8/17/2019 La Señal Del Enemigo

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 Buenas Nuevas de Jesús, con amor   Guía de estudio nº 13

La señal del enemigo

La señal del enemigo, o “marca de la bestia”, no es ninguna curiosidad pintoresca. ocas

veces eleva su vo! el "eñor, pero en esta ocasi#n lo $ace en los tonos m%s solemnes. "e

trata de su m%s urgente & seria advertencia.

 No cabe imaginar peor tragedia 'ue $aber sido cristiano toda una vida, para aceptar

(inalmente la “marca de la bestia”. La “marca de la bestia” es el paso (inal en la adoraci#ndel &o. )odo a'uel 'ue ceda al egoísmo recibir% (inalmente esa marca, a menos 'ue antes

suceda algo 'ue lo convierta. *+iertamente es algo de la ma&or importancia “- un tercer

%ngel los sigui#, diciendo a gran vo! /"i alguno adora a la bestia & a su imagen & recibe la

marca en su (rente o en su mano0” 2pocalipsis 14 & 156.

"#lo e7iste una (orma en la 'ue podemos evitar recibir la “marca de la bestia”, 'ue es

recibiendo en su lugar el sello de 8ios. )odo a'uel 'ue no reciba 9ste :ltimo, recibir%

autom%ticamente la primera. ;s tiempo de 'ue estudiemos & nos aseguremos de

comprender en 'u9 consiste la marca de la bestia, & c#mo evitarla. ;n la pr#7ima guía de

estudio 16, dedicaremos la atenci#n al maravilloso sello de 8ios.

1. A fin de comprender en qué consiste la marca, identifiquemos primeramente la

bestia de Apocalipsis 13

 Nota: Los libros de Daniel y Apocalipsis encajan tan perfectamente como la cerradura y

 su llave, interpretándose uno al otro mutuamente. Por ejemplo, Daniel describe las cuatro

 randes bestias !ue le fueron mostradas en visi"n: un le"n, un oso, un leopardo y una

cuarta muy e#tra$a, más parecida a un dra"n !ue cual!uiera de las tres precedentes. %l 

le"n, soberano y majestuoso, simboli&aba a 'abilonia( )edo*Persia estaba representada

 por el oso, cruel y derramador de sanre( el leopardo era +recia, rápida y astuta. Daniel 

describe a las tres anteriores por su nombre Daniel -:/( /:-0 y -12( y la cuarta bestia,

espantosa y terrible, era el s3mbolo del imperio !ue sucedi" a +recia, esto es, el paano

 4mperio 5omano. La 6bestia7 !ue vemos en el cap3tulo 1 de Apocalipsis, combina

caracter3sticas de los cuatro imperios mundiales precedentes.

(1) “El dragón le dio su poder, su trono, y gran autoridad Apocalipsis 13!"

 Nota: 5ecibe su poder, trono y autoridad del 6dra"n7, !ue es un s3mbolo del diablo,

!uien obr" mediante el 4mperio 5omano.

6Pero alo nuevo sucedi" al 4mperio 5omano !ue nunca se 8ab3a dado previamente en la8istoria: a mitad de camino de su e#istencia, cambi" su relii"n oficial, y su carácter 

cambi" de ser un poder pol3tico, a venir a convertirse en un poder reliioso. A medida !ue

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los emperadores se iban debilitando proresivamente, su capital fue despla&ándose desde

 5oma a 9onstantinopla. %so propici" un vac3o de poder !ue el bispo de 5oma fue ávido

en ocupar. Pronto comen&" a se$orear sobre los otros obispos, y a tomar sobre s3 el 

carisma !ue los precedentes emperadores de 5oma 8ab3an disfrutado en e#clusiva. As3 fue

como ;el dra"n le dio su poder, su trono, y ran autoridad.< Aluien 8a escrito: ;De las

ruinas de la 5oma pol3tica se erii" el ran 4mperio moral, en la iantesca forma de la

 4lesia 5omana., ;l surgimiento de la iglesia medieval 2.

