Las Redes Socioculturales desde la Contextualización de los ...
Transcript of Las Redes Socioculturales desde la Contextualización de los ...
LAS REDES SOCIOCULTURALES DESDE LA CONTEXTUALIZACIÓN DE LOS
REFRANES EN EL REPARTO SUEÑO EN SANTIAGO DE CUBA.
Tesis final para Licenciado en estudios socioculturales.
Dra. María Luz Rodríguez Cosme.
MSc. EddysMayeta Ruiz.
Lic. Leyvis Quintero Serret.
La importancia de incorporar la riqueza cultural de los refranes a un contexto
determinado constituye sin duda un hecho social y cultural, que contribuye a la
formación del patrimonio intangible de la cultura de una nación. Ellos, como
parte de la tradición oral, son también el resultado de la acumulación y la
conservación de conocimientos transmitidos de padres a hijos y de sabios y
ancianos a la comunidad en su conjunto. La tradición oral es, al mismo tiempo,
el legado de los antepasados muertos a los descendientes vivos, así como el
saber que se produce constantemente.
Las tradiciones orales abarcan todos los aspectos de la vida: conocimiento de
la naturaleza, de los oficios, reglas que rigen la comunidad, religión, historia,
literatura, diversiones; en resumen, se puede considerar que son la cultura
misma en su más amplia acepción.
La oralidad como categoría sociocultural, aportación realizada en los estudios
por la Dra. María Luz Rodríguez Cosme ofrece potencialidades para su
tratamiento, entendida como “manifestación de intercambio comunicativo entre
los miembros de una comunidad de hablantes que dominen los mismos
códigos lingüísticos y culturales, lo que favorece el habla no solo coloquial sino
también el registro culto, el cual debe trabajarse en la comunidad para su
perfección”; lo cual, potenciará a largo plazo la competencia comunicativa.
(Cosme 2008:49)
Desde lo particular, la oralidad es vista a partir de sus manifestaciones orales:
refranes, adivinanzas, décimas, cuentos, leyendas, tradiciones, etc. como una
fuente enriquecedora de conocimiento. Es por eso que el refrán como
manifestación de la literatura oral comprende los más diversos campos del
pensamiento y la vida del hombre: tradición, destino, palabra, familia, trabajo,
educación, sentimientos humanos, sociedad, relaciones entre los hombres,
reflexiones sobre la vida y la muerte y se inserta oportunamente como un
elemento de la sabiduría de las naciones.
Los refranes, que responden a características especiales, a menudo son frases
cortas, sentenciosas y concretas que encierran en sí misma una enseñanza. El
refrán despierta la vivacidad del espíritu; en la antigüedad era un género tanto
para los más cultos como para los menos cultos, quienes los usaban a modo
de ahorrar palabras, contribuían así a una mejor educación de los individuos
ante la vida, todo esto como reflejo y enseñanza de las tradiciones de nuestros
antepasados. En ese mismo sentido se continúa manifestando en esta
comunidad del Reparto Sueño.
Por medio del refrán se expresa un sentimiento simbólico cuyo código funciona
entre personas de una misma cultura con similar imaginación y sistema de
valores. Estas resoluciones acerca de los refranes serán tratadas en cada uno
de los momentos de la investigación, porque está presente lo vivencial socio-
comunitario entre los jóvenes, lo cual crea nexos comunicativos que favorecen
el intercambio comunicativo y se produce una contextualización de los refranes
de forma tal, que el mensaje de uno sea entendido por todos.
Comienza así a conformarse un proceso de formación cultural donde
intervienen además los factores psicológicos, antropológicos de la
comunicación social donde se resumen tradiciones, costumbres e historias que
reflejan distintos momentos vivenciales de los jóvenes de la comunidad que se
estudia. Por consiguiente, resulta interesante retomar el uso de la oralidad, a
partir de los refranes como componente de la expresión oral en la población
joven de la comunidad objeto de estudio.
De manera que se contextualiza la oralidad como Categoría Sociocultural en la
atención a la competencia comunicativa en sus dimensiones sociolingüística y
discursiva. La oralidad posee un caudal de riquezas históricas, sociales,
familiares, culturales donde a través de los refranes, se reflejan costumbres,
historias, sentimientos comunes a los miembros de la comunidad y que han
sido transmitidas de forma oral y de generación en generación; pero con los
consiguientes cambios contextuales que ello conlleva.
Esta manifestación de la oralidad ha tenido su comportamiento particular en
zonas rurales y en zonas urbanas. Cada una, de acuerdo con su tipo de
población, ha sostenido o transformado estas formas de mensajes.
Indudablemente, las regiones del campo ponen de manifiesto mayor nivel de
conservación; situación que se corresponde con las características de sus
pobladores, que son más pausados en su andar cotidiano y, a la vez,
conservan con mayor durabilidad sus tradiciones.
En cambio, los pobladores de la ciudad, en específico la población más joven,
en correspondencia con su dinámica de vida, fusionan más rápido sus formas
de hablar con otras maneras de decir, que en ocasiones, tienen que ver con las
canciones, las películas o la última telenovela; todo lo cual da al traste con la
estabilidad del uso de los refranes. De este modo, puede expresarse que el
refranero se transforma, a tal punto que se advierte un nivel de desuso de ese
género en la comunicación oral.
Así pues, este aspecto de la literatura oral ha perdido el auge inicial, tanto por
unos como por otros y sobre todo en nuestros jóvenes. Apreciación que parte
después de aplicar la observación como método empírico de recogida de
datos, que permitió detectar que el uso de refranes entre las comunidades de
hablantes estudiadas no es suficiente.
De tal suerte, como experiencia de estos investigadores, se enfoca el trabajo
hacia una comunidad citadina específica de Santiago de Cuba; de este modo,
se logra ganar en objetividad, sobre todo, al tomar en consideración el contexto
donde se produce la comunicación y las diferentes situaciones comunicativas
en las cuales se desarrollan los sujetos sociales.
El fundamento teórico para la contextualización de los refranes se produce a
través de una relación entre transmisión, apropiación y cultura. La tradición oral
atraviesa un largo proceso sociocultural que tiene un momento de aprendizaje
y otro de utilización. Ello posibilita la asimilación de la cultura y que se transmita
de una generación a otra a través de la apropiación como categoría
psicológica, todo lo que contradice a los fundamentos de espontaneidad que
predominan en las tradiciones orales e historias narradas.
