Guerra Independencia 1808 1814

Historia de España de 2º de bachilleratoDepartamento de Geografía e Historia

I.E.S. Fuente Juncal______________________________________________________________________

1. Introducción.

En el período que transcurre entre 1788 (acceso al trono de Carlos IV) y la muerte de Fernando VII (1833) se produce en España la crisis del Antiguo Régimen y el nacimiento de la España contemporánea. La grave crisis ocurrida durante el reinado de Carlos IV condujo a la Guerra de la Independencia.

Este conflicto se considera el inicio de la Edad Contemporánea en España. En este marco nace el proyecto liberal plasmado en la Constitución de 1812. Ésta constituyó, durante décadas, la referencia del liberalismo español, que sufrió avances y retrocesos, durante el reinado de Fernando VII.

2. La crisis de la monarquía de Carlos IV.

En los primeros años del siglo XIX la monarquía de Carlos IV se encontraba muy desprestigiada. Godoy, valido y hombre de confianza del Rey, sufría una fuerte oposición. Los sectores privilegiados de la nobleza y del clero representaban la principal oposición: los nobles estaban descontentos por su marginación del poder y el clero por la desamortización. También se le oponían los reformistas ilustrados.

Otro motivo de descontento era la subordinación a la política exterior española a las necesidades de la Francia de Napoleón. Una de las consecuencias más graves de esta política fue la derrota de Trafalgar (1805) ante Inglaterra, que supuso la destrucción de gran parte de la armada española. En 1807 Napoleón firma con Godoy el “Tratado de Fontainebleau”, que permitía la entrada de tropas francesas para ocupar Portugal y preveía el reparto de este país entre España y Francia.

La política de Godoy suscitó la oposición del llamado “partido fernandino”. Este grupo era partidario del príncipe Fernando, hijo de Carlos IV, y conspiraba contra el rey. El “Motín de Aranjuez” (marzo de 1808) provocó la caída de Godoy y la abdicación de Carlos IV en su hijo Fernando (Fernando VII). Entretanto, las tropas fancesas habían entrado en España gracias al citado tratado de Fontainebleau.

La caída de Godoy y de Carlos IV agravó la crisis de la monarquía. Napoleón, aprovechándose de esta situación, llama a Francia a Carlos IV y a Fernando VII y los obliga a sucesivas abdicaciones, las llamadas “abdicaciones de Bayona”, que pusieron la corona de España en manos de Napoleón, quien la entregaría a su hermano José (José I).

3. La Guerra de la Independencia (1808 – 1814)

3.1.- El levantamiento contra los franceses y la formación de Juntas

La creciente hostilidad contra las tropas francesas, percibidas como fuerzas de ocupación, desembocó en la sublevación del pueblo de Madrid el 2 de mayo de 1808. El detonante fue la salida de los últimos miembros de la familia real española hacia Francia.

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Una cadena de sublevaciones se extendió por todo el país, combatidas por los franceses ante la pasividad de las instituciones españolas. Había comenzado la guerra.

El vacío de poder, producido por las abdicaciones de Bayona, y los levantamientos llevaron a los sublevados a establecer un nuevo poder para organizar el gobierno y la defensa. Nacen así las “Juntas Provinciales”1.

Estas Juntas se consideran soberanas y legitiman su autoridad en nombre del “rey ausente”. Las componían hombres de la aristocracia y del clero, militares y letrados. Había desde defensores del Antiguo Régimen hasta liberales, pero todos estaban unidos por la oposición a los franceses, la defensa de la independencia de España y de la monarquía de Fernando VII. Al poco tiempo las Juntas se reunieron en la Junta Central, que asumió los poderes soberanos y se erigió en el máximo órgano gubernativo.

3.2.- El gobierno de José I

Mientras tanto, José I intentaba, con la ayuda de los afrancesados, acabar con el Antiguo Régimen en España.

Para conseguir este propósito se redacta el “Estatuto de Bayona”, una carta otorgada que, a pesar de mantener en manos del monarca la mayor parte del poder, incluía una especie de declaración de derechos y una serie de reformas de carácter liberal que proyectaban la supresión de determinados privilegios, la prohibición de amortizar nuevas tierras, la libertad de comercio e industria y la igualdad en el cobro de impuestos.

