Hoy Quiero Hospedarme en Tu Casa Corregido

Hechos de los Apstoles

Hoy quiero hospedarme en tu casa.

Jess Arturo Figueroa Quiroga.Hoy quiero hospedarme en tu casa.

Jess Arturo Figueroa Quiroga.

Hoy

Quiero

Hospedarme

En tu casa.

Encuentro transformadorJess Arturo Figueroa Quiroga.

Jess Arturo Figueroa Quiroga.

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Portada:Diagramacin:

A Marcela.INTRODUCCIN.

Las reflexiones de este pequeo libro se inspiran en la Biblia, desde una lectura cuidadosa y la compaa amorosa del Espritu Santo. Quiere responder a todo aquel que anhela un encuentro personal con Jess que transforme su vida. Con certeza, quien se aproxime a este libro no volver a ser igual. Este material puede ser utilizado para la reflexin personal o como devocional en familia o crculos bblicos. Los invito a experimentar un encuentro con Jess, permitiendo que la Palabra de Dios ilumine sus corazones y haga posible el amanecer de un nuevo da en sus vidas.El autor.

TEXTO INSPIRADOR1Habiendo entrado Jess en Jeric, iba pasando por la ciudad. 2Y sucedi que un varn llamado Zaqueo, que era jefe de los publicanos, y rico, 3procuraba ver quin era Jess; pero no poda a causa de la multitud, pues era pequeo de estatura. 4Y corriendo delante, subi a un rbol sicmoro para verle; porque haba de pasar por all. 5Cuando Jess lleg a aquel lugar, mirando hacia arriba, le vio, y le dijo: Zaqueo, date prisa, desciende, porque hoy es necesario que pose yo en tu casa. 6Entonces l descendi aprisa, y le recibi gozoso. 7Al ver esto, todos murmuraban, diciendo que haba entrado a posar con un hombre pecador. 8Entonces Zaqueo, puesto en pie, dijo al Seor: He aqu, Seor, la mitad de mis bienes doy a los pobres; y si en algo he defraudado a alguno, se lo devuelvo cuadruplicado. 9Jess le dijo: Hoy ha venido la salvacin a esta casa; por cuanto l tambin es hijo de Abraham. 10Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se haba perdido.a (Lucas 19:1-10)

1.-. JESS QUIERE ENCONTRARSE CONTIGO (Jess pasa por tu ciudad)1Habiendo entrado Jess en Jeric, iba pasando por la ciudad. A.- Pida al Espritu Santo su compaa para entender la Bendita Palabra de Dios. (Oracin)Desde el inicio de la predicacin, Jess manifiesta su actitud itinerante, es decir, recorre las ciudades y aldeas anunciando el Reino de Dios: 35Recorra Jess todas las ciudades y aldeas, enseando en las sinagogas de ellos, y predicando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo.e (Mateo 9:35).Los grandes signos que realiz Jess mientras permaneci entre nosotros se encuentran registrados en la Biblia. De El, las personas de su tiempo, decan que enseaba con autoridad. En ese sentido, la fama de Jess se extendi rpidamente: 27Y todos se asombraron, de tal manera que discutan entre s, diciendo: Qu es esto? Qu nueva doctrina es esta, que con autoridad manda aun a los espritus inmundos, y le obedecen? 28Y muy pronto se difundi su fama por toda la provincia alrededor de Galilea. (Marcos 1:27-28).

Pero esos acontecimientos que rodearon a Jess en su predicacin, ahora, en nuestro tiempo, son posibles cuando nos aproximamos a la Biblia y creemos en su palabra, en la autoridad que asign a todo aqul que en El cree y permite que el Espritu de Dios more en su interior manifestando una vida nueva: 1Habiendo reunido a sus doce discpulos, les dio poder y autoridad sobre todos los demonios, y para sanar enfermedades. 2Y los envi a predicar el reino de Dios, y a sanar a los enfermos. (Lucas 9:1-2). Esta capacidad no fue solo de los apstoles, el grupo de los 12, sino tambin para todo el que en El cree: 17Y estas seales seguirn a los que creen: En mi nombre echarn fuera demonios; hablarn nuevas lenguas; 18tomarn en las manos serpientes, y si bebieren cosa mortfera, no les har dao; sobre los enfermos pondrn sus manos, y sanarn. (Marcos 16:17-18).

La obra de Jess contina an en nuestros das por medio de todo aquel que escucha su envo y lo obedece: 15Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura.b(Marcos 16:15). En este momento, Jess est pasando por tu ciudad, por tu aldea, por tu vereda, por tu barrio, por tu casa, por tu vida. El quiere encontrarse contigo para alimentar tu esperanza, para que encuentres sentido a tu existencia, para ofrecerte una salida all donde crees que no la hay. El quiere encontrarse contigo para sanarte de toda enfermedad y dolencia, del cuerpo o del alma (material o espiritual). A pesar de los dictmenes mdicos, o la forma de pensar de los que te rodean; pues para Dios nada es imposible. Jess simplemente est pasando por tu ciudad ahora. El sigue caminando por todo lugar donde se lleve el mensaje del Reino de Dios. Jess puede realizar grandes transformaciones donde se predique su palabra.

Grandes signos se siguen realizando hoy por mano de aquellos que creen en Jess, dando cumplimiento a su palabra. Los milagros que Jess sigue haciendo se cuentan por millares. En cada vida existe una manifestacin amorosa de Dios. Pregunte a 10 personas cercanas si han recibido alguna manifestacin de Dios, y te sorprenders con la respuesta. Hoy es un da muy especial porque Jess est pasando a tu lado. Qu podr suceder? Tienes alguna pregunta para hacerle? Quieres algo de l? Podr hacer algo por ti? Crees que vale la pena encontrarse con l? Cul es tu necesidad fundamental? Buscas una respuesta?No contines la lectura de este libro sin plantear una posible intervencin de Dios en tu vida. Qu quieres que El haga por ti?Suspende por unos momentos la lectura y escribe en un papel lo que quieres que se resuelva en tu vida, la respuesta de Dios para superar la situacin que ests viviendo: enfermedades del cuerpo o del alma, situaciones interpersonales, algn vicio que te agobia, un proyecto por realizar, un ministerio pendiente, un aspecto del carcter a cambiar que compromete tu felicidad, un negocio en mente; en fin, Si te encuentras con Jess qu le pides?CULTIVANDO LA PALABRA.B.- Profundizacin. Realiza la sugerencia propuesta.

Qu pensamiento le llam la atencin? (comparte en grupo)C.- Compromiso.

A qu te comprometes?D.- Guarda en tu corazn una cita bblica.

E.- Oracin.

Convierte en oracin lo que te llam la atencin, pidiendo fortaleza para cumplir el compromiso con el respaldo de la cita bblica seleccionada.

Encuentre motivos para orar en familia o grupo.2.- ENCUENTRO PERSONALIZADO. 2Y sucedi que un varn llamado Zaqueo, que era jefe de los publicanos, y rico,A.- Pida al Espritu Santo su compaa para entender la Bendita Palabra de Dios. (Oracin)

Todo encuentro con Jess es personal. Nunca promueve el anonimato porque no le es indiferente la situacin de cada ser humano. Este relato hace referencia a un hombre llamado Zaqueo, con unas caractersticas que lo identifican. Era un jefe de publicanos, recaudador de impuestos y adems muy rico. En la Biblia se encuentra el dato de los tributos e impuestos que el pueblo paga a las autoridades, sea del rey o del templo. En muchos casos los tributos son impuestos que resultan de la prdida de una guerra. El rey ganador impone un tributo de proteccin y sometimiento.

En muchos casos los tributos son recaudos para el desarrollo de alguna obra o el pago de un servicio.

