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Las operaciones de Carga Nacional e Internacional y sus riesgos logísticos.
Estudio de caso - Empresa Movilizar Carga S.A.S
Álvaro José Salazar Leal 1
UNIVERSIDAD SANTO TOMÁS
FACULTAD DE NEGOCIOS INTERNACIONALES
TUNJA
2021
1 Artículo de reflexión sobre la práctica empresarial realizada en la empresa Movilizar Carga
Internacional S. A. S., como practicante en el cargo de “Analista de Riesgos” durante el periodo
correspondiente a: octubre de 2020 – febrero de 2021, para optar por el título universitario de
Profesional de Negocios Internacionales de la Universidad Santo Tomás.
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Resumen
En el comercio internacional, el proceso logístico en las operaciones de carga nacional e
internacional de mercancías debe abordarse desde una mirada estratégica corporativa hasta una
proyección global, debido a que estas resultan relevantes frente a la importación y exportación de
mercancías en la modalidad de transporte que asume una organización (Aérea, Marítima,
Terrestre o Multimodal).
De allí que el documento aborda las temáticas de: logística de carga de mercancías en el
contexto global e internacional; riesgos en el proceso de carga y transporte; y buenas prácticas.
Y se reconocen los diferentes tipos de riesgos que afrontan las modalidades de transporte, de
manera especial, la modalidad de transporte marítimo, desde los riesgos estratégicos;
operacionales; y financieros y comerciales.
En consecuencia, el objetivo de este trabajo consiste en Reflexionar los riesgos del
proceso logístico en las operaciones de carga nacional e internacional de mercancías, de allí que
a través de la revisión documental de literatura especializada en el área objeto de estudio y un
estudio de caso, como parte de una metodología cualitativa, resultado de la práctica profesional
en el cargo de analista de riesgos de la organización Movilizar Carga Internacional S. A. S., se
elabora el siguiente artículo.
Palabras Claves
Comercio Internacional, Análisis de riesgos, Proceso Logístico, Operaciones de carga
Nacional e Internacional
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Abstract
In international trade, the logistics process in national and international cargo operations
of goods must be approached from a corporate strategic view to a global projection, because
these are relevant to the import and export of goods in the mode of transport that an organization
assumes (Air, Maritime, Land or Multimodal).
Therefore, the document addresses the following topics: freight logistics in the global and
international context; risks in the loading and transportation process; and good practices. And it
recognizes the different types of risks faced by the different modes of transport, especially the
maritime transport mode, from strategic, operational, financial and commercial risks.
Consequently, the objective of this work is to reflect on the risks of the logistic process in
the operations of national and international cargo of goods, hence, through the documentary
review of specialized literature in the area under study and a case study, as part of a qualitative
methodology, as a result of the professional practice in the position of risk analyst of the
organization Movilizar Carga Internacional S. A. S., the following article is elaborated.
Keywords
International Trade, Risk Analysis, Logistics Process, National and International Cargo
Operations
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Introducción
En la actualidad, el mundo se encuentra cada vez más interconectado y globalizado,
caracterizándose por la libre circulación de la información, las personas, y los bienes. Esto ha
permitido que las sociedades puedan crecer y desarrollarse en sus diferentes ámbitos desde
aspectos sociales, económicos, comerciales y tecnológicos “Posibilitando el intercambio de
productos y la mejora de las condiciones de vida” (Quintero, Cortazar, y Ramírez, 2018, p. 21)
en sociedad.
En vista de ello, las empresas en Colombia, de manera especial las Pymes encuentran que
existe no solo una tendencia sino una necesidad hacia la generación de estrategias que propendan
por la internacionalización. La apertura de escenarios y rutas comerciales hacia nuevos mercados
extranjeros, surge por tanto, como una estrategia clave que aporta beneficios para el crecimiento
y desarrollo económico del territorio nacional.
En tal sentido, la internacionalización en el comercio internacional juega un papel
importante en los procesos de importación y exportación de un país. De allí que se mencione que
esta “ha evolucionado con el transcurrir de los años, fundamentalmente por cambios en la
estructura de redes de comercio global, y las facilidades de acceso a la información, así como por
la disponibilidad de recursos logísticos y financieros” (López, Moreno, y Vidal, 2018, p. 141).
Por ello, resulta necesario generar una reflexión, al partir de una mirada analítica en la
cual se contemplen las acciones y actividades relacionadas con el área de operaciones logísticas,
así como con los costos derivados del transporte de carga de mercancías y la competitividad de
las organizaciones del sector productivo.
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De allí, que los medios de transporte “formen parte fundamental en las operaciones de la
distribución física internacional”. Razón por la cual la cadena de suministros debe conformarse
por “exportadores, importadores, despachadores de aduana, transportistas, concesionarios,
empresas consolidadoras, courier, líneas aéreas y marítimas de carga” (López et al., 2018, p.
148) y demás colaboradores que resulten confiables, quienes puedan asumir y garantizar la
seguridad que conlleva una cadena logística segura.
Sin embargo, las empresas que se dedican al transporte de carga en Colombia han debido
afrontar problemáticas relacionadas a actividades delictivas como el narcotráfico, contrabando y
lavado de dinero. En tanto, ha resultado necesario, que las organizaciones asuman un
compromiso de responsabilidad en la verificación de los soportes y la capacidad financiera real
con la cual cuentan los clientes que requieren del servicio de carga internacional. Esto, con el
objeto de no incurrir en sanciones, multas o problemáticas legales que afecten a las empresas.
Como resultado, el presente artículo de reflexión responde a la revisión y análisis de 27
artículos, manuales, cartillas, informes y demás documentos de orden especializado resultado de
la consulta en bases de datos bibliográficas de carácter científico como Scielo, Redalyc, google
académico, repositorios de universidades y páginas web de organizaciones internacionales, entre
otros. De tal forma que se propició una reflexión sobre los componentes, métodos y etapas de los
procesos de orden logístico en la cadena de suministro que intervienen en la carga de mercancías
en el contexto nacional e internacional.
Entre otros aspectos, también se reconocen como parte del estudio de caso, las evidencias
y experiencias vivenciadas en la práctica profesional realizada como estudiante de la Universidad
Santo Tomás, quien se desempeñó en el cargo de “Analista de Riesgos” en la empresa Movilizar
Carga Internacional S. A. S.
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Por consiguiente, el presente documento se compone por cuatro secciones: en un primer
momento se dirige hacia el reconocimiento de la importancia del proceso logístico de carga en
las modalidades de transporte aéreo, marítimo, terrestre y multimodal; a lo cual le sigue
(posteriormente) un análisis de los tipos de riesgos a los cuales se enfrenta el sector productivo
durante el cumplimiento de los contratos estipulados por parte de la persona que solicita la
prestación del servicio de carga y la entidad encargada de asumir y prestar el servicio desde las
diferentes figuras que intervienen en la cadena de suministro; también se considera la
importancia de las buenas prácticas para prevenir los siniestros y reducir los riesgos motivo de la
incertidumbre, de manera especial, en la actualidad, en la cual el sistema global se ha debido
enfrentar a la pandemia producto del COVID-19, lo cual ha incidido y generado afectaciones que
deben ser consideradas, para finalmente exponer de manera general la situación abordada en el
respectivo estudio de caso. Para finalizar se sintetizan los principales resultados encontrados a
partir de la revisión bibliográfica y se exponen las conclusiones del artículo.