Pero José Bonaparte nunca tuvo las manos libres para hacer su política de reformas; su subordinación a Napoleón era total. Por otro lado, tampoco contó con el apoyo del pueblo.

3.3.- El desarrollo de la guerra

La guerra pasó por tres fases:

1ª) Hasta finales de 1808. La sublevación se convierte en guerra abierta y la resistencia toma la forma de “sitio” (como Gerona y Zaragoza). El ejército francés tuvo que rendirse en Bailén, lo que provocó la entrada en España del propio Napoleón al frente de un gran ejército.

2ª) Desde finales de 1808 hasta 1812. Fase caracterizada por la hegemonía miliar francesa y la actuación de la guerrilla. El avance francés fue contundente, lo que provocó que la Junta Central se refugiara primero en Sevilla y después en Cádiz. La mayor parte del territorio estaba ocupado por los franceses. Tropas inglesas, bajo el mando del Duque de Wellington, intentaban, avanzando desde Portugal, frenar a Napoleón.

1 Las Juntas parten de la creencia en dos principios. En primer lugar, que la renuncia de Fernando VII, soberano legítimo. No ha sido voluntaria y que, por tanto, no es válida. En segundo lugar, que cautivo el monarca, y, ante la adhesión a José I de las autoridades tradicionales, la iniciativa corresponde a la sociedad, bien para defender los derechos soberanos de Fernando VII (tesis absolutistas), bien para asumir la soberanía que el cautiverio del Rey ha dejado vacante (tesis liberal).______________________________________________________________________Tema 1. La Guerra de la Independencia y los comienzos de la revolución liberal. La Constitución de 1812

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Uno de los problemas de los grandes problemas militares de Napoleón fue la guerrilla. Las partidas guerrilleras eran grupos formados por antiguos soldados, voluntarios civiles y hasta bandoleros, que atacaban por sorpresa al enemigo con rápidas acciones, valiéndose del conocimiento del terreno y de la complicidad de la población civil. Los franceses dominaban las ciudades pero el campo fue controlado por estas partidas.

3ª) Entre 1812 y 1814. Se caracteriza por la pérdida de posiciones de los franceses, embarcados en la campaña de Rusia. El frente ruso obligó a Napoleón a retirar tropas de España lo que fue aprovechado por las tropas angloespañolas. Las victorias de Arapiles, Vitoria y San Marcial obligaron a Napoleón a firmar el “Tratado de Valençay” (diciembre de 1813). Este tratado ponía fin a la guerra y reconocía a Fernando VII como Rey de España.

3.4.- Carácter de la guerra

La Guerra de la Independencia tuvo varias dimensiones:

a) Fue una guerra de liberación nacional en la que el pueblo rechaza la dominación, en este caso napoleónica.

b) Fue un conflicto civil interno entre los afrancesados y los patriotas. Los afrancesados eran una minoría relevante desde el punto de vista político, social y cultural, que colaboró con José I. Este apoyo respondió a motivos diversos, como los ideológicos (veían la posibilidad de hacer una serie de reformas necesarias sin revolución) o el oportunismo (creían muy posible una victoria de Napoleón).

c) Los patriotas eran defensores de la monarquía borbónica y contrarios a José I, pero entre ellos también surgieron dos posturas: Los liberales, que además de defender la nación contra Francia, deseaban hacer su propia revolución, y los absolutistas, defensores de la religión y de la monarquía absolutista tradicional.

d) Un conflicto internacional pues Gran Bretaña se alió con España frente a los franceses. Así España se convirtió en el escenario de la lucha entre Francia e Inglaterra.

3.5.- Consecuencias de la guerra

Las consecuencias en pérdidas humanas y materiales fueron enormes lo que agudizó la quiebra económica y financiera que se arrastraba desde época de Carlos IV. Las ciudades quedaron desvastadas; el mundo rural sufrió el alza de los precios y las crisis de subsistencia. Los prometedores comienzos de la industria textil catalana fueron interrumpidos.

Pero la Guerra de la Independencia también creó el marco adecuado para que tuviera lugar la revolución política, la revolución liberal que acabó con el Antiguo Régimen.


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4. Los comienzos de la Revolución Liberal. La Constitución de 1812.