8rag#n =mperio >omano, instrumento de "atan%s

oder ;?9rcito al mando de Belisario

)rono >oma

Gran autoridad ;dicto de @ustiniano estableciendo la autoridad

del Abispo de >oma como papa 33 8.+.6

(") “#erida de muerte Apocalipsis 13!3

 Nota: Los franceses 8ab3an lleado a la conclusi"n de !ue la ilesia 9at"lica 5omana era su enemio. %l ej?rcito de Napole"n entr" en 4talia, determinado a poner fin al papado.

 'ert8ier tom" prisionero al papa en 1@/. De esa forma, el papa, !ue a tantos 8ab3a

llevado en cautividad, fue ?l mismo tomado cautivo.

(3) “$u %erida mortal fue sanada. &oda la tierra se mara'illó en pos de la bestia... y

adoraron a la bestia Apocalipsis 13!3,, y *

 Nota: La curaci"n de la 8erida mortal del papado 8a venido siendo un lento proceso( el 

11 de febrero de 1- se dio un paso sinificativo, cuando )ussolini restituy" su poder 

temporal al papado, !uien volvi" a ser jefe de estado. Bn oficial !ue fue testio en la firma de a!uel acuerdo entre )ussolini y el papado, dijo: 6Comos a8ora testios de la

 firma de este documento. A medida !ue la tinta va fluyendo de las plumas, se va curando

la 8erida de cincuenta y nueve a$os.7

Ci bien la 4lesia 5omana fue 8erida, está sanando 8oy... Las visitas del papa Juan Pablo

 44 a Am?rica 8abr3an sido inimainables 8ace una o dos d?cadas. Bn comit? de te"loos

 Anlicanos y 9at"lico*5omanos recomendaron la uni"n de las dos ilesias, a fin de curar 

 su separaci"n de E0 a$os. %se plan reunir3a a @F0 millones de cat"lico*romanos con FE

millones de anlicanos, incluyendo a millones de episcopales americanos. Gasta el 

ministro bautista 'illy +ra8am 8a dic8o ver en el papa a aluien !ue debiera liderar launi"n de todas las ilesias.

 %l papado está avan&ando de forma notable en poder mundial. %n las nuevas naciones del 

tercer mundo, as3 como en las naciones occidentales, su poder emerente es un 8ec8o

indiscutible. %n muc8os pa3ses controla la educaci"n. %difica randes y costosos templos,

abriendo sus bra&os a millones de conversos a su fe.

tras ilesias distintas de la 5omana están mirando 8acia ella en busca de lidera&o. %l 

diriente Anlicano Jo8n )oorman 8a afirmado !ue si 8a de llearse a una uni"n final 

entre las ilesias, 6tendrá !ue 8aber una cabe&a principal de la ilesia, y esa cabe&a8abrá de ser sin duda el bispo de 5oma.7

() “#ablaba arrogancias y blasfemias Apocalipsis 13!+ y - aniel !"+

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 Nota: 9uando Jesús perdon" a personas sus pecados, los jud3os lo acusaron de blasfemia,

diciendo: 6HIui?n es este !ue 8abla blasfemias HIui?n puede perdonar pecados, sino

 s"lo Dios7 Lucas E:-12. Bn autor cat"lico afirma: 6%l sacerdote toma el luar del 

Calvador mismo, y al decir ;eo te absolvo

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masas de la sociedad volvi?ndose 8acia 5oma, incluyendo a las ilesias protestantes !ue

 se separaron de ella durante la 5eforma y despu?s de ella, no 8emos de pensar !ue todos

van a seuir esa direcci"n. Dios tiene un pueblo !ue le permanecerá fiel. De acuerdo con

el Apocalipsis, finalmente 8abrá s"lo dos clases sobre la tierra: de un lado a!uellos cuyos

nombres est?n escritos en el libro de la vida del 9ordero( del otro, los !ue cedan ante la

6bestia7 !ue describe el cap3tulo 1 de Apocalipsis.