Al respecto Rodríguez Cosme en su investigación doctoral destaca “la
transmisión de la memoria histórica que trasciende de una época a otra, es
dinámica, porque se mueve, transforma y enriquece a través del tiempo”
(2008: 34). Por ello, resulta vital, realizar análisis que posibiliten entender la
evolución de nuestra cultura desde un enfoque filosófico.
La valoración realizada por la investigadora posibilita profundizar en cómo la
cultura se ha ido enriqueciendo a través de la apropiación de los elementos
nuevos a partir de los propios, lo cual produce una apropiación cultural que
también se ha manifestado en los jóvenes de la comunidad santiaguera de
Sueño, y que demuestra la contextualización de la tradición oral, incluyendo
también los refranes como manifestación de ella.
Si bien es obvio que esta apropiación se produce cuando los pueblos entran en
relaciones de intercambio, hay que destacar que contribuyen a una expresión
cultural en plena correspondencia con la sociedad y con todo un sistema de
signos o códigos, que son de dominio de un grupo cultural determinado:
Espacio social de donde emerge la cultura espiritual, se manifiestan y se
conservan las historias o tradiciones orales entre los jóvenes de la comunidad
santiaguera de Sueño.
Desde el enfoque psicológico, no debe olvidarse que cada joven posee su
propia individualidad, de ahí la necesidad de atender la diversidad en cuanto a
lo cognitivo y lingüístico que revela que hay jóvenes con una diversidad de
criterios en cuanto a gustos, formas de decir y comportamiento social.
Por eso, de acuerdo a su educación y su estilo de vida, donde influye la familia
y el entorno sociocultural, este joven santiaguero será capaz de asimilar y
apropiarse de la cultura en la medida que interactúe en diversos espacios
sociales y cree sus propios nexos interculturales que luego serán del dominio
de un grupo y permitirán la comunicación entre ellos.
Es por eso, que al hablar del uso de los refranes en esta comunidad se alude a
la parte espiritual de los jóvenes que allí habitan y conforman una comunidad
de habla, donde se contextualiza una parte de las tradiciones orales que en un
tiempo fueron parte viva de nuestros antepasados pero son evidentes las
transformaciones porque la lengua como fenómeno social no es estática, sino
que evoluciona y cambia con el desarrollo de la humanidad.
Los refranes han permitido que se reciba un conjunto de conocimientos para
que el hombre se sienta más identificado con la zona en que vive, y al mismo
tiempo le enseñan a reconocer las características que lo tipifican y lo
diferencian con respecto a otras comunidades de la provincia.
Desde esta perspectiva se concibe un trabajo que a partir de la relación cultura-
sociedad- lengua, fomente la atención a la diversidad comunitaria del joven
santiaguero y lo haga respetar y amar las características que posee en cuanto
a costumbres, modo de vestir, comportamiento, creencias y otras
manifestaciones culturales.
Por otro lado, favorece la mirada hacia una identidad que se debe desarrollar,
como elemento esencial en la formación de la personalidad de los jóvenes
santiagueros, en su intercambio con el refranero cubano para su uso en el
habla cotidiano. No por imposición sino haciéndole saber que ellos son el
resultado de un proceso de construcción social que surge espontáneamente a
partir de las relaciones sociales, porque los criterios de identificación se
convierten en diferencias sociales y culturales a través de las interpretaciones
que hace cada persona de ellas.
En la identidad, el pasado está implícito en las costumbres, tradiciones,
valores, que conforman la memoria colectiva pero el presente de los jóvenes de
la comunidad de Sueño se muestra en los modos de actuar, de pensar con
respecto a todo lo que le rodea y que luego pasan a conformarse en rasgos
distintivos que los identifican y que los singularizan respecto a otros jóvenes.
En este proceso están presentes las categorías sociológicas orden y acción,
pues el joven en sociedad debe asumir reglas, normas, conductas, a partir de
lo reglamentado estatalmente, con las cuales acciona para lograr la
comunicación con su semejantes.
Al mismo tiempo, desde que comienza a desarrollar su pensamiento y
lenguaje, se inicia un proceso de adaptación, adquisición, transmisión de
cultura como ser social, que deviene del desarrollo socio histórico; categorías
sociológicas que se analizan junto a la socialización del hombre en la sociedad.
Por otro lado, la ciencia antropológica en sus estudios, ha demostrado que el
uso de los refranes como aspecto oral posibilita realizar reconstrucciones
históricas. Según Vansina, J (1885) la influencia de las narraciones de
historias, mensajes, relatos, que se transmiten de forma oral ha producido un
hecho endocultural, entendido antropológicamente como un aspecto que forma
parte interior de la cultura y que es asimilada por el sujeto en el proceso de
conocimiento y retroalimentación, lo que favorece el establecimiento de
saberes y conductas.
Como todo fenómeno cultural que involucra personas, se admite que la
población joven de la comunidad santiaguera, en su proceso de socialización
producen igualmente un conjunto de redes culturales para su intercambio que
establece también sus conductas y rasgos característicos.
De manera que se corrobora, que los análisis de la lengua y el habla en
relación con el hombre y la sociedad, han cobrado nuevas connotaciones a
partir de la antropología, la lingüística o la etnolingüística, la cual valora que
existen estilos del habla, habla situacional o de la comunidad, reglas del habla,
que potencian la competencia comunicativa. Hymes, D, (1986).
Malinowski (1970), pionero de estos enfoques, apuntó que el lenguaje no es
sólo medio de comunicación, sino que se encuentra en relación con la vida de
las personas, sus formas de habla, las cuales reflejan sus costumbres
espirituales y actividades comunitarias como forma de manifestar la cultura.
Los autores de esta investigación han visto en estas variantes de expresión
cultural, que necesariamente hay que salvar algunas formas tradicionales que
pudieran desaparecer como consecuencia de la poca frecuencia con que se
usan, este es el caso de los refranes, que han entrado en un estado de poco
uso por parte de la mayoría de las personas y específicamente de la población
joven santiaguera del Reparto Sueño.
