica de qué tanto vale reabrir heridas. Vargas Llosa dedicó una colum- na a la historia que ahora adapta y dijo: "Es un libro que deberían leer todos esos jóvenes que toda- vía creen que la verdadera justi- cia está en la punta de un fusil" (“El País”, 16/12/2012). Al ex senderista imberbe y por lo tanto inimputable, al ca- bito accidental, al fraile chan- cón, al académico maduro; la vida aún le guarda una sorpre- sa. Y él nos guarda otras que querrá contar. insistía en el 'derecho del pueblo a conocer la ver- dad de la guerra'. Enton- ces, escribí un artícu- lo, hablé de masacres y atrocidades. No es posi- ble terminar en un abra- zo fraterno mientras los arquitectos de la violen- cia sigan vivos". Luego de oírlo, le digo a Lurgio que no lo veo como un camaleón, pero sí con una gran ca- pacidad de adaptación: "Lo que pasa es que a tantos niños simple- mente nos tocó vivir la guerra interna. Nadie elige vivir esas cosas. Cuando estabas en SL y querías escapar- te, te mataban. Entré al Ejército porque me capturaron, era difí- cil salir". ¿En cambio, sí decidiste entrar al convento? "Comen- zaban los tiempos de paz, me orientaron las monjitas". Lurgio ha sido asediado por cineastas y documentalistas im- pactados por su historia. Fran- cisco Lombardi y su habitual guionista Giovanna Pollarolo hablaron con él; también el do- cumentalista Javier Corcuera y la reportera Mariana Sánchez Aizcorbe. Pero Luis Llosa se ha- bía adelantado y le compró los derechos. Le dijo que escribiría el guion con Mario Vargas Llosa, y que este quería conocerlo. ¿De qué hablaste con Vargas Llosa? "Fue muy ameno. Toma- mos un café, hablamos de Ayacu- cho y de Uchuraccay" [MVLL hizo un informe sobre la masacre de periodistas que allí aconteció]. Antes de despedirme, le digo que su vida dará un nuevo giro tras la película: "No lo sé. Cuan- do salió el libro, di muchas entre- vistas. Sigo siendo Lurgio y quie- ro estar al lado de mi familia". TATUAJES EN LA MEMORIA "A tantos niños, simplemente, nos tocó vivir la guerra interna. Nadie elige vivir esas cosas". @ SIGA LA NOTICIA Vea la entrevista a Lurgio Gavilán: www.elcomercio.pe/luces

description

La autobiografía de Lurgio Gavilán, publicada el 2012 por el IEP y la Universidad Iberoaméricana de México, será llevada a la pantalla grande con un guión del Premio Nobel de Literatura, Mario Vargas LLosa. Título: Vivió para contarlaFuente: El ComercioFecha: 08/02/2015

Transcript of Libro "Memorias de un soldado desconocido" será llevado al cine

Page 1: Libro "Memorias de un soldado desconocido" será llevado al cine

C6 l Cine —El Comercio —domingo 8 de febrero del 2015

He leído su biografía y no sé si el Perú esté listo para asimilarla cuando se convierta en película ambiciosa. Me asombro de que Lurgio Gavilán se haya sentido listo para contarla. Habrá quie-nes rechacen indignados su fa-se senderista, cuando, según su propio relato, se enroló en el radicalismo porque “fui tras de mi hermano”. Era 1983 y tenía 12 años. Al poco tiempo, estaba sumido en el pánico y la alerta permanente, pues los mandos terroristas no solo asesinaban a militares y ronderos, sino tam-bién a sus militantes si come-tían una falta tan humana como dormirse haciendo guardia. Una noche fue obligado, junto a cinco chicos, a ahorcar a una compañera que se enamoró de un policía. Al cabo de dos años, Lurgio albergaba sueños de de-serción, pero la violencia –y la suerte– decidieron por él.

Habrá quienes recelen de su pase al Ejército. Fue tras una emboscada. Lo cuenta con cier-ta frialdad, pues quiere compar-tir su historia sin poses ni desga-rros. Hoy es antropólogo y sabe lo útiles que son las historias de vida para sociedades que nece-sitan comprenderse antes de re-conciliarse: “Unos instantes más y habría muerto. Intenté gritar torpemente […] ¡Viva Gonza-lo! ¡Viva Lenin! ¡Viva Marx! […] Cuando volví en mí, el teniente me estaba hablando y me pedía guiar el camino de regreso a la base militar” (pág. 99).