 Al mismo tiempo !ue reconocemos la aplicaci"n de esas profec3as, 8onramos la memoria

de los muc8os sinceros y sacrificados seuidores de la 4lesia 9at"lica. No es por esp3ritu

cr3tico ni por fanatismo !ue reconocemos la llana verdad de Dios contenida en las

 profec3as de Daniel y Apocalipsis. Las profec3as identifican al papado como un sistema.

Ce trata del desarrollo en la 8istoria de un principio !ue opera en todo cora&"n 8umano:

el deseo natural de e#altaci"n y poder controlador sobre nuestros semejantes.

 %n el cap3tulo 1 de Apocalipsis, el Ce$or 8a despleado verdad !ue confirma nuestra fe.

 %s como si 8ubiera previsto !ue la verdad revelada en ese cap3tulo 8abr3a de sorprender a

muc8os, al comprenderla por primera ve&. Por si !uedara para aluien aluna duda encuanto a la identidad de la 6bestia7 y su 6marca7, proporciona tambi?n su 6número7, de

 forma !ue todos puedan estar seuros de !ui?n está a83 representado, alo as3 como si le

8ubiera colocado una eti!ueta o un número de serie. bservemos el último vers3culo:

Apocalipsis 13!1*! “Aqu4 %ay sabidur4a. El que tiene entendimiento cuente el n5mero

de la bestia, pues es n5mero de %ombre. 6 su n5mero es seiscientos sesenta y seis

 %n los d3as de Juan autor de Apocalipsis2, los romanos 8ablaban y escrib3an en lat3n,

lenua !ue emplea el papado 8asta el d3a de 8oy. %se idioma emplea las mismas letras

!ue usamos 8oy nosotros, pero usa tambi?n letras para e#presar valores num?ricos. La propia 'iblia 9at"lica 5omana en su versi"n Douay2, 8ace este comentario sobre el 

citado vers3culo: 6Ceiscientos sesenta y seis. Durante silos se 8a comprendido el t3tulo

de Papa de 5oma como siendo el Kicarius =ilii Dei, !ue sinifica ;Kicario del Gijo de

 Dios

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3. El profeta 7uan 'io otra bestia en Apocalipsis 13!11. 0e dónde proced4a

>;"D;")2 “"ubía de EEE EEEEEEEE...”

 Nota: a 8emos visto !ue el ;mar< representa randes concentraciones de ente, luares

8abitados. La ;tierra;"D;")2 “...tenía dos EEEEEEE seme?antes a los de un EEEEEEEEE, pero $ablabacomo un EEEEEEE. ;?erce toda la autoridad de EEE EEEEEEEEE EEEEEEE en presencia de

ella, & $ace 'ue la tierra & sus $abitantes EEEEEEEE a la primera EEEEEEEE, cu&a $erida

mortal (ue sanada.”

 Nota: Oiene dos cuernos semejantes a los de un cordero, s3mbolo apropiado de la joven

 Am?rica, con sus principios emelos de libertad civil y reliiosa !ue tanto ayudaron a !ue

la naci"n viniese a convertirse en la pr"spera superpotencia !ue es 8oy.

 A diferencia de los cuernos de las bestias o reinos precedentes, los de esta última carecen

de coronas sobre ellos. Los fundadores de Am?rica aprendieron las lecciones ense$adas por la 8istoria de la antiua %uropa, creando una nueva naci"n sin reyes.

 Pero !u? lástimaQ Cu carácter cambia desde ser como el de un cordero 8asta venir a ser 

como el de un dra"n !ue ejerce todo el poder de la primera bestia en presencia de ella.