Respecto a este particular, los antropólogos, dan una mirada desde la relación
lengua, cultura, hombre y género; en tanto que los sociólogos valoran las
potencialidades de la oralidad en su relación con la familia, comunidad e
instituciones culturales, lo que influye positivamente en la formación de la
personalidad, porque es aquí donde confluyen todo un conjunto de aspectos
socioculturales, que unido a sus condiciones sociológicas y antropológicas le
permiten participar de una tradición, un cuento, un refrán o cualesquier de las
demás formas de la literatura oral y ser capaces de entenderla.
No obstante, la creación de nexos interculturales que funcionen para esa
comunidad de habla posibilita la salvaguarda de ese aspecto de la cultura,
para que las generaciones nuevas la conozcan y que sobre todas las cosas
conserve ese legado de nuestras generaciones ya pasadas. No es posible
olvidar, que durante mucho tiempo la oralidad fue el único sistema de expresión
de hombres y mujeres utilizada para transmitir conocimientos, saberes y
tradiciones.
En América y el Caribe, la influencia ha estado marcada por un contexto
favorecedor de cultura, al coincidir puntos comunes en la historia de los
pueblos, gracias a la mezcolanza de razas que surgieron como resultado del
proceso de conquista del Nuevo Mundo y posibilitó un rico y matizado acervo
cultural si a refranes, frases o sentencias se refiere.
Estos mismos elementos se manifestaron también en la cultura santiaguera
pues no se debe olvidar que Santiago de Cuba, fue plaza de trata negrera y
aunque esto constituye un legado irrepetible, no ocurrió lo mismo con los
refranes que quedaron en la cultura santiaguera gracias a ese acontecimiento
de la historia de este archipiélago cubano.
La vida de los refranes ha ido más allá, ha buscado quedar como reflejo y
enseñanza de la cultura de cada pueblo conforme a sus nexos interculturales y
lingüísticos que propicien la decodificación de dichos nexos, que
semánticamente tienen un significado funcional y práctico para sus miembros.
Estos refranes tienen diversos matices, muchos tienen un matiz religioso y
bíblico; otros fueron traducidos del yoruba, de La Regla de Osha, de loscongos
o paleros y sufrieron el paso del tiempo y se transculturaron al nuevo contexto
lingüístico, que como expresión del lenguaje oral fueron insertándose en la vida
social y espiritual del individuo en su relación con la comunidad diversa de
hablantes santiagueros.
Caracterización de la comunidad de Sueño
La provincia Santiago de Cuba está situada en la porción meridional central de
la región oriental de la Isla de Cuba, limita al sur con el mar Caribe, al norte con
la provincia de Holguín, al este con Guantánamo y al Oeste con la provincia de
Granma. Esta La provincia cuenta con 6344 Km2 de extensión y más de la
mitad del 72% de su territorio es montañoso.
La comunidad objeto de estudio está enclavada en la porción sureste de esta
provincia, se ubica en el Consejo Popular Sueño y pertenece a la
circunscripción 183 del Reparto Sueño. Consta con una población total de 676
habitantes, de ellos 417 son mujeres y esto representa el 61,7% y 259 son
hombres que representa el 38,3 %. Sesenta y tres niños son menores de 14
años (20 hembras y 43 varones) y ellos representan el 9.3% de esta población.
El resto, es decir, 197 personas tienen más de 60 años y comprenden el 28,9
%.
Un dato de gran interés es el hecho de que por esta comunidad atraviesa una
de las principales avenidas de esta ciudad y esto hace posible que las acciones
culturales se hagan extensivas también a otros transeúntes que se sientan
motivados a participar; y es que la Avenida de Céspedes constituye, en primer
lugar, una afluencia carnavalesca de populosa impresión.
El área no cuenta con Casa de cultura, pero posee instituciones culturales
como el foco cultural Sueño, el Consejo Provincial de las Artes Escénicas el
cual apoya a un incipiente proyecto sociocultural donde se recibe clase de
teatro y de otras manifestaciones culturales, el mismo tiene como nombre
Reparador de Sueños y se encuentra ubicada en la casa de abuelos
“Corazones contentos”.
En este sentido, de un universo de 416 se tomó una muestra de 127 personas
y se realizó una entrevista especializada a siete de ellos, distribuida entre
promotores culturales, creadores de un proyecto comunitario llamado
Reparadores de Sueño y al personal calificado de Artes escénicas; institución
cultural que se encuentra ubicada en esta misma comunidad.
La encuesta se dividió en tres grupos etarios: 43 jóvenes comprendidos en las
edades de 14 a 17 años; 55 de 18 a 25 años y 22 personas comprendidas
entre los 30 y 55 años de edad. Al analizar los resultados de forma general se
observa que 113 de los encuestados dicen conocer los refranes y sólo 7
respondieron negativamente. Los primeros se distribuyen en 36 del grupo 1; 55
del grupo 2 y 22 del grupo 3. Ellos representan el 94.16% del total, y los
segundos, es decir las siete personas pertenecen al grupo 1, representan el
16.3% con respecto a la muestra.
Al analizar el comportamiento del uso de los refranes entre los jóvenes
santiagueros, se confirma que 49 de los implicados ven buena la frecuencia en
el uso de los refranes y 71 refieren que los refranes se usan con poca
frecuencia. Los primeros representan el 40.83% y los segundos el 59.16%.
Al marcar los aspectos relacionados con los refranes, 95 señalaron que los
refranes expresan un mensaje educativo. Esto representa el 79.16% de la
muestra total y 25 no lo señalaron, significando el 20.83%. En el inciso que
refiere que los refranes desarrollan la capacidad intelectual; 94 de los
encuestados lo señalaron para un 78.33% y 26 no, para un 21.66%.
En el inciso sobre su contribución a la formación de la identidad cultural de los
pueblos; 104 responden de forma positiva y 16 negativamente. Los primeros
conforman el 86.66% y los segundos el 13.33%. En el último aspecto de esta
pregunta, que confirma que los refranes son elementos de la tradición oral; 93
de los encuestados se sumaron a esta verdad. Estos representan el 77.50% y
el 22.50 no lo hizo.Ellos representan 27 personas de la muestra total.
De forma general se observó que la mayoría de los encuestados en esta
pregunta, conoce que los refranes inciden positivamente en la formación
cultural de los miembros de una comunidad determinada y que se revelan los
elementos esenciales de los refranes. Desde su valor educativo, el desarrollo
de la capacidad intelectual y sobre todo que son parte de la tradición oral de los
pueblos.