El oficial que pudo rematarlo lo usó de guía para volver sano y salvo a su base. En medio del ho-rror, ese gesto de confianza es uno de los momentos más con-movedores. Los extremos emo-cionales se tocan. Pero Lurgio no subraya nada; solo nos cuenta cómo el teniente, a quien consi-deraba su padre, lo hizo asimi-larse a la vida del Ejército, lo hi-zo cabito y lo ayudó a terminar el colegio. También le tocó partici-par, como soldado, en operacio-nes atroces.

Y habrá quienes digan “esto es demasiado, no me lo creo” cuando lleguen a su conversión en fraile. Pero la clave es leer a Lurgio con el mismo despre-juicio con el cual él ha contado todo. Y confiar en él, porque en torno a su desfogue sin furia ni resentimiento, hubo religiosos

una historia de la guerra internaarChivo pErsonal

arChivo pErsonal

arChivo pErsonal

Vivió para contarlaLurgio Gavilán reveló, en “Memorias de un soldado desconocido”, su periplo de adolescente senderista, soldado y fraile franciscano. Basado en su libro, Luis Llosa hará una película con guion de Mario Vargas Llosa.

Fernando Vivas

escritor. Tras la publicación de "Memorias de un soldado desconocido" (iEp, 2012), lurgio paseó por varias ferias de libros.

soldado. En 1993, en una patrulla militar en viviana, ayacucho. lurgio ya era mayor de edad y poco después dejó el Ejército. En 1997, en santa rosa de ocopa, Junín, como fraile franciscano, hizo tareas de catequesis.

cabitos. En la base de huanta, con otro adoles-

cente. Miradas inocentes en medio de la guerra.

ralph zapaTa

y antropólogos que lo anima-ron a publicar. Uno de ellos, el difunto Carlos Iván Degrego-ri, escribió el prólogo y resume en una línea su odisea: “Des-pués de pasar por las tres insti-tuciones totales (SL, ejército e Iglesia) más connotadas de la historia del Perú, Lurgio es un hombre libre” (pág. 13).

no es un camaleónConversando con amigos que leyeron el libro, evocamos la figura de Zelig, el camaleón de Woody Allen. ¿Es Lurgio un personaje camaleónico porque adaptó diferentes identidades? Pienso que no. Lo que hay en él son fases acumulativas, expe-riencias que decantan una per-sonalidad capaz de tomar dis-tancia de todo lo que le tocó vivir para contarlo.

Lo llamé a México, donde vive con su mujer y su niña (tiene, además, un hijo mayor en el Pe-rú), pues prepara su tesis doctoral en la Universi-dad Iberoamericana.

¿Crees que la socie-dad peruana está pre-parada para tu historia? "Creo que no. El libro no lo empecé a escribir pen-sando en el público. Y ahora estoy sorprendido, me han llamado ex sol-dados que quieren con-tar su vida, me invitan a hablar ante jóvenes y ni-ños. Y me ha pasado, pero es uno entre 100, que un escritor llamó a la univer-sidad quejándose de que permitieran estudiar a un criminal de guerra. Cuan-do vino a México Alfredo Crespo (del Movadef), participé con preguntas y me llamó la atención que

PersonajesdanTE piaggioafpvíCTor idrogo

Luis Llosa Urquidi: Director y pro-ductor de cine y TV, fundador de Iguana Producciones. Dirigió varios largometrajes, en el Perú y en Ho-llywood. El último fue "La fiesta del chivo" (2006), basado en la nove-la homónima de su primo y cuñado Mario Vargas Llosa. Ha comprado los derechos del libro de Gavilán.

Mario Vargas Llosa: Varias obras de nuestro premio Nobel se han lleva-do al cine, sin su participación en la adaptación. Codirigió una versión de su novela "Pantaleón y las visi-tadoras" (1975) y ha escrito guio-nes para TV. “Tatuajes en la memo-ria” sería su primer guion basado en una historia ajena.

Daniel Lazo: El ganador de la pri-mera temporada de "La voz Perú", de origen ayacuchano, ha debuta-do en el cine en "La última noticia", filme de Alejandro Legaspi, aún por estrenarse. Luis Llosa dice que, aunque no está aún decidido, po-dría interpretar a Lurgio Gavilán en “Tatuajes en la memoria”.

