La disyuntiva del octavo arte

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La disyuntiva del octavo arte; ¿por qué excluir a los videojuegos? Actualmente los videojuegos son un tema popular, conflictivo y muy comercial, pero a pesar de esa visón, este escrito no busca reasaltar o hacerle promoción a consolas o a juegos de moda, sino observar el contenido artístico que éstos puedan poseer. Esto se debe, a que los videojuegos no sólo son una forma de entretenimiento individual o colectivo, también pueden ser un medio de expresión artística. En otras palabras, los videojuegos a pesar de estar considerados como un mero entretenimiento, un escape para los ociosos o un vicio, también puede ser una compilación de las siete artes existentes (pintura, escultura, arquitectura, literatura, música, danza y cine). Esto sin omitir, que también podrían ser una expresión de todo aquel artista que quiere llegar a un nivel de exposición más colectivo. Con el propósito de demostrar que existe el arte detrás de los videojuegos, se espera que este ©LGR

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La disyuntiva del octavo arte; ¿por qué excluir a los videojuegos?

Actualmente los videojuegos son un tema popular, conflictivo y muy comercial,

pero a pesar de esa visón,  este escrito no busca reasaltar o hacerle promoción  a consolas

o a juegos de moda, sino observar el contenido artístico que éstos puedan poseer.  Esto se

debe, a que los videojuegos no sólo son una forma de entretenimiento individual o

colectivo, también pueden ser un medio de expresión artística.  En otras palabras, los

videojuegos a pesar de estar considerados como un mero entretenimiento, un escape para

los ociosos o un vicio, también puede ser una compilación de las siete artes existentes

(pintura, escultura, arquitectura, literatura, música, danza y cine). Esto sin omitir, que

también podrían ser una expresión de todo aquel artista que quiere llegar a un nivel de

exposición más colectivo.  Con el propósito de demostrar que existe el arte detrás de los

videojuegos, se espera que este escrito demuestre con hechos esta paradoja y a su vez,

permita que los lectores logren comprender que los videojuegos pueden llegar a ser el

octavo arte.  También se desea mostrar que no todas las personas que laboran en esta

industria son oportunistas monetarios, sino que hay algunos que aprovechan el medio

para exponer su lado artístico.

Los juegos de video son  programas de ordenador confeccionados para el

entretenimiento, pero enfocados mayormente en la interacción entre una o varias

personas con un aparato electrónico (ya sea un ordenador, un sistema arcade, una

videoconsola, un dispositivo handheld o actualmente un teléfono móvil) que ejecuta

dicho videojuego.  En cambio el arte es la actividad creativa que posee el ser humano y

que consiste en reformar y enlazar materiales, imágenes, sonidos, entre otros elementos,

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para así transmitir una idea o un sentimiento y producir un efecto estético. Sin obviar,

que esta técnica estética, también sirve para embellecer ciertos objetos o estructuras

funcionales.  Si se analiza los dos vocablos definidos en las pasadas oraciones, se diría

que son totalmente diferentes, ya que uno es tecnológico y el otro es la expresión del

sentimiento.  Pero la gente desconoce que los videojuegos son una compilación de las

siete artes, ya que estos poseen historia (literatura),personajes detallados o modelados

digitalmente (escultura) , edificaciones arquitectónicas (arquitectura), canciones inéditas

especiales para cada juego (música), sincronía (baile), texturas y colores (pintura) y la

proyección de fotogramas de forma rápida y sucesiva para crear la impresión de

movimiento, mostrando algún vídeo (cine). 