En la entrevista dirigida a los especialistas de las instituciones culturales antes
mencionadas, se le interrogó respecto de la importancia que ellos le conceden
a la investigación. Todos coincidieron en el hecho de que los refranes en
Santiago de Cuba, y sobre todo entre la población joven se están usando con
poca frecuencia, que los estudios que pretenda salvar su uso serán
interesantes porque contribuyen a conservar una tradición que ha venido
transmitiéndose de generación en generación y que constituye, además una
parte de la cultura de los pueblos. Ellos representan el100 %.
En otra pregunta referida a la necesidad de insertar los refranes en las más
variadas acciones culturales que se programen en la comunidad escogida, de
modo que se fomenten los sentimientos de identidad regional a partir de la
oralidad, todos excepto uno asumieron la propuesta.
En adición señalaron que gracias a la transmisión de generación en
generación de las tradiciones orales, ha trascendido a nuestros días como
elementos identitarios y que como los refranes forman parte de la literatura oral
que nos llegó en gran medida por el componente africano, ellos pueden ser
considerados en todas las actividades según programa para aprovechar
también la carga educativa y moral que hay en la mayoría del refranero
popular.
Redes interculturales para la contextualización del uso de los refranes.
Los refranes pudieran considerarse como la primera y más sencilla
manifestación de arte popular en la cultura de los pueblos. Existen en casi
todos los idiomas y han existido en todos los tiempos y lugares. Ellos
constituyen pensamientos o sentencias de utilidad práctica, trozos o rasgos
popularizados de la historia, de la literatura, de las ciencias y delas artes.
Para Fernández Gayol:
El refrán es una verdadera huella del arte popular. Es la voz de la
experiencia, no de un hombre – por sabio que fuere – sino del
pueblo, de la humanidad del ayer y de hoy, proyectada en el cause
inmenso de la vida. En el caso del refranero español es riquísimo
en cantidad y calidad, manantial inagotable de sabiduría práctica de
ingenio y gracia: verdaderos momentos de filosofía vulgar cuyo
autor es el pueblo. ( 1978:24)
Así pues es el exponente más exacto y trascendente e intrascendente de la
filosofía popular, un vehículo de cultura y expresión dentro del contexto global
de la cultura de un país. Se trasmiten esencialmente de forma oral y por su
carga lingüística representan una idea corta, donde se concentra todo el
contenido semántico de un discurso o elemento importante de la comunicación
que se desee expresar, a través de una idea corta.
El refrán no siempre resulta moral, es una aguda sentencia popular que
expresa la sabiduría de la experiencia en forma figurada y pintoresca aunque
de tosco estilo; pero sus sentencias suelen ser ingeniosas y profundas, revela
sentido común, descripción y arte de vida con gran dosis de malicia picaresca,
que se traduce en formas chistosas, vulgares y en un metafórico lenguaje de
comparación figurada, por eso todo refrán -a diferencia de los proverbios y
adagios- exige cierto esfuerzo mental o análisis para la cabal comprensión de
su significado, desentrañando su más bien oculto sentido.
Ejemplos de estos refranes que no poseen una enseñanza moral según el
contexto en que se encuentren pueden ser:
En la Guerra y en el amor todo vale. // El que a hierro mata a hierro
muere.
Quien da primero, da dos veces. // Si te pegan en una mejilla, pon la
otra.
El que se hace de miel se lo comen las hormigas. // Has bien y no mires
a quien.
No por mucho madrugar amanece más temprano // Al que madruga dios
lo ayuda.
Es por eso, que para la comprensión de cada refrán es necesario analizar su
contextualización, pues cuando decimos en la Guerra y en el amor todo vale,
en una persona de sentimientos dañinos podemos observar cómo esta se
manifiesta negativamente a tal punto que podría perjudicar a cualquierindividuo
para lograr su objetivo. Lo contrario sucede con el refrán el que a hierro mata a
hierro muere, que nos comunica claramente que todo aquel que haga mal, mal
recibirá.
Por tanto, los refranes pueden ser utilizados desde diferentes puntos de vista
(morales o no morales), en dependencia de las creencias de cada cultural y de
la interpretación de cada individuo en correspondencia con su nivel cultural y el
contexto social donde se desarrolla.
De igual manera en nuestro país y en especial en Santiago de Cuba, son
considerados de gran valor pues constituyen una vía efectiva para que los
miembros de una comunidad determinada, conozcan variados aspectos de la
cultura de los pueblos que los usan.
Con ellos se registran sus vivencias, sus costumbres, su arquitectura, y resulta
interesante ver como diferentes culturas reflejan en ellos experiencias
similares. Sin embargo, en la mayoría de los refranes se puede encontrar un
sello identitario, pues ellos también contienen un elemento que aun cuando el
refrán sea de uso global se siente como nuestro, porque, además de ser
contextualizados, son transformados y hecho parte de la cultura nuestra.
Por lo tanto, estas expresiones epigramáticas de sabiduría popular ayudan a
revelar la identidad cultural de un pueblo. Por ejemplo, los refranes:
A buena hambre, no hay pan malo.
A cena de vino, desayuno de agua.
A falta de faisán, buenos son rábanos con pan.
Denotan presencia de rasgos característicos de la cultura alimenticia del
continente europeo como son el pan y el vino. Estos elementos nutritivos casi
siempre están presentes en las mesas europeas.
Otros del refranero europeo que debido a algunas voces, aspectos lingüísticos,
etc. nos hacen pensar que se trata de Europa son:
Amor loco, yo por vos y vos por otro. (España)
Amor de madre, que todo lo otro es arre. (España)
Sin pan ni vino, no hay amor fino. (España)
Almorzar sin beber, merendar sin comer. (España)
Sed de cazador y hambre de pescador. (España)
Soplar y sorber, no puede ser. (España)
Váyase lo comido por lo servido. (España)
Quien da hacha muy alto, le caerá astillas en los ojos. (Checoslovaco)
Sobre barriga desnuda un par de pistolas. (Búlgaro).
