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Gobernanza de las
playas españolas
Dr.Josep-Francesc Valls, catedrático Departamento
Dirección Marketing ESADE- Universidad Ramón Llull
Sr. Josep Rucabado, profesor Departamento Sistemas de
Información ESADE- Universidad Ramón Llull
Dr. Rafael Sardá, investigador Consejo Superior
Investigaciones Científicas Blances, profesor de ESADE
Antoni Parera, Research Assistant ESADE
Barcelona junio 2013
*Este estudio forma parte del proyecto ”Metodologías y conocimientos para validar un nuevo modelo
integral de gestión de playas como objetivo de la GIZC”, acogido al Plan Nacional I+D+I, del Ministerio de
Economía y Competitividad 2010-12, en el que han participado CISC de Blanes y Universitat de Girona.
**El trabajo de campo ha sido realizado con el soporte de FEMP
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1. INTRODUCCIÓN
Las playas son sistemas naturales sometidos en la actualidad a una gran presión
humana y climática. En las playas como en el resto de las zonas costeras, coinciden en
base a lo anterior tres factores interrelacionados: los biofísicos, que condicionan la
productividad del ecosistema y la defensa costera; los socioeconómicos; y el proceso
de gestión, su gobernanza (Fernandez, Mtsuda y Subade, 2000). Ocurre que los valores
ecológicos, los socio-culturales y los económicos se han visto totalmente modificados
durante los últimos cincuenta años como consecuencia del vuelco hacia el litoral que
se ha producido. El turismo ha basado su desarrollo en el uso intensivo de la playa y
del litoral y ello ha supuesto una fuerte presión sobre esta parte del territorio. Esta
presión procede de la intensificación de los usos residenciales, industriales y de
recreación. Y se asocia, por una parte, al crecimiento de la población que vive en la
costa); y por otra, al crecimiento económico derivado de la pesca, la agricultura, la
explotación mineral y las diversas actividades turísticas y recreación (Wesley and Pforr,
2010)
El litoral y en concreto las poblaciones de costa han protagonizado durante la segunda
mitad del siglo XX los mayores flujos migratorios estacionales de la historia. A los viajes
veraniegos de los turistas hay que añadir el grueso de la población que se ha instalado,
bien sea por ir a trabajar en los servicios, bien por buscar condiciones climáticas más
benignas, bien por decidir instalarse o pasar largas temporadas en estas zonas. Tras la
primera década del siglo XXI, esta tendencia dista mucho de difuminarse; al contrario,
los procesos de globalización del turismo internacional potencian cada vez más la
presión sobre estos sistemas y lo que ocurre en el Mediterráneo y el Caribe se
incrementa también en otros mares, como consecuencia de la presión de terceros
países.
Tras más de 50 años de gestión intensiva al servicio del turismo en el Mediterráneo, las
playas siguen representando para los municipios españoles el núcleo de atracción más
destacado en torno al que gira la riqueza generada por el desarrollo turístico. Aunque
su uso no se planificó en el primer momento, puesto que el negocio turístico fue
creado por emprendedores internacionales de forma exógena, los turoperadores, la
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gobernanza de las playas españolas ha ido mejorando hasta el punto de que las
decisiones endógenas de los municipios resultan determinantes en la planificación
junto al soporte recibido por parte de las Diputaciones, las Comunidades Autónomas y
el Estado.
Del mismo modo que otros sistemas costeros, las playas desempeñan múltiples
funciones socio-ecológicas siendo tres las más relevantes: actuar como depositarios de
biodiversidad; ofrecer protección a la costa; y satisfacer las necesidades humanas de
ocio desde la perspectiva de la recreación (Sardá et al., 2012). Pues bien, en muchos
municipios, las funciones de la playa se circunscriben a la última de las tres, las
oportunidades recreativas, relegando las otras dos de carácter biofísico, la del cuidado
de la biodiversidad y la de la protección de la costa. Esto ocurre en muchas ocasiones
porque la gestión de estas competencias se encuentra lejos del lugar de actuación, lo
que acaba provocando procesos importantes de degradación que unidos a los
asociados al cambio global acelera la erosión (Eurosion, 2004). Con la finalidad de
poner fin a esta tendencia, durante las dos últimas décadas ha aparecido un
movimiento que reclama un mayor cuidado en la gestión de estos sistemas naturales,
desarrollando sistemas integrados de gestión para un correcto uso de las playas dentro
de esquemas apropiados de gobernanza (James, 2000; Ariza et al., 2008, 2012).
Entendemos la gobernanza como el más apropiado modelo de dirección política en el
que todos los actores públicos y privados tienen un cometido en los procesos de la
toma de decisiones” (Wesley and PForr, 2010; Thomson and Pforr, 2005; Mayntz,
2003). El objetivo de dirección política consiste en establecer una estrategia sostenible
en el territorio que integre todas las políticas, tenga en cuenta tanto las funciones
recreativas como las biofísicas y sea compartida por todos. Para alcanzarlo se
requieren cinco principios (Milligan and O’riordan, (2007; y Duxbury and Dickinson,
2007):
vivir dentro de los límites medioambientales interpretando la capacidad de
carga frente al riesgo de vulnerabilidad; la resiliencia es el camino;
buscar un justo y equitativo reparto de la riqueza generada por el entorno
playa;
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alcanzar una economía sostenible en base a la integración de la información
ecológica, social y económica;
promover una buena relación entre los agentes implicados en el destino; y
practicar la responsabilidad medioambiental.
Lejos de agotarse la capacidad atractiva de las playas en la actualidad, la oportunidad
se proyecta a través de un modelo de planificación sostenible y de gestión integrada
de las funciones dentro de una estructura efectiva de Gobernanza. Se trata de adquirir
protagonismo no sólo en la temporada estival, sino a lo largo de todo el año gracias a
complementarse con el resto del portfolio del destino. Algunos municipios están
desincentivando la masificación veraniega de las playas invitando a los turistas a
desplazarse en otros períodos del año, modificándoles la visión y el uso de la playa. De
este modo, ésta se entiende como el eje de desarrollo del destino, en la medida en
que sea capaz de rodearse de los productos más innovadores de cultura, ocio,
recreación y relación. Manteniendo y mejorando el recurso biofísico, e innovando en la
faceta recreativa, las playas pueden acabar configurándose como espacios singulares
de creación de experiencias para los nuevos turistas contemporáneos: experimentar el
espacio es conocerlo y conocerlo es convertirlo en foco de atracción (Suvantola, 2002).
Si hace cincuenta años los turistas europeos procedentes del norte y del centro de
Europa encontraron en el Mediterráneo paquetes turísticos de sol y playa para pasar
15 ó 20 días de verano, ahora podrán encontrar en los espacios renovados la vivencia
completa de experiencias diversas a lo largo de los doce meses del año,
probablemente en formatos vacacionales más cortos.
El estudio sobre la Gobernanza de las Playas Españolas ha sido realizado por un equipo
de profesores de ESADE Business School con el apoyo del Consejo Superior de
Investigaciones Científicas (CSIC), dentro del proyecto “Metodologías y conocimientos
para validar un nuevo modelo integral de gestión de playas como objetivo de la GIZC”,
acogido al Plan Nacional I+D+I, del Ministerio de Economía y Competitividad 2010-12.
Los resultados obtenidos tienen su origen en un trabajo de campo con 150 casos de
municipios españoles de litoral, que fue realizado con el soporte de la Federación
Española de Municipios y Provincias, FEMP entre febrero y abril de 2012.
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2. OBJETIVO Y METODOLOGÍA
El objetivo del estudio consiste en analizar el modelo de Gobernanza de las playas españolas,
teniendo en cuenta una serie de aspectos: la calidad de las instalaciones y servicios de las
playas; la variedad de los productos turísticos ofertados en el municipio; el nivel de
planificación estratégica de la playa y del turismo y el nivel de cooperación con el resto de
administraciones y con el sector privado; y las buenas prácticas de gobernanza que
desarrollan.
Para alcanzar estos objetivos, además del uso de fuentes secundarias diversas, hemos
realizado un trabajo de campo entre los municipios de litoral españoles. La relación de
los 439 municipios con litoral marino fue facilitada por la Federación Española de
Municipios y Provincias (FEMP). El equipo del proyecto elaboró un cuestionario de 57
preguntas, algunas factuales y otras de opinión, que fue debidamente digitalizado e
introducido en un servicio externo de gestión de cuestionarios por internet.
Seguidamente se contactó al universo completo de los municipios por correo
electrónico, y por teléfono en su defecto. A los componentes de la muestra se les
remitió la dirección electrónica de la página web a la que tenían que acceder para
responder la encuesta. A aquellos municipios que tuvieron dificultades en la respuesta
al cuestionario por internet, se les remitió el mismo en formato PDF, a fin que pudiera
ser completado manualmente y enviado posteriormente por correo electrónico o fax.
La encuesta se llevó a cabo durante los meses de mayo y junio de 2012. Los datos
factuales preguntados se referían al año 2011 completo. Durante prácticamente las
cinco semanas que duró la recogida de datos se obtuvieron 150 cuestionarios
considerados válidos, cuya distribución por Comunidades Autónomas y porcentaje de
respuestas válidas se presenta en la tabla siguiente:
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Muestra por CCAA
Universo Respuestas %
País Vasco 27 7 26%
Cantabria 21 6 29%
Asturias 19 9 47%
Galicia 72 19 26%
Andalucía 60 21 35%
Murcia 8 4 50%
Valencia 55 22 40%
Cataluña 69 35 51%
Baleares 36 9 25%
Canarias 72 18 25%
Total 439 150 34%
Puede observarse que el número de cuestionarios válidos supera la tercera parte del
universo, lo cual constituye un resultado bastante superior a la media de las encuestas
realizadas por correo. Sin embargo, dado que el número de encuestas no es muy
elevado en valor absoluto, el margen de confianza a tener en cuenta en cada uno de
los resultados estadísticos en forma de porcentaje será de cierta envergadura. En
concreto, y bajo la hipótesis de que la extracción de la muestra respondiera a criterios
teóricos de aleatoriedad -cuestión un tanto incierta- y admitiendo un error muestral α
del 5%, los límites del intervalo de confianza para un resultado del 50% se cuantifica en
±6,5%.