Lo cierto es que la prctica del tributo o los impuestos en la Biblia se ve a lo largo de todo su desarrollo, como las dos dracmas, que era el impuesto anual que se pagaba para el mantenimiento del templo: 24Cuando llegaron a Capernaum, vinieron a Pedro los que cobraban las dos dracmas,f y le dijeron: Vuestro Maestro no paga las dos dracmas? 25El dijo: S. Y al entrar l en casa, Jess le habl primero, diciendo: Qu te parece, Simn? Los reyes de la tierra, de quines cobran los tributos o los impuestos? De sus hijos, o de los extraos? 26Pedro le respondi: De los extraos. Jess le dijo: Luego los hijos estn exentos. 27Sin embargo, para no ofenderles, ve al mar, y echa el anzuelo, y el primer pez que saques, tmalo, y al abrirle la boca, hallars un estatero;7 tmalo, y dselo por m y por ti. (Mateo 17:24-27)En tiempos de Jess, el Imperio Romano ejerce dominio sobre los pueblos conquistados; Judea, provincia romana, es sometida a este dominio imperial y con ello estaba obligada a tributar.

A pesar de que existe en la cultura de los judos el precepto bblico del tributo al servicio del templo o como impuesto de guerra, los publicanos no son bien vistos por los habitantes del lugar por los siguientes motivos:

1.- Un recaudador de impuestos frecuentemente era culpable de extorsin: 12Vinieron tambin unos publicanos para ser bautizados,e y le dijeron: Maestro, qu haremos? 13l les dijo: No exijis ms de lo que os est ordenado. (Lucas 3:12-13)

2.- Eran clasificados juntamente con los pecadores ms bajos: 10Y aconteci que estando l sentado a la mesa en la casa, he aqu que muchos publicanos y pecadores, que haban venido, se sentaron juntamente a la mesa con Jess y sus discpulos. (Mateo 9:10)3.- Son interesados: 46Porque si amis a los que os aman, qu recompensa tendris? No hacen tambin lo mismo los publicanos? (Mateo 5:46)4.- No es una persona para imitar: 11El fariseo, puesto en pie, oraba consigo mismo de esta manera: Dios, te doy gracias porque no soy como los otros hombres, ladrones, injustos, adlteros, ni aun como este publicano; (Lucas 18:11) 5.- Es considerado igual a un pagano (gentil). Alguien que no es del pueblo de Dios: 17Si no los oyere a ellos, dilo a la iglesia; y si no oyere a la iglesia, tenle por gentil y publicano. (Mateo 18:17)

Este es el retrato de Zaqueo, el hombre del relato que tiene un encuentro personal con Jess. Recuerda que Jess dijo que los sanos no necesitan mdico sino los enfermos. Y Jess vino por los pecadores, por nosotros que no somos perfectos pero que necesitamos de l como la tierra reseca necesita del agua para que la semilla germine y fructifique. Mira tu situacin personal y no creas que es imposible un encuentro con Jess. El quiere encontrarse contigo ahora, a pesar de todo: de tu pasado o presente, de que otro o t mismo piense que no eres digno de eso; a pesar de que creas que no hay salida para tu problema, de que no tengas claro el rumbo de tu existencia. Solo anhela una experiencia ms cercana con Dios, Jess est interesado en encontrarse contigo.

CULTIVANDO LA PALABRA.

B.- Profundizacin.

Qu pensamiento te llam la atencin? (comparte en grupo)

C.- Compromiso.

Cul es tu compromiso? (Comparte)D.- Guarda en tu corazn una cita bblica.

E.- Oracin.


Encuentra motivos para orar en familia o grupo.

3.- QUIERES SABER QUIEN ES JESS?

3procuraba ver quin era Jess; A.- Pide al Espritu Santo su compaa para entender la Bendita Palabra de Dios. (Oracin)El texto revela que Zaqueo se esfuerza por mirar a Jess. Ciertamente haba escuchado hablar de los milagros y del poder que proceda de Dios a travs de l. Pero Zaqueo ante todo quiere saber quin es Jess, tiene motivos personales para buscar un encuentro con l.La bsqueda de Zaqueo revela que la riqueza material no es suficiente para dar sentido a la existencia llenando cualquier vaco. El anhelo de conocer a Jess responde a una necesidad existencial que lo material no puede colmar. Este hombre rico, y adems jefe de publicanos, quiere ir ms all de lo que significa las riquezas materiales y el reconocimiento pblico: quiere un encuentro personal con Jess. Este deseo de ver quin es Jess, revela el inters por lograr un encuentro, pero al mismo tiempo, ese inters brota de una necesidad. Qu necesidad tendra Zaqueo? De entrada podemos afirmar que su riqueza material y su posicin social no satisfacen su necesidad fundamental, y por ese motivo busca ver quin es Jess.Jess es el valor que llena toda necesidad. El es el Supremo Bien que saca de la indiferencia a todo ser humano. Tiene la capacidad de llenar cualquier vaco en la persona que lo busca de corazn. Es importante preguntarse, a la luz de la Biblia, cules son los motivos por los que la gente busca a Jess: 42Cuando ya era de da, sali y se fue a un lugar desierto; y la gente le buscaba, y llegando a donde estaba, le detenan para que no se fuera de ellos. (Lucas 4:42)Te presento doce motivos por los cuales alguien intentara buscar a Jess:

1. Jess es el principio y el fin de todas las cosas: Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin. Al que tuviere sed, yo le dar gratuitamenteh de la fuente del agua de la vida. (Apocalipsis 21: 6). Jess ofrece sentido a la existencia del ser humano.2. Jess es sanidad: 24Y se difundi su fama por toda Siria; y le trajeron todos los que tenan dolencias, los afligidos por diversas enfermedades y tormentos, los endemoniados, lunticos y paralticos; y los san. (Mateo 4:24). 3. Jess es resurreccin y vida: 25Le dijo Jess: Yo soy la resurreccin y la vida; el que cree en m, aunque est muerto, vivir. (Juan 11:25).4. Jess es manifestacin del Padre: 10No crees que yo soy en el Padre, y el Padre en m? Las palabras que yo os hablo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el Padre que mora en m, l hace las obras. (Juan 14:10). 30Yo y el Padre uno somos. (Juan 10:30)

5. Jess es la luz: 12Otra vez Jess les habl, diciendo: Yo soy la luz del mundo;b el que me sigue, no andar en tinieblas, sino que tendr la luz de la vida. (Juan 8:12). Con Jess es posible salir de las tinieblas del pecado, vicio o error.6. Jess es el camino, la verdad y la vida: 6Jess le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por m. (Juan 14:6). No hay otro camino para llegar al Padre.7. Jess es la fuente de todo tesoro de la sabidura y el conocimiento: a fin de conocer el misterio de Dios el Padre, y de Cristo, 3en quien estn escondidos todos los tesoros de la sabidura y del conocimiento. (Colosenses 2:2-3)8. En Jess se haya descanso para el alma: 28Venid a m todos los que estis trabajados y cargados, y yo os har descansar. 29Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de m, que soy manso y humilde de corazn; y hallaris descanso para vuestras almas; (Mateo 11:28-29)9. En Jess se reactiva la esperanza: 7en quien tenemos redencin por su sangre, el perdn de pecadosb segn las riquezas de su gracia, (Efesios 1:7)10. Jess es fuente para la accin exitosa: el que permanece en m, y yo en l, ste lleva mucho fruto; porque separados de m nada podis hacer. (Juan 15:5).11. Jess es salvacin: 12Y en ningn otro hay salvacin; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos. (Hechos 4:12). Jess adems es la puerta de la salvacin (Juan 10:9) y el Buen Pastor (Juan 10:11)12. Jess es libertad: 36As que, si el Hijo os libertare, seris verdaderamente libres. (Juan 8:36)Zaqueo saba lo que decan de Jess, le haban hablado de sus enseanzas, signos y milagros maravillosos. El tiene motivos para anhelar un encuentro con Jess y hacerle muchas preguntas. Ciertamente su preocupacin no tiene que ver con ganar riquezas, pero su necesidad revela que algo le hace falta; busca lo que la riqueza material no le ofrece. Esta actitud lo distancia del comportamiento de los ricos, e inmediatamente lo ubica frente a las palabras de Jess: De cierto os digo, que difcilmente entrar un rico en el reino de los cielos. 24Otra vez os digo, que es ms fcil pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios. (Mateo 19:23-24). Zaqueo busca una mayor riqueza, aquella que no se destruye: el encuentro con Jess que transforma la vida. Jess quiere encontrarse hoy con la humanidad para ofrecerle su mayor riqueza: el Reino de Dios y su justicia, con la certeza de que lo dems (lo material que hace posible suplir necesidades humanas), vendr por aadidura. (Mateo 6:35)


B.- Profundizacin.