A perro malo, palo malo. (Búlgaro)
El malo siempre piensa en engaño. (España)
El silencio no se equivoca. (Francés)
La mala llaga sana y la mala fama mata. (España)
La paz hace el dinero, y el dinero, la guerra. (Francés)
Las cosas buenas cuestan menos que las malas. (Italia)
Muchos hay en la guerra y pocos en la pelea. (España)
Soldado viejo, idiota viejo. (Francés)
Cada hombre tiene su lado flaco. (Checoslovaco)
Cuando dios quiso castigar al hombre, inventó a los abogados. (Ruso)
Cuando una mujer hermosa ríe, la bolsa de alguien llora. (Italia).
Sin embargo, en los refranes latinoamericanos se encuentran elementos
lingüísticos-culturales que expresan la manera de decir del hombre
latinoamericano:
Tened paciencia que la muerte es un ratito. (Uruguay)
Caballo y al amigo no hay que apurarlos porque se cansan. (El
Salvador)
Amigo en la adversidad, amigo en la realidad. (México)
A gato viejo, ratón tierno. (México)
Rancho viejo, todo es gotera. (Uruguay
Rancho viejo no escapa a la gotera. (Uruguay)
Una barriga hambrienta no tiene oídos. (Argentina)
Da más vuelta que galleta dura en boca de viejo. (Uruguay)
Es más viejo que préstame un medio. (El Salvador)
Cuando el pobre va de culo, no hay barranca que lo ataje. (Colombia)
El que más tiene, más quiere. (El salvador).
A falta de pan, casabe (aborígenes)
Estos ejemplos muestran de una manera explícita la carga cultural que los
refranes guardan en sí mismos y el uso desde las diferentes normas
lingüísticas de las regiones, lo que permite comprender que ellos representan
una fuente de considerable valor que puede ser utilizada en el desarrollo de la
competencia lingüística y sociocultural de los miembros de una comunidad de
hablantes, en especial, la de los jóvenes de Sueño.
Los refranes, además de contribuir al desarrollo de la competencia sociocultural
y lingüística de los pueblos, pueden ser usados como elementos de base en la
labor educativa que persigue la sociedad en la formación sus hombres.
Si bien es cierto que la cultura santiaguera es fundamentalmente el resultado
de la mezcla de españoles, africanos e indocubanos; entonces hay que admitir
que eso mismo ha ocurrido con los refranes, es decir que ellos han sido el
resultado de conquistas, rebeliones, dominación por la metrópoli española,
trata negrera, exterminación de los aborígenes, guerras de liberación,
imposiciones culturales, etc.
Todo ello trajo consigo el nacimiento de un contexto sociolingüístico donde las
claves de contextualización, hicieron posible que cada miembro de la
comunidad de hablantes fuese capaz de entender el mensaje o enseñanza que
llevan los refranes, los cuales a su vez pasaron a formar parte de la cultura de
este pueblo.
Este mismo contexto posibilitó, además, la mezcla de refranes que provenían
de diferentes etnias culturales y que pasaron a formar parte de la literatura oral
en esta región del Caribe y se ha ido transmitiendo de generación en
generación y de épocas en épocas.
Ejemplos de ellos son los que nos legaron los diferentes grupos humanos que
emigraron para esta área geográfica: hispanos, africanos, chinos, gitanos y
otros que al entrar en contacto con la cultura de este pueblo, ejercieron sus
influencias en los aspectos socioculturales de esta provincia. Aunque en menor
grado algunos emigrantes de Haití, Jamaica, Puerto Rico, etc. también trajeron
sus costumbres, modo de decir y por supuesto sus refranes.
Después de varias revisiones bibliográficas los autores de esta investigación
constataron que tanto en Cuba, como en África, son los adultos los hablantes
que más usan los refranes. Asimismo, descubrieron que los temas de los
refranes abarcan la tradición, el destino, la familia, el trabajo, los sentimientos,
la sociedad y las creencias de los pueblos en su devenir histórico-cultural.
El refranero africano ofreció a la cultura santiaguera un gran número de
refranes que hoy forman parte del decir popular de los miembros de esta
ciudad, pues no se puede olvidar la influencia cultural que desde todos los
referentes socioculturales, antropológicos, y lingüísticos ofreció la cultura
africana al ocurrir la trata negrera para labores diversas dentro de esta isla en
especial en el oriente cubano.
Entre los más comunes, y que tal vez nunca se imaginó que fueran el
resultado de nuestros ancestros africanos pudieran citarse:
Árbol que nace torcido, jamás su tronco endereza.
El que a buen árbol se arrima, buena sombra lo cobija.
No por mucho madrugar, amanece más temprano.
No hay peor cuña que la del mismo palo.
No dejes camino por vereda.
Marineros somos y en la mar andamos.
Nunca van lejos los de adelante, si los de atrás corren bien.
Más vale malo conocido que bueno por conocer.
El hombre es el prójimo.
El cielo no se ara, al padre no se le acusa.
La mona aunque la vistan de seda, mona se queda.
La mentira puede correr un año, la verdad la alcanza en un día. (Nigeria)
El cielo no se ara, al padre no se le acusa.
Otros del refranero africano, menos conocidos por varias generaciones de
santiagueros de la comunidad de Sueño y por tanto no tan asimilados como
parte de la cultura santiaguera son:
El hombre es el prójimo.
Muchas palabras no llenan un cesto. (Yoruba)
El hombre puede equivocarse sobre su parte de alimento, no puede
equivocarse sobre su parte de palabra. (Malí)
El registro es amplísimo, tanto por su variedad formal como por su contenido.
Sus giros metafóricos enriquecen el discurso popular y su valor rebasa lo
inmediato, va más allá; trasciende en el tiempo y se establece en la cultura
porque se traslada de padre a hijo y así sucesivamente en la medida que los
hijos quieran mantenerlos vivos.
Ellos son fieles reflejo de la riqueza espiritual del pueblo que les da vida a
través de su uso en la comunicación diaria. Sin embargo, es interesante
señalar que mediante esta investigación, se ha constatado cómo los jóvenes de
la comunidad de Sueño sienten afinidad por algunos refranes que han
cambiado en su estructura morfosintáctica y semántica.
Gracias al cancionero cubano y otras variantes populares, los jóvenes han
creado otros refranes, con los cuales se identifican al contextualizarlos con su
manera de actuar y hablar. Pero van olvidando o dejando de usar aquellos
tradicionales.