El 35% de los cuestionarios fue rellenado por técnicos, en su gran mayoría de las
concejalías de Medio Ambiente, Turismo o Playas, que alcanzaría el 41% si se
añadieran los arquitectos e ingenieros municipales. Otra cuarta parte fue contestada
por jefes o responsables de Áreas, Secciones o Servicios, mayoritariamente de Medio
Ambiente, Playas y Turismo. Y casi otra cuarta parte (23%) fueron rellenados por el
propio alcalde o por concejales de las mismas áreas mencionadas en las líneas
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anteriores. De este modo, se puede considerar que las respuestas obtenidas llevan el
marchamo político y técnico que se pretendía.
Por lo que se refiere al tamaño de los municipios, prácticamente la mitad (47%) tienen
una población comprendida entre los 10.000 y 50.000 habitantes, mientras que un
36% corresponde a municipios de menor población repartidos equitativamente entre
menores de 5.000 habitantes y entre 5.000 y 10.000.
A partir del análisis de estos datos, se han construido una serie de indicadores
relacionados con la Gobernanza de las Playas españolas. Una vez cruzados entre sí,
facilitan una mejor comprensión de los diferentes modelos de gestión y pueden servir
a la vez para la mejora de la gestión de otras poblaciones de playas a nivel europeo e
internacional.
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3. RESULTADOS
3.1. Prestaciones de las instalaciones y servicios de las playas
La amplia mayoría de los municipios españoles de litoral, que alcanza el 84,0%,
considera que las prestaciones que ofrecen sus playas son altamente satisfactorias
(Cuadro 1). En efecto, las valoraciones promedio otorgadas a las instalaciones y
servicios son en general elevadas. Entre ellas destacan:
la presencia de papeleras (4,41 en una escala de 1 a 5)
las duchas y Lavapiés (4,38)
los servicios asistenciales de la Cruz Roja (4,35)
Existen unas cuantas, con valoraciones medio-altas:
los paneles informativos para usos diversos (4,15)
los contendores de reciclaje (4,11)
Las pasarelas de madera (4,08)
Los restaurantes y bares (3,96)
Instalaciones para discapacitados (3,95)
Bancos (3,85)
Cuadro 1: Satisfacción municipal por la prestación de servicios de playas
84%
12%
4%
SI
NO
NS/NC
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Cuadro 2: Valoración calidad de instalaciones y servicios
Media
Papeleras 4,41
Duchas y Lavapiés 4,38
Servicio asistencial Cruz Roja u otro 4,35
Paneles informativos (para localización de servicios, zonas
protegidas, etc.) 4,15
Contenedores de reciclaje 4,11
Pasarelas de maderas 4,08
Aseos públicos 4,05
Quiosco, chiringuito 4,00
Restaurante, bar 3,96
Instalaciones para discapacitados (accesibilidad con apoyo
en el baño: silla anfibia, sistema "audio-playa", etc.) 3,95
Bancos 3,85
Toldos, sombrillas, hamacas 3,66
Zonas deportivas (campo vóley, etc.) 3,59
Área de juegos infantiles 3,55
Fuentes 3,43
Windsurf, motonáutica, patines, kayaks, piraguas 3,41
Cabinas sanitarias (WC móviles) 3,38
Palmerales/sombrajo 3,14
Teléfono 3,06
Vestuarios 2,98
Zona de pesca con caña 2,86
Plataformas flotantes 1,94
Algo parecido ocurre con los servicios de vigilancia y de seguridad. Aparece en primer
lugar la señalización de banderas sobre el estado del mar (4,47). Le sigue el puesto de
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socorro y auxilio (4,44); el balizamiento de la zona de baño (4,43) y la silla de vigilancia
(4,20). Los menos valorados son el balizamiento de los espigones (3,31); la megafonía
para la alerta de emergencia (3,42); la señalización sobre la intensidad de riesgos de
oleaje, medusas, etc. (3,91); y el vehículo de ambulancia (3,67) (Cuadro 3)
Cuadro 3: Valoración vigilancia y seguridad
Media
Señalización sobre el estado de la mar (banderas verdes, etc.) 4,47
Puesto de socorro y auxilio 4,44
Balizamiento de la zona de baño 4,43
Silla de vigilancia 4,20
Embarcación de salvamento 4,18
Señalización de las zonas y de las actividades prohibidas,
restringidas y peligrosas 4,06
Torre de observación 4,01
Plan de prevención de emergencias 4,00
Señalización de regulación de las actividades náuticas 3,98
Señalización intensidad de riesgos en la playa (oleaje, medusas,
etc.) 3,91
Servicio de vigilancia policial 3,84
Cartel informativo del riesgo permanente (en cada acceso) 3,71
Vehículo ambulancia 3,67
Alerta de emergencia (megafonía) 3,42
Balizamiento de los espigones 3,31
Excepto el transporte público (3,48), la mayoría de los aspectos relacionados con la
accesibilidad a la playa y los aparcamientos resultan también excelentemente
valorados: los accesos peatonales a la playa (4,51); los accesos de tráfico (4,27); la
señalización para acceder a ella (4,17); los accesos para discapacitados (4,14); y los
aparcamientos (4,05) (Cuadro 4).
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Cuadro 4: Valoración accesos y aparcamientos
Media
Accesos a la playa para peatones 4,51
Accesos de trafico 4,27
Señalización para llegar a la playa 4,17
Accesos para discapacitados (rampas) 4,14
Aparcamientos 4,05
Transporte publico 3,48
Aparcamientos de bicicletas 3,43
Relativamente más bajas resultan las valoraciones promedio de protección de la
naturaleza. Aquellos municipios que poseen dunas aprecian más la limpieza de la
basura de las dunas (3,87) y la adecuación de pasarelas para los usuarios (3,80) entre
las tareas para mantenerlas en valor. Los municipios con dunas mencionan sin excesivo
convencimiento los desvelos por su limpieza, acordonamiento o control de las especies
invasoras (3,87, 3,53 y 3,39, respectivamente). Lo mismo ocurre en aquellos
municipios que poseen dentro de su territorio Lugares de Interés Comunitario, LIC,
zonas de cría de ostrero, corales marinos, micro reservas.. Diríamos que el cuidado de
la playa -entendido como el espacio de arena de transición inmediata al mar, utilizado
para el asueto vacacional y deportivo- resulta en general bastante superior al de estos
otros recursos litorales (Cuadro 5).
Cuadro 5: Valoración de la protección de la naturaleza
Media
Limpieza de la basura de las dunas 3,87
Adecuación de pasarelas por los usuarios 3,80
Acordonamiento de las dunas 3,53
Otros aspectos 3,50
Carteles informativos sobre el valor de las dunas 3,41
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Control de las especies invasoras en las dunas 3,39
Trabajos de restauración de dunas 3,34
El 69,6% de los municipios de litoral españoles afirma que sus playas pierden arena.
Entre ellos, el 46,0% ha llevado a cabo tareas de regeneración en las playas de
referencia durante los últimos veinte años; en el resto de las playas, la regeneración ha
resultado más baja (39,0%). Los municipios están preocupados por el reducido
esfuerzo que realizan frente a la erosión, hasta el punto de valorar este aspecto como
el más bajo (3,83 dentro de una escala de 1 a 5), frente a aspectos como la calidad
sanitario-microbiológica (4,76), la localidad visual (4,64), la calidad ambiental de la
arena (4,56) y los contendores de reciclaje (4,11). El bajo interés mostrado por la
recuperación de la arena de las playas corroboraría el análisis introductorio de que la
función recreativa resulta mucho mejor tratada que las otras dos biofísicas, de
conservación de la biodiversidad y de protección de la costa.
Excepto la regeneración de las playas (3,83), el resto de elementos relativos a la
calidad del agua son altamente positivos (Cuadro 6):
Microbiológica (4,76)
Visual (4,64)
Ambiental arena (4,56)
Limpieza arena y recogida de residuos (4,50)
Trabajos de mejora y acondicionamiento (4,30)
Cuadro 6: Valoración de las playas
Media
Calidad sanitario-microbiológica de las aguas de baño 4,76
Calidad visual del agua 4,64
Calidad ambiental arena 4,56
Limpieza de la arena y recogida de residuos 4,50
Acondicionamiento de la playa y trabajos de mejora 4,30
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Regeneración de la playa 3,83
La alta valoración alcanzada por la mayoría de las prestaciones de las playas no se
sustenta en las certificaciones de la gestión de la calidad. Excepto la Bandera Azul (el
68,7% de la muestra afirma tenerla en su poder), el resto de las más importantes
certificaciones resulta bastante escasa (Cuadro 7):
ISO 14001 (32,0%)
Agencia local 21 (29,3%)
Q Calidad Turística (28,0%)
ISO 9001 (16,7%)
EMAS (12,7%)
Tras la mayoritaria Bandera Azul, aparece un bloque compuesto por ISO 14001,
Agenda 21 y la Q de Calidad (que las han alcanzado del 28 al 32% de los municipios
encuestados). Y en tercer lugar quedan las certificaciones más rezagadas, ISO 9011,
EMAS y otras varias que requieren mucho más compromiso (del 12,7 al 16,7% de los
municipios encuestados). Entre ellos, hay que mencionar los galardones Ecoplayas; el
sistema integral SICTED; la certificación Qualitur (Comunidad Valenciana); y las normas
UNE 187001 y UNE 170001.
Sólo el 8% de los municipios dispone de 5 certificaciones; el 10%, 4; el 9,3%, 3; y el
28,0%, 2.
Cuadro 7: Certificaciones de calidad de las playas españolas
% Sí
Certificado Bandera Azul 68,7
Certificado ISO 14001 32,0
Certificado Agenda 21 29,3
Certificado Q Calidad Turística 28,0
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Certificado ISO 9001 16,7
Otras Certificaciones 15,3
Certificado EMAS 12,7
Ya hemos indicado que los que no se muestran ufanos por la prestación de los
servicios de playas significan una proporción baja de la muestra, el 12%. Pues bien,
resulta interesante analizar las razones señaladas por este grupo de municipios para
no explotar convenientemente los recursos de la playa y del litoral. No están
satisfechos con las prestaciones como consecuencia de la falta de recursos económicos
(4,45), agravada por la crisis actual que ha reducido de forma destacada los recursos
municipales. Le siguen otra serie de motivos:
la dispersión de competencias entre administradores (2,94)
la falta de información (2,05)
y la incapacidad organizativa interna (1,78) (Cuadro 8).
