HORIZONTES CULTURALES · Cartagena Juan Carlos Céspedes Acosta ... Fotografías: Ocaña Hoy...

54
HORIZONTES CULTURALES Revista virtual de cultura Tercera época N° 85. Ocaña, Colombia. Enero de 2020 Desfile de comparsas. Carnaval de Ocaña, 3 de enero de 2019. Fotografía: Ocaña Hoy

Transcript of HORIZONTES CULTURALES · Cartagena Juan Carlos Céspedes Acosta ... Fotografías: Ocaña Hoy...

HORIZONTES CULTURALESRevista virtual de cultura

Tercera época N° 85. Ocaña, Colombia.

Enero de 2020

Desfile de comparsas. Carnaval de Ocaña, 3 de enero de 2019.

Fotografía: Ocaña Hoy

2HORIZONTES CULTURALESRevista virtual de cultura

Sumario

Editorial…………………………………… 3Poemas festivos ….…………………….. 4Poetas de la Costa norte……………... 5Poetas de la región de Ocaña………. 6Poetas venezolanos …………………… 7Educación. Formación del docenteUniversitarioPor Daniel Quintero Trujillo…………… 9Comentarios. Las cabañuelas que

esperan las comunidadesPor José Atuesta Mindiola……………. 12

Historia. Historiografía de OcañaPor Luis Eduardo Páez García……….. 14Narrativa. La ciudad del cuerpoPor Benjamín Casadiego……………… 18Narrativa- Don Quijote y Guicho PanzaPor Jairo Luis Vega Manzano………… 23Comentarios. Río de Janeiro, lindaciudad

Por Alonso Ojeda Awad………………. 26Comentarios. Moderinidad, antece-dentes y neoliberalismoPor Sísifo Iluso Rodríguez………........ 29Literatura. El derecho a escribirmalPor Manu de Ordoñana, Ana MerinoY Ane Meyoz……………………………. 32Noticias……………………………......... 39Croniquilla. El monaguilloPor Orlando Clavijo Torrado…………. 43

Crónica. El pasado que retornapara quedarsePor Jorge Carrascal Pérez..………….. 46Elegía por mi madrePor Jairo Luis Vega Manzano……….. 54Publicaciones…………………………… 56

Director

Luis Eduardo Páez García

Colaboradores:

Isla Margarita (Venezuela)

Emilia Marcano Quijada

Donostia – San Sebastián (España)

Manu de Ordoñana, Ana Merino

y Ane Mayoz

Québec – Canadá

Héctor Quintero Jaime

Brasil

Valdeck Almeida de Jesús Lotado

Panamá

Mario Javier Pacheco

Bogotá

Fernando Cely Herrán-Alonso Ojeda A

wad-Guillermo Quijano Rueda

Jesús María Stapper

Tunja

Daniel Quintero Trujillo

Medellín

Monseñor Ignacio Gómez A.

Anna Francisca Rodas I.

Andrés Valencia Tobón

Ibagué

Jorge Carrascal Pérez

Barranquilla

Yajaira Pinilla Carrascal

Ocaña

José Miguel Navarro Soto- Leonardo R. Lobo

Jairo Luis Vega Manzano

Aguachica

José Orlando Blanco Toscano

San Diego (Cesar)

Yolaida Padilla

Girón

Jesús Alonso Velásquez Claro

Bucaramanga

Lumar H. Quintero Serpa

Cúcuta

Guido A. Pérez Arévalo-Álvaro Claro Claro

Fernando Chelle – Orlando Clavijo Torrado. Juan

Pabón Hernández, Ólger García Velásquez.

Pamplona

Jorge Mariano Camacho

Valledupar

Álvaro Maestre García-José Atuesta Mindiola

Montería

Antonio Mora Vélez

Cartagena

Juan Carlos Céspedes Acosta - Zion Zion Ligth

Chinácota

Carlos Eduardo Torres Muñoz –

Popayán

Rodrigo Valencia Q.

Donaldo Mendoza

Fotografías:

Ocaña Hoy

Municipio de Ocaña

Archivo LEPG.

Complejo Histórico de la Gran Convención

Tel. 562 3500

Correo electrónico:

[email protected]

HORIZONTES CULTURALES

Editorial

El 1 de febrero de 2013 comenzó a circular la edición digital de

Horizontes Culturales. Hace, pues, siete años, ininterrumpidamente,

venimos promoviendo y divulgando la cultura de la antigua provincia

de Ocaña, de Norte de Santander, de la Costa norte y de Colombia,

en general.

Una buena nómina de colaboradores, entre quienes se cuentan

escritores independientes y académicos, aporta mes a mes, sus luces

sobre diferentes áreas de la literatura, las artes, la historia y el

patrimonio cultural y, de igual manera, se publican comentarios

sobre política nacional, noticias y novedades bibliográficas. A todos

ellos, como siempre, nuestra voz de agradecimiento por el apoyo

recibido y su constancia desde Venezuela, Brasil, España, Panamá,

Canadá, Bogotá, Tunja, Medellín, Cartagena, Ibagué, Barranquilla,

Montería, San Diego, Aguachica, Girón, Bucaramanga, Cúcuta.

Pamplona, Valledupar, Chinácota, Popayán y Ocaña.

Entramos a 2020, el año de la ocañeridad, con mucho entusiasmo por

los avances logrados en poco tiempo, para la conmemoración de los

450 años de fundación de Ocaña, con las gestiones que ya se han

venido adelantando desde la administración municipal, los Vigías del

Patrimonio Cultural y la Academia de Historia.

La instalación de la Mesa Técnica para dicha conmemoración fue un

éxito, y ahora se espera que toda la sociedad civil de Ocaña, las

colonias provinciales, los artistas y escritores, los gestores culturales,

los ambientalistas, los ingenieros y arquitectos, los deportistas, etc.,

se comprometan en serio con Ocaña.

Horizontes Culturales continuará con la divulgación de las

actividades artísticas, académicas y literarias durante todo el año,

mostrándole a Colombia y al mundo la riqueza cultural de nuestra

tierra y el talante de sus buenos hijos.

3

Poemas festivos

HORIZONTES CULTURALES4

NINGÚN RECUERDO ESTÁ LEJOS

Pienso en la hermosa navidad

cuando el Niño Dios era una verdad

Pienso en el primer día de colegio

cuando las clases de Ciro Lobo Serna eran un privilegio

Pienso en la Urbanidad de Carreño

cuando conducta, respeto y obediencia eran un

empeño

Pienso en los recreos de la mañana y tarde

cuando al que no hacía una maldad se le decía cobarde

Pienso en las primeras vacaciones

cuando ir a otra ciudad significaba satisfacer ilusiones

Pienso en la cicla que me trajo papá de Venezuela

cuando tenía pito, faro y parrilla donde cargar

bagatelas

Pienso en el purgante de Magnesia Picot o de Limolax

cuando la carrera al baño, las náuseas y la diarrea eran

las más

Pienso en la pegotica que me volvía loco

que la mamá me prohibía ver porque para ofrecer tenía

muy poco

Pienso en la Kola Calle, en su inigualable sabor

cuando íbamos al Agua de la Virgen y la fe era un

chorro sanador

Pienso en los juegos de infancia

cuando las bolas, el trompo y la coca eran signos de

vagancia

Pienso en mis entrañables papás

cuando luchaban con brío contra la indecencia y todo

lo demás

Pienso en los caminos de la vida

cuando veo esposa, hijos y amigos que

alegran los ratos y curan las heridas

Jorge Carrascal Pérez

Ibagué enero 12 de 2020

COMPLAS DEL CARNAVAL

Víctor Barbosa, por Dios,

por la reina soberana,

un traguito de aguardiente

manque sea por la ventana.

La chicha y el aguardiente

tuvieron un muchachito

y por nombre le pusieron

quintero Amaya Pedrito.

Si el guarapo se muriera,

qué muerte tan alevosa¡!

“Chichí” cómo lloraría,

no permita Dios tal cosa.

Debajo de las Llanadas

hay un señor que se luce,

tirándose los camperos

con un guarapo sin dulce.

Echemos cinco de chicha

repartíos en dos totumas:

somos Carrique y Carmito

que venimos en ayunas.

Si acaban con el guarapo

no acaban con las peleas,

porque queda el aguardiente

que da las mismas ideas.

Y aquí terminan por hoy

estos cantares tan malos,

ahora nos vamos al Llano

a meternos unos “palos”.

Henrique Ruiz Machuca

Boletín del Carnaval No.7,

Ocaña,17 de noviembre de 1945.

HORIZONTES CULTURALES5

Poetas de la Costa caribe

¿UNA LIMOSNA?

¿Una limosna, si me alcanza el mundo,

he de recibir, y recibida,

la he de dar reconvertida

en sueños infecundos?

¡No!...! He de morir triste, y

moribundo

intentaré reír, para agradarte!

…Entonces, la limosna que anunciaste

querrás entregarme…!No la quiero!

Sosiégate con mi desespero

y envíame por rosas tus espinas

y déjame reír, si reír quiero.

Es mi postrer voluntad: ¡Reír tan triste

que llanto te provoque y no consuelo

al extinguirse esta llama que

encendiste!

Álvaro Maestre García

Valledupar.

EL ZAPATERO

El día aparece despejado e inocente

el zapatero en su humilde oficio

con resignación cansada

y la tristeza arraigada en el alma

cada día

inicia su tarea en la memoria del tiempo.

Empieza a clavetear la esperanza en el yunque

pega los pasos del caminante

para que no olvide su trasegar

en la eternidad

su ilusión es azul como un cielo imperturbable.

El zapatero traza su plan en el viento

diariamente cose los días.

Dagoberto Rodríguez Alemán

Barrancabermeja = Mompox.

Del poemario De las mujeres ausentes,

Medelllín, 2016.

HORIZONTES CULTURALES6

Poetas de la Región de Ocaña

Milciades Fuentes Manzano

Río de Oro (Cesar)

SECRETO

Quiero esconder mis penas

guardadas debajo de una piedra

silenciosa,

Ella no contará mi secreto

enterrado en el fondo del tiempo,

una luciérnaga enamora el lugar y

lo llena de luz y poesía,

la piedra duerme y el secreto

es un secreto.

VISITA

Llega del país de los vientos de nueve

y con pocas palabras estrenamos

un amor viajero.

Matthew me lanza un beso

que rompe las diferencias del tiempo,

me entrega un abrazo,

entre bejucos de la selva virgen

nos contamos los secretos de abuela

y de nieto

que hoy llega a regalarme una sonrisa

de sol de los venados.

José Hilario Yepes

Río de Oro

Del poemario

Sombrilla de poemas, flores y peces, 2019.

HORIZONTES CULTURALES7

Poesía venezolana

Emilia Marcano, Venezuela

YO, LA OSCURA

Yo, la oscura,

provengo de insanos pasadizos

no disponibles en aparadores ni anaqueles,

ni cuentan con registro, marca o huella fósil

que no haya firmado yo,

con la pluma de todas mis heridas.

El dinero y las historias son tan grises

que es indispensable me presente, sórdida y desnuda,

para desenvolver del hastío

a decenas de escrotos salpicados de monogamia.

Algunos se pasman viendo

las llagas en mi cuerpo,

otros se sientan a ver el rosario

de penalidades y tragedias

que me cuelgan del pubis,

los demás miran la droga, miran la rumba,

miran la mesa llena de aluminio y ron,

miran mi agenda apretada

por tantos compromisos pendientes.

Los otros,

aquellos seres que, en orden alfabético,

construyen mis noches de piedra y semen,

no vienen a salvarme,

ni a repetir las mismas mentiras,

ni a conversar, ni a encender las luces

de mi mente.

Todos, sin excepción, son recuerdos

de la edad de piedra

que me mató las horas.

Emilia Marcano Quijada.

Ocaña, 450 añosde historia, tradiciones y

cultura (1570 – 2020)1570 - 2020

Academia de Historia de Ocaña

El 26 de julio de 1570, la tropa expedicionaria

de Francisco Fernández rancheó en el valle

sobre el cual hoy se levanta Ocaña. Y el 14 de

diciembre se llevó a cabo el rito oficial de la

fundación.

La fundación se hizo por orden del Cabildo de

Pamplona, 36 españoles participaron en este

acontecimiento histórico.

8

Iglesia de San Francisco, antes del terremoto de

Cúcuta.

HORIZONTES CULTURALES 9

FORMACIÓN DEL DOCENTE UNIVERSITARIO

El tema de la Pedagogía en la

Enseñanza Superior, a pesar de ser

objeto de una preocupación reciente de

las Instituciones universitarias, ocupa en

la actualidad un lugar importante dentro

de sus reflexiones y discusiones en las

políticas de vinculación de docentes.

En Colombia, podemos afirmar que una

gran mayoría de profesores

universitarios, ejercen la tarea de

docentes, con escasa o ninguna

formación pedagógica y las Instituciones

de Educación Superior realizan

esfuerzos mínimos para su

capacitación. Un ingeniero puede saber

mucho de ingeniería, un economista ser

docto en su área, pero esto no implica

que tengan dominio sobre las

estrategias metodológicas para la

enseñanza de estas disciplinas, que les

permita desempeñarse con mayor

facilidad en la orientación de los

estudiantes.

El docente universitario, además de los

conocimientos y habilidades inherentes

a su especialidad profesional, debe

integrar sus enseñanzas al gran

conjunto de actividades, adquisiciones y

logros de los estudiantes, debe

comunicarse con ellos, transmitiendo y

recibiendo información y mensajes con

fluidez, precisión y claridad;

correlativamente, debe conocer y utilizar

recursos educativos, tecnología de la

información y metodologías acordes con el

contexto pedagógico vigente.

