1984. George Orwell: Un recuento de Historia y Literatura

Jhoan Fredley Holguín López

Historia

No se trata aquí de relatar nuevamente el texto, sino de relacionarlo con lo aprendido y lo trabajado en el semestre. Se desarrollarán cuatro ejes temáticos de los que se puede empezar por la verdad, luego por la identidad, seguido de la memoria y por último una nota personal, donde se pondrá dar por sentado las características básicas para seguir la obra:

Nombre del protagonista: Winston Smith

Edad: 39 Años

Lugar de trabajo: Ministerio de la Verdad

Partido: Ingsoc

Territorio: Oceanía

Ciudad: Londres

Año: 1984

Estos datos dan por sentado la realidad del personaje central de la obra, un hombre, casado aunque no vivía con su mujer, ni sabía de su paradero, si estaba viva o muerta, que tenía un problema con las venas varices, que tomaba ginebra de la Victoria constantemente, y lo más importante, que pertenecía a un partido que había triunfado en una Revolución, cuando el Socialismo Inglés o Ingsoc se había impuesto en Oceanía, luchaba y/o se aliaba con una de las otras dos potencias Eurasia y Asia Oriental existentes en ese mundo literario.

Verdad

La verdad lleva gravitando consigo al mito y a la ficción, ya que son los que la sustentan y le dan vida. En el caso del texto no es nada diferente ya que el partido configura de entrada un mito que lo posiciona en un lugar, en el lugar del poder de donde ejerce el control de todos los individuos; ejerce también el control sobre las leyes y sobre el pasado, ya que constantemente está destruyendo al historia reescribiéndola a su conveniencia, para que de este modo la mentalidad de los individuos alcance a creer en el poder del partido y se convenza de que es lo mejor que les pudo haber pasado en sus vidas, que de otro modo sería un desastre sus vidas.

El mito creacionista es el mito por excelencia para demostrar la existencia de algo, partiendo del nacimiento del ser humano y la naturaleza, lo que sigue siendo un enigma demasiado grande como para el entendimiento del hombre. Es por esto que el partido crea un mito que lo refrenda y es el mito del triunfo de la Revolución socialista del Socialismo Inglés o como se le conoce en neolengua1 Ingsoc y a la vez impone primero una forma Despótica de gobierno, luego Totalitaria y una última que se consideraría Tiránica y controladora. Pareciera ser un hecho inherente de las revoluciones, que luego de que se triunfó y por razones conscientes o inconscientes se llegue a un régimen despótico donde las proclamas hechas por los humanistas defensores de los derechos o mejor dicho de los ideales de la revolución, que aun siendo abstractos, chocan con la realidad imperante, que al verse amenazados por la misma y por tratar de mantenerla como en el momento de su auge, pretende el selecto grupo encargado temporalmente del gobierno, mediante el empleo de la fuerza, la imposición del mencionado régimen en vez de implementar un cambio de raíz que abogue por el bienestar de la mayoría. Esto o al parecer fue lo que ocurrió en el texto, pero dimensionando de una manera muy exagerada la forma de control del partido que ejercía el poder, que trataba de influir en cada aspecto individual, no sólo corporal y físico, sino mental e ideológico, de modo que cada sujeto fuera el partido, que no pensara, que no razonara que fuera una extensión de este, porque siendo de otra manera el partido mismo sería el encargado de normalizar y acabar con cualquier ser que siquiera dudara de las decisiones y proclamas que el mismo partido comunicara.