Estos cuatro factores (recursos económicos, dispersión de competencias, falta de
preparación e incapacidad organizativa) planean sobre los resultados de la muestra.
Cuadro 8: Razones por las que no se han explotado los recursos de la playa y del
litoral
Media
Falta de recursos económicos 4,45
Dispersión de competencias entre administradores 2,94
Falta de información 2,05
Otras causas 1,88
Incapacidad organizativa interna 1,78
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3.2. Desarrollo de la gestión municipal de las playas
¿Quién realiza en concreto la gestión de las playas en los municipios litorales
españoles? En algunos casos, la asume directamente la alcaldía (8,74% de los
municipios encuestados). La tarea principal recae sobre las áreas de Medio Ambiente y
Sostenibilidad, Turismo, y Playas y Litoral. Pero participan también de una manera
destacada las de Policía, Gobernación, Protección Civil y Seguridad; Servicios;
Infraestructuras, Obras Públicas y Servicios; Limpieza y Mantenimiento; Deportes y
Cultura; y Urbanismo. En la parte delantera del Cuadro, se pueden contemplar las
concejalías principales que se responsabiliza de la gestión de la playa (Cuadro 9):
Medio Ambiente (30,7%)
Turismo (21,3%)
Playa /Litoral (15,7%)
Alcaldía (8,7%)
Policía, Gobernación, Protección Civil y Seguridad (6,3%)
En la parte posterior del cuadro, se muestran las concejalías implicadas directa e
indirectamente dentro de las Áreas que gestionan las playas españolas:
Medio ambiente y sostenibilidad (55,9%)
Turismo (48,0%)
Policía, Gobernación, Protección Civil y Seguridad (38,4%)
Infraestructuras, Obras y Servicios (24,4%)
Playas y Litoral (20,5%).
Comparando los porcentajes de las columnas delanteras con las traseras, llama la
atención el papel preponderante que toma el área Policía, Gobernación, Protección
Civil y Seguridad. Digamos que por la afluencia y la función, la playa es tratada como
una cuestión de orden público.
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Cuadro 9: Concejalías competentes en la gestión de las playas
Además de las concejalías y Áreas municipales, hay que constatar la presencia de
algunas figuras jurídicas de índole mancomunal- como ocurre en el País Vasco-, que
asumen funciones de gestión, como es el caso de las Diputaciones Forales.
Hemos dividido los recursos humanos que trabajan en las playas en cinco categorías:
tres son de tipo permanente, que son funcionarios, laboral y voluntario; y de tipo
específico de la alta estación, laboral y voluntario. Varias constataciones (Cuadro 10):
Funcionarios: el 17,3% no tiene ningún funcionario al servicio de las playas; el
43,7%, 1 ó 2 ; el 26,4%, entre 3 y 5; y el 12,3%, más de 6 funcionarios
Laboral permanente: el 14,6% no tiene personal laboral permanente; el 35,9%,
entre 1 y 2; el 26, 8%, entre 3 y 5; y el 22,3%, más de 6
Voluntario permanente: el 84,2% de los municipios no tiene voluntarios
permanentes; destaca que el 5,2% tiene de 6 a 10
Laboral adicional: el 17,2% no tiene ningún laboral adicional; y el 41,3% tiene
entre 6 y 25 personas
0,0%
10,0%
20,0%
30,0%
40,0%
50,0%
60,0%
30,7%
21,3%
15,7%
8,7%6,3%
4,7%3,1%
2,4%0,8% 0,8% 0,8% 4,7%
55,9%
48,0%
20,5%
12,6%
39,4%
18,1%24,4%
9,4%
18,9%
11,0% 11,0%
25,2%
Concejalías en Gestión de PLAYAS(1ª concej. versus todas las concej. implicadas)
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Voluntario adicional: el 75,4% no tiene ningún voluntario adicional en verano;
sólo se observa que el 6,5% tiene entre 11 y 25 personas en este régimen; y el
8,2%, más de 25 personas
Cuadro 10: Recursos humanos al servicio de las playas
Porcentajes válidos
Personal
funcionarial
permanente
Personal
laboral
permanente
Personal
voluntario
permanente
Personal
laboral
adicional
Personal
voluntario
adicional
0 personas 17,35% 14,61% 84,21% 17,24% 75,41%
1 persona 29,59% 19,10% 1,75% 3,45% 0,00%
2 personas 14,29% 16,85% 1,75% 8,05% 1,64%
3 personas 8,16% 8,99% 1,75% 4,60% 0,00%
4 personas 12,24% 10,11% 1,75% 4,60% 1,64%
5 personas 6,12% 7,87% 0,00% 9,20% 3,28%
De 6 a 10 personas 6,12% 17,98% 5,26% 22,99% 3,28%
De 11 a 25 personas 5,10% 3,37% 1,75% 18,39% 6,56%
Más de 25 personas 1,02% 1,12% 1,75% 11,49% 8,20%
Sea cual sea la dimensión del municipio, la valoración de los ayuntamientos de litoral
acerca del nivel de formación del personal que trabaja en las playas es ligeramente
superior a 4 sobre la escala de 1 a 5: para el 72,1 %, la formación de su personal es
adecuada o muy adecuada.
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3.3. Planificación estratégica de las playas
La importancia que los municipios españoles de litoral otorgan a sus playas dentro del
conjunto de recursos y activos del municipio es altísima, un 4,52 sobre 5. Sin embargo,
al distinguir entre los diferentes factores estratégicos, muy pocos les otorgan la
relevancia manifestada. Afirman que es un atractivo rentable (3,81); un atractivo más
del municipio (3,77); un eje de desarrollo económico (3,64); un atractivo importante,
pero no prioritario (2,98); un atractivo demasiado costoso (2,58); y un atractivo que
tendrá menos peso a medio y largo y plazo (1,86). La resultante de estas opiniones es
que la playa se ha convertido en un eje de desarrollo económico indispensable, pero su
rentabilidad no es excesivamente elevada. A fin de desarrollar todas las posibilidades,
ha de combinarse con el resto de los recursos existentes en el municipio. Aunque en
menor proporción, hay un grupo de municipios que consideran que los costes de
mantenerla resultan excesivamente caros y que acabará perdiendo el valor que ha
adquirido con todo merecimiento durante los últimos cincuenta años. (Cuadro 11)
Cuadro 11: Tipo de atractivo que es la playa
Media
un atractivo rentable 3,81
un atractivo más del Municipio 3,77
el eje de desarrollo económico del Municipio 3,64
un atractivo importante pero hay que invertir mucho más en
otros proyectos 2,98
un atractivo excesivamente costoso 2,58
un atractivo que tendrá menos peso a medio y largo plazo 1,86
Sin excesiva euforia pero de forma contundente, la mayoría de la muestra reivindica
todas las competencias de gestión (3,53). Igualmente contempla que el ejercicio de
esta función lo debería realizar una concejalía u organismo de forma centralizada
(3,18), sin interferencia de la Comunidad Autónoma (2,17)) y de forma más radical del
Estado (1,61). Ni el impuesto turístico municipal (2,19),ni el autonómico (2,01) ni el
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estatal (1,89), ni tampoco la privatización (1,28) resolverían mejor los costes de gestión
de las playas (Cuadro 12) Mucho menos quieren oír hablar de privatizar las playas
para garantizar el mantenimiento y mejora (1,19).
Cuadro 12: Quién debe gestionar la playa
Media
El municipio debe disponer de todas las competencias de gestión 3,53
Debería llevarla una concejalía u organismo público de forma centralizada 3,18
Un impuesto turístico municipal resolverá los costes de gestión de las playas 2,19
La Comunidad Autónoma debería tener todas las competencias de gestión 2,17
Participan demasiadas concejalías en el Municipio 2,09
El Estado debería tener todas las competencias de gestión 1,61
Debería ser privada y financiada por el sector 1,28
La relación con el sector privado aparece un tanto peculiares. Un poco más de la mitad
de la muestra indica que los ayuntamientos se coordinan con el sector privado para la
gestión de las playas, pero el tipo de coordinación contiene determinadas
características, que aparecen en los siguientes ítems:
El sector público municipal actúa en solitario (53,9% a favor frente a 46,1%)
Los agentes intervienen pero sin gestionar la playa (55,1% a favor frente a
44,9% en contra)
Los agentes intervienen formando parte de la coordinación cogestionando la
playa (84,9% en contra frente a 15,1% a favor)
El ayuntamiento ofrece subvenciones al sector privado para la coordinación
(92,9% en contra frente al 7,1% a favor).
La respuesta ligeramente favorable a la gestión de las playas en solitario (53,9 frente a
46,1%) no esconde el bajísimo interés (84,9% frente a 15,1%) por coordinarse con los
agentes privados para cogestionar las playas; y menos aún, el descarte de la opción
subvencionar al sector privado para que éste gestione las playas (92,9 frente a 7,1%).
20
No ha variado casi nada la visión municipal de gestionar en exclusiva tanto las playas
como los productos turísticos en general respecto a mediciones anteriores: el nivel de
la cooperación con el resto de las administraciones resulta escaso (2,90 en la escala de
1 a 5); y el del partenariado público-privado a nivel municipal no progresa en nuestro
país ni en estos momentos de crisis.
Sólo una cuarta parte de los municipios consultados afirma disponer de un plan
estratégico relativo a las playas (23,0%, frente al 68,0% que responde no poseerlo)
(Cuadro 13). Además, cerca de la mitad, el 45,5%, de los que tienen planes afirma
desarrollarlos para un año, lo cual no se ajusta a los criterios de planificación
estratégica por tratarse de un espacio temporal excesivamente reducido. Contrasta
este bajo nivel de planificación con la alta importancia que otorgan a la playa y la
elevada satisfacción por las prestaciones y se presenta más en consonancia con el bajo
nivel de las certificaciones de calidad
Independientemente de que haya planificación o no, la mayoría de los municipios
consultados considera que los objetivos de la política municipal en la gestión de playas
resulta bastante eficaz (3,84).