La política de improvisación de docentes

que ocurre en algunas instituciones,

obedece al fenómeno de la permanente

expansión de las matrículas estudiantiles

que obligan a las universidades, a contratar

en forma inmediata algunos docentes

sin preparación pedagógica. Esta práctica

administrativa es peligrosa, por cuanto

posteriormente, se observan los resultados

traducidos en los problemas de enseñanza,

bajo rendimiento académico de los

estudiantes, relaciones interpersonales

deterioradas, incapacidad para asesorar el

proceso de enseñanza aprendizaje, etc. Por

consiguiente, la calidad de la enseñanza

universitaria, está correlacionada, con una

política de preparación y capacitación

pedagógica de los docentes, que puede

operacionalizarse a través de cursos

permanentes de actualización pedagógica,

para los profesores que se encuentran en

ejercicio, cursos de inducción pedagógica

para los docentes que ingresan por primera

vez a la Institución Superior y que no han

tenido preparación para la docencia;

impulso a los postgrados en educación

(Diplomados, especializaciones, maestrías

Por Daniel Quintero

Trujillo.

Educador y escritor

Educación

10HORIZONTES CULTURALES

Apoyemos las

instituciones culturales y

a las personas

que trabajan

por Ocaña, Norte

de Santandery Colombia.

y doctorados) con énfasis en los

respectivos campos del conocimiento.

Esta estrategia de acción permitiría al

profesor universitario adquirir no solo una

actualización académica en su área

científica, sino también en las teorías

educativas, modelos de aprendizaje,

didáctica especial para la enseñanza de

su ciencia, ´práctica del trabajo grupal,

interacción docente – estudiante,

aprendizaje on line y técnicas de

investigación pedagógica y evaluación del

aprendizaje. Formación que contribuiría a

convertir al profesor universitario en un

orientador educacional. Y al estudiante, en

una persona con autonomía, capaz de

generar su propio aprendizaje, que sea

capaz de expresar su experiencia a

medida que esta ocurra.

Finalmente es necesario afirmar que las

Escuelas Normales Superiores y las

Facultades de Educación, están

comprometidas en la preparación

Pedagógica de los docentes de todos los

niveles de la enseñanza, para buscar una

correlación positiva entre la pedagogía, la

tecnología y la ciencia; evitando así que el

docente sea solo transmisor de

contenidos o domesticador del estudiante.

Así el maestro será quien enseñe a

pensar, a investigar y hacer ver Cómo las

áreas científicas se interaccionan con

todas las demás actividades humanas.

Finca la cuadra.

Firavitoba,13 enero 2020

[email protected]

VISITE LAS BIBLIOTECAS PÚBLICAS DE

OCAÑA, EL MUSEO DE LA GRAN

CONVENCIÓN, DEL MINISTERIO DE

CULTURA, Y LA ACADEMIA DE

HISTORIA DE OCAÑA.

En el Complejo Histórico de la Gran

Convención están disponibles los

siguientes servicios:

Biblioteca Pública Municipal “Luis

Eduardo Páez Courvel” Lunes a

viernes, 8 a.m. a 12 m. y 2 a 6 p.m. .

Biblioteca y Hemeroteca de la

Academia de Historia de Ocaña.

Lunes a Viernes, 9 a.m. a 12 m. y 3 a 6

de la tarde

Archivo Histórico de Ocaña. Lunes a

viernes. 9 a.m. a 12 m. y 3 a 6 p.m.

Museo de la Gran Convención. De

lunes a sábado, 8:30 a. m. a 12 m. y

2:30 a 6 p.m.

HORIZONTES CULTURALES11

HORIZONTES CULTURALES12

Comentarios

LAS CABAÑUELAS QUE ESPERAN LAS COMUNIDADES.

Por José Atuesta

Mindiola.

Poeta y prosista

Las cabañuelas, palabra hermosa y

campestre, diminutivo de cabaña,

que el compositor Roberto Calderón

popularizó en el cancionero

vallenato. Es alegoría de esperanza y

de fiesta vegetal, en virtud de que,

en la tradición popular, son las

lloviznan de enero que anuncian lo

que será el calendario de lluvias

durante el año. Y la lluvia es fuente

reveladora para calmar la sed del

planeta y de los seres vivos.

La lluvia es vendimia de vida,

ensoñación y alegría. Es imaginación,

tonada nutricia del alma y purificación

de los sentidos. El ser humano por

naturaleza es un sempiterno sediento.

Tiene sed biológica, emocional,

estética y espiritual. Pero la sed de

amar, de aprender, de crear, de viajar,

de conocer, lo sublimiza a la categoría

de hombre pensante, científico o

artista. Una muestra de su aptitud

artística son estos versos: “Contrario a

la sequía de la ausencia, a la múltiple

desolación del desierto, a la estéril

resonancia de la sed; estás tú, como

mazorca de agua, desgranando sobre

mí el zumo vital de tu cuerpo”.

La sed hace derramar lágrimas a los

pájaros cuando ven la soledad de los

árboles sin hojas. La sed es la

ansiedad de la rosa para prolongar la

dulce fragancia de sus pétalos. Es el

grito de los bosques cuando el fuego

arroja sus lanzas coloradas y baña de

cenizas el paisaje. La sed es la cruz

del campesino que ofrenda oraciones

para que lleguen las lluvias, crezcan

los ríos, florezca la vida, germinen los

frutos y cese el hambre.

La sed es una invocación de la

infancia en nuestros pueblos

ribereños, cuando en el verano

extenso y estéril se hacen las

cacimbas para ver manar el agua. El

espíritu sediento, por esta larga

sequía, nos incita la esperanza de

volver a los tiempos de cosecha, la

primavera que se aproxima, y la

certeza de ser abrazado por la

resiliencia, esa capacidad que tienen

los seres humanos de superar las

circunstancias adversas para volver al

equilibrio.

Nosotros somos diferentes a los

animales, somos inconformes y

siempre buscamos algo más, pero en

la necesidad de tomar agua somos

muy parecidos. El salmista narra este

pasaje: “Los ciervos en épocas de

verano braman ansiosos buscando un

arroyo para saciar su sed. El bramar

de este rumiante cuando está

desesperado por encontrar agua, es

HORIZONTES CULTURALES13

una analogía del salmista con la

condición de su alma de recibir el agua

que fluye de la presencia de Dios, la

cual sacia toda sed espiritual del

alma”.

A nivel social, son muchas las

expectativas con nuestros actuales

gobernantes, aferrados a la fe de que

los anuncios de la implementación de

sus programas y obras sean cabañuelas

de esperanza, que satisfagan a las

comunidades sedientas de justicia,

trabajo, educación, salud, servicios

públicos, seguridad, deportes, cultura

y bienestar.

DÉCIMAS AL ÁRBOL DE CAÑAGUATE

Por José Atuesta Mindiola

I

De bosques americanos

el cañaguate es nativo,

y en el Valle donde vivo

es el árbol soberano.

La leyenda del arcano:

Un espíritu protector

para ocultar del invasor,

el oro fue derretido

y por este árbol absorbido

que lo lleva en su interior.

II

El cañaguate se desnuda

para calmar la sequía,

porque el follaje es la vía

de eliminar lo que suda.

En verano hace su muda:

cambia su verde vestido

por amarillo encendido

en enero con las brisas;

las flores son las sonrisas

de los árboles queridos.

III

Altos árboles en brillo

con la magia en esplendores,

cuando el sol entre sus flores

se desborda en amarillo.

Caligrama en estribillo

bellos racimos flotantes

en ramas veraneantes:

cañaguate árbol nativo

que alucina de motivos

a propios y visitantes.

IV

En la región de Badillo,

del Valle y alrededores,

el cañaguate y sus flores

del paisaje es un castillo.

Esplendentes canutillos

sus pétalos en fulgor;

amarillo es el color

de amor en Valledupar,

porque empieza por amar

dice un poeta cantor.

Anónimo - Camille Flammarion, L'Atmosphere:

Météorologie Populaire (Paris, 1888), pp. 163

HORIZONTES CULTURALES14

HISTORIOGRAFÍA DE OCAÑA

Por Luis Eduardo

Páez García.

Coordinador del

Parlamento Internacional

de Escritores –Ocaña.

Academia Colombiana de

Historia

Historia

2020, Año de la Ocañeridad, es el mejor

pretexto para referirnos a la

historiografía ocañera, desde sus inicios

en la época virreinal, pasando por el

siglo XIX, hasta llegar a nuestros

tiempos.

Para fortuna de la historiografía

regional de Norte de Santander, Ocaña

ha contado con valiosos estudios

realizados por escritores, intelectuales

e historiadores quienes han tratado de

plasmar en sus artículos o libros el

recorrido que ha tenido tanto Ocaña

como las poblaciones de su antigua

provincia, desde la fundación el 14 de

diciembre de 1570. Fuentes primarias,

como las que reposan en el Archivo

General de la Nación AGN, en el Archivo

Histórico de Ocaña AHO, Archivo

Histórico de Santa Marta, de Mompox,

Pamplona y Tunja, han permitido la

reconstrucción de los periodos históricos

y acercamientos a personajes

destacados, más o menos acertados, sin

descartar, por supuesto, algunas

interpretaciones que es necesario

revaluar a la luz de las nuevas lecturas

que se hacen de la historia,

considerando también el aumento

significativo de las fuentes primarias

que han aparecido o no fueron

consultadas por los primeros

historiadores locales a partir de la

década de 1950, cuando ya habían

fallecido los pioneros de la Academia de

Historia o los pocos que aún quedaban

no se dedicaron a aumentar el acervo

bibliográfico con nuevas

investigaciones. En los años 70, se

publicó la Biblioteca de Autores

Ocañeros, cuyos tomos 2, 5, 6, 9, 11, 13

y 16, 17 y 18 se dedicaron a la historia,

la crónica y las biografías. Los tomos 2,

5 y 9 fueron reediciones de

publicaciones hechas en las tres

primeras décadas del siglo XX.

En la década de 1970, el profesor y

académico Jorge Meléndez Sánchez hizo

algunos aportes importantes sobre el

periodo virreinal y los años 30, 40, 50 y

60 del siglo XX. El ingeniero y

académico Raúl Pacheco Ceballos y su

hermanos Miguel produjeron trabajos

sobre genealogías ocañeras, y en la

provincia se generaron estudios

monográficos sobre La Playa de Belén,

de Guido A. Pérez Arévalo, de San

Calixto, de José Antonio Amaya, de

Ábrego, de José de la Cruz Vergel

Jaimes, de Convención, de Ólger García

Velásquez y Edwin Avendaño Guevara y

nuevamente de Ocaña con la

Monografía Histórica del Municipio de

Ocaña, de Mario Javier Pacheco y

HORIZONTES CULTURALES15

nuestras obras Historia de la región de

Ocaña, publicada en 2009 y la Historia

de la Literatura de la región de Ocaña,

en 2011.

Sin duda alguna, para poder

comprender 450 años de historia,

cualquier investigador debe, no solo leer

a los autores ocañeros, sino analizarlos

en su contexto sociocultural, las fuentes

que utilizó y su inclinación política e

ideológica, es decir, comprender el por

qué de algunas afirmaciones, fechas,

omisiones voluntarias o involuntarias,

etc. Esta ha sido una de las causas que

ha propiciado que historiadores

nacionales escriban erróneamente el

año de la fundación o hagan

afirmaciones no ajustadas a la realidad,

como por ejemplo que Ocaña fue

esquiva a la revolución de los

Comuneros o a la independencia.

Todavía finalizando el siglo XXI, leíamos

en varios textos académicos errores en

este sentido o en la confusión entre

Puerto Nacional y Gamarra, pese a

existir la debida documentación.

En 2005, cuando tuve el honor de der

recibidos como miembro en la Academia

de Historia de Norte de Santander,

presenté la ponencia “Historiografía de

la Región de Ocaña”, con base en una

investigación de 184 trabajos históricos

que incluyó obras generales, opúsculos y

ensayos entre 1805 y 2005. Para este

año, 2020, han ocurrido nuevos

hallazgos de documentos en los archivos

históricos nacionales que vienen a

enriquecer la bibliografía histórica.

Como aspecto que considero

destacado, debo mencionar también la

investigación sobre patrimonio

cultural material e inmaterial, con

motivo del auge que ha tenido esta

temática en las agendas de los

investigadores y la promoción del

turismo histórico y religioso. El

patrimonio inmaterial se ha nutrido

de publicaciones en la Nueva Revista

Colombiana de Folclor, del Patronato

Colombiano de Artes y Ciencias, y

sobre gastronomía regional también

se han publicado algunos ensayos que

destacan su historia.

La crónica, vista como un género

que rescata la memoria histórica, ha

tenido en los últimos diez años un

avance destacado, con las

publicaciones de Álvaro Lobo Amaya,

Jorge Carrascal Pérez, y Aldemar

Villalba Ortega (de Convención).

En el sur del departamento del

Cesar, Río de Oro se destaca por su

actividad cultural y por sus

publicaciones periódicas que se

llevan a cabo con grandes esfuerzos.