Sin embargo, esos que de manera jocosa y burlesca tratan de parodiar la
situación económica actual de Cuba, los jóvenes de la muestra seleccionada,
los emplean, transfigurándolos y provocando cambios en sus aspectos
morfosintácticos y semánticos; aunque en algunos de ellos no hay aparente
transformación en su aspecto semántico y otros se han contextualizado.
Ejemplos de ellos son:
Camarón que se duerme se lo comen los turistas // Camarón que se
duerme se lo lleva la corriente.
No mires la carátula, escucha el CD// Las apariencias engañan.
La guara mató a Filiú. // Es mejor estar solo que mal acompañado.
No le busque la quinta rueda al coche. // No le busque la quinta pata al
gato.
Árbol que nace torcido, la ciencia te lo endereza.// Árbol que nace
torcido jamás su tronco endereza.
Dios le da pan al que no tiene diente. // Dios le da barba al que no tiene
quijada.
El pobre no tiene talla. // Al desnudo cualquier ropa le sirve.
Lo que te den, cógelo. // Si la vida te da limones, hazla limonada.
Hijo de gato caza ratón. // Hijo de maja sale pinto.
No hay agua caliente que no se enfríe. // No hay mal que dure cien años,
ni cuerpo que lo resista.
La prisa acompaña la desgracia. // Si tu mal tiene cura para que te
apuras.
Cuídate de las aguas mansas que de las bravas me cuido yo.
No moja pero empapa.
Gira que está fija.
Soldado brinda’o, muere reventa’o.
Tiene más suerte que un pollo deja’opa’ gallo.
Quiere llegar al último escalón sin pisar el primero.
No crea que porque la garzaes blanca es enfermera.
No se trata de llegar primero, sino saber llegar.
La vida no se coge por la cola.
No piense que porque el perro duerme bajo del carro es mecánico.
Son uña y mugre.
Son uña y carne.
Mente vacía oficina del diablo.
Hay más felicidad en dar que en recibir.
No crea que porque el sapo es verde es cirujano.
Muchos de estos refranes han cambiado su aspecto morfosintáctico y en algún
modo su carga semántica de forma total y/o parcial. Por ejemplo, el caso del
refranero africano: Árbol que nace torcido, jamás su tronco endereza; ha
dejado de ser un refrán pesimista para convertirse en un refrán de una fuerte
carga optimista al ser cambiado por el cubano: Árbol que nace torcido, la
ciencia te lo endereza.
De esta manera se evidencia el proceso de transculturación de este refrán
como muchos otros han sufrido y que en el proceso de interacción entre los
jóvenes de la comunidad objeto de estudio, han mudado su significado y su
intención comunicativa, al presentarse nuevos códigos interpretativos y
culturales que permiten el entendimiento entre ellos.
De modo que estos representan momentos para que el refranero no se
conserve al ser considerado voz de viejos o pasado de época, sin percatarse
que el refrán puede seguir cumpliendo la función comunicadora y de reflejo de
la cultura de una comunidad de hablantes con la inserción de ellos en acciones
culturales y de otro tipo que se diseñen en la comunidad.
Los jóvenes de Sueño tienen refranes propios y otros que han asumidos con
sus consiguientes cambios culturales e identitarios. Por ejemplo: cubanos
somos y en el camino andamos, camarón que se duerme se lo comen los
turistas, no mires la carátula, escucha el CD, etc. Este último puede
considerase como uno de los tantos que han surgido después de los años 1990
y que de algún modo parodia el ya conocido: las apariencias engañan.
De modo que un análisis de las redes sociales resulta conveniente para
comprender la influencia del todo en las partes y viceversa; es decir, el efecto
producido por la acción selectiva de los sujetosen la red; desde la estructura
hasta la relación y desde el comportamiento hasta la actitud.
En esta investigación se combinan redes completas, donde los lazos son las
relaciones específicas en la comunidad definida, con las redes personales
(visto en el sentido de los sujetos que aportan desde su expresión refranes o
ideas afines para los efectos de esta investigación.
Desde esta óptica, es oportuno definir lo que para estos investigadores
funciona como redes interculturales. En este sentido, se destaca que se trata
de la interculturalidad como fenómeno de la realidad que involucra el
comportamiento social participativo de los sujetos que intercambian ideas,
modos de decir, experiencias, gustos estéticos, etc. a partir de situaciones que
provocan un aporte, conexión o reflexión de las ideas que se producen entre
los co-participantes.
De este modo, se introduce una nueva definición referida a redes
interculturales la expresión de nexos semánticos, antropológicos, sociales y de
la cultura diversa que convergen en los intereses comunicativos de los
hablantes; todo esto en correspondencia con tres momentos en los cuales el
sujeto puede acceder a su aportación o expansión de ideas: intercambio
cultural, intercepción cultural y generalización cultural ( Mayeta, E, 2010:54)
(Ver figura).
Así, el intercambio cultural ocurre de manera espontánea. Va desde los
jóvenes de fina decencia hasta los de rasgos más marginales. Este intercambio
cultural tiene su manifestación en los más variados espacios donde confluyan
los jóvenes; es decir, una conga, una conferencia, una sala de espera en un
hotel u hospital, una fila para adquirir algún producto en un mercado o bodega,
etc. donde ellos interactúan o simplemente escuchan desde una posición
participante que indirectamente acceden al diálogo de los demás.
La intercepción cultural constituye la función impresiva de la comunicación; es
decir, qué impresión queda en el joven acerca de una conversación dada en su
interacción con los demás miembros de la comunidad. Tiene que ver mucho
con lo que se imita de lo que se ha escuchado, o de lo que le interesa tomar
como patrón. A través de canciones, palmadas, chistes, cuentos… el joven
expresa su punto de intercepción entre su manera de expresarse y lo que ha
tomado de otras.
En tanto que la generalización cultural refiere el modo en que el joven asume y
proyecta el intercambio cultural. Es decir, una vez que hace suyos
determinados patrones absorbidos, participa en la transculturación de esa
expresión, a partir de sus experiencias, que por demás, comienzan a
pertenecer a otros o a practicarse en otras personas o grupo de ellas, en
diferentes escenarios.
De manera que estos tres momentos que comprenden las redes interculturales
funcionan de forma tal que en su contextualización, los jóvenes, al asumir un
mismo código interpretativo, pueden entrar en contacto comunicacional con
otros miembros de la comunidad de hablantes, donde ocurre un proceso de
retroalimentación del todo con las partes y viceversa.