Logística de carga de mercancías en el contexto nacional e internacional
Es relevante determinar los procesos y condiciones necesarias para transportar y trasladar
mercancías desde un punto de origen hacia un punto de destino. Ante lo cual se reitera que “La
logística abarca más que el transporte” (Barbero, Fiadone, y Millán, 2020, p. 14), debido a que
debe contemplar las rutas de desplazamiento de un bien durante una ruta o trayectoria, su
almacenamiento, el tiempo que transcurre desde la recepción hasta la entrega, su organización,
los costes financieros alrededor de la cadena de suministro y la calidad del servicio prestado,
entre otros aspectos.
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De manera especial, debido a que existen diferentes modalidades de carga, que van desde
la vía aérea, marítima, terrestre y multimodal. Todas ellas parten de un contrato suscrito entre
una entidad u organización cuya actividad económica se dedica al transporte de mercancías y un
respectivo cliente (persona natural o jurídica). Es necesario señalar que el correcto desarrollo del
proceso logístico parte de los documentos y soportes que son suministrados como requisito
imprescindible para suscribir el contrato, los cuales deben haber sido verificados y autorizados
una vez la organización se encarga del análisis de riesgos. De allí que diligenciar correctamente
los formularios y demás soportes utilizados en este tipo de trámites resulta de relevancia.
Bien se sabe que cometer errores en la descripción de la mercancía, la declaración de
aduanas, la señalización de instrucciones en puerto de destino, entre otros, constituyen una serie
de riesgos para la organización, los cuales se traducen directamente en retrasos o perdidas
económicas, que inciden de manera negativa para la empresa u organización encargada de
prestar el servicio de carga, debido a que este tipo de falencias dan origen a una mala reputación
para la entidad, generan una mala relación con los clientes, y en ocasiones la ruptura de lazos y
por tanto la pérdida de clientes potenciales, así como de capital económico.
De allí que como parte de las operaciones logísticas, al establecer contratos entre las
partes que intervienen en el proceso de carga, se deberían fijar o establecer criterios claros frente
a los plazos de tiempo para la entrega de mercancías; la prevención de daños durante el
transporte de la misma; así como el asegurar que se sigan los procedimientos óptimos para la
carga y estiba en el medio de transporte a utilizar en una operación nacional o internacional,
independientemente de la vía de transporte que se utilice; el despacho aduanero para exportación
e importación; la descarga y recepción de mercancías.
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Logística en el Transporte Aéreo
Razón por la cual a continuación se presenta de manera general el cómo se percibe el
proceso logístico de carga en las diferentes modalidades de transporte. Al considerar que el tipo
de transporte es elegido dependiendo de la clase de mercancía y los costes que influyen en el
traslado de la misma desde un punto de origen hacia su punto de destino. Se da principal
importancia al transporte marítimo al ser el medio con el cual el investigador tuvo mayor
contacto durante su estadía y experiencia en la respectiva etapa de práctica profesional.
Desde una mirada centrada en las ventajas de utilizar el transporte aéreo, Parada (2017),
manifiesta que este resulta estratégico si se requiere aludir a la rapidez para transportar productos
perecederos; de gran valor; que no ocupan una gran cantidad volumen; y/o deben llegar a
mercados poco accesibles a través de otros medios. Sin embargo, se debe contemplar que la
selección de esta modalidad de carga es la que mayor costo implica con respecto al traslado de
mercancías en relación a su peso.
Por otra parte, en otros aspectos, como el embalaje y la adquisición de seguros, se pueden
minimizar no solo los gastos, sino también los riesgos a los cuales se enfrenta esta modalidad, al
ser la que menores riesgos conlleva alrededor de las demoras en la entrega, o frente al asumir
responsabilidades alrededor de robos o hurtos de bienes.
Diagama y Calderón (2018), reiteran la importancia de la verificación de la
documentación como una parte relevante dentro del proceso logístico. Debido a que es necesario
corroborar que la documentación disponible cumpla con los requisitos exigidos por la agencia de
aduanas, un ejemplo de ello es que en los procesos de importación de bienes, el Ministerio de
Comercio, Industria y Turismo (Mincomercio) debe comprobar la documentación para poder
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generar la aprobación y debida autorización para que se efectué el servicio de carga, debido a
que este puede ser denegado.
De igual forma en los terminales aéreos, se realizan controles con respecto a los perfiles
de ingreso de mercancías para determinar si la carga es o no objeto de inmovilización, estos se
realizan una vez la carga arriba al respectivo aeropuerto, y la agencia de aduana debe radicar ante
la DIAN los respectivos soportes de importación para poder trasladar la carga a una zona de
bodega y almacenaje, efectuar los pagos de derecho de aduana, gestionar la nacionalización (al
verificar si los bienes son objeto de aforo o no) y permitir que la mercancía “quedé a libre
disposición del importador” (Diagama y Calderón, 2018, p. 25)
Es necesario señalar que el sector aéreo resulta de importancia para la economía global,
debido a que permite fomentar la innovación, la competitividad económica y aumentar la
productividad. Con respecto a la cadena de valor global, esta se encuentra vinculada al desarrollo
de la industria aérea, debido a que “aunque el transporte aéreo corresponda a menos del 1% del
volumen de bienes comercializados globalmente, responde por más del 35% de valor global
comercializado” (Sánchez y Weikert, 2020, p. 10).
Ahora bien, en América Latina y el Caribe, este sector es realmente relevante debido a
sus aportes y contribuciones a la economía regional. “responde por la generación y soporte de
5,2 millones de puestos de trabajo; de dicho total; 715 mil son empleos directos” (Sánchez y
Weikert, 2020, p. 10)
También, los autores señalan que la pandemia producto del virus COVID-19 ha generado
serias afectaciones a la industria aérea en cuestión de economía y transporte de carga. Siendo
millonarias las pérdidas de capital que se han originado a nivel global durante 2020. Situación
que ha repercutido en la estabilidad de las empresas y de sus colaboradores, debido a que “En
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América Latina y el Caribe. Solo en esta región, la caída ha puesto en peligro más de cinco
millones de puestos de trabajo (directos e indirectos)” (Sánchez y Weikert, 2020, p. 22).
Con respecto al transporte de cargas aéreas “Un análisis geográficamente desagregado
del volumen de carga transportado por vías aéreas permite concluir que Europa y América Latina
y el Caribe, habían sido las regiones con la reducción más expresiva en el CTK en marzo de
2020 (ambas con -18,5% en comparación al mismo mes de 2019, frente a una caída promedio
global de 15,2%)” (Sánchez y Weikert, 2020, p. 29). De allí que se afirme que América Latina y
el Caribe son regiones que han sido severamente impactadas por la situación de pandemia y que
esto ha afectado y reducido la capacidad de transporte de carga. “En Julio, el indicador (ACTK)
para esta región fue un 49,2% inferior a los niveles de 2019” (Sánchez y Weikert, 2020, p. 30).
Por tanto, la disminución en la capacidad del transporte de carga a través de esta
modalidad, producto de la pandemia, ha resultado un factor relevante que debe considerarse
desde una posición estratégica alrededor de la logística nacional e internacional. Debido a que las
pérdidas económicas en el contexto latinoamericano han incidido de manera negativa en la
estabilidad y la capacidad de soportarse de las organizaciones que ofrecen el servicio de carga a
través de la modalidad de transporte aéreo.