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E.- Oracin.



4.- PEQUEO DE ESTATURA?.

pero no poda a causa de la multitud, pues era pequeo de estatura. A.- Pide al Espritu Santo su compaa para entender la Bendita Palabra de Dios. (Oracin)Cuando se emprende la realizacin de un objetivo, aparecen los obstculos. Nada es fcil en la vida. Todo tiene un costo. En este caso, Zaqueo era pequeo de estatura y la multitud se convierte en el obstculo que le impide ver a Jess.La multitud est ah, ella es igual para todos los que intenten acercase a Jess. Ella es un obstculo para el encuentro de Zaqueo y Jess. Las multitudes siguen a Jess porque estn enfermos, cautivos, sin esperanza, tienen sed de Dios, buscan un encuentro para resolver sus problemas. Y Jess siente compasin por ellos porque estn como ovejas sin pastor: en peligro, sin orientacin y a la deriva: 36Y al ver las multitudes, tuvo compasin de ellas; porque estaban desamparadas y dispersas como ovejas que no tienen pastor.f. (Mateo 9:36)La Biblia relata muchas circunstancias donde la multitud es un obstculo para el encuentro salvfico con Jess:

1.- 1Entr Jess otra vez en Capernaum despus de algunos das; y se oy que estaba en casa. 2E inmediatamente se juntaron muchos, de manera que ya no caban ni aun a la puerta; y les predicaba la palabra. 3Entonces vinieron a l unos trayendo un paraltico, que era cargado por cuatro. 4Y como no podan acercarse a l a causa de la multitud, descubrieron el techo de donde estaba, y haciendo una abertura, bajaron el lecho en que yaca el paraltico. (Marcos 2:1-4). La multitud, en este caso, impide el encuentro con Jess al bloquear la entrada. Pero la fe de los que llevan al paraltico es tan grande que los impulsa a realizar todo lo necesario para entrar: hasta quitar el techo de la casa para llegar a Jess. Ellos asumen las consecuencias de esa decisin. Una persona sin fe, al considerar que es imposible entrar por la puerta, abandona todo buen propsito. Pero la fe hace que florezca la creatividad y encuentra el recurso para estar con Jess, logrando lo esperado. Creo que este texto revela por lo menos tres propsitos: 1) Los que cargan al paraltico, que realmente son los que actan, saben del poder de Jess, ellos creen que Jess puede sanar al paraltico, 2) debe existir un vnculo muy fuerte entre estos hombres y el paraltico para tomar una decisin de ingresar por el techo y no claudicar en el intento y, 3) esta fe y el vnculo con el paraltico son los motores inspiradores de la accin; una accin fortalecida en la fe de Jess, pero tambin el amor al paraltico. Cuando existen estos tres elementos en el logro de un objetivo, ciertamente nada os ser imposible.2.- 24Fue, pues, con l; y le segua una gran multitud, y le apretaban. 25Pero una mujer que desde haca doce aos padeca de flujo de sangre, 26y haba sufrido mucho de muchos mdicos, y gastado todo lo que tena, y nada haba aprovechado, antes le iba peor, 27cuando oy hablar de Jess, vino por detrs entre la multitud, y toc su manto. (Marcos 5:24-27). En este caso, de igual manera, la multitud impide que la mujer se acerque y pida a Jess la sanidad. Sin embargo, porque saba que Jess poda sanarla solo con el toque de su manto, ella se abri paso en medio de la multitud que apretaba a Jess, y logr su objetivo. El texto revela tres momentos importantes: 1) La mujer cree que Jess puede sanarla con solo tocar su manto, 2) hace doce aos que padece de esa dolencia y no quiere seguir con ella porque ha gastado todos sus bienes; y 3) la fe y el rechazo a la enfermedad que humilla e inutiliza son los motores que la impulsan a la accin para abrirse paso en medio de la multitud y tocar el manto de Jess.3.- 37Al da siguiente, cuando descendieron del monte, una gran multitud les sali al encuentro. 38Y he aqu, un hombre de la multitud clam diciendo: Maestro, te ruego que veas a mi hijo, pues es el nico que tengo; 39y sucede que un espritu le toma, y de repente da voces, y le sacude con violencia, y le hace echar espuma, y estropendole, a duras penas se aparta de l. 40Y rogu a tus discpulos que le echasen fuera, y no pudieron. 41Respondiendo Jess, dijo: Oh generacin incrdula y perversa! Hasta cundo he de estar con vosotros, y os he de soportar? Trae ac a tu hijo. 42Y mientras se acercaba el muchacho, el demonio le derrib y le sacudi con violencia; pero Jess reprendi al espritu inmundo, y san al muchacho, y se lo devolvi a su padre. 43Y todos se admiraban de la grandeza de Dios. (Lucas 9:37-43)Este padre de familia no se da por vencido a pesar de que los discpulos de Jess haban orado por su hijo, sin lograr el resultado esperado. El pap no se resigna a la enfermedad, l sabe que Jess puede sanarlo y desde la multitud clama. El padre de familia est convencido que Jess puede sanar a su hijo y por eso lo busca, a pesar de que la multitud se lo impide.4.- 35Aconteci que acercndose Jess a Jeric, un ciego estaba sentado junto al camino mendigando; 36y al or a la multitud que pasaba, pregunt qu era aquello. 37Y le dijeron que pasaba Jess nazareno. 38Entonces dio voces, diciendo: Jess, Hijo de David, ten misericordia de m! 39Y los que iban delante le reprendan para que callase; pero l clamaba mucho ms: Hijo de David, ten misericordia de m! 40Jess entonces, detenindose, mand traerle a su presencia; y cuando lleg, le pregunt, 41diciendo: Qu quieres que te haga? Y l dijo: Seor, que reciba la vista. 42Jess le dijo: Recbela, tu fe te ha salvado. (Lucas 18:35-42El relato manifiesta claramente que la multitud se convierte en una barrera para el encuentro con Jess. Pero este ciego, al saber que Jess es el que pasa, tiene certeza, por lo que ha odo hablar de l, que Jess puede sanarlo. No le importa la multitud que lo reprende y manda callar. El clama mucho ms, con la fe en Jess. Es ah donde se abre la puerta de su milagro para alcanzar lo esperado. La fe se convierte en el motor que impulsa a la accin para alcanzar el amor de Jess. 5.- 3En stos yaca una multitud de enfermos, ciegos, cojos y paralticos, que esperaban el movimiento del agua. 4Porque un ngel descenda de tiempo en tiempo al estanque, y agitaba el agua; y el que primero descenda al estanque despus del movimiento del agua, quedaba sano de cualquier enfermedad que tuviese. 5Y haba all un hombre que haca treinta y ocho aos que estaba enfermo. 6Cuando Jess lo vio acostado, y supo que llevaba ya mucho tiempo as, le dijo: Quieres ser sano? 7Seor, le respondi el enfermo, no tengo quien me meta en el estanque cuando se agita el agua; y entre tanto que yo voy, otro desciende antes que yo. 8Jess le dijo: Levntate, toma tu lecho, y anda. (Juan 5:3-8)En este relato la fe se manifiesta a travs de la insistencia del enfermo cuando acude cada da al estanque, esperando que el ngel agite las aguas para recibir sanacin. Su persistencia se hace an ms fuerte, a pesar de los mltiples fracasos que ha tenido porque otro le gana el turno. El enfermo cree que a l tambin le llegar su hora. La sanidad que desea recibir est condicionada a la posibilidad de ser el primero que baje al estanque, pero la multitud se lo impide por su invalidez. Jess viendo su fe, lo sana, an ante la imposibilidad manifiesta del enfermo. Este relato nos ensea que la multitud nunca ser un impedimento para alcanzar sanidad cuando se busca un encuentro personal con Jess.6.- Dijo Jess: Quitad la piedra. Marta, la hermana del que haba muerto, le dijo: Seor, hiede ya, porque es de cuatro das. 40Jess le dijo: No te he dicho que si crees, vers la gloria de Dios? 41Entonces quitaron la piedra de donde haba sido puesto el muerto. Y Jess, alzando los ojos a lo alto, dijo: Padre, gracias te doy por haberme odo. 42Yo saba que siempre me oyes; pero lo dije por causa de la multitud que est alrededor, para que crean que t me has enviado. 43Y habiendo dicho esto, clam a gran voz: Lzaro, ven fuera! (Juan 11:39-43).Jess realiza el milagro a pesar de la incredulidad de la multitud. La incredulidad nunca ser un impedimento cuando Jess quiere manifestar su gloria. Cuando Jess dice Si crees vers la gloria de Dios no est condicionando su accin salvfica a la fe de la multitud, por eso concluye diciendo: Yo saba que siempre me oyes. Quitad la piedra es el pedido de Jess a retirar todo aquello que impide un encuentro con el Dios de la vida. 7.- 13Y le presentaban nios para que los tocase; y los discpulos reprendan a los que los presentaban. 14Vindolo Jess, se indign, y les dijo: Dejad a los nios venir a m, y no se lo impidis; porque de los tales es el reino de Dios. (marcos 10:13-14)