Mientras los franceses ocupaban prácticamente todo el país, La Junta Suprema Central tomó la decisión de convocar Cortes Generales del Reino. Se abría así el camino del liberalismo.

El decreto que convocaba las Corte establecía que la representación se realizaría sin la tradicional división en estamentos, sino en cámara única y con voto individual. Las Cortes Generales y Extraordinarias del Reino se reunieron en 1810 en Cádiz, la única zona no ocupada por los franceses.

4.1.- Composición de las Cortes

Existían entre los diputados diferentes posiciones políticas:

a) Los absolutistas. Partidarios de que la soberanía residiera en el monarca absoluto.

b) Los jovellanistas. Este grupo, liderado por Jovellanos, defendía una soberanía compartida entre el rey y las cortes.

c) Los liberales. Defendían la soberanía nacional, es decir, que la fuente de autoridad y legitimidad es la nación y no el rey. Dominaron los debates en las cortes por lo que será la posición que terminó triunfando.

Desde un punto de vista social predominaban en las cortes las clases medias con formación intelectual, eclesiásticos (muy numerosos), abogados, funcionarios y militares, así como miembros de la burguesía industrial y comercial. L alta nobleza apenas estuvo representada ni tampoco las masas populares. Muchos delegados de las provincias ocupadas y de los territorios españoles de América no pudieron asistir, por lo que fueron sustituidos por residentes en Cádiz, ciudad con una nutrida burguesía mercantil y refugio de muchos liberales burgueses.

Desde el comienzo las cortes demostraron que no se parecían a las antiguas. El primer decreto aprobado por las cortes establecía que éstas representaban la soberanía nacional. Así se ponía en marcha la revolución liberal.

4.2.- La labor legislativa de las Cortes de Cádiz.

La obra de las Cortes, desarrollada entre 1810 y 1813, presenta dos dimensiones:

a) Liquidación de los fundamentos sociales y económicos del Antiguo Régimen. A ello se encaminan las siguientes medidas:

1ª.- Decreto de libertad de imprenta. Suponía el derecho a la libertad de expresión y suprimía la censura para os escritos políticos.

2ª.- Decreto de abolición de los señoríos jurisdiccionales.3ª.- Se derogan los gremios. Se establece la libertad de comercio e

industria y la libre contratación de los trabajadores.______________________________________________________________________Tema 1. La Guerra de la Independencia y los comienzos de la revolución liberal. La Constitución de 1812

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4ª.- Abolición de la Inquisisción, considerada como un obstáculo para la libertad de pensamiento.

5ª.- Medidas desamortizadoras. Se establece una concepción de la propiedad libre y plena, que se opone a las propiedades vinculadas o amortizadas.

b) La Constitución de 1812. Recogía las ideas del liberalismo. Sus características más importantes son:

1ª.- Soberanía Nacional. Suponía el fin jurídico de la monarquía absoluta. El Rey debe someterse a la Constitución.

2ª.- Limitación del poder de la Monarquía.3ª.- Reconocimiento de la igualdad jurídica de los ciudadanos varones.

Se suprimen los privilegios.4ª.- División de poderes. Legislativo, que reside en las Cortes, una

asamblea unicameral, y en el Rey; el poder ejecutivo, que reside en el Rey, y el judicial, que reside en los tribunales de justicia.

5ª.- Sufragio universal masculino.6ª.- Establecía la confesionalidad de estado, es decir, el reconocimiento

de una única religión, en este caso la católica, en la nación española.7ª.- Reconocimiento de derechos y libertades individuales. 8ª.- Estado centralizado y unitario. La apuesta por una nación

compuesta por individuos libres e iguales implicaba el fin de los privilegios territoriales como los fueros vascos y navarro.

La obra legislativa de las Cortes de Cádiz, incluida la primera Constitución liberal, suponía el paso del Antiguo Régimen a un régimen nuevo. De la monarquía absoluta a monarquía constitucional, de sociedad estamental a una sociedad con igualdad legal para todos los ciudadanos.

Todas estas leyes y proyectos quedaron frustrados con el regreso de Fernando VII que, en 1814, anula esta Constitución y vuelve al absolutismo. Durante su reinado se desarrolló el conflicto entre el liberalismo y el absolutismo. Habrá que esperar al reinado de su hija Isabel II para que en España se implantara el régimen liberal.


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