Cuadro 13: Disponibilidad de un plan estratégico para la playa
23%
68%
9%
SI
NO
NS/NC
21
De este bajo nivel de planificación se desprende un aspecto negativo sistémico; el 66,7
% de los municipios encuestados afirma no haber establecido un techo sobre la
capacidad receptiva máxima del municipio para preservar el espacio natural protegido
de la playa. De este modo, más de dos tercios de los municipios siguen ofreciendo sus
playas a cuantos más turistas lleguen mejor sea en el período que sea. Entre el 23,0%
que planifica, el 10,7% (16 municipios) manifiesta haber establecido un techo, seis lo
cuantifican concretamente y dos especifican haber realizado estudios de capacidad de
carga de las playas.
Esta visión de la playa, el modelo de gestión y el nivel de planificación se concretan en
los siguientes aspectos presupuestarios: los municipios de litoral españoles dedican de
promedio el 1,3% de su presupuesto global al turismo y otro 1,3%, a las playas (Cuadro
14). El reparto de este porcentaje del presupuesto es el siguiente (Cuadro 15):
El 44%, al capítulo 1, personal
El 42%, al capítulo 2, material
Y el 14% al capítulo 6, inversiones
Cuadro 14: Presupuesto de playas y de turismo
22
Cuadro 15: Distribución presupuesto dedicado a las playas
Al desglosar el presupuesto turístico entre los distintos municipios, ocurre que (Cuadro
16):
Más del tercio (35,9%) gestiona un presupuesto inferior al 0,5% del global
municipal
Más del 40% (42,3%), entre el 0,5 y el 2%
Más de una quinta parte de los municipios (21,9%) dispone de recursos
financieros superiores al 2% del global
Comparándolos con los dedicados al turismo, se puede observar que el presupuesto de
playa es inferior a aquél entre los municipios que están por debajo del 1% y por encima
del 3%; superiores, entre 1 y 2%; y bastante parecidos en los porcentajes del 2 al 3%.
Cuadro 16: Presupuesto de playa según municipios
% pres.TURISMO % pres. PLAYA
> 3% 11,1 7,8
de 2% a 3% 14,3 14,1
de 1% a 2% 20,6 29,7
de 0,5% a 1% 15,9 12,5
< 0,5% 38,1 35,9
Cap.1: 44% Cap.2:
42%
Cap. 6: 14%
23
3.4. Coordinación intramunicipal, interadministrativa y privada
El 68,2% de los municipios de litoral españoles afirma realizar algún tipo de
coordinación con los diferentes agentes públicos que forman parte del producto sol y
playa, frente al 31,8% que expresa lo contrario. (Cuadro 17) Con la Comunidad
Autónoma es con quien alcanza el mayor grado de cooperación el municipio (3,65
sobre la escala de 1 a 5); seguido de la provincia y la Diputación (3,59); los municipios
adyacentes creando mancomunidades diversas (3,54). Un poco más atrás quedan el
Consejo Comarcal (3,27) y el Estado (3,18) (Cuadro 18).
Cuadro 17: Coordinación municipal con los distintos agentes
Cuadro 18: Grado de coordinación supramunicipal
Media
Comunidad Autónoma 3,65
Provincia (Cabildos Insulares, etc.) 3,59
Municipios adyacentes 3,54
Consejo Comarcal 3,27
Estado 3,18
60%
28%
12%
SI
NO
NS/NC
24
La relación de bajo nivel de cooperación entre el ayuntamiento y el sector privado en
lo que atañe a las playas, definida en el punto anterior, se proyecta más allá de ella: el
61,1% de los municipios afirma no tener planes de creación de nuevos productos
turísticos o de reposicionamiento que afecten a la playa, frente al 38,9% que sí. Sin
embargo, afirman que el nivel de cooperación con las empresas del sector turístico
resulta francamente bueno. Destacan (Cuadro 19): los centros deportivos (4,10); los
hoteles, oferta de alojamiento en general, y restaurantes (3,98); las asociaciones y centros
culturales (3,95);el comercio (3,96); los bares (3,85); los autocares (3,51); y las discotecas
(3,47).
Los que menos: las casas de colonias (2,79); las empresas de alquiler de coches (3,04);
las de alquiler de viviendas y APIS (3,18); y las cooperativas (3,19).
Cuadro 19: Nivel de cooperación municipal con las empresas del sector turístico
Media
Centros deportivos 4,10
Asociaciones culturales 4,02
Restaurantes 3,98
Hoteles/pensiones/fondas 3,98
Comercio 3,96
Centros culturales y recreativos 3,89
Bares 3,85
Autocares 3,51
Discotecas 3,47
Agencias de Viajes 3,39
Constructores 3,23
Cooperativas 3,19
Agencias de alquiler de viviendas 3,18
Agencias de alquiler de coches 3,04
Casas de colonias 2,79
25
Bastante menor es la implicación de los colectivos no estrictamente turísticos: los
propietarios agrícolas y ganaderos (2,62; propietarios forestales (2,64); pescadores
(2,95); e industriales (3,00). Sin embargo, se muestran más implicados: los
constructores (3,27); los comerciantes (3,55); la población local en general (3,48); los
medios locales de comunicación (3,45) (Cuadro 20)
Cuadro 20: Actitud de los agentes respecto a la explotación de la playa
Media
Comerciantes 3,55
Población local en general 3,48
Medios locales de comunicación 3,45
Constructores 3,27
Profesionales liberales 3,21
Transportistas 3,16
Industriales 3,00
Pescadores 2,95
Propietarios forestales 2,64
Propietarios agrícolas/ganaderos 2,62
26
3.5. Municipio turístico y sostenibilidad de la playa en 2020
Los indicadores de calidad de la oferta turística general de los municipios de litoral
españoles aparecen altos, en la misma línea de los de las playas. Los menos valorados
son los transporte público municipal (3,58) –que ya se detectó relacionado con la
accesibilidad a la playa- y la oferta comercial no alimentaria (3,79). El resto todos
puntúan por encima de 4. Destacan: medio ambiente (4,40); seguridad ciudadana
(4,39); accesos al municipio (4,31); carreteras (4,17); oferta cultural (4,14); y oferta
comercial alimentaria y asistencia sanitaria, (4,10). (Cuadro 21).
Cuadro 21: Valoración de factores de calidad de la oferta turística de su municipio
Media
Medio ambiente 4,40
Seguridad ciudadana 4,39
Accesos al municipio 4,31
Carreteras 4,17
Oferta cultural 4,14
Oferta comercial alimentaria 4,10
Asistencia sanitaria 4,10
Telecomunicaciones 4,09
Oferta comercial no alimentaria 3,79
Transporte público municipal 3,58
Hemos solicitado a la muestra que nos aporte la visión a largo plazo que tiene de su
municipio y de los recursos turísticos propios. Estos datos los hemos cruzado con la
visión actual. Los recursos que adquirirán mayor importancia en 2020 son los
siguientes (Cuadro 22):
Cultura y patrimonio (de 4,22 a 4,67)
Sol y playa (de 4,43 a 4,61)
27
Gastronomía (de 4,23 a 4,58)
Comercios y shopping (de 3,52 a 4,10)
Eventos (de 3,84 a 4,36)
Ecoturismo (de 3,31 a 4,01)
Los que protagonizan los mayores incrementos, a pesar de que no aparecen entre los
más relevantes, son los siguientes:
Salud, balnearios y spa (una diferencia de 1,26)
Reuniones de negocios y comerciales (1,17)
Centros de congresos (1,06)
Centros de ferias (0,94)
Deportes de aventura (0,93)
Un análisis pormenorizado de los resultados nos lleva a destacar la existencia de:
un tronco común de recursos que lideran la oferta turística de los municipios
de litoral españoles. Estos recursos son: cultura y patrimonio; sol y playa; y
gastronomía. En estos tres recursos confluyen la mayoría de los municipios de
litoral y destacan muy por encima de todos los recursos deseados,
convirtiéndose en indispensables en cualquier combinación para crear una
oferta de playa. Estos tres recursos son los que seguirán manteniéndose como
recursos imprescindibles a largo plazo
un segundo grupo compuesto por eventos; deportes náuticos; comercio; y
ecoturismo. Estos recursos se consideran necesarios para la configuración de
una oferta más o menos completa.. Los cuatro adquirirán un mayor
protagonismo a largo plazo que hasta ahora
un tercer grupo del que forman parte agroturismo; salud, balnearios y spa;
reuniones de negocios; centro de ferias; centro de congresos; golf; y
montañismo. Estos recursos aportarían algún tipo de diversificación o
28
especialización a la oferta. La proyección a 2020 destaca la importancia dentro
del grupo de del agroturismo; de la salud, balnearios y spa; de las reuniones
de negocio; y de la aventura
y finalmente, un cuarto grupo integrado por centro universitario; parque
temático; deporte fluvial; caza; y casino. No parecen interesantes para la
mayoría, a tener en cuenta que entre ellos se integran parques temáticos y
casinos. La proyección de estos recursos turísticos en 2020 seguirá siendo
bastante relativa.
Cuadro 22: Recursos turísticos que se pretenden en 2020
Los viajeros españoles y europeos que llegan a los municipios de sol y playa españoles
hacen vacaciones estivales de ocho o más días (4,28 dentro de escala de 1 a 5); van a
4.43
4.23
4.22
3.84
3.77
3.52
3.31
3.08
2.95
2.68
2.64
2.61
2.58
2.44
2.40
2.33
2.17
2.07
1.94
1.73
1.71
1.64
4.61
4.58
4.67
4.36
4.30
4.10
4.08
3.51
3.77
3.15
3.28
3.54
3.52
3.61
3.67
3.39
2.36
2.68
2.45
2.50
2.48
2.00
1.0 2.0 3.0 4.0 5.0
Sol y Playa
Gastronomia
Cultura y Patrimonio
Eventos
Deportes nauticos
Comercios
Ecoturismo
Pesca
Agroturismo, Turismo rural
Montañismo
Golf
Deportes de aventura
Centro de ferias
Reuniones de negocios,…
Salud, balnearios y Spa
Centro de Congresos
Caza
Centro universitario
Deportes fluviales
Parque tematico
Otros
Casino
Actuales
Deseados
29
segunda residencia (4,13);realizan vacaciones cortas de 3 a 4 pernoctaciones (3,98); y
city breaks o fines de semana con una pernoctación y media (3,89). En menor
proporción excursiones de día (3,61) o estancias prolongadas (3,50) (Cuadro 23).