Otro de los aparatos para el convencimiento del poder del partido fue la instauración y difusión de una supuesta guerra perpetua, que es la que provoca la no escisión de ningún sujeto del partido hacia ningún bando enemigo, mostrándole y demostrándole a cada ser los alcances que tenía el enemigo para con sus detractores. Así no sólo se prohibía y estigmatizaba la relación con cualquier tipo de persona que no fuera del partido, sino también se generaba una cierta fidelidad hacia él mismo en nombre del Gran Hermano, quien es el ser supremo y bondadoso que alberga todas las metas del partido, es la figura amada que aboga por la vida equitativa de todos los individuos. La figura enemiga así como el Gran hermano y la guerra misma, era otro 1 Idioma simplificado del inglés tradicional que coarta la libertad de expresión y la libertad de pensamiento.

elemento que debía ser eterna ya que el odio es más permanente y lleno de vitalidad que la felicidad, el amor y piedad juntos.

Identidad

Es sencillo entonces basados en lo anterior distinguir quienes eran los héroes y quienes los monstruos dentro del relato. La creación de un héroe está basada en la idealización de un ser humano que refleje las actitudes ejemplares hacia el partido y es creado por el mismo partido, como estrategia para generar una consciencia del bien y una identidad, por ende una colectividad que defienda el partido y lo respalde a la hora de enfrentarse con un enemigo, hasta el punto que se sacrifique por el bien del partido y de sus camaradas. El héroe busca marcar un referente para cada sujeto, de modo que para el partido es más cómodo crear las réplicas a partir de un modelo que siga creando un montón de héroes cotidianos que trabajan por prolongar el partido mediante las tareas y trabajos diarios que estarán relacionados siempre con el prestigio y todas las formas de imposición del partido.

El monstruo entonces sería toda aquella persona ajena al partido y a sus ideales, por eso tanto énfasis en controlar cada pieza particular del individuo, eliminando toda privacidad y síntoma de libertad, volviendo la libertad como propiedad del partido. Goldstein entonces sería el ejemplo perfecto del monstruo que ataca al partido y siembra la duda de la de la libertad abierta y equitativa de todos los seres humanos, acusando al partido de traicionar la revolución e insultando al Gran Hermano. Un tipo de monstruo se relaciona con el aspecto geográfico, ya que este al no estar dentro de los límites de la jurisdicción territorial del partido es considerado como extranjero, por tanto ajeno a sus tradiciones e ideales, siendo considerado como peligroso ante un posible acercamiento pasivo con un miembro del Ingsoc y que este miembro se diera cuenta que había cierta igualdad entre él y los extranjeros de una clase similar. Otro tipo de monstruo circula dentro de la jurisdicción territorial del partido, trabaja en sus instituciones pero está totalmente en contra de los ideales del Ingsoc, estos sujetos están bajo la mala influencia del doblepensar, que aun conociendo y sabiendo la estructura del partido no traga entero las babosadas que este predica y se sitúa en contraposición con algunos pocos que sería imposible rastrear a menos que lo haga la policía del pensamiento, quien es la encargada de encaminar a los individuos descarriados haciéndolos capitular de sus herejías y engendrando de nuevo su amor por el Gran Hermano de manera que hasta la muerte su pensamiento sea siempre fiel al partido.

Como todos las cualidades de las personas, hasta las naturales, tienen que ver con el partido porque estas le pertenecen, sea la reproducción se la misma especie humana, o la relación entre una pareja de individuos, la fuerza de la pubertad y la existencia de sentimientos entre camaradas están totalmente suprimidos y abolidos mediante la

facultad del doblepensar que siendo bien utilizado surge como control perfecto al enseñar las facultades del partido y que cuando se empiece a tener un pensamiento desleal al partido, se elimine inmediatamente. Otra forma de control es el odio y sus llamados dos minutos de odio, donde se sienta a todos los miembros del partido ante una gran pantalla donde exponen a Goldstein, su principal enemigo. Allí descargan toda su ira y todo el ímpetu reprimido de las personas y así seguir sumisas ante el partido y sus decisiones. No llegan a ser más que tradiciones inventadas para continuar vigilando y dominando a todas las personas.

Esta corriente de obediencia no hace más que maquinizar a las personas sólo en función del Ingsoc hasta el punto de alienar tanto a las personas que puedan sacrificarse sin ningún titubeo ante cualquier interés del partido o cualquier manera de perpetuarse este en el poder.