En este caso los discpulos impiden a los nios tener un encuentro con Jess.8.- 13Mas ay de vosotros, escribas y fariseos, hipcritas! porque cerris el reino de los cielos delante de los hombres; pues ni entris vosotros, ni dejis entrar a los que estn entrando. (Mateo 23:13)

Los escribas y fariseos, con su sistema religioso que desconoce el amor de Dios, se constituyen en muralla que impide el encuentro con Jess. Los fariseos representan la clase religiosa que pretende tener la verdad de Dios y se consideran as mismo los nicos santos. Ellos se identifican como conocedores de los mandamientos de la ley y se gloran de seguirla al pie de la letra. Pero Jess es claro al decirles que son obstculo: ni entris vosotros, ni dejis entrar a los que estn entrando.

9.- 19Entonces su madre y sus hermanos vinieron a l; pero no podan llegar hasta l por causa de la multitud. 20Y se le avis, diciendo: Tu madre y tus hermanos estn fuera y quieren verte. 21l entonces respondiendo, les dijo: Mi madre y mis hermanos son los que oyen la palabra de Dios, y la hacen. (Lucas 8:19-21)En este caso, el camino para lograr un encuentro con Jess a pesar de la multitud, es or la palabra de Dios y ponerla en prctica. Jess muestra en este relato que ninguna multitud puede impedir o perturbar ese encuentro, incluso tratndose de su madre y sus hermanos.El relato central que ocupa las reflexiones de este libro menciona que la multitud impide a Zaqueo ver quin es Jess. Es decir que la multitud se convierte en obstculo para ver a Jess. Recuerde que Zaqueo es de baja estatura.

La estatura, en trminos espirituales, no es una condicin que impida el encuentro con Jess. La Biblia siempre utilizar el imperativo Levntate para aproximar al ser humano a un encuentro con Dios. Al ordenar levantarse, queda manifiesta la condicin de estar en el suelo, en el piso, cado: condicin anloga, en muchos casos, al que est en pecado o enfermo: 18Me levantar e ir a mi padre, y le dir: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti. 19Ya no soy digno de ser llamado tu hijo; hazme como a uno de tus jornaleros. (Lucas 15:18-19).Y en el caso de los enfermos: 24Pues para que sepis que el Hijo del Hombre tiene potestad en la tierra para perdonar pecados (dijo al paraltico): A ti te digo: Levntate, toma tu lecho, y vete a tu casa. (Lucas 5:24)Cul es la condicin que impide la aproximacin de Zaqueo a Jess?

Para el que vive a ras de tierra, el primer obstculo es el lmite de su horizonte. Pero cuando subimos la montaa, los obstculos quedan abajo y el horizonte se hace mucho ms amplio.Y a ti Qu te impide un encuentro con Jess?, recuerda que la condicin de baja estatura no es impedimento para lograrlo. Trata de identificar aquello que no te ha permitido hasta ahora un encuentro con Jess: las creencias religiosas, la iglesia, tu pasado, tu cultura, tu condicin social, tu formacin, las personas que viven contigo, la falta de tiempo, no interesarse en estos temas, un vicio, la poca fe. Procura dar un paso de fe rompiendo toda barrera que te impida encontrarte con Jess. El quiere restaurar tu vida y llevarte a un nivel de excelencia para que experimentes la alegra de vivir con la plena libertad de los hijos de Dios. El quiere romper ahora las cadenas que te esclavizan. Suea con una vida mejor, cree que con Jess todo es posible. Busca a quien puede dar sentido a tu existencia, hay una oportunidad para ti: Jess. CULTIVANDO LA PALABRA.

B.- Profundizacin.


C.- Compromiso.



E.- Oracin.



5.- HAY QUE SUBIR4Y corriendo delante, subi a un rbol sicmoro para verle; porque haba de pasar por all.A.- Pide al Espritu Santo su compaa para entender la Bendita Palabra de Dios. (Oracin)Ante la barrera de la multitud que impide ver a Jess, Zaqueo toma la decisin de subir a un rbol. No se da por vencido. Es un hombre que tiene claro lo que quiere y sabe cmo conseguirlo. La multitud no tiene suficiente capacidad para frustrar la empresa de Zaqueo.

Es importante notar la actitud que mueve a Zaqueo a subir al rbol. El lo hace corriendo. Es decir, con diligencia, con decisin firme.

Zaqueo despus que identifica el problema, que siente la barrera de la multitud, busca en forma creativa una alternativa para hacerle frente al obstculo que se le presenta. El no desiste, sino que, al contrario, persiste en alcanzar su propsito. Pienso que, de acuerdo a lo que pudimos observar en aquellos que se enfrentan al bloqueo de la multitud, la fe ilumina el camino correcto para que Zaqueo encuentre el rbol adecuado en el lugar preciso por donde pasa Jess.En el contexto bblico el verbo subir est muy asociado al encuentro con Dios por medio de la oracin. Se trata de subir al monte de Dios. Cuando la Biblia cuenta que alguien va hacia Jerusaln (el lugar del encuentro con Dios en el templo) siempre est acompaado del verbo subir, evidenciado la accin necesaria para aproximarse a la Ciudad Santa, al Templo de Dios.

Cuando se trata de la oracin, tambin la Biblia mantiene la constante de subir al monte.

Con estos antecedentes podemos comprender que la accin de Zaqueo, al subir al rbol, se ubica en un contexto de oracin buscando el encuentro con Dios. No es una oracin que se queda quieta ante la imposibilidad de ver a Jess, por su condicin y la multitud que se lo impide. Ahora que tu fe se ha hecho ms slida, encontrars la luz que ilumina el sendero en tu existencia. Es la accin de Jess en tu vida. Puedo sentir en este mismo instante lo que Dios est haciendo por ti, el cambio que ests experimentando en tu entendimiento, se trata de su presencia viva. Algo hermoso est sucediendo en tu interior, en tu cuerpo y en tu mente. Agradece a Dios porque l hizo que este encuentro sea posible. (La gloria es para Dios)Ahora tienes motivos para orar a otro nivel. Nunca olvides este momento y persiste en la oracin contnua. La oracin es el espacio privilegiado de encuentro con Dios.

