Universidad de las Artes

Maestría en Arte Contemporáneo

Mtro. Eudoro Fonseca Yerena

Noviembre 20, 2009

DULCE MARIA RIVAS GODOY

Reporte de lectura

La Metamorfosis

Franz Kafka

1915

Inusual desde el principio, La Metamorfosis encierra muchas lecturas posibles.

Empieza con el despertar de Gregorio Samsa transformado en un insecto monstruoso.

Conforme la historia prosigue, Gregorio parece aceptar su fatídica realidad, sin cuestionarse

nunca cómo pudo haber ocurrido esa transformación. Esta ausencia de cuestionamiento es

muy peculiar; incluso la falta de interés de Gregorio por las causas de su condición, nos

hace preguntarnos si en realidad sufrió algún cambio físico.

La metamorfosis de Gregorio no es, como podría parecer, la verdadera causa de su

desgracia; sino el efecto simbólico de su propia vida cotidiana. Antes de su transformación,

llevaba una vida muy aburrida, que curiosamente no difería mucho de la vida de un insecto.

Se ocupaba solamente de su trabajo, haciendo todo lo que podía por mantener a su familia.

No tenía amigos y con excepción de su hermana, la relación con su familia era distante. Su

verdadera metamorfosis ocurre cuando se da cuenta de su situación y del rol que juega en

su casa. Gregorio no se convierte en un insecto; simplemente reconoce que eso es lo que ha

sido desde hace algún tiempo. Esta situación es la que puede haberlo llevado al estado de

enfermedad mental y física que finalmente le produce la muerte.

Gregorio había vivido siempre trabajando para su familia, sacrificando cualquier

otro tipo de actividad. Su familia, por el contrario se volvió cada vez menos productiva,

llegando a depender totalmente de él. Cuando ocurre su metamorfosis, los papeles se

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invierten: Gregorio es incapaz de trabajar, aunque aún desea hacerlo y la familia tendrá que

hacerse cargo de él. A su familia, con excepción de su hermana, tal parece que solo les

importa que Gregorio llegue a tiempo a trabajar. Gregorio y su familia no se comunican

muy bien, en parte debido a sus frecuentes viajes de negocios. Esto, en cierta forma, lo ha

convertido en un extraño y en su casa, lo ven más como un proveedor que como un

miembro de la familia. Esta falta de comunicación está presente antes y después de su

transformación; la metamorfosis solamente enfatiza esa situación. Al principio intenta

hablar con frases cortas y entrecortadas, pero se da cuenta de lo poco que su familia lo

entiende y acaba dándose por vencido. Por otro lado, sus padres hacen muy poco esfuerzo

por conversar con él y cuando ocurre la metamorfosis, pierden todo interés.

Greta, su hermana, tampoco se comunica con él, pero parece conocer sus

pensamientos. Le acerca comida y limpia su habitación. La relación de Gregorio con su

hermana es mucho más significativa que la que mantiene con sus padres. La música es

algo que los une.

Aunque al principio parece que Greta está de su lado, muy pronto disminuyen sus

cuidados hacia él. Lo que hace es más por deber que por buen corazón y poco a poco

empieza a verlo como una peste. Cuando Gregorio escapa de su cuarto para oírla tocar el

violín, los huéspedes y la casa entera entran en crisis por su intrusión. Greta pierde

finalmente la paciencia; les dice a sus padres que Gregorio es una carga demasiado pesada

para la familia y decide que esa criatura no es el Gregorio real quien, por supuesto, hace

mucho tiempo desapareció. Poco después de haberse roto este último eslabón que lo unía a

su familia, Gregorio exhala su último aliento.

La familia de Gregorio, de algún modo lo ve como una peste que les impide llevar

la vida que debieran estar viviendo. Cuando lo encierran en su habitación, inmediatamente

empiezan a ver mejorías a su alrededor. Todos consiguen trabajo y ayudan en la casa,

incluso empiezan a comunicarse mejor entre sí, como si a pesar de su esfuerzo, Gregorio

siempre los hubiese estado reprimiendo. La metamorfosis física de Gregorio, sucedió

mientras dormía, pero el verdadero cambio había estado ocurriendo desde antes, muy

lentamente. Cuando despierta y descubre lo que realmente es, no puede siquiera

reconocerse, ni su familia creer lo que ven sus ojos. Sobreviene su final, pero la vida sigue

y Greta también está cambiando.

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