Allí, en revistas como Facetas Líricas,

del Centro de Historia Miguel

Jerónimo Niz, o en las obras de los

sacerdotes Tulio Grimaldo Sánchez y

Carlos T. Durán Hernández, o los

artículos del académico Pedro Amadís

Santana Barbosa y Miguel Ángel Picón

Sánchez se manifiesta en interés por

recuperar la historia de su municipio.

En 2005, llegamos a estas

conclusiones, sobre nuestra

historiografía:

Como característica sobresaliente, la

historiografía de la región de Ocaña no

registra investigaciones o trabajos

críticos, con base en el análisis social o

HORIZONTES CULTURALES16

económico de la zona, pese a que desde la

década de 1930 ya se había iniciado en

Colombia la escritura de la historia con

base en estos aspectos fundamentales,

debido a la modernización capitalista que

se instaura a partir de la revolución en

marcha de Alfonso López Pumarejo.

La historiografía relativa a los indígenas de

la región presenta aún vacíos protuberantes

que es preciso llenar con investigaciones

especializadas.

La historiografía de la región de Ocaña, se

inicia con los informes de los sacerdotes

Agustín Francisco del Rincón y Joaquín

Gómez Farelo, en el siglo XVIII, agregando a

ello, la Floresta de Santa Marta de José

Nicolás de la Rosa.

La historiografía del siglo XIX tiene como

principal exponente a Eustoquio Quintero,

pese a las inconsistencias que sus trabajos

presentan; por lo demás, son destacables

los trabajos de Manuel Ancízar y Agustín

Codazzi, en materia geográfica, sociológica

y cultural.

Los compendios históricos más importantes

de la región de Ocaña, fuente de obligada

consulta para los actuales investigadores,

siguen siendo: Los Genitores, de Alejo

Amaya; Noticias Históricas de la ciudad y

provincia de Ocaña, de Justiniano J. Páez;

Monografía de la parroquia, de Monseñor

Manuel Benjamín Pacheco y Monografía de

Ocaña, de Luis A. Sánchez Rizo.

Con relación a las guerras civiles,

incluyendo la de los Mil Días, se evidencia

la tendencia partidista en las

interpretaciones de los hechos; del mismo

modo, los criterios con que se manejaron y

se manejan actualmente los análisis sobre

la Convención de Ocaña de 1828, acusan el

influjo de las tendencias liberal y

conservadora o los afectos o desafectos

hacia Santander y Bolívar. Esto se

evidenció, por ejemplo, en la

compilación que hiciera la Academia

Colombiana de Historia, de las ponencias

presentadas durante el II Congreso

Grancolombiano de Historia, reunido en

Ocaña, con motivo del Sesquicentenario

de la Gran Convención, en 1978.

La historiografía de las últimas décadas

del siglo XX, sigue presentando

deficiencias en cuanto al análisis crítico.

Por ello, ahora más que nunca, se

precisa la conformación de equipos

interdisciplinarios que aboquen el

estudio de nuestra historia

contemporánea y complementen los

períodos colonial y republicano, sobre

todo porque ahora la sistematización de

los archivos públicos, como el Archivo

General de la Nación y otros

departamentales, facilita el acceso a

datos que antes no estaban disponibles

fácilmente a los investigadores. La

temática referida a la violencia en la

región de Ocaña, desde la década de

1980, sólo aparece en algunas obras del

historiador y académico Jorge Meléndez

Sánchez más como un llamado a abordar

el tema que como un resultado analítico

metodológicamente organizado (1)

El asunto sobre la historiografía de la

región de Ocaña, es bastante amplio

y complejo, especialmente hoy en

día, cuando han surgido nuevos ejes

temáticos que estimulan las miradas

hacia aspectos como la historia de las

ideas políticas, de la cultura y la

economía, de los grupos humanos, de

las minorías (mujeres,

afrodescendientes, etc.), de las

confesiones religiosas, de la

asociatividad, de la ciencia, de los

medios de transporte, etc. El reto

que se presenta hoy a los

HORIZONTES CULTURALES17

historiadores de Ocaña y de Colombia,

es bastante grande y requiere de mucha

constancia y diligencia. A este respecto,

se opone el problema de la falta de

recursos económicos para consultar los

archivos localizados fuera de los núcleos

urbanos provinciales, el deterioro o

inexistencia de los archivos históricos en

varias poblaciones y la falta de una

escuela de historia en Ocaña.

Aspiramos que la conmemoración de los

450 años de fundación de Ocaña, sirva

para atender estas falencias y producir

nuevos trabajos de investigación a la

altura de las circunstancias.

(1) Ponencia presentada ante la Academia de

Historia de Norte de Santander para optar la

calidad de Miembro Correspondiente, Cúcuta,

2005”

ACADEMIA DE

HISTORIA DE OCAÑA

Fundada en 1935

Complejo Histórico de

la Gran Convención

Tel. 562 3500

Servicios que presta:

Biblioteca

especializada en

historia regional.

Información turística.

Asesorías culturales.

Archivo Histórico de

Ocaña.

Consultas:

Lunes a viernes

De 9:00 a.m. a 12:00

m. y de 3:00 a 6:00

p.m.

[email protected]

HORIZONTES CULTURALES18

Narrativa

Por Benjamín

Casadiego. Escritor

e investigador

cultural.

LA CIUDAD DEL CUERPO

La razón tiene motivos para

sospechar del ritual, ya que el ritual

tiene el defecto fatal de unir a la

gente. Richard Sennett, Carne y

Piedra.

En la oración fúnebre, pronunciada

durante las exequias de las víctimas

del primer año de de la guerra contra

Esparta en 431 a.C., Pericles hace una

advertencia relacionada con las

mujeres: “La mayor gloria de una

mujer es que los hombres hablen de

ella lo menos posible, tanto para

alabarla como para criticarla”.

Pericles hablaba para los vivos pero

sabía que también lo escuchaban los

muertos, que hacían parte de un

mundo frío, como el mundo de las

mujeres que en esa oración habían

perdido, ante la ciudad, el lenguaje y

el deseo. La certidumbre, lejos de

confinarlas, abrió otros lugares de

encuentro con un sello especial.

Si bien las mujeres de los atenienses

libres podían participar en ritos como

las fiestas Panateneas, había dos que

habían ganado para ellas después de la

famosa oración, uno era la

Tesmoforias, que estaba ubicada en un

lugar adyacente al espacio de poder

donde los hombres se reunían a debatir

los asuntos de la Polis. “Aunque el

mito de Démeter relacionaba a las

mujeres con la tierra –dice Richard

Sennett en Carne y Piedra-, las

Tesmoforias relacionaban a las mujeres

entre sí”. Las mujeres celebraban el

rito como ciudadanas: desaparecían

por tres días al cabo de los cuales

regresaban al encuentro con sus

esposos. “El manto de tinieblas de la

tierra –continúa Sennett-, el frío de los

pozos, la cercanía a la muerte,

transformaban el estatus de sus

cuerpos. Durante las Tesmoforias las

mujeres realizaban un viaje por las

tinieblas, del que emergían a la luz con

su dignidad afirmada”.

Para explicar ese cambio, entre un

espacio compartido con hombres y

este nuevo, Sennett recurre a una

figura retórica llamada metonimia,

que consiste en la sustitución de una

palabra por otra. “La metonimia es

algo así como arrojar un manto sobre

los significados originales

transformándolos en virtud de la

asociación”. A diferencia del poeta,

que la usa para variar el lenguaje, aquí

se usaba el espacio para realizar

cambios, de allí que al segundo día, las

HORIZONTES CULTURALES19

palabras frío y pasivo significaban

autodisciplina y fortaleza, en lugar de

debilidad e inferioridad, como ocurría

en el exterior.

El segundo ritual ganado por las mujeres

de Atenas fueron las fiestas de Adonis,

rituales agrarios relacionados con la

muerte. En este caso las

transformaciones urbanas estaban

circunscritas a los espacios domésticos

ya que las mujeres estaban recluidas en

casa. Estas fiestas no se incluían dentro

de los calendarios oficiales de

festividades y, de alguna manera,

incomodaban a los hombres, entre ellos

Platón que veía en esos rituales “una

revelación de la esterilidad del placer

efímero”. Lejos de aquello, las fiestas

devolvieron a las mujeres el lenguaje

del deseo, algo que Sennett explica

recurriendo a la metáfora. “El poder

espacial de la metáfora –dice-, era

combinar elementos insólitos. En un

ritual, un espacio de metáfora es un

lugar en el que la gente puede juntar

elementos dispares. Esto ocurre en

virtud de la manera en que utilizan sus

cuerpos, más que mediante

explicaciones. En las fiestas de Adonis,

la danza y la bebida ocupaban el lugar

de la queja”. De allí la perplejidad de

Platón que no podía entender que las

mujeres se subieran al tejado de sus

casas en una noche de julio a conversar

entre ellas de sus deseos íntimos

cuando estaba claro que la fertilidad

y el parto definían la condición de la

mujer. Sin embargo, este refugio que

podía ser, desde el siglo XX, como una

afirmación de la libertad de expresión

y la feminidad, en el siglo V no lo era.

El ritual no decía no al sí masculino.

“No impulsaba a las mujeres a

dominar por una noche el ágora, la

colina de Pnyx u otros bastiones

masculinos. El tejado no era

plataforma de lanzamiento para la

rebelión. Por el contrario, era un

espacio en el que, de manera

espontánea y corporal, las mujeres

pasaban por alto las condiciones que

les imponían el orden dominante de la

ciudad”.

Lo cierto es que, si bien tales

celebraciones podrían haber sido

suprimidas, nadie lo hizo, tal era la

extrañeza que provocaba en los

hombres esa fiesta de la resistencia

que ocurría precisamente sobre sus

cabezas, pues debajo de los tejados,

los griegos celebraban los simposios,

un encuentro que hacía parte de la

luz y la legalidad, de la que podía

resultar, o bien deliciosos debates

filosóficos, políticos, artísticos, o bien

una estruendosa noche de placeres

hedónicos: “Catorce comensales

podían reclinarse –dice Sennett-,

comiendo y bebiendo, mientras

acariciaban hombres y mujeres

dedicadas a la prostitución”. Es claro

que lo que allí ocurría no tenía nada

que ver con las decorosas conductas

que se llevaban en el exterior.

HORIZONTES CULTURALES20

Para Sennett, las dos festividades nos

hablan de una verdad social

elemental: el ritual tiene un efecto

sanador. “El ritual es una de las

formas en que los oprimidos –lo

mismo hombres que mujeres- pueden

responder a las ofensas y al desprecio

que sufren en la sociedad, y, más en

general, los rituales pueden hacer

soportables los sinsabores de la vida y

de la muerte. El ritual constituye la

forma social mediante la que los seres

humanos tratan de enfrentarse al

rechazo como agentes activos en

lugar de cómo víctimas pasivas”. La

razón y la ciencia miran de soslayo el

hecho de que metáforas y metonimias

afronten las dificultades en lugar de

derrotarlas, de sacarlas a patadas de

la vida, una relación confusa que

dibuja dos formas de asumir la vida

desde la antigüedad y que Sennett

resuelve a través de dos palabras:

logos y mythos.

El pensamiento político de los griegos

concibió las ideas de democracia en

torno a los aspectos del logos. Como

Clístenes afirmó por primera vez, la

libertad de expresión y el debate sólo

tienen sentido si la gente se

responsabiliza de sus palabras, de

otra manera el argumento no tiene

peso alguno y las palabras son

indiferentes. En la colina de Pnyx el

logos actuaba de esa manera en un

sentido espacial: se podía ver y

escuchar a quien aplaudía o pateaba

un discurso, y comprobar qué votaba

cada uno.

En el mythos, el orador no es

responsable de sus palabras. Por el

contrario, el lenguaje del mito gira

en torno a la creencia formulada en

la afirmación griega: “Este relato no

es mío, pero lo he oído en algún

lugar”. La mayoría de los mitos, y por

supuesto los griegos, se refieren a las

hazañas de seres mágicos o dioses, de

manera que parece lógico pensar que

son los dioses quienes conciben esas

historias y no los hombres y las

mujeres que los relatan.

Esto dejaba una lección tormentosa:

las palabras, de las que son

responsables las personas, crean

desconfianza, mientras que las

palabras que hacen parte de los

relatos, crean confianza pues los

espectadores suspenden

voluntariamente la incredulidad,

según la fórmula aristotélica. Algo así:

“Esto me lo contaron, no lo puedo

asegurar, ustedes verán si me creen”.

Y creemos, mágicamente creemos. De

lo que queda una fórmula que

siempre nos costará entender, cuando

pensamos en la política y en los

políticos: “La democracia se rige por

la política de la desconfianza

recíproca. Las palabras de las que los

oradores no parecen responsables

crean un vínculo de desconfianza”.

Esa es la paradoja. Si la transparencia

creaba dudas, la oscuridad aclaraba

los hechos: “Los rituales arrojaban un

manto de tinieblas sobre las

HORIZONTES CULTURALES21

sospechas que los individuos podían

haber albergado unos de otros en la

antigua ciudad, algo muy diferente de

la mezcla de admiración y sospecha

que provocaba la exhibición desnuda”.

Carne y Piedra, a mi juicio la obra

maestra de Richard Sennett, nos deja

una lección sobre el cuerpo en la

ciudad, de hecho fue concebida como

una historia de la ciudad desde la

experiencia corporal de las personas, la

manera como se movieron los hombres,

lo que escuchaban, veían, olían,

comían y amaban, desde la Atenas del

siglo de Pericles a la Nueva York del

siglo XX: los rituales de las mujeres de

Atenas, consumados en el cuerpo y en

el espacio urbano a partir de los

poderes poéticos de la metáfora y la

metonimia; el significado de la noche

para los judíos que vivían en Venecia

durante el siglo XVI, cuando el gueto

era cerrado para mantenerlos a salvo

de las hordas cristianas y, como un

reverso de la moneda, el significado de

la casa como refugio de los cristianos

en la antigua Roma.

