Foto: Abel Carmenate Habana, fiesta y gestión contra la corriente · 2015-02-17 · una mirada...

4
E n México persiste, no obstante avances, una mirada poco interesada por el teatro latinoamericano. Salvo Argentina y, en menor medida, Colombia, el conocimiento sobre las dramaturgias y teatralidades caribeñas, centro- americanas y de los demás países de nuestra América son desconocidas en su mayoría. Así, la asistencia a Mayo Teatral es una fiesta. Y resultó doble fiesta esta edición porque la revista Con- junto celebró sus primeros 50 años de existencia, refrendando la juventud de su visión. Las difíciles condiciones de la Isla, la real escases de recur- sos materiales, son suplidas en Mayo Teatral por una organización impecable y una capacidad de gestión impresionante a cargo de un equipo con- ducido por la Dirección de Teatro de la Casa de las Américas. Así, a contracorriente, se tejió una curaduría de puestas en escena de un alto nivel. Yo quisiera referirme aquí a cuatro puestas en escena que fueron de mi especial interés dentro de aquellas que alcancé a ver. En La Habana, fiesta y gestión contra la corriente Jaime Chabaud 20 21 Romeo y Julieta de Aramburo , Kiknteatr. Foto: Abel Carmenate

Transcript of Foto: Abel Carmenate Habana, fiesta y gestión contra la corriente · 2015-02-17 · una mirada...

Page 1: Foto: Abel Carmenate Habana, fiesta y gestión contra la corriente · 2015-02-17 · una mirada poco interesada por el teatro latinoamericano. Salvo Argentina y, en menor medida,

21

En México persiste, no obstante avances, una mirada poco interesada por el teatro latinoamericano. Salvo Argentina y, en menor

medida, Colombia, el conocimiento sobre las dramaturgias y teatralidades caribeñas, centro-americanas y de los demás países de nuestra América son desconocidas en su mayoría. Así, la asistencia a Mayo Teatral es una fiesta. Y resultó doble fiesta esta edición porque la revista Con-junto celebró sus primeros 50 años de existencia, refrendando la juventud de su visión. Las difíciles condiciones de la Isla, la real escases de recur-sos materiales, son suplidas en Mayo Teatral por una organización impecable y una capacidad de gestión impresionante a cargo de un equipo con-ducido por la Dirección de Teatro de la Casa de las Américas. Así, a contracorriente, se tejió una curaduría de puestas en escena de un alto nivel. Yo quisiera referirme aquí a cuatro puestas en escena que fueron de mi especial interés dentro de aquellas que alcancé a ver.

En La Habana, fiestay gestión contra la corriente

Jaime Chabaud

20

21

Romeo y Julieta de Aramburo, Kiknteatr.

Foto

: Abe

l Car

men

ate

Page 2: Foto: Abel Carmenate Habana, fiesta y gestión contra la corriente · 2015-02-17 · una mirada poco interesada por el teatro latinoamericano. Salvo Argentina y, en menor medida,

Hace al menos cuatro años se anunció la muerte de un grupo crucial para Latinoamérica (con pro-yección en cualquier escenario del mundo): el Tea-tro de los Andes. Su director-fundador César Brie se separaba del colectivo y aquello representaba la desintegración del colectivo. Al menos tal infor-mación se manejó. Sin embargo, en 2010 realizan Hamlet de los Andes con el director invitado Diego Aramburo, puesta en escena que catapulta a los maravillosos integrantes de este grupo en una ver-sión libre del clásico para aterrizarlo de manera brutal, a machetazos, en la realidad boliviana. Y va más allá en un juego de metateatralidad en donde los actores como tales, saliendo de sus personajes, se encaran con las preguntas de Hamlet. Aram-buro logra sin dificultades que el bardo inglés se nacionalice boliviano. La dramaturgia y la puesta, sin embargo, plantean varios finales que no serían necesarios. Me parece que al intervenir el original de la manera en que lo hacen podrían haber sido un poco más audaces con la estructura anecdótica a favor del todo.

Romeo y Julieta de Aramburo, también de Boli-via, cerró la participación de ese país en la Tempo-rada de Teatro Latinoamericano y Caribeño Mayo Teatral de La Habana. La propuesta fragmenta a Shakespeare para centrarse en una Julieta metida en la vorágine del mundo adolescente tocado por la droga. El director Diego Aramburo descoyunta

las premisas o temas del original para ponderar la espiral de autodestrucción en la que mete a un Romeo más bien ausente en el universo de esta Julieta empanizada de cocaína. Si bien la puesta resulta profundamente provocadora en un inicio, lo que parecía se convertiría en una dramatur-gia mucho más radical se ancla a un relato con-vencional (y estacional) en donde las sorpresas del dispositivo escénico se agotan muy rápido a pesar de la potencia de la actriz Camila Rocha. Tanto esta, como la del Hamlet de los Andes, resul-taron importantes muestras de lo que un joven director va desarrollando en Bolivia.