Kemos a!u3 !ue Am?rica 8a de volverse un poder perseuidor, y !ue obrará en

cooperaci"n con el papado. Oan estrec8a será la uni"n entre ambos, !ue 8ará 6!ue la

tierra y sus 8abitantes adoren a la primera bestia, cuya 8erida mortal fue sanada.7

+. 08ué dice “a los %abitantes de la tierra esa bestia que inicialmente fue seme9ante

a un cordero Apocalipsis 13!1>;"D;")2 “'ue le $agan una EEEEEEEE a la bestia 'ue (ue $erida de espada & revivi#.”

 Nota: La 6imaen de la bestia7 es una copia del sistema !ue convirti" al papado en

 poder supremo, en la %dad )edia. %se sistema estuvo caracteri&ado por la uni"n de la

ilesia y el obierno civil, de forma !ue la ilesia dispon3a de poder para imponer sus

domas por medio de medidas coercitivas a caro de los poderes temporales, tanto

 judiciales como policiales.

 Desde el tiempo en el !ue el papado fue 8erido de muerte, las naciones 8an escapado, en

 eneral, de cual!uier forma de dominaci"n por parte de la ilesia. La 8umanidad 8acomprendido en su mayor3a !ue los obiernos civiles 8an de estar libres de todo control 

reliioso. De una u otra forma 8an reconocido la verdad ense$ada por Jesús, de !ue la

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ilesia y el estado deben permanecer separados: 6Dad, pues, a 9?sar lo !ue es de 9?sar,

 y a Dios lo !ue es de Dios7 )ateo --:-12. La 9onstituci"n americana, por ejemplo,

 aranti&a la separaci"n completa de ilesia y estado, propiciando !ue pueda ser 

obedecido ese mandato de Jesús.

 Pero el libro de Apocalipsis predice un tiempo en el !ue Am?rica reneará de los

 principios !ue le 8an permitido disfrutar de su actual prosperidad, e inducirá tambi?n a

otras naciones a seuir su ejemplo. %ntonces se producirá una reedici"n de la opresi"n y

 persecuci"n !ue se dieron con tanta intensidad en la %dad )edia.

HNo es cierto !ue eso parece imposible en nuestro silo de lu& y libertad %l supuesto

 proreso moral de la 8umanidad no pasa de ser una apariencia superficial. %n lo

 profundo, la naturale&a 8umana continúa estando inclinada a la maldad. A medida !ue

aumentan las uerras, el derramamiento de sanre, los disturbios sociales, el detonante

del terrorismo y los desastres naturales, los obernantes mundiales se sentirán

autori&ados para tomar medidas 8asta entonces impensables. %s más !ue probable !ue se

vuelvan 8acia la 4lesia 5omana en bús!ueda de direcci"n moral y espiritual. Bn solo paso nos separa del cumplimiento de esos últimos vers3culos del cap3tulo 1.

Hemos visto &a la pretensi#n papal de 'ue su autoría en el cambio del “8ía del "eñor” del

s%bado al domingo constitu&e la señal suprema de su autoridad. )ambi9n $emos visto 'ue

la ma&oría de los protestantes lo siguen gustosos en ese cambio & pretensi#n, a:n sin

reconocer e7plícitamente 'ue lo aceptan & se colocan ba?o la autoridad del papado.

. 0e qué dos formas recibir2n casi “todos los moradores de la tierra esa “marca

de la bestia Apocalipsis 13!1:1*>;"D;")2 “Hacía 'ue a todos... se les pusiera una EEEEEE en EEE EEEEE EEEEEEEEE o

en EEE EEEEEEEE...”

 Nota: La observancia del sábado del s?ptimo d3a distinue a a!uellos a !uienes Juan

llama los 6santos7. La ;marca de la bestia< es la falsificaci"n de la verdadera se$al de

 Dios, sutilmente dise$ada para ena$ar a tantos como sea posible. )illones de personas

están en rave peliro de recibir la marca de la bestia, mientras !ue se sienten seuros al 

 seuir a la mayor3a en su práctica reliiosa.