Llamé a Luis Llosa para que me contara cómo iba el proyecto. "Es un libro muy interesante, pero todavía no hay una pelí-cula allí. Hemos trabajado con Mario [Vargas Llosa] la adap-tación y hemos terminado una primera versión. Hace unas se-manas fui a México, a hablar con Lurgio. Ha hecho anotacio-nes muy puntuales que nos ayu-dan a legitimar cómo hablaban los personajes".

Le pregunto a Lucho si man-tendrán las fases en la vida de Lurgio: "Nos estamos concen-trando en las dos primeras, la de fraile es una suerte de epílogo, es como una consecuencia de la guerra". ¿Cuándo rodarán? "Hacia junio. Vamos a intentar ir a Ayacucho, aunque razones de producción podrían llevar-nos a otro sitio. El año pasado, aprovechamos la Semana San-ta ayacuchana, y viajamos con

Mario a hacer trabajo de campo. Conversa-mos con mucha gente, recorrimos varios luga-res y surgieron cosas pa-ra la adaptación que no están en el libro".

Daniel Lazo, el ga-nador de la primera temporada de "La voz Perú", declaró días atrás que trabajaría en una próxima pelícu-la de Luis Llosa. No dio más detalles. Le pregun-to a Lucho si Daniel ha-

ría el papel de Lurgio: "Hemos hablado con él. Es una posibi-lidad. El punto de partida es la manera extraordinaria en que canta 'Adiós pueblo de Ayacu-cho'. Pero he hecho contactos en México que podrían deter-minar traer a otros actores".

Le hago a Lucho la misma pre-gunta que a Lurgio. ¿Estamos listos para esta historia? "Es un reto. Todos los que vivimos esa época hemos sido víctimas. ¡Có-mo no herir susceptibilidades! Pero Lurgio es una voz autoriza-da porque vivió la guerra". ¿Ya tienen título? "Sí, 'Tatuajes en la memoria', es una frase del libro".

Si la película se rueda en ju-nio, quizá la veamos estrenada a fines de año, sino en el 2016. El libro de Lurgio se reeditará en tiempos de trance político, y con él, se reavivará la polémica de qué tanto vale reabrir heridas. Vargas Llosa dedicó una colum-na a la historia que ahora adapta y dijo: "Es un libro que deberían leer todos esos jóvenes que toda-vía creen que la verdadera justi-cia está en la punta de un fusil" (“El País”, 16/12/2012).

Al ex senderista imberbe y por lo tanto inimputable, al ca-bito accidental, al fraile chan-cón, al académico maduro; la vida aún le guarda una sorpre-sa. Y él nos guarda otras que querrá contar.

insistía en el 'derecho del pueblo a conocer la ver-dad de la guerra'. Enton-ces, escribí un artícu-lo, hablé de masacres y atrocidades. No es posi-ble terminar en un abra-zo fraterno mientras los arquitectos de la violen-cia sigan vivos".

Luego de oírlo, le digo a Lurgio que no lo veo como un camaleón, pero sí con una gran ca-pacidad de adaptación: "Lo que pasa es que a tantos niños simple-mente nos tocó vivir la guerra interna. Nadie elige vivir esas cosas. Cuando estabas en SL y querías escapar-te, te mataban. Entré al Ejército porque me capturaron, era difí-cil salir". ¿En cambio, sí decidiste entrar al convento? "Comen-

zaban los tiempos de paz, me orientaron las monjitas".

Lurgio ha sido asediado por cineastas y documentalistas im-pactados por su historia. Fran-cisco Lombardi y su habitual guionista Giovanna Pollarolo hablaron con él; también el do-cumentalista Javier Corcuera y la reportera Mariana Sánchez Aizcorbe. Pero Luis Llosa se ha-bía adelantado y le compró los derechos. Le dijo que escribiría el guion con Mario Vargas Llosa, y que este quería conocerlo.

¿De qué hablaste con Vargas Llosa? "Fue muy ameno. Toma-mos un café, hablamos de Ayacu-cho y de Uchuraccay" [MVLL hizo un informe sobre la masacre de periodistas que allí aconteció]. Antes de despedirme, le digo que su vida dará un nuevo giro tras la película: "No lo sé. Cuan-do salió el libro, di muchas entre-vistas. Sigo siendo Lurgio y quie-ro estar al lado de mi familia".tatuaJes en la memoria

—"A tantos niños, simplemente, nos tocó vivir la guerra interna. Nadie elige vivir esas cosas".

@ siga la noticiaVea la entrevista a Lurgio Gavilán:www.elcomercio.pe/luces