Aún en la actualidad se enfrentan a los riesgos y la incertidumbre producto de la actual
situación global sobre las formas de enfrentar el contagio del virus, garantizar las buenas
prácticas, las medidas de bioseguridad, y demás aspectos que requieren de que las empresas
generen inversiones para modificar su infraestructura, reinventar sus sistemas logísticos de
acuerdo a las actuales medidas sanitarias y aquellos aspectos que surgen a medida que se
reconoce la actuación del virus covid-19. Esto mientras al mismo tiempo enfrentan situaciones
en las cuales las capacidades laborales de sus colaboradores pueden disminuir, debido a que
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estos también se enfrentan a la incertidumbre sobre su propia permanencia en su respectivo
puesto de trabajo.
Logística en el Transporte Terrestre
Parada (2017), manifiesta que el transporte terrestre, o aquel que se realiza por carretera
es el más rápido y económico de realizar, al permitir la gestión de la entrega de mercancías
“puerta a puerta”.
También, Silvera y Mendoza (2017), señalan que en Colombia el transporte terrestre es el
más utilizado de la logística nacional para el transporte de carga. Sin embargo, es necesario
según lo expresa Deluque (2018), reconocer que esta es la modalidad de transporte más propensa
a robos o hurtos. Razón por la cual para Bohoyo (2017), resulta necesario contar con
colaboradores que se encuentren capacitados y puedan determinar una toma de decisiones
asertiva para evitar y prevenir daños, pérdida de la carga y de capital económico.
En esta modalidad de transporte resulta importante generar valor y propender por el
desarrollo de una adecuada economía de escala, de allí que el Ministerio de Transporte (2020),
como entidad encargada de la regulación y cumplimiento de la normatividad en el territorio
nacional reconozca la importancia de este tipo de transporte y sus aportes al crecimiento de este
sector de la industria nacional.
Silvera y Mendoza (2017), manifiestan que a nivel nacional el gremio de transportes
puede unificarse cuando considera que existen situaciones que afectan sus derechos o que
pueden modificarse a su favor, y esto puede provocar que se paralicé la movilización de cargas.
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Un riesgo que afecta a las organizaciones que prestan el servicio desde la logística de la
cadena de suministro. Lo cual conlleva a que al ser esta la modalidad de transporte de carga más
utilizada en el contexto nacional, también debe contar con una serie de medidas dirigidas hacia la
prevención del riesgo, un ejemplo de esto, se relaciona con el estipular criterios para evitar los
robos o hurtos y los daños a mercancía durante el proceso de transporte, aspectos que facilitan el
garantizar una correcta prestación del servicio de carga desde una posición sustentada en el
reconocimiento de los diferentes factores que puedan presentar una afectación negativa.
Logística en el Transporte Multimodal
De acuerdo con Parada (2017), en el transporte multimodal se combina el uso de
diferentes medios de transporte. Ahora bien, este tipo de logística es realizada por Operadores de
Transporte Multimodal (OTM), organizaciones o compañías navieras especializadas, quienes
asumen la responsabilidad y compromiso con el cumplimiento de pactos y acuerdos trazados
alrededor de un contrato.
Entre sus ventajas se encuentra la reducción del tiempo en la manipulación de
operaciones de carga y descarga; disminución de costes y tiempos de transporte; minimización
de inspecciones y controles aduaneros; simplificación de la documentación; gestión de
seguimiento de rutas: prevención y reducción de los siniestros alrededor de los hurtos y daños.
Es necesario señalar que la modalidad de transporte multimodal realmente es una
modalidad que resulta frecuente debido a que, en ocasiones, la prestación del servicio de carga,
contempla el uso de dos o más modalidades de transporte en el momento de recepcionar la
mercancía en un punto de origen, y su respectiva entrega en un punto de destino.
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Logística en el Transporte Marítimo
Es necesario señalar que el transporte marítimo, es decir aquel que se realiza a través del
mar, suele ser el medio de transporte más utilizado y uno de los preferidos en el comercio
internacional. Quintero et al. (2018), señalan que “el transporte marítimo abarca cerca del 80%
de los intercambios comerciales, siendo el más representativo de las relaciones económicas entre
países” (p. 22), debido a su alta capacidad de carga y su coste menor en la logística frente a otros
tipos de transporte (en esta modalidad los fletes se fijan de acuerdo al peso o el volumen de
mercancía, seleccionando el que sea superior).
Sánchez y Weikert (2020), afirman que “la logística marítima es la columna vertebral del
comercio, dado que es el modo por el que se moviliza alrededor del 84% del volumen
comercializado mundialmente y casi el 70% del valor” (p. 14).
La United Nations Conference on Trade of Development (2020); United Nations
Conference on Trade of Development (2019); y United Nations Conference on Trade of
Development (2018); reitera que esta modalidad de transporte resulta clave para el comercio
internacional marítimo debido al alto porcentaje de mercancías que se transportan por esta vía.
De allí que a continuación se presentan las principales rutas que se emplean en el transporte
marítimo.
Tabla 1.
Rutas Asia - Europa, transpacífica y transatlántica
Asía 64%
Europa 16%
América del Norte 8%
Países en desarrollo de América 6%
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África 4%
Oceanía 2%
Fuente: (United Nations Conference on Trade of Development, 2018, pág. 6)
Razón por la cual entre las principales rutas comerciales que fomentan la economía desde
el transporte marítimo se destaca el papel de China, la Unión Europea y Estados Unidos. Por otra
parte, es necesario señalar que entre las principales desventajas que se relacionan con el
transporte marítimo, Quintero et al. (2018), manifiestan que se encuentra la lentitud en el
desplazamiento a la hora de establecer el proceso de transporte de la mercancía, lo cual se
relaciona directamente con los tiempos de entrega. A su vez, este tipo de transporte encuentra
una baja penetración debido a que necesita del transporte terrestre para las operaciones
relacionadas con la recepción y entrega de la mercancía hasta su punto de destino.
De igual forma, se relaciona con el condicionamiento que existe a la disponibilidad de
puertos, o almacenes y la preparación de los buques, la cual tarda tiempo en establecer las
condiciones y requisitos necesarios para partir hacia el mar, de tal forma que la frecuencia de los
viajes es menor.
Con respecto a América Latina y el Caribe, es necesario señalar “que la región moviliza
más del 17% de las exportaciones más las importaciones mundiales, pero su capacidad de
transporte propia no alcanza el 2% total de la industria” (Sánchez y Weikert, 2020, p. 15). Esto
principalmente debido a que en la región han disminuido las empresas navieras propias de capital
privado o estatal en los últimos 20 – 30 años.
Ahora bien, las afectaciones producto de la pandemia, han significado para la industria
marítima en el transporte de cargas, un retroceso de más de tres años. Para América Latina, las
afectaciones principales se evidenciaron en la importación de bienes. Las cuales se encontraron
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en un menor índice que las exportaciones de la región durante los periodos que van de febrero a
junio de 2020. Y Solo empezaron a recuperarse hasta Julio de 2020.
Sin embargo, los gastos en torno a los fletes marítimos en el mes de Junio se encontraron
“en niveles más altos que los de 2019, y en algunos casos, con señales de alza” (Sánchez y
Weikert, 2020, p. 46).
La Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN) (2020), menciona que los
gastos de transporte deben incluir una valoración de diversas variables, en las cuales se generan
análisis sobre “la naturaleza de la carga, su cantidad, valor, relación peso/medida, distancia a
recorrer, etc.” (p. 6), en los cuales se incurre para gestionar el traslado de mercancías hacia su
punto de destino.