 Daniel @:-E revela c"mo el papado 8a intentado cambiar la ley de Dios mediante la substituci"n del d3a de reposo desinado por Dios, por otro d3a común. Ce podr3a discutir 

la justicia de acusar al papado de un crimen semejante si no fuera por!ue ?l mismo

reconoce el 8ec8o. Las autoridades cat"licas admiten abiertamente !ue s"lo ellos son

responsables del cambio efectuado en el santo sábado de Dios.

6Preunta: HOiene aluna otra forma de probar !ue la ilesia R5omanaS posee autoridad 

 para instituir festividades o preceptos

 5espuesta: Ci no poseyera tal poder, no 8abr3a podido 8acer a!uello en lo !ue todos los

modernos dirientes reliiosos están de acuerdo con ella: no podr3a 8aber substituido la

observancia del sábado del s?ptimo d3a de la semana por la del domino del primer d3a,

un cambio para el !ue no e#iste autori&aci"n en las %scrituras.7 Ctep8en Teenan,

+atecismo 8octrinal , p. 1@( La >evelaci#n de ;ventos 'ue $an de "uceder  , p. 100, 1012.

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6Desde lueo, la 4lesia 9at"lica afirma !ue el cambio fue su propio acto... y el acto es

una  marca  de su autoridad eclesiástica en materia reliiosa.7 9ardenal +iobbons,

98ancellor G.=. O8omas2.

6No 8ay prueba aluna en la %scritura de !ue fuera la voluntad de Dios !ue el Cabbat8

 fuera cambiado del sábado al domino, de forma !ue a!uellos no*cat"licos !ue rec8a&an

el valor de la Oradici"n Rcat"licaS como rela de fe, debieran, en l"ica, seuir 

observando el sábado como el Cabbat8.7 =rancis J. 5ipley, 2'uí est% la e , p. 1@/2.

6Nada se dice en la 'iblia a prop"sito de un cambio en el d3a del Ce$or del sábado al 

domino. Cabemos del cambio s"lo a partir de la tradici"n de la ilesia Rcat"licaS... %sa

es la ra&"n por la !ue nos parece tan il"ica la actitud de muc8os no*cat"licos, !uienes

afirman !ue no creerán en nada a menos !ue puedan encontrarlo en la 'iblia y !ue sin

embaro, continúan uardando el domino como d3a del Ce$or, por disposici"n de la

 4lesia 9at"lica7 Leo J. Orese, ;7plicando la e , p. -2.

 A!uellos !ue reciban la marca en sus frentes son los !ue creerán !ue el domino es el D3a

del Ce$or, a pesar de !ue la 'iblia afirma lo contrario. Los !ue reciban la marca en sumano derec8a son los !ue sabrán con certe&a !ue se trata de alo falso, pero por 

conveniencia, por temor a ver en peliro su subsistencia y seuridad personal, accederán

a alistarse con la mayor3a, en luar de tenerse valientemente del lado de Dios.

. 08ué importancia 'ital da ios a ese asunto de la “marca de la bestia

Apocalipsis 1!;:1"

>;"D;")2 2'uel 'ue se aliste con el enemigo del >e& del universo, “9l tambi9n

 beber% del vino de EEE EEEE de 8ios, 'ue $a sido vaciado puro en el c%li! de EEE EEEE...”

 Nota: Los !ue re8úsan recibir la 6marca de la bestia7 se encuentran en se$aladaminor3a. Gan de afrontar la burla y desprecio de familiares y amios. Cu fidelidad a la

observancia del sábado puede sinificarles la p?rdida de un prometedor empleo, o el 

renunciamiento a un determinado estatus social. Pero todas las penurias !ue son

llamados a soportar son nada, en comparaci"n con la bendita seuridad del favor de

 Dios sobre ellos. Pero observa bien esto: Nadie 8a recibido aún la marca de la bestia. %l 

tema aún no 8a sido presentado claramente ante todos para !ue puedan tomar una

decisi"n inteliente. %l Ce$or tiene muc8os fieles seuidores suyos observando todav3a en

 su inorancia el falso sábado, pero recibirán lu& al respecto antes de !ue se impona la

6marca de la bestia7.

