Después de presentar a Cristo como siendo El propio Dios, igual

que al Padre en toda Su deidad, siendo El creador y sustentador

del Universo, vino a este mundo y llevo a cabo la obra de la

redención y la prueba es que Él está sentado a la diestra de

Dios en las alturas.

Esa es la visión que tiene el autor de Cristo, por eso pasa a

enseñarnos que Él es superior a todo lo creado. Sean ángeles,

sean los hombres o sea el sistema religioso.

La superioridad del Hijo sobre los ángeles (1:5‐14)

Por eso en el v. 5 la demonstración de la supremacía de

Cristo sobre los ángeles se expresa a través de preguntas retórica, que exige una respuesta negativa por parte del lector.

Ninguno… Jesús es superior a los ángeles porque es El creador de todas las cosas y aún de ellos.

La superioridad de Jesús a los ángeles es presentada:

Hebreos 1:5-14 presenta siete citas del AT (5 de los Salmos, 1

de los libros históricos y una del pentateuco) que comprueban

la superioridad del Hijo a los ángeles. Estas son las primeras

de muchas citas del AT en la epístola. (Salmo 2:7, 2 Samuel

7:14, Deut. 32:43, Salmo 104: 4, Salmo 45:6…, Salmo

102:25-27, Salmo 110:1)

1- Por Su nombre Jesús es superior a los ángeles porque

no se llama mensajero (el sentido de “ángel”), sino Hijo de

Dios. (4-5) Nombre sobre todo nombre (Fip. 2:9)

“¿A cuál de los ángeles dijo Dios jamás?”, quiere expresar que

a ningún ángel se le ha otorgado el título de ‘Hijo de Dios’ en

ningún lugar de las Escrituras. Los ángeles han sido llamados

hijos de Dios de manera colectiva (Job 1:6), pero nunca de

manera singular como se hace referencia a Cristo. (Mat. 3:17,

Mac. 9:7)

Cristo es El Hijo natural de Dios, de Su misma esencia y

naturaleza. La palabra ‘engendrar’ no significa generación en

el sentido de pasar a ser Hijo divino, sea cuando nació, o en

el momento de la resurrección, ascensión o entronización a la

diestra del Padre. Palabra engendrar expresa el misterio de la

plenitud de la revelación (manifestación) de Cristo como Hijo

de Dios encarnado y manifestado a los hombres para nuestra

salvación, una vez que Jesús es El Hijo eterno de Dios y es

Dios en igualdad con El Padre y el E.S.

La segunda referencia procede de los libros históricos (2 S.

7:14), que contiene una promesa de Dios para David, dada

por medio del profeta Natán. Esa promesa no fue cumplida

plenamente en Salomón, ya que su reino no fue firme, y

tampoco eterno (2 S. 7:13, 16). Las promesas divinas no se

agotaban en Salomón, sino que transcendían al tiempo. Las

promesas pasaban por Salomón y abarcaban toda la

descendencia incluyendo al Mesías cuyo reino sería eterno.

Esa promesa tuvo su cumplimiento en Cristo (Luc. 1:32-33,

Jn. 7:42)

2- Los ángeles adoran al Hijo (1:6, Ap. 5:11-14)

Cuando trae al Primogénito al mundo referencia a la

encarnación. Primogénito con el sentido de predilecto o

preferido según el pensamiento semita y no primero nacido en

la casa. (cof. Heb. 12:23)

ADÓRENLE TODOS LOS ÁNGELES DE DIOS Aquí

encontramos una prueba de la deidad de Cristo y de Su

superioridad a los ángeles. Adorar a cualquier ser creado es

idolatría (Luc. 4:8, Deut. 6:13, Ex. 20:3-5). Los ángeles tienen

principio, El Hijo es Eterno e Inmutable (1:7-12), por eso le

deben a Él adoración.

3- El Hijo se sienta en el trono, los ángeles sirven al trono

(1:8-9 / Ap. 5 y 7)

El Salmo 45:6, 7, aplicado originalmente a un rey en su

coronación, sirve para describir el reino eterno de Jesús (vv.

8, 9). Cristo no es servidor, sino Rey. Si los ángeles también

reinan, como pensaban los judíos del primer siglo, Cristo es

superior a ellos y a todos los demás reyes, sus compañeros.

Y Él no es una creación que pueda cambiar o dejar de existir,

sino un Rey eterno. A quien se le llama Dios.

Su Reino es eterno y tiene en su mano el cetro. Es Él quien

imparte la justicia y la rectitud. Cetro = simboliza autoridad

real.

Jesucristo ama la justicia y manda que el pueblo de su Reino

también ame la justicia y odie la iniquidad.

Calvino: “Cristo por medio de su evangelio que es su cetro

espiritual, nos renueva según la rectitud de Dios”

Qué bueno saber que nada podrá compararse con Su reino

eterno. (Rom. 8:18, 2 Cor. 4:17-18)

4- Los ángeles fueron creados para servir, Jesús es Señor

soberano quien reina (1:10-14)

El autor habla de la majestad de Cristo. El trono, el cetro, la

unción con óleo… Todas características de un rey.

Ya los ángeles no fueron más que espectadores que adoraban

cuando la tierra fue fundada, pero el Hijo fue agente de la

creación.

Por eso no es un rey como los demás que han reinado, Él es un

rey que antecede la creación (1:10) y es un rey que precede a

todo eternamente. (1:11-12 / Salmo 102:25-27)

Esta creación corrompida por el pecado es transitoria y pasará,

y Él restaurará toda la creación. (2 Pe. 3:13).

Mostrando la superioridad de Cristo a los ángeles, el autor

concluye con la misma pregunta retórica que hizo en el v. 5,

que anticipa una respuesta negativa.

A ningún ángel se le ha dado jamás el honor de sentarse a la

diestra de Dios, aunque su labor sea importante. En ningún

lugar consta que Dios haya honrado nunca a ángel alguno

dándole una recompensa por los servicios brindados; en

ninguna parte promete Dios a un ángel algún obsequio,

distinción o rango. Un ángel es un ángel y seguirá siendo un

ángel. El Hijo, por el contrario, “después de haber provisto la

purificación de nuestros pecados… se sentó a la diestra de la

Majestad en el cielo” (Heb. 1:3).

Por eso nadie puede compararse a Él, y ninguno de Sus

enemigos prevalecerán frente a Él. Jesús terminó la obra de la

redención. (1:3)

Termina v. 14 con otra pregunta retórica que requiere una

respuesta afirmativa. Mostrándonos que los ángeles fueron

creados por Dios para cumplir los propósitos de Dios

Espíritus servidores. No solo adorar en la presencia de Dios,

sino que también sirven a los santos, a los que heredaran la

salvación. (Hech. 5,19, 12:7, 27:23, Salmo 91:11)

Los angeles como creaturas sirven a Dios, nosotros tenemos

mucho más razón para servir a Dios, pues además de ser

creados por Dios hemos sido rescatados por Dios 1:3.

Conclusión:

La adoración y el compromiso de servicio nacen y es

alimentado a la medida de nuestro conocimiento de Cristo

crece. Frente a la cruz, si preguntamos a Cristo: Por qué

mueres Señor? Y por la gracia de Dios entendemos que Él es

El Dios Eterno, santo, inocente que tomo nuestro lugar en la

cruz, no nos faltará motivación para adorarlo, no nos faltará

motivación para servirlo.

Que Dios nos ayude a crecer en nuestro conocimiento de Cristo,

que esto nos lleve a crecer en nuestra devoción, humildad,

obediencia y servicio.

¡A Él toda la gloria!