Elemento que se encuentra ligado al reconocimiento de los Incoterms, como reglas
internacionales, regidas por la cámara de comercio internacional, para valorar “el alcance del
precio; en qué momento y dónde se produce la transferencia de riesgos sobre la mercancía del
vendedor hacia el comprador; el lugar de entrega de la mercancía; quien contrata y paga el
transporte y el seguro; qué documentos tramita cada parte y su costo, entre otros” (DIAN, 2020,
p. 6).
En tal sentido la Cámara de Comercio de Bogotá (2019), menciona la importancia de los
incoterms en los procesos de importación, debido a que estos definen las obligaciones, costos y
riesgos a asumir por las partes involucradas en el proceso logístico de carga de mercancías o
bienes.
Razón por la cual, de acuerdo al Consejo Nacional de Competitividad (2019), los
resultados de la Encuesta nacional logística (ENL) para 2018 revelaron que son varios los retos
que el país debe asumir para mejorar su eficiencia en materia de calidad de los procesos
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logísticos al asegurar que los ingresos de un producto y los costos estimados dirigidos hacia el
costo logístico superan los promedios de otros países pertenecientes a la OCDE.
Se reitera la importancia del transporte de carga de mercancías a través de la modalidad
marítima, al ser el más importante en el contexto internacional, sin embargo, desde una posición
sustentada en el riesgo, es una modalidad desde la cual el plano de las relaciones internacionales
y los tiempos de entrega deben participar de una coordinación logística asertiva, para evitar que
la lentitud en el proceso de transporte y preparación de los buques sean observadas como
desventajas, debido a que a cambio de estos aspectos, se genera una ventaja alrededor de la
disminución de costos y gastos relacionados con la recepción, nacionalización y entrega de
mercancías, esto, siempre y cuando los soportes y reglamentaciones requeridas por la DIAN se
encuentren en orden.
Riesgos en el proceso de carga nacional e internacional de mercancías
En la logística nacional e internacional de carga, se hace necesario identificar riesgos con
el objetivo de evitar siniestros, reducir gastos y favorecer la asertividad de los procesos alrededor
del transporte de mercancías.
En tal sentido las organizaciones optan por adquirir un seguro. Lo cual brinda la
posibilidad a los importadores y/o exportadores de poder cubrir las pérdidas que se contemplen
en la póliza y disminuir los riesgos por pérdidas, daños o robos.
Los riesgos suelen suponer una amplia y diversa cantidad de definiciones, al aproximarse
según la RAE (Real Academia Española): hacia la contingencia o proximidad de un daño; lo cual
surge desde el reconocimiento de la incertidumbre, y los factores internos y externos que pueden
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afectar el proceso logístico de carga. Perspectiva de la cual se asume la necesidad de identificar
aspectos que puedan derivar en una amenaza o situación de vulnerabilidad para minimizar los
efectos negativos y delimitar oportunidades de optimización que resulten benéficas para alcanzar
los objetivos fijados por una organización.
La toma de medidas oportuna, contribuye a la evaluación sobre tratamiento de riesgos, la
planificación y ejecución de alternativas y el control periódico de las mismas para asegurar los
resultados positivos. Definiendo el tipo de acciones que contribuyen a mejorar el accionar de la
compañía y descartando las ideas o aspectos que no funcionen. A continuación, se presenta un
cuadro comparativo sobre los diferentes tipos de riesgos, según las concepciones establecidas por
Parada (2017), a los cuales se enfrentan las organizaciones y empresas en los procesos logísticos
de carga de mercancías:
Tabla 2.
Tipos de riesgos en el proceso logístico de carga de mercancías
Riesgos del entorno: No se relacionan con la actividad de la organización pero
pueden afectarla.
Riesgos estratégicos: Se relacionan con el cumplimiento de los objetivos de la
organización en un plazo determinado.
Riesgos
operacionales:
De naturaleza o
ámbito geográfico
Se derivan de la acción de agentes naturales externos (Lluvia,
granizo; terremotos).
En estos resulta importante reconocer la zona geográfica; prever
los accidentes geográficos alrededor de las rutas, tener en cuenta
las distancias de recorrido de un trayecto, y la disponibilidad de medios, como lo son los puertos, terminales o aeropuertos.
Tecnológicos Fallos asociados a la energía, la línea de producción, entre otros.
De transporte Relacionados con accidentes, averías, entre otros.
Personales Se derivan de los daños causados a un cliente, un colaborador
en un accidente laboral, entre otros.
De
responsabilidad
Asociados a las afectaciones de terceros a causa de la actividad
de la organización; o aquellos que implican daños
medioambientales, entre otros.
Riesgos políticos
Asociados a la inestabilidad política de los territorios por los
cuales transita una mercancía. (Guerras; terrorismo; Huelgas)
Este tipo de riesgo debe ser analizado por la organización
encargada de transportar mercancía a través de territorios en los
cuales se presenten este tipo de situaciones, debido a que pueden
generarse daños, extravíos, y retrasos en las entregas.
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Con el objetivo de identificar si se debe desestimar una
transacción comercial, fijar una ruta diferente o utilizar un
medio de transporte diferente al que previo en un primer
momento.
Dentro de estos riesgos también se debe pensar en los riesgos de
carácter legal o normativo y tener presente los criterios
contemplados en las leyes que aplican para la exportación o
importación de mercancías.
Entre esto se suele contemplar el convenio CMR; CIM; el convenio de Ginebra; las reglas de York y Amberes; El
protocolo de Bruselas de 1968; las reglas de la haya de 1924; la
convención de Hamburgo de 1978. De igual forma deben
considerarse las normativas Incoterms más actuales. Entre otras.
Riesgos financieros y comerciales
Endeudamiento de la organización; mala gestión de los créditos
y la administración financiera; ruptura de relaciones con clientes
o proveedores.
Otros Riesgos
Derivados de la
elección y medio
del transporte
Relativos a términos de capacidad, costes y rapidez
Propios del medio
de transporte
utilizado
En el caso del transporte marítimo:
Naufragio
Varada o embarrancada
Abordaje
Contribución a la avería gruesa
Cambio de ruta durante el viaje
Asociados a la idoneidad del buque
Interferencia del agua salada
Propios del mar
En el caso del transporte aéreo:
Caída de la aeronave
Asociados a la idoneidad de la nave
En el caso del transporte terrestre:
Vuelcos
Accidentes de circulación
Movimientos de mercancía por frenazos
Golpes, choques, roces con puentes.
Propios de la
naturaleza de la
mercancía
transportada
Incendio por mercancía inflamable
Explosión a causa de mercancía inflamable
Fuga radioactiva
Oxidación
Herrumbre
Derrames
Fermentación
Generación de moho y vaho
Relacionados con
interferencia
humana
Pueden ser intencionados en el caso de: Robos, asaltos,
piratería, entre otros.
No intencionados: accidente durante la carga, descarga o la
manipulación defectuosa.
Fuente: Elaboración propia a partir de los postulados de (Parada, 2017).
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Resulta necesario reconocer los tipos de riesgos a los cuales se enfrenta una organización,
de acuerdo a lo expuesto por Parada (2017), con el objetivo de establecer estrategias, acciones y
medidas preventivas, lo cual resulta pertinente, desde una mirada de mitigación de riesgos, para
fomentar el crecimiento y la sostenibilidad de la organización encargada de prestar este servicio
en el país.