La Biblia nos muestra que Jess sube al monte a orar: 23Despedida la multitud, subi al monte a orar aparte; y cuando lleg la noche, estaba all solo. (Mateo 14:23). Jess ensea a sus discpulos que es necesario orar para no caer en tentacin (Lucas 22:39-40) 39Y saliendo, se fue, como sola, al monte de los Olivos; y sus discpulos tambin le siguieron. 40Cuando lleg a aquel lugar, les dijo: Orad para que no entris en tentacin. Recuerden que el objetivo final de la tentacin es el pecado, y con ello la muerte: 13Cuando alguno es tentado, no diga que es tentado de parte de Dios; porque Dios no puede ser tentado por el mal, ni l tienta a nadie; 14sino que cada uno es tentado, cuando de su propia concupiscencia es atrado y seducido. 15Entonces la concupiscencia, despus que ha concebido, da a luz el pecado; y el pecado, siendo consumado, da a luz la muerte. (Santiago 1: 13-15)Soportar la tentacin, por medio de la oracin, trae consigo una gran recompensa: 12Bienaventurado el varn que soporta la tentacin; porque cuando haya resistido la prueba, recibir la corona de vida, que Dios ha prometido a los que le aman. (Santiago 1:12)El templo de Dios es el lugar privilegiado de la oracin, el espacio reservado para que el hombre se encuentre con l. En el Antiguo Testamento el templo es un lugar fsico, una construccin material. En el Nuevo Testamento, el Templo de Dios es el ser humano que acepta a Jess para que gobierne su vida: 16No sabis que sois templo de Dios, y que el Espritu de Dios mora en vosotros?e (1Corintios 3:16)

Jess dice que l es mayor que el templo (Mateo 12:6), es decir que en l se realiza el encuentro con Dios. Cuando Jess entra en el Templo de Jerusaln descubre que La casa de Oracin la han convertido en cueva de ladrones : 45Y entrando en el templo, comenz a echar fuera a todos los que vendan y compraban en l, 46dicindoles: Escrito est: Mi casa es casa de oracin;e mas vosotros la habis hecho cueva de ladrones.f (Lucas 19:45-46). Esta accin proftica de Jess, de echar fuera a los ladrones del templo es equivalente a lo que hace con los demonios: 16Y cuando lleg la noche, trajeron a l muchos endemoniados; y con la palabra ech fuera a los demonios, y san a todos los enfermos; (Mateo 8:16). Jess reprende a los demonios y los echa fuera. El diablo es el padre de los demonios y sus obras son: 1.- El diablo es el enemigo que siembra la cizaa junto a la buena semilla de la palabra de Dios (Mateo 13:39)

2.- El diablo es el que roba la semilla que cae en el terreno de aquellos que escuchan la palabra y no la entienden: 11Esta es, pues, la parbola: La semilla es la palabra de Dios. 12Y los de junto al camino son los que oyen, y luego viene el diablo y quita de su corazn la palabra, para que no crean y se salven. (Lucas 8:11).

3.- El diablo es padre de mentira y homicida: 43Por qu no entendis mi lenguaje? Porque no podis escuchar mi palabra. 44Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queris hacer. El ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en l. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira. (Juan 8:43-44)

4.- El diablo es el adversario del hombre: 8Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como len rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar; (1Pedro 5:8)5.- Es padre de los que no hacen justicia y no aman al hermano: 10En esto se manifiestan los hijos de Dios, y los hijos del diablo: todo aquel que no hace justicia, y que no ama a su hermano, no es de Dios. (1Juan 3:10)

El Apstol Pablo en su carta a los Efesios menciona que: 12 no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes. (Efesios 6:12). Y por lo tanto es necesario seguir su recomendacin: 10Por lo dems, hermanos mos, fortaleceos en el Seor, y en el poder de su fuerza. 11Vestos de toda la armadura de Dios, para que podis estar firmes contra las asechanzas del diablo. (Efesios 6:10-11).En este sentido, la oracin del cristiano debe asemejarse a la accin proftica de Jess cuando echa fuera aquellos que haban convertido la Casa de Oracin en cueva de ladrones y que es igual a reprender los demonios y echarlos fuera. El cristiano, como templo de Dios, debe hacer de su casa un lugar de oracin y, para no caer en tentacin, debe echar fuera cualquier expresin diablica que intente robar la presencia de Dios en su vida. Debe asumir la autoridad que Jess dej a los que creen en su nombre: 17Y estas seales seguirn a los que creen: En mi nombre echarn fuera demonios; hablarn nuevas lenguas; 18tomarn en las manos serpientes, y si bebieren cosa mortfera, no les har dao; sobre los enfermos pondrn sus manos, y sanarn. (Marcos 16:17-18)


B.- Profundizacin.


C.- Compromiso.



E.- Oracin.



6.- JESS MIRA TU ESFUERZO5Cuando Jess lleg a aquel lugar, mirando hacia arriba, le vio, A.- Pide al Espritu Santo su compaa para entender la Bendita Palabra de Dios. (Oracin)Jess llega al lugar que t has escogido para encontrarte con l. Jess vio el gesto de Zaqueo. Dios mira todo el esfuerzo que una persona hace para lograr un encuentro con l. Dios se deja encontrar cuando la persona lo busca de todo corazn.El proceder de Dios expresado en la Biblia es que l siempre mira la condicin humana y responde al pedido que le hacen sus hijos que lo buscan de todo corazn. Dios no desconoce la situacin por la que est atravesando cada uno de sus hijos. Se trata de una mirada misericordiosa, con amor, entregando todo su corazn: para sanar, perdonar, redimir, salvar, libertar, rescatar: 7Dijo luego Jehov: Bien he visto la afliccin de mi pueblo que est en Egipto, y he odo su clamor a causa de sus exactores; pues he conocido sus angustias, 8y he descendido para librarlos de mano de los egipcios, y sacarlos de aquella tierra a una tierra buena y ancha, a tierra que fluye leche y miel (xodo 3:7-8). Es idntica la actitud compasiva de Jess frente a la multitud necesitada de Dios: 14Y saliendo Jess, vio una gran multitud, y tuvo compasin de ellos, y san a los que de ellos estaban enfermos. (Mateo 14:14).Jess mira para sanar, redimir, resucitar muertos, dar vista a los ciegos, liberar cautivos. Jess nunca mira para condenar. El levanta la mirada para amar, perdonar, sanar, consolar, librar de la muerte, llamar: 1.- El caso de la mujer enferma de flujo que toc el manto de Jess: 22Pero Jess, volvindose y mirndola, dijo: Ten nimo, hija; tu fe te ha salvado. Y la mujer fue salva desde aquella hora. (Mateo 9:22)

2.- Al joven rico: 21Entonces Jess, mirndole, le am, y le dijo: Una cosa te falta: anda, vende todo lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrs tesoro en el cielo; y ven, sgueme, tomando tu cruz. (Marcos 10:21)

3.- Con la mujer sorprendida en adulterio: 10Enderezndose Jess, y no viendo a nadie sino a la mujer, le dijo: Mujer, dnde estn los que te acusaban? Ninguno te conden? 11Ella dijo: Ninguno, Seor. Entonces Jess le dijo: Ni yo te condeno; vete, y no peques ms.(Juan 8:10-11).4.- A la suegra de Pedro: 14Vino Jess a casa de Pedro, y vio a la suegra de ste postrada en cama, con fiebre. 15Y toc su mano, y la fiebre la dej; y ella se levant, y les serva. (Mateo 8:14-15)

5.- Cuando llama a sus discpulos.6.- A la mujer que desde haca dieciocho aos tena espritu de enfermedad, y andaba encorvada: 12Cuando Jess la vio, la llam y le dijo: Mujer, eres libre de tu enfermedad. (Lucas 13:12).7.- En el lugar de las ofrendas: 1Levantando los ojos, vio a los ricos que echaban sus ofrendas en el arca de las ofrendas. 2Vio tambin a una viuda muy pobre, que echaba all dos blancas. 3Y dijo: En verdad os digo, que esta viuda pobre ech ms que todos. (Lucas 21:1-3)Toda accin que busque un encuentro con Jess tiene su respuesta. Ahora mismo El est mirando lo que sucede en tu corazn, el momento por el cual ests pasando. El te habla al corazn como la luz penetra en la oscuridad y deja ver lo que all existe. Porque Dios conoce el corazn del hombre, l es quien pesa las acciones (1Samuel 2:3). Al corazn contrito y humillado no despreciars t, oh Dios (Salmo 51: 17). Jess mira tu esfuerzo, el hecho de que sigas leyendo este libro me permite ver en ti el deseo de un encuentro con Jess. Ciertamente l atender tu pedido. Despus del encuentro con Jess no volvers a ser igual, tu vida empieza a cambiar. Las cosas de ahora en adelante no son igual porque sencillamente t ya no eres igual, algo extraordinario empez a formar parte de tu vida y eso te llevar a dimensiones que nunca habas imaginado. Todo es cuestin de alimentarlo, de prestarle atencin y hacer que crezca cada da a travs de tu oracin.