Comparando el tipo de vacaciones actuales con las deseadas por la muestra, irrumpe
fuertemente el deseo de que sus municipios alberguen en 2020 turistas extranjeros o
nacionales que realicen estancias prolongadas (de 3,50 a 4,50). Esta expectativa que
aparece nítida en los resultados de este estudio ha sido un deseo mayoritariamente
extendido a lo largo de los últimos quince años entre numerosos municipios de litoral
que no acaba de prosperar (3,50 en escala de 1 a 5). Mientras enuncian esta
expectativa, las vacaciones estivales de ocho días o más se consolidan como la primera
preferencia (de 4,28 a 4,73); seguidas por las vacaciones cortas de tres o cuatro días
(de 3,98 a 4,60); y los city breaks o fines de semana de 1-2 días (de 3,89 a 4,46). Frente
a este tipo de visitantes, los de paso o los excursionistas adquieren cada vez menos
relevancia. Aunque el paquete inicial de las vacaciones estivales se compusiera de un
mayor número de días que en la actualidad, queda patente entre los encuestados el
convencimiento mayoritario de la permanencia del tipo de vacación tradicional de sol y
playa de 8 días. Este es el modelo diseñado históricamente por los turoperadores y
permanece en la mente de los munícipes de cara al futuro.
Cuadro 23: Visitantes y turistas actuales y en 2020
4.28
4.13
3.98
3.89
3.61
3.50
2.82
4.73
4.34
4.60
4.46
3.93
4.50
2.97
0.0 1.0 2.0 3.0 4.0 5.0
vacaciones estivales (8 dias o mas)
segunda residencia
vacaciones cortas (3-4 dias)
city break /fin de semana (1-2dias)
excursion de dia
estancias prolongadas (mas de 1mes)
de paso hacia otro lugar
Actuales
Deseadas
30
El número de metros cuadrados disponibles en la playa por bañista el día más
concurrido del año es la resultante del éxito de la misma y del modelo de planificación
del municipio. Hemos cruzado el espacio disponible actual con el deseado por cada
municipio y aparecen los siguientes datos:
más de la mitad de los municipios (57,1%) declara que cada bañista dispone
de menos de cinco metros cuadrados de playa, con tendencia a reducirse este
porcentaje en 2020 (42,1%)
el 25,4% de la muestra afirma ofrecer entre 6 y 10metros cuadrados, con ligera
tendencia a aumentar en 2020 (29,8%)
el 6,3% pone a disposición del bañista entre 11 y 15 metros cuadrados, con
deseo de duplicarse (12,3%).
Casi un tercio de la muestra (29,8%) desearía que los bañistas dispusieran de entre 6 y
10 metros cuadrados de espacio en la playa en los momentos de máxima
aglomeración. Además, se reduce el porcentaje de los que ofrecen menos de 5 metros
cuadrados de espacio en la arena (de 57,1 a 42,1%). Todo ello unido a que entre la
realidad y el deseo aumenta el porcentaje de los que consideran ideal ofrecer más de
10 metros cuadrados por bañista (de 17,4 a 28,4%), se refleja una clara tendencia s
superar las fuertes aglomeraciones estivales a los que nos han acostumbrados las
clásicas estampas de playa españolas en verano y a identificar la playa como un lugar
no tan masivo. El 1,6% de los municipios encuestados ofrece playas con más de 25
metros cuadrados por bañista, triplicando de aquí al año 2020 las playas casi desiertas
(Cuadro 24).
31
Cuadro 24: Metros cuadrados por bañista
Porcentaje real Porcentaje
deseado
Menos de 5 m2 por bañista 57,1 42,1
De 6 a 10 m2 por bañista 25,4 29,8
De 11 a 15 m2 por bañista 6,3 12,3
De 16 a 20 m2 por bañista 7,9 8,8
De 21 a 25 m2 por bañista 1,6 1,8
Más de 25 m2 por bañista 1,6 5,3
La ocupación media mensual turística presenta una curva de alta estacionalidad: dos
meses, julio y agosto, por encima del 75%; dos meses, junio y septiembre, entre el 50 y
el 60 % aproximadamente; tres meses, abril, mayo y octubre, entre el 30 y el 40%; y el
resto del año, con índices por debajo del 23%. Observando el fenómeno de la alta
estacionalidad del turismo que llega a España por tramos, se evidencia una estructura
de ocupación turística muy baja: el 65% de los municipios tienen menos del 25% de
ocupación durante seis meses al año. Y las ocupaciones superiores al 90% sólo se
producen en muy pocos municipios la mayoría de los casos en julio y agosto, creando
graves problemas de servicios e infraestructuras (Cuadros 25 y 26):
Cuadro 25: Ocupación media mensual
32
Cuadro 26: Ocupación media mensual por tramos
Como consecuencia de la crisis económica que ha golpeado fuertemente no sólo el
sector inmobiliario del litoral sino todos los negocios turísticos en general, al plantear
el horizonte 2020, las expectativas no parecen excesivamente halagüeñas:
La desestacionalidad no mejorará –y la respuesta general es radicalmente baja
(1,81)
Los viajeros seguirán viniendo principalmente de forma organizada a través de
TTOO o Agencias de Viaje (2,16) y se ampliarán poco los viajes independientes
el gasto diario por visitante se mantendrá en niveles parecidos al actual (2,47)
y no va a producir ningún vuelco, lo cual no alumbra reposicionamientos hacia
la calidad de los destinos.
A este escenario continuista en 2020 acompañan una serie de datos en la misma
dirección: no se va a incrementarse sobremanera la exigencia de calidad (2,67); ni la
preocupación por el medio ambiente (2,66); ni va a ampliarse la variedad de
actividades a realizar en el municipio al servicio de los turistas (2,66) (Cuadro 27).
33
Cuadro 27: Escenario 2020
Media
Exigencia de calidad 2,67
Preocupación por el medio ambiente 2,66
Variedad de actividades a practicar 2,66
Volumen de visitantes 2,64
Fidelidad del visitante 2,53
Gasto diario por visitante 2,47
Organización viaje: independiente 2,36
Organización viaje: a través de AA.VV. y TT.OO. 2,16
Estacionalidad 1,81
Existe la convicción generalizada (95% de respuestas afirmativas) de que las playas
pueden seguir siendo el atractivo fundamental de los municipios de litoral, del mismo
modo que lo fueron hace cincuenta años. No aparece en el horizonte un sustitutivo
con mayor capacidad de atracción que sea capaz de desbancarla. Sin embargo, en el
horizonte aparece una tibieza: la capacidad de mantenerla enhiesta alcanza una
valoración de 3,76 sobre la escala de 1 a 5, un guarismo excesivamente bajo para tan
amplia convicción. Las condiciones para que ocurra pasan por (Cuadro 28):
más inversión estatal (4,55)
más inversión autonómica (4,45)
más inversión municipal (3,95)
y en menor medida, más inversión privada (3,78).
Se contempla una posición de rechazo amplio ante cualquier tipo de tasa turística: ni
municipal (2,18); ni autonómica (2.01); ni estatal (1,89). NI hablar tampoco de
privatizar las playas (1,19)
34
Cuadro 28: Condiciones para la sostenibilidad de las playas
Media
Más inversión estatal 4,55
Más inversión autonómica 4,45
Más inversión municipal 3,95
Más inversión privada 3,78
Seguir como ahora 2,60
Tasa turística municipal 2,18
Tasa turística autonómica 2,01
Tasa turística estatal 1,89
Privatizarlas 1,19
La playa sigue siendo el principal atractivo de los municipios de litoral. Si por cualquier
motivo las playas del municipio quedaran inútiles, se produciría una debacle en el 53 %
de los municipios, puesto que perderían más del 60% de los turistas. Sin embargo, el
17% afirma que perdería menos del 20% de turistas; y el 11,7%, entre el 20 y el 40%
(Cuadro 29)
Cuadro 29: Si desapareciera la playa
Porcentaje
menos del 20% de turistas 17,0
del 21 a 40% de turistas 11,7
del 41 a 60% de turistas 17,0
del 61 a 80% de turistas 33,0
del 81 a 100% de turistas 21,3
Al comparar los tramos de la población actual con la deseada en 2020, se constatan
una serie de aspectos relevantes, dentro de que la muestra en general contempla el
35
escenario futuro en franco crecimiento y se observan escasos movimientos
estratégicos entre los tipos de población deseados (Cuadro 30):
los municipios de menos de 5.000 habitantes marcan una tendencia de fuerte
crecimiento en población permanente y adicional verano (17,9 a 22,7% y 35,1 a
47,1% respectivamente), frente a un suave incremento de la población de la
segunda residencia (45,1 a 47,1%)
los municipios de 5.000 a 10.000 habitantes subirían la población permanente
(17,9 a 19,7%), pero no la de segunda residencia y adicional verano (18,3 a
15,7% y 18,9 a 15,7% respectivamente)
los municipios de 10.000a 50.000 habitantes caerían en la población
permanente (47,3 a 43,9%, subiría en segunda residencia (29,6 a 33,3%) y se
mantendría prácticamente estable
los municipios de 50.000 a 100.000 habitantes casi se duplicaría la población
permanente (5,4 al 9,1%), por el contrario la segunda residencia y la adicional
verano se reducirían a más de la mitad (5,6 a 2,0%, y 5,4 a 2,0,
respectivamente),
y los de más de 100.000 habitantes la permanente y la adicional verano se
reducirían fuertemente (11,6ª 4,5%, y 6,8 a 2,0%, respectivamente, mientras
aumenta levemente la segunda residencia (1,4 a 2,0).