Figura1. Momentos que representan la interculturalidad en un contexto dado.
La figura declara precisamente los tres momentos que representan las redes
interculturales en su variedad de nexos, donde incluso hay grupos aislados que
al no dominar las redes de la totalidad, la comunicación no es posible.
Asimismo, se presenta todo un conjunto de redes interconectadas entre sí, que
indican cómo a partir de cualesquier de los espacios declarados en el
intercambio cultural, y de modo espontáneo los miembros de esta comunidad
de hablantes experimentan la función impresiva de la comunicación, para
luego asumir los códigos lingüísticos e interpretativos y comenzar a hacer
generalizaciones y a expandir la comunicación hacia todos los grupos que
interactúan en ese espacio sociocultural.
A partir de estas consideraciones sobre las redes interculturales y sus
momentos, los autores de este estudio, hicieron una selección de una lista de
refranes agrupados en diversas bandejas culturales. Entiéndanse, bandejas
culturales, como una categoría lexical destinada a favorecer una situación
comunicacional entre distintos miembros de un grupo de hablantes que
intercambian creencias, costumbres, rituales, estados de ánimo, tradiciones,
experiencias, etc. de forma espontánea. Asimismo, refiere la variedad de nodos
semánticos, antropológicos y socioculturales que se establecen entre ellos
para hacer posible el proceso comunicativo.
Así pues, se hizo la siguiente clasificación:
Refranes referidos a la religión.
Refranes que expresan conceptos de amistad.
Refranes que toman en cuenta la convivencia.
Refranes que brindan ciertas soluciones.
Refranes dirigidos a mujeres y hombres.
Refranes de tipos idénticos de conexión ante una temática determinada
como la edad.
Refranes referentes a la sabiduría.
Refranes sobre el dinero.
Refranes sobre experiencias de la vida.
Refranes de corte jocoso o burlesco.
Esta propuesta se realizó con la finalidad de que ellos sean asumidos en las
distintas actividades que se programen en la comunidad objeto de estudio, ya
sea en una institución educacional, la casa de los abuelos o cualesquier otras
que se desarrollen en la calle como propuesta del verano santiaguero que sea
de participación para jóvenes y adolescentes.
De esta manera se propicia que los jóvenes de la comunidad sientan la
necesidad de incorporar el refranero a su decir cotidiano por la riqueza cultural
que hay en cada uno de ellos. Se ofrece además una clasificación a partir de la
recopilación de los refranes en la zona, que ha sido denominada bandejas
culturales.
El refrán favorece el intercambio sociocultural entre ellos y de este modo
recuperar esa parte de la cultura intangible de los pueblos cuyo uso ya no es
tan frecuente entre los jóvenes de esta comunidad que se ha tomado como
muestra para desarrollar esta investigación.
1. Refranes que refieren la religión.
¡Fíate de la virgen y no corras...!
A la ira de dios no hay cosa fuerte.
A la mesa y a la misa, una sola vez se avisa.
Al que dios no le dio hijos, el diablo le da sobrinos.
Al que dios se lo dio, San Pedro se lo bendiga.
Al que madruga, dios lo ayuda.
Al que no tiene faena, el diablo se la da.
Andando bien con dios, los santos son inquilinos.
Ángel patudo, quiso volar y no pudo.
Antes está la obligación que la devoción.
Carne de cura, da calentura.
Con dios voy, mis obras dirán quién soy.
Cree en dios y no corras.
Cuando el diablo envejece se vuelve monje
2. Refranes que expresan conceptos de amistad.
A los amigos se les conoce en la desgracia.
A muertos y a idos, pocos amigos.
Al amigo con su vicio.
Al caballo y al amigo no hay que apurarlos porque se cansan.
Al tiempo del higo, no hay amigo.
Amigo en la adversidad, amigo en la realidad.
Amigo por amigo, el buen pan y el buen vino.
Clérigo, fraile y judío, no le tengas por amigo.
Con el amigo bueno hasta la sepultura.
Cuídate del amigo que fue antes enemigo.
El abrazo de un verdadero amigo no tiene precio.
El amigo es un hermano en tiempo de angustia.
El hombre se ha hecho para tener un amigo.
El mejor espejo es el ojo del amigo.
El peor testigo, el que fue tu amigo
3. Refranes que toman en cuenta la convivencia.
¿Quién es tu hermano? El vecino más cercano.
A tu hijo, buen nombre y oficio.
Al cuervo su hijo le parece un ruiseñor.
Al hijo querido, el buen regalo es el castigo.
Barre la nuera lo que ve la suegra.
Casa sin niño es casa sin nada.
Cierra tu puerta y alaba a tu vecino.
Consejo de padres, guárdelo el hijo con siete llaves.
Cuñada y suegra, ni de barro, buenas. Nuera, ni de barro ni de cera.
El cochino y el suegro, quiéralos muertos.
El hermano para el día malo.
El hijo de guabina no se ahoga en la cocina.
El que tiene tejado de vidrio no le tira piedras al vecino.
Entre padres y hermanos, no metas tus manos.
Harto es necio el que cría hijos y nieto.
4. Refranes que brindan ciertas soluciones.
A mal tiempo buena cara.
A cualquier dolencia, el remedio es la paciencia.
A riopasado, santo olvidado.
Cuando más oscuro está, más rápido amanecerá.
Ausencias causan olvidos.
Barco parado no gana flete.
Bien venga mal si viene solo.
Cada cosa a su tiempo
Cien años de guerra y no un día de batalla.
Con los años viene el seso.
Cuando hay arruga, no hay duda.
Charco pasado santo olvidado.
El que temprano se levantó, una cartera encontró, pero más temprano se
levantó el que la perdió.
El que temprano se moja, lugar tiene de secarse.
El tiempo aclara las cosas.
5. Refranes dirigidos a mujeres y hombres.
Dirigidos a mujeres.
A golpes se hacen los hombres y a empujones las mujeres.
A la mujer casada y casta, con el marido le basta.
Aunque el consejo de la mujer sea poco, no tomarlo es de loco.
Bien es tener la mujer preñada y no saber de quién.
Cuando jóvenes las mujeres son uvas, cuando viejas, pasas.