¿Cómo se desarrollan los mitos privados

y los públicos, los encuentros en una

ciudad hecha de seres humanos y de

vacíos? Desde mediados del siglo XIX, a

partir de los grandes urbanistas como

Moses, Cerdá, Haussmann, las ciudades

comienzan a separar los cuerpos que

antes se podían tocar, tropezar y

abrazar: ahora deben circular

eficientemente, sin lenguaje,

quedando solo el gesto de la mirada,

que tampoco ve. Un ensayo de la

monotonía. Por eso las manifestaciones

callejeras que ahora se gestan por todo

el mundo vienen a ser esa vuelta al

cuerpo que se toca y que conversa, ese

momento donde el mito tiene la

palabra creíble, a diferencia del logos

que, paradójicamente, sostiene la

democracia, pero que está cubierto

por una sombra de duda. “Entre los

problemas cívicos de una ciudad

multicultural está la dificultad moral

de estimular la simpatía hacia los que

son los Otros. Y esto solo puede ocurrir

si se entiende por qué el dolor corporal

exige un lugar en el que pueda ser

reconocido y en el que sus orígenes

trascendentes sean visibles. Semejante

dolor tiene una trayectoria en la

experiencia humana. Desorienta y hace

incompleto al individuo, vence el

deseo de coherencia. El cuerpo que

acepta el dolor está en condiciones de

convertirse en un cuerpo cívico,

sensible al dolor de otra persona, a los

dolores presentes en la calle,

perdurable al fin –aunque en un mundo

heterogéneo nadie puede explicar a los

demás qué siente, quién es. Pero el

cuerpo sólo puede seguir una

trayectoria cívica si reconoce que los

logros de la sociedad no aportan un

remedio a su sufrimiento, que su

infelicidad tiene otro origen, que su

dolor deriva del mandato divino de que

vivamos juntos como exiliados”.

HORIZONTES CULTURALES22

El cierre de Sennett nos pone a pensar

en esa necesidad de silencio y soledad

que piden las víctimas de Bojayá, por

lo menos en ellas pensé mientras leía

los rituales de esas mujeres en Atenas.

Una de las exigencias en el proceso de

exhumación de las víctimas de Bojayá

era la intimidad. Los familiares

pidieron soledad y silencio, sin

embargo no fue fácil que esa súplica se

entendiera. En la iglesia, durante la

primera conmemoración después de la

masacre ocurrida el 2 de mayo de

2002, la mayoría de los participantes

eran gente de la prensa, de las ONG y

del gobierno. Los deudos estaban

perdidos en esa multitud de chalecos.

Pedir soledad e intimidad fue un

proceso, no tan largo del que ellos

llevaron por 13 años para que Medicina

Legal y la Fiscalía comenzara el

proceso de identificación de los

muertos. Pero sí fue tedioso. Algunos

periodistas dijeron que les estaba

violando la libertad de prensa. Al final

entendieron. O no entendieron.

Entonces, hace tres años, un jaibaná

comenzó el rito con rezos y riegos de

armonización; al otro día, a las seis de

la mañana, entraron los familiares

cantando alabaos y el Ave María. Con

ese ritual le estaban pidiendo permiso

a la tierra y al alma de los difuntos.

Eso fue en 2017, el momento que

antecedió a la entrada de la

Fiscalía. No se permitieron flashes,

la luz no podía invadir el campo.

Veinticinco siglos atrás, en Grecia,

las mujeres se habían ganado ese

espacio de soledad, intimidad y

penumbra para llorar o reír. Para

hablar o gritar.

Imágenes: Portada: Alberta Whittle,

'Derecho de admisión'. Performance.

Abajo: Miembros del Coro Africano,

Londres, Peter Lindbergh

HORIZONTES CULTURALES23

Narrativa

Por Jairo Luis Vega

Manzano.

Ingeniero y escritor

DON QUIJOTE

Y GÜICHO PANZA

Primera Parte

Viene del número anterior…

CAPÍTULO V

Donde sigue el cuento del chasco que

le pasó a nuestro caballero con los

arrieros toledanos, quienes lo

mandaron para su casa todo poético y

vuelto nada con la porracera que le

pegaron.

Viendo, pues, don Quijote que, en

efecto, no podía moverse por la

aliñada recibida, comenzó a recordar

de lo leído en sus libros sobre algún

truco que lo ayudara a salir de tal

situación, y se le vino a la cabeza aquel

de Valdovinos y del marqués de Mantua,

su tío, cuando Carloto, el hijo de Carlo

Magno, lo dejó herido en la montaña en

un trance parecido. Así, imaginándose

ahora ser Valdovinos, con muestra de

gran sentimiento, se comenzó a

revolcar por la tierra y a decir con

debilitado aliento lo mismo que dicen

decía el herido caballero del bosque:

¿Dónde estás, señora mía,

que no te duele mi mal?

O no lo sabes, señora,

o eres falsa y desleal.

Y de esta manera fue prosiguiendo

todo el romance, hasta aquellos versos

que dicen:

¡Oh noble marqués de Mantua,

mi tío y señor carnal!

Justo cuando llegó a estos versos, pasó

por allí un labrador vecino suyo del

pueblo, el cual, viendo a aquel hombre

allí tendido sin saber quién era,

apresuradamente llegó hasta él

diciéndole:

—¿Quién es usted, señor,

y qué mal siente que tan feo se queja?

Don Quijote creyó que aquel era el

marqués de Mantua, a quien creía su

tío en ese momento, y así prosiguió en

su romance. El labrador, que estaba

admirado oyendo aquellos disparates,

le limpió el rostro cubierto de polvo y

enseguida se dio cuenta de quién era,

por lo cual le dijo:

—Señor Quijana, ¿quién lo

HORIZONTES CULTURALES24

ha vuelto a usted de esta manera, por

Dios?

Pero él seguía contestando con su

romance a cuanto le preguntaba.

Viendo esto el buen hombre, con

bastante trabajo lo subió a su jumento.

Recogió las armas y las amarró sobre

Rocinante, al cual cogió de las riendas

y, tomando del cabestro a su asno, se

encaminó hacia su pueblo, bien

preocupado de oír los disparates que

don Quijote decía, por lo cual se dio

cuenta que su vecino tenía las tejas

corridas, pues continuaba diciéndole:

—Sepa, señor don Rodrigo

de Narváez, que la hermosa mujer a la

cual me he venido refiriendo es la linda

Dulcinea del Tejo, por quien yo he

hecho, hago y haré los más famosos

fechos de caballería que se han visto y

que no se volverán a ver igual en el

mundo.

—Mire, señor —replicó el

labrador—, yo no soy don Rodrigo de

Narváez, ni el marqués de Mantua, sino

Pedro Alonso, su vecino. Ni usted es

Valdovinos, ni Abindarráez, sino el

honrado hidalgo, el señor Quijana.

—Yo sé quién soy —dijo

don Quijote—, y sé que puedo ser no

solo los que he dicho, sino todos los

doce pares de Francia, y aun todos los

nueve de la Fama, pues lo que lograron

hacer ellos juntos no es nada para lo

que conseguiré hacer yo en el futuro.

Se acordará de mí.

Haciendo Pedro Alonso un poco de

roña por el camino para llegar algo

más de noche y que no vieran tan

maltrecho al molido hidalgo, entraron

en el pueblo y a la casa de don

Quijote, la cual hallaron toda

alborotada. Estaban en ella el cura,

que se llamaba Pero Pérez, y Nicolás,

el barbero del lugar, amigos de don

Quijote, a quienes en ese instante el

ama les decía:

—¿Cómo les parece el

cuento de mi señor? Tiene tres días de

estar mangoniando no se sabe ´ónde, y

no aparecen ni él, ni el rocín, ni la

escopeta, ni la espada, ni el resto de

armas. Seguro que esos malditos libros

que lee le han corrío las tejas. Al

diablo con esos benditos libros que han

echao a perder el más delicao

cacumen de to´el pueblo.

La sobrina decía cosas parecidas y aún

decía más:

—Imagínense que mi tío

se lo pasaba leyendo estos libros hasta

dos días de seguidos, y de pronto

soltaba el libro que estuviera leyendo y

pelaba por la espada y cogía a

cintarazos las paredes, y cuando se

rendía de dar espadazos decía que

había dado muerte a cuatro gigantes

tan altos como una torre. Y el sudor

que le producía decía que era sangre

de las heridas que había sufrido en la

batalla. Por eso creo que esos malditos

libros deberíamos quemárselos. ¿Qué

le parece a usted eso, padre?

—Lo mismo digo yo —

contestó el cura—, y de mañana no

pasa que sean condenados al fuego,

para que no le vaya a ocurrir a otra

HORIZONTES CULTURALES25

persona la misma cosa.

Todo esto estaban oyendo el labrador y

don Quijote, con lo cual confirmó Pedro

Alonso la enfermedad de su vecino y,

así, siguiéndole el juego y remedándole

su emperifollado tonito, comenzó a

decir:

—Abran paso al señor

Valdovinos y al señor marqués de

Mantua, que viene mal herido, y al

señor moro Abindarráez, que trae preso

al valeroso Rodrigo de Narváez, alcalde

de Antequera.

A estas voces corrieron todos hacia

ellos, abrazando a don Quijote la criada

y su sobrina, quien sin poder bajar del

jumento por lo maltrecho que venía, les

dijo que se pusieran las pilas todo

mundo, porque venía mal herido por

culpa de su caballo, y pidió que lo

llevaran a la cama y que llamaran

urgentemente para que curara sus

heridas a Vicentico, que era un

curandero del pueblo al que él le tenía

mucha fe.

—Venga, señor —dijo el

ama dirigiéndose a don Quijote—, que

nosotros sabremos aquí curalo sin

necesidá de que venga ese yerbatero.

¡En mala hora se ha puesto usté´ a leer

esos malditos libros, por Dios!

Llevaron a la cama a don Quijote, y

revisándole para ver si tenía alguna

herida, no le encontraron ninguna, por

lo cual él les dijo:

—Estoy todo molido

porque me caí con Rocinante

combatiendo con diez camastrones,

los más bastos que se pudieran hallar

en toda la tierra.

—¡¿Camastrones hay en

el baile éste?! —dijo el cura oyendo

esto—. Por la señal de la cruz si no

quemo todos esos libros mañana.

Le hicieron a don Quijote un montón

de preguntas, y a ninguna quiso

contestar. Solamente respondió algo

ofuscado por la cansonería que tenían

con esa averiguadera:

—Dejen la preguntadera,

más bien denme de comer y déjenme

dormir, carajo.

Así hicieron. Lo metieron en la cama y

fueron enterados por el labrador de la

forma como lo había encontrado y de

los disparates que había dicho al

hallarle y al traerle.

Continuará en la próxima entrega…

HORIZONTES CULTURALES26

Por Alonso Ojeda

Awad

Ex – Embajador de

Colombia. Director

Programa de Paz U.P.N

Comentarios

RÍO DE JANEIRO, LINDA CIUDAD

o figuraba entre mis planes venir a

visitar este pujante puerto del océano

Atlántico y una de las ciudades más

hermosas y embrujadoras del Brasil.

Pero como dice el refranero popular:

“Dios tiene sus planes para cada uno

de nosotros”, y cuando menos

pensamos, nos sorprendemos

caminando calles y barrios hasta ahora

totalmente desconocidos para

nosotros.

El viaje de nuestra hija Silvia y nuestro

nieto menor Emanuel a Río de Janeiro,

aceleró nuestros planes. Y la empresa

aérea con su buena cobertura de

vuelos nos terminó de ayudar en

nuestro empeño. Después de un largo

viaje desde Bogotá, al termino de seis

horas de vuelo continuo, aterrizamos

en el aeropuerto internacional de Río,

Galeao Tom Jobin, en las primeras

horas de la mañana.

Me sorprendió la buena educación y

empatía con los primeros cariocas que

interactué en el aeropuerto. Una larga

y congestionada autopista nos llevó

hasta la avenida “presidente Vargas” y

ésta nos condujo a Lapa para subir

luego al pintoresco barrio donde viven y

que se llama “Santa Teresa”. Este es

uno de los barrios más antiguos y

pintorescos de Río. Aquí viven

fundamentalmente artistas, escritores,

gentes del teatro y se encuentran los

mejores y más típicos y auténticos

restaurantes de la cocina carioca.

Además, cuenta con excelente

cobertura de transporte urbano donde

sobre sale su famoso tranvía conocido

como “El Bonde” instalado desde

comienzos del siglo XX y que los

comunica con el centro de la ciudad

cruzando los famosos “Arcos de Lapa”,

Al ver pasar el tranvía por las calles,

me nace la nostalgia por el tranvía y el

troli bogotano que pasadas

administraciones capitalinas

clausuraron irresponsablemente, dando

lugar a otras formas comerciales de

transporte con gasolina y diésel.