Cuadro 30: Población actual y deseada
población actual deseada actual deseada actual deseada
menos de 5.000 personas 17,9 22,7 45,1 47,1 35,1 47,1
de 5.001 a 10.000 personas 17,9 19,7 18,3 15,7 18,9 15,7
de 10.001 a 50.000 personas 47,3 43,9 29,6 33,3 33,8 33,3
de 50.001 a 100.000 personas 5,4 9,1 5,6 2,0 5,4 2,0
más de 100.000 personas 11,6 4,5 1,4 2,0 6,8 2,0
Total 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0
pobl.permanente pobl.2ª residen. pobl.adic.verano
36
3.6. Características y prácticas de los municipios y de su gestión
Además de la descripción de los resultados y de la visualización gráfica de las
respuestas obtenidas a partir de los distintos ítems del cuestionario, una de las
intenciones de presente estudio consiste en desvelar eventuales relaciones que
puedan existir entre características, prácticas y resultados de la gestión en el conjunto
de municipios, y detectar posibles grupos diferenciados entre ellos.
A partir de algunas de las variables analizadas, se han elaborado cuatro Índices con el
fin de obtener una visión más nítida de la Gobernanza de las playas españolas Cada
uno de estos Índices elaborados integran preguntas que se aplican a un mismo
concepto y facilitan el análisis de las relaciones entre ellos.
3.6.1. Índice de Calidad de Playas (IGCP)
Para obtener el IGCP se han tenido en cuenta los siguientes índices primarios:
Índice de Calidad de la Arena de las Playas
Índice de Calidad del Agua de las Playas
Índice de Calidad de las Instalaciones y Servicios
Índice de Servicios de Vigilancia y Seguridad
Índice de Protección de Dunas
Índice de Accesos y Aparcamientos
Estos índices han sido construidos como valores medios de las respuestas obtenidas a
las preguntas asociadas a los mismos. Por tanto, en cada municipio todos ellos tienen
valores comprendidos dentro del rango de 1 a 5.
Dado que la correlación entre ellos resulta alta -con la excepción del Índice de
Protección de Dunas, debido probablemente a la ausencia de dunas reconocidas en
buena parte de los municipios- resulta cómodo y pertinente definir el IGCP como
promedio de todos los índices anteriores sin incluir el índice de dunas por escasez de
datos.
Los coeficientes de correlación lineal se muestran en el Cuadro 32, donde puede
observarse una asociación muy elevada (siempre superior a r=0,66) entre el Índice
General IGCP y cada uno de los elementos que lo conforman.
37
Cuadro 31: Índice general de Calidad de Playas (IGCP)
La distribución del índice general de calidad IGCP sigue una curva asimétrica a favor de
los valores altos (Cuadro 32), donde se compara con una distribución normal.
INDICES DE CALIDAD DE PLAYAS
Idx Q
Arena
Idx Q
Agua
Idx Q
Instalac.
Idx Q
Vig&Seg
Idx Q
Dunas
Idx Q
Acc&Park
Idx Gral
CALIDAD
PLAYAS
(-dunas)
Coef. Correlación Pearson
Idx Q Arena 1 ,564**
,551**
,509**
,419**
,568** ,761**
Idx Q Agua 1 ,419**
,464**
,252*
,426** ,665**
Idx Q Instal 1 ,823**
,420**
,716** ,891**
Idx Q Vig&Seg 1 ,322**
,617** ,869**
Idx Q Dunas 1 ,434** ,465**
Idx Q Acc&Park 1 ,833**
Idx Gral CALIDAD PLAYAS (-dunas)1
N Municipios
Idx Q Arena 147 142 146 147 80 147 147
Idx Q Agua 142 141 142 75 142 142
Idx Q Instal 147 147 81 147 147
Idx Q Vig&Seg 148 81 148 148
Idx Q Dunas 81 81 81
Idx Q Acc&Park 149 148
Idx Gral CALIDAD PLAYAS (-dunas) 148
**. La correlación es significativa al nivel 0,01
*. La correlación es significante al nivel 0,05
38
Cuadro 32: Distribución del IGCP
3.6.2. Índice de Buenas Prácticas de Gobernanza (IBPG)
A lo largo del cuestionario se encuentran bastantes ítems que pueden asociarse
conceptualmente con una buena práctica de gobernanza, como es el caso de la
existencia de un plan estratégico de playas, de la inclusión en el PGOU del impacto
sobre la calidad de las playas, del grado de coordinación con otras administraciones,
de la obtención de certificaciones de calidad, del nivel de formación de personal y
otros. Tras una criba por nivel de correlación y número válido de respuestas, se ha
elaborado el Índice de Buenas Prácticas de Gobernanza (IBPG). En cada municipio su
valor puede oscilar entre 1 y 4,55, y está formado como valor medio de los ítems que
se relacionan a continuación:
Nº certificaciones de calidad
Importancia que la Política Municipal otorga a la Playa
Período que abarca el Plan Estratégico
Consecución de objetivos
Coordinación activa entre agentes implicados en gestión de la playa
Existencias Plan de creación de nuevos productos
PGOU: consideración del impacto en la calidad del turismo
Grado de cooperación con municipios adyacentes
Nivel de cooperación público-privada
Las correlaciones entre estos Índices y el IBPG se muestran en el Cuadro 33.
39
Cuadro 33: Índice de Buenas Prácticas de Gobernanza (IBPG)
Se puede observar en general una relativa baja correlación entre los ítems originarios,
y una elevada correlación entre el IBPG con cada uno de ellos. Este resultado da
cuenta del hecho que las buenas prácticas están conformadas por una multitud de
acciones individuales -cada una de ellas poco significativas por sí mismas- en lugar de
unas pocas prácticas muy significativas.
A diferencia del índice anterior, el IBPG sigue muy ajustadamente una distribución
normal (Cuadro 34).
Cuadro 34: Distribución del IBPG
Indice de Buenas Prácticas de Gobernanza
Correlación de Pearson
num.
Certificac.
Importanci
a Política
Municipal
otorga a la
playa
21
PlanEstrat
egico -
periodo
Consecu-
ción de
objetivos
23 Coord
AgenPlaya
25 Plan
Nuevos
Productos
PGOU
impacto en
calidad
turismo
Municipio?
53-1 Coop
con Munici
adyacentes
54 Coop
publico-
privada
Idx B Prac
Gobern
num. Certificaciones 1 ,187* ,233** ,285** ,225** ,204* ,199* -,110 ,119 ,514**
Importancia Polít.Munic.da a la playa 1 ,073 ,422** ,248** ,066 ,126 ,219* ,133 ,464**
21 PlanEstrategico -periodo 1 ,229* ,107 ,287** ,154 ,015 ,145 ,538**
Consecución de objetivos 1 ,099 ,061 ,271** ,219* ,194 ,582**
23 Coord AgenPlaya 1 ,291** ,187 ,130 ,151 ,514**
25 Plan Nuevos Productos 1 ,156 ,024 -,003 ,493**
PGOU impacto en calidad turismo 1 ,252* ,379** ,601**
53-1 Coop con Munici adyacentes 1 ,213* ,404**
54 Coop publico-privada 1 ,557**
Idx Buenas Pract. Gobernanza 1
*. La correlación es significante al nivel 0,05 (bilateral).
**. La correlación es significativa al nivel 0,01 (bilateral).
40
3.6.3. Índice de Valoración de la Proximidad en la Gestión de Playas (IVPG)
Este tercer Índice refleja la valoración percibida por los responsables municipales sobre
el resultado de una gestión de playas más o menos próxima. Se calcula a partir de las
respuestas a las siguientes preguntas:
1. El Municipio debe disponer de todas las competencias de gestión de playas 2. La Comunidad Autónoma debería tener todas las competencias de gestión 3. El Estado debería tener todas las competencias de gestión
Y se elabora estableciendo una fórmula que mide una “distancia” entre ellas. A fin de
mantener una homogenización con el resto de variables se define este Índice de
Valoración sobre la Proximidad en la Gestión (IVPG) de modo que quede comprendido
entre 1 y 5; siendo el 1 el valor que representa una menor eficacia cuando la gestión es
de proximidad (municipal), y el 5 una mayor eficacia para la misma. Su distribución se
muestra en el Cuadro 35.
Cuadro 35: Distribución del IVPG
3.6.4. Índice de Expectativas de Recursos Turísticos (IERT)
Se ha construido un cuarto Índice que recoge la percepción de los responsables
municipales sobre el futuro despliegue de Recursos Turísticos a largo plazo en su
territorio. El índice se obtiene mediante la comparación de las respuestas a las dos
preguntas consecutivas “Valoración de recursos turísticos actuales” y “Valoración de
41
recursos turísticos deseados en 2020”. Su rango teórico es de -4 a +4, aunque en la
práctica las expectativas a largo plazo suelen ser claramente asimétricas por el lado de
las posiciones optimistas, como muestran los límites reales comprendidos entre -1 y
+2,25.
En este caso, dado que el signo (negativo/positivo) del valor del índice refleja
perspectivas futuras peores o mejores a las actuales, se ha preferido mantener los
límites de oscilación original sin reconvertirlos a los habituales de 1 a 5. De este modo,
se visualizará mejor el umbral que separa las estimaciones de recesión / crecimiento
de esta actividad en el municipio (Cuadro 36).
Cuadro 36: Distribución del IERT
3.6.6. Comparativo por Comunidades Autónomas y Provincias
Al establecer un análisis comparativo de los cuatro Índices obtenidos por Comunidades
Autónomas que tienen playa españolas, se observa que las que obtienen una mejor
puntuación en el global de los índices son, por este orden, Andalucía, Valencia y
Baleares; las que peor, Galicia, Murcia y País Vasco (Cuadro 37).
42
Cuadro 37: Comparación de la media de los índices por Comunidad Autónoma
Al hacer lo propio con las Provincias de playa españolas, se observa que las que
obtienen mejores Índices comparados son Valencia, Cádiz y Alicante; las que peor,
Pontevedra, Guipúzcoa, y Vizcaya (Cuadro 38).