Me alegra que tu forma de pensar empiece a ser diferente.


B.- Profundizacin.


C.- Compromiso.



E.- Oracin.



7.- JESS SE AUTO-INVITA.y le dijo: Zaqueo, date prisa, desciende, porque hoy es necesario que pose yo en tu casa.

A.- Pide al Espritu Santo su compaa para entender la Bendita Palabra de Dios. (Oracin)Jess llama a Zaqueo por su nombre. El conoce su historia personal.

El llamamiento que Jess hace a Zaqueo tiene cuatro elementos que vale la pena tener en cuenta:

1.- Jess llama a Zaqueo por su nombre. Es una llamada personalizada. El nombre de cada uno identifica a la persona en su integralidad: lo que l es, hace y piensa hacer. No se puede hablar de acciones o actitudes en abstracto, ellas siempre estn relacionadas con una persona con nombre concreto. Jess llama a Zaqueo por su nombre y queda al descubierto lo que l es. Para Dios no hay nada oculto, y por eso a cada uno de nosotros nos llama por el nombre. 2.- Darse prisa revela la urgencia del encuentro con Jess. Un encuentro que no se puede aplazar. As como Zaqueo subi corriendo (de prisa) al rbol, ahora Jess lo invita a que baje con la misma actitud. Y ciertamente Zaqueo obedeci con prontitud. El encuentro con Jess es ahora, no es un asunto para pensar o dejarlo para otro momento. El darse prisa es apenas el resultado de un proceso que inicia en la gran necesidad de tener un encuentro con Jess, alguien que puede llenar todo vaco en el ser humano. El inters que existe es el que mueve a la accin de prisa. Cuando no hay inters, la gente no se mueve. Te interesa un cambio en tu vida?3.- Desciende. No es tiempo de seguir en el rbol. Es necesario volver a la realidad.

Es necesario subir a la montaa de la oracin para luego bajar a lo cotidiano con una actitud diferente: con alegra, esperanza y un espritu renovado. Es volver a encontrarse con las circunstancias pero desde una mentalidad totalmente nueva. Zaqueo sube al rbol porque quiere conocer a Jess, y ahora es tiempo de bajar para disfrutar de ese encuentro. Ya nada le impide ver a Jess. Ahora est frente al Seor. Y adems l le dice que quiere hospedarse en su casa. Su oracin-accin ha dado el resultado esperado.Cuando Moiss se encuentra orando frente al mar rojo, mientras los egipcios lo persiguen, escucha la voz de Dios que le dice: Por qu clamas a m? Di a los hijos de Israel que marchen. 16Y t alza tu vara, y extiende tu mano sobre el mar, y divdelo, y entren los hijos de Israel por en medio del mar, en seco. (xodo 14:15-16). Ya no es tiempo de orar, se trata de actuar. 4.- Jess se auto-invita. Necesita encontrarse con Zaqueo. Jess dice: 20He aqu, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entrar a l, y cenar con l, y l conmigo. (Apocalipsis 3:20).

Jess llama. El que abre la puerta de su corazn podr recibirlo. Jess tiene claro que l ha venido a buscar lo que se haba perdido (Lucas 19:10). Jess tiene una prioridad en su misin, l deja la multitud y busca a Zaqueo.

En este sentido se cumplen las palabras de Jess: 7Pedid, y se os dar; buscad, y hallaris; llamad, y se os abrir. 8Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrir. (Mateo 7:7-8)CULTIVANDO LA PALABRA.

B.- Profundizacin.


C.- Compromiso.



E.- Oracin.



8.- LO RECIBI EN SU CASA.6Entonces l descendi aprisa, y le recibi gozoso.A.- Pide al Espritu Santo su compaa para entender la Bendita Palabra de Dios. (Oracin)Zaqueo obedece aprisa cuando Jess le pide que descienda del rbol. Y en ese mismo momento y lugar lo recibe gozoso. Zaqueo responde con prontitud, con generosidad. Estas caractersticas son tpicas de las personas que estn gozosas. Sin embargo es necesario profundizar en las implicaciones de recibir a Jess con gozo.

Jess es la Palabra hecha carne. Cuando Jess narra una parbola que tiene que ver con aquello de recibir la palabra o semilla que el sembrador siembra, nos advierte que recibir la palabra con gozo no es garanta de xito en la cosecha. La persona que recibe la palabra con gozo, de acuerdo a la explicacin de la parbola, equivale a la semilla que cae entre las piedras: 5Parte cay en pedregales, donde no haba mucha tierra; y brot pronto, porque no tena profundidad de tierra; 6pero salido el sol, se quem; y porque no tena raz, se sec. (Mateo 13: 5-). Y cuando Jess explica la parbola, hace una analoga entre este terreno y la persona que recibe la palabra con gozo, pero: 20Y el que fue sembrado en pedregales, ste es el que oye la palabra, y al momento la recibe con gozo; 21pero no tiene raz en s, sino que es de corta duracin, pues al venir la afliccin o la persecucin por causa de la palabra, luego tropieza. (Mateo 13:20-21).En ese sentido no podemos quedarnos con el gozo como principal objetivo del encuentro con Jess, porque el gozo en s mismo no es garanta de que la semilla de la palabra o un encuentro con l produzca fruto. Muchos cristianos reciben hoy con gozo la palabra de Dios pero no la profundizan en su corazn, de tal manera que los lleve a transformar su vida prctica, que es donde realmente se debe ver el fruto.

El cristiano est llamado a dar fruto. Pero el gozo con el que se recibe la palabra no garantiza el fruto si la semilla no logra alcanzar la profundidad necesaria en el terreno del corazn.

El gozo se confunde con la incredulidad cuando Jess resucitado se presenta a sus discpulos: 41Y como todava ellos, de gozo, no lo crean, y estaban maravillados, les dijo: Tenis aqu algo de comer? (Lucas 24:41)Muchos cristianos hoy se mueven de gozo en gozo, buscando un mar de experiencias espirituales con un centmetro de profundidad. Muchos de ellos han sentido la presencia de Dios en sus vidas, pero as como llega, de forma inesperada, de igual forma desaparece de sus vidas porque no le dieron profundidad.

El comn de la gente acepta haber recibido un favor de Dios, que pronto olvidan con facilidad. O acaso no ha escuchado decir gracias a Dios no me pas nada- cuando fue librado de un peligro. El caso es que esa accin de Dios es suficiente para transformar la vida de cualquiera, pero el ser humano lo olvida fcilmente porque no le da la profundidad que requiere.

Recuerda el favor que Dios ha tenido contigo, l tiene la esperanza de que la semilla sembrada empiece a germinar transformando tu vida.Es necesario pasar del gozo, de la alegra del favor de Dios, a una transformacin autntica.Veamos dnde nos lleva el texto pasando por el gozo inicial de Zaqueo.CULTIVANDO LA PALABRA.

B.- Profundizacin.


C.- Compromiso.



E.- Oracin.



9:- UN TOQUE A LA CONCIENCIA.

7Al ver esto, todos murmuraban, diciendo que haba entrado a posar con un hombre pecador.A.- Pide al Espritu Santo su compaa para entender la Bendita Palabra de Dios. (Oracin)Zaqueo empieza a escuchar voces del exterior que llegan hasta su conciencia. Jess no dice nada, l simplemente est presente.

En el trnsito del gozo a la conciencia, el texto elabora la propuesta de un encuentro con Jess que transforma vidas.

El simple hecho de encontrarse con la Palabra hecha carne (Jess), cuando empieza a tocar el nivel de la conciencia, se hace posible el cambio.

La misin de Jess no es acusar a nadie. Esta actitud es tpica en los sacerdotes y fariseos del tiempo de Jess. Jess sabe que el ser humano es acusado por su propia conciencia cuando existen huellas de pecado, de la obra del que acusa (diablo-acusador), que recuerda al pecador su filiacin con lo diablico (es la manera que el diablo tiene para ejercer posesin sobre el pecador). Lo vemos en el relato de la mujer sorprendida en adulterio: Jess, inclinado hacia el suelo, escriba en tierra con el dedo. 7Y como insistieran en preguntarle, se enderez y les dijo: El que de vosotros est sin pecado sea el primero en arrojar la piedra contra ella.8E inclinndose de nuevo hacia el suelo, sigui escribiendo en tierra. 9Pero ellos, al or esto, acusados por su conciencia, salan uno a uno, comenzando desde los ms viejos hasta los postreros;

Jess, como es la luz del mundo, alumbra en las tinieblas y deja al descubierto las obras de los hombres. Quien recibe a Jess, ciertamente no caminar en tinieblas: 46Yo, la luz, he venido al mundo, para que todo aquel que cree en m no permanezca en tinieblas. (Juan 12:46).