El primer día lo dedicamos a ir hasta la

ciudad de Niteroi. Es una ciudad

especial que está ubicada al otro lado

de la Bahía de Guanabara y que se

comunica con Rio de Janeiro, a través

de un larguísimo puente que atraviesa

la Bahía. Además, cuenta con un amplio

y suficiente servicio de barcos que

transportan más de dos mil pasajeros

cada 30 minutos, en forma segura y

confortable. Por otro lado, tiene el

servicio de catamaranes que hacen un

bonito paseo por mar, atravesando la

Bahía. Niteroi puede considerarse como

HORIZONTES CULTURALES27

ciudad dormitorio, ya que son miles las

personas que trabajan en Río y van a

dormir y descansar en Niterói.

Niterói es la tierra natal del famoso

artista y arquitecto Oscar Niemeyer,

quien ideó y construyó la hermosa ciudad

capital del Brasil, Brasilia. Por esta razón

Niteroi es la segunda ciudad en el mundo

con más obras del famoso arquitecto.

Este conjunto arquitectónico trajo para

Niterói una importante revitalización

cultural y un nuevo escenario turístico.

“El camino Niemeyer” como se llama,

abriga siete obras importantes: Teatro

popular, Museo de la Ciencia y la

Creatividad, Memorial Roberto Silveira,

Centro de Atención al Turista, Plaza

Juscelino Kubitschek, Centro Petrobras

de Cine, y el Museo de Arte

Contemporáneo-MAC-.

“El Museo de Arte Contemporáneo MAC,

proyectado por el arquitecto Oscar

Niemeyer, es una obra de arte en

armonía con el paisaje privilegiado de las

aguas de la Bahía de Guanabara,

inaugurado el 2 de septiembre de 1996,

el local abriga exposiciones temporales y

la colección de Arte contemporánea de

Joao Satamini. Una de las más grande del

país, que retrata el arte brasileño a

partir de los años 50”. En conclusión, su

forma arquitectónica semeja desde la

distancia una gran estructura alienígena,

aposentada sobre la roca, con el “Pan de

azúcar” a lo lejos, pronta a iniciar su

viaje por los espacios siderales.

“Niterói tiene el más grande conjunto

continuo de fuertes y fortaleza de Brasil

compuesto por la Fortaleza de Santa Cruz

y por los Fuertes: do Pico, Sáo Luiz,

Barao do Río Branco, Tataiba y

Imbuhy. La Fortaleza de Santa Cruz

fue la primera erguida, alrededor de

la Bahía de Guanabara, en 1555”. Al

frente de la Fortaleza sobresale el

imponente “Pan de azúcar”, cerrando

en esta forma la boca de la Bahía de

Guanabara. Con los inmensos cañones

allí dispuestos estaba asegurada el

dominio de la Bahía y por lo tanto, la

seguridad de Río de Janeiro.

De regreso, arribamos a los pueblos

de pescadores que están ubicados en

las playas de Jurujuba donde se

disfruta de excelente gastronomía

nativa, sobresaliendo la “moqueca de

camarones” y los bolinhos de bacalao.

Como para relamerse los dedos.

De regreso a casa, por la noche,

atravesamos las refrescantes y

hermosas playas de Leme y

Copacabana, que invitan a un buen

baño de mar.

NOTA DE TRISTEZA.

En Río de Janeiro me sorprendió la

dolorosa noticia de la muerte del

apreciado padre jesuita JAVIER SANIN

FONNEGRA. Compañero del alma

mía. Fue un amigo en toda la

https://es.wikipedia.org/wiki/R%C3%ADo_d

e_Janeiro#/media/Archivo:Rio_Collage.png

HORIZONTES CULTURALES28

dimensión de la palabra. En los años

que comencé mi nueva vida civil,

después de dar largos debates en

Replanteamiento del Eln, me invitó a

escribir en la REVISTA JAVERIANA, de la

cual fue su director. Era un amigo

profundo de la Paz que no transigía con

ninguna forma de violencia o lucha

armada. Primo hermano del valiente

ingeniero Federico Arango Fonnegra,

quien murió asesinado en el Magdalena

Medio, buscando justicia social para el

país. No pude contener las lágrimas y

musité una plegaria en su nombre.

¡HONRA ETERNA A SU MEMORIA ¡

POESÍA AUTORES OCAÑEROS:

HISTORIA

Los sonetos de Hacarí

La estatua

Sobre el cerro, ciudad, que te domina,

y tras el cual esplenden tus auroras.

el bronce augusto del Señor que adoras

te abre sus brazos de bondad divina.

Reina así soberano en tu colina,

a donde van tus ruegos cuando imploras,

el beso de tus brisas voladoras,

y hecha canto tu parda golondrina.

Y allí su corazón resplandeciente,

te abraza como el sol en sus fulgores,

goza tus goces y tus penas siente,

Y se transforma en ánfora de amores,

para verter la paz sobre tu gente

y las perlas de aljófar en tus flores.

(1935)

Marco A. Carvajalino Caballero.

https://shadowhunters.fandom.com/es/wiki/Rio_de

_Janeiro

HORIZONTES CULTURALES 29

Comentarios

MODERNIDAD, ANTECEDENTES Y NEOLIBERALISMO

Por Sísifo Iluso

Rodríguez

El proceso histórico con el cual iba a

ser posible superar la creencia de que

el ser humano era una unidad originaria

y el lenguaje la expresión del pensar

constituido en imagen y semejanza de

Dios, es la Modernidad. La visión que

antecede generaba también una

dialéctica capaz de explicar los signos

como el medio que facilitaría la

comunicación con Dios, ante la

imposibilidad de los sentidos para

aprehender la verdad: Moisés recibe las

Tablas de la Ley en un desierto y Jesús

es identificado con el Verbo.

Esta etapa que precede a la

modernidad concibe el lenguaje como

un desparramamiento divino de signos

sobre el mundo y, al hombre, como la

concesión que trabaja para descubrir

las verdades contenidas en él. Al

cuerpo y a las cosas le restaba

importancia el alma inmortal. Otro

orden reemplazará esa coherencia de

dominación divina: la razón. El cuerpo

y no el alma; todo se va a procesar en

un tiempo que se distancia del de la

visión eterna. Desde la razón, es decir

desde el mismo hombre se genera la

expectativa, el futuro y no el fin.

Procesado en la producción, el trabajo

y la acumulación de valor, entre otros

acontecimientos, va a surgir el

fenómeno histórico de las disciplinas

con la jerarquía de la ciencia que

entrarían a configurar el sujeto de ésta

etapa.

La jerarquía disciplinaria que promovió

la ciencia al curubito de la razón

separó a ésta del arte y a los

resultados de los procesos, incluyendo

por supuesto, el modo de producir. Les

imprimió una mayúscula importancia

signada como progreso. La filosofía

que había sido tratada como una

disciplina más, es ulteriormente

identificada con la función crítica del

pensamiento. La psicología, sociología

y antropología, con el arte y la

literatura configurarían el ámbito de

las humanidades. Todo se comprende

como ese “hacer conocimiento” que va

a estructurar la etapa que se concibe

como la única forma válida de pensar

de este sujeto histórico: el

eurocentrismo.

Esta presunción le permite decir a

Edward Said, en su ensayo histórico

sobre el Orientalismo que, desde

Carlomagno hasta la Modernidad,

Occidente se ha equivocado

interpretando al mundo Oriental. La

sola diferencia en la comprensión del

tiempo en uno y otro, genera una

percepción distinta de las cosas; el

mundo que ha creado Occidente es el

mismo que él ha inventado.

HORIZONTES CULTURALES 30

Del sistema financiero y bajo el todavía

dominio industrial, asomaría el

neoliberalismo como al proceso que se

le irían sumando acontecimientos

posibilitando su entrada histórica. Uno

de estos fue el Plan Marshall, el cual se

convierte en la base que generaría el

Imperio Norteamericano, y que éste

presentó al mundo como una ayuda

humanitaria durante la Guerra Fría.

El mundo económico sujeto a la regla

que respalda en oro al papel moneda

como principio y garantía en la

circulación de mercancías, es

sorprendido con la unilateral decisión

del gobierno Nixon, de vulnerar esa

regla al emitir el papel-signo (sin

respaldo alguno). ¿La razón? El poder

tejido como imperio frente a los demás

nación-Estado.

Un banco más que centenario como el

Lehman Brothers, precisamente en

EEUU, entra a jugar con el poder que

gesta, en la práctica, la desregulación

tan anhelada por las finanzas generando

una de las mayores crisis después de la

del año 29, aun cuando ésta última, a

diferencia de aquella, se produjo por un

exceso en la producción que permitió la

intervención del Estado, y por supuesto,

bajo el respaldo de esa singular

mercancía en que se había constituido

el oro para la Modernidad.

Se va a ir conduciendo así el mundo a

una complejidad económico-social cada

vez mayor, suscitada por el paso de una

economía dominada por el costo de la

producción a otra en la cual va a

predominar el costo del dinero.

Las crisis provocadas en la economía por

la dominante tendencia de los juegos

financieros, se leían superficialmente

en los medios como la privatización

de ganancias y nacionalización de

pérdidas, sin que se enunciara su

perverso alcance, en el sentido de

que éstas últimas las asumiría el

bolsillo del contribuyente, es decir, el

pueblo; por ello se afirma que en el

neoliberalismo el capital gana si hay

ganancias y gana más si no las hay.

Pero más aún, la implementación del

dominio financiero en la economía no

se contrae a la alteración del proceso

de producción, distribución, consumo

y precarización del trabajo, por su

articulación con el desarrollo técnico

de las comunicaciones; va más allá,

es un fenómeno que ha permitido

acuñar en la crítica el término

“neohumano”, para significar la

negativa experiencia que implica el

mundo neoliberal en el hombre.

La adherencia a las redes, ha

facilitado una acumulación delirante

de información de las clases sociales

expresadas en el ejemplo del Big

Data. Éste señala la capacidad de

modelar y controlar el gusto de los

consumidores, generando una especie

de máquina neurobiológica encausada

por la automatización digital.

Nosotros como latinoamericanos

hemos sufrido un efecto particular

del desarrollo material que ha

logrado Europa. Nunca logramos una

independencia, a no ser en el juego

que surtía más la amplitud de la

razón que la realidad y en un

lenguaje, al cual se le ha depositado

las creencias.

Cualquier pedazo nuestro de historia

sometido como objeto de análisis

desde la conquista hasta la actualidad,

se ha movido bajo el código de una

dependencia que enuncia una libertad

robada, en el sentido de imposibilitar

la reinvención de su propia realidad.

La dependencia en una Modernidad de

sometimiento económico les diseñó a

estos pueblos un funesto futuro en el

desarrollo industrial y, no ha cejado de

presionar desde ese sometimiento para

“integrarnos” a este nuevo y

deshumanizante proceso neoliberal.

Ese fenómeno histórico del narco-

paramilitarismo llegó a nosotros con el

consabido estigma de la dependencia y

políticas neoliberales. Una protesta se

levanta hoy acompañada por las

centrales obreras, estudiantes, amas

de casa…; todos llevados más por la

desesperación que ha producido el

efecto de esas políticas; esas que no se

llevan a cabo por una instancia

reflexiva de la derecha, sino por la

configuración en una llamada

ultraderecha que fabricó su poder

económico-político con el narco-

paramilitarismo y que hoy teme perder

frente a las fuerzas democráticas que

quieren continuar con el desarrollo de

los Acuerdos de Paz de la Habana y con

el ánimo de alcanzar una

reconciliación donde podamos caber

todos los colombianos.

HORIZONTES CULTURALES 31

La cultura y la educación

hacen parte del desarrollo de los

pueblos.

Las entidades territoriales

deben incluir en sus planes de desarrollo el componente

cultural, en el marco de la

participación ciudadana

previsto en la Constitución

Nacional.

HORIZONTES CULTURALES 32

Por Manu de

Ordoñana,

Ana Merino

y Ane Mayoz

LiteraturaEL DERECHO A ESCRIBIR MAL

Lionel Trilling (1905-1975), crítico

literario estadounidense, es quien

firma los ensayos que componen este

libro con este título tan llamativo. En

ellos analiza la obra de grandes

escritores, de lo que padecieron por la

crítica. Su análisis se centra en autores

tan leídos como Gustave Flaubert,

Vladimir Nabokov, Ernest Hemingway,

Isaak Bábel, Edith Wharton, Leon

Tolstói… y en temas de sobra

comentados como la salud de la

novela, la literatura moderna… Pero

antes que nada, es fundamental anotar

que los artículos que vamos a comentar

fueron escritos con anterioridad, como

dice Manuel Vilas, en su reseña del

libro, “fueron escritos en el medio

siglo en una época sin prisas”, por lo

que leer a Trilling “es leer un mundo

espiritual ya desaparecido”. Pero qué

duda cabe que, como buen analista que

es, disecciona mucha de la materia

literaria existente durante siglos y que

resulta atemporal.

El primer capítulo lleva por título: Anna

Karenina. Cuando este libro apareció

en 1878 los lectores vieron recogidos

en el arte lo que era familiar en la

vida. Y no es que hasta entonces no se

hubiera hecho, Tolstói no inventó un

nuevo género con esta novela, sin

embargo, lo acogieron como si por

primera vez percibieran qué era la

verosimilitud. Y curiosamente este

punto fue criticado por el poeta y

crítico Arnold Mathew (1822-1888), al

afirmar que esta novela no debía ser

tomada como una obra de arte, sino

como un pedazo de vida. Según Lionel

Trilling las palabras de Arnold son

espurias: el arte es el arte y la vida es

la vida. Porque leemos novelas y

vivimos la vida y cuando decimos de

ciertas novelas que las “vivimos”, en

realidad, no es más que una manera de

hablar.

