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Jess cura para que seamos capaces de servir. Mc 1, 29-39

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Recuerda que los evangelios no son crnicas de sucesos. Son teologa narrativa.

Recuerda que los evangelios no son crnicas de sucesos. Son teologa narrativa. No tiene ninguna importancia que las palabras de Jess sean exactamente las que l pronunci; ni que los hechos narrados hayan acontecido as, en un momento y lugar determinado.Lo importante es el mensaje que quieren trasmitirnos y que seamos capaces de traducirlo a nuestro lenguaje, de manera que podamos entenderlo hoy.

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Para ello es imprescindible que nos coloquemos en el ambiente de aquella poca y conozcamos las caractersticas de aquella cultura.5

Para ello es imprescindible que nos coloquemos en el ambiente de aquella poca y conozcamos las caractersticas de aquella cultura.

6Con toda naturalidad se nos habla de la suegra de Pedro, aunque nunca se hable de la esposa. En aquella sociedad era impensable el estado de soltero, y Jess nunca cuestion las normas existentes con relacin a la sexualidad, al matrimonio o a la familia.

Recordad que no formaban una familia aparte, sino que seguan integrados en el clan. La media de vida era de 35 - 40 aos. Si no se casaban a esa edad, no tenan tiempo de educar a sus hijos hasta que se casaran.Las mujeres se casaban a los 12 - 13 aos; los hombres a los 14 15.

Todos los evangelios empiezan constatando la euforia de la gente en el seguimiento de Jess.

Todos los evangelios empiezan constatando la euforia de la gente en el seguimiento de Jess.

Pero poco a poco, se va apoderando de ellos, primero la decepcin, despus el abandono, y finalmente la oposicin total.

Todos los evangelios empiezan constatando la euforia de la gente en el seguimiento de Jess.

Pero poco a poco, se va apoderando de ellos, primero la decepcin, despus el abandono, y finalmente la oposicin total.

Todos se apuntan a los aspectos liberadores de la enseanza de Jess. Estn encantados de ser curados, de ser liberados, de ser queridos.

le pas la fiebre y se puso a servirlesLo malo empieza cuando se descubren las exigencias del mensaje:Tienes que curar al otro, tienes que servir, tienes que amar...

"Duras son estas palabras, quin puede hacerle caso?"Jess cura para que seamos capaces de servir. Esto es precisamente lo que no nos gusta del mensaje.

El evangelio no habla en ningn caso de resignacin ante cualquier clase de dolor, sea fsico, sea psquico, sea moral. 15

Jess no identifica la salvacin con la supresin del dolor. Todo lo contrario, afirma expresamente que la verdadera salvacin puede alcanzarla todo hombre a pesar del mal que nos rodea (bienaventuranzas).16

Siempre que se pueda, se debe suprimir, pero la victoria contra el mal no est en suprimirlo, sino en evitar que te aniquile.Texto: FRAY MARCOSDominico Orden de Predicadores

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