Razón por la cual para Molina, Morelos, y Marrugo (2017), resulta imprescindible que
desde la logística se reconozcan los riesgos y la incertidumbre existentes alrededor de los
procesos de comercialización internacional de mercancías. Esto con el fin de poder enfrentar y
proponer soluciones y alternativas que posibiliten el cumplir y concretar los negocios, resultado
del contrato de transporte de mercancía en cualquiera de sus modalidades.
Existen diversas formas de categorizar los tipos de riesgo en la cadena de suministro, de
manera especial, señalan dos clasificaciones, los riesgos externos a la empresa pero internos a la
cadena y los riesgos externos a la cadena, los cuales señala como riesgos de tipo operacional o
riesgos disruptivos. Los primeros hacen referencia a la incertidumbre con respecto a: “la
demanda del consumidor; inherente a las operaciones, como la incertidumbre en la demanda del
consumir; en el suministro; costos… Los riesgos disruptivos son interrupciones mayores
causadas por desastres naturales u ocasionados por el hombre o crisis económicas” (Osorio,
Manotas, y Rivera, 2017, p. 136).
Por tanto, las organizaciones deben elaborar mapas de riesgos, en los cuales se expongan
las eventualidades más frecuentes que afecten la logística de la organización e incidan de forma
negativa; en los cuales se clasifiquen los riesgos de acuerdo a su clase, categoría o impacto.
Mientras a su vez se propenda por el diseño de modelos de gestión de riesgos en los cuales se
evalúen las diferentes vías de actuación que puede seguir una empresa u organización.
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Ante lo cual, para la elaboración de un mapa de riesgos las organizaciones deben generar
de manera asertiva el análisis de mercado (al identificar oferta y demanda de necesidades,
reconocimiento de la competencia, reconocimiento de barreras de entrada a nuevos mercado); la
proposición de estrategias y el accionar de las operaciones comerciales (medios de pago,
créditos, documentos bancarios), financieras (fluctuación en las tasas de cambio) y logísticas, así
como toda actividad que pueda favorecer o beneficiar el proceso del comercio internacional.
Por ello Molina et al. (2017), manifiesta que el diseño de un modelo “plantea la posible
mejor solución, con el fin de que el empresario pueda comercializar en un entorno de mayor
certeza y seguridad” (p. 3).
En tal sentido, Molina et al. (2017) encuentra que el mapa de riesgos, favorece la
realización de un mapa de calor. En el cual se determinan descriptores sobre la probabilidad de
ocurrencia de un riesgo, sus consecuencias, impacto, grado de control o influencia; con sus
respectivas estimaciones.
Herramientas que resultan un insumo necesario para la proposición de un modelo de
gestión. Al encontrar que una vez identificados los tipos de riesgo, sus probabilidades de
ocurrencia, grado de impacto negativo, grado de control y demás aspectos que se observan en el
mapa de riesgos y en el mapa de calor. Desde el modelo de gestión se establecen los
controles/alertas; medidas y acciones que se deben estipular, a manera de pasos o etapas con el
objeto de optimizar la toma de decisiones ante cada posibilidad de riesgo que pueda surgir
durante el proceso logístico de carga y transporte internacional. A continuación la figura 1,
presenta los aspectos clave que se consideran al momento de elaborar un modelo de gestión de
riesgos
21
Figura 1. Elementos clave en la elaboración de un modelo de gestión de riesgos
Fuente: Elaboración propia a partir de los postulados de Molina et al. (2017)
Por otra parte, la Asociación Bancaria y de Entidades Financieras de Colombia
(ASOBANCARIA) (2017), manifiesta que en Colombia, el comercio internacional ha dado paso
a la incursión de la apertura económica del país mediante la formalización de tratados de libre
comercio, lo cual se relaciona directamente con las exportaciones e importaciones que se medían
en el territorio nacional. Sin embargo, la generación de redes comerciales, también ha dado paso
a que organizaciones criminales piensen en nuevas formas y rutas para enmascarar actividades
delictivas e ilegales, alrededor de delitos como el contrabando o el lavado de dinero.
Motivo por el cual resulta necesario prestar atención a los errores conceptuales que
puedan cometerse alrededor de “los elementos que constituyen una actividad de lavado de dinero
a través del comercio internacional” (ASOBANCARIA, 2017, p. 34). Teniendo especial cuidado
22
en los medios de pago, el efectivo no es la única forma de encubrir un recurso ilícito; entre las
prácticas de lavado de dinero se encuentran las operaciones fraudulentas de trámites y
documentos, de allí que se deben verificar y corroborar la veracidad de los soportes que se
suministran a las entidades encargadas de prestar el servicio de carga internacional.
Buenas prácticas en el proceso de carga nacional e internacional de mercancías
En época de pandemia, resulta necesario e imprescindible que las entidades encargadas
del transporte de carga en sus diferentes modalidades, adopten medidas continuas destinadas a la
prevención del contagio de COVID – 19.
Motivo por el cual entidades como el Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el
Trabajo (INSST) (2020), manifiestan la importancia de reconocer las buenas prácticas en la
logística del transporte de carga nacional e internacional.
Frente a esto resulta necesario que se planifique de antemano con sumo cuidado la
entrega y recogida de mercancías, su correcto embalaje y disposición en el contenedor o en el
área sobre el cual serán transportados los bienes, así como los procesos de carga - descarga, y
desinfección de las mercancías.
Todo esto con el fin de establecer un proceso logístico y operativo adecuado, que permita
minimizar los tiempos de entrega, evitando la manipulación innecesaria. Por otra parte deberán
ser comunicadas las formas alternativas para la entrega y recepción de bienes a los colaboradores
de las organizaciones y a los clientes, con el fin y minimizar el de evitar contacto entre personal.
De igual forma el INSST (2020), hace especial hincapié en mantener el distanciamiento
social estableciendo áreas de espacio adecuada para la realización del trabajo operativo y
23
procurando que los colaboradores sean conscientes, se encuentren capacitados y reconozcan la
importancia de mantener distancias de 1,5 a 2 metros, el mayor tiempo que sea posible mientras
se realizan los quehaceres laborales.
Otro tipo de buenas prácticas se relacionan con el contemplar los tipos de riesgos; la
salud ocupacional y la seguridad en el trabajo. Esto se relaciona con las buenas prácticas que
deben realizar los operarios que se vinculen al transporte de carga. Ante lo cual Párraga y
Sánchez (2019), contemplan que existen riesgos operacionales de tipo personal relacionados con
los colaboradores, que pueden reconocerse como riesgos biomecánicos los cuales resultan de las
afectaciones a la salud de los operarios que intervienen en el proceso logístico de carga nacional
e internacional de mercancía.
Estos pueden resultar o tener su origen en la manipulación inadecuada de las mercancías;
el adoptar malas posturas en el proceso de carga o descarga de bienes, y el asumir pesos mayores
a los pesos máximos que se permiten para el alza y descargue de mercancías. Estas situaciones
deben reconocerse y por tanto se debe procurar la elaboración de acciones y estrategias
destinadas a disminuir y prevenir los accidentes y lesiones motivo de una actividad laboral
realizada de manera inadecuada.
Ahora bien el apuntar a gestionar procesos que resulten sostenibles con el medio
ambiente, también resultan en prácticas que se reconocen como actividades amigables, que
aportan valor a las organizaciones. De allí que Gutiérrez, García, Zarzosa, González, y
Salamanca (2018), señalan que el transporte marítimo es uno de los medios más eficientes y
sostenibles, al ser “sumamente respetuoso con el medio ambiente. Lo cierto es que sólo un 12%
de la contaminación marina por hidrocarburos tiene su origen en el transporte marítimo, mientras
que la mayoría procede de descargas urbanas o plantas industriales terrestres” (p. 10).