Memoria

«El que controla el pasado  — decía el slogan del Partido, —  controla también el futuro. El que controla el presente, controla el pasado.»2 Esta era la una de las principales consignas que el partido tenía para ejercer su poder sobre la historia, lo que le daba crédito a continuar engrandeciendo al Gran Hermano y su obra mundial en beneficio de toda Oceanía. El ministerio de la verdad era el ente encargado de reescribir la historia hasta en su magnitud más global, de manera todos los sucesos pasados ya sabía el Gran Hermano que ocurriría o bien los había pronosticado. Esta forma de alterar el pasado hacía flanquear la memoria de todas las personas al no tener bases para argumentar un hecho pasado, haciéndolos desconfiar así de sus propias memorias considerándolas a sí mismas falsas memorias. No había otro medio más eficaz de ejercer el poder que mediante la imposición a la historia, porque la historia era también propiedad del partido y por lo tanto podría alterarla a su antojo; al que fuera en contra de la historia editada o discrepaba de los informes dados por el partido respecto a los suministros y/o los botines de guerra, pronto caería en las manos de la policía del pensamiento y al cabo de algún tiempo desaparecería de la historia, a estos casos se les conocía como vaporización, de una persona que nunca había existido y que apenas se tenía el recuerdo de alguien que hacía un tiempo la había visto o había hasta hablado con ella, pero no quedaba ningún registro de esa persona y por lo siguiente pasaba a ser una falsa creación de la memoria de alguien más.

Una forma de controlar el pensamiento fue la creación de una lengua simplificada hasta más no poder que se conocía como neolengua, era una síntesis exhaustiva del idioma inglés que restringía hasta la propia imaginación y por lo demás produciría una lengua muerta que no tendría muchas opciones de mutabilidad al eliminar tantas palabras y tantos sinónimos de ellas. Desde el año de 1984, los filósofos y estudiosos que estaban encargados de la producción de la onceava

2 Orwell, George. 1984. Londres: Planeta, 1949. Primera parte. Cáp III.

edición del Diccionario de Neolengua pronosticaban que para el año 2050 la mayoría de población de Oceanía hablaría en neolengua y seguirían siendo víctimas del Ingsoc, más dominados por la precaria forma de pensamiento restringido mediante la supresión de palabras que no tendría de nuevo sino un sinnúmero de prefijos.

Las consignas del partido son llamativas, tienen contenido el doblepensar y aunque parecieran obvias para hacer dudar a la población, son tan bien pensadas que ni el mayor intelectual podría siquiera dudar de su veracidad ya que tienen implícita dobles verdades, que podría ser una o la otra, pero que el camarada del partido por estar entrenado en el doblepensar eliminaría la opción moralmente incorrecta impuesta por el mismo partido.

Nota Personal

Es así como sin pensarlo elegí la obra más completa donde se pudo determinar cada aspecto trabajado en el semestre desde los primeros temas hasta los últimos. Cada vez que iba avanzando en la lectura, saltaba a la vista un aspecto trabajado en clase, por minúsculo que fuera, pero que refería o mejor, daba cuenta de la enorme estructura de la que hacía parte. Se puede decir que hay obras literarias un poco predecibles, pero ésta es diferente porque el protagonista, aun dándose cuenta que el partido no es lo mejor que existe y que se veía distanciado de la esencia de la humanidad, no es capaz de escapar de las garras del partido y en cambio termina amando al Gran Hermano, cuando todavía es consciente de que pronto va a morir, pero sabe que ya está purgado de toda culpa. Ahora también está consciente que no puede ya reintegrarse a la vida dentro del partido por el miedo a la reincidencia del error que ya cometió, miedo infundado por el propio partido que a su vez muestra su benevolencia al entregarlo encaminado, totalmente alienado a su muerte mientras camina por un pasillo esperando un fugaz tiro en la nuca.