Cuando una mujer hermosa ríe, la bolsa de alguien llora.
Cuando una mujer no tiene respuesta se ha secado el mar.
Digan lo que digan, una mujer bella siempre tiene la razón.
El amor a los hombres le entra por los ojos, a las mujeres por los oídos.
El hombre fuego, la mujer estopa y si el viento sopla.
El hombre persigue a la mujer hasta que ella lo caza
El huevo por la yema y la mujer por fuera.
El que tiene mujer bella le pone tranca a la puerta.
El trabajo de la mujer es simple, pero nunca termina
En cojera de perro y en lágrimas de mujer, no hay que creer.
Dirigidos a los hombres.
Al buey por el cuerno y al hombre por el verbo.
Al hombre apurado le falta sabiduría.
Al hombre harto hasta la cereza lo amarga.
Cada hombre tiene su nombre.
Cada hombre tiene su lado flaco.
Como vive un hombre, así muere
Corazón alegre, hombre sano.
Cuando el ron va delante tumba al hombre.
De hombre que nunca ríe, nadie fíe.
Decir y hacer no es para todos los hombres.
Durmiendo todos los hombres son mansitos.
El día se consume por las sombras y el hombre, por la ira.
El hombre en defensa de su causa es un león.
El hombre es más frágil que un cristal y más rudo que una roca
El hombre es un animal de costumbres.
6.Refranes de tipos idénticos de conexión ante una temática determinada
como la edad.
A gato viejo, ratón tierno
A la res vieja, alíviale la reja.
A la vejez, viruelas.
Al músico viejo le queda el compás.
Amores nuevos no olvidan los viejos.
Atravesao como buey viejo en vaquería.
Buey viejo no pisa mata y si la pisa no la maltrata.
Canas, tarros y borracheras no vienen por vejez.
Como camina el cangrejo viejo, lo hace el nuevo.
Cotorra de cayo, mientras más vieja más caballo.
Cuando el tigre está viejo, come babosa.
Cuando no hay ancianos, el pueblo se echa a perder.
Da más vuelta que galleta dura en boca de viejo.
De cualquier yegua vieja sale tamaño alacrán.
De jefes y burros viejos, lo más lejos.
7. Refranes referentes a la sabiduría
A palabras necias, oídos sordos.
Aguja sabe lo que cose y el dedal lo empuja.
Al hombre apurado le falta sabiduría
Amar y saber, todo junto no puede ser.
Antes de hablar, un padre nuestro, rezar.
Aprende el que más respeta.
Aprende llorando y reinas ganando.
Aún el necio cuando calla, es contado por sabio.
Aunque tengas dientes, aprende a tragar.
Aunque tengas mujer aprende a cocinar.
Bachilleres en artes, burros en todas partes.
Bien es tener la mujer preñada y no saber de quién.
Cada maestro tiene su librito.
Cada uno sabe donde le aprieta el zapato.
Con un día de camino se recoge una casta de sabiduría
8. Refranes sobre el dinero
A la mala venta, mala cuenta.
A la pobreza, no hay vergüenza.
A los nietos de la negra, el dinero los blanquea.
A más oro, menos reposo.
A pobre no lo llaman para cosas buenas.
Al pobre soberbio, limosna de palo.
Al que tiene lleno el bolsillo, no le faltan amigos.
Al sabio no le iguala ningún tesoro.
A quien dan, no escoge.
A quien de ti se fíe, no lo engañes.
Bien me quieres, bien te quiero, no me toques el dinero.
Bienes de fortuna, mudables como la luna.
Casamiento de pobres, fábrica de limosneros.
Codicia mala, saco rompe.
Con las glorias se olvidan las memorias.
9. Refranes sobre cosas que pasan en la vida.
¡Vivir para ver!
A mal vivir, mal morir.
A rey muerto, rey puesto.
Al domador de leones no lo mata la papera.
Al lechero no lo mataron por echarle agua a la leche.
Al que le falta ventura, la vida le sobra.
Al que nace de miel, a dedazos se lo comen.
Bala que zumba no mata.
Bendita la muerte cuando viene después del buen vivir.
Bicho malo nunca muere.
Bien predica quien bien vive.
Cada cual siente su duelo y poco los ajenos.
Comer para vivir y no vivir para comer.
Como se vive, se muere.
Cuando el diablo no tiene qué hacer, con el rabo mata moscas.
10. Refranes de corte jocoso o burlesco.
Tienes más hambre que un piojo en una peluca
Tienes más hambre que una garrapata en un caballo de bicicleta
Estas más atrás que un cordal
Más vale morir en los tarros de una novilla que pateao por una vaca vieja.
Buey viejo no pisa mata y si la pisa no la maltrata.
Aguacate maduro peo seguro.
Más vale comer pollo entre dos, que aura uno solo.
Parientes y trastos viejos, pocos y lejos.
La mona aunque la vistan de seda, mona se queda.
Bachilleres en artes, burros en todas partes.
Lorito viejo no aprende a hablar.
El que nace pa' tamal, del cielo le caen las hojas.
El que nace pa´ medio, no llega al real.
Si el buey no nace, el negro jala la carreta.
Es justo reconocer, que se ha dejado tal y cual se recogieron los refranes, pues
no es posible obviar, la norma lingüística de la provincia Santiago que tiene sus
particularidades con respecto al resto del país.
Consideraciones finales.
El estudio del refranero cubano como parte de la oralidad en una comunidad de
Santiago de Cuba, favorece la búsqueda, el análisis, y la necesidad de
extensión cultural de una problemática sensible para el estudio de la identidad.
Haber dedicado atención a la contextualización del uso de refrán por los
jóvenes de la comunidad de Sueño, constituye un punto de partida para en
posteriores estudios profundizar sobre la base de lo sociocultural, con una
intención intercultural. Pues se trata de ir encontrando los puntos nodales del
comportamiento de ese tipo de oralidad, no solo en una comunidad, sino
gradualmente en toda la cuidad de Santiago de Cuba.
Agruparlo a partir de las bandejas socioculturales teniendo en cuenta sus
temas y motivos, resulta un aporte novedoso en aras de lograr un acercamiento
a las redes interculturales de las comunidades y los pueblos, demostrando así
que los refranes se contextualizan y no siempre desaparecen aunque
disminuya el uso dentro de la lengua oral.