Pero también es cierto que Tolstói

posee el atributo realista en grado

HORIZONTES CULTURALES33

sumo, lo que no le hace ser el más

grande de los novelistas, pero sin duda,

sí el que establece las normas y los

modelos para la novela; y no son normas

y modelos del arte, sino de la realidad.

Tolstoi es objetivo; su objetividad está

cargada de afecto, y mediante la

afectividad logra crear la ilusión de

realidad. Y queda patente que solo

cuando el novelista realmente ama a sus

personajes los puede mostrar en su

totalidad, en todas sus contradicciones,

en sus fracasos y en sus grandes

momentos.

En la obra de Tolstói (1828-1910), la

familia es una realidad, la paternidad es

real, no una condición simbólica, porque

los afectos verdaderamente existen. La

felicidad que nos concede esta novela se

debe sobre todo a la visión moral de su

autor, por esto la crítica literaria ha de

rendirse ante ella. Parte de la magia del

libro reside en que viola nuestras

nociones de la proporción que debería

existir entre la importancia de un hecho

y la cantidad de espacio que recibe.

Esto se aprecia muy bien en la novela

cuando utiliza pocas líneas para contar

que Vronski comprende de repente que

no está ligado a Anna por el amor, sino

por el fin del amor. Y en cambio dedica

muchas páginas al momento en que

Levin descubre que no tiene ni una sola

camisa para su boda. Esto indujo a

Mathew Arnold a decir del libro que no

debía ser comprendido como arte sino

como la vida misma y quizá este pasaje

demuestra la energía de la inteligencia

animal que distingue a Tolstói como

novelista.

En otro artículo se centra en otra

famosa novela. El mismo año que Mark

Twain (1835-1910) publicó Las aventuras

de Tom Sawyer, 1876, comenzó a

escribir lo que calificó como “otro libro

para niños”. Como creía que un libro

debía escribirse por sí mismo, y como el

libro parecía que no tenía ganas de salir

ni él intención alguna de obligarlo, el

tiempo siguió pasando. Hasta que casi

diez años más tarde se sintió poseído

por una intensa carga de energía

literaria que le llevó a no parar de

escribir. Este impulso creativo tuvo

relación con la visita al Mississipi, es

decir, regresó donde había tenido lugar

su feliz infancia y adolescencia.

Entonces sí, el libro estaba impaciente

por escribirse a sí mismo. Cuando se

publicó Huckleberry Finn fue adorado

por los lectores, pero su autor todavía

no lo veía como lo que es: una de las

obras literarias más importantes del

mundo y uno de los documentos

centrales de la cultura norteamericana.

Su grandeza reside en su poder para

decir la verdad, son los niños quienes le

asignan valor a la verdad, y en ser uno

de esos libros que se puede leer en

diferentes etapas de la vida, puesto que

el paso del tiempo añade nuevos

significados.

Además, lo califica de gran libro porque

trata de un dios, de un poder con mente

y voluntad propias, que parece encarnar

una gran idea moral para los hombres

Tolstoi. https://elcultural.com/el-

viejo-leon-tolstoi-un-retrato-literario

HORIZONTES CULTURALES34

de imaginación moral. Aquí está la

relación de esta obra con T. S. Eliot,

quien en uno de sus poemas se refirió al

río Mississipi como a un dios pardo y

fuerte. Y es que el propio Huck es un

servidor del dios-río, y está muy cerca

de comprender la naturaleza divina del

ser al que sirve. El río en sí mismo no es

ético ni bueno, solo divino. Existe en el

libro, quizá no visible en una primera

lectura, una intensa y compleja

moralidad. Su voluntad de hacer el bien

es genuina, la naturaleza del río

promueve la bondad de quienes lo aman

e intentan acomodarse a sus designios.

Lionel Trilling alude a lo que sufrió el

libro: su prohibición en ciertas librerías

y escuelas cuando le añadieron el

adjetivo de subversivo, por las mentiras

endémicas, los hurtos insignificantes,

las denigraciones a la respetabilidad y a

la religión, y la mala gramática de la

novela. Y acepta sin ninguna duda que

es un libro subversivo —incluso que la

literatura tiene que serlo— y que hay

que comprenderlo, que el libro es

aplicable a la humanidad en su

conjunto, en todo tiempo y lugar, por lo

tanto, “universal”. Pero también es

local y particular. Tiene una específica

referencia moral a los Estados Unidos

del periodo posterior a la Guerra Civil.

La guerra y el desarrollo del ferrocarril

acabaron con la época en que el río era

la arteria central de la nación. La guerra

sí que supuso un cambio en la calidad de

vida, puesto que se llevó la sencillez, la

inocencia o la paz, pero no se puede

ignorar el mucho mal que existía con

anterioridad a ella. Y Mark Twain es uno

de los que no olvidan los vicios de

antaño. Él decía que “antes la gente

deseaba dinero”, mientras hoy “se

arrodillan ante él y lo adoran”. A esta

obra que es casi perfecta en cuanto a la

forma y al estilo, se le imputa el error de

terminar con el complicado plan que urde

Tom para facilitar la fuga de Jim. Es una

novela de aventuras, en la que el

personaje más importante no es otro que

el propio viaje. Y cuya prosa rompe con la

idea de que lo literario tiene que

apartarse del habla cotidiana. Es una

prosa clara, franca, lúcida cargada de

sensibilidad literaria, al margen de las

faltas de ortografía y los errores

gramaticales. Y, precisamente, por esta

prosa Ernest Hemingway se pronunció así:

“Toda la literatura norteamericana

moderna procede de un libro de Mark

Twain titulado Huckleberry Finn”. Tras

esta aplastante afirmación, cómo no

indicar que la propia prosa de Hemingway

desciende de manera directa y consciente

de esta novela. Pero no solo la de él,

también la de otros muchos escritores. Por

todo lo mencionado, Lionel Trilling define

a Mark Twain como “el maestro de un

estilo que rehúye la fijación de la página

impresa, que oímos con la inmediatez de

la voz hablada, veraz y sin

ostentaciones”.

Pero la alusión a Hemingway (1899-1961)

no acaba aquí, porque le dedica otro

apartado donde comienza haciendo la

https://es.babelio.com/auteur/-Hemingway.

Ernest-Hemingway/5557

HORIZONTES CULTURALES35

correspondiente división entre “el

hombre” y “el artista”. Y queda claro

que desde 1935 en sus obras de

ficción Hemingway “el hombre” se

apodera de Hemingway “el artista”.

Constata el papel inusualmente

importante que la crítica desempeñó en

este autor —el título de este capítulo es

“Hemingway y sus críticos”—, así como

el hecho de ser un escritor muy sujeto

al escrutinio público. Lo que realmente

le dolió fueron las constantes

acusaciones de que su obra atentaba

contra los valores más elevados de la

humanidad. Presionado por esa crítica

que confundía el artista con el hombre

se comprometió con la reivindicación

del hombre, demostrando que él

también podía convocar los

sentimientos sociales que requería la

sociedad.

No cabe duda de que Hemingway fue

forzado a esa obra inferior por verse

obligado a justificarse ante esa

concepción canónica de la literatura. No

vieron que Hemingway “el artista” era

un escritor ferozmente apasionado por

la verdad. Y es este deseo de decir la

verdad da su forma a su célebre estilo.

Su compromiso con la idea de la técnica

como un fin en sí mismo es otra

manifestación de su deseo por la

verdad. Fue acusado con frecuencia de

estar en contra de la mente en sí. Pero

hay que matizar que él no se opone a la

razón sino a la racionalización. Percibe

la mente como un cuchillo de castración

que amputa la valentía y el amor propio

de las personas y las deja “razonables”,

que para él es igual a aburridas y

artificiales.

La mítica obra de Rudyard Kipling (1865-

1936), El libro de la selva, fue el primer

descubrimiento literario de Lionel

Trilling. Y sin duda, la mejor forma de

hacerlo por todos los placeres que

ofrece el libro y por todo lo que

contiene: progenitores maravillosos, la

benevolencia del mundo salvaje, la

fascinación por la Manada y su Ley… En

otro libro, Kim —según Trilling su mejor

libro—, muestra Kipling su admiración

por la vida india, aunque los indios

repudian el libro y a él. Esta novela te

adentra en la historia y la cultura,

presenta distintos estilos de vida,

diferentes formas de pensar, trata a la

religión como algo que está en el mismo

origen de la vida, muestra cómo surgen

los mitos y por qué se crean… Kipling

fue un hombre honesto que, a pesar de

amar los valores patrióticos, fue en

contra de ellos al inyectarles arrogancia

y engreimiento, los dispuso de una

manera antagónica a lo intelectual.

Recuerda cómo en su época de

estudiante iban contra él. Por eso, es

evidente que en la literatura toda

declaración de orgullo, esperanza o

amor nacional suena impostada y solo

sirve para reforzar la tendencia al

rechazo, tal como lo demuestran las

reacciones hacia Kipling.

Si algo se destaca de F. Scott Fitzgerald

https://human.libretexts.org/Bookshelves/Literatur

e_and_Literacy/Book%3A_English_Literature_-

_Victorians_and_Moderns_(Sexton)/9%3A_Rudyard_

Kipling_(1865%E2%80%931936)/9.1%3A_Biography

HORIZONTES CULTURALES36

(1896-1940) es su carácter heroico, muy

presente en Crack-Up /capitán Swing),

libro que contiene una colección de

ensayos en los que Fitzgerald examinó

su atormentada vida, cartas inéditas y

apuntes del escritor todo ello recopilado

por el crítico literario Edmund Wilson

(1895-1972). La raíz de su heroísmo

puede encontrarse en su capacidad para

amar. Escribió mucho sobre el amor y

este también es perceptible en su

estilo. Era un moralista nato y su deseo

de “predicar a la gente de una manera

que parezca aceptable” está unido a su

tendencia para celebrar lo bueno y no

denunciar lo malo. Sintió que tanto el

amor como el arte requieren de una

especie de fragilidad personal y estaba

convencido de que “para escribir uno

debe ser imprudente”. Fue quizá el

último escritor importante que reafirmó

la fantasía romántica, que viene del

Renacimiento, de la ambición y el

heroísmo personal de la vida dedicada —

o desperdiciada— a un ideal del yo.

Centrándose en su libro El gran Gatsby

cree que se mantiene fresco y que

incluso ha ganado peso y relevancia.

Esto es debido al coraje

específicamente intelectual con que fue

concebido, coraje que indica el dominio

de los recursos tradicionales que tenía a

su disposición. Esa misma osadía la tuvo

al concebir a su héroe. Dividido entre el

poder y los sueños es, sin duda, la

imagen misma de Estados Unidos. Si en

una novela la voz del autor es muy

decisiva, en su obra la voz de su prosa

es la esencia de su éxito. Se oye esa

ternura hacia los deseos humanos que

modifica la sólida firmeza del juicio

moral. Al igual que sus héroes, careció

de prudencia, de ese instinto ciego de

preservación que necesita todo escritor

y muchísimo más el escritor

norteamericano, pero solo de eso

careció, y es un defecto pletórico de

generosidad, casi heroico.

En otro momento del libro se adentra

en Lolita. La novela de Vladimir

Nabokov (1899-1977) fue publicada

primeramente en París en 1955. En

Estados Unidos jamás existió resolución

legal sobre su publicación, fueron los

editores quienes dudaban sobre la

conveniencia de publicarla. La poca

indignación moral que despertó puede

sugerir que los lectores se dieran cuenta

de que es un libro inquietante y

provocador. Claramente justificado

queda por parte de Trilling que este

libro no es pornografía, sino la historia

de un episodio erótico, en el que tanto

las emociones como las sensaciones

eróticas están a la vista del lector. Y lo

que hace es analizarla profundamente

para saber lo que Nabokov se proponía

con esta novela tan escandalosa.

Otro autor en el que profundiza fue

Flaubert (1821-1880) quien murió

súbitamente en 1880 lo que significó

que la novela Bouvard y Pécuchet en la

que llevaba metido ocho años quedó

inconclusa, de ahí que el capítulo se

refiera a su último testamento. Le

enfurecía lo que veía y oía a su

alrededor, por eso esta obra es un

triunfo de la conciencia crítica, en el

sentido de corregir y reformar; se

proponía aludir a toda la vida

intelectual de Francia mediante los dos

héroes cómicos del título. Se burlan de

la religión, la filosofía, la literatura…

hasta tal punto que rechazan la cultura.

Se ha dicho que esta obra, al ser

compleja y difícil de analizar, ha

causado problemas a los críticos.

Trilling la analiza exhaustivamente y

afirma que a pesar de ser un libro muy

bueno fue un fracaso por su

ambigüedad y por no reflejar la

intención de su autor.

El capítulo titulado “La moralidad de

la inercia” aborda el tema de la

conferencia que le pidieron en torno a

las cuestiones morales de la novela de

Edith Wharton (1862-1937) Ethan

Frome. Le costó abordar el tema

porque no lo veía como ejemplo de

percepción moral, simplemente porque

sus personajes no toman decisiones

morales. Sin embargo, entendió que lo

escogieran porque era un libro muy

reputado en Estados Unidos, usado en

las escuelas y universidades. En esta

obra, Trilling ve una deficiencia

literaria y moral, una falta de vitalidad

de la prosa y un sufrimiento de los

personajes sin justificar. Aunque

concluye que el no tomar decisiones

morales es una gran parte de la vida

moral de la humanidad y que por lo

tanto merece su atención.