En Zaqueo brill la luz de Jess porque empez a escuchar de manera diferente las voces de la multitud que murmuraba acerca de su condicin. En este momento, la semilla que inicialmente cae en pedregales y se manifiesta con el gozo, empieza a profundizar hasta un nivel de conciencia. El encuentro con Jess se realiza en el mbito de la conciencia. Cuando esto ocurre entonces el fruto no se hace esperar. Se produce la transformacin del ser humano: la conversin que lleva a la salvacin. Podemos argumentar que Zaqueo no es la primera vez que escucha de sus paisanos tales acusaciones, y adems, nunca haba pasado nada significativo en l. Lo que hace la diferencia en la vida de Zaqueo es que ahora Jess est en su casa, y esa presencia iluminadora tiene la capacidad de abrir un espacio en la conciencia de Zaqueo, que lo lleva a un cambio radical en su vida.Existe situaciones que son comunes para un gran nmero de personas, pero no todos las asumen de la misma manera. La situacin que para unos es una amenaza, para otros es una oportunidad. El gran regalo de ser cristiano es entender que tenemos la mente de Cristo y eso marca la diferencia en un mundo de angustia y sufrimiento, preocupacin y desesperanza.


B.- Profundizacin.


C.- Compromiso.



E.- Oracin.



10.- LA CONVERSIN ES UNA DECISIN.

8Entonces Zaqueo, puesto en pie, dijo al Seor: He aqu, Seor, la mitad de mis bienes doy a los pobres; y si en algo he defraudado a alguno, se lo devuelvo cuadruplicado.A.- Pide al Espritu Santo su compaa para entender la Bendita Palabra de Dios. (Oracin)Este es el fruto del toque de Jess en la vida de Zaqueo: la conversin.Cuando la presencia de Jess toca los niveles ms profundos de la conciencia personal, entonces es posible la conversin como ejercicio de la libertad para decidir. En ltimas, el ser humano decide cambiar despus de ser iluminado su interior.

El joven rico, cuando se encuentra con Jess y entabla una conversacin, no tuvo la suficiente capacidad para decidir entregarlo todo y seguirlo.

La bendicin, gracia, salvacin, es un regalo de Dios, pero es el hombre quien decide tomarla o dejarla: 26He aqu yo pongo hoy delante de vosotros la bendicin y la maldicin: 27la bendicin, si oyereis los mandamientos de Jehov vuestro Dios, que yo os prescribo hoy, 28y la maldicin, si no oyereis los mandamientos de Jehov vuestro Dios, y os apartareis del camino que yo os ordeno hoy, para ir en pos de dioses ajenos que no habis conocido. (Deuteronomio 11:26-28).La muerte y la vida tambin son elecciones de los hombres: 19A los cielos y a la tierra llamo por testigos hoy contra vosotros, que os he puesto delante la vida y la muerte, la bendicin y la maldicin; escoge, pues, la vida, para que vivas t y tu descendencia; (Deuteronomio 30:19)Zaqueo fue movido a la conversin, ciertamente haba pecado y tena bien claro que deba pagar lo defraudado. Su gesto desborda en generosidad porque empieza entregando la mitad de sus bienes a los pobres. Adems corre el riesgo de quedar sin riquezas cuando dice que si en algo he defraudado a alguno, se lo devuelvo cuadruplicado. Ciertamente Zaqueo era muy rico, pero me sorprende que si su riqueza estaba fundada en actos corruptos donde haba defraudado a mucha gente, con la decisin tomada, estaba corriendo el riesgo de quedarse sin nada. Cuando dice que entrega la mitad de sus riquezas a los pobres, Zaqueo se gana un espacio en el corazn de la multitud que lo acusa.

La segunda parte de su promesa est condicionada a un acto de fraude que hubiere cometido. El estaba muy seguro de que no haba defraudado a nadie, o por el contrario, estaba decidido a quedarse con la mayor riqueza que ahora acababa de entrar en su casa y que no la cambia por ningn tesoro en la tierra.Zaqueo encuentra un gran tesoro y ahora est dispuesto a entregarlo todo por tenerlo: 44Adems, el reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo, el cual un hombre halla, y lo esconde de nuevo; y gozoso por ello va y vende todo lo que tiene, y compra aquel campo.(Mateo 13:44)Zaqueo es un hombre que sabe hacer tesoros: 19No os hagis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orn corrompen,f y donde ladrones minan y hurtan; 20sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orn corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan. (Mateo 6:19-20)

Cul es tu mayor tesoro? Acaso Jess? El relato de Zaqueo debe movernos a elegir el mejor tesoro: la salvacin, la presencia de Jess y todo lo que esto significa. No olvide releer los motivos por los cuales alguien buscara un encuentro con Jess.CULTIVANDO LA PALABRA.

B.- Profundizacin.


C.- Compromiso.



E.- Oracin.



11.- EL TESORO DE LA SALVACIN.

9Jess le dijo: Hoy ha venido la salvacin a esta casa; por cuanto l tambin es hijo de Abraham.A.- Pide al Espritu Santo su compaa para entender la Bendita Palabra de Dios. (Oracin)Jess como invitado nunca tom la palabra. Todo el proceso lo realiza Zaqueo desde que baja gozoso y recibe a Jess, hasta la decisin de entregar sus bienes. Pero ahora, despus de la decisin de Zaqueo, Jess toma la palabra para decirle que ese es el camino de la salvacin. Zaqueo recibe el gran tesoro de la salvacin despus de entregar sus bienes. Hay un intercambio cualitativo de bienes en el relato. La salvacin solamente llega a la casa de Zaqueo cuando l toma una decisin. Que Jess haya entrado a la casa no es garanta de salvacin. Solo cuando el hombre elige la salvacin es que puede recibirla. Cierto da Jess entr en casa de Simn el fariseo (Lucas 7:36-50), pero quien recibi la salvacin fue una mujer pecadora: 50Pero l dijo a la mujer: Tu fe te ha salvado, ve en paz.(Lucas 7:50). Jess entr en casa de Simn el fariseo, pero l no recibi la salvacin.Y realmente Qu fue lo que recibi Zaqueo?

La Biblia afirma que la salvacin es gratuita y que como consecuencia de ella se pasa de la muerte a la vida, adems de experimentar una autntica condicin de resurreccin, a la medida de Cristo: 5aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristoa (por gracia sois salvos), 6y juntamente con l nos resucit, y asimismo nos hizo sentar en los lugares celestiales con Cristo Jess, 7para mostrar en los siglos venideros las abundantes riquezas de su gracia en su bondad para con nosotros en Cristo Jess. 8Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; (Ef2:5-8)La salvacin llega a la casa de Zaqueo porque l tambin es hijo de Abraham, y por lo tanto, heredero de las promesas hechas por Dios. Recuerde que el hijo de Abraham es Isaac, el de la promesa. Pero este ttulo se hace extensivo a todos los que en adelante se aaden al pueblo de Dios, a los que creen en Jess y hacen un pacto de vinculacin y pertenencia por medio de la fe: 7Sabed, por tanto, que los que son de fe, stos son hijos de Abraham.b (Glatas 3:7)Esa fue la salvacin que entr a la casa de Zaqueo y que hoy quiere entrar a tu vida. Es la misma presencia de Jess que trae consigo una gran promesa. Jess quiere hospedare en tu casa. Todo depende de ti. Cada uno conoce su verdad. Es posible engaar a muchos, pero nunca es posible engaarse a si mismo, a menos que la conciencia est enferma. Pero recuerda que Dios es mayor que la conciencia.CULTIVANDO LA PALABRA.

B.- Profundizacin.


C.- Compromiso.



E.- Oracin.