Comunidad
AutónomaIGCP IBPG IVPG IERT
Andalucía 4,32 3,20 4,17 0,67
Valencia 4,37 3,34 4,06 0,53
Balears 4,08 2,72 4,41 0,66
Canarias 3,83 2,63 4,15 0,80
Cataluña 4,03 2,89 3,90 0,45
Cantabria 4,18 3,13 2,94 0,93
Asturias 4,30 2,95 3,22 0,56
Gal icia 4,22 2,83 3,28 0,70
Murcia 4,14 2,73 3,25 0,80
País Vasco 4,25 2,59 3,13 0,52
43
Cuadro 38: Comparación de la media de los índices por Provincias
3.6.7. Modelo Conceptual
Como queda dicho, cada uno de los Índices elaborados mide diversos aspectos de la
gestión de playas y de la actividad turística sobre el municipio: el General de Calidad de
las Playas, IGCP, mide la percepción de los gestores municipales sobre los resultados
obtenidos en su municipio; en cambio el de Buenas Prácticas de Gobernanza, IBPG, no
mide resultados sino medios o procedimientos de gestión para conseguir resultados,
es decir, para ofrecer un servicio de calidad de uso y disfrute de playas a ciudadanos y
turistas. En cuanto a los otros dos índices, el de Valoración de la Proximidad de la
Gestión de playas, IVPG, tiene en cuenta los valores consolidados del equipo municipal
Provincias IGCP IBPG IVPG IERT
Valencia 4,82 3,13 4,19 0,96
Cádiz 4,53 3,38 4,17 0,97
Alicante 4,52 3,43 4,25 0,35
Málaga 4,54 3,54 4,10 0,04
Almería 4,20 2,95 4,19 0,79
Huelva 3,94 2,81 4,25 1,07
Balears 4,08 2,72 4,41 0,66
Castellón 3,97 3,34 3,75 0,50
Tenerife 3,86 2,72 4,13 0,78
Girona 4,19 3,16 3,88 0,20
Gran Canaria 3,80 2,53 4,18 0,82
Barcelona 4,15 2,84 3,81 0,49
Lugo 4,29 2,54 3,44 1,00
Cantabria 4,18 3,13 2,94 0,93
A Coruña 4,34 2,95 3,25 0,56
Tarragona 3,68 2,63 4,06 0,68
Asturias 4,30 2,95 3,22 0,56
Murcia 4,14 2,73 3,25 0,80
Pontevedra 4,05 2,93 3,21 0,62
Guipúzcoa 4,11 2,48 3,58 0,45
Vizcaya 4,43 2,74 2,67 0,62
44
acerca de la eficacia diferencial entre una gestión próxima (municipal) o una
centralizada (estatal); y el de Expectativas de Recursos Turísticos, IERT, tiene en cuenta
las perspectivas de evolución del desarrollo turístico en el municipio en 2020. Estos
dos últimos índices reflejan aspectos concretos de valores o actitudes derivados de la
cultura organizacional del equipo de gestión.
A partir de ello, resulta pertinente plantear un modelo conceptual que explique el
grado de consecución de objetivos (Calidad de la Playa), a partir de las Buenas
Prácticas de Gobernanza, de las perspectivas de crecimiento a largo plazo del sector y
de la valoración sobre la eficacia de la proximidad de gestión, además de otras
características físicas del municipio como pueden ser el tamaño de población o la
longitud de su litoral, susceptibles de ser consideradas a priori como influyentes en
sentido estadístico. Expresado en términos simbólicos
IGCP = función (IBPG, IVPG, IERT, población, longitud delitoral, etc.)
Resultados dos a dos (bilaterales)
La primera hipótesis que se plantea es si las Buenas Prácticas de Gobernanza (IBPG)
tienen un impacto positivo en la calidad de la oferta de playas (IGCP). El cálculo de la
asociación entre ambos índices confirma la hipótesis planteada: se obtiene un r=0,51
en el modelo de regresión lineal, y un r=0,53 en el modelo de regresión cuadrática
(Cuadro 39).
Cuadro 39: Impacto de las Buenas Prácticas de Gobernanza en la calidad de las playas
45
La segunda hipótesis que puede plantearse es si las otras variables independientes
consideradas están asociadas de modo bilateral con la calidad de la oferta de playas
(IGCP). En la Tabla de correlaciones lineales se observa que el índice de calidad de las
playas no presenta correlación significativa con ninguna de ellas, salvo una ligera
asociación con el tamaño de población (r= 0,19 , esto es, asociación inferior al 4%).
Algo parecido ocurre con el modelo de regresión cuadrático. Se puede observar
(Cuadro 40) una asociación entre el tamaño de la población y el índice de Proximidad
de Gestión, aunque no muy elevada (r=0,35), que insinuaría que cuanto mayor es el
tamaño de la población más se valoraría una gestión de proximidad.
Cuadro 40: Influencia del tamaño de población en la gestión de la proximidad
Resultados multilaterales
Hemos aplicado el método estadístico de regresión lineal multivariable opción paso a
paso al modelo conceptual establecido da un coeficiente de correlación conjunta
r=0,59 para la función:
IGCP = 2,44 + 0,56 * IBPG + 0,17 * IERT
Esto significa que las Buenas Prácticas de Gestión constituye el mejor indicador de los
seleccionados y actúa en sentido positivo (a mayor valor del índice IBPG, mayor
Calidad de playas) y que las Expectativas de Crecimiento por parte del equipo
municipal aportan valor (también en términos positivos) a la asociación de la Calidad,
aunque en menor intensidad.
Correlación de Pearson
IGCP IBPG IVPG IERT
Población
(esc. log)
Long.
litoral
(Km)
Idx Gral Valora. CALIDAD Playas (IGCP) 1 ,510** ,065 ,044 ,188
* ,091
Idx B Prac Gobernanza (IBPG) 1 ,120 -,067 ,125 ,007
Idx Valor.Proximidad Gestión (IVPG) 1 -,011 ,347** ,174
Idx Expectativas Recursos Turísticos (IERT) 1 -,022 ,049
Población (escala log) 1 ,235**
Long. litoral (Km) 1
**. La correlación es significativa al nivel 0,01 (bilateral).
*. La correlación es significante al nivel 0,05 (bilateral).
46
3.6.8. Tipologías de Municipios
Las técnicas estadísticas de clasificación nos han permitido la formación de grupos
significativamente diferenciados de municipios, cuyas características específicas se
identifican a posteriori a partir de los propios resultados. El conjunto de los 150
municipios del estudio ha sido procesado mediante el modelo de clasificación de
algoritmo bietápico según el criterio de clasificación de Información Akaike (AIC). El
modelo identifica cuatro grupos de municipios (Cuadro 41). En cada una de las
variables consideradas se indica el valor mínimo mediante cursiva y el valor máximo
mediante negrita, con el fin de facilitar la identificación de las características propias
de cada grupo. De entrada, se observa una cierta regularidad no prevista: en cada
grupo la media de su población resulta aproximadamente el doble del grupo anterior.
El tamaño de la población ayudará a visualizar la constitución de los grupos, pero no
debe olvidarse dos aspectos relevantes:
a) se trata de valores medios, es decir, el tamaño de población de un municipio concreto no determina su clasificación en el grupo de valor medio más próximo, sino que debe entenderse en términos probabilísticos. Dicho de otro modo, son conjuntos de municipios que desde el punto de vista geométrico no son disjuntos, sino que se sobreponen en parte unos sobre otros.
b) las técnicas estadísticas no permiten afirmar ninguna hipótesis sobre causalidad, simplemente asociación.
Los valores numéricos resultantes en los cuatro grupos indicados han sido traducidos a
categorías verbales (Cuadro 42).
Cuadro 41: Tipologías de municipios
GruposIdx Gral
CALIDAD
Idx B Prac
Gobern Index Expect
Idx Gest
Proximidad
Poblacion
(hab.)
N % Media Media Media Media Media
A 30 26,8% 4,3281 2,7711 ,7743 2,7417 6.446
B 11 9,8% 2,8035 2,3750 ,6446 3,3409 11.470
C 36 32,1% 4,1371 2,6727 ,6107 4,4236 24.457
D 35 31,3% 4,5223 3,5315 ,6341 4,1857 40.017
Combinados 112 100,0% 4,1776 2,9382 ,6652 3,7924 4,2678
Municipios
47
Cuadro 42: Tipologías de municipios
Hemos intentado representar las cuatro tipologías de municipio con playa resultantes
(Cuadro 43a, 43b, 43c y 43d) expresando icónicamente las características de cada una
de ellas. De este modo, en el momento de aplicar el modelo a un municipio
determinado resulta mucho más fácil reconocer su cercanía o lejanía respecto a cada
tipología:
El modelo “Goleta” responde a la tipología A
el modelo “Caravela”, a la B
el modelo “Gaviota”, a la C
y el modelo “Trasatlántico”, a la D.
Cuadro 43A: Modelo “Goleta”
GRUPOS Idx Gral CALIDAD Idx B Prac Gobernanza Index Expect Idx Gest Proximidad Tamaño Población
A EFICIENTES OPTIMISTAS favor. Gestión ESTATAL PEQUEÑOSB INEFICIENTES POCA GOBERNANZA MEDIAÑOS-PEQUEÑOSC EFICIENTES PESIMISTAS favor. Gestión MUNICIPAL MEDIANOS-GRANDESD MUY EFICIENTES BUENA GOBERNANZA GRANDES
48
Cuadro 43B: Modelo “Caravela”
Cuadro 43C: Modelo “Gaviota”
49
Modelo 43D: Modelo “Trasatlántico”
50
4. Conclusiones y propuestas de mejora Los municipios españoles de litoral se muestran en general altamente satisfechos de
las prestaciones de sus playas. Tanto de las instalaciones y servicios, como de la
vigilancia y seguridad, de los accesos y de la calidad de las aguas. Tal es el caso
concreto de las papeleras, duchas, y lavabos, Cruz Roja, paneles informativos, y
contenedores de reciclaje; señalización sobre el estado de la mar, y balizamiento de la
zona de baño; acceso peatonales a la playa, de tráfico y señalización, y accesos para
discapacitados; y calidad sanitario-microbiológica de las aguas, visual, ambiental
limpieza de arenas y recogida de residuos. Excepto algunos aspectos, como las
plataformas flotantes, las zonas de pesca con caña y los vestuarios, el resto de los
aspectos analizados obtiene una valoración mínima de 4,10 en una escala de 1 a 5. Sin
embargo, no ocurre lo mismo con la protección de la naturaleza, en la que las
puntuaciones medias son claramente inferiores, entre 3,34 y 3,87; ni con la
regeneración de las playas, de las que más de dos tercios afirma que pierden arena y
sólo el 46% realiza tareas para evitarlo; ni con el número de metros cuadrados de
playa por bañista, en lo que casi el 60% de los municipios disponen de menos de 5
metros cuadrados; ni con las certificaciones de control de calidad, en las que excepto
la acreditación de Bandera Azul la implantación del resto de las acreditaciones resulta
bastante baja. Se confirma que la gobernanza de las playas se vuelca más en la función
recreativa que en las biofísicas, de actuar como depositarios de biodiversidad y de
ofrecer protección a la costa.