24
Otras miradas, como la propuesta por Hernández (2018), se dirigen hacia el reconocer los
intereses de las personas que solicitan la carga; la de quienes prestan el servicio de transporte; y
la del destinatario. Por esto se sugiere conocer las normativas, leyes, decretos y reglamentos que
regulan esta actividad en el país.
Las organizaciones también cuentan entre sus buenas prácticas el garantizar la seguridad
de la cadena de suministro, de allí, que se generen inspecciones, procesos de control y
monitoreo, y la generación de alianzas entre administraciones de aduanas, razón por la cual la
Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) (2016), manifiesta la importancia de
implementar normativas o marcos normativos y sistemas que permitan determinar cada paso
logistico de la cadena de suministro de manera transparente y eficaz.
En tal sentido la Superintendencia de Riesgos del Trabajo (2016), estipula que es
necesario que la persona encargada del transporte de carga se encuentre capacitada y preparada
ante cualquier actividad sospechosa de riesgo para actuar de manera asertiva. En el caso de
transportar elementos cuya fuga pueda causar toxicidad, como ejemplo, deberán informar
inmediatamente la situación ante la autoridad correspondiente para evitar un siniestro mayor.
Hecho que también reitera Sánchez (2019), debido a la importancia de que generar una
correcta prevención y seguridad en el transporte de mercancía evita pérdidas millonarias a las
organizaciones encargadas de prestar estos servicios y a sus respectivos clientes. Lo cual a su vez
incide en la reputación organizacional de la empresa.
Razón por la cual a continuación se presenta una sistematización de las principales
buenas prácticas en materia logística que las organizaciones realizan como parte de su actividad
productiva.
25
Tabla 3.
Buenas prácticas identificadas en relación a la actividad logística en el transporte de carga
Adopción de
medidas de
bioseguridad
en el
transporte de
carga de
mercancías
Relacionadas con la presentación de sintomatología asociada al virus COVID – 19, los
colaboradores deberán realizarse la debida prueba y comunicar a las empresas el resultado del
test, si este es positivo o negativo para establecer el periodo de incapacidad laboral; y a su vez,
el especificar con que personas se tuvieron contacto para gestionar los debido análisis de la
prueba y evitar la propagación y el contagio masivo de la enfermedad.
El uso de los elementos de protección dispuestos por la OMS, entre los cuales se encuentran
los tapabocas. Y el que los colaboradores se encuentren capacitados y sean conscientes de que
deben evitar tocarse la cara, nariz y los ojos. Cubrirse la boca al toser o estornudar y utilizar
elementos de desinfección como el alcohol y el gel antibacterial.
Relacionadas al correcto embalaje y transporte de mercancías que han sido desinfectadas de
acuerdo a los protocolos establecidos para evitar el contagio del virus COVID – 19
Comunicación de las formas alternativas para la entrega y recepción de mercancías a
proveedores, clientes y colaboradores de la organización.
Planificación de las rutas de transporte y sus paradas alternativas para que los colaboradores
puedan cubrir sus necesidades biológicas, como el uso de sanitarios, mientras cuentan con elementos como el alcohol, el gel antibacterial y demás elementos que faciliten la desinfección
y prevención, a través de la higienización.
En el caso del transporte terrestre mantener los vehículos desinfectados, y establecer medidas
de ventilación de la cabina periódicamente.
Capacitación a
colaboradores
Incentivar el distanciamiento entre el personal y minimizar su contacto, al establecer
capacitaciones dirigidas a que los colaboradores reconozcan la importancia de mantener distancias entre 1,5 a 2 metros de distancia mientras realizan sus quehaceres laborales
Prevención de los riesgos operacionales de tipo personal, desde los riesgos biomecánicos los
cuales contemplan lesiones debido al manejo inadecuado de posturas y al asumir pesos que
resultan excesivos y perjudiciales para la columna vertebral.
Capacitación relacionada con el transporte de mercancías o materiales tóxicos, inflamables,
explosivos, irritantes o asfixiantes, que constituyan un riesgo químico durante su transporte.
Capacitación relacionada con el aseguramiento de las condiciones necesarias para asegurar
que la mercancía llegue al puno de destino en un estado óptimo.
Apropiación
Normativa
Reconocimiento de las normativas nacionales e internacionales de acuerdo a los territorios en
los cuales se establecen las rutas para el tránsito y transporte de mercancías con el objeto de
garantizar la seguridad de la cadena de suministro. Un ejemplo es el conocimiento de la Guía
Técnica Colombiana GTC 45. Guía para la identificación de peligros y valoración de riesgos en seguridad y salud ocupacional.
Conocimiento del Decreto 1072 del 26 de mayo de 2015. Decreto único reglamentario del
sector trabajo relacionado con la dirección de riesgos laborales y la implementación de un
sistema de gestión de seguridad y salud en el trabajo (SG-SST).
Entre otras disposiciones establecidas por el Ministerio del Trabajo tales como el conocimiento
de las guías de atención integral de seguridad y salud en el trabajo basadas en la evidencia
(GATI – SST).
Y la guía de atención integral basada en la evidencia para dolor lumbar inespecífico y
enfermedad discal relacionada a la manipulación de carga y otros factores (GATI – DLI - ED)
Determinación de procesos de control y monitorio del transporte y seguimiento de los procesos
logísticos de la cadena de suministro de acuerdo a las disposiciones de aduana con el objetivo
de asegurar de que se cumplan las medidas y marcos normativos de forma transparente y eficaz
sin incurrir en sanciones legales.
26
Prácticas
sostenibles con
el medio
ambiente
Minimizar el uso de hidrocarburos en el transporte marítimo de mercancías, con el objeto de
participar de los objetivos de desarrollo sostenible y un enfoque cimentado en proteger el
medio ambiente y desincentivar las prácticas que resulten en la degradación medio ambiental
como parte del proceso logístico.
Fuente: Elaboración propia a partir de los postulados del INSST (2020); Párraga y Sánchez (2019); la
Superintendencia de Riesgos del Trabajo (2016); y Sánchez (2019).
Prácticas que resultan útiles y benéficas para las organizaciones debido a que les
permiten encontrarse preparadas para afrontar los riesgos y la incertidumbre propia que se
maneja en la logística del transporte de carga nacional e internacional. De manera especial, en
esta época en la cual las medidas deben reforzarse debido a las implicaciones que el virus
COVID – 19 ha traído consigo en los procesos logísticos del transporte y cargue de mercancías.
Estudio de Caso Empresa Movilizar Carga Internacional S. A. S.
De acuerdo a lo expresado por Quintero et al. (2018), el mar se ha transformado en una
vía principal de comunicación. Razón por la cual resulta necesario que los estados cuenten con la
capacidad de usar el mar. Para los autores “quien manda en el mar, manda en el comercio” (p.
21). De allí que el mar resulte una ruta de trasporte valiosa y muy utilizada para el transporte de
carga.
El transporte marítimo es una de las modalidades de carga más importantes. En el
transcurso de la práctica profesional, requisito para culminar la carrera de Negocios
Internacionales de la Universidad Santo Tomás, desde el cargo de “Analista de Riesgos”, se
gestionó un acercamiento a los procesos logísticos de carga de mercancías en la modalidad
marítima. Durante un periodo comprendido entre los meses de octubre de 2020 a febrero de
27
2021, en los cuales transcurrió la etapa práctica en la empresa Movilizar Carga Internacional S.