La arquitectura y la escultura se puede vislumbrar en la creación de los escenarios

y mundos de cada uno de los juegos; en ocasiones, la elaboración del escenario es tan

detallada que es digna de reconocimiento, ya que el espectador se puede sentir como si

realmente estuviera dentro del universo del juego.  Esto se debe a que estos artistas

edifican coliseos romanos, casas antiguas, iglesias renacentistas o cualquier edificación

con el simple hecho de que el usuario se sienta parte de ese lugar. Como ejemplo tenemos

los increíbles escenarios de juegos, como Ico (PS2), God of War (PS2 y PS3), Legacy of

Kain (PS2 y XBOX), Assassin’s Creed (PS3, XBOX 360 y PC), Oblivion (PS3, PC y

XBOX 360), Final Fantasy (PS2), entre otros.  También la escultura se visualiza, porque

a veces los artistas que laboran en un juego esculpen los personajes para poder captar

mejor su imagen y puedan ser apreciados mejor por el espectador.  A su vez, la pintura se

observa, ya sea por los colores que se utilizan para desarrollar los escenarios y los

caracteres o simplemente en juegos que simulan pinceladas como es el caso de Okami

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(PS2 y Nintendo Wii)  La imagen inmóvil que vemos en una pintura tiene muchos más

secretos y técnicas para lograrse de lo que podemos pensar; pero para el caso de un

videojuego, crear cada personaje, ya sea un héroe o un villano, a veces tiene tanto merito

como ver una pintura renacentista o barroca.  A lo largo de la historia de los videojuegos,

se han visto una infinidad de técnicas para poder plasmar las ideas de los ilustradores, ya

fuese en papel, materiales físicos, como la plastilina o solamente dibujando de un modo

virtual, empleando así lo más nuevo de la computación. Todo esto con la única finalidad

de que cada pequeño integrante de este universo que está por crearse tenga su propia

personalidad y pueda despertarse sentimiento encontrados tales como: el odio, el amor y

esperanza. 

En cambio  el cuarto arte (literatura) es el arte que actualmente se utiliza más en

los videojuegos, ya que en este siglo XXI los usuarios de los videojuegos no sólo son

menores de 21 años, ya que existen jugadores de treinta años que exigen juegos con

historias de calidad para entretenerse, educarse de manera indirecta y salir de la

monotonía.  También las compañías de videojuegos contratan escritores para redactar

historias de calidad que sean del agrado de los usuarios, entre ellas se encuentra la

historia de Assassin’s Creed que trata de las cruzadas y de las vicisitudes que acataron a

los templarios, la historia de Dante’s Inferno que es la adaptación de La Divina Comedia

de Dante Aliguieri y God of War relato que incluye los dioses griegos y una reedificación

de éstos.  Por su parte el quinto y sexto arte (música y danza)  se pueden observar, ya que

actualmente los videojuegos poseen banda Sonora y se contratan coreógrafos para

sincronizar los movimientos de los personajes.  Cabe resaltar que el séptimo arte también

se proyecta en los videojuegos, ya que existen algunos juegos que pretenden imitar al

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cine, entre ellos se encuentra Metal Gear Solid que parece una película de acción, Rachet

and Clanck que en vez de un juego parece una película de Pixar, Heavy Rain que asemeja

un “triller” de accion policiaca y Final Fantasy que sus cinemas son de igual calidad que

la película Beowulf y cuenta con una historia similar a las de las novelas de aventura.

Tampoco se puede obviar que el cine adapta historias de los videojuegos para llevarlas a

la pantalla grande, ya que desean captar la atención de los fanáticos de los juegos

electrónicos y de los cinéfilos.

En fin, deberíamos aceptar e internalizar la idea de que en un futuro los

videojuegos ya no serán vistos como un simple entretenimiento por los meritos ya antes

expuestos y comenzar a visualizarlos como un arte venidero. Por consiguiente, es

necesario comprender que los programadores y las personas que elaboran los juegos no lo

hacen simplemente por dinero, sino que ellos al igual que Leonardo, Cervantes, Picasso y

Mozart, desean confeccionar unas piezas artísticas que sean memorables y recordadas por

futuras generaciones. No obstante, se debe enfatizar que el arte al igual que la educación

ha evolucionado con la tecnología y por ende estos programas serán posteriormente el

arte del siglo XXI.

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