También aborda el eterno diagnóstico

referido a la novela: si se mantiene

viva o muerta. Presenta el caso del

reputado médico C. P. Snow

HORIZONTES CULTURALES37

(1905-1980), cuyas novelas no llevan la

marca de grandeza, pero interesan

porque tiene la impresión de que

fueron escritas únicamente para

probar que la novela no había muerto.

La novela que escribió trata sobre los

hombres cuyo talento les ha permitido

ascender de las clases bajas.

Lo interesante en la novela es cómo

los distintos orígenes sociales son

modificados por las actitudes de los

grupos científicos, hasta crear los

hombres nuevos, que es a lo que se

refiere el título The New Men.

Para el final hemos dejado el artículo

de donde ha extraído el título del

libro. En 1929, cuando Trilling leyó el

libro Caballería roja —una colección

de relatos cortos sobre los regimientos

soviéticos de caballería en Polonia —,

desconocía a su autor, Isaak Bábel

(1894-1940), y le inquietó encontrarse

con un talento nuevo de gran energía y

atrevimiento. Era la obra de ficción

más notable que había salido de la

Rusia revolucionaria, la única en la

que se podía distinguir el sello de un

talento excepcional, hasta de genio.

Estos relatos estaban estructurados de

manera que el lector no supiera cómo

el autor respondía a la brutalidad que

documentaba. Pero no era el tipo de

libro que él quería de la Revolución ni

tampoco el que la Revolución rusa

quería. A decir verdad, ningún

acontecimiento en la historia de la

cultura soviética es más significativo

que el fin de la carrera de Bábel. A

finales de los veinte y comienzo de los

treinta era considerado como uno de

los talentos más notables de la

https://www.isliada.org/li

bros/la-edad-de-la-

inocencia/

literatura soviética, pero no de manera

oficial, puesto que fue objeto de ataques

provenientes de la burocracia literaria.

Cuando en 1932 se suprimió la Asociación

Rusa de Escritores Proletarios, surgió un

nuevo periodo de libertad, y así llegó el

Primer Congreso de Escritores en 1934

donde Bábel habló. Y se pronunció así:

“Todo lo que tenemos nos ha sido

dado por el partido y el gobierno;

carecemos de un solo derecho, el derecho

a escribir mal. Camaradas, no nos

engañemos: este es un derecho

fundamental, y que nos lo quiten no es

poca cosa”. Como dice al respecto

Trilling, “Cuán precioso debe parecer

cuando existe la necesidad de concebirlo.

Sobre el derecho a escribir mal depende

el absoluto derecho a escribir”.

Además, Bábel se llamó a sí mismo un

escritor de un nuevo género literario:

el género del silencio. Al oír todo esto

muchos entendieron lo serios y

terribles que eran los chistes de Bábel.

Mencionó la doctrina de que el escritor

debe tener respeto por el lector. “El

lector pide pan y debemos darle lo que

pide, pero no de la manera que lo

espera. La esencia del arte es lo

inesperado”. Era un hombre político

teniendo en cuenta que todo hombre

de su inteligencia era político en los

tiempos de la Revolución. Estaba

cautivado y dividido por la vía de la

violencia y la vía de la paz. Fue en

1923 cuando empezó a escribir sus

obras de madurez; a expresar sus

pensamientos con claridad y sin

extenderse, a buscar su palabra

adecuada, y es que su preocupación

por la forma estaba al servicio de sus

preocupaciones morales. Era un

intelectual, un escritor, “un hombre

La lectura te forma,

te entretiene, te da

conocimientos, te

abre la mente al

mundo, te induce a

la conciencia crítica.

Inculquemos en

nuestros hijos el

hábito de leer:

¡nunca lo olvidarán!

HORIZONTES CULTURALES38

con anteojos sobre la nariz y otoño

en el corazón”, tal y como él se

definió. Como ha quedado expuesto,

hemos comentado algunos apartados

del libro, los que nos han parecido

más sugerentes, y los hemos

resumido. Teniendo en cuenta lo que

dice Lionel Trilling de que “resumir es

casi siempre un acto de traición

crítica”, qué mejor que tras probarlo,

degustarlo en su totalidad.

HORIZONTES CULTURALES 39

Noticias

COMIENZAN LAS FESTIVIDADES

TRADICIONALES DE COMEINZOS DE AÑO

2 de enero. Con el desfile de las reinas,

de carros antiguos y el Reinado de la

Tercera Edad, Ocaña dio comienzo a su

temporada festiva de 2020.

La administración municipal y

entidades de la sociedad civil, se

comprometieron para brindar a propios

y visitantes unos festejos tranquilos

donde el componente cultural tuviera

prelación. El desfile de apertura

comenzó a las tres de la tarde,

saliendo del sector de San Fráncico

hasta la Plaza de Ferias. En horas de la

noche tuvo lugar el Reinado de la

Tercera Edda en el barrio de

Villanueva.

3 y 4 de enero. Desfile de Comparsas

“Recuperación de la Cultura

tradicional del Carnaval”, apertura

oficial del Carnaval y Primer

Concierto de Carnaval “Raíces”

homenaje a la obra musical de los

compositores Ocañeros.

5 y 6 de enero. Conciertos en la Zona

Cero, Plaza del 29 de mayo, San

Agustín y Plaza de Ferias. Varias

agrupaciones musicales.

Destacamos el Concierto “Raíces”,

apoyado por el programa Nacional de

Concertación del Ministerio de Cultura

y la Alcaldía Municipal, donde se

dieron cita cultores de nuestra música

tradicional.

HORIZONTES CULTURALES 40

REGISTROS FOTOGRÁFICOS DEL CARNAVAL DE OCAÑA

2 DE ENERO. Desfile de autos antiguos y Reinado de la Tercera Edad.

3 DE ENERO. Desfile de reinas y comparsas

4 DE ENERO. Concierto “Raíces”, homenaje a la obra musical de

los compositores ocañeros.

5 Y 6 DE ENERO. Conciertos en la Plaza del 29 de mayo (Zona Cero,

Plaza de Ferias y Comfanorte)

HORIZONTES CULTURALES 41

SE CONFORMA LA MESA TÉCNICA PARA LA

CONMEMORACIÓN DE LOS 450 AÑOS DE

OCAÑA

CONFORMADA LA MESA TÉCNICA PARA LA

CONMEMORACIÓN DE LOS 450 DE

FUNDACIÓN DE OCAÑA.

22 de enero. El alcalde municipal Samir

Casadiego Sanjuán y el Secretario de

Educación, Cultura y Turismo, Raúl

Rolando Castro, presidieron la reunión

celebrada en las instalaciones de la

Alcaldía Municipal, cuyo objetivo fue el

de organizar la Mesa Técnica para la

conmemoración de los 450 años de la

fundación de Ocaña.

Se hicieron presentes, las siguientes

instituciones y organizaciones de la

sociedad civil local: Diócesis de Ocaña,

Cámara de Comercio, Universidad

Francisco de Paula Santander-Ocaña,

BBVA, Davivienda, Comultrasan,

Crediservir, Banco Agrario, SENA,

Cooperativa de Caficultores del

Catatumbo, Asociación Juan C. Pacheco-

Vigías del Patrimonio Cultural, Academia

de Historia de Ocaña, un delegado de

la gobernación de Norte de Santander,

FESC, Fundación Cine Leonelda,

Fundación Don Bosco, Apuestas

Cúcuta 75.

Previas palabras de apertura de la

alcaldía municipal y la Secretaría de

Educación, Cultura y Turismo, se hizo

una presentación sobre la Ley 1987 y

sus alcances, así como el proyecto de

organización de la Mesa Técnica, sus

componentes, objetivos e

integrantes, así como la dinámica de

los comités temáticos.

Fue un ejercicio productivo y

participativo que comenzará a

ejecutarse el breve lapso, iniciando

con la estructuración de la

programación de actividades a partir

del mes de febrero de 2020 y la

formulación de proyectos que

beneficien a Ocaña.

El 29 de enero se hizo la segunda

reunión de la Mesa Técnica,

puntualizándose sobre la

programación cultural en 2020 y la

necesidad de contar con proyectos

debidamente formulados en las

diferentes áreas. Avanzan los

contactos con la gobernación de

Norte de Santander y la Asamblea

Departamental.

HORIZONTES CULTURALES 42

HORIZONTES CULTURALES 43

Por Orlando

Clavijo Torrado.

Academias de

Historia Norte de

Santander y Ocaña

Croniquilla

EL MONAGUILLO

En la época a que se refiere este

episodio la función de monaguillo

correspondía solamente a los varones.

Quizá fue a raíz del Concilio Vaticano II

– 1962-1965 – que se permitió a las

mujeres oficiar como acólitas, y desde

entonces vemos a graciosas niñas con

sus moñas y colas de caballo

moviéndose en el altar. En muchas

iglesias no se ven ya sino acólitas.

In illo tempore – en aquel tiempo – la

misa era en latín. El curso de acólito o

monaguillo se centraba en aprender de

memoria la parte de responder al cura.

Había unos momentos al recitar el

Confiteor – yo confieso – que el

monaguillo, de rodillas, debía hacerle

venia al cura – creo que eran cuatro

veces -, las que obviamente las hacía

uno como un autómata, sin entender ni

pío, pero a uno de niño le gustaban esas

cosas, que tomaba como monerías.

Pero mi cuento se endereza a la ocasión

en que el padre Jesús Hemel Arévalo

Torrado – primo de mi madre – me invitó

a que lo acompañara a la celebración de

una misa en el corregimiento de La

Curva, en la carretera a Ocaña.

En dicho caserío vivían unos parientes

de mi padre, de manera que fue mucha

la algarabía por mi llegada. El párroco

me dejó allí y él continuó para la

capilla, la cual, vista hoy, no ha

cambiado a pesar de transcurrir tantas

décadas. Quiero decir que es la misma

capilla humilde, al costado izquierdo de

la carretera, en dirección Cúcuta-

Ocaña. Allí veneran a una Virgen de la

Tablita, rústica imagen pintada en un

pequeño trozo de madera, pero no es la

única porque en Campo Dos,

corregimiento de Tibú, también tienen

su Virgen de la Tablita.

Pero, sigamos con mi cuento. Mis

parientes no solo me agasajaron con

carne asada, caldo con huevos inmensos

de gallina criolla, tajadas de maduro y

pan, y chocolate, sino que después de

semejante comilona les dio por

brindarme con cerveza. Yo era novicio

en las artes de la bebeta. A la verdad,

nunca me había emborrachado. Esa

gente me embutía cerveza sin parar,

porque la alegría de tener al hijo de

Leoncio entre ellos no se comparaba

con nada. Y yo, beba y beba, como los

peces en el río del villancico navideño.

HORIZONTES CULTURALES44

A las once de la mañana el padre debía

comenzar la misa, pero faltaba su

ayudante. Me mandó a llamar con

urgencia, pero el bendito acólito ya no

era acólito sino alcohólico, y se

encontraba en una soberana pea

desparramado en una cama. El

reverendo tuvo que celebrar solo la

misa.

El disgusto suyo no fue menor. Le dio

quejas a mi papá que cómo le parecía

que se llevaba a este muchachito de

trece años a que lo asistiera en un acto

sagrado, y vea con lo que sale, le da

por ponerse a jartar, ¡todo un

seminarista! Mi papá, muy

avergonzado, le presentó miles de

disculpas al sacerdote, y a mí me

regañó no sé cuántas horas.

Aquella juma fue la primera y última

que me pegué siendo monaguillo.

[email protected]

12 de enero de 2020.

OCAÑA, 450 AÑOS DE

TRADICIONES, CULTURA Y

ALEGRÍA

Para 2020, la ciudad de Ocaña

estará de cumpleaños. El 14 de

diciembre cumplirá 450 años de

fundación y desde ya, la

Academia de Historia prepara

actividades para promover y

divulgar la historia, las artes y

las letras locales y de la

antigua provincia, heredera de

una cultura material e

inmaterial que hoy nos

enorgullece.

Ocaña es una de las ciudades

más antiguas del nororiente

colombiano, Posee un acervo

considerable de bienes

patrimoniales con declaratorias

nacionales, departamentales y

municipales. Su oferta de

turismo histórico, religioso,

ambiental y cultural, en

general, es una de las más

destacadas en el departamento

Norte de Santander.

2020: Año de la Ocañeridad.

Una cordial invitación para que

nuestros paisanos, residentes

en otras latitudes, vuelvan a su

solar nativo y celebren con

alegría esta efemérides.

45

Por Jorge Carrascal

Pérez.. Escritor

independiente.

Crónica

EL PASADO QUE RETORNÓ PARA QUEDARSE

.

.

Luz María Carrascal de Quintana, mi

abuela paterna que vivía en

Teorama, iba con relativa

frecuencia a Ocaña y por supuesto

llegaba a nuestra casa en San

Agustín. Entraba, saludaba, se

sentaba en la sala a reposar del

viaje, enseguida y como detalle,

mamá le servía un recién hecho

jugo, preferiblemente de piña por

ser el de su agrado. Después me

miraba sutilmente a la cara y de

inmediato expresaba: Vení y me

acompañás a hacer unas compras.

La primera era en el almacén de

don Pedro Trigos ubicado en el lugar

que hoy ocupa el Edificio La Guaca.