A. S.
Esta organización cuenta con un carácter nacional e internacional. De allí que se ha
encargado de establecer alianzas estratégicas y formar una red de agentes transitorios alrededor
del mundo al contar con aliados estratégicos en más de 123 países. Motivo por el cual se
reconoce que esta es una entidad con una trayectoria que le ha permitido reconocer y aplicar una
serie de buenas prácticas para optimizar sus procesos logísticos. A continuación se mencionan
las actividades realizadas por la organización y desde el cargo de Analista de Riesgos en función
de practicante.
Tabla 4.
Funciones y labores alrededor del análisis de riesgos logísticos en el proceso de carga internacional
(modalidad marítima)
Análisis de riesgos
alrededor del estudio
de los clientes actuales
de la Organización
Movilizar Carga
Internacional
En esta etapa se gestionan acciones para:
Verificar el objeto social y referencias comerciales de los clientes
actuales de la organización
Corroborar la fiabilidad y autenticidad de las actividades comerciales
realizadas por los importadores
Realizar el análisis financiero sobre las variables del importador
(activos totales, ingresos por actividades ordinarias, comparación de
ingresos del último año frente a años anteriores, gastos operacionales,
utilidades netas, pasivos, operaciones comerciales en cantidad y valor
FOB, entre otros)
Verificar que los soportes y documentos suministrados a Movilizar Carga resulten confiables y cumplan con las normativas y
requerimientos establecidos por las agencias de aduana para ingreso y
salida de mercancías en el territorio nacional
Gestionar búsquedas en bases de datos / Antecedentes legales en
listas públicas del estado y en las emitidas internacionalmente
(Interpol, FBI, Procuraduría, RUES, DIAN, PONAL, OFAC).
Seguimiento de
operaciones de
importación de las
empresas que optan
por la modalidad de
transporte marítimo
Entre las funciones desarrolladas alrededor del seguimiento de la operación de
importación en la modalidad de transporte marítimo se encuentran las
siguientes:
Inscripción y gestión de la documentación
Investigación EDT, ETA, días libres contenedor y emisión de
BL/AWB
Revisión de BL/AWB: NIT, datos consigne, shipper, razón social.
Envió de la documentación a la agencia de aduana
Selectividad (automática – física – documental)
Pago de provisión de fondos
28
Arribo de la mercancía a puerto
Envió de provisión de fondos
Liberación del BL / Retiro AWB
Llegada de mercancía a destino final
Devolución de contenedor (si aplica)
Agenciamiento
aduanero
La entidad establece relaciones y alianzas asertivas con los agentes de aduana
y agentes consolidadores y navieros, lo cual resulta de suma importancia en los
procesos logísticos, debido a que se debe mantener un contacto permanente
con estos para gestionar adecuadamente la coordinación de los despachos de
mercancía.
Contacto con agentes
de carga nacional e
internacional
Resulta idóneo contar con agentes de carga; intermediarios confiables y aliados estratégicos (quienes facilitan el prestar el servicio de tercerizados en
China)
Tracking Con el objeto de verificar las fechas de zarpe y arribo de mercancías. Y realizar
el seguimiento estratégico desde una locación actual hacia un punto de destino.
Booking (Reserva)
La reserva se confirma al suministras datos estratégicos como: el nombre del
buque; cierre; salida de la mercancía; puerto de origen; puerto de destino; fecha
estimada de arribo; y documento de embarque (BL) Bill of landing, el cual se
emite en origen.
Análisis de sobrecostos
en puertos
Entre las labores realizadas alrededor del análisis de riesgos operacionales,
resulta necesario estar al tanto de la dirección de las operaciones internas de la
empresa. De allí que la alta gerencia de Movilizar Carga no solo direcciona, sino
que realiza el seguimiento de los procesos logísticos para evitar sobrecostos en
los puertos y prevenir sanciones aduaneras o de tipo cambiario para la
organización y sus respectivos clientes.
Adquisición de póliza
de seguros
Es necesario diligenciar los formatos para pólizas de seguro internacional para
asegurar la mercancía nacionalizada.
Aplicación de
plataformas y bases de
datos para identificar
clientes con potencial
importador
Elaboración de matrices de análisis de riesgos, en los cuales se identifican los clientes potenciales de la organización que se encuentran en el departamento de
Note de Santander, quienes pueden obtener los beneficios adquiridos al contratar
el servicio de movilizar carga internacional y contribuir al posicionamiento en
el mercado nacional de la respectiva organización
Manejo operativo
general
La organización se encarga de informar debidamente a los clientes que
adquieren sus servicios, que entre la documentación a aportar deben suministrar
la partida arancelaria; el certificado de origen (si aplica); la descripción de
mercancías; la forma de embalaje; el peso bruto; las dimensiones de la
mercancía; la dirección de recogida y destino final; así como coordinar las
fechas de salida y llegada de mercancía a punto de destino.
Todo esto con el objeto de que aduana pueda realizar las corroboraciones
necesarias sin que se efectúen irregularidades y esto tengo como consecuencia el resto de los plazos de tiempo establecidos para la prestación del servicio.
Fuente: Elaboración propia
Por tanto, resulta necesario señalar que la entidad genera una serie de actuaciones
dirigidas al logro de un manejo asertivo de las operaciones logísticas en el proceso de carga de
mercancías en territorio nacional e internacional. Sin embargo, existen falencias que pueden
considerarse como oportunidades de mejora. En la etapa de práctica profesional se encontró que
una de las principales dificultades a las cuales se enfrentaba la organización radicada en la forma
29
que manejaba sus créditos, al ser una modalidad frecuentada por sus clientes como alternativa
para pagar de forma anticipada las mercancías y el transporte de las mismas desde un lugar de
origen hacia un punto de destino.
Debido a que son diversos los clientes de la organización, que en diferentes
oportunidades han suministrado soportes financieros y comerciales poco factibles. Y debido a la
falta de un análisis de riesgo de los clientes y de su respectiva capacidad financiera, la empresa
ha incurrido en sanciones y multas, al no contar con soportes completos que cumplieran con las
normativas y requerimientos determinados por agencia de aduanas, hechos que han desembocado
en la perdida de capital financiero de la organización debido a los extra costos.
Razón por la cual, la organización ha venido fortaleciendo sus operaciones al habilitar el
cargo de “Analista de Riegos”, y establecer figuras de autoridad para supervisar los debidos
procesos. A modo de establecer soluciones y alternativas a seguir para responder a las
necesidades identificadas y prevenir que vuelvan a repetirse situaciones que resulten
contraproducentes para la entidad.
Se reitera la importancia de verificar que los soportes que suministren los clientes que
adquieren la prestación del servicio de carga, resulten confiables. De manera especial, al
considerar que muchas organizaciones que importan en el departamento efectúan operaciones de
manera ilícita (evasión fiscal y lavado de activos), tema que resulta delicado y debe ser considero
al momento de realizar una selección de los clientes actuales y futuros de la empresa.
Por otra parte, resulta necesario señalar, de acuerdo a las nociones de Parada (2017),
cuales son los principales tipos de riesgos que afronta la organización, desde la modalidad de
transporte marítimo.