 La cuesti"n no es si un d3a es mejor !ue el otro, en lo e#terior, sino !ue se trata de un

asunto de lealtad y obediencia a Dios.

 %l llamamiento !ue 8ace la 6bestia7 lo es en realidad a la e#altaci"n del 6yo7, al amor 

 por uno mismo !ue es sello y marca del carácter de Catanás desde su rebeli"n en el cielo.

 Los !ue elien morir al 6yo7 y tomar la cru& de 9risto, obtendrán la victoria sobre la

6bestia7, su 6imaen7 y su 6marca7. La marca de la bestia está en oposici"n con la cru& 

de 9risto( y el verdadero sábado del Ce$or viene a ser la se$al de llevar su cru&.

*. Ante la se'era prueba que tendr2n que enfrentar “todos los moradores de la

tierra, 0cómo obtendremos la fuer ante esa fuerte

presión Apocalipsis 13!*- 1"!11

Guía de estudio 13 < J

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>;"D;")2 or la (e, por la sincera apreciaci#n de nuestro cora!#n $acia el

“EEEEEEEEE 'ue (ue inmolado desde el EEEEEEEEEEE del mundo”K Fenceremos “por

medio de EEE EEEEEEE del EEEEEEEEE... no amaron su propia vida, a:n EEEEE EEE

 EEEEEEEE.”

Hemos visto &a 'ue la aut9ntica motivaci#n de todo el 'ue acepte la marca de la bestia

ser% el culto al “&o”, dictado por el temor o la conveniencia. ;l temor a no poder compraro vender, a verse privado del amor $umano, llevar% a muc$os a recibir esa marca contra la

'ue advierte 8ios en t9rminos tan nítidos e incon(undibles.

;. “?8uiero 'i'ir@, ser2 la eclamación del que se disponga a recibir la “marca de la

bestia. 08uieres 'i'ir, a costa de rebelarte 'oluntaria y conscientemente contra

ios /2latas "!"B- Comanos !+

>;"D;")2 “"i (uimos plantados ?untamente con 9l en la EEEEEEEEEEE de su EEEEEEE,

así tambi9n lo seremos en la de su EEEEEEEEEEEEEEE.”

1B. 0lamó 7es5s “?8uiero 'i'ir@ al enfrentarse a la cru< en la que murió por tiDilipenses "!:*

)D >;"D;")2 EEEE.

 Nota: A8ora es el momento adecuado para ponernos sin reservas en las manos amorosas

del 9ordero !ue fue sacrificado por nosotros. La crisis !ue está por sobrevenir y !ue se

acerca rápidamente, pondrá a prueba 8asta lo sumo la paciencia y la fe de los 6santos7,

 pero Dios tendrá un pueblo !ue permanecerá fiel a su verdad, frente a la oposici"n del 

mundo. Decide 8oy formar parte de ese pueblo, desde a8ora y para siempre.

“Ec%ad toda 'uestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de 'osotros 1 edro

+!

“>rad sin cesar 1 &esalonicenses +!1

“=o se %aga mi 'oluntad, sino la tuya Fucas ""!"

“8ios dio a los $ombres el poder de elegirK a ellos les toca e?ercitarlo. No pod9is cambiar

vuestro cora!#n, ni dar por vosotros mismos los a(ectos a 8iosK pero pod9is escoer  

servirle. od9is darle vuestra voluntad, para 'ue 9l obre en vosotros tanto el 'uerer como

el $acer, seg:n su voluntad”  %l 9amino a 9risto, p. J & 6

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