Ahí compraba distintas telas, y lo

que más me gustaba de la

transacción era el lápiz marcado

“Coltejer el primer nombre en

textiles” que siempre me regalaba

“por juicioso y acompañar a la

abuela” decía complacido. De aquí

nos vamos directo adonde el

compadre Chango Jácome, indicaba

mamá Luz. El almacén quedaba a

un costado de la plaza 29 de Mayo;

actualmente están las oficinas de

Cootranshacaritama y la Panadería

Nápoles. Ahí se demoraba hablando con

su compadre hasta que las palabras

entraban en paro por las horas extras de

trabajo no remuneradas. Hacía el pedido

de lo que necesitaba, se despedía, y

salíamos -ya yo lo sabía por experiencia

propia- directo a la iglesia de la Virgen

de Torcoroma. Si donde Chango se

demoraba, en la iglesia sí que era cosa

de nunca acabar. Hasta que me ingenié

el truco de hacerme el dormido y

empezar a cabecear, situación que le

causaba pesar y remordimiento.

¡Pobrecito debe estar muerto del

cansancio!, y paraba de rezar cuanta

oración, jaculatoria, letanía y

advocación existiera: “Santa Teresa de

Jesús, ayúdanos; Dios Padre celestial,

ten piedad de nosotros; Refugio de los

pecadores, ruega por nosotros; Casa de

oro, escúchanos Señor; Puerta del

cielo…

Y si el arribo de la abuela a Ocaña

coincidía con las vacaciones escolares,

entonces me iba con ella a Teorama a

ayudarle a organizar las vitrinas y

estanterías del almacén; aprender a

fabricar trampa jaulas en las que cogía

picoplatas, azulejos, cardenales, mirlas,

y, por ser tan maliciosos y astutos, a

veces, toches o turpiales. A los pájaros

primero había que cebarlos colocándoles

guineos en una tabla puesta en la rama

de un guayabo. Mi tío Ramiro que

HORIZONTES CULTURALES46

acompañaba a la abuela, no le gustaba

que yo cogiera pájaros, por eso cuando

advertía los que tenía atrapados, me

obligaba a soltarlos ¡después de tanta

brega en la agarrada!. Ahora puedo

entenderlo. Tenía un gran e innato

sentido conservacionista de la

naturaleza. Sin embargo desde esa

remota época mantengo la idea y el

propósito de tener un pájaro activo y

gracioso así sea enjaulado. Aunque en

contados casos se consigue la

materialización de este caprichoso

sueño. El encanto de los sueños está en

que se fraguan estando uno despierto.

Se habrán dado cuenta del acendrado

espíritu religioso de la abuela, tanto que

siempre deseó tener un sacerdote en la

familia, y para tal fin envió al inocente

tío Jorge al Seminario Mayor de Santa

Martha. Estando próxima su ordenación,

el corazón le ordenó en cambio casarse

con la cartagenera Saray Anzoátegui. La

frustración de doña Luz María fue

indescriptible. Sin embargo no cesó en

su empeño y apuntó la artillería pesada

contra este indefenso cristiano. Pero

también fracasó la pobre abuela porque

a cambio de un nieto con cuello de

clériman ¡le salió un man con pinta de

sacamuelas!. (Al cazador más diestro

también se le escapa la escurridiza

liebre).

A la edad de 10 años, mis papás se

arriesgaban a mandarme en lancha a El

Banco la tierra de José Barrios, el de La

piragua. Allí también vivía la amada tía

Anita, célebre modista igual que

Memita, así llamaba a su entrañable

hermana. La plata que me daban para el

viaje, yo la conservaba intacta en el

bolsillo porque cuando pedían el valor

del pasaje, le mentía al cobrador

diciéndole que era nieto de don

Armenio García Núñez, hombre

probo, de recio carácter y limpio

obrar que manejaba buena parte del

comercio banqueño, y por supuesto

muchos lo conocían, acataban y

respetaban. ¡Y de tan meritoria

condición me valía para hacerle el

quite al pago!

Me seducía mirar el paso de los

imponentes barcos David Arango y

Atlántico cuyas enormes ruedas de

palas movidas mediante una máquina

de vapor iban batiendo las turbias

aguas del río Magdalena, y de paso

asustando al huidizo cardumen de

peces. Los elegantes turistas no

podían sustraerse del mágico

espectáculo que ofrecían los

maravillosos paisajes y el espontáneo

saludo de los rivereños. A los viajeros

se les veía asomados por la borda del

barco respondiendo el amistoso gesto

o fotografiando todo lo que estaba al

alcance de sus ojos.

Hubo una ocasión en que queriendo

sorprender a mi tía y primos

hermanos con mi llegada, no se las di

a conocer. Pero el sorprendido fui yo

porque al llegar a El Banco ellos no

estaban pues se habían ido para

Tiquicio Nuevo, municipio en donde

tío Celiar tenía una extensa finca.

Tenía menos de 12 años de edad, no

obstante acaté a ir al atracadero de

las lanchas y allí me dijeron que

dentro de poco partía una para allá.

Me subí e inició la travesía.

Atravesando la Ciénaga de

Zapatosa el motor de la lancha se

HORIZONTES CULTURALES47

apagó y como ya era de noche el dueño

decidió que nos quedaríamos a dormir

ahí mismo, que “en la mañana voy en

chalupa a El Banco y compro los

repuestos porque a esta hora ya no hay

ningún almacén abierto” aclaró. Las 2

hamacas que había en el modesto

camarote las ocuparon el dueño y la

esposa, los demás dormimos encima de

los amontonados bultos de arroz que

transportaban. Fue tal la cantidad de

mosquitos que me picaron que cuando

por fin llegué adonde mi tía, me miró y

se puso a llorar. Durante el tramo que

había entre la lancha y el lugar en que

estaba mi tío Celiar, la gente comentaba

al ver mi aspecto “el pobre cachaquito

parece que tuviera sarampión, niña

Anita”. Justo en esa época tío fungía

como principal jurado del plebiscito que

en 1.957 se hizo en el país con el

propósito de saber si el general Gustavo

Rojas Pinilla continuaba o tenía que

abandonar la presidencia.

Acabada la votación mi tío fue conmigo

a buscar al propietario de la

embarcación, y cuando finalmente lo

encontró tomándose una cerveza Águila

en la tienda del paisa Darío Jaramillo, y

sin darle tiempo de que se tomara el

último sorbo, lo encuelló, cacheteó y

le gritó: Negro zarrapastroso ¡acaso

no sabías que se trataba de mi

sobrino?. Don Celiar él no me dijo

nada de eso. Y yo que estaba al lado,

desmentí la acomodada contestación.

De repente el tembloroso y

desencajado hombre empezó a

orinarse en los pantalones. Tío me

agarró de la mano y mirando aquel

grotesco espectáculo, acabó

afirmando: ¡eso te pasa por cobarde,

embustero y mala gente!

Ibagué enero 29 de 2020

http://www.infocatolica.com/blog/cura.php/

1909021027-se-nos-va-la-generacion-de-la

HORIZONTES CULTURALES51

Iglesia de Santa Ana en 1940.

HORIZONTES CULTURALES54

ELEGÍA POR MI MADRE

(Como homenaje a mi madre, María Concepción Manzano de Vega, con motivo

de cumplirse el primer aniversario de su partida al viaje sin retorno, este 31

de enero de 2020)

Recuerdo los días de hace algunas lunas, cuando en nuestra tierra nativa nos

volvimos a encontrar, y con tu presencia otra vez mi alma solitaria tornaste a

alegrar.

Te hallé sentada en la cama mirando a través de tu translúcida visión a la nada.

Tal vez mirando sobre los palpitantes noventa y dos años del atrás, apartando las

sedas de araña del tiempo, y con tus ojos encharcados al saberme cerca.

Con seguridad repasando tu tiempo feliz en un sueño, tal como creíste haberlo

vivido, como contándote a sorbos la historia que ya me habías desgranado, de

antes de mí:

Mirando hacia las aguas cristalinas de nuestro río grande tentado de pomarrosas y

humedecido de tus congéneres de la Ermita, los de tus primeros recuerdos.

Como tus primas hermanas, que a pesar de tu condición de hija natural, te

acogieron en su zócalo como a una más de entre las mimadas del abuelo.

Cuando de nuevo esa vez tuve que partir, tus ojos se volvieron a empapar,

mientras me empavonabas de mil persignaciones, como cuartelándome el futuro

en ceros y unos, bases de la ilustración del todo, y me despedías levemente con

tu mano derecha.

Repetiste tímidamente con la diestra la seña, una última santiguación y quedaste

sola.

Detenida allí permaneciste mientras yo corría tras mis utopías, creyendo cumplir

estando en la fuente de la ciencia, el arte y mi compromiso social.

Materias que no saciaron mis adentros sibaritas y me separaron de la felicidad

como al desterrado de su dominio.

Y esa vez incrédulo no pude rastrear la natural mutación de tu materia:

En tu desfallecer volviste a ser la niña de ayer y a trechos llamabas a tu tío y a tu

madre, hincándote de nuevo con ellos mientras a los del nuevo tiempo nos

dejabas a la deriva.

Y partí sin saber reconocer que era la última ocasión en la que te vería, y que esa

imagen para siempre se quedaría.

Y decidiste cumplir la cita aplazada, ese 31 de enero de 2019, en tu batola de

baño remangada, sin permiso furtiva por los yambos y guaduales, cruzando las

aguas atropelladas, para encontrar por la otra orilla las remanencias de mi

padre, que con seguridad reavivaste con la deflación del malogrado tiempo

surcado desde aquel fatídico 4 de febrero de 1987.

¿Habrá un lápiz, espátula, pincel o lumbre para pintar a un ser como vos, que

blindada de entereza, equidad, afectos, y encalada de humildad, me

transferiste tu arte, tu orden, tu chispa y alegría, que urdiste mi ser y me

despejaste el viento hacia la singularidad primigenia?

¿Habrá tiempos curvados que retrocedan, que vuelvan a repetir el tibio cielo de

mi pueblo como cuando alimentado con amor y bendiciones crecí de niño en

casa a tu lado?

Con seguridad no encontrarías justificación a mi lamento.

Pero si tan solo una tarde en que me dejaste al cuidado de mis hermanos

mayores pareció que se me acababa el mundo, ¿qué no se me ha podido acabar

ahora que me obligas a mirar en soledad hacia el infinito, donde está todo y a la

vez no hay nada?

Mis lágrimas brotan a torrentes sobre este escrito en construcción, con la ilusión

de aprender a vivir como vos, madre, mucho tiempo.

Y ahora solo queda una piedra escrita con tu nombre, en donde persiste que la

vida termina, contradiciendo al acaso, sin elongación alguna.

Tus tibias manos acabaron en este mármol, que, además, como recordatorio,

eterniza que aquí lo tuyo se adelgazó en una brizna de infinitud.

Ahora yo, abrazado a tu pétreo nombre y con tus flores mirando a la quimera,

no tengo consuelo.

Seguiré en mi turbar con apócrifa esperanza, y así, en algún instante de

eternidad, poder renovar tu amor materno y tu bondad.

Pero en fin madre, como único alivio creería que entre toda la insolidaridad y la

ignominia, no la pasamos tan mal del todo que digamos.

Jairo Luis vega Manzano

Silvania, diciembre 19 de 2019

HORIZONTES CULTURALES55

Publicaciones

56HORIZONTES CULTURALES

Todas las publicaciones reseñadas aquí pueden consultarse en la

Biblioteca de la Academia de Historia de Ocaña.

Relatos al calor del fogón de leña. Narrativa. José de la Cruz Vergel

Jaimes. Cúcuta: Diciembre 2019. contiene una reseña de las

memorias del viajero belga Gerard Noyelle, especialmente en lo

relativo a Ábrego, y once narraciones que dejan ver aspectos de la

violencia registrada en la provincia de Ocaña.

José de la Cruz Vergel Jaimes, oriundo de Ábrego, es tal vez el más

destacado escritor de este municipio, y ya ha publicado varios libros

sobre la historia de su terruño, demostrando su capacidad como

investigador histórico. Es miembro de la Academia de Historia de

Ocaña.

HORIZONTES CULTURALES 57

El tiempo del bicentenario. Una publicación de

RTVC – Señal Memoria, Fundación Patrimonio

Fílmico Colombiano, Museo Nacional de Colombia,

ICANH y Fundación BAT Colombia. Excelente

material que contiene la línea del tiempo hasta

2010, ensayos sobre hitos históricos y una USB con

las voces de presidentes de la república desde

1940, relativas a sucesos históricos,

conmemoraciones, etc., de gran valor para los

investigadores y ciudadanos, en general.

La Academia de Historia de Ocaña agradece al

historiador ocañero Jaime Humberto Silva Cabrales,

director de Señal Memoria, por el envío de este

material para la biblioteca de la Academia.

58

Gaceta Histórica de Norte de Santander, N° 152 de 2019,

órgano de divulgación de la Academia de Historia de

Norte de Santander. Contiene ensayos históricos de los

académicos Luis Fernando Niño López, Omar Rozo Pérez,

Olga Marina Sierra, Leonardo Yotuhel, Patrocinio Ararat

Díaz, Juan Manuel Ramírez Pérez, Susana Quintero

Borowiak, Jaime Ricardo Reyes Calderón, José Miguel

Alzate, Álvaro Antonio Claro Claro, Diego Alejandro

Ortega Carrillo, Luis Eduardo Lobo Carvajalino, Ólger

García Velásquez, y una entrevista sobre la vida y obra de

Fernando Chelle.

ALGUNOS MUSEOS DE NORTE DE SANTANDER