Las razones que esgrimen los que no se muestran tan ufanos con las prestaciones que
ofrecen tienen razones fundamentalmente económicas (4,45 sobre escala 1 a 5) y poco
o muy poco responsabilizan a la dispersión de competencias entre administraciones
(2,94), a la falta de información (2,05) o a la incapacidad organizativa interna (1,78).
Las tareas de gestión de las playas las realizan mayoritariamente los servicios
municipales de Playas (41% de los casos), los de Medio Ambiente (38%) y los de
Turismo (19%). Sobre las espaldas de estás tres Áreas recae la máxima responsabilidad
de gestión. En algunos casos, muy pocos, la alcaldía asume las funciones. Y en todos
los casos aportan servicios el resto de las concejalías de Policía, Gobernación,
51
Protección Civil y Seguridad; Servicios; Infraestructuras y Obras Públicas; Limpieza y
Mantenimiento; Deportes y Cultura; y Urbanismo. El personal que realiza la gestión de
las playas resulta muy bien valorado y dimensionado para las funciones
encomendadas.
La relevancia estratégica resulta bastante inferior a la satisfacción expresada por las
prestaciones ofrecidas. Cuatro aspectos muestran a las claras esta indefinición
estratégica. La primera, la playa es considerada más como un atractivo rentable que
como el eje de desarrollo económico del municipio (3,81 frente a 3,64). La segunda,
más de la mitad de la muestra, el 53,9%, se posiciona a favor de que en este campo de
gestión el municipio actúe en solitario: debe ser el municipio quien disponga de todas
las competencias (3,53). La tercera, sólo una cuarta parte de los municipios dispone de
una planificación estratégica más o menos continuada y únicamente seis
ayuntamientos declaran que han realizado estudios de capacidad de carga para saber
el número de turistas que puede acoger la playa y el municipio. Y la cuarta, los siempre
escasos recursos económicos disponibles para acometer la tarea exigida. Un tercio
gestiona un presupuesto de playas inferior al 0,5% del global municipal, y más del 40%,
entre el 0,5 y el 2%. En estos cuatro aspectos de relevancia estratégica aparecen claros
síntomas de contradicción en el momento de establecer alianzas para obtener los
recursos financieros necesarios para afrontar el futuro rentable de las playas. Aceptan
bastante poco la presencia de la Comunidad Autónoma (2,17) y la del Estado (1,61); al
sector privado no lo quieren ver en la gestión de las playas, ni participando
directamente (55,1%), ni cogestionándolas (84,9%); y finalmente, tampoco se
muestran excesivamente motivados por la implantación de una tasa turística (2,19).
La elaboración de cuatro Índices, el de Valoración de las Calidad de las Playas , el de Buenas
Prácticas de Gobernanza, el de Valoración de la Proximidad en la Gestión de las Playas y el de
Expectativas de Recursos Turísticos, nos ha permitido establecer una serie de asociaciones
entre las que destacan dos. La primera es que las Buenas Prácticas, la proximidad de la gestión
a nivel municipal, y las buenas expectativas de crecimiento a largo plazo inciden en la
consecución de los objetivos de Calidad. Y la segunda es que cuanto mayor el tamaño de la
población más se valoraría la proximidad de la gestión municipal.
52
A partir del cruce de estos Indicadores se han obtenido cuatro tipologías de municipios
españoles con playa:
El modelo “Goleta” se caracteriza por tener poblaciones pequeñas, eficiencia en
calidad en las playas, nivel de gobernanza mediano, y son muy optimistas de cara al
futuro en cuanto a recursos turísticos; prefieren una gestión más estatal que municipal
de las playas
El modelo “Caravela” se caracteriza por tener poblaciones medianas o reducidas, baja
eficiencia en calidad y nivel de gobernanza, optimismo medio en cuanto a expectativas
de recursos turísticos; la gestión queda a mitad de camino entre la municipal y la
estatal
El modelo “Gaviota” se caracteriza por una población mediana alta, una eficiencia
media, un bajo nivel de gobernanza y son los menos optimistas en cuanto a las
expectativas e recursos turísticos; son los más férreos defensores de la gestión
municipal de sus playas
El modelo “Trasatlántico” tiene poblaciones de gran tamaño, son los más eficientes en
cuanto a la calidad de las playas, y disponen de los niveles más elevados de
gobernanza, son algo optimistas de cara al futuro en cuanto a la gestión de los
recursos turísticos; la gestión de sus playas la prefieren municipal
La sostenibilidad de los municipios turísticos a medio y largo plazo se presenta con
algunos interrogantes:
no aparecen cambios sustanciales en los parámetros sobre el tipo de estancias
que esperan a medio y largo plazo. Creen que seguirán preponderantes las
vacaciones clásicas de 8 o más días (4,73); las de las segunda residencia (4,34);
las de larga estancia (4,50, que experimenta un gran auge; y las de city break
(4,60). En general, no plantean un modelo distinto
la alta estacionalidad de la temporada turística no tiene visos de cambiar (1,81).
Persistirán con altos picos en julio y agosto y, excepto leves aumentos, cayendo
en picado en resto de los meses del año
los viajes de los turistas serán ligeramente más independientes (2,36) que
intermediados (2,16). No contemplan pues ni a medio ni a largo plazo el
desembarco de la comercialización delos destinos por internet, una visión que
53
sí tienen por ejemplo los grandes destinos turísticos españoles y la mayoría del
sector privado
el gasto diario por visitante no va a incrementarse (2,47). Excepto algunos
municipios que plantean claramente convertirse en destinos de calidad y por
tanto aplicarán precios medios más elevados, la mayoría mantiene el modelo
de turismo bastante barato
si ocurriera algún cataclismo que destruyera la playa, los municipios confiesan
que no son capaces de retener a los visitantes y turistas: más de la mitad de los
municipios perdería más del 60% de los turistas. Más que municipios con una
serie de productos atractivos entre los que la playa ejerce un liderazgo, se
siguen ofreciendo como municipios mono producto de sol y playa
el equilibrio entre la población permanente y la turística se va a decantar a
favor de la primera. La muestra considera que el atractivo de la playa le va a
producir a medio y largo plazo un crecimiento de la población permanente.
Excepto en las poblaciones entre 10.000 a 50.000 habitantes y en las de más de
100.000, todas esperan aumentar la población permanente, aunque muy poco
o incluso decrece en la segunda residencia y en la del verano
en cuanto a los productos que liderarán los destinos de 2020 además de la
playa aparecen dos más prácticamente al mismo nivel que aquélla: la cultura y
el patrimonio, y la gastronomía. El viejo paradigma turístico asociado en
exclusiva a la playa, adquiere una dimensión cultural amplia en el medio y largo
plazo. Aparece un segundo grupo que adquirirá un mayor protagonismo:
deportes náuticos, comercio y ecoturismo; estos tres tienden a integrarse en el
paquete básico anterior. Y un tercero compuesto por agroturismo, salud,
negocios, ferias y congresos, golf y montañismo que se ofrecen como
productos complementarios, que ayudarán a algún grado de diferenciación
frente a la competencia
54
Cuadro 44: DAFO Playas Españolas
Propuestas de mejora
Si los municipios desean seguir dándoles la importancia actual a las playas y obtener
una mejor rentabilidad con su utilización al servicio del ocio y de la recreación,
aparecen unas líneas de mejora de la gobernanza:
1. En la prestación de los servicios, en la protección de la naturaleza, en la
certificación de la calidad, en el intangible de la marca y en la planificación
estratégica hasta alcanzar la alta autosatisfacción que los municipios
muestran por las playas
55
2. En la cooperación vertical con el resto de las administraciones. Existen
demasiados gaps entre los diferentes estadios de la gestión pública que
dilatan el análisis de la situación, la financiación, y la gestión de las
soluciones específicas de las poblaciones con playa
3. En las relaciones de partenariado con el sector privado, implicándolo en la
gestión y demandándole aportación financiera para la sostenibilidad futura
de las playas y de los municipios turísticos. La visión pública municipal de la
playa, máxime en las condiciones económicas actuales, hace inviable la
gestión en solitario. Por ello, resulta inviable sin una cooperación íntima
entre todas las esferas de la administración y sin la presencia privada
mucho más activa
4. En la racionalización de los costes y de la gestión, mancomunando los
servicios individuales con otros municipios adyacentes, creando clusters
pluri-municipales de playa
5. En la oportunidad que presenta la aplicación de la tasa turística implantada
por el Estado para mejorar los recursos puestos al servicio de los municipios
de playa. Esta inyección puede facilitar el planteamiento estratégico de la
gestión de las playas dentro del municipio turístico
6. En la configuración de la playa y el resto de los productos turísticos del
municipio como una experiencia vacacional integral. Se trata de tejer una
propuesta de valor para cada temporada del año dirigida a unos públicos
precisos a base de estructurar los distintos productos, con la playa como
enseña. Esta visión desestacionalizada del turismo facilitaría la
consolidación de una población laboral permanente aplicada en el sector y
la creación de nuevos puestos de trabajo
7. En la rentabilidad tanto de los servicios públicos como de los negocios
privados, mediante un análisis riguroso de los ingresos y gastos (tantyo
públicos como privados). No sea el caso de que en la gestión actual de la
playa se produzcan rentabilidades negativas en uno u otro caso o en los
dos. En ese supuesto, habrá que replantear la dedicación turística del
municipio
56
8. En la innovación de productos de ocio, turismo, recreación, salud y cuidado
del cuerpo para los distintos tipos de estancias, a la busca de las nuevas
necesidades de los clientes. La playa y el litoral se presentan como un
espacio natural único para una amplia oferta de servicios únicos
9. En la aplicación de la planificación estratégica, que le facilitará un desarrollo
armónico y sostenible del municipio.
57
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