12.- JESS CUMPLE SU MISIN. 10Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se haba perdido.aA.- Pide al Espritu Santo su compaa para entender la Bendita Palabra de Dios. (Oracin)Las palabras de Jess cierran el relato, revelando el objetivo de aquel encuentro, y con l, la condicin original de Zaqueo: que estaba perdido. La condicin del que se encuentra perdido, a la luz de la revelacin Bblica, la podemos ver en el relato del Hijo prdigo: Un hombre tena dos hijos; 12y el menor de ellos dijo a su padre: Padre, dame la parte de los bienes que me corresponde; y les reparti los bienes. 13No muchos das despus, juntndolo todo el hijo menor, se fue lejos a una provincia apartada; y all desperdici sus bienes viviendo perdidamente. 14Y cuando todo lo hubo malgastado, vino una gran hambre en aquella provincia, y comenz a faltarle. 15Y fue y se arrim a uno de los ciudadanos de aquella tierra, el cual le envi a su hacienda para que apacentase cerdos. 16Y deseaba llenar su vientre de las algarrobas que coman los cerdos, pero nadie le daba. 17Y volviendo en s, dijo: Cuntos jornaleros en casa de mi padre tienen abundancia de pan, y yo aqu perezco de hambre! 18Me levantar e ir a mi padre, y le dir: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti. 19Ya no soy digno de ser llamado tu hijo; hazme como a uno de tus jornaleros. 20Y levantndose, vino a su padre. Y cuando an estaba lejos, lo vio su padre, y fue movido a misericordia, y corri, y se ech sobre su cuello, y le bes. 21Y el hijo le dijo: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti, y ya no soy digno de ser llamado tu hijo. 22Pero el padre dijo a sus siervos: Sacad el mejor vestido, y vestidle; y poned un anillo en su mano, y calzado en sus pies. 23Y traed el becerro gordo y matadlo, y comamos y hagamos fiesta; 24porque este mi hijo muerto era, y ha revivido; se haba perdido, y es hallado. Y comenzaron a regocijarse. (Lucas 15:11-24).

Estar perdido, a la luz de este relato bblico es ubicarse por debajo de la condicin de los cerdos, que tienen alimento. Es una condicin que llega como consecuencia de una mala decisin: haber destruido la riqueza que el Padre le haba dado, viviendo perdidamente.Pero la misericordia de Dios se manifiesta como amor, incluso en las peores condiciones en que se encuentre el ser humano. Dios est buscando a todo aquel que se ha perdido, su propsito es restaurar la condicin original en que fueron creados para hacerlos hijos de Dios por el sacrificio de Jess, su hijo. La misin de Jess es buscar y salvar a todo aquel que ha destruido la imagen de Dios en que ha sido creado. Aquellos que han destruido su riqueza interior porque han permitido que en su corazn germinen semillas de odio, resentimiento, venganza, ira, envidia, y toda clase de vicios que producen frutos de amargura, violencia, infelicidad y frustracin. Hombres y mujeres esclavos del pecado, presa del alcoholismo, las drogas y toda clase de vicios que los mantienen atados. Hombres y mujeres que utilizan la libertad para auto-destruirse, alimentando un carcter que los hace infelices y les impide relacionarse con los otros en forma saludable. Como resultado, sus matrimonios se han destruido o mantienen relaciones insoportables, lastimando a su pareja y sembrando en sus hijos semillas de maltrato y amargura. Y Jess vino para buscar y salvar a todos aquellos que estn perdidos y toman conciencia de esta condicin. Jess es el nico camino para restaurar la imagen de esta humanidad bajo el poder de las tinieblas y de la potestad de Satans. Jess es el nico camino de la verdadera felicidad. Cuando el hijo prdigo tom conciencia de la situacin en que se encontraba y record la experiencia de abundancia en casa de su padre, tuvo la suficiente capacidad para aceptar que haba pecado, pero tambin la decisin de levantarse y encaminarse junto a su padre. El no peda sino que su padre lo tratase como a uno de sus jornaleros, pero el amor del padre, su perdn y misericordia llega ms all: restaur su dignidad perdida devolvindole la condicin de hijo y hacindolo nuevamente partcipe de sus mejores bienes. Esto es lo que hace Dios cuando un hijo perdido regresa a casa. Esas fueron las palabras de Jess por la conversin de Zaqueo, l tambin era cobijado por la promesa de la descendencia de Abraham. CULTIVANDO LA PALABRA.

B.- Profundizacin.


C.- Compromiso.



E.- Oracin.



CONCLUSION.

Al concluir estas reflexiones, el mensaje que debe quedar en tu corazn es que Jess hoy quiere hospedarse en tu casa para ofrecerte el cambio que siempre has deseado pero que no has podido lograr. Porque lo que es imposible para el hombre es posible para Dios. El puede restaurar tu familia, tu hogar, tu matrimonio, tu economa. El puede transformar tu vida, tu carcter, tu forma de ser. Jess puede liberarte de cualquier atadura de vicios que no te dejan vivir en libertad. Jess puede llevarte a las dimensiones de xito que nunca imagin. Jess hace posible la realizacin de tus sueos, tus proyectos y metas. Lo nico necesario para que todo esto te suceda es que debes anhelar un encuentro con Jess y permitirle que l entre en tu corazn. Cada da, en la oracin y meditacin de la Palabra de Dios, se ir operando este proceso transformador.

el cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo, 14en quien tenemos redencin por su sangre, el perdn de pecados.b (Colosenses 1:13-14)Si despus de leer este libro quieres aceptar a Jess en tu vida, repite conmigo:

Seor Jess, te recibo como mi nico salvador, perdona mis pecados, te pido que transformes mi vida y mores dentro de m. Aydame a crecer cada da en gracia ante tus ojos y los ojos de los hombres, bendice mi camino y has que llegue a buen trmino mis sueos y proyectos. Amn.Si tienes algn testimonio o comentario escribe a [email protected] bendigo y me comprometo a orar por ti.

a a 19.10: Mt. 18.11.

Reina Valera Revisada (1960). 1998 . Sociedades Bblicas Unidas: Miami

e e 9.35: Mt. 4.23; Mr. 1.39; Lc. 4.44.

29porque les enseaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas. (Mateo 7:29)

b b 16.15: Hch. 1.8.

13Esto dar todo aquel que sea contado; medio siclo,a conforme al siclo del santuario. El siclo es de veinte geras. La mitad de un siclo ser la ofrenda a Jehov. 14Todo el que sea contado, de veinte aos arriba, dar la ofrenda a Jehov. 15Ni el rico aumentar, ni el pobre disminuir del medio siclo, cuando dieren la ofrenda a Jehov para hacer expiacin por vuestras personas. 16Y tomars de los hijos de Israel el dinero de las expiaciones, y lo dars para el servicio del tabernculo de reunin; y ser por memorial a los hijos de Israel delante de Jehov, para hacer expiacin por vuestras personas. (Ex 30.1315).

f f 17.24: Ex. 30.13; 38.26.

7 Moneda correspondiente a cuatro dracmas.

e e 3.12: Lc. 7.29.

h h 21.6: Is. 55.1.

b b 8.12: Mt. 5.14; Jn. 9.5.

b b 1.7: Col. 1.14.

f f 9.36: 1 R. 22.17; 2 Cr. 18.16; Zac. 10.2; Mr. 6.34.

porque de cierto os digo, que si tuviereis fe como un grano de mostaza, diris a este monte: Psate de aqu all, y se pasar;e y nada os ser imposible. (Mateo 17:20)

e e 3.16: 1 Co. 6.19; 2 Co. 6.16.

e e 19.46: Is. 56.7.

f f 19.46: Jer. 7.11.

13y me buscaris y me hallaris, porque me buscaris de todo vuestro corazn.c 14Y ser hallado por vosotros, dice Jehov, (Jeremas 29:13-14)

2Sam 12.6; Exodo 22.1

f f 6.19: Stg. 5.23.

a a 2.15: Col. 2.13.

b b 3.7: Ro. 4.16.

a a 19.10: Mt. 18.11.

b b 1.14: Ef. 1.7.

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Hoy Quiero Hospedarme en Tu Casa Corregido

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