De los grupos latinoamericanos legendarios que continúan renovándose y manteniendo un discurso teatral vigoroso, Malayerba es uno de los más entrañables. Sus dos cabezas: Charo Francés y Arístides Vargas (“Charístides”: una sola deidad teatral en dos cuerpos reposados y sabios) enar-bolan una identidad artística que sigue siendo profundamente conmovedora y pertinente en nuestros países. Radicado en Ecuador, Malayerba es un espacio, un laboratorio, un colectivo y un imaginario que con infinita generosidad derrama su teatro entre sus espectadores. Con Instruccio-nes para abrazar el aire Arístides escribe una obra en donde regresa a 1976, a la Ciudad de la Plata, en su natal Argentina, para recrear los aconte-cimientos que se ligan con la historia de Chicha

Hamlet de los Andes, Teatro de los Andes.

Foto

: Jor

ge L

uis B

años

Page 3: Foto: Abel Carmenate Habana, fiesta y gestión contra la corriente · 2015-02-17 · una mirada poco interesada por el teatro latinoamericano. Salvo Argentina y, en menor medida,

23

Mariani, una de las fundadoras de Abuelas de Plaza de Mayo. En una casa, un puñado de jóve-nes pertenecientes a la organización de los Mon-toneros, son asesinados por la dictadura militar. Una niña, Clara Anahí Mariani, es sustraída y ello catapulta una búsqueda desesperada y dolorida. Búsqueda de un cuerpo, una persona, sí, pero que trasciende y se convierte en búsqueda de justicia, de ética, de memoria, de humanidad.

Instrucciones para abrazar el aire es una mirada de los procesos sociales pero ya no a la manera de los años 70 u 80 del siglo pasado –coincido con Vivian Martínez Tabares– en donde se daba la transmisión de un discurso directo y sin filtro alguno, sino desde una visión del mundo huma-nista y cuestionadora “que se extiende en la escala modesta del teatro”.

Instrucciones para abrazar el aire se construye en tres ejes: los abuelos que buscan a la nieta y se dirigen hacia la casa, unos cocineros que pre-paran permanentemente conejos en escabeche (y que ocultan –al menos uno– algo que pasa tras una barda en el fondo de la casa) y la pareja de vecinos que no pueden detener su abrasa-dor deseo de despejar sus sospechas sobre los habitantes de la casa. El tratamiento que Arísti-des da al texto elude cualquier tentación de dis-curso directo. Por el contrario, dobla la realidad, la distorsiona e incluso la torna divertida por

momentos en interacciones absurdas y siempre atravesadas por el lenguaje poético que lo carac-teriza y lo ha convertido en el gran dramaturgo que es. La brutalidad de lo presentado es inobje-table pero se nos entrega de manera oblicua. Aquí la narratividad converge con la dramaticidad y el tiempo se desdibuja, se borran sus fronteras o se vuelve elástico. Espléndido montaje actuado por el propio Arístides y la genial Charo Francés que esperamos se vea muy pronto en México al igual que la obra de la que hablaré a continuación.

Antigonón, un contingente épico, de Rogelio Elizondo en manos del director Carlos Díaz ha resultado para mí la puesta en escena más provo-cadora que he visto en mucho tiempo. Esta crea-ción de Teatro el Público de Cuba es una patada en los güevos, un mazazo en la cabeza, un disparo a la conciencia. A pesar de que algunos códigos y giros lingüísticos se me escapan de este trabajo tan anclado en historia, idiosincrasia y chistes del ser cubano, la esencia del espectáculo toca cual-quier sensibilidad latinoamericana y, presumo, del mundo. Y a pesar de esa dificultad, que para el extranjero también se vuelve en un elemento fascinante, la obra mete las manos a fondo en la cubanidad y el habla popular. El resultado se puede ver en cualquier escenario del mundo y me parece fundamental que esta puesta viaje para derribar algunos mitos y prejuicios sobre la Isla.

22

23

Arístides Vargas, Charo Francés y Paolo Nalli en el Encuentro de Teatristas Latinoamericanos y Caribeños

Foto

: Abe

l Car

men

ate

Page 4: Foto: Abel Carmenate Habana, fiesta y gestión contra la corriente · 2015-02-17 · una mirada poco interesada por el teatro latinoamericano. Salvo Argentina y, en menor medida,

Antigonón, un contingente épico pasa cuchillo al sistema político, a las ideas petrificadas, a los mili-tares, a los campesinos, a los alineados y a los no alineados, a los jóvenes, a la historia y a los héroes. Y pasa a cuchillo a todo mundo a partir de una dramaturgia y puesta en escena en absoluto con-vencionales. A ratos pasarela de modas en donde

la papaya (la vagina), las tetas y la pinga (el pene) se ventilan al aire sin prejuicios. A ratos music hall en una letanía de insatisfacciones y reclamos. La insolencia, ironía e inteligencia de Antigonón…, la provocación que encarna, el grito adolorido y furio-samente divertido en que se convierte, en el fondo, es un gesto de amor por la Patria. Extraordinaria. m

Antigonón, un contingente épico, Teatro El Público.

Foto

: Jor

ge L

uis B

años