30
Existe una relación entre los riesgos estratégicos y los riesgos operaciones, siendo que los
primeros se encuentran implícitos en los demás tipos de riesgos, al relacionarse con el objetivo
misional de la organización y su respectivo cumplimiento. En tal sentido, desde los riesgos
operaciones en el transporte marítimo se deben enfrentar situaciones con un carácter de riesgo de
naturaleza o ámbito geográfico; al derivarse de la acción de agentes externos, como la
posibilidad de que un buque o barco de transporte en su trayecto pueda encontrarse en medio de
una tormenta, un maremoto, u otra situación de carácter natural ajena al proceso logístico de
carga y que resulte imprevista ante un cambio climático o ambiental; a su vez se reconoce desde
el aspecto geográfico la importancia de las rutas comerciales. También puede ocurrir que un
evento inesperado retrase la disponibilidad de un puerto, de manera especial, debido a que la
organización llega al puerto de Shanghái, en China.
Entre estos riesgos también se encuentran los relacionados al transporte y al personal; los
primeros debido a que la embarcación puede sufrir un fallo mecánico o a un accidente laboral de
un colaborador durante estos procesos al no seguir una instrucción o buena práctica
correspondiente a la normativa interna de la organización para prevenir o evitar situaciones en
las cuales una persona pueda llegar a sufrir una lesión o afectación a su salud, durante su
respectivo horario laboral.
Los riesgos financieros y comerciales, los cuales resultan ser los más importantes en este
estudio de caso, debido a que son aquellos que se relacionan directamente con el endeudamiento
de la organización, la mala gestión de los créditos y la administración financiera, lo cual se
traduce en las sanciones o multas cambiarias que la organización ha debido asumir debido a la
falta de análisis de riesgos sobre las capacidades financieras que pueden asumir sus respectivos
31
clientes y la corroboración de la veracidad de los soportes que los mismos han suministrado a la
empresa.
Aspectos que generan una mala relación con el cliente o directamente la ruptura de
relaciones comerciales y la percepción de una mala imagen corporativa e incluso la posibilidad
de que se propicie publicidad negativa sobre la organización y los servicios prestados por la
empresa alrededor del transporte y cargue de mercancías en el contexto nacional e internacional.
Para finalizar, se encuentran otro tipo de riesgos, como aquellos propios del medio de
transporte utilizado: En este caso desde la modalidad marítima se encuentran: la posibilidad de
naufragio; varada; averías; interferencia del agua salada; necesidad de generar un cambio en la
ruta, entre otros, propios del mar.
Conclusiones
Los procesos logísticos en las operaciones de carga nacional e internacional de mercancía
deben ser analizados desde una postura reflexiva en la cual se reconozca la importancia de
identificar los tipos de riesgos (relacionados al entorno, estratégicos, operacionales, políticos,
financieros o comerciales, entre otros), mencionados por Parada (2017), y las situaciones de
incertidumbre ante las cuales se enfrentan las organizaciones que prestan el servicio de carga y
transporte de mercancías.
Lo cual, resulta vital al realizar el seguimiento y control del trayecto recorrido de acuerdo
a la modalidad de transporte seleccionada por el cliente de una empresa. De manera especial,
debido a que el ejercer buenas prácticas, por ejemplo, mediante la capacitación a colaboradores,
32
se hace posible establecer medidas dirigidas a minimizar gastos, evitar situaciones adversas o
contraproducentes y pérdidas de capital económico.
Otra buena práctica, que resulta pertinente es la adopción de medidas de bioseguridad en
el transporte de carga de mercancías, la cual resulta una medida necesaria en la actualidad,
debido a que los colaboradores de las empresas que prestan el servicio de carga deben
comprender que la pandemia global, producto del covid - 19, ha determinado la necesidad de
generar acciones dirigidas a la prevención del contagio entre trabajadores a través del
distanciamiento social; las prácticas de higiene constante y lavado de manos; el uso de
implementos como el alcohol y gel antibacterial; y la limpieza de los vehículos o espacios de
trabajo. Esto, debido a que las mercancías deben seguir diferentes etapas y procesos que van
desde su recepción inicial hasta el momento en que llegan a punto de destino. Momentos en los
cuales más de un colaborador de una u otra forma debe entrar en contacto con el bien o producto.
La desinfección, por tanto, es un recurso necesario para proteger la salud de los colaboradores de
la organización y de los respectivos usuarios o clientes que han solicitado el servicio de carga.
Ahora bien, las buenas prácticas en torno a capacitación a colaboradores y adopción de
medidas de bioseguridad en el transporte de carga de mercancías se relacionan con aspectos
vinculados a la salud ocupacional. Sin embargo, existen otras prácticas, que resultan asertivas,
tales como la apropiación normativa, mediante la cual se reitera la pertinencia de que las
entidades cuenten con manuales o guías en los cuales se establezcan lineamientos producto del
reconocimiento de la legislación normativa y las leyes que existen en un territorio. En tal sentido,
resulta necesario a la hora de realizar un proceso logístico de carga internacional, el reconocer las
diferentes normativas internacionales que se relacionan a los escenarios geográficos en los cuales
33
se ha trazado una ruta de transporte. Medida que asegura que la empresa pueda prestar un
servicio de calidad.
Por consiguiente, resulta relevante dentro del proceso logistico implementar medidas
dirigidas a la prevención de riesgos. De allí que las entidades que prestan el servicio de carga
deben reconocer no solo los tipos de riesgos a los cuales se enfrentan, de acuerdo con parada
(2017), sino a su vez, establecer estrategias y acciones orientadas a la mitigación de riesgos a
través de la elaboración de mapas de riesgos y el diseño de modelos de gestión de riesgos en los
cuales se establezcan o determinen las vias de actuación que puede seguir una empresa u
organización.
Esto, debido a que en los territorios del país, tales como en Norte de Santander, es
necesario reconocer que existen personas y grupos que cometen prácticas delictivas
(contrabando, lavado de dinero, entre otras operaciones ilegales) que resultan contrarias a la
normatividad y a las leyes del país, quienes ocultan su accionar delictivo al suministrar
documentos poco factibles y asumir la figura de usuarios o clientes de las entidades que prestan
los servicios de carga y transporte nacional e internacional.
Las acciones malintencionadas, cometidas por estas personas o grupos que hacen parte de
organizaciones criminales, pretenden vulnerar la normatividad y leyes del país y de las empresas
de carga, incurriendo en prácticas delictivas como la alteración o falsificación de documentos, el
contrabando, lavado de activos, entre otros. Situaciones a las cuales están expuestas empresas
como Movilizar Carga Internacional S. A. S. la cual no es ajena a estas circunstancias, debido a
que la falta de análisis de riesgos frente a las actividades comerciales, capacidad de
financiamiento y verificación de los soportes suministrados por sus clientes, han llevado a la
organización ha incurrir en sanciones y multas legales, que no solo han afectado el itinerario de
34
viaje y la planificación de transporte de carga, sino a su vez el buen nombre de la organización,
que ha debido contar con acompañamiento legal en situaciones específicas para efectuar los
debidos pagos de los tramites y establecer compromisos para no incidir en una situación similar.
Razón por la cual se reitera la importancia de realizar de manera correcta y transparente
la verificación de los documentos y soportes que son facilitados a las organizaciones que prestan
el servicio de carga y transporte; y así mismo, el debido análisis de riesgos, antes de establecer
una contratación. Al comprender que los errores que se presenten pueden resultar
contraproducentes al acarrear pérdidas económicas, sanciones, multas, rupturas en los lazos
comerciales con los respectivos clientes y manchas en la reputación y la imagen corporativa de
las empresas dedicadas al transporte de carga de mercancías a